Esborraz, Marina y Leon, Natalia (2018) - El Concepto de Goce. Murallas de Lo Imposible y Lo Posible

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X Congreso Internacional de Investigación y Práctica Profesional en Psicología

XXV Jornadas de Investigación XIV Encuentro de Investigadores en Psicología


del MERCOSUR. Facultad de Psicología - Universidad de Buenos Aires, Buenos
Aires, 2018.

El concepto de goce. Murallas


de lo imposible y lo posible.

Esborraz, Marina y Leon, Natalia.

Cita:
Esborraz, Marina y Leon, Natalia (2018). El concepto de goce. Murallas
de lo imposible y lo posible. X Congreso Internacional de Investigación y
Práctica Profesional en Psicología XXV Jornadas de Investigación XIV
Encuentro de Investigadores en Psicología del MERCOSUR. Facultad de
Psicología - Universidad de Buenos Aires, Buenos Aires.

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EL CONCEPTO DE GOCE.
MURALLAS DE LO IMPOSIBLE Y LO POSIBLE
Esborraz, Marina; Leon, Natalia
Universidad de Buenos Aires. Facultad de Psicología. Argentina

RESUMEN “necesidad, demanda y deseo”, principalmente en el Escrito “Sub-


El presente trabajo se enmarca en el proyecto de investigación versión del sujeto y dialéctica del deseo en el inconsciente freudiano”
UBACyT (2018-2020): “Génesis, delimitación y transformación del (1960). Sin embargo, la pulsión no figura en esa tríada, y podríamos
concepto de goce en la obra de J. Lacan”. En esta oportunidad agregar que no se identifica con ninguna de las tres, aunque poste-
proponemos un recorrido en torno al concepto de Goce en la elabo- riormente quedará ubicada entre la necesidad y la demanda.
ración de Lacan, en su particular relación con el concepto de deseo En el escrito “Subversión del sujeto y dialéctica del deseo en el
y de pulsión freudianos. A partir de algunas referencias presentes inconsciente freudiano” hallamos esta referencia respecto de la
en el seminario sobre “La Ética del Psicoanálisis” de J. Lacan, or- pulsión: “(…) el instinto, entre los modos de conocimiento que la
ganizaremos nuestro desarrollo a partir de una pregunta: ¿Por qué naturaleza exige de los vivo para que satisfaga sus necesidades, se
contando con el concepto de pulsión sería necesario proponer el de define como aquel conocimiento en el que admiramos el no poder
goce? Intentaremos desarrollar una respuesta, planteando dos di- ser un saber. Pero de lo que se trata en Freud es de otra cosa, que
mensiones que atraviesan y permiten analizar el concepto de goce: es ciertamente un saber, pero de un saber que no comporta el me-
una dimensión de carácter estructural y la otra de carácter singular. nor conocimiento, en cuanto está inscripto en un discurso del cual,
Una plantea la lógica de lo imposible, la otra, en cambio señala las a la manera de un esclavo mensajero del uso antiguo, el sujeto que
experiencias de posibilidad. lleva bajo su cabellera su codicilio que le condena a muerte no sabe
ni su sentido ni su texto…” (Lacan 1960, p.785)
Palabras clave La pulsión como un saber sin conocimiento, marca en el cuerpo,
Goce - Pulsión - Deseo ¨eco” de un decir. En el camino hacia la satisfacción de la necesidad
ésta se encuentra perdida como tal por haber quedado trastocada
ABSTRACT por el lenguaje. En su lugar surge lo que Freud ha denominado
THE CONCEPT OF LUST. BARRIERS OF THE IMPOSSIBLE AND “pulsión”. Conviene destacar que no sólo la necesidad está perdida,
POSSIBLE sino también el objeto de la satisfacción. Ahora bien, esas marcas
This time we propose a journey around the concept of lust in the desconocidas que el sujeto porta, conllevan un tipo de satisfacción
development of Lacan´s work, in its particular relationship with the que configuran su síntoma.
Freudian´s concept of desire and drive. From some references taken Por lo tanto, hasta aquí encontramos casi una equivalencia entre
from the Seminar on “The Ethics of Psychoanalysis” by J. Lacan, we pulsión y goce, ¿pero podemos afirmar que es efectivamente así?
will organize our development based on a question: Why, counting ¿Por qué contando con el concepto de pulsión sería necesario
on the concept of drive, would it be necessary to propose that of proponer el de goce?
lust? We will try to develop a response, proposing two dimensions
that go through and allow us to analyze the concept of lust: a di- Entre deseo y goce
mension of structural character, and the other of a singular charac- En su Seminario dedicado a tratar “La Ética en psicoanálisis” (1959-
ter. One raises the logic of the impossible, on the other hand, the 60) pueden situarse algunas referencias fundamentales para la ela-
other points out the experiences of possibility. boración del concepto de Goce. Lacan afirma allí que el inconscien-
te tiene un estatuto ético: los conceptos de goce y deseo definen el
Keywords estatuto ético del inconsciente. De esta afirmación se desprenden
Lust - Drive - Desire distintas cuestiones: una de ellas hace referencia a que su estatuto
no es óntico, que no se trata de un ente, no es una sustancia, la
Introducción existencia del inconsciente es de otro orden que definirá como “no
El concepto de goce en la obra de Lacan es un concepto comple- realizado” en el Seminario “El reverso del psicoanálisis” (1964).
jo, que atraviesa diversos momentos de elaboración. Si bien en un A su vez se plantea que la ética del inconsciente no se subsume a
inicio surge estrechamente ligado al concepto de pulsión freudia- una moral, como puede entenderse en algunas referencias freu-
no, posteriormente se reformula e incluso parece multiplicarse en dianas que definen al Superyó como “conciencia moral”, sujeta a
distintos “goces”, lo cual creemos que ha llevado en ocasiones a mandatos culturales, en oposición al Ello que pugnaría por la sa-
perder su especificidad. tisfacción de los impulsos sin ningún reparo. “El ello es totalmente
El concepto de Goce como tal no está presente en la etapa inicial de amoral, el Yo se esfuerza por ser moral, y el Superyó puede ser
la enseñanza. En sus primeros seminarios, Lacan realizó la distinción hipermoral y, entonces, volverse tan cruel como únicamente puede

