Año IX. Madrid 15 de Julio de 1881. Núm. 13.

o -B .-. d e

BOLETI N OFICIAL
REVISTA MASÓNICA.

LIBERTAD. JUSTICIA. MORALIDAD.

SECCION OFICIAL.

GR.-. OR.*. DE ESPAÑA.

AD UNIVERSI TRRRARUM ORBIS SUHMl ARCHITECTI GLÜRIAM.

ORDO A B CHAO,
L a G ran D elegación del Supremo ConsaJo del 3 3 de E spañ a en la
isla de Cuba
ENVIA

A llust.\ y Pod.\ H.\ Paz {Práxedes Mateo Sagastá)

S.-. E.-. P.-.
Ilustre y Poderoso H.’ .: Suponemos en vuestro poder el telegrama
que, fiel intérprete de nuestros sentimientos, os dirigimos al saber
vuestra elevación á la presidencia del Gobierno. Dia de ventura ha
debido ser, incuestioiíablemente, éste para todos los buenos espa­
ñoles, y para aquellos que en el fondo de su alma levantan un altar á
los principios de verdadera libertad y á los sublimes preceptos masó­
le

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 242 B O LETIN O F IC IA L .

nicos. Si el país espera mucho de vos, los masones lo aguardan todo;

pues decidido protector dé la Ord.’ ., amante de sus ideales, sabréis
darle la estabilidad y prestigio que necesita para su desarrollo y en­
grandecimiento; que no de otro modo le será dado llevar á cabo el
programa civilizador que le rige y la gran obra del perfeccionamiento
humano.
Quiera el Gran Arquitecto del Universo conservaros mucho tiempo
en el poder y ayudaros en vuestra generosa y digna empresa.
El cariño fraternal que nos une se acrecienta más alejados de la
madre Patria, y podéis estar seguro de encontrar siempre en nosotros
toda la cooperación, todos los esfuerzos que necesitéis, pues nos
alienta la fé más pura y el deseo más firme de trabajar por el engran­
decimiento de España y de la Orden.
Os saludamos, Ilustre y Poderoso hermano, con los s.*. y b.‘ . que
nos son conocidos, desde los Valles de la Habana á los 12 dias de Fe­
brero de 1881 (e.\ v.’.).—José M. de Beranger, gr.‘. 33.—Luis Cáno­
vas, gr.‘. 33.—Joaquín Cubero, gr.\ 33.—Mariano de Usera, gr.\ 33.—
José Ortega, gr.*. 33.—Está sellado.

El Ven.’., DDig.*., OOf.’ . y demas OObr.*. dfe laResp.’. Log.-. Espirita,

número 123, constituida al Or.'. de Crevillente, bajo los auspicios
del Ser.’ . Or.’ . de España,
E N V IA N

Al Ser.'. Gr.'. Or.'. de España

S.’. F.-. U.-.

Los HH.-. de esta Resp.'. Log.’. Espirita, por primera vez reunidos
desde la exaltación al poder gubernamental de la nación, de nuestro
muy querido H.-. Paz, Gr.-. Comend.’. y Gr.’. Maest.’ . honorario de la
Masonería española, tienen la gratísima satisfacción de enviar al
Ser.’. Gr.’ . Or.’. de España la expresión del inmenso júbilo que expe­
rimentan al considerar que, con tan fausto acontecimiento, se ha de
afirmar de un modo estable y ordenado en nuestra querida patria la
sacrosanta Institución que nos hermana, combatida hasta hoy por
sus naturales enemigos de fuera y por envidiosos perturbadores de
dentro.
Al felicitar estos OObr.*. en este dia al Ser.’ . Gr.’. Or.’ . de España,
declaran que su satisfacción no entraña idea política alguna, ajena
ésta á sus opiniones particulares y á su deber como masones. Se feli-

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 R E V IS T A M A S Ó N IC A . 243

citan á sí propios, por cuanto consideran que no en vano aquel escla­

recido varón ha de empuñar las riendas del Estado, para que puedan
encontrar en su valioso apoyo la justicia merecida quien la reclame
y la humanitaria protección el desdichado, probadas consecuencias
de aquel personaje ilustre.
En su consecuencia, ruegan estos OObr.'. al Ser.*. Gr.’ . Or.*. de
España se haga intérprete de los sentimientos que á éstos les anima,
y trasmita al Excmo. Sr. D. Práxedes Mateo Sagasta !a expresión de
su constante afecto, acompañándole la más cordial enhorabuena.
Traz.’ . en l og.*. á los 17 dias del mes de Febrero de 1881 (e.’ . v,-.).
—El Ven.*. Maest.*.. José Quesada Mas {Job), gr.\ 3.°.—El Prim.*.
Vig.'., José Peñalva(César), gr.‘. 3.®.—ElSeg.'. Vig.*., Joaquín Chas
{Prim), gr.*. 3.°.—El Orad.*., Manuel Mas (Pirro), gr.*. 3.".—El Secr.*.
Guard.*. S.*.. José López Magro {Maximiliano), gr.*. 3.®

A L.-. G.*. D.*. G.-. A.*. D.*. U.*.

