Ecosistemas Acuticos
Ecosistemas Acuticos
Ecosistemas Acuticos
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Fundación Agua. Apartado Postal 17-03-833, Quito. Tlfs: 2343-599; 2341-029. e–mail:
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2
EcoCiencia. P.O. Box. San Cristóbal 1523 y Seymour. Casilla 17-12-257. teléfono: 593-2-2451338. e-
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Abstract
The aquatic ecosystems of Ecuador are strongly threatened. They are a
conservation priority taking account of their condition as genetic reservoirs of
unique species, as hydrological regimen regulators and as essential resources of the
mankind. The Nature Conservancy Ecuadorian Program (TNC) and its partners, are
working in behalf of the conservation or the Cóndor Bioreserve (BRC). BRC covers
more than 1’500.000 ha and includes hydrological systems from glacier, at 5000
mosl, to low land rivers, at 400 mosl. With the objective of know the aquatic
ecosystems variability inside de BRC, a preliminary model of abiotic characterization
of aquatic ecosystems has been generated, based on preceding endeavors
preformed by The Freshwater Initiative (FWI) of TNC. The characterized area
includes the Ecological Reserve Cayambe-Coca (RECAY), a Northeastern potion of
the Ecological Reserve Antisana (REA) and paramo and cloudy forest areas
belonging to Sucumbios and Carchi Provinces, accounting a surface of 758.595 ha.
Using a Geographic Information System (GIS) and the variables altitude, slope,
catchment area, geology, mean annual precipitation and vegetation coverture,
1338 basins, components of 10 complete watersheds, have been defined. The
cluster analysis used defined 24 macrohabitats (or groups of macrohabitats) in the
studied area. It is necessary to perform a field validation of this model, all together
with a greater effort of information gathering, to improve this model as a first step
of the design of a model that comprises all the BRC area.
Introducción
Ecosistemas acuáticos
Los páramos del sector norte y centro de la cordillera oriental de los Andes, están
localizados sobre los 3400 msnm, mientras que en el sector sur, en la zona del
austro ecuatoriano, estos inician a una altitud comprendida entre los 2800 y 2900
msnm (Sierra et al. 1999). Estos páramos se comportan como una gran esponja
que va soltando lentamente su contenido de agua, alimentando, de esta manera, a
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Caracterización sistemas acuáticos octubre 2002
Esta “gran esponja” constituye una reserva inmensa de agua que en la actualidad
es utilizada como recurso de subsistencia para las grandes ciudades y el sector
agrícola en general (Parsons, 1982). Además, a lo largo de esta cordillera se
encuentran cientos de riachuelos que nacen de lagunas de origen glaciar (Roldán,
1992; Terneus, 2002), y cuyas aguas continúan su cauce atravesando extensas
zonas de bosque nublado con una gradiente altitudinal extensa (1000 – 3000 m de
altitud) que varia de acuerdo a la topografía, tipo de vegetación e influencia de
lluvias.
Área de Estudio
presencia de algunos flujos laharíticos y/o flujos de lodo con materiales pirocláticos
no consolidados. En la porción inferior del área de estudio, cubierta por bosques
nublados, predominan los relieves heterogéneos muy fuertes y disectados (López,
1992; Peralvo y Trujillo, 2000). El área de estudio se encuentra en los flancos
orientales de la cordillera oriental y en la porción norte de la cordillera amazónica.
La base de la cordillera Oriental está compuesta principalmente de rocas
metamórficas precámbricas con esquistos cristalinos; la Cordillera Galeras está
compuesta esencialmente de piedra caliza cretácea de la formación Napo
(Jorgensen et al. 1999). Seis formaciones vegetales existen en el área de acuerdo a
la clasificación de la vegetación para el Ecuador continental (Sierra et al. 1999) y al
estudio realizado por EcoCiencia para evaluar la disponibilidad del hábitat del oso
andino en la RECAY (Iturralde et al. 2001): Páramo húmedo (incluye páramo
herbáceo, páramo anegado, páramo frailejones y bosques de páramo), Bosque
siempreverde montano alto (BSV-ma), Bosque de neblina montano (Bnm), Bosque
siempreverde montano bajo (BSV-mb) y Bosque piemontano de la cordillera
amazónica (Figura 1).
