Casacion Prescripcion

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En lo principal, deduce recurso de casación en el fondo; y, en el otrosí, patrocinio del recurso

Iltma. Corte de Apelaciones de Puerto Montt

Gastón Olivos Bravo, abogado, en representación, según se encuentra acreditado, de la


A.F.P. CAPITAL S.A., en estos autos sobre recurso de apelación caratulados “A.F.P.
CAPITAL S.A. CON OMAR ALARCON 0”, Rol 248-2023, principal, a S.S. Iltma.
respetuosamente digo:

Dentro de plazo, interpongo recurso de casación en el fondo contra la sentencia definitiva de


segunda instancia, pronunciada con fecha 29 de julio de 2023 (en adelante, la “Sentencia
Recurrida”), solicitando a S.S. Iltma. admitirla a trámite y ordenar se eleven los autos a la Excma.
Corte Suprema, para que, conociendo del mismo, acoja el recurso e invalide la Sentencia Recurrida,
dictando acto continuo, pero separadamente, la pertinente sentencia de reemplazo que declare que
se rechaza la excepción de prescripción de la acción ejecutiva opuesta por la contraria.

Lo anterior, fundado en los antecedentes de hecho y de derecho que paso a exponer.

I. ANTECEDENTES DEL RECURSO

La Sentencia Recurrida infringió los artículos 2503 y 2518 del Código Civil al exigir -para la
interrupción civil de la prescripción- que la notificación de la demanda de autos se realice
dentro del plazo de prescripción: tal como lo ha concluido la doctrina más autorizada (y
recientemente la Excma. Corte Suprema) la interrupción civil se cuenta desde la
presentación de la demanda, y si bien es cierto que sin su notificación ella carece de
significado procesal, una vez efectuada la notificación se retrotraen sus efectos a la
fecha de la presentación de aquélla.

I. GENERALIDADES: DEMANDA Y EL ORIGEN DE LA DEUDA


COBRADA EN AUTOS

1. A.F.P. CAPITAL, interpuso demanda ejecutiva en contra de OMAR DEL


CARMEN SOFFIA ALARCON, a fin de que se despache mandamiento de ejecución y
embargopor la suma de $1065462.-, más intereses, reajustes y costas.

2. Lo anterior, por cuanto don OMAR DEL CARMEN SOFFIA ALARCON, adeuda a
mí representado la suma de $1065462.-, por concepto de cotizaciones previsionales
adeudadas al afiliado ANTONIO ROLANDO CHAMBLA PAREDES,
R.U.T. 8.994.155-5, por los períodos de 12/2011 a 02/2014.

3. Pues bien, con fecha 27 de septiembre de 2016 se ingresó demanda ejecutiva en


contra de don Omar del Carmen Soffia Alarcón ante el Juzgado de Letras del Trabajo de
Castro, la que finalmente fue notificada 6 de marzo de 2023 al ejecutado de autos en su
domicilio de PUDAHUEL S/N, K.M. 1170, Sector Piruquina, comuna de Castro, en forma
personal al ejecutado.

II. LA EXCEPCIÓN DE PRESCRIPCIÓN OPUESTA POR EL


EJECUTADO

4. En estos autos compareció el ejecutado oponiendo a la ejecución la excepción de


prescripción de la acción ejecutiva. Indicó que, conforme a lo dispuesto por el artículo 464
N° 17 del Código de Procedimiento Civil, en relación con el artículo 5° de la Ley 17.322, el
plazo de prescripción de la acción ejecutiva, para el cobro del crédito consignado en la
resolución de cobranza establecida en esta ley, en contra del deudor de la misma, es de 5
años contados desde la fecha de la terminación de los respectivos servicios.

5. Añadió que aparece de manifiesto que respecto del trabajador Antonio Rolando
CHAMBLAS PAREDES, este habría dejado de prestar servicios hace más de 5 años a la
fecha de la notificación de la demanda, toda vez que este dejó de prestar servicios el 20 de
febrero de 2014.

