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Historia Actual Online, 53 (3), 2020: 1-4 ISSN: 1696-2060
TABLA DE CONTENIDOS
ARTÍCULOS
El ABC de Sevilla y el ABC de Madrid en la Guerra Civilespañola. El caso del bombardeo de

Almería por la Kriegsmarine�� 5
Manuel Amorós Agudo
Las cooperativas industriales textiles: una respuesta obrera durante la autarquía��21

Luis Carlos San José Belda
La influencia de la Unión Europeaen el espacio postsoviético: la Asociación Oriental (2009-2019)��31

César García Andrés
Crónica de una ratificación atragantada: el accidentado sí de Reino Unido a Maastricht desde la

óptica de la prensa española�� 43
José Carlos Tenorio Maciá
La prensa comunista argentinay la política exterior peronista (1946-1947)��57

Mercedes Saborido
DOSSIER: PANCATALANISMO E IZQUIERDA REVOLUCIONARIA EN LA TRANSICIÓN ESPAÑOLA
Presentación del dossier: Pancatalanismo e izquierda revolucionaria en la Transición española��71

Eduardo Abad García
Etapa de generación teóricade Germania Socialista (1970-1972)�� 75

Xavier Ferré Trill
El Partit Socialista d’Alliberament Nacionaldels Països Catalans (PSAN) durante el tardofranquismo

y la Transición�� 95
Roger Buch
Los Países Catalanes: la proyección de las tesis de Joan Fuster en el ideario político valenciano y
catalán desde la Transición a la actualidad�� 109
Carlos Cárdenas Blesa
La construcción del espacio político de la izquierda nacionalista en la isla de Mallorca. Las

elecciones municipales de 1979 y de 1983�� 123
Antoni Marimon Riutort
Indefinición, falta de teorización y confusión. La izquierda revolucionaria ante los Països Catalans
(1962-1982)�� 137
Antoni Rico i Garcia
DEBATE HISTORIOGRÁFICO
Carrero Blanco ante La gran baza soviética: ideología y discurso�� 151

Juan Miguel Valdera Gil y Benamí Barros García
Aproximación historiográfica a los “Estudios de lo bélico” de la Guerra Civil española sobre el

bando sublevado�� 167
Francisco J. Leira-Castiñeira
© Historia Actual Online, 53 (3), 2020: 1-4 1

RESEÑAS
Delgado, Lorenzo y López, Santiago M. (eds.), Ciencia en Transición. El lastre franquista ante el
reto de la modernización, Madrid, Sílex, 2019, 383 pp.�� 179
Por Mario Rosano Alloza
Egido, José Antonio, La dificultad de la Revolución Nacional en una colonia petrolera. Venezuela
vencerá. Puerto de Santa María, El Boletín, 2019, 150 pp.�� 180
Por Isabel Mª Cubero Trujillo
González Madrid, Damián A.; Molina García, Sergio y Ortíz Heras, Manuel, L’adhésion de l’Espagne
à la CEE (1977-1986), Bruxelles, Peter Lang, 2020, 436 pp.�� 182
por Alejandro Román Antequera
González Martínez, Carmen (coord.), Transiciones políticas contemporáneas: singularidades

nacionales de un fenómeno global, Madrid, Fondo de Cultura Económica y Red Columnaria,
2018, 284 pp.�� 183
Por Mariano Monge Juárez
Hernández Sánchez, Fernando, La frontera salvaje. Un frente sombrío del combate contra Franco,
Barcelona, Pasado & Presente, 2018, 541 pp.�� 185
Por Eduardo Abad García
Núñez de Prado Clavell, Sara, Historia de Rusia: De la Unión Soviética a la Federación Rusa,
Madrid, Síntesis, 2019, 330 pp.�� 186
Por José Luis Rodríguez Jiménez
Pérez Herrera, Gema, José Pedro Pérez-Llorca. Una biografía política, Madrid, Agencia Estatal
Boletín Oficial del Estado y Centro de Estudios Políticos y Constitucionales, 2020 (Col. Derecho
Público), 408 pp.�� 190
Por Julio Pérez Serrano
Rivera, Antonio y Mateo, Eduardo, Fernando Buesa, una biografía política. No vale la pena matar
ni morir, Madrid, Catarata, 2020.�� 192
Por David Mota Zurdo
2 © Historia Actual Online, 53 (3), 2020: 1-4

EL ABC DE SEVILLA Y EL ABC DE MADRID EN LA GUERRA

CIVIL ESPAÑOLA. EL CASO DEL BOMBARDEO DE ALMERÍA
POR LA KRIEGSMARINE
THE ABC OF SEVILLE AND THE ABC OF MADRID IN THE

SPANISH CIVIL WAR. THE CASE OF THE BOMBARDMENT OF
ALMERIA BY THE KRIEGSMARINE
Manuel Amorós Agudo*

*
I.E.S. Alhamilla, Almería, España. E-mail: [email protected]
Recibido: 4 septiembre 2019 / Revisado: 8 agosto 2020 / Aceptado: 10 septiembre 2020 / Publicado: 15 octubre 2020
Resumen: El objeto de este estudio es el de ana- into account. The important role that the written
lizar la relación entre el bombardeo de la Kriegs- press had as a propaganda weapon in the Spa-
marine sobre Almería, el 31 de mayo de 1937, y nish Civil War will be studied by analyzing the
el diario ABC, teniendo como marco referencial war itself, its consequences and in what way this
el rigor crítico al abordar la utilización de la pren- war was transmitted by both sides to their rea-
sa como fuente documental primaria en el análi- ders. All of this from the analysis of a historical
sis de la Historia Contemporánea Española, que event that belongs to our nearest memory and
la inscribe en el espacio de su elaboración y en of which it´s 83 years.
el entramado de los actores que la produjeron.
Para ello, se toma como referencia la labor edito- Keywords: ABC newspaper, bombardment,
rial y de opinión en función de sus dos ediciones. Kriegsmarine, Almeria, propaganda
Estudiando el hecho en sí, qué repercusión tuvo
INTRODUCCIÓN
y de qué forma fue transmitido este por los dos
L
bandos enfrentados a sus respectivos lectores, os estudios de Historia Contemporánea, y
podemos introducirnos en la relación del papel especialmente cuando hablamos de la Gue-
que jugó la prensa dentro de la contienda civil rra Civil Española, recurren a fuentes he-
española como un arma propagandística. Todo merográficas como herramienta investigadora,
ello desde el análisis de un acontecimiento his- usándola como elemento central o como apoyo
tórico que pertenece a nuestra memoria más de otras fuentes. La historiografía de la Guerra
cercana, y del cual se han cumplido 83 años. Civil Española acepta que esta, pronto se convir-
tió en un laboratorio armamentístico y táctico,
Palabras clave: diario ABC, bombardeo, Kriegs-
incluso implantando una nueva arma bélica, la
marine, Almería, propaganda
propaganda y su control. Los medios de informa-
Abstract: The aim of this study is the analysis of ción entre 1936 y 1939, prensa, radio, cine…, se
the relationship between the bombardment on pusieron al servicio de los contendientes, apare-
Almería by Kriegsmarine on May 31st, 1937 and ciendo la radio, por su inmediatez informativa y
the ABC newspaper. Critical rigour has been used la carencia de fronteras, la herramienta estrella.
when approaching the press as a documentary A pesar de ello, la prensa no quedó relegada, in-
source in the analysis of the Contemporary Spa- tentando ser la acaparadora de las “simpatías”
nish History, considering both its production and de la opinión internacional, y un vehículo para
the characters that made it. To achieve this, the omitir o suavizar el impacto de las derrotas mi-
publishing work and the opinion one were taken litares de sus respectivos ejércitos, desviando el
interés hacia los frentes que les eran más favo-

El ABC de Sevilla y el ABC de Madrid en la Guerra Civil Manuel Amorós Agudo
rables, permitiendo mantener la moral de la po- considerando el manejo de él por los dos ban-
blación y censurar al bando contrario, a pesar del dos, y en consecuencia el control propagandís-
problema de restricción de papel. La utilización tico en el conflicto español mediante el estudio
de la prensa como documento para describir de- comparativo que ofrecen las ediciones madrile-
terminadas circunstancias en el conflicto espa- ñas y sevillanas de ABC.
ñol es significativa cuando analizamos el diario
ABC, un periódico con dos crónicas de guerra El inicio de las operaciones del Control Naval en
antagónicas, la republicana, desde su edición las costas españolas favoreció las condiciones
madrileña, y la de los sublevados, en su edición para ataques a los buques extranjeros en labores
sevillana. de vigilancia2. En la primavera de 1937 la tensión
aumentó tras los incidentes del destructor inglés
ABC fue fundado por Torcuato Luca de Tena y Ál- Hunter el 13 de mayo de 1937, el ataque al mer-
varez-Ossorio en 1905 en Madrid, inaugurando cante italiano Barletta el 24 de mayo de 1937,
su edición sevillana en 1929. Su línea monárqui- el bombardeo sobre la patrullera alemana Alba-
ca y conservadora cambió tras la sublevación del tross el 26 de mayo de 1937, y el ataque por par-
18 de julio de 1936. La capital española perma- te de la aviación republicana del crucero alemán
neció fiel a la República y las autoridades repu- Deutschland el 29 de mayo de 1937, detonan-
blicanas tomaron el control del diario editado en te del bombardeo sobre la ciudad de Almería3.
Madrid convirtiéndose en órgano de Unión Re- Tras este incidente, el Gobierno alemán protestó
publicana. Por su parte, la edición de Sevilla, al ante el Comité de No Intervención, negando que
igual que la ciudad, se adhirió a los golpistas bajo su buque estuviera incumpliendo las normati-
la dirección de Luca de Tena. vas del Control y que este hubiese abierto fuego
contra los aviones. Inmediatamente la Kriegsma-
Un elemento importante en el control informa- rine se retiró del Control hasta que no obtuviera
tivo, fueron las agencias y oficinas de prensa y garantías de no repetirse el suceso. Italia secun-
propaganda1. Durante el periodo republicano dó la retirada.
destacó la agencia de noticias española Fabra
como suministradora de información al ABC. El 30 de mayo de 1937 Hitler y su Estado Ma-
Otras agencias más modestas, como Logos y Fe- yor diseñaron las represalias. Las propuestas ini-
bus, hacían lo propio. Todas distribuían noticias ciales de bombardeo sobre Barcelona, Valencia
de la agencia francesa Havas y de la estadouni- o Cartagena se descartaron por su inviabilidad.
dense United Press. En febrero de 1935, Fabra, La atención se centró en una pequeña ciudad,
insatisfecha con Havas, logró un contrato con la fiel al Gobierno republicano, con la mitad de su
agencia oficial alemana Deutsches Nachrichten provincia bajo su control, y con apenas defensas
Büro (DNB). Al inicio del conflicto, parte de Fabra costeras, Almería.
y Febus, con toda su estructura, quedaron bajo
control gubernamental republicano integradas 1. EL BOMBARDEO SOBRE ALMERÍA
en el Ministerio de Propaganda del Gobierno de
La mañana del 31 de mayo de 1937 una flotilla
Largo Caballero, siendo la proveedora a los rota-
comandada por el acorazado de bolsillo Admiral
tivos más destacados republicanos. La otra parte
Scheer y compuesta por los destructores Alba-
de Fabra quedó controlada por los sublevados,
tros, Leopard, Seeadler y Lluchs, bombardearon
aunque realmente fueron las agencias alemanas
Almería. La crónica del ataque fue facilitada por
e italianas las que ejercieron una mayor influen-
ABC republicano4. El parte oficial del ataque fue
cia en los organismos de comunicación franquis-
redactado y enviado por el Comandante Militar
tas, canalizando sus informaciones vía Fabra du-
de Almería Giralt al Ministerio de Defensa Nacio-
rante el periodo 1936-1939.
El planteamiento de este análisis hemerográfico

nos sitúa durante las semanas siguientes al ata-
que de la Kriegsmarine sobre la ciudad de Alme- 2
Véase: Alpert, Michael, La guerra civil española en el
ría el 31 de mayo de 1937. Esto nos permite comar, Madrid, Siglo XXI, 1987.
nocer a partir de este hecho sus consecuencias,
3
“Un crucero alemán, en aguas jurisdiccionales, dis-
para contra nuestros aviones y éstos le bombardean”,
ABC. Diario Republicano de Izquierdas (Madrid), 30 de
1
Para entender este elemento, véase: Olmos, Víctor, mayo de 1937, p. 5.
Historia de la Agencia EFE: El mundo en español, Ma- 4
“Relato del atentado”, ABC. Diario Republicano de
drid, Editorial Espasa Calpe, 1997. Izquierdas (Madrid), 1 de junio de 1937, pp. 5-6.

Manuel Amorós Agudo El ABC de Sevilla y el ABC de Madrid en la Guerra Civil
nal en Valencia5. A las doce de la mañana se rea- 2. ABC DE MADRID

lizó un primer recuento de víctimas, que ascen-
día a 19 muertos y 55 heridos6. El encargado de La política de restablecimiento del poder cen-
comunicar estos datos trágicos al Ministerio de tral adoptada por el socialista Juan Negrín desde
Defensa en Valencia fue Gabriel Morón, Gober- mayo de 1937, se tradujo en un intento de cen-
nador Civil de Almería7. El número de víctimas tralizar la propaganda gubernamental creando
se minimizó por la rutina de la población civil de el Gabinete de Censura ante la necesidad de la
hacer noche en las afueras del casco urbano o en unión frente al fascismo. Este Gabinete, contro-
refugios naturales de la periferia ante los cons- lado por el ministro de Gobernación Julián Zu-
tantes ataques de la aviación rebelde y de sus gazagoitia, comunicó la prohibición de publicar
aliados que sufría la ciudad8. crónicas que supusieran cualquier tipo de cen-
sura para el nuevo Gobierno, o hacerse eco de
Los destrozos materiales fueron innumerables. las dificultades que este pudiera encontrar, por
El bombardeo comenzó por la parte baja de la lo que las noticias relacionadas con el bombar-
ciudad, alcanzando el puerto, los barrios de Pes- deo sobre Almería fueron facilitadas a la edición
cadería y Rambla de La Chanca, la Iglesia de San madrileña por las Agencias de noticias Febus y
Roque, la Catedral, el Ayuntamiento, el edificio Fabra. Esto llevó al Gobierno republicano a po-
de la Cruz Roja Internacional y edificios de la ner inmediatamente en funcionamiento la ma-
Avenida de la República. La segunda ráfaga, en quinaria propagandística desde ABC y desde
forma de abanico, alcanzó toda la ciudad, llegan- toda la prensa madrileña, que apoyaba al nuevo
do sobre la parte alta, Plaza de Toros, Hoyo de Gobierno Negrín desde el 17 de mayo de 193711.
los Coheteros, Cruz de Caravaca, y Cementerio9. Este apoyo fue manifestado por la Junta Direc-
tiva de la Asociación del Arte de Imprimir, que
El ministro de Defensa Nacional Indalecio Prieto consideraba que desde determinados diarios re-
pidió una ofensiva contra la Kriegsmarine. Esto publicanos se actuaba contra el Gobierno y las
desembocaría en una confrontación directa con organizaciones del Frente Popular mediante un
Alemania y por tanto la implicación de franceses, lenguaje considerado como terrorismo verbal.
ingleses y soviéticos en ayuda a la República. El Las protestas se elevaron a las autoridades para
presidente del Gobierno, Juan Negrín, y el presi- evitar la ruptura de la unidad proletaria y anti-
dente de la República, Manuel Azaña, rechaza- fascista12. En este sentido, el 1 de junio de 1937,
ron la idea10. ABC madrileño, mediante un anuncio destacado,
llamaba la atención a los lectores para anunciar
que:
5
“Un acorazado y cuatro destructores de la marina de
guerra alemana bombardean la ciudad de Almería”, “[…] el Gobierno legítimo de la República es
ibid., p. 3. el poseedor de toda la autoridad para ha-
6
El recuento final de víctimas difiere en función de la blar y para mandar; nosotros, y con noso-
estimación de distintos autores. Según nuestra inves- tros todos los españoles, al lado del Gobier-
tigación, basada en los documentos de la Audiencia no, ahora más que nunca, para otorgarle
Provincial, habría más de un centenar de heridos de nuestra ilimitada confianza, nuestro apoyo
diversa consideración y 30 muertos. “Recuento de
y nuestra obediencia”13.
víctimas en el bombardeo alemán sobre Almería”, Ar-
chivo Audiencia Provincial de Almería (AAPA), Alme- Varias fueron las prioridades republicanas tras
ría, Fondos Registro Civil, Sección 3ª, Libros 12 y 165,
el bombardeo de Almería. Una de ellas fue jus-
junio de 1937.
7
“Varios detalles. Las víctimas. Los daños”, ABC. Dia-
tificar el ataque al navío alemán ante la opinión
rio Republicano de Izquierdas (Madrid), 1 de junio de pública. El 1 de junio de 1937 se transcribió el
1937, p. 6. comunicado oficial del Consejo de Ministros del
8
Bombas y olvidos. Almería 1937, Berlanga Martínez, día anterior, denunciando “[…] el criminal aten-
Manuel (dir.), 2008, [51:21 mm.]
9
“Plano del arquitecto D. José Pradal Gómez con los 11
“La crisis a través de la Prensa Madrileña”, ABC. Dia-
impactos de los obuses en el ataque alemán, sirvien- rio Republicano de Izquierdas (Madrid), 19 de mayo
do como prueba del Gobierno de la República ante la de 1937, p. 12.
Sociedad de Naciones”, Archivo Municipal de Almería 12
“Asociación del Arte de Imprimir”, ABC. Diario Re-
(AMA), Almería, Registro Topográfico General, julio publicano de Izquierdas (Madrid), 2 de junio de 1937,
de 1937. p. 8.
10
Hugh, Thomas, Historia de la Guerra Civil Española, 13
ABC. Diario Republicano de Izquierdas (Madrid), 1
1976, p. 741. de junio de 1937, p. 7.

tado de que España es víctima por parte del na- mente un Tupolev SB-2 pilotado por el ministro
zismo alemán. […]”. Este justificaba el ataque de Indalecio Prieto bombardeando el Deutschland,
la aviación republicana al crucero alemán por insistiendo en el anclaje textual en el mensaje de
incumplir este las normas del Control14. Misma justificación de los medios oficiales20.
argumentación presentó la portada de ese día
con una imagen a media página del Deutschland, Los sublevados acusaron al Gobierno de Valencia
relatando a pie de foto que los aparatos leales de permisividad con las escuadrillas soviéticas,
respondieron al fuego antiaéreo del buque, en- considerando un acto deliberado la operación
contrándose este fuera de su zona de Control15. sobre Ibiza21. ABC republicano desmintió la infor-
Esta tesis seguía siendo la base diplomática pre- mación de ABC de Sevilla con una “interviú (sic)”
sentada por Álvarez del Vayo ante la Sociedad de de París Soir, facilitada por Fabra22. Aquí, el ca-
Naciones el 31 de mayo de 1937, añadiendo un pitán Argega afirmaba que las tripulaciones que
nuevo elemento que proporcionaba inquietud, bombardearon el buque alemán eran españolas,
la imposibilidad de garantizar la seguridad de los confirmando la versión gubernamental de res-
buques del Control16. La justificación del ataque puesta al fuego antiaéreo23. Esto fue ratificado,
al Deutschland también se realizó ante el minis- según Febus, por los tripulantes del Deutschland
tro inglés Eden por el embajador Azcárate, y ante a su llegada a Tetuán24. La actuación de la es-
el Secretario de Estado estadounidense Mr. Hull, cuadrilla en el incidente del Deutschland se fue
por el embajador De los Ríos, expresándole que enconando con el paso de los días, obligando al
el bombardeo de Almería se consideraba un acto Ministerio de Defensa Nacional a emitir una nota
de guerra17. desmintiendo la colaboración de pilotos rusos, y
justificando que las órdenes de vuelo eran solo
El 1 de junio de 1937, el editorial “Tres diálogos de reconocimiento25.
ejemplares” corroboraba que el ataque de Ibiza
fue un acto de defensa, subrayando que los ale- La propuesta inglesa ante el Comité de No Inter-
manes habían sido avisados de que su seguridad vención el 7 de junio de 1937 para reingresar a
no podía ser garantizada si incumplían fondear italianos y alemanes al Control, sirvió para que
en las radas rebeldes18. Acompañándolo, como el altavoz del Partido Comunista soviético, Pra-
era habitual, estaba la viñeta de Aníbal Tejada19. vda, hiciera pública, sin aportar pruebas de ello,
La “Caricatura del Día” representaba eufórica- la argumentación republicana de existir un en-
tramado diplomático que evidenciaba intencio-
14
“El Consejo de Ministros de ayer”, idem.
nalidad alemana en el incidente de Ibiza, y que la
15
“El Deutschland “, ibid., p. 1. trama se hubiese estructurado con el objetivo de
16
“Álvarez del Vayo entrega una comunicación oficial
en la Sociedad de Naciones”, ibid., p. 5. 1939)”, Revista de estudios de comunicación Zer, 24,
17
“Nuestro embajador en Londres conferencia con (2019), pp. 205-228.
Eden” y “De los Ríos sale para Washington”, ABC. Dia- 20
“La caricatura del día”, ABC. Diario Republicano de
rio Republicano de Izquierdas (Madrid), 2 de junio de Izquierdas (Madrid), 2 de junio de 1937, p. 2.
1937, pp. 3-4. 21
“El bárbaro atentado al pabellón alemán fue una
18
“Ante una osada reclamación alemana, el ministro acción deliberada de los aviadores soviéticos”, ABC.
de Defensa Nacional fija la posición de España sobre Diario Ilustrado (Sevilla), 4 de junio de 1937, p. 13.
los barcos encargados del Control”, ABC. Diario Repu- 22
“Manifestaciones del capitán que mandaba la es-
blicano de Izquierdas (Madrid), 30 de mayo de 1937, cuadrilla”, ABC. Diario Republicano de Izquierdas (Ma-
p. 7. drid), 8 de junio de 1937, p. 5.
19
Aníbal Tejada fue un fotógrafo, dibujante y cartelis- 23
Según el coronel Andrés García Lacalle, el grupo de
ta argentino que desde la década de los 20 del siglo bombarderos Tupolev SB-2 eran tripulados exclusiva-
pasado trabajó en diferentes agencias de publicidad y mente por pilotos soviéticos. Tras su regreso de las
en ABC como ilustrador. La Guerra Civil, llevó a Tejada Baleares, los pilotos de los dos Katiuskas le comen-
a realizar su actividad de dibujante en ABC republi- taron que habían bombardeado al Canarias, el cual
cano, en publicaciones como No Veas, Balas Rojas o les disparó con su artillería antiaérea. Hugh, Thomas,
como responsable cultural de la 75 Brigada Mixta de Historia de la Guerra Civil…, op. cit., pp. 738-740.
la República. Fue el primer director de la sección de 24
“Los aviones republicanos fueron tiroteados al volar
dibujo y pintura de Altavoz del Frente. Su trabajo du- sobre el Deutschland”, ABC. Diario Republicano de Iz-
rante la contienda demostró su capacidad creadora quierdas (Madrid), 12 de junio de 1937, p. 4.
de propaganda de guerra para mantener la moral en 25
“El ministro de Defensa Nacional desmiente otra
el frente y en la retaguardia, además de la culturiza- falsedad de los informadores alemanes”, ABC. Dia-
ción de los combatientes. Véase: Espinosa-Etxenike, rio Republicano de Izquierdas (Madrid), 9 de junio de
F. J., “Viñetas de guerra en el ABC republicano (1936- 1937, p. 4.

olvidar el ataque contra Almería, y favorecer los internacional”, no solo sobre Almería, también,
intereses de los intervencionistas26. Tras algunas como indicaba el diario, sobre Guernica y tan-
jornadas sin noticias, el 19 de junio de 1937 el tas poblaciones bombardeadas con armamento
Ministerio de Defensa Nacional volvía a facilitar suministrado por los aliados de Franco29. Junto
otra nota27. En ella, según Febus, se confirmaba al editorial la viñeta de Tejada, caricaturizan-
la versión del Gobierno español referente al in- do, como era costumbre, a Hitler que se lava-
cidente del Deutschland, afirmando que el almi- ba las manos esperando que un Bobby ingles le
rante alemán Raeder afirmó en el entierro de los ofreciera una toalla ante la frase “lecciones de
marinos en Wilhelmahaven, que el buque ale- cinismo”. El 3 de junio de 1937 otro editorial
mán, a pesar de haber ordenado el comandante arremetía contra Alemania, comparando sus
el ataque, no se pudo realizar, ya que los aviones bombardeos sobre población española con los
republicanos lanzaron las bombas antes de pode la Gran Guerra, calificándolos de “actuación
der abrir fuego contra ellos. Igualmente, el diario terrorista” contra las ciudades leales al Gobierno
inglés News Chronicle, de sesgo antifranquista, de la República30. Al igual que jornadas anterio-
confirmaba que la argumentación alemana de res, se acompañó de la viñeta de Tejada, donde
agresión se desmontaba ante las declaraciones el ridiculizado Hitler acababa acuchillando con
efectuadas por el comandante jefe de la Marina un puñal en el que se insertaba la leyenda “Con-
alemana, afirmando “De esta forma, la cuestión trol” a una figura de mujer que personificaba la
cambia por completo, y, por tanto, las represalias No Intervención, destacando el mensaje “¡Quien
alemanas contra Almería son ahora más inexcu- mal anda, mal acaba!”31.
sables que nunca”. En esta línea justificativa, la
edición madrileña de ABC no dejó pasar la opor- El argumento de la violación de la soberanía es-
tunidad de mostrar el reconocimiento oficial pañola por parte de un estado extranjero fue
tanto de la diplomacia como de la Marina inglesa utilizado por ABC madrileño para advertir de la
por la comunicación que desde el Ministerio de posibilidad real de globalizar el conflicto, refle-
Defensa Nacional se proporcionó en relación con jando la tensión internacional en las páginas in-
la seguridad de las operaciones de los navíos en teriores del 3 de junio de 193732. Ese temor expli-
el puerto de Palma de Mallorca28. Febus alababa caba, según Fabra y la Agencia AIMA del PCE, la
la correcta actitud de la representación diplomá- petición de las instituciones francesas e inglesas
tica y naval de Gran Bretaña en contraposición al Gobierno de Valencia de no realizar actuación
de la conducta del jefe de la flota alemana que, violenta contra Alemania. El 4 de junio de 1937
ante el incidente del navío germano, “lanzó […] el ministro de Estado José Giral firmó una nota
amenazas, pronto cumplidas, mediante el alevo- oficializando la posibilidad del peligro que la
so bombardeo sobre Almería”. agresión sobre Almería podía representar para
la paz europea. El comunicado, dirigido al en-
Otro argumento recurrente utilizado por el Go- cargado de Negocios de Gran Bretaña, debía ser
bierno republicano fue la visibilización del esca- remitido al Comité para demandar a las poten-
so respeto que le otorgaron Alemania e Italia a cias democráticas lo que consideraba el Gobier-
su obligación en las labores del Control Naval, no de la República “una reclamación de justicia
lo que evidenciaba la permisibilidad de las po- por los daños gravísimos en el orden material, e
tencias democráticas hacia estos dos países. Dos incalculables en el orden moral ocasionados por
días después del bombardeo apareció un edi- una flota a la que el Comité de No Intervención
torial que destacaba esta pasividad ante lo que ha confiado el Control”33. La URSS se postuló ofi-
consideraba una “agresión oficial del fascismo cialmente cuando el diario madrileño publicó la
26
“La nota del Gobierno español-dice Pravda-desga- 29
“La agresión oficial del fascismo y el pueblo espa-
rra toda la tela de araña diplomática”, ABC. Diario Re- ñol”, ABC. Diario Republicano de Izquierdas (Madrid),
publicano de Izquierdas (Madrid), 8 de junio de 1937, 2 de junio de 1937, p. 2.
p. 9. 30
“El terrorismo en la guerra, error psicológico de Ale-
27
“La versión del Gobierno Español sobre el incidente mania”, ABC. Diario Republicano de Izquierdas (Ma-
del Deutschland ha sido confirmada plenamente por drid), 3 de junio de 1937, p. 2.
el almirante alemán Raeder”, ABC. Diario Republicano 31
“La caricatura del día”, idem.
de Izquierdas (Madrid), 20 de junio de 1937, p. 5. 32
“Sigue la condenación mundial por el bárbaro ata-
28
“La correcta actitud de España con los buques en- que de los piratas alemanes a la ciudad de Almería”,
cargados del control, reconocida y agradecida por la ibid., p. 5.
diplomacia y la Marina inglesa”, ABC. Diario Republi- 33
“Con toda serenidad y energía el Gobierno de la Re-
cano de Izquierdas (Madrid), 1 de junio de 1937, p. 7. pública protesta de la inconcebible agresión alemana

carta del embajador soviético en Gran Bretaña, te Izvestia, a criticar las concesiones a los paí-
Maisky, dirigida al presidente del Comité. En ella ses considerados agresores37. El Gobierno ruso
se denunciaba la pasividad de este, reclamando creía, según ABC madrileño, que el Comité esta-
explicaciones sobre la presencia de los buques ba permitiendo a los “países fascistas” cumplir
alemanes en zonas que no les correspondía se- sus objetivos en suelo español, favoreciendo a
gún el acuerdo del Control marítimo. Al mismo los rebeldes. Las cuatro potencias dejaban sin
tiempo exigía que la investigación sobre las ile- decisión en estos debates a la URSS, solicitando
galidades de los sublevados, atacando navíos ru- esta que, ante nuevos incidentes, se tuvieran en
sos, se llevara con la misma diligencia con la que cuenta todas las naciones integrantes del Con-
se estaba llevando el ataque a la Kriegsmarine34. trol, lo que beneficiaría a solucionar el conflicto
español y ayudaría a la paz universal. El editorial
A pesar de la tensión, Gran Bretaña y Francia se- del 13 de junio de 1937 advertía, tomando como
guían sin condenar el bombardeo a Almería. Los referencia la carta de Maisky, que la actuación
estadounidenses hacían lo mismo, buscando so- del Comité “de calmar al adversario, cuando el
luciones pacíficas con Alemania. Así lo manifestó adversario finge no querer calmarse, es táctica
Mr. Hull a De los Ríos tras su entrevista con el de derrota previa, algo que las democracias eu-
embajador del III Reich M. Dieckoff35. ropeas no comprendían”38.
Los intentos republicanos para que consideraran El texto oficial del acuerdo entre las cuatro po-
sus reivindicaciones, chocaban con los intereses tencias fue comunicado por los británicos al Go-
franceses e ingleses, que centraban sus esfuer- bierno republicano y a los sublevados después
zos en convencer y proponer medidas para re- de su firma39. La consecuencia inmediata fue la
incorporar a Italia y Alemania al Control de las vuelta al Comité y al Control de las aguas espa-
costas españolas ante el temor de su salida de- ñolas de alemanes e italianos, considerando su-
finitiva. Esto sería una constante en las siguien- ficiente garantía la cláusula que creó recelo en
tes jornadas, postulándose los británicos como Valencia y en Moscú, la consulta entre las cua-
los más activos negociadores proponiendo crear tro potencias, en caso de agresión. El ministro
zonas de seguridad en los puertos españoles, y Eden informó a la Cámara de los Comunes del
permitir a los buques del Control responder ante acuerdo, evidenciando que este evitaría nuevos
cualquier agresión, aunque ello no implicaba bombardeos de las costas españolas por buques
derecho de represalias36. A pesar de no tener de guerra extranjeros. La primera medida de
el consenso de Valencia y Salamanca, las cuatro Alemania fue el envío de una flotilla encargada
potencias aceptaron la propuesta británica, in- del relevo de los buques en aguas españolas,
cluyendo una cuestión para el reingreso de ale- iniciando de nuevo las labores de Control40. En
manes e italianos al Comité, permitir la consulta, el momento en el que se retomaba la vigilancia,
solo entre los cuatro países, en caso de una nue- la tensión se volvió a disparar ante el ataque al
va agresión, considerada esta como un ataque a Leipzig el 15 y 18 de junio de 1937. La acusación
todas ellas. ABC republicano calificó esto como de Berlín a Valencia de provocar este incidente
“una compensación para dar a Alemania satis- hubo de desmentirse inmediatamente desde el
facciones”. ministerio de Defensa Nacional41.
La posición republicana era de tibieza ante el
nuevo acuerdo que negociaban en Londres. Fue
37
“Izvestia critica duramente las negociaciones de
Londres”, ABC. Diario Republicano de Izquierdas (Ma-
el Gobierno soviético el que volvió, median-
drid), 12 de junio de 1937, p. 7.
38
“Las maneras suaves de la democracia y el gesto
contra Almería”, ABC. Diario Republicano de Izquier- airado del fascismo”, ABC. Diario Republicano de Iz-
das (Madrid), 5 de junio de 1937, pp. 5-6. quierdas (Madrid), 13 de junio de 1937, p. 2.
34
“Una importante carta del embajador Maisky al Co- 39
“Alemania e Italia vuelven a participar en el control
mité de no intervención”, ABC. Diario Republicano de generosamente”, ABC. Diario Republicano de Izquier-
Izquierdas (Madrid), 11 de junio de 1937, p. 7. das (Madrid), 17 de junio de 1937, p. 8.
35
“De los Ríos sale para Washington”, ABC. Diario Re- 40
“Alemania envía nuevos controladores”, ABC. Diario
publicano de Izquierdas (Madrid), 2 de junio de 1937, Republicano de Izquierdas (Madrid), 18 de junio de
p. 5. 1937, p. 9.
36
“El nuevo plan de control elaborado en Londres. 41
“El crucero alemán Leipzig no ha sido agredido por
Alemania e Italia obligarán pronto a elaborar otro”, ningún submarino de la República Española”, ABC.
ABC. Diario Republicano de Izquierdas (Madrid), 11 de Diario Republicano de Izquierdas (Madrid), 20 de ju-
junio de 1937, p. 8. nio de 1937, p. 5.

