Bután, situada en el sur de Asia, tiene una superficie de 38.390 Km2 con lo que se encuentra entre los países más pequeños.
Bután, con una población de 760.000 personas, se encuentra en la posición 163 de la tabla de población, compuesta por 196 países y presenta una moderada densidad de población, 20 habitantes por Km2.
Su capital es Timbu y su moneda Ngultrum.
Bután es la economía número 168 por volumen de PIB. Su deuda pública en 2023 fue de 3.121 millones de euros3.375 millones de dolares, con una deuda del 116,07% del PIB está entre los países con más deuda respecto al PÎB del mundo. Su deuda per cápita es de 4.106 € euros por habitante4.441 $ dolares por habitante.
Hay algunas variables que pueden ayudarle a conocer algo más si va a viajar a Bután o simplemente quiere saber más sobre el nivel de vida de sus habitantes.
El PIB per cápita es un muy buen índicador del nivel de vida y en el caso de Bután, en 2022, fue de 3.582 € euros3.775 $ dolares, por lo que se encuentra con esta cifra está en la parte final de la tabla, en el puesto 128. Sus habitantes tienen un bajísimo nivel de vida en relación a los 196 países del ranking de PIB per cápita.
En cuanto al Índice de Desarrollo Humano o IDH, que elabora las Naciones Unidas para medir el progreso de un país y que en definitiva nos muestra el nivel de vida de sus habitantes, indica que los butaneses tienen una mala calidad de vida.
Si la razón para visitar Bután son negocios, es útil saber que Bután se encuentra en el 89º puesto de los 190 que conforman el ranking Doing Business, que clasifica los países según la facilidad que ofrecen para hacer negocios.
En cuanto al Índice de Percepción de la Corrupción del sector público en Bután ha sido de 68 puntos, así pues, sus habitantes tienen un bajo nivel de percepción de corrupción gubernamental.
En las tablas de la parte inferior de la página puede ampliar información sobre la economía y demografía de Bután y si quiere ver información sobre cualquier otro país puede hacerlo desde economía países
Los ranking publicados tienen en cuenta los países de los que tenemos datos, al igual que ocurre con los textos que los acompañan.