Fisiopatología y nutrición.

Mtro. Dr. Ernesto Alejandro Hernández Escobedo.

2024
Giovanni Ramsses Cervantes Jacobo.
Nutrición 3B.

14-5-2024
Resúmenes fisiopatología.
1. Generalidades del metabolismo y alteraciones
fisiopatológicas.

Metabolismo, Catabolismo y Anabolismo.

Metabolismo:

El metabolismo es el conjunto de procesos químicos que ocurren en un

organismo para mantener la vida. Incluye la síntesis y degradación de moléculas
para obtener energía y construir componentes celulares. Los desequilibrios
metabólicos pueden surgir debido a factores genéticos, dieta inadecuada, falta de
ejercicio y enfermedades metabólicas. Los trastornos metabólicos afectan a
personas de todas las edades y grupos étnicos, siendo algunos más comunes en
ciertas poblaciones. Se basa en pruebas de laboratorio para medir niveles de
metabolitos y hormonas, además de evaluaciones clínicas y de imagen según la
enfermedad específica. El tratamiento varía según el trastorno metabólico, pero
puede incluir cambios en la dieta, medicamentos para regular los niveles
metabólicos y terapias específicas según la condición.

Catabolismo:

Es el conjunto de procesos metabólicos que descomponen moléculas complejas

en componentes más simples, liberando energía.

Una dieta rica en calorías y grasas puede aumentar el riesgo de catabolismo

excesivo, así como enfermedades metabólicas que afectan la capacidad del
cuerpo para descomponer nutrientes. El catabolismo excesivo puede ocurrir en
situaciones de ayuno prolongado, enfermedades crónicas y condiciones de estrés.

Se evalúa mediante pruebas de laboratorio para medir los niveles de metabolitos y

hormonas, junto con la evaluación clínica de los síntomas y la historia médica.
Depende de la causa subyacente e incluye medidas para frenar la descomposición
excesiva de tejidos y promover la síntesis de nuevas moléculas.

Anabolismo:
Es el conjunto de procesos metabólicos que construyen moléculas complejas a
partir de moléculas simples, utilizando energía.

Una dieta pobre en nutrientes esenciales y falta de ejercicio pueden limitar la

capacidad del cuerpo para llevar a cabo el anabolismo de manera eficiente.

Los trastornos del anabolismo pueden surgir en personas con desnutrición,

enfermedades crónicas y trastornos metabólicos. El diagnóstico se realiza
mediante pruebas de laboratorio para evaluar los niveles de nutrientes y
hormonas, junto con la evaluación clínica de los síntomas y la historia médica. El
tratamiento implica corregir las deficiencias nutricionales, promover una dieta
equilibrada y realizar ejercicio regularmente para estimular la síntesis de
moléculas importantes en el cuerpo.

1.2 Respuesta metabólica al estrés e hipermetabolismo:

El cuerpo experimenta una respuesta metabólica al estrés, como quemaduras

graves o lesiones traumáticas, que causa un aumento en el metabolismo basal
conocido como hipermetabolismo. Factores de riesgo que pueden desencadenar
esta condición incluyen lesiones traumáticas, quemaduras graves y enfermedades
crónicas pueden desencadenar esta respuesta. Afecta principalmente a personas
que experimentan lesiones graves.

El diagnóstico se basa en la evaluación clínica y de laboratorio de los cambios

metabólicos.

El principal tratamiento se centra en la nutrición adecuada y el control de la

respuesta inflamatoria mediante antiinflamatorios.

1.3 Estrés oxidativo:

Es un desequilibrio entre la producción de especies reactivas de oxígeno y la

capacidad del cuerpo para neutralizarlos, lo que puede dañar las células y
contribuir al desarrollo de enfermedades. El estrés oxidativo puede ser causado
por la exposición a toxinas ambientales, dieta poco saludable, estrés crónico y
enfermedades. Es un factor contribuyente en muchas enfermedades crónicas,
como enfermedades cardiovasculares y neurodegenerativas. Su diagnóstico se
basa en pruebas que evalúan los niveles de antioxidantes y productos de
oxidación en el cuerpo. El tratamiento involucra la reducción de factores
desencadenantes, aumentando la ingesta de antioxidantes a través de la dieta y,
en algunos casos, suplementos.

