Plan de Estudio Educación Media
Plan de Estudio Educación Media
Plan de Estudio Educación Media
4: Esta otra manera de hacer educación, pensando en el desarrollo de las potencialidades humanas
con respeto a los ritmos y procesos de aprendizaje, la formación de una ciudadanía participativa y
transformadora, con arraigo nacional, conciencia de unidad latinoamericana y sentido planetario,
tiene ya un importante recorrido de experiencias impulsadas por docentes venezolanos y
venezolanas en distintos contextos: escuelas experimentales, escuelas y liceos bolivarianos,
escuelas técnicas, entre otras. Existe una amplia base de la cual partir, para continuar y profundizar.
Del proceso de la Constituyente Educativa llevado a cabo durante el año 1999, surgió el Proyecto Educativo
Nacional (PEN, 1999) que recoge la sistematización de los planteamientos realizados por docentes, estudiantes,
personal obrero y administrativo, madres, padres y responsables en asambleas y mesas de trabajo en escuelas de
los 24 estados.
En el año 2000 se crean las Escuelas Bolivarianas y se fortalecen las Escuelas Técnicas Robinsonianas y Zamoranas.
Del PEN surge la propuesta del Proyecto Pedagógico Nacional que inicia con la realización de congresos
pedagógicos municipales, estadales y nacionales durante los años 2004-2006, reivindicando la participación
protagónica y la construcción colectiva en las propuestas educativas. El Proyecto Pedagógico Nacional se concibe
entonces como la integración de las Escuelas Bolivarianas (creadas en 1999), las Misiones Educativas (Robinson,
Ribas y Sucre, creadas en 2003), los Liceos Bolivarianos (creados en 2004) y los Simoncitos para la educación inicial
(creados en 2005), conformando todos el Sistema de Educación Bolivariana (que contemplaría la articulación de
los niveles de educación inicial, primaria y media, junto a las Misiones Educativas).
ANTECEDENTES: Procesos de cambio educativo y pedagógico en el curso de
la Revolución Bolivariana
Los liceos bolivarianos se crean con la orientación de “romper con la estructura tradicional, transformar la
escuela bajo la concepción de la construcción colectiva de los componentes organizativos, pedagógicos y
administrativos, donde participan estudiantes, docentes, administrativos, obreros, representantes y otros
integrantes de la comunidad” (MED, 2007). El plan de los liceos bolivarianos se denominó “Adolescencia y
Juventud para el Desarrollo Endógeno y Soberano”, reivindicando un enfoque inter y transdisciplinario a
través de áreas, seminarios de investigación y elaboración de proyectos socioproductivos como estrategias
pedagógicas y metodológicas para conocer la realidad y en la búsqueda de la integración del conocimiento.
El entonces Viceministro de Asuntos Educativos, Armando Rojas, en el Segundo Congreso Pedagógico (2005),
manifestó la necesidad de “romper con las viejas estructuras arcaicas, realizar transformaciones curriculares
profundas que conlleven a la construcción colectiva de un currículo contextualizado y orientado a formar al
ser social para la nueva república” (MED, 2005).
En el año 2007, se propone el Currículo Nacional Bolivariano, que se plantea como “una guía con líneas
orientadoras metodológicas que dan coherencia y pertinencia al proceso educativo a partir de objetivos
formativos, métodos, actividades y modos de actuación que permitirán cumplir el encargo social de formar al
ser humano, a fin de incorporarlo activamente al momento histórico (…) de manera comprometida y
responsable”. Se plantean en esta propuesta de diseño curricular como pilares de la educación bolivariana:
Aprender a Crear, Aprender a Convivir y Participar, Aprender a Valorar y Aprender a Reflexionar; se organiza el
diseño en Ejes Integradores (Ambiente y Salud Integral, Interculturalidad, Tecnología de la Información y
Comunicación, Trabajo Liberador) y Áreas de Aprendizaje (en el caso de los Liceos Bolivarianos: Lenguaje,
Comunicación y Cultura; Ser Humano y su Interacción con Otros Componentes del Ambiente; Ciencias Sociales
y Ciudadanía; Filosofía, Ética y Sociedad; Educación Física, Deportes y Recreación; Desarrollo Endógeno en por
y para el Trabajo Liberador). Así mismo, esta propuesta sugiere para la organización de los aprendizajes: La
clase, los proyectos (Proyecto Educativo Integral Comunitario, Proyecto de Aprendizaje y Proyecto de
Desarrollo Endógeno) y el Plan Integral.