(Hay un sello.)

La Resp.*. Log.*. Simb.*. Luz del Zenit, núm. 220, al Valí.*, de Cara-
vaca, reg.’. const.*. bajo los auspicios del Ser.*. Gr.*. Or.*. de Es­
paña,
E N V IA

A todas las RResp.-. LLogr. regularmente constituidas bajo los

auspicios del Ser.'. Gr.'. Or.:. de España

S.'. F-*. U.-.

Sabed: Que en Ten.*, extraordinaria celebrada el 21 de Mayo
de 1881 (e.-. v.-.) se constituyó definitiva y regularmente esta Resp.*.
Log.*. Luz del Zenit, núm. 220 antiguo, 109 reformado, siendo uno de
sus acuerdos enviar un cariñoso abrazo y saludo á las 153 Resp.'.
LLog.*. que actualmente trabajan bajo la obediencia del Ser. . Gr. .
Or.*. de España, invitando á los TTall.'. á que remitan sus Cuadros-
lógicos y señas de sus domicilios al Sec.*. de esta Log.'., el H.’ . José
Martínez Carrasco, calle del Colegio, núm. 29, con objeto de estable­
cer la recíproca correspondencia y mutua ayuda que nos debemos.
Reciban con tan plausible motivo todas las LLog.'. de la obedien­
cia el fraternal abrazo que á nombre de ésta y en nombre de la
misma les envían sus Car.'. HH.'.
Traz.*. en Secret.*. el Hia l.*de Junio de 1881 (e.*. v.*.), al Or.*. de

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 244 b o l e t ín o f ic ia l .

Caravaca.—El Ven.-. Maest.-., Rámulo, gp.-. Orad.-,, Terea-

Cío, gr.'. 3.®.—El Sec.-., G.\ S.-. (Trajano), gr.-. 3.». — (Hay un sello.)

El G r.'. Secr.'. G en.', del Ser.'. Gr.'. Or.-. de Espafla

E N V IA

A l Q.\ U :. Angel Montañés García (Flammarion), gr.-. 3.°

S.'. F.\ U.'.
Quer.'. H.-.: Tengo el gusto de participaros que la Gr.-. Log.-.
Simb.*. ha recibido con mucho gusto la Pl.'. que con fecha 18 de Junio
próximo pasado la habéis dirigido por conducto del Ven.-.de la Resp.-.
Log. . Hijos de la Verdad, en demanda de la rehabilitación de vues­
tros derechos mas.-., y que ha tenido á bien concedérosla.
Al manifestároslo así, cumplo un deber gratísimo que tengo un
placer en consignar.
Contad, Quer.-. H.-., con el aprecio y seguridad de mi considera­
ción más distinguida.
Traz.'. en Gr.-. Secr.'. á los 4 dias de Julio de 1881 (e.'. v.-.j.—El
Gr.'. Secr.'. Gen.'., J. U. y F. (Espartero), gr.-. .83.—(Hay un sello )

A L.-. G.'. D.-. G.-. A.*. D.'. U.-.

El Gr.'. M aest.-, de la Gr.*. Log.-. Sim bólica D epartam ental de los
V V .-. de Cuba, bajo lo auspicios del Ser.-. Gr.-. Or,-. de E sp a ñ a , á
todos los m asones de su inm ediata obediencia

e n v ía

S.-. F.-. U.-.

Al alejarme, mis QQ.-. HH.-., de estos VV.-., acatando la ley impe-

riosa de la necesidad, deber ineludible es por mi parte, pagando
vuestro afecto fraternal y cariñoso con el testimonio sincero de la
santa gratitud que mi corazón os guarda, deciros hoy, á los que tan
dignamente constituís y representáis en esta Antilla la Masonería
española, la tristeza y la pena que experimento al dejaros Con
vosotros y con vuestro perseverante, viril y eficaz concurso hemos
realizado el hecho trascendental é importante de una fusión lógica­
mente reclamada por la ley que agrupa y ampara bajo una común

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Ayuntamiento de Madrid
 246 B O LETIN O F IC IA L.

masón de corazón, donde les guardo un culto que nunca limitarán el

sacrificio y la fatiga. Seguid, MM.-. HH.-., como hasta aquí: no pene­
tre jamás en vuestros pechos la tibieza y el desmayo; columnas, se­
guid siendo de robusto sosten á nuestros templos; aumentad con ac­
tiva propaganda nuestro poder, que de hora en hora crece, y acudid
siempre en unidad compacta y con fó ardiente al llamamiento que
tenga á bien haceros el II.-. y p.-. H.-. G.*. M.-. de Ntro.-. Ser.-. Gr.-.
Or.'. Fiad á mí el placer y el honor de decirle lo que sois y valéis, y
lo que han hecho y harán los masones de Cuba.
Recibid en tanto mi ósculo de paz y mi fraternal abrazo de despe­
dida.
Habana 15 de Junio de 1881 ( e.-. v.-.).-V .-. H.-., Baresló, gr.-. 3 3 .-
(Hay un sello.)