6. Por última, solicita se declare la prescripción de la acción ejecutiva según lo


dispuesto en el artículo 31 Bis de la Ley N° 17.322, toda vez que habría transcurrido el
plazo que establece allí la ley para dicho efecto.

III. LA SENTENCIA RECURRIDA

7. La Sentencia Recurrida, procedió a acoger la excepción de prescripción por


considerar que: “En opinión de esta sentenciadora, para interrumpir la prescripción de la
acción y de la deuda, la ejecutante debe demandar y notificar su pretensión, conforme lo
disponen el artículo 31 bis y artículo 2, ambos de la ley 17322, en relación al artículo 464
N°17 del Código de Procedimiento Civil, puesto que solo así la se traba Litis y la ejecutada
toma conocimiento exacto de la pretensión deducida en su contra y puede proceder al pago
o defenderse y por ende enervar la acción.”.
8. Luego, y a pesar de los argumentos esgrimidos por esta parte en el recurso de
apelación presentado, la Iltma. Corte de Apelaciones de Puerto Montt confirmó con fecha
29 de julio de 2023 la sentencia de primera instancia.

I. CAUSALES DEL RECURSO DE CASACIÓN EN EL FONDO

9. En la especie se encuentra conculcados los artículos 31 Bis de la Ley 17322, y 2503


y 2518 del Código Civil, según detallaremos más adelante.

(A) PRIMER ERROR DE LA SENTENCIA RECURRIDA:


EFECTUADA LA NOTIFICACIÓN SE RETROTRA EN
SUS EFECTOS A LA FECHA EN LA QUE SE INTERPUSO LA
DEMANDA.

10. Como S.S. Iltma. podrá apreciar, la Sentencia Recurrida yerra al exigir que la
notificación de la misma se realice dentro del plazo de 5 años para la prescripción de
la acción.

11. De acuerdo con el artículo 2518 del Código Civil: "La prescripción que extingue las
acciones ajenas puede interrumpirse, ya natural, ya civilmente. Se interrumpe naturalmente
por el hecho de reconocer el deudor la obligación, ya expresa, ya tácitamente. Se
interrumpe civilmente por la demanda judicial; salvo los casos enumerados en el artículo
2503".

12. Como S.S. Iltma. sabe mejor que esta parte, el efecto de la interrupción y su
finalidad es doble: (a) paralizar el curso de la prescripción, y; (b) hacer ineficaz todo el
tiempo transcurrido hasta que se produce el acto interruptivo. Tal como lo señala el artículo
2518 del Código Civil, ya transcrito, la causa de la interrupción puede provenir del
reconocimiento del deudor, o de una demanda judicial.

13. La interrupción civil "supone que el acreedor salga de su inactividad; bien que el
legislador haya exigido que esta actividad del acreedor se produzca ante los tribunales y
que ella implique la intención de este de cobrar su crédito, pero ello se produce tanto si el
acreedor está en situación de hacerlo inmediata y directamente como cuando con tal
finalidad pide privilegio de pobreza, prepara la vía ejecutiva, presenta una medida
prejudicial y, en general, cuando realiza cualquier gestión judicial que manifiesta su
intención de cobrar su crédito"1.

14. Tal como se indicó en el capítulo precedente, resulta de meridiana claridad que
A.F.P. Capital no ha permanecido inactivo en su gestión de cobro de los créditos

1ABELIUK MANASEVICH, Rene: Las Obligaciones. Tomo II. Editorial Jurídica de Chile. Santiago, 1993
pág. 995.
contenidos en las facturas, sino que, por el contrario, realizó en sede judicial todas las
actuaciones y trámites conducentes a tal fin, presentando, con fecha 27 de septiembre
de 2016 - antes de transcurrido poco más de un año desde la fecha de la terminación
de los servicios- la demanda ante el Tribunal de S.S.

