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Indice de Conceptos O-P 2

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OBISPO. (Del griego episkopos, vigilante). Vigilante.

Sucesor de los apóstoles, que gobierna una Iglesia


particular en comunión con el papa de Roma y con los otros obispos.

Los obispos pueden ser:


1. Auxiliar: Ayuda al obispo diocesano con o sin facultades especiales (cc. 403-411).
2. Coadjutor: Ayuda al obispo diocesano. Tiene derecho de sucesión (c. 403 &3).
3. Diocesano: El que tiene el cuidado pastoral de una diócesis (c. 376).
4. Dimisionario: El que ha cesado en el oficio por haber alcanzado los límites de edad o por renuncia
aceptada 8CF. C. 185).
5. Emérito: (Cf. Dimisionario).
6. Exento: Si no pertenece a ninguna provincia eclesiástica y depende directamente de la santa sede
(c. 431 &2).
7. Jubilado. (Cf. Dimisionario).
8. Propio: Aquél en cuya diócesis uno se ha incardinado.
9. Regular: El que proviene de un instituto de vida religiosa (cc. 705-707).
10. Residencial. El que reside personalmente en su diócesis. La obligación ha de ser:
- Formal o activa: comprende tanto la residencia física como el cumplimiento del oficio episcopal.
- Personal: obliga incluso cuando el obispo tiene obispo coadjutor o auxiliar.
La residencia admite ciertas ausencias:
- Durante las visitas ad limina, la participación en concilios, en el sínodo de los obispos, en la asamblea
de la conferencia episcopal o para el cumplimiento de otro oficio que se le ha confiado legítimamente.
- Por otras causas (p. e: descanso, vacaciones, etc) durante no más de un mes, tanto continuo como
ininterrumpido, con tal que la diócesis no sufra ningún perjuicio (c. 395 &2).
- Por causas graves y urgentes (p. e: caridad cristiana, evidente utilidad de la Iglesia o de la sociedad
civil, etc), incluso en los días de navidad, de semana santa, de la resurrección del Señor, de pentecostés, del
cuerpo y sangre de Cristo (&3).
En caso de ausencia legítima que dure más de seis meses, el metropolitano debe informar a la Santa
Sede; si se trata del mismo metropolitano, lo mismo debe hacer el sufragáneo más anciano (&4); en efecto,
el obispo ilegítimamente ausente puede ser castigado con las penas previstas en el c. 1396.
11. Secular: El que proviene del clero secular (cc. 705-707).
12. Sufragáneo. El que depende de un metropolitano; o sea, forma parte de una provincia eclesiástica.
13. Titular. Todos los obispos, fuera de los obispos diocesanos. O sea: los auxiliares, coadjutores.

OBISPO DIOCESANO. El obispo a quien se le ha confiado una diócesis. Le compete en su diócesis toda la
potestad ordinaria, propia e inmediata, que requiere el ejercicio de su ministerio, exceptuadas las causas
que por el derecho o por decreto del papa se reservan a la autoridad suprema o a otra autoridad
eclesiástica (c. 381).

El obispo diocesano tiene las siguientes potestades:


- Ordinaria: Por derecho divino aneja al oficio que el papa le concede por medio de la misión canónica.
- Propia: El obispo es vicario de Cristo y no del papa (c. 331 &1).
- Inmediata: Sobre todos los súbditos, salvo el c. 586.
- Legislativa: No puede delegarla (c. 135 &2).
- Ejecutiva: Puede ser ejercitada por medio de otros (cc. 135 &4, 136-144).
- Judicial: Puede ser ejercitada por medio de otros (c. 135 &3, 1419-1421).
Al obispo diocesano se le equiparan en derecho los prelados, los abades territoriales, los vicarios
apostólicos, los prefectos y administradores apostólicos, los ordinarios militares (cc. 381 &2, 134).
El obispo diocesano debe tomar posesión de su diócesis, a norma del c. 383 &3, a dos meses de recibir
las letras apostólicas, si ya es obispo consagrado. A 4 meses de recibir las letras apostólicas si no es,
todavía, obispo consagrado. Antes, no puede ejercer válidamente la potestad que ha recibido con el oficio
(c. 382 &1).
Son deberes y derechos del obispo diocesano:
1. Munus de santificar:
- Debe promover la santidad de los fieles y de conducir una vida santa (cc. 387, 276 &1).
- Debe aplicar la misa por el pueblo (c. 388).
- Tiene derecho a celebrar pontificales (c. 390).
2. Munus de enseñar:
- Debe proponer las verdades de la fe (cc. 386 &1, 753, 756, 761, 763).
- Tiene el deber/derecho de cuidar que se observen los cánones sobre el ministerio de la palabra (cc.
386 &1, 392 2).
- Tiene el deber/derecho de vigilar la manera cómo se da la instrucción religiosa y teológica (cc. 386
&1, 794, 804-906, 810-813, 818).
- Tiene el deber de defender la integridad y la unidad de la fe (cc. 386 &2, 392, 803, 810, 812, 818,
823).
3. Munus de gobernar:
- Debe ejercitar la caridad pastoral hacia todos los fieles; especialmente para con los alejados (c. 383
&1), con los de distinto rito (&2), con los hermanos separados (&3), con los no bautizados (&4), con los
presbíteros (c. 384).
- Debe favorecer y coordinar las diversas formas de apostolado, respetando cada una de ellas (c. 394
&1).
- Debe favorecer el apostolado de todos los fieles (&2).
- Debe residir personalmente en la diócesis (c. 395 &1). Se puede ausentar por causas justas (&2) o
graves y urgentes (&3). Los casos de ausencia ilegítima están enumerados en el c. 395 &4.
- Debe visitar la diócesis (c. 396 &1): personas, instituciones y lugares sagrados (c. 397 &1),
monasterios sui iuris e institutos religiosos de derecho diocesano (cc. 628 &2, 586 &1 y 594), institutos
religiosos de derecho pontificio, aún exentos, pero sólo en los casos establecidos expresamente por el
derecho (c. 397 &2). Debe hacerlo personalmente (c. 391 &1) con la debida diligencia (c. 398) estrechando
relaciones personales (c. 396 &1); puede hacerlo en compañía de algunos clérigos (c. 396 &2) pero evitando
hacer gastos excesivos e innecesarios (c. 398).
- Debe presentar cada cinco años una relación sobre la situación de la diócesis al papa (c. 399).
- Debe cumplir personalmente la visita ad limina (c. 400 &&1 y 2). El vicario apostólico puede hacerlo
por medio de un procurador; el prefecto apostólico no está obligado a la visita (c. 400 &3).
El obispo diocesano pierde el oficio por:
- Renuncia: Está invitado a presentarla al llegar a los 75 años, por enfermedad o causas graves. Debe
ser aceptada por el papa (cc. 185 y 189). Conserva el título de su diócesis (es dimisionario); puede continuar
habitando en ella. Su sustento corre a cargo de la conferencia episcopal y/o de la diócesis a la que ha
servido (c. 402).
- Traslado: De parte de la santa sede (cc. 190-191).
- Remoción: De parte de la santa sede (cc. 192-195).
- Privación: C. 196.
- Suspensión: A norma del derecho penal (c. 196).
OCTAVA. (Del latín, octo, ocho). Los ocho días durante los cuales se celebra el oficio o la conmemoración de
una fiesta. Antoguamente eran muy numerosas y se clasificaban en privilegiadas, comunes y simples. Desde
1969 sólo existen las de navidad y pascua.

OCULTO. (Del latín, occultus, escondido, secreto). 1. Lo que no se ha divulgado.

2. En derecho matrimonial, impedimento oculto, impedimento que n se puede probar en el fuero


externo.

3. En derecho penal, delito oculto, delito que no se ha divulgado y que se puede prever
prudentemente que no se divulgará en el futuro.

ODIO. Una de las pasiones del apetito; tiene por objeto un cierto mal, lo que no le conviene. Se funda en un
bien, aquello que se ama y es contrariado por el objeto del odio, y es relativo al amor de este bien.

OFENSA. (Del latín, ob, delante, y fendere, golpear, chocar). Daño inferido a la dignidad de una persona:
Dios, un superior, un semejante.

OFICIAL. Persona establecida con poder ordinario para administrar justicia en nombre y en lugar del
obispo, con el que constituye un solo y mismo tribunal.

OFICIO. (Del latín, officium, de facere, hacer). Conjunto de horas canónicas contenidas en el breviario y que
santifican los diversos momentos del día.

OFICIO ECLESIASTICO. Cualquier cargo, constituido establemente por disposición divina o eclesiástica, que
haya de ejercerse para un fin espiritual. (cf. c. 145 &1).

ORATORIO. Lugar destinado al culto divino con licencia del ordinario, en beneficio de una comunidad o
grupo de fieles que acuden allí, al cual también pueden tener acceso otros fieles, con el consentimiento del
superior competente. (cf. c. 1223).

ORDEN RELIGIOSA. Instituto religioso de cierta antigüedad y que denomina regla a sus constituciones. Las
principales órdenes son, hoy día, las diferentes órdenes de monjes (benedictinos, cistercienses) y de
canónigos (premostratenses), las órdenes mendicantes (frailes predicadores, frailes menores), los
carmelitas, la compañía de Jesús, del santísimo redentor, de la misión.

