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Universidad Tecnológica Centroamericana


Facultad de Ciencias de la Salud
Departamento de estructura y función Curso:
Procesos metabólico
Sección: 1765

Examen práctico ABP

No. Nombre de estudiante Número Cargo

1 Liliana Meza 12141052 Coordinador


Angela Ortiz 11951118
2

Yahir Sánchez 12211223


3
12111044
4 Denissa Pineda

5 Roxi Velasquez 11821004

Presentado a. Dra.

Glenda Alemán

Lugar y fecha.

UNITEC, TGU. 09 de junio de 2024


2

1. Nombre del Grupo: Almendras


2. Coordinador de Equipo: Liliana Isabel Meza DelCid
3. Tema de ABP: Hábitos y trastornos alimenticios en los estudiantes de
la facultad de ciencias de la salud de UNITEC TGU Q2,2024.
4. Integrantes:

a. Roxi Ivanna Velasquez Martínez 11821004

b. Angela Andrea Ortiz Rodriguez 11951118

c. Liliana Isabel Meza DelCid 12141052

d. Denissa Paulette Pineda 12111044

e. Yahir Alessandro Recarte Sánchez 12211223


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ÍNDICE
Integrantes 2
Planteamiento de problema 4
Justificación y explicación 5
Resumen abp 7
Causas de los hábitos y trastornos alimenticios 8
Factores de riesgo 9
Consecuencias 10
Posibles soluciones 11
Metodología de la intervención 12
Diseño de intervenciones 15
Estrategias adicionales para una dieta saludable 17
Cambios de estilo de vida 17
Actividades 20
Recomendaciones 21
Bibliografías 23
4

Planteamiento de problema

Los malos hábitos y trastornos alimentarios en estudiantes representan una


problemática, se ubica en tercer puesto en las enfermedades crónicas más
comunes entre jóvenes con prevalencias entre 3-5% (1). El uso de la práctica
de ayuno prolongado, el cual se afirma es un estilo de dieta muy restrictiva es
la práctica más frecuente entre hombres y mujeres que pretenden reducción de
peso corporal (2).

Los estudiantes de ciencias de la salud se exponen continuamente a factores


estresantes circunstanciales tales: asignaturas que suman un alto número de
créditos, poco tiempo libre o uso de alcohol entre otros, por lo cual conforma al
grupo de factores desencadenantes ´para la manifestación de trastornos
alimentarios, se propone rasgos psicológicos y comportamentales de la
población universitaria en concordancia con el principal factor de riesgo, siendo
la percepción de imagen corporal (3).

Los malos hábitos y trastornos alimentación continúa siendo un problema de


salud pública a nivel mundial y en nuestro país no es una excepción, dado lo
anterior se establece la siguiente interrogante:

¿Cuáles son los hábitos y trastornos alimenticios que predominan en los


estudiantes de la facultad de ciencias de la salud de UNITEC en
Tegucigalpa del segundo trimestre del 2024?
5

Justificación y explicación

La alimentación es importante y esencial para la vida, una mentalidad


incorrecta puede acarrear a diferentes trastornos alimenticios así mismo el
descuido de la salud por actividades en este caso académicas, los estudiantes
del área de la salud pueden experimentar trastornos alimenticios por unas
diversas razones, algunas de las cuales incluyen:

Presión académica y competitividad: los programas de salud suelen ser


exigentes y competitivos, lo que puede generar altos niveles de estrés y
ansiedad en los estudiantes. La presión por obtener buenas calificaciones,
completar pasantías o prácticas clínicas, y sobresalir en un entorno altamente
competitivo puede llevar a una relación disfuncional con la comida como una
forma de controlar el estrés o mantener un cierto nivel de rendimiento.
Conocimiento sobre nutrición: Los estudiantes del área de la salud suelen
tener un conocimiento profundo sobre nutrición y salud, lo que puede llevar a
una obsesión poco saludable con la alimentación "perfecta" o una
preocupación excesiva por el peso y la forma corporal.

Horarios irregulares y demandantes: Los horarios de estudio y prácticas


clínicas en el campo de la salud a menudo son irregulares y demandantes, lo
que puede dificultar el establecimiento de hábitos alimenticios regulares y
saludables.

