Clase 5 Y 6 HISTORIA
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Clase 5 Y 6 HISTORIA
En el litoral Pacifico y en la región de las tierras altas occidentales. Hacia el ano 900 a .C.
aparecieron los primeros asentamientos humanos en el norte de la depresi6n central de El
Salvador, y en las tierras altas centrales y el noroeste de Honduras. Esos asentamientos
presentaban varias características en común: poseían una estructura social estratificada,
contaban con una tecnología manufacturera sofisticada y usaban algunos bienes importados,
en especial de jadeíta y obsidiana.
Los centros tempranos de la Zona Central concuerdan, cronológicamente, con el
surgimiento de la primera cultura de gran complejidad en Mesoamérica: la cultura olmeca
de la costa central del Golfo de México. Los olmecas lograron montar una red de
interacci6n que abarcaba largas distancias. El comercio probablemente fue un estimulo
para la penetraci6n de elementos olmecas en la Zona Central, del ano 1000 al 400 a.C.
La misma ruta comercial que utilizada posteriormente por los mayas, quienes promovieron
el desarrollo de prósperos centros regionales, como Quelepa, en el oriente de El Salvador,
con toda probabilidad fundado por un grupo mesoamericano.
El año 250 d.c. marca un hito en la historia antigua de la Zona Central. Fue entonces cuando
hizo erupción el volcán de Ilopango, situado en las tierras centrales de El Salvador. Como
consecuencia de esa catástrofe, alrededor de 10000 Km2 de las planicies centrales del
Pacifico de la Zona Central fueron desocupados por los grupos humanos que los habitaban.
Es fácil imaginar los trastornos provocados por el movimiento de personas hacia zonas
aledañas. La recuperación del territorio afectado debe haber tardado decenas, si no cientos de
anos. Sucesivas migraciones de grupos mayas y mexicanos, entre los siglos VI Y XIII d.C.,
contribuyeron a que el territorio se recuperara.
Quelepa no fue afectado por la erupción del Ilopango, por estar localizado muy al este de
la Lona de desastre. Este centro, que habrá logrado establecer importantes lazos con
poblaciones situadas en las tierras altas, después de la erupción, se relaciono con grupos
del sur del istmo, pero posteriormente fue sometido por' una elite maya mexicanizada
En las tierras altas centrales y el noroeste
En otras partes surgieron centros de ocupación, pero mas pequeños, mas dispersos y
menos dinámicos. Gualjoquito, en el curso medio del rio Ulua, surgió al mismo tiempo
que Salieron Viejo y desde el año 500 d.c. cayo bajo la orbita de influencia de Copan
Entre el año 400 a.C. y el 500 d.C., en el Valle de Sula surgieron centros regionales, los cuales
posteriormente se convirtieron en unidades políticas independientes, que interactuaron y
compitieron entre si y mantuvieron relaciones con los mayas. La ocupación del Valle de Sula
siguió el mismo patrón evolutivo de otros asentamientos de las tierras altas centrales y el
noroeste: lento crecimiento, rápido florecimiento y decadencia repentina. Mientras el Valle de
Sula era abandonado, en las tierras altas del sur comenzaban a darse cambios importantes; 10
mas relevante fue la inmigraci6n de grupos mexicanos a la zona. Entre esos grupos sobresalen
los pipiles, hablantes de nahua, de cuya presencia atestiguan la arquitectura de los dos
principales sitios -Cihuatan y Santa María, en territorio hondureño-, la manufactura de
artefactos de obsidiana y de pedernal, y la producción cerámica.
En el siglo XIII, Cihuatan y Las Marías fueron destruidas por el fuego, probablemente como
resultado de un conflicto con los nonoalcos, otro grupo de origen pipil que, en el momento del
contacto con los españoles, controlaba la mayor parte del centro y el oeste del actual territorio
de El Salvador.
En el noroeste, cerca de la costa del Caribe, floreci6 Naco, el mas grande centro político
regional y uno de los mas importantes cuando llegaron los españoles. Naco man tenia nexos
comerciales con las tierras altas de Guatemala y con la península de Yucatán. Resulta
interesante que mientras la elite políticamente dominante probablemente tenia afinidades con
los pipiles, el grueso de la poblaci6n provenía de las tierras altas del este de Guatemala.