Esta obstinación del Gobierno británico de apa- este acuerdo y los efectos que derivaran de él46.
ciguar a Hitler llevó a una incesante ronda de vi- A esta protesta se unió el embajador soviético
sitas diplomáticas del ministro de Asuntos Exte- en Gran Bretaña, Maisky, por considerar que las
riores alemán Von Neurath a Gran Bretaña. Esto garantías del acuerdo no solo incumbían a los
implicaba que Italia y Francia quedaron relega- buques de las cuatro potencias, sino a todos los
das a un segundo plano en las negociaciones de Estados implicados en el control, rechazando
las cuatro. No obstante, el conde Ciano afirmó responsabilidades al asegurar solo a buques que
que “cualquier iniciativa y progreso diplomático ayudaban directa o indirectamente a los suble-
alemán es iniciativa y progreso de la posición ita- vados españoles47.
liana”42. Francia, por su parte tomó con ciertas
reservas las conversaciones angloalemanas al El incidente del Leipzig llevó a Alemania a exigir
ver peligrar lo que ellos consideraban “la Peque- la aplicación de las cláusulas del nuevo acuerdo
ña Entente”, lo que facilitaba el Lebensraum43. A entre las cuatro potencias. Gran Bretaña y Fran-
pesar de ello, tras el incidente del Leipzig el Pac- cia no creyeron la versión alemana, negándose
to de los Cuatro planteó estudiar el asunto con- a participar en ningún tipo de represalias como
juntamente, atendiendo a la petición alemana. proponía Berlín. El ministro de Asuntos Exterio-
Izvestia volvió a calificar esta situación como “un res Von Neurath, en nombre de Hitler, anunció al
acto de concesión a los agresores fascistas”44. Gobierno británico que, ante la falta de acuerdo,
su Gobierno se veía en la obligación de retirar
El acuerdo y la vuelta a las costas españolas de los buques de guerra del Control Naval. El em-
italianos y alemanes fueron objeto de crítica en bajador Dino Grandi, informó que el Gobierno
el editorial del 20 de junio de 193745. El texto se- italiano secundaba la propuesta alemana48. Esto
ñalaba que las negociaciones, e incluso las acti- volvía a aumentar la tensión en el Mediterráneo.
tudes, para conseguir el acuerdo, “[…] es todo un De ello se hacía eco Fabra al referenciar un co-
curso para el estudio de las nuevas maneras di- municado de DNB que anunciaba que la actitud
plomáticas engendradas al calor de la guerra de de los buques alemanes hacia la República “no
España” por la burla que suponía la resolución podría considerarse pacífica”49.
a las víctimas del pueblo español, y mirar hacia
otro lado ante el sufrimiento de los almerienses. El periodista José María Benítez Toledo, bajo
Si la nota ofrecía cesiones de seguridad a los seudónimo de Juan de Aguirre, argumentaba el
buques del control, se continuaba preguntando devenir al que abocaron los países fascistas al
“¿[…] la sangre de los españoles asesinados por Comité, ya que habían conseguido subordinar
los obuses alemanes en la capital andaluza no las iniciativas inglesas y francesas a las suyas50.
tiene ningún valor?” o “¿Quién le va a garanti- Benítez destacaba que era evidente que tan-
zar a España que el bombardeo de Almería no to Alemania como Italia operaban en las aguas
se repita?” españolas por cuenta propia, vaticinando lo
que ocurría unos años más tarde, “Lo que no
El Gobierno soviético protestó ante el resultado quisieron aprender las democracias en nuestro
del acuerdo entre las cuatro potencias, protes- drama tendrán que empezar a comprenderlo en
ta materializada en una nota a Lord Plymouth,
presidente del Comité de No Intervención, don- 46
“El Gobierno soviético protesta de los procedimien-
de Moscú declinaba toda responsabilidad sobre tos de las cuatro potencias”, ABC. Diario Republicano
de Izquierdas (Madrid), 21 de junio de 1937, p. 13.
47
“El Pacto de los Cuatro asegura la impunidad de los
buques que prestan ayuda a los rebeldes”, ABC. Dia-
42
“La opinión italiana y el viaje de Von Neurath a rio Republicano de Izquierdas (Madrid), 22 de junio
Londres”, ABC. Diario Republicano de Izquierdas (Ma- de 1937, p. 9.
drid), 18 de junio de 1937, p. 9. 48
“Fracaso el chantaje forjado sobre la calumnia del
43
“Inquietud en Francia ante las conversaciones an- Leipzig, Alemania e Italia se retiran del Comité de
gloalemanas”, ABC. Diario Republicano de Izquierdas Control y anuncian que sus buques de guerra cesan
(Madrid), 19 de junio de 1937, p. 7. en la misión que les había sido encomendada”, ABC.
44
“La vuelta de Italia y Alemania al control es una con- Diario Republicano de Izquierdas (Madrid), 24 de ju-
cesión a los agresores fascistas”, ABC. Diario Republi- nio de 1937, p. 3.
cano de Izquierdas (Madrid), 20 de junio de 1937, p. 49
“La futura actitud de Alemania”, ABC. Diario Repu-
8. blicano de Izquierdas (Madrid), 25 de junio de 1937,
45
“Una respuesta a la nota del Comité de no interven- p. 3.
ción”, ibid., p. 2. 50
“Inglaterra, Francia y el fascismo”, idem.

el suyo”. Ante esta situación el diario madrileño barcos alemanes a Almería”55. Las circunstancias
indicaba que se vivían horas de un dramatismo bélicas en el Frente del Norte preveían de una
cada vez mayor, ya que Fabra transmitía desde forma inminente la caída de Bilbao, por lo que el
la capital inglesa la advertencia que hacía el em- Gobierno de Negrín para desviar las informacio-
bajador inglés en Berlín que cualquier acto vio- nes desfavorables y buscar la implicación en el
lento de Alemania en el Mediterráneo crearía, conflicto de las potencias democráticas, utilizó el
a juicio de Londres, una situación grave51. Ingla- bombardeo de Almería para exhibir las manifes-
terra y Francia plantearon nuevas medidas para taciones internacionales por este hecho56. Estas
cubrir la retirada de las flotas alemana e italiana condolencias, en su gran mayoría de las organi-
del sistema del Control, solicitando la inclusión zaciones de izquierdas, fueron actos de protesta.
de observadores neutrales en los buques de pa- La desaprobación de las Juventudes Unificadas
trulla52. Ante las dificultades en la vigilancia de Socialistas, instaban a las Internacionales juve-
las costas españolas, Izvestia aprovechaba para niles socialista y comunista a movilizarse, según
desprestigiar a los países encargados de la ges- su discurso, contra “los asesinos nazis”. Por su
tión del Control, preguntando “¿No piensan, en parte, los comunistas franceses, los obreros de
este caso, las potencias occidentales renunciar Ivry en París, o la Internacional Socialista Obrera
por completo al control?”53. hacían llegar sus comunicados de solidaridad y
repudio a Valencia57. Las Trade Unions calificaron
Un mes después del bombardeo a Almería, la el bombardeo como un acto de guerra que viola-
ciudad volvió a ser noticia. Ante la situación de ba el Derecho Internacional y amenazaba la paz,
tensión en las costas mediterráneas españolas, agregando, según Febus, que el acto alemán fue
el ministro de Defensa Nacional denunció al en- realizado en presencia de un buque inglés, des-
cargado de Negocios de Gran Bretaña la situa- tacando la pasividad de la Royal Navy ante los
ción surgida tras recibir el parte del 27 de junio actos violentos de los buques alemanes58.
de 1937 del jefe de la Base naval de Almería. En
él se informaba del descubrimiento de unas mi- En esta coyuntura, el Gobierno de Negrín publicó
nas por parte de unos pescadores a unas diez mien ABC republicano los manifiestos de diferentes
llas de la costa, lugar donde los buques ingleses personalidades del mundo obrero e intelectual59.
ejercían la vigilancia de control. Esto demostra- Los responsables del movimiento obrero inter-
ba, según el ministro “la tendencia que tienen nacional recalcaban la inoperancia del Control
las flotas al servicio de los rebeldes de procurar internacional, pidiendo la retirada de los buques
que surjan accidentes, achacándonos a nosotros alemanes e italianos y la restitución de todos los
las causas de los mismos (sic)”54. derechos internacionales a la República. Por su
parte, los intelectuales republicanos expresaron
El Gobierno de la República hizo públicos los su repulsa por el ataque alemán, condenando
apoyos y condenas recibidas por el bombar- la agresión, y llamando a la conciencia universal
deo almeriense. Entre las primeras muestras de
aliento destacó la de Lluis Companys, presiden- 55
“El señor Companys expresa al Gobierno de la Re-
te de la Generalitat Catalana, al presidente del pública la indignación de Cataluña por el brutal bom-
Consejo de Ministros manifestando la “indigna- bardeo de Almería”, ABC. Diario Republicano de Iz-
quierdas (Madrid), 5 de junio de 1937, p. 6.
ción del pueblo catalán por el brutal ataque de 56
“El salvaje bombardeo de Almería provoca en el
mundo civilizado un movimiento de repulsa y conde-
nación contra los métodos nazifascistas”, ABC. Diario
Republicano de Izquierdas (Madrid), 2 de junio de
51
“Una advertencia inglesa al fascismo descontrola- 1937, p. 3.
do”, ABC. Diario Republicano de Izquierdas (Madrid), 57
“El bárbaro acto de piratería alemana contra Alme-
26 de junio de 1937, p. 3. ría sigue en el primer plano de las graves preocupa-
52
“Francia e Inglaterra se esfuerzan en mantener el ciones europeas”, ABC. Diario Republicano de Izquier-
control”, ibid., p. 4. das (Madrid), 4 de junio de 1937, p. 5.
53
“Ultimo acto de la farsa de la no intervención”, ABC. 58
“Las Trade Unions denuncia el bombardeo de Alme-
Diario Republicano de Izquierdas (Madrid), 29 de ju- ría.”, ABC. Diario Republicano de Izquierdas (Madrid),
nio de 1937, p. 4. 8 de junio de 1937, p. 8.
54
“El ministro de Defensa Nacional denuncia ante el 59
“La situación de profunda inquietud internacional
Gobierno ingles las argucias de que se valen los fas- creada por el bárbaro bombardeo de Almería es obje-
cistas para provocar incidentes internacionales a la to de estudio y comentario por parte de todos los paí-
República Española”, ABC. Diario Republicano de Iz- ses civilizados”, ABC. Diario Republicano de Izquierdas
quierdas (Madrid), 30 de junio de 1937, p. 6. (Madrid), 6 de junio de 1937, p. 6.

por el ataque a un régimen libremente elegido nados del Gobierno del Frente Popular, sino
por el pueblo español. Destaca la condena del sus más fieles defensores […]”
periodista Roberto Castrovido, quien apelaba a
la grandeza histórica de Alemania, y no asumía Las últimas condolencias y apoyos recibidos en
el uso bárbaro del “honor caballeresco” utiliza- la ciudad se gestionaron mediante el Gobierno
do por una potencia encargada por el Comité de Civil, y fueron del comandante y comisario polí-
la vigilancia de las costas españolas60. Cruz Roja tico del Jaime I, del comandante del destructor
Española se unió a las protestas, solicitando a la Lazaga y del Comité Provincial de la Federación
Sociedad de Naciones que pusiera fin al bom- Socialista de Gijón64.
bardeo de ciudades abiertas que producían gran
3. ABC DE SEVILLA
cantidad de víctimas inocentes entre las pobla-
ciones civiles61. Unos días más tarde, la indigna- Entre las grandes finalidades propagandísticas
ción del poeta chileno Pablo Neruda fue plasma- alemanas destacó la lucha contra el comunis-
do en el sobrecogedor poema Un plato para el mo, objetivo que asumió el Departamento An-
obispo. tikomintern, controlado por Goebbels desde su
creación en 1934. Esta cuestión permitió a Ale-
Las víctimas y la propia ciudad almeriense fue-
mania erigirse como la gran defensora ante los
ron casi olvidadas informativamente en el des-
movimientos comunistas en el exterior, lo que
pliegue republicano. Tras el primer comunicado
se plasmó de forma contundente en 1936 con el
a Valencia, el 2 de junio de 1937, Febus ofrecía
apoyo de Hitler a Franco en una empresa bélica
una reseña en la que se indicaba la situación de
que fue planteada en términos de lucha contra el
los damnificados de las fuerzas de seguridad de
bolchevismo. Ese afán controlador se potenció a
la República, indicando la vuelta de la cotidiani-
partir de 1937 por parte de la propaganda nazi
dad a la ciudad tras el regreso de la actividad del
en la España franquista desde la embajada del
comercio y la industria62. El artículo felicitaba, en
III Reich en Salamanca, a la cabeza de la cual se
nombre del comandante militar, a los almerien-
encontraba Wilhelm von Faupel, con un aumen-
ses por su actitud con los heridos. Desde la co-
to cuantitativo de noticias apoyado por el recién
nocida “División Líster” se manifestó la condena
creado Departamento de Prensa de la Embajada.
“contra la cobarde agresión a Almería por la es-
Fundamental para ello fue la labor de Franz von
cuadra alemana”, siendo el propio Enrique Líster,
Goss, antiguo director de la Agencia DNB y con-
comandante-jefe de la 11ª División, el encargado
sejero de prensa de la embajada, dirigiendo la
de la arenga en el mitin de protesta63. También
propaganda nazi encargada desde el Ministerio
intervino “El poeta campesino, camarada Her-
de Propaganda alemán mediante la Deutsches
nández” que, tras recitar unos versos, transmitió
Nachrichtenbüro. Tras el bombardeo de Alme-
al presidente del Consejo de Ministros, que:
ría, la prioridad del rotativo sevillano se centró,
“Ante el criminal Bombardeo de que ha sido al igual que el Gobierno de Valencia, en justifi-
objeto la ciudad de Almería por unidades car, acusando a la República y defendiendo a sus
de la escuadra alemana, nosotros, los que aliados con el objetivo de preparar la excusa del
combatimos en las trincheras, nos sentimos ataque sobre Almería. Para intentar conseguir
hoy, más que nunca, no solo fieles subordi- esta meta, fue clave la Agencia DNB, facilitando
informaciones al ABC sevillano, mayoritariamen-
te provenientes de la prensa europea.
El 31 de mayo de 1937 se oficiaba el funeral de

los muertos del Deutschland en la colonia de Gi-
60
“El honor alemán se limpia con sangre inocente”,
braltar. Las exequias se concelebraron en North
ABC. Diario Republicano de Izquierdas (Madrid), 11 de
junio de 1937, p. 5. Front Cementery con honores militares por la
61
“Cruz Roja Española.”, ABC. Diario Republicano de Royal Navy y buques de diferentes países, inclui-
Izquierdas (Madrid), 4 de junio de 1937, p. 4. dos los estadounidenses, a los féretros cubiertos
62
“Detalle de algunas víctimas del bombardeo. El co- por banderas gamadas65. El 29 de junio de 1937,
mandante militar felicita a los vecinos por su abnega- apareció en la portada del ABC de Sevilla la fo-
ción al socorrer a los heridos”, ABC. Diario Republica-
no de Izquierdas (Madrid), 2 de junio de 1937, p. 3. 64
“Telegramas de condolencia por el criminal bom-
63
“La 11ª. División ante el atentado contra Almería”, bardeo alemán.”, ibid., p. 5.
ABC. Diario Republicano de Izquierdas (Madrid), 4 de 65
“El entierro de las víctimas en Gibraltar”, ABC. Dia-
junio de 1937, p. 4. rio Ilustrado (Sevilla), 1 de junio de 1937, p. 6.

tografía del entierro en la colonia inglesa de las dad, tan solo recogió la posición del III Reich, por
“víctimas del bombardeo de los aviones rojos”66. la que declaraba oficialmente finalizada la acción
represiva, mediante el bombardeo realizado al
El lenguaje propagandístico, habitual en los regí- puerto de Almería, por la agresión al acorazado
menes totalitarios al construir la realidad, fue el Deutschland70.
utilizado para relatar el 1 de junio de 1937, según
el diario sevillano, “la infame agresión” al acora- Las numerosas manifestaciones espontáneas de
zado alemán en misión internacional de paz en- duelo en Alemania eran destacadas en las co-
comendada por el Control67. La noticia señalaba lumnas del ABC franquista. Las protestas y duelo
que “Aviones bolchevistas bombardearon, sin espontáneo también jalonaron la España fran-
que para ello hubiera ninguna razón, un buque quista. Este fervor hacia la “nación amiga alema-
de guerra alemán anclado en el litoral español”, na y su pabellón glorioso” se realizaban en las
argumentando que “este nuevo y criminal aten- ciudades controladas por los sublevados, como
tado contra un navío alemán, obliga al gobierno el caso de Pamplona, dedicando el diario sevilla-
del Reich a tomar medidas que comunicará in- no su portada del 5 de junio de 1937 a plasmar
mediatamente al Comité de No Intervención”. como “El pueblo, con las autoridades a la cabeza,
se dirige a los consulados alemán e italiano para
Los titulares ofrecidos por el Diario Ilustrado protestar por el criminal atentado rojo”. Esta re-
denotaban la línea informativa que seguirían afirmación de afiliación con Alemania e Italia se
las siguientes jornadas68: “Cómo se perpetró la subrayó el 2 de junio de 1937 mediante un re-
agresión”, “El funeral por las víctimas”, “Indig- cuadro propagandístico destacado, poniendo de
nación en Alemania y petición de represalias”, relieve que:
“Reacción de Alemania contra el crimen de los
rojos”, “La hora de escoger entre la barbarie o la “Las manifestaciones populares que ayer se
civilización”, o “La indignación del pueblo italia- celebraron en Sevilla, y en otras ciudades de
no ante la cobarde agresión”. las provincias liberadas, para testimoniar a
Alemania e Italia la protesta contra las agre-
El 2 de junio de 1937 apareció la primera refe- siones de que los rojos han hecho víctimas a
rencia al bombardeo almeriense, recogiendo la los pabellones gloriosos de aquellos países,
comunicación oficial de la Kriegsmarine. Berlín son el exponente más inequívoco de la so-
consideraba lidaridad inquebrantable entre España y las
dos naciones que figuran a la cabeza de la
“justa e inevitable el ataque del pueblo ale-
lucha universal contra el marxismo corrosi-
mán para hacer comprender que no es po-
vo e infame”71.
sible limitarse una vez más a presentar una
nota de protesta ante el Comité de No In- Otra de las manifestaciones destacadas fue la de
tervención”69. Salamanca del día 31 de mayo de 1937 en apoyo
a los aliados franquistas, en la que a la cabeza
Se resaltaba el carácter militar y fortificado del
de la manifestación iban las banderas de España,
puerto almeriense, afirmando que las baterías
de Falange Española Tradicionalista, de la JONS
de costa “habían sido destruidas”. La propagan-
y de Alemania e Italia72. Millán Astray y Eugenio
da franquista omitió los detalles del número de
Montes arengaron a los manifestantes, reafir-
muertos y heridos o los daños causados a la ciu-
mando el alegato favorable a sus aliados. Esta
demostración popular desembocó en el palacio
66
“Gibraltar. Del atentado contra el Deutschland”,
ABC. Diario Ilustrado (Sevilla), 29 junio de 1937, p. 1.
del Generalísimo, donde Franco finalizó su sofla-
67
“En aguas de Ibiza, en donde se hallaba en función ma patriótica con “¡Viva Alemania!, ¡Viva Italia!,
internacional de control, es bombardeado por la avia- ¡Arriba España!”. Esa devoción por sus aliados se
ción marxista, de orden del Gobierno de Valencia, el volvió a resaltar el 3 de junio de 1937 con otro
acorazado alemán Deutschland, en el que perecen recuadro destacado, insistiendo en que:
veintitrés tripulantes y sufren graves heridas un cen-
tenar más de ellos”, ibid., p. 5. 70
“Se declara terminada la acción represiva por la
68
ABC. Diario Ilustrado (Sevilla), ibid., pp. 6-7-9. agresión al Deutschland”, ibid., p. 10.
69
“La escuadra alemana como réplica al ataque de la 71
Ibid., p. 13.
aviación marxista contra el acorazado Deutschland, 72
“En Salamanca se formó una imponente manifes-
bombardea el puerto militar fortificado de Almería”, tación demostrativa de la solidaridad de España con
ABC. Diario Ilustrado (Sevilla), 2 de junio de 1937, p. Alemania e Italia”, ABC. Diario Ilustrado (Sevilla), 1 de
9. junio de 1937, pp. 9-10.

“Las agresiones criminales del Gobierno ante la falta de acuerdo en el seno del Comité. Al
rojo contra los pabellones alemán e italiano mismo tiempo, Eden, según noticias de DNB faci-
son un nuevo motivo de solidaridad senti- litadas por New Chronicle, dudaba en plantear la
mental entrañable de la España auténtica cuestión de la seguridad del Control solo a Italia
con las gloriosas naciones que, al ser vícti- y Alemania, algo con lo que estaría conforme el
mas de los crímenes marxistas, aducen ante Gobierno republicano, que preferiría, según la
el mundo un título más de civilización y cul- agencia germana, un Control internacional79.
tura.
La confrontación mundial comenzó a planear
España, en estos instantes, reitera a Italia y tras el ataque al buque alemán según indicaba
a Alemania su adhesión y simpatía más fer- ABC sevillano, ya que indicaba que la responsabi-
vorosas”73. lidad en la creciente tensión internacional le co-
rrespondía al Gobierno republicano ante un ata-
Inmediatamente Portugal comenzó su acción di- que inesperado que había sido repetido sobre
plomática ante el Comité, ya que el Gobierno de buques del Control80. La Agencia DNB añadía un
Salazar consideraba que en vista de los “inciden- nuevo elemento, el temor existente en los am-
tes” en Ibiza y Almería se habían desequilibrado bientes políticos ingleses y franceses ante la reti-
las fuerzas en favor de una de las partes belige- rada germano-italiana del Control81. En este afán
rantes, la República, y los Estados del Comité de acaparar todas las informaciones favorables a
debían declararse solidarios a favor de Alemania los sublevados de los diarios europeos, DNB pu-
e Italia retirando del Control sus buques74. Los blicó una nota destacada que recogía la opinión
británicos pusieron también a funcionar su en- del Daily Express, el gran defensor británico de la
granaje diplomático, ellos con el objetivo de ha- política de apaciguamiento, que manifestaba la
cer regresar a italianos y a alemanes al Control75. posibilidad que la agresión contra el Deutschland
Alemania e Italia aprovecharon esta coyuntura hubiese tenido lugar para sembrar la discordia
para proponer crear zonas de seguridad, reco- entre las potencias, lo que era secundado por el
gidas con un nuevo acuerdo76. Estas propuestas, diario conservador Morning Post82.
facilitadas por el corresponsal del laborista Daily
Herald, estaban siendo estudiadas por los britá- El 3 de junio de 1937 falleció en accidente de
nicos para establecer un Comité compuesto de aviación el general Emilio Mola. El día siguiente
cuatro almirantazgos, británico, francés, alemán ABC de Sevilla exaltó la figura del “director” en
e italiano, lo que facilitaría una coordinación y ocho páginas monográficas, incluyendo el rela-
cooperación más estrecha de las cuatro flotas en to del accidente83. A pesar de ser Mola el centro
el Control. Esto no agradó a la URSS, como apun- informativo en las jornadas siguientes del diario
taba el Morning Post77. En esta línea, Lord Cam- sevillano, las denuncias de los sublevados hacia
brorne planteaba en la Cámara tres zonas de se- la República de lo que consideraban un “bárbaro
guridad para los buques del Control, llegando a atentado al pabellón alemán” continuaban, re-
un común acuerdo las cuatro potencias en caso cogiendo las acusaciones del semanario fascista
de nuevos incidentes78. Los sublevados alababan Gringoire, afirmando que el ataque al Deuts-
las iniciativas negociadoras del ministro Eden chland se realizó bajo las órdenes del coronel
ruso Warrily Tigroff tras recibir un mensaje de
73
ABC. Diario Ilustrado (Sevilla), 1 de junio de 1937,
Moscú y actuar independientemente de las au-
p. 9.
74
“Portugal envió al Comité de No Intervención una
nota de protesta por el criminal atentado rojo al bu- 79
“Estudiando medidas de garantía. El señor Eden es-
que alemán Deutschland. En la cual también estable- tudia un memorial”, ibid., p. 13.
ce reservas para el futuro”, ABC. Diario Ilustrado (Se- 80
“Von Ribbentropp entrega el comunicado de su Go-
villa), 3 de junio de 1937, p. 9. bierno”, ABC. Diario Ilustrado (Sevilla), 1 de junio de
75
“El Gobierno inglés buscará una solución satisfacto- 1937, p. 11.
ria a los incidentes de Ibiza y Almería”, ibid., pp. 12- 81
“Buscando fórmulas a la gravísima situación crea-
13. da por los marxistas españoles”, ABC. Diario Ilustrado
76
“Las reivindicaciones de las garantías de los Gobier- (Sevilla), 2 de junio de 1937, p. 12.
nos alemán e italiano”, ibid., p. 9. 82
“La opinión inglesa censura la criminal conducta de
77
“El bárbaro atentado al pabellón alemán fue una los rojos”, ABC. Diario Ilustrado (Sevilla), 3 de junio de
acción deliberada de los aviadores soviéticos”, ABC. 1937, p. 11.
Diario Ilustrado (Sevilla), 4 de junio de 1937, p. 13. 83
ABC, Diario Ilustrado (Sevilla), 4 de junio de 1937,
78
“Propuestas británicas”, ibid., p. 14. pp. 3-10.

