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Efraín Cepeda presidirá el Senado: ¿qué le depara al Gobierno Petro?
El congresista costeño ganó el pulso interno y fue avalado en unanimidad por la bancada conservadora para liderar la Corporación a partir del próximo 20 de julio.
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Tanto los liberales como La U ya anunciaron que respaldarán los acuerdos y estarán a favor de apoyar a Cepeda. FOTO Camilo Suárez
21 de junio de 2024
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Aun sin haber arrancado la legislatura, el Gobierno de Gustavo Petro ya enfrenta un desafío mayúsculo para el trámite de sus proyectos en el Congreso a partir del 20 de julio. A la Presidencia del Senado –por acuerdo de los partidos con mayor votación en las elecciones de 2022–, arribará el senador conservador Efraín Cepeda, quien se ha destacado como uno de los opositores del Ejecutivo y quien ha marcado una distancia de antaño con el primer mandatario.
Detrás de su postulación unánime –que se oficializó al término de un desayuno en el Congreso con la bancada–, se libró una dura pelea con el también senador Carlos Andrés Trujillo, considerado cercano al Gobierno y a quien dentro de la propia colectividad le achacan que en un primer momento los godos se hayan declarado partido de gobierno, con todo y las diferencias que a la postre los llevaron a ser independientes.
Si bien el partido comunicó la decisión en la mañana de este jueves a través de una carta firmada por los 15 senadores de la bancada, llamó la atención que en las fotografías del encuentro hubo dos ausentes de primer orden: tanto Trujillo como el senador Miguel Ángel Barreto. De acuerdo con fuentes al interior de la colectividad, ambos congresistas lideraban un pequeño conato disidente para buscar que a esa dignidad no llegara Cepeda, sino justamente Trujillo.
“Trujillo fue quien pactó con Petro ser partido de gobierno en 2022, cuando él era el presidente de la colectividad. Muchos nos opusimos, pero al final se impuso. Todo esto a cambio de que en este 2024, cuando nos toca la Presidencia al Senado a nosotros, el presidente Petro lo apoyara para ocupar esa dignidad. Hasta último momento Trujillo buscó que se respetara ese acuerdo, pero se impuso la mayoría y escogimos a Cepeda, que puede garantizar independencia”, explicó a este diario uno de los congresistas de la bancada que pidió reserva de la fuente.
Según los senadores, sumado a las dudas por las decisiones que desde la Presidencia del Senado podría ejercer el senador Trujillo en favor del Gobierno, había sendos cuestionamientos contra su nombre por su supuesta vinculación con el escándalo alrededor de los carrotanques para La Guajira y las presuntas irregularidades que tienen en jaque la Unidad Nacional de Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD). Lo anterior, tras lo dicho por el propio director de la entidad, Carlos Carrillo.
“Trujillo no tenía cómo pelear esa Presidencia. La coalición interna desde que llegó a liderar Cepeda ha estado con él. Trujillo no fue a la reunión y le comunicamos que las mayorías estábamos con Cepeda, que lo íbamos a respaldar. Le tocó firmar”, manifestó otro senador.
El arribo a la Presidencia del Senado del político costeño –quien suma más de tres décadas en el Parlamento– podría traducirse en otro golpe para los intereses del Gobierno, que en la próxima legislatura espera tramitar varias de sus reformas sociales: tanto las que se quedaron en el camino (la de la salud o la de educación), como aquellas que siguen en trámite (particularmente la laboral), así como las nuevas que serán radicadas, entre ellas, la reforma a la justicia.
“He ofrecido a todas las bancadas garantías en el debate. Eso sí, quiero que sean debates mesurados y que gane el sector que tenga los votos, pero esto no es personal. Esto es político. Analizaremos también como partido los diferentes proyectos. Ojalá se llegue a consensos, los buscaremos. Hemos dicho que son tan importantes los proyectos de los congresistas como los del Gobierno, de manera que vamos a guardar allí un equilibrio”, aseguró este jueves Cepeda.
La relación entre el senador y el Gobierno se deterioró por cuenta del trámite de la fallida reforma a la salud y llegó a su momento de mayor tensión en febrero. En ese entonces, emulando una fórmula que les dio rédito con la bancada liberal en Cámara, el Gobierno intentó dividir a los godos y buscar la salida de Efraín Cepeda de la presidencia de la colectividad a cambio de aparentes puestos y burocracia.
Si bien el senador alcanzó a renunciar, la bancada negó su salida y lo ratificó como presidente, lo que entre líneas supuso un mensaje para el Ejecutivo de que no cederían a la presión burocrática a cambio de tramitar las reformas.
Según el senador Nicolás Albeiro Echeverry, Cepeda fue escogido fundamentalmente porque puede ofrecer garantías de independencia frente al Gobierno. “En estos momentos difíciles, en los que se requiere contrarrestar la permanente amenaza a la democracia, qué mejor que alguien con experiencia y capacidad como Efraín Cepeda. Para el momento que estamos viviendo es fundamental tener a alguien independiente”, sostuvo.
Cuestionado sobre si hará contraposición al Gobierno Petro desde la Presidencia del Senado, Cepeda sostuvo que “son muchas las reformas” que le han votado al Ejecutivo; sin embargo, defendió que se han opuesto a proyectos sin consenso ni diálogo. “No somos notarios, pero sí entramos en el debate, interpretando la Constitución que habla de la colaboración armónica entre los poderes”.
Aunque es incierto si el Ejecutivo respetará los acuerdos o buscará imponer una tercería para que a la Presidencia del Senado llegue alguien más afín a sus intereses, el profesor Jorge Iván Cuervo –analista político e investigador de la Universidad Externado–, de lograr un trabajo armónico, el petrismo podría sacar réditos con la llegada de Cepeda.
“Es un político tradicional con experiencia institucional que entiende cómo funciona el Congreso para bien y para mal. Su presencia ahí le puede ayudar al Gobierno en la medida en que se pueden construir acuerdos. Cepeda representa un tipo de clase política capaz de abrirse a negociaciones y pactos. Es más pragmático”, dijo el catedrático.
