SOLARTE. La Evaluación de PP en El Estado Liberal (Capitulo 6y7)
SOLARTE. La Evaluación de PP en El Estado Liberal (Capitulo 6y7)
SOLARTE. La Evaluación de PP en El Estado Liberal (Capitulo 6y7)
2
A Luzma
3
INTRODUCCION .......................................................................................................... 7
1 EL CONCEPTO DE LA EVALUACIÓN......................................................... 14
1.1 SIGNIFICADO DE LA EVALUACIÓN....................................................... 14
1.2 GENESIS DE LA EVALUACIÓN................................................................ 20
2 TEORÍA POLITICA Y EVALUACIÓN ........................................................... 24
2.1 LA EVALUACIÓN Y EL PENSAMIENTO LIBERAL ............................... 24
2.1.1 Dimensión axiológica liberal. ................................................................... 25
2.1.2 Dimensión epistemológica liberal............................................................. 29
2.1.3 La evaluación y la concepción liberal del Estado de bienestar. ............... 31
2.2 EVALUACIÓN Y LAS POLÍTICAS PÚBLICAS ........................................ 32
2.2.1 Formas de ver las políticas públicas......................................................... 32
2.2.2 Relación entre los modelos explicativos de las políticas públicas y el
desarrollo de la evaluación.................................................................................... 36
2.2.3 El proceso de las políticas públicas. ............................................................. 41
2.2.4 La evaluación de políticas............................................................................. 45
2.2.5 Evaluación de políticas vs evaluación de programas. .................................. 46
2.3 EL ROL POLÍTICO Y SOCIAL DE LA EVALUACIÓN EN EL ESTADO
LIBERAL. .................................................................................................................. 47
2.3.1 La evaluación como herramienta de formación ciudadana y participación
social. 48
2.3.2 La evaluación como herramienta de aprendizaje social........................... 48
2.3.3 La evaluación como herramienta de responsabilización. ......................... 48
2.3.4 La evaluación como herramienta de mejoramiento de la gestión pública 50
2.3.5 La evaluación como herramienta política de gobierno................................. 50
2.3.6 La evaluación como herramienta de validación del sistema social e
ideológico............................................................................................................... 52
3 DIMENSIÓN AXIOLÓGICA DE LA TEORÍA EVALUATIVA Y SU
RELACIÓN CON LOS MODELOS DE JUSTICIA LIBERAL. ............................. 54
3.1 PRINCIPIOS ÉTICOS DEL UTILITARISMO LIBERAL Y SU RELACIÓN
CON LA EVALUACIÓN........................................................................................... 55
3.2 PRINCIPIOS ÉTICOS DEL IGUALITARISMO LIBERAL Y SU
RELACIÓN CON LA EVALUACIÓN ...................................................................... 60
3.3 EL DEBATE SOBRE LA CALIDAD DE VIDA Y SU IMPLICACIÓN EN LA EVALUACIÓN
DE POLÍTICAS Y PROGRAMAS. ...................................................................................... 65
4
4.3.2.3 Scriven y la ciencia del valor........................................................................ 86
4.3.3 La evaluación orientada hacia el uso. La necesidad de integración y
pragmatismo........................................................................................................... 89
4.3.3.1 Cronbach y la planificación evaluativa......................................................... 90
4.3.3.2 Robert Stake: la evaluación y la investigación política ................................ 95
4.4 ENFOQUES Y MODELOS DE LA EVALUACIÓN.................................... 98
4.4.1 Modelo de logro de metas ....................................................................... 101
4.4.2 Modelo de efectos.................................................................................... 103
4.4.3 Modelo libre de metas ............................................................................. 103
4.4.4 Modelo de evaluación comprensiva ........................................................ 103
4.4.5 Modelos centrados en el cliente. ............................................................. 107
4.4.6 Modelo centrados en usuarios claves (stakeholders).............................. 108
4.4.7 Modelos económicos. .............................................................................. 109
4.4.8 Modelos de evaluación de profesionales................................................. 109
4.4.9 Otros modelos. ........................................................................................ 110
4.4.9.1 Modelo basado en la investigación de las ciencias sociales. ...................... 110
4.4.9.2 Modelo de inspección industrial................................................................. 111
4.4.9.3 Modelo de caja negra (black box)............................................................... 111
4.4.9.4 Modelo de Responsabilización (accountability)......................................... 111
5 LA EVALUACIÓN Y EL MODELO DE ESTADO ....................................... 112
5.1 LA EVALUACIÓN EN EL ESTADO BIENESTAR .................................. 112
5.2 LA EVALUACIÓN EN EL ESTADO DE MERCADO .............................. 122
6 LA EVALUACION Y LA INTERVENCIÓN SOCIAL ................................. 132
6.1 LA TEORÍA DE LA INTERVENCIÓN DESDE LA PERSPECTIVA DE LA
INVESTIGACIÓN SOCIAL. ................................................................................... 132
6.2 LA TEORÍA DE LA INTERVENCIÓN EN LOS PROGRAMAS .............. 134
6.3 LA LÓGICA DE LA INTERVENCIÓN SOCIAL EN LOS PROGRAMAS
DE DESARROLLO.................................................................................................. 135
6.4 LOS MECANISMOS DE INTERVENCIÓN SOCIAL EN EL ESTADO
LIBERAL DE BIENESTAR Y LA EVALUACIÓN ................................................ 137
7 LA EVALUACIÓN Y EL CONTEXTO POLÍTICO E INSTITUCIONAL. 143
7.1 FACTORES POLÍTICOS RELACIONADOS CON LA CONFORMACIÓN
DE LA POLÍTICA PÚBLICA. ................................................................................. 143
7.2 FACTORES POLÍTICOS RELACIONADOS CON LA
IMPLEMENTACIÓN DE LA POLÍTICA PÚBLICA. ............................................. 145
7.2.1 Los medios de implementación................................................................ 145
7.2.2 La burocracia.......................................................................................... 147
5
ABSTRACT
6
La Evaluación de Políticas Públicas en el
Contexto del Estado Liberal
INTRODUCCION
1
CEPAL. Equidad, desarrollo y ciudadanía. Visión Global. Tomo I. Colombia: Ed. Alfaomega. 2000.
p. xii
7
hecho que ahora más que nunca, los gobiernos latinoamericanos deben,
dentro de la escasez de los recursos y su quiebra casi generalizada,
afinar las acciones a emprender para modificar tal situación de inequidad
e injusticia. Cada vez es más notorio por la experiencia real, el
desprestigio de las políticas de receta, que se aplican de manera
repetitiva. Tal situación ha llamado la atención de los organismos
multilaterales y las economías dominantes, quienes en distintos foros
han comenzado a asumir con preocupación la discusión sobre el tema
de la pobreza mundial.
8
Por otra parte, para el gobierno, la evaluación es un instrumento útil para
diseñar políticas, particularmente aquellas orientadas al mejoramiento de
la condición de vida de la población, evaluar su gestión, producir ajustes
convenientes y reconstruir el aparato institucional. La evaluación, más
que un mecanismo instrumental, representa una cultura de gobierno.
9
En América Latina, no se puede hablar de una apropiación sistemática
de la evaluación como práctica gubernamental ni social hasta la fecha.
Durante el período de reformas sociales de carácter populista en los
años 50 y 60 su aplicación fue mínima. Hacia los años 70’s se
incrementa su uso de manera puntual, orientada básicamente hacia la
evaluación de algunos programas de desarrollo y básicamente
promovida por los organismos multilaterales y las ONG’s internacionales
que desarrollaban programas de asistencia. A nivel del gobierno, se
hizo más énfasis en la implantación de sistemas de planificación
centralizados, que orientaran la presupuestación por programas. En los
años 90, se asiste a un debilitamiento del debate sobre las políticas de
desarrollo2, al ejecutar procesos de ajuste en la economía y los
gobiernos. Durante este período se intentó desarrollar sistemas
nacionales de planificación y evaluación, algunos con mayor éxito y
continuidad que otros, en diversos países como Chile, Colombia
(SINERGIA en el gobierno de Ernesto Samper), Bolivia (SISPLAN),
México (modelo de la Sec. de Desarrollo Social - SEDESOL), con
diversas orientaciones, centrados en los programas sociales, algunos en
el desempeño de las agencias estatales y otros en el presupuesto del
gobierno.
2
SÁNCHEZ, José Fdo. Director del ILPES. Presentación en el Seminario de alto nivel sobre las
funciones básicas de la planificación. La Habana, 16 al 17 de Noviembre de 2000.
10
mostrar la integración de algunos elementos teóricos de estos campos,
puede radicar el mayor beneficio de este trabajo.
11
El contenido se encuentra dividido en siete capítulos. El primero
contiene algunas definiciones básicas sobre la evaluación de políticas y
su historia. En el segundo capítulo se describen de manera general los
planteamientos básicos del texto; cómo se relaciona la evaluación con el
liberalismo a través de tres dimensiones básicas: axiológica,
epistemológica y la concepción del Estado; las características de la
evaluación desde la perspectiva de las políticas públicas y el rol de la
evaluación en el contexto del Estado liberal.
12
desarrollar un marco teórico para un proyecto de investigación en
Evaluación de Políticas Públicas en América Latina. Paralelamente, los
cursos de evaluación de políticas públicas exigían integrar el
componente instrumental de la evaluación con la teoría política,
intentando ofrecer a los estudiantes una perspectiva mas fundamentada
de su significado dentro del Estado, que les permitiera comprender con
mayor rigor las implicaciones de un programa evaluativo serio en el
gobierno, así como los orígenes y especificidades de los distintos
enfoques de la evaluación sin caer en la simple exposición de técnicas.
Como tal, este material se ha ido construyendo a partir de
requerimientos investigativos, académicos y de asesoría al sector
público, así como diversas ponencias sobre planificación y evaluación
presentadas en los congresos del Centro Latinoamericano de
Administración Pública - CLAD en Madrid, México, Santo Domingo y
Lisboa; y del trabajo en la Red Interamericana de Gestión de Proyectos.
13
1 EL CONCEPTO DE LA EVALUACIÓN
La evaluación, como se tratará aquí, tiene que ver con las intervenciones
del gobierno desde la perspectiva de la ciencia política y de las políticas
públicas (en la literatura inglesa: Political Science y Policy Science), en
la dimensión de bienestar del Estado liberal, estudiando el cambio social
generado por el Estado y el gobierno a través de programas y políticas
públicas. Desde esta óptica, la evaluación se concibe de manera amplia,
y tiene que ver con los problemas públicos, la búsqueda de soluciones,
el análisis del aparato institucional que las desarrolla y la ideología que
soporta el cambio.
3
ROBSON, Colin. Real World Research. Londres: Ed. Blackwell. 1993. p 170
14
La definición del concepto de evaluación, particularmente en el campo
de las intervenciones públicas y sociales, ha estado marcada por el
debate sobre su alcance y utilidad. Una primera tendencia define a la
evaluación de manera instrumental, como un proceso sistemático que
recoge información, la procesa, y determina los resultados de una
intervención con el objeto de tomar decisiones en el ámbito político o
gubernamental, generalmente con un alcance determinado por los
límites que impone la intervención evaluada. Una segunda, que plantea
la evaluación como algo inherente al proceso de construcción social, que
sirve para conocer la realidad, percibir los problemas sociales, construir
colectivamente propuestas y mejorar la sociedad; esta última le da a la
evaluación un alcance social más amplio y deliberativo, que traspasa la
simple intervención e incursiona en el cuestionamiento de la sociedad, el
Estado y la ideología política que lo respalda.
4
WEISS, Carol. Evaluation. USA: Ed Prentice may, 1998. p. 4.
5
PATTON, Michael Quinn. Practical Evaluation. Sage Publications 1982. p 15.
6
ROSSI, Peter; Freeman, Howard E. Evaluation – A Systematic Approach. USA: SAGE
Publications. 2da edición. 1982. p. 20
7
STUFFLEBEAM, Daniel; SHINKFIELD, Anthony. Evaluación Sistemática. Ediciones Piados:
España. 1985. p. 19.
15
orientación que ha generado definiciones centradas en el valor,
considerándola como un “juicio de valor” sobre algo, entendido este
como la contribución de la intervención en términos de valía y mérito,
para lo cual es fundamental la construcción de criterios razonables de
valor.
8
MENY, Yves; THOENIG Jean C. Las políticas públicas. Barcelona: Editorial Ariel. 1992. p. 194
9
MULLER, pierre. Las políticas públicas. Santa fe de Bogotá. Pontificia Universidad Javeriana.
Traducción de Carlos Salazar Vargas y Jean - Francois Jolly. Mimeo. p 27.
16
Para Meny y Thoenig10 evaluar una política pública es “apreciar los
efectos atribuibles a una intervención gubernamental en un campo
específico de la vida social y del entorno físico. Un modo de
razonamiento sobre la base de métodos científicos de la eficacia y de los
efectos reales, previstos o no, buscados o no de las políticas públicas”.
Al respecto Eleanor Chelimsky11 señala tres propósitos de la evaluación
en el gobierno: la formulación de políticas, la ejecución y la
responsabilidad en la toma de decisiones públicas (efectividad de un
programa, necesidad de continuarlo). El considerar la evaluación como
un asunto de responsabilidad ante la toma de decisiones hace pensar en
un escenario de voluntad política que permita algún nivel de
independencia del proceso evaluativo.
10
MENY, Yves; THOENIG Jean C. Op. cit., p. 195
11
CHELIMSKY, Eleanor. La experiencia de los Estados Unidos en la evaluación de programas. En:
Control y Evaluación de la Gestión Pública. Santa fe de Bogotá: Departamento Nacional de
Planeación. 1992. p. 26.
12
FISHER, Frank. Evaluating Public Policy. Chicago: Ed. Nelson Hall Publishers, 1997. p. 19, 207
17
Según Shadish, Cook y Levington13, el debate teórico de la evaluación
se ha centrado en cinco aspectos básicos. En primer lugar la relación
entre la práctica evaluativa y los problemas sociales; este componente
incluye elementos tales como la afinidad existente entre el programa y
los cambios sociales que se pretenden generar, la naturaleza de los
problemas sociales, la estructura del programa y las restricciones que
componen su funcionamiento. A este respecto es necesario considerar
los elementos que componen la denominada teoría de la intervención
social, la cual explica, desde diversas perspectivas, cómo la intervención
genera cambios en el contexto social. En el caso de las políticas
públicas, la evaluación se enfrenta a consideraciones relativas al
proceso de conformación de la política, y su perspectiva cambia en
función a las distintas características que poseen los modelos
explicativos de la política.