toridades militares españolas84. Una semana más precipitar una guerra en Europa, algo de lo que
tarde, Radio Vizcaya desmentía que los pilotos se felicitaba el diario sevillano88.
del bombardeo del Deutschland fueran rusos85.
La noticia se transcribía en el diario franquista, Las negociaciones para el regreso de alemanes
ofreciendo el nombre del teniente coronel Hi- e italianos al Control se centraron en las cuatro
dalgo de Cisneros, hombre de confianza de Inda- potencias navales89. Los británicos continuaban
lecio Prieto, como el responsable de la acción y cediendo, y propusieron una “Convención prácti-
de intentar provocar un conflicto internacional, ca”, recogiendo los puntos acordados, comunica-
lo que presuponía, según el diario, la imputación dos a los dos contendientes en España para dar
del ministro Prieto en el ataque al Deutschland. garantías de no repetir incidentes con buques
de las cuatro potencias. DNB informó que no
El periodista Cesar González Ruano, desde su lí- se esperaba el regreso al Control de los aliados
nea laudatoria a la política nazi, el 5 de junio de franquistas hasta que no recibieran respuestas
1937 fue el encargado de imputar a la URSS una de republicanos y sublevados, lo que indetermi-
provocación perfectamente premeditada sobre naba la fecha de la nueva reunión del Comité90.
lo que él calificó como “repugnante y criminal La comunicación a Valencia y Salamanca incluía
bombardeo del acorazado alemán”. González la advertencia que un ataque efectuado contra
justificó el bombardeo de Almería como una res- los navíos del Control sería considerado como un
puesta con las armas ante una provocación al pa- hecho contra todos los navíos de las potencias
bellón alemán cuando la voluntad italogermana encargadas de la fiscalización, lo que implicaba
era la de la paz, por ello justificada la retirada del que las medidas a tomar serían conjuntas91. El
Control de los que consideraba “los dos países primer test de esta cláusula se produjo ante el
salvadores de occidente”86. bombardeo del vapor italiano Madda el 15 de
junio de 1937, a lo que Deutsche Allgemeine Zei-
DNB seguía facilitando crónicas, principalmente tung advertía que el aviso que los bolchevistas
de la prensa británica referentes al Control Na- recibieron con el bombardeo de Almería parecía
val. El 8 de junio de 1937 se informaba de la ad- no haber tenido un efecto muy duradero92.
hesión de Italia y Alemania a la propuesta inglesa
de protección a los navíos del Control, incluyen- A pesar del entendimiento entre ingleses y fran-
do estos la reserva del derecho de represalias sin ceses, las desavenencias comenzaron a surgir
consulta previa87. ABC de Sevilla se hacía eco de desde el Almirantazgo británico que rechazó las
la información de The Times al respecto, que se- gestiones francesas de una vigilancia mixta con
ñalaba que, a pesar de la insistencia alemana del observadores neutrales en los barcos del Con-
derecho de represalia individual ante una agre- trol, según recogían los diarios ingleses. Parte de
sión, el Gobierno británico pedía al alemán que la prensa francesa señalaba de forma muy su-
se limitara al derecho natural, lo que no impli- cinta, el malestar por el rehúso británico de sus
caba contraer acuerdo que supusiera represalias propuestas93.
como el bombardeo de Almería. La información
finalizaba afirmando que la política inglesa tenía Ante el inminente acuerdo sobre las garantías de
como objetivo persuadir a Alemania e Italia a re- seguridad de los buques del Control que anun-
anudar su colaboración en el servicio de vigilan- 88
“Sobre la adopción de las contrapropuestas alema-
cia. Esta predisposición negociadora llevó, según nas e italianas”, idem.
DNB, al Gobierno británico a reconocer que las 89
“Las conversaciones internacionales como conse-
contrapropuestas alemanas e italianas eran jus- cuencia del criminal bombardeo al acorazado alemán
tificadas al producirse situaciones que podrían Deutschland”, ABC. Diario Ilustrado (Sevilla), 9 de ju-
nio de 1937, p. 17.
90
“Las dos partes en lucha en España deben dar ga-
84
“El bárbaro atentado al pabellón alemán fue una rantía”, ABC. Diario Ilustrado (Sevilla), 13 de junio de
acción deliberada de los aviadores soviéticos”, ibid., 1937, p. 18.
p. 13. 91
“El texto de la nota dirigida a las dos partes que
85
“Los pilotos que bombardearon al Deutschland, se- luchan en España”, ABC. Diario Ilustrado (Sevilla), 16
gún las radios rojas, no eran rusos”, ABC. Diario Ilus- de junio de 1937, p. 14.
trado (Sevilla), 11 de junio de 1937, pp. 7-8. 92
“Valencia ya está avisada”, ABC. Diario Ilustrado (Se-
86
“El momento difícil”, ABC. Diario Ilustrado (Sevilla), villa), 19 de junio de 1937, p. 14.
5 de junio de 1937, pp. 3-4. 93
“Se anuncia un acuerdo entre las cuatro potencias
87
“Comentarios de la prensa inglesa”, ABC. Diario Ilus- navales”, ABC. Diario Ilustrado (Sevilla), 9 de junio de
trado (Sevilla), 8 de junio de 1937, p. 13. 1937, p. 17.

ciaba el diario sevillano, este, recogiendo infor- del Leipzig. Desde ABC de Sevilla se informó de
maciones de la prensa italiana, se asombraba del las opiniones de la prensa alemana suministrada
reconocimiento por parte de Londres a los suble- por DNB. La unanimidad era total, exigiendo al
vados la calidad de parte beligerante, lo que no Control su posición sobre si tolerar los métodos,
había sucedido hasta ese momento94. Por su par- indicados como “criminales” por las publicacio-
te, la Agencia de Telégrafos de la Unión Soviética nes germanas, sin tomar las correspondientes
TASS informó sobre las gestiones del embajador medidas99. Esto llevó a Eden a reunirse con los
soviético en Londres, Maisky, ante el Comité para embajadores de Italia, Francia y Alemania, en-
justificar el ataque al crucero alemán, ya que este tregándoles un informe del incidente redactado
se encontraba en operaciones que no estaban desde Berlín para ser estudiado. Los ingleses pi-
al servicio del Control. La nota remitía además dieron una investigación que aclarase el hecho,
las quejas de Moscú ante la situación produci- negando la propuesta alemana de realizar una
da al dejar a la diplomacia soviética al margen demostración de fuerza marítima ante el Gobier-
de la toma de decisiones del Comité95. La Press no republicano ondeando los pabellones de las
Association escribía que esta nota preveía una cuatro potencias100. Esta situación provocó la ne-
actitud que causaría dificultades para sacar ade- gativa del ministro alemán von Neurath a viajar
lante las propuestas británicas ante el Comité96. a Londres para negociar sobre varias cuestiones
La respuesta a las negociaciones de Maisky vino de la contienda española.
de la Agencia italiana Stefani acusando a Moscú
de torpedear la colaboración entre las potencias Los sublevados informaron al Gobierno británico
occidentales desde el mismo comienzo de las ne- que desde Salamanca se garantizaba la seguridad
gociaciones del Control Naval. La Agencia italia- de todos los barcos y funcionarios al servicio del
na indicaba el fracaso del intento de la URSS de Comité, declarando la aceptación de las zonas de
entrar en el nuevo acuerdo tras el ataque de los seguridad en los puertos bajo su control, ante la
navíos alemanes e italianos para internacionali- indecisión de Valencia101. DNB recogía la opinión
zar la vigilancia, advirtiendo de la política de pro- desde Berlín y Roma, en la que Alemania tenía,
vocación y perturbación que realizaba Moscú, según la convención de 12 de junio de 1937, el
por lo que se debía estar alerta ante la ruptura derecho internacional de actuar a su voluntad,
de la tranquilidad en Europa97. una actitud lógica según los aliados franquistas,
ya que lo contrario sería signo de debilidad102.
Todo esto no impidió que el 16 de junio de 1937 Esto llevó el 23 de junio de 1937 a von Ribben-
Alemania e Italia comunicaran su vuelta a la Co- tropp, embajador alemán en Londres, a presen-
misión de No Intervención incluso antes de recitar una nota ante el Foreing Office notificando
bir respuesta de los dos contendientes españo- que el Gobierno del III Reich no estaba dispuesto
les para retomar la colaboración en el servicio a exponer más tiempo sus buques encargados
de fiscalización. La notificación a la Cámara de de una misión internacional a los ejercicios de
los Comunes por Eden fue destacado por ABC tiro de los bolchevistas españoles, por ello de-
sevillano, informando de la importancia de esta cidían retirarse definitivamente del servicio del
noticia en Inglaterra, al destacar la satisfacción Control103. El mismo día, la Agencia Stefani hacía
que expresaban The Times, Daily Telegraph o
Morning Post98. 99
“El crucero Leipzig fue atacado por un submarino
rojo español que disparo contra él cuatro torpedos”,
El 20 de junio de 1937 la armonía entre las cua- ABC. Diario Ilustrado (Sevilla), 20 de junio de 1937,
tro potencias se volvió a quebrar con el incidente p. 14.
100
“En la reunión de las cuatro potencias para tratar
94
“Londres tuvo que reconocer beligerancia a los na- de la agresión al crucero alemán Leipzig por un sub-
cionales”, ABC. Diario Ilustrado (Sevilla), 10 de junio marino rojo, no se llegó a un acuerdo”, ABC. Diario
de 1937, p. 14. Ilustrado (Sevilla), 20 de junio de 1937, p. 14.
95
“Un embajador soviético que pretende dar explica- 101
“El Generalísimo hace saber al Gobierno británico
ciones al bombardeo del Deutschland”, idem. que él garantizó, y garantizará siempre la seguridad
96
“La nota soviética no encontró buena acogida”, ABC. de todos los barcos al servicio del control”, ABC. Dia-
Diario Ilustrado (Sevilla), 11 de junio de 1937, p. 7. rio Ilustrado (Sevilla), 23 de junio de 1937, p. 17.
97
“La última maniobra de los soviets”, ABC. Diario 102
“Alemania tiene derecho a obrar a su voluntad” y
Ilustrado (Sevilla), 12 de junio de 1937, p. 8. “Es menester mostrar a los rojos de España una mano
98
“El regreso de Alemania e Italia al Comité de no In- fuerte”, idem.
tervención. La visita de von Neurath a Londres”, ABC. 103
“El embajador de Alemania entregó la nota de su
Diario Ilustrado (Sevilla), 18 de junio de 1937, p. 14. Gobierno separándose del control”, ABC. Diario Ilus-

público la nota oficial del Gobierno italiano que Roma se destacaba sobre el discurso del presi-
anunciaba su retirada definitiva del sistema de dente del Consejo inglés la actitud conciliado-
Control ante la falta de solidaridad de este or- ra de Alemania, sin descartar la posibilidad de
ganismo con Alemania104. Ante esta nueva situa- nuevas provocaciones llevadas a efecto por “los
ción, Alemania e Italia abogaban por la libertad rojos españoles”109. El sentir desde Alemania, a
de acción y el pleno derecho de defensa de sus pesar del reconocimiento británico de la indigna-
unidades navales en el caso de nuevas agresio- ción por el ataque al Deutschland, se centró en
nes, consideradas por ellos “criminales”105. la censura realizada por Chamberlain a las repre-
salias ejercidas contra Almería al ser interpelado
El 25 de junio de 1937 el Primer Ministro britá- por un diputado de la izquierda110.
nico compareció en la Cámara de los Comunes
para dar explicaciones sobre la situación gene- El 28 de junio de 1937 el Führer pronunció un
rada dentro del Comité. Chamberlain justificaba discurso en la Asamblea de la región MainFran-
la creación de la No Intervención para localizar conia111. La Agencia DNB afirmaba que “este
la Guerra Civil, por ello Inglaterra seguiría con discurso era la posición del III Reich con vistas a
su política para salvaguardar la paz106. Su discur- aclarar los círculos oficiales de las otras poten-
so defendió que mientras durara la Guerra Civil cias”. Hitler realizó un alegato que, repasando
existía posibilidad de que ocurrieran inciden- la coyuntura del último mes, arremetía contra
tes que pudieran involucrar a las potencias ex- la solidaridad internacional al no actuar cuando
tranjeras, siendo la retirada de la Kriegsmarine fueron atacados el Deutschland y el Leipzig. Ante
una consecuencia de uno de estos incidentes, esta situación, el Canciller alemán reafirmó que
concretamente el bombardeo del Deutschland. hicieron lo que debían hacer lealmente, y la na-
Chamberlain finalizó su intervención apelando al ción alemana no quería volver por segunda vez
pueblo inglés y a los miembros del Parlamento afrontar el peligro de las últimas semanas, pero
evitar pronunciarse sobre esta cuestión sin ha- que “Gracias a Dios, somos hoy bastante fuertes
ber previamente previsto las consecuencias de para podernos proteger”. Ese mismo día, ABC de
sus palabras. Seguidamente intervino el minis- Sevilla recogía de los diarios ingleses las cuestio-
tro Eden. Su discurso, recogido por DNB, trató la nes que se negociaban en el seno del Comité112.
cuestión de la venta de armamento a las dos par- Daily Telegraph comentaba los movimientos que
tes en el conflicto español, algo que implicaba, se preveían para que Francia e Inglaterra se hi-
según la Agencia germana, a la Unión Soviética, cieran cargo ellas solas de las zonas del Control
por lo que no fue denunciado por esta y eviden- dejadas por los aliados de los sublevados. Mien-
ciaba el beneficio del Gobierno republicano en tras, The Times ponía el acento en la nota de
la adquisición de material bélico. Con este ar- protesta que elevó Portugal a Eden ante la impo-
gumento, Eden, finalizó su alocución afirmando sición de observadores ingleses en las fronteras
que ahora cada país que venda armas a España hispanoportuguesas, ya que esto rompía el equi-
debería proteger sus propios navíos107. librio de este servicio a favor de “los bolchevistas
españoles”.
Las reacciones italianas y alemanas a las decla-
raciones en la Cámara de los Comunes fueron La propuesta anglofrancesa de hacerse con el
inmediatas. DNB recogía el sentir en los círculos Control en solitario fue tomada con reservas en
políticos italianos, lamentando que las declara- el Comité, ya que los representantes de Alema-
ciones de Chamberlain, animada de los mejores nia e Italia consideraban que la base para ejecu-
deseos, hubiesen llegado tan tarde108. Desde tar el Control imparcialmente se encontraba en
el equilibrio113. El posible fracaso que vislumbra-
trado (Sevilla), 24 de junio de 1937, p. 9.
104
“Comunicado oficial del Gobierno italiano”, idem. 109
“La actitud conciliadora de Alemania”, idem.
105
“Después de la separación de Alemania e Italia del 110
“La primera impresión en Berlín de los discursos de
sistema de Control”, ABC. Diario Ilustrado (Sevilla), 25 Chamberlain y Eden”, ibid., pp. 13-14.
de junio de 1937, p. 11. 111
“Un importante discurso del canciller alemán Adol-
106
“El presidente del Gobierno inglés habló en la Cá- fo Hitler”, ABC. Diario Ilustrado (Sevilla), 29 de junio
mara sobre la guerra de España”, ABC. Diario Ilustra- de 1937, p. 11.
do (Sevilla), 26 de junio de 1937, p. 11. 112
“Apreciaciones sobre la próxima reunión del Comi-
107
“Eden averiguó ya que Rusia suministró material té de no Intervención”, ibid., pp. 11-12.
de guerra a los rojos”, idem. 113
“Lo que declararon los representantes de Alemania
108
“Lo que opinan los medios políticos italianos”, ABC. e Italia”, ABC. Diario Ilustrado (Sevilla), 30 de junio de
Diario Ilustrado (Sevilla), 27 de junio de 1937, p. 13. 1937, p. 10.

ba la Agencia inglesa Press Association del plan 1937, apoyándonos en la bibliografía reseñada
anglofrancés llevó a esta a manifestar que todo buscando objetividad.
el sistema de la No Intervención podría derrum-
barse, esperando con desconfianza las respues- La disimilitud originó antagonismo periodístico,
tas de Alemania e Italia. y este se tradujo en una disimetría cuantitativa
y cualitativa en la extensión informativa sobre el
CONCLUSIONES bombardeo de Almería y su causa, el ataque al
Deutschland. Atendiendo a esta cuestión y a la
La Guerra Civil Española demostró la importan- descompensación en la paginación en cada una
cia de la propaganda como un arma más en el de las ediciones, unas 25 páginas de media dia-
desarrollo y desenlace del conflicto. En este pro- rias en ABC sevillano y unas 13 páginas de media
ceso, la utilización de la prensa fue un vehículo diarias en ABC madrileño en el periodo analiza-
imprescindible para su aplicación. Sin duda, el do, podemos destacar los siguientes datos:
diario ABC, con sus dos ediciones, cumplió ese
papel ideológico a la perfección, librando otra Las dos ediciones de ABC dedicaron el mayor des-
batalla para difundir sus mensajes al enemigo pliegue informativo relacionado con el objeto de
y retaguardia y, en el caso analizado, principal- estudio, de forma directa o indirecta, durante los
mente al extranjero. Además, los mensajes de dos primeros días de junio de 1937. El rotativo
ambas ediciones tuvieron otro destinatario, el madrileño comenzó con siete páginas el primer
propio frente. El objetivo era el de mantener la día y cinco páginas el segundo día, descendiendo
moral alta entre sus ejércitos. Esta circunstancia con una media de dos páginas y media diarias
se dio de forma más profusa en ABC de Madrid hasta final de junio, insertando, de forma habi-
que en ABC de Sevilla, informando en las trin- tual, las noticias en las páginas iniciales de cada
cheras con el reparto de ejemplares entre los uno de los números. Desde Sevilla, la informa-
soldados, donde la proporción de contenidos ción fue constante esos dos primeros días con
relacionados con lo que sucedía en los frentes seis páginas cada uno, encajando la gran mayo-
de batalla con su homónimo sevillano era mayor, ría de las noticias a partir de las páginas centra-
incluso en muchos casos haciendo protagonista les del diario. El descenso de noticias directas
al Ejército Republicano con sus logros y en nu- con el hecho y su causa disminuyó con el avance
merosos reportajes gráficos. de las jornadas en ABC de Sevilla, siendo la baja-
da brusca de informaciones coincidente tras la
Los principales argumentos propagandísticos fa- muerte del general Mola a partir del 3 de junio
cilitados por el análisis de las dos ediciones de de 1937. A partir de este momento fue constante
ABC utilizados por cada uno de los bandos desde la información en una página diaria hasta final de
finales de mayo a finales de junio de 1937 en el junio. El número de noticias dedicadas al hecho
caso que nos ocupa, fueron por parte de ABC de analizado no se vio influenciado por el descen-
Madrid los defendidos por el Gobierno republi- so de páginas, ya que las crónicas se adaptaron,
cano, esto es, justificación, visibilización de una reduciendo su contenido. En este sentido, des-
relación de fuerzas desfavorable a la República tacamos que, durante el mes de junio de 1937,
en el ámbito internacional o la publicidad en aparecieron tres portadas completas en el dia-
busca de la internacionalización del conflicto. Por rio sevillano, haciendo referencias al entierro de
su parte, en ABC de Sevilla, se destacó la lucha las víctimas del navío alemán, mientras el diario
contra el comunismo, las muestras de afiliación madrileño solo utilizó media portada al inicio de
con Alemania e Italia y la búsqueda de reequili- mes para justificar el ataque a este. A pesar de
brios en el ámbito diplomático. Estos argumen- ello, ABC de Madrid utilizó en los primeros días
tos fueron sometidos a diferentes estrategias de de junio en su propuesta propagandística dos
tratamiento de la información, que se pusieron editoriales y tres ilustraciones de Aníbal Tejada
al servicio de los discursos políticos y militares para denunciar la actuación alemana y la pasivi-
para presentarlos ante el contexto internacional, dad de las potencias democráticas.
proporcionando una considerable disparidad de
contenido en las dos ediciones de ABC. No obs- El bombardeo sobre la ciudad almeriense como
tante, con el objetivo de contextualizar y poder tal no se redactó en ABC de Madrid hasta la cuar-
entender en toda su dimensión el hecho expues- ta página de las crónicas del 1 de junio de 1937
to, se ha optado por analizar las páginas de ABC con ocho noticias. Durante las semanas posterio-
de Madrid el 30 y 31 de mayo y 1 de junio de res, el diario madrileño usó el titular del bombar-
deo para centrarse en recoger en sus páginas las

innumerables comunicaciones de repulsa y pro- las simpatías hacia la nación amiga, y justificar
testa de diferentes instituciones afines a la Repu- su papel como defensora de la paz. Por ello, la
blica, la frenética actividad diplomática ante los estructura propagandística del bando rebelde,
organismos internacionales y Gobiernos demo- ante el intenso movimiento internacional, fue
cráticos, y los constantes comunicados guberna- utilizada para favorecer esta cuestión, ofrecien-
mentales, dedicando una media de siete noticias do DNB la información de los diarios italianos,
diarias. Entre estas sobresalieron las “notas” gu- alemanes, y principalmente de los ingleses más
bernamentales, tanto para el interior como para proclives al “apaciguamiento”. En contraposi-
el exterior, por sus titulares y por la extensión de ción, la poca cobertura de la prensa francesa
ellas, dejando relegadas a un segundo plano las fue evidente, debido al recelo francés ante las
demás informaciones adjuntas. Las referencias aspiraciones germanas. A pesar de este desplie-
al bombardeo sobre Almería en ABC de Sevilla gue, en numerosas ocasiones, las informaciones
no llegaron hasta el 2 de junio de 1937, dedi- o los resúmenes de las noticias más destacadas
cando seis pequeñas noticias en dos páginas y facilitadas por la agencia DNB al ABC franquista
siempre como un justificante al ataque del navío fueron objeto de una selección por parte de la
alemán realizado por los aviones de la República. redacción del diario que supuso la eliminación
El ataque al Deutschland, y todo lo que giró alre- de párrafos enteros considerados de poco inte-
dedor, como las víctimas, los apoyos a la nación rés para los lectores o intranscendentes para los
amiga, las acusaciones hacia el “gobierno rojo” o intereses de los sublevados.
las repercusiones internacionales, fue la priori-
dad para el bando sublevado, recibiendo la ma- Por su parte, la línea editorial del ABC republi-
yor cobertura informativa, con unas 48 noticias. cano durante el periodo analizado se caracteri-
El ataque al navío alemán fue utilizado como zó por su control gubernamental, dirigiendo sus
noticia secundaria por la República, haciendo propuestas propagandísticas a dar mucha impor-
ínfimas alusiones directas a él, pero sí como el tancia a los símbolos y personalidades de lucha
justificante para denunciar internacionalmente contra el fascismo. Por ello, las noticias ofrecidas
la intervención “fascista” en el conflicto español. desde el rotativo madrileño fueron suministra-
das en su totalidad por las agencias controladas
La importancia internacional del “incidente” en por el Gobierno, Febus y Fabra, por el propio Go-
su conjunto aumentó con el paso de los días, lo bierno y por las agencias de los apoyos guberna-
que se manifestó en el amplio despliegue infor- mentales republicanos, como el caso de la comu-
mativo que realizaron las dos ediciones, con una nista A.I.M.A. Uno de los grandes problemas con
media de tres noticias diarias, comprendiendo el que se encontró la propaganda republicana
que las relaciones dentro del Control Naval en- fue el alto índice de analfabetismo de la pobla-
tre las potencias totalitarias y las potencias de- ción en general y de los lectores del periódico
mocráticas eran fundamentales en el desenlace en particular. Este problema de analfabetismo
para ambos contendientes. Por ello, se recogió llevó a ABC republicano a introducir elementos
el corpus de las negociaciones dentro del Comité gráficos prácticamente a diario durante más de
de No Intervención, las negociaciones fuera de dos años dentro del período bélico, incluido el
este, y la doble retirada italogermana del Con- periodo analizado en este trabajo. Para ello ABC
trol, asumiendo que el desenlace del conflicto de Madrid dio a conocer trabajos (muchos de
podría depender de la gran tensión que se ge- ellos publicados anteriormente en otros periódi-
neró en el Mediterráneo. Así, esta tensión fue cos y rescatados a modo de hemeroteca) de una
manejada tanto por sublevados como por repu- extensa nómina de dibujantes, entre los cuales
blicanos para intentar atraer el interés y las sim- destacó Aníbal Tejada, ilustrador de cabecera del
patías, para mostrarse ambos como víctimas, lo periódico madrileño. Tejada aprovechó su sec-
que les proporcionaba razones para apoyar sus ción propia “Caricatura del día” para reflejar la
intenciones de internacionalizar el conflicto. actualidad y transmitir los mensajes oficiales con
el objetivo de ridiculizar e insultar a los perso-
En este sentido, la edición sevillana se encontra- najes del fascismo, tanto a nivel nacional como
ba bastante influenciada por el control propa- internacional.
gandístico nazi, encontrando que el 92% de las
informaciones aparecidas se facilitaron desde la
Agencia Alemana de Noticias DNB, con la tarea
de influir en la opinión pública a favor de la Ale-
mania nacionalsocialista, conseguir aumentar

LAS COOPERATIVAS INDUSTRIALES TEXTILES: UNA

RESPUESTA OBRERA DURANTE LA AUTARQUÍA
INDUSTRIAL TEXTILE COOPERATIVES: A WORKERS

RESPONSE DURING AUTARCHY
Luis Carlos San José Belda*

*
Universidad de Alicante, España. E-mail: [email protected]
Recibido: 22 marzo 2020 / Revisado: 21 junio 2020 / Aceptado: 10 octubre 2020 / Publicado: 15 octubre 2020
Resumen: El final de la autarquía condujo a una INTRODUCCIÓN
E
crisis industrial de las empresas textiles tradicio-
nales en Alcoy durante el año 1964. Este hecho l propósito del trabajo es dar a conocer al
tuvo como consecuencia la pérdida de empleo público las consecuencias en la industria
para los trabajadores. La aparición de las coope- local de la autarquía que condujo en un de-
rativas industriales regidas por los trabajadores terminado periodo a una crisis laboral que tuvo
de las antiguas industrias textiles fue la respues- su precedente inmediato en los antecedentes de
ta a la crisis del trabajo. Una experiencia que en la Guerra Civil. Cómo se reproducen las causas
la ciudad había tenido como precedente en la pese a darse en distintas etapas históricas que
unificación total de la industria fabril durante la comprenden la colectivización en la Guerra Civil
Guerra Civil. Pues bien, la investigación incide en y las sociedades cooperativas en la autarquía.
la evolución de la industria textil tradicional que
Una vez el régimen del General Franco derrotó
desembocó en una crisis laboral y la respuesta
la II República activó el modelo económico au-
por parte de los trabajadores.
tárquico. En este caso aportaremos una serie de
Palabras clave: Autarquía, cooperativismo, fran- pruebas para describir cómo el mismo régimen
quismo, industria textil, sindicalismo que aniquiló cualquier idea de colectividad en-
tre la masa de la clase trabajadora la activará
Abstract: The end of autarchy led to an industrial posteriormente para evitar un paro masivo en
crisis in Alcoy in 1964. The consequence of this la ciudad como consecuencia del mismo modelo
economic event was the emergence of industrial económico.
cooperatives run by cooperative workers in res-
ponse to the labour crisis. An experience which Este modelo se basó en la práctica empresarial
in the city had had a precedent in the total unifi- de los años 30 creado tras la falsa sensación de
cation of the local manufacturing industry during racionalidad y producción que se iniciará con la
the Civil War. Well, the research looks at the evo- autarquía, pero como contrapartida generará la
lution of the traditional textile industry that led muerte de la industria tradicional de la ciudad, la
to a labour crisis and how the workers faced and crisis del trabajo y la reaparición del movimiento
resolved the situation. cooperativo como respuesta viable y contrasta-
da frente la crisis y salvaguardar la paz social del
Keywords: Autarchy, cooperativism, francoism, régimen.
textile industry, trade unionism
El objetivo del presente artículo es ofrecer nue-
vos datos que permitan conocer la realidad de
este tipo de empresas desde el punto de vista
personal de un cooperativista que vivió en pri-

Las cooperativas industriales textiles Luis Carlos San José Belda
mera persona la evolución del movimiento coo- una sola entidad industrial. En segundo lugar,
perativo en su ciudad. una vez reunidos y analizados todos los datos
económicos y financieros, se decidió reorganizar
1. UNIFICACIÓN TOTAL DE LA INDUSTRIA, las fábricas no operativas con la misión de seguir
1936-1939 produciendo. El hecho de ubicarse geográfica-
mente alejados de los frentes de batalla dió la
Los meses previos a la Guerra Civil en nuestro
oportunidad, al encontrarse en la retaguardia re-
país estuvieron marcados localmente por una
publicana, de producir productos textiles para el
crisis industrial sin precedentes fundamentada
ejército del Frente Popular.
por una producción que no atendía a la realidad
del mercado nacional que provocó una subida Más adelante, durante el desarrollo de la Guerra
de salarios que no lograba cubrir las necesidades Civil fue un organismo encargado de organizar
básicas de la mayoría de los trabajadores. las empresas deficitarias, redirigir sus produccio-
nes y obtener las materias primas. Esto se alteró
La declaración del golpe de estado por parte del
a medida que el frente de guerra retrocedió y se
bando sublevado propició un empeoramiento
perdieron todos los mercados por el avance del
en las condiciones laborales de los trabajadores
frente nacional y el hundimiento de la República.
que arrastraban una parálisis en el sector textil
desde principios del 1936. Sin una respuesta a En este sentido, también se contó con la respues-
la falta de pagos que superaban varias semanas ta de los agentes económicos de la ciudad tales
los trabajadores trasladaron estos hechos a sus como el Ayuntamiento y el Consejo Revolucio-
representantes sindicales. El Comité de Fábrica nario de Defensa, que resolvieron durante este
puso en conocimiento estos hechos en distintas periodo la inactividad y falta de decisión de los
asambleas. primeros meses de la Guerra Civil. Un ejemplo
claro lo podemos apreciar en que el fenómeno
Con tales hechos el Sindicato de la Industria Tex-
de colectivización se produjo antes de los Decre-
til y Fabril1 acometió un estudio de la situación
tos de intervención y confiscación de industrias2
de las empresas. Una vez se analizó la quiebra
estos fueron sustituidos por las Normas de apli-
de muchas de ellas, el Sindicato acordó median-
cación del 7 de marzo3. La actuación local llegó
te votación en Asamblea General, intervenir
hasta conocimiento del propio Ministro de In-
las industrias textiles junto con la papelera y la
dustria, Joan Peiró, que felicitó por la forma y la
metalúrgica. La intervención afectó a totalidad
efectividad con la que el Sindicato de la Industria
de las fábricas textiles estableciendo un orden
Textil había llevado a cabo las reformas.
controlado por la Comisión Técnica de Control
Textil, que pasó ser denominada Consejo Técnico “La valoración que hicimos de la interven-
Administrativo. ción de lo intervenido, en el momento de la
incautación, nos daba veinte ocho millones
La cuestión fue estudiada detenidamente por el
de pesetas […] fue cuando nos dirigimos al
Sindicato, el cual llevó a cabo una investigación
Ministro de Industria Joan Peiró a ver si nos
para analizar de qué forma cambiar el rumbo de
podíamos quedar con la industria como una
los acontecimientos. En este proceso, las accio-
cooperativa textil”4.
nes acometidas por el Consejo Técnico de Admi-
nistración estuvieron sujetas a la aplicación de Cabe destacar que las actuaciones del Sindicato
medidas paliativas para hacer funcionar a una no fueron respaldadas por el gobierno, puesto
industria que estaba en peligro de colapso desde
finales de 1935.
2
Decreto de incautación e intervenciones en la in-
La actuación del Sindicato se dividió en dos eta- dustria 23 de febrero de 1937. Establece el tipo de
pas. En primer lugar, se decidió por mayoría ab- intervención por parte del Estado o en el caso de las
soluta en la asamblea responder a la inactividad empresas incautadas el Estado pasaba a ser un órga-
y paro generalizado de la industria, incautando no de gestión.
3
Orden del 7 de marzo de 1937 por la que se estable-
las distintas fábricas; éstas, se unificaron bajo
ce la obligatoriedad del pago de sus contribuciones
industriales y el mecanismo de intervenciones de las
1
Sindicato de la Industria Textil y Fabril: fue el mayor industrias civiles.
organismo sindical que ostento la máxima represen- 4
Gómez C. “La industria estuvo bajo el control obre-
tación de los trabajadores constituidos en su mayoría ro entre 1936 y 1939”, El País, 20 de noviembre de
por militantes de la CNT. 1979.

