Derecho de Familia
Derecho de Familia
Derecho de Familia
NACIONAL”
INTEGRANTES:
- CHERO MARRIAS KATHERIN YESMIN.
- MORE GÓMEZ ANGIE CELESTE.
- SANDOVAL HERRERA ERICKA YANILE.
- YAMUNAQUE BRAVO DIEGO MARTÍN.
ÁREA:
DERECHO DE FAMILIA Y SUCESIONES.
DOCENTE:
MARÍA DEL PILAR CASTRO ARELLANO.
AULA:
36104.
TEMA:
DECAIMIENTO Y DISOLUCIÓN DEL VÍNCULO MATRIMONIAL.
2022
INTRODUCCIÓN
La presente investigación se refiere al tema, el decaimiento y la disolución del vínculo matrimonial, en el que se
establece la forma o modo y plazo de conversión de la separación de cuerpos al divorcio ulterior, solo suspende
deberes conyugales como lo es, el del lecho y cohabitación, pero sigue prevaleciendo el vínculo matrimonial con la
finalidad de que se pueda dar una posibilidad de retomar los deberes conyugales.
Asimismo, en relación con la disolución del vínculo matrimonial la causa más natural seria la muerte de uno de los
conyugues, pero no siempre sucede así, ya que hay diversas causales establecidas en nuestro propio ordenamiento
jurídico que pueden ser invocadas por uno de los conyugues para que se dé la disolución de este, dándose como
consecuencia de ello, el divorcio.
Las causales del decaimiento y disolución conyugal son taxativas y se encuentran previstas en el artículo 333º del
Código Civil.
La finalidad de esta investigación es expresar con claridad los diferentes problemas en el matrimonio,
especialmente aquéllos que perturban su estabilidad hasta llegar algún momento y por diferentes formas a la
conclusión o terminación del vínculo, para ello hemos hecho una profunda investigación en donde se detalla con
exactitud y precisión cada punto.
1. DECAIMIENTO Y DISOLUCIÓN DEL MATRIMONIO
El matrimonio puede concluir en forma natural con el deceso de uno de los cónyuges o voluntariamente sea éste por
consenso entre los cónyuges, quienes deciden situar fin a la sociedad conyugal o invocando una causal de divorcio, caso
en el que el Juez tendrá que decidir y publicar la ruptura del vínculo matrimonial.
Al entrar en el tema del decaimiento y la disolución del vínculo conyugal, nos estamos refiriendo a circunstancias
“sobrevinientes” a la celebración del matrimonio que debilitan la relación conyugal hasta el punto de disolverla. Al igual
que ocurre con los supuestos de invalidez de matrimonio, las causales de decaimiento y disolución conyugal son
taxativas, contempladas expresamente en la legislación.
Hay momentos en la vida matrimonial en que las relaciones entre los cónyuges decae y en otras se debilita tanto, que la
vida en común se torna insostenible, debido precisamente a: inconductas, pasiones y debilidades de cualquiera de los
cónyuges, por lo que las diferentes legislaciones del mundo han previsto las figuras jurídicas de la separación de cuerpos
y el divorcio como formas de dar una salida legal a dicha situación y a las cuales el Perú no es ajeno, sino que las ha
plasmado en su Legislación.
2. SEPARACIÓN DE CUERPOS
La separación de cuerpos es una etapa previa al divorcio, este es una unión voluntaria y en algunos casos se va cuando
la convivencia de los cónyuges se vuelve algo irremediable pero ellos aún no quieren romper lazos matrimoniales, por
ende se les hace mejor solicitar separación de cuerpos, suspendiendo los deberes derivados de la convivencia de los
cónyuges, pero el vínculo matrimonial de estos sigue vigente y esto va impedir si alguno de los contrayentes quieren
contraer matrimonio con alguien más, ya que haciendo separación de cuerpos deja una posible oportunidad de
reconciliación entre ese matrimonio de los cónyuges.
1. Suspende los deberes relativos al lecho y habitación: Los cónyuges no deben seguir viviendo ni durmiendo juntos.
2. Pone fin al régimen patrimonial de sociedad de gananciales: En caso de existir una sociedad de gananciales se
sustituye dicho régimen por el de separación de patrimonios.
3. Dejando subsistente el vínculo matrimonial: Les brinda a los cónyuges un espacio de reflexión para una posible
reconciliación.
3. CAUSALES DE LA SEPARACIÓN DE CUERPOS
Son causales de la separación de cuerpos, a tenor del Art. 333° del C. C., las siguientes:
1. El adulterio
Es el ayuntamiento carnal o relación sexual que comete uno de los cónyuges en agravio del otro, cuando tiene
trato carnal con persona distinta a su consorte, faltando así a sus deberes de fidelidad que le impone el
matrimonio, sin que interese mayormente si de esta relación nace o no un hijo, por cuanto lo que sanciona la ley
es la infidelidad en sí misma.
Conocida también con el nombre de sevicia, es el trato excesivamente cruel, inhumano y perverso que uno de los
cónyuges comete en agravio del otro con el fin de causarle sufrimiento físico y moral, traspasando el límite del
respeto mutuo que debe existir entre los cónyuges.
Esta es una causal de separación de cuerpos o de divorcio sumamente grave, pues, nose puede obligar a la víctima a
vivir al lado de su agresor.