15. Y esa presentación, S.S. Iltma., produjo que la prescripción de la acción


ejecutiva se interrumpiera, perdiendo el deudor todo el tiempo transcurrido desde el
vencimiento, toda vez que la presentación de la demanda como la notificación practicada con
posterioridad constituye una sola unidad jurídica.

16. En efecto, se cumplen los requisitos establecidos por la ley, la doctrina la


jurisprudencia para que opere la interrupción civil de la prescripción.

(i) EXISTENCIA DE UNA DEMANDA JUDICIAL

17. La prescripción adquisitiva se interrumpe civilmente según el art. 2503 del Código
Civil en virtud de “todo recurso judicial intentado por el que se pretende verdadero dueño
de la cosa, contra el poseedor”. Algo similar se dispone respecto de la prescripción
extintiva, la que “se interrumpe civilmente por la demanda judicial” (art. 2518 inc. 3º CC).

18. Sobre el particular, se ha resuelto que “debemos entender por demanda judicial
cualquier gestión o medida judicial que el acreedor plantee en orden al reconocimiento o
defensa de su derecho, en oposición a reclamos o requerimientos extrajudiciales, que sin
lugar a dudas carece de fuerza interruptiva, de acuerdo con nuestra legislación”.

19. En la especie, la demanda ejecutiva fue presentada ante el tribunal de S.S. el día 27
de septiembre de 2016 (tan solo poco más de un año desde la fecha en que supuestamente
se habría puesto término a los servicios del trabajador) con lo que se cumple el primer
requisito para que opere la interrupción civil de la prescripción.

(ii) NOTIFICACIÓN LEGAL DE LA DEMANDA

20. El segundo requisito para que opere la interrupción civil de la prescripción es que se
notifique legalmente la demanda. Consta en autos que la demanda fue notificada
personalmente al ejecutado con fecha 6 de marzo de 2023, por el receptor judicial don
Rodrigo Cárdenas Subiabre.

21. Al respecto, la Sentencia Recurrida, siguió la tesis del ejecutado, que expresa: “En
suma, respecto del trabajador Antonio Rolando CHAMBLAS PAREDES, quien dejó de
prestar servicios hace más de 5 años contados hacia atrás, desde la fecha en que se notificó
a la demanda ejecutiva de autos, esto es, el día 06.MAR.2023, esta acción encaminada al
cobro de lo que se pretende por la ejecutante se encuentra prescrita, toda vez que, respecto
del trabajador individualizado, dejó de prestar servicios el 20.FEB.2014. De esta forma la
acción ejecutiva se encontraba prescrita al 06.MAR.2023, dado que, según lo establecido en
el Art. 31 bis de la Ley 17.322: “La prescripción que extingue las acciones para el cobro de las
cotizaciones de seguridad social, multas, reajustes e intereses, será de 5 años y se contará desde el
término de los respectivos servicios””.

22. Cabe preguntarse, S.S. Iltma. ¿Es necesario, para que se produzca la
interrupción, que la demanda se notifique dentro del plazo de prescripción?

23. La respuesta, S.S. Iltma., es negativa, como lo comprueba el texto de la ley, la


doctrina y la jurisprudencia. Veamos.

24. Para que se produzca l interrupción de la prescripción, el Código Civil exige


únicamente la existencia de un “recurso” o “demanda judicial” lo cual es confirmado por el
mismo artículo 2503 del Código Civil, según el cual, basta para producir dicho efecto que
se haya “intentado el recuso judicial”, sin necesidad de que se notifique dentro del plazo en
cuestión.

25. El hecho que el artículo 2503 del Código Civil en su numeral 1° –al cual se remite
también el artículo 2518– establezca que no se podrá alegar interrupción “si la notificación
de la demanda no ha sido hecha en forma legal”, quiere decir que para producir efectos
procesales y dar inicio al proceso, la demanda debe ser notificada, lo cual no está en
discusión, pero eso no significa que la ley exija que la notificación dentro del plazo sea
el instante de la interrupción, sino la simple constatación de que la nulidad de la
notificación borra el efecto interruptivo que haya podido producirse.