Un segundo aspecto del debate teórico, tiene que ver con la validez de
los enfoques con los que se debe abordar el conocimiento y la discusión
entre la objetividad y la subjetividad en la evaluación social. En este
caso la teoría evaluativa hace suya la discusión ontológica sobre la
naturaleza de la realidad y epistemológica sobre sus características, así
como la forma mas apropiada de abordarla14. Si la realidad no existe, o
es relativa, los conceptos de causalidad y validez, pueden depender de
cada individuo. Por el contrario, si existe una realidad externa, existiría
un punto común de referencia colectivo acerca de esta y sus atributos.
13
SHADISH, William; COOK, Thomas; LEVINTON, Laura. Foundations of Program Evaluation.
USA: Ed. SAGE, 1991. p. 37.
14
Ibid., p 42.
18
como Guba y Lincoln15 defienden teorías diferentes orientadas
exclusivamente a la construcción de estudios de caso, métodos blandos
para recoger información, que en el fondo tienen como planteamiento
central que la verdad es relativa a cada individuo y por lo tanto debe ser
reconstruida de manera específica. Estas dos escuelas corresponden a
los paradigmas denominados postpositivistas y constructivistas y que se
utilizan para explicar dos perspectivas de la investigación en las ciencias
sociales.
En tercer lugar la teoría acerca del valor, la cual provee de los elementos
filosóficos para atribuir valor a una intervención. Esto tiene que ver con el
establecimiento de aquellos estándares valorativos por medio de los
cuales la evaluación del programa en estudio puede ser considerada
como buena o mala, aceptable o no aceptable. ¿Cuáles son los factores
que hacen que desde nuestro punto de vista el programa funcione bien o
mal?, ¿cuál es la escala de valoración? ¿Deben los evaluadores estar
libres de valores al iniciar el análisis de una intervención o por el
contrario deben “armarse” de una serie de principios objetivos que son
considerados como valores prioritarios a los cuales debe responder el
programa y contra los cuales se deben contrastar su desempeño?
¿Puede un evaluador enfrentar un juicio a cerca de una intervención sin
poseer unos valores declarados como ciertos?
15
Ibid., p. 46
19
Y, finalmente la práctica de la evaluación, relacionada con las
metodologías y técnicas más apropiadas para ejercer la disciplina, los
métodos que utiliza, los objetos de estudio que aborda, la financiación
de los recursos, los procedimientos, etc. Incluye elementos tales como
decidir si se debe realizar una evaluación o no, cual es el propósito que
debe tener, cual es el rol que debe jugar el evaluador, las preguntas que
deben ser respondidas, qué diseños deben ser usados y qué actividades
deben realizarse para facilitar el uso de los resultados de la evaluación.
20
Sin embargo, las políticas sociales de esta época no incluían a la
evaluación como parte de su aplicación18 y los métodos de investigación
social que se aplicaban se dirigían a la recolección de información útil
para diagnosticar los problemas y cuantificarlos. De esta forma se
suponía que las soluciones eran las apropiadas para dichos problemas.
18 WEISS, Op.cit., p 11
21
Los años 60 en los Estados Unidos, con la denominada guerra contra la
pobreza vieron el auge de la evaluación de programas en gran escala,
financiados por el gobierno. La evaluación no se limitó a los programas
escolares sino que cubrió una amplia gama de programas asistenciales
de salud, vivienda, programas de acción comunitaria etc. Se presumía
que la evaluación era un instrumento adecuado para determinar los
resultados obtenidos con el dinero invertido. En este período se presenta
el auge de la escuela sistémica y el desarrollo de disciplinas como la
investigación de operaciones, y el análisis económico etc., las cuales
influyen en la conformación de enfoques sistémicos para la evaluación
de los programas. Muestra de ello es el auge en la utilización, durante
esta época, de los modelos de análisis costo beneficio, en la
corporación RAND y el Departamento de Defensa.
22
demuestra el gran auge de la evaluación durante este período, lo que
excedió incluso la disponibilidad de personal capacitado en el área. La
inversión federal en evaluación durante el periodo entre 1975 y 1977
excedió los $ 3 billones de dólares22. Muchas firmas fueron establecidas
para llevar a cabo evaluaciones federales y se desarrolló la investigación
en el área en muchas universidades. En 1976 se fundaron dos
sociedades profesionales – Evaluation Research Society y Evaluation
Network; en el 85 surgió la Asociación Americana de Evaluación con
cerca de 3,000 miembros y en Europa por esta época, se constituyó la
Asociación Europea de Evaluación.
22 Ibid., 27.
23
2 TEORÍA POLITICA Y EVALUACIÓN
24
naturaleza de la realidad social que debe ser evaluada, y un tercer
componente, relacionado con la concepción del Estado y la intervención
social que debe existir para asegurar la aplicación de los principios
éticos dominantes. Cada una de estas dimensiones será desarrollada
con algún detalle en los capítulos 3, 4, 5, y 6 respectivamente, de esta
monografía.
25 Ibid., p. 46.
26 KYMLICKA, Will. Filosofía Política Contemporánea. Una Introducción. Barcelona: Ed Ariel, 1990.
p. 11.
25
intervención requiere conformar criterios generales, que permitan
construir escalas de valor, no referidos a asuntos particulares de la
intervención misma (objetivos o medios por ejemplo) sino a una
concepción moral de lo que es bueno para un individuo y la sociedad,
enmarcando lo que serían actos correctos desde dicha perspectiva
axiológica. Este asunto se relaciona necesariamente con la selección de
los atributos que conforman el significado del concepto de justicia, así
como el de bienestar y calidad de vida, aspectos que entran en la esfera
directa de las preocupaciones del Estado y de sus intervenciones. El
liberalismo ha intentado dar respuesta de diversas formas a la pregunta
sobre lo que es bueno o malo para el individuo, o la sociedad, y
subyacente a cada forma de pensamiento hay una opción distinta para
la evaluación del Estado y la sociedad.
26
interpretaciones, la cual asume dimensiones bien distintas si se parte de
concepciones utilitaristas, intuicionistas o feministas de la teoría política
liberal, para solo mencionar algunas.
28 FISHER, Frank. Evaluating Public Policy. Chicago: Ed. Nelson Hall Publishers, 1997. Cap 8.
Frank Fisher subraya la existencia de un debate ideológico sobre lo que son los principios que
deben orientar la calidad de vida, el cual se concentra contemporáneamente entre la lógica de la
utilidad vs la lógica de los derechos. (léase utilitarismo vs igualitarismo). Con respecto a la
evaluación, Fisher identifica un componente básico para la evaluación de políticas publicas que
denomina la “evaluación de los compromisos ideológicos”, el cual hace parte del proceso evaluativo
y que está directamente relacionado con la verificación que se realiza de la validez de las ideologías
vigentes y que orientan la política, para solucionar los conflictos sociales.
27
como derecho la realización de ciertos tratamientos en salud29. Tampoco
existe acuerdo sobre si la nutrición (como componente indispensable de
la salud y del bienestar) es un fin en sí mismo o es un medio para que
los individuos satisfagan otras necesidades de orden superior. En el
primer caso, el aceptar la nutrición como un fin lleva a considerar que
un objetivo principal del bienestar es garantizar un mínimo nutricional
(pe: canasta familiar), mientras que en el segundo caso, se puede
argumentar que los individuos se nutren con el objeto de poder realizar
acciones en su vida que conlleven a su realización personal (p.e:
disfrutar del deporte o desempeñarse laboralmente de manera
satisfactoria). Obsérvese que las características de la distribución son
afectadas igualmente por el concepto de calidad de vida subyacente; si
hablamos de nutrición podríamos considerar como justo que todos los
individuos posean un mínimo de nutrientes básicos para realizar sus
funciones vitales. Sin embargo, se podría considerar injusto que
algunos estén sobre-alimentados y posean acceso a muchos más
bienes alimenticios. Desde una posición utilitarista, una política
alimentaria que maximice el nivel nutricional para una población puede
ser adecuada, mientras que desde una perspectiva igualitaria es
necesario que los bienes sean dirigidos a aquellos mas desnutridos, aun
en detrimento de los que están en mejores condiciones.
29 La cirugía plástica por simple mejoramiento de imagen personal, por ejemplo, ya que se podría
argumentar que el sentirse bien como persona con su imagen es un componente indispensable de
calidad de vida.
28
que se expresa en la adopción de criterios de valoración31, los cuales
dependen de la posición que se adopte. Esta noción plantea la
relatividad de la evaluación como ejercicio intelectual y social, así como
la conveniencia de estudiarla a partir de su relación con los diferentes
modelos de justicia liberal.
31 Estas teorías de valor pueden ser tomadas de manera prescriptiva de los modelos liberales, o
construir de acuerdo a los criterios de valor que sean apropiados y compartidos para el programa.
29
• Una comisión evaluativa del congreso, intenta determinar la
responsabilidad de un Ministro en el fracaso de un programa de
explotación petrolera en el país, para el cual se han realizado
inversiones y contratos internacionales. Para ello utiliza métodos
contrapuestos de investigación judicial que permitan conocer la
verdad sobre la actuación de los implicados, escuchando las
partes involucradas, contraponiendo testimonios, pruebas
documentales etc. Con base en el juicio emitido por la comisión,
se tomarán decisiones políticas con respecto al gobierno.
30
en el segundo caso, se refleja una epistemología subjetiva, con
tradiciones constructivistas, relativistas o de teoría crítica (Guba)32.
33 Una de estas clasificaciones la realiza Ramesh Mishra, agrupando a los países entre “Estados
del bienestar diferenciados” y “Estados del bienestar integrados”. Los primeros corresponden a
aquellos en donde existe una economía libre de mercado y una activa participación en la toma de
decisiones por parte de los intereses individuales (Estados Unidos, Inglaterra, p.e); y a los
integrados los define como aquellos en donde el Estado interviene formando acuerdos entre los
representantes de la patronal y de los trabajadores (Alemania, Italia p.e).
MONTAGUT, Teresa. Política Social – Una Introducción. España: Ed. Ariel Sociología. 2000. p 77.
31
presencia de modelos diferenciados a partir del análisis de las relaciones
entre el sector público, la familia y el mercado. Esping-Andersen ha
descrito tres modelos: el corporativista, orientado a generar bienestar a
partir del trabajo y basado en contribuciones individuales y acuerdos
corporativos; el social demócrata, orientado a proveer asistencia por
parte del Estado de manera universal y el liberal en el que predomina el
esfuerzo individual y el mercado.
35 DYE, Thomas. Understanding Public policy. New Jersey: Ed. Prentice Hall, 1.984. p 1.
32
la política pública como “la asignación con autoridad de valores para la
totalidad de la sociedad”; Harold Lasswell la define como “un programa
proyectado de metas, valores y prácticas”36
36 Ibid. Pag 2.
37 En ingles “The Policy System”, diferenciado del “Political System”. El modelo describe el sistema
de políticas a partir de tres componentes, uno de ellos es el sistema político, entendido como las
instituciones, los procesos, y los comportamientos políticos
33
de la necesidad, la formulación de la política, la legitimación de la
política, la implementación y la evaluación38.
38 Estos modelos, centrados en el proceso racional adolecen de visiones de conjunto que expliquen
las interrelaciones entre los grupos de interés, las relaciones de poder y diferentes variables que
influyen en las decisiones haciendo que el proceso real no sea absolutamente racional, sino que
obedezca a lógicas de tipo incremental o de racionalidad limitada. De esto se sigue que no
necesariamente el cambio en los procesos genera cambio en las políticas.
39 Este modelo es limitado por cuanto concibe las acciones gubernamentales exclusivamente como
producto de la presión de los grupos y deja por fuera elementos de carácter técnico, cultural y
político que actúan desde el interior y desde afuera del gobierno generando políticas. También
descuida la existencia de coyunturas especiales que generan la atención del Estado.
41 Este modelo considera que las políticas públicas se establecen para mantener la jerarquía social
y resguardar los privilegios de la elite. Los cambios que se realicen y reformas en el gobierno no
están orientados a defender los intereses de las masas, sino es en la medida en que sirvan para
mantener el orden. Las masas son pasivas, apáticas y desinformadas. El ejercicio democrático no
permite que las masas tomen decisiones sino que estas siempre serán asumidas por los más
capacitados.
34
La política como la maximización de la ganancia social –
racionalismo. Este modelo define la política como una acción racional
que debe buscar maximizar el beneficio social. El criterio de decisión
para determinar si se adopta o no una política consiste en evaluar si los
beneficios son superiores a los costos. En caso de no serlo debe
desecharse. Los conceptos de beneficio y costo incluyen no solamente
lo económico, sino todos aquellos aspectos sociales y políticos que son
afectados por la intervención.42
42 Existen diversos modelos para aplicar el modelo racional. Dror define las siguientes
componentes:
DROR, Yehezkel, Public Policy-Making Re-examined, Part IV; “An Optional Model of Public Policy-
Making” (San Francisco: Chandler, 1968) citado por: DYE, Thomas. Op. cit., p 31.
Estos modelos asumen racionalidad en la toma de decisiones por parte de los gerentes públicos.
En la realidad los procesos de toma de decisiones no se realizan en función solamente de la
maximización, sino que inciden muchas otras variables que van desde las limitaciones psicosociales
y técnicas del gerente público, la influencia de los grupos de poder, la influencia del contexto
político, del entorno, las limitaciones presupuestales, hasta los procesos incrementales de formación
de política que sacrifican eficiencia por viabilidad política y social.