Su ubicación geográfica, junto con los diferentes pisos climáticos que caracterizan a
esta región, la definen como una zona con una altísima diversidad de fauna y flora,
con una alta calidad paisajística y como un gran reservorio de recursos naturales
renovables y no renovables (Paredes et al. 1998). Cuatro grandes cuencas hídricas
nacen al interior de la Reserva: la del río Aguarico (139.500 ha), la del Quijos
(250.434 ha), la del río Mira (6.700 ha) y la del Esmeraldas (26.243 ha); esta gran
cantidad de recursos hídricos convierte a la RECAY en el reservorio de agua más
importante del norte del país (Paredes et al. 1998).
Métodos
Para la clasificación de los sistemas acuáticos definimos, a través del Modelo Digital
de Terreno (DEM), áreas de captación para cada segmento de río. La red
hidrográfica se generó a partir de las cartas del Instituto Geográfico Militar del
Ecuador (IGM), con escalas 1:50.000 y 1:100.000. La cobertura vegetal se la
obtuvo de los mapas generados por Sierra et al. (1999) e Iturralde et al. (2001), en
formato raster, con escalas 1:1´000.000 y 1:100.000, respectivamente. Las
unidades geológicas se digitalizaron y rasterizaron a partir de los mapas del estudio
“Potencial minero del Ecuador”, con escalas 1:250.000, generados por el CLIRSEN.
Las variables precipitación, temperatura y caudales fueron obtenidas de los
anuarios del INAMHI (1972-1983), de una recopilación previa realizada por el
Centro de Datos para la Conservación (CDC, 2000) y de información recopilada por
TNC (1999).
Este análisis generalmente es calculado con datos crudos (originales) sin necesidad
de que sean estandarizados, aunque los resultados son muy susceptibles a
variación si las unidades de análisis son modificadas. La ventaja de este análisis es
que los valores de distancia, entre dos objetos, no son cambiados por adición de
nuevas observaciones al análisis, pudiendo ser éstas incluso valores extremos
(outlayers). La técnica de agrupamiento que se empleó fue la de Ward (1963), en
la que los clusters se forman a través del análisis de la varianza promedio de los
casos que definen los grupos (clusters). Esta técnica busca minimizar la suma de
cuadrados de cada caso, de cada par de clusters, que se forman durante el análisis.
Esta característica hace que este método de agrupamiento sea muy eficiente,
aunque tienda a crear grupos pequeños.
Resultados
La información obtenida sobre caudal medio por mes, demostró tener una serie de
incongruencias. Al revisar los solapamientos de información, entre las distintas
fuentes utilizadas, se encontró que para algunos años o trimestres, los datos de
caudal tenían diferencias importantes. Esto teniendo en cuenta que provenían de
datos tomados de las mismas estaciones hidrológicas. (Etaciones Quijos en Baeza
(H718) y Quijos DJ Oyacachi (H719), Anexo 5). Al igual que ocurre con la
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Caracterización sistemas acuáticos octubre 2002
Caracterización Abiótica
Discusión
Variables Utilizadas
Desde el punto de vista abiótico los ecosistemas acuáticos son de los más diversos
del mundo (Allan, 1996; Jacobsen et al. 1997; Jacobsen, 1999; Roldán, 1992). La
estructura y composición de estos ecosistemas están influenciadas por la variación
en el ingreso de agua, por los tipos de comunidades vegetales, tipos de suelo y
geología, de las zonas de drenaje. Además, los cambios ambientales a escala
espacial contribuyen con un sinnúmero de parámetros que moldean y transforman
estos ecosistemas, en su recorrido hacia los océanos.
Altitud
Se podría considerar que la altitud es uno de los factores determinantes para la
caracterización de los ecosistemas (Sauer, 1965). En los ecosistemas acuáticos, de
los Andes ecuatorianos, la variación altitudinal es significativa y se encuentra
estrechamente relacionada con la topografía y el relieve de la cordillera (Wolf,
1975). Sin embargo, la altitud misma no determina la estructura y composición de
los ecosistemas acuáticos, sino que es el factor del que dependen parámetros físico
químicos, como la concentración de oxígeno y la temperatura del agua (Figuras 2 y
4), entre otros, que en conjunto son los responsables de las variación de estos
ambientes (Weaver y Rundle, 2001).
Sin embargo, lo más probable es que esta caracterización muchas veces resulte
muy gruesa en relación con los ecosistemas acuáticos. En especial, tomando en
cuenta los cambios de presión atmosférica y temperatura, con respecto a la altitud
(Figuras 2 y 4). Un cambio de altitud promedio de 1200m, implica un cambio
aproximado del 12 % en la presión parcial de oxígeno en el agua (1.2 mg de O 2/l) y
una diferencia de 6 grados centígrados en la temperatura promedio anual. Esto
posiblemente impliquen diferencias fundamentales en la presencia y composición de
taxa y, por tanto, en los flujos de energía y las relaciones de los ecosistemas
acuáticos con su entorno.
