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Principio del Código Procesal Penal vistos en clase explicados por el Abogado.

Oralidad

Principio de la Oralidad busca que durante el proceso penal exista una mayor participación
verbal de las partes intervinientes, buscando la celeridad del mismo, el principio de oralidad
busca una mayor intervención e inmersión del parte en el proceso respectivo a la comisión de
un delito, de la cual el juzgador podrá poseer una mejor comprensión de lo aportado por las
partes a lo largo de sus ponencias introductorias, alegatos probatorios y conclusiones finales.
Cabe aclarar que no busca eliminar o limitar la prueba documental referente a escritos físicos,
si no tener una mejor comprensión de las esencias de estos, para una mejor comprensión del
juzgador.

Publicidad

El principio de publicidad define que toda audiencia o proceso penal sea público para cualquier
persona de estrato social, a fin de garantizar a los miembros de la sociedad la transparencia
correspondiente de lo celebrado en las audiencias afines a la comisión de un delito, busca que
los miembros de una sociedad conozcan más de lo que la función judicial realiza en favor de
una sociedad, con el objetivo de garantizar el bienestar social de la impartición de justicia
apegada a derecho y a la constitución de la república.

Publicidad Interna

Este principio consiste en el derecho que poseen las partes intervinientes en el proceso sobre
la comisión de un delito a estar presentes durante la evacuación, o desarrollo de un proceso
penal en concreto, a este punto debe de estar presente el ente acusador como lo es el
ministerio público, la defensa, el imputado y la víctima, dicho principio se realiza para que
todas las partes posean conocimiento de las etapas, prueban y eventualidades que conllevan y
culminan en una sentencia.

Publicidad externa

Este principio consiste en el derecho que poseen los miembros de una sociedad a conocer de
oficio o a solicitud de partes los diversos procesos que se desarrollen por un órgano judicial de
su localidad o en general, consistente en dar a conocer a los ciudadanos la correcta aplicación
de las leyes y la constitución.

Contradicción

Consistente en que las partes intervinientes en un proceso poseen el derecho a ser escuchadas
y a plantear las alegaciones, criterios, pruebas y demás preceptos que consideren pertinentes
para desvirtuar los enunciados de su contraparte, ante una tesis que seria la acusación, existe
una antítesis que es la defensa, de la cual surge una síntesis que culmina con la sentencia de
un juez competente.

Inmediación
El enunciado de este principio consiste en que, ante los hechos controvertidos generados por
la comisión de un delito o una falta, se deberá de comparecer siempre ante la figura de un
juzgador que velará por la celebración correcta de el debido proceso, en este caso
denominado juez, o en su caso magistrado, ya que este fungirá como juzgador y no podrá
delegar dicha función a otra persona, aludiendo a que el juez estará presente físicamente en
todo momento durante la celebración del proceso.

Concentración

dicho principio busca la celeridad del operador de justicia, en otras palabras, busca el poder
realizar un proceso penal en concreto en la menor cantidad de audiencias posible para la
reducción de costos para las partes intervinientes, a lo que se le llama economía procesal
acompañado de la celeridad al momento de dictar una resolución judicial a favor o en contra
de las partes intervinientes.

Acusatorio

Establece que ningún ciudadano podrá ser juzgado o sentenciado a puesto bajo prisión por un
delito por el cual no ha sido denunciado, querellado o vencido en juicio debidamente
comprobado, es decir ninguna persona puede ser condenado por un delito del cual no se le ha
acusado, ni se ha comprobado su comisión o participación en el, es el principio que rige la
faceta entre la acusación de los hechos controvertidos y a la sentencia que pone fin al proceso.

Proporcionalidad

Dicho principio posee su origen en proporcionar a cada quien lo suyo, diseñado para sancionar
al actor de un delito a una medida equivalente a la acción o daño ocasionado a un tercero, es
decir para cada acción o delito tipificado en el código penal, existirá siempre una sanción
equivalente al daño causado, una responsabilidad equivalente a sus acciones, un resarcimiento
económico en los casos que sea establecidos en respuesta a los daños dolosos o culposos que
una persona hubiese causado a otro, no existe el delito sin pena, ya que este de estar
tipificado y detallado en la ley correspondiente.

Lesividad

El presente principio busca que toda acción penal que produzca una repercusión a un tercero o
a la sociedad este tipificado o detallado dentro de la legislación penal correspondiente,
asignándole la descripción del hecho punible, su sanción correspondiente y sus respectivas
situaciones atenuantes y agravantes. Busca detallar y establecer a las acciones pueden afectar
de manera dolosa o culposa el bien jurídico que la constitución establece que es la vida de una
persona, su integridad física, moral o económica.