43 Este modelo describe bastante bien el proceso real de diseño de políticas asumiendo que los
seres humanos no siempre buscan la maximización racional de sus beneficios, sino que son
35
La política como escogencia racional en situaciones competitivas -
Teoría de juegos. La teoría de juegos en las políticas públicas es
heredera de los desarrollos de Von Neuman, a mediados de siglo
conformaron la escuela de investigación de operaciones. La teoría de
juegos pretende, bajo condiciones de certidumbre o incertidumbre
determinar cuál es la mejor estrategia que un jugador debe realizar
cuando su decisión depende de lo que haga su contendor. Es decir, las
decisiones son dependientes entre sí y un jugador al decidir, tiene en
cuenta sus intereses pero también lo que espera que el contendor
realice. Llevado a las políticas públicas un jugador puede ser un
gobierno que debe decidir que hacer frente a un gobierno oponente en
una situación de conflicto o cualquier situación similar.
muchas las variables que conducen a tomar una decisión, proceso que muchas veces no esta
claramente delimitado mediante eventos formales sino que se mezcla sutilmente con los procesos
rutinarios de la gerencia.
36
limitada (Simon) y la escuela del comportamiento. Tuvo como orientación
básica la decisión de los mejores cursos de acción45 dentro del sistema
político vigente, sin entrar a teorizar ni a cuestionar su naturaleza46; el
enfoque dominante para la formación de políticas y su evaluación
consideraba a la sociedad como algo racional, que debía utilizar la
investigación social y la experimentación para reformarse y tomar las
mejores decisiones. Estas, solo debían hacerse a partir de evidencias
empíricas, pruebas y datos que las validaran como curso de acción.
Este período, situado entre las décadas del 50 y 60, coincidió con la
construcción y auge del Estado de bienestar, en el cual se iniciaron
programas a gran escala para solucionar problemas urbanísticos, de
educación, ocupación y salud, tanto en Estados Unidos como en Europa.
La evaluación utilizó el método científico para determinar la verdad sobre
las intervenciones sociales, considerando los programas sociales como
un campo de experimentación. Así como el estudio de las políticas no
buscaba la modificación del sistema político, sino garantizar su
operación, la evaluación intentaba contribuir a diseñar los mejores
programas sociales, comparando mediante experimentación social
diversas alternativas, y proveyendo información para su ajuste,
continuidad o cierre47. El desarrollo de la teoría de políticas y de la
evaluación estuvo al servicio de los gobiernos, y fue patrocinado en gran
medida por fondos estatales.
45 Un ejemplo de este tipo de modelos considera que el proceso de análisis de políticas para definir
el mejor curso de acción se realiza en cinco pasos:
1. Formulación, en el cual se define el problema social que se quiere resolver, y el alcance de la
solución (objetivos a lograr)
2. Investigación, para determinar las mejores alternativas que se presentan
3. Predicción, sobre lo que pasará en el futuro utilizando las técnicas de proyección estadística
4. Modelaje, en el cual se simula lo que pasará si se usa cada alternativa, de acuerdo a las
predicciones realizadas. Para ello se pueden utilizar modelos matemáticos de simulación e
investigación de operaciones.
5. Síntesis, en el cual se escoge una alternativa comparando el desempeño en las simulaciones
realizadas.
Adaptado de: QUADE, E.S. Analysis for Public Decisions. Rand Corporation. USA: Ed. Prentice
Hall. 1989. 3a edición.p. 44.
46 MENY, Yves; THOENIG Jean C. Las políticas públicas. Barcelona: Editorial Ariel. 1992. p. 44.
47 Corresponde este periodo al desarrollo teórico de autores como Campbell, Stanley, Suchman.
Ver Cap 4. seccion 4.3.2
37
explicativos de las políticas públicas no centrados en determinar cuál
era la mejor decisión, sino en analizar el proceso mediante el cual se
toman las decisiones públicas (Policy-Making). Este momento se sitúa al
final de los años 60s y durante parte de la década de los 70, generando
cierta relativización en la concepción de las políticas públicas, y la
ampliación de su campo de estudio, al incorporar elementos explicativos
relacionados con la teoría de grupos, las relaciones de poder en la
sociedad y las organizaciones, así como lógicas de construcción
incremental (incrementalismo), impregnando su estudio de un criterio
más de aprendizaje sobre cómo se formulan en la realidad48, que del
intento de encontrar el mejor medio para formularlas; y dando origen a
modelos descriptivos en contraposición con el carácter prescriptivo que
se manejaba inicialmente.
48 Es interesante el paralelismo, producto del escenario común, entre el desarrollo de las nociones
de política, en el sector público y el de estrategia en las organizaciones. Ambas parten desde un
modelo racional para irse ampliando hacia modelos incrementales y de aprendizaje social y
organizacional. Al comparar la literatura sobre modelos de concepción de estrategia (Mintzberg
p.e), se observa la similitud con respecto a los modelos de políticas públicas. Asimismo ambas son
definidas de manera genérica como cursos de acción. Una tesis que podría plantearse –sobre la
cual no existe alusión en la literatura revisada para este documento- es que las políticas públicas en
el gobierno corresponden a la estrategia en las organizaciones privadas.
38
político. En este esfuerzo, es fundamental la opinión de los participantes,
su ideología, expectativas y el evaluador es un servidor civil en función
de los intereses de los clientes de la evaluación50.
50 Ver Sección 4.3.3.2, particularmente el proceso de investigación política según Robert Stake.
39
conveniencia de realizar determinada intervención y estableciendo
sistemas de medición con el objeto de controlar y asegurar la eficiencia
de la política y el logro de los resultados propuestos.
55 WIESNER, Eduardo. Evaluation. Markets, and Institutions in the Reform Agenda of Developing
Countries. En: CHELIMSKY, Eleanor; SHADISH, William. Evaluation for 21st century. A handbook.
USA:.Sage Publications. 1997. p 190 y subs.
40
mercado y sus condiciones, el desempeño de las instituciones y los
programas, así como de políticas claves y de estructuras institucionales.
56 AGUILERA, Luis F. La Hechura de las Política Públicas. México: Grupo Edit. Miguel Angel
Porrúa. 1992.
57 Decimos que estrictamente, por cuanto se podría pensar que es un ideal teórico el que las
políticas surjan de forma natural a partir de las demandas sociales. Como se describió
anteriormente, algunos modelos explicativos de las políticas públicas las consideran respuestas a
demandas sociales (modelos racional-pluralistas), sin embargo otras visiones desvirtúan esta
explicación al introducir análisis centrados en los intereses de élites, clases, grupos o burocracias.
58 KELMAN, Steven. La política pública en el Estado Moderno. Buenos Aires: Grupo Editor
Latinoamericano. 1992. p. 15
41
que el gobierno haga como a lo que deja de hacer, por cuanto este
puede desatender de manera premeditada cualquier asunto, y esto
constituye igualmente un curso de acción.
61 Por ejemplo, una política de salud puede incluir como propósito el incremento de la capacidad de
atención a los usuarios, a través de la ampliación de la capacidad hospitalaria o el establecimiento
de niveles de atención médico diferenciados, para lo cual se realizarán contrataciones con
entidades privadas o se ampliarán las plantas existentes, inyectando recursos al sistema o
redefiniendo líneas de financiación.
42
gobierno y sus instituciones o el continuo cambio en las mismas hasta
desvirtuar la lógica de la acción emprendida62.
62 PATTON, Michael Quinn. Utilization – Focused evaluation. USA: Ed. Sage Publications. 1986. p
87.
WEISS, Op. cit., p 48 y subs.
WEISS, Carol. Investigación Evaluativa. México: Ed Trillas, 1992. p 41.
64 Carol Weiss denomina a esto la teoría del programa. Ver cap 6, en donde se presentan algunos
conceptos sobre la teoría de la intervención social.
43
de la población ya sea como beneficiarios directos, sujetos de su
cumplimiento, o relacionados indirectos. Las políticas utilizan
instrumentos para alcanzar sus objetivos, tales como las regulaciones,
los medios económicos y la información66, los cuales corresponden a los
medios con los cuales cuenta el Estado para atender los asuntos
públicos. Las regulaciones llevan implícito un carácter coercitivo y
pueden consistir en restricciones o la estipulación de reglas de
acatamiento en cualquier campo de la vida pública67. Por su parte los
medios económicos suministran recursos (de cualquier índole: físicos,
monetarios), para obtener determinados productos ya sea a través de la
intervención directa del Estado, del mercado y sus instituciones, o de los
ciudadanos mismos68. La información puede complementar los
anteriores instrumentos o ser una vía de cambio de patrones de
comportamiento ciudadano, suministrando conocimiento necesario para
tal fin69.
66 VEDUNG, Evert. Public Policy and Program Evaluation. USA: Transaction Publishers. 1997. p.
122 y subs.
67 Una política de seguridad puede generar restricciones a la movilización ciudadana, mientras que
una política de saneamiento fiscal puede utilizar regulaciones a las transacciones bancarias.
68 Una política asistencial en vivienda, puede otorgar subsidios para las familias de menores
recursos. Una política de fortalecimiento de exportaciones puede inyectar recursos económicos a
los productores, u otorgar subsidios.
69 Una política de seguridad vial puede utilizar campañas de prevención para los automovilistas.
44
para comprender el rol de la evaluación de políticas y se asimilan al
modelo de los procesos descrito previamente. Básicamente incluyen una
etapa de identificación y formulación del problema que se pretende
resolver, la formulación de soluciones, la selección de la mejor
alternativa, la implementación y la terminación. Algunos incluyen la
evaluación como una etapa final y otros presentan etapas de
preparación para la implementación, o de legitimación política una vez
se ha escogido la alternativa71.
71 DYE, Thomas. Op. cit., p 318 y subs. Ver también: MENY, Yves; THOENIG Jean C. Op. cit., p.
105 y subs. QUADE, E.S. Op. cit., p. 50 y subs. VEDUNG, Evert. Op. cit., p. 15 y subs.
45
Desde el punto de vista de la gestión del gobierno, autores como
Eleanor Chelimsky76 señalan como propósitos de la evaluación, la
formulación de políticas, la ejecución y la responsabilidad en la toma de
decisiones públicas (efectividad de un programa, posibilidad y necesidad
de continuarlo o mejorarlo).
77 El monitoreo cumple un rol de control del programa, y de alimentación para la evaluación. Peter
H. Rossi, lo define como monitoreo del programa y responsabilización (accountability), con dos
objetivos: identificar el alcance de la población objetivo y la entrega de servicios; y plantea que este
es un insumo importante para la evaluación del impacto del programa.
ROSSI, Peter; Freeman, Howard E. Evaluation – A Systematic Approach. USA: SAGE Publications.
2da edición. 1982. p. 123.
Vedung, lo ubica durante el proceso de gobierno, una vez se ha tomado la decisión sobre lo que se
hará y se realiza sobre la administración del programa. VEDUNG, Evert. Op. cit., p. 17.
Entre los tipos de monitoreo (y componentes) que normalmente se incluyen están: Monitoreo del
desempeño del programa, monitoreo financiero, estudios de diagnóstico, evaluaciones de medio
término, auditoria, monitorio de las operaciones, capacidad y sostenibilidad. VALADEZ y
BAMBERGER. Monitoring and Evaluation Social Programs in Developing Countries. Washington:
The World Bank. 1994. p. 120
46
específicos. En otras ocasiones las políticas corresponden a estrategias
o acciones que no necesariamente requieren programas estructurados
sino acciones ejecutivas o legislativas determinadas. La estructuración
en políticas o programas difiere en los distintos países. Mientras que en
los Estados Unidos el programa es clave para agrupar acciones y
presupuestos, en Francia por ejemplo, no se utiliza y los presupuestos
se asignan con criterios de categorías contables79.
80 Incluso Weiss declara en su texto que utilizará el término evaluación de programas para abarcar
la evaluación de políticas, programas y proyectos. Ibid.
82 Esto no significa que el contexto de cada programa no implique una estrategia evaluativa
particular. VEDUNG, Evert. Op. cit., p. 121.
83 WHOLEY, Joseph. ¿What can we actually get from program evaluation? Policiy Sciencie, 3, p
361-369. Citado por : MENY, Yves; THOENIG Jean C. Op. cit., p. 201,
47
2.3.1 La evaluación como herramienta de formación ciudadana y
participación social.
Esta perspectiva recoge la idea de que la evaluación permite al
ciudadano informarse acerca del desempeño del gobierno con respecto
a sus intereses particulares mejorando su capacidad de opinión y
decisión con respecto a su futuro. Esta idea es extensiva también al
concepto de que se genera aprendizaje individual y formación como
ciudadano al estar en contacto con proposiciones, puntos de vista y
análisis de carácter plural promovidos democráticamente mediante los
procesos evaluativos.
84 FETTERMAN, D.M. Foundations of Empowerment Evaluation. Thousand Oaks, CA: SAGE. 2000
85 SANGRA, Emmanuel. Evaluation an civil society, the example of the Canton of Geneva. 2000.
Paper presentado en la Cuarta Conferencia de la Sociedad Europea de Evaluación. Lausanne,
Suiza. Octubre 2000; en donde se presenta el caso de la Comisión Externa para la evaluación de la
Política Pública de Geneva, en la cual tanto su composición, la selección de objetos de evaluación,
así como la amplia consulta de intereses ciudadanos, contribuye desde la perspectiva del autor a
mejorar la transparencia, el empoderamiento y la mediación en la sociedad civil.
48
han emprendido en la mayoría de los países y se han promovido
procesos descentralizadores, en búsqueda de mayor autonomía y
equilibrio fiscal, así como la aparición de nuevas formas de prestación de
servicios a través del mercado. Este escenario ha generado mayores
demandas de responsabilización86 y transparencia al interior del
gobierno desde los subordinados hacia sus superiores, y desde el
gobernante hacia la ciudadanía, con el objeto de presionar el uso
apropiado de los recursos y la consecución de resultados en la gestión.
La responsabilización incluye dar cuenta sobre el cumplimiento de
mandatos constitucionales y legales del gobernante, la cantidad y
calidad de los bienes o servicios que el gobierno provee, el cumplimiento
de los objetivos y planes programados, el uso de los fondos públicos, el
cumplimiento de los objetivos de largo plazo, los niveles de eficiencia, el
cumplimiento de procedimientos, la utilización de recursos etc., y debe
ser ejercida en los distintos niveles del gobierno.