En virtud de lo anterior decidimos investigar y desarrollar nuestro tema para


poder indagar e informar, al mismo tiempo concientizarnos de la importancia
del mismo, una dieta equilibrada con una variedad de alimentos nutritivos
puede ayudar a mantener niveles estables de glucosa y dopamina, lo que
contribuye a un mejor enfoque, concentración y estado de ánimo, las vitaminas
y nutrientes que se adquieren con una buena alimentación previene
enfermedades, con este proyecto se busca enfocase más en la práctica que en
la teoría ya que como estudiantes de Ciencias de la Salud estudiamos los
temas no obstante no se pone en práctica, el objetivo del mismo es equilibra
una vida académica exitosa con una buena salud física y mental.
6

En esta imagen se muestra una captura de pantalla de la videollamada como


forma de evidencia para discutir la organización y el tema de nuestra
investigación con todos los integrantes del grupo.
7

Resumen ABP

Los estudiantes de la facultad de ciencias de la salud están expuestos a una


serie de presiones académicas y sociales que pueden influir en sus hábitos
alimenticios. Estos hábitos pueden variar desde una alimentación equilibrada y
saludable hasta patrones alimenticios poco saludables o incluso trastornos
alimenticios. Algunos factores que pueden contribuir a estos hábitos y
trastornos incluyen el estrés académico, la presión por mantener un cuerpo
"ideal" en una profesión relacionada con la salud, y la falta de tiempo para
preparar comidas nutritivas debido a las demandas del programa de estudios.
Los trastornos alimenticios comunes entre los estudiantes de ciencias de la
salud pueden incluir la anorexia nerviosa, la bulimia nerviosa y el trastorno por
atracón. Estos trastornos pueden tener graves consecuencias para la salud
física y mental de los estudiantes, y pueden interferir con su rendimiento
académico y su capacidad para completar su formación profesional. Factores
de riesgo específicos: Los estudiantes de ciencias de la salud pueden
enfrentarse a factores de riesgo únicos que pueden influir en sus hábitos
alimenticios y su relación con la comida. Por ejemplo, la exposición constante a
información sobre salud y nutrición puede aumentar la presión sobre ellos para
mantener dietas "perfectas" o alcanzar un estándar ideal de salud.
Presión académica y estrés es unas de las principales causas de este
problema tanto como las exigencias del programa de estudios en ciencias de la
salud pueden provocar altos niveles de estrés entre los estudiantes. Este
estrés puede manifestarse en patrones alimenticios poco saludables, como
comer en exceso como forma de lidiar con la presión o, por el contrario,
restringir la ingesta de alimentos como una forma de mantener el control en un
aspecto de sus vidas. Por otra parte, tenemos lo de la Imagen corporal y
percepción de la salud esto relacionado a que los estudiantes de ciencias de la
salud están inmersos en un entorno donde la salud y el bienestar son temas
centrales, pueden ser especialmente sensibles a su propia imagen corporal y a
las expectativas sobre cómo deberían lucir como profesionales de la salud.
Esto puede conducir a comportamientos extremos en relación con la
alimentación y el ejercicio, como obsesionarse con contar calorías o pasar
largas horas en el gimnasio, pero también tenemos el lado en el que hay
acceso limitado a alimentos saludables esto es por la naturaleza exigente del
programa de estudios de ciencias de la salud puede dejar a los estudiantes con
poco tiempo para preparar comidas nutritivas. Esto puede llevar a una mayor
dependencia de alimentos procesados, comidas rápidas o bocadillos poco
saludables, lo que puede contribuir a hábitos alimenticios deficientes y a un
mayor riesgo de desarrollar trastornos alimenticios.
Es importante que las instituciones educativas y los profesionales de la salud
reconozcan la importancia de abordar los hábitos y trastornos alimenticios
entre los estudiantes de ciencias de la salud. Esto puede implicar la provisión
de recursos y apoyo adecuados, así como la promoción de hábitos alimenticios
saludables y una imagen corporal positiva dentro del entorno académico.
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Causas de los hábitos y trastornos alimenticios


