8 formas de

POTENCIAR
TU LIDERAZGO
GUÍA PRÁCTICA PARA MUJERES EMPRESARIAS

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GUÍA PRÁTICA PARA MUJERES EMPRESARIAS

A menudo pensamos que los grandes líderes nacen con habilidades

excepcionales, pero la verdad es otra: el liderazgo se construye. No importa en
qué parte de tu camino profesional estés ni cuáles son tus habilidades actuales,
podés convertirte en una líder inspiradora y efectiva si te comprometés con tu
propio crecimiento.

En esta guía profundizamos en ocho pasos que desde Mesa Redonda

consideramos fundamentales para desarrollar tu liderazgo.

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1. Tomá la iniciativa
El liderazgo no se trata de esperar a que las circunstancias sean perfectas o a que
otros nos den permiso para actuar. Se trata de identificar una oportunidad o un
desafío y lanzarse a buscar soluciones. En el mundo empresarial, muchas veces las
decisiones rápidas pueden marcar la diferencia entre aprovechar una oportunidad o
dejarla pasar. Sin embargo, tomar la iniciativa no significa ser impulsiva, sino actuar
con una visión clara y el coraje para hacer lo necesario.

Consejo: Cuando notes un problema o área de mejora en tu negocio, tomá el control y

liderá la búsqueda de una solución. Empezá con pequeños pasos: identificá algo que
siempre hayas querido mejorar o cambiar y actuá hoy mismo.

Ejercicio práctico:
Establecé una "sesión de ideas" semanal con vos misma o con tu equipo donde
identifiques mejoras a implementar en algún proceso, producto, o servicio. A partir de
ello, tomá la iniciativa de poner en práctica una pequeña acción para mejorar ese
aspecto. Llevá un registro de los resultados para evaluar el impacto y ajustar según sea
necesario.

2. Escuchá con empatía

A menudo pensamos que escuchar es solo una parte del proceso de comunicación,
pero en realidad, es el fundamento de una buena relación profesional. La empatía
permite entender no solo lo que la otra persona está diciendo, sino también lo que
está sintiendo. Al escuchar con empatía, creamos un entorno de confianza donde las
personas se sienten cómodas compartiendo sus ideas y emociones. En un equipo, esto
es vital para fomentar un ambiente colaborativo y productivo.

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Consejo: Dedicá tiempo a escuchar sin juzgar o apresurarte a dar soluciones. Como líder,
tu papel no siempre es resolver los problemas de inmediato, sino comprender plenamente
las preocupaciones y puntos de vista de los demás. Esta comprensión te permitirá tomar
decisiones más informadas y ganar la confianza de quienes te rodean.

Ejercicio práctico:
Esta semana, programá una reunión individual con alguien de tu equipo o red
profesional. Durante la conversación, practicá la "escucha activa empática". Dedicá los
primeros 10 minutos solo a escuchar, sin interrumpir ni ofrecer soluciones. Hacé
preguntas abiertas como:
¿Cómo te sentís con esta situación?
¿Qué es lo que más te preocupa en este momento? Al final de la conversación,
hacé un resumen de lo que entendiste para asegurarte de que internalizaste tanto
el contenido como las emociones detrás de sus palabras.

3. Construí confianza
La confianza es el fundamento de cualquier relación sólida, especialmente en el
liderazgo. Para una empresaria líder, construir confianza con su equipo, clientes y
socios es clave para el éxito a largo plazo. La confianza no sólo se gana con acciones
grandes y visibles, sino también con consistencia en los pequeños detalles: cumplir lo
prometido, ser honesta y transparente, y estar presente para los demás. Liderar desde
la confianza significa crear un entorno donde las personas se sientan seguras de
seguirte y aportar lo mejor de sí mismas.

Consejo: Dedicá tiempo a escuchar sin juzgar o apresurarte a dar soluciones. Como líder,
tu papel no siempre es resolver los problemas de inmediato, sino comprender plenamente
las preocupaciones y puntos de vista de los demás. Esta comprensión te permitirá tomar
decisiones más informadas y ganar la confianza de quienes te rodean.

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Ejercicio práctico:
Hacé una autoevaluación honesta de tu liderazgo y reflexioná sobre cómo te perciben
los demás. Pensá en un proyecto o situación reciente en la que sentís que podrías
haber sido más transparente o confiable. A continuación, realizá estos pasos prácticos:

Identificá un área clave donde podrías fortalecer la confianza (delegación de

tareas, claridad de tus expectativas, o en la comunicación abierta con tu equipo)

Iniciá una conversación abierta con tu equipo o clientes clave: Preguntales

directamente cómo se sienten respecto a tu nivel de transparencia y coherencia.
Pedí retroalimentación.

1. Acción de mejora: A partir de la retroalimentación, establecé un plan de acción

concreto. Por ejemplo, si recibís comentarios de que la delegación no es clara, creá
un sistema más transparente y efectivo de asignación de responsabilidades. Si el
problema es la falta de comunicación abierta, agendá reuniones más frecuentes
para alinear expectativas.