ORDENAMIENTO JURIDICO. Determinación histórica y objetiva de posibilidades y exigencias recíprocas


legítimas que se intercambian entre los sujetos de las diversas relaciones jurídicas.

ORDINARIATO MILITAR. Circunscripción eclesiástica peculiar y jurídicamente asimilada a la diócesis regida


por estatutos especiales aprobados por la Santa Sede, que determinan las normas contenidas en la
constitución, salvo los acuerdos, donde existen, entre la Santa Sede y los gobiernos respectivos.

ORDINARIO. 1. Poder de jurisdicción vinculado por el derecho a un oficio eclesiástico y que, por el hecho
mismo, se posee en virtud del oficio recibido (p. e: un párroco tiene la potestad o la jurisdicción ordinaria
para confesar a sus feligreses y a los forasteros de paso por su territorio.

2. Como sustantivo, designa a todos los que poseen el poder ordinario en el fuero externo; a saber:
el papa, los obispos diocesanos y todos aquellos que, aun interinamente, han sido nombrados para
regir una Iglesia particular o una comunidad a ella equiparada según el c. 368, y también quienes en
ellas tienen potestad ejecutiva ordinaria, es decir, los vicarios generales y episcopales; así también,
respecto a sus miembros, los superiores mayores de institutos religiosos clericales de derecho
pontificio y de sociedades clericales de vida apostólica de derecho pontificio, que tienen, al menos,
potestad ejecutiva ordinaria (cf. c. 134 &1).

ORDINARIO DEL LUGAR. 1. El que ejerce la jurisdicción en el lugar de que se trata (p. e: en una diócesis
dada, el obispo residencial y sus vicarios generales son el ordinario del lugar).

2. Son ordinarios de lugar: el papa, los obispos diocesanos y todos aquellos que, aun interinamente,
han sido nombrados para regir una Iglesia particular o una comunidad a ella equiparada según el c.
368, y también quienes en ellas tienen potestad ejecutiva ordinaria, es decir, los vicarios generales
y episcopales; así también, respecto a sus miembros.

ORIENTALES (IGLESIAS). 1. Iglesias que aceptaron las decisiones del concilio de calcedonia (c. 451). La lucha
contra el iconoclasmo reforzó en el patriarcado de Constantinopla la convicción y el orgullo de poseer la
verdad frente a las herejías trinitarias y cristológicas.

2. En la época moderna se ha extendido la costumbre de llamar Iglesias ortodoxas a todas las


Iglesias orientales que han conservado la fe de Calcedonia, pero que no están en plena comunión
con la Iglesia católica.

ORIENTALIUM ECCLESIARUM. Decreto sobre las iglesias orientales católicas, promulgado por el concilio
Vaticano II (21 de marzo de 1964). Recuerda la importancia de la diversidad de las iglesias locales, las
auténticas riquezas del oriente cristiano y el valor de sus instituciones, afirma el absoluto derecho de
ciudadanía de las tradiciones orientales en la armonía total de la Iglesia y amplía las reglas de la
communicatio in sacris.

ORTODOXIA. (Del griego, orthos, recto y doxa, opinión). 1. Cualidad de un pensamiento teológico que es
conforme con la enseñanza revelada.

2. Término empleado hoy para designar de forma genérica a las Iglesias orientales fieles a la fe de
calcedonia.

PACEM IN TERRIS. Encíclica de Juan XXIII (11 de abril de 1963) sobre la paz en el mundo. Este documento
está dirigido a todos los "hombres de buena voluntad". Toca temas como: el respeto a la persona humana,
las reglas del orden interior de los estados y de la sociedad democrática, el desarme universal, el
llamamiento a la creación de un poder supranacional y a un orden mundial.

PADRINO. Persona que presenta a otra al bautismo o a la confirmación y garantiza su perseverancia.

PARALITURGIA. Ceremonia religiosa no prevista en los libros oficiales, pero organizada más o menos según
el modelo de una celebración litúrgica.

PARECER. Consejo, consulta, opinión personal. Cuando el derecho dice "el superior... cuando necesita el
consejo de algún colegio o grupo de personas, el colegio o grupo debe convocarse a tenor del c. 166, a no
ser que tratándose tan sólo de pedir el consejo, dispongan otra cosa el derecho particular o propio; para la
validez de los actos, se requiere pedir el consejo de todos" (cf. c127 &1) está diciendo que el superior debe
pedir el parecer. Esto es para la validez y la licitud, aunque luego actúe de manera diversa a cómo le ha
aconsejo el colegio o grupo de personas. Si el superior procediera, obligatoriamente, como le han
aconsejado ya estaríamos hablando de consentimiento o consenso.