Las causas de ciertos malos hábitos y trastornos alimenticios radican en
muchas variantes desde lo psicológico, sociales culturales hasta presiones
deportivas, dichos trastornos de la conducta alimentaria hacen referencia al
conjunto de actitudes, comportamientos y estrategias asociados con una
preocupación permanente por el peso y la imagen corporal (1).
Se determinó que las dietas más peligrosas y que causan más muertes, son
las que contienen altos niveles de sal, bajas cantidades de fibra y poco
consumo de frutas. De la misma manera, en menor cantidad, también existen
afecciones relacionadas el bajo consumo de nueces, verduras y omega-3.
Significa que la dieta y los hábitos alimentarios son los principales factores de
mayor impacto sobre la salud a nivel mundial (2).
Por ejemplo, la anorexia nerviosa de inicio más tardío suele antecederse de un
mayor número de eventos estresantes, siendo los más importantes conflictos
familiares, pérdidas y enfermedades médicas. El inicio de la bulimia nerviosa
se ha asociado con pérdidas y separaciones de figuras significativas,
problemas interpersonales con la familia y amistades, de salud, y amenazas al
bienestar físico(3).
Se menciona que el acceso a la universidad supone un cambio importante en
el individuo, que puede repercutir en su estilo de vida, lo que convierte a este
subgrupo poblacional en vulnerable desde el punto de vista nutricional (4). El
mismo autor enfatiza que el motivo más frecuente para no alimentarse bien fue
la falta de costumbre y el tiempo, con 37,6% y 36,5%. (4).
La existencia de este tipo de referencias es especialmente influyente en
diversos tipos de deportes y el término anorexia atlética se utiliza para referirse
al conjunto de comportamientos alimentarios subclínicos presentes en los
deportistas, entre cuyas características comunes podemos encontrar baja
autoestima, una imagen corporal distorsionada en la que el cuerpo es percibido
con un exceso de peso, culpabilidad, ineficiencia, perfeccionismo y un sentido
de pérdida de control, con un mecanismo compensatorio ejercido a través de la
manipulación de la comida y la utilización de métodos de control del peso tales
como vómitos(5)
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Factores de riesgo

1. Presión académica y estrés: El alto nivel de estrés académico y las


demandas del programa de estudios pueden provocar patrones alimenticios
poco saludables, como comer en exceso o restringir la ingesta de alimentos.

2. Imagen corporal y percepción de la salud: La exposición constante a


estándares de salud y belleza puede influir en la forma en que los estudiantes
de ciencias de la salud perciben su propio cuerpo y su relación con la comida,
llevándolos a comportamientos extremos relacionados con la alimentación y el
ejercicio.

3. Acceso limitado a alimentos saludables: La naturaleza exigente del


programa de estudios puede dejar a los estudiantes con poco tiempo para
preparar comidas nutritivas, lo que puede resultar en una mayor dependencia
de alimentos procesados, comidas rápidas o bocadillos poco saludables.

4. Presión por mantener un cuerpo "ideal": La profesión relacionada con la


salud puede generar una presión adicional sobre los estudiantes para
mantener un cuerpo "ideal" según los estándares de la industria, lo que puede
influir en sus hábitos alimenticios y su relación con la comida.

5. Falta de tiempo para preparar comidas nutritivas: Las demandas o la


presión que ejercen los estudios pueden llevar a una falta de tiempo para la
preparación de comidas saludables, lo que puede contribuir a la adopción de
hábitos alimenticios deficientes y aumentar el riesgo de desarrollar trastornos
alimenticios.
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Consecuencias

El estrés puede afectar el sistema gastrointestinal de varias formas, ya que existe


una estrecha conexión entre el cerebro y el intestino, conocida como el eje
cerebro-intestino. Cuando una persona experimenta estrés, ya sea agudo o
crónico, puede desencadenar una serie de cambios en el sistema gastrointestinal
que pueden provocar diversos síntomas.

1. Trastornos funcionales: El estrés puede desencadenar o exacerbar


trastornos gastrointestinales funcionales como el síndrome del intestino
irritable (SII), que se caracteriza por síntomas como dolor abdominal,
hinchazón, gases, diarrea y/o estreñimiento.
Aumento de la acidez estomacal: El estrés puede estimular la
producción excesiva de ácido estomacal, lo que puede provocar acidez
estomacal, dolor abdominal y, en algunos casos, úlceras gástricas.
2. Cambios en la motilidad intestinal: El estrés puede afectar la motilidad
intestinal, lo que puede provocar cambios en la velocidad con la que los
alimentos se mueven a través del sistema digestivo. Esto puede causar
síntomas como diarrea o estreñimiento.
3. Aumento de la sensibilidad visceral: El estrés puede aumentar la
sensibilidad de los receptores de dolor en el intestino, lo que puede hacer
que una persona sea más susceptible al dolor abdominal y otros síntomas
gastrointestinales.
4. Disbiosis intestinal: El estrés crónico puede alterar el equilibrio de la
microbiota intestinal, lo que puede conducir a la proliferación de
bacterias dañinas y la reducción de bacterias beneficiosas en el
intestino. Esto puede contribuir a problemas digestivos y a un mayor
riesgo de enfermedades gastrointestinales.
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Posibles soluciones

