Skinner CIENCIA Y CONDUCTA HUMANA
Skinner CIENCIA Y CONDUCTA HUMANA
Skinner CIENCIA Y CONDUCTA HUMANA
CONDICIONAMIENTO OPERANTE
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caso, es también posible, por ejemplo, estudiar el efecto combinado de más de
una de estas variables.
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Seleccionamos una conducta relativamente simple, que pueda ser
repetida libre y rápidamente, y susceptible de ser observada y registrada con
facilidad. Si el sujeto del experimento es una paloma, por ejemplo, la conducta
de levantar la cabeza por encima de una altura dada es adecuada. Podemos
observarla mirando la cabeza de la paloma sobre una escala colocada en la
pared opuesta de la caja. Primero estudiamos la altura a la que se mantiene
normalmente la cabeza y fijamos en la escala un punto que se alcanza sólo
raramente; al tiempo que observamos la escala empezamos sólo raramente; al
tiempo que observamos la escala empezamos a abrir el depósito de la comida
muy rápidamente cada vez que la cabeza se levanta por encima de la línea. Si
el experimento se efectúa de acuerdo con las especificaciones el resultado es
invariable: observamos un cambio inmediato en la frecuencia con que la
cabeza sube por encima de la línea; también observamos}, y esto tiene en
teoría cierta importancia, que ahora se sobrepasan líneas más altas. Podemos
pasar casi inmediatamente a una línea más alta determinando cuándo deber
ser mostrada la comida. En uno o dos minutos la postura del ave ha cambiado
de tal forma que la posición de la cabeza raramente está por debajo de la línea
que elegimos al principio.
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precede, de una manera invariable, este movimiento. Una conducta de este
tipo puede caer bajo el control de estímulos, pero la relación no es la de
provocación automática. El término <<respuesta>> no es, por tanto, del todo
apropiado, pero se encuentra tan bien establecido que vamos a utilizarlo a
continuación. Una respuesta que ya se ha producido no puede, desde luego,
predecirse o controlarse. Podemos predecir solamente qué respuestas
similares se producirán en el futuro. La unidad de una ciencia predictiva no es,
por tanto, una respuesta, sino una clase de respuesta. La palabra
<<operante>> es la que utilizaremos para designar esta clase. El término pone
de relieve el hecho de que la conducta opera sobre el medio ambiente para
producir consecuencias. Las consecuencias definen las propiedades respecto a
las cuales las respuestas se llaman similares. El término se utilizará tanto como
adjetivo (conducta operante), cuanto como sustantivo para designar la
conducta definida por una consecuencia dada.
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efecto para cambiar una probabilidad de respuesta.) En el experimento de la
paloma, por tanto, la comida es el refuerzo y el presentar la comida cuando se
emite una respuesta es el acto de reforzar. La operante es definida por la
propiedad respecto a la cual es contingente el refuerzo, es decir, la altura a la
cual la cabeza ha de ser levantad. El cambio en la frecuencia con la cual la
cabeza es levantada hasta esta altura, es el proceso de condicionamiento
operante.
PROPIEDADES CUANTITATIVAS
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No podemos evitar estos problemas seleccionando una respuesta que
las características ambientales delimiten más exactamente –por ejemplo, el
acto de manipular una cerradura. Cualquier indicador mecánico de la conducta
constituye, desde luego, una ventaja –al ayudarlos, por ejemplo, a reforzar en
el momento adecuado. Podríamos registrar la altura de la cabeza de la paloma
por un procedimiento fotoeléctrico, pero es más simple seleccionar una
respuesta que produzca un cambio que pueda ser registrado con mayor
facilidad en el medio ambiente. Si la paloma está condicionada a picotear un
pequeño disco situado sobre la pared de la caja experimental, podemos utilizar
el movimiento del disco para cerrar un circuito eléctrico con el fin de, por una
parte, accionar el depósito de la comida y, por otra, contar o registrar las
respuestas. Semejante respuesta parece diferir de la de estirar el cuello en que
tiene un carácter de todo-o-nada. Pero vamos a ver en seguida que las
características mecánicas de golpear un interruptor no definen una
<<respuesta>> que sea algo menos arbitraria que la de alargar el cuello.
