Leccion 48 Malaquias 3 8 10
Leccion 48 Malaquias 3 8 10
Leccion 48 Malaquias 3 8 10
Malaquías 3:8-10
“El diezmo y las ventanas
de los cielos ”
Después de amonestar al
pueblo sobre las consecuencias
de sus pecados, Malaquías
profetizó la segunda venida del
Salvador y les prometió
increíbles bendiciones del
Señor si eran fieles en el pago
de sus diezmos y ofrendas.
¿Qué es la ley del diezmo?
Con frecuencia, al enseñar y testificar acerca de la ley del diezmo, hacemos hincapié en las bendiciones
temporales inmediatas, dramáticas y fácilmente reconocibles que recibimos; y con seguridad se reciben
esas bendiciones. Sin embargo, algunas de las muchas bendiciones que recibimos al obedecer este
mandamiento son significativas, pero sutiles. Esas bendiciones se pueden discernir solo si estamos
espiritualmente atentos y somos perceptivos (véase 1 Corintios 2:14).
La imagen de las “ventanas” de los cielos que usó Malaquías es instructiva. Las ventanas permiten que la
luz natural entre en un edificio. Del mismo modo, la perspectiva y la iluminación espiritual se derraman a
través de las ventanas de los cielos a nuestra vida cuando honramos la ley del diezmo.
Por ejemplo, una sutil pero significativa bendición que recibimos es el don espiritual de la gratitud que
permite que el aprecio por lo que tenemos reprima nuestros deseos de lo que queremos. Una persona
agradecida está llena de alegría; una persona desagradecida sufre en la pobreza del descontento sin fin
(véase Lucas 12:15) […].
El pago íntegro del diezmo es mucho más que un deber; es un paso importante en el proceso de
santificación personal. A quienes pagan el diezmo, los felicito.
A aquellos que actualmente no obedecen la ley del diezmo, los invito a meditar sobre sus caminos y a
arrepentirse. Les testifico que al obedecer esta ley del Señor, se abrirán las ventanas de los cielos para
ustedes. No demoren el día de su arrepentimiento (véase David A. Bednar, “Las ventanas de los cielos”,
Liahona, noviembre de 2013, págs. 17–18, 20).
ACTIVIDAD PRÁCTICA
Imagínate que se te pide que enseñes una lección
breve sobre la ley del diezmo del Señor a una de
las clases de la Primaria de mayor edad de tu
barrio o rama. En la lección se te pide que trates
las tres preguntas siguientes:
“E d y l v d l c”
M 3
“L b d p l d”
RELATO DEL ELDER VALERI V. CORDON (de los Setenta)
El élder Valeri V. Cordón, de los Setenta, compartió un relato que lo ayudó a fortalecer su testimonio
de la ley del diezmo. A medida que estudies este relato, presta atención a cómo se aplicaron algunos de
los principios concernientes a adquirir conocimiento espiritual:
De joven trabajaba en la fábrica de mi padre durante las vacaciones. La primera pregunta que él
siempre me hacía después de haber recibido mi salario era: “¿Qué vas a hacer con tu dinero?”.
Después de trabajar durante unos ocho años y constantemente responder a la misma pregunta, mi
padre pensó que me había enseñado a pagar el diezmo. Lo que él no sabía es que yo había aprendido
este importante principio en un solo fin de semana. Permítanme relatarles cómo aprendí ese principio.
Después de algunos sucesos relacionados con una guerra civil en Centroamérica, el negocio de mi padre
quebró, y pasó de tener unos 200 empleados de tiempo completo a menos de cinco costureras que
trabajaban en el garaje de nuestra casa según hubiera demanda. Un día, durante aquellos tiempos
difíciles, oí a mis padres hablar sobre si debían pagar el diezmo o comprar alimentos para sus niños.
El domingo seguí a mi padre para ver qué iba a hacer. Después de las reuniones de la Iglesia lo vi tomar
un sobre y poner el diezmo en él. Aquello solo fue una parte de la lección. La pregunta que yo seguía
haciéndome era qué íbamos a comer.
El lunes por la mañana temprano, unas personas llamaron a nuestra puerta. Cuando la abrí, preguntaron
por mi padre. Lo llamé y cuando él llegó, los visitantes le hablaron de un pedido urgente de ropa que
había que coser rápidamente. Le dijeron que el pedido era tan urgente que le pagarían por adelantado.
Ese día aprendí los principios de pagar el diezmo y las bendiciones que esto trae (véase Valeri V.
Cordón, “El idioma del Evangelio”, Liahona, mayo de 2017, pág. 56).
ASIGNACIONES PARA LA CASA (entregar antes
del miércoles 30 a las 12 del mediodía)
3. “[Retráete] […] de hacer tu ___________ en mi día santo; y [llámalo] ___________” (Isaías 58:13–14).
4. “Ay de los que a lo ___________ llaman bueno, y a lo _________, malo” (______________ 5:20).
7. “Antes que te ___________ en el vientre […] te di por ___________ a las naciones” (___________ 1:4–
5).
12. __________ “hará volver […] el ___________ de los hijos hacia los _____________” (Malaquías 4:5–
6).
Lección 49:
Malaquías 4:5–6
“Elías hará volver el corazón
de los padres y de los hijos”