Independencia de poder

Este principio nos hace referencia a la independencia y el respeto al criterio que todo juez o en
su caso magistrado de apelación, deberá de tener para discernir sobre el desarrollo y finalidad
de un proceso penal, ya que estos a su criterio legal y resguardando las leyes por las que se
rigen como ser la constitución u otras leyes que favorezcan al imputado deberán de emitir su
fallo o resolución sobre un proceso penal, sin la intervención de agentes terceros que puedan
venir a intervenir o contaminar el proceso a través de influencias, el poder judicial al ser uno
de los tres poderes del estado goza de autonomía en la toma de sus dediciones especialmente
los jueces que son garantes del derecho y que en su criterio legal emiten un fallo con base a las
alegaciones de las partes intervinientes y no de terceros ajenos por muy mediáticos o
controversiales que puedan llegar a ser un caso en específico. Dicha intervención deberá de
ser denunciada ante la corte suprema de justicia al estarse violentando el presente principio.

Principio del Código Procesal Penal vistos en clase, contenidos en el código Procesal Penal.

Artículo 1. Juicio previo.

El Genesis de los principios que rigen el presente código da inicio con el juicio previo estableció
como primicia en la cual se presume que una persona que haya cometido una falta o delito,
no será sancionado, o multado hasta que en un proceso legal se hayan cumplido todo los
requisitos establecidos por la ley, se dicte sentencia y este sea obligado a pagar una condena, a
cumplir una medida, a resarcir un daño, después de haber expuesto las acusaciones, las
alegaciones de la defensa, la demostración de los hechos a través de la prueba y culminando
en una sentencia que sancione al sujeto o lo exima de la responsabilidad penal.

Artículo 2. Estado de inocencia.

Nuestro segundo principio apela a la presunción de inocencia de la cual una persona puede
llegar hacer acusada de la comisión de un delito o una falta, en este principio nos establece
que la persona a acusada de la violación de la ley será tratada con el debido respeto e
integridad física, y presentado como tal asignándole una defensa justa y un debido proceso, y
no podrá ser condenado hasta que s ele demuestre lo contrario, y en los casos en que se viole
este precepto el órgano juzgador será responsable de manera penal, civil y administrativa de
los daños ocasionados a la integridad física o moral de la persona acusada en su momento.

Artículo 3. Respeto de la dignidad y de la libertad.

Como respuesta al estado de acusado, denunciado o detenido el presente código nos garantiza
la integridad a la dignidad y libertad de la persona que este atravesando por este tipo de
procesos en dicha materia, genera una relación con el principio del estado de inocencia, y con
el del juicio previo en el que el órgano juzgador velara por que se le trate con el debido respeto
salvaguardándoles su garantías constitucionales, que son inviolables, en resumen se le tratara
como a un ciudadano más independientemente de la acusación que le haya llevado a dicha
situación.

Artículo 4. Principio de contradicción.

Como sabemos la mayoría de los procesos en la actualidad en la mayorías de las materias son
de carácter oral y público, es decir la oralidad rige el procedimiento penal y acompañado con
el principio de contradicción que en síntesis es el tener una respuesta por parte de la defensa
del acusado hacia las insinuaciones o acusaciones por parte de, en su caso el ministerio
público o el acusador privado, es decir en un sistema en donde una tesis se enfrenta a una
antítesis, es decir que una acusación presentada contra una persona, es debatida o
desvirtuada por otra persona que logra comprobar mediante hechos o pruebas su punto a esa
dualidad se refiere el principio de contradicción a toda acusación existirá una defensa.

Artículo 5. Protección de los intervinientes en el proceso.


En los casos de materia penal rige el principio de protección, tanto a las partes intervinientes el
proceso, como a la sociedad, en este apartado el órgano judicial brinda a las partes que
intervienen en este tipo de procesos la seguridad física a las personas que hayan sido víctimas
de una agresión de toda índole penal, así como a los testigos que posean miedo a declarar
para esclarecer los hechos controvertidos en un proceso, esto lo realizara de oficio lo cual
quiere decir que se realizara sin la necesidad de que alguna de las partes se lo solicite.

Artículo 6. Antecedentes penales.

Es de conocimiento común que los antecedentes penales son el récord o historial que emite el
poder judicial en los casos que una persona que haya sido condenada por medio de una
sentencia firme por la comisión de un delito o no, dicho historial por decirlo de una forma más
sencilla se verá como se dice coloquialmente manchado hasta el momento en que una persona
haya sido condenada por la comisión de un delito o haya cumplido con su condena y proceda a
limpiar dicho historial de toda esta actividad es el poder judicial que llevara dicho récord del
denunciado.

Artículo 7. Independencia de jueces y magistrados.

Este principio nos hace referencia a la independencia y el respeto al criterio que todo juez o en
su caso magistrado de apelación, deberá de tener para discernir sobre el desarrollo y finalidad
de un proceso penal, ya que estos a su criterio legal y resguardando las leyes por las que se
rigen como ser la constitución u otras leyes que favorezcan al imputado deberán de emitir su
fallo o resolución sobre un proceso penal, sin la intervención de agentes terceros que puedan
venir a intervenir o contaminar el proceso a través de influencias, el poder judicial al ser uno
de los tres poderes del estado goza de autonomía en la toma de sus dediciones especialmente
los jueces que son garantes del derecho y que en su criterio legal emiten un fallo con base a las
alegaciones de las partes intervinientes y no de terceros ajenos por muy mediáticos o
controversiales que puedan llegar a ser un caso en específico. Dicha intervención deberá de
ser denunciada ante la corte suprema de justicia al estarse violentando el presente principio.

