Sanando mis heridas de infancia
Sanando mis heridas de infancia
Sanando mis heridas de infancia
CONCLUSIONES
EJERCICIOS DE AUTO-REFLEXIÓN
1. Hoy me perdono.
2. Carta a mi niño/niña interior.
3. Carta a mi adulto.
4. Integrando mi ser.
INTRODUCCIÓN
c
onocer nuestro pasado, nos permite aceptar quienes somos en realidad, para
seguir haciendo lo que nos suma y tomando lo que nos resta como oportunidad
de transformación.
Por el contrario, un niño o niña que se quedó con heridas abiertas, tendrá dificulta-
des para hacerse cargo de su propia vida, pues la idea constante de que alguien le
ha causado daño, se impregna como una barrera que no le permitirá avanzar.
World Vision 7.
construcción de una estructura psíquica des- frente a cada tropiezo, porque aún cuando
organizada, la misma que se verá reflejada en existe la creencia de tener todo resuelto en
una adultez con carencias emocionales mar- la adultez, la verdad es que las heridas emo-
cadas. cionales de la primera infancia que quedan sin
cerrar, se muestran al exterior reclamando
Entonces, qué tanto se necesita hacer o dejar
justicia y sostenimiento, en la etapa adulta.
de hacer para que los hijos e hijas realmente
alcancen “todo lo mejor” de la vida. La res- En ese sentido, la única manera de generar un
puesta radica esencialmente en el actuar de vínculo con tus hijos e hijas, desde el respeto,
los padres y madres, siendo los primeros pro- el amor y la ternura, es sanando tus propias
tagonistas en sanar su interior, perdonando a heridas de infancia.
sus propios padres y madres por cómo les
A continuación, se detallan algunos concep-
criaron, por su presencia o su ausencia, y por
tos sobre el proceso de sanación interna.
otro lado, también un actuar introspectivo,
perdonándose a sí mismos, por juzgarse
World Vision 9.
nas de su entorno. Los dos ejemplos previamente detallados,
Por el contrario, una madre o un padre que hacen mención sólo a una etapa de desarro-
piensa que es mejor dejar llorar a su bebé llo, pero si a eso sumamos que vivimos en una
para que “aprenda a ser autónomo” o para sociedad donde a los niños y niñas se les
que no se “malacostumbre a los brazos”, no niega casi todo con frases como: “No toques
sólo está ignorando el sentir del bebé, sino eso”, “No te sientes así”, “No corras”, “No
que éste a su vez va interiorizando el mensaje comas con las manos”, “No llores”... No, no,
que el mundo es un lugar amenazante, sin- no. Los niños y niñas, van normalizando la
tiendo que está en constante peligro, pues idea de que todo lo que hacen está “mal”, co-
siente que está solo, sin alguien que le sosten- mienzan a conocer lo que es el miedo, la
ga cuando lo necesita. Si ese bebé sigue que- culpa, la vergüenza, el dolor.Y así van avanzan-
dándose sin contención en distintos momen- do en la vida, con esas emociones incorpora-
tos de su vida, se convertirá probablemente das.
en un adulto que irá por la vida con miedo, in- Entonces, a modo de precisión, ¿quiere decir
seguro de sí mismo, buscando vincularse con que cada adulto se comporta de acuerdo a
personas que le proporcionen esa seguridad sus necesidades cubiertas o no cubiertas du-
que le hace falta en su estructura. rante sus primeros años de vida y al significa-
do que otorga a cada experiencia vivida? Sí.
Cada uno de nosotros tenemos una estruc-
tura basada en emociones que se han ido ges-
tando desde nuestras edades tempranas y las
que contribuyen a la idea principal que confi-
guramos sobre determinadas situaciones. Por
tanto, a mayores necesidades básicas no cu-
biertas (a lo largo de nuestra vida), más blo-
queos tendremos para actuar de manera au-
téntica, en nuestra cotidianidad.
Ejemplo:
Hola “pequeña Nelly”
Me alegra saber siempre de ti. Eres una niña amorosa y creativa.
Me importas mucho, valoro tu existencia y valentía. Quiero que
sepas que estaré siempre a tu lado para guiarte y acompañarte
en tu crecimiento, sosteniendo tu mano las veces que lo necesites.
Te amo sin condiciones.
Atte.- “Nelly grande”
Ahora lee en voz alta la carta elaborada, con el permiso de recibir cada emoción que surja
en ese momento. Es decir, si al leer sientes tristeza y deseos de llorar, ¡házlo! sin juicio.
Ejemplo:
Hola “Nelly grande”
Quiero que siempre te acuerdes de mi, que me sostengas firmemente
cuando sienta caer y me acompañes cuando no encuentre una salida.
Quiero también que me dediques tiempo y no me juzgues cuando lloro.
¡Yo también te amo!
Atte.- “La pequeña Nelly”
Ahora lee en voz alta la carta elaborada, nuevamente con el permiso de sentir y transitar
en cada emoción que aparezca.