1.4 Adaptaciones metabólicas al ayuno:

El cuerpo experimenta adaptaciones metabólicas durante el ayuno para conservar

energía y mantener la función celular. El ayuno prolongado puede aumentar el
riesgo de desnutrición y otros problemas de salud. Las adaptaciones metabólicas
al ayuno son comunes en personas que practican el ayuno intermitente o en
situaciones de escasez de alimentos. Se evalúa mediante pruebas de laboratorio y
la observación clínica de los cambios en los niveles de metabolitos y hormonas.
Parte del tratamiento implica la monitorización cuidadosa de la ingesta nutricional
y puede requerir intervención médica en casos de desnutrición o desequilibrios
metabólicos.

Es de suma importancia conocer estos procesos fisiológicos pues al sufrir alguna

alteración en estos, el riesgo a desarrollar enfermedades crónicas aumenta
significativamente, además de que juegan un papel muy importante dentro de la
nutrición ya que al conocer estos procesos y complicaciones nos ayudará a
entender diversas complicaciones de futuros pacientes y como es que podemos
intervenir.
2 sistema inmune.

El sistema inmunológico es la red de células, tejidos y órganos que protegen al

cuerpo contra patógenos y sustancias extrañas, manteniendo la homeostasis.
Factores genéticos, edad, estilo de vida y enfermedades pueden afectar la función
inmunológica. Los trastornos del sistema inmunológico pueden afectar a personas
de todas las edades y géneros.

2.1 Respuesta inmune y su relación con el estado de nutrición:

La nutrición juega un papel crucial en la función inmunológica, ya que los

nutrientes esenciales son necesarios para la producción y activación de células
inmunes. Una dieta desequilibrada puede afectar negativamente la respuesta
inmune, aumentando el riesgo de infecciones y enfermedades autoinmunes. La
malnutrición puede afectar a personas de todas las edades, especialmente en
áreas con acceso limitado a alimentos nutritivos. Se evalúa mediante pruebas de
laboratorio para medir los niveles de nutrientes en el cuerpo y mediante la
evaluación clínica del estado nutricional.

El tratamiento implica corregir deficiencias nutricionales a través de una dieta

equilibrada y, en algunos casos, suplementos nutricionales.

2.2 Cascada de la inflamación.

La inflamación es una respuesta inmune normal a la lesión o infección, que implica

una serie de eventos bioquímicos conocidos como cascada de la inflamación. La
inflamación crónica puede ser causada por factores como el estrés, la obesidad, el
tabaquismo y enfermedades crónicas. La inflamación crónica está asociada con
muchas enfermedades crónicas, como enfermedades cardiovasculares, diabetes y
cáncer. El diagnóstico se basa en la evaluación clínica de los síntomas y pruebas
de laboratorio para medir los marcadores inflamatorios en el cuerpo. Involucra el
tratamiento de la causa subyacente de la inflamación, así como medidas para
reducir la inflamación y controlar los síntomas.
2.3 Deficiencias micro nutricionales y sistema inmune:

Las deficiencias de micronutrientes, como vitaminas y minerales, pueden afectar

negativamente la función inmunológica al comprometer la producción y activación
de células inmunes. Una dieta desequilibrada y condiciones que afectan la
absorción de nutrientes pueden aumentar el riesgo de deficiencias
micronutricionales. Las deficiencias micronutricionales pueden ser comunes en
poblaciones con acceso limitado a alimentos nutritivos y en personas con ciertas
enfermedades. El diagnóstico se basa en pruebas de laboratorio para medir los
niveles de micronutrientes en el cuerpo, así como en la evaluación clínica del
estado de nutrición.

El tratamiento implica corregir deficiencias micronutricionales a través de una dieta

equilibrada y, en algunos casos, suplementos dietéticos.

Es clave conocer el sistema inmune y cómo trabaja ya que como nutriólogos en

formación es importante que sepamos lo fundamental que son los alimentos para
dar a todas las células los nutrientes necesarios para que protejan a nuestro
cuerpo de cualquier complicación y/o agente extraño. La dieta equilibrada y rica en
nutrientes esenciales juega un papel fundamental dentro de la producción y
regulación de células del sistema inmunológico.
3. Fisiopatología de la Desnutrición.