Precipitación
La precipitación en un área de drenaje es otro de los factores fundamentales que
caracteriza a los ecosistemas acuáticos (Allan, 1996). La variabilidad en la
distribución de las lluvias define el carácter mas o menos estable de las aguas de
cada región (Margalef, 1983). La precipitación transfiere agua de la atmósfera hacia
la tierra. Este ingreso de agua produce escorrentía la misma que desemboca en ríos
y lagunas, creando una relación importante entre estos y sus zonas de drenaje. Son
determinantes los caudales de agua y la variabilidad de estos, para el ensamblaje
de comunidades de ecosistemas lóticos y lénticos (Allan, 1996; Margalef, 1983;
Roldán, 1992). El mantenimiento de los ecosistemas acuáticos depende del balance
entre la precipitación, la escorrentía, los nacimientos subterráneos, los
afloramientos superficiales, las infiltraciones en el terreno y los procesos de
evapotranspiración. Este balance varía geográfica y estacionalmente, lo que
determina la heterogeneidad de los ecosistemas (Izco et al. 1997; Roldán, 1992).
Geología
La geología también es una variable que caracteriza a los ecosistemas acuáticos.
Gran parte de los iones, presentes en el agua, resultan de la lixiviación por el
lavado de las rocas en las que se asientan estos ecosistemas (Allan, 1996; Roldán,
1992; Margalef, 1983). La composición química del agua contribuye en gran
medida a la composición y a la presencia de ciertos taxa (Allan, 1996; Roldán,
1992; Margalef, 1983). Aquí también la geomorfología cumple un papel
preponderante, en términos de energía potencial que tienen los sistemas lóticos,
La sinergia de estos factores hace que los ecosistemas acuáticos tengan diferencias
significativas con relación a su origen y a la composición geológica y geomorfológica
de su cuenca. Así, por ejemplo, se puede diferenciar ecosistemas acuáticos con
orígenes en deshielo de glaciares, escorrentía subterránea, drenaje de cabeceras,
entre otros (Roldán, 1992; Goldman y Horne, 1968).
Es una lástima que, por razones técnicas, no se haya podido utilizar esta variable
en el proceso del análisis jerárquico, en el presente estudio. De todas formas, es
importante recalcar su importancia, con miras a su utilización en el futuro, bajo
criterios técnicos adecuados, que permitan unificar la heterogeneidad de
características geológicas únicamente de seis a ocho categorías, para obtener una
mejor representatividad de la información
Pendiente
En zonas altas, son característicos los ríos rápidos, de aguas cristalinas, con
grandes variaciones de caudal y velocidad de corriente, y con substratos
caracterizados por material grande. Lo contrario ocurre en zonas bajas, donde los
ríos tienen aguas cargadas de sedimentos, con mayor estabilidad en su velocidad
de corriente y con substratos más pequeños (Roldán, 1992). Estas diferencias son
el resultado de un factor que está también estrechamente relacionado con la
altitud, la energía potencial. La energía potencial es el resultado de la pendiente.
Por gravedad, el agua busca abrirse paso y labra, lava y erosiona el terreno, en su
camino hacia zonas bajas (Roldán, 1992; Margalef, 1983). Los cambios drásticos de
altitud, en distancias cortas, confieren a los ríos una gran energía mecánica. Esta
energía decrece conforme disminuye la pendiente (Figura 7)(Allan, 1996; Marble,
1992; Roldán, 1992).
Área de Drenaje
El área de drenaje es importante en la caracterización de ecosistemas acuáticos ya
que permite relacionar una superficie determinada con un sistema de drenaje
específico. La precipitación, las vertientes de agua subterránea y demás
afloramientos, en un área determinada, contribuyen a la variación de los volúmenes
de agua que ingresan en un ecosistemas acuático, a través del tiempo (Margalef,
1983; Ward, 1992). Este es un primer paso en la caracterización del balance hídrico
para áreas determinadas, que a grosso modo se cumple con el modelo planteado.
La segunda tiene relación con conectividad y, por tanto, con el tamaño de los
ecosistemas en relación con su área de drenaje y con los ecosistemas relacionados
y sus áreas de drenaje. Los ecosistemas lóticos son sistemas con flujo
unidireccional. Las condiciones en un lugar determinado, de estos sistemas,
representan el resultado de las condiciones acumuladas del área de drenaje en
dicho punto. Esto incluye, generalmente, el drenaje de una serie de áreas más
pequeñas con características propias. Sólo teniendo en cuenta la variable caudal,
existen diferencias marcadas entre el nacimiento de un río y su desembocadura en
otro sistema hídrico.