AD CM VEltSl TERRARDM OREIS SÜMHI ARCHITECII GLORIAM

ORDO A B CHAO

G ran D elegación del Suprem o Consejo de 3 3 de E spaña en la isla

de Cuba.

El II.-. H.-. José M. Beranger (Bareeló), gr.-. 33, miembro de esta

G.-. D.-., me dice por despedida con fecha 15 del actual lo que copio:
«II.-. y Quer.-. H.*.: Cumplido el deber ya de mi despedida general
ala Masonería simbólica en estos VV.-., queda en pió el deber de ju s­
ticia, que con íntima satisfacción cumplo, haciéndolo de vos, 11.-. H.-
que con fó perseverante, ardiente entusiasmo, abnegación nunca
limitada y febril empeño habéis tan poderosamente contribuido á la
cohesión y engrandecimiento de nuestra Institución. Vos, más habi­
litado que otro alguno para ser intérprete fiel de los sentimientos en
que mi alma rebosa. los esparciréis con elocuente palabra por los
senos de las altas Cámaras, donde quedarán consignados y latentes
durante mi ausencia. No puedo excusar dejar consignado en este dia
que los fructíferos trabajos.de la fusión y la iniciadora propaganda
de Ntro.-. Ser.-. Gr.-. Or.-. en estos VV.-. el año de 1879 os fuó más
principalmente debida que á cuantos de nuestros HH.-. trabajaron en
pró de tan beneficioso objeto, lo que establece en favor vuestro un
titulo irrecusable de agradecimiento por parte de la Masonería espa­
ñola, de la que me hago autorizado y fiel eco en este momento. Asi
tendré el honor de expresarlo al Sup.*. Consejo, dándole cuenta deta­
llada de vuestros sobresalientes y especiales merecimientos. Recibid
miéntras, aunque con la honda pena que nuestra separación motiva.

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 REVISTA MASÓNICA. 247

el expresivo y cariñoso abrazo de despedida de vuestro H.'.,

Al cumplir tan honroso encargo á que la obediencia y la fe me im­

pelen de consuno, poco puedo añadir á las elocuentes palabras del
G ■ M de la Gr.-. L og/. Simb.-. Dep.*. y Gran Delegado. Su benevo­
lencia. más que mis méritos.las inspiraron; pero ellas aumentan y
vigorizan la pureza de mis creencias y el empeño leal con que lie a
al último extremo los sagrados deberes que impone a mi puesto la
gran Institución de la Mas.-. Esp á que con tanta honra perte-

r u a r o s , mis HH.-., áque hagais lo mismo; alentaros en vuestra

tarea y procurar avivar en vosotros sentimientos que abrigáis tan
intimos, sería, más que desconoceros, afrentaros. ..
La unión fraternal que cariñosamente nos liga y la sanidad de
nuestras creencias serán prendas seguras del
preponderancia de nuestra santa y elevada asociación, y este sen
S o que n u n ca en m i c o r a z ó n s e e n tib ia , - ' ' ^ 7 “
la persistencia y la fé de que constantemente habéis dado y daréis

S d b i d . QQ.-. HH.-., el abrazo fraternal que os envía desde

los VV.-. de la Habana á 16 de Jumo de 1881 ( e . ‘ . v . V. . m . ..
Luis Cánovas (Canoa).-(Hay, un sello.)

R EVISTA MASÓNICA.

nuestro derecho.

1.