En la costa noreste y las tierras altas orientales
Por falta de hallazgos correspondientes a fechas mas tempranas, las primeras noticias de ocupación
humana en esta zona son posteriores al ano 600 d.c. Los asentamientos eran pequeños y dispersos, pero
hacia el ano 1000 d.c. sumaban unos doscientos. Los mas representativos y los mejor conocidos se
encuentran en las Islas de la Bahía (Honduras), son Eigthy Acres, en Utila, un complejo habitacional, y
Plan Grande, en Guanaja, un centro ceremonial. En la zona costera del noreste, después del ano 1000
d.C., surgieron extensos centros de poblaci6n, algunos con áreas que sobrepasan las 25 ha., y con
grandes obras de arquitectura.
Otros importantes descubrimientos fueron realizados en las tierras altas regadas por el rio Pisijire,
donde se encontr6 restos arquitect6nicos alrededor de plazas y construcciones que probablemente
fueron juegos de pelota. La cerámica hallada en todos estos sitios es idéntica. Algunos estudiosos
opinan que su forma y tratamiento de la superficie están asociados con hablantes de chibcha y que
se deriva de alguna tradición suramericana, pero los proyectos de construcci6n a gran escala y los
patrones de asentamiento sugieren mas bien antecedentes mesoamericanos.
En la costa pacifica de Nicaragua.
Los primeros datos sobre la ocupaci6n humana de esta zona datan del ano 350 a.c. Se trata de
grupos de agricultores sedentarios que cultivaban principalmente maíz y complementaban su dieta
con recursos obtenidos de los lagos y estuarios; por otra parte, mantenían relaciones comerciales
con los habitantes del norte de El Salvador y con los de la península de Nicoya. La producción
cerámica alcanzo su mayor esplendor entre los años 800 y 1200 d .C. Y refleja una fuerte
influencia mesoamericana
Cuando llegaron los europeos, la planicie costera del Pacifico - desde El Salvador hasta
Nicoya- estaba do minada por los chorotegas, un grupo de origen mexicano. El área de
Rivas y la isla de Ometepe estaban pobladas por los nicaraos, un grupo de hablantes de
nahua que consiguió desplazar a los chorotegas de ese territorio, empujándolos hacia el
sur, poco antes de la invasión europea.
Geopolítica de la Zona Central en el año 1500
d.C.
En el momento del contacto con los españoles, la Zona Central era un complejo mosaico, poblado
tanto por grupos de ascendencia mesoamericana como de tradici6n suramericana. Algunos, como los
pipiles, habían logrado desarrollar tan complejas instituciones políticas que podríamos hablar de un
estado, otros en cambio funcionaban como señoríos o cacicazgos y algunos eran grupos tribales. Los
españoles tuvieron grandes dificultades para comprender esas sociedades en toda su complejidad.
Hacia el ano 1500 d.c. los grupos nahua pipiles ocupaban el área central y occidental de El Salvador.
Los españoles, tras la conquista, dividieron ese territorio en dos provincias: IzaIco y Cuscatlán. La
zona al este del rio Lempa estaba poblada por los lencas, y las islas del Golfo de Fonseca estaban
ocupadas por lencas y nahuas.
El actual territorio de Honduras estuvo ocupado, esencialmente, por lencas y misumalpas. Existe
evidencia de que entre los anos 1300 y 1500 d.c. el Valle de Naco se convirti6 en un territorio
multiétnico, donde grupos de origen nahua pipil ejercían su hegemonía. Los valles de Aguan y
Agalta, también en el noroeste de Honduras, estuvieron poblados por hablantes de una variante
nahua.
Patrones institucionales
Los alimentos mas importantes de la Zona Central eran el maíz, los frijoles y el ayote,
complementados con diversos tipos de tubérculos, según las regiones. Los productos mas
relevantes para el intercambio eran el cacao, el algod6n y la sal. La provincia de IzaIco
era la mas importante productora de cacao, pero también se cultivaba en otros puntos,
como en la costa pacifica de Nicaragua, donde producían los nicaraos.
El cacao era un monopolio detentado por ciertos grupos, que 10 cultivaban y redistribuían a
cambio de otros productos. La provincia de Cuscatlán estaba especializada en la producci6n
de algodón e índigo. En la costa del Pacifico de Nicaragua se producía el tabaco y la coca.
