GEO6069v1
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INFORME FINAL
REALIZADO POR:
GEO RESOURCE LTDA.
S.I.T. Nº 545
Inspector Fiscal:
Dr. Héctor Flores Moraga
Profesionales Especialistas
Geólogo Pablo Alarcón Pinto
1. INTRODUCCIÓN 2
1.1. UBICACIÓN 4
1.2. OBJETIVOS 6
1.3. ANTECEDENTES 6
3.2. MAGNETOTELÚRICA 52
3.2.1. Terreno 53
3.2.2. Procesamiento 56
3.2.3. Modelamiento 57
Figura 1.1: Ubicación de la cuenca del Itata en la Región del Ñuble. Fuente: Elaboración
propia. .................................................................................................................. 5
Figura 1.2: Localización de estaciones geofísicas en estudios previos en las regiones del
Ñuble y Biobío, relevantes para este estudio. Fuente: Elaboración propia. ................... 17
Figura 1.3: Estructura de las fichas bibliográficas presentadas en el Anexo H ............... 18
Figura 2.1: Mapa geológico de la Cuenca del Río Itata. Modificado de DGA, 2011. ........ 21
Figura 2.2: Mapa hidrogeológico de la Cuenca del Río Itata. Modificado de DGA, 2015. . 23
Figura 2.3: Mapa de captaciones subterráneas registradas en la Dirección General de
Aguas Subterráneas en la Cuenca del Río Itata. Elaboración Propia ............................. 25
Figura 2.4: Columnas estratigráficas de las captaciones que detectan roca (Perfiles
gravimétricos L1 y L2) ubicadas en la cuenca del Río Itata. ........................................ 27
Figura 2.5: Columnas estratigráficas de las captaciones que detectan roca (Perfil
gravimétrico L3) ubicadas en la cuenca del Río Itata. ................................................ 28
Figura 2.6: Columnas estratigráficas de las captaciones que detectan roca (Perfil
gravimétrico L4) ubicadas en la cuenca del Río Itata. ................................................ 29
Figura 2.7: Columnas estratigráficas de las captaciones que detectan roca (Perfil
gravimétrico L5) ubicadas en la cuenca del Río Itata. ................................................ 30
Figura 2.8: Columnas estratigráficas de las captaciones que detectan roca (Perfiles
gravimétricos L6 y L7) ubicadas en la cuenca del Río Itata. ........................................ 31
Figura 2.9: Columnas estratigráficas de las captaciones que detectan roca (Perfiles
gravimétricos D7A, D10 y D9B) ubicadas en la cuenca del Río Itata. ........................... 32
Figura 2.10: Plano de ubicación de los perfiles elaborados a partir de las captaciones
seleccionadas. ...................................................................................................... 33
Figura 3.1: Flujo de adquisición, procesamiento y modelamiento de datos gravimétricos.
.......................................................................................................................... 35
Figura 3.2: Mapa de ubicación de estaciones gravimétricas medidas y estación de
gravedad absoluta utilizada para procesamiento. ...................................................... 36
Figura 3.3: Gravedad Absoluta calculada para la zona de estudio. .............................. 38
Figura 3.4: Figura esquemática de la corrección por altura o aire libre. ....................... 39
Figura 3.5: Figura esquemática de la corrección de Bouguer o de placa. ...................... 40
Figura 3.6: Figura esquemática de la corrección topográfica....................................... 40
Figura 3.7: Modelo de elevación topográfica (DEM) utilizado para corrección topográfica.
.......................................................................................................................... 42
Figura 3.8: Anomalía de Bouguer Completa (ABC) calculada para la zona de estudio. ... 43
Figura 3.9: Campo regional calculado para la zona de estudio. En diamantes negros los
puntos de medición de gravedad sobre roca. ............................................................ 44
Figura 3.10: Anomalía de Bouguer Completa reducida calculada para la zona de estudio.
.......................................................................................................................... 45
Figura 3.11: Ejemplo de cuerpo en 2D (Shuey y Pasquale 1973). ............................... 46
Figura 3.12: Mapa de ubicación de perfiles gravimétricos modelados. ......................... 47
Figura 3.13: Ejemplo de dato outlayer, perfil L7, punto de medición 304. .................... 48
Figura 3.14: Ejemplo de modelamiento e integración de información de otras
metodologías para el perfil L1. Elaboración propia. ................................................... 50
Figura 3.15: Modelación del Perfil L1 con distintas densidades de sedimentos (1,9; 2,0 y
2,1 kg/m3). Elaboración propia. .............................................................................. 51
Figura 3.16: Instalación de una estación de magnetotelúrica. .................................... 52
Figura 3.17: Flujo de adquisición, procesamiento y modelamiento de datos MT. ........... 53
Figura 3.18: Mapa de distribución de estaciones MT. ................................................. 54
Figura 3.19: Series de tiempo de una estación de magnetotelúrica (TRAP5). ................ 56
Figura 3.20: Curvas de resistividad aparente y fase de la estación TRAP5. Eje x de la
figura corresponde al periodo en unidades de segundos. ........................................... 58
Figura 3.21: Visualización de las curvas de resistividad aparente (arriba) y de la fase
(abajo). Eje x de las figuras corresponde al periodo en unidades de segundos Derecha:
Visualización modelo 2D en Winglink. Paleta de colores a la derecha indica valores de
resistividad. ......................................................................................................... 60
Figura 3.22: Figura esquemática de cómo se realiza la adquisición de datos de una
estación TEM y sus fundamentos físicos de interacción con el subsuelo. Modificado de
Dentith & Mudge, 2014. ........................................................................................ 63
Figura 3.23: Flujo de adquisición, procesamiento y modelamiento de datos TEM. ......... 63
Figura 3.24: Mapa de distribución de estaciones TEM. ............................................... 65
Figura 3.25: Esquema de medición. (a) Pulso transmisor. (b) Fuerza electromagnética
inducida. (c) Campo magnético secundario medido en distintas gates o ventanas de
tiempo. ............................................................................................................... 66
Figura 3.26: Ejemplo de stacking de estación ITA44. En color rojo, azul y gris los datos
correspondientes a LM, HM y ruido respectivamente. En líneas con trasparencia se
muestran todas las mediciones realizadas, y en línea sólida los valores apilados (stacking)
de cada momento. ................................................................................................ 67
Figura 3.27: Ejemplo de cálculo de resistividad aparente para estación ITA44. ............. 69
Figura 3.28: Ejemplo de curva final de decaimiento de voltaje de la estación ITA44,
obtenida de las curvas de LM y HM traslapadas. ....................................................... 70
Figura 3.29: Ejemplo de limpieza de datos de curva de decaimiento de voltaje de la
estación ITA44. En gris los puntos que se han eliminado para la inversión. .................. 71
Figura 3.30: Modelo de capas y ajuste respecto a la curva de decaimiento de voltaje de la
estación de TEM ITA44. ......................................................................................... 72
Figura 4.1: Curvas de resistividad y fase de las estaciones TRAP1 y YUN4. .................. 74
Figura 4.2: Sección de tensor de fase y parámetro skew de uno de los perfiles del sector
de Maravilla (MAR2 y MAR3). ................................................................................. 75
Figura 4.3: Cálculo de strike para el perfil MAR2-3 ubicado en el sector de Maravilla. .... 76
Figura 4.4: Ubicación de las estaciones de magnetotelúrica en el sector de Trapiche. .... 78
Figura 4.5:Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT TRAP1
a TRAP6. ............................................................................................................. 80
Figura 4.6: Ubicación de las estaciones de magnetotelúrica en el sector de Maravilla. ... 81
Figura 4.7: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT MAR2
– MAR3. .............................................................................................................. 83
Figura 4.8: Ubicación de las estaciones de magnetotelúrica en el sector de Cato. ......... 84
Figura 4.9: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT
CATO5 – CATO6. .................................................................................................. 86
Figura 4.10: Ubicación de las estaciones de magnetotelúrica en el sector de Cachapoal. 87
Figura 4.11: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT
CACHA1 – CACHA2. .............................................................................................. 89
Figura 4.12: Ubicación de las estaciones de magnetotelúrica en el sector Camino
Cachapoal............................................................................................................ 91
Figura 4.13: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT
CCACHA12 – CCACHA11. ....................................................................................... 92
Figura 4.14: Ubicación de las estaciones de magnetotelúrica en el sector de Ninquihue. 93
Figura 4.15:Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT QUI3
– QUI4. ............................................................................................................... 95
Figura 4.16: Ubicación de las estaciones de magnetotelúrica en el sector El Ala. .......... 96
Figura 4.17: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada del punto MT ALA3. 97
Figura 4.18: Ubicación de las estaciones de magnetotelúrica en el sector de Coihueco. . 98
Figura 4.19: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT COI4
– COI3. ............................................................................................................. 100
Figura 4.20: Ubicación de las estaciones de magnetotelúrica en el sector de Viña Ribera.
........................................................................................................................ 101
Figura 4.21: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT
VRC1 – VRC2. .................................................................................................... 103
Figura 4.22: Ubicación de las mediciones de magnetotelúrica en el sector de Bellavista.
........................................................................................................................ 104
Figura 4.23: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT RC1
– RC2 – RC3. ..................................................................................................... 106
Figura 4.24: Ubicación de las estaciones de magnetotelúrica en el sector de Liucura. .. 107
Figura 4.25: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT
LIU11 – LIU8 – LIU6. .......................................................................................... 109
Figura 4.26: Ubicación de las estaciones de magnetotelúrica en el sector de Pinto. ..... 110
Figura 4.27: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT PIN2
– PIN1. ............................................................................................................. 112
Figura 4.28: Ubicación de la medición de magnetotelúrica en el sector de Cartago. ..... 113
Figura 4.29: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de la estación de MT
CAR1. ............................................................................................................... 115
Figura 4.30: Ubicación de las estaciones de magnetotelúrica en el sector de Atacalco. 116
Figura 4.31: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT
ATA8 – ATA7. ..................................................................................................... 118
Figura 4.32: Ubicación de las estaciones de magnetotelúrica en el sector de San Antonio.
........................................................................................................................ 119
Figura 4.33: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT
SAN7 – SAN6. .................................................................................................... 121
Figura 4.34: Ubicación de las estaciones de magnetotelúrica en el sector de Trehualemu.