NO cabe negar la importancia que tienen las relaciones interna­

cionales en las esteras del derecho masónico. Jamás hemos descono­
cido esL gran verdad. Institución que afecta por prmc.pal objet.vo
el esta b le L bajo bases sólidas é indestructibles la fraternidad entre
iL hombres que pueblan el universo mundo y la solidaridad humana
en su más lata acepción, como fundamentos esenoialisimos para lle­
gar a levantar el suntuoso edificio de la libertad y de la ^
Masonería, si ha de cumplir su generosa misión de paz y de progres

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 248 BOLETIN OFICIAL.

mdefln.do, debe necesariamente dedicar especial atención y cuidadoso

esmero a extender y ensanchar aquellas relaciones. Esto es indiscu­
tible. esto es axiomático dentro de los rectos principios que informan
el sentido de la sociedad masónica, que, con imperceptibles variado,
nes en la forma de organización, osuna en espíritu doquiera sea el
punto del globo en que la vemos establecida.
Pero de aquí, á proclamar que no hay derecho ni regularidad en
tanto que éstos no arranquen de la tradición, existe un abismo in­
franqueable, como el que indudablemente existe entre lo antiguo v
lo nuevo, entre las ideas que yacen en la tumba del pasado y las que
dan calor y vida en los tiempos que corren á las sociedades mo­
dernas.
Y lo extraiio del caso es, que los mismos escritores que más pom-
rosamente se engalanan con el titulo de reformistas, tronando cons­
tantemente con el formalismo del rito y ,le la liturgia; los que tien-
den a descartar los símbolos dentro de nuestras prácticas, son los
mas entusiastas sostenedores de esa doctrina, que nosotros gráfica-
niente pudiéramos llama,. Derecho diomo por los puntos de semejanza
que hallamos entre ella y la que defendió siempre el Pontificado con
relación al gobierno civil de las naciones.
No hay más que abrir el libro de la historia para volver los oios
con horror y el oorazon con espanto ante las terribles catástrofes
que semejantes errores, mantenidos con miras egoístas é interesa-
das, produjeron en la antigüedad y en la Edad Media.

con^eTnode/°‘’ “ r ' “ '»<=ha permanente

podei cv il, abándose unas veces con las masas populares
contra el Imperio, y otras con el feudalismo oligárquico para hollar
ejai 3-esclavizar al pueblo que contribuyó á encumbrarlos deseo-’
nociendo sus derechos y sepultándolo en el más deplorable e’nvileci-
lento, aquellos que se decían representantes de Dios sobre la tierra
eparüendo Estados, consagrando la usurpación, sancionando el ne-
ando crimen y santificando la traición, y tendiendo en todas ocasio-
inve’‘ r r " " ‘ “ ’’ ^ “ ™ ” bre de un derecho
: : r r “ h r n i d a 7 “ ™'“^’ ^
Borrando con su benódeo influjo las supersticiones y los fanatis-
mos^eligiosos, ,a revolución ha creado un derecho n l o en a r l
nía la razón humana; dándonos á conocer los secretos de la na­
turaleza y descorriendo el velo de muchos misterios, la filosofía y ias
emneas exactas han abierto risueños y dilatados hm-izontes a, pén
míen o y a la inteligencia del hombre, que se acerca tanto más al

Ayuntamiento de Madrid
 REVISTA MASÓNICA. 249

Gran Arquitecto cuanto más procura investigar las causas y los

efectos de todo lo que nos rodea.
Y tanto es así, y por tal manera el derecho nuevo, en cuya elabo­
ración prestó eficacísimo concurso nuestra Orden, se ha infiltrado en
el corazón de los pueblos, saturando con su poderoso aliento el alma
de todas las instituciones democráticas, que hoy pasan por anacróni­
cas todas las sociedades que pugnan por mantener la pureza de los
antiguos ideales.
Obsérvese cómo se forman los Estados modernos. Nace el Munici­
pio á la vida pública, del Municipio brota la Provincia, de la Provin­
cia sale la entidad nacional, regularizando los poderes, que vienen á
reglamentar el ejercicio de la autoridad y á garantizar el libre des­
envolvimiento de los derechos individuales. La organización de abajo
a arriba; el derecho sancionando el hecho; el self-gooernment dic­
tando las leyes y armonizando todos los intereses legítimos.
¿Habrá nación, habrá potencia en la actualidad, por grande que
sea su podery por mucho que se aforre á las tradiciones históricas,
queso niegue á reconocer la soberanía de un Estado cuya Constitución
arranque de la voluntad, ó mejor dicho, del consentimiento expreso
de la mayoría de los ciudadanos? La jurisprudencia escrita en los
anales de la diplomacia contesta negativamente la pregunta. Aun las
mismas potencias que han establecido por derecho de conquista
colonias en territorios apartados de las metrópolis, se vieron obliga­
das, por la fuerza misma de los hechos consumados , á reconocer la
independencia cuando la mayoría de los asociados quiso y pudo sa­
cudir el yugo del poder central, constituyéndose en Estados perfecta­
mente autónomos.
¿Y es, por ventura, la Masonería una institución tan rezagada en
el camino del progreso que no ha de reconocer estos principios en­
carnados en la conciencia humana? ¿Será más intransigente que la
diplomacia, que jamás pecó de generosa?
De ningún modo. La Masonería, tal como actualmente la conoce­
mos, que tiene su cuna en el pueblo más libre de Europa, que ha tun-
dado la gran República norte-americana, que lucha con el clerica­
lismo en Bélgica, que reivindica la unidad italiana, dando el cetro de
la soberanía al más humilde, pero al más popular de sus príncipes,
no debe, no puede en manera alguna vivir apegada á la tradición,
porque esto seria tanto como afirmar el derecho divino, borrando de
una sola plumada todos los adelantos conquistados en los dos últimos
siglos para retrogadar á los famosos tiempos del poder personal de
los Reyes absolutos, que no eran legítimos mióntras no recibían la

