JONAS
JONAS
JONAS
“Vino palabra de Jehová por segunda vez a Jonás, diciendo: Levántate y ve a Nínive,
aquella gran ciudad, y proclama en ella el mensaje que yo te diré.
Y se levantó Jonás, y fue a Nínive conforme a la palabra de Jehová.
Y era Nínive ciudad grande en extremo, de tres días de camino” (Jonás 3:1-3).
INTRODUCCIÓN
Para una persona que ha aprendido a tener amor cristiano hacia todos los hombres, la
actitud de Jonás parece casi increíble.
Pero para un israelita que había aprendido que él pertenecía al pueblo escogido y que
los gentiles eran corruptos, y por lo tanto no eran aceptables a Dios, la actitud de Jonás
era más comprensible. Aunque nos sorprenda porque esperamos una actitud diferente
de los profetas del señor, la reacción de Jonás fue muy humana. ¿Fue necesario estar
en el vientre del pez tres días y tres noches para que ciento veinte mil personas se
arrepintieran? ¿Quiere decir que Dios castiga cuando no cumplimos lo que nos pide?
Dios tiene planes maravillosos para cada uno de sus hijos, en el plan de Dios nunca
estuvo que Jonás fuera tragado por un pez y que estuviera en su interior durante tres
días y tres noches. El Plan de Dios para Jonás fue hacer de él un gran mensajero, hacer
de Jonás un canal de bendición. En el plan de Dios es que tú y yo seamos canales de
bendición para las personas que nos rodean con los dones que Él nos dio. Si eres un
ingeniero, un médico, un profesor, un comerciante, un estudiante, etc. En el plan de
Dios está que seas cabeza y no cola (Deuteronomio 28:13).
La Biblia afirma y dice que todo lugar que pisará la planta de tu pie será tuyo
(Deuteronomio 11:24).
Aplicación: ¿Qué planes tienes? ¿Tienes algún sueño frustrado? ¿Trabajas duro,
estudias hasta altas horas de la noche y no ves resultados? Hoy es el momento de
reflexionar y darle una oportunidad a los planes de Dios; porque, sus planes siempre
son mejores que los nuestros.
II. LOS PLANES DE DIOS PARA JONÁS (1:2)
El período en que Jonás profetizó fue de gran angustia nacional (2 Reyes 14: 26-27).
Todos los reyes que ocuparon el trono de Israel hicieron el mal a la vista del Señor, y se
cernía el castigo nacional. Mediante Jonás el Señor predijo una recuperación del
poderío nacional. Parece que el alivio que siguió tuvo el propósito de ser un aliciente
para que la nación se volviera a Dios. La prosperidad fue una demostración de lo que la
nación podría alcanzar bajo la bendición del Dios del cielo.
Sin embargo, a pesar de la bendición divina, Jeroboam “hizo lo malo ante los ojos de
Jehová” (2 Reyes 14: 24), como lo hicieron sus sucesores. En medio de toda esta
apostasía nacional Jonás es llamado para ir a Nínive como un evangelista, como un
profeta para pedir que el pueblo se arrepienta y así no reciba las consecuencias de su
mal proceder.
Aplicación:
Hoy todos fuimos llamados para ir a Nínive, en Nínive están nuestros parientes,
amigos, vecinos, colegas de trabajo, compañeros de estudio, etc. Hoy como en los
tiempos de Jonás todo el mundo está en apostasía, para la gente de éste tiempo, hacer
lo incorrecto es normal; porque, todo el mundo lo hace, es en medio de éste tipo de
conceptos y filosofías humanas que el Señor nos llama para ir y amonestar a que si no
se arrepienten de sus malos caminos se les viene un futuro nefasto. Hoy somos
llamados para ser bendición para nuestros prójimos con lo que sabemos hacer: con
nuestro oficio, con nuestra profesión, con lo que el Señor nos dio.
El profeta alberga dudas y está perplejo en cuanto al mandato que Dios le ha dado de
que fuera a Nínive. El mero pensamiento de dirigirse a esa gran metrópoli, las
dificultades y aparentes tropiezos de la tarea, hicieron que rehuyera llevar a cabo la
misión divina y que pusiera en duda la sabiduría de esa empresa.
Por no haber estado a la altura de la fe vigorosa que lo habría llevado a darse cuenta
de que juntamente con el mandato divino venía el poder celestial para cumplirlo, Jonás
se sumergió en el desaliento, el temor y la desesperación (PR 199).
Aplicación:
24
asegura la salvación.
Aplicación:
Jonás tuvo que pasar tres días y tres noches en el vientre del
al plan de Dios.
CONCLUSIÓN
Llamado:
abismo, así como Jonás en el vientre del pez, haz como Jonás
(Isaías 1:18).