........................................................................................................................ 122
Figura 4.35:Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT TRE3
– TRE4. ............................................................................................................. 124
Figura 4.36: Ubicación de las estaciones de magnetotelúrica en el sector de Yungay. .. 125
Figura 4.37: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT
YUN1 – YUN2. .................................................................................................... 127
Figura 4.38: Ubicación de las estaciones de magnetotelúrica en el sector de Huepil. ... 128
Figura 4.39: Modelo de resistividad y secciones interpretadas de los puntos MT HUE1 –
HUE2. ............................................................................................................... 130
Figura 4.40: Modelos de inversión 1D de las mediciones que se encuentran en el extremo
este cercanos a la Cordillera Principal .................................................................... 133
Figura 4.41: Izquierda: Modelos de inversión 1D de las mediciones que se encuentran Sur
de Maravilla y en Trapiche. Derecha: Modelo de inversión 1D al Oeste de Trapiche. .... 134
Figura 4.42: Modelos de inversión 1D de las mediciones que se encuentran en El Ala y al
Sur de El Ala. ..................................................................................................... 135
Figura 4.43: Modelos de inversión 1D de las mediciones que se encuentran en la franja
entre Bulnes y Cabrero. ....................................................................................... 136
Figura 4.44: Localización de puntos de control utilizados para modelamiento gravimétrico
2D, obtenidos de este estudio, capaciones subterráneas y estudios previos. Fuente:
Elaboración propia. ............................................................................................. 139
Figura 4.45: Modelamiento e integración de información de otras metodologías del perfil
L1..................................................................................................................... 141
Figura 4.46: Modelamiento e integración de información de otras metodologías de perfil
L2..................................................................................................................... 142
Figura 4.47: Modelamiento e integración de información de otras metodologías de perfil
L3..................................................................................................................... 143
Figura 4.48: Modelamiento e integración de información de otras metodologías de perfil
L4..................................................................................................................... 145
Figura 4.49: Modelamiento e integración de información de otras metodologías de perfil
L5..................................................................................................................... 146
Figura 4.50: Modelamiento e integración de información de otras metodologías de perfil
L6..................................................................................................................... 147
Figura 4.51: Modelamiento e integración de información de otras metodologías de perfil
L7..................................................................................................................... 149
Figura 4.52: Modelamiento e integración de información de otras metodologías de perfil
D1. ................................................................................................................... 151
Figura 4.53: Modelamiento e integración de información de otras metodologías de perfil
D2. ................................................................................................................... 152
Figura 4.54: Modelamiento e integración de información de otras metodologías de perfil
D3. ................................................................................................................... 153
Figura 4.55: Modelamiento e integración de información de otras metodologías de perfil
D4. ................................................................................................................... 154
Figura 4.56: Modelamiento e integración de información de otras metodologías de perfil
D5. ................................................................................................................... 156
Figura 4.57: Visión general en planta del espesor sedimentario. ............................... 158
Figura 4.58: Visión general en planta de la profundidad del basamento. .................... 159
Figura 4.59: Visión en planta de espesor sedimentario estimado por DGA (2011). Imagen
de elaboración propia, a partir de datos de DGA (2011). ......................................... 161
Figura 4.60: Visión en planta de espesor sedimentario estimado por DGA (2012). Imagen
modificada de DGA (2012). .................................................................................. 162
Figura 4.61: Modelo de inversión de relleno sedimentario obtenido por DGA (2015).
Imagen obtenida directamente de DGA (2015). ...................................................... 164
Figura 4.62: Anomalía de Bouguer completa residual obtenida por DGA (2015). Obtenida
directamente de DGA (2015). .............................................................................. 165
Figura 4.63: Modelo de profundidad del basamento estimado por Aguirre et al., 2022.
Imagen obtenida directamente de Aguirre et al., 2022. ........................................... 167
Figura 4.64: Anomalía de Bouguer Completa residual de la base de datos gravimétrica
conjunta del presente trabajo, DGA (2011) y DGA (2012). Círculos negros: presente
estudio; Triángulos blancos: DGA (2011); Triángulos azules: DGA (2012). ................ 169
ÍNDICE DE TABLAS
Tabla 2.1: Tabla de información de los pozos profundos recopilados que detectan roca en
la cuenca del Rio Itata. Base cartográfica en WGS84 H18S. ....................................... 26
Tabla 3.1: Esquema de adquisición de las estaciones de magnetotelúrica .................... 55
Tabla 4.1: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Trapiche
(WGS84 - 18S). ................................................................................................... 77
Tabla 4.2: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Maravilla
(WGS84 – 18S). ................................................................................................... 81
Tabla 4.3: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Cato (WGS84
– 18S). ............................................................................................................... 84
Tabla 4.4: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Cachapoal
(WGS84- 18S). .................................................................................................... 87
Tabla 4.5 Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Camino
Cachapoal (WGS84 – 18S)..................................................................................... 90
Tabla 4.6: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Ninquihue
(WGS84 – 18S). ................................................................................................... 93
Tabla 4.7: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de El Ala (WGS84
– 18S). ............................................................................................................... 96
Tabla 4.8: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Coihueco
(WGS84 – 18S). ................................................................................................... 98
Tabla 4.9: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Viña Ribera
(WGS84 – 18S). ................................................................................................. 101
Tabla 4.10: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Bellavista
(WGS84 – 18S). ................................................................................................. 104
Tabla 4.11: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Liucura
(WGS84 – 18S). ................................................................................................. 107
Tabla 4.12: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Pinto
(WGS84 – 18S). ................................................................................................. 110
Tabla 4.13: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Cartago
(WGS84 – 18S). ................................................................................................. 113
Tabla 4.14: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Atacalco
(WGS84 – 18S). ................................................................................................. 116
Tabla 4.15: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de San Antonio
(WGS84 – 18S). ................................................................................................. 119
Tabla 4.16: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Trehualemu
(WGS84 – 18S). ................................................................................................. 122
Tabla 4.17: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Yungay
(WGS84 – 18S). ................................................................................................. 125
Tabla 4.18: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Huepil
(WGS84 – 18S). ................................................................................................. 128
Tabla 4.19: Ubicación de estaciones geofísicas TEM de mejor calidad para la
interpretación geológica y geofísica en la cuenca Itata (WGS84 – 18S). .................... 131
RESUMEN
El presente informe hidrogeológico desarrollado por GEO RESOURCE LTDA. a solicitud de
la Dirección General de Aguas (DGA), presenta en detalle la búsqueda de investigaciones
previas, la recopilación de información bibliográfica, contexto geológico e hidrogeológico de
la cuenca y el resultado de las diferentes metodologías geofísicas realizadas para
determinar la profundidad del basamento rocoso presente en la zona acuífera de la Cuenca
del Río Itata en la región del Ñuble.
I
1. INTRODUCCIÓN
2
Esto hace necesario conocer la línea base de los reservorios subterráneos, sus interacciones
con el medio y sus limitaciones.
Para el presente estudio, en la cuenca del Itata Valle Central profundo, se realizaron
campañas geofísicas mediante los métodos: gravimétrico, magnetotelúrico (MT) y
transiente electromagnético (TEM). Los modelos generados a partir de este levantamiento
geofísico presentan la variación de los valores de resistividad eléctrica y de densidades a
través de la cuenca, lo que permite la interpretación tanto de las características del relleno
sedimentario como de la profundidad del basamento rocoso.
3
Para una mejor compresión y representación de los datos, se presentan tanto los resultados
obtenidos utilizando cada método geofísico como la interpretación conjunta entre las
distintas metodologías utilizadas. Los trabajos de terreno se ejecutaron durante el periodo
comprendido entre octubre del año 2023 y febrero de 2024.
Los Anexos comprenden una variedad de documentos, que incluyen planos y mapas
elaborados, captaciones revisadas, modelos de inversión 1D para las estaciones de TEM,
2D para las estaciones de magnetotelúrica y 2D para los perfiles gravimétricos. Además,
se incluye el registro fotográfico desarrollado durante las campañas geofísicas que
documenta el progreso de las labores realizados en terreno.
1.1. Ubicación
La cuenca del río Itata presenta una intrincada red hidrográfica superficial que incluye 3
cursos de agua principales, correspondientes a los ríos Itata, Ñuble y Diguillín. La cabecera
de la cuenca se ubica en la zona de la Cordillera de los Andes, conocida a estas latitudes
como Cordillera Principal, la cual representa las mayores alturas del sector, como es el caso
los volcanes Chillán y Nevados de Chillán, con aproximadamente 3.200 m s.n.m. Esta
cordillera se compone principalmente de rocas volcánicas y volcanosedimentarias, cuyo
origen se asocia a procesos eruptivos pasados, y rocas de origen intrusivo. A medida que
disminuye la altura geográfica hacia el oeste inicia la transición hacia la precordillera, con
alturas geográficas que fluctúan entre los 300 a 800 m s.n.m. Esta zona se caracteriza por
la presencia de una diversidad de litologías, entre ellas rocas plutónicas, volcánicas y
volcanosedimentarias.
Al continuar hacia el oeste, inicia la una amplia explanada que representa el Valle Central,
el cual conforma una zona deprimida entre la Cordillera de la Costa y la Cordillera Principal.
En este sector se han acumulado grandes potencias de relleno sedimentario y
volcanosedimentario, cuyo origen se asocia a procesos erosivos y de transporte productor
de la densa red de drenaje que surca el valle, y también por la acción de procesos eruptivos
pasados.
4
La vertiente oriental de la Cordillera de la Costa marca el aumento de las elevaciones que
llegan hasta los 900 m s.n.m. aproximadamente. Esta unidad se compone de un antiguo
basamento rocoso altamente erosionado, representado por rocas intrusivas y en menor
medida metamórficas. Finalmente, hacia la desembocadura del río Itata disminuyen
abruptamente las elevaciones con el desarrollo de una restringida planicie costera.
La Figura 1.1 representa el área de estudio, definida por el mandante a partir de un archivo
.kmz en las bases de la licitación (Itata_profunda.kmz). En esta área del Valle Central
profundo, se desarrollaron las campañas geofísicas utilizando las metodologías
magnetotelúricas (MT), transiente electromagnético (TEM) y gravimetría.
Figura 1.1: Ubicación de la cuenca del Itata en la Región del Ñuble. Fuente: Elaboración propia.
5
1.2. Objetivos
Objetivo General
El objetivo general del presente estudio es generar nueva información geofísica que permita
caracterizar en profundidad el relleno sedimentario y el basamento rocoso presente en la
zona acuífera de la cuenca del río Itata.
Objetivos Específicos
1.3. Antecedentes
En este subcapítulo se exponen los trabajos e informes recopilados que aportan a los
objetivos de este estudio con respecto a la Geología, Hidrogeología y Geofísica. Se resume
la información que se consideró relevante de cada estudio para la realización de este
informe.
• Mapas geológicos preliminares de Chile, Hoja Los Ángeles – Angol. Escala 1:250.000
(Instituto de Investigaciones Geológicas, 1981)
Carta de las unidades geológicas a una escala de 1:250.000 en el área comprendida entre
Los Ángeles y Angol. Se identifican los afloramientos geológicos más relevantes y
características morfoestructurales que se presentan en el extremo sur de la cuenca de
Itata.
6
Se presentan formaciones geológicas presentes en el área de estudio, tales como Fm.
Mininco y Fm. La Montaña, junto a una descripción de su origen, composición, correlaciones
estratigráficas y quiebres estructurales.
Por otro lado, la Fm. La Montaña, constituyen los lomajes antepuestos a la Cordillera
Principal. Está constituida por una serie de depósitos morrénicos y aluviales, de composición
relativamente uniforme y con bancos lenticulares de arcillas y arenas finas.
El área estudiada se ubica entre los 36° y 37° de latitud sur y al oeste de los 71°31’. Esta
carta presenta las unidades geológicas a una escala de 1:250.000 en el área comprendida
entre Concepción y Chillán. Se identifican los afloramientos geológicos más relevantes y
características morfoestructurales que se presentan en el extremo oeste de la cuenca de
Itata.
Estratigráficamente, las rocas más antiguas están representadas por rocas metamórficas
paleozoicas, que se distribuyen principalmente en el sector occidental de la cordillera de la
costa.
7
aluvionales y eólicos, que conformarían acuíferos libres a semiconfinados de una extensión
variable.
Se realizó una estimación de la recarga para el acuífero de la cuenca del río Itata, a partir
de un modelo de simulación hidrológica simplificado, el cual se realizó considerando la
interacción existente entre los sectores de riego, los cauces superficiales, los embalses y
los pozos de bombeo.
8
longitudinales que muestran la profundidad de la roca. Se concluye que existe un solo gran
acuífero subdividido en tres zonas diferenciadas por el tipo de relleno permeable.
Los resultados de mayor interés incluyen los resultados del levantamiento gravimétrico
realizado en la cuenca del río Biobío, abarcando las regiones del Biobío y La Araucanía.
Mediante la ubicación de estaciones gravimétricas, se pudo proporcionan información
general sobre la morfología del basamento subterráneo del Valle Central en latitudes
aproximadas de 37º S a 38º S. Se llevaron a cabo un total de 15 perfiles gravimétricos,
con estaciones distribuidas aproximadamente cada 2 kilómetros.