49
2.3.4 La evaluación como herramienta de mejoramiento de la
gestión pública
Aunque la teoría administrativa y de las políticas incluye la evaluación
como parte de la gestión de las organizaciones y del proceso de las
políticas públicas, esta ha adquirido gran relevancia particularmente con
la denominada “nueva administración pública”, en los años 90. La
“nueva administración pública” presenta una clara orientación hacia la
gestión por resultados87, y la calidad de los servicios.
89 Esta última visión es impulsada fuertemente por la corriente neoinstitucional, aunque autores
como Campbell trabajaron desde los años 60´s el concepto de la evaluación como elemento para la
reforma social.
50
cuanto a la problemática social y a la opinión ciudadana, con el objeto
de incluirlos en su programa o agenda de gobierno; le permite valorar
constantemente su imagen pública a partir de la evaluación de los
resultados de las acciones emprendidas por su gobierno y la
investigación acerca de la percepción ciudadana sobre su labor.
Asimismo la evaluación le puede ofrecer una visión más comprensiva de
la gobernabilidad con que cuenta su administración y de las demandas e
intereses de sus competidores políticos, o de los demás poderes del
Estado. Esta finalidad de la evaluación se puede extender para beneficio
de todos los demás actores políticos (partidos, poderes públicos) así
como de la misma sociedad y sus organizaciones.
51
2.3.6 La evaluación como herramienta de validación del sistema
social e ideológico.
Una perspectiva mucho mas formativa, desde el punto de vista de la
ciencia política y la democracia, es la evaluación como herramienta de
validación del sistema social y político, que contribuye a la construcción
de conocimiento sobre su funcionamiento y la correlación con las teorías
políticas y sociales que lo soportan, bajo un modelo determinado de
Estado o de sociedad. Efectivamente, la investigación evaluativa provee
evidencia empírica, que puede facilitar la construcción de visiones algo
más realistas en un sistema democrático. Este punto de vista de
conocimiento y de investigación, generalmente relegada a los
académicos, actúa en diversos niveles y se construye a partir de la
conjunción de cada uno de los ejercicios evaluativos que se realizan
desde las diversas perspectivas que han sido descritas.
93 Fisher denomina a este segundo aspecto “validación del nivel social”. FISHER, Frank. Op. cit., p.
111.
52
estructura institucional del Estado y la influencia de las políticas en su
ajuste o cambio.
94
Frank Fisher plantea la necesidad de cuatro componentes evaluativos para las políticas públicas,
desde una óptica de argumentación política: evaluación de logros de la política, validación de la
pertinencia de la política con respecto a la situación problema, el análisis de la contribución de la
política a la construcción de valor en la sociedad, y la evaluación ideológica. Esta última
corresponde al análisis del sistema de valores e ideologías que soportan la política.
Ibid., p 155
53
3 DIMENSIÓN AXIOLÓGICA DE LA TEORÍA EVALUATIVA Y SU
RELACIÓN CON LOS MODELOS DE JUSTICIA LIBERAL.
Por cuanto las políticas y programas buscan mejorar las condiciones del
ser humano, existen principios y valores (una teoría del valor) al diseñar
una política, los cuales son aceptados de manera general o al menos
parcialmente por aquellos que la diseñan, y que se expresan en
términos de justicia social, igualdad, derechos sociales, equidad etc. La
construcción de esta teoría del valor se realiza a partir de concepciones
filosóficas, políticas, éticas de lo que debe ser el individuo, el Estado y la
sociedad en general.
Las teorías del valor incluyen tres elementos96. Una metateoría que
estudia la naturaleza y justificación del valor, una teoría prescriptiva que
plantea la primacía de valores particulares y una teoría descriptiva que
plantea valores sin pretender la supremacía de ninguno. Algunos
autores como Scriven plantean la necesidad de una metateoría. Esta
metateoría debe construirse para la evaluación estableciendo aquellos
estándares y criterios aceptados contra los cuales se van a medir el
desempeño del programa. Otros evaluadores promueven que los
54
evaluadores deben utilizar un enfoque prescriptivo, tomando una teoría
particular (como la teoría de la Justicia de Rawls) que oriente la
determinación del valor. La mayoría de los evaluadores, sin embargo,
utilizan enfoques descriptivos, construidos a partir de los interesados,
determinando los criterios apropiadas para evaluar; en este caso los
valores son implícitos a la misma evaluación y al programa.
55
filosofía política ha sido tradicionalmente el enfoque sobre el cual se han
construido los modelos de justicia social y los marcos normativos al
respecto. Posee la ventaja de que ofrece una teoría moral que no
depende de concepciones ajenas a las preferencias del individuo (Dios o
la religión por ejemplo), o sea de unos principios morales superiores. Al
estar centrado en la búsqueda de la felicidad del individuo, es
consistente con la forma racional de pensar alrededor del bienestar de la
sociedad como objeto de actuación del Estado y las instituciones
políticas y sociales. De igual forma, da la misma importancia a las
preferencias de cada individuo, por cuanto no estable un sistema
jerárquico de valores sociales100.
100 Bajo esta línea, “una propuesta de organización social de carácter socialista se valorará con la
misma importancia que una de libre mercado, por ejemplo”.
GARGARELLA, Roberto. Las teorías de la justicia después de Rawls. España: Ed. Paidos. 1999. p
24.
56
de las condiciones globales, independientemente de la distribución se
actúa bajo un criterio netamente utilitarista. Diversos modelos y enfoques
evaluativos adoptan este punto de vista, y está muy asociado con la
toma de decisiones sobre la conveniencia de continuar o no determinada
acción. Obsérvese que ante todo hay un criterio de valor generalmente
expresado de manera objetiva y cuantitativa en referencia al aumento de
ganancia social.
57
un individuo desea para sí mismo102, definiendo lo que es bueno o malo
para cada cual.
58
desfavorecidos (en igualdad de condiciones que los de mejor estado), en
espera de mejoramientos futuros.
106 Por ejemplo, cuando algunos grupos sociales solicitan la restricción de los derechos para la
población gay.
107 Este tema lo han abordado profusamente Rawls, Cohen, Sen, en el debate contemporáneo.
59
indicadores objetivos de bienestar, tales como el nivel de ingresos, el
acceso a servicios públicos etc., cuya mejor expresión se encuentra en
el denominado índice de necesidades básicas insatisfechas, el cual
orienta la puesta en marcha de políticas y la evaluación de sus los
logros, en función del avance cuantitativo del índice.
109 RAWLS, John. Teoría de la Justicia. México. Fondo de Cultura Económica. 1985. Segunda
Edición. p 20.
110 Rawls considera como grandes instituciones a la “constitución política y a las principales
disposiciones económicas y sociales”
60
situación que se asimila a un “velo de la ignorancia”, constituye la
situación apropiada para que individuos bajo estas características
definan los principios justos que deben regir la sociedad. Bajo esta
perspectiva, ninguno estará condicionado por principios de benevolencia
que le permitan favorecen intereses ajenos en detrimento de los suyos
particulares y por cuanto cada uno es igual y está en capacidad de
reclamar sus preferencias, no estará dispuesto a favorecer una
distribución que maximice la suma algebraica de satisfacciones, pero
que lo coloque a él en situación de desventaja113.
113 Aquí, en esta característica de la posición original, Rawls excluye la posibilidad de que los
individuos consideren razonable para sus intereses un enfoque utilitarista de maximización de
beneficios totales. Un motivo poderoso para que un individuo lo rechace radica en que en la
posición original, nadie sabe cómo puede utilizar sus capacidades para sacar ventaja en el futuro
sobre los demás, y considera que está en igualdad de condiciones.
61
libertades, etc.) y b) bienes primarios naturales, asignados por la
naturaleza, tales como la salud, el vigor, la inteligencia etc. Rawls asume
que la distribución debe aplicarse exclusivamente sobre los bienes
primarios sociales115.
115 Como se verá mas adelante, este es uno de los puntos en los que ha sido criticado por autores
como Cohen, Sen.
62
deben ser consideradas fundamentales para los igualitaristas119. Su
posición crítica frente al utilitarismo, ha contribuido a cuestionar su
validez como mecanismo para construir una teoría moral de la política120.
Sin embargo, ha recibido críticas tanto de otros igualitaristas como
Ronald Dworking y de autores libertarios como Nozick. En primer lugar
existen cuestionamientos relacionados con la construcción de su modelo
teórico y las condiciones que Rawls establece para su deducción. El
concepto de posición original se considera por algunos autores como
utópico e irreal, por cuanto en nuestra sociedad nadie se encuentra en
dicho estado de igualdad y de “ignorancia” con respecto a su rol social y
a sus capacidades. De igual forma ningún individuo ha sido consultado
con respecto al establecimiento de un contrato que maneje la estructura
básica de la sociedad. Incluso se plantea que la escogencia del
segundo principio por parte de los individuos en posición original no es
más que una forma de utilitarismo reglamentado por la regla Maximin, en
la cual los individuos al no saber lo que puede pasar hacia el futuro
escogen la distribución de bienes menos mala, en la peor de las
situaciones.
Las críticas más fuertes tienen que ver con dos aspectos: su concepción
de los bienes primarios y la regla de decisión de la diferencia (segundo
principio). Se argumenta que no es particularmente equitativo el que
Rawls considere como criterio de igualdad exclusivamente a los bienes
sociales, cuando él mismo afirma que son vitales los bienes naturales.
Rawls no considera a las diferencias físicas o naturales como criterios
de desigualdad. En esta situación, una persona con limitaciones físicas o
incapacidades estaría en peor estado que otra sin estas limitaciones,
aún cuando la repartición de los bienes sociales sea igual. Esta persona,
acarreará mayores costos en virtud de su limitación y debería ser esto
tenido en cuenta como una desigualdad que debe ser compensada en
mayor grado, lo cual no es contemplado por la teoría en mención.
119 COHEN, G. A. Igualdad de qué? Sobre el bienestar, los bienes y las capacidades. En:
NUSSBAUM, Martha; SEN, Amartya. Calidad de vida. México: Fondo de Cultura Económico. 1996.
p 27.
63
condiciones desiguales y que parte de los recursos generados por el
“mayor trabajador” deben ser transferidos al “menor trabajador” para
compensar su desigualdad. Aquí hay una contradicción evidente por
cuanto se terminaría subvencionando al individuo que ha hecho un
esfuerzo adicional merced a su libre elección.
64
En una concepción igualitarista, la evaluación parte de una ética
objetivista122, que provee criterios objetivos que definen los bienes
primarios valorables los cuales que deben hacer parte del bienestar de la
sociedad, a diferencia del utilitarismo que acude a una ética subjetiva
basada en preferencias abstractas individuales; e igualmente, determina
una métrica para realizar la distribución, la cual debe beneficiar a todos
los individuos por igual y en caso de existir desigualdades estas deben
beneficiar a los más desventajados.
65
de los individuos. Propuso el concepto de “capacidad”, que después
llamó “funcionamientos” o “desempeños” ante la connotación limitada y
negativa del primer término125. Este concepto se ubica posterior a la
tenencia de un bien (bien primario según Rawls) y antes de la “utilidad”
(bienestar utilitarista) que el individuo obtenga con el bien. La igualdad
se evalúa en función de lo que un bien puede hacer al individuo o lo que
éste puede hacer con él para transformarlo en lo que Sen denomina
“libertades”. Por ejemplo: los alimentos producen nutrición, no por si
solos pero si en conjunción con lo que el individuo hace con ellos. Esta
libertad de elección y hacer cosas es diferente para cada contexto y
necesidades de los individuos. Por lo tanto la provisión de bienes iguales
no genera igualdad en las libertades126 y una política igualitaria debe
contemplar estas diferencias.
127 En inglés existe diferencia, no perceptible en el español, entre el concepto de welfare y well-
being. El primero se deriva de las teorías asistencialistas y el concepto de bienestar utilitarista,
centrado en la satisfacción de necesidades. El segundo es mas amplio e incluye aspectos
relacionados con el ser, el individuo, las capacidades, oportunidades etc. Para diferenciarlo del
welfare, se le asigna un asterisco. NUSSBAUM, Martha; SEN, Amartya. Calidad de vida. México:
Fondo de Cultura Económico. 1996. p. 22.
128 SEN, Amartya. Capacidad y Bienestar*. En: NUSSBAUM, Martha; SEN, Amartya. Calidad de
vida. México: Fondo de Cultura Económico. 1996. p. 57.
66
de agencia y la libertad de agencia. El concepto de bienestar* se aplica a
los intereses de la persona, mientras que la agencia plantea los
intereses generales que pueden incluir “metas diferencias a la promoción
de su propio bienestar*129”. De otra parte es necesario discernir entre lo
que es un logro y lo que significa la libertad de lograr. “El logro del
bienestar* de una persona se considera como una evaluación del estado
de ser de la persona (en vez de digamos, el bien de su contribución al
país o de su éxito para logra sus metas generales)”130. Los
funcionamientos hacen el ser de una persona y pueden incluir desde
evitar la morbilidad hasta el logro de del auto respeto, la participación
etc.
67
produce, y la maximización de las utilidades sin importar la distribución
entre los individuos. En este sentido, las instituciones sociales son
valiosas en la medida en que generen resultados y estos estén
relacionados con el bienestar de las personas; no se concede valor a las
desigualdades de la distribución, ni a las libertades y derechos de los
individuos en sí mismos, en la medida en que estos no contribuyan a las
utilidades. Ante las dificultades metodológicas de la medición de la
utilidad como satisfacción de deseos, esta se concibe como la
“representación de las preferencias de una persona”132 reflejándose en
la práctica en la medición de la renta real (ingreso) o de los bienes que
conforman el concepto de utilidad.
133 Un bien puede ser la renta, entendiendo que esta puede generar acceso a bienes
determinados.
68
objeto del primer principio y aunque hace parte de los denominados
bienes primarios, se distingue de la riqueza, renta etc. Sen plantea que
el asunto de la libertad no consiste en plantear su prevalencia sobre
otros bienes en tanto ordenación de prioridades por cuanto es un bien
que aumenta la ventaja de los individuos, sino que en sí misma tiene
valor político135. En su concepto amplio, la libertad incluye la libertad
política, los servicios económicos, las oportunidades sociales, las
garantías de transparencia y la seguridad protectora136.