Entre los arboles cuyos frutos eran consumidos por los indígenas de la Zona Central estaban
los zapotes, aguacates, marañones, ciruelos, nances, coyoles y mameyes.
Todas las sociedades indígenas de la Zona Central - con excepción de las que poblaban la
Tegucigalpa- cran sociedades muy estratificadas. Los pipiles y los nicaraos estaban
organizados en tres estratos: nobles, indígenas comunes 0 tributarios y esclavos. La
pertenencia a esos estratos era h hereditaria. Sin embargo, existía una restringida
movilidad social ascendente, con base en los méritos personales; también era posible el
descenso social, resultado del castigo por faltas cometidas. En caso de angustias
económicas, los indígenas podían venderse a si mismos 0 a sus hijos en calidad de
esclavos.
Los nobles ocupaban los mas altos cargos civiles y religiosos. En las crónicas se les
denomina primero como señores y mas tarde se les llamo «caciques» (palabra de origen
arawak). Algunos nobles formaban parte del consejo de ancianos, órgano asesor del señor
y de los capitanes de guerra. Entre los nicaraos y los pi piles los señores eran los
encargados de controlar y distribuir la tierra y gozaban del privilegio de estar eximidos
del pago de tributos. En algunas provincias se hacia una distinción entre el señor supremo
de la unidad política mayor y otros señores de menor rango.
El estrato mas amplio estaba constituido por los tributarios, quienes practicaban la
agricultura, la caza, la pesca, diversas actividades artesanales, el comercio y la guerra. La
esclavitud no era necesariamente hereditaria. Se distinguía entre los esclavos de guerra y
los esclavos de rescate, es decir, obtenidos mediante el comercio.
En cuanto al matrimonio, el patrón predominante era el endogámico de clase y de
provincia. Entre los lencas el matrimonio era un medio para establecer alianzas políticas
regionales. El sistema legal entre los nicaraos se basaba en la costumbre (derecho
consuetudinario); entre los pipiles existía un cuerpo de leyes mas elaborado, aunque
también estos se guiaban por la costumbre.
Practicas religiosas y cosmovision
La presencia humana en la Zona Sur de la América Central se remonta al periodo glacial tardío, hacia
el ano 10 000 a.C., aunque es posible que en investigaciones posteriores se obtengan evidencias de
fechas mas tempranas. Los sitios arqueológicos que han permitido obtener información para fechas
tan antiguas son muy pocos. El mas grande hallado hasta el momento es Finca Guardaría, en el Valle
del Reventazón, en Costa Rica. Los arqueólogos han encontrado objetos como puntas de proyectil,
raspadores, cuchillos, perforadores y martillos, de donde se infiere que se trataba de grupos humanos
errantes, pequeños, que Vivian en habitantes selváticos y se dedicaban a la cacería de mamíferos gran
des y medianos.
Los grupos humanos debieron adaptarse a esas condiciones; aunque se seguía practicando la cacería, la
recolección y la domesticación accidental de plantas se convirtieron en actividades cada vez mas
importantes. Las palmeras empezaron a desempeñar un papel relevante en la alimentación regional,
mismo que algunos tubérculos. En esta fase persistió la tradición de fabricar objetos bifaciales
mediante el lasqueo a presión. También comienzan a aparecer pequeñas piedras de moler, utilizadas
para machacar plantas. En esta etapa, que se extiende hasta el5000 a.C., se sentaron las bases para la
evolución hacia la agricultura en milenios posteriores.
La explotaci6n de manglares y estuarios, la recolección y la caza fueron actividades
complementarias. Las técnicas de pesca mejoraron durante este periodo. Sin embargo, el
cambio tecnológico mas sobresaliente fue la aparici6n de la cerámica en Panamá, en el tercer
milenio a.c. (cerámica Monagrillo). No cabe duda de que la alfarería panameña fue de origen
local, pues muestra unas técnicas y un estilo propios muy diferentes de los de otras cerámicas
tempranas en el resto de América. Los orígenes de la alfarería en el territorio de Costa Rica
están menos claros. A la mas antigua se Ie conoce con el nombre de «Tronadora» y es un poco
mas tardía que la de Monagrillo. A pesar de los cambios demográficos y culturales del periodo,
la sociedad sigui6 siendo culturalmente sencilla, y las comunidades bastante igualitarias.