9
• Modelación Hidrogeológica cuenca Itata - Bajo, Región del Biobío (DGA, 2013)
10
El objetivo general de este estudio consistió en el desarrollo de modelos conceptuales de
las distintas cuencas y acuíferos estudiados, permitiendo generar una herramienta de
gestión basada en función de la hidrología e hidráulica, así como en la disponibilidad de
recursos hídricos.
El objetivo principal de este informe busca delimitar y definir los distintos sectores
hidrogeológicos de aprovechamiento común de las cuencas de las regiones del Maule,
Biobío, La Araucanía, Los Ríos y Los Lagos.
11
cuencas menores. Una vez realizada la delimitación de cuencas, se estimó la precipitación
media de éstas utilizando diferentes herramientas de cálculo, basándose en datos obtenidos
de las isoyetas del Balance Hídrico de Chile (DGA, 1987). Posterior al cálculo se
precipitaciones, se aplicó un coeficiente de infiltración a los valores obtenidos tomando
como base estudios previos de la DGA. De esta manera, se obtuvo una representación
preliminar de recarga media anual que se produciría en cada sector hidrogeológico
delimitado.
Se concluye que el sector hidrogeológico Río Andalién presenta una condición en la que la
explotación actual y el otorgamiento de nuevos derechos de aprovechamiento no generan
riesgo en el acuífero.
En este estudio se establece una propuesta de sectorización para el acuífero asociado al río
Ñuble con 14 sectores. El trabajo presenta una gran cantidad de datos con respecto a la
caracterización hidrológica e hidrogeológica en el sector estudiado de la cuenca del río Itata,
generando un mapa con las unidades hidrogeológicas presentes en el área de estudio.
12
estaciones TEM contiguas, abarcando longitudes de aproximadamente 1 km con estaciones
separadas cada ~200 m de cada punto central y loops individuales de 200x200 m.
Los resultados del estudio geofísico indican que el basamento alcanza predominantemente
profundidades menores a 300 m, con extremos de hasta 500 m en el área de estudio.
• Prospección geofísica sector rural déficit hídrico Valle del Itata (DGA, 2018)
El objetivo del estudio consistió en la definición de una serie de puntos de prospección para
la construcción de captaciones de agua, enmarcado dentro de un proyecto para paliar la
escasez hídrica que afecta la zona del valle del Itata.
Estudio geofísico en el cual se realizó una campaña de prospección geofísica con el método
del transiente electromagnético (TEM), con un total de 259 prospecciones (Figura 1.2) en
46 sectores distribuidas en 9 comunas del valle del Itata, con diferentes loop de prospección
(10x10 m, 25x25 m, 50x50 m y 100x100 m).
- Unidad I – Unidad saturada integrada por una secuencia de sedimentos finos con
presencia de arcillas.
- Unidad III – Unidad parcialmente saturada integrada por arenas medias, arenas
gruesas y gravas.
- Unidad V– Unidad con saturación baja a seca integrada por sedimentos finos.
13
Además, en el documento se recopilaron los parámetros hidráulicos de los diferentes
sectores donde se realizaron las prospecciones (transmisividad y coeficiente de
almacenamiento), a partir de la consulta de los expedientes de la DGA.
• Sectorización Hidrogeológica del acuífero del Río Laja, Región del Biobío (DGA,
2018)
El objetivo general del estudio fue realizar una propuesta de sectorización hidrogeológica y
una estimación de la recarga (oferta) para el acuífero del valle del río Laja
Se llevó a cabo una sectorización hidrogeológica y una estimación de la recarga del acuífero,
con el objetivo de identificar los flujos de agua subterránea, así como las zonas de recarga
y descarga. Este proceso implico una recopilación de antecedentes, que abarca información
hidrológica, geológica e hidrogeológica, así como datos de captaciones registradas por la
Dirección General de Aguas.
Además, llevan a cabo análisis hidrogeoquímicos y una exploración geofísica, que incluye
la instalación de 55 estaciones de transiente electromagnético (TEM) y 50 estaciones
gravimétricas (Figura 1.2).
Los resultados obtenidos en base a los ensayos geofísicos ejecutados, define que el acuífero
del río Laja se emplaza en una depresión sedimentaria que mantiene una marcada
tendencia de profundización hacia el este. Se identificaron rellenos saturados de hasta 400
m de espesor, donde el basamento se ubica de manera más somera al oeste y flancos del
área de estudio. Asimismo, se distingue gran variedad granulométrica en la composición
de las unidades que conforman el subsuelo, desde bolones y ripios húmedos que presentan
medianas a altas resistividades, hasta materiales más arcillosos que arrojan menores
resistividades y representan las zonas menos permeables dentro del sistema acuífero. Se
confirma de esta manera la existencia de una formación acuífera de gran continuidad tanto
vertical como horizontal, de importante espesor, donde el basamento se hallaría por lo
menos a 1 km de profundidad desde la cota de terreno.
14
Finalmente, formulan un modelo conceptual del acuífero, proporcionando una base sólida
para la gestión sostenible de este recurso hídrico subterráneo.
Para la interpretación geofísica se utilizaron 467 estaciones de gravedad, de las cuales 343
estaciones corresponden a mediciones realizadas por DGA (2011) y 124 estaciones de DGA
(2015), además de la información de estaciones TEM y MT que corresponden a datos
adquiridos por DGA (2015). El estudio realiza 81 estaciones TEM de loop 200 m (TEM-
200m), agrupadas en 16 perfiles de 5 estaciones cada uno, y 14 estaciones TEM de loop
50 m, ubicadas en torno a los sitios de los perfiles TEM-200m. Las 5 estaciones MT medidas
en ese mismo estudio se ubican en la parte rural-semiurbana de la cuenca del Ñuble (parte
central y oriental), dada la imposibilidad de medir en la parte urbana por dificultades de
ruido cultural. La metodología propuesta tiene el potencial de identificar un recurso vital
para la sustentabilidad en las próximas décadas.
15
Adicionalmente se generó un perfil hidrogeológico con orientación SO-NE en la que se
sintetiza la geometría del acuífero y las características hidrogeológicas del área estudiada.
• Análisis y caracterización del Acuífero de la cuenca del rio Itata, Estudio geofísico
Itata Bajo (DGA, 2023)
- Unidad BD: Unidad basal, resistividades variables en torno a 100 Ωm y sobre 2000
Ωm en algunos sectores. Se asocia a rocas metamórficas alteradas con un mayor
grado de saturación, salinidad y/o alteración en niveles con menores valores de
resistividad.
16
Figura 1.2: Localización de estaciones geofísicas en estudios previos en las regiones del Ñuble y Biobío, relevantes
para este estudio. Fuente: Elaboración propia.
17
1.4. Conclusiones del análisis de antecedentes
Por otra parte, la búsqueda de estudios DGA que incluyen labores geofísicas previas en la
cuenca, permitió planificar de mejor forma las localidades donde se realizaron las
mediciones geofísicas del presente informe, además de darle una mayor robustez a los
modelos generados.
Para cada estudio revisado en el subcapítulo anterior se generaron fichas resúmenes, las
cuales se presentan en el Anexo H, cuya estructura base se presenta a continuación:
18
Los estudios recopilados de mayor relevancia corresponden a:
• Prospección geofísica sector rural déficit hídrico valle del Itata (DGA, 2018).
Los antecedentes del estudio DGA (2011) presentan una descripción geológica del área de
interés donde se indican las relaciones estratigráficas de las unidades junto a sus
composiciones y espesores aproximados. En términos geofísicos presentan modelos
gravimétricos de profundidad de basamento de algunos perfiles a lo largo de la cuenca, que
permitieron comprender la geometría general de la cuenca y con esto definir zonas de
interés para el presente estudio.
De manera similar, el estudio DGA (2012) presenta un plano de la geología presente al sur
de la zona de estudio y en términos geofísicos, presentan un modelo de profundidad de la
cuenca sedimentaria desde Bulnes hacia el sur.
En el estudio DGA (2018) se realizó una campaña de prospección geofísica con el método
del transiente electromagnético (TEM), con un total de 259 estaciones en 46 sectores
distribuidos en 9 comunas del valle del Itata. De estas mediciones, las de mayor
importancia corresponden a las emplazadas al este de su sector de estudio, debido a su
cercanía a la Cordillera de la Costa. La interpretación de los valores de resistividad y
unidades identificadas en este sector permitieron constreñir de mejor manera los modelos
geofísicos generados en este trabajo.
El estudio de Aguirre et al. (2022) complementa las mediciones geofísicas de DGA (2011)
y DGA (2015) con nuevas estaciones de gravimetría, TEM y MT, ubicadas en sectores
específicos para el desarrollo de un modelo mejorado de la profundidad de basamento y
espesor sedimentario de la cuenca. Este trabajo, aportó con puntos de control importantes
de profundidad de basamento en algunos sectores (principalmente de estaciones MT), para
el modelamiento de los perfiles gravimétricos del presente trabajo.
19
2. CONTEXTO GEOLÓGICO E
HIDROGEOLÓGICO
La geología del sector (Figura 2.1) indica un predominio por material sedimentario que se
encuentra rellenando valles y de manera subordinada depósitos volcánicos y
volcanosedimentarios hacia el extremo oriental y occidental, donde geomorfológicamente
se emplazarían la Cordillera Principal y la Cordillera de la Costa respectivamente.
La unidad más antigua corresponde a una franja intrusiva de edad Carbonífero – Pérmico
(CPg en Figura 2.1) con orientación NNE-SSO, la cual aflora hacia el oeste del área de
estudio. Estas rocas conforman gran parte de la Cordillera de la Costa y su composición
petrográfica varía entre tonalitas y granodioritas.
20
Figura 2.1: Mapa geológico de la Cuenca del Río Itata. Modificado de DGA, 2011.
21
La Formación La Montaña (PlHlm en Figura 2.1), de edad Pleistoceno – Holoceno, aflora
principalmente al extremo noreste del área de estudio y está conformada por una serie de
depósitos morrénicos y aluviales compuestos principalmente por arcillas y arenas finas con
poca compactación y sin cementación. Estudios más recientes, al sur del área de estudio,
determinan que la parte superior del relleno sedimentario del Valle Central correspondería
principalmente a la Formación Malleco (antes definida como Fm. La Montaña), ya que no
se reconoce diferencias en las facies que permitan diferenciar estas dos unidades
(Anavalón, 2018). Fm. Malleco estaría constituida por una sucesión de conglomerados,
areniscas y en menor medida, limolitas y tobas, las cuales estarían cubriendo a Fm. Mininco.
Los Depósitos piroclásticos (Pl3t en Figura 2.1) están en el sureste del área y corresponden
a depósitos no consolidados de edad cuaternaria, asociados a flujos piroclásticos de
composición riolítica por el colapso de calderas volcánicas.
Los Depósitos de avalancha volcánica (Q3av en Figura 2.1) se encuentran al suroeste del
área y de manera similar a los depósitos descritos anteriormente, se relacionan a colapsos
parciales de edificios volcánicos. Presenta clastos de composición riolítica a andesítica con
tamaños que varían entre grava gruesa y sedimentos finos.
22
Figura 2.2: Mapa hidrogeológico de la Cuenca del Río Itata. Modificado de DGA, 2015.
23
La Unidad B corresponde a acuíferos de mediana importancia hidrogeológica en rocas o
depósitos no consolidados que forman acuíferos de amplia distribución con intercalaciones
de litologías de menor permeabilidad, asociado principalmente a las formaciones geológicas
PPlm y PlHlm.
