Principios de La Doctrina Social de La Iglesia
Principios de La Doctrina Social de La Iglesia
Principios de La Doctrina Social de La Iglesia
DOCTRINA SOCIAL DE
LA IGLESIA
LA DOCTRINA SOCIAL
El bien común se define como aquello que puede ser usado o aprovechado por todas las
personas con la finalidad de alcanzar un objetivo.
El bien común ha de ser el objetivo número uno de todo Estado. El Derecho también tiene como objetivo
lograr el bien común, ese interés general que favorezca a toda la sociedad.
EL DESTINO UNIVERSAL DE LOS
BIENES
Dios ha destinado la tierra y cuanto ella contiene para uso de todos los hombres y pueblos. En
consecuencia, los bienes creados deben llegar a todos en forma equitativa.
La persona, no puede renunciar a los bienes materiales que responden a sus necesidades y
constituyen las condiciones básicas para su existencia; estos bienes le son indispensables para
alimentarse, crecer, comunicarse y asociarse.
El destino universal de los bienes comporta un esfuerzo común dirigido a obtener para cada persona
y para todos los pueblos las condiciones necesarias de un desarrollo integral, de manera que todos
puedan contribuir a la promoción de un mundo más humano , « donde cada uno pueda dar y recibir, y
donde el progreso de unos no sea obstáculo para el desarrollo de otros ni un pretexto para su
servidumbre.
EL PRINCIPIO DE SUBSIDIARIDAD
Es el principio en virtud del cual el Estado ejecuta una labor orientada al bien común.
La solidaridad es un principio, un deber, una virtud y una actitud que busca la igualdad de todos
en dignidad y derechos.
La solidaridad procede del reconocimiento de un deber moral que tiene cada uno con la
sociedad, cuyo objetivo es conseguir la justicia social, entendida esta como equilibrio social
que compensa las desigualdades mediante una distribución de la riqueza confiada al Estado.
La solidaridad es también una verdadera y propia virtud moral, no un sentimiento superficial. Al contrario,
es la determinación firme y perseverante de empeñarse por el bien común; es decir, por el bien de todos y
cada uno, para que todos seamos verdaderamente responsables de todos.
LA DIGNIDAD DE LA PERSONA
HUMANA
La dignidad humana significa que un individuo siente respeto por sí mismo y se valora al mismo tiempo que es
respetado y valorado. Implica la necesidad de que todos los seres humanos sean tratados con igualdad y que puedan
gozar de los derechos fundamentales que de ellos derivan.
Nuestra dignidad se manifiesta, expresa y realiza por medio de la inteligencia, la conciencia moral y la libertad.
Podemos entender el mundo y dar una orientación a nuestra existencia, tenemos la capacidad de elegir y actuar
responsablemente.
La dignidad es un don, pero también una tarea. No basta con perseguir el reconocimiento de nuestra propia dignidad.
De nuestra inteligencia, conciencia y libertad surge la responsabilidad de preocuparse porque los demás también
alcancen el respeto de su dignidad. Se trata de una responsabilidad hacia nosotros, hacia los otros y hacia la naturaleza.