Luis Carlos San José Belda Las cooperativas industriales textiles
que dichas acciones se realizaron antes de la dadora cuyos componentes fueron los antiguos
aprobación de los decretos de colectivización; es empresarios que más tarde crearon la Asocia-
decir, se situaron al margen de la legalidad repu- ción Patronal de la Industria Textil y Fabril7. La
blicana. Posteriormente, con el giro de la política finalidad de esta Comisión liquidadora en tér-
del Gobierno de Negrín, dichas acciones deriva- minos locales estuvo basada en la recopilación
das de la incautación se anularon, exceptuando de balances-inventarios correspondientes a la
las industrias en poder estatal cuando fueran de situación previa a la Guerra Civil.
interés estratégico. Sin Embargo, este giro políti-
co no afectó localmente atribuciones del Sindi- En Alcoy las principales actuaciones se desa-
cato. rrollaron desde la Asociación Patronal8 de una
forma lenta, debido a la complejidad de la uni-
2. FINAL DE LA GUERRA E INICIO DE LA AU- ficación puesto que el estudio analizaba la inte-
TARQUIA, 1939-1943 gridad de las 129 empresas textiles. La postura
es bastante esclarecedora sobre los efectos que
Al finalizar la Guerra Civil buscando la unidad produjo la colectivización de los medios de pro-
financiera se aprobó la Ley de Desbloqueo bus- ducción de la industria textil. En tal caso es inte-
cando la devolución de los valores de las cuen- resante rescatar la reflexión del secretario de la
tas bloqueadas de las razones sociales. De igual Comisión Técnico-Administrativa de la industria
modo por petición de la misma Asociación Pa- textil transcurridos 40 años después.
tronal se realizó el pago de los alquileres de los
dueños durante la Guerra Civil, así como los jor- […] en el 39 se les devolvió con los almace-
nales por el trabajo de actividades en sus propias nes llenos y a pleno rendimiento. En la dé-
empresas. cada de los cuarenta, entre la autarquía y la
demanda por la II Guerra Mundial, los em-
El Sindicato de la Industria Textil y Fabril fue di- presarios alcoyanos hicieron su agosto, en
suelto por una nueva ley dando paso a nuevo tanto que muchos trabajadores volvieron
Sindicato que queda regulado por la Ley de Ba- a realizar jornadas de hasta catorce horas
ses de la Organización Sindical de 6 de diciembre para pagar los alimentos, que eran escasos
de 19405. En el contexto de una nueva política y estaban de precio por las nubes9.
laboral, el régimen aglutinó la representación de
los trabajadores e industriales en la sección so- Podemos indicar que las últimas gestiones de la
cial y económica respectivamente. Comisión Liquidadora finalizaron en 1943, con la
devolución de las cantidades de las cuentas co-
El Decreto del 3 de mayo de 1938 se creó con rrientes anteriores al verano de 1936.
el objeto de llevar a cabo la descolectivización
de todas las empresas que habían sido naciona- La Guerra Civil rompió con las esperanzas de ob-
lizadas intervenidas o incautadas. El organismo tener una mejor representación de los trabaja-
encargado de llevarla a cabo fue la Comisión de dores porque toda la legislación previa basada
Incorporación Industrial y Mercantil6 Nº3 dirigi- en la suma de derechos adquiridos en la II Repú-
da desde la Capitanía General de Valencia, cuyo
propósito fue reorganizar y orientar la actividad 7
La Asociación Patronal de la Industria Textil y Fabril
industrial que había sido destruida o inutilizada se creó al finalizar la Guerra Civil. Esta certificó las
según sus planteamientos. Para este fin se nom- cuentas personales, maquinarias y materias primas,
bró desde la CIIM se creó una Comisión Liqui- propias de la actividad comercial de las 129 empre-
sas que habían sido colectivizadas por el Sindicato
5
Ley de Bases de la Organización Sindical del 6 de de la Industria Textil y Fabril durante septiembre de
diciembre de 1940. Destacamos de esta ley su mani- 1936. Finalizado la descolectivización de la industria
fiesto: “[…] ahora una nueva expresión orientadora en Alcoy pasó a denominarse Textil Alcoyana S. A. en
y concreta las bases políticas del sistema sindicalis- noviembre de 1939.
ta proclamada en los veintiséis puntos de la Falange 8
Las competencias de la Asociación Patronal de la In-
Española Tradicionalista de las JONS y su Fuero del dustria Textil y Géneros de Puntos fueron absorbidas
Trabajo, recogiendo nuestra tradición gremial […] con por las directrices emanadas del Sindicato Vertical.
aquel principio de los veintiséis puntos que se conci- Como consecuencia de estos hechos los empresarios
be España, en lo económico, como un gigantesco Sin- alcoyanos perdieron toda capacidad de decisión futu-
dicato de productores, la sindicalización viene a ser la ra ante las negociaciones empresariales.
forma política de la economía entera de España […]”. 9
Gómez, C., “La industria estuvo bajo el control obre-
6
Comisión Incorporación Industrial y Mercantil ro entre 1936 y 1939”, El País, 20 de diciembre 1979,
(CIIM), regulada por el Decreto 13 junio de 1938. p. 54.

blica fueron suprimidos por la creación del Fuero Sindicatos, en los cuales serán encuadrados
de Trabajo. El régimen militar de Franco que se todos los factores de la economía por ramas
instauró después de la derrota de la II República de producción o servicios”15.
en la Guerra Civil supuso una involución del pro-
greso constitucional del siglo XX en materia de La Ley de Bases de Organización Sindical de 6 de
libertades y reformas laborales que fueron abor- diciembre de 194016artículo bajo la dirección de
dadas durante el gobierno de Frente Popular. la Falange Española Tradicionalista de la JONS las
Centrales Nacionales Sindicales. La Central Na-
En este sentido mediante la aprobación de la Ley cional Sindicalista17 redujo a la representación
13 de septiembre de 193610 prohibió los parti- teórica de los productores18 aunque la misión
dos o agrupaciones políticas del Frente Popular, principal no era resolver las contradicciones de
funcionarios y empleados de empresas públicas. planteamientos de las ordenanzas y reglamentos
La Ley de 23 de septiembre de 193911 disolvió de trabajo; era más bien un organismo de masas
todas las organizaciones sindicales de la etapa que aplicaba las decisiones de la administración
del Frente Popular e incautaba todos sus bienes general del estado como afirma en este artículo
pasando a la titularidad del Estado. el Ministro Secretario General del Movimiento.
La Ley de Responsabilidades Políticas12 de 9 de “Hemos creado el Sindicalismo nacional

febrero de 1939 represalió con la máxima fuerza para aunar los afanes e ímpetus de todos:
de la que disponía el Estado a los agentes socia- del capital y el trabajo, de la empresa y la
les políticos o funcionarios que habían estado producción en servicio de España para ele-
cumpliendo la legalidad republicana. Del mismo var el nivel de vida. Añadió que otro de los
modo prohibió las asociaciones profesionales en tópicos de la propaganda extranjera, inclu-
su lucha por encuadrar bajo el control Sindical so entre los no comunistas, es la supuesta
tanto a empresarios como trabajadores. falta de libertad para constituir asociacio-
nes sindicales en nuestra Patria olvidando
El Fuero del Trabajo13 Inspirado en la Carta de los males, huelgas, lock out, atentados que
Lavoro 14 careció de objetivos de aplicación ne- perturbaban la vida nacional”19.
cesaria de los convenios laborales y normativas
reales encaminadas a resolver los verdaderos Con la anulación de los jurados Mixtos los tra-
problemas de trabajadores como salarios, despi- bajadores sólo podían recurrir a la Magistratura
dos o representación sindical. La Ley de Unidad de Trabajo para recurrir a problemas o conflictos
Sindical de 26 de enero de 1940 se creó bajo los laborales que fueron escasos dentro de esta dé-
principios siguientes; cada de los años 40. Esto fue debido en parte
a la obra represora ejercida a representantes de
“Tres son los principios que inspiran la Or- partidos y organizaciones obreras que estuvie-
ganización NacionalSindicalista prevista por
el Fuero del Trabajo, reflejo fiel de la orga-
nización política del Nuevo Estado a saber; 15
BOE del 31 de enero de 1940, Ley de 26 de ene-
Unidad, Totalidad y Jerarquía. Habrá pues, ro sobre Unidad Sindical. p. 772. Art.- II a partir de la
según precepto del Fuero, un solo orden de publicación de esta ley, aquellas asociaciones creadas
para defender o representar total o parcialmente in-
10
Boletín Oficial de la Junta de Defensa Nacional de tereses económicos o de clases, lleven o no la deno-
España del 16 de septiembre de 1936. minación de Sindicato, Asociaciones obreras, Patro-
11
BOE del 12 de octubre de 1939 sobre bienes de los nales, Gremiales, etcétera, quedaran incorporadas a
antiguos Sindicatos Marxistas y anarquistas. la Organización Sindical del Movimiento. Art III.- Des-
12
BOE de 9 de febrero de 1939. Capítulo I; Dispo- de este momento dicha asociaciones se entenderán
siciones Generales, Capítulo II De las causas de res- sometidas en su actuación a la disciplina del movi-
ponsabilidad y de las circunstancias que la modifican, miento, bajo la Inspección de la Delegación nacional
Capítulo III De las sanciones y de las reglas para su de Sindicatos.
aplicación. 16
BOE del 7 de diciembre 1940, Ley de Bases de la
13
BOE del 10 de marzo de 1938, por el cual queda Organización Sindical. p. 8.388.
aprobado el Fuero del Trabajo. Núm. 505, p. 6.178. 17
Central Nacional Sindical (CNS).
14
La Carta Lavoro del 21 de abril 1927 creada por el 18
Productores: el nombre por el cual se conocían a
Estado totalitario fascista italiano estableció el orde- los trabajadores por la Organización Sindical Españo-
namiento entre las asociaciones profesionales y em- la.
presariales. También establecía las garantías de los 19
“Primer Congreso Sindical de la Industria Valencia-
trabajadores y ordenada los convenios colectivos. na”, ABC, 12 de diciembre de 1951, p. 20.

ron en las labores de dirección en el Gobierno hilar más productivas, rápidas que necesitaban
del Frente Popular menos trabajadores. Al igual que los telares me-
cánicos, que no fueron sustituidos por telares
El Sindicato Nacional Textil20 reunía al empre- automáticos. Fue la consecuencia de la falta de
sariado sujetos a los mecanismos propios del modernización durante el periodo del crecimien-
Sindicato Vertical, OSE21, Dirección General de to económico de la década de los años cuarenta
Industria de Alicante Valencia y Castellón y la y los cincuenta.
Delegación Nacional de Sindicatos22 estos fueron
los conductos oficiales para presentarse a distin- Un modelo empresarial sin cambios en la es-
tos concursos para producir productos textiles. tructura de gestión y dirección hasta la etapa
Como ejemplo una vez ganado estos concursos23 de apertura de la dictadura o el desarrollismo.
las empresas fabricaban capotes y mantas desti- Las empresas estuvieron sujetas a cumplimien-
nados a cumplir el contrato con Ejército del Aire tos muy rígidos por el propio diseño de las ins-
y el parque de intendencia de la Guardia Civil. tituciones franquistas. Un claro ejemplo es que
las licencias para la compra de materias primas
La etapa del primer franquismo que correspon- debían de ser autorizadas por el Ministerio de
de cronológicamente entre 1939 hasta 1957 se Industria y la Oficina de la Lana esta regulaba las
caracterizó en la década de los cuarenta por res- materias primas mediante la concesión de cu-
tricciones energéticas como carbón, carburos, pos24 y además controlaba la producción en fun-
fuerza eléctrica necesaria para las maquinarias ción de la región25 en la que se ubicaba el empre-
y las existencias en materias primas y la caída sario. Este en cualquier caso debía de presentar
de la demanda del mercado nacional. La conse- una relación de maquinaria detallado bien de las
cuencia de la pérdida de los mercados durante la hilaturas de carda o los husos de las selfactinas26
Guerra Civil y la configuración del nuevo modelo o continuas.
económico imposibilitó su crecimiento por aten-
der al dirigismo estatal basado en decisiones ar- El régimen cambiará de postura económica im-
bitrarias que no atendían necesariamente a las plicándose en la búsqueda de apertura interna-
necesidades del mercado sino más bien a cubrir cional desde finales del 50 se producirá la entra-
las necesidades políticas que tenían su eje de ac- da en los organismos oficiales. El acceso al FMI27.
tuación a través del Sindicato. 24
Para poder optar a la adjudicación de repartos de
En el ámbito local el hundimiento económico materia primas (lana y algodón) los fabricantes de-
inducido por el sistema autárquico se tradujo bían de estar inscritos en la sección de lana o algodón
dependientes de la Delegación Nacional de Sindica-
a largo plazo en una falta de modernización de
tos. En cualquier caso, las adjudicaciones se ejercían
la industria textil. La escasa rentabilidad indu- a través de la dirección general de Industria o bien
cida por maquinarias como las selfactinas que Oficina de la Lana ambas supeditadas a las decisiones
no se sustituyeron por máquinas continuas de del Ministerio de Industria y Comercio.
25
Las adjudicaciones de materias primas o cupos se
20
Sindicato Nacional Textil. La estructura se dividía distribuían a través de 15 regiones, éstas se les asig-
en secciones. La Sección económica se componía de naba un porcentaje de este modo se buscaba equi-
sectores específicos del Algodón; Lana, Seda, Fibras parar a todas las ciudades que los componían. Las 15
Diversas, Fibras Artificiales. fibras de recuperación; en regiones correspondían a; Catalunya, Alcoy, Andalu-
1954 se incluyó el de regenerados textiles que reunía cía, Castellón, Zaragoza, Murcia-Albacete, Rioja Nor-
una gran cantidad de empresas alcoyanas, Confec- te, Pradoluengo, Zamora- Ortigosa, Palencia- Alar
ción y Comercio. A su vez estos se integraban por gru- Astudillo, Béjar, Mallorca, Madrid-Varios.
pos económicos específicos tales como fabricantes de 26
Máquina discontinua de hilar usado en la sección
medias, calcetines, de géneros de punto. de hilatura de las fábricas textiles tradicionales fue
21
Siglas referidas a la Organización Sindical Española. sustituida progresivamente en Alcoy a partir de los
22
Delegación Nacional de Sindicatos; ejercía la repre- años 1960 por máquinas continuas de hilar más pre-
sentación política control supervisión y vigilancia de cisas y con una producción mucho más rápida.
los órganos como las CNS. Del mismo modo dictami- 27
Fondo Monetario internacional, “fue creado me-
nada las actividades socioeconómicas tales como la diante un tratado internacional en 1945 para contri-
I Asamblea Económica Nacional de la Industria Textil buir al estímulo del buen funcionamiento de la eco-
del año 1954. nomía mundial […]. El FMI es la institución central del
23
BOE del 17 de julio de 1945, Núm. 200. Condicio- sistema monetario internacional, es decir, el sistema
nes para presentarse a los concursos de intendencia de pagos internacionales y tipos de cambio de las mo-
del Ejército del Aire, Servicio de alojamiento de tropa nedas nacionales que permite la actividad económica
y concurso de material. entre los países. Sus fines son evitar las crisis en el

y la aceptación de los acuerdos aduaneros y pales empresarios durante el transcurso de 1963

comerciales conocidos como GATT28 generará la con una marcada falta de innovación que se tra-
puesta en marcha del Plan de Estabilización que dujo en una falta de criterios competitivos para
supondrá el abandono del sistema de interven- competir en un nuevo mercado nacional que in-
ción estatal, adoptando la liberalización del mer- auguró la misma época de los 60.
cado, produciendo una entrada de inversión de
capitales extranjeros, turismo, la modernización La respuesta al problema sociolaboral generado
y transformación de los sectores productivos del en la última década residió en que, si se hubiera
país además de un aumento del consumo por la llevado a cabo la reconversión necesaria, hubiera
subida de poder adquisitivo de los españoles. comportado un alto coste para la modernización
industrial de la misma forma que la amortización
3. EL PUNTO DE NO RETORNO Y LA VUELTA de las plantillas comportaba un alto número de
AL COOPERATIVISMO, 1962 despidos en un corto plazo generando un pro-
blema social que solo se resolvió a finales de los
El Sindicato Nacional29 Textil a través de su je- setenta con la reconversión de la industria local.
fatura nacional decidió unificar los reglamen-
tos nacionales del trabajo en marzo de 1957 no El punto de no retorno debemos ubicarlo duran-
obstante, la unificación de conjunto de leyes te el año 1962-1963 cuando se produjo una ba-
laborales siguió sin ofrecer una respuesta a los jada de pedidos31 en las industrias textiles. Este
problemas que se generaron con el crecimiento hecho motivó que los empresarios redujeran la
económico de los 50. producción y por extensión la reducción de la
jornada laboral. Sin embargo, la falta de produc-
La aprobación del Convenio colectivo de 196230 ción durante 1964 supuso el cierre inmediato de
tuvo unas consecuencias directas para los princi- las empresas alegando que no podían atender a
los pagos.
sistema, alentando a los países a adoptar medidas de
política económica bien fundadas; como su nombre La clave de esta crisis fue la consecuencia de la
indica, la institución es también un fondo al que los aplicación del Convenio Colectivo del textil de
países miembros que necesiten financiamiento tem-
poral pueden recurrir para superar los problemas de máximo que habían alcanzado, lo más veteranos, de-
balanza de pagos”. Clift, J., Guía del FMI. ¿Qué es el jando este concepto congelado y abolido para el futu-
Fondo Monetario Internacional?, Washington DC: ro. Ello obedecía al criterio obsesivo de suprimir la di-
FMI, Servicios de Publicaciones, 2001, p. 7. ferencia entre los costes entre las empresas antiguas
28
Acuerdos generales sobre acuerdos comerciales y y las de reciente creación. 2.-Concesión de una paga
aduaneros. anual de 10 días con motivo de las fiestas patronales
29
Las funciones del Sindicato Nacional se recogen de Alcoy, reduciendo las de 18 de Julio y Navidad a
en Ley de Bases de la Organización Sindical de 6 de 12 días, con diferencia positiva de 4 días a favor de
diciembre de 1940, Ley de Constitución de Sindica- los trabajadores 3.- Garantizar con cargo a la empresa
tos, Art. 18, “Primero. - proponer al gobierno las or- los subsidios de baja por enfermedad, hasta el 75%
denanzas necesarias para la disciplina y fomento de del salario y en caso de accidente hasta el 100%. 4.-Se
la producción, conservación y distribución de los pro- creó un subsidio de 20 días a favor de la viuda del pro-
ductos, así como la regulación de los precios de los ductor fallecido y tres gratificaciones extraordinarias.
mismos en las diversas fases del proceso productivo. 5.- Se creó el plus Convenio de un 100% sobre el sala-
Dictar los Reglamentos y tomar las medidas condu- rio de cotización, que para evitar trabajos de cálculo y
centes a estos fines”, “Art Quinto. – Promover, dirigir suprimir desigualdades, fue más tarde sustituido por
y, en su caso desempeñar las actividades cooperati- la cantidad de 300 pesetas mensuales fijas […]”. Terol
vas de producción relacionadas con la rama corres- Aznar, R., La Textil Alcoyana, S.A. Historia de una eta-
pondiente”, “Art Sexto. – Organizar la aportación eco- pa de la Industria Textil de Alcoy (1940-1998), Alcoy,
nómica de las empresas recaerá necesariamente en Agrupación Empresarial Textil Alcoyana, (s.f.), pp. 60-
los militantes de Falange Española Tradicionalista de 61.
las JONS”, “Art. Veinte. – La acción de los Sindicatos en 31
Correspondencia de los años 1963 y 1964 entre los
las esferas Nacional, Provincial, y Local se desarrollará empresarios; Miguel Payá y Cía, Bernabeu y Cía, San-
en la disciplina del movimiento y bajo las jerarquías tiago Blanes Santos, Hilados y Tejidos Plá, José Soler y
de los Mandos sindicales, correspondientes de Falan- Cía, Enrique Miralles, Vicente Blanes e Hilaturas Pas-
ge Tradicionalista de las JONS”. tor aludiendo a las existencias fabricadas y pedidos
30
Convenio Colectivo 1962. De los que extraemos los y las soluciones a adoptar para la subsistencia de la
puntos más importantes: “1.- Reconocer a todos los industria Textil Alcoyana. “Correspondencia”, Agrupa-
trabajadores, prescindiendo de la fecha de ingreso en ción Empresarial Textil Alcoyana, Documentación sin
la empresa, la antigüedad general del 38%, que era el clasificar, Alcoy, 1962-1964.

1964 que sustituyó el Reglamento Nacional del de 22.600.000 millones de pesetas con la misión
Trabajo de marzo de 1957. El anterior reglamento de modernizar la producción o atender a las ne-
pospuso todas las reformas que necesariamente cesidades de los cooperativistas.
tuvo que cumplir el Convenio. Este acuerdo en
un principio fue positivo para los trabajadores En este punto de la investigación cabe destacar
porque concedían unas verdaderas mejoras. No las reflexiones del presidente de la Cooperativa
obstante, supuso la muerte a la Industria tradi- Industrial Textil Fábrica d’Escaló sobre su idea
cional del textil. Por estas razones las medidas sobre el movimiento cooperativo dentro del ám-
del Convenio se caracterizaron no diferenciar bito local, según afirma: Palacios Antonio.
la antigüedad del trabajador en la empresa, el
“Son menos vulnerables en épocas de crisis
pago de anual de festivos locales a cambio de
económica y de trabajo. Son más solidarias
la reducción de las fiestas nacionales, un seguro
para desenvolver y perfeccionar la educa-
de baja por enfermedad y subsidio temporal de
ción social que todo hombre cooperativista
viudedad.
necesita en la colaboración que se practica,
En la localidad las repercusiones fueron vistas ayudándose mutuamente. Deben tener la
como la concesión de unos derechos que las experiencia necesaria en la administración,
anteriores reglamentaciones no atendieron. No en la técnica y en sus actividades económi-
obstante, el beneficio empresarial fue insuficien- cas”34.
te para destinarlos a una mejora sustancial en los
El artículo hace referencia en exclusiva al sector
trabajadores este hecho junto el diseño empre-
del textil y su teórica estructuración;
sarial que atendía al mercado nacional sujeto a
la autarquía se tradujo en La falta de previsión, a) Para una mejor ampliación y perfección
reestructuración y adaptación a la apertura eco- técnico-administrativa.
nómica fueron los hechos que motivaron el paro
generalizado llevando a la quiebra económica. b) Acoplamientos de mandos intermedios
y de obreros especializados
Durante el transcurso de 1964, se reactivó el
cooperativismo en Alcoy como única solución al c) Ajustar las plantillas entre los asociados.
cierre de las empresas textiles. Los empresarios d) Unificar rendimientos y precios
que en un primer momento redujeron turnos de
trabajo, jornadas o cesaron toda actividad, vie- e) Conseguir mejores inversiones en am-
ron en el traspaso de la actividad mercantil en pliaciones y modernización de utillaje con
sociedades cooperativas la forma de salvar la vistas a futuro de estabilización
situación. Las sociedades cooperativas estuvie-
f) Las relaciones comerciales con otras coo-
ron sujetas La Ley de Cooperativas del 2 enero
perativas del campo, de viviendas y consu-
194232. y contraladas por las decisiones de la
mo resultarían más rentables.
Organización Sindical Española a su vez vincula-
da a la política económica del régimen. Por otra En este sentido el documento nos muestras unas
parte, los antiguos trabajadores renunciaron al de las ideas del pensamiento cooperativista. Tra-
cobro de sus trabajos con el objeto de invertir ta de manera concisa la gran importancia de la
sus ahorros en el traspaso de las empresas para gestión de los trabajadores de la sociedad y la
crear sociedades cooperativas como forma de importancia en la dirección de estas. Otra apor-
salir de la crisis y seguir trabajando en su sector. tación interesante es la referencia a la aplicación
de los Planes de Desarrollo en especial en lo re-
Esta vuelta al cooperativismo fue una acción pro-
movida desde la Obra de Cooperación y apoya-
das financieramente pro el Fondo Nacional de 1970, p. 13; “Préstamo de cuatro millones de pesetas
Protección del Trabajo que concedió a las nuevas a una cooperativa textil. Para la compra de maquina-
cooperativas industrial unos créditos33 por valor ria y aumento de la producción”, Información, 20 de
abril de 1974, p. 22. Alcoy: “3.350.000 pesetas, para
32
Ley de Cooperación Decreto 11 noviembre 1943. una cooperativa de obreros textiles El préstamo, del
33
“Préstamo a 165 socios de una cooperativa obrera Fondo Nacional de Protección del trabajo, fue entre-
alcoyana. Para adquirir la fábrica en la que trabajan”, gado ayer por el Delegado Provincial de Sindicatos”,
Información, 6 de marzo de 1965, p. 15; “Préstamo Información, 25 de octubre de 1966, p. 9.
de dos millones de pesetas a una cooperativa indus- 34
“Cooperativas Textiles Locales”, Fondo Privado Pa-
trial alcoyana”, Información, viernes 6 de noviembre lacios Olcina, Alcoy, p. 1 (s.f.).

ferentes a las cooperativas industriales textiles del sector. Por una parte, heredaron la antigua
de la localidad según afirma; estructura de producción, financiación, gestión
y administración de las empresas ideadas para
“Es aquí donde aconsejamos a los hombres un mercado que no atendía a las obligaciones de
que dirigen los Planes de Desarrollo eco- los sesenta. La fuerte inversión que tenían que
nómico español, una norma cooperadora, realizar en maquinaria industrial que en muchos
al promover la formación de las empresas, de los casos no podían realizarla, salvo alguna
que sean dirigidas por los mismos usuarios, excepción de las cooperativas industriales, que
evitando en todo lo posible, pero protegien- pudieron financiarse con los créditos del Fondo
do como se debe la iniciativa privada de la Nacional de Protección del Trabajo. La imposi-
pequeña empresa, favoritismos o intrusio- bilidad de transformar la industria de una pro-
nes oligárquicas, ya que se anuncia por to- ducción barata y de baja calidad para realizar el
das las ideas sociales lo urgente que la or- salto cualitativo para producir productos de ca-
ganización económica deje de ser función lidad orientados al mercado nacional del hogar
específica, […]. no pudo realizarse. Por otro lado, la herencia de
los cuadros de dirección de las empresas no es-
No es lo más importante, creemos del plan
taba formados para las nuevas necesidades de
de Desarrollo que vaya a la creación de cen-
gestión y financiación que necesitaban estas so-
tenares y centenares de puestos de trabajo,
ciedades.
lo que tendría verdadera importancia sería
poder constatar que se realicen grandes es- CONCLUSIONES
fuerzos para salvar errores cometidos en el
pasado por las leyes generales de la espe- Para abordar el presente trabajo hemos estu-
culación, el monopolio y la producción del diado el fenómeno por el cual reaparece el mo-
dinero, acentuando, cada vez más, la des- vimiento cooperativo. En este sentido hemos
igualdad en la distribución de la riqueza. buscado las causas generales que afectaron lo-
calmente a la evolución de proceso en distintos
Los hombres que sientan verdaderamente apartados legislativo, económico y social.
el sindicalismo y el cooperativismo español
deben de pensar con sinceridad, con diná- En el apartado legislativo, la victoria del régimen
mica constructiva y hasta revolucionaria, no de Franco supuso un retroceso en los derechos y
hay sector del pensamiento social que no la representación que condujo a una involución
esté aplicado en rectificar y corregir los vien materia laboral y social cómo hemos analiza-
cios de origen en que anda incurso al valor do. en; Ley sobre bienes de los antiguos Sindica-
de la económica, […]. tos Marxistas y anarquistas, la Ley del Fuero del
Trabajo, La Ley de Responsabilidades Políticas,
[…] las virtudes concretas que la coopera- La Ley de Unidad Sindical y La Ley de Bases de
ción ofrece, cabe destacar, entre ellas que Organización Sindical de 6 de diciembre de 1940.
puede llegar a ser una técnica de acción hu- En particular la Ley de Cooperativas cuyas com-
mana en un plausible esfuerzo de liberación petencias no se establecieron claramente distor-
organizada de incalculable transcendencia sionando en forma y manera la conformación de
y de gran fuerza creedora, teniendo muchí- las cooperativas.
simas posibilidades de superar el sistema
capitalista. De ahí que la aplicación de este En el apartado laboral los trabajadores del sec-
movimiento socioeconómico de reciproci- tor textil vieron afectadas sus vidas por el peligro
dad y comunitario, allí donde el gobierno que implicaba la pérdida de su puesto de trabajo
haya de invertir parte esencial de una eco- durante los años 1963 y 1964. Por lo tanto, ob-
nomía, fruto del esfuerzo mancomunado de servamos en la aprobación del Convenio Colec-
todos los españoles”35. tivo que en términos locales respondió a las de-
mandas patronales de la reducción de los costes
Los cooperativistas dentro del contexto del cam- laborales.
bio económico gestado por la apertura del régi-
men a través de la consecución del Plan de De- En el apartado económico los efectos locales, la
sarrollo tuvieron que hacer frente a la herencia implantación del modelo económico autárquico
a corto plazo la industria se caracterizó por un
35
“Cooperativismo. Reflexiones de la industria textil”, periodo de producción intermitente debido a las
“Fondo Privado Palacios Olcina”, Alcoy, pp. 1-2.

restricciones eléctricas materiales y supeditadas

a las negociaciones entre los agentes sindicales,
y la intervención económica del Estado median-
te las adjudicaciones de lotes. No obstante, fue
continuado desde la Guerra Civil hasta 1962. Sin
embargo, esta situación a largo plazo significó
por una distorsión de la realidad económica y so-
cial que al final provocó el colapso industrial por
la falta de competencia e innovación.
Por todo ello encontramos la respuesta de los

trabajadores al cierre de las fábricas la clave del
proceso de la reaparición del movimiento coo-
perativo. Estos trabajadores se reconvirtieron en
cooperativistas debido a la falta de respuestas
de los empresarios. Una medida que como ha-
blamos anteriormente se adoptó cuando surgió
el problema del paro y la falta de pagos durante
la Guerra Civil. Del mismo modo más tarde, en
1964 hemos observado como los propios traba-
jadores optaron por unas medidas bilaterales
usando el propio sistema para obtener a través
de la OSE y la Obra de Cooperación salvaguardar
sus empleos y obtener una adecuada financia-
ción que hubiera sido inviable sin el apoyo de
estos organismos. De la misma forma usaron la
negociación a través del traspaso de las empre-
sas deficitarias como pago a los retrasos que se
les adeudaban.

