Qué hacemos
Qué hacemos
Para ello, brinda asistencia vital en situaciones de emergencia, salvaguarda los derechos humanos fundamentales y ayuda a las personas desplazadas a encontrar un lugar seguro que puedan llamar hogar.
Proteger a las personas forzadas a huir
Año con año, millones de personas – mujeres, hombres, niñas y niños – son forzadas a abandonar sus hogares para escapar de conflictos y persecuciones.
ACNUR, la Agencia de la ONU para los Refugiados, las apoya y acompaña siempre, desde que estalla una crisis hasta los meses – incluso años – que permanecen desplazadas de sus hogares.
ACNUR brinda asistencia vital y protección en situaciones de emergencia; aboga por mejores sistemas y leyes de asilo para que las personas desplazadas puedan acceder a sus derechos; y las ayuda a volver a casa en condiciones seguras, o bien a construir un futuro en otro país.
Asimismo, se esfuerza por garantizar que las personas apátridas obtengan una nacionalidad, lo que les permite tener acceso a derechos fundamentales, como la educación y la atención médica.
Respuesta a situaciones de emergencia
En un plazo de 72 horas, ACNUR puede distribuir suministros para 600.000 personas y contar con personal experto en el terreno para brindar protección.
Salvaguarda de los derechos humanos
ACNUR ha trabajado en más de 100 países en la interpretación y la aplicación de normas jurídicas para garantizar que las personas refugiadas puedan ejercer sus derechos.
Construcción de un futuro mejor
En la última década, ACNUR ha ayudado a casi un millón de personas refugiadas a reconstruir sus vidas en países distintos al de origen.
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Respuesta a situaciones de emergencia
Cuando las personas son forzadas a huir, es esencial emprender acciones rápidamente. Con frecuencia, las personas refugiadas cruzan las fronteras traumatizadas, hambrientas y exhaustas, con apenas un par de prendas.
ACNUR se esfuerza por garantizar que lleguen a un lugar seguro y que no sean devueltas a contextos en los que peligran su vida o su libertad. Este es el principio central de la Convención sobre el Estatuto de los Refugiados de 1951, que constituye el cimiento legal de la labor que realiza ACNUR.
ACNUR ayuda a las personas que han sido desplazadas de sus hogares a establecerse en lugares seguros, lejos de los conflictos o de quienes buscan hacerles daño; asimismo, distribuye rápidamente suministros y moviliza al personal experto para brindar protección. Además, garantiza que las personas refugiadas y desplazadas cuenten con albergue, alimento, agua, atención médica y ayuda para encontrar a familiares desaparecidos.
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Salvaguarda de los derechos humanos
Los gobiernos suelen garantizar los derechos humanos fundamentales y la seguridad de su ciudadanía, sin embargo, cuando las personas son forzadas a huir y se convierten en refugiadas, ya no pueden confiar en esta red de protección.
ACNUR se esfuerza por proteger a las personas refugiadas, desplazadas y apátridas abogando por los derechos de todas ellas. Para ello, colabora con gobiernos y otros socios para fortalecer las leyes y los sistemas nacionales, así como apoyar en la prestación de servicios.
Haciendo todo esto, ACNUR ayuda a garantizar que las personas desplazadas tengan acceso a documentación, educación, empleo y atención médica. ACNUR también trabaja para garantizar que las personas apátridas gocen del derecho a una nacionalidad.
Generar cambios positivos a nivel nacional, regional y mundial puede tomar años; sin embargo, ACNUR lo ha logrado con ayuda de estudiantes, juristas, juzgadores, organizaciones de la sociedad civil y representantes de la clase política.
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Construcción de un futuro mejor
Tener empleo, recibir educación y contar con un lugar al cual llamar hogar se traducen en un nuevo comienzo para las personas refugiadas.
ACNUR las ayuda a encontrar un empleo para que puedan sostenerse a sí mismas y a sus familias en condiciones dignas, y para que puedan hacer uso de sus competencias para retribuir a las comunidades de acogida. Por otra parte, ACNUR garantiza que la niñez y la juventud tengan acceso a la educación, lo cual les ofrece una sensación de normalidad y salvaguarda su futuro. De esta forma, ACNUR trata de garantizar que se aprovechen el talento y el potencial de las personas desplazadas.
Buscar soluciones a largo plazo en favor de las personas refugiadas es un elemento central del mandato de ACNUR. Por tanto, cuando los retornos son seguros, ACNUR ayuda a las familias y a las personas a volver a su lugar de origen. Cuando el retorno no es viable porque persisten la guerra, el conflicto o la persecución, ACNUR ayuda a las personas a establecerse y a hacer contribuciones positivas en un tercer país, o bien a integrarse en un país de acogida.
¡Dona y sé parte del cambio ahora!
Con tu donación podrás ayudar a proteger a personas forzadas a huir de su hogar por conflictos o persecuciones.