Por este motivo y teniendo en cuenta los estudios existentes sobre las distintas
comunidades vegetales encontradas en la BRC, esta variable cobra importancia en
la caracterización de ecosistemas acuáticos del área de estudio. En la Figura 9 se
Por otro lado, teniendo en cuenta las otras variables utilizadas, se puede notar que
la variable “comunidades vegetales” es la que más peso ha tenido en esta
caracterización. En un análisis multivariado el conjunto de datos de las diferentes
variables define un agrupamiento u otro. En este sentido, se utilizaron siete
variables relacionadas con cobertura vegetal, conjuntamente con las otras variables
descritas en este documento. Definitivamente, esto se debe a que la cobertura
vegetal en la BRC es una variable bastante estudiada y de la que se posee buena
información. Es importante recalcar que la distribución de cobertura vegetal tiene
relación con la altitud. En este sentido, para futuros trabajos de caracterización,
sería importante utilizar el ordenamiento jerárquico en base a la utilización de la
variable comunidades vegetales, paralelamente con un ordenamiento jerárquico en
base a más información, de mejor calidad, del resto de variables. No existe tal cosa
como una combinación ideal de variables. Una gran diversidad de condiciones
pueden resultar en valores similares de distancia. Sin embargo el objetivo final es
conseguir el modelo que mejor se ajuste a las condiciones de la BRC.
Siguientes pasos
Uno de los campos que requiere mayor atención tiene relación con la información y
manejo de la misma. Por una parte, es necesario hacer una recopilación exhaustiva
de información, con respecto a las distintas variables, tanto físico-químicas como
biológicas, que definen y caracterizan a los ecosistemas acuáticos. Es necesario
contar con bases de datos y herramientas que permitan sistematizar y encontrar
fácilmente la información requerida. Este trabajo debe ser planificado para
completar paquetes de información a distintas escalas, para suplir las necesidades y
requerimientos de futuros proyectos. Así, por ejemplo, la validación de este
modelo y la generación de un modelo para toda la BRC.
Literatura Citada
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New York Botanical Garden, New York, USA.
Tablas y Figuras
Anexo 1.
Las siguientes tablas (tomada y modificada de Giller y Malmqvist, 1998) nos puede
ayudar a comprender los factores más relevantes, dependiendo del área de estudio
y la escala que queremos abarcar.
Software utilizado
TNTmips 6.3
Arc View 3.1
Creación de variables
Altitud y Pendiente
Para la obtención de estas variables se calcularon la altitud y pendiente promedio
por segmento de río. La operación se realizó en base a la información altitudinal.
Área Microcuenca
Las microcuencas obtenidas en base al DTM nos dieron una aproximación de las
potenciales microcuencas que posteriormente serían editadas, se continuó con la
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Caracterización sistemas acuáticos octubre 2002
Cobertura Vegetal
Para la clasificación de cobertura digital se utilizaron las imágenes satelitarias
landsat 7ETM. La clasificación se realizó según los criterios de Sierra. Los tributos
de la misma fueron asignados a cada microcuenca.
Precipitación
Contando inicialmente con información de las estaciones meteorológicas, se crearon
áreas de igual precipitación en base a polígonos de Voronoi. El vector obtenido fue
rasterizado, constituyendo de esta manera la fuente de los atributos para las
microcuencas.
Geología
Se inició con la digitalización de las cartas geologicas correspondientes, a escala
1:250000. Se continuó posteriormente con la rasterización del archivo, finalizando
con la toma de atributos geológicos para cada microcuenca.
Altitud T. Anual
Código Nombre Latitud Longitud T. Años.