69
apropiadamente lo que es bueno para los individuos en función de sus
condiciones particulares y la capacidad que tienen estos para ampliar
sus libertades aprovechando bienes, exige la definición de métricas
apropiadas que permitan evaluar y comparar la posición de cada
individuo y de la sociedad138. Esta perspectiva asume la pobreza como
la privación de capacidades de los individuos que inhibe su libertad de
acción. Dicha privación no necesariamente está causada por el nivel de
renta del individuo; y la acción del Estado debe partir de un análisis de
las condiciones y capacidades de los individuos, siendo exitosa la
provisión de bienes en la medida en que contribuya a aumentar sus
capacidades.
70
4 DIMENSIÓN EPISTEMOLÓGICA DE LA TEORÍA EVALUATIVA
Adaptado de GUBA, E. G. The paradigme Dialog. Newbury Park: 1990. Publications. 1990.
71
En un extremo se encuentran teóricos como Campbell y Cronbach
quienes defienden la cientificidad en la recolección de la información,
aunque el primero defiende los métodos experimentales, mientras que el
segundo aboga por aproximaciones desde diversos métodos
concentrándose en los aspectos políticos. Teóricos como Guba y
Lincoln142 defienden teorías diferentes orientadas exclusivamente a la
construcción de estudios de caso, métodos blandos para recoger
información, que en el fondo tienen como planteamiento central que la
verdad es relativa a cada individuo y por lo tanto debe ser reconstruida
de manera específica.
142 SHADISH, William; COOK, Thomas; LEVINTON, Laura. Op. cit., p. 46.
72
externo del individuo143. Los constructivistas utilizan enfoques dialécticos
y hermenéuticos en los cuales la construcción individual es realizada
mediante la interacción del investigador y los sujetos de la investigación,
buscando consenso en la construcción.
144 GREENE, CARACELLI. Defining and describing the paradigm issue in mixed – method
evaluation.
En: GREENE, Jennifer C.; CARACELLI Valerie J. (Editors). Advances in Mixed-Method evaluation:
The challenges and benefits of integrating diverse paradigms. San Francisco. CA. USA: Joseey-
Bass Publishers. Serie: New Directions for evaluation. A publication of the American Evaluation
Association. Number 74, Summer 1997. p. 8.
73
pero que explican el verdadero alcance de la intervención y permiten
elaborar un juicio de valor realista. Sus métodos son de tipo consultivo,
participativo y formativo.
74
social es necesario mezclar métodos y que las diferencias de
paradigmas no afectan por cuanto estos conforman descripciones
generales de la realidad, más no prescriben como determinarla (práctica
investigativa). El tipo de métodos, bajo esta visión, debe estar
determinado por el tipo de problema que se quiere resolver.
147 CHEN, Huey-tsyh. Applying Mixed Methods Under the framework of Theory-Driven Evaluations.
En: GREENE, Jennifer C.; CARACELLI Valerie J. (Editors). Advances in Mixed-Method evaluation:
The challenges and benefits of integrating diverse paradigms. San Francisco. CA. USA: Joseey-
Bass Publishers. Serie: New Directions for evaluation. A publication of the American Evaluation
Association. Number 74, Summer 1997. p. 65.
75
fundamentos de diferentes áreas del conocimiento, tales como la
educación, la política, la psicología, la sociología, la salud, la
administración etc. Los autores aquí presentados son solo algunos de
los más representativos de tres momentos importantes en la teoría
evaluativa.
76
decisiones pretendía retroalimentar los programas para mejorarlos
continuamente.
El método de Tyler fue ampliado por otros autores tales como Metfessel
y Michael149, quienes, aunque con un paradigma básicamente igual al de
Tyler, centraron su atención en el desarrollo de criterios de valoración y
en la participación de la comunidad escolar en la evaluación.
149
STUFFLEBEAM, Daniel; SHINKFIELD, Anthony. Op. cit., p. 99.
77
uso de diseños y modelos científicos de carácter experimental, bajo
condiciones controladas, aunque no niega la utilización de otros
métodos de carácter científico.
150 Esta definición contiene cuatro dimensiones claves: (1) Proceso – “la determinación”; (2)
Criterio – “los resultados” (3) Estímulo – “la actividad”; (4) Valor – “el objetivo”. El método científico
provee el medio más prometedor para “determinar” la relación del “estímulo” al “objetivo” en
términos de “criterios” razonables. Tomado de Evaluative research: principles and practice in public
service and social action programs, New York: Russell Sage Foundation. Citado por: SHADISH,
78
y consideraba que la evaluación debería utilizar el enfoque científico
para obtener conclusiones sustentables bajo dicha lógica, cualquiera que
sea la técnica investigativa seleccionada, siempre y cuando esta resulte
apropiada y factible para la evaluación. Sin embargo, sostenía que el
evaluador debía balancear el rigor científico con las condiciones reales
en las que actuaba.
William; COOK, Thomas; LEVINTON, Laura. Foundations of Program Evaluation. USA: Ed. SAGE,
1991
153 El enfoque científico exige que la evaluación sea formulada como una serie de hipótesis tipo: A
conduce a B, en donde A es el programa y B el efecto deseado. La diferencia entre la investigación
pura y la investigación evaluativa plantea que mientras la primera pregunta si A esta relacionada
con B y comprueba bajo condiciones controladas esta relación experimentalmente, la segunda
pregunta si A intenta efectivamente cambiar B y responde empíricamente, manipulando A y
valorando su efecto sobre B.
STUFFLEBEAM, Daniel; SHINKFIELD, Anthony. Op. cit., p. 120
79
por qué A produce B, proceso que si es de gran importancia en la
investigación pura. En la evaluación, según el autor, es de suma
importancia la relación entre causas y efectos de un programa y la
planificación del mismo.
e. Sentar las bases de una futura investigación sobre las razones del relativo éxito de técnicas
alternativas
Redefinir los medios que hay que utilizar para alcanzar los objetivos, así como incluso las submetas,
a la luz de los descubrimientos de la investigación.
STUFFLEBEAM, Daniel; SHINKFIELD, Anthony. Op. cit., p.114
80
Su modelo plantea que los programas son generados por
precondiciones (que corresponden a la variable independiente) y se
encuentran inmersos en acontecimientos que le influyen para generar un
efecto (variable independiente) que a su vez producirá determinadas
consecuencias156.
156 Para la evaluación de los efectos de un programa es preciso por lo tanto explicitar cuatro
categorías de variables:
a.Partes integrantes o procesos del programa
b. Población estimada y grupos de interés
c. Condiciones situacionales del programa
d. Efectos diferenciales del programa
81
que ver con hipótesis acerca de causación, y la asignación aleatoria y
los métodos cuasi-experimentales desvían muchas pruebas,
precluyendo la inferencia causal. Sin embargo, destacó algunos
métodos cuasiexperimentales como útiles para la práctica evaluativa al
no tener problemas de asignación aleatoria. Tuvo gran influencia de Karl
Popper especialmente en lo que tenía que ver con la teoría de la
falsación158.
159 SHADISH, William; COOK, Thomas; LEVINTON, Laura. Op. cit., p. 125 y subs.
82
forma de arreglar la escogencia de los grupos y su observación para
llegar a determinadas conclusiones161.
161 Si las variables A y B son multivariadas (es decir, cada una son un paquete de variables
relacionadas entre sí), tal como sucede en la mayoría de los problemas sociales, no se obtendrá
información que permita predecir el comportamiento de B, pero se puede obtener evidencia de
cómo variaciones en A, afectan a B.
CAMPBELL, Reform as experiments. En: American psychologist. 24. p. 409 - 429. 1969. Citado por:
SHADISH, William; COOK, Thomas; LEVINTON, Laura. Op. cit., p. 125.
162 Es decir, si el grado en el que se presentan agentes internos que pueden causar conclusiones
erróneas no debidos a la relación A genera B, sino a las condiciones particulares del experimento.
Desde su perspectiva, la asignación aleatoria es apropiada para construir los experimentos por
cuanto permite falsear muchas interpretaciones (Popper, 1968), que pueden evidenciar relaciones
entre las variables.
163 Campbell asignó más importancia a la validez interna que a la externa y estudió ocho
amenazas a esta en un experimento: la historia, la maduración, la administración del test, la
instrumentación, la regresión estadística, los sesgos de la selección de participantes, la mortalidad
experimental y la interacción entre la selección y la maduración.
CAMPBELL y STANLEY. Diseños experimentales y cuasi experimentales en la investigación social:
Buenos Aires: Amorrortu editores. 1973 p. 16.
164
SHADISH, William; COOK, Thomas; LEVINTON, Laura. Op. cit., p. 126 y subs.
165 CAMPBELL, D.T. experiments as arguments, in E. R. House, S. Mathison, J.A. pearsol, & H.
Preskill (Eds.), Evaluation studies review annual (Vol. 7, pp. 117-127). Bervely Hills, CA: Sage.
Citado por: SHADISH, William; COOK, Thomas; LEVINTON, Laura. Op. cit,. p. 131.
83
Su posición intelectual fue amplia en cuanto al alcance de la
experimentación como mecanismo para mejorar la sociedad e identificar
las intervenciones que realmente prometían resultados en la resolución
de los problemas sociales, llegando incluso a ser utópico a este
respecto. En su paper de 1969 “Las reformas como experimentos166”
plantea que los Estados Unidos y las naciones modernas deben alistarse
para un enfoque experimental para las reformas sociales, por medio del
cual puedan decidir y aprender sobre qué programas deben culminarse,
replicarse o modificarse. Campbell cree que la época de la sociedad
experimental se aproxima por cuanto observa que los gobiernos están
destinando presupuestos para la evaluación de programas, bancos de
datos, medición de indicadores sociales (lo que llama “legislación para la
gran sociedad”).
84
administradores. Considera que un sistema político y administrativo
verdaderamente comprometido con las reformas debe estar dispuesto a
experimentar y utilizar métodos científicos para aprender.
167 CAMPBELL, D. Reforms as experiments. p. 410. Citado por: SHADISH, William; COOK,
Thomas; LEVINTON, Laura. Op. cit., p. 138 - 139. Traducción libre.
85
se tratarían otras alternativas”168. Es igualmente, una sociedad
comprometida hacia la acción y la investigación, honesta y dispuesta a
probar la realidad, abierta a la crítica y a modificar teorías equivocadas,
descentralizada, responsable por el bienestar de la población, que
promueve la participación individual y el consenso, igualitaria que valora
el buen sentido y las preferencias de los individuos.
168 SHADISH, William; COOK, Thomas; LEVINTON, Laura. Op. cit., p.139. Traducción libre.
169 SCRIVEN, M. S. New frontiers of evaluatiuon. Evaluation Practice, 7, 1.986, p. 19. Citado por:
SHADISH, William; COOK, Thomas; LEVINTON, Laura. Op. cit,. p 74 - 75
86
constructo similar a cualquier constructo científico de una variable
observable. La validez de una demanda de valor implica la unión de
demandas fácticas con demandas de conocimiento e investigación de
consistencia.
Scriven concibe la evaluación como una ciencia del valor que le provea
a la sociedad los medios sistemáticos para conocer si lo que hace es
bueno, sirviendo el interés público y no solamente el de los afectados
por la institución que se evalúa. Aquellas evaluaciones cuyos beneficios
no superen sus costos no deben hacerse. Propone dos tipos de
evaluación, la formativa y la sumativa: “la evaluación puede ser hecha
para proveer feedback a las personas quienes están tratando de mejorar
algo (evaluación formativa); o proveer información para quienes toman
decisiones que se preguntan si presupuesta, termina, o compran algo
(evaluación sumativa)”173.
173 SCRIVEN, M. The logic of evaluation. Inverness, CA: Edgepress. 1980. p 6 – 7. Citado por:
SHADISH, William; COOK, Thomas; LEVINTON, Laura. Op. cit., p.78. Traducciòn libre.
87
importante es el que surge cuando el evaluar toma las metas del staff del
programa y concentra la evaluación en ellos; en ese caso el evaluador
no está buscando los efectos del programa, los cuales pueden ser
buscados o no.
175 Scriven plantea un modelo de evaluación que contiene elementos que el evaluador debe tener
en cuenta en su evaluación:
Descripción: ¿Qué se va a evaluar?
Cliente: ¿Quién está comisionando la evaluación?
Antecedentes y contexto del evaluando y la evaluación
Recursos disponibles para uso del evaluando y los evaluadores
Función: ¿Qué hace el evaluando?
Sistema de entrega: ¿Cómo el evaluando investiga el mercado?
Cliente: ¿Quién está usando o recibiendo los efectos del evaluando?
Necesidades y valores de la población impactada y potencialmente impactada
Estándares: ¿Existen previamente algunos estándares de mérito o esfuerzo validados
objetivamente que sean aplicables?
Procesos: ¿Qué restricciones / costos / beneficios aplican para la normal operación del evaluando?
Efectos (outcomes): ¿Qué efectos son producidos por el evaluando?
Generalización posible para otras personas / lugares / tiempos / versiones
Costos: dinero vs. psicológico vs. personal; inicial vs. repetido; directo / indirecto vs. inmediato /
retrasado / discontinuo.
Comparaciones con opciones alternativas
Significancia: Una síntesis de todo lo anterior
Recomendaciones: Esto puede o no ser requerido, y puede o no seguir de la evaluación.
Reporte: Vocabulario, longitud, formato, medio, tiempo, localización y personal para su presentación
necesita ser revisado cuidadosamente.
Meta evaluación: La evaluación debe ser evaluada, preferiblemente previamente a la
implementación y a la distribución del reporte. Una evaluación externa es deseable pero primero el
88
Scriven plantea una lógica de la evaluación en tres etapas: La
evaluación de necesidades permite determinar criterios de mérito (lo que
tiene valor). Posteriormente es necesario identificar los estándares
apropiados para juzgar el mérito, los cuales pueden obtenerse a partir de
estudios comparativos; contra estos estándares deberá compararse el
objeto evaluado.
evaluador debe aplicar la lista de chequeo a la evaluación en sí misma. Los resultados de la meta
evaluación deben ser usados formativamente, pero también pueden ser incorporados al reporte.
