Estados Superficiales

Descargar como pptx, pdf o txt
Descargar como pptx, pdf o txt
Está en la página 1de 9

CONCEPTO Y APLICACIONES

La rugosidad o aspereza es la huella que se


produce en la superficie de una pieza como
consecuencia del proceso de elaboración.
En función de la rugosidad superficial
exigida para una pieza, se utilizará uno u
otro proceso de fabricación.

Existen tres grupos básicos de superficies:

•SUPERFICIES EN BRUTO: superficies


obtenidas después del proceso de
elaboración sin ser trabajadas posteriormente .

•SUPERFICIES MECANIZADAS: superficies que pueden ser, básicamente,


de tres clases:

POR ARRANQUE DE MATERIAL, por


medio de herramientas de corte
que quitan material por arranque

MECANIZADOS ESPECIALES,
superficies que después de ser
mecanizadas por arranque de viruta
modifican su superficie por
esmerilado, pulido, etc.
MECANIZADAS SIN ARRANQUE DE
VIRUTA . Forjado, extrusión, laminado,
corte, cizallado,..

•SUPERFICIES TRATADAS :
superficies que una vez en bruto
o mecanizadas necesitan,
posteriormente , apariencia
externa. Para ello se recurre a procesos de recubrimiento como
niquelado, pintado, etc
Las características de una superficie quedan definidas por los
conceptos de uniformidad y alisado, que se refieren a la conservación
del perfil ideal de la extensión total y al aspecto de la superficie,
dependiendo de la clase y apariencia de la huella resultante del
mecanizado, respectivamente.
En la tabla siguiente se representan, estas características a modo de
cuadro resumen.
En cuanto a la simbología de los estados superficiales, comentar
que el símbolo de acabado superficial está representado seguidamente
con una serie de variantes que se indican a continuación
Símbolo básico.
Utiliza dos líneas de longitud desigual, inclinadas 60º
aproximadamente respecto la superficie señalada.
El símbolo por sí sólo no tiene significado, excepto en
los casos que se mencionan a continuación.

Arranque de viruta.
Se utiliza cuando se realiza la manufactura de una pieza
por arranque de viruta, se incluye una línea como se
indica en la figura. Se utiliza en piezas de torneado,
fresado, rectificado
Sin arranque de viruta.
Si no se permite arranque de viruta, se le adiciona un
círculo al símbolo básico.
Este símbolo se puede emplear para indicar que una
superficie debe quedar como está y que es resultado
de un proceso anterior. En este caso, ninguna
indicación adicional se debe añadir. Se utiliza en
piezas de fundición, forja, etc.

Símbolo de acabado superficial adicional.


Se utiliza cuando se indiquen características
especiales del acabado superficial, se agrega
una línea horizontal.

Notación de valor de la rugosidad.


Cuando la pieza se puede obtener a partir de
cualquier método de producción, se expresa como en
la figura.
Los valores numéricos de la rugosidad, o su
denominación, deberán colocarse, según las figuras,
en lugar de la letra «a».
Arranque de viruta y valor Ra.
Cuando la pieza deba llevar los valores de la
rugosidad y deba obtenerse por arranque de viruta,
se utiliza el símbolo que se muestra en la figura.
Se puede sustituir el valor de Ra en micras (tabla de
valores de Ra) por los sím­bolos de la clase de
tolerancia escogida, según las indicaciones de la
propia tabla.

La unidad de rugosidad es la micra (1 micra= 1 µm = 0,001 mm). Se


mide a través de unos instrumentos electrónicos llamados
rugosímetros (mecánicos, ópticos, eléctricos y electrónicos). Esta
rugosidad debe estar definida en los distintos planos constructivos
de la piezas, pero no se hace de forma numérica, sino utilizando
unos signos y valores numéricos.
Sin arranque de viruta y valor Ra.
De la misma forma, cuando la pieza debe
obtenerse sin arranque de material, se utiliza el
símbolo que se muestra en la figura.
Cuando se especifica un sólo valor, representa el
valor máximo permitido de la rugosidad de la
superficie.

Límites de rugosidad.
Cuando sea necesario especificar los límites máximo
y mínimo del rugosidad, ambos valores se expresan
como en la figura, colocando el límite máximo (a1) en
la parte superior y el límite mínimo (a2) en la parte
inferior.
El criterio de rugosidad principal, se puede indicar
con el número relacionado con la calidad (tabla de
valores de Ra).
Proceso especial.
Este símbolo se utiliza para indicaciones de
características especiales del acabado superficial, así
que, en casos particulares, se puede especificar
condiciones especiales del acabado superficial.
El acabado superficial, se debe indicar sobre la línea
de extensión según queda reflejado en la figura.

Longitud básica.
Cuando sea preciso anotar la longitud básica, ésta
debe ser elegida de entre los valores de la serie
dada por la norma UNE 66500 (0.08; 0.25; 0.8;
2.5; 8; 25 mm) y se escribirá de la forma
expresada en la figura.
Dirección de estrías.
Cuando se requiere indicar la dirección de las estrías,
ésta se especifica como se muestra en la figura. La
dirección de las estrías (orientación de las rugosidades)
que predomina y que se obtiene por el proceso de
producción utilizado.
El símbolo utilizado para hacer constar la dirección de
las estrías del mecanizado es el de la figura.
Valor de la tolerancia.
Cuando se necesita especificar el valor de la
tolerancia para el trabajo por medio de máquinas,
éste debe indicarse a la izquierda del símbolo
básico expresándose en milímetros.
Sobremedida de mecanizado: 5 mm.

A modo de resumen, he aquí las especificaciones del estado de la


superficie y su colocación respecto al símbolo base.

•a. Valor de la rugosidad Ra expresado en µ o bien el símbolo de la clase


de rugosidad de N1 a N12.

•b. Proceso de mecanización o tratamiento


aplicado a la superficie.

•c. Longitud base o campo considerado.

•d. Dirección de las estrías o huellas producidas durante el mecanizado.

•e. Sobremedida (tolerancia) para mecanizado.

•f. Otros valores de la rugosidad (entre paréntesis).

Como es lógico, no hay obligación de anotar todos estos datos a la vez.


Sólo se utilizan, en cada caso, los necesarios
CALIDADES SUPERFICIALES

Según lo visto, es evidente que la rugosidad va relacionada


íntimamente con el procedimiento de trabajo, de forma que
interesará servirse de uno u otro procedimiento según la calidad de
la superficie que deseemos para la pieza a trabajar.
En la Figura 10.26 se muestran algunos ejemplos de cómo
representar las to­lerancias de acabado. Los símbolos que no están en
una superficie concreta afectan a toda la pieza. Las zonas de
acabados especiales y los tratamientos térmicos se señalan con una
línea discontinua de 0.4 paralela a la superficie tratada.

También podría gustarte