4. Mostrá respeto
El respeto en el liderazgo implica mucho más que cortesía: se trata de valorar
genuinamente las opiniones, ideas y experiencias de las personas con las que trabajás.
Crear un ambiente de respeto no solo fortalece el trabajo en equipo, sino que fomenta
la creatividad y la confianza. Cuando respetás a los demás, abrís el espacio para que
todos se sientan valorados y motivados a contribuir con su mejor esfuerzo.

Consejo: El respeto mutuo debe ser evidente en todas las interacciones diarias. Asegurate
de que todas las personas en tu entorno, sin importar su cargo o función, se sientan
escuchadas y reconocidas. Fomentar una cultura de respeto genera un ambiente de trabajo
inclusivo y colaborativo.

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Ejercicio práctico:
Organizá una actividad con tu equipo donde cada persona comparta una idea o
solución sobre un desafío actual del negocio. Antes de que se emitan juicios o
comentarios, cada participante deberá explicar su punto de vista sin interrupciones.
Luego, en lugar de debatir las ideas de inmediato, el resto del grupo debe hacer
preguntas para comprender mejor la perspectiva compartida. Solo al final se puede
abrir el espacio para comentarios. Esto fomenta un ambiente donde la comprensión y
el respeto preceden a la evaluación crítica.

5. Sé proactiva
El liderazgo no se trata solo de resolver problemas cuando ocurren, sino de anticiparse
a ellos. Ser proactiva te permite estar preparada para los desafíos antes de que se
conviertan en crisis. Esto no solo te ahorra tiempo y energía, sino que también te
permite guiar a tu equipo con una visión clara y tranquila, incluso en momentos de
incertidumbre.

Consejo: Tomate el tiempo para planificar, prever y prepararte para posibles

eventualidades. Esto te permitirá actuar de manera estratégica en lugar de reaccionar
impulsivamente. Tener un plan de contingencia te da más control sobre el rumbo de tu
negocio.

Ejercicio práctico:
Hacé una lista de tres posibles desafíos que podrían surgir en los próximos meses en
tu negocio. Definí una solución preventiva para cada uno y asegurate de estar
preparada si alguno de estos escenarios llega a materializarse.

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6. Da retroalimentación honesta con amabilidad

La retroalimentación es crucial para el crecimiento personal y profesional, tanto para

vos como para los miembros de tu equipo. Sin embargo, la forma en que das feedback
es clave. La retroalimentación honesta, cuando se da con amabilidad, no solo ayuda a
mejorar el desempeño, sino que también fortalece la relación y genera un ambiente de
respeto mutuo. Ser clara y específica es importante, pero también lo es ser empática y
considerada.

Consejo: No tengas miedo de dar retroalimentación, pero asegurate de hacerlo con

empatía. Reconocé los logros antes de abordar los aspectos que deben mejorarse. Así, la
persona a la que le das feedback se sentirá apoyada en su crecimiento, en lugar de
criticada.

Ejercicio práctico:
Da retroalimentación honesta y amable a un miembro de tu equipo esta semana. Usá
el método sándwich: Comentario positivo + Crítica constructiva + Comentario
positivo para equilibrar el elogio con la crítica constructiva. Observá cómo la otra
persona responde y cómo mejora su desempeño.

7. Empoderá a los demás

El verdadero liderazgo consiste en dejar de hacer todo por vos misma y dar a los
demás la oportunidad de desarrollarse y brillar. Al empoderar a las personas de tu
equipo, aligeras tu propia carga y permitís que otros crezcan y tomen decisiones
importantes. La clave es delegar con confianza, asegurándote de que tienen las
herramientas necesarias para tener éxito.

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Consejo: Aprendé a delegar con propósito. Confíá en el potencial de las personas a las que
les asignás tareas importantes. Empoderar significa brindar autonomía y apoyo, lo que
permite a los demás desarrollar su capacidad de liderazgo.

Ejercicio práctico:
Identificá una tarea o proyecto importante que normalmente asumirías vos. Delegá
esta responsabilidad a alguien de tu equipo, dándole libertad para tomar decisiones.
Observá cómo esa persona crece con la oportunidad y cómo podés ofrecerle el apoyo
que necesita para tener éxito.

8. Sé la líder que te gustaría ser y ¡nunca dejes de

aprender!
El liderazgo se trata de ser un modelo a seguir y un aprendiz constante. Los mejores
líderes son aquellos que demuestran integridad, humildad y empatía en sus acciones
diarias, y que además reconocen que no lo saben todo.

El aprendizaje es un proceso continuo para el crecimiento personal y profesional, por

eso cuando un líder se compromete a formarse para crecer personal y
profesionalmente, también inspira a su equipo a hacer lo mismo.

Consejo:Identificá las características de los líderes que admirás y reflexioná sobre cómo
podés incorporar esas cualidades en tu propio estilo de liderazgo. Recordá que la
autenticidad es clave: no se trata de imitar a otros, sino de encontrar tu propio estilo
basado en los principios que considerás importantes

Ejercicio práctico:
1. Lista de líderes: Elegí tres líderes que admires y anotá las cualidades que te inspiran de
ellos.
2. Compromiso de aprendizaje: Establecé un objetivo anual y mensual para aprender algo
nuevo, ya sea a través de grupos de pares, libros, cursos, podcasts, etc.
3. Solicitá retroalimentación: Preguntá a tu equipo qué aspectos de tu liderazgo valoran y
cuáles creen que podés mejorar.

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