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CONCLUSIONES
1. El debido proceso como pilar de los derechos fundamentales
En la investigación, los derechos que asegura a todas las personas, ya sean nacionales o extranjeras, el acceso a un sistema de justicia justo, imparcial y razonable. A lo largo de la historia, su evolución ha permitido que el derecho procesal se adapte a los principios democráticos y constitucionales de cada nación. En América Latina, el debido proceso ha cobrado una relevancia considerable, no solo en el ámbito judicial, sino también en los procesos administrativos, parlamentarios y entre particulares. Esto refleja una consolidación del imperio de la ley y una mayor defensa de los derechos del ciudadano. Su doble dimensión, como un derecho subjetivo que puede ser exigido por cualquier individuo y como un derecho objetivo que impone al Estado y sus instituciones la obligación de garantizarlo, se convierte en un pilar fundamental para prevenir abusos y proteger la dignidad humana. 2. Importancia de los principios procesales en la resolución de controversias Para determinar, los principios procesales, como el derecho de defensa, la igualdad ante la ley, la presunción de candidez y el derecho a un proceso público y sin demoras indebidas, son fundamentales para asegurar una resolución justa de cualquier conflicto. Estos principios equilibran las partes involucradas y protegen el proceso judicial de influencias externas, como la parcialidad o el abuso de poder. En particular, el principio de igualdad procesal es crucial, pues garantiza que todos los ciudadanos tengan iguales opciones para presentar sus pruebas y argumentos ante el tribunal. Asimismo, el derecho de defenderse, que incluye a ser escuchado, contar con un defensor y acceder a los medios de prueba, se presenta como una herramienta esencial para asegurar que las decisiones judiciales sean justas y respeten el derecho de los acusados. La tutela jurisdiccional autentica, reconocida como un derecho en muchas constituciones, no solo implica la resolución de los conflictos, sino por supuesto la protección del derecho durante el proceso. Esto exige que los tribunales y otras autoridades judiciales actúen conforme a principios de legalidad, razonabilidad, proporcionalidad y justicia, y que se ofrezcan garantías claras para todas las partes involucradas. 3. El acceso a la jurisdicción y su relación con el derecho al debido proceso A partir del laburo, nos llevó las dimensiones fundamentales del debido proceso, ya que asegura que cualquier persona pueda acudir a los tribunales para obtener una solución a sus disputas. Este derecho no solo implica la probabilidad de manifestar una demanda ante el tribunal, sino también la garantía de que dicho acceso será efectivo, sin obstáculos legales injustificados o discriminación. El gobierno tiene la formalidad de crear normas judiciales accesible y eficiente, ya que la falta de acceso a la justicia puede privar a las personas de la protección de sus derechos y fomentar la impunidad. Así determinar, el acceso a la jurisdicción está estrechamente vinculado con el principio de igualdad procesal. Porque los ciudadanos puedan dar este derecho de manera capaz, deben contar con las mismas oportunidades y condiciones en el proceso judicial. La jurisprudencia constitucional ha destacado que la falta de un acceso efectivo a la justicia puede constituir una trasgresión de los DDHH, ya que impide a las personas defender sus derechos fundamentales de manera adecuada. El establecimiento de mecanismos de apelación y revisión, así como el derecho a un proceso plural, son fundamentales para garantizar que las decisiones judiciales sean legítimas y equitativas. 4. El rol jurisprudencial constitucional en la seguridad del debido proceso Finalmente, el trabajo nos dice que se juega un rol clave en la protección del derecho fundamental, especialmente en lo relacionado con el debido proceso. El consejo Constitucional, como la máxima jefatura en la manifestación de la carta magna, tiene la facultad de revisar decisiones judiciales y administrativas que violen los derechos de las personas, asegurando que las resoluciones se ajusten a los estándares constitucionales. A través de mecanismos como el hábeas corpus y la acción de amparo, el Tribunal ha desarrollado una doctrina que refuerza la prioridad de proteger el acceso a la justicia, la semejanza ante la ley y no ser juzgado dos veces por el mismo hecho, entre otros derechos fundamentales. Además, el Tribunal ha subrayado que las autoridades judiciales y administrativas deben actuar de acuerdo con los principios constitucionales, evitando que la aplicación de las leyes sea arbitraria o desproporcionada. En este contexto, la jurisprudencia constitucional actúa como un control que permite corregir los fallos del sistema judicial y administrativo, asegurando así la efectividad del debido mecanismo y la seguridad de las personas. Referencias Bibliográficas García, R. (2017). El debido proceso y su aplicación en el derecho constitucional latinoamericano. Editorial Jurídica Latinoamericana. https://www.editorialjuridicalatinoamericana.com Pérez, M. (2015). El derecho al acceso a la jurisdicción: Estudio de su evolución y fundamentación en el sistema jurídico internacional. Revista de Derecho Constitucional, 22(3), 120-142. https://www.jstor.org/ Rodríguez, F. (2019). 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