PARENTESCO. (Del latín, pariens, de pario, parir). Vínculo existente entre dos personas que tienen un
mismo origen y por tanto cierta comunidad de sangre.

El parentesco, además, puede ser:

1. Espiritual. Vínculo de paternidad o de filiación espiritual respectivamente, contraído en el


bautismo o en la confirmación entre el ministro o padrino del sacramento y el que lo recibe. No es
impedimento dirimente para contraer matrimonio.

2. Legal. El que es contraído según la ley, p. e: por adopción.

3. Por afinidad. Vínculo existente entre una persona y los consanguíneos de su cónyuge.

PARROCO. Pastor propio que cuida de una comunidad parroquial en la que es partícipe del ministerio de
Cristo: enseñar, santificar, regir; bajo la autoridad del obispo; y con la cooperación de otros sacerdotes y
diáconos; y con la ayuda de seglares (c. 519)

El párroco ha de ser:

1. Una persona física (sacerdote); aunque veremos que hay también "párrocos solidarios".

2. Designado normalmente para un tiempo indefinido.

Sus obligaciones son:

- Predicar la palabra de Dios, sobre todo, mediante la homilía.

- Formación catequética,

- fomento de iniciativas que promuevan el espíritu evangélico y la justicia social,

- formación católica de los niños y jóvenes, y de todos en general,

- hacer de la Eucaristía el centro de la comunidad parroquial,

- fomentar la recepción frecuente de los sacramentos,

- procurar la participación activa y consciente,

- conocer y visitar las familias,

- dedicarse especialmente a los pobres, afligidos, abandonados, emigrantes,

- ayudar a los matrimonios,

- reconocer y promover la misión de los laicos en la Iglesia,

- cooperar con el obispo y demás sacerdotes a que los fieles tengan conciencia de pertenencia a la
Iglesia universal.

- cuidar que los bienes de la parroquia sean bien administrados.


- residir en la casa parroquial, cerca de la Iglesia,

- ausentarse con causa justa por un mes,

- aplicar la misa por el pueblo los domingos y días de precepto,

- cuidar que en los libros parroquiales sean hechas las anotaciones pertinentes a la celebración de los
sacramentos.

PARTES EN EL PROCESO. Son las personas, físicas o jurídicas, entre las que se entabla el juicio, haya o no
oposición de intereses. En el juicio contencioso se llaman actor y demandado.

PATRIARCA. (En griego, el primero de los antepasados, el cabeza del linaje). 1. Título meramente
honorífico, que no comporta en la Iglesia latina potestad alguna de régimen, si no consta lo contrario por
privilegio apostólico o costumbre aprobada (c. 438), dado desde el s. VI a los obispos de las cinco grandes
sedes de la cristiandad: Roma, Constantinopla, Antioquía, Alejandría y Jerusalén, y extendido luego a otras
sedes importantes. Así p. e: Rusia tuvo su propio patriarcado de Moscú después de la caída de
Constantinopla (1453), de cuya sede dependía hasta entonces. Al papa Juan XXIII se le conocía con el título
de patriarca de Venecia, antes de acceder a la silla de Pedro, por ser obispo de dicha jurisdicción
eclesiástica.

2. En el derecho de las iglesias orientales unidas, obispos a los que los cánones atribuyen
jurisdicción sobre todos los obispos (comprendidos los metropolitas), el clero y el pueblo de un
territorio (patriarcado) o de un rito, jurisdicción que ejercen bajo la autoridad del papa.

PATRIMONIO. 1. Etimológicamente, el conjunto de bienes recibidos de los antepasados.

En los institutos de vida consagrada, la naturaleza, fin, espíritu, carácter y sus sanas tradiciones (c.
578).

PATROCINIO GRATUITO. Beneficio que se concede al litigante que es completamente "pobre", consistente
en la exención total del pago de las costas judiciales entendidas en sentido amplio (c. 1464).

PATRONO. Santo bajo cuya protección está puesta una persona física o moral.

PELIGRO DE MUERTE. Situación, ya exterior (amenaza, advertencia producida y de la que se tiene certeza,
accidente que inevitablemente se producirá, catástrofe de la naturaleza) ya interior (enfermedad) que hace
pensar que uno puede fallecer.

PENA. (La voz latina poena, del griego poine, se introdujo probablemente en lalengua latina para designar
un castigo o la multa que permitía redimirse de él). Privación de algún bien, del que la Iglesia puede
disponer, impuesta por la autoridad legítima para corrección del delincuente y castigo del delito (Cf. 1312
&2).