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serlo el ello¨ (Freud, 1923, p.54-55). operación de lenguaje. El significante introduce la pérdida, en tanto
Tampoco la ética del inconsciente se define por ninguna de las éti- puede ser pensada como desnaturalización de las necesidades y
cas que Lacan va mencionando a lo largo del Seminario: la ética pérdida del instinto, que determinan nuestra sujeción a las leyes de
aristotélica, la ética positivista, la ética hedonista, la ética kantiana, la cultura. Hay pérdida inaugural y esto da cuenta de una estructu-
la ética utilitarista. La ética del inconsciente se define en esa par- ra pensada en términos del significante, que implica la dimensión
ticular relación entre deseo y goce, por lo cual nos proponemos de lo perdido. Otro modo de afirmar este planteo sería formular la
seguir en la línea de dicha articulación. inexistencia del Goce todo. Es lo que podemos leer en la conocida
Lacan realizó una lectura del texto de Freud “Proyecto de psicolo- fórmula de Lacan: “No hay relación sexual”, es decir no hay propor-
gía” (1895) y puso especial énfasis en el concepto de “das Ding”. cionalidad, no hay goce complementario, puesto que está perdido
Afirma que”…el campo de la cosa ex-siste, diríamos, como “un por estructura. Y será esa falta la que abrirá la búsqueda constante
más allá en el origen de la cadena significante”. Un más allá de e imposible de realizarse de modo pleno.
la cadena pero que funciona causando su trabajo. Das Ding sería Ahora bien, en el pasaje del Seminario VII que estamos analizando
“aquello en torno a lo cual se organiza todo el andar del sujeto, en Lacan introduce una definición crucial: la pulsión obtiene su satis-
relación al mundo de sus deseos”. (Lacan, 1959-60 p.68). facción al penetrar en ese “campo central” incognoscible y trans-
El deseo aparece mayormente ligado a la cadena significante, re- grediendo el cercado impuesto por la defensa. Se deduce que la
gulado por la vía del el principio del placer. En cambio el concepto pulsión se satisface en el “encuentro”, definido como imposible, del
de goce surge estrechamente ligado al de la pulsión de muerte. sujeto con la Cosa de goce.
Esta diferencia entre deseo y goce se define en términos firmes en Lacan define el lugar topológico de la Cosa como el “campo central
el Escrito “Del trieb de Freud y el deseo del psicoanalista”, donde del goce”, a la vez extraño e íntimo. Este campo del goce, lo real
Lacan afirma: “el deseo viene del Otro y el goce está del lado de la primordial del sujeto, está protegido por el Principio del placer. El
Cosa”. Y continúa un poco más adelante: “Esto por la razón de que Principio del placer gobierna la búsqueda del objeto [das Ding] y le
la pulsión divide al sujeto y al deseo, deseo que no se sostiene sino impone sus rodeos, que conservan su distancia en relación a su fin.
por la relación que desconoce de esta división con un objeto que Desde esta perspectiva el Principio del placer comporta un siste-
la causa. Tal es la estructura del fantasma” (Lacan, 1964 p. 832). ma de protección y evitamiento del goce pulsional. La pulsión, en
Sin embargo convendría señalar que el deseo en la elaboración consecuencia, sólo puede alcanzar su fin cuando el Principio del