Los malos hábitos y trastornos alimenticios son complejos y requieren


enfoques multidisciplinarios para su tratamiento, entre las posibles soluciones
tenemos:

● Terapia cognitivo-conductual: permite al paciente identificar y cambiar


patrones de pensamiento y comportamientos disfuncionales relacionados
con la alimentación y la imagen corporal.

● Terapia nutricional: trabajar con un nutricionista puede ayudar a


establecer patrones de alimentación más saludables y a abordar los aspectos
físicos del trastorno alimenticio.

● Apoyo grupal: participar en grupos de apoyo que manifesté lo que les esté
pasando para proporcionar un sentido de comunidad y comprensión mutua.

● Terapia interpersonal: mejorar la relación interpersonal para poder


abordar los problemas subyacentes que contribuyen al trastorno
alimenticio y los malos hábitos.
● Educación y concienciación: saber de una nutrición adecuada y la promoción
de una imagen corporal positiva pueden ayudar a prevenir los trastornos.

● Preparación y organización de comidas: el tener comidas preparadas con


anterioridad podría ayudar a los estudiantes a comer sanamente y a tiempo.
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Metodología de la intervención
La metodología para intervenir en trastornos alimenticios en estudiantes del área de
salud suele ser multidisciplinaria, involucrando a profesionales como psicólogos,
médicos especializados en nutrición, y terapeutas. Se enfoca en la detección
temprana, evaluación exhaustiva, tratamiento personalizado y seguimiento continuo
para promover la recuperación y prevenir recaídas. Además, se suele incluir
educación sobre alimentación saludable, manejo del estrés y técnicas de
afrontamiento. Debemos conocer que cada una de estas conlleva un proceso
diferente en el cual vamos a ir desglosando a continuación:

1. Detección temprana: Se busca identificar señales de trastornos alimenticios


como anorexia, bulimia o trastorno por atracón. Esto puede incluir evaluaciones
regulares de salud física y mental, así como la observación de cambios en el
comportamiento alimentario y de ejercicio.
2. Evaluación exhaustiva: Una vez identificados los posibles trastornos
alimenticios, se realiza una evaluación completa que incluye entrevistas clínicas,
cuestionarios de salud mental, evaluación nutricional y, en algunos casos, pruebas
médicas adicionales para detectar posibles complicaciones físicas.
3. Seguimiento continuo: El progreso del estudiante se monitorea de cerca a lo
largo del tratamiento, con sesiones regulares de seguimiento con el equipo de
profesionales. Se realizan ajustes en el plan de tratamiento según sea necesario
para abordar los desafíos y promover la recuperación.
4. Educación sobre alimentación saludable: Se proporciona información y
educación sobre nutrición y hábitos alimentarios saludables, con el objetivo de
promover una relación positiva con la comida y el cuerpo.
5. Manejo del estrés y técnicas de afrontamiento: Se enseñan habilidades para
manejar el estrés, regular las emociones y desarrollar estrategias de afrontamiento
saludables que ayuden al estudiante a lidiar con desencadenantes emocionales sin
recurrir a comportamientos alimenticios desordenados.
13

6. Apoyo continuo: Se fomenta el apoyo social y emocional, tanto de amigos y


familiares como de grupos de apoyo específicos para trastornos alimenticios, para
ayudar al estudiante a sentirse respaldado y comprendido durante su proceso de
recuperación.
La intervención para trastornos alimenticios en estudiantes del área de salud es un
proceso integral que aborda tanto los aspectos físicos como emocionales del
trastorno, con el objetivo de promover la recuperación y el bienestar a largo plazo.
Sin embargo, también se pueden tomar medidas de intervención desde otro punto
de vista como ser la Implementación del Plan de Intervención:

a. Coordinación Multidisciplinaria:

Reuniones Regulares: Equipos de salud mental, académicos, y médicos se reúnen


para discutir el progreso y ajustes del plan.