SHADISH, William; COOK, Thomas; LEVINTON, Laura. Op. cit., p. 83. Adaptado de Scriven (1980,
pp. 113 - 116) Traducción libre
176 SCRIVEN, M. The logic of evaluation. Inverness, CA: Edgepress. 1980. p. 45. En: SHADISH,
William; COOK, Thomas; LEVINTON, Laura. Op. cit., p. 89.
89
dio origen hacia los años 70 a una escuela orientada hacia el uso de
información para ajustar los programas sociales. Sus exponentes
propusieron muchas formas de evaluar, en función de la utilidad y de los
intereses de la evaluación. Consideraron necesario adoptar enfoques
incrementales en los procesos de cambio de los programas sociales, e
introdujeron análisis de tipo político en la evaluación. Más que la
búsqueda de una verdad objetiva, su preocupación fue que la evaluación
debía proveer información útil para las decisiones importantes de la
política o programa. Los criterios de mérito para juzgar el valor del
programa deben ser construidos a partir de los intereses de los
stakeholders. En cuanto a los métodos promueven la aplicación de una
amplia variedad de métodos, en función de las necesidades evaluativas
y de su aplicabilidad.
90
mensaje le interese a todas las audiencias, se comprenda, lo encuentren
creíble, se haya respondido a las preguntas que considere más
importantes y cuestionarse si se han alterado las ideas preconcebidas y
enriquecido la capacidad de toma de decisión.
180 La elección de la unidad de estudio (u) es muy importante. Esta debe garantizar que no recibe
(revisar) el tratamiento y no está influenciada por otras unidades. Una unidad (u) es algo así como
una muestra de la población (U) y puede ser diseñada por el investigador. Las conclusiones sobre
una observación concreta (o) se pueden generalizar para los demás casos (O). En un trabajo
evaluativo exhaustivo, con los recursos suficientes, lo recomendado sería tener todas las
potenciales observaciones (O). De la misma forma, el tratamiento seleccionado (t) debe ser un
prototipo generalizable para todos (T).
91
problemas “políticos” deben ser resueltos en el diseño por parte del
planificador de la evaluación, anticipando los U, T* y O* que los clientes
desean conocer y también de S*.
181 SHADISH, William; COOK, Thomas; LEVINTON, Laura. Op. cit., p. 334. Traducción libre.
92
El proceso de conformación de políticas según Cronbach incluye la
actuación de cinco grupos:
93
en ellas el propósito de la evaluación. Esta, por su parte, debe trabajar
en la determinación de pistas sobre el mejoramiento de los programas.
182 SHADISH, William; COOK, Thomas; LEVINTON, Laura. Op. cit., p. 338.
94
evaluativo que responda todas las preguntas. Por el contrario deben
realizarse múltiples estudios a la medida de los distintos intereses y que
estén interrelacionados buscando proveer información para mejores
estudios posteriores. De otra parte, los evaluadores tienen que
concentrarse en buscar preguntas para un amplio rango de elementos,
aun cuando no sean tan precisas, atendiendo intereses plurales y una
perspectiva responsables. Este aspecto difiere de los diseños
tradicionales que puntualizan la precisión y la concentración en aspectos
específicos.
184 SHADISH, William; COOK, Thomas; LEVINTON, Laura. Op. cit., p. 271 subs
95
embargo, esta debe tener como propósito el servicio y ser útil a
personas específicas185.
185 STAKE, R. To evaluate an arts program. En: R. E. Stake (Ed.), Evaluating the arts in education:
A responsive approach. p. 13 – 31. Columbus, OH: Merrill.
Citado por: SHADISH, William; COOK, Thomas; LEVINTON, Laura. Op. cit., p. 273.
186 STAKE, R. An interview with Robert Stake on responsive evaluation. En: R. E. Stake (ed.),
Evaluating the arts in education: A responsive approach. p. 33 – 38. Columbus, OH: Merrill.
Citado por: SHADISH, William; COOK, Thomas; LEVINTON, Laura. Op. cit., p. 273.
187 El siguiente ejemplo, que plantea Stake refleja esta concepción: “Cuando una comunidad
expresa un deseo por, o tolerancia de, alguna forma de discriminación, el evaluador pude combatirlo
o estudiarlo. El puede investigar y reportar el daño que resulta. Como humano puede escoger
oponerse a la discriminación pero su contrato para evaluar no es una licencia para socavar las
practicas locales. El rol del reformador social es algo que yo admiro, pero a mí me gustaría que sea
reconocido como algo superpuesto y no como sinónimo del rol del evaluador. Yo no admiro los
sistemas escolares que discriminan en la forma en la cual distribuyen privilegios y oportunidades.
Yo no estoy afectado, sin embargo, con la habilidad o la sensibilidad de los evaluadores para
determinar los asuntos correctos. Por supuesto, ellos deben contar lo que está pasando, no
importando cuan impopular sea el mensaje.”
STAKE, R. An interview with Robert Stake on responsive evaluation. En: R. E. Stake (ed.),
Evaluating the arts in education: A responsive approach. p. 38. Columbus, OH: Merrill.
Citado por: SHADISH, William; COOK, Thomas; LEVINTON, Laura. Op. cit., p. 274. Traducción
libre.
96
no tienen control, y deja de concentrarse en aquellas variables sobre las
que se puede influir (tales como la asignación de presupuesto o los
planes de clase).
Stake quiere que la evaluación responda a intereses administrativos,
pero resistiendo a las presiones existentes por generar reportes
favorables.
188 Para que la evaluación sea responsiva, se deben suceder los siguientes eventos :
Hablar con los clientes, staff del programa y las audiencias
Identificar el foco del programa
Revisar las actividades del programa
Descubrir propósitos, intereses
Conceptualizar elementos
Identificar necesidades de datos, elementos
Seleccionar observadores, jueces; seleccionar instrumentos si se requiere.
Observar antecedentes diseñados, transacciones y efectos
Tematizar; preparar representaciones, estudios de caso
Validar; confirmar; intentar desconfirmar
Escudriñar, replicar elementos para las audiencias
Formatear para el uso de audiencias
SHADISH, William; COOK, Thomas; LEVINTON, Laura. Op. cit., p. 280.
189 SHADISH, William; COOK, Thomas; LEVINTON, Laura. Op. cit., p. 287. Traducción libre
97
estimula al ser humano pero poco se sabe de ella. La segunda
corresponde a la interpretación de la estimulación y la tercera
corresponde a nuestra compleja interpretación racional, es decir nuestra
realidad racional. Las realidades dos y tres en las personas están
cambiando constantemente. La intención del investigador debe ser
tratar de construir más claras realidades dos y tres para apoyará un
escepticismo disciplinado.
98
como todas las existentes, utilizará propuestas realizadas por cuatro
autores: House, Stufflebeam, Vedung y Guba191.
Tabla 2. Clasificación de los enfoques evaluativos de acuerdo al paradigma
investigativo y la ética liberal.
Paradigma Etica Enfoque Algunos Objetividad Autores Dirigida a:
dominante liberal modelos representativos.
dominante representativos
Evaluación de cuantitativa Suchman Orientada a los
Visión efectos administradores
positivista o Experimentación cuantitativa Campbell Administradores
post- social
positivista Planificación Cuantitativa Cronbach Administradores
Análisis de evaluativa (utos)
sistemas Contexto - Cuantitativa Stufflebeam Administradores
Insumos –
procesos –
productos CIPP
Evaluación Cuantitativa Stake Clientes o
respondente – – cualitativa Scriven usuarios del
Utilitarista centrada en el programa
cliente
Evaluación costo Cuantitativa Rivlin Administradores
– beneficio
Evaluación Cuantitativa Rossi – Freeman Administradores
comprensiva – Wright
Objetivos Evaluación Cuantitativa Tyler Administradores
conductuales orientada a
objetivos
Decisión Evaluación hacia Cuantitativa Patton Administradores
la decisión
Evaluación del Cuantitativa Stufflebeam Administradores
perfeccionamiento
Sin objetivos Evaluación Cualitativa Scriven Clientes,
formativa – usuarios
evaluación libre
de metas
Visión Critica artística Juicio de expertos Experiencia Eisner Clientes,
constructivista entendidos
Revisión Acreditación Experiencia Entidades Clientes
profesional Revisión de pares profesionales profesionales y
público usuario
Intuicionista- Contraposición Método Negociación Owens – Wolf Jurado, Justicia
pluralista contrapuesto
Iluminativa Método holístico Aprendizaje Parlett-Hamilton Público
– explicativa
99
Vedung193 para los modelos enfocados en determinar los resultados de
las intervenciones estatales. Comparativamente con la clasificación
expuesta previamente, se observa que el criterio básico de clasificación
corresponde al énfasis que orienta la evaluación, ya sea la
determinación de efectividad en la intervención, el análisis económico o
la revisión por expertos profesionales. Las categorías de efectividad y de
modelos económicos, corresponderían a las denominadas anteriormente
como construcciones post-positivistas, y los modelos profesionales a la
visión constructivista respectivamente. Sin embargo, el criterio para
distinguir los “modelos” presentados algunas veces corresponde a la
orientación del valor que se utiliza (metas, resultados, efectos,
productividad etc.), mientras que en otros casos hace referencia a un
enfoque investigativo determinado (análisis de sistemas) o a una
estrategia para valorar y tomar decisiones (comisiones políticas, juicio de
pares etc.), por lo que no existe un criterio clasificativo único y claro, que
sea evidente en la taxonomía representada, situación común en diversos
autores y en general en la literatura evaluativa.
192 GUBA Y LINCOLN. Effective Evaluation: Improving the usefulness of evaluation Results through
responsive and naturalistic approaches. San Francisco: Jossey-Bass. 1981. Citado por: VEDUNG,
Evert. Op. cit., p. 35.
100
Modelo de logro de metas
Metas
Modelos
de
Modelo de efectos
Efectividad
Intereses
Modelo orientado al cliente
del cliente
Modelos
substantivos Modelo de
de evaluación stakeholders
Intereses de (Norte america)
Stakeholders
Comisiones políticas
(Suecia)
Modelo de
Modelo de productividad
productividad
Modelos
Costo efectividad
económicos
Modelo de
eficiencia
Costo eficiencia
Modelos
Revisión de pares
profesionales
101
La segunda pregunta, introduce el concepto de impacto, al tratar de
determinar si existe una relación verificable entre los resultados y el
programa.
102
4.4.2 Modelo de efectos
El modelo de efectos se concentra en determinar los efectos tanto
buscados como no buscados que se producen mediante una política o
programa. Las metas del programa se utilizan como un medio para
determinar los efectos que se pretendían inicialmente con el programa,
los cuales pueden ser expresados en términos del mediano o largo
plazo (impacto).
103
e incluso su planificación inicial194; también es llamada por algunos
autores (Stufflebeam por ejemplo)195 como evaluación centrada en el
cliente196. Considera que la evaluación debe además determinar la
satisfacción o insatisfacción que un grupo de gente adecuadamente
seleccionado siente por el programa, siendo el tema dominante de la
evaluación proporcionar un servicio a personas específicas (clientes).
194. Aunque este modelo fué construido a partir de las noción de Tyler acerca de que los
evaluadores deben comparar los resultados observados con las metas planificadas, amplía el
concepto de la evaluación y exige un exámen de los antecedentes, el proceso, las normas y los
juicios, además de los resultados. El modelo ha evolucionado como evaluación respondente y
señala que el propósito es efectuar una búsqueda continua de cuestiones clave y proporcionar al
cliente toda la información útil que le sea posible.
196 La presentación de este modelo como “centrado en el cliente” se debe básicamente a que
construye de manera colectiva con los stakeholders, los valores dominantes de la evaluación,
buscando independencia de los criterios de valor del evaluador. Sin embargo, otros autores
(Vedung por ejemplo) consideran que los modelos centrados en el cliente son de otra naturaleza y
están enfocados exclusivamente en los intereses de los beneficiarios de los servicios del programa,
por lo cual los ubican en una categoría independiente.
104
Estos tres tipos de datos se utilizan como conceptos centrales para
estructurar lo que debe hacerse al describir y juzgar un programa.
Base lógica
del programa Antecedentes
Transacciones
Resultados
105
Además de describir el programa de interés con relación a la matriz de
descripción, es necesario investigar y analizar la base lógica del
programa (filosofía, principios conceptuales, postulados, enfoques etc.).
Es el punto de partida para juzgar las intenciones del programa.
106
relacionadas con la política de interés. Los resultados podrían asimilarse
a los efectos de la política.
Sus defectos como modelo tienen que ver con la complejidad y las
posibles limitaciones que presenta en la evaluación de efectos.
Existen dos orientaciones. Trabajar con las necesidades del cliente o con
sus expectativas, dado que las dos no necesariamente coinciden. En el
caso de las necesidades, existe la necesidad de determinarlas por parte
del evaluador y esto implica una selección de las más válidas.199 El
modelo diferencia entre los clientes del programa y los clientes de la
evaluación.
107
educativas o de percepción les impiden identificar correctamente
prioridades en las necesidades básicas o sean fácilmente inducidos por
las ofertas del mercado. Por ejemplo, una comunidad puede estar
fuertemente influenciada a priorizar necesidades de infraestructura en
detrimento de la educación. También existe el peligro potencial de
sacrificar en la priorización de necesidades a aquellos grupos sociales
que no pueden expresarse (niños o ancianos p.e) o a las minorías.
§ Decisores y tecnócratas
§ Partidos políticos
§ Funcionarios de programas relacionados
§ funcionarios de agencias estatales relacionadas
§ Políticos
§ Gremios,
§ Burócratas,
§ Líderes,
§ Clientes
§ Académicos relacionados con el programa
§ Funcionarios públicos
§ Etc.
108
concepto de verdad cuando esta es construida a partir de múltiples
intereses y expectativas.
109
En el sector público este modelo presenta múltiples posibilidades200 de
aplicación. La evaluación de programas públicos puede ser comisionada
a pares expertos en las áreas relacionadas con el programa, del mundo
académico y científico, quienes pueden comparar con otros programas
del sector público y evaluar con suficiente objetividad y experticia,
permitiendo que la evaluación esté alejada de intereses políticos,
económicos o jerárquicos tipos del mundo de las organizaciones
públicas.
201 POSAVAC, Carey. Program Evaluation. Methods and case studies . USA: Ed. Prentice Hall.
Fifth edition. 1997.