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 250 BOLETIN OFICIAL.

consagración y la sanción del Pontificado. La Masonería vive y se

alimenta en las más puras y cristalinas fuentes de la civilización,
prestando su fecundante savia al árbol frondoso de la libertad políti­
ca en su más alto significado.
Tal vez haya entre nosotros espíritus meticulosos y conciencias
medrosas que califiquen de atrevido el símil que acabamos de hacer.
Empero como las inducciones no son ni pueden ser producto de la
fantasía, sino resultado lógico de investigaciones eminentemente ra­
cionales, ni tememos la critica ni habrá de arredrarnos la censura
más ó mónos apasionada.
Aparte de los ideales que persigue la Masonería, nosotros estudiamos
los organismos dentro de los cuales se mueve y los recursos que
adopta para desenvolverse, porque, conocidos los medios y averigua­
dos los fines, no es difícil establecer comparaciones con otras entida­
des que simultáneamente representan análogos ó parecidos intereses.
Por eso, en cuanto á su organización y en muchas de sus tenden­
cias. no titubeamos en asimilar la vida y la existencia de la Masone­
ría á la existencia y á la vida del Estado civil moderno, de ese Esta­
do que ha comenzado á iniciarse en algunos países afortunados, pero
que aun pertenece en su totalidad al dominio de la filosofía. Es más;
aun abrigando el convencimiento de que la Masonería debe ir á la
vanguardia del progreso, acogiendo ó implantando inmediatamente
en su seno todos los grandes adelantos para llevarlos mediatamente
sm Violencias ni perturbaciones, á las sociedades profanas, no hemos
querido ir tan léjos, ateniéndonos única y exclusivamente á lo que
entra en los dominios de la realidad, á lo que es tangible, á lo que ya
funciona en la vida activa de las naciones en que se practica el Self-
gooernment en toda su pureza.
Viniendo, por consiguiente, á los puntos capitales de la cuestión
que nos proponemos tratar en este trabajo, vamos á sintetizarlos con
estas preguntas:
¿Creen las potencias masónicas de Inglaterra y de los Estados-
Unidos, Suiza. Francia, Italia, etc., etc., que una potencia masónica
organizada bajo la base de la soberanía de la totalidad de sus aso­
ciados, merece ser admitida, no reconocida, en el concierto de la Ma­
sonería universal? ¿Tiene más fuerza el derecho que arranca de la
tradición, cuando ésto ha prescrito, cuando ha caducado, por aban­
dono ó porque carece de partidarios, que el que toma su origen en los
hechos consumados, consiguiendo con la pureza de sus prácticas
reunir en torno suyo un grupo importantísimo y respetable en nú­
mero y calidad?

I:

Ayuntamiento de Madrid
 REVISTA MASÓNICA. 251

¿Podrá el futuro Congreso de Turin, si es que se llega á reunir, de­

jar de rendirse ante la evidencia, reconociendo la legalidad y lare-
.^ularidad de nuestro Gran Oriente, y rechazando por perturbadores
álos insignificantes grupitos que con absurdas pretensiones vienen
creando obstáculos á la completa unificación de la Masonería espa­
ñola? ¡¡.No dirá nada á los sentidos ni á la inteligencia de los Supre­
mos Consejos que se disponen aechar las bases del derecho inaso-
nico Jurisdiccional ó internacional, la robusta organización del Gran
oriente de España, que preside un hombre tan ilustre como Romero
Ortiz. que cuenta con 160 Logias en actividad, y cuyas Camaras fun­
cionan sin interrupción dentro del Rito Escocés?
Aun cuando nosotros sustentamos particularísimas opiniones en
esta materia, com o más de una vez lo hemos significado desde las
columnas de esta R e v i s t a , habremos de prescindir en absoluto de
nuestro criterio individual para contestar, dentro de la mas pura o r ­
todoxia m asónica escocesa, las preguntas que anteceden.
Pero esto merece capítulo aparte, y aplazamos nuestra tarea para
el próximo número.
F. P. (B olívar ), gr.\ 18.