Artículo 8. Finalidad del proceso.

La celeridad es vital en este tipo de procesos dentro de lo establecido por las normas
hondureñas, lo que se busca dar es una pronta respuesta con base a derecho a través de una
resolución pronta y precisa a las partes involucradas respetando los términos de tiempo
establecidos en el presente código, es en este enunciado donde cabe el dicho una justicia con
retardo no es justicia, debe de existir una resolución en tiempo y forma ya sea favorable o
negativa para una de las partes.

Artículo 9. Saneamiento de irregularidades procesales.

Los orquestadores del proceso penal en este caso los jueces y magistrados de oficio velaran
por que se respete el debido proceso como lo vimos en los artículos anteriores
específicamente el artículo 8 que busca el dar una pronta respuesta, es decir en este principio
lo que se busca es salvaguardar la celeridad e integridad del proceso evitar que las partes
intervinientes de manera dolosa o culposa retrasen el caminar de un proceso correctamente,
de esta forma el órgano competente aplicara las sanción monetaria correspondiente a las
partes que traten de retrasar o dañar el debido proceso.

Artículo 10. Neutralización de los efectos del delito.


En este apartado lo que el órgano judicial busca o trata de concretar es que el presunto daño
causado a una persona o tercero, o a la misma sociedad no se incremente ni sea alcanzado por
otros, lo que busca es mitigar el daño, o tratar de resarcirlo de una manera física o material, o
previniendo que el actor de un hecho delictivo siga dañando a otros a través de su detención,
es comprensible que existen cosas que son irreparables, pero el presente principio busca
reducir el daño colateral y ver de qué forma se puede retribuir a los afectados en el caso en
concreto.

Artículo 11. Prohibición del doble juzgamiento.

El principio de doble juzgamiento es una pieza central para futuras acusaciones, sobre un
mismo hecho, es decir que en los casos que una persona haya sido condenada o absuelta por
un hecho cometido en un determinado tiempo y lugar no podrá cumplir una doble condena
por esos mismos hechos en un futuro independientemente de que se la legislación recalifique
ese delito o falta bajo otra figura, o el ente acusador alegue nuevas circunstancias que pueden
perjudicar al denunciado o detenido. Otra manera de definirlo en palabras más simples nadie
podrá ser juzgados dos veces por el mismo delito.

Artículo 12. Lealtad para con la justicia.

El principio de lealtad de la mano con el principio de la independencia, dan por sentado el


respeto al debido proceso a través de la aplicación de las leyes que lo rigen, salvaguardando al
integridad del mismo, los jueces sin necesidad de las partes velaran porque las pretensiones de
las partes acusadora y defensora sean congruentes y apegadas a la realidad de las leyes y
situaciones físicas que traten que demostrar, todo esto aplicando la buena fe y la sana critica
en la valoración de las actuaciones de las partes, de esta forma los jueces y magistrados
sancionaran la manera dolosa o culposa de las partes que actuando en el proceso, a través de
sus respectivas sanciones, el objeto es la precisión y veracidad de la justicia apegada a las
leyes.

Artículo 13. Igualdad de los intervinientes.

Un principio relacionado y haciendo énfasis a la carta magna en donde establece que en el


estado de Honduras no existen las clases sociales o el favoritismo a algunas de las partes
intervinientes, ante la ley todos son iguales tanto parte acusadora como acusado, posee una
relación simbiótica con el artículo 3 del respeto a las partes de alguna manera, en síntesis, el
principio busca a la imparcialidad en el proceso y el respeto a las partes intervinientes en él.

Artículo 14. Inviolabilidad del derecho a la defensa.

El derecho del imputado a defenderse ante las acusaciones del ministerio público o del
acusador privado es inviolable, bajo ninguna circunstancia una persona deberá de afrontar un
proceso legal sin su respectivo defensor, ya sea un abogado privado, o un defensor publico
asignado por el estado, un proceso sin una de estas partes es nulo y viciado, dicho derecho
también debe de ser exigido por la parte acusadora, la indefensión no puede existir en un
proceso legal ya que es contrario a las garantías que la constitución ofrece a sus ciudadanos y
el presente código trata de salvaguardar tanto el principio de inocencia y de juicio previo de
una persona acusada de la comisión de un delito.

Artículo 15. Asistencia técnica y defensa.


La asistencia técnica mantiene una relación con el derecho a la defensa del artículo anterior en
donde se garantiza de que a una persona que sea acusada por un delito, o falta se le asigne un
abogado de oficio o el pueda de disponer de uno para poder comparecer a juicio y defenderse
de las acusaciones entabladas en su contra, es de conocimiento público que la situación
económica de los hondureños no es posible que todas las personas puedan optar a contratar
directamente a un abogado privado, por lo que el estado provee de oficio en los casos
correspondientes un defensor para salvaguardar el derecho a la defensa y proceder con el
debido proceso sin vicios o dilaciones al mismo.

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