RESUMEN VIDEOS

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FACULTAD INGENIERIA

INGENIERIA CIVIL

PUERTOS

Integrante:

Mera Ordoñez Rolando Joel

Docente:

Ing. Nic Burgos Mendoza

Manta, 02 octubre 2024


RESUMEN VIDEO 01

La circulación general atmosférica es el sistema de movimientos a gran escala

del aire en la atmósfera de la Tierra. Estos movimientos distribuyen el calor, la humedad

y otros gases, desempeñando un papel clave en el clima global. Uno de los principales

factores que impulsa la circulación atmosférica es la diferencia de temperatura entre el

ecuador y los polos, ya que el calor solar incide de manera desigual sobre la superficie

terrestre. El aire caliente en el ecuador tiende a ascender y desplazarse hacia las zonas

polares, mientras que el aire frío de los polos se desplaza hacia el ecuador. Esta

circulación genera una serie de patrones globales que incluyen las corrientes en chorro,

las celdas de Hadley, Ferrel y polar, las cuales influyen directamente en las condiciones

climáticas de diversas regiones.

En la célula de Hadley, que es la más cercana al ecuador, el aire caliente sube

en la zona de convergencia intertropical (ZCIT), donde se produce una gran cantidad de

lluvias. Luego, el aire se desplaza hacia los 30 grados de latitud norte y sur, donde

desciende, generando áreas de alta presión y condiciones más secas, lo que explica la

presencia de los desiertos en estas latitudes. El movimiento descendente del aire

provoca la formación de los vientos alisios, que fluyen desde los trópicos hacia el

ecuador. Este ciclo de ascenso, desplazamiento y descenso del aire forma parte esencial

de la circulación atmosférica.

La célula de Ferrel se encuentra entre las latitudes de 30 y 60 grados y está

influenciada por las interacciones entre la célula de Hadley y la célula polar. En esta

célula, el aire se desplaza en dirección opuesta a las dos anteriores: en la superficie, se

mueve hacia los polos y en las capas superiores de la atmósfera, hacia los trópicos. Este
patrón es responsable de los vientos del oeste, que son dominantes en las latitudes

medias. Estos vientos influyen en gran medida en el clima de las zonas templadas,

donde se encuentran la mayoría de las grandes ciudades del mundo. Las perturbaciones

en esta célula pueden generar sistemas de bajas presiones y tormentas.

La célula polar, que se encuentra entre los 60 grados de latitud y los polos,

funciona de manera opuesta a la célula de Hadley. En esta zona, el aire frío desciende en

los polos y se mueve hacia las latitudes inferiores en la superficie. Al llegar a los 60

grados de latitud, este aire más frío se encuentra con el aire cálido proveniente de las

latitudes medias, lo que genera inestabilidad y las características corrientes de chorro

polares. Estas corrientes son flujos de aire rápidos y estrechos que se mueven de oeste a

este y separan las masas de aire frío polar del aire más cálido de latitudes medias.

La circulación general atmosférica también está influenciada por otros factores,

como la rotación de la Tierra y la distribución de los continentes y océanos. La rotación

genera el efecto Coriolis, que desvía los vientos hacia la derecha en el hemisferio norte

y hacia la izquierda en el hemisferio sur. Esto contribuye a la formación de los vientos

predominantes en cada latitud y a la estructura de los sistemas climáticos globales. La

interacción entre la circulación atmosférica y los océanos, especialmente las corrientes

marinas, es crucial para la distribución del calor en la Tierra y la variabilidad climática,

como El Niño y La Niña.

RESUMEN VIDEO 02

La atmósfera terrestre está formada por varias capas que se distinguen por su

composición, temperatura y comportamiento. Estas capas se extienden desde la

superficie de la Tierra hasta el espacio exterior, y cada una tiene un papel importante en
la regulación del clima y la protección del planeta. La capa más baja es la troposfera,

donde ocurre casi toda la actividad meteorológica. Esta capa contiene la mayor parte del

vapor de agua y la masa total de aire de la atmósfera. La temperatura disminuye con la

altitud en esta región, y en su parte superior, conocida como tropopausa, se alcanzan las

temperaturas más frías.