Las unidades hidrogeológicas que predominan al interior del área a sectorizar corresponden
a las Unidades A, B, C1 y D. Respecto de estas dos últimas, no se conocen antecedentes
hidrogeológicos que den cuenta de la presencia de acuíferos relevantes. En esta área, las
Unidades C1 y D se localizan en zonas elevadas o de mayor cota respecto de las Unidades
A y B, por lo que, se asume que corresponden a áreas de baja relevancia para la
sectorización acuífera.
El basamento de la cuenca está conformado por las Unidades C, C1 y D, los cuales con los
antecedentes de DGA (2015) se consideraron impermeables.
Para una mejor caracterización de las unidades hidrogeológicas presentes en la cuenca del
río Itata se recurrió a la búsqueda en la base de datos de la Dirección General de Aguas de
captaciones profundas cercanas. Debido a la densidad de las captaciones presentes en el
área (Figura 2.3), se revisó y analizó las captaciones en distintas áreas de interés, donde
se planifica, realizar las campañas geofísicas con el fin de identificar pozos profundos que
alcanzan a detectar roca y así poder ajustar los modelos geofísicos.
24
Figura 2.3: Mapa de captaciones subterráneas registradas en la Dirección General de Aguas Subterráneas en la
Cuenca del Río Itata. Elaboración Propia
25
Se recopilaron y analizaron un total de 856 captaciones (ANEXO A), siendo la mayoría de
estas norias, drenajes y pozos zanjas de poca profundidad. Sin embargo, se han
identificado 24 pozos profundos que resultan fundamentales para el ajuste y la corrección
de los modelos geofísicos (Tabla 2.1). De estos pozos, se han realizado columnas
estratigráficas (Figura 2.4 a Figura 2.9) que muestran la presencia de roca del basamento
en profundidad. Además, en la Figura 2.10 se observa la relación de estos datos con los
perfiles gravimétricos realizados.
Tabla 2.1: Tabla de información de los pozos profundos recopilados que detectan roca en la cuenca
del Rio Itata. Base cartográfica en WGS84 H18S.
26
Figura 2.4: Columnas estratigráficas de las captaciones que detectan roca (Perfiles gravimétricos L1
y L2) ubicadas en la cuenca del Río Itata.
27
Figura 2.5: Columnas estratigráficas de las captaciones que detectan roca (Perfil gravimétrico L3) ubicadas en la cuenca del Río Itata.
28
Figura 2.6: Columnas estratigráficas de las captaciones que detectan roca (Perfil gravimétrico L4) ubicadas en la cuenca del Río Itata.
29
Figura 2.7: Columnas estratigráficas de las captaciones que detectan roca (Perfil gravimétrico L5) ubicadas en la cuenca del Río Itata.
30
Figura 2.8: Columnas estratigráficas de las captaciones que detectan roca (Perfiles gravimétricos L6 y L7) ubicadas en la cuenca del Río
Itata.
31
Figura 2.9: Columnas estratigráficas de las captaciones que detectan roca (Perfiles gravimétricos D7A, D10 y D9B) ubicadas en la cuenca del
Río Itata.
32
Figura 2.10: Plano de ubicación de los perfiles elaborados a partir de las captaciones seleccionadas.
33
3. METODOLOGÍA
3.1. Gravimetría
Esta metodología es una técnica pasiva (remota) que consiste en determinar las diferencias
de gravedad entre distintos puntos distribuidos en la zona de estudio. Las variaciones del
campo gravitatorio son generadas por la presencia de cuerpos de distinta densidad en
profundidad. Dado esto, debido a las diferencias de densidad entre los rellenos
sedimentarios de una cuenca y su roca basal, la interpretación de las anomalías
gravimétricas son una gran herramienta para el estudio y modelamiento de cuencas
sedimentarias.
34
Figura 3.1: Flujo de adquisición, procesamiento y modelamiento de datos gravimétricos.
3.1.1. Terreno
Las mediciones se realizaron con un gravímetro relativo G-370 marca Lacoste & Romberg.
Los datos fueron adquiridos bajo un protocolo de loop diario mediante la medición de una
estación base en distintos momentos del día, para poder hacer la corrección por deriva
instrumental. Y, para la correcta conversión de gravedad relativa a gravedad absoluta, se
utilizó como estación base de gravedad absoluta la estación CHILLAN, medida por el
Instituto Geográfico Militar. En cuanto a los datos topográficos se realizaron con un GPS
diferencial marca Sanding, modelo GNSS RTK Sanding T7, que fueron procesados en el
software SurvX 4.0.
35
Figura 3.2: Mapa de ubicación de estaciones gravimétricas medidas y estación de gravedad absoluta utilizada para procesamiento.
36
3.1.2. Procesamiento
37
Figura 3.3: Gravedad Absoluta calculada para la zona de estudio.
38
3.1.2.2. Cálculo de anomalía de Bouguer Completa
Una vez obtenida la gravedad absoluta para cada punto de medición, se realiza el cálculo
de la anomalía de Bouguer Completa, según el proceso de corrección estándar de datos
gravimétricos (Blakely, 1995; Lowrie, 2007) que se presenta a continuación.
1 + 𝑘 𝑠𝑖𝑛2 𝜑
𝑔0 = 𝑔𝑒 .
√1 + ⅇ 2 𝑠𝑖𝑛2 𝜑
39
❖ Bouguer Simple (ⅆ𝑔𝐵 ): Corresponde a la variación de gravedad generada por la
masa que se encuentra entre el datum y el punto de medición (Figura 3.5).
𝑔
ⅆ𝑔𝐵 [𝑚𝐺𝑎𝑙] ≈ 0.0419 ∙ 𝜌[ ] ∙ ℎ [𝑚]
𝑐𝑐
Donde h es la elevación del punto de medición y en este estudio se considera una densidad
de reducción clásica de 2,67 kg/m3.
Esta corrección fue calculada siguiendo la combinación de algoritmos propuestos por Kane
(1962) y Nagy (1966) y una grilla topográfica ASTER GDEM, de resolución de 30mx30m
(Figura 3.7).
40
❖ Cálculo de Anomalía de Bouguer Completa (ABC): Una vez calculadas todas las
correcciones para cada punto de medición, se calcula la anomalía de Bouguer
completa (Figura 3.8) de la siguiente manera:
41
Figura 3.7: Modelo de elevación topográfica (DEM) utilizado para corrección topográfica.
42
Figura 3.8: Anomalía de Bouguer Completa (ABC) calculada para la zona de estudio.
43
Figura 3.9: Campo regional calculado para la zona de estudio. En diamantes negros los puntos de
medición de gravedad sobre roca.
44
Figura 3.10: Anomalía de Bouguer Completa reducida calculada para la zona de estudio.
45
3.1.3. Modelamiento
46
Figura 3.12: Mapa de ubicación de perfiles gravimétricos modelados.
47
❖ Limpieza de datos
Figura 3.13: Ejemplo de dato outlayer, perfil L7, punto de medición 304.
48
(líneas verticales moradas) y los puntos de control de la tendencia regional (puntos
rosados).
❖ Modelamiento 2D
Para este estudio se realizaron pruebas de modelamiento forward del perfil L1 con distintas
densidades típicas de relleno sedimentario (1,9, 2,0 y 2,1 kg/m3) que corresponden a
contrastes de 0,77, 0,67 y 0,57 kg/m3 respectivamente, con el objetivo de poder escoger
el valor más adecuado para modelar la cuenca regional y poder analizar la variabilidad de
los espesores sedimentarios en función de este parámetro. Como se puede observar en la
Figura 3.15, los modelos realizados con las distintas densidades ajustan muy bien los datos
observados, pero existe una variación importante en el espesor de la cuenca sedimentaria
obtenida. No obstante, la forma de la cuenca se conserva y es muy similar en todos los
casos. En base a este análisis, se respalda la importancia de considerar las posibles
variaciones en los contrastes de densidad durante la interpretación, a pesar de que los
modelos restantes son modelados con una densidad única de 2,0 kg/m3 (contraste de 0,67
kg/m3), escogida como un valor promedio coherente, que se ajusta también a información
de otros estudios respecto a la profundidad de la cuenca sedimentaria en la región.
49
Figura 3.14: Ejemplo de modelamiento e integración de información de otras metodologías para el perfil L1. Elaboración propia.
50
Figura 3.15: Modelación del Perfil L1 con distintas densidades de sedimentos (1,9; 2,0 y 2,1 kg/m3). Elaboración propia.
51
3.2. Magnetotelúrica
52
Figura 3.17: Flujo de adquisición, procesamiento y modelamiento de datos MT.
3.2.1. Terreno
❖ Adquisición
53
Figura 3.18: Mapa de distribución de estaciones MT.
54
Para llevar a cabo la adquisición de datos, fue utilizado el equipo de medición ADU08e, de
la compañía Metronix (para más información referirse a Metronix (2017)). Este dispositivo
está equipado con tres bobinas de inducción, modelo MF07e, que se instalan en terreno
con orientación norte-sur, oeste-este y vertical, respectivamente, con el propósito de
registrar las variaciones naturales en el tiempo del campo magnético. Además, cuentan con
cuatro electrodos impolarizables EFP06, que se instalan distribuidos en dos dipolos de
longitud entre 10 m y 80 m, con orientación norte-sur y este-oeste, y se utilizan para
capturar información sobre las fluctuaciones temporales del campo eléctrico terrestre.
Todos estos sensores se conectan a la unidad de adquisición (ADU08e), que almacenan
simultáneamente las series temporales de los campos eléctricos y magnéticos medidos. El
esquema de medición de las estaciones de AMT para este estudio se resume en la Tabla
3.1.
65.536 90
16.384 240
4.096 360
1.024 480
* No todas las estaciones de AMT fueron adquiridas con la banda de 512 Hz.
55
3.2.2. Procesamiento
56
(Z) (Ecuación 1), el cual relaciona las componentes horizontales del campo eléctrico (𝐸𝑥 , 𝐸𝑦 )
y magnético (𝐻𝑥 , 𝐻𝑦 ).
𝑍𝑥𝑦 (𝜔)
(𝐸𝐸𝑥 (𝜔)
(𝜔)
) = ( 𝑍𝑥𝑥 (𝜔)
𝑍
) 𝐻𝑥 (𝜔)
(𝐻 (𝜔)
) Ecuación 1
𝑦 𝑦𝑥 (𝜔) 𝑍𝑦𝑦 (𝜔) 𝑦
Por otra parte, se realiza el cálculo de los vectores de inducción (𝑇𝑥 , 𝑇𝑦 ) (Ecuación 2), que
corresponde a la función de transferencia que relaciona las componentes horizontales del
campo magnético con su componente vertical (𝐻𝑧 ):
𝐻𝑥 (𝜔)
𝐻𝑧 (𝜔) = (𝑇𝑥 (𝜔) 𝑇𝑦 (𝜔)) ( ) Ecuación 2
𝐻𝑦 (𝜔)
Para más información sobre la formulación teórica de método referirse a Chave y Jones
(2012).
La estimación del tensor de impedancias y los vectores de inducción se lleva a cabo a partir
de dos algoritmos independientes, la primera mediante el software ProcMT (Metronix,
2002) que utiliza una regresión por mínimos cuadrado, y la segunda con la librería SigMT
(Ajithabh y Patro, 2023) que implementa una estimación robusta para estimar las funciones
de transferencia.
A partir del tensor de impedancias es posible calcular las curvas de resistividad aparente y
fase en función de la frecuencia. En la Figura 3.20 se muestran a modo de ejemplo las
curvas de resistividad aparente y fase de la estación TRAP5.
3.2.3. Modelamiento
Para la inversión de los datos se utiliza el software Winglink, el cual permite realizar el
control de calidad de los datos y posteriormente efectuar el modelamiento a través de
inversiones bidimensionales. Para esto, al software son importados tanto el tensor de
impedancia, como los vectores de inducción, pudiéndose visualizar las curvas de
resistividad aparente y fase.