La desnutrición es una condición en la que el cuerpo no recibe los nutrientes

necesarios para mantener la salud y el funcionamiento adecuados. Puede ser
causada por una ingesta inadecuada de alimentos, problemas de absorción o
enfermedades que afectan el metabolismo. La desnutrición puede ser causada por
factores socioeconómicos, enfermedades crónicas, trastornos digestivos y
condiciones que afectan la ingesta de alimentos. La desnutrición afecta a millones
de personas en todo el mundo, especialmente en países en desarrollo y en
poblaciones vulnerables como niños, ancianos y personas con enfermedades
crónicas.

Existen muchos tipos de desnutrición entre las que destacan:

3.1 Desnutrición proteico-energética (Marasmo):

El marasmo es un tipo de desnutrición caracterizado por una ingesta inadecuada

de proteínas y calorías, lo que resulta en una pérdida de masa muscular y grasa
corporal. La falta de acceso a alimentos nutritivos, la pobreza extrema y la falta de
educación sobre la nutrición son factores de riesgo para el marasmo. Es más
común en niños pequeños en áreas con acceso limitado a alimentos nutritivos y en
personas que sufren de hambruna o desplazamiento. Su diagnóstico se basa en la
evaluación clínica de la pérdida de peso, la atrofia muscular y la debilidad, junto
con pruebas de laboratorio para evaluar los niveles de nutrientes en el cuerpo.

El tratamiento implica una alimentación gradual con una dieta equilibrada rica en
proteínas y calorías, así como suplementos nutricionales si es necesario.
3.2 Desnutrición proteica (Kwashiorkor):

El kwashiorkor es un tipo de desnutrición causada por una ingesta inadecuada de

proteínas, lo que resulta en edema, deterioro del crecimiento y desarrollo, y
deficiencias nutricionales. La falta de acceso a alimentos ricos en proteínas, dietas
basadas en alimentos de bajo valor nutricional y enfermedades crónicas son
factores de riesgo para el kwashiorkor. Es más común en niños pequeños en
áreas con pobreza extrema y falta de acceso a alimentos nutritivos. Se realiza una
evaluación clínica de los signos de malnutrición, incluido el edema, así como
pruebas de laboratorio para evaluar los niveles de proteínas y otros nutrientes en
el cuerpo. Una alimentación gradual con una dieta equilibrada rica en proteínas,
junto con tratamiento para corregir las deficiencias nutricionales y el edema son
parte del tratamiento.

3.3 Desnutrición inducida por citocinas (Caquexia):

La caquexia es un estado de desnutrición grave y debilitante que a menudo se

observa en personas con cáncer, enfermedades crónicas y enfermedades
inflamatorias, caracterizado por la pérdida de masa muscular y grasa corporal. La
caquexia está asociada con enfermedades que causan inflamación crónica y la
producción excesiva de citocinas inflamatorias. Es más común en pacientes con
cáncer avanzado y enfermedades crónicas como la insuficiencia cardíaca y la
enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC). La evaluación clínica de la
pérdida de peso y masa muscular, junto con pruebas de laboratorio para evaluar
los niveles de nutrientes y marcadores inflamatorios en el cuerpo. El tratamiento
implica el tratamiento de la enfermedad subyacente, junto con medidas para
mejorar la ingesta de nutrientes y controlar la inflamación mediante medicamentos.

Conocer algunos tipos de desnutrición es fundamental como nutriólogos en

formación ya que esto nos ayudará a poder dar un tratamiento adecuado mediante
una dieta equilibrada y adecuada según la deficiencia presentada.
4. Fisiopatología de las Enfermedades del Tracto
Gastrointestinal.

4.1 Esófago:

El esófago es un tubo muscular que conecta la garganta con el estómago y es

responsable de transportar los alimentos y líquidos ingeridos hacia el estómago
mediante contracciones musculares coordinadas. Factores de riesgo incluyen el
consumo excesivo de alcohol, el tabaquismo, la obesidad, la ingesta de alimentos
muy calientes o ácidos, y condiciones médicas como la acidez estomacal crónica.
Las enfermedades del esófago pueden afectar a personas de todas las edades,
pero son más comunes en adultos mayores y en aquellos con antecedentes de
enfermedades gastrointestinales. El diagnóstico se realiza mediante estudios de
imagen como la endoscopia, pruebas de función esofágica y análisis de síntomas
específicos. El tratamiento varía según la condición específica, pero puede incluir
cambios en la dieta, medicamentos para reducir la acidez estomacal, cirugía para
corregir anomalías estructurales o terapias para mejorar la motilidad esofágica.