Las penas eclesiásticas se dividen en:


1. Medicinales o censuras. Son aquellas penas consideradas precisamente como medicina para
romper la contumacia del delincuente y hacerle volver al buen camino (Cf. cc. 1331-1335). Este tipo de
penas cesa cuando desaparece la contumacia en el delincuente. Son penas medicinales: el entredicho, la
suspensión y la excomunión.
2. Expiatorias. Son las penas que buscan la expiación del delito; o sea: el restablecimiento de la justicia
y la reparación del daño (Cf. cc. 1336-1338). Estas penas pueden ser perpetuas; por ello el ordenamiento
canónico ha previsto que estas mismas penas no impidan tener acceso a los sacramentos.
3. Latae Sententiae (=LS: de sentencia dictada). Pena en que se incurre al momento de cometer el
delito, sin necesidad de que intervenga la autoridad para imponer la pena; aunque la autoridad interviene
para declarar la pena que ya existe por vía judicial o administrativa. Se trata de una pena no impuesta, pero
declarada. Generalmente, las penas latae sententiae son penas medicinales.
4. Ferendae Sententiae (=FS: de sentencia por dictar). Pena que, una vez cometido el delito, requiere
la intervención de la autoridad competente para aplicarla. Se trata, entonces, de una pena impuesta y
declarada. Ordinariamente, la penas ferendae sententiae son expiatorias.
5. Determinadas. Son las previstas por una ley o por un precepto. Pueden ser penas determinadas
tanto las medicinales (Cf. como las expiatorias).
6. Indeterminadas. Son aquéllas que proceden de la prudente estimación del juez, del superior
competente o de la ley particular (Cf. c. 1315).
7. Preceptivas. Son algunas que deben ser consideradas taxativamente; es decir, se debe hacer una
lista de ellas y sólo ellas serán consideradas tales penas (Cf. c. 1397).
8. Facultativas. Son las que pueden ser impuestas o no según la prudente estimación del juez,
superior competente o ley particular. Se diferencia de las indeterminadas en que aquéllas deben ser
impuestas. Lo que hace la autoridad competente es fijar el marco de la pena; en cambio, las penas
facultativas pueden ser impuestas o no.
9. Perpetuas. Duran siempre, aun después del arrepentimiento. Pueden ser perpetuas sólo las penas
expiatorias, no las medicinales.
10. Temporales. Duran por un cierto tiempo. Pueden ser temporales tanto las penas medicinales
como las expiatorias. Las penas medicinales duran hasta el momento del arrepentimiento del delincuente,
las penas expiatorias hasta que se cumpla el tiempo fijado por la ley, no por precepto, porque no se
establecen penas expiatorias por precepto (c. 1336 &1).

PENA DE MUERTE. Medida que adoptan algunas sociedades civiles. El ordenamiento canónico no recurre a
ella en ningún caso.

PENITENCIARIA APOSTOLICA. Tribunal de la curia romana presidido por el cardenal penitenciario mayor,
ayudado por el regente, el teólogo, el canonista y otros consultores.

Es competente en el fuero interno, aun no sacramental; por tanto, no tiene potestad judicial, sino
administrativa. Concede en el fuero interno gracias, absoluciones, dispensas, conmutaciones, sanaciones y
condonaciones. También es competente en la concesión y uso de las indulgencias.

PENITENCIARIO. (Cf. Canónigo 2. penitenciario) Miembro del cabildo de canónigos. Tiene la función, no
delegable, de absolver en el fuero sacramental de las censuras latae sententiae no declaradas, ni
reservadas a la santa sede, incluso respecto a quienes se encuentren en la diócesis sin pertenecer a ella y
respecto a los fieles diocesanos, aún fuera del territorio de la diócesis (c. 508 &1).

PERDIDA DEL ESTADO CLERICAL. Aunque la sagrada ordenación, válidamente recibida, nunca se anula, -
por tanto, tampoco el estado clerical-, sin embargo, el clérigo pierde su estatuto clerical por la pena de
dimisión legítimamente impuesta, o por rescripto de la sede apostólica, que solamente concede a los
diáconos por causas graves o a los presbíteros por causas gravísimas. Quien por una sentencia judicial o por
un decreto administrativo obtiene la declaración de que su ordenación sagrada fue nula, queda privado del
estatuto clerical; más bien se declara que nunca perteneció al estado clerical.

El proceso judicial se rige por los cánones 1708-1712.

