Una república es una forma de gobierno y de organización del Estado en la que el poder
político, y en particular la jefatura del Estado, es ejercido por representantes del pueblo. Esto
significa que el gobierno lo desempeñan individuos elegidos por la ciudadanía y sometidos a un
cuerpo de leyes fundamentales, iguales para todos (es decir, una Constitución), en el marco de
una separación de poderes.
La palabra “república” proviene del término latín res publica, “la cosa pública”, con el que los
romanos hacían referencia a la esfera de los intereses públicos, del bien común o del Estado. El
término res publica fue empleado por primera vez en la época conocida como la República
romana, iniciada en el 509 a. C., cuando se puso fin a la monarquía.
En ese entonces, la república era una forma parcial de democracia, en la que inicialmente
una aristocracia (los patricios) ocupaba los asientos del Senado romano y dentro de este grupo
social se elegía a dos cónsules que gobernaban y comandaban el ejército. Los cónsules eran
elegidos mediante el voto de todos los ciudadanos varones libres de Roma (tanto patricios
como quienes no formaban parte de la aristocracia, los plebeyos), reunidos en una asamblea
llamada Comitia centuriata en la que se organizaban según su nivel de riqueza. A partir del
siglo IV a. C., el Senado y el cargo de cónsul comenzaron a ser ocupados también por plebeyos.
Sin embargo, lo que hoy se entiende por república difiere del uso antiguo, y generalmente se
refiere al imperio de la ley sostenido en una Constitución, a la elección directa o indirecta del
jefe de Estado y de los representantes en el poder legislativo y a la separación de los poderes
públicos. En ese sentido, la existencia de la república es contraria al acaparamiento del poder
político por parte de una sola persona, como ocurre en las autocracias, o a la designación
vitalicia y hereditaria de los máximos cargos públicos, como ocurre en las monarquías (aun
cuando, en la actualidad, muchas monarquías otorgan al rey una posición más simbólica que
política).
La república es un régimen de gobierno y organización del Estado basado en instituciones
democráticas y principios liberales, en el que todos los ciudadanos son iguales ante la ley y
eligen a sus representantes mediante el voto directo o indirecto, pues la soberanía reside en
el pueblo. Esta idea de república surgió tras la Revolución francesa de 1789, cuando en 1792 se
abolió la monarquía y se instauró la Primera República francesa. Anteriormente, se había
constituido un régimen republicano en Estados Unidos, tras declarar su independencia de la
Corona británica en 1776 y redactar su Constitución en 1787. Aun así, existe cierto margen de
ambigüedad en torno al uso del término, por lo que depende del punto de vista considerado.