26. Por consiguiente, si bien la demanda sin notificación carece fuerza interruptiva,
“EFECTUADA LA NOTIFICACIÓN SE RETROTRAEN SUS EFECTOS A LA
FECHA EN LA QUE SE INTERPUSO LA DEMANDA O RECURSO. De ahí que ha
surgido la práctica (hoy obligación legal) de poner cargo a los escritos”.2

27. De admitirse la conclusión contraria, se disminuye –para quien pretende


interrumpir- el plazo prescriptivo, comoquiera que el acreedor tendría que salir de su
inactividad con mucha más anterioridad, porque además debe preocuparse de que la
demanda resulte efectivamente notificada, esto con las incertidumbres propias de la gestión
judicial.

2 FABRES FERNÁNDEZ DE LEIVA, José Clemente: Instituciones de Derecho Civil chileno. Imprenta y Librería
Ercilla, 2ª edición. Santiago, 1902. t. II, nt. 95, pp. 446. En el mismo sentido, DOMÍNGUEZ Águila y
PEÑAILILLO ARÉVALO, expresan que deben distinguirse los efectos procesales de la notificación de sus efectos
sustantivos y que la presentación de la demanda es suficiente para evitar la prescripción ya que demuestra que el
dueño o acreedor no ha permanecido en la inactividad en que se funda la institución de la prescripción en sus dos
modalidades. Énfasis agregado.
28. Nuestra jurisprudencia no ha tenido reparos en señalar que basta la notificación de la
demanda para interrumpir la prescripción, aunque esta se produzca con posterioridad al
plazo de prescripción. Así por ejemplo, se ha fallado:

 “La interrupción civil se cuenta desde la presentación de la demanda, y si bien


es cierto que sin su notificación ella carece de significado procesal, una vez
efectuada la notificación se retrotraen sus efectos a la fecha de la presentación
de aquélla. Esta es, por lo demás, la tesis que más se aviene con el espíritu de la
institución, ya que es la presentación de la demanda, o sea el acto de reclamar o
perseguir su derecho en juicio por parte del acreedor, el evento público y ostensible
que pone de manifiesto el propósito del titular del derecho de instar por su
resguardo poniendo en conocimiento de la justicia su pretensión en tal sentido. De
otra parte, confirma esta interpretación la idea de que los efectos de la interrupción
no pueden quedar expuestos a las artes y maniobras del deudor, quien, una vez
presentada la demanda interruptora, podría dilatar o dificultar la práctica de la
notificación más allá del vencimiento de la prescripción, impidiendo de esta manera
que ella quedara interrumpida con el recurso judicial del acreedor que tiende
precisamente a impedir su curso”3.

Actualmente, la Excma. Corte Suprema reconoce la mismapostura:

 ““Sexto: Que, centrada en tales términos la controversia, corresponde determinar,


entonces, cuándo se produce la interrupción de la prescripción de la acción; en otras
palabras, se debe dilucidar si la presentación de la demanda y su notificación, son
elementos que la constituyen o, si esta última actuación, sólo configura una
condición necesaria para alegarla en la instancia respectiva.