Por encima de la tropopausa se encuentra la estratosfera, donde, a diferencia de

la troposfera, la temperatura aumenta con la altitud. Esto ocurre debido a la presencia de

la capa de ozono, que absorbe la radiación ultravioleta del Sol, calentando la

estratosfera. Esta capa es relativamente estable, por lo que es un lugar ideal para el

vuelo de aviones de gran altitud. La capa de ozono también es crucial para la vida en la

Tierra, ya que protege a los organismos de los efectos nocivos de la radiación UV.

A continuación, la mesosfera se extiende hasta aproximadamente 85 kilómetros

de altitud. En esta región, la temperatura vuelve a descender drásticamente, siendo una

de las zonas más frías de la atmósfera. Aquí, los meteoros que entran en la atmósfera

suelen desintegrarse debido a la fricción con las partículas de aire, creando lo que

comúnmente conocemos como estrellas fugaces. El límite superior de esta capa,

conocido como mesopausa, es el punto donde la temperatura deja de disminuir.

La termosfera es la siguiente capa, donde la temperatura aumenta de nuevo

significativamente con la altitud, alcanzando niveles extremadamente altos. Este

calentamiento es el resultado de la absorción de radiación solar de alta energía, como

los rayos X y la radiación ultravioleta. Aunque las temperaturas en la termosfera pueden

superar los 1,500 grados Celsius, el aire es tan delgado que no se percibe calor como en
la superficie terrestre. En esta capa también ocurren fenómenos como las auroras

boreales y australes, y es donde orbitan muchos satélites.

Finalmente, la exosfera es la capa más externa de la atmósfera, extendiéndose

hasta los 10,000 kilómetros o más. En esta región, las partículas de aire son

extremadamente escasas y se dispersan gradualmente hacia el espacio exterior. Aquí,

los átomos y moléculas tienen trayectorias largas sin colisionar entre sí, lo que hace que

esta capa sea prácticamente indistinguible del espacio exterior. La exosfera es

esencialmente la transición entre la atmósfera terrestre y el espacio interplanetario.

RESUMEN VIDEO 3

La Tierra realiza varios movimientos simultáneos en el espacio, de los cuales

los más importantes son la rotación y la traslación, que tienen un impacto significativo

en el clima, la duración de los días y las estaciones del año. Además, existen otros

movimientos menores como la precesión y la nutación, que también influyen en ciertos

aspectos de la dinámica terrestre. Estos movimientos determinan gran parte de las

condiciones ambientales que experimentamos a diario.

El movimiento de rotación es el giro que realiza la Tierra sobre su propio eje.

Este movimiento tiene una duración de aproximadamente 24 horas y es el responsable

de la sucesión del día y la noche. La rotación ocurre de oeste a este, lo que da la

impresión de que el Sol se mueve en el cielo de este a oeste. Este movimiento genera la

división en husos horarios y provoca el efecto Coriolis, que influye en los patrones de

vientos y corrientes oceánicas.


Por otro lado, el movimiento de traslación es el que realiza la Tierra alrededor

del Sol, en una órbita elíptica. Este recorrido dura aproximadamente 365 días y 6 horas,

lo que da lugar al año calendario y a la necesidad de un año bisiesto cada cuatro años

para compensar el desfase. La traslación es el principal factor en la aparición de las

estaciones del año. La inclinación del eje terrestre, que es de aproximadamente 23.5

grados respecto al plano de su órbita, provoca que la radiación solar incida de manera

desigual en las distintas latitudes, lo que da lugar a las estaciones.

La precesión es un movimiento más lento que afecta la orientación del eje de

rotación de la Tierra. Se debe a la influencia gravitacional de la Luna y el Sol sobre la

Tierra, causando que su eje trace un cono en el espacio. Este ciclo de precesión dura

unos 26,000 años y tiene un impacto a largo plazo en la orientación de las estrellas en el

cielo, además de influir en pequeños cambios en las estaciones.

La nutación es una ligera oscilación del eje de rotación terrestre que acompaña

a la precesión. Se produce debido a las variaciones en la atracción gravitacional de la

Luna sobre la Tierra mientras ésta sigue su órbita alrededor del Sol. Aunque es un

movimiento de menor escala en comparación con la precesión, la nutación también

influye en las variaciones climáticas a largo plazo.

Estos movimientos combinados afectan no solo el clima y las estaciones, sino

también el comportamiento de las mareas, la orientación de los cuerpos celestes en el

cielo y, en menor medida, la geografía a lo largo de los siglos debido a cambios en la

distribución del calor solar sobre la superficie de la Tierra.

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