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el ratón o la paloma, tiene interesantes implicaciones. Las diferencias en lo que
se suele llamar inteligencia son atribuidas, en parte, a diferencias en la rapidez
con que se aprende; pero no puede haber aprendizaje más rápido que un
incremento instantáneo en la probabilidad de la respuesta. La superioridad de
la conducta humana debe ser, por tanto, de algún otro tipo.
EXTINCION OPERANTE
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capítulo VI, la resistencia a la extinción motivada por un refuerzo intermitente
puede ser mucho mayor que si el mismo número de refuerzos fuese dado en
respuestas consecutivas. De esta forma, si sólo ocasionalmente reforzaos a un
niño para que se comporte bien, el comportamiento persiste después de
interrumpir el refuerzo durante mucho más tiempo que si hubiésemos reforzado
cada caso concreto hasta llegar al mismo número total de refuerzos. Esto tiene
una importancia práctica en los casos en que se dispone de refuerzos
limitados. Problemas de este tipo surgen en la educación, la industria, la
economía y en muchos otros campos. En algunos programas de refuerzo
intermitente podemos contabilizar hasta 10.000 respuestas en la conducta de
una paloma antes de que la extinción sea completa.
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muchas variables distintas, que una ciencia de la conducta debe identificar y
clasificar. Definimos cualquier caso dado en términos de variables. La situación
que resulta de una extinción prolongada se parece superficialmente a la
inactividad resultante de toras causas. La diferencia radica en la historia del
organismo Un aspirante a escritor que ha enviado a los editores manuscritos
tras manuscritos sólo para verlos rechazados, puede decir que <<no es capaz
de escribir ni una palabra más>>. Puede verse parcialmente paralizado por lo
que llamamos <<falta de inspiración del escritor>>. Es posible que insista
todavía en que <<quiere escribir>>, y podemos estar de acuerdo con él en que
su probabilidad extremadamente baja de respuesta se debe principalmente a la
extinción. Se encuentran todavía operando otras variables que si la extinción
no se hubiera producido, podrían conducir a una alta probabilidad de
respuesta.
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prueba directa. Observemos la frecuencia de una respuesta seleccionada,
hacemos que un hecho sea contingente a ella y observamos cualquier cambio
en la frecuencia. Si hay un camino, clasificamos el hecho como reforzante del
organismo en las condiciones presentes. No es un círculo vicioso clasificar a
los hechos en términos de sus efectos; el criterio es empírico y objetivo. Sin
embargo, sería vicioso si luego pasaremos a afirmar que un hecho dado
fortalece una operante por qué es reforzante. Si tenemos cierto éxito al
conjuntar acerca de las potencias reforzantes es debido a que hemos hecho en
cierta forma un examen imperfecto; hemos calibrado el efecto reforzante de un
estímulo sobre nosotros mismos y suponemos que el mismo efecto se produce
en los demás. Acertamos solamente cuando nos parecemos al organismo que
estamos estudiando y cuando hemos observado correctamente nuestra propia
conducta.
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Valoramos la fuerza de los hecho que refuerzan cuando intentamos
descubrir lo que alguien <<consigue de la vida>>. ¿Qué consecuencias son las
responsables de su repertorio de conductas presente y de las frecuencias
relativas de las respuestas que se producen en el mismo? Sus opiniones
acerca de varios temas comunes de conversación nos dice algo, pero su
conducta diaria es una guía mejor. Deducimos refuerzos importantes de cosas
tan corrientes como su <<interés>> por un escritorio que trata ciertos temas,
por almacenes o museos que exponen ciertos objetos, por amigos que
comparten determinados tipos de conducta, por restaurantes que sirven
determinados tipos de comida, etc. El <<interés>> hace referencia a la
probabilidad que resulta, al menos en parte, de las consecuencias de la
conducta de <<tener interés>>. Podemos estar casi seguros de la importancia
de un refuerzo si observamos las variaciones de la conducta, al tiempo que el
refuerzo se produce o deja de producirse, puesto que entonces es menos
verosímil que el cambio en la probabilidad se deba a un cambio incidental de
cualquier otro tipo. La conducta de relacionarse con un amigo determinado
varía según él va caminando en proporcionar refuerzos. Si observamos esta
covariación, podemos entonces estar bastante seguros de <<lo que significa
esta amistad>> o de <<lo que nuestro sujeto ve en su amigo>>.