4.2 Hernia hiatal:

Una hernia hiatal ocurre cuando una porción del estómago sobresale a través del
diafragma hacia el tórax, a través de un orificio en el diafragma llamado hiato
esofágico. Los factores de riesgo incluyen la edad avanzada, el tabaquismo, la
obesidad y el embarazo, así como el levantamiento de objetos pesados o la
tensión durante la defecación. Es más común en adultos mayores y en personas
con antecedentes de obesidad o enfermedades respiratorias. El diagnóstico se
realiza mediante técnicas de imagen como radiografías, endoscopias o pruebas de
pH esofágico para confirmar la presencia de la hernia y evaluar su gravedad.
Además, se pueden realizar pruebas para descartar complicaciones como la
esofagitis por reflujo o la enfermedad de Barrett. El tratamiento de la hernia hiatal
puede implicar cambios en el estilo de vida, como evitar comidas pesadas o
picantes, perder peso, dejar de fumar y elevar la cabecera de la cama. En casos
más graves o sintomáticos, se pueden recetar medicamentos para reducir la
acidez estomacal o se puede considerar la cirugía para reparar la hernia y
fortalecer el esfínter esofágico inferior.

4.3 Enfermedad de Reflujo Gastroesofágico (ERGE):

La ERGE es una condición en la que el contenido ácido del estómago retrocede

hacia el esófago, causando síntomas como acidez estomacal, regurgitación ácida
y dolor en el pecho. Los factores de riesgo incluyen obesidad, tabaquismo,
consumo excesivo de alcohol, consumo de alimentos grasos o picantes, hernia
hiatal y embarazo. Es una afección común que afecta a personas de todas las
edades, pero es más prevalente en adultos mayores y en aquellos con
antecedentes de enfermedades gastrointestinales.

El diagnóstico se realiza mediante la evaluación de los síntomas del paciente,

pruebas de pH esofágico, endoscopia y estudios de imagen como la manometría
esofágica. Cómo tratamiento se incluye cambios en el estilo de vida como evitar
alimentos desencadenantes y elevar la cabeza de la cama durante el sueño, así
como medicamentos para reducir la producción de ácido estomacal o cirugía en
casos graves o resistentes al tratamiento médico.

4.4 Acalasia:

La acalasia es un trastorno del esófago en el que el músculo esofágico no se

relaja adecuadamente, lo que dificulta el paso de los alimentos desde el esófago
hacia el estómago. Aunque la causa exacta no siempre está clara, la acalasia
puede estar asociada con la degeneración de los nervios del esófago. Es una
afección poco común que afecta a personas de todas las edades, pero es más
común entre los 30 y los 60 años. Para diagnosticarla se realizan pruebas de
función esofágica como la manometría esofágica y la endoscopia para descartar
otras condiciones similares. El tratamiento Incluye técnicas para aliviar la
obstrucción esofágica, como la dilatación endoscópica o la cirugía para cortar el
músculo esofágico y permitir un mejor paso de los alimentos.
4.5 Estenosis esofágica:

La estenosis esofágica es un estrechamiento anormal del esófago que puede ser

causado por inflamación, cicatrización o tumores que obstruyen el paso de los
alimentos. Los factores de riesgo incluyen enfermedades autoinmunes como la
esofagitis eosinofílica, ingestión de sustancias cáusticas, cirugía esofágica previa y
enfermedades inflamatorias crónicas. Puede afectar a personas de todas las
edades, pero es más común en adultos mayores y en aquellos con antecedentes
de enfermedades esofágicas. La evaluación clínica de los síntomas del paciente,
estudios de imagen como la endoscopia y pruebas de función esofágica forman
parte del diagnóstico. El tratamiento depende de la causa subyacente y puede
incluir dilatación esofágica, tratamiento médico para reducir la inflamación o
cirugía para corregir la obstrucción.

Conocer estas patologías es de suma importancia ya que nosotros como

nutriólogos debemos dar recomendaciones y planes adecuados para prevenir
enfermedades de tracto gastrointestinal, además de poder ayudar a los pacientes
con estas enfermedades para controlarlas y que los síntomas no sean tan
frecuentes y no se agraven con el tiempo.
5. Tracto gastrointestinal bajo.