ISLA DE CUBA.
Llamamos la atención de nuestros lectores sobre la siguiente
plancha que ha circulado profusamente en los Valles de la p a n An -
tilla ES un documento notable tanto por lo mesurado de la forma
como por los preciosos datos que contiene. Es además ejemplo de esa
tolerancia que sólo existe y se practica dentro del orden masónico
tan calumniado por los que se dicen apóstoles de una religión que
ante todo y sobre todo pide humildad y candad a sus afiliados.
Dice así:
«A L R E V E R E N D O P . SA N TO S.
«Reverendo Padre; Gratamente impresionados, anoche hemos sa­
lido de la iglesia al oir las explicaciones que habéis dado respecto a
los fines que se propone la Masonería. Y decimos gratamente impre­
sionados, porque en los principios del verdadero masón esta perdonar
las injurias, vengan de donde vinieren; pero habéis de permitirnos,
aunque sólo sea por respeto á la verdad, desconocida en ' ' “ stra p -
roracion de anoche, deciros que habéis estado en el error al suponer
que la Masonería es causa de todos los males que a igen a

Ayuntamiento de Madrid
 252 BOLETIN OFICIAL.

ciad, al afirmar que niega la existencia de Dios, al decir que ella es

responsable de cuantos males afligen á la humanidad, y que desea
des rmr a todos los hombres para reinar ella sola, paseando por todas
partes la tea del incendiario.
»La verdad, Rdo. Padre, no debe combatirse con la mentira, y per­
donad qne os dé este consejo un masón. Precisamente lo único que se
exige al hombre para ingresar en la Institución es la creencia en un
Dios, y tanto es así, que si hubiese en el mundo un ateo, que no lo
hay, ese es el único á quien se le negarla la entrada en nuestros
augustos Templos.
«Respecto á que la Masonería sea responsable á los males que afli ■
gen a la sociedad, os diremos que, al extenderse la Institución por
todas partes, ha ido derramando la luz donde no habla más que tilde-
blas, y extendiendo los principios salvadores de igualdad, libertad y
fraternidad que predicó el Mártir del Calvario, nuestro H •. Jesús
cuyo ejemplo de mansedumbre y humildad no imitáis vosotros los
que os llamáis sus ministros.
»lAhI ,Os atrevéis á hablar de la tea del incendiario, vosotros los
que en las hogueras de la Inquisición habéis asesinado en nombre de
un Dios que reprueba vuestras predicaciones, atormentando con los
horrores del martirio a las innumerables victimas de vuestro fa-
ndftismoi
Podéis decirnos cuántas víctimas han sido inmoladas por la Ma-
onerianQuereis que os digamos cuántos inocentes habei“ sacrifl
cado vosotros por las delaciones del Rdo. P. José Torrubias cen­
sor y revisor del Santo Oficio en Madrid en 1750, que faltando á
sns juramentos denunció en España á 97 Logias Masónicas, cu-
0^0* 0^ ” O" el destierro ó en elsupli-
drciem “ ! n r ' x n O™ han ocasionado las Buías
tn. c « r , J -' XIV, Pío Vil y León XII; los edictos de

d L d e Í c fd T pedieron en las gra-

I s 1 íQeereis que os recordé-
os los tormentos que hicisteis sufrir á Jacobo Mouton, al Mayor
dArlinoourt,aD.OyresdeOrnelles-ParraEao en Portugal á T^ssin
n Francia, a Tournon, á Bevilacqua, al marqués de Tolosa, al gene­
ral Alava, al Dr. Luque, al jóven Sarda, al capitán Alvarez de Soto-
n Z r ;M Cabrillana, al teniente coronel Galvez ó al ca­
nónigo Marina, que perseguisteis, fusilásteis ó ahorcásteis en nuestra
patria por ser nuestros HH.-.? jQnereis que traigamos á vuestra
memoria la tortura de los protestantes de Inglaterra, la matanza de