LA INFLUENCIA DE LA UNIÓN EUROPEA EN EL ESPACIO

POSTSOVIÉTICO: LA ASOCIACIÓN ORIENTAL (2009-2019)
THE EUROPEAN UNION’S INFLUENCE ON THE POST-SOVIET

AREA: THE EASTERN PARTNERSHIP (2009-2019)
César García Andrés*

*
Universidad de Valladolid, España. E-mail: [email protected]
Recibido: 17 junio 2020 / Revisado: 29 junio 2020 / Aceptado: 8 agosto 2020 / Publicado: 15 octubre 2020
Resumen: En el año 2009 se puso en marcha INTRODUCCIÓN
E
dentro de la Política Europea de Vecindad una
nueva iniciativa regional por parte de la Unión l 10º aniversario del establecimiento de la
Europea, la denominada Asociación Oriental. Se política europea denominada Asociación
creó para impulsar las relaciones con los vecinos Oriental (AO) ha planteado la revisión y el
de Europa Oriental y del Cáucaso Meridional: análisis de los efectos que han tenido sus inicia-
Armenia, Azerbaiyán, Bielorrusia, Georgia, Mol- tivas a lo largo de estos años en los países que
davia y Ucrania. Para la Unión Europea este pro- la integran. Con la entrada en el siglo XXI, en la
yecto estaba destinado a estrechar la integración Unión Europea (UE) se produjo la mayor amplia-
económica y la asociación política en dos zonas ción en una sola vez de toda su historia. Este he-
del continente europeo en las que la seguridad cho se denominó como “la ampliación hacia el
y la estabilidad democrática era, y sigue siendo, Este”, ya que la mayor parte de los países que se
una prioridad. incorporaban a la UE en este momento estaban
relacionados con antiguos gobiernos de carácter
Palabras claves: Asociación Oriental, Política comunista del centro y este de Europa, que lle-
Europea de Vecindad, Unión Europea, Europa garon a su colapso entre finales de los años 80 y
Oriental, Cáucaso Meridional. principios de los 90 del siglo XX.
Abstract: A new regional initiative by the Euro- Con estas ampliaciones las nuevas fronteras na-
pean Union, the Eastern Partnership, was laun- turales de la UE cambiaron, de tal modo que las
ched within the European Neighbourhood Poli- relaciones con los nuevos países limítrofes entra-
cy in 2009. It was created to boost the relations ban en una nueva etapa marcada por la Política
with Eastern Europe and Southern Caucasus: Europea de Vecindad (PEV). Para el autor Janer
Armenia, Azerbaijan, Belarus, Georgia, Moldo- Torrens:
va and Ukraine. For the European Union, this
initiative was designed to strengthen economic “los objetivos previstos en los acuerdos de
integration and political partnership in two areas asociación celebrados con los países inte-
of the European continent where security and grantes de la nueva política y con los pro-
democratic stability was, and remains, a priority. gramas de asistencia técnica y financiera, el
aspecto más significativo de esta política es
Keywords: Eastern Partnership, European Nei- definir una misma estrategia con unos valo-
ghbourhood, European Union, Eastern Europe, res comunes para el conjunto de países que,
Southern Caucasus.

La influencia de la Unión Europea César García Andrés
si bien son muy heterogéneos, comparten la legitimidad con la UE”5, lo que provoca gran-
vecindad y fronteras con la UE”1. des diferencias entre ellos. De este modo, poco
tiempo después de la implantación de la PEV, y
Si bien es cierto que desde finales de los años como afirma Mercedes Guinea Llorente, en 2006
80 y principios de los años 90 del siglo pasado, la Comisión (Europea) planteaba la necesidad de
la por entonces Comunidad Europea (CE) se pre- añadir una dimensión regional a la política6 de
ocupó por los vecinos orientales que buscaban vecindad.
incorporarse a un sistema económico nuevo e
intentaban la implementación de nuevos regí- Como postulan Magdalena Gora, Natasza Styc-
menes democráticos en esos países. Por ejem- zynska y Marcin Zubek, “el argumento central es
plo, en el año 1989 las instituciones de Bruselas que las deficiencias del PEV eran resultado tanto
pusieron en marcha numerosas políticas de ayu- de la toma de decisiones de la UE como de las
da a los países de Europa Central y Oriental. Uno dificultades a las que se enfrenta la PEV en los
de los primeros programas en aprobarse fue el países destinatarios”7. Por lo que, comenzaron
denominado Polonia-Hungría Ayuda a la Cons- a surgir nuevas iniciativas regionales que pro-
trucción Económica (programa PHARE), que pos- fundizaban de una forma más directa sobre las
teriormente amplió el marco geográfico de esta necesidades específicas de cada área. En el caso
ayuda a otros países de la zona2, junto con otros de las fronteras con Europa del Este (Bielorru-
programas como TACIS o INTERREG. sia, Moldavia y Ucrania) y los países del Cáucaso
Meridional (Armenia, Azerbaiyán y Georgia) se
Teniendo en cuenta estos pasos iniciales y como creó la AO, en palabras de Paula Marcinkowaka
asegura Ricardo Martín de la Guardia, que, “gra- “[…] como una respuesta a otras dimensiones
cias a la PEV, la Unión ha continuado insistiendo regionales dentro del marco de la política ex-
en la absoluta necesidad de dotar de estabilidad terior, como un valor añadido a la Sinergia del
a sus fronteras, manifestación de su constante Mar Negro y a la dimensión septentrional, y un
preocupación por la seguridad”3. Con esta políti- contrapeso a la Unión para el Mediterráneo”8.
ca también, “en virtud de la proximidad geográ- Mientras que para Francisco José Ruiz Gonzá-
fica se pretende provocar la proximidad econó- lez “surgía como desarrollo y complemento de
mica, cultural, política y axiológica […]”4, como las actuales relaciones bilaterales, y para seguir
afirma Luis Ernesto Orozco Torres. Sin embargo, fomentando la estabilidad y la confianza mul-
uno de los grandes problemas que cuestionaba tilateral”9. Por lo que se puede asegurar que el
a la PEV, a pesar de la cercanía de sus fronteras,
era la heterogeneidad que presentaban cada uno 5
Casier, Tom, “European Neighborhood Policy: Li-
de los países que formaban parte de ella, junto ving up to Regional Ambitions?”, en Bindi, Federiga,
con los intereses particulares con los que cada y Angelescu, Irina (Eds.), The Foreing Policy of the Eu-
uno de ellos contaban. De ahí, que como señala ropean Union. Assesing Europe’s Role in the World,
Tom Casier, “se deba explorar […] más a fondo Washington D.C., Brookings Institution Press, 2012,
cómo la atracción subjetiva por la UE lleva a cier- pp. 99-117, p. 114.
tos Estados de la PEV a buscar proactivamente
6
Guinea Llorente, Mercedes, “La Política Europea de
Vecindad y la estabilización del entorno próximo: el
caso de Europa Oriental”, Revista de Derecho Comuni-
tario, 31, septiembre/diciembre (2008), pp. 805-831,
p. 812.
1
Janer Torrens, Joan David, “La Nueva Política Euro- 7
Gora, Magdalena et al. “Domestic Sourcesof Euro-
pea de Vecindad de la Unión Europea”, Revista de De- pean Foreign Policy: Politicisation, Contestation and
recho Comunitario Europeo, 24, mayo-agosto (2006), the EU Neighbourhood”, en Gora, Magdalena et al.
pp. 519-540, p. 538. (Eds), Contestation of EU Enlargement and European
2
García Andrés, César, “Central and Eastern Europe Neighbourhood Policy. Actors, Arenas and Arguments,
after the end of communism: the beginning of rela- Copenhagen, Djof Publishing, 2019, pp. 9-30, p. 18.
tions with the European Union. The case of Ukraine 8
Marcinkowska, Paula, European Neighbourhood Po-
(1991-1999)”, RevistaUniversitara de Sociologie, Year licy, a Polish perspective, Revista UNISCI/UNISCI Jour-
XIV, 1, (2018), pp. 106-119, p. 108. nal, 40, Enero/January (2016), pp. 27-41, p. 35.
3
Martín de la Guardia, Ricardo, “La frontera oriental 9
Ruiz González, Francisco José, “Las Relaciones Unión
de Europa, nuevas perspectivas para viejos proble- Europea-Rusia, la «Asociación Oriental», el futuro de
mas”, Saitabi, 55 (2005), pp. 123-141, p. 138. la OSCE, y sus consecuencias para la Política Común
4
Orozco Torres, Luis Ernesto, La Nueva Política Euro- de Seguridad y Defensa (PCSD)”, en Mora Benavente,
pea de Vecindad ¿de la Paneuropea a la Paraeuropa?, Enrique, La Política Europea de Seguridad y Defensa
Sevilla, Ed. Universidad de Sevilla, 2006, p. 127. (PESD) tras la entrada en vigor del Tratado de Lisboa,

César García Andrés La influencia de la Unión Europea
nacimiento de la AO para estos autores ponía de 1. LA POLÍTICA EUROPA DE VECINDAD

relieve la importancia de esta región y su interés
por parte de la UE. Desde mediados de la década de los años 90 del
siglo XX las relaciones de la UE con los países de
Sin embargo, otros autores consideran que el ca- Europa del Este que iban a formar parte de la
mino iniciado por la UE y los países vecinos del PEV se basaban en los Acuerdos de Colaboración
este de Europa y del sur del Cáucaso ha sido mal y Cooperación (ACC)13, que tenían una vigencia
abordado desde sus inicios y que continúa con sede 10 años, y, cuyas disposiciones trataban de
rias carencias. Este el caso de Olga Schumylo-Ta- consolidar la democracia y desarrollar la econo-
piola y Vivien Pertusor que contemplan que “la mía en estos países. Mientras que, en el caso de
UE con la AO reorientó su pacto de libre comer- los vecinos del sur del Mediterráneo, el antece-
cio para desarrollar un acuerdo más profundo y dente de estos vínculos se encuentra en el deno-
completo sin preguntar a sus asociados si tenían minado Proceso de Barcelona14 de 1995, a través
o no interés en el mismo”10, dejando entrever la de Acuerdos de Asociación.
situación de superioridad de la que partía la UE.
Pero también hay autores como Ruth Ferrero-Tu- 1.1. Primeros pasos de la Política Europea de
rrión que considera que “los países que forman Vecindad
parte de esta AO han vuelto a centrarse en cuán-
Con estos antecedentes, y con las ampliaciones
to y qué les puede ofrecer la UE en lugar de in-
que se produjeron en los años 2004 y 2007, se
tentar dibujar el camino por el que quieren tran-
fue abriendo el camino para la creación de una
sitar”11. Aunque, a pesar de todo ello, para otros
nueva política en el ámbito comunitario que
autores, y teniendo en cuenta la actual situación
abarcase a los nuevos vecinos de la UE. Los pri-
de escepticismo que vive la UE, “la puesta en
meros documentos sobre política de vecindad
marcha y desarrollo de esta AO es vista como
aparecidos durante 2002 y 2003 giraron en torno
reconfortante, al ver cómo ciudadanos europeos
a la necesidad de promover las reformas en los
de países no miembros pueden ver de qué ma-
países vecinos siguiendo el modelo de la UE15.
nera les afectan positivamente las políticas de la
Así, uno de los pasos iniciales tuvo lugar el 11 de
UE”12, como sostiene Francisco Márquez de la
marzo de 2003 cuando la Comisión Europea (CE)
Rubia.
sacó a la luz una comunicación titulada: “Una
Así, con este punto de partida, se pretende Europa más amplia. Relaciones con los países
ahondar a lo largo de este artículo el desarrollo vecinos: un nuevo marco para las relaciones con
que la AO ha tenido para Armenia, Azerbaiyán, nuestros vecinos del Este y del Sur de Europa”16.
Bielorrusia, Georgia, Moldavia y Ucrania. Co- En este texto se pusieron de relieve tres asuntos:
menzando con la implementación de la PEV en estrechar los lazos con los nuevos países fronte-
un espacio más amplio de las fronteras europeas rizos, reforzar los vínculos con los países del Sur
y tras la cual se llegó a la creación de las iniciati-
vas regionales, en este caso de estudio, de la AO, 13
La UE firmó una serie de Acuerdos de Colaboración
para una mayor profundización en las cuestiones y Cooperación, pero no solo con países de Europa
relacionadas con estos países. Oriental, sino también con países del Cáucaso Meri-
dional y de Asia Central: Armenia, Azerbaiyán, Geor-
gia, Kazajistán, Kirguizistán, Moldavia, Rusia, Ucrania,
Uzbekistán y Tayikistán.
14
Es una asociación que tiene como finalidad la crea-
Madrid, Cuadernos de Estrategia 145: Instituto Espa- ción de una zona de estabilidad y seguridad en los
ñol de Estudios Estratégicos, 2010, pp. 206-248, p. países del Mediterráneo, y que es la base de la políti-
235. ca exterior de la UE hacia estos estados.
10
Schumylo-Tapiola, Olga y Pertusor, Vivien, “La Po- 15
Herranz Surrallés, Anna, “La Política Europea de
lítica Europea de Vecindad: aún queda camino por Vecindad (PEV): ¿Un nuevo modelo de gobernanza
recorrer”, Anuario Internacional CIDOB, (2011), pp. exterior?”, Claves para interpretar la Política Exterior
217-223, p. 222. Española y las Relaciones Internacionales en 2006,
11
Ferrero-Turrión, Ruth, “El Partenariado Oriental de Anuario Internacional CIBOD (2006), p. 269.
la UE a la deriva”, Real Instituto Elcano, Comentario 16
Comisión de las Comunidades Europeas, Comu-
Elcano 38/2015, 28 de mayo (2019), p. 2. nicación de la Comisión al Consejo y al Parlamento
12
Márquez de la Rubia, Francisco, “Diez años de Aso- Europeo, “Una visión más amplia. Relaciones con los
ciación Oriental”, Instituto Español de Estudios Estra- países vecinos: un nuevo marco para las relaciones
tégicos IEEE, Documento Informativo, 11/2019, 13 de con nuestros vecinos del Este y del Sur de Europa”,
mayo (2019), p. 7. Bruselas, 11.3.2003, COM (2003) 104 final.

del Mediterráneo y fortalecer las relaciones con las instituciones de la UE debían realizar unos in-
Rusia. Sin embargo, también existía un objetivo formes sobre cada país en relación con la situa-
prioritario para las instituciones europeas, ya ción en la que se encontraban cada uno de ellos.
que, la idea de la UE era llevar la estabilidad a Tras la valoración positiva de estos informes te-
estos países para asegurar sus propias fronteras, nía lugar la segunda fase, en la que se llevaba a
como una acción preventiva para evitar cual- cabo la negociación de los planes de acción para
quier peligro para Europa17. Aunque como se fijar los ámbitos de actuación en cada uno de los
tratará en las líneas siguientes, no siempre desde países. Y, por último, se debían realizar informes
las instituciones comunitarias se ha podido llevar periódicos sobre los avances que se estaban pro-
a cabo este objetivo. duciendo en cada una de las materias estudiadas
y en cada uno de los países.
El siguiente paso para la creación de la PEV tuvo
lugar el 1 de julio de 2003 cuando la CE publicó En cuanto a la financiación, en los primeros años
la comunicación: “Sentar las bases de un nuevo de la PEV, hasta el año 2006, esta ayuda se reci-
instrumento de vecindad”18. En esta ocasión se bía de diferentes contribuciones financieras de
planteaba propuestas para tratar de simplificar la UE. Canalizada a través de distintos instrumen-
los antiguos mecanismos existentes en un único tos como los programas MEDA, con medidas de
proyecto de vecindad. Sin embargo, no fue hasta acompañamiento financieras y técnicas; TACIS
el 12 de mayo de 2004, pocos días después de de asistencia técnica y financiera; los préstamos
que se hiciera efectiva la ampliación, cuando la concedidos por el Banco Europeo de Inversiones
CE divulgó una nueva comunicación con las prin- (BEI); la Iniciativa Europea para la Democracia y
cipales bases de la nueva política a desarrollar: los Derechos Humanos (IEDDH); o la financiación
“Política europea de vecindad. Documento de de proyectos de ayuda humanitaria21. En el caso
Estrategia”19. En ella, el método propuesto con- del programa Meda el presupuesto destinado a
sistía en definir, junto con los países socios, un ello era de 3.100 millones de euros aproximada-
conjunto de prioridades cuyo cumplimiento su- mente, y contaba también con parte de los 5.300
ponía un acercamiento a la UE20. Además, se am- millones de euros asignados al programa TACIS22.
pliaba el alcance geográfico de la PEV al Cáucaso Sin embargo, con la entrada en el nuevo marco
meridional, incluyendo Armenia, Azerbaiyán y financiero plurianual en el año 2007, que se iba a
Georgia. desarrollar hasta el año 2013, el Parlamento Eu-
ropeo (PE) y el Consejo publicaron un Reglamen-
1.2. Desarrollo de la Política Europea de Vecin- to en octubre de 2006, a través de cual se creaba
dad el denominado Instrumento Europeo de Vecin-
dad y Asociación (IEVA). Con el que no solo se
Una vez visto como se fue gestando esta política
aumentaba la cantidad presupuestaria para esta
y su ámbito de actuación, es necesario conocer
política a más de 11.000 millones de euros, sino
cuáles han sido los mecanismos para su desarro-
que también se abría un abanico más amplio en
llo y los principales recursos financieros con los
cuanto al tipo de programas a los que afectaba.
que cuenta para ello. En lo relativo a la imple-
Así, en el artículo 6 del Reglamento se plantean
mentación de la PEV se pueden observar tres fa-
documentos de estrategia nacionales, plurina-
ses: en primer lugar, los órganos designados por
cionales y transfronterizos […], y programas ope-
17
Ramiro Troitiño, David et al. “Foreign Affairs of the rativos de cooperación transfronteriza […]23.
European Union: How to Become an Independent
and Dominant Power in the International Area”, en Con todo ello, en diciembre de ese mismo año se
Ramino Troitiño, David et al. The EU in the 21st Cen- publicó por parte de la CE una Comunicación al
tury. Challenges and Opportunities for the European Consejo y al PE “relativa a la consolidación de la
Integration Process, Cham, Springer, 2020, pp. 209-
230, p. 218.
18
Comisión de las Comunidades Europeas, Comuni- 21
Janer Torrens, Joan David, “La Nueva Política Euro-
cación de la Comisión, “Sentar las bases de un nuevo pea de…”, op. cit., pp. 534-535.
instrumento de vecindad”, Bruselas, 1.7.2003, COM 22
Schumylo-Tapiola, Olga y Pertusor, Vivien, “La Polí-
(2003) 393 final. tica Europea de…”, op. cit., p.218.
19
Comisión de las Comunidades Europeas, Comuni- 23
Artículo 6 del Reglamento (CE) Nº 1638/2006 del
cación de la Comisión, “Política europea de vecindad. Parlamento Europeo y del Consejo de 24 de octubre
Documento de Estrategia”, Bruselas, 12.5.2004, COM de 2006 por el que se establecen las disposiciones
(2004) 373 final. generales relativas a la creación de un Instrumento
20
Ibid., p. 3. Europeo de Vecindad y Asociación, pp. 6-7.

Política Europea de Vecindad”24. En ella se hace sejo titulada “Asociación Oriental” y que como
referencia a aspectos positivos que presenta la figura:
PEV y del mismo modo a ciertas deficiencias que
se deben subsanar. En este último aspecto, se “la Asociación Oriental estará basada en
comenzó a hablar de crear iniciativas regionales compromisos mutuos respecto al Estado de
que avanzasen de forma positiva en la integra- Derecho, la buena gobernanza, el respeto
ción y la cooperación de los países de la PEV. Así, de los derechos humanos, el respeto y la
con la Comunicación de la CE al PE y al Conse- protección de las minorías y los principios
jo de diciembre de 2007 y titulada “Una sólida de la economía de mercado y el desarrollo
Política Europea de Vecindad”25 se sentaron las sostenible”27.
bases para la puesta en marcha de dos iniciativas
Los países que se incorporaron dentro de esta
regionales como refuerzo a la PEV: la Sinergia del
nueva iniciativa regional de la UE son: Armenia,
Mar Negro y la Asociación Euro-mediterránea
Azerbaiyán, Bielorrusia, Georgia, Moldavia y
(Unión para el Mediterráneo). Del mismo modo,
Ucrania. Sin embargo, la influencia de la UE es
también se iniciaron las conversaciones para la
muy limitada. Esto no sólo se debe a que la UE
creación de la tercera iniciativa regional, la AO,
ha excluido a [estos] países de la perspectiva de
a través del Consejo Europeo de junio de 2008.
adhesión por el momento, sino también porque
2. LA ASOCIACIÓN ORIENTAL los Estados miembros de la UE mantienen per-
cepciones y preferencias diferentes para los par-
La complicada situación que se estaba viviendo ticipantes de la PEV28.
en los países de Europa Oriental y del Cáucaso
Meridional entre 2007 y 2008 profundizó en la 2.1. Mecanismos e instrumentos, financiación,
necesidad de la creación de una política más in- y organización
tensa hacia esas regiones, teniendo un gran im-
En las conclusiones de la Presidencia del Conse-
pacto la guerra que se estaba produciendo en-
jo Europeo que se realizaron entre el 19 y 20 de
tre Georgia y la Federación Rusa. No fue hasta
marzo de 2009, el presidente concluyó:
la publicación de las Conclusiones del Consejo
Europeo del 19 y 20 de junio del 2008 cuando “en consonancia con la Comunicación de
comenzó a hablarse de poner en marcha las ne- la Comisión del 3 de diciembre de 2008,
gociaciones para el desarrollo de una dimensión el Consejo Europeo acoge con satisfacción
oriental de la PEV. De este modo, en la Conclu- la creación de una ambiciosa Asociación
siones de la Presidencia del Consejo Europeo Oriental […]29”,
Extraordinario de Bruselas de 1 de septiembre
de 2008 se plasmó la necesidad de acelerar el con el propósito de lograr la asociación política
proceso: y la integración económica. Con estos objetivos
finales se fueron creando distintos mecanismos
“La UE considera que es ahora más necesa- para su consecución, de entre los cuales des-
rio que nunca apoyar la cooperación regio- tacan tres: los acuerdos de asociación (AA), las
nal y favorecer las relaciones que mantiene zonas de libre comercio amplias y profundas, y
con sus vecinos orientales […]”26. pactos de movilidad y seguridad que tratasen
asuntos relativos al tratamiento de las políticas
Finalmente, a principios de diciembre de 2008 se
publicó una comunicación de la CE al PE y al Con-
27
Comisión de las Comunidades Europeas, Comunica-
ción de la Comisión al Parlamento Europeo y al Con-
24
Comisión de las Comunidades Europeas, Comunica- sejo, “Asociación Oriental”, Bruselas, 3.12.2008 COM
ción de la Comisión al Consejo y al Parlamento Euro- (2008) 823 final, p. 3.
peo “relativa a la consolidación de la Política Europea 28
Giusti, Serena y Penkova, Tomislava, “Ukraine and
de Vecindad”, Bruselas, 4.12.2006, COM (2006) 726 Belarus: Floating between the European Union and
final. Russia”, en Bindi, Federiga, y Angelescu, Irina (Eds.),
25
Comisión de las Comunidades Europeas, Comu- The Foreign Policy of the European Union. Assessing
nicación de la Comisión al Parlamento Europeo y al Europe’s Role in the World, Washington D.C., Broo-
Consejo, “Una sólida Política Europea de Vecindad”, kings Institution Press, 2012, pp. 134-152, p. 134.
Bruselas, 5.12.2007, COM (2007) 774 final. 29
Consejo Europeo, 19/20 de marzo de 2009, Conclu-
26
Consejo de la UE, Conclusiones de la Presidencia, siones de la Presidencia, Consejo de la Unión Euro-
Consejo Europeo Extraordinario de Bruselas 1 de sep- pea, Bruselas, 29 de abril (2009), 7880/1/09 REV 1,
tiembre (2008), 12594/08, p. 3. p. 11.

de visados. En el caso de la AO, el Plan de Ac- concluye en el año 2020, con una dotación que
ción fue seguido de una Agenda de Asociación superaba los 15 millones de euros.
para los países que hubieran realizado progresos
sustanciales30. Es decir, con esta nueva Agenda En lo relativo a la organización de la AO se pueden
se produjo la sustitución de los antiguos planes distinguir distintos niveles de cooperación, entre
de acción por la creación de convenios con me- ellos, la principal herramienta son las reuniones
didas adaptadas a los requisitos de cada uno de bianuales entre los representantes y los Jefes de
los socios dependiendo de las necesidades que Estado o de Gobierno de los Estados miembros
tuvieran, con los denominados AA. de la UE, los presidentes del Consejo Europeo y
de la CE como portavoces de la UE y los presiden-
Así, la propia comunicación del año 2008 definía tes de los países asociados. Además, junto a es-
a los AA como “un sólido vínculo político que fo- tas reuniones se establecen asambleas anuales
mentarán una mayor convergencia al establecer de los Ministros de Asuntos Exteriores de las UE
una vinculación más estrecha con la legislación y y de los países de la AO. Pero sin ninguna duda,
las normas de la UE”31. Pero esta herramienta po- son las reuniones bianuales las que presentan
lítica iba a ser complementada con las denomi- una mayor importancia dentro del contexto de
nadas zonas de libre comercio amplias y profun- la AO. Hasta el momento se han efectuado cinco
das (DCFTA, en sus siglas en inglés). Se trataba de cumbres, de las que a continuación se detallarán
incrementar las relaciones comerciales entre las cuáles han sido las mayores aportaciones para el
partes, sin embargo, desde la UE se pedía como progreso de la AO.
premisa, que los países asociados acercaran pos-
turas en los asuntos económicos a los estándares La I Cumbre tuvo lugar el 7 de mayo de 2009 en
de la UE, por lo que el paso inicial era ir prepa- Praga, con la quedaba constituida de forma ofi-
rando a estos países para el futuro DCFTA. Otro cial la AO. En esta reunión inicial se fijaba como
de los puntos fuertes de esta AO era el desarro- objetivo principal: “crear las condiciones nece-
llo de los ámbitos relacionados con la movilidad sarias para acelerar la asociación política y una
entre estos países y los países miembros de UE mayor integración económica entre la Unión Eu-
para alcanzar un entorno seguro en sus fronteras ropea y los países asociados interesados”34. La II
más cercanas: facilitación de visados y de read- Cumbre se desarrolló entre los días 29 y 30 de
misión y la liberación total de visados. septiembre de 2011, en Varsovia, y, se recono-
cieron las aspiraciones europeas y la elección
En cuanto a la financiación de esta iniciativa europea de algunos socios y su compromiso
regional, se gestiona a través del mismo instru- de constituir una democracia profunda y soste-
mento que la PEV, que como hemos mencionado nible35. La III Cumbre se realizó en Vilna, entre
anteriormente para el periodo 2007-2013 pasó los días 28 y 29 de noviembre de 2013. En esta
a ser denominado IEVA, por lo que estos fondos reunión se formalizó la finalización de las nego-
elevaron a 600 millones de Euros el importe total ciaciones de los AA con Moldavia y con Georgia.
de los recursos destinados a estas nuevas inicia- Sin embargo, esta Cumbre se vio empañada por
tivas32 en el periodo 2010-2013. Todo ello, junto el paso atrás que tuvo lugar por parte del go-
con nuevas y mayores inversiones a través del bierno de Ucrania al suspender la firma de su AA
BEI y del Banco Europeo para la Reconstrucción y con la UE, al igual que la negativa de Armenia
el Desarrollo (BERD). Cuando finalizó el periodo a concluir las negociaciones de su acuerdo. La
de aplicación del IEVA se sustituyó por el Instru- IV Cumbre se celebró entre los días 21 y 22 de
mento Europeo de Vecindad (IEV), a través de un mayo de 2015 en Riga, donde se fijaron nuevos
Reglamento publicado en el año 201433, y, que retos para los socios orientales. La última hasta
el momento, la V Cumbre se reunió en Bruselas
el 24 de noviembre de 2017 abriendo un nuevo
30
Casier, Tom, “European Neighborhood Policy: …”, abanico de posibilidades para los socios orienta-
op. cit., p. 102.
31
Comisión de las Comunidades Europeas, Comunica- 34
Consejo de la UE, Declaración Conjunta de la Cum-
ción de la Comisión al Parlamento Europeo y al Con- bre de Praga de la Asociación Oriental-Praga, 7 de
sejo, “Asociación Oriental…”, op. cit., p. 5. mayo de 2009, Bruselas, 8 de mayo (2009), 8435/09
32
Ibid., p. 15. (Presse 78), p. 6.
33
Diario Oficial de la UE, Reglamento (UE) Nº 35
Council of the EU, Joint Declaration of the Eastern
232/2014 del Parlamento Europeo y del Consejo de Partnership Summit, Warsaw, 29-30 September 2011,
11 de marzo (2014), por el que se establece un Instru- Warsaw, 30 September (2011), 14983/11 (Presse
mento Europeo de Vecindad, L 77/27. 341), p. 1.