5.1 Diarrea Aguda y Crónica.

La diarrea aguda se define como la evacuación de heces líquidas o semilíquidas
más de tres veces al día por menos de dos semanas, mientras que la diarrea
crónica se refiere a episodios que persisten más de cuatro semanas. La diarrea
aguda es común a nivel mundial, especialmente en áreas con saneamiento
deficiente, y se diagnostica principalmente a través de la historia clínica y el
examen físico, aunque en casos graves se realizan análisis de heces y cultivos. El
tratamiento incluye rehidratación oral, dieta adecuada y tratamiento específico
para infecciones. La prevención se basa en mejorar la higiene, el saneamiento, el
acceso a agua potable y la vacunación contra ciertos patógenos. La diarrea
crónica, menos frecuente, requiere pruebas adicionales como colonoscopias y
biopsias, y su tratamiento varía según la causa subyacente, incluyendo cambios
dietéticos y medicamentos específicos.
5.2 Estreñimiento.
El estreñimiento es la dificultad para evacuar, con frecuencia menor a tres veces
por semana, acompañado de esfuerzo excesivo o sensación de evacuación
incompleta. Es más común en mujeres y ancianos, afectando aproximadamente al
14% de la población mundial. Se diagnostica mediante la historia clínica y examen
físico, con estudios adicionales en casos crónicos. El tratamiento incluye un
aumento de la ingesta de fibra y líquidos, uso de laxantes, y ejercicio regular. La
prevención se centra en una dieta rica en fibra, hidratación adecuada y actividad
física regular.
5.3 Síndrome de Intestino Irritable (SII).
El SII es un trastorno gastrointestinal funcional caracterizado por dolor abdominal
recurrente asociado a cambios en la frecuencia o forma de las heces. Afecta a
alrededor del 10-15% de la población global, siendo más común en mujeres. El
diagnóstico se basa en los criterios de Roma IV y la exclusión de otras
enfermedades. El tratamiento incluye cambios en la dieta, como una dieta baja en
FODMAPs, uso de medicamentos como antiespasmódicos y antidepresivos, y
terapia cognitivo-conductual. La prevención implica identificar y manejar los
factores desencadenantes y reducir el estrés.
5.4 Enfermedad Celíaca.
La enfermedad celíaca es una enfermedad autoinmune en la que la ingesta de
gluten provoca daño en el intestino delgado. Afecta aproximadamente al 1% de la
población y se diagnostica mediante pruebas serológicas y biopsias intestinales. El
tratamiento principal es una dieta estricta sin gluten de por vida. La prevención en
individuos con predisposición genética se enfoca en la introducción cuidadosa de
gluten durante la infancia y la vigilancia médica continua.
5.6 Síndrome de Intestino Corto.
El síndrome de intestino corto es una afección donde la absorción de nutrientes
está comprometida debido a la pérdida significativa de intestino delgado. Es una
condición rara que puede resultar de cirugía, enfermedad de Crohn u otras
afecciones. El diagnóstico se basa en la historia clínica y estudios de imagen. El
tratamiento incluye nutrición parenteral, suplementos nutricionales y, en algunos
casos, trasplante intestinal. La prevención se centra en el manejo adecuado de las
condiciones subyacentes y la cirugía conservadora del intestino cuando sea
posible.
5.7 Enfermedad de Crohn y Colitis Ulcerativa Crónica Inespecífica (CUCI).
La enfermedad de Crohn y la CUCI son enfermedades inflamatorias del intestino.
La enfermedad de Crohn puede afectar cualquier parte del tracto gastrointestinal,
mientras que la CUCI se limita al colon y al recto. Ambas son crónicas y pueden
provocar síntomas como dolor abdominal, diarrea y pérdida de peso. El
diagnóstico incluye pruebas de laboratorio, endoscopias y estudios de imagen. El
tratamiento consiste en antiinflamatorios, inmunosupresores y terapias biológicas,
y en casos severos, cirugía. La prevención de brotes implica adherirse al
tratamiento, evitar factores desencadenantes y llevar una dieta adecuada.

Conocer las patologías del tracto gastrointestinal es de suma importancia ya que

muchos pacientes padecen de alguna de estas enfermedades sin siquiera saberlo,
el conocer cada una de estas nos ayudara a dar un posible diagnostico y poder
dar recomendaciones según se requiera, estas enfermedades son bastantes
comunes en personas con un estilo de vida sedentario y es común que acudan al
nutriólogo con estas enfermedades sin un diagnóstico previo del médico.
6 fisiopatología en Anemia.

