Apenas se sentaba el conde, con las cartas en la mano, frente a uno de estos amigos, la suerte parecía
soplar sobre su cabeza, y ellos no se cansaban de perder, invitándole a una partida todas las noches, como si le aguardasen por riguroso turno.
Vicente Blasco Ibáñez
IV La hora de realizar; de poder soplar el polvo de los archivos y el de las bibliotecas en busca de viejas verdades útiles y de antemano anheladas, llególe – al fin - a Mitre a poco de instalarse en Buenos Aires después de Caseros.
(17) Las lágrimas á los ojos Mas que nunca abrasadoras, Mas triste que nunca estuvo LLena de negras memorias, Iba á soplar en la lámpara Soledad ansiando y sombra, Cuando á una puerta escusada Sonó señal cautelosa.
Se puede fácilmente imaginar la cólera y la desesperación de los tres hermanos. Una vez se sintieron agotados de soplar tan fuerte, comprendieron que el pilluelo les había tomado el pelo otra vez.
Sin embargo, un primo suyo, pescadero (que incluso había traído como regalo de bodas un par de lenguados), empezaba a soplar agua con su boca por el agujero de la cerradura, cuando llegó el señor Rouault en el preciso momento para impedirlo, y le explicó que la posición seria de su yerno no permitía tales inconveniencias.
He hablado a usted, general, con franqueza, pero los sentimientos que expresa esta carta quedarán sepultados en el más profundo silencio; si llegasen a traslucirse, los enemigos de nuestra libertad podrían prevalecerse para perjudicarla, y los intrigantes y ambiciosos para soplar la discordia.
Y al mirar que de esta suerte llora a un tiempo y los divierte, ¡silban como Zoilo a Homero, algunos sin compasión, al gaitero, al gaitero de Gijón! :::V Dice el triste en su agonía, entre
soplar y
soplar: «¡Madre mía, madre mía!
Ramón de Campoamor
Por
soplar en el oído del moribundo el nombre de Jesús, perecen ciento; ciento, por que bese el labio contraído la imagen de Jesús, y por disputar una alma a Satanás, en su hora suprema de asalto, perecieran todas.
Tomás Carrasquilla
Y en efecto; convidó a la vecindad, preparó el festín, y cuando los convidados estuvieron reunidos, se agachó y se puso a
soplar el fuego con no poco ímpetu; pero le sucedió al revés que a la reina madre.
Juan Valera
Los discípulos del santo obispo de Hipona se ampararon de tales padrinos y diéronse tan buenas trazas y manejaron las cosas al pespunte y con tanta reserva, que todo fue para ellos
soplar y hacer lunetas.
Ricardo Palma
En tres años no solté la corneta de la mano. _Do-re-mi-fa-sol-la-si_; he aquí mi mundo durante todo aquel tiempo. Mi vida se reducía a
soplar. Ramón no me abandonaba.
Pedro Antonio de Alarcón
Al amanecer empezó a
soplar el viento, un viento helado; el frío calaba hasta los huesos, pero ¡qué maravilloso espectáculo en cuanto salió el sol!
Hans Christian Andersen