les, con la publicación del documento “20 metas En Moldavia se encuentra la región de Transnis-
para 2020: resultados tangibles para los ciudada- tria, territorio que se independizó de este país en
nos”36, donde se indican las acciones que estos 1990 para no perder los vínculos que les unía con
países deben alcanzar para el año 2020. La últi- Rusia, sin embargo, las presiones entre ambas
ma reunión relacionada con la AO tuvo lugar el desencadenaron un conflicto armado en 1992.
13 de mayo del año 2019 coincidiendo con los 10 La población de Transnistria se vio ayudada por
años de la puesta en marcha de esta iniciativa. contingentes mandados desde Moscú. Así, des-
En esta asamblea, se analizaron los logros conde el final de la guerra, unos meses después, tro-
seguidos y los retos a los que aún se enfrentan, pas rusas custodian las fronteras de esta región.
poniendo un especial interés en elaborar el pro- Desde entonces, los procesos de negociación y
grama de la AO más allá de 2020, asegurando así las propuestas para tratar de poner fin al conflic-
de que juntos siguen siendo más fuertes37. to han sido tan numerosos como modestos los
avances logrados39.
2.2. Algunas claves para la puesta en marcha de
la Asociación Oriental En el caso del país caucásico de Georgia desta-
can dos conflictos territoriales desde la inde-
Como se ha ido poniendo de manifiesto a lo lar- pendencia de este país en 1991. El primero de
go del artículo, la necesidad de crear la AO re- ellos es la región de Abjasia la cual declaró su
side en la puesta en marcha de estrategias más independencia de facto de Georgia en 1992, en
directas y específicas en los países que forman esta ocasión el gobierno ruso también apoyó a
parte de ella. A pesar de la cantidad de proble- los separatistas abjasios. En el año 2006, Geor-
mas que tienen lugar en estas naciones, el talón gia lanzó una ofensiva para acabar con las ideas
de Aquiles de la AO sigue siendo, sin embargo, independentistas de la zona, pero el ejército
el tema de los “conflictos congelados” (y no tan ruso entró en la guerra para apoyar a la región
congelados) en la región: Abjasia, Nagorno-Kara- de Abjasia. Desde el año 2008 Rusia defiende
baj, Transdniester y Osetia del Sur38. Además, en la frontera entre Abjasia y Georgia. El segundo
los últimos años han aumentado los conflictos caso es el de Osetia del Sur, región fronteriza al
dentro de la AO con la crisis de Crimea y el movi- norte con Rusia. Desde el año 1991 y tras una
miento secesionista en el este de Ucrania con las guerra, es independiente de facto con el apoyo
regiones de Donetsk y Lugansk. Se debe tener en de Rusia. En el año 2008 el presidente georgiano,
cuenta que los problemas que se desarrollan en Mijeíl Saakashvili, lanzó una ofensiva contra esta
estos lugares están directamente relacionados región en un nuevo intento de que volviera bajo
con las políticas territoriales llevadas a cabo por su control. Sin embargo, el ejército ruso se lanzó
los gobernantes soviéticos durante la existencia inmediatamente a la defensa de Osetia del Sur,
de la Unión Soviética. También, hay que apreciar cuyas fronteras son defendidas desde ese mo-
que Rusia tenía (y tiene) la necesidad de que mento por militares rusos. De este modo, Moscú
esos nuevos países independientes continuaran apoya a los dos territorios rebeldes que no re-
dependiendo en cierto modo de ella, debido conocen la autoridad de Tbilisi, Abjasia y Osetia
principalmente a la cercanía de las políticas que del Sur, otorgando la nacionalidad rusa a sus ha-
desde la UE se estaban desarrollando hacia estos bitantes y desplegando tropas40. Como se puede
países. observar por el momento temporal en el que se
desarrolla este último conflicto, y como se ha vis-
to anteriormente, coincidiendo con las primeras
36
European Commission, High Representative of the fases sobre las negociaciones para la creación de
Union for Foreign Affairs and Security Policy, Eastern la AO, este enfrentamiento tuvo un impacto cru-
Partnership – 20 Deliverables for 2020. Focusing on cial en su puesta en marcha definitiva.
key priorities and tangible results, Joint staff working
document, Brussels, 9.6.2017, SWD (2017) 300 final. En Azerbaiyán, país vecino del anterior, el con-
37
Council of the EU, Reunión de los ministros de Asun- flicto proviene de la región de Nagorno-Karabaj,
tos Exteriores de la Asociación Oriental: conclusiones una zona poblada en su mayoría por armenios.
de la Presidencia en el 10º aniversario de la Asocia-
ción, Comunicado de prensa, 353/19, 13.5.2019.
38
Martín, Iván, “¿Qué finalité politique para la Polí- 39
Martín de la Guardia, Ricardo et al. Conflictos post-
tica Europea de Vecindad? Sobre los objetivos e ins- soviéticos. De la secesión de Transnistria a la desmem-
trumentos de la cooperación de la UE con sus países bración de Ucrania, Madrid, Dykinson, 2017, p. 35.
vecinos”, Anuario Jurídico y Económico Escurialense, 40
Ruiz González, Francisco José, “Las Relaciones
XLV (2012), pp. 359-387, p. 367. Unión…”, op. cit., p. 218.

En 1991 este territorio proclamó su independen- Sin embargo, se produjeron otros acontecimien-
cia, desencadenando la guerra hasta que se lo- tos que permitieron a la UE hacer expectativas
gró el alto al fuego en 1994. Desde este momen- positivas en cuanto al acercamiento con algunos
to se creó un grupo de mediación para mantener de estos países, sobre todo en años recientes.
la paz en la zona, aunque se encuentra bajo el Este el caso de las conocidas como Revoluciones
control de Armenia, Azerbaiyán no quiere desde Colores que tuvieron lugar en Georgia en el
ligarse completamente de esta región. Aunque año 2003 y en Ucrania en 2004. Se trata de ma-
durante los años 2008, 2014 y 2016 se produ- nifestaciones entre la población civil y la clase
jeron de nuevo enfrentamientos armados entre política de la oposición para desalojar del poder
ambos territorios. a los presidentes existentes42, debido a la pésima
situación política y económica, unido a la falta
Por último, y más reciente que los precedentes, de libertades que existía en esos momentos en
hay que mencionar la situación en Ucrania, don- estos países. Estos hechos han servido para dar a
de existen dos casos de conflictos territoriales: la estos países un impulso hacia la democracia y la
península de Crimea y las regiones separatistas buena gobernanza, y conseguir un mayor apoyo
de Donetsk y Lugansk. En cuanto a Crimea, des- por parte de las instituciones de la UE. Al igual
de el momento de la independencia de Ucrania que el conocido como Euromaidan entre los
en 1991 siempre ha tenido presente buscar su años 2013-2014 en Ucrania, que sirvió para de-
propia autonomía con el beneplácito de Rusia. mostrar el apoyo de gran parte de la población
Sin embargo, hasta marzo de 2014 no se vivió el a la asociación con la UE tras la suspensión de la
momento en el que proclamó su independencia firma del AA por parte del gobierno ucraniano.
de facto de Ucrania y su incorporación a Rusia. El
segundo caso está muy relacionado con el ante- 2.3. Resultados de la Asociación Oriental por
rior, ya que las regiones del este de Ucrania vien- países
do el “éxito” conseguido por Crimea intentaron
también su unión a Rusia, sin embargo, en esta Desde la puesta en marcha de la AO en el año
ocasión el gobierno ucraniano envió tropas para 2009 hay que poner de manifiesto que de los
frenar este conato de independentismo, dan- compromisos mutuos en los que se basaba la
do inicio al conflicto armado en las regiones de AO (democracia, derechos humanos…), que han
Donetsk y Lugansk, las cuales, tienen apoyo de sido comentados, no todos han cumplido lo es-
Rusia. perado, por lo que deben seguir progresando
para alcanzar esos objetivos que existen entre
Además de estos conflictos territoriales, tam- las partes. Uno de los ejemplos que se pueden
bién se han desarrollado problemas relativos a poner en relación con este asunto y de gran im-
la distribución de gas especialmente entre los portancia para el desarrollo interno de estos paí-
años 2005-2008 con cortes por parte Rusia al ses es lo referente a su evolución en el aspecto
suministro ucraniano que afectaba directamen- democrático.
te a algunos países de la UE; y, preocupaciones
económicas como la creación de la Unión Econó- Como se puede observar en el gráfico anterior,
mica Euroasiática entre Rusia, Kazajistán y Bielo- la mayor parte de los países que forman parte
rrusia, al que unos meses después se incorporó de la AO han bajado su puntuación en cuanto a
Armenia y Kirguizistán. Su entrada en vigor el 1 unas estructuras democráticas sólidas dentro de
de enero de 2015 planeaba ciertas dificultades sus territorios. Esto implica, una revisión de las
económicas y comerciales para que la UE alcan- políticas comunitarias que desde la UE se están
ce acuerdos de este tipo con los países de la AO desarrollando hacia estos países, ya que como se
que forman parte de esta Unión. Por lo que te- ha puesto de manifiesto, es uno de los puntos
niendo en cuenta lo anteriormente explicado,
los riesgos para la seguridad continental no se 42
En el caso de Georgia de 2003, la conocida como
pueden abordar por medio de la PEV, dado el Revolución de las Rosas hizo dimitir al presidente
mencionado carácter bilateral de la misma, de en ese momento Eduard Shevardnadze. En las elec-
ciones posteriores ganó el líder de la oposición que
modo que la UE solo puede tratar la cuestión por
encabezaba el movimiento, Mijaíl Saakashvili. En el
separado41. caso de Ucrania de 2004, la denominada Revolución
Naranja tras unas elecciones fraudulentas hizo que
se repitiera la segunda vuelta de las presidenciales,
41
Ruiz González, Francisco José, “Las Relaciones haciendo ganador al líder de la oposición Viktor Yus-
Unión…”, op. cit., p. 235. chenko, frente al anterior ganador Viktor Yanukovich.

clave en los que se basa la implantación de esta la UE. En cambio, más complicada será la futura
iniciativa regional. Ya que como afirma Casier, en negociación del, ya que la participación desde
el plano bilateral, la cooperación en el marco de el año 2015 en la Unión Económica Euroasiática
la AO preveía acuerdos con los países que cum- pudiera ser causa de conflicto por los distintos
pliesen las condiciones necesarias43. intereses de ambas organizaciones.
Tabla 1. Evolución de los países de la AO en rela- En lo relativo a Azerbaiyán, la puesta en marcha

ción con el desarrollo de la democracia44. de conversaciones con la UE sigue un patrón más
lento que en el caso anterior. Las negociaciones
Año 2008 Año 2014 Año 2019 relativas al AA comenzaron en el año 2017, y en
Punt. Ranking Punt. Ranking Punt. Ranking el año 2018 se dio un paso hacia adelante con
global mundial global mundial global mundial
la definición de las prioridades para alcanzar ese
Ucrania 6,94 53 5,42 92 5,90 78
acuerdo. En cuanto a la política de visados, al
Moldavia 6,50 62 6,32 69 5,75 83
igual que con Armenia, los acuerdos de facilita-
Georgia 4,62 104 5,82 81 5,42 89
ción de visados y de readmisión se acordaron en
Armenia 4,09 113 4,13 113 5,54 86
el año 2014.
Bielorrusia 3,34 132 3,69 125 2,88 141
Azerbaiyán 3,19 135 2,83 148 2,75 147
Sin embargo, al hablar de Bielorrusia, su situa-
ción con respecto a las relaciones con la UE es
Elaboración propia de autor a través de los datos muy diferente a las de cualquier otro país de la
facilitados por The Economist45. AO. Los principales problemas con los que cuen-
ta la UE para el acercamiento a Bielorrusia son:
A pesar de ello, la AO ha servido para mejorar en primer lugar, la figura inamovible del pre-
las relaciones con los seis países que forman la sidente de la República que está en manos de
entidad. A los diez años de la creación de la AO Aleksandr Lukashenko desde el año 1994 (solo
se puede afirmar que se ha avanzado en las ne- hay que recordar la controvertida derogación de
gociaciones con la mayoría de los países en tres la Constitución Bielorrusa de 1994 para ser sus-
aspectos principales: los AA, los DCFTA y las po- tituida por la de 1996 –más “cómoda” para los
líticas referentes a los visados, aunque con dife- intereses presidenciales-47); en segundo lugar, el
rencias entre sus miembros. intenso contacto con las políticas que provienen
desde Rusia; y, en tercer lugar, la difícil situación
En el caso de Armenia, en lo relativo al AA, tras del país en cuestión de derechos humanos. Todo
su negativa a firmar el acuerdo en 2013, por las ello hizo que en el año 2004 comenzaran a apli-
presiones rusas relativas a la ya mencionada carse medidas restrictivas por parte de la UE a
Unión Económica Euroasiática, las negociacio- Bielorrusia por la violación de derechos huma-
nes se reiniciaron en el año 2015 y finalizaron en nos y la situación política general del país. En el
2017. De tal forma que, en la V Cumbre de la AO, año 2016 las instituciones de la UE decidieron
de ese mismo año, se llevó a cabo la firma del levantar ciertas medidas sobre el país eslavo,
acuerdo de asociación global y reforzado entre aunque en el año 2018 se han prorrogado ciertas
Armenia y la UE46. En lo referente a la política de medidas en vista de que la situación del país no
visados, desde el año 2014 tiene lugar la facilita- mejora. Por ello, el inicio de conversaciones para
ción de visados y de readmisión entre este país y un AA con Bielorrusia depende de los cambios
políticos que se produzcan en este Estado. En lo
43
Casier, Tom, “European Neighborhood Policy: …”, relativo a los acuerdos de facilitación de visados
op. cit., p. 104. y de readmisión se iniciaron las conversaciones
44
Índice mundial elaborado por The Economist sobre en el año 2014.
el desarrollo de la democracia en 167 países que se
basa en 60 indicadores diferentes, que se puntúan En lo concerniente a Georgia y al AA, se aplica
entre el 0 y el 10, mostrándose en esta gráfica el cóm- de forma provisional desde el año 2014, y entró
puto global de cada uno de los países de la AO, en tres en vigor en el año 2016, incluyendo el apartado
años diferentes. relativo al DCFTA. En lo relativo a la política de
45
Disponible en: https://www.economist.com/gra- facilitación de visados y de readmisión se aplica
phic-detail/2020/01/22/global-democracy-has-ano-
ther-bad-year [Consultado el 12 de julio de 2020]. 47
Valéncia I Montes, Laino X., El Tratado de la Unión
46
Comisión Europea-Comunicado de prensa: Cum- Rusia-Belarús: ¿tintas sobre papel mojado?, Cuader-
bre de la Asociación Oriental de 2017: juntos seremos nos Constitucionales de la Cátedra Fadrique Furió Ce-
más fuertes, Bruselas, 24 de noviembre (2017), p. 2. riol, 43/44 (2003), pp. 211-231, p. 219.

desde el año 201148. Poco tiempo después se pu- tivas regionales (Sinergia del Mar Negro, Unión
sieron en marcha las negociaciones para alcan- para el Mediterráneo y la AO) pretendía ahondar
zar un acuerdo para la liberalización de visados y garantizar por agrupaciones de Estados, las po-
que se lleva aplicando desde el año 2017. líticas que la UE iba a llevar a cabo en esos países.
En el caso de Moldavia, en cuanto al AA, al igual En el caso de la AO la difícil situación que se es-
que sucede en Georgia, se aplica provisional- taba desarrollando en la región durante los años
mente desde el año 2014, pero no fue hasta el previos a la puesta en marcha de esta iniciativa
año 2016 cuando se produjo la aplicación oficial dejaba de manifiesto la importancia de construir
del acuerdo, incluido el DCFTA. Si hablamos de desde las instituciones comunitarias una política
la política de facilitación de visados y de readmi- clara y concisa hacia estas regiones. Sobre todo,
sión se adoptó en paralelo a las conversaciones teniendo en cuenta la situación de guerra que
que se estaban realizando para la creación de la se produjo en Georgia en el año 2008, tanto en
AO en el año 2008. A partir del año 2011 se pu- Osetia del Sur como en Abjasia, y los problemas
sieron en marcha las negociaciones para alcan- relacionados con el gas en Ucrania desde el año
zar un acuerdo para la liberalización de visados 2005, todo ello causado y potenciado por el ve-
que se lleva aplicando desde el año 2014. cino fuerte de la parte oriental, Rusia. De este
modo, hay que tener en cuenta la complicada
Por último, en Ucrania, la entrada en vigor del puesta en marcha a la que se enfrentaba la AO
AA tuvo lugar en el año 2017, aunque se esta- para conseguir sus objetivos con éxito.
ba aplicando de manera provisional desde 2014,
al igual que el DCFTA desde el año 2016, y que Por ello, se debe valorar si la AO ha sido positi-
también entró en vigor en el 2017. En el caso del va y ha alcanzado sus objetivos tras cumplir diez
régimen de facilitación de visados y de readmi- años de existencia. Si bien es cierto, que durante
sión está presente, al igual que en su país vecino estos años la UE junto con estos países se han
Moldavia, desde el año 200849. En cuanto a la li- visto salpicados por conflictos de todo tipo, entre
beralización de visados se iniciaron las conversa- ellos: políticos, territoriales, económicos, comer-
ciones en el año 2016 y al año siguiente, 2017, el ciales… Todos estos asuntos han frenado o retra-
Consejo adoptó el Reglamento sobre este asun- sado en varios momentos las negociaciones con
to. algunos de los países, por ejemplo, hablando de
problemas relativos a cuestiones políticas y terri-
CONCLUSIONES toriales, como se ha podido ver, se encuentra lo
concerniente a Ucrania, con: la anexión ilegal de
Como se ha podido ver a lo largo de este artículo,
la Península de Crimea por Rusia; y, la situación
la creación de la PEV propició un gran impulso
de lucha armada en las regiones orientales de
para desarrollar unas relaciones más amplias y
Donetsk y Lugansk en pugna entre los militares
profundas con los países vecinos de la UE, tan-
ucranianos y los milicianos prorrusos. Mientras
to de Europa Oriental, del Cáucaso Meridional,
que, si se habla en relación con problemas eco-
como de los países del arco Mediterráneo. A pe-
nómicos y comerciales, que produjeron cierto
sar de ello, también es necesario afirmar que la
retraso en las negociaciones, hay que poner el
diversidad de los países hacía muy complicado
caso de Armenia, debido a la incertidumbre que
realizar políticas comunes en todos los territo-
causó a la UE su entrada en la Unión Económica
rios que formaban la PEV. Por ello, durante los
Euroasiática, liderada por Rusia.
años siguientes a la creación de la PEV en el año
2004 se fue trabajando para la consecución de Del mismo modo, es necesario hacer una re-
nuevas propuestas que abordasen los problemas flexión crítica sobre si se están consiguiendo los
de cada región de una manera más coherente, avances necesarios dentro de los compromisos
completa y eficaz. Así, la creación de las inicia- en los que se basa la AO, como en el caso de la
democracia o de los derechos humanos, en los
48
Council of the EU, Joint Declaration of the Eastern que desde dentro de UE se debiera profundizar
Partnership Summit, Warsaw, 29-30 September 2011, para que esos asuntos mejorasen en esos países.
Warsaw, 30 September (2011), 14983/11 (Presse Pero hay que reconocer que, a pesar de ciertos
341), p. 4. inconvenientes que se han producido a lo largo
49
Diario Oficial de la UE, Acuerdo entre la Comuni-
de esta década, se han salvado muchas diferen-
dad Europea y Ucrania sobre la facilitación de la ex-
pedición de visados de corta duración, L 332/68,
cias entre las partes y se han logrado grandes
18.12.2007. acuerdos, que antes de la creación de la AO pa-

recían imposibles. Así, en lo relativo a los AA y

DCFTA que se han alcanzado con Georgia, Mol-
davia y Ucrania han servido para afianzar la po-
sición de la UE en estos países y para dar a estos
Estados cierta confianza en sus políticas a seguir.
También es de alabar los acuerdos conseguidos
en lo referente a la facilitación de visados y de
readmisión en los seis países que forman la AO
(aunque en el caso de Bielorrusia aún sigue en
fase de negociaciones desde 2014), y, en espe-
cial, los avances que se han producido en lo re-
lativo a la liberación de visados en Georgia, Mol-
davia y Ucrania.
Aún con todo esto, se debe hacer un juicio de

valor y plantear si la UE realiza con sus políticas
comunitarias todo lo que está en sus manos para
colaborar y cooperar con estos países. Hay que
tener en cuenta que uno de los principales pro-
blemas para ello son las relaciones con Rusia y lo
que este país significa para los socios orientales
de UE. En especial, en los asuntos referidos a Ar-
menia, Azerbaiyán y Bielorrusia, en los que Rusia
se encuentra muy presente en las políticas que
llevan a cabo. Pero la UE, a pesar de realizar cier-
tas medidas y políticas, no plantea firmemente
una política fuerte contra la intromisión de Rusia
en la política de estos países, afectándoles nega-
tivamente. Si bien es cierto, que unas políticas
más duras sobre las presiones que Rusia ejerce
sobre estos antiguos países soviéticos pudieran
generar grandes problemas a la UE, sobre todo,
en temas relacionados con el ámbito económico
y comercial.

CRÓNICA DE UNA RATIFICACIÓN ATRAGANTADA: EL

ACCIDENTADO SÍ DE REINO UNIDO A MAASTRICHT DESDE
LA ÓPTICA DE LA PRENSA ESPAÑOLA*
CHRONICLE OF A TROUBLESOME RATIFICATION: THE ROCKY

YES OF BRITAIN TO MAASTRICHT FROM THE SPANISH PRESS’
PERSPECTIVE*
José Carlos Tenorio Maciá*

*
Recibido: 10 julio año / Revisado: 16 septiembre 2020 / Aceptado: 2 octubre 2020 / Publicado: 15 octubre 2020
Resumen: El Tratado de Maastricht ha sido, has- INTRODUCCIÓN
1
ta la fecha, el mayor salto adelante de la cons-
trucción europea. Sin embargo, o quizá debido a 992 fue bautizado por la reina Isabel II
ello, su alumbramiento estuvo marcado por los como annus horribilis para la familia real
problemas de la familia comunitaria, y de Reino británica1. Por motivos muy diferentes, Jac-
Unido en particular, para garantizar su ratifica- ques Delors, entonces presidente de la Comisión
ción. En este trabajo nos acercamos a las páginas Europea, reconocía al término del mismo que él
de ABC, El País y La Vanguardia desde la concep- también había soñado con un año diferente. Y es
ción del tratado en diciembre de 1991 hasta su que, en palabras del profesor Walter Goldstein,
aprobación definitiva en Westminster a finales “se suponía que el año 1992 marcaría un punto
de julio de 1993. A través de siete eventos desta- de inflexión místico en la gloria de Europa. Como
cados de dicho periodo, se pretende conocer su en 1492, un viaje hacia lo desconocido iba a em-
lectura de este enredado proceso, con especial pezar”2. Pero, contra todo pronóstico, la Europa
atención al caso británico. de Maastricht, ideada para relanzar el proyecto
europeo como nunca antes, resultaría más fácil
Palabras clave: ABC, El País, La Vanguardia, de firmar por los líderes de los Doce que de ra-
Maastricht, Reino Unido tificar por los parlamentos nacionales: casi dos
años fueron necesarios antes de su entrada en
Abstract: The Maastricht Treaty has been the vigor en noviembre de 19933.
greatest leap forward of the European construc-
tion to date. However, or maybe because of that,
its birth was marked by the difficulties faced by *
El presente trabajo forma parte de una investigación
Member States, and particularly by Britain, to se- financiada por la Generalitat Valenciana y el Fondo
cure its ratification. In this work we approach the Social Europeo. Además, está enmarcado en el Pro-
pages of ABC, El País and La Vanguardia from the yecto EUCLIO 2: Europeísmo y redes transatlánticas
inception of the treaty (December 1991) to its en los siglos XX y XXI.
final approval in Westminster (July 1993). Over
1
Entre otros eventos desafortunados, en dicho año
seven key events of the period, we wish to learn se produce la separación de sus hijos Carlos y Andrés.
2
Goldstein, Walter, “Europe after Maastricht”, Fo-
about its view of this arduous process, with par-
reign Affairs, 71/5 (1992-93), p. 122.
ticular attention to the British case. 3
Para una panorámica general del Tratado de Maas-
tricht véase Martín de la Guardia, Ricardo y Pérez
Keywords: ABC, El País, La Vanguardia, Maastri- Sánchez, Guillermo, Historia de la Unión Europea: de
cht, United Kingdom los seis a la ampliación al Este, Madrid, Arco Libros,
2003; Moreno Juste, Antonio y Núñez Peñas, Vanes-

Crónica de una ratificación atragantada José Carlos Tenorio Maciá
El Tratado de Maastricht, surgido del Consejo viembre del año anterior. Europa había sido una
Europeo de diciembre del 91, se había gestado de las cuestiones que habían precipitado su caí-
entre la autocomplacencia de los Estados miem- da, ya que a muchos de los suyos les preocupaba
bros por la reciente caída del comunismo al otro que el creciente aislamiento de la mandataria en
lado del telón de acero y su inquietud por la re- Bruselas pudiese ir en contra de los intereses del
unificación alemana. Y es que, como apuntaba país. Celosa de la soberanía nacional, Maggie se
Tony Judt, si bien el Acta Única Europea del 86 ya mostraba cada vez más crítica con la Comunidad
preveía los siguientes pasos de la integración, el y su afán integracionista. Y, ciertamente, su idea
fin de la Guerra Fría actuaría como principal ca- de Europa apenas difería de la de su sucesor,
talizador de este salto cualitativo en la construc- pero los euroescépticos tories, que se sentían
ción europea4. Con Maastricht nacía lo que hoy traicionados por la conspiración interna que ha-
seguimos llamando Unión Europea y, con ella, la bía desbancado a la Dama de Hierro, mantenían
moneda única. Además, en paralelo a los acuer- la guardia alta para evitar posibles desviaciones
dos sobre la Unión Económica y Monetaria, se del nuevo líder; máxime cuando este, en su pri-
negociaron con resultados más modestos otros mer discurso como premier al otro lado del Ca-
asuntos relacionados con la Unión Política. nal, había hablado de poner a Reino Unido en
el corazón de Europa9. De alguna manera, John
Si algo corroboraron las conclusiones de la cum- Major era para ellos un líder en periodo de prue-
bre en tierras holandesas era que Reino Unido ba10.
se reafirmaba como el “awkward squad”5 o, di-
cho de otra manera, como el socio menos inte- El caso es que, a su vuelta de Maastricht, Major
gracionista del Club6, al conseguir dos opt-outs o presentó los acuerdos alcanzados en la Cámara
cláusulas de exención que le permitían mante- de los Comunes y consiguió su apoyo. Solo siete
nerse al margen de lo que hoy conocemos como de sus compañeros de filas votaron en contra11.
el euro, así como del protocolo sobre política El 7 de febrero del 92, apenas dos meses des-
social anexo al tratado. Estas concesiones lleva- pués, se firmaba oficialmente el Tratado de la
ron al premier británico, John Major, a proclamar Unión Europea. La Europa de Maastricht parecía
al término de la cumbre “juego, set y partido”7; más cerca. A partir de entonces, Londres, como
unas palabras que acabarían volviéndose en su el resto de socios, debía abrir el proceso de rati-
contra. Pero, por lo de pronto, el acuerdo de ficación pero, ante la proximidad de las eleccio-
Maastricht era percibido como un éxito formida- nes generales, Downing Street decidió aplazarlo
ble para Reino Unido y un triunfo personal de su para después de la cita con las urnas. Esta última
primer ministro8. tuvo lugar el 9 de abril del 92 y, en contra de los
sondeos12, los conservadores lograron su cuar-
Más allá de que el triunfalismo del Gobierno bri- to mandato consecutivo. Major volvía a alzar el
tánico estuviese justificado, Major había conse- puño en señal de victoria; esta vez para celebrar
guido salvar Maastricht preservando la unidad la legitimidad que le confería el respaldo popu-
del Partido Conservador, que amenazaba con lar.
resquebrajarse por la cuestión comunitaria des-
de la salida forzada de Margaret Thatcher en no- Pero el hijo del trapecista no tardaría en com-
probar que legitimidad no implicaba necesaria-
sa, Historia de la construcción europea desde 1945,
mente autoridad. Y es que la letra pequeña de su
Madrid, Alianza, 2017. inesperado triunfo advertía que su mayoría era
4
Judt, Tony, Posguerra: una historia de Europa desde precaria y que el ala euroescéptica de su parti-
1945, Barcelona, Taurus, 2015, p. 1.021.
5
Kershaw, Ian, Roller-coaster. Europe 1950-2017, Lon- 9
Young, Hugo, This blessed plot. Britain and Europe
dres, Allen Lane, 2018, p. 428. from Churchill to Blair, Londres, Papermac, 1998, p.
6
Laursen, Finn y Vanhoonacker, Sophie, The intergo- 374.
vernmental conference on political union. Institutio- 10
Forster, Anthony, Britain and the Maastricht nego-
nal reforms, new policies and international identity tiations, Basingstoke, Macmillan, 1999, p. 26.
of the European Community, Maastricht, European 11
Dorey, Peter, The Major premiership. Politics and
Institute of public administration, 1992, p. 21. policies under John Major, 1990-97, Londres, Palgrave
7
Marr, Andrew, A History of Modern Britain, Londres, Macmillan, 1999, p. 6.
Pan Books, 2008, p. 335. 12
Por primera vez en mucho tiempo, las encuestas
8
Blair, Alasdair, Dealing with Europe. Britain and the eran favorables al candidato laborista. Los electores
negotiation of the Maastricht Treaty, Aldershot, Ash- británicos parecían valorar el viraje del Labour hacia
gate, 1999, pp. 219-220. el centro bajo el liderazgo de Neil Kinnock.
44 © Historia Actual Oline, 53 (3), 2020: 43-56