Aquí lo que se trata de proteger es la vida del cónyuge, que, a diferencia de la sevicia, protege su integridad física,
pues no es posible que el cónyuge que es el llamado a proteger y cuidar de su consorte sea el primero en querérsela
quitar.
4. La injuria grave
Consiste en el empleo de palabras soeces, reñidas contra la moral, gestos o además que cualquiera de los cónyuges
emplee para herir la dignidad y el amor propio del otro. Este empleo de palabras puede hacerse en forma verbal o
por escrito. Así como cualquier hecho que constituya menosprecio, y sobre todo, que esta forma de actuar, sea
constante, continua y esté destinada a herir la susceptibilidad y el amor propio del otro.
5. El abandono injustificado de la casa conyugal por más de dos años continuos o cuando la
duración sumada de los periodos de abandono exceda a este plazo
Da lugar a la separación de cuerpos o al divorcio, por lo que no hay abandono injustificado cuando la separación
se produce con acuerdo de los cónyuges o por razones atendibles de salud, negocios o capacitación u otras
semejantes, o cuando pese a la separación existen indicios inequívocos, tales como el envío de una carta, remesas
de dinero, etc., que demuestran que el cónyuge culpable no tuvo intención de romper el vínculo matrimonial.
Está constituido por actos, hechos o situaciones indecentes, indecorosas y deshonestas en que incurre cualquiera
de los cónyuges, en agravio del otro y que hacen insoportable la vida en común tales como la ebriedad habitual, la
vagancia, exhibicionismo en lenocinios, la vida disipada, etc.
7. El uso habitual e injustificado de drogas alucinógenas o de sustancias que puedan generar
toxicomanía
Esta causal se refiere al uso habitual de drogas, estupefacientes o sustancias químicas que producen adición o vicio,
denominado toxicomanía y que reviste diversas formas, que producen consecuencias perniciosas en el que las
practica, por lo que hay el inminente peligro de que el otro adquiera el mismo vicio, pudiendo dar lugar al
nacimiento de hijos que salgan con algún defecto a causa de la ingestión de dichas sustancias.
Esta enfermedad que supone por parte del que la sufre, el haber contraído esta enfermedad sobre la base de
relaciones íntimas tenidas fuera del hogar conyugal con otras personas, constituye un grave daño a la salud, por lo
que da lugar a la apertura de instrucción por este delito.
Si la condena fue impuesta antes de la celebración del matrimonio no es causal de divorcio o de separación de cuerpos,
sino de invalidación del matrimonio por constituir ignorancia sobre un defecto sustancial que hace insoportable la vida en
común; pero si fue posterior a la celebración del matrimonio y antes de casarse el cónyuge conoció el delito cometido por
el otro y pese a ello se casa, no habrá lugar a la acción de separación. La acción caduca a los seis meses de conocida la
causa por el ofendido o en todo caso a los cinco años de producido.
11. La imposibilidad de hacer una vida en común debidamente probada en un proceso judicial
Es decir, aquí el legislador se ha puesto en aquel caso en que la vida en común resulte imposible entre los cónyuges por
existir discrepancias y diferencias entre los mismos con respecto a hábitos, usos, costumbres, grado de cultura,
idiosincrasia, valores y hasta gustos; en los cuales no han logrado jamás ponerse de acuerdo, previa concertación a fin de
hacer más llevadera la vida de hogar entre los mismos (incompatibilidad de caracteres).
12. La separación de hecho de los cónyuges durante un período ininterrumpido de dos años.
Dicho plazo será de cuatro años si los cónyuges tuviesen hijos menores de edad, en estos
casos no será de aplicación lo dispuesto en el artículo 335 del código civil.
Creemos que el legislador ha obrado con ligereza al incluir esta causal de separación, nos imaginamos que si
bien es cierto muchas veces resulta imposible ponerse de acuerdo entre consortes para separarse
convencionalmente cuando la vida en común se turna insoportable, por inconductas de cualquiera de los
cónyuges y que en aras de proteger a los hijos no se atreven a exponerlas en una demanda de separación de
cuerpos o de divorcio por causal por no estigmatizarlos, conservando un estatus y un vínculo matrimonial
aparente, que prácticamente ya no existe, sin embargo, ha debido meditarse más y no dar carta blanca a que
muchos hagan mal uso de esta causal.
Para demandar la separación de cuerpos por esta causal, se exige que hayan transcurrido 2 años de celebrado
el matrimonio, tiempo suficiente para que la pareja se conozca y logren la ansiada armonía conyugal; pero si
pese a ello surgen graves desavenencias que resquebrajan la armonía familiar, la ley les franquea el camino de
una oportuna separación fundada en el principio del consentimiento recíproco.
CONCLUSIÓN:
El matrimonio llega a su fin con la partida de divorcio o por la muerte de uno los cónyuges. Cuando hablamos
del decaimiento y disolución del vínculo conyugal, nos referimos a aquellas circunstancias que se presentan
luego de haberse contraído el matrimonio. Teniendo ambas instituciones en común que tienen causales para
invocar las respectivas figuras y que son de carácter taxativo.
La separación de cuerpos es un debilitamiento al matrimonio, que, sin llegar a terminarlo, permite a los
cónyuges vivir por separado, poner fin a la sociedad de gananciales en caso de haberla y darles un poco de
reflexión para que en un futuro no muy lejano se encuentre una posible reconciliación.