ANTECEDENTES: Procesos de cambio educativo y pedagógico en el curso de la
Revolución Bolivariana
En estos antecedentes es importante reseñar algunos proyectos dirigidos al desarrollo, dotación
y uso de recursos educativos, con indudable impacto curricular. Entre ellos, el desarrollo de los
Centros Bolivarianos de Informática y Telemática (CBIT) dirigidos a la democratización del uso del
computador como recurso de aprendizaje, la promoción de las tecnologías libres y la integración
comunitaria a las escuelas; la creación de las Unidades Móviles Integrales de Educación
Bolivariana (UMIEB), para facilitar el acceso a laboratorios de computación , ciencias naturales y
sociales a escuelas alejadas de los centros urbanos; el Proyecto Canaima Educativo, por medio
del cual se han dotado más de 3 millones de computadoras personales a las y los estudiantes de
educación primaria y media.
Merece también especial mención el Proyecto Todas las Manos a la Siembra, que ha promovido
y difundido la práctica de la agricultura sustentable y el enfoque agroecológico en buena parte
de los centros educativos, incorporando estos temas al currículo, aunque con alcances diversos.
Igualmente, y dado que este proceso de cambo curricular se iniciará en Liceos de Turno Integral,
es necesario apuntar que el Programa de Alimentación Escolar (ahora Sistema de Alimentación
Escolar) alcanza hoy a más de 2 mil liceos nacionales y está jugando un papel importante en el
impulso de la agricultura escolar.
En este contexto es necesario destacar como antecedente inmediato de este proceso de cambio
curricular al desarrollo, producción y distribución de la Colección Bicentenario. Sin duda, su
elaboración por parte de equipos de profesoras y profesores, permitió la revisión de los
contenidos y enfoques pedagógicos, desarrollando una propuesta de vinculación entre el
aprendizaje escolar, la vida y la reflexión crítica.
EXPECTATIVAS SOCIALES DESDE LA CONSULTA NACIONAL POR LA CALIDAD
EDUCATIVA. BANDERAS DE LUCHA.
• Garantizar educación de calidad para todas y todos;
• Desarrollar una pedagogía del amor, el ejemplo y la curiosidad;
• Fortalecer el papel de los maestros y las maestras como actores
fundamentales de la calidad educativa;
• Promover un clima escolar caracterizado por la convivencia;
• Garantizar un sistema de protección estudiantil;
• Lograr una estrecha relación entre las familias, la escuela y la
comunidad;
• . Desarrollar un currículo nacional integrado y actualizado;
• Garantizar edificaciones educativas sencillas, amigables, seguras;
• Desarrollar un sistema de evaluación de la calidad educativa y fortalecer
la supervisión educativa
• Reconfigurar la organización y funcionamiento del Ministerio del Poder
Popular para la Educación;
LA EDUCACIÓN MEDIA COMO ESPACIO DE VIDA DE
LOS Y LAS ADOLESCENTES
Este nivel va dirigido a la formación integral de las y los adolescentes. La educación
media, al igual que la educación inicial y primaria ES PRESENCIAL, precisamente porque
atiende niños, niñas y adolescentes que representan PERSONAS EN PROCESO DE
FORMACIÓN. ADOLESCENTE significa PERSONA EN DESARROLLO (adolescere: cambio,
desarrollo), superando la matriz de opinión que se ha generado de que adolescente viene
de “adolecer”.
La CONTINUIDAD COGNITIVA – AFECTIVA desde la Educación inicial, educación primaria y
la educación media es fundamental en este proceso de cambio curricular.
Los cambios acelerados de los tiempos actuales le exigen a las instituciones educativas
revisar a fondo la obsolescencia que se expresa muchas veces en el currículo y la cultura
escolar en general.
Romper con estructuras curriculares rígidas, cerradas, homogéneas y estáticas, abriendo
la posibilidad de abordar los procesos de aprender de manera significativa, desde la vida,
con mayor pertinencia y más acorde a nuestros tiempos. Un currículo centrado en
procesos, flexible, dinámico, contextualizado y abierto que permita una mayor conexión
con las necesidades, intereses y características de nuestros y nuestras estudiantes y una
relación DOCENTE-ESTUDIANTE más rica, amorosa, de comprensión mutua y de aprendizaje
significativo. Es una invitación a los profesores y las profesoras a incorporarse en un proceso
de investigación y formación permanente en torno a los retos de la educación media actual,
sistematizando su práctica pedagógica desde el aprender a aprender, aprender haciendo y
aprender en colectivo.
