CLASE Aceptacion y Rechazo de La Herencia Causales de Indignidad
CLASE Aceptacion y Rechazo de La Herencia Causales de Indignidad
CLASE Aceptacion y Rechazo de La Herencia Causales de Indignidad
Art. 2290. Transmisión del derecho de opción Si el heredero fallece sin haber
aceptado ni renunciado la herencia, el derecho de hacerlo se transmite a sus
herederos. Si éstos no se ponen de acuerdo en aceptar o renunciar la herencia
deferida a su causante, los que la aceptan adquieren la totalidad de los derechos
y obligaciones que corresponden a éste. La renuncia de la herencia del causante
fallecido sin aceptar ni renunciar una herencia a él deferida, implica también la
renuncia a ésta.
Si el heredero fallece dentro del plazo de diez años sin haberse pronunciado,
sus herederos podrán ejercer el derecho de opción por el tiempo que faltare para
completar aquellos diez años.
Si uno o más aceptan la herencia podrán, eventualmente, recibir la totalidad de
la herencia a falta o renuncia de los demás coherederos.
Si la persona en vida renuncia a la herencia del causante, imposibilita a sus
herederos de aceptar o rechazar.
EFECTOS
Art. 2291. Efectos El ejercicio del derecho de opción tiene efecto retroactivo al día
de la apertura de la sucesión.
Si acepta la herencia, se entenderá que lo recibió directamente del causante,
desde el mismo instante en que se produjo el fallecimiento. Por ello, el período
que transcurrió desde la muerte hasta la aceptación se lo tiene como aceptante, a
todos los efectos legales.
Si el llamado a la herencia ha renunciado a ella, se entenderá que nunca ha
existido su llamamiento esto implica que el acto de renuncia se retrotrae al
momento mismo de la muerte del causante.
ACCIÓN DE LOS ACREEDORES DEL HEREDERO
El Art. 2294 CCYC. enumera una serie de actos que implican aceptación de la
herencia. Son ellos:
a. la iniciación del juicio sucesorio del causante o la presentación en un juicio en
el cual se pretende la calidad de heredero o derechos derivados de tal calidad;
Si el llamado a la sucesión inicia el juicio sucesorio, esta actitud lo coloca en la
condición de heredero aceptante.
Cuando se presenta en algún juicio en donde pretenda su condición de
heredero del causante o bien, de algún derecho derivado del mismo.
Art. 2297. Aceptación por una persona incapaz o con capacidad restringida La
aceptación de la herencia por el representante legal de una persona incapaz
nunca puede obligar a éste al pago de las deudas de la sucesión más allá del
valor de los bienes que le sean atribuidos. Igual regla se aplica a la aceptación de
la herencia por una persona con capacidad restringida, aunque haya actuado con
asistencia, o por su representante legal o convencional.
No se permite que, en el acto de la aceptación, el representante obligue a su
representado al pago de las deudas de la sucesión, con bienes y valores distintos
que excedan de lo contenido en el acervo hereditario.
La representación comprende tanto la de una persona menor de edad como de
una persona con capacidad restringida.
Los menores emancipados por matrimonio, pueden aceptar o renunciar la
herencia.
En caso de tutela, estos deben pedir autorización judicial para repudiar
herencias no así para aceptar la herencia.
RENUNCIA DE LA HERENCIA
La renuncia a la herencia es el acto por la cual la persona llamada a la sucesión
manifiesta expresamente su voluntad de no recibir la herencia
CARACTERES
Es un acto jurídico unilateral, pues la renuncia del llamado a la herencia se
perfecciona con su sola voluntad, en el sentido de no querer recibir la herencia.
La renuncia debe ser expresa.
La renuncia debe ser integral sobre toda la herencia, no pudiendo haber
renuncia parcial.
La renuncia debe ser un acto puro y simple, no siendo posible someterla a
modalidades.
Necesariamente, la renuncia debe ser efectuada de manera gratuita, siendo
esencia de la misma.
MOMENTO DE EJERCER SU DERECHO A RENUNCIAR
Art. 2298. Facultad de renunciar El heredero puede renunciar a la herencia en
tanto no haya mediado acto de aceptación
Como consecuencia de que la aceptación es irrevocable, su facultad de
renunciar ya no será posible si realizo acto que implique aceptación.
FORMA DE LA RENUNCIA
Art. 2299. Forma de la renuncia La renuncia de la herencia debe ser expresada
en escritura pública; también puede ser hecha en acta judicial incorporada al
expediente judicial, siempre que el sistema informático asegure la inalterabilidad
del instrumento.
Se determina que el acto de la renuncia deba ser efectuada por escritura
pública.
También mediante un acta notarial incorporada al expediente judicial. En este
último caso, se establece como condición para su validez de que el sistema
informático asegure la inalterabilidad del instrumento.
RETRACTACIÓN DE LA RENUNCIA
Art. 2300. Retractación de la renuncia El heredero renunciante puede retractar su
renuncia en tanto no haya caducado su derecho de opción, si la herencia no ha
sido aceptada por otros herederos ni se ha puesto al Estado en posesión de los
bienes. La retractación no afecta los derechos adquiridos por terceros sobre los
bienes de la herencia
A diferencia de la aceptación, que es irrevocable, la ley permite que la renuncia
a la herencia pueda retractarse con posterioridad, pudiendo el llamado a la
sucesión cambiar su voluntad inicial y asumir su condición de heredero, no
obstante, aquella renuncia expresada inicialmente.
Sin embargo, esta facultad de retractarse presenta ciertos límites.
h. los que hayan inducido o coartado la voluntad del causante para que otorgue
testamento o deje de hacerlo, o lo modifique, así como los que falsifiquen, alteren,
sustraigan, oculten o sustituyan el testamento;
También quedan comprendidas en esta causal de indignidad las personas que
falsifiquen, alteren, sustraigan, oculten o sustituyan el testamento
i. los que hayan incurrido en las demás causales de ingratitud que permiten
revocar las donaciones
Constituye causal de indignidad las mismas causas que por ingratitud se permite
revocar las donaciones. Resulta aplicable lo preceptuado en el Art. 1571 CCYC
Las donaciones pueden ser revocadas por ingratitud del donatario en los
siguientes casos:
a) si el donatario atenta contra la vida o la persona del donante, su cónyuge o
conviviente, sus ascendientes o descendientes;
b) si injuria gravemente a las mismas personas o las afecta en su honor;
c) si las priva injustamente de bienes que integran su patrimonio; d) si rehúsa
alimentos al donante. En todos los supuestos enunciados, basta la prueba de que
al donatario le es imputable el hecho lesivo, sin necesidad de condena penal
MUCHAS GRACIAS