110
cuestionado fuertemente al considerarse que su validez no está
asegurada por las limitantes de aplicación.
111
5 LA EVALUACIÓN Y EL MODELO DE ESTADO
204 Este concepto está relacionado directamente con la dimensión axiológica de la evaluación en el
estado liberal.
205 Finalmente, podría mencionarse que en los Estados Unidos, el término “Welfare” (bienestar) se
refiere a la asistencia financiera a los mas pobres, con un fuerte perfil de caridad. SPICKER, Paul.
An Introduction to social Policy. Robert Gordon University. En Web:
http://www2.rgu.ac.uk/publicpolicy/introduction/.\ 2002
112
suministro de garantías en salud, educación, vivienda etc., en algunos
casos con orientación hacia la población en general y en otros para los
más desprotegidos206. La evaluación de este bienestar, tiene que ver con
las políticas y los programas sociales, su diseño e implementación, la
determinación de resultados, los efectos, la asignación de recursos etc.
208 NUSSBAUM, Martha; SEN, Amartya. Calidad de vida. México: Fondo de Cultura Económico.
1996. p. 22.
209 Teresa Montagut señala que el concepto de política social, no debe estar necesariamente
asociado al modelo de bienestar, por cuanto cualquier estado (autoritario por ejemplo), posee
alguna forma de política social.
MONTAGUT, Op. cit., p 20.
113
desde el 15% de sus ingresos a comienzos de siglo, hasta el 60% en los
años 80210.
La evaluación como práctica institucional y disciplina investigativa
moderna surgió durante el auge de dicho Estado de bienestar, y su
desarrollo está fuertemente relacionado a dicho modelo. La decisión de
“evaluar los programas de gobierno sistemática y científicamente es
nueva” y se ubica en los Estados Unidos hacia los años 60 y 70211. La
evaluación durante este período vivió tanto su nacimiento como su
mayor esplendor, pudiendo demarcarse tres momentos más o menos
diferenciados. El primero, denominado por Daniel Stufflebeam212, como
la edad de la inocencia, corresponde en los Estados Unidos al período
inmediatamente posterior a la posguerra, en donde se realiza en medio
de una crisis económica y social una gran expansión de servicios
educativos, de vivienda y salud sin mucho interés en determinar los
resultados de dichas acciones por parte de las autoridades. Durante este
período la evaluación recibió como insumo el avance en la producción
de técnicas evaluativas y modelos cuantitativos pero permaneció
restringida a iniciativas locales, orientada hacia la educación y financiada
mediante patrocinios privados o con presupuestos de los distritos
escolares. Se observa la carencia de una orientación evaluativa desde el
alto gobierno como parte de sus políticas y no existe una definición clara
sobre su uso y utilización de los resultados. Un segundo momento,
corresponde al desarrollo de los programas de guerra contra la pobreza
y de la denominada “gran sociedad”, por parte de los presidentes
Kennedy y Johnson, a partir de la década de los 60, caracterizados por
la aplicación de gran cantidad de fondos en procesos sistemáticos de
intervención social que buscaban transformar y reformar la sociedad.
210 CAMDESSUS, Michel. Worldwide Crisis in the Welfare State: What next in the Context of
Globalization? Address by Michel Camdessus. Managing Director of the International Monetary
Fund at a seminar organized by Observatoire Chrétien des Réalités Economiques. Paris, France,
October 15, 1998. En Web: www.imf.org/external/np/speeches/1998/sp98ind.htm
114
avanzar en el desarrollo de nuevos métodos que permitieran salvar las
dificultades metodológicas existentes, particularmente ocasionadas por
la disparidad de contextos, que hacían difícil aplicar pruebas y métodos
estandarizados. Esto generó un gran repunte metodológico y el
desarrollo de complejos estudios evaluativos patrocinados por el
gobierno y el congreso, así como la Oficina General de Contabilidad.
213 FURUBO Jan-Eric, SANDAHl Rolf. Some notes on evaluation in Sweden. Publicado en Web por
European Evaluation Society – EES - Newsletter.
http://www.europeanevaluation.org/newslett/newslett.htm
2002.
214 AHLENIUS, Inga-Britt. Auditing and Evaluation in Sweden. En: CHELIMSKY, Eleanor;
SHADISH, William. Evaluation for the 21st Century. A Handbook. Op. cit., p 81 y subs.
215 HANSSON, Finn. Critical comments on evaluation research in Denmark. En: CHELIMSKY,
Eleanor; SHADISH, William. Evaluation for the 21st Century. A Handbook. Op. cit., p 177.
216 NIOCHE, Jean Pierre. De la evaluación al análisis de las políticas públicas. Traducción de
Carlos Salazar. Bogotá: Universidad Javeriana.. 1996. Mimeo.
115
Médica en la evaluación de aspectos de tránsito, del Ministerio de
trabajo en la preparación de un balance social de empresas privadas
sobre condiciones de trabajo, entre otros. En esta década se realizaron
solamente 36 evaluaciones217.
116
carácter humanitario, religiosos, de interés común, democrático y de
beneficio social220. En esta línea de pensamiento, todo Estado liberal es
de bienestar, en la medida en que hace parte de su razón básica de ser.
220 SPICKER, Paul. An Introduction to social Policy. Robert Gordon University. En Web:
http://www2.rgu.ac.uk/publicpolicy/introduction/ 2002
223 ESPING-ANDERSON, G. Los tres mundos del estado de bienestar, Valencia, Ediciones Alfons
el Magnànim. 1993. Citado por: MATA, Carles Ramió: Los problemas de implantación de la nueva
gestión pública en las administraciones públicas latinas: modelo de estado y cultura institucional.
En: Revista del CLAD. Reforma y Democracia. Venezuela. No 21. 2001. p . 88
117
sociales con carácter universal. No existe prestación de servicios
sociales por parte del mercado y se busca simetría social por medio de
la redistribución estatal.
225 AHLENIUS, Inga-Britt. Auditing and evaluating in Sweden En: CHELIMSKY, Eleanor; SHADISH,
William. Evaluation for the 21st Century. A Handbook. Op. cit., p 80 y subs.
227 AHLENIUS, Inga-Britt. Auditing and evaluating in Sweden. En: CHELIMSKY, Eleanor;
SHADISH, William. Evaluation for the 21st Century. A Handbook. Op. cit., p 80 y subs.
228 AHLENIUS, Inga-Britt. Auditing and evaluating in Sweden. En: CHELIMSKY, Eleanor;
SHADISH, William. Evaluation for the 21st Century. A Handbook. Op. cit., p 83 - 84.
229 FURUBO, Jan-Eric, SANDAHL, Rolf. Some notes on evaluation in Sweden. Publicado en Web
por European Evaluation Society –EES - Newsletter.
http://www.europeanevaluation.org/newslett/newslett.htm 1996.
118
objeto de determinar costos y efectos de las políticas públicas. En 1985
se implementó un modelo de gobierno por metas y resultados, y en
1996 una reforma al sistema de administración presupuestal. La
evaluación dentro de este nuevo proceso de reforma del Estado se ha
reorientado hacia la el mejoramiento de la administración, generándose
gran cantidad de información de manera descentralizada en las distintas
comunas, ministerios, departamentos, parlamento y Oficina general de
Auditoria230.
230 RAGNHILD, φvrelid, (Director del Depto Público de Oslo). Evaluation in Norway. Publicado en
Web por European Evaluation Society –EES - Newsletter.
http://www.europeanevaluation.org/newslett/newslett.htm 1997
231 Se distingue también un cuarto grupo de países que constituyen lo que se ha llamado el modelo
europeo “mediterráneo”, y que tienen como característica común el tener ascendencia latina. Estos
países se caracterizan por poseer un modelo híbrido no claramente institucionalizado, con influencia
católica. Su unidad básica es la familia que actúa como agente redistributivo. El estado protege a la
familia y existe concentración de funciones por parte del estado, auque con niveles de gasto social
relativamente bajos. En este grupo se ubican España, Portugal, y América Latina.
MATA, Carles Ramió: Los problemas de implantación de la nueva gestión pública en las
administraciones públicas latinas: modelo de estado y cultura institucional. En: Revista del CLAD.
Reforma y Democracia. Venezuela. No 21. 2001. p . 91.
119
Estado232. El uso de la evaluación está relacionado directamente con el
diseño de políticas, intervenciones sociales y proyectos, así como la
decisión sobre la continuidad de las mismas, más que hacia el control
del gasto o de las acciones mismas, el cual depende en estos países
mas que todo del cumplimiento de normas existentes las cuales son
auditadas por oficiales del Estado.
120
el nivel central, contribuyendo a la evaluación de las políticas de
descentralización.234
234 AMBROIS, Pascale. (Consultor). Evaluation in France. Publicado en Web por European
Evaluation Society –EES - Newsletter. http://www.europeanevaluation.org/newslett/newslett.htm
1197
235 Evaluation. Journal of theoria, research and practice. Vol 5. No 4. 1 Oct 1999. Sage
Publications. UK. p. 503
236 Es necesario aclarar que se hace mención a los modelos vigentes en la actualidad tanto en
Estados Unidos como en el Reino Unido, particularmente a partir de los gobiernos conservadores
121
es útil para determinarlo, mediante el contraste con indicadores
previamente establecidos, e incluso se utiliza como herramienta para
legitimar la desaparición de ciertos programas públicos estatales237. A
través de la evaluación y sus resultados, se asignan presupuestos tanto
a programas como a entidades públicas, se proveen reportes
comparativos del desempeño de los servicios públicos dirigidos a los
usuarios238, y se utiliza como herramienta de planificación y fijación de
metas institucionales. Su carácter es el de “rendición de cuentas239” en la
gestión institucional por parte de los funcionarios públicos y es pieza
fundamental en el proceso de “reinvención del gobierno”. Este modelo
será tratado en mayor detalle en la siguiente sección.
de Ronal Reagan y Margaret Tatcher y la aparición del denominado “New Public Management”, que
privatizó y recorto muchos de los servicios estatales asistenciales. En estos países en mayor o
menor grado hubo estado de bienestar, posterior a la segunda guerra mundial, período en el cual la
evaluación cumplió roles asociados con las políticas de provisión de servicios, las cuales han sido
descritas al reseñar la génesis y desarrollo de la teoría evaluativa.
238 CHELIMSKY, Eleanor. The coming Transformations in evaluation En: CHELIMSKY, Eleanor;
SHADISH, William. Evaluation for the 21st Century. A Handbook. Op. cit., p 7.
239 “Accountability”
122
ineficiencia240, lo cual dio origen a procesos de reforma del Estado,
centrados inicialmente en el problema de su tamaño241.
240 El Fondo Monetario Internacional, consideraba que existían dos tipos de costos inherentes al
Welfare State: el costo de la provisión de servicios y el costo de la pérdida de eficiencia económica
asociada con ciertos servicios que desmotivan la búsqueda de empleo.
CAMDESSU Michel s. Worldwide Crisis in the Welfare State: What next in the Context of
Globalization? Address by Michel Camdessus. Managing Director of the International Monetary
Fund at a seminar organized by Observatoire Chrétien des Réalités Economiques. Paris, France,
October 15, 1998. www.imf.org/external/np/speeches/1998/sp98ind.htm
241 GUERRERO, Omar. Del Estado Gerencial al Estado Cívico. México: Universidad Autónoma de
México. Fac. de Ciencias Políticas y Administración Pública. 1999. p 19.
244 El FMI, llamaba la atención a finales de los años 90´s en como la globalización y la demografía
eran retos fundamentales para los estados del bienestar. La primera porque presionaría para bajar
barreras de protección y aumentar productividad, y la segunda por cuanto generaría cargas
pensionales y de protección muy difíciles de sostener en las condiciones actuales de seguridad
social.
CAMDESSUS, Michel. Worldwide Crisis in the Welfare State: What next in the Context of
Globalization? Address by Michel Camdessus. Managing Director of the International Monetary
Fund at a seminar organized by Observatoire Chrétien des Réalités Economiques. Paris, France,
October 15, 1998. www.imf.org/external/np/speeches/1998/sp98ind.htm
123
La segunda forma de ver el Estado de mercado corresponde al concepto
de bienestar dentro del modelo liberal-residual (tercer modelo de Estado
de bienestar descrito en el aparte anterior), basado en el esfuerzo
individual, en el cual el mercado juega un rol preponderante en su
consecución y el Estado se limita a proveer protección exclusivamente
para grupos vulnerables de la población. En esta perspectiva, el Estado
liberal de mercado es una propuesta para asegurar el bienestar de la
ciudadanía, basado en el esfuerzo individual, sin ser evidente una
propuesta de redistribución de riesgos por cuanto es el ciudadano el que
debe proveérsela245.
246 El origen del concepto más citado corresponde a HOOD, Christopher (1991) “A Public
Managemente for all seasons? En: Public Administration, 69: 3 –19. Otra obra clave para el
movimiento de la NGP, fue el texto de OSBORNE y GAEBLER en 1992, “Reinventando el
Gobierno”. Citado en BARZELAY, Michael: La nueva gerencia pública. Un ensayo bibliográfico para
estudiosos latinoamericanos (y otros). En: Revista del CLAD. Reforma y Democracia. Venezuela.
No 19. 2001. p . 1 y subs.
247 BARZELAY, Michael: La nueva gerencia pública. Un ensayo bibliográfico para estudiosos
latinoamericanos (y otros). En Revista del CLAD – Reforma y Democracia. No 19. Venezuela. 200.
Pag 9.
249 Hood & Jackson, plantean los elementos doctrinarios de la Nueva Gerencia Pública:
Utilice una burocracia pública independiente
Utilice una organización privada/independiente
Utilice la delegación/un jefe/jerarquías diferenciadas
Separar la especialidad e “políticas” y de “administración”
124
manera de ejemplo, algunos de los principios de la nueva administración
pública en el Reino Unido son: enfoque en productos en vez de insumos,
manejo por metas y no por reglas ni regulaciones, redefinición de
clientes como consumidores, autoridad descentralizada, uso del
mercado en vez de los mecanismos burocráticos, catalización de los
sectores público, privado y voluntario, empoderamiento de los
ciudadanos e introducción de finanzas privadas250 251.