PROCESO DE CAMBIO CURRICULAR EN LA EDUCACIÓN MEDIA
En la ley orgánica del año 1980, se señalaba como indicador de supervisión y logro
educativo “los objetivos dados” durante cada período escolar, contenidos
evaluados y horas desarrolladas o cumplidas, por lo cual el y la docentes, estaban
pendientes de “pasar un gran número de objetivos”. Independientemente de si los
y las estudiantes habían aprendido o no, tenían que cumplir la meta que había
establecido en el plan de clase y de evaluación, en detrimento de la sinceridad, el
fin justificaba los medios, inclusive mandando trabajos, haciendo un taller o
cualquier actividad para cumplir con el objetivo, en detrimento de la profundidad
ya que la meta era “cubrir” todos los objetivos pasando uno tras otro de manera
superficial. Este tipo de planificación por objetivos instruccionales eliminaba por
completo la posibilidad de desarrollar las capacidades creadoras tanto del
profesorado como la de los y las estudiantes.
Cada profesor o profesora tiene que decidir entre lo escrito en un programa, lo
visto en la universidad y el contexto donde labora (las tres cosas totalmente
distintas) y termina haciendo “lo mejor que puede” para responder, la mayoría de
las veces, a las exigencias administrativas de los distintos períodos escolares.
La práctica tradicional en cuanto a la elaboración del currículo ha consistido en
equipos técnicos “expertos”, que diseñan de manera prescrita todos los planes y
programas, dejando en manos del profesorado la EJECUCIÓN DEL PROGRAMA tal
como se le ha establecido (de manera homogénea, cerrada, rígida y
descontextualizada).
PROCESO DE CAMBIO CURRICULAR EN LA EDUCACIÓN MEDIA
1. Abarcan todos los aspectos de la vida del plantel, deben estar integradas a la organización y el
funcionamiento, a la forma en que se trabajan las áreas, a las rutinas, a las actividades comunes y a
las relaciones entre todos los que participan en la vida escolar: docentes, directivos, estudiantes,
trabajadores administrativos y obreros, familias, comunidad.
2. Deben integrarse como dimensiones permanentes, prolongadas en el tiempo. No es que a veces
seamos solidarios o que esta semana apreciaremos la diversidad humana, sino que la cultura
escolar esté impregnada de práctica solidaria y de aprecio a la diversidad humana.
3. Deben ser evaluadas en el conjunto de los procesos escolares y las prácticas pedagógicas y no sólo
en el comportamiento de las y los estudiantes. El liceo y la escuela técnica (y en general todos los
centros educativos de todos los niveles y modalidades) deben preguntarse continuamente si las
actividades escolares son o no (o hasta qué punto son) coherentes con los referentes éticos y los
procesos indispensables.
4. Tienen que ser objeto de reflexión de todos quienes participan en la vida escolar y, por tanto,
tienen que propiciarse las oportunidades para que individual y colectivamente todas y todos
tengan la oportunidad de elaborar y compartir sus propias aproximaciones sobre estos referentes,
ampliándolos e interpretándolos, para que puedan servir de guía ética efectiva para pensar y
autoevaluar sus acciones.
5. Deben tener una traducción en cada área de formación, tanto en forma de recomendaciones
metodológicas como en los contenidos. En este sentido son transversales a todo el currículo.
REFERENTES ÉTICOS Y PROCESOS INDISPENSABLES
La calidad educativa está fuertemente relacionada a la pertinencia de lo que se enseña y cómo se enseña
Las asignaturas tradicionales que por décadas se han estado enseñando en el currículo venezolano, se han caracterizado
por la desactualización (los planes de estudios vigentes siguen siendo de la década de los años setenta), la
desvinculación y la no pertinencia.
Reflexionar acerca de qué contenidos (por qué y para qué) enseñamos y cómo lo enseñamos. Se propone entonces
abordar la enseñanza de las distintas áreas de formación con énfasis en conocimientos y experiencias pertinentes, que
tengan sentido para los y las estudiantes en su período de vida, sus individualidades y sus contextos. Pertinencia política,
social, cultural, ambiental, económica, geográfica, histórica. Pertinencia cognitiva que permita a los y las docentes
conectarse con los saberes y vivencias previas de los y las estudiantes y crear pedagógica y didácticamente las
condiciones de necesidad e interés. Pertinencia cognoscitiva, invitando al aprendizaje por descubrimiento, a la
indagación y a la investigación como prácticas permanentes para aprender, a la creación y el disfrute por aprender y a la
producción de conocimiento como acto natural de los seres humanos. Pertinencia afectiva caracterizada por un clima
escolar de convivencia, con respeto a las diferencias, con diálogo de saberes y promoviendo el aprendizaje en colectivo.
Pertinencia valorativa con énfasis en la identidad, el arraigo cultural, la dignidad como ser humano y como parte de una
comunidad.