Comunicación Continua: Mantener una comunicación abierta entre todos los


involucrados, incluyendo al estudiante y su familia.

b. Intervención Psicoeducativa:

Sesiones Educativas: Información sobre el trastorno, su manejo, y estrategias de


autocuidado.

Grupos de Apoyo: Fomentar la participación en grupos de apoyo para compartir


experiencias y estrategias.

c. Seguimiento y Evaluación:

Evaluaciones Periódicas: Revisión del progreso mediante entrevistas, cuestionarios,


y retroalimentación de profesores y tutores.

Ajustes del Plan: Modificaciones basadas en la evolución del estudiante y su


respuesta a las intervenciones.

Prevención y Promoción de la Salud Mental

a. Programas de Bienestar:
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Talleres y Seminarios: Enfocados en el manejo del estrés, mindfulness, y hábitos


saludables.

Campañas de sensibilización: Promover la importancia de la salud mental y reducir


el estigma asociado.

b. Ambiente Académico Saludable:

Políticas de Apoyo: Implementación de políticas institucionales que favorezcan el


bienestar mental, como horarios flexibles y espacios de descanso.

Capacitación de Personal: Formación para profesores y personal en identificación


temprana y manejo de trastornos mentales.

4. Recursos y Referencias Externas

a. Colaboración con Instituciones:

Referencias a Especialistas: Derivaciones a servicios externos cuando se requieren


tratamientos especializados. Implementar esta metodología implica un compromiso
institucional y un enfoque centrado en el estudiante para asegurar un tratamiento
integral y efectivo, promoviendo tanto la recuperación como el éxito académico y
personal.
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Diseño de intervenciones

RECOMENDACIONES DIETÉTICAS, ESTRATEGIAS DE PREVENCIÓN, CAMBIOS


DE ESTILO DE VIDA.

RECOMENDACIONES DIETÉTICAS

Para un paciente con ansiedad y depresión, es fundamental evitar ciertos


alimentos y bebidas que pueden exacerbar estos síntomas. Para evitar:

Azúcares Refinados

● El consumo excesivo de azúcares refinados puede causar picos y caídas en los


niveles de azúcar en sangre, lo que puede llevar a cambios de humor y aumentar la
ansiedad y la depresión. Ejemplos: Dulces, pasteles, galletas, refrescos, jugos
azucarados.

Alimentos Procesados y Ultra procesados

● Estos alimentos suelen tener un alto contenido de grasas trans, azúcares añadidos, y
aditivos que pueden afectar negativamente la salud mental. Ejemplos: Comida
rápida, snacks envasados, carnes procesadas (salchichas, embutidos), productos de
panadería industrial.

Cafeína

● La cafeína puede aumentar los niveles de ansiedad, interferir con el sueño y


contribuir a síntomas de depresión si se consume en exceso. Ejemplos: Café, té
negro, bebidas energéticas, refrescos con cafeína.
16

Alcohol

● El alcohol es un depresor del sistema nervioso central y puede empeorar los


síntomas de depresión y ansiedad, además de interferir con los patrones de sueño.
Ejemplos: Vino, cerveza, licores, cócteles.

Grasas Trans y Grasas Saturadas

● Estas grasas pueden afectar negativamente la salud cerebral y están asociadas con
un mayor riesgo de depresión. Ejemplos: Margarina, productos horneados
comerciales, comida rápida, productos fritos.

Sodio en Exceso

● El consumo excesivo de sodio puede llevar a la retención de líquidos y aumentar la


presión arterial, lo que puede contribuir a la ansiedad. Ejemplos: Alimentos
enlatados con alto contenido de sal, snacks salados, sopas instantáneas, comidas
preparadas.

Aspartamo y Otros Edulcorantes Artificiales

● Algunos estudios sugieren que los edulcorantes artificiales pueden afectar


negativamente el estado de ánimo y aumentar la ansiedad. Ejemplos: Bebidas
dietéticas, productos bajos en calorías endulzados artificialmente, chicles sin azúcar.

Alimentos con Alto Índice Glucémico

Estos alimentos pueden causar rápidos aumentos y caídas en los niveles de azúcar
en sangre, lo que puede afectar el estado de ánimo y la energía. Ejemplos: Pan
blanco, arroz blanco, pastas refinadas, cereales azucarados.
17

Estrategias adicionales para una dieta saludable:

● Comidas Regulares: Comer a intervalos regulares para mantener niveles estables


de azúcar en sangre.