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forma determinada son el resultado de ciertas consecuencias, y, como veremos
en el capítulo XVIII, es posible que él mismo nunca se dé cuenta de esta
relación aunque sea evidente para los demás.
REFUERZOS CONDICIONADOS
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<<precurrente>> tras haber actuado sobre el medio ambiente para crear la
posibilidad de comer o beber. Por tanto, los estímulos generales por esta
conducta precurrente se convierten en refuerzos. De esta forma, antes de que
podamos llevar la comida del plato a la boca con éxito, debemos estar cerca
del plato, y cualquier conducta que nos lleve cerca de él se ve reforzada
automáticamente. La conducta precurrente se encuentra, por tanto, apoyada.
Esto es importante por cuanto solamente una pequeña parte de nuestra
conducta se ve reforzada de forma inmediata por comida, agua, contacto
sexual u otros hechos de importancia biológica obvia. Aunque es característico
de la conducta humana que los refuerzos primarios sean eficaces después de
un largo período de tiempo, esto sólo se debe probablemente a que los hechos
que intervienen se convierten en refuerzos condicionados. Cuando alguien
coloca postigos en su casa en octubre porque una conducta similar en el
octubre anterior fue seguida de una casa caldeada en enero, necesitamos
cubrir la laguna que existe entre su conducta de octubre y el efecto de enero.
Entre los refuerzos condicionados responsables de la intensidad de su
conducta, se encuentran ciertas consecuencias verbales proporcionadas por sí
mismo o por los vecinos. A menudo es importante introducir una serie de
hechos entre un acto y un refuerzo primario fundamentalmente para controlar la
conducta con fines prácticos. En la educación, industria, psicoterapia y muchos
otros campos, nos encontramos con técnicas pensadas para crear refuerzos
condicionados adecuados. El efecto de proporcionar consecuencias afectivas
inmediatas allí donde las consecuencias fundamentales aparecerán retrasadas,
equivale a <<elevar la moral>>, <<elevar el interés>>, <<prevenir el
desánimo>> o corregir la intensidad operante baja que hemos llamado abulia,
etc. Más concretamente, esto sirve para inducir a los estudiantes a estudiar, a
los empleados a acudir al trabajo, a los pacientes a practicar una conducta
social aceptable, etc.
Refuerzos generalizados
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pueden obtenerse después de que el medio ambiente físico ha sido
manipulado eficazmente. Una forma de conducta precurrente puede preceder a
diferentes tipos de refuerzos en diferentes ocasiones. La estimulación
inmediata a partir de tal conducta se convertirá entonces en un refuerzo
generalizado. Nos vemos automáticamente reforzados, independientemente de
cualquier privación concreta, cuando controlamos con éxito el mundo físico.
Esto puede explicar nuestra tendencia a llevar a cabo trabajos de habilidad,
creación artística y práctica de deportes como los bolos, billar o tenis.
Es posible, sin embargo, que parte del efecto reforzante del <<feed back
sensorial>> no esté condicionado. Un niño parece sentirse reforzado por una
estimulación del medio ambiente que no ha ido seguida de un refuerzo
primario; el sonajero es un ejemplo. La capacidad de recibir refuerzos de este
modo podría haber surgido durante el proceso evolutivo, y puede tener un
paralelo en el refuerzo que recibimos al <<hacer que el mundo se mueva>>.
Cualquier organismo reforzado por su éxito al manipular la naturaleza,
independientemente de las consecuencias momentáneas, estará en una
posición favorable cuando se figan consecuencias importantes.
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pero, cuando cualquiera que muestre afecto proporciona también otros tipos de
refuerzo, el efecto es generalizado.
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diplomas que recibe. Estos no son tan fácilmente cambiables por refuerzos
primarios como el dinero, pero la posibilidad de cambio existe. Las monedas
educativas forman una serie en la que una puede ser cambiada por la siguiente
y el valor comercial o de prestigio de la última, el diploma, está muy claro. Por
regla general, los premios, medallas y becas concedidos por calificaciones
altas o realizaciones o habilidades especializadas no se hallan asociados
explícitamente a refuerzos primarios, pero las dimensiones físicas claramente
definidas de tales premios representan una ventaja para la preparación de
contingencias. Generalmente el refuerzo esencial es similar al del prestigio o
estima.