LAS ÁREAS DE FORMACIÓN
Las áreas de formación se abordarán durante los cinco años de estudio.
Cada área cobra direccionalidad, continuidad y coherencia en el recorrido como un EJE DE
APRENDIZAJE que garantiza SINCERIDAD Y PROFUNDIZACIÓN, considerando el período
de vida, el contexto y las intencionalidades pedagógicas de cada docente en cada año de
estudio.
Todas las áreas tienen igual importancia, relevancia y pertinencia para la formación
integral de los y las adolescentes y jóvenes, por lo que aparecen por orden alfabético, con
la finalidad de generar un imaginario distinto al tradicional en el cual se le da mayor
importancia a unas que a otras.
1. ACCIÓN CIENTÍFICA, SOCIAL Y COMUNITARIA.
2. ARTE Y PATRIMONIO CULTURAL.
3. CIENCIAS NATURALES.
4. DEPORTES Y RECREACIÓN.
5. EDUCACIÓN FÍSICA.
6. ORIENTACIÓN, ACOMPAÑAMIENTO Y CONVIVENCIA
7. LENGUA.
8. LENGUA EXTRANJERA.
9. MATEMÁTICA.
10. MEMORIA, TERRITORIO Y CIUDADANÍA.
11. PARTICIPACIÓN EN LA PRODUCCIÓN DE BIENES Y SERVICIOS.
El tema generador:
En cada área de formación se proponen temas generadores que se derivan directamente de los temas indispensables.
Los tejidos temáticos que se presentan en cada tema generador NO SON CAMISAS DE FUERZA sino que, al contrario, permiten a los y las
docentes, tomarlos como referencia para construir su planificación según el año, período de vida, las pertinencias anteriormente señaladas y
los contextos propios. Así mismo, cada docente puede seleccionar del tejido temático aspectos para, por ejemplo, familiarizar a los y las
estudiantes con contenidos nuevos y poco a poco en el recorrido los va profundizando. Es aquí donde se potencian las habilidades
pedagógicas y didácticas de los profesores y las profesoras para considerar las características propias de los distintos grupos de estudiantes
con los que está trabajando, la edad, las individualidades y el contexto.
Los temas generadores e integradores del conocimiento deben poseer criterios dentro de cada área de formación en función de lo
contemporáneo, lo útil y necesario para la vida tanto para sí mismo y misma como para la vida en comunidad, que genere reflexión,
pensamiento crítico y sensibilidad ante los problemas de la sociedad y del planeta, que provoque entusiasmo, disfrute por aprender y
permita generar conciencia como ser humano y como parte del ambiente. Los temas generadores permiten provocar en los y las estudiantes
participar en el saber y en la experiencia humana de aprender de manera permanente, que generen una actitud investigativa para ir más allá
de los temas que se plantean y para aprender por sí mismo y por sí mima. Los temas generadores con sus tejidos temáticos se proponen a
partir de los temas indispensables. Cada área de formación en la cual se abordan debe contener los referentes teórico-prácticos necesarios
para su comprensión.
Es importante resaltar este aspecto ya que es otro enfoque en el abordaje del conocimiento, desmontando la cultura tradicional de muchos
años en los cuales el currículo se ejecuta, se “administra” pasando “objetivos” y dando contenidos porque “toca darlos”, “hay que darlos”, la
mayoría de las veces sin pertinencia cognitiva, afectiva ni sociocultural y, la mayoría de las veces sin aprendizaje significativo. En este
enfoque se espera que los y las estudiantes de la mano de sus profesores y profesoras (quienes también participan activamente en la
investigación de estos temas indispensables y generadores), estudien, profundicen y comprendan temas, practiquen e indaguen en estos
aspectos fundamentales y son las y los docentes quienes seleccionan, organizan y planifican las temáticas según sus propósitos pedagógicos
y las pertinencias. Para que un tema GENERE aprendizaje, motivación, reflexión, asociación con lo previamente aprendido, debe partir de lo
conocido, de lo concreto, de los objetos y sus relaciones, sus interconexiones, de sus regularidades en las experiencias de los y las
estudiantes más allá de leyes y teorías preestablecidas como verdades absolutas. Comprender que estas leyes y teorías son parte del
conocimiento (no determinantes del mismo) y sirven de apoyo para comprender la realidad. La práctica tradicional del estudio de
asignaturas, materias y disciplinas utiliza la realidad para entender la teoría como fin en sí mismo. Es un reto pedagógico y curricular para la
educación contemporánea que los sistemas de conocimientos, con sus teorías, leyes, modelos, entre otros, permitan comprender la
realidad, la vida en todas sus dimensiones, siempre con los qués, por qués, para qués y cómos que están implicados.