El Proposito de Dios y Lo Profetico
El Proposito de Dios y Lo Profetico
El Proposito de Dios y Lo Profetico
El propósito de Dios era con esta viuda de Sarepta y con el general Naamán.
Mucha gente con necesidad, pero solamente una viuda recibió la visitación y la
habitación de lo profético para su vida y su casa. ¿Por qué?
Fue una mujer que soltó lo que el profeta le pidió. Dios nos llama y nos da la
oportunidad de soltar para ser bendecidos. Soltar es dar lo que me pide el
Señor. ¿Qué nos ha estado pidiendo el Señor a cada uno?
Decía esta mañana en el Altar de Oración que todo en la Escritura apunta a lo
profético.
Ahora, las crisis, las dificultades pueden llevarnos a pensar que no va a ocurrir
nada. Pero David es nuestro ejemplo de, que aun viviendo cosas difíciles, Dios
puede hacerlo en medio de un proceso duro si creemos en El y en su Palabra
Profética.
Salmos 46
Reina-Valera 1960
Dios es nuestro amparo y fortaleza
Al músico principal; de los hijos de Coré. Salmo sobre Alamot.
46 Dios es nuestro amparo y fortaleza,
Nuestro pronto auxilio en las tribulaciones.
2
Por tanto, no temeremos, aunque la tierra sea removida,
Y se traspasen los montes al corazón del mar;
3
Aunque bramen y se turben sus aguas,
Y tiemblen los montes a causa de su braveza. Selah
8 Venid, ved las obras de Jehová,
Que ha puesto asolamientos en la tierra.
9
Que hace cesar las guerras hasta los fines de la tierra.
Que quiebra el arco, corta la lanza,
Y quema los carros en el fuego.
10
Estad quietos, y conoced que yo soy Dios;
Seré exaltado entre las naciones; enaltecido seré en la tierra.
11
Jehová de los ejércitos está con nosotros;
Nuestro refugio es el Dios de Jacob. Selah
Ese mismo David que pasó por dificultades para llegar a ser rey de Israel está
también diciendo que hay que descansar en Dios y conocerlo.
2 Samuel 7
Reina-Valera 1960
Pacto de Dios con David
(1 Cr. 17.1-27)
7 Aconteció que cuando ya el rey habitaba en su casa, después que Jehová le
había dado reposo de todos sus enemigos en derredor, 2 dijo el rey al profeta
Natán: Mira ahora, yo habito en casa de cedro, y el arca de Dios está entre
cortinas. 3 Y Natán dijo al rey: Anda, y haz todo lo que está en tu corazón,
porque Jehová está contigo.
4
Aconteció aquella noche, que vino palabra de Jehová a Natán, diciendo: 5 Ve y
di a mi siervo David: Así ha dicho Jehová: ¿Tú me has de edificar casa en que
yo more? 6 Ciertamente no he habitado en casas desde el día en que saqué a
los hijos de Israel de Egipto hasta hoy, sino que he andado en tienda y en
tabernáculo. 7 Y en todo cuanto he andado con todos los hijos de Israel, ¿he
hablado yo palabra a alguna de las tribus de Israel, a quien haya mandado
apacentar a mi pueblo de Israel, diciendo: Por qué no me habéis edificado casa
de cedro? 8 Ahora, pues, dirás así a mi siervo David: Así ha dicho Jehová de los
ejércitos: Yo te tomé del redil, de detrás de las ovejas, para que fueses príncipe
sobre mi pueblo, sobre Israel; 9 y he estado contigo en todo cuanto has andado,
y delante de ti he destruido a todos tus enemigos, y te he dado nombre
grande, como el nombre de los grandes que hay en la tierra. 10 Además, yo
fijaré lugar a mi pueblo