● Hidratación Adecuada: Beber suficiente agua para mantenerse hidratado, lo que es


crucial para la función cerebral.

● Alimentos Nutritivos: Optar por alimentos integrales, frescos y mínimamente


procesados que sean ricos en nutrientes esenciales para la salud mental.

● Estas recomendaciones pueden ayudar a manejar mejor los síntomas de ansiedad y


depresión, pero es importante consultar a un profesional de la salud o un dietista
registrado para obtener asesoramiento personalizado y adecuado (1).

Cambios de estilo de vida

● Ejercicio regular: Mantenerse físicamente activo no solo es importante para la salud


en general, sino que también puede ayudar a regular el apetito y mejorar el estado
de ánimo, además de esto la actividad física posee impacto en la salud mental
aquellos adultos activos poseen una mejora en los conceptos formados sobre si
mismos con elevación del autoestima lo que indica un incremento en confianza y
seguridad, estabilidad y autocontrol en estudiantes esto se puede observar y ver
reflejado en grupos que si hacen uso de esta práctica y aquellos que no, como
eliminación de la ansiedad tensión y estrés mejorando el estado de ánimo(2).

● Gestión del estrés: Buscar formas saludables de manejar el estrés, como la


meditación, el yoga o el ejercicio, puede ayudar a prevenir la alimentación emocional,
la practica obstante de actividad física posee impacto con relación a un descenso de
la ansiedad en estudios previos mostraron que la ansiedad diaria puede ser reducida
por medio de la práctica de ejercicio. Demostrando que quince minutos de carrera
tres veces por semana o la práctica de deportes como el voleibol pueden reducir el
estrés y ansiedad (2). Además de que entre más mayor sea la destreza en el
ejercicio, mayor será la apreciación de la calidad de la calidad de
18

vida y el autodescubrimiento mediante el ejercicio (2).

● Educación sobre nutrición: Aprender sobre los grupos de alimentos, el valor


nutricional de los alimentos y cómo afectan al cuerpo puede ayudar a desarrollar una
relación más saludable con la comida, La información, adecuada y adaptada, puede
motivar la necesidad de cambiar, ayudar a desarrollar las habilidades que permitan
realizar una elección adecuada de los alimentos, contribuir a la modificación de
conductas y actitudes, y orientarlas hacia estilos de vida más saludables que se
mantengan en el tiempo, La educación nutricional juega un rol fundamental ya que
contribuirá a que el paciente modifique sus actitudes y rutinas en relación con la
comida, pierda miedos y restablezca un patrón de alimentación normal, favoreciendo
de este modo a su recuperación nutricional(3).

● Buscar apoyo profesional: Consultar a un nutricionista, dietista o terapeuta


especializado en trastornos alimenticios puede ser fundamental para recibir
orientación y apoyo personalizado, por ejemplo, La terapia cognitivo-conductual
(TCC) adaptada a la BN o conocida como la bulimia nerviosa que es el tratamiento
de elección para este trastorno TA o trastorno de atracones que son
ejemplificaciones de algunos trastornos alimenticios, Existen varios estudios que
avalan la eficacia de la TCC, encontrándose una mejoría de las conductas de atracón
y purga de entre el 30 y 50% en los pacientes que reciben tratamiento(4).

● Identificar desencadenantes: Reconocer los factores que desencadenan los malos


hábitos alimenticios, como el estrés, la ansiedad o la soledad, puede ayudar a
desarrollar estrategias para abordarlos de manera más saludable. En relación con un
ejemplo de factores que expresan trastornos alimenticios o malos hábitos alimenticios
son los hábitos de ingesta, con relación a la percepción a la figura y peso corporal; y
a su capacidad para controlarlos. Esta sobrevaloración de la importancia de la figura,
del peso y de su control es la pieza clave en el mantenimiento del problema
denominan el “núcleo psicopatológico” A partir de este núcleo se derivan el resto de
características clínicas de los trastornos TCA: la dieta estricta y los
19

comportamientos dirigidos a controlar el peso (p.e.restringir la ingesta, ejercicio


excesivo, etc.), la evitación (p.e. evitar mirar ciertas partes del cuerpo), los
rituales de comprobación (p.e. mirarse continuamente al espejo pesarse
frecuentemente), y la preocupación por pensamientos sobre la comida, la figura
y el peso(5).