57
❖ Limpieza de datos
Figura 3.20: Curvas de resistividad aparente y fase de la estación TRAP5. Eje x de la figura
corresponde al periodo en unidades de segundos.
58
❖ Inversión 2D
Para llevar a cabo las inversiones se consideraron los datos originales de cada estación,
utilizando ambas componentes de resistividad aparente y fase obtenidas (XY e YX). Se
definió un piso de error de 10% para la resistividad aparente y de 5% para la fase. La grilla
se creó en función del rango de frecuencias obtenidas para cada sitio.
❖ Análisis de dimensionalidad
El tensor de fase, definido por Caldwell et al. (2004), es un tensor de segundo orden que
no se encuentra afectado por la distorsión galvánica del campo eléctrico, y que se
representa gráficamente mediante elipses, denominadas como elipses de fase. La forma y
orientación de éstas entregan información sobre la dimensionalidad del medio. En los casos
unidimensionales, donde la resistividad varía sólo en profundidad, las elipses tienden a ser
circulares. Por otro lado, en situaciones 2D donde la resistividad varía en profundidad y en
una dirección preferencial, las elipses se deforman y se alinean en la dirección del strike
geoeléctrico. En situaciones tridimensionales suelen tener un comportamiento más errático.
59
Figura 3.21: Visualización de las curvas de resistividad aparente (arriba) y de la fase (abajo). Eje x de las figuras corresponde al periodo en
unidades de segundos Derecha: Visualización modelo 2D en Winglink. Paleta de colores a la derecha indica valores de resistividad.
60
Un parámetro que se desprende del cálculo del tensor de fase es el ángulo de distorsión β,
el que es utilizado como un índice de la dimensionalidad, y que representa el grado de
simetría del tensor de fase. Este invariante rotacional tiende a cero en situaciones 2D y
aumenta su valor en situaciones 3D. En general un valor mayor a 3° es indicativo de una
situación tridimensional.
o Strike geo-eléctrico
El cálculo del strike se realiza mediante la librería implementada en Python MTpy (Krieger
y Peacock, 2014), que permite la estimación de un rumbo eléctrico a través de tres
metodologías diferentes: mediante el algoritmo de Zhang et al. (1987), a partir de la
definición del tensor de fase y, finalmente, a partir de la orientación de los vectores de
inducción.
61
3.3. Transiente electromagnético
62
Figura 3.22: Figura esquemática de cómo se realiza la adquisición de datos de una estación TEM y
sus fundamentos físicos de interacción con el subsuelo. Obtenida de Dentith & Mudge, 2014.
63
3.3.1. Terreno
❖ Adquisición
64
Figura 3.24: Mapa de distribución de estaciones TEM.
65
Figura 3.25: Esquema de medición. (a) Pulso transmisor. (b) Fuerza electromagnética inducida. (c)
Campo magnético secundario medido en distintas gates o ventanas de tiempo. Obtenida de ABEM
(2021).
3.3.2. Procesamiento
Para realizar un correcto procesamiento de los datos es necesario hacer una inspección
inicial de ellos, para de esta manera evaluar su calidad, lo que permite posteriormente
hacer una limpieza acertada de estos, que luego es considerada al momento de efectuar la
interpretación de los modelos. Este análisis considera la dispersión de los datos (en función
del stacking realizado), el análisis del nivel de ruido, análisis de relación de High/Low
Moment, obtención de una curva única de decaimiento de voltaje, y cálculo de la curva de
resistividad aparente.
66
❖ Stacking de mediciones
Figura 3.26: Ejemplo de stacking de estación ITA44. En color rojo, azul y gris los datos
correspondientes a LM, HM y ruido respectivamente. En líneas con trasparencia se muestran todas
las mediciones realizadas, y en línea sólida los valores apilados (stacking) de cada momento.
67
❖ Análisis de nivel de ruido
El análisis del nivel de ruido consiste en comparar las curvas de decaimiento de voltaje con
las curvas de ruido electromagnético ambiental de la estación. Esto nos permite
comprender y evaluar hasta qué tiempos la curva de decaimiento de voltaje se puede
considerar válida, entendiendo que en los tiempos en que ambas curvas se traslapan
posiblemente el voltaje observado estará siendo afectado por el ruido natural del lugar. En
la Figura 3.26 se puede observar la comparación de la curva de decaimiento (rojo y azul)
de voltaje versus la curva de ruido ambiental (gris) de la estación ITA44, de la cual se
puede deducir que los datos de mejor calidad para utilizar en el modelamiento en este caso,
por encontrarse sobre el nivel de ruido ambiental, son hasta 100 ms aproximadamente.
A partir de las curvas de decaimiento de voltaje, que es el dato directo de medición del
equipo, es posible calcular lo que se conoce como resistividad aparente para ambas
inyecciones de corriente (Figura 3.27). Si bien, también es posible interpretar las curvas
de decaimiento, este parámetro nos entrega de forma más directa información respecto a
cómo es el cambio o contraste de resistividad eléctrica en profundidad.
En general, las mediciones de Low Moment deberían ser más confiables en los tiempos
tempranos, mientras que las de High Moment lo serían para tiempos tardíos. En condiciones
ideales, las curvas de ambas mediciones se deberían traslapar de buena manera para
tiempos intermedios. El análisis de cómo se traslapan ambas curvas nos permite escoger
qué datos utilizar para cada tiempo de medición y obtener una única curva final de
decaimiento de voltaje y resistividad aparente para utilizar en la inversión (Figura 3.28).
68
Figura 3.27: Ejemplo de cálculo de resistividad aparente para estación ITA44.
69
Figura 3.28: Ejemplo de la curva final de decaimiento de voltaje de la estación ITA44, obtenida a partir del traslape de las curvas de decaimiento de LM y HM.
70
3.3.3. Modelamiento
❖ Limpieza de datos
En base a todos los análisis anteriores, antes de realizar las inversiones TEM 1D, se realiza
una limpieza de las curvas de decaimiento de voltaje y resistividad aparente, eliminando
todos aquellos puntos que se consideran anómalos, fuera de rango o sobre el nivel de ruido
ambiental. En la Figura 3.29, se muestra un ejemplo de la limpieza de la estación ITA44,
donde se eliminan todos los puntos que se encuentran en periodos de tiempo donde la
curva de decaimiento de voltaje se traslapa con el nivel de ruido ambiental y los valores
tienen un comportamiento dispersivo (Figura 3.28).
Figura 3.29: Ejemplo de limpieza de datos de curva de decaimiento de voltaje de la estación ITA44.
En gris los puntos que se han eliminado para la inversión.
71
❖ Inversión 1D
El software utilizado para hacer inversiones 1D de TEM corresponde a Winglink, que permite
realizar 2 tipos de modelos, un modelo de capas simple (layered model) y un modelo
suavizado de varias capas (smooth model). En este estudio se decidió trabajar con modelos
de capas simples, que consiste en un modelo capaz de interpretar los datos con la menor
cantidad de capas posibles (Figura 3.30). De esta manera se evita una sobre interpretación
de los datos.
Figura 3.30: Modelo de capas y ajuste respecto a la curva de decaimiento de voltaje de la estación de
TEM ITA44.
72
4. RESULTADOS E INTERPRETACIÓN
4.1. Magnetotelúrica
Por otro lado, los datos recopilados en la zona de estudio abarcaron un rango promedio de
frecuencias entre 10.000 Hz hasta 1 Hz, en el cual es posible apreciar que las estaciones
desplegadas hacia los sectores cordilleranos, presentan en frecuencias altas (> 10.000 Hz)
valores de resistividad aparente que oscilan entre los 30 Ωm – 300 Ωm, llegando hasta los
3.000 Ωm en frecuencias más bajas (10 Hz – 1 Hz) sugiriendo la presencia de estructuras
resistivas, mientras que las estaciones ubicadas en el valle registran una tendencia a
valores mayores de resistividad aparente 30 Ωm – 200 Ωm en frecuencias altas,
disminuyendo hacia frecuencias bajas, lo que sugiere la presencia de zonas conductivas en
profundidad.
73
Figura 4.1: Curvas de resistividad y fase de las estaciones TRAP1 (izquierda) y YUN4 (derecha).
74
4.1.2. Análisis de dimensionalidad
El análisis del tensor de fase de las estaciones desplegadas en la zona de estudio permite
evaluar la dimensionalidad de las estructuras presentes en el subsuelo, mostrando
diferencias claras entre los sectores estudiados, teniendo que en algunos predomina la
unidimensionalidad y/o bidimensionalidad del medio, sin embargo, en otros se ve una clara
incidencia de estructuras tridimensionales.
Figura 4.2: Sección de tensor de fase y parámetro skew de uno de los perfiles del sector de Maravilla
(MAR2 y MAR3).
75
En el caso de la Figura 4.2 se logran apreciar elipses bastante circulares hasta los 0.01 s
(100 Hz) en el caso de la estación MAR3 y hasta los 0,001 s (1.000 Hz) en el caso de la
estación MAR2, con valores de skew (β) menores a 3°, lo que podría indicar la presencia
de una estructura de resistividad bidimensional al menos hasta los 50 Hz. Por otro lado, las
frecuencias más bajas muestran elipses mucho más achatadas y con skew altos (β > 3°)
que podrían ser indicadores de la presencia de una estructura de resistividad tridimensional
en profundidad.
Para mayor información consultar los anexos de la sección MT, en donde se presenta el
resto de los análisis de tensor de fase y skew (Anexo B).
❖ Strike geo-eléctrico
Al igual que en el caso anterior, el análisis del strike geo-eléctrico entrega diferentes
configuraciones a lo largo de toda la zona de estudio, teniendo casos en los que el strike
geo-eléctrico es prácticamente nulo a otros en que el ángulo es de más de 45°. Es
importante mencionar que la orientación del rumbo geo-eléctrico posee una ambigüedad
intrínseca de 90°, por ende, durante el análisis de dimensionalidad se debe discernir cuál
de los ángulos determinados mediante diferentes algoritmos se debe seleccionar para
posteriormente ser utilizado en la rotación de los modelos bidimensionales, de acuerdo a
la coherencia que este ángulo posea con un determinado perfil de estudio.
Figura 4.3: Cálculo de strike para el perfil MAR2-3 ubicado en el sector de Maravilla.
Para más información consultar los anexos de la sección MT, donde se presentan los
análisis de strike geo-eléctrico restantes (Anexo B).
76
4.1.3. Modelos de resistividad eléctrica
Para una mejor visualización y comprensión de los modelos obtenidos, se presentan los
modelos de resistividad v/s profundidad con la mejor calidad de datos obtenidos en cada
zona junto a su interpretación hidrogeológica respectiva. La totalidad de los perfiles
generados se presenta en el apartado de ANEXO B.
❖ Sector Norte
Tabla 4.1: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Trapiche (WGS84 - 18S).
77
Figura 4.4: Ubicación de las estaciones de magnetotelúrica en el sector de Trapiche.
El perfil representado en la Figura 4.5, con orientación NE-SO, indica valores de resistividad
menores a 50 Ωm (tonalidades lilas) los que podrían asociarse a la Fm. Mininco que se
correlacionan de buena forma con los materiales finos como sedimentitas lagunares y
fluviales, y limolitas que componen a esta formación. Se identifica que esta unidad presenta
un mayor espesor hacia la porción norte del perfil donde alcanza profundidades cercanas a
250 m b.n.t. (TRAP5), mientras que, hacia el sur en TRAP6, alcanza aproximadamente los
100 m b.n.t. Bajo esta unidad se aprecia valores de resistividad medios-altos (tonalidades
azules a verdes), que indican el paso a materiales más gruesos y/o con mayor grado de
compactación.