La pérdida del estado clerical comporta la pérdida de todos los derechos y obligaciones, oficios,
funciones y potestad delegada, menos la del celibato que únicamente concede el papa (c. 292). Por el
contrario, la declaración de que la ordenación recibida ha sido nula comporta la exoneración de esa
obligación del celibato, que nunca en realidad se contrajo (c. 291).

Sin embargo, puesto que la ordenación sagrada es indeleble, el sacerdote, aunque haya perdido el
estatuto clerical, puede ejercer la potestad de orden para absolver pecados -y la de régimen para remitir
censuras- a cualquier penitente que esté en peligro de muerte (c. 976); igualmente le podrá conferir el
sacramento de la confirmación (cf. c. 883 &3), y de la unción de enfermos (c. 1003 &2).

El clérigo que ha perdido el estatuto clerical no puede ser adscrito de nuevo entre los clérigos, si no es
por rescripto de la sede apostólica (c. 293).

PERDIDA DEL OFICIO ECLESIASTICO. Es la cesación del ejercicio de un cargo que se ha recibido. Puede
perdérselo de las siguientes maneras:

1. Transcurso de tiempo prefijado: En oficios para los cuales el derecho universal o particular fijan el
tiempo. P. e: cinco años para el ecónomo diocesano.

2. Cumplimiento de la edad o jubilación: Setenticinco años para los párrocos, obispos. Con ochenta
años cumplidos un cardenal pierde derecho a participar en cónclave (cf. Edad).

3. Renuncia: Por petición voluntaria.

4. Traslado: Puede revestir un carácter mixto pues unas veces se producirá a petición del titular, y
otras, se causará por iniciativa de la autoridad.

5. Remoción y privación: Reviste respectivamente un carácter disciplinar y penal.

La pérdida de condición de titular de la autoridad que concedió un oficio, de por sí, mientras no
establezca otra cosa el derecho, no lleva consigo la pérdida del oficio que él otorgó.

PERSONA. (Del latín, persona, máscara de teatro, de ahí, personaje, luego papel desempeñado en el
mundo). Según la clásica definición de Boecio, que santo Tomás recoge, es persona "la sustancia individual
de naturaleza racional".

En el ordenamiento canónico el hombre es constituido persona mediante el bautismo, por medio del
cual recibe los derechos y deberes propios del cristiano. Hay, además, dos condiciones para ser persona en
la Iglesia: estar en la comunión eclesiástica y no estar afectado por una sanción legítimamente impuesta.

PERSONA JURIDICA. Conjunto de personas o cosas elevadas a este rango por la autoridad eclesiástica
competente para buscar un fin congruente con la misión de la Iglesia que trasciende el fin de los individuos
(c. 114). Tanto las asociaciones públicas como las privadas pueden ser personas jurídicas en la Iglesia: las
públicas, en virtud del mismo derecho, o por decreto de a autoridad que le da ese rango, y las privadas que
obtienen su personalidad jurídica sólo mediante decreto especial de la autoridad competente que se la
concede expresamente.
PERSONA MORAL. Entidad de la Iglesia católica, existente por derecho divino; pero que para todos los
efectos jurídicos funge como persona jurídica. Son personas morales, la Iglesia católica, la sede apostólica
(c. 113 &1) y el colegio episcopal (c. 336).

POSTULACION. (Del lat. postulare, pedir, postular). Consiste en promover a una persona a un oficio; pero la
persona promovida tiene algún impedimento que no le permite desempeñarlo. P. e: no se puede ir a
elecciones porque la persona tiene impedimento; entonces se le pide a la autoridad que nombre a la
persona a tal oficio (cc. 180-183).

POSTULADOR. (Del latín, postulare, pedir, postular). Persona que representa y sostiene ante el trbunal
competente una causa de beatificación o de canonización.

POTESTAD. (Del lat. potestas, poder). Principio muy similar al munus (cf. Munus); pero más limitado que
éste. Se la confiere a los ministros sagrados (los laicos pueden participar de ella c. 129 &2) para cumplir
actos en la Iglesia, de naturaleza diversa: actos de santificación -sacramentales8 o no-, de magisterio
auténtico o de gobierno (cc. 129,&1 y 274 &1). La potestad sagrada es el derecho y la capacidad de realizar
determinados actos.

La potestad de régimen se distingue en:

1. Potestad legislativa: Es la capacidad de dar leyes.

2. Potestad judicial: Es el poder de dirimir situaciones dentro de un marco estrecho como son los
procesos.

3. Potestad ejecutiva: Consiste en urgir el uso y la aplicación de las leyes.

La potestad de régimen, además, puede ser:

4. Ordinaria: Es la que va aneja a un oficio. Se concede a la persona mediante oficio (c. 131) (Cf. Oficio
eclesiástico).