Según este modelo, la única característica clínica que no está directamente


relacionada con el núcleo psicopatológico son los atracones, que aparecen como
consecuencia de los intentos por restringir la ingesta y someterse a dietas extremas
e inflexibles (5).
20

Actividades

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24

Recomendaciones

Educación y concienciación nutricional:

● Talleres y seminarios: Organizar sesiones regulares sobre nutrición equilibrada,


etiquetado de alimentos, y la importancia de una dieta variada.
● Material educativo: Distribuir folletos y guías nutricionales que se adapten a las
necesidades específicas de los estudiantes de salud, destacando cómo una buena
nutrición puede mejorar el rendimiento académico y profesional.
● Incorporar la nutrición en el currículo: Integrar temas de nutrición y salud en los
programas de estudio para que los estudiantes comprendan su importancia y puedan
aplicar ese conocimiento en su vida diaria y futura práctica profesional.

Acceso a comidas saludables:

● Opciones en cafeterías y vending machines: Asegurarse de que las cafeterías y


máquinas expendedoras ofrezcan opciones saludables, incluyendo frutas, verduras,
granos enteros, y proteínas magras.
● Descuentos y subvenciones: Ofrecer descuentos en comidas saludables o vales para
que los estudiantes puedan comprar alimentos nutritivos a precios accesibles.
● Horas de comedor flexibles: Extender el horario de servicio de comidas para adaptarse
a los horarios variables de los estudiantes de salud.

Apoyo psicológico y emocional:

● Servicios de asesoramiento: Proporcionar acceso a consejeros y terapeutas


especializados en trastornos alimenticios y problemas de alimentación.
● Grupos de apoyo: Crear grupos de apoyo donde los estudiantes puedan compartir sus
experiencias y obtener ayuda de sus compañeros y profesionales.
● Programas de reducción del estrés: Implementar programas y talleres de manejo del
estrés, ya que el estrés puede influir negativamente en los hábitos alimenticios.

Fomento de la actividad física:

● Instalaciones deportivas accesibles: Asegurarse de que los estudiantes tengan acceso


a instalaciones deportivas y programas de ejercicio.
● Clases de ejercicio gratuitas o a bajo costo: Ofrecer clases de yoga, pilates, aeróbicos y
otros tipos de ejercicio que puedan interesar a los estudiantes.
● Eventos y campañas: Organizar eventos deportivos y campañas para promover un
estilo de vida activo y saludable.

Monitoreo y evaluación continua:

● Encuestas regulares: Realizar encuestas periódicas para evaluar los hábitos


alimenticios y necesidades de los estudiantes, ajustando las estrategias según los
resultados obtenidos.
● Consultas con dietistas: Proveer servicios de consulta con dietistas o nutricionistas para
ofrecer asesoramiento personalizado.
● Evaluación de programas: Monitorear y evaluar la efectividad de los programas
implementados, haciendo ajustes necesarios para mejorar su impacto.

25

RESULTADOS

TABLA#1
Distribución de sexo en los participantes en las FCS de UNITEC Tegucigalpa, Q2, 2024
Frecuenci Porcentaj
Selección de Sexo a e
Mujer 34 67%
Hombre 17 33%
51 100%

TABLA#2
Cantidad según la edad de participantes en la FCS de UNITEC Tegucigalpa, Q2, 2024
Selección de rango de Frecuenc Porcenta
edad ia je
16-18 8 16%
19-21 17 33%
22-24 18 35%
25-30 8 16%
<30 0 0%
51 100%

TABLA#3
Distribución según la carrera cursante de encuestados de la FCS en UNITEC TGU, Q2
2024.
Selección según su Frecuenc Porcenta
carrera ia je
Medicina 25 48%
Odontología 10 19%
Nutrición 8 15%
Psicología 9 17%
Total 52 100%

TABLA#4
Distribución según los participantes que experimentado algún cambio significativo en
tus hábitos alimenticios desde que comenzaste tus estudios en el campo de la salud de
la FCS de UNITEC, Q2,2024
Según los que experimentaron un cambio Frecuenc Porcenta
significativo ia je
Si 39 0.75
No 13 0.25
Total 52 1
26

GRÁFICO#1
Distribución de los participantes que recurren a dietas restrictivas para controlar su
peso o mejorar su apariencia física de la FCS de UNITEC, Q2,2024.