6.1 Anemia Ferropénica

La anemia ferropénica es una condición caracterizada por la disminución de los
glóbulos rojos o de la hemoglobina en la sangre debido a una deficiencia de hierro,
esencial para la producción de hemoglobina. Es la forma más común de anemia
en todo el mundo, afectando principalmente a niños, mujeres en edad fértil y
personas con dietas deficientes en hierro, especialmente en países en desarrollo.
El diagnóstico se realiza a través de pruebas de laboratorio que muestran niveles
bajos de hemoglobina, hematocrito, ferritina sérica y saturación de transferrina,
junto con glóbulos rojos microcíticos e hipocrómicos en un frotis de sangre. El
tratamiento incluye la suplementación oral de hierro y, en casos severos, hierro
intravenoso, además de tratar las causas subyacentes de la deficiencia. La
prevención se basa en una dieta rica en hierro, fortificación de alimentos y
suplementos de hierro cuando sea necesario, junto con educación sobre nutrición
adecuada y tratamiento de condiciones predisponentes.
6.2 Anemia Megaloblástica.
La anemia megaloblástica es una forma de anemia causada por la deficiencia de
vitamina B12 o ácido fólico, esenciales para la síntesis de ADN en la producción
de glóbulos rojos. Esta condición es menos común que la anemia ferropénica y
puede afectar a personas con dietas deficientes, trastornos de absorción o
enfermedades autoinmunes como la anemia perniciosa. El diagnóstico se realiza
mediante pruebas de laboratorio que muestran glóbulos rojos grandes
(megaloblásticos) y niveles bajos de vitamina B12 o ácido fólico. El tratamiento
consiste en la administración de suplementos de vitamina B12 o ácido fólico,
dependiendo de la deficiencia específica, y en la corrección de cualquier trastorno
subyacente que cause la deficiencia. La prevención incluye una dieta equilibrada
con alimentos ricos en vitamina B12 (carne, pescado, productos lácteos) y ácido
fólico (vegetales de hojas verdes, frutas, legumbres) y, en algunos casos,
suplementos vitamínicos.

Estas patologías son tratadas principalmente mediante la dieta del nutriólogo de la

mano de un médico, últimamente estas patologías se han vuelto más comunes,
por eso es de suma importancia conocer estas enfermedades para saber como
podemos ayudar a nuestro paciente, mediante estrategias nutricionales y
recomendaciones del estilo de vida.
7 Fisiopatología de las Enfermedades de Hígado y Páncreas.