de Lacan es un concepto límite, tiene dos caras, una mira hacia el placer fracasa. Años después encontramos formulaciones de Lacan
goce y la otra hacia el placer. De tal modo que no es exacto suponer que van en esta misma dirección, tal como lo encontramos en el
que la realización del deseo simplemente se opone al goce. Hay un Seminario XI donde afirma que en última instancia toda pulsión es
punto en que realización del deseo y goce, o suplemento de goce, pulsión de muerte, o en el Seminario XVII donde menciona que el
confluyen en Lacan y hay un punto en que se separan. De hecho camino hacia la muerte no es nada más que lo que llamamos goce.
encontramos en los primeros seminarios formulaciones como “de- En el Seminario VII Lacan trae a colación lo que denomina “el goce
seo en estado puro” que encontramos en el Seminario V, o como de la transgresión”, y en relación a él ubica la obra de Sade, a la
“condición absoluta del deseo” en relación al análisis que realiza a cual le da el estatuto de un sistema ético. “Aquello de lo que aquí
partir de la lectura de Antígona en el Seminario VII. se trata es de la actitud de Sade, en la medida en que nos indica el
acceso al espacio del prójimo en lo que llamaría, para parafrasear
Imposibilidad y posibilidad de goce el título de una de sus obras que se llama Idea sobre las novelas,
En el seminario VII Lacan afirma: “El problema del goce, en tanto la idea de una técnica orientada hacia el goce sexual en tanto que
éste se presenta como envuelto en un campo central con caracte- no sublimado” (Lacan, 1959-60, p. 240). ¿Cuál es el interés por
res de inaccesibilidad, de oscuridad y de opacidad, en un campo los preceptos sadianos? Precisamente el de ubicar la imposibilidad
rodeado por una barrera que vuelve su acceso al sujeto más que estructural del goce, las barreras para su acceso absoluto incluso
difícil, inaccesible quizás, en la medida que el goce se presenta no cuando su propósito sea eliminarlas. ¿Por qué? Bien, Lacan men-
pura y simplemente como la satisfacción de una necesidad, sino ciona que lo que se puede apreciar en la literatura sadiana es que
como satisfacción de una pulsión…” (Lacan, 1960, p. 253). al avanzar en dirección a ese vacío central, el acceso al goce se
A partir de esta cita de Lacan, pueden ubicarse dos dimensiones presenta como fragmentado, se fragmenta el cuerpo del otro. Y es
diversas respecto al “goce”: una dimensión estructural en la que de ese modo, dice, que los analistas hemos articulado la noción de
el goce “se presenta como envuelto en un campo central de inac- “objeto parcial”.
cesibilidad de oscuridad, de opacidad”, es decir, el lugar topológico Entonces si el acceso a la Cosa es mortífero, la parcialidad del ob-
de la Cosa. Otra dimensión de carácter singular y que se refiere a jeto permite cierto modo de satisfacción, que no es otro que la sa-
una experiencia subjetiva alcanzada específicamente en la posible tisfacción de la pulsión. Ahora bien, ¿cómo se satisface la pulsión
“satisfacción de una pulsión” y que debe ser articulada en términos si no es a través del síntoma? ¿Cómo se articula dicha satisfacción
económicos de ganancia y pérdida de goce. con el deseo?