78
Entre las mediciones TRAP5-TRAP1-TRAP2, se aprecia un aumento progresivo en los valores
de resistividad mayores a 500 Ωm (tonalidades amarillas a rojas) a una profundidad de 400
m b.n.t. lo cual indicaría la aparición del basamento cristalino, que hacia su techo podría
tener un grado variable de fracturamiento, meteorización y/o alteración, el cual disminuiría
progresivamente en profundidad. Por otro lado, hacia el sur en las mediciones TRAP2-
TRAP3-TRAP4-TRAP6 se identifica un mayor espesor de la capa de resistividad media-alta
(tonalidad verdosa), con la aparición del basamento alterado y/o fracturado bajo los 1.000
m b.n.t. en TRAP6.
79
Figura 4.5:Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT TRAP1 a TRAP6.
80
o Maravilla (MAR1-3)
Tabla 4.2: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Maravilla (WGS84 – 18S).
81
El perfil representado en la Figura 4.7, con orientación N-S, al igual que el del sector
Trapiche, indica una primera capa conductiva con valores de resistividad menores a 50 Ωm
(tonalidades lilas) posiblemente asociados a la Fm. Mininco. El espesor de esta unidad se
aprecia relativamente homogéneo con una potencia de 100 m en promedio y con una
creciente extensión hacia el límite sur del perfil (MAR3) donde alcanza profundidades
cercanas a 200 m b.n.t. Bajo esta unidad se aprecia un progresivo aumento en los valores
de resistividad, donde las zonas con tonalidades azules a verdes indicarían el paso a
materiales más gruesos y/o con mayor grado de compactación.
82
Figura 4.7: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT MAR2 – MAR3.
83
o Cato (CATO1-6)
Tabla 4.3: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Cato (WGS84 – 18S).
84
Las mediciones CATO5 – CATO6 se realizaron cercanas al Río Ñuble con una orientación
NO-SE permitieron generar el perfil de la Figura 4.9, el cual presenta una primera capa
superficial de unos 50 m de espesor con resistividades medias-bajas (tonalidades celestes-
verdosas) asociados a los depósitos fluvio-aluviales que se encuentran rellenando los
cauces de los ríos y que presentarían en estos primeros metros una composición
mayoritariamente gruesa como gravas y ripios. Bajo esta capa y hasta los 100 m de
profundidad, se aprecia un descenso en los valores de resistividades (tonalidades lilas), lo
cual se asocia a la aparición de la Formación Mininco (o posiblemente Fm. La Montaña), la
cual presentaría un predominio de material fino como arcillas y/o limos en este tramo.
Subyaciendo esta capa conductiva, se aprecia un aumento en la resistividad hasta los 200
– 250 m de profundidad que podría corresponder a un miembro distinto de la Formación
Mininco con mayor grado de compactación y contenido de materiales gruesos como bolones
y/o gravas. Desde los 200 – 250 m hasta al menos los 800 m de profundidad las
resistividades vuelven a decrecer hasta valores menores a 30 Ωm, lo cual podría
corresponder a un Miembro inferior de la Formación Mininco con alto contenido arcillo-
limoso o bien a una nueva unidad altamente conductora que no se ha reconocido
anteriormente.
85
Figura 4.9: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT CATO5 – CATO6.
86
o Cachapoal (CACHA1-2)
Tabla 4.4: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Cachapoal (WGS84- 18S).
87
El perfil O-E generado a partir de las mediciones CACHA1-CACHA2 en la Figura 4.11, se
ubica hacia el oeste de las mediciones de Cato y cercano al río Ñuble. De manera similar al
perfil descrito anteriormente, se aprecia una primera capa superficial de resistividad media
y con un espesor cercano a los 50 m correlacionado con los depósitos fluvio-aluviales que
rellenan el cauce del río. Bajo esta capa, y de manera similar al perfil de Cato, aparecería
la Formación Mininco con un estrato superior de baja resistividad que alcanza los 100 m de
profundidad, seguido de un aumento en la resistividad asociado a un tramo con mayores
contenidos de materiales granulométricamente más gruesos que alcanzarían profundidades
cercanas a 500 m.
88
Figura 4.11: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT CACHA1 –
CACHA2.
89
o Camino Cachapoal (CCACHA1-12)
90
Figura 4.12: Ubicación de las estaciones de magnetotelúrica en el sector Camino Cachapoal.
91
Figura 4.13: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT CCACHA12 –
CCACHA11.
92
o Ninquihue (QUI1-4)
93
El perfil generado a partir de las mediciones QUI3-QUI4 en la Figura 4.15, se ubica al
suroeste de la ciudad de San Carlos, en la unidad geomorfológica del Valle Central. Los
resultados revelan una potente secuencia conductora con resistividades menores a 50 Ωm
(tonalidades moradas) hasta los 110-130 m b.n.t., asociadas a depósitos que se encuentran
rellenando el valle y que presentarían altos porcentajes de material fino como arenas,
arcillas y/o limos. Bajo esta unidad las resistividades decrecen progresivamente
(tonalidades lilas), lo cual, podría corresponder a un estrato de la Formación Mininco con
mayores contenidos de arcillas y/o limos en variables condiciones de humedad y
compactación.
94
Figura 4.15:Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT QUI3 – QUI4.
95
o El Ala (ALA 1-4)
Tabla 4.7: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de El Ala (WGS84 – 18S).
96
Con la medición ALA3 se generó un perfil de resistividad vs profundidad representado en la
Figura 4.17, el cual, presenta una primera capa superficial de 60 m de espesor con
resistividades medias-bajas (tonalidades celestes-verdosas) asociados a los depósitos
fluvio-aluviales que se encuentran rellenando el cauce del río Ñuble y que presentarían una
composición mayoritariamente gruesa con gravas y ripios. Bajo los 60 m y de manera
progresiva se identifica un aumento en las resistividades (tonalidades amarillas-naranjas),
que estarían indicando la aparición de un basamento meteorizado, alterado y fracturado
hasta profundidades cercanas a los 100 m, y a profundidades mayores a 190 m se esperaría
la aparición del basamento cristalino inalterado y fresco. Cabe mencionar que esta
medición, al estar en el lecho del río, los valores de resistividad de la roca fracturada pueden
ser más bajos debido a la infiltración de agua en esta zona.
Figura 4.17: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada del punto MT ALA3.
97
o Coihueco (COI 1-4)
Tabla 4.8: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Coihueco (WGS84 – 18S).
98
Las mediciones COI4 – COI3 permitieron genera un perfil con orientación O-E (Figura 4.19),
el cual presenta una primera capa superficial de unos 60 a 70 m de espesor con
resistividades medias-altas (tonalidades verdosas) asociados a los depósitos de la
Formación ¿Montaña/Malleco? que se compone por una mezcla de conglomerados,
conglomerados arenosos, areniscas, intercalaciones de limos y depósitos piroclásticos. Bajo
esta capa y hasta al menos 300 m de profundidad se identifica una unidad de menor
resistividad (tonalidad azul), la cual podría corresponder a condiciones de humedad y/o
saturación con un aumento en la proporción de material fino como limos y/o arcillas lo cual
estaría generando este nivel de mayor conductividad en la zona.
99
Figura 4.19: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT COI4 – COI3.
100
❖ Sector Centro
Tabla 4.9: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Viña Ribera (WGS84 –
18S).
101
El perfil representado en la Figura 4.21, con orientación NO-SE, se encuentra aledaño a la
cordillera de la costa y al igual que los modelos previos descritos en esta zona, indica una
primera capa conductiva con valores de resistividad menores a 50 Ωm (tonalidades lilas)
que alcanza los 10 m de espesor y estaría asociado a material disgregado que rellena el
valle con altos contenidos de arcillas y/o limos. Bajo esta unidad se aprecia un progresivo
aumento en los valores de resistividad, donde, las tonalidades azules a verdes indicarían el
paso a materiales más gruesos y/o con mayor grado de compactación.
102
Figura 4.21: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT VRC1 – VRC2.
103
o Bellavista (RC 1-3)
104
Hacia el este del perfil anterior se realizaron las mediciones MT RC1 – RC2 – RC3, con
orientación NE-SO, con las que se generó el perfil representado en la Figura 4.23. De
manera análoga al modelo anterior, se aprecia una primera capa conductiva con valores de
resistividad menores a 50 Ωm (tonalidades lilas) con un espesor mayor, que alcanza los 60
m aproximadamente, y que estaría asociado a material disgregado que rellena el valle con
altos contenidos de arcillas y/o limos. Bajo esta unidad se aprecia un progresivo aumento
en los valores de resistividad, donde, las tonalidades azules a verdes indicarían el paso a
materiales más gruesos y/o con mayor grado de compactación.
105
Figura 4.23: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT RC1 – RC2 –
RC3.
106
o Liucura (LIU 1-11)
Tabla 4.11: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Liucura (WGS84 – 18S).
107
El perfil representado en la Figura 4.25, se encuentra orientado SO-NE y cruza a los ríos
Itata y Diguillin en los tramos LIU11 – LIU8 y LIU8 – LIU6 respectivamente. De manera
general, el modelo presenta una primera capa de resistividades medias altas (tonalidades
verdes) seguidas de un progresivo aumento en las resistividades que indicarían la aparición
de roca en un estado variable de alteración, meteorización y/o fractuamiento.
El tramo entre LIU11 – LIU8 presenta un espesor de la primera capa en promedio de 200
m, asociado a material de los depósitos fluvio-aluviales que se encuentran rellenando los
cauces de los ríos que composicionalmente presentan en su mayoría granulometrías
gruesas como gravas y ripios. Bajo esta unidad el drástico incremento de los valores de
resistividad podría indicar la aparición del basamento en condiciones de alteración y
fracturamiento (tonalidades amarillas - naranjas) y se esperaría roca en estado fresco bajo
los 700 m aproximadamente.
Por otro lado, la sección LIU8 – LIU6 presenta un mayor espesor de la cubierta
sedimentaria, inclusive se detectan tramos de media-baja resistividad (tonalidades
celestes) que se pueden asociar a mayores contenidos de arenas, arcillas y/o limos en
comparación a la porción descrita anteriormente. El incremento de las resistividades se
aprecia cercano a los 500 m b.n.t. donde podría aparecer la roca en condiciones de
alteración y/o fracturamiento, que gradualmente cambiaría a roca inalterada a mayores
profundidades (tonalidades rojas).
108
Figura 4.25: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT LIU11 – LIU8 –
LIU6.
109
o Pinto (PIN 1-8)
Tabla 4.12: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Pinto (WGS84 – 18S).
110
El perfil representado en la Figura 4.27, se asemeja en gran medida a los perfiles de Cato
y Cachapoal, donde se tiene una primera capa superficial con espesor menor a 10 m y baja
resistividad, asociadas a material de relleno compuesto principalmente por arcillas y/o
limos, seguido de un aumento en los valores de resistividad (tonalidades verdes) hasta los
50 m b.n.t. aproximadamente, que correspondería a la Formación Montaña/Malleco?
mayoritariamente compuesta por bloques, gravas y arena. Bajo esta capa, aparecería la
Formación Mininco con un nivel superior de baja resistividad que alcanzaría los 120 m de
profundidad, seguido de un aumento en la resistividad asociado a un tramo con mayores
contenidos de materiales granulométricamente más gruesos hasta aproximadamente los
400 m.
111
Figura 4.27: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT PIN2 – PIN1.
112
o Cartago (CAR1)
Tabla 4.13: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Cartago (WGS84 – 18S).