(m) (ºC)
M008 Puyo 1° 30’ 27” S 77° 54’ 38” W 960 1972 - 1983 20.5
M029 Baños 1° 23’ 21” S 78° 24’ 53” W 1846 1972 - 1983 17.2
M041 Sangay (Puerto Santa Ana) 1° 41’ 35” S 77° 57’ 00” W 880 1972 - 1983 21.3
M070 Tena 0° 59’ 57” S 77° 49’ 30” W 665 1972 - 1994 23.8
M098 San Marcos 0° 06’ 18” N 77° 57’ 37” W 3440 1984 - 1984 7.9
M101 El Carmelo 0° 40’ 40” N 77° 36’ 58” W 2856 1980 - 1983 12.0
M103 San Gabriel 0° 36’ 15” N 77° 49’ 10” W 2860 1972 - 1983 12.3
M121 El Refugio Cotopaxi 0° 39’ 33” S 78° 26’ 12” W 4800 1978 - 1983 0.9
M186 El Coca Inamhi 0° 27’ 55” S 76° 59’ 17” W 290 1977 - 1985 25.3
M188 Papallacta (R. Cayambe Coca) 0° 21’ 54” S 78° 08’ 41” W 3150 1963 - 1994 9.7
M201 El Chaco Inecel 0° 20’ 00” S 77° 40’ 00” W 1570 1977 - 1993 18.3
M202 Jatunyacu 1° 06’ 02” S 77° 55’ 02” W 550 1981 - 1986 20.3
M203 Reventador 0° 03’ 13” S 77° 32’ 59” W 1145 1974 - 1993 18.5
M205 San Rafael – Napo 0° 05’ 13” N 77° 34’ 34” W 1353 1975 - 1991 19.0
M208 Río Salado – Inecel 0° 12’ 00” S 74° 42’ 00” W 1310 1977 - 1993 19.8
M215 Baeza 0° 37’ 34” S 77° 51’ 57” W 1960 1974 - 1993 16.5
M293 Palmoriente-Huashito 0° 19’ 00” S 77° 04’ 00” W 360 1985 - 1994 25.0
Código: Nomenclatura utilizada por INAMHI para las estaciones. Nombre, ubicación geográfica y altitud, de
las estaciones meteorológicas. T. Años: El rango de años de los que se obtuvo información de temperatura media
mensual. T. Anual: Promedio de la temperatura media anual, medida en las distintas estaciones.
Altitud Q. Anual
Fuente Código Nombre Latitud Longitud Q. Años
(m) (m3/s)
Inamhi H015 Chota en Pte.Carretera 0° 28’ 48” N 78° 04’ 25” W 1515 1975.-.1994 30.267
Chalupas en Chalupas (A.J.
CDC H710 0° 50’ 23” S 78° 16’ 43” W 3570 1974.-.1984 5.436
Huahui)
Inamhi H718 Quijos en Baeza 0° 27’ 16” S 77° 53’ 11” W 1770 1982.-.1994 51.233
CDC H718* Quijos en Baeza 1974.-.1997 49.708
Inamhi H719 Quijos DJ Oyacachi 0° 18’ 10” S 77° 46’ 30” W 1490 1969.-.1994 196.467
CDC H719* Quijos DJ Oyacachi 1974.-.1994 198.782
CDC H720 Misahualli en Cotundo 0° 50’ 30” S 77° 47’ 04” W 800 1974.-.1997 19.593
CDC H721 Jatunyacu DJ Iloculin 1° 05’ 00” S 77° 54’ 20” W 570 1974.-.1998 308.471
CDC H722 Yanahurco DJ Valle 0° 41’ 30” S 78° 16’ 52” W 3590 1974.-.1996 2.104
CDC H725 El Golpe en Aucacocha 1° 07’ 50” S 78° 18’ 24” W 3440 1982.-.1987 0.896
Inamhi H727 Santa Rosa AJ Quijos 0° 18’ 27” S 77° 46’ 48” W 1420 1982.-.1987 4.190
Inamhi H728 Salado AJ Coca (AJ Guaytaringo) 0° 09’ 10” S 77° 39’ 48” W 1480 1983.-.1987 -
Inamhi H729 Oyacachi AJ Quijos 0° 18’ 16” S 77° 48’ 30” W 1520 1982.-.1988 45.376
CDC H731 Cosanga AJ Quijos 0° 29’ 30” S 77° 51’ 50” W 1740 1974.-.1996 50.602
CDC H733 Quijos A.J. Borja 0° 25’ 03” S 77° 49’ 00” W 1635 1978.-.1992 87.988
CDC H735 Coca en codo Sinclair 0° 01’ 00” S 77° 20’ 00” W - 1982.-.1993 532.433
Fuente: Origen de los datos recopilados (CDC, 2000; INAMHI, varias fuentes). Código: Nomenclatura utilizada por INAMHI
para las estaciones. Nombre, ubicación geográfica y altitud, de las estaciones hidrológicas. Q Años: El rango de años de
los que se obtuvo información. Q. Anual: Promedio del caudal anual, medido en las distintas estaciones. * Las estaciones
H718 y H719 están repetidas para mostrar las diferencias en caudal encontrada entre distintas fuentes de información