Desarrollaremos a continuación estos dos ejes: 2-Dimensión singular:


1-Dimensión estructural En el pasaje citado del seminario sobre la ética, la experiencia sub-
Lacan reinterpreta el complejo de Castración en términos de una jetiva relativa al goce pulsional queda definida como un encuentro.

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La satisfacción de la pulsión pertenece a un acto psíquico singular BIBLIOGRAFÍA
que adquiere para Lacan el estatuto de una realización imposible, Freud, S. (1923). El yo y el ello, en Obras Completas, Tomo XIX. Buenos
en la medida en que el objeto es estructuralmente irrecuperable. Aires: Amorrortu editores, 1992.
La ganancia de placer que Freud ubica más allá del principio del pla- Freud, S. (1920). Más allá del principio del placer, en Obras Completas,
Tomo XX. Buenos Aires, Argentina: Amorrortu editores, 1992.
cer es conceptualizada por Lacan como goce, concepto que enfatiza
Jadin, J-M. y Ritter, M. (2009). La jouissance au fil de l´enseignement de
la operación fundamental de Freud en sus formulaciones metapsi-
Lacan. Paris, Francia: Éditions Érés, 2009.
cológicas del año 1920, en relación a la compulsión de repetición.
Lacan, J. (1959-60). El Seminario. Libro VII: La ética del psicoanálisis. Bue-
La perspectiva del goce no es la del principio de placer, sino su más nos Aires, Argentina: Editorial Paidós, 1988.
allá, es una ganancia que siempre va en contra de la homeosta- Lacan, J. (1964). El Seminario. Libro XI: Los cuatro principios fundamenta-
sis del principio del placer. Implica la recuperación de un “plus de les del psicoanálisis. Madrid, España: Ediciones Barral.
goce”, sobre el trasfondo estructural de la inexistencia de un Goce Lacan, J. (1964) El Seminario. Libro XVII: El reverso del psicoanálisis. Bue-
absoluto. La satisfacción de la pulsión sería un modo de realización nos Aires, Argentina: Editorial Paidós, 1988.
de lo imposible, sede de la Cosa. Lacan, J. (1960) Subversión del sujeto y dialéctica del deseo en el incons-
En el Seminario XI Lacan profundiza el vínculo entre lo real, nombre ciente freudiano, en Escritos 2. Buenos Aires, Argentina: Editorial Siglo
de lo imposible, con la satisfacción alcanzada a través de la pulsión XXI, 1987.
y afirma: “Esta satisfacción es paradójica. Cuando la miramos de Lacan, J. (1964) Del trieb de Freud y el deseo del psicoanalista, en Escritos
2. Buenos Aires, Argentina: Editorial Siglo XXI, 1987.
cerca, nos damos cuenta que entra en juego algo nuevo, la catego-
ría de lo imposible, la cual es, en los fundamentos de las concepcio-
nes freudianas, absolutamente radical. El camino del sujeto -para
pronunciar aquí el término sólo en relación al cual puede situarse
la satisfacción- pasa entre dos murallas de lo imposible”. (Lacan,
1964, p.173).
El camino del sujeto en términos de una satisfacción está entre,
una primera muralla de lo imposible, que señalaría la dimensión
estructural: La Cosa, lo imposible de apresar. La segunda muralla,
apuntará a la dimensión subjetiva y a las satisfacciones siempre
paradojales que se anuncian en experiencias de goce diversas. Una
podemos ubicarla en el nivel del síntoma, que presenta de modo
irreductible la satisfacción de la pulsión, una suerte de conmemo-
ración de goce. Otra perspectiva en relación al goce podría ubicarse
en el nivel del fantasma, que sitúan el Goce como aquello de lo
que el sujeto se considera privado. Por esta vía la imposibilidad
estructural se interpreta como impotencia subjetiva. “No es que no
haya, es que a mí me falta”, “No es que sea imposible, sino que yo
no puedo” y la suposición neurótica por excelencia, de que el otro/a
sí tiene, goza, puede.

Comentario Final
A lo largo del desarrollo que hemos desplegado, intentamos situar
la complejidad del concepto de Goce, su relación y diferencia con el
de deseo y el de la pulsión. Nos hemos preguntado al respecto: ¿Por
qué contando con el concepto de pulsión sería necesario proponer
el de goce?
Es preciso situar que el surgimiento del concepto de Goce, está
articulado con dimensiones diversas, en términos de lo imposible
del Goce todo, estructuralmente perdido, y las posibilidades de sa-
tisfacciones pulsionales, goces suplementarios, que en términos de
la perspectiva singular, permiten la lectura de experiencias de goce
posibles y paradojales.
A su vez la relación con el deseo no es unívoca, dado que si bien
algunas afirmaciones permiten suponer que el deseo siempre es
defensa contra el goce, también es un movimiento hacia él, lo que
quedará plasmado en la idea llevar a la “pulsionalización” del deseo
como efecto de un análisis.

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