Ayuntamiento de Madrid
 REVISTA MASÓNICA. 253

albigenses y hugonotes en Francia, el suplicio de los reformadores

de Italia ó la combustión de herejes en nuestra España por vuestro
fanatismo? ¿Dónde están entre nosotros los Inocencio III, Carlos I.
Catalina de Médicis, Felipe II, Luis XIV, Guido Fox, Jacobo Clemen­
te, Juan Chatel, Felton y los Rdos. PP. Burton, Lachaisse, Le-
tailler, Torrubias ó Merino, regicida de nuestra España? ¿Queréis
presentarnos víctimas do nuestra intolerancia como Galileo, Campa-
nella, Savonarola, Vanini, Urbano Grandier, los Templarios y la po­
bre familia á que robasteis en Italia el famoso niño Mortara? ¿Habéis
olvidado los crímenes del Papado?
«Nosotros no atacamos á la Iglesia católica apostólica y romana;
vosotros, con vuestra intolerancia, habéis sido, sois y sereis sus ver­
daderos y únicos destructores. Nosotros, á pesar de que nos habéis
llamado anoche monstruos vomitados porel infierno, somos más tole­
rantes que vosotros, y no hacemosá la religión responsable de los er­
rores de sus falsos apóstoles. Nosotros nos complacemos en socorrer
al desgraciado sin preguntarle á qué religión pertenece; nosotros he­
mos distribuidoelaño último entre los pobres de esta Isla más de 82.60Ü
pesos fuertes, sacados de nuestro bolsillo particular y ganados con el
sudor de nuestra frente; nosotros costeamos la educación de numero­
sas niñas á quienes vosotrosteneiscompletamente abandonadas; nos­
otros muchas veces, pero muchas, hemos tenido que pagar los derechos
que el Vicario de esta ciudad exigia para dar sepultura al cadáver de
un infeliz que murió en la miseria, porque vuestra caridad niega las
aguas del bautismo y el rincón de una humilde sepultura al que no
os da algunas monedas, que no empleáis—como Dios manda—en
enseñar al que no sabe, en dar de comer al hambriento ni en ves­
tir al desnudo, sino en ostentar un lujo fastuoso impropio de vuestro
ministerio, y muchas veces en torpes vicios y en bacanales licen­
ciosas.
«Vuestra predicación no nos perjudica, porque combatís con el
error. ¿No veis que incurrís en una negación inexplicable al decir
que paseamos por el mundo la tea del incendiario y al pedir que se
quemen nuestras Logias? ¿En qué punto délos Evangelios habéis leído
una frase igual ó remotamente parecida? ¿Habéis olvidado las narra­
ciones de la mujer adúltera, de la Samaritana y del publicano que nos
hizo Jesús?
«Por eso, hijos de la f é , nos complaceríamos en sacaros del error
en que estáis, aunque para ello tuviéramos que levantar templos con­
tra templos, altares contra altares, según la encubierta frase de vues­
tro dignísimo prelado No penséis tan mal de la Masonería, ni llaméis

Ayuntamiento de Madrid
 254 BOLETIN OFICIAL.

á los masones hijos del demonio, porque ni vosotros ni nosotros esta­

mos en posesión de la verdad, y no sabemos el fin que nos espera.
«Práctica por práctica, la nuestra es de más valor, porque se pre­
dica con el ejemplo, y porque nuestra única aspiración es formar de
la humanidad una sola familia, en la cual impere sobre todas las co­
sas la creencia en Dios, que es manantial fecundo de sabiduría y
causa eterna ó inmutable de todo lo bueno, de todo lo bello y de todo
lo verdadero.
«Recibid, Rdo. P. Santos, el perdón que los masones de Cárdenas
por mi conducto os envían por las calumnias é injurias que la noche
anterior habéis vertido en la cátedra del Espíritu Santo.—Que Dios
os ilumine.—Cárdenas 8 de Mayo de 1881.—Masíaí Ferrety. N.\ S.\
Muelo Seenola.yi

RELACIONES EXTERIORES.

Tenemos á la vista una interesantísima carta particular, fechada

en París el 9 del corriente y suscrita por el ilustre hermano Sebas­
tian Salvador, grado 33, nombrado representante del Serenísimo
Gran Oriente de España cerca de várias potencias masónicas de
Europa.
El hermano Salvador relata el magnífico recibimiento que se le ha
hecho en los varios puntos que ya ha recorrido cumpliendo su alta
misión.
Nada diremos del Gran Oriente de Francia, con el cual mantene­
mos cordiales relaciones desde que se firmó el tratado de reconoci­
miento. El Gran Secretario M. Thévenot, M. Gammas, miembro del
Supremo Consejo, y M. de Hamel, Secretario del Presidente de la Re­
pública, se han excedido en dar constantes muestras de atenciones y
de cariño al hermano Salvador. Este, por su parte, agradecido, hace
de los expresados hermanos merecidísímos elogios.
«Después,—dice nuestro querido hermano en la carta á que venimos
refiriéndonos,—fui á visitar al Supremo Consejo de Francia, siendo re­
cibido muy bien por su Gran Secretario M. Millet de Saint-Pierre, con
el cual ya me unjan relaciones de amistad. Cuando tratamos de los
asuntos de la Orden, le hice notar la extrañeza con que habíamos
visto que una potencia masónica tan antigua y acreditada como era
Supremo Consejo de Francia, reconociera á la confederación de el
Sevilla.