5. Delegada: Es conferida a la persona misma, no en razón del oficio (c. 145 &1).

6. Propia: La que es ejercitada por el titular del oficio (obispo, párroco, superior).

7. Vicaria: La que es ejercitada por uno que representa a otro. P. e: vicario general.

POTESTAD ADMINISTRATIVA. Función de gobernar, inspirar, guiar e incluso santificar. En este sentido,
poseen la potestad administrativa no sólo los que ya tienen la potestad ejecutiva sino incluso el legislador.
Es que, en la Iglesia, el legislador no sólo legisla sino que a veces desempeña funciones que estrictamente
pertenecen a la potestad ejecutiva. P. e: el obispo ecónomo.

La diferencia fundamental entre la potestad ejecutiva y la administrativa está en que esta última se
refiere a la administración de toda la Iglesia mientras que la potestad ejecutiva es parte de la potestad
administrativa porque sirve para urgir el uso y la aplicación de las leyes.

En consecuencia, poseen la potestad administrativa los moderadores supremos (superiores y


superioras generales) de los institutos de vida consagrada e incluso, de las sociedades de vida apostólica.
PRECEPTO. (Del lat. praeceptum, derivado de praecipere, ordenar).

1. Mandato común a todos los cristianos, sometidos a los mandamientos de Dios y al ordenamiento de
la Iglesia.

2. Precepto singular: Acto administrativo singular dado por la autoridad ejecutiva competente
mediante el cual se impone directa y legítimamente a una persona o personas determinadas la obligación
de hacer u omitir algo, sobre todo para urgir la observancia de la ley (c. 49).

PREFECTURA APOSTOLICA. Porción de pueblo de Dios, en camino a ser diócesis, gobernada por un
prefecto, en nombre del papa (c. 371 &1). El prefecto apostólico, normalmente, es presbítero. Ejercita una
potestad ordinaria vicaria que es prácticamente la misma que la de un obispo diocesano.

No tiene un consejo presbiteral; pero sí un consejo compuesto por tres misioneros (por lo menos cf. c.
495 &2). En sede vacante, el gobierno es asumido por el proprefecto (c. 420).

PRELADO. (Del lat. praelatus, de praeferre, poner delante, a la cabeza). Título honorífico dado a algunos
clérigos que tienen jurisdicción ordinaria en el fuero externo.

PRELATURA. Determinada porción del pueblo de Dios, encomendada a un prelado, que se asimila a la
diócesis. Puede ser:

1. Territorial: Situada en un territorio, confiada por especiales circunstancias históricas, étnicas o


culturales a un prelado, que la gobierna, a modo de un obispo diocesano (c. 370). El prelado puede ser
obispo.

2. Personal: Es un instituto u órgano administrativo clerical de tipo asociativo con el fin de promover
una mejor distribución del clero, sea del punto de vista del número o de la cualificación o para proveer
obras especiales de pastoral o de misión (cc. 294 y 268).

El papa la erige escuchando a las conferencias episcopales comprometidas. Los presbíteros de la


prelatura personal no forman parte del presbiterio de la prelatura sino de la diócesis en la que prestan su
servicio (cc. 294, 295 &1 y 297).

El prelado dirige la prelatura personal como su ordinario propio (c. 295 &1) sin serlo pues se parece o
asimila a los superiores de las sociedades de vida apostólica de derecho pontificio; pero no puede ser
asimilado al obispo diocesano ni es miembro de la conferencia episcopal.

Los laicos (según el c. 296) no son "pueblo propio" de la prelatura personal, aunque pueden dedicarse,
según acuerdo, a las obras apostólicas de la misma. La posición de los laicos es similar a la de las terceras
órdenes seculares (c. 303) o a otras asociaciones de fieles laicos unidos a institutos religiosos o seculares
(cc. 676 &2 y 725).

PRESCRIPCION. (Del lat. prae, antes y scriptum, escrito; o sea: escrito previamente).

1. Orden o precepto ("Según las prescripciones del derecho" p. e: c. 116 &1).

2. Modo originario, instituido por el derecho positivo, de adquirir derechos o de librarse de


obligaciones, mediante el decurso de un determinado lapso de tiempo y observados los requisitos fijados
por la ley. Según que mediante la prescripción se adquiera un derecho o se libre de una obligación,
tendremos, respectivamente, la prescripción adquisitiva o usucapión y la liberativa o extintiva, llamada
simplemente prescripción.

PRIVACION. Falta de un bien en un sujeto que normalmente debería o podría poseerlo.