José Carlos Tenorio Maciá Crónica de una ratificación atragantada
do había salido reforzada. Sobre esto último, el lograría recuperarse hasta su salida del poder en
entonces secretario privado de Major, Stephen 1997.
Wall, recuerda que durante los meses inmedia-
tos a los comicios se haría evidente que muchos En este difícil contexto, tanto para los más euro-
de los euroescépticos tories estaban más intere- peístas, en plena reactivación de las disputas na-
sados en la integridad de su batalla antieuropea cionales, como para los propios tories, que veían
que en la supervivencia del propio Gobierno13. dañada su reputación como buenos gestores de
la economía y mostraban cada vez más fisuras
Así se pondría de relieve en junio, tras el recha- por la cuestión europea, Reino Unido asumía la
zo de los daneses a la Europa de Maastricht14 presidencia de turno del Consejo. Su principal
y, poco después, en la fatídica semana de sep- cometido era evidente: había que salvar la opo-
tiembre en la que al Miércoles Negro (la mayor sición de Dinamarca a Maastricht para salvar, así,
crisis del Sistema Monetario Europeo desde su el propio tratado, aunque muchos amenazasen
entrada en vigor en el 79) le siguió el petit oui de con seguir adelante sin el país nórdico. Eso mis-
los franceses a Maastricht15. La insuficiencia del mo sucede en el Consejo Europeo de Edimburgo,
apoyo popular al nuevo tratado y las riñas en la celebrado los días 11 y 12 de diciembre del 92.
familia comunitaria en torno a la atribución de En el último acto de la presidencia británica, que
responsabilidades por el shock monetario po- aspiraba a atender las demandas de Dinamarca
nían en la picota el proyecto de Unión Europea y, para desbloquear el proceso y, a su vez, contra-
a su vez, aumentaban la presión sobre John Ma- rrestar la presión de los eurorrebeldes ingleses,
jor y su política hacia la Comunidad. se acaba hallando la fórmula por la cual, entre
otras disposiciones, se extendía a Copenhague la
De hecho, tras el no de Copenhague, el Gobierno cláusula de exención que permitía a Londres des-
británico se vio forzado a detener el proceso de vincularse de la moneda única. El 18 de mayo del
ratificación en Westminster, a la espera de una 93, los daneses, esta vez sí, daban luz verde a la
solución que complaciese a los daneses y garan- Europa de Maastricht. En consecuencia, dos días
tizase, así, la unanimidad requerida para la en- después, los Comunes aprobaban finalmente la
trada en vigor de Maastricht. Además, la salida Maastricht Bill, avalada más tarde por la Cámara
forzada de la libra del Sistema Monetario Euro- de los Lores y sancionada, en última instancia,
peo (SME), incapaz de defenderse ante la apre- por la reina Isabel II.
ciación del marco alemán, dejaba maltrecha la
estrategia económica del equipo de Major, que No obstante, a John Major todavía le esperaba
había apostado muy fuerte por este mecanismo un último asalto; seguramente el más dramático
de cooperación monetaria a nivel europeo en de todo el proceso. Con el tratado ya aprobado,
aras de contener la inflación doméstica. El gol- la ratificación quedaba pendiente de lo que re-
pe para Downing Street sería tan duro que, al- solviese el Parlamento sobre el capítulo social;
gunos como John W. Young, han considerado el uno de los dos opt-outs concedidos a Londres,
Miércoles Negro como el punto de inflexión del y que le eximía de lo que Bruselas dispusiese en
mandato de John Major16; un evento del que no este ámbito. La oposición laborista, cada vez más
atraída por la idea de una Europa social, había
13
Wall, Stephen, A stranger in Europe: Britain and the
decidido elevar una moción a los Comunes para
EU from Thatcher to Blair, Oxford, University Press,
2008, p. 138.
que los diputados se pronunciasen al respecto.
14
Con un 50,7% del electorado en contra, el no de Los euroescépticos tories, que compartían con el
los daneses supuso la primera vez que la Comunidad Labour su animadversión hacia Major, se unie-
presenciaba la incapacidad de un Estado miembro de ron a sus habituales adversarios, lo que llevó al
ratificar alguno de sus tratados. premier a someter a su Gobierno a una moción
15
El Miércoles Negro hace referencia al 16 de sep- de confianza ligada al mantenimiento del contro-
tiembre de 1992, cuando fruto de la inestabilidad de vertido opt-out. Esta vez, los rebeldes del Partido
las monedas europeas, la libra, que se había incorpo- Conservador se posicionaron a favor de su líder
rado tarde y a regañadientes al Sistema Monetario y, evitando su propia autodestrucción, confirma-
Europeo, se vio forzada a abandonar este sistema de
ron el cierre definitivo del proceso de ratificación
tipos de cambio fijos por la presión de los mercados.
Cuatro días más tarde, los franceses daban su apro-
en Westminster.
bación al Tratado de Maastricht por un margen muy
Así se ponía fin a la pesadilla que, de acuerdo
estrecho.
16
W. Young, John, Britain and European unity. 1945-
a Andrew Geddes, había supuesto la aprobación
1999, Basingstoke, Macmillan Press Ltd., 2000, p. 161.

de Maastricht para el 10 de Downing Street17. Un las principales cabeceras españolas de la época

mal sueño compartido por los más europeístas la voz discordante de Londres en el camino hacia
del subcontinente, que solo pudieron brindar la Unión Europea? Esta cuestión guiará nuestro
tras las resoluciones que, sobre el nuevo tratado, análisis en adelante.
quedaban pendientes en los tribunales de Ale-
mania y Reino Unido. El 1 de noviembre de 1993, 1. EL PROCESO EN LOS MEDIOS
la Comunidad Económica Europea (CEE) daba el
1.1. Consejo Europeo de Maastricht (9-10 di-
salto que tanto se le había resistido: la Unión Eu-
ciembre 1991)
ropea iniciaba su andadura.
ABC se refiere a Maastricht en tres ediciones. La
En este trabajo abordamos la travesía de la Eu-
idea principal que se desprende de sus comenta-
ropa forjada en Maastricht desde las páginas de
rios es la siguiente: la integración federal presen-
tres de los diarios más distinguidos de la prensa
tada en esta cumbre llegaba demasiado rápido,
española: ABC, El País y La Vanguardia18. Para
ya que trataba de establecer por decreto una
ello, se han seleccionado siete eventos clave de
realidad que carecía de bases firmes para hacer
un periodo que abarca más de año y medio, des-
efectiva una empresa de tanta envergadura. De
de la concepción del tratado en diciembre del
ahí que, aun reconociendo la importancia de la
91 hasta su aprobación final en Westminster a
fecha para el proyecto europeo, cargase contra
finales de julio del 93. Nuestro análisis incluye
los “eurofrenéticos” y “euromaximalistas” por
el Consejo Europeo de Maastricht, las eleccio-
priorizar el idealismo sobre la realidad prácti-
nes generales en Reino Unido, los referéndums
ca20. No debe sorprender que, conocidos los re-
en Dinamarca y Francia19, el llamado Miércoles
sultados de la reunión, rehúya del triunfalismo
Negro, el Consejo Europeo de Edimburgo y la
y presente una lectura puramente nacional del
ratificación definitiva en Westminster. De cada
evento, poniendo en valor los fondos de cohe-
acontecimiento se consulta el día o los días de su
sión logrados por Felipe González.
celebración, así como las dos jornadas previas y
las dos posteriores, poniendo el foco en el espa- Por otro lado, a lo largo de estas jornadas ABC
cio editorial, tanto a nivel cuantitativo como cua- instaba a los socios europeos a integrar la visión
litativo. Esto último responde al doble objetivo de un Reino Unido que, a su parecer, estaba
de la presente investigación: por un lado, cono- mostrando una disposición inédita a fortalecer
cer la importancia otorgada por la prensa a cada la cooperación europea.
una de las fechas destacadas; por otro, averiguar
y comparar la interpretación de cada periódico El País se refiere a Maastricht desde sus páginas
de los distintos eventos, teniendo siempre en editoriales en dos ocasiones: antes y después de
cuenta su lectura del caso británico. celebrarse la reunión. Esta última se presentaba
como el rubicón de la Europa política y económi-
En una España gobernada desde 1982 por el Par- ca, y una vez finalizada, se ensalzaba que, en un
tido Socialista de Felipe González, firme defensor nuevo éxito histórico, Europa avanzaba: tras los
de la profundización del proyecto europeo aus- Tratados de Roma, “llegar a este punto ha sido
piciada en Maastricht, ¿cómo valorarían tres de el segundo gran éxito de la Europa contemporá-
nea”. Eso sí, la cabecera reconocía que, pese a
17
Geddes, Andrew, The European Union and British los aspectos federales incluidos, el paso adelante
politics, Basingstoke, Palgrave Macmillan, 2004, p. había sido limitado21.
202.
18
Según datos de la Oficina de Justificación de la Di- Es precisamente la modestia del progreso lo que,
fusión, en 1993, año en el cual se cierra nuestra in- para El País, convertía a Londres en claro vence-
vestigación, El País (progresista) era el diario de in- dor de la cumbre; un triunfo que compartía con
formación general líder en España, seguido por ABC Madrid por los resultados en materia de cohe-
(monárquico-conservador). Por su parte, La Vanguar- sión. Ya desde un inicio, el diario destacaba las
dia (catalanista y de tendencial liberal) se situaba de reticencias británicas ante Maastricht; toda una
cuarto entre los más vendidos. Información recogida
amenaza contra las pulsiones integracionistas
en “La OJD certifica el liderazgo absoluto del diario El
País en el año 1993”, El País, 7 de junio de 1994, p. 34.
19
Además de la consulta a daneses y franceses en tor- 20
“Europa en Maastricht”, ABC, 8 de diciembre de
no al nuevo tratado, Irlanda también convocaría un 1991, p. 21.
referéndum sobre Maastricht, saliendo adelante con 21
“Europa avanza”, El País, 12 de diciembre de 1991,
el apoyo de casi el 70% del electorado. p. 8.

de la mayoría. De hecho, el acuerdo final llega cio incómodo (etiqueta habitual, sobre todo, en
a ser presentado como el producto resultante las páginas de El País) sino como el abogado del
de las concesiones hechas por Londres; es decir, diablo imprescindible para acercar a tierra firme
las conclusiones de Maastricht representarían el las ideas excesivamente ambiciosas de Maastri-
punto hasta el cual la delegación británica se ha- cht.
bría dejado arrastrar sus pies, plantados a con-
tracorriente22. Ahora bien, ello no es óbice para El País y La Vanguardia, por su parte, exhiben
que, a lo largo de estas jornadas, se pusiese en mayor simpatía por la Europa de Maastricht. Ce-
valor la mejor disposición de John Major en la lebran por encima de todo que se avanzase en
mesa de negociaciones comunitaria, en contras- la construcción europea aunque, a diferencia
te con la actitud de su predecesora, Margaret de ABC, creían que el tratado se había quedado
Thatcher. corto en su alcance. Al fin y al cabo, ambas ca-
beceras ansiaban una verdadera Europa política.
La Vanguardia menciona la cita de Maastricht en Pero, aun reconociendo sus imperfecciones, no
dos ocasiones. Para el diario catalán, cualquier veían una alternativa mejor a Maastricht.
avance en la integración comunitaria debía par-
tir del consenso entre sus miembros. Pero de la 1.2. Elecciones generales en Reino Unido (9
misma forma que pedía prudencia, compren- abril 1992)
diendo incluso las reservas de Londres a partici-
La convocatoria electoral en las Islas no mere-
par en un modelo de Europa unitario e inflexible,
ce la atención de ABC hasta el mismo día de la
creía llegado el momento de dar un salto cuali-
consulta. Desde entonces, los comicios se cuelan
tativo, sobre todo ahora que había caído el telón
en su espacio editorial. El diario ponía de relie-
de acero23.
ve que los británicos acudían a las urnas sin que
Una vez concluye la cumbre, además de valo- se enfrentasen dos modelos de sociedad, tal y
rar la actuación de la delegación española, La como venía siendo habitual en el país; esta vez,
Vanguardia festeja el progreso alcanzado, que no eran las grandes ideologías sino las cuestio-
no duda en considerar un paso histórico. Ahora nes concretas las que ocupaban el debate públi-
bien, reconoce la insatisfacción de quienes espe- co, y Europa no estaba entre ellas. Esto se debía,
raban más de Maastricht y teme que las cláusu- en parte, al “nuevo laborismo” de Neil Kinnock:
las de exención concedidas a Londres sirviesen “un socialismo convenientemente pasteurizado,
de precedente a otros países. Estos opt-out, en capaz de enterrar sus viejos mitos”. El diario re-
cualquier caso, volvían a cubrir de nubes el canal conocía que el líder del Labour había hecho me-
de la Mancha: “la cuestión ahora es saber si Lon- jor campaña que el actual primer ministro tory,
dres, al marginarse, no ha vuelto a perder otra pero creía una incógnita los resultados25.
oportunidad para, como corrobora la historia,
Una vez conocido el desenlace electoral, ABC
intentar subirse al tren después, a destiempo y
no escondía su sorpresa ni su satisfacción por
en peores condiciones”24.
la reelección de John Major, lo que demostra-
Así pues, ABC toma distancia desde el principio ba el buen sentido de los electores británicos:
respecto a la Europa diseñada en Maastricht, al toda una apuesta por la estabilidad en tiempos
considerar que trataba de imponer un modelo de convulsión internacional. Para esta cabecera,
centralista y federal sin el beneplácito previo de se había impuesto la mayor competencia y sin-
la opinión pública. En ningún momento cuestio- ceridad ideológica de John Major respecto a Kin-
na la necesidad de la integración europea pero nock, un recién convertido al lenguaje liberal26.
entiende que otra Europa era posible; una Eu- Esta interpretación doméstica ofrecía, además,
ropa más práctica, que no tratase de forzar una una lectura más global: los resultados en Reino
nueva realidad y que se limitase a evolucionar al Unido eran la última confirmación de la tenden-
ritmo del sentir popular. Por todo ello, ABC coin- cia al triunfo de los postulados de centro-dere-
cide, a grandes rasgos, con la postura crítica de cha en la nueva Europa de la posguerra fría.
Londres, a quien presenta no tanto como un so-
22
Id.
23
“Ante la cumbre de Maastricht”, La Vanguardia, 8 25
“Elecciones británicas”, ABC, 9 de abril de 1992, p.
de diciembre de 1991, p. 22. 19.
24
“Pero se mueve”, La Vanguardia, 12 de diciembre 26
“Triunfo conservador”, ABC, 10 de abril de 1992, p.
de 1991, p. 18. 19.

Ahora bien, ABC advertía que la exigua mayo- espacio en la segunda página, ponía en valor la
ría conseguida por Major obligaba a los tories a estabilidad del sistema británico, que huía de los
atender los graves problemas económicos y so- extremismos que florecían al otro lado del Canal,
ciales de Reino Unido. En ningún momento se e indicaba que el éxito de Major suponía el man-
incluye la ratificación de Maastricht entre ellos. tenimiento del thatcherismo; un fenómeno que,
a su entender, habría llegado a su fin si la candi-
En sus dos editoriales sobre el 9-A, El País tilda data hubiese sido la propia Margaret Thatcher. El
de mediocre la campaña de los dos principales estilo del actual líder tory, más suave y humano,
partidos, en un Reino Unido que exhibía un débil habría resultado clave para vencer y garantizar la
liderazgo desde la salida de Margaret Thatcher, continuidad de su legado32.
“comprensible e incluso saludable en un país
hastiado de caudillismo”. Precisamente, cree Por lo tanto, los tres diarios muestran su sorpre-
que la Dama de Hierro había priorizado lo urgen- sa por la victoria de John Major en los comicios,
te frente a lo importante, que ahora correspon- lo que, al menos en un primer momento, dejaba
día atender al próximo primer ministro: el enca- en la sombra las posibles consecuencias del es-
je de las naciones de Reino Unido y la reforma trecho margen de su victoria a la hora de sacar
institucional (léase un nuevo sistema electoral y adelante el tratado en los Comunes; un tratado
una Constitución escrita)27. Conocida la victoria que pasa desapercibido en la cobertura de las
de John Major, que entiende como inesperada e tres cabeceras. Por otro lado, aunque ABC es el
histórica28, cree que se había impuesto la opción único que se posiciona en favor del candidato
de la gente corriente; vencía el hombre de la ca- tory, todos manifiestan cierta satisfacción por
lle, el hijo del trapecista29. En definitiva, para El los resultados. Ahora bien, a la hora de explicar
País John Major lograba borrar con su victoria el el triunfo electoral, El País y La Vanguardia po-
fantasma de Margaret Thatcher para siempre30. nen mayor énfasis en las virtudes de la persona,
mientras que para ABC era, ante todo, un triunfo
La Vanguardia, por su parte, solo le dedica una de las ideas de centro-derecha.
referencia a los comicios en su espacio editorial,
que no es sino una valoración de los resultados. 1.3. Referéndum en Dinamarca (2 junio 1992)
Para el diario catalán, la victoria había sido un
triunfo personal del candidato tory: “Major re- Las dos veces que ABC se refiere a este acon-
presentaba el punto medio que la mayoría bus- tecimiento en su espacio editorial lo hace tras
caba: ni entusiasta thatcherista ni converso como conocerse los resultados. La cabecera no cele-
Kinnock”31. En adelante, y debido a la profunda bra la derrota de Maastricht en tierras danesas
división del país, al premier le esperaba una ta- pero entiende que había sido un aviso saludable
rea compleja, pero la cabecera celebraba que, al a cargo de una nación ejemplar, que sabía lo que
menos, Major contaba con la mayoría parlamen- votaba. Suscribe algunos de los argumentos de
taria para poder hacerle frente. La cuestión eu- los partidarios del no e insiste en que no se había
ropea no se encontraba entre dichos retos. rechazado a Europa sino a cierta Europa: la Euro-
pa federal dominada por el eje París-Berlín, go-
También el director del periódico barcelonés, bernada por una vasta burocracia ajena al con-
Juan Tapia, dedicaba un comentario a la actua- trol democrático33. Más allá de las consecuencias
lidad política en Reino Unido. Desde su habitual jurídicas, para este diario los efectos más graves
del resultado eran los psicológicos, al extender-
se la sensación de que los dirigentes iban por un
27
“Los grandes temas pendientes”, El País, 8 de abril
de 1992, p. 12.
lado y la Europa real por otro. Por ello, considera
28
El día previo a la jornada electoral, Enric González, que el no danés podría propagarse a otros paí-
corresponsal de El País en Londres, hacía la siguiente ses donde ya se estaban alzando voces críticas
observación: “si mañana vence Major sería la mayor con la propuesta de Unión Europea. No incluye
sorpresa electoral desde la caída de Churchill” (Gon- a Reino Unido entre ellos, pero comenta que, si
zález, Enric, “Los conservadores dicen que su derrota bien Downing Street había optado por un cauto
supondría el ascenso del fascismo y la quiebra del Rei-
no Unido”, El País, 8 de abril de 1992, p. 7).
29
“Como un transatlántico”, El País, 11 de abril de
1992, p. 12. 32
Tapia, Juan, “La victoria de Major”, La Vanguardia,
30
Id. 11 de abril de 1992, p. 2.
31
“La victoria de Major”, La Vanguardia, 11 de abril 33
“El no de Dinamarca”, ABC, 3 de junio de 1992, p.
de 1992, p. 18. 17.

silencio, Margaret Thatcher estaría meditando bio. Y esta actitud, aunque por distintos motivos,
desde su retiro34. puede contagiarse a otros países”36.
El País obvia por completo la consulta danesa Así pues, los tres periódicos, pese a reconocer
hasta la última jornada de nuestro análisis. En su desde un principio la importancia de este even-
único editorial, el diario se muestra preocupado to, solo se refieren a él tras conocerse su desen-
porque las reticencias a la construcción euro- lace. ABC evita celebrarlo pero muestra su com-
pea no eran exclusivas de Copenhague y llama a prensión, acomodando los resultados a su propia
Bruselas a tomar nota de ello, aunque descarta lectura de lo acordado apenas seis meses antes:
una posible renegociación del tratado. Considera la Europa real reaccionaba contra la Europa ficti-
que el pecado capital de Maastricht había sido cia proyectada en Maastricht. La Vanguardia, en
su déficit democrático. No obstante, cree que se cambio, carga contra los detractores del tratado
encontraría una salida a la crisis abierta por el re- en tierras escandinavas y, al igual que El País,
chazo danés, que podría basarse en ofrecer a los insta a seguir adelante con el proceso de ratifi-
dinamarqueses el modelo de opt-out acordado cación. Para el diario del Grupo PRISA, la salida
en Maastricht para Reino Unido. Sobre este últi- a este revés podría encontrarse en la extensión
mo, precisamente, hace el siguiente comentario: a Copenhague del modelo británico de opt-out.
“Paradójicamente, los menos afectados parecen Eso sí, aunque todos se refieren al refuerzo de la
ser los británicos, tal vez porque en su caso, y de causa euroescéptica, ninguno atisba una posible
acuerdo con una tradición democrática envidia- reacción al tratado en Reino Unido.
ble, el debate se produjo antes de la firma del
acuerdo”35. 1.4. Miércoles Negro (16 septiembre 1992)
Al igual que El País, La Vanguardia solo comen- En los tres editoriales localizados, ABC ofrece
ta lo acontecido en Dinamarca en la última de desde su espacio editorial una lectura funda-
las ediciones consultadas. El periódico catalán se mentalmente nacional de la inestabilidad mone-
decanta por un enfoque eminentemente domés- taria que sacudía a buena parte de los países de
tico, tratando de explicar el porqué del rechazo la CEE. Cuestiona, sobre todo, la política econó-
de los daneses a Maastricht. En su opinión, se mica del Gobierno español, al que instaba desde
había impuesto el temor a la burocracia de Bru- un principio a bajar los tipos de interés para de-
selas y al dominio alemán de la UE proyectada preciar la peseta y estimular así la recuperación
en Maastricht. Pero lejos de suscribirlo, el diario económica. Con el estallido del SME, que dejaría
veía en ello una paradoja manifiesta: la prospe- muy debilitada a la moneda nacional, no hace
ridad de Dinamarca se debía, en gran parte, a su más que perseverar en sus críticas al tándem Sol-
pertenencia a la familia comunitaria, de manera chaga-González, al que acusa de haber gastado
que el no de esta consulta podría volverse en su por encima de sus posibilidades. Por otro lado,
contra: “la pequeña Dinamarca, sin el mercado en una interpretación más general, entiende que
exterior europeo, tendría un glorioso pasado la tormenta monetaria se había debido a la coli-
vikingo y un mal futuro”. En cualquier caso, no sión de los intereses nacionales de los miembros
creía que Maastricht estuviese muerto y celebra- del SME, que en pleno proceso de ratificación
ba la determinación de París y Berlín de seguir de Maastricht presentaban realidades y necesi-
adelante con el proceso de ratificación, ya que el dades diferentes. Una iniciativa de cooperación
referéndum danés había alentado el euroescep- monetaria que, tras el Miércoles Negro, conside-
ticismo y este podría extenderse por la geogra- raba tocada pero no hundida37.
fía europea: “En el referéndum danés quien se
Respecto a la salida de la libra del SME anunciada
ha salido con la suya es la idea, patrocinada por
por John Major, ABC no ve en ella una solución a
Londres, de una Europa no sólo no federal, sino
largo plazo sino una medida temporal. Entiende
reducida a ser una inmensa zona de libre cam-
que el problema de Londres era, básicamente,
no haber recuperado su potencial exportador
pese a los “notables avances” experimentados
durante los años de gobierno de Margaret That-
34
“Consecuencias del «no»”, ABC, 4 de junio de 1992, 36
“Euroescepticismo”, La Vanguardia, 4 de junio de
p. 19. 1992, p. 20.
35
“Traspié danés, traspié europeo”, El País, 14 de ju- 37
“El rapto de Europa”, ABC, 18 de septiembre de
nio de 1992, p. 14. 1992, p. 17.

cher, lo que dejaba a la esterlina en una situación Bundesbank, en las que habría insinuado la ne-
de vulnerabilidad frente a los especuladores in- cesidad de un nuevo reajuste de las paridades de
ternacionales38. las monedas adscritas al SME. Ello habría desen-
cadenado la reacción de los mercados, poniendo
El País, por su parte, llega a dedicarle a la crisis en cuestión la vitalidad de Maastricht a escasos
del SME cuatro editoriales. En un primer momen- días de la consulta francesa. De ahí que países
to, esta cabecera celebraba la reducción de tipos como España se hubiesen visto forzados a de-
del Bundesbank, que interpretaba como un sí a valuar su moneda, algo que esta cabecera había
Maastricht, ya que a pocos días del referéndum llamado a evitar desde un principio y que ahora
en Francia, el Banco Federal Alemán, aun a costa hacía más urgente que nunca la aplicación de los
de perder su tradicional independencia, viraba planes de convergencia en nuestro país41.
su política monetaria para tratar de calmar a los
mercados europeos y garantizar así la estabilidad No obstante, para La Vanguardia lo más preo-
del SME. Sin embargo, el gesto alemán se mos- cupante de todo lo acontecido estos días era la
traría insuficiente y estalla la crisis, lo que para El salida de la libra del SME, sin la cual este último
País probaba la urgencia de avanzar en la UEM no sería el mismo. Además, en un país como Rei-
proyectada en Maastricht y, a nivel doméstico, no Unido, receloso de la Europa de Maastricht,
la necesidad de que España aplicase el programa John Major podría ceder ahora ante quienes de-
de convergencia económica recogido en dicho fendían la salida definitiva del SME42.
tratado. A corto plazo, la quiebra de la confianza
en el SME podría afectar a los resultados de la Así pues, durante la crisis del SME, en la que Lon-
consulta en Francia sobre la UE: “Un fantasma dres es un actor más por la pluralidad de países
recorre Europa: el de la parálisis y el estupor”39. afectados, se observa que cada publicación ofre-
ce una lectura diferente a la hora de explicar el
En cuanto a Reino Unido, el diario consideraba detonante de la misma. Como hemos visto, para
que, con su decisión de abandonar el SME, era ABC el shock monetario se debía, simplemente,
Londres quien había iniciado el terremoto que a las diferentes realidades económicas de los Es-
situaba a este sistema ante la crisis más impor- tados participantes en el SME. El País creía que la
tante de su historia. Además, recuerda que los decisión del Gobierno británico de sacar a la libra
británicos habían sido los primeros en salirse de este mecanismo había precipitado la crisis. Y
de la llamada “serpiente monetaria europea”, La Vanguardia, por su parte, responsabilizaba
el precedente del SME, y tilda de “lamentable” de todo lo ocurrido al banco central alemán, por
esta nueva retirada de la libra: “ya no hay solu- tratar de forzar un cambio en las paridades en
ciones nacionales, como tercamente defienden su propio beneficio; un reproche ausente en las
los demagogos, sino una interdependencia pro- páginas de ABC y El País.
gresiva”40.
En lo que sí coinciden los tres diarios es en la
La Vanguardia incluye dos editoriales sobre la defensa del SME, al que debía regresar la libra
tormenta monetaria, en los que resulta curioso tarde o temprano. Además, todos insisten en
el viraje que se produce entre ambos. En un prin- que Madrid debía acogerse, cuanto antes, a los
cipio, el periódico catalán se hacía eco de la deci- planes de convergencia económica acordados en
sión del Bundesbank de bajar los tipos de interés Maastricht. Ahora bien, ABC es el único que a lo
para calmar la situación del SME. No entraba en largo de estas jornadas carga contra la política
valoraciones más allá de considerarla una medi- económica de Moncloa, a quien venía instando
da más política que técnica, ya que para muchos a devaluar la moneda nacional para ganar com-
evidenciaba el compromiso de Alemania con la petitividad.
construcción europea. Sin embargo, a partir del
día 17, el mismo protagonista pasará de héroe 1.5. Referéndum en Francia (20 septiembre
a villano en las páginas de La Vanguardia. Para 1992)
este diario, el Miércoles Negro se habría precipi-
De las cinco jornadas analizadas, todas las edi-
tado por unas declaraciones del presidente del
ciones de ABC cuentan con su correspondiente
38
Id. referencia en el espacio editorial. Por mucho
39
“Un mal menor”, El País, 18 de septiembre de 1992,
p. 12. 41
“La devaluación de la peseta y el SME”, La Vanguar-
40
“El sistema, amenazado”, El País, 17 de septiembre dia, 18 de septiembre de 1992, p. 16.
de 1992, p. 12. 42
Id.