250 MAUHOOD, Caroline. Performance Measurement in the United Kingdom (1985-1995). En:
CHELIMSKY, Eleanor; SHADISH, William. Evaluation for the 21st Century. A Handbook. Op. cit., p
135. Traducción libre.
252 Carlos Mata Ramió, sugiere que la ascendencia del New Public Management, lo liga
directamente con la cultura anglosajona, y su aplicación se facilita en países con modelos de estado
debidamente consolidados y consensuados a nivel social, tales como el Social Demócrata (Suecia),
Corporativista (Alemania) y Residual (Reino Unido). Su aplicación en países latinos se dificulta,
entre otras razones, por cuanto en estos no ha existido un acuerdo social sobre el modelo de
estado.
MATA, Carles Ramió: Op. cit., . 93.
253 Denominada así por el libro del mismo nombre, publicado por Osborne y .....en 19.., el cual se
convirtió en manual de cabecera del gobierno Clinton y un clásico entre académicos y consultores
del estado a nivel mundial.
125
mismas; y reconoce las diferencias entre el sector público y privado254.
Propone encontrar un equilibrio adecuado que redunde en mejorar la
eficacia, eficiencia y adaptabilidad, aplicando criterios de tipo
empresarial255. La necesaria flexibilización y adecuación al contexto que
requiere esta corriente se aprecia en las diferencias existentes en las
estrategias adoptadas para reformar al Estado en el Reino Unido y en
Francia. En el primero se aplicó la reforma con el ciudadano como
paradigma, de manera enérgica, rápida y orientada hacia la rendición de
cuentas por parte del funcionario, mientras que en Francia se optó por
una estrategia de cambio gradual, incremental, centrada en el trabajador
público y orientada a reconocer su trabajo256.
256 TROSA, Sylvie. Public Sector Reform Strategy: A giant leap or a small setp?. En: MAYNE, John
; ZAPICO-GONI, Eduardo (editores). Monitoring performance in the public sector. USA: Transaction
publishers. 1999. p. 101.
126
cada cual busque la mejor opción para sus intereses individuales. La
evaluación en este contexto, es pieza fundamental para reformar al
Estado, hacer seguimiento de su desempeño, evaluar los resultados,
medir las expectativas y el nivel de satisfacción del ciudadano, y exigir
rendición de cuentas al gobernante o funcionario público.
A pesar del actual auge del modelo este tiene fundamentos económicos
en el institucionalismo. Por su parte, la teoría de la evaluación de
programas se encontraba muy cercana al tema, por cuanto la orientación
hacia la medición de resultados, la evaluación por objetivos, los modelos
costo-beneficio y los modelos experimentales, han sido relevantes en el
campo evaluativo y basaban los juicios en la medición de cambios y
logros observables en los programas y las instituciones. En 1983 Joseph
Wholey afirmaba:
127
“...el gobierno necesita un tipo de administración especial,
administración orientada a los resultados”, dirigida a
producir mejoramientos demostrables en el desempeño y
resultados de las agencias del gobierno y los programas.
Así como usamos el termino, la administración orientada a
los resultados es el uso propuesto de recursos e
información para lograr progreso medible hacia los efectos
258
objetivos relacionados a las metas del programa”
258 WHOLEY, Joseph. Evaluation and effective public management. Boston: Little, Brown. P. 11.
Citado por: SHADISH, William; COOK, Thomas; LEVINTON, Laura. Op. cit., p. 234. Traducción
libre.
260 WHOLEY, Joseph. Trends in performance measurement. En: CHELIMSKY, Eleanor; SHADISH,
William. Evaluation for the 21st Century. A Handbook. Op. cit., p 124.
261 MAYNE ; ZAPICO-GOÑI. Effective performance monitoring: a necessary condition for public
sector reform. Pag 11 a 17. En: MAYNE, John ; ZAPICO-GONI, Eduardo (editores). Monitoring
performance in the public sector. USA: Transaction publishers. 1999. p. 11 – 17.
.
128
iniciado algún sistema de monitoreo y evaluación de sus actividades,
dirigidos principalmente a proyectos y programas sociales262. Ahora, bajo
el nuevo enfoque, los sistemas de evaluación se amplían para
extenderse a medir el desempeño del gobierno en sus distintos niveles,
no sólo en lo relacionado con programas sociales, sino con la evaluación
de las instituciones que lo conforman.
129
Algunos modelos incluyen un cuarto nivel, que corresponde al
funcionario de cada organización con el objeto de orientar la
denominada gestión de recursos humanos mediante un sistema de
evaluación del desempeño de acuerdo a los resultados obtenidos por
cada empleado.
La implantación de estos sistemas generalmente propone una unidad
central de monitoreo que puede estar ubicada en algún ministerio, o
adscrita a la presidencia de la república264, encargada de administrar el
sistema y evaluar los resultados.
264 HAUGLI, Nielsen Terje. Establishing Performance Monitoring: The role of the central unit. En:
MAYNE, John ; ZAPICO-GONI, Eduardo (editores). Monitoring performance in the public sector.
USA: Transaction publishers. 1999. p. 33.
265 WIESNER, Eduardo. Op. cit., p. 190. En: CHELIMSKY, Eleanor; SHADISH, William. Evaluation
for 21st century. A handbook. USA:.Sage Publications. 1997.
130
etc, todas ellas generadoras de políticas y que abren nuevos capos de
acción para la evaluación dentro del Estado.
131
6 LA EVALUACION Y LA INTERVENCIÓN SOCIAL
Toda política posee de manera intrínseca una teoría del cambio social, y
la forma de concebir el cambio se encuentra implícita en la definición de
los objetivos de la política, la selección de la población objetivo hacia la
cual se dirige, la escogencia de los ejecutores o implementadores y por
supuesto el tipo de política que se debe aplicar267.
268 ROBSON, Colin. Real World Research. U.K: Ed. Blackwell. 1993. p. 435 y s.s.
132
modelo absolutamente racional y positivista asume al investigador como
aislado de la realidad, que puede desde su perspectiva construir y
diseñar intervenciones apropiadas las cuales serán exitosas en función
de su valor lógico y causal.
269 ROBSON, Colin. Real World Research. U.K: Ed. Blackwell. 1993. p. 438.
133
Toda intervención esta fundamentada con una concepción lógica que
permite desde dichos supuestos optimizar la selección de alternativas de
selección y escoger la más conveniente.
134
limitaciones de recursos o institucionales existentes afectan de manera
directa el éxito de la intervención. En nuestro anterior ejemplo, el grado
de pertinencia del supuesto del aprendizaje así como la capacidad para
ofrecer un programa de autoaprendizaje de buena calidad, incidiría en
los resultados finales sobre la consecución de empleo por parte de los
individuos capacitados.
274 MOKATE, Karen Marie - La evaluación Económica de los Proyectos Sociales. Publicado en la
revista No 21. Desarrollo y Sociedad. Publicación del CEDE - Centro de Estudios sobre Desarrollo
económico - Facultad de Economía de la Universidad de los Andes. Marzo de 1993. Pags. 9 a 25.
También, ver: MENY, Yves; THOENIG Jean C. Op. cit., p. 93 y subs
VEDUNG, Evert. Op. cit., p. 17
275 En realidad los impactos son efectos de largo plazo que se generan a partir de la intervención.
135
Para ilustrarlo utilizaremos el ejemplo de una intervención educativo. En
la tabla 3 se describe una posible forma de diseñar una intervención276.
Tabla 3. Ejemplo de cadena de intervención para un proyecto educativo.
RECURSOS ACCIONES PRODUCTOS EFECTOS IMPACTO
Presupuestos a. construcción Una escuela Aumento de
Ingenieros de una escuela construida y cobertura
Mano de funcionando Asistencia de educativa.
Obra niños entre 7 y Mejoramiento del
Docentes b. Dotación de Dotación 12 años y, nivel educativo de
Técnicos la escuela completa permanencia la población.
educativos en términos de Disminución del
Materiales c. Selección y Asignación de calidad analfabetismo.
Suministros capacitación de docentes educativa Elevación de la
docentes capacidad de
Docentes generación de
capacitados ingresos.
Los efectos, por su parte, tienen que ver con asegurar la asistencia de la
población en edad escolar a dicha escuela y garantizar su permanencia
en términos de calidad predefinidos. Nótese que la definición de los
efectos implica la utilización de “normas” técnicas (indicadores)
relacionadas con: nivel de asistencia escolar, tasa de deserción, nivel de
calidad educativo etc. Estos indicadores de los efectos producidos
difieren de los relacionados con los productos de la escuela.
276. Existen diversas formas de concebir la estructura lógica del programa o proyecto, dependiendo
del contexto particular en el que se trabaje.
136
La relación entre impacto y aumento del bienestar implica que existe un
acuerdo con respecto a lo que se considera bienestar y cuáles son las
preferencias seleccionadas para aumentar este bienestar.
278 Se hace referencia a la dimensión del bienestar de los estados liberales, presente en cualquiera
de los modelos antes expuestos (residual, corporativista, socialdemócrata), y no al período histórico.
279 Se trata de examinar los métodos de intervención social en cuanto a enfoques y prácticas que
orientan el trabajo social de las organizaciones de desarrollo (públicas o privadas). Estas
caracterizaciones han sido desarrolladas como orientaciones para el trabajo social.
280 Adaptado de: ESTES, Richard J.. PRAXIS -Resources For Social and Economic Development –
USA: University of Pennsylvania. 1995. Publicado en Web:
http://www.ssw.upenn.edu/~restes/praxis.html
137
más necesitada, la cual está conformada por individuos, familias, grupos,
organizaciones, comunidades. Los sujetos prioritarios del sistema de
bienestar son lo ancianos, niños abandonados, personas incapaces de
valerse por sí mismas y grupos víctimas de abusos y opresión social.
138
ciudadanos y sacar a flote conflictos sociales mediante la confrontación
civil con el Estado281. La participación comunitaria es una respuesta al
cuestionamiento de los servicios prestados por el Estado, y busca
aumentar el poder de la población en la toma de decisiones y en la
búsqueda de soluciones. Incluso muchas corrientes de la participación
comunitaria se oponen a la intervención del Estado y consideran que la
gente sola es capaz de promover y generar su desarrollo282. El auge del
movimiento de Ongs sobre todo en los países en desarrollo se ubica en
este período del Estado de bienestar.
281 MIDGLEY, James: La política social, el estado y la participación comunitaria. En: Pobreza. Un
tema impostergable. Kligsberg. (compilador). México: Fondo de Cultura Económica. PNUD. 1997. p.
207 y subs.
139
específicamente en grupos específicos marginados dentro de las
comunidades. El énfasis de la intervención mezclaba la provisión como
la prevención.
283 ESTES, Richard J.. PRAXIS -Resources For Social and Economic Development – USA:
University of Pennsylvania. 1995. Publicado en Web:
http://www.ssw.upenn.edu/~restes/praxis.html...
140
manipulan las variables sociales y económicas del mundo, sosteniendo
la dependencia del “sur”, mediante sus ventajas comparativas y
competitivas. Esto permite al norte, afianzar su posición geopolítica,
controlar mercados y el acceso tanto a mano de obra como materias
primas en los países pobres del “sur”.
Este tercer modelo surge como una respuesta de los activistas del
desarrollo y de las organizaciones políticas de carácter ecologista,
liberalismo de izquierda, grupos feministas y de defensa de los derechos
humanos etc. ante la primacía de criterios económicos y de mercado
que amenazan con desmontar los mecanismos de asistencia y
protección social emprendidos desde períodos anteriores. Al poseer un
carácter contestatario, no congruente necesariamente con el modelo de
Estado, aún no son claras sus implicaciones con respecto a las políticas
públicas.
141
población en las decisiones públicas, asignación de recursos orientan la
evaluación de las políticas sociales.
142
7 LA EVALUACIÓN Y EL CONTEXTO POLÍTICO E
INSTITUCIONAL
286 WEISS, The politics of impact measurement . Policy Studies Journal, 1, p. 179. Citado por:
SHADISH, William; COOK, Thomas; LEVINTON, Laura. Op. cit., p. 186.
287 SHADISH, William; COOK, Thomas; LEVINTON, Laura. Op. cit., p. 186. y subs.
143
sistemas y categorías, la interpretación de la realidad por medio de
datos, las consecuencias de decisiones y acciones como producto de la
evaluación, la presencia de organizaciones y programas que poseen
lógicas políticas, y la búsqueda de conocimiento a través de la
información para reducir la incertidumbre.
144
mas grave, entre lo que el programa se propone y lo que hace294. El
desconocimiento del contexto político inhibe a la evaluación de encontrar
las explicaciones apropiadas para los hechos observados, limitando
profusamente su utilidad.
145
La política ideal es reconfigurada durante su implementación por cuatro
componentes299: el grupo poblacional objeto de la política, la
organización que implementa, factores ambientales (políticos, culturales,
legales, opinión pública, financieros etc.). Adicionalmente existen grupos
poblacionales que si bien no son objeto directo de afectación, están
relacionados de manera indirecta y pueden afectarla.
299 SMITH, Thomas B. The policy implementation process, Policy Sciences. 1973. p 202 – 205
Citado en: QUADE, E.S. Analysis Op. cit., p. 343 – 344.
146
política económica, información) o al “foco funcional” de la
301
intervención . Esta orientación contempla tres rangos de posibilidades:
7.2.2 La burocracia.
Una mención aparte merece la burocracia con respecto, no solo a su
evidente influencia en el proceso de implementación de políticas, sino al
desarrollo de procesos evaluativos de las mismas. Meny y Thoenig302
mencionan que nueve de cada diez veces son las burocracias públicas o
semipúblicas quienes deben ejecutar una decisión gubernamental. Las
características particulares de este agente público, cuya genealogía
excede totalmente el alcance de este documento, hacen que los
productos resultantes de su intervención difieran de las decisiones de
quienes hacen la política, afectando la eficiencia de la acción
administrativa y la eficacia de la misma303. Entre las causas de los
desfases se encuentran304:
147
§ El carácter público de la burocracia, que dificulta asumir metas
objetivas.
148
BIBLIOGRAFIA
149
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evaluación de programas. En: Control y Evaluación de la Gestión
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http://www.europeanevaluation.org/newslett/newslett.htm 1997
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