«Entóneos dicho hermano me contestó que no había tal reconoci­

miento, sino una simple admisión de relaciones oficiosas; que habien-

Ayuntamiento de Madrid
 REVISTA MASONICA. 255

do nombrado aquéllos un garante de amistad, se Ies había contesta­

do en iguales términos hasta tanto que hubiese una potencia masónica
oficialmente reconocida en España, y que, por lo tanto, si nosotros
queríamos ponernos en el mismo caso, también se aceptaría con
gusto nuestra representación cerca del Supremo Consejo. Habiendo
dado á conocer un número de El Taller, que creo es del mes de Fe­
brero, y que M. de Saint-Pierre no había visto, en que este periódico
da por ofleiales con Francia y con Laussanne relaciones que son pu­
ramente oficiosas, me dijo que harían rectificar semejante versión,
puesto que ningún Supremo Consejo confederado podría reconocer
en España más Supremo Consejo que el que dé mayores pruebas de
regularidad en el convento que ha de celebrarse en Turin el 24 de
Octubre próximo (1); pero como el expresado hermano opina, que tal
vez ese convento no se celebre hasta el año próximo, por varias di­
vergencias que han surgido entre los Supremos Consejos confede­
rados, me repitió que, si queríamos ponernos en igual situación que
los de Sevilla, respecto de éstos sería cosa aceptada; yo le contestó
que nosotros no podíamos aceptar, porque nuestro Supremo Consejo
es el que mayores pruebas de regularidad puede dar, y porque ade­
más nuestro Gran Oriente es el que representa mayor número de
masones. Logias y Capítulos, y el que goza de mayor prestigio y
autoridad dentro y fuera del mundo masónico.»
Nuestro estimado hermanóse extiende en algunas consideracio­
nes sobre este asunto, consideraciones que suprimimos por haberlas
de tratar nosotros más extensamenle en los artículos que comenza­
mos á publicar en el presente número. Baste saber que el represen­
tante del Gran Oriente de España salió complacidísimo de la confe­
rencia con M. de Saint-Pierre, el cual sabe ahora cosas que descono-
cia en absoluto acerca de la Masonería española y del estado de
cosas actual. , ... ,
Pero si estas son las impresiones que nos comunica relativamente
á Francia, no son mónos gratas las que ha recibido en Inglaterra,
donde permaneció desde el 27 de Junio hasta el día 9 del actual
En las conferencias que allí ha tenido pudo convencerse de las
excelentes disposiciones que existen en el Supremo Consejo de In­
glaterra é Indias y en la Gran Logia respecto de nuestro Gran
Oriente. «El voto del Supremo Consejo, dice, nos será favorable con
el convento y sin el convento.» _
L o d e l i c a d o del asunto y el temor de ser indiscretos nos impide
r e v e l a r por ahora los datos que nos trasmite el hermano Salvador,
el cual nos participa que el dia lo (hoy) salía para Suiza.

(1) La caria de nuestro querido H.-. Salvador nos ha inspirado la serie de artículos
que bajo el titulo de N u e s tr o Derecho com ea za m oa hoy á publicar.

Ayuntamiento de Madrid
 256 boletín oficial .

SECCION DE NOTICIAS.

Nuestro Gran Comendador v Gran MaestPñ p1 Tinc*t.a

Anton.o Romero Ortiz, ee halla^actuSmente en los talos do ™¡no“

ha llegado á Madrid el hermano

gSm gr. . 33. y miembro que fuó de la Gran Dele-

Deseárnosle larga vida y muchas suscriciones,

merta,“ ff^dlrigido i " i '" - ™ ./'e Al-

(liencia, interesando los sentimfentos
favorde los desgraciados

reeelon gue /antL v^ícti¿arha““c \ S r e „ fr „ r s ^ ^ o s “ e i l i S I ;

aquffiTnfólicel hilos‘dtfrabl^^^^
petfcio“ “ e“ “ Utalroi h r r l S s ''l e ™ t r r l i "s M a 'í’fifía 'd
no reconoce limites; si acude en ‘inviií^^írirT^- caridad masónica
con mayor motivo debe acndh á“ re ™ d tr‘ l,? l'¿ “ |oliW
desgracia que ha caído sobre millares de esnañolV^s P „,!ÍIni
la madre patria y bajo las inclemencias d r S I sil Ibrliad n r-'d L ®

tada Logia Union P ^ a s í « V . ^ t a e ¡ ^ ^ « c i S ^ ^ <=‘-

nuel Orts Ortuño, ocurrido el 23 de Junio último ^ '

el án im T .lllls'‘ lt a lV l“ d e l“ “ | u | V /c f T T '° " “

nar con brillantez el puesto que ocupaba’ clesempe-
Nos asociamos al naturarclolor W e masones,
por tan irreparable pérdida. ^ experimenta aquella Logia

MADRID: ISSl.-EstablecimieQto tipográfico del Gr.-. Or.-. de España.

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