El perfil representado en la Figura 4.29, identifica una potente capa de baja resistividad, la
cual probablemente presente altos contenidos de material fino como arcillas y/o limo que
113
se puede asociar a la Formación Montaña/Malleco? hasta los 600 m aproximadamente. Bajo
esta unidad se aprecia un cambio y aumento de los valores de resistividad (tonalidades
azules a verdes), lo cual es posible asociar con la aparición de la Formación Cura-Mallín
compuesta por una secuencia de rocas piroclásticas, sedimentitas clásticas, tobas y
brechas.
114
Figura 4.29: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de la estación de MT CAR1.
115
o Atacalco (ATA 1-8)
116
El perfil representado en la Figura 4.31, identifica una primera capa superficial con espesor
menor a 10 m y resistividad bajas, asociadas a material de relleno compuesto
principalmente por arcillas y/o limos, seguido de un aumento en los valores de resistividad
(tonalidades verdes) hasta los 40 m b.n.t. aproximadamente, que corresponderá a la
Formación Montaña/Malleco? mayoritariamente compuesta por bolones, gravas y arena.
Bajo esta capa, la baja de resistividad correspondería a la Formación Mininco de baja
resistividad (tonalidades moradas) que alcanzaría los 180 m de profundidad y que estaría
compuesta por altos contenidos de material fino como arcillas y/o limos.
117
Figura 4.31: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT ATA8 – ATA7.
118
o San Antonio (SAN 1-7)
Tabla 4.15: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de San Antonio (WGS84 –
18S).
119
El perfil representado en la Figura 4.33, presenta condiciones similares a los perfiles de
Pinto, donde se tiene una primera capa superficial con espesor menor a 10 m y bajas
resistividad bajas, asociadas a material de relleno compuesto principalmente por arcillas
y/o limos, seguido de un aumento en los valores de resistividad (tonalidades verdosas)
hasta aproximadamente los 50 m b.n.t., que corresponderá a la Formación
Montaña/Malleco? mayoritariamente compuesta por bolones, gravas y arena. Bajo esta
capa, aparecería la Formación Mininco con un estrato superior de baja resistividad que
alcanzaría los 150 m de profundidad, seguido de un leve aumento en la resistividad
asociado a un tramo con menor porcentaje de materiales finos hasta aproximadamente los
400 m.
120
Figura 4.33: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT SAN7 – SAN6.
121
o Trehualemu (TRE 1-7)
122
El perfil representado en la Figura 4.35, presenta una primera capa superficial con espesor
menor a 10 m y resistividad bajas, asociadas a material de relleno compuesto
principalmente por arcillas y/o limos, seguido de un aumento en los valores de resistividad
(tonalidades verdosas) hasta aproximadamente los 80 m b.n.t., que corresponderá a la
Formación Montaña/Malleco? mayoritariamente compuesta por bolones, gravas y arena.
Bajo esta capa, se detectaría la aparición de la Formación Mininco asociado a la baja de
resistividad (tonalidades azules a moradas) que alcanzaría como mínimo los 200 m de
profundidad.
123
Figura 4.35:Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT TRE3 – TRE4.
124
❖ Sector Sur
Tabla 4.17: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Yungay (WGS84 – 18S).
125
El perfil representado en la Figura 4.37, presenta una primera capa superficial con espesor
de 10 m y baja resistividad, asociadas a material de relleno compuesto principalmente por
arcillas y/o limos, seguido de un aumento en los valores de resistividad (tonalidades azules-
celestes) hasta aproximadamente los 30 m b.n.t., que podrían corresponder tanto a la
Formación Montaña/Malleco? como a la misma unidad de relleno, pero con un aumento en
la concentración de material grueso como gravas y arenas. Esta unidad podría encontrarse
en condiciones de saturación y/o humedad. Bajo esta capa, se detecta un aumento en los
valores de resistividad, que posiblemente indicarían un mayor grado de compactación de
los materiales o bien el paso a la Formación Cura-Mallín.
126
Figura 4.37: Modelo de resistividad eléctrica y sección interpretada de los puntos MT YUN1 – YUN2.
127
o Huepil (HUE 1-2)
Tabla 4.18: Ubicación de estaciones geofísicas MT realizadas en el sector de Huepil (WGS84 – 18S).
128
El perfil representado en la Figura 4.39, identifica una primera capa superficial con un
espesor cercano a 10 m y bajas resistividades, asociadas a material de relleno compuesto
principalmente por arcillas y/o limos, seguido de un aumento en los valores de resistividad
(tonalidades verdes) hasta los 40 m b.n.t. aproximadamente, que correspondería a la
Formación Montaña/Malleco? mayoritariamente compuesta por bloque, gravas y arena. En
la capa subyacente las resistividades aumentan (tonalidades amarillas), lo cual se asociaría
a materiales más compactos o a la aparición de la Formación Cura-Mallín compuesta por
una secuencia de rocas piroclásticas, sedimentitas clásticas, tobas y brechas.
129
Figura 4.39: Modelo de resistividad y secciones interpretadas de los puntos MT HUE1 – HUE2.
130
4.2. Transiente Electromagnético
Tabla 4.19: Ubicación de estaciones geofísicas TEM de mejor calidad para la interpretación geológica
y geofísica en la cuenca Itata (WGS84 – 18S).
131
en última instancia una bajada de resistividad que correspondería a la aparición de la
Formación Mininco con una composición predominante de materiales finos.
Tal como se describió en los perfiles MT de estas zonas, el espesor de esta capa puede
llegar a alcanzar más de 400 m, por lo que la medición TEM9 se realizó al oeste de la
localidad de Trapiche cercana a la Cordillera de la Costa. Los resultados de esta estación
muestran un alza en los valores de resistividad superando los 1.000 Ωm a una profundidad
de 60 m b.n.t. lo que posiblemente este indicando la aparición del basamento en condiciones
de variable meteorización, alteración y/o fracturamiento.
La Figura 4.42 presenta los modelos de inversión 1D obtenidos de las mediciones TEM57,
TEM60 y TEM20 realizados en la localidad de El Ala y hacia el sur de esta. Los tres modelos
muestran valores de resistividad medios-bajos en sus primeros metros que podrían
asociarse tanto a depósitos fluvio-aluviales como a la Formación Mininco en las zonas de
menor resistividad. Subyaciendo a esta unidad se aprecia un incremento en los valores de
resistividad que se puede atribuir a la aparición del basamento en condiciones variables de
alteración. Esto se correlaciona de buena forma con las mediciones MT desarrolladas en el
mismo sector y que también dan cuenta de esta alza de resistividad. La profundidad a la
cual se detecta el aumento de la resistividad es variable, observándose a 30, 50 y 70 m
aproximadamente.
132
Figura 4.40: Modelos de inversión 1D de las mediciones que se encuentran en el extremo este
cercanos a la Cordillera Principal
133
Figura 4.41: Izquierda: Modelos de inversión 1D de las mediciones que se encuentran Sur de
Maravilla y en Trapiche. Derecha: Modelo de inversión 1D al Oeste de Trapiche.
134
Figura 4.42: Modelos de inversión 1D de las mediciones que se encuentran en El Ala y al Sur de El
Ala.
Por último, las mediciones realizadas entre las ciudades de Bulnes y Cabrero corresponden
a TEM26-TEM29-TEM30-TEM35 y TEM34, las cuales se emplazan en dirección norte-sur
(Figura 4.43). Los modelos de inversión 1D de esta zona muestran de manera general una
capa de resistividad media a baja en sus primeros metros, que se asociaría a material que
rellena los valles con variables contenidos de material grueso como gravas y arenas. Al ir
aumentando la profundidad, los modelos muestran un progresivo descenso en los valores
de resistividad lo cual correspondería a la aparición de la Formación Mininco con elevados
contenidos de material fino como arcillas y/o limos. Esta unidad se extendería por más de
150 m de profundidad correlacionándose de buena forma con las captaciones profundas
analizadas en el sector.
135
Figura 4.43: Modelos de inversión 1D de las mediciones que se encuentran en la franja entre Bulnes
y Cabrero.
136
4.3. Gravimetría
Los puntos de control de cada uno de los modelos corresponden a información integrada
de mediciones realizadas en este estudio, estratigrafía de pozos e información de estudios
previos. El total de los puntos de control utilizados se presenta en la Figura 4.44.
La nomenclatura utilizada para los puntos de control obtenidos en este trabajo se detalla a
continuación:
• N = ND-0801-
• R = ND-0882-
• M = ND-1602-
• Q = ND-1601-
• W = ND-1603-
137
Los modelos presentados en la sección de resultados poseen la siguiente estructura:
138
Figura 4.44: Localización de puntos de control utilizados para modelamiento gravimétrico 2D, obtenidos de este estudio, capaciones subterráneas y estudios
previos. Fuente: Elaboración propia.
139
4.3.1. Perfiles E-W (L1-L7)
• Perfil L1
• Perfil L2
• Perfil L3
140
Figura 4.45: Modelamiento e integración de información de otras metodologías del perfil L1.
141
Figura 4.46: Modelamiento e integración de información de otras metodologías de perfil L2.
142
Figura 4.47: Modelamiento e integración de información de otras metodologías de perfil L3.
143
• Perfil L4
• Perfil L5
• Perfil L6
La sección L6 (Figura 4.50) corresponde a un perfil de unos 75 km que cruza las comunas
de Quillón y Pemuco, atravesando las localidades de General Cruz, San Pedro, Pemuco y
Cartago. La cuenca posee un espesor máximo de 1.470 m, el que se encontraría en las
cercanías de Cartago. El espesor medio de la sección es de 625 m.
144
Figura 4.48: Modelamiento e integración de información de otras metodologías de perfil L4.
145
Figura 4.49: Modelamiento e integración de información de otras metodologías de perfil L5.
146
Figura 4.50: Modelamiento e integración de información de otras metodologías de perfil L6.
147
• Perfil L7
La sección L7 (Figura 4.51) corresponde a un perfil de unos 75 km que cruza las comunas
de Yumbel, Cabrero y Yungay, atravesando las localidades de Cabrero, Colicheo, Yungay.
La cuenca posee un espesor máximo de 800 m, el que se encontraría 10 km al oeste de
Yungay. El espesor medio de la sección es de 290 m.
El campo regional de este perfil se encontró mal definido en los sectores de Cabrero y Los
Mayos (Yungay), debido a la inexistencia de información de profundidad de basamento. Por
esto, se consideraron espesores estimados de 80 y 160 m respectivamente, teniendo en
consideración los espesores mínimos definidos por los expedientes de captaciones
circundantes.
148
Figura 4.51: Modelamiento e integración de información de otras metodologías de perfil L7.
149
4.3.2. Perfiles auxiliares (D1-D14)
• Perfil D1
La sección D1 (Figura 4.52) corresponde a un perfil de unos 50 km que cruza las comunas
de San Carlos y Coihueco, atravesando las localidades de Quinquegua, Quillahue, Mutupin,
Las Arboledas y Cato. La cuenca posee un espesor máximo de 1.660 m, el que se
encontraría en las proximidades de Quinquehua. El espesor medio de la sección es de 900
m.
• Perfil D2
La sección D2 (Figura 4.53) corresponde a un perfil de unos 85 km que cruza las comunas
de San Carlos, San Nicolás, Chillán, Chillán Viejo, Bulnes, San Ignacio, El Carmen, Pemuco
y Yungay, atravesando las localidades de Ranchillos (San Carlos), El Manzano, Chillán,
Chillán Viejo, Montenegro, Canterrana, La Hermita y Ranchillos (Yungay). La cuenca posee
un espesor máximo de 1.275 m, el que se encontraría en las proximidades de Ranchillos
(San Carlos). El espesor medio de la sección es de 840 m.
• Perfil D3
La sección D3 (Figura 4.54) corresponde a un perfil de unos 75 km que cruza las comunas
de San Carlos, Chillán, Chillán Viejo, San Ignacio, El Carmen y Pemuco, atravesando las
localidades de Quinquegua, Ninquihue, Chillán, San Ignacio, El Carmen y Santa Filomena.