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refuerzos generalizados sean algo más que las propiedades físicas de los
estímulos observados en cada saso o que existan entidades no físicas que
deban ser tenidas en cuenta.
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respecto al placer como un hecho puramente privado, a no ser que sucediera
algo parecido a esto. De todas formas, el mismo sujeto no está en una posición
ventajosa para hacer tales observaciones. Los <<juicios subjetivos>> acerca de
la agradabilidad o satisfacción proporcionada por estímulos son normalmente
inciertos e inconsistentes. Como ha puesto de relieve la doctrina del
inconsciente, puede que no seamos capaces en absoluto de informar acerca
de hechos que pueden demostrarse que constituyen para nosotros un refuerzo
o que hagamos un informe que esté en contradicción directa con las
observaciones objetivas; podemos calificar como desagradable un tipo de
hecho que puede demostrarse que es reforzante. Ejemplos de esta anomalía
van desde el masoquismo al martirio.
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se produzca de nuevo. Es difícil, si no imposible, atribuir estos efectos
reforzantes a una historia de condicionamiento. Más tarde es posible que
encontremos al mismo sujeto reforzada por una orquesta o por un brillante
espectáculo. Aquí es más difícil asegurar que el efecto reforzante no éste
condicionado. Sin embargo, podemos asegurar plausiblemente que una
capacidad de ser reforzado por cualquier feed-back procede del medio
ambiente sería biológicamente ventajosa, puesto que prepararía al organismo
para operar con éxito sobre el medio ambiente antes de que se diera un estado
de privación determinado. Cuando el organismo genera un feed-back táctil,
como al percibir el grueso de un tejido o la superficie de una escultura, el
condicionamiento es comúnmente considerado como resultante de un refuerzo
sexual, aunque el área estimulada no sea principalmente sexual. Es tentador
suponer que otras formas de estimulación producidas por la conducta están
relacionadas de manera similar con importantes hecho biológicos. Cuando el
medio ambiente cambia, la capacidad de verse reforzado por un hecho dado
puede significar una desventaja biológica. El azúcar es altamente reforzante
par la mayoría de los seres humanos, como muestra la amplia aceptación de
los caramelos. Su efecto a este respecto excede en gran manera las
exigencias biológicas comunes; sin embargo, esto no ocurrió hasta que el
azúcar fue cultivado y refinado en gran escala. Hasta hace unos pocos cientos
de años, el fuerte efecto reforzante del azúcar fue probablemente una ventaja
biológica. El medio ambiente ha cambiado. El sexo proporciona otro ejemplo.
Ya no hay una ventaja biológica en el importante efecto reforzante del contacto
sexual, pero no necesitamos retroceder muchos cientos de años para encontrar
situaciones de hambre y peste, bajo las cuales el poder del refuerzo sexual
ofrecía una ventaja decisiva. Una explicación biológica del poder reforzante es
quizá lo más que podemos hacer al intentar explicar por qué un hecho es
reforzante. Tal explicación probablemente es e poca ayuda en un análisis
funcional, ya que no nos suministran ninguna manera de identificar un estímulo
reforzante como tal, antes de haber probado su poder como refuerzo en un
organismo dado. Por tanto, debemos contentarnos con un examen en términos
de efectos de los estímulos sobre la conducta.
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condicionamiento operante. Esto resulta evidente en el hecho de que alguien
puede no ser capaz de describir una contingencia que ha surgido efecto de
manera clara.
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se ha establecido una respuesta supersticiosa, sobrevirá aun cuando sea
reforzada sólo raras veces.
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contingencia ocasiona un cambio sustancial, son vulnerables ante las
coincidencias.
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conducta similar y unas consecuencias parecidas. Si hemos hecho esto,
simplemente utilizamos el término para predecir que echará la carta en esta
ocasión.
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la conducta de mirar. En general buscar algo que consiste en emitir respuestas
que en el pasado han producido <<algo>> como consecuencia.
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