El Imperio Colonial. América
El Imperio Colonial. América
El Imperio Colonial. América
La colonización americana.
A la par que la conquista, comienza la colonización, es decir, la fundación
de ciudades, la administración, la explotación de recursos y el comercio. De
América se trae plata, oro y perlas, productos como el cacao, maíz, patata,
tabaco. De España se llevan manufacturas, materias primas, mercurio, tejidos,
vino, aceite, armas, municiones, herramientas, cultivos como el arroz y el café,
ganado, caballos.
El descubrimiento (1492), conquista y posterior colonización de América
convirtió a la monarquía española en una gran potencia económica y colonial,
que intentó sacar el máximo beneficio de aquellas tierras. La historia ofrece
pocos ejemplos de eficacia y celeridad tan grandes en un esfuerzo de
descubrimiento y ocupación. Esta es como el relevo de la Reconquista ibérica.
A esta visión se le opone la de “las tiranías y crueldades perpetradas por los
españoles en las Indias Occidentales”, leyenda difundida por los adversarios
de España (ingleses, franceses, criollos independentistas, etc.) y que forjó la
“leyenda negra” en torno a la historia moderna de España.
En líneas generales la conquista y posterior colonización implicaron
consecuencias fatales para la población indígena entre las que caben
destacar: el fuerte descenso demográfico fruto de las enfermedades de origen
europeo y la dureza del trabajo al que fueron sometidos y la aculturación
impuesta sobre todo a través de un severo proceso evangelizador que acabó
con las formas de vida y creencias tradicionales de los indígenas. Tanto es así
que desde bien pronto desde los propios países conquistadores surgieron
voces críticas con los métodos empleados, en especial desde órdenes como la
de los dominicos, que denunciaban prácticas como el requerimiento (invitación
forzosa a aceptar la soberanía del conquistador); la encomienda (fórmula
consagrada por las Leyes de Burgos en 1512 a caballo entre la esclavitud y el
feudalismo: a un encomendero colonizador se le asignaba una partida de
encomendados indios que trabajaban la tierra y pagaban tributos a cambio de
protección y evangelización) y el reclutamiento forzoso de mano de obra,
conocido como tandas en México y mita en Perú. Bartolomé de las Casas,
Ginés de Sepúlveda y Francisco de Vitoria protagonizaron en la primera mitad
del siglo XVI un debate en torno a la legitimidad de la conquista que tuvo
como resultado la promulgación de unas Leyes Nuevas para América (1542-
43), las cuales, pese a su relativo cumplimiento, se concibieron con la
intención de evitar prácticas abusivas. Esta situación fue la que dio origen a la
“leyenda negra”.
Por otro lado, existió un fuerte impacto ecológico que fue recíproco.
Humboldt ya mostró que las mayores transformaciones en el sistema vegetal
y animal del mundo databan de la colonización española. Parece que la mayor
influencia se ejerció en el trasvase Europa-América, aunque el movimiento
inverso ejerció también enorme influencia, así se menciona las “revoluciones”
del maíz y la patata y el horizonte agrícola de Europa se transforma en el siglo
XVI con el conocimiento del nuevo mundo (caña de azúcar, tabaco, etc.).