7.1 Hepatitis Aguda y Crónica.

Hepatitis aguda es una inflamación del hígado que dura menos de seis meses,
causada comúnmente por infecciones virales (hepatitis A, B, C), toxinas,
medicamentos o enfermedades autoinmunes. Hepatitis crónica persiste más de
seis meses, principalmente debido a infecciones virales crónicas (hepatitis B y C),
enfermedades autoinmunes, y abuso de alcohol. La hepatitis crónica puede
progresar a cirrosis y cáncer de hígado. El diagnóstico incluye pruebas
serológicas, biopsias y estudios de función hepática. El tratamiento varía según la
causa, desde antivirales hasta cambios en el estilo de vida y tratamiento
inmunosupresor. La prevención incluye vacunación (hepatitis A y B), prácticas de
higiene, y evitar el consumo excesivo de alcohol y drogas hepatotóxicas.
7.2 Hígado Graso.
El hígado graso o esteatosis hepática se caracteriza por la acumulación de grasa
en las células del hígado. Puede ser alcohólico (esteatosis hepática alcohólica) o
no alcohólico (NAFLD). Es común en personas con obesidad, diabetes tipo 2, y
dislipidemia. El diagnóstico se realiza mediante ecografía, análisis de sangre y, en
algunos casos, biopsia hepática. El tratamiento se centra en cambios en el estilo
de vida, como pérdida de peso, ejercicio y control de enfermedades metabólicas.
La prevención incluye mantener un peso saludable, dieta equilibrada y ejercicio
regular.
7.3 Cirrosis Hepática.
La cirrosis hepática es una enfermedad crónica en la que el tejido hepático normal
es reemplazado por tejido cicatricial, lo que conduce a una pérdida de función
hepática. Es causada por hepatitis viral crónica, abuso de alcohol, hígado graso no
alcohólico y enfermedades autoinmunes. Los síntomas incluyen fatiga, ictericia, y
ascitis. El diagnóstico se basa en pruebas de función hepática, imágenes y biopsia
hepática. No hay cura, pero el tratamiento puede ralentizar la progresión y aliviar
los síntomas, incluyendo medicamentos, cambios en el estilo de vida y, en casos
avanzados, trasplante de hígado. La prevención implica evitar factores de riesgo
como el consumo excesivo de alcohol y controlar enfermedades hepáticas
subyacentes.
7.4 Pancreatitis Crónica.
La pancreatitis crónica es una inflamación prolongada del páncreas que lleva a un
daño permanente. Es comúnmente causada por el consumo crónico de alcohol y
enfermedades hereditarias. Los síntomas incluyen dolor abdominal, pérdida de
peso y esteatorrea. El diagnóstico se realiza mediante pruebas de imagen como
TC, RM, y análisis de sangre. El tratamiento se enfoca en aliviar el dolor, mejorar
la función digestiva y tratar complicaciones. Puede incluir medicamentos, cambios
dietéticos, y en casos severos, cirugía. La prevención se centra en evitar el alcohol
y tratar condiciones predisponentes.
7.5 Patología de Vías Biliares y Anexos.
Colecistitis es la inflamación de la vesícula biliar, generalmente debido a cálculos
biliares. Coledocolitiasis implica cálculos en el conducto biliar común, lo que puede
causar obstrucción y pancreatitis biliar. La pancreatitis biliar es la inflamación del
páncreas debido a cálculos biliares. El diagnóstico de estas condiciones incluye
ecografía, TC, y ERCP. El tratamiento puede involucrar antibióticos, analgésicos y
procedimientos como la colecistectomía (extirpación de la vesícula biliar) o la
extracción de cálculos biliares. La prevención se basa en mantener un peso
saludable, una dieta equilibrada y, en algunos casos, el tratamiento quirúrgico de
la vesícula biliar antes de que ocurran complicaciones.

Las enfermedades en el hígado y páncreas son bastante comunes y es bastante

recurrente que las presenten sin síntomas tan evidentes, como nutriólogo el saber
de que manera podemos prevenir y tratar estas patologías mediante planes
nutricionales y consejería nos ayudara bastante para trabajar de la mano con
médicos y doctores para resolver estas enfermedades.
8 Fisiopatologías de las Enfermedades Cardiovasculares y
Crónico Degenerativas.