GRÁFICO#2
Distribución según los participantes que experimentaron poco control sobre lo que
comen, con la sensación de no poder detenerte incluso si ya estás lleno/a en la FCS de
UNITEC, Q2, 2024.

TABLA#5
Distribución según los participantes que creen que las redes sociales y los medios de
comunicación influyen en la percepción de la imagen corporal y los hábitos
alimenticios de los estudiantes en la FCS de UNITEC, Q2, 2024.
Frecuenc Porcentaj
Participantes ia e
Si 45 87%
No 7 13%
Total 52 100%
27

TABLA#6
Distribución según los participantes que conocían que la depresión y la ansiedad
causan cambios en los hábitos o trastornos alimenticios en la FCS, UNITEC, Q2,2024.
Participantes que conocen la Frecuenc Porcenta
relación ia je
Si 45 87%
No 7 13%
52 100%

GRÁFICO#3
¿Distribución es el tipo de apoyo consideran más efectivo para manejar la ansiedad y la
depresión? esto en relación con problemas en los hábitos y trastornos alimenticios en
los estudiantes de la FCS, UNITEC, Q2 2024.

GRÁFICO#4
Distribución según el conocimiento sobre los efectos negativos de los trastornos
alimenticios en la salud física y mental en los estudiantes de la FCS de UNITEC,
Q2,2024.
28

TABLA#7
Distribución según la importancia que los programas de estudio en salud incluyan
educación sobre trastornos alimenticios y cómo abordarlos en la FCA de UNITEC,
Q2,2024.
La importancia de medidas en Frecuenc Porcenta
relación: ia je
Si 41 79%
No 11 21%
Total 52 100%

GRÁFICA#5
Distribución según en qué medida consideraban los participantes que el estrés
relacionado con tus estudios afecta tus hábitos alimenticios en la FCS de UNITEC,
Q2,2024.

TABLA#8
Distribución según la frecuencia buscas apoyo profesional o recursos relacionados con
la alimentación y la salud mental cuando experimentas dificultades los estudiantes de
la FCS de UNITEC, Q2,2024.
Participantes que Frecuenc Porcentaj
respondieron ia e
Nunca 16 31%
Rara vez 17 33%
A veces 12 24%
Frecuentemente 6 12%
Siempre 0 0%
Total 51 100%
29

Conclusiones

● La investigación revela que el estrés académico y las altas demandas del programa de
estudios de ciencias de la salud tienen un impacto negativo significativo en los hábitos
alimenticios de los estudiantes. Estos factores contribuyen a la adopción de patrones
alimenticios poco saludables, como el ayuno prolongado y la restricción calórica
extrema. Además, la presión por mantener un cuerpo "ideal" influye fuertemente en la
percepción de la imagen corporal, llevando a comportamientos extremos relacionados
con la alimentación y el ejercicio. Un 75% de los participantes reportó cambios
significativos en sus hábitos alimenticios desde que comenzaron sus estudios, y un alto
porcentaje (87%) cree que las redes sociales y los medios de comunicación aumentan
la presión para mantener una imagen corporal específica.

● Se concluyó que aunque los estudiantes de ciencias de la salud poseen un


conocimiento profundo sobre nutrición, este conocimiento puede conducir a una
obsesión poco saludable con la alimentación "perfecta" y una preocupación excesiva
por el peso y la forma corporal. Esta obsesión se ve reflejada en la adopción de dietas
restrictivas que, aunque inicialmente parecen saludables, pueden resultar en trastornos
alimenticios como la anorexia nerviosa y la bulimia nerviosa. La alta conciencia sobre la
relación entre la salud mental y los hábitos alimenticios es notable, con un 87% de los
encuestados reconociendo que la depresión y la ansiedad pueden causar cambios en
los hábitos alimenticios.

● Para abordar eficazmente los trastornos alimenticios y promover hábitos alimenticios


saludables entre los estudiantes, es esencial un enfoque multidisciplinario que incluya
terapia cognitivo-conductual, apoyo nutricional, y programas de manejo del estrés. Las
intervenciones preventivas, como programas de bienestar y campañas de
sensibilización, son cruciales para reducir la incidencia de estos trastornos. Los
resultados del estudio subrayan la importancia de implementar estrategias educativas y
de apoyo para ayudar a los estudiantes a equilibrar sus responsabilidades académicas
con una alimentación saludable y un bienestar general
30

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