Para algunos autores, la tesis correcta sostiene que la demanda se debe notificar
antes del vencimiento del plazo de prescripción, ya que se trata de una actuación
ineludible para que las resoluciones judiciales produzcan efecto, postura que
encuentra una razón de texto en el artículo 2503 número 1 del Código Civil, en el
sentido que la interrupción no se produce “si la notificación de la demanda no ha
sido hecha en forma legal”. Para otros, esta comunicación no es requerida,
afirmación que se desprende del tenor de los artículos 2518 y 2503 del citado
código, que aluden a “la demanda judicial” y a todo “recurso judicial”,
respectivamente, argumento al que agregan otras consideraciones prácticas,

3ILTMA. CORTE DE APELACIONES DE VALPARAÍSO, 29 octubre 1963, Rev. de Der., t. 60, sec. 2ª, pág.
130.
256, Nº 1, pág. 71, bajo la base que el efecto de la interrupción no podría quedar librado a las maquinaciones del
deudor que dilata la notificación; 28 junio 2001, Gaceta Jurídica 252, Nº 4, pág. 199. EXCMA. CORTE SUPREMA,
13 julio 1938, Rev. De Der., t. 36, sec. 1ª, pág. 97; EXCMA. CORTE
SUPREMA, 26 diciembre 1910, Rev. de Der., t. 9, sec. 1ª, pág. 99. Los énfasis son nuestros.
relacionadas con las dificultades que supone realizar una notificación y, finalmente,
una justificación conceptual, como propone el profesor Peñailillo, en el sentido que,
en este examen, se deben distinguir los aspectos sustantivos y procesales de la
interposición de la demanda (Peñailillo Arévalo, Daniel, “Los Bienes”, Editorial
Jurídica, 2006, p. 414), distinción que antes desarrolló José Clemente Fabres, para
quien, “si la prescripción se interrumpe con cualquier recurso, no debe contarse la
interrupción desde la fecha de la notificación de la demanda, sino desde la fecha en
que se entabló el recurso o la demanda. Es cierto que sin la notificación no surte
efecto la demanda, pero efectuada la notificación se retrotraen sus efectos a la fecha
en que se interpuso la demanda o el recurso. De aquí ha nacido la práctica de poner
„cargo‟ a los escritos” (“Instituciones de Derecho Civil Chileno”, II, Imprenta y
Librería Ercilla, 1902, p. 446). En la doctrina actual se inclinan por esta
interpretación los profesores Daniel Peñailillo A. (op. cit., p. 415) y Ramón
Domínguez A. (“La Prescripción Extintiva. Doctrina y Jurisprudencia”, Editorial
Jurídica, año 2004, p. 260 y ss.), sin perjuicio de otros que han manifestado su
conformidad con ella, como René Abeliuk M. (citado por Domínguez, en op. cit., p.
264, nota 784).

Séptimo: Que, en este orden de ideas, el artículo 2518 del Código Civil, señala que
la prescripción “Se interrumpe civilmente por la demanda judicial; salvos los casos
enumerados en el artículo 2503”, concluyéndose, a contrario sensu, que exceptuadas
las hipótesis mencionadas en el artículo 2503, la presentación de la demanda
judicial es suficiente para interrumpir civilmente la prescripción. Por otro lado, si se
considera la distinción entre el efecto procesal y el Sustantivo de la interposición de
la demanda, no parece adecuado exigir para la interrupción de la prescripción su
notificación, la que si bien debe dotarse de consecuencias en el ámbito estricto del
proceso, no constituye un elemento necesario para provocar dicho efecto, por cuanto
se trata de una gestión que no se radica dentro de la esfera exclusiva y discrecional
del demandante, ya que su ejecución práctica depende de la acción de un tercero –
receptor judicial- y en la determinación del paradero del demandado. En este
sentido, se debe tener presente que el fundamento de la prescripción estriba en
sancionar la desidia del demandante en la protección o reclamo de sus derechos,
aspecto subjetivo que deja de estar presente en su titular, si tramita la demanda,
porque así evidencia su voluntad de ampararlos, ejerciendo la acción respectiva, sin
necesidad de notificarla. Para Domínguez Águila, “habrá de reconocerse sin
embargo, que en el estado actual de la jurisprudencia ya es regla la que obliga a
notificar la demanda antes que el plazo de prescripción haya transcurrido; pero no
porque tal sea la jurisprudencia dominante podemos aceptar la doctrina sin otra
consideración. Ella proviene más bien de la confusión que generalmente existe entre
los efectos procesales de la notificación y los aspectos substantivos en que descansa
la prescripción, y no separar unos de otros determina aquí que se pretenda exigir que
la voluntad interruptiva se haga depender de su conocimiento por el deudor, a pesar
que aquella no tiene por qué tener un carácter recepticio. Es verdad que el Código
exige luego para mantener el efecto interruptivo que haya una notificación válida;
pero no la pide para que ese efecto se produzca inicialmente” (La prescripción
extintiva, Santiago, Jurídica, 2004, p. 263).”4