8.1 Síndrome Metabólico

El síndrome metabólico es un conjunto de condiciones que ocurren juntas,
aumentando el riesgo de enfermedad cardiovascular, diabetes tipo 2 y accidente
cerebrovascular. Estas condiciones incluyen hipertensión, hiperglucemia, exceso
de grasa abdominal y niveles anormales de colesterol o triglicéridos. Es prevalente
en personas con obesidad y estilos de vida sedentarios. El diagnóstico se basa en
la presencia de al menos tres de estos factores. El tratamiento se centra en
cambios en el estilo de vida, como la pérdida de peso, dieta saludable y ejercicio
regular, junto con medicamentos para controlar los componentes específicos del
síndrome. La prevención incluye una dieta equilibrada, actividad física regular y
evitar el tabaquismo.
8.2 Dislipidemias y Ateroesclerosis
Las dislipidemias son trastornos del metabolismo de los lípidos, caracterizados por
niveles anormales de colesterol y triglicéridos en la sangre. Estas condiciones son
factores de riesgo principales para la ateroesclerosis, una enfermedad en la cual
las arterias se estrechan debido a la acumulación de placa. El diagnóstico se
realiza mediante análisis de sangre para medir los niveles de lípidos. El
tratamiento incluye cambios en la dieta, ejercicio, y medicamentos como las
estatinas. La prevención se centra en una dieta saludable, ejercicio regular y, en
algunos casos, medicación para mantener los niveles de lípidos bajo control.
8.3 Hipertensión Arterial
La hipertensión arterial es una condición en la que la presión de la sangre contra
las paredes de las arterias es demasiado alta, lo que puede llevar a problemas de
salud graves, como enfermedades cardíacas y accidentes cerebrovasculares. Se
diagnostica cuando la presión arterial es consistentemente de 140/90 mmHg o
más. El tratamiento incluye cambios en el estilo de vida como dieta baja en sal,
ejercicio regular y medicación antihipertensiva. La prevención implica mantener un
peso saludable, actividad física regular, una dieta equilibrada y control del estrés.
8.4 Generalidades de Obesidad
La obesidad es una condición en la que una cantidad excesiva de grasa corporal
aumenta el riesgo de problemas de salud. Es diagnosticada cuando el índice de
masa corporal (IMC) es de 30 o más. Es una condición prevalente a nivel mundial,
asociada con estilos de vida sedentarios y dietas poco saludables. El tratamiento
incluye cambios en la dieta, aumento de la actividad física y, en algunos casos,
medicación o cirugía bariátrica. La prevención se basa en una dieta equilibrada,
ejercicio regular y educación sobre hábitos de vida saludables.
8.5 Diabetes Mellitus
La diabetes mellitus es un grupo de enfermedades metabólicas caracterizadas por
hiperglucemia debido a defectos en la secreción de insulina, su acción o ambas.
Los dos tipos principales son la diabetes tipo 1, una enfermedad autoinmune, y la
diabetes tipo 2, relacionada con el estilo de vida. El diagnóstico se realiza
mediante pruebas de glucosa en sangre y hemoglobina A1c. El tratamiento incluye
cambios en el estilo de vida, medicación y en algunos casos, insulina. La
prevención, especialmente para la diabetes tipo 2, se enfoca en mantener un peso
saludable, una dieta balanceada y actividad física regular.
8.6 Enfermedad Ateroesclerosa
La enfermedad ateroesclerosa es una condición en la cual las arterias se
endurecen y estrechan debido a la acumulación de placa. Esta enfermedad puede
llevar a problemas cardiovasculares graves, como infartos de miocardio y
accidentes cerebrovasculares. Se diagnostica mediante estudios de imagen como
angiografías y pruebas de función cardiovascular. El tratamiento incluye cambios
en el estilo de vida, medicamentos para controlar los factores de riesgo y
procedimientos quirúrgicos en casos severos. La prevención implica una dieta
saludable, ejercicio regular, no fumar y control de los niveles de colesterol y
presión arterial.
8.8 Hiperuricemia y Gota
La hiperuricemia es una condición caracterizada por niveles elevados de ácido
úrico en la sangre, lo que puede llevar a la formación de cristales en las
articulaciones, causando gota, una forma de artritis extremadamente dolorosa. El
diagnóstico se realiza mediante análisis de sangre y líquido sinovial. El tratamiento
incluye medicamentos para reducir los niveles de ácido úrico y aliviar el dolor,
junto con cambios en la dieta y el estilo de vida. La prevención se basa en una
dieta baja en purinas, mantener un peso saludable y evitar el consumo excesivo
de alcohol.
8.9 Insuficiencia Cardíaca Congestiva Crónica
La insuficiencia cardíaca congestiva crónica es una condición en la que el corazón
no puede bombear suficiente sangre para satisfacer las necesidades del cuerpo.
Los síntomas incluyen disnea, fatiga y edema. El diagnóstico se realiza mediante
ecocardiogramas, electrocardiogramas y pruebas de esfuerzo. El tratamiento
incluye cambios en el estilo de vida, medicamentos y, en algunos casos,
dispositivos implantables o cirugía. La prevención implica el manejo adecuado de
condiciones subyacentes como hipertensión, diabetes y enfermedades coronarias,
junto con una dieta saludable y ejercicio regular.
Muchos aspectos de las enfermedades cardiovasculares pueden ser gestionados
eficazmente mediante la dieta. El estar informado acerca de esto puede ayudarme
a diseñar planes de alimentación específicos que ayudan a controlar los niveles de
lípidos en sangre, mantener la presión arterial en rangos saludables y gestionar el
peso corporal.
Para mí como estudiante de nutrición, el conocimiento de las enfermedades
cardiovasculares es vital. Este conocimiento no solo permite la creación de
estrategias dietéticas efectivas para la prevención y manejo de estas
enfermedades, sino que también nos capacita para educar a la población,
colaborar con otros profesionales de la salud y contribuir a la investigación en el
campo de la nutrición cardiovascular.