que fuesen censurables las motivaciones políti- Una vez conocidos los resultados, El País cele-
cas de su convocatoria, ABC celebra la consulta bra el triunfo de Maastricht en tierras galas, ya
sobre Maastricht en Francia y llama al Gobierno que este acuerdo iba en sintonía con la interde-
español a seguir el ejemplo galo, dando voz a los pendencia que exigía el momento histórico. No
españoles para pronunciarse sobre la “Europa obstante, la fortaleza del no en la consulta mos-
centralista, secretista y burocratizada” consa- traba la inmadurez de la construcción europea y
grada en Maastricht43. En esa misma línea, carga obligaba a avanzar, en adelante, con cautela. Y
contra el “despotismo sin ilustrar” de Moncloa es que, para este diario, “el problema básico que
por la falta de información ofrecida al pueblo es- denuncia el resultado francés es el retraso de la
pañol sobre dicho tratado44. Europa política en relación con la económica”,
por lo que llama a reducir el déficit democrático
La cabecera madrileña muestra cierta equidis- de una futura UE que, con todo, cree que apenas
tancia respecto a las dos campañas enfrentadas había dado tímidos pasos hacia el federalismo48.
en el referéndum francés: Europa necesitaba En cualquier caso, entiende que, en una Europa
unirse pero no a cualquier precio. Por eso, una más estable tras haber superado el escollo fran-
vez conocido el estrecho margen de la victoria cés, el texto de Maastricht no debía modificarse,
del sí, entiende que Bruselas debía rectificar do- ya que bastaba con revisar la forma de aplicarlo.
tando a las instituciones de mayor transparencia
y menor burocracia45. Y es que para este diario, Respecto a Londres, El País comenta que la idea
la fuerza del no a Maastricht en Francia repre- de Europa de los británicos estaba recibiendo un
sentaba el rechazo a una Europa socialista y no al apoyo indirecto por la falta de entusiasmo que
proyecto europeo per se. De hecho, su número estaba suscitando Maastricht en distintos paí-
del día 22 abría con el titular “Sí a Europa, no a ses. Además, entiende que el aplazamiento de
Delors”. la ratificación en Westminster anunciado por
John Major planteaba un desafío parecido al de
ABC llega a citar y a suscribir las célebres pala- la consulta francesa49.
bras pronunciadas por Margaret Thatcher en
su discurso de Brujas: de nada servía vencer al En cuanto a La Vanguardia, son tres los edito-
socialismo a nivel nacional si la Comunidad, sin riales que dedica al referéndum en Francia. Para
someterse a las urnas, lo aplicaba desde Bruse- el diario catalán, Maastricht podría no ser un
las46. Además, el diario coincidía con Londres en monumento a la perfección pero era, al fin y al
la necesidad de avanzar en la ampliación de la cabo, la única alternativa; una necesidad para
construcción europea y, por otro lado, creía justi- todos los europeos, cuyo destino final debía ser
ficable que John Major postergase la aprobación la unión política. De ahí que, en la campaña fran-
del tratado en las Islas hasta que se resolviese la cesa, identifique a los partidarios del no como
cuestión danesa, todavía pendiente. temerarios o, simplemente, como aquellos que
querían saldar cuentas de política interna50.
En cuanto a El País, se localizan referencias en
el espacio editorial en tres ediciones. Para esta Durante estas jornadas, La Vanguardia entiende
cabecera, el posible fin de Maastricht en caso que en el referéndum francés estaban en juego
de salir derrotado en Francia no sería el fin del los propios tratados fundacionales de la Comuni-
proyecto europeo, pero no cree que hubiese una dad y que el rechazo a Maastricht podría no solo
alternativa mejor a dicho tratado. “La negación reducir el proyecto europeo a una zona de libre
de Maastricht es ahora mismo la negación de Eu- comercio, sino desatar la reaparición de viejos y
ropa”, sentenciaba47. trágicos enfrentamientos. De ahí que, confirma-
do el petit oui de los franceses, celebre lo que
entendía como un sí a Europa. Ahora bien, re-
conoce que las dudas seguían en el horizonte y
43
“No solo un referéndum francés”, ABC, 20 de sep- que, coincidiendo con la actitud tradicional de
tiembre de 1992, p. 21. Londres, tocaba reflexionar para sintonizar con
44
“Hacia una Europa distinta”, ABC, 21 de septiembre las demandas de la opinión pública. Ello no es
de 1992, p. 19.
45
Id. 48
“Un ‘sí’ con problemas”, El País, 22 de septiembre
46
“No a la Europa socialista”, ABC, 22 de septiembre de 1992, p. 14.
de 1992, p. 17. 49
Id.
47
“Europa en vilo”, El País, 20 de septiembre de 1992, 50
“La hora de Maastricht”, La Vanguardia, 20 de sep-
p. 10. tiembre de 1992, p. 30.

óbice para que el diario defienda la rápida rati- bre, la cabecera entiende que los Doce habían
ficación de Maastricht, aunque comprenda la alcanzado “unos acuerdos de filigrana” que, al
decisión de John Major de postergar la votación menos, permitían restaurar la esperanza54.
final del tratado en su país51.
ABC no se pronuncia sobre el balance de la pre-
El mismo día en que se informaba del respaldo a sidencia británica aunque, finalizada la cumbre,
Maastricht en Francia, el director de esta cabe- la idea que se desprende de sus páginas es que
cera, Juan Tapia, titulaba su pieza habitual “Aten- su mandato semestral se cerraba ofreciendo una
ción a Gran Bretaña”, consciente de que la suerte mejor imagen.
del tratado dependía en cierta manera de lo que
ocurriese en las Islas. El País se refiere a la cita en Edimburgo en tres
de las ediciones consultadas. Para este diario,
En conjunto, aunque ABC prefería la victoria del aun sin Dinamarca o Reino Unido, el nacimiento
sí, conectaba con proclamas de uno y otro bande la Unión Europea era inexcusable. De ahí que
do, y en particular con aquellos que se oponían suscribiese las palabras de quienes, como De-
al creciente oscurantismo y burocratización de lors, amenazaban con ahondar en la integración
Bruselas. Podría decirse que el suyo era también prescindiendo de la aprobación de los socios
un petit oui. De ahí que, conocido el estrecho más recalcitrantes55. Al término de la reunión,
margen del sí, pida una rectificación en el rum- El País entendía que dicho ultimátum había fa-
bo del proyecto europeo. El País y La Vanguar- cilitado el alcance de un acuerdo que, si bien
dia, en cambio, mantienen en todo momento su de mínimos, permitía desbloquear la Europa de
defensa de Maastricht como única alternativa; Maastricht; renqueante, sí, pero viva al fin y al
ahora bien, evitan el triunfalismo tras conocer- cabo. Una salida que, aunque salvaba la cara de
se el resultado y hacen llamadas a la prudencia la presidencia británica, ponía fin a un semestre
y a la reflexión. Respecto a Londres, ninguna de “impresentable” de los británicos, que habían
las tres publicaciones duda ya de que la próxima acabado cediendo para evitar una catástrofe en
amenaza a la Europa de Maastricht llegaría des- casa y que ahora debían ratificar el tratado antes
de el otro lado del Canal. de verano56.
1.6. Consejo Europeo de Edimburgo (11-12 di- La Vanguardia, por su parte, se pronuncia desde
ciembre 1992) el espacio editorial en tres ocasiones. Y lo hace
con un marcado dramatismo: en Edimburgo es-
ABC dedica su espacio editorial a la reunión en taba en juego la supervivencia o el declive de Eu-
tres ocasiones: desde el día en que esta comien- ropa. De hecho, según sus enviados especiales,
za hasta la jornada después de su clausura. Para era la cita “más difícil y compleja” de la historia
ABC, coincidiendo con la postura de Londres, no de la CEE57. Para el diario catalán, que llamaba
podía haber Unión sin Dinamarca. De ser así, los a desafiar el bloqueo de Copenhague y Londres,
británicos podrían ser los siguientes y ello con- no cabían más dilaciones: la letra y el espíritu de
sagraría el predominio alemán en Bruselas. De Maastricht debían ser preservados, ya que dicho
ahí que rechazase las advertencias de quienes, tratado representaba un paso decisivo hacia la
como España, amenazaban ahora con avanzar Europa política y la moneda única. De lo contra-
con o sin Copenhague52. Además, aunque no rio, cree que debía ofrecerse una alternativa que
preveía el naufragio de la cita comunitaria, espe- no defraudase a una opinión pública mayorita-
raba que el proyecto europeo siguiese adelante riamente europeísta58.
sin la ambición de Maastricht, que había pasado
por alto el sentir de la ciudadanía con plantea-
mientos ilusorios. De hecho, ABC creía que el
futuro de la naciente UE pasaba por atender su 54
“Acuerdos de filigrana”, ABC, 13 de diciembre de
déficit democrático y progresar en la integración 1992, p. 25.
de forma prudente53. Una vez concluida la cum- 55
“Delors habla claro”, ABC, 11 de diciembre de 1992,
p. 16.
51
“El sí a Europa”, La Vanguardia, 21 de diciembre de 56
“Final del túnel”, El País, 14 de diciembre de 1992,
1992, p. 22. p. 14.
52
“La cumbre de Edimburgo”, ABC, 11 de diciembre 57
Ambrós, Isidre y Baquero, Pau, “Una agenda de ór-
de 1992, p. 19. dago”, La Vanguardia, 11 de diciembre de 1992, p. 4.
53
“Europa, el futuro”, ABC, 12 de diciembre de 1992, 58
“La responsabilidad de Edimburgo”, La Vanguardia,
p. 19. 11 de diciembre de 1992, p. 20.

Conocido el desenlace del Consejo Europeo, La popular60. Además, en plena discusión en West-
Vanguardia evita el triunfalismo pero cree que minster sobre el capítulo social planteado en
se había salvado el proyecto de UE diseñado Maastricht, el diario madrileño coincidía con el
en Maastricht. Además, valora la mediación de Gobierno británico en su crítica a la Europa so-
John Major para solucionar la cuestión danesa, cial, al entender que su pretendida uniformidad
que maquillaba una presidencia mediocre hasta sería un lastre para la economía de los países
la fecha. Para este diario, lo más importante era miembros61.
la lección que se llevaban de Edimburgo daneses
y británicos: con o sin ellos, sus socios comunita- Cuando John Major decide presentar una mo-
rios estaban decididos a avanzar en la construc- ción de censura para desbloquear la tramitación
ción europea59. parlamentaria de Maastricht, ABC reacciona
apoyando la apuesta del premier, que evidencia-
Así pues, ABC es el único periódico que, en con- ba su coraje y suponía toda una lección demo-
tra de la postura de la Comisión Europea y de crática. Ahora bien, conocido el éxito de su ma-
acuerdo con la visión británica, defendía que no niobra, la cabecera no esconde que el liderazgo
podía haber Unión sin alguno de los doce miem- de Major seguía en cuestión62.
bros; precisamente porque dejar atrás a los so-
cios más críticos con Bruselas supondría dotar El País, por su parte, solo se refiere a la políti-
de mayor poder al eje franco-alemán, una sica británica desde su editorial para comentar la
tuación que contemplaba como indeseable. Por victoria de Major en la moción de censura. Para
el contrario, tanto El País como La Vanguardia esta cabecera, que John Major superase el voto
rechazaban renegociar el tratado en Edimburgo de confianza y, con ello, el último escollo parla-
y aplaudían la determinación de quienes defen- mentario para ratificar Maastricht, no resolvía la
dían seguir adelante, aunque para ello hubiese división interna de su partido, que se encontraba
que prescindir de los miembros más reacios. No en una situación de miseria por la rebelión de
obstante, una vez conocido el desenlace de la los euroescépticos thatcheristas. Ahora bien, el
cumbre se percibe una moderada satisfacción en premier conseguía dejar atrás una semana en la
los tres diarios; en el caso de ABC por haberse al- que había peligrado hasta la presencia del Reino
canzado un acuerdo a doce. Además, todos coin- Unido en la CEE. Por otro lado, El País se refiere
cidían en que lo pactado en Edimburgo mejora- también a la cuestión elevada por el conservador
ba la imagen de una presidencia británica hasta rebelde Rees-Mogg al High Court, planteando la
entonces enrevesada, lo que podría facilitar la posible ilegalidad de que Westminster ratificase
ratificación definitiva de la Europa de Maastricht un tratado que limitaba la soberanía nacional.
en Westminster. Para este diario, la razón estaba del lado de quie-
nes no veían en ello ni un ápice de inconstitucio-
1.7. Ratificación en Westminster (22-23 julio nalidad63.
1993)
Al igual que El País, a lo largo de estas jornadas
ABC aborda la actualidad política de Reino Uni- solo aparece un comentario editorial en las pági-
do en dos ocasiones. Para esta cabecera, nuestro nas de La Vanguardia, en el que se valora la vic-
país debía tomar ejemplo del encendido debate toria final de John Major en los Comunes. Para
que estaba teniendo lugar al otro lado del Canal esta cabecera, el premier continuaba con la eti-
en torno a la Europa de Maastricht. En este sen- queta de provisionalidad con la que había llega-
tido, creía conveniente analizar al detalle dicho do al 10 de Downing Street tras sustituir a Mar-
tratado, puesto que era una norma de rango garet Thatcher. Ahora bien, había jugado fuerte
superior a la propia Constitución. El diario con- al plantear un voto de confianza que, una vez
sideraba inexorable la marcha hacia la Unión superado, conseguía afirmar su dominio sobre
Europea, pero esta debía llevar siempre consigo el Partido Conservador y, más concretamente,
a la ciudadanía. Por eso, para ABC, la UE del fu- sobre la Dama de Hierro y los suyos. El Tratado
turo debía parecerse a la Unión que se estaba de Maastricht quedaba así salvado, a la espera
discutiendo en países como Reino Unido: una de las últimas decisiones judiciales pendientes
UE que avanzase con la legitimidad del respaldo 60
“Discutir Maastricht”, ABC, 21 de julio de 1993, p.
15.
61
“La crisis británica”, ABC, 24 de julio de 1993, p. 15.
59
“Alivio tras la cumbre”, La Vanguardia, 14 de di- 62
Id.
ciembre de 1992, p. 24. 63
“Major gana”, El País, 24 de julio de 1993, p. 8.

en las islas británicas y en Alemania64. Como como mínimo, un editorial a cada uno de ellos,
decía el director del diario, Juan Tapia, “Europa y en la mayoría de los ejemplares consultados
atraviesa una gran crisis. Pero por ahora resiste se sitúan entre los temas más relevantes. Aho-
y sigue”65. ra bien, se pueden diferenciar claramente dos
grupos. El primero, que genera más reacciones
En definitiva, que Westminster siguiese dis- desde el espacio editorial, incluye las cumbres
cutiendo la Europa de Maastricht era todo un de Maastricht y Edimburgo, la crisis del SME y
ejemplo para ABC, ya que, en consonancia con el referéndum en Francia. El otro bloque, con un
su línea editorial, el proceso de integración debía número de referencias más discreto, engloba las
caminar siempre de la mano del sentir de los ciu- elecciones generales en Reino Unido, la consulta
dadanos. Además, coincide con La Vanguardia danesa y la ratificación final en los Comunes.
en valorar positivamente la moción de confianza
planteada por John Major para salvar Maastricht Si a nivel cuantitativo predominan las similitudes
en última instancia. El País, por su parte, se cen- entre las tres cabeceras, en lo referente al ámbi-
traba en la división de los conservadores britá- to cualitativo de nuestro análisis prevalecen las
nicos en torno a Europa y, al igual que el resto diferencias. Ello es así, sobre todo, por el marca-
de publicaciones, entendía que el desenlace final do contraste del discurso de ABC frente al de El
no resolvía las grietas de la formación tory. País y La Vanguardia, que presentan líneas edito-
riales más parejas. A grandes rasgos, el primero
CONCLUSIONES representa la voz crítica que, sin cuestionar el
proyecto europeo, arremete contra la Unión ne-
Desde la concepción inicial del Tratado de la UE
gociada en Maastricht. Las dos cabeceras restan-
hasta su aprobación definitiva en Westminster,
tes, por su parte, ofrecen una postura más ama-
ABC, El País y La Vanguardia coinciden en la im-
ble hacia la nueva Europa proyectada en tierras
portancia diferenciada que otorgan a cada uno
holandesas. De ahí que solo ABC se identifique,
de los eventos destacados. Es decir, más allá de
en buena medida, con la idea de Europa defendi-
la particularidad discursiva de cada medio, exis-
da por el Gobierno británico, y que tanto El País
te cierta semejanza en el número de referencias
como La Vanguardia se acerquen a las tesis de
que de cada acontecimiento incluyen los tres
las instituciones comunitarias, muy parecidas a
diarios en su espacio editorial. Así, siendo ABC
las del propio Gobierno español.
el periódico más activo desde las páginas de opi-
nión66, se puede observar una lógica general en Con todo, sí se puede observar un relato com-
la relevancia otorgada por todos ellos a cada fe- partido por los tres diarios a lo largo de nuestra
cha: la cumbre de Maastricht merece una aten- investigación. En Maastricht, todos coincidían
ción especial. Esta se reduce con las elecciones en poner a Londres la etiqueta de vencedor, ya
en Reino Unido y, más todavía, con el referén- que había obtenido las cláusulas de exención a
dum en Dinamarca, que solo despiertan cierto las que aspiraba. De ahí que nadie cuestionase
interés tras conocerse los resultados. La tenden- la aprobación de dicho tratado en Westmins-
cia a la baja cambia drásticamente con la crisis ter. Cuatro meses después, todos mostraban
del SME y, especialmente, con la consulta en su sorpresa por la victoria de John Major en los
Francia, donde se alcanza el clímax. El Consejo comicios generales, lo que, al menos en un pri-
Europeo en Edimburgo seguirá generando bas- mer momento, dejaba en la sombra las posibles
tantes comentarios, aunque menos que antes, consecuencias del estrecho margen de su victo-
desinflándose después con el cierre del proceso ria a la hora de sacar adelante el tratado en los
en Westminster. Comunes. Una vez conocido el no danés, se daba
por hecho que, habiendo sido debatido por los
Es cierto que las tres publicaciones cubren, de
diputados británicos, lo ocurrido en Dinamarca
forma casi siempre diaria, todos los aconteci-
no afectaría a Londres. Ahora bien, aunque no
mientos analizados. De hecho, todas le dedican,
se adivinaba la reapertura de la discusión en las
Islas, empezaba a calar la sensación de que algo
64
“Un paso decisivo en Gran Bretaña”, La Vanguardia,
había cambiado.
24 de julio de 1993, p. 14.
65
Tapia, Juan, “Las crisis europeas”, La Vanguardia, 24 Poco después, durante la crisis del SME, que
de julio de 1993, p. 2.
golpeaba a numerosos países, Londres sería
66
Frente a los 16 editoriales de El País y los 13 de
La Vanguardia, el diario ABC dedica 22 a lo largo de
un actor más, aunque ya se hablaba de que la
nuestro análisis. aprobación final de Maastricht en Westminster

peligraba. Tras el veredicto francés, por el que Además, su rechazo a la Europa social y la impor-
ninguno lanzaba fuegos artificiales, todos reco- tancia otorgada a la ampliación del club comuni-
nocían la inmadurez de la construcción europea tario concordaba con la opinión de Londres. Sin
o, al menos, la necesidad de avanzar con pru- duda, es el título más cercano a los tories y, en
dencia. Tampoco se percibiría triunfalismo tras general, el que mayor estima muestra por el país
la cumbre de Edimburgo, aunque al igual que en de la Union Jack.
Maastricht, La Vanguardia y El País celebraban
el mero hecho de que se alcanzase un acuerdo. Será El País quien lance las críticas más rotundas
Además, la determinación de la mayoría de Esta- contra los británicos, a quienes presenta como
dos miembros de avanzar hacia la UE, reafirma- una amenaza para esa mayoría que, de acuerdo
da en la capital escocesa, y el balance positivo de a la postura del propio diario, anhelaba estrechar
la reunión para los intereses británicos, en parte los lazos de la familia comunitaria. Por ejemplo,
por la mediación de John Major en la cuestión tilda de cicatera su presidencia del Consejo en el
danesa, dejaban en un segundo plano las posi- segundo semestre del 92 y, previamente, llega a
bles dificultades de Londres y Dinamarca para situar en la salida de la libra del SME el origen de
avalar definitivamente Maastricht. la crisis monetaria. La Vanguardia, por su parte,
no se muestra tan crítica con Reino Unido, cuya
Ya en Westminster, no se atisbaba la derrota final particular renuencia a la integración europea
del Gobierno porque la aprobación de Maastri- comprendía. Ahora bien, se suceden las adver-
cht ya estaba muy avanzada, aunque no se lle- tencias de que dicha actitud aislacionista podría
gaba a descartar del todo y existía cierto drama. acabar volviéndose en su contra.
Al final, superada la moción de censura y, con
ella, los obstáculos finales en la ratificación del Pero si algún Gobierno es cuestionado durante
tratado, ninguna de las tres cabeceras se atre- este periodo en las páginas de ABC ese es el de
vía a asegurar la entrada en vigor de Maastricht. Felipe González, al que se vincula con el proyec-
Además, todos reconocían la creciente debilidad to de Unión Europea elaborado en Maastricht de
del primer ministro británico, señalada habitual- espaldas a la ciudadanía. Es por ello por lo que
mente desde el Miércoles Negro. se le llega a acusar de estar ejerciendo un “des-
potismo ilustrado” sobre los españoles, siendo el
Sobre este último, cabe destacar que, a lo largo único diario que solicita abiertamente una con-
de la presente investigación, se percibe en los sulta nacional sobre el Tratado de la UE o, en su
tres diarios que John Major, si era un euroescép- defecto, elecciones anticipadas.
tico, era al menos “su euroescéptico”, lo que le
merece una mayor consideración por parte de Por último, cabe destacar que, a lo largo de nues-
todos ellos. Esto podría explicar, en parte, que tro análisis, La Vanguardia es la cabecera que
en los comicios generales de abril del 92, aunque presenta el proceso de ratificación con mayor
ABC fuese el único que se posicionase en favor dramatismo. Ello se hace patente, sobre todo,
del candidato tory, todos en mayor o menor me- durante la consulta en Francia y, meses más tar-
dida se mostrasen satisfechos con los resultados de, en el Consejo Europeo en Edimburgo, cuan-
electorales. Más de un año después, tras la apro- do dichos eventos cobran especial trascendencia
bación definitiva en los Comunes, los tres dia- en su espacio editorial: o Maastricht o el caos. En
rios terminaban presentando al premier como este sentido, La Vanguardia es también la más
un gran superviviente: tocado pero vivo, al igual enérgica contra los detractores del Tratado de la
que el propio Tratado de Maastricht al momento UE (en claro contraste con ABC), lo que queda re-
de cerrar nuestro análisis. flejado en las palabras que dedica a los daneses
y franceses que se habían decantado por el no.
Por otra parte, ABC es el diario que más se pre-
ocupa por exponer la idea de Europa de los bri-
tánicos en sus páginas, e insiste en la buena dis-
posición de John Major a cooperar en la mesa
de negociaciones comunitaria. El decano de la
prensa madrileña llega incluso a identificarse
con las palabras de Margaret Thatcher en su fa-
moso discurso de Brujas: de nada servía vencer
al socialismo en las urnas si luego se acababa
aplicando desde Bruselas, ajena al voto popular.

LA PRENSA COMUNISTA ARGENTINA Y LA POLÍTICA

EXTERIOR PERONISTA (1946-1947)
THE ARGENTINE COMMUNIST PRESS AND PERONIST

FOREIGN POLICY (1946-1947)
Mercedes Saborido*
*
Universidad de Buenos Aires, Argentina. E-mail: [email protected]
Recibido: 12 agosto 2020 / Revisado: 25 septiembre 2020 / Aceptado: 10 octubre 2020 / Publicado: 15 octubre 2020
Resumen: El presente trabajo introductorio centrarse en la existencia muchos elementos de

propone analizar la visión del semanario Orien- continuidad respecto del régimen anterior2, eso
tación, órgano de prensa oficial del Partido Co- no niega, como explica Altamirano, “la novedad
munista de la Argentina (PCA), respecto de la del alineamiento de fuerzas que produjo, ni el
política exterior peronista, desde la llegada a la hecho de que con él tuviera comienzo una dico-
presidencia de Juan Domingo Perón hasta la con- tomía antagónica con largas consecuencias para
solidación de la Tercera Posición. la vida pública nacional”3.
Palabras claves: Prensa comunista, orientación, El presente trabajo, de carácter introductorio, se

peronismo, política exterior, identidad propone describir el posicionamiento del sema-
nario Orientación, órgano de prensa del Comité
Abstract: This introductory work proposes to Central del Partido, respecto de la política exte-
analyze the vision of the weekly Orientation, offi- rior peronista desde la llegada a la presidencia
cial press organ of the Communist Party of Ar- de Perón hasta la promulgación de la llamada
gentina (PCA), regarding Peronist foreign policy, Tercera Posición (1946-1947), considerando la
from the arrival of Juan Domingo Perón to the proclamación de la misma, episodio crucial en
presidency until the consolidation of the Third términos ideológicos.
Position.
En una primera aproximación a la temática, se
Keywords: communist press, Orientación, pero- sostiene la idea de que las relaciones interna-
nism, foreign policy, identity cionales constituyeron un ámbito fundamental
para la crítica y/o la formulación de la definición
INTRODUCCIÓN
de peronismo y con ello, para la reconstrucción
L
a llegada del General Juan Domingo Perón a y configuración de su propia identidad política.
la presidencia por vía democrática significó
el advenimiento de un nuevo clivaje político 2
Como explica García Sebastiani, incluso la confor-
en la historia argentina. Si bien la historiografía mación de la Unión Democrática respondía a una
ha dejado de lado la idea de la supuesta ruptura dinámica política anterior: “la alianza respondió a
y anomalía que representó el peronismo1 para pautas de entendimiento interpartidario que estaban
presentes entre las opciones políticas del espectro
partidario argentino desde la década de 1930” Gar-
1
Rein, Raanan, “De los grandes relatos a los estudios cía Sebastiani, Marcela, “Radicales y socialistas en la
de “pequeña escala”: algunas notas acerca de la his- argentina peronista”, en García Sebastiani, Marcela,
toriografía del primer peronismo”, en Rein, Raanan, Fascismo y antifascismo. Peronismo y antiperonismo.
Barry, Carolina, Acha, Omar y Quiroga, Hugo (comps.), Los conflictos políticos e ideológicos de la Argentina
Los estudios del primer peronismo. Aproximaciones (1930-1955), Madrid, Iberoamericana, p. 200.
desde el siglo XXI, Buenos Aires, Instituto Cultural de 3
Altamirano, Carlos, Bajo el signo de las masas
la provincia de Buenos Aires, 2009. (1943-1973), Buenos Aires, Ariel Historia, 2001, p. 19.

La prensa comunista argentina Mercedes Saborido
Nos basamos en el concepto de identidad políti- tica local, careciendo de todo sentido crítico6. En
ca elaborado por Aboy Carlés que la define como segundo lugar, se pueden identificar los trabajos
publicados por ex militantes y representantes de
“el conjunto de prácticas sedimentadas, la izquierda nacional, en los cuales se evidencia
configuradoras de sentido, que establecen un desmesurado esfuerzo por poner de mani-
a través de un mismo proceso de diferen- fiesto la aparente “traición” al pueblo o el “error
ciación externa y homogeneización interna, histórico” que había cometido el comunismo al
solidaridades estables, capaces de definir a enfrentarse sistemática e ininterrumpidamente
través de unidades de nominación, orienta- al peronismo7. Esa vertiente historiografía fue
ciones gregarias de la acción en relación con sostenida en su mayoría por críticos del Par-
la definición de asuntos públicos”4. tido Comunista y logró prevalecer, con ciertas
modificaciones de forma y no de fondo, duran-
La definición citada, rompe con corrientes teó-
te décadas. Estudios académicos recientes han
ricas que presuponen la identidad política como
desafiado la tradición política e historiográfica
algo dado, objetivo y estable para imprimirle un
que analizaba la dinámica política entre ambos
fuerte dinamismo asociado al devenir histórico,
grupos políticos de un modo estrictamente bi-
prestándole especial atención al elemento re-
nario8, para mostrar posturas más complejas y
lacional de las mismas (diferenciación externa
ambiguas del PCA respecto de peronismo9. Así,
además de interna) y su carácter discursivo. El
la relación entre ambos grupos políticos, carac-
discurso, en ese marco, le imprime al proceso de
terizada por distintos niveles de enfrentamiento,
identificación una lógica fuertemente performa-
con momentos de transigencia y con diversos
tiva y constitutiva de la realidad. No se conside-
espacios de imbricación y solapamiento, estuvo
ra como mero soporte de ideas preexistente (y
condicionada por la necesidad del comunismo
sedimentadas) sino vehículo de disputa política
que a su vez da cuenta del plano ideológico y de 6
Arévalo, Oscar, El Partido Comunista, Buenos Aires,
los debates en pugna en un período determina- CEAL, 1983; Fava, Athos, Qué es el Partido Comunista,
do. En toda época hay discursos en pugna: no Buenos Aires, Sudamericana, 1983; Partido Comunis-
un único discurso que monopoliza sentidos sino ta de la Argentina, Comité Central, Esbozo de Historia
una pluralidad de discursos que se relacionan en del Partido Comunista de la Argentina, Buenos Aires,
un terreno particular, en un contexto singular, a Ateneo, 1947.
7
Ramos, Jorge Abelardo, El Partido Comunista en la
partir de ciertos conceptos estructurantes. En el
política argentina, Buenos Aires, Coyoacán, 1962;
ámbito local, el discurso comunista debatió sim- Puiggrós, Rodolfo, Historia crítica de los partidos po-
bólicamente con distintos