FILOS10 EXISTENCIALISMO
FILOS10 EXISTENCIALISMO
FILOS10 EXISTENCIALISMO
ÁREA:FILOSOFÍA -
GRADO: DÉCIMO
DOCENTE: JAIME
CORDERO VÁSQUEZ
FECHA: Octubre 29, Noviembre 5 y 12 de 2024
Según Sartre, el existencialismo era una forma de humanismo: ser existencialista implicaba tener
empatía por el otro y abogar por la responsabilidad social.
El existencialismo surgió en las ideas de Søren Kierkegaard y de Friedrich Nietzsche, así como
en el pesimismo de Arthur Schopenhauer (1788-1860) y las novelas de Fiódor Dostoievski (1821-
1881).
Por haber surgido entre las dos grandes guerras del siglo XX, el existencialismo acompañó el
pensamiento de época que rechazaba la moral vigente hasta el momento.
Este rechazo, sumado a la lectura de los textos de Kierkegaard, Nietzsche y Heidegger, sentó las
bases intelectuales para fundar el pensamiento filosófico de los existencialistas. Además, las
primeras obras existencialistas, como El ser y la nada y La náusea, de Sartre, y El extranjero y La
peste, de Camus, marcaron el tono y la dirección del movimiento.
En 1945, y luego de ser acusados de pesimistas y antihumanistas por distintos sectores sociales y
académicos, los existencialistas se defendieron de los ataques intelectuales en la conferencia
que Sartre brindó en el club Maintenant, en París. De esta charla surgió el libro El existencialismo es
un humanismo, así como un conjunto de premisas teóricas lo suficientemente sólidas como para
marcar una forma de pensar distinta a las anteriores.
Representantes del existencialismo
Los principales representantes del existencialismo fueron:
Tipos de existencialismo
El existencialismo cristiano se basa principalmente en la obra de Kierkegaard.
Se considera que hubo tres escuelas existencialistas, cada una marcada por una postura propia
frente a la idea de la existencia de Dios.
El existencialismo cristiano. Esta escuela propone que cada persona debe tomar sus
decisiones de manera independiente, dado que las decisiones constituyen luego su esencia. Son
sus acciones las que serán evaluadas ante Dios, dado que esa es la única forma de mantener el
constante escrutinio de las propias acciones. Aparte de Kierkegaard, se consideran
pertenecientes a esta forma de existencialismo al filósofo alemán Karl Jaspers (1883-1969), al
filósofo y escritor español Miguel de Unamuno (1864-1936), y a los filósofos y escritores
franceses Gabriel Marcel (1889-1973), Emmanuel Mounier (1905-1950), Pierre Butang (1916-
1998).
Existencialismo ateo. El existencialismo ateo sostuvo que, al no haber un Dios que diera forma
a la esencia humana, no había manera de saber de antemano la esencia de las personas. Sus
representantes fueron Jean-Paul Sartre, Simone de Beauvoir y Albert Camus.
Esta forma de existencialismo negaba cualquier forma de pensamiento trascendental, metafísico
o religioso. En particular, porque la formulación sartreana (“la existencia precede a la esencia”),
se oponía a la tradición metafísica fundada por Aristóteles y heredada por el cristianismo. De esta
manera, el existencialismo ateo confronta el miedo y la angustia de la muerte, sin ofrecer ningún
tipo de salvación final a manos de Dios, ni de la naturaleza.
Existencialismo agnóstico. Esta vertiente está asociada más que nada a la obra de Camus y a
su manera de pensar. Para Camus, la existencia o inexistencia de Dios y de lo divino no debía
modificar en sentido alguno la existencia del ser humano, ya que la realidad divina no
solucionaba ningún problema ético, ni brindaba consuelo alguno al ser humano.