La cuenca posee un espesor máximo de 1.790 m, el que se encontraría al norte de
Ninquihue. El espesor medio de la sección es de 1.030 m.
• Perfil D4
La sección D4 (Figura 4.55) corresponde a un perfil de unos 50 km que cruza las comunas
de San Carlos, Chillán, Coihueco, Pinto y San Ignacio, atravesando las localidades de
Mutupin, Monte Blanco, Talquipen, Las Mariposas, San Ignacio. La cuenca posee un espesor
máximo de 1.525 m, el que se encontraría al 8 km al norte de Talquipen. El espesor medio
de la sección es de 1.045 m.
150
Figura 4.52: Modelamiento e integración de información de otras metodologías de perfil D1.
151
Figura 4.53: Modelamiento e integración de información de otras metodologías de perfil D2.
152
Figura 4.54: Modelamiento e integración de información de otras metodologías de perfil D3.
153
Figura 4.55: Modelamiento e integración de información de otras metodologías de perfil D4.
154
• Perfil D5
La sección D5 (Figura 4.56) corresponde a un perfil de unos 75 km que cruza las comunas
de San Carlos, Coihueco, Pinto, San Ignacio, El Carmen, Pemuco y Yungay, atravesando
las localidades de Cachapoal, Cato, Niblinto, Coleal, Ciruelito, La Capilla, Camarico y El
Saltillo. La cuenca posee un espesor máximo de 1.035 m, el que se encontraría en Cato. El
espesor medio de la sección es de 485 m.
155
Figura 4.56: Modelamiento e integración de información de otras metodologías de perfil D5.
156
4.3.3. Mapas de espesor sedimentario y profundidad de basamento
En estas es posible notar la existencia de un depocentro ubicado entre las ciudades de San
Carlos y Coihueco, que posee una orientación NNO-SSE. El depocentro principal, ubicado
al oeste de San Carlos, en la localidad de Santa Margarita alcanzaría espesores superiores
a 1.600 m. Este se extiende hacia el SE, encontrándose un espesor sedimentario >1.400
m al norte de Talquipen. Además, al sur de San Carlos se observa un depocentro secundario
entre las localidades de Chillán y Quiriquina que posee espesores sedimentarios por sobre
los 1.000 m.
Por otra parte, se observa una disminución del espesor sedimentario de la cuenca de Itata
hacia el sur, resolviéndose espesores sedimentarios de 800 m en las proximidades de
Pemuco.
Una diferencia importante con respecto a todos los estudios anteriores es que en este
trabajo se observa la existencia de un depocentro aislado en el sector de Cartago que
alcanza espesores sedimentarios por sobre los 1.000 m. Esta estructura es observada
claramente en la anomalía de Bouguer completa, pero debido a su posición distal con
respecto al Valle Longitudinal, es posible que la densidad utilizada para la modelación no
sea representativa de los sedimentos existentes en la zona, lo que podría resultar en una
diferencia en el espesor sedimentario modelado.
Es importante destacar que las secciones presentadas en este apartado corresponden a los
modelos obtenidos a partir de la utilización de parámetros de modelamiento específicos
detallados en la sección 3.1.3. Si bien, es probable que los valores efectivos de espesor
sedimentario y profundidad de basamento puedan variar en función de la elección de los
parámetros de modelación, los rasgos generales de la geometría de la cuenca, que se
derivan de la geometría de los datos gravimétricos obtenidos, se mantienen. Esto es, la
existencia de una cuenca sedimentaría con sus mayores profundidades en el sector norte
de la zona de estudio, y que se vuelve más somera hacia el sur.
157
Figura 4.57: Visión general en planta del espesor sedimentario.
158
Figura 4.58: Visión general en planta de la profundidad del basamento.
159
4.3.4. Comparación con estudios anteriores
• DGA (2011)
El estudio efectuado por DGA (2011) obtiene una geometría de cuenca (Figura 4.59) similar
a la resuelta por este estudio. Las mayores diferencias serían que el depocentro ubicado en
Coihueco no tiene continuidad hacia el depocentro de San Carlos, y la anomalía resuelta en
este estudio se extiende aún más hacia el oeste, llegando a la localidad de Las Mariposas.
Además, al sur de Pemuco reporta el inicio de una profundización de la cuenca que en el
presente estudio no se logra observar.
• DGA (2012)
El estudio DGA (2012) se enfoca en la zona sur de la cuenca de Itata (Figura 4.60), además
de incluir la región del Biobío. En este trabajo se observa la existencia de un depocentro al
oeste de la ciudad de San Ignacio que coincide con la estructura propuesta en el presente
estudio, aunque la profundidad sugerida es mayor (entre 1.200 y 1.500 m) a la resuelta
en la presente publicación (entre 1000 y 1.200). Por otro lado, en la zona de Pemuco DGA
(2012) exhibe un espesor máximo de 300 m, manifestándose como la región de menor
espesor sedimentario dentro de la Depresión Intermedia al sur de la Cuenca de Itata. Esta
estructura difiere con la obtenida en el presente trabajo, donde en Pemuco se resuelven
espesores sedimentarios de entre 800 y 1.000 m. Finalmente, DGA (2012) es capaz de
generar una estimación de profundidades en el área de Tucapel, zona que no pudo ser
cubierta por el presente trabajo. En esta zona, exhiben la presencia de un depocentro
aislado ente las localidades de Huepil y Tucapel, el cual tendría espesores sedimentarios
por sobre los 1.400 m en Huepil. Esto dista fuertemente de los 400 a 600 m obtenidos para
la misma localidad en este estudio.
160
Figura 4.59: Visión en planta de espesor sedimentario estimado por DGA (2011). Imagen de elaboración propia, a partir
de datos de DGA (2011).
161
Figura 4.60: Visión en planta de espesor sedimentario estimado por DGA (2012). Imagen modificada de DGA (2012).
162
• DGA (2015)
El mapa de espesores sedimentarios expuestos por el estudio DGA (2015) (Figura 4.61)
presenta una alta rugosidad que no se condice con las tendencias exhibidas por el mapa de
anomalía de Bouguer completa residual (Figura 4.62) obtenido en el mismo estudio. Un
ejemplo de esto es que la anomalía de Bouguer residual presenta anomalías negativas al
norte de la zona de estudio, sin embargo, esto no se condice con el modelo de espesor
sedimentario obtenido en el sector. Por esta razón este estudio no será considerado en el
análisis efectuado en este trabajo.
163
Figura 4.61: Modelo de inversión de relleno sedimentario obtenido por DGA (2015). Imagen obtenida directamente de DGA (2015).
164
Figura 4.62: Anomalía de Bouguer completa residual obtenida por DGA (2015). Obtenida directamente de DGA (2015).
165
• Aguirre et al., 2022
Por otro lado, Aguirre et al. (2022) determina la existencia un depocentro más prominente
desde Chillán hacia el sur (Figura 4.63), que alcanza espesores sobre los 1.700 m y que no
se encontraría conectado hacia el norte con el depocentro ubicado en la ciudad de San
Carlos. Además, el depocentro de Coihueco se encuentra ligeramente más al sur,
ubicándose sobre la localidad de Talquipen.
En general, los resultados obtenidos en este trabajo se correlacionan de buena manera con
las profundidades y formas presentadas por Aguirre et al. (2022). Además, dada la cantidad
de mediciones realizadas ha permitido obtener un mapa de mejor resolución y mayor
extensión de la forma de la cuenca.
166
Figura 4.63: Modelo de profundidad del basamento estimado por Aguirre et al., 2022. Imagen obtenida directamente de Aguirre et al., 2022.
167
• Análisis conjunto de DGA (2011), DGA (2012) y el presente estudio
168
Figura 4.64: Anomalía de Bouguer Completa residual de la base de datos gravimétrica conjunta del
presente trabajo, DGA (2011) y DGA (2012). Círculos negros: presente estudio; Triángulos blancos:
DGA (2011); Triángulos azules: DGA (2012).
169
5. CONCLUSIONES Y RECOMENDACIONES
170
− En base a la información de espesor sedimentario obtenida a partir de los modelos
de este trabajo y la información expuesta por estudios anteriores, se recomienda
realizar campañas de medición gravimétrica que se extiendan hacia el sur de la zona
de estudio, abarcando las localidades de Tucapel y Cholguán, con la finalidad de
definir de mejor manera el inicio de la profundización de la cuenca hacia el sur
observada por DGA (2011) y DGA (2012). Por otra parte, se recomienda extender
el perfil gravimétrico D12 entre las localidades de Culenar y San Carlos, para definir
de mejor manera la geometría del depocentro en esa zona.
− Considerando la existencia de diversos estudios independientes a la fecha en la
cuenca de Itata, se recomienda a futuro realizar un reprocesamiento de todos los
datos existentes, que permita unir todas las bases de datos y hacer una modelación
conjunta que logre integrar la información en un solo modelo regional. Esto teniendo
en cuanta las limitaciones técnicas y supuestos efectuados durante el desarrollo de
cada uno de los trabajos realizados previamente. Para conseguir mejores resultados,
también se recomienda en esta fase, realizar mediciones adicionales que permitan
anclar y unificar las distintas bases de datos. Además, se sugiere la realización de
una inversión gravimétrica tridimensional que resuelva de mejor manera tanto la
geometría de la cuenca como la de estructuras más profundas.
− Adicionalmente, y ya que los modelos de espesor sedimentarios obtenidos a partir
de una modelación 2D pueden variar en función de la elección de los parámetros de
modelación, (contraste de densidad entre basamento y sedimento escogido), se
recomienda realizar una campaña de sondajes con una distribución que sea capaz
de muestrear efectivamente las variaciones latitudinales y longitudinales de las
densidades de los rellenos sedimentarios de la cuenca, para precisar los parámetros
de modelación elegidos en cada sector.
- Para futuros estudios geofísicos a realizar en la cuenca Itata, se recomienda realizar
mayor densidad de mediciones Magnetotelúricas (MT) al sureste del sector El Ala,
con el fin de detectar la profundización del basamento hacia el valle. Además, para
complementar los sectores del valle donde la cantidad de información geofísica es
mínima, se recomienda realizar mediciones Magnetotelúricas (MT) de larga duración
(>24 hrs) en los sectores entre Pemuco y Yungay (donde se debe considerar pedir
permisos forestales), al oeste de Cartago (donde se detectó un depocentro en este
estudio), en el sector de La Hermita y al oeste de la localidad de Coihueco. Esto,
con el fin de obtener información de calidad dentro de los primeros 5 km de
profundidad.
171
- En base a los modelos gravimétricos obtenidos y las faltas de puntos de control en
algunos sectores para definir de buena forma el campo regional, se recomienda
realizar estudios geofísicos a futuro que permitan definir la profundidad de
basamento en sectores específicos como Santa Clara (perfil L4), General Cruz (perfil
L5), Cabrero (perfil L7) y Los Mayos (perfil L7), para constreñir de mejor manera la
modelación de los perfiles involucrados. Considerando que estas zonas poseen alto
nivel de ruido electromagnético, una alternativa a los métodos EM es la realización
de estudios sísmicos.
- Por otra parte, considerando el depocentro observado en este estudio en el sector
de Cartago, que no se había observado previamente en estudios anteriores, se
recomienda la medición de estaciones MT de banda ancha sobre la zona profunda
del depocentro para constreñir de mejor manera la profundidad de esta subcuenca.
- Finalmente, también se recomienda complementar los resultados obtenidos por los
modelos gravimétricos en la zona central de la cuenca, con estaciones de
magnetotelúrica banda ancha, que permitan observar la profundidad de basamento
en base a otras metodologías.
172
6. REFERENCIAS
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