36. Así las cosas, habiéndose presentado la demanda de autos el día 27 de septiembre de
2016, es decir, con poco más de un año desde que supuestamente se habría producido la
fecha de la terminación de los servicios del trabajador cuyas cotizaciones se demandan,
debe entenderse que se interrumpió la prescripción con esa fecha, debiendo corregirse el
yerro cometidoen la sentencia recurrida.

III.- FORMA EN QUE INFRACCIÓN HA INFLUÍDO SUSTANCIALMENTE EN


LO DISPOSITIVO DEL FALLO.

29. S.S. Excma., de no haberse incurrido en el error descrito, el tribunal de alzada


indudablemente hubiese revocado la decisión del juez del primer grado, acogiendo nuestra
apelación.
30. En primer lugar, la demanda fue presentada dentro del plazo de prescripción que
señala el artículo 31 Bis de la Ley 17322, ya que la terminación de los servicios se produjo
el 20 de febrero de 2014, y la demanda fue presentada el 27 de septiembre de 2016, antes
de transcurrido los cinco años que señala la norma en comento. Asimismo, la demanda fue
debidamente notificada al demandado con fecha 06 de marzo de 2023 al demandado en
forma personal y después de haberse oficiado al Servicio de Impuestos Internos y a la
Tesorería General de la República para obtener el domicilio del demandado.
31. En segundo lugar, la errada aplicación que la Iltma. Corte de Apelaciones ha hecho
de lo dispuesto en los artículos 2503 y 2518 del Código Civil, ya que de haberse
interpretado correctamente el sentido y alcance de ambas normas se habría revocado la
sentencia apelada y en su lugar se habría declarado que se acoge a demanda ejecutiva en
todas sus partes, desechándose la excepción de prescripción deducida por el ejecutado.

Por tanto,

A S.S. respetuosamente pedimos, Tener por interpuesto recurso de casación en el fondo en


contra de la sentencia definitiva dictada en autos con fecha 29 de junio de 2023, y
notificada a esta parte por estado diario el mismo día; concederlo para ante la Excma. Corte

4 Sentencia Excelentísima Corte Suprema, 10 de diciembre de 2021, ROL 63.334-2020, considerandos sexto
y séptimo.
Suprema, a fin de que ésta lo admita a tramitación y, conociendo del recurso (i) lo acoja en
todas sus partes; (ii) invalide la sentencia definitiva de segunda instancia en cuanto
confirmó la sentencia definitiva de primera instancia que acogió la excepción de
prescripción extintiva opuesta por el ejecutado; y, luego (iii), en su lugar, dicte sentencia de
reemplazo en que corrija los errores de Derecho denunciados en el presente recurso y,
correspondientemente, rechace la mencionada excepción opuesta por el ejecutado.

Otrosí: Sírvase S.S. Iltma. tener presente que en mi calidad de abogado habilitado para el
ejercicio de la profesión asumo personalmente el patrocinio del presente recurso de
casación en el fondo, de conformidad con lo dispuesto en el inciso final del artículo 772 del
Código de Procedimiento Civil, fijando domicilio en Avenida Libertador Bernardo
O´Higgins 949 piso 9 oficina 901-B, comuna de Santiago.

Por tanto, A S.S. Iltma. ruego: tenerlo presente

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