PRIVILEGIO. (Del lat. privilegium, de lex, legis ley, y privatus, privado: ley privada). Acto administrativo
singular que contiene una gracia otorgada por acto peculiar en favor de determinadas personas, tanto
físicas como jurídicas. Lo concede el legislador y la autoridad ejecutiva a la que el legislador haya otorgado
esa potestad (c. 76 &1).

PRIVILEGIO PAULINO. 1: El matrimonio contraído por dos personas no bautizadas se disuelve por el
privilegio paulino en favor de la fe de la parte que ha recibido el bautismo, por el mismo hecho de que ésta
contraiga un nuevo matrimonio, con tal de que la parte no bautizada se separe.

2: Se considera que la parte no bautizada se separa, si no quiere cohabitar con la parte bautizada o
cohabitar pacíficamente sin ofensa del Creador, a no ser que ésta, después de recibir el bautismo, le
hubiera dado un motivo justo para separarse" (c. 1143)

PRIVILEGIO PETRINO. Poder personal que posee el papa de declarar nulo, por justos motivos, un
matrimonio rato y no consumado.

PROCESO. (Del lat. processus, marcha hacia adelante, progreso). Instrumento jurídico estructurado por la
ley para la tutela de los derechos subjetivos mediante el ejercicio de la función judicial.

Hay distintos procesos:


1. Proceso contencioso ordinario.
1.1. Presupuesto: acto ilícito.
1.2. Partes en causa: actor y demandado.
1.3. Objeto: controversia surgida por un presunto acto ilícito por negación o violación de derechos
privados.
1.4. Finalidad: Restaurar el bien de un privado. Se define la controversia mediante la afirmación o
reparación del derecho privado.
2. Proceso penal.
2.1. Presupuesto: acto delictivo.
2.2. Partes en causa: acusador (promotor de justicia) y acusado.
2.3. Objeto: Perturbación del orden público causado por un delito.
2.4. Finalidad: restaurar el bien público, mediante la precisación del delito y el debido castigo del
delincuente.
3. Proceso administrativo.
3.1. Presupuesto: Acto ilegítimo.
3.2. Partes en causa: Recurrente y resistente (la autoridad que dio el acto administrativo).
3.3. Objeto: Controversia surgida por un presunto acto administrativo ilegítimo.
3.4. Finalidad: Definir la controversia surgida por el acto de la potestad administrativa, mediante la
constatación o negación de la presunta ilegitimidad.
4. Algunos procesos especiales:
4.1. El proceso contencioso oral. (CC. 1656-1670).
4.2. Proceso matrimonial de declaración de nulidad del matrimonio: Que, a su vez, puede ser:
4.2.1. Proceso ordinario. (cc. 1671-1685).
4.2.2. Proceso documental. (cc. 1686- 1688).
4.2.3. Proceso administrativo.
4.2.4. Proceso judicial.
4.3. Proceso para declarar la nulidad de la sagrada ordenación.

PROCLAMA. Notificación por la que la autoridad eclesiástica anuncia a los fieles que pronto va a tener lugar
la celebración de un matrimonio y les impone el deber de denunciar los impedimentos que puedan
oponerse a la recepción de estos sacramentos.

PROCURADOR. (Del lat. curare pro [alio], actuar por otro). Persona física que representa a un hábil
(persona física o jurídica) o a un inhábil.

PROFANACION. (Del lat. profanus, fuera del templo).

1. Acción sacrílega que atenta contra el carácter sagrado de una eprsona, de una cosa o de un lugar
consagrado a Dios.

2. Profanación de las especies eucarísticas. Delito penado con excomunión latae sententiae
reservada a la santa sede (c. 1367).

PROHIBICION. 1. Acción de vedar o impedir el uso o ejecución de una cosa.

2. Medida preventiva y no pena, por la que el ordinario veda la recepción o el ejercicio de las
órdenes y funciones sagradas a un delincuente cuyo delito es probable o cierto, pero que está cubierto por
la prescripción.

PROMOTOR DE JUSTICIA. Miembro del tribunal que insta para que el juez procure el bien público,
interviniendo en la causa a semejanza de las partes.

PRORROGA. Extensión de un derecho o de un poder más allá de los límites legales, en virtud del derecho o
de una decisión de la autoridad competente.

PROVINCIAL. Superior religioso encargado de gobernar una porción (provincia) de una orden o
congregación.

PUBLICA HONESTIDAD. Impedimento dirimente que surge de un matrimonio inválido, después de haberse
establecido la vida común, o bien de un concubinato notorio y público, e invalida el matrimonio en el
primer grado de línea recta entre una parte y los consanguíneos de la otra (c. 1093).

PUBLICATA. Notificación por la que la autoridad eclesiástica comunica que pronto va a tener lugar una
ordenación.

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