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UNION FAMILIAR

INTRODUCCIÓN:

La familia es una institución fundamental en la sociedad y tiene un


significado especial en la Biblia. La palabra “familia” proviene del
latín “familia”, que significa “grupo de personas que viven bajo el
mismo techo”. En la Biblia, la palabra “familia” se refiere a la unidad
básica de la sociedad, que consiste en padres e hijos.

Para poder llegar a observar la crisis de valores en las familias en la


actualidad, basta con que podamos ver a nuestro alrededor, inclusive
que podamos ver no solo en el entorno social en que nos
encontramos, sino que también podamos observar nuestra propia
familia, y aún nuestra propia iglesia.

¿Qué observamos?

Observamos que hoy muchas familias se desmoronan porque no se


toman en serio los valores necesarios para una convivencia entre
personas inteligentes, con principios.

Y como la sociedad tiene su fundamento en la familia, entonces,


familias en crisis traen consigo una sociedad en crisis.

Las causas de la crisis familiar son variadas, y provienen de


realidades individuales, es decir del mal proceder y de la mala actitud
que los individuos asumen frente al tema de sembrar y cultivar
valores morales y espirituales que mantengan la unidad familiar.

El amor y la unidad son pilares fundamentales en el núcleo familiar.


La Biblia nos enseña en

Colosenses 3:14: «Y sobre todas estas cosas, vestíos de amor, que es


el vínculo perfecto». Esta cita bíblica nos invita a que el amor sea lo
que nos una como familia, formando un vínculo perfecto que fortalece
y edifica nuestros lazos familiares. A continuación, exploraremos
cómo podemos cultivar el amor y la unidad en nuestra familia.
Mateo 7:12 – COMUNICACIÓN EFECTIVA –

“Así que, todas las cosas que queráis que los hombres hagan con
vosotros, así también haced vosotros con ellos; porque esto es la ley
y los profetas.”

Una comunicación efectiva es esencial para fortalecer los lazos


familiares. Debemos ser abiertos, respetuosos y comprensivos al
expresar nuestros pensamientos, sentimientos y preocupaciones.
Escuchar activamente a los demás y mostrar empatía es fundamental
para construir la unidad dentro del hogar.

1 Juan 4:12 – AMOR INCONDICIONAL –

“Amados, amémonos unos a otros; porque el amor es de Dios. Todo


aquel que ama, es nacido de Dios, y conoce a Dios”.

El amor verdadero es desinteresado y no depende de las


circunstancias. Debemos amarnos unos a otros sin condiciones,
recordando que el amor es un compromiso constante que va más allá
de los errores y debilidades de cada miembro de la familia; por lo
tanto, es muy importante aceptarnos tal y como asomos y ayudarnos
mutuamente para cambiar las actitudes que van en contra de la
palabra de Dios y que afectan o lastiman a las personas que nos
rodean.
Mateo 6:14-15 – PRACTICAR EL PERDÓN –

“Porque si perdonáis a los hombres sus ofensas, os perdonará


también a vosotros vuestro Padre celestial; más si no perdonáis a los
hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras
ofensas”.

Todos cometemos errores y podemos herir a quienes amamos. El


perdón es esencial para sanar las heridas y mantener la armonía
familiar. Siguiendo el ejemplo de Cristo, debemos perdonar de
corazón y dejar atrás el resentimiento, buscando la reconciliación, la
unidad de la familia y como consecuencia Dios podrá derramar Sus
grandes bendiciones.

Efesios 6:14 – ORAR JUNTOS –

“Orando en todo tiempo con toda oración y súplica en el Espíritu, y


velando en ello con toda perseverancia y súplica por todos los
santos”.

La oración es una poderosa herramienta para unir a la familia. Al orar


juntos, buscamos la guía de Dios, fortalecemos nuestra fe y nos
recordamos mutuamente que somos parte de una familia que se
apoya y confía en el Señor.

Salmos 133:1-3 – PASAR TIEMPO DE CALIDAD EN FAMILIA

“¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es Habitar los hermanos juntos


en armonía! Es como el buen óleo sobre la cabeza, El cual desciende
sobre la barba, La barba de Aarón, Y baja hasta el borde de sus
vestiduras; Como el rocío de Hermón, Que desciende sobre los
montes de Sion; Porque allí envía Jehová bendición, Y vida eterna”.
La forma de vida actual es muy agitada, la familia cada día está más
dividida, está muy afectada por los afanes, por la búsqueda de
recursos, etc. Cada día este mundo moderno nos hace ser más
independientes e individuales (las redes sociales, las series de tv,
etc.), por este motivo es importante priorizar el tiempo en familia.
Crear momentos especiales para compartir actividades,
conversaciones significativas y momentos de diversión, fortalece los
lazos familiares y fomenta la unidad y atrae la bendición de Dios.

Efesios 4:2-3 – SER AMABLES Y PACIENTES –

“Yo pues, preso en el Señor, os ruego que andéis como es digno de la


vocación con que fuisteis llamados, con toda humildad y
mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en
amor,”.

La amabilidad y la paciencia son frutos de la humildad. Ser amables y


pacientes nos ayuda a mantener la armonía y la paz en nuestras
relaciones familiares. Debemos ser conscientes de nuestras palabras
y acciones, buscando siempre tratar a los demás con amabilidad y
mostrando paciencia aún en los momentos más difíciles.

Salmos 32:11 – CELEBRAR EN FAMILIA –

“Alegraos en Jehová y gozaos, justos; Y cantad con júbilo todos


vosotros los rectos de corazón”.
La gratitud debe ser uno de los pilares fundamentales del hogar. Los
integrantes de la familia debemos celebrar los logros y expresar amor
y agradecimiento hacia los miembros del hogar. Debemos ser
intencionales en mostrar gratitud y fortalecer los lazos emocionales
mediante palabras y acciones que demuestren que los logros
alcanzados por un miembro de la familia son los logros de todos.

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