Silent Hill 3
Silent Hill 3 es un videojuego de supervivencia y horror (¿O qué? ¿Qué esperabas de Silent Hill? ¿Pachinkos?), protagonizado por Jeder Morris, la cual es la hija de Pedrito Masón. Aunque en esta ocasión, Jeder se tendrá que enfrentar a una tía que se llama Claudia, que está loca, loquísima; y que busca llevar a Heather con ella al Silent Hill para disque predicar la palabra de Dios. Sin embargo, como Heather se rehusó a pagarle el diezmo, que a partir de ahí Claudia nos hace la vida imposible y hasta le gasta una broma al Harry (le quita el corazón). Y como a Heather nadie le toca los ovarios, pues al final se va al pueblucho ese a cargarse a todo Cristo que se ponga por delante y para ver que mierda está pasando.
Argumento
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Advertencia: Este artículo contiene detalles de trama y argumento, como por ejemplo que Járri y Claudia se mueren. Ahora que te lo dije, puedes seguir leyendo.... |
Hace 17 años, Harry Mason (el prota del Silent Hill 1), por alguna razón no voló al cielo y consiguió escapar de ese pueblo de locos, y durante el camino POR FIN dejó de preguntar por su hija (¿Cheryl Mason?, ¿y esa quién es?); ya que básicamente acabó hecha mierda, pero a cambio le dieron un bebé, vamos, una nueva hija de recambio, con la cuál quedo muy feliz. Llamo al bebé Heather, porque si la llama como la anterior, no pararía de dar el coñazo preguntando por ella, esta historia se repetiría y sería una idiotez.
Después de 17 años, un buen día Heather se fue a un centro comercial, ya que su padre le pidió que comprara algo, al final Heather nunca lo buscó y se quedó jetona en el McDonald's, y después de amanecerse se encuentra a un tal Douglas Cartland, un tipo que sin razón aparente sigue a Heather al lugar (no sé amigo, a mí me suena a un viejo verde). Sin embargo, Heather se esconde de este loco en el baño, para así meterse su dosis diaria de LSD, una dosis tan fuerte que se queda flipando y ve demonios y esas cosas. Lo malo es que ve como un monstruo le anda viendo el culo, por lo que activa sus genes estadounidenses y así logra obtener una pistola con la cual defenderse. Sin embargo, después de explorar el centro, Heather se encuentra a una loca llamada Claudia, que le dice unas chorradas que le dan dolor de cabeza a Heather, con lo que Claudia aprovecha para escapar.
Heather, sin embargo, entra a un ascensor, que accede a otro ascensor y el mundo se pone extraño, Jeter ve sangre por todos lados y más monstruos que nunca; aunque afortunadamente para nosotros, ninguno de los desarrolladores del juego fue tan vulgar como para crear un simbolismo de la sangre con la menstruación. Y luego de muchas puertas con cerrojos rotos, trancadas, Perro a la barbecue y monstruos, Jeter llega a lo que podría llamarse "Jefe", un gusano, (y del que nos hace preguntarnos la fijación de la franquicia con siempre hacer alegorías fálicas). Heather le mata y ya con eso se le pasa el efecto de la droga. Posterior a esto, Heather tiene una bonita charla con Douglas y luego va al metro para llegar a su cantón, donde su papi la espera.
Lamentablemente, Heather la tiene difícil para llegar a su hogar, ya que cuando se va al metro, arriba en un tren común; solo que sin conductor, sin gente, con monstruos, y que cada vez que avanzas un vagón el que precediste se suelta, pero eso no le quita lo común. En este periplo, Heather se tuvo que bajar para llegar a una zona de oficinas, pero con la mala suerte de que cuando se intentó bañar en una bañera, a dicho aparato le empezó a salir ketchup, y siendo Heather una víctima más del virus de la inmensa hueva, ni se tomó la molestia de reparar el baño y mejor se echó un coyotito.
Heather despierta en el suelo lleno de mierda suciedad, se enoja y le da una patada a la bañera, pero solo logra reafirmar que la bañera no tiene la culpa de sus cochinadas. Aun así Heather explora el edificio, que ahora está plagado de perros y osos hormigueros, y conoce a Vincent, un cura que encuentra ese mundo de locos bastante "Fascinante". Aunque, en en este nivel se revela que Heather fue adicta a el cigarrillo alguna vez, (lo que remarca su drogadicción), y que los hechizos de los cuentos de hadas funcionan en la realidad.
Sin embargo, nuestra querida Heather por fin logra escapar del lugar para por fin ir a su casita a reunirse con papi, pero cuando llega, Heather se lleva una muy desagradable sorpresa. Al principio, mientras Heather le hablaba a su padre de todos los sin sentido que vivió durante el día, piensa que Harry la está haciendo de coña con su vieja broma de que se había muerto en el sillón de nuevo, pero antes de que Heather le reclamase de que ese chiste ni siquiera era gracioso en primer lugar, pues que ve que en realidad su padre si había muerto, por lo que Heather, luego del shock inicial, se quiebra y rompe en llanto. Impulsada con una gran rabia, Heather sigue un rastro de sangre que la lleva a la azotea, en la que se encuentra a Claudia, quién empieza a mofarse de que su viejo había muerto, lo que hace que Heather le jure a Claudia que de alguna manera logrará que le toque el arpa a San Pedro. Pero a Claudia le chupa tres pingos lo que piense la mocosa, le envía al monstruo que mató a Harry, y la provoca diciendo que, si es tan cabrona, que la busque en el lugar en donde todo inicio, Silent Hill.
Probablemente por el producto de la adrenalina, Heather logra enfrentar en combate a este monstruo plagiado de las películas de Freddy Kruger, venciéndolo con el poder ranchero de los escopetazos. Sin embargo, justo cuando Heather bajó al apartamento para ponerle el pijama de madera a Harry, se encuentra de nuevo al detective Douglas, quién, antes de que Heather lo demande por allanamiento de morada, la convence de ayudarle a detener a la loquita de Claudia y llevarla al pueblucho. Como Heather ya no tenía para el pasaje, pues acepta. Y finalmente, después de la mitad del juego, por fin vamos a ese lugar maldito por dónde los cerrajeros tienen miedo de pasar, SIlent Hill.
Ya en un hotel del pueblo maldito, Heather y Douglas tienen la inteligente idea de separarse para buscar, a sugerencia de Vincent, a un viejo llamado Leónidas Leonard, Heather va al Hospital y Douglas a su casa, (el tipo no es pendejo, prefirió poner la tarea peligrosa a la adolescente traumada, mientras seguro él se fue a comer donas). Es así como Heather pone rumbo al Hospital para enfermos mentales Brookhaven, para que así le den tratamiento encontrar a Leonard. Lamentablemente para los salidos, las enfermeras de este lugar no están tan sexys como las del 2, pero bueno. Después de un buen rato dando vueltas en círculos, Heather entra en una habitación donde Leonard le hace una llamada por teléfono, revela que es el padre de Claudia y que esta de su lado. Heather se emociona por encontrar a alguien normal y va derechita en su búsqueda.
Perdiéndose como de costumbre (porque no es Silent Hill sin perderse a lo bruto), Heather entra a un laberinto, y tras llegar a un símbolo de color rojizo, ve un vídeo porno donde recuerda a Lisa Garland, la enfermera güena del Silent Hill 1. Y después de recorrer el laberinto, y de que un pervertido le llamase para felicitarla por su cumple nº 31 (aunque después dice que es el 24), Heather llega con Leonard, que probablemente sea descendiente del Mono-demonio-mutante feo de cojones, ya que no es muy agraciado que digamos, por lo que Heather le mata, le roba su cupón del KFC un sello que tenía consigo, y sale de nuevo al mundo real.
Al salir del hospital, nuestra querida Heather se va corriendo al motel para reunirse con Douglas, aunque en el sitio se encuentra a Vincent masturbándose contemplando la pared. Él le cuenta que Douglas la está esperando en el parque de diversiones, Heather esta tan aburrida que le cree y va a divertirse un poco en el parque.
Ella llega al parque para jugar en los autos de choque y reírse de los niños pequeños contra los que haga colisión, pero, cuando se le empieza a ocurrir esa emocionante idea, su comida del McDonald's le da indigestión, y el mundo real cambia al mundo de locos y se llena de disfraces de conejitos con salsa de tomate en la cara (¡Es salsa de tomate! ¡en serio!); y adivina, si, monstruos, por lo que Heather debe (otra vez) pelear para sobrevivir y que no se la carguen. Mientras tanto, Douglas le cuestiona a Claudia sus verdaderas intenciones con Heather, a lo que, la bruja declara que la quieren usar para que regrese Diosito, y así, este castigue a los ateos del mundo por no creer que Cristo si era capaz de fiestones al convertir el agua en vino. Como Douglas cree que eso es una reverenda mamada, está listo para atacar a Claudia, aunque por tarado resbala con una cáscara de plátano y se rompe el coxis.
Heather por su parte, se empezó a aburrir de no encontrar nada interesante en el kiosko del parque, así que se va a una Mansión, solo que una llena de sangre que parece real, cadáveres y lugares mortíferos, lo estándar. Cuando se llega al final del recorrido una luz socialista roja persigue a los visitantes. Si llega a tocarlos mueren, eso es lo más emocionante del recorrido. Pero Heather logra sobrevivir y llega a los Caballitos, en donde se enfrenta a Alessa, su antiguo yo, por lo que se arman los guamazos. Balaceo que balaceo, katanazos que damos, y que Heather logra derrotar a Alessa y así reencontrarse con Douglas, quién le dice que, como anda incapacitado de la cintura para abajo, que vaya sola a detener a esos dementes. Y Heather, convencida que dé en esta ocasión el tipo no se le unió por flojera, sino por tonto, que se va sola a la Final Dungeon, la Iglesia.
Ya en el sitio, Heather y Claudia empiezan a discutir cuestiones religiosas, solo para que Heather empiece a tener cólicos o algo, y en lugar de darle pastillitas para el dolor, Claudia huye cagando leches. Tras perseguirla, y de que Heather sea trolleada épicamente por el cuatro ojos de Vincent, Heather llega hasta el final de la iglesia, donde ve como Claudia apuñaló a Vincent por la espalda, aunque a nadie le importa, ya que el tipo se robaba las obleas de la Iglesia. Lo malo es que Heather descubre que esta embarazada del mismo Dios (¡Carajo Heather!, ¡¿Qué los condones están de adorno, o qué?!).
Y si bien, Heather siente repulsión a meter la mano en un retrete, no duda en tragarse una píldora radioactiva de color sangre que lleva años colgada al cuello, por lo que Heather acaba vomitando una babosa (¿Con qué clase de Dios se metió esta tía?). A Claudia, sin embargo, como que le empezó a dar hambre, y se la come ¡cruda!, con lo cual se atraganta y muere... Sin embargo, estamos en un juego japo muchachos, estos tíos a la de ahuevo buscarán incluir que de alguna manera matemos un dios, por lo que de Claudia surge Dios. Heather, viendo que de alguna manera no pudo tener el gusto de hacer parranda por la muerte de Claudia, y de poner su pancarta con la leyenda de: "¡Felicidades por morir, gilipollas!", pues al menos se conforma con pelear contra Dios, por lo que se arman los putazos finales. Corro que corro, esquivo que esquivo, tasajeó que tasajeó y que Heather fue capaz de derrotar al mismo Dios, y ya me dirán que tan Dios era, ya que una comesueldos le ganó. Aunque después de matar a Dios, y de que Heather se lamentase porque su padre colgó los tenis, esto nos lleva a...
Finales del Juego
Por resumir, hay varios finales dependiendo de lo bien, mal, lenta o inútilmente juegues:
- Normal: Vas al centro comercial compras y vuelves a casa, se consigue si no te compras el juego.
- Poseída: Heather pierde los sesos y hace que Douglas se vaya a bailar con la más fea.
- Terror nocturno: Sale esto; "Error, no se encuentra el disco Silent Hill 3".
- OVNI: Cuando llegas a la casa de Heather aparece su papi tomando té con un alien y Jaime Sandiland, y después de un intercambio de palabras, Jarri dice que destruirá Silent Hill. Luego de que los OVNIS le disparen rashos lásher, Silent Hill explota y empieza a sonar una cancioncita japonesa.
- Final Canon: Heather se reúne con Douglas, y luego de echarle un pedo al hacerle creer que se había vuelto loca, aclara que nada más lo estaba chingando. Posteriormente, Heather declara que ya no quiere que la llamen por su nombre falso, sino el real: Cheryl. Así que Heather decide darle un funeral en condiciones a nuestro amado Pedrito Masón, cerrando esta historia.
Personajes
- Heather Mason: La prota del juego, una adolescente con tendencia a perderse en centros comerciales y acabar en una dimensión alternativa. A diferencia de muchas rubias hollywoodenses, ella no está oxigenada, siendo muy sarcástica. Sin embargo, se sabe que está como una cabra, esto por su firme creencia de que, si arroja basura al desagüe, una diosa le recompensaría con cañerías de oro y plata. De momento es la única protagonista fémina en esta saga.
- Douglas Cartland: Es un viejo gordo que lleva 17 años siguiendo a Heather y por fin la encuentra, (por lo visto Heather es tan difícil de encontrar como el chupacabras). Aun así, dudamos que realmente sea un detective, ya que es frecuente encontrarle con gabardina y en calzoncillos, por lo que, se sospecha que padece una enfermedad mental grave y que se gana la vida como exhibicionista.
- Harry Mason: El prota del primer Silent Hill. Es casi el padre de Heather, pero bueno, no sale mucho y se muere rapidito.
- Claudia Loba: Ella es Claudia, aunque Heather prefiere llamarla "Perra". Es una fea mujer que está obsesionada con la creación de el "Paraíso" (al cual Douglas describe como una tierra de borregos castrados). Su padre vive en una alcantarilla. Va descalza por ahí, así el suelo este repleto de legos (lo cual acentúa su locura), no tiene cejas (posiblemente se las quemó) y siempre blasfema contra cualquiera que insulte a su Dios.
- Vincent Smith: Es un amigo de toda la vida de Claudia. El cuatro ojos que no quiere ensuciarse las manos y le deja todo el trabajo a Heather. Lamentablemente, no vio venir que Claudia le tocará la
colaespalda con un puñal.
Armas
Heather no es que sea una atleta profesional: se cansará al correr, al disparar, al cortar, le pesaran las cosas, lo normal en un prota de Silent Hill. Tendrá a su disposición nada menos que:
- Navajita: Espera, ¿De verdad alguien usó ese traste?
- Cañería de acero: Da unas piñas bastante buenas, pero tampoco es para emocionarse.
- Cañeria de plata y oro: Es igual de inútil, pero puedes hacerte el chulo con estas.
- Pistola eléctrica: También es inútil. Te la regaló Járri, aunque solo sirve para evitar la represión policial gringa.
- Pistola: Tiene 10 balas y te la encuentras tirada por ahí, bueno, como todas las armas, y básicamente hace cosquillas a los enemigos. Al final te enteras de que es la mejor arma para cargarse al jefe final, y te pones a llorar por haber gastado toda la munición contra cristales y barriles de cerveza.
- Escopeta: Te la encuentras dentro de una caja de regalo y da mucha caña, pero pesa un huevo y es habitual que Heather se canse al usarla.
- Metralleta: Te la encuentras tirada en un hospital y dispara muy rápido, pero nunca aciertas. Eso sí, asusta a los enemigos incluso sin munición. Como Heather vio muchas películas bélicas, se siente Rambo al usarla.
- Mazo: Pesa tanto que lo lleva arrastrando por el suelo y le cuesta dar, y solo sirve para romper ladrillos y saltar a la pértiga. (El tema es, ¿Dónde se lo guarda?)
- Katana: Es una de las pocas armas que sirven, así que píllala. Para una mejor experiencia, le recomendamos que mientras la use, se ponga el Soundtrack de Kill Bill.
- Sable laser: Como Heather es experta en el manejo del sable láser y fue entrenada por Yoda, usa uno de estos para pelear. (Además, aumenta el frikismo de Heather aún mas).
- Lanzallamas: El nombre lo dice todo.
- Ladrillo: Es muy efectiva.
- Jeter Beam: Se lo dan cuando matas a
437895634785645423323263216333 criaturas. No sirve mucho (para empezar el Sable Laser se convierte en eso), a menos que uses la llave mágica y...
- Sexy Beam: Cuando Heather se convierte en la Princesa Heart, el Jeter Beam se convierte en el Sexy Beam. Además de hacerse una transformación con el Poder del Prisma Lunar, se ve
ridículagloriosa con su traje.
Visto que las armas son bastante inútiles, tú mejor opción será correr y gritar en busca de ayuda.
Enemigos
- Perros: Son unos bichos grandes y feos con vendas en el cuerpo, aunque no son agresivos del todo, les puedes tirar un trozo de pollo y salir corriendo si molestan.
- Cosa rara que vuela afilada: Son otros bichos más que gritan de forma poco saludable, son unos pesados que te estarán intentando eliminar y no te dejaran en paz.
- Boxeador desmejorado: ¿Recuerdas a las Mandarínes del juego anterior? ¡Volvieron, en forma de fichas! Aunque hasta una tortuga sería más rápida que ellos.
- El lagarto mutado: Un lagarto con un hoyo en el "cuello" sin brazos que te dará golpes saltando. Y bueno, se matan rápido, son muy fomes.
- El gordo borracho: Son unos gordos que siempre andan durmiendo en cualquier sitio, pero tienen mal despertar y te pegaran si los despiertas. Aguantan muchas ostias, por la gordura seguramente.
- El Macarra con cuchillo: Tiene un puñal malayo en cada mano y te intentarán pegar con técnicas de gimnasio.
- El drogado: Va por el suelo buscando drogas y te tirará al suelo si te acercas mucho. Vamos, como todos los drogados.
- Las enfermeras: Igualitas que las de todos los Silent Hill anteriores, siguientes y posteriores... y por los siglos de los siglos, Amén. Solo que estas tienen cara de mujer y no de monstruo, además, son las únicas hasta ahora con pistolita, con la que son capaces de meterle un gol a Heather en el entrecejo.
- Gusano: Es un bicho gigante que lo matas con unos pocos tiros, es bastante cutre y te lo puedes cargar fácilmente.
- El Navajas Religioso: Es el rey cani, ya que el muy paria mató a Jarri después de que éste se burlase de él por ser una burda copia del Joven Manos de Tijera, pero parece que el chistesito no le duró mucho.
- Clon bueno de Heather: Es igual que ella, pero más tonta y menos rubia (que raro, debería ser más rubia todavía).
- Leonard Lobo: El padre de Claudia, un enfermo mental alojado en un hospital para enfermos mentales. Vive en una alcantarilla y le salen anguilas de la cabeza, (seguramente su hija sea la linda de la familia). También le gusta nadar en el agua sucia de las alcantarillas.
Este es el bicho que arrastra a Jeter, probablemente llevando a su presa para practicar la necrofilia. - El coso que arrastra a Jeter: También llamado Valtiel, es un bicho raro que aparece siempre girando unas válvulas o arrastrando a Heather. La aparición de este ángel lovecraftiano hace que las almas en el cielo entren en pánico y corran gritando, incluso cuando este ángel no quiere hacer daño, y solo quiere hablar con alguien.
- La enfermera tetona: Es una tipa bien buenota que aparece varias veces, lamentablemente no hace nada y solo sirve de fondo.
- Dios: Es otra copia de Heather, pero en grande y sin órganos. Se mata con la pistola (¿Qué te gastaste las balas? Pues te jodes, ahora usas la cañería), y lo que era el fin del mundo, se convierte en el fin del juego.
Gráficos y Sonido
Son buenos... aunque la cámara es una guarrería que se debería castrar. Las enfermeras emiten sonidos de placer cuando las matas, y el gordo eructa cuando le das unos buenos disparos en su panza. Y como es costumbre, Akira Delaoca se compuso tremendos temones, como el icónico You're Not Here (¿Aló? ¡No Estoy!).
La película
¿Alguien sabe porque aparece el Cabezón Piramidal y Jeder Morris en la misma mala película, si los dos son de entregas distintas y no tienen absolutamente nada que ver el uno con el otro? Para mí que los guionistas estaban en estado de ebriedad, y al final se les fue la olla por completo.
Monstruos... ¿Te parecían monstruos? 
- Silent Hill 3 para gente que nadie lo jugó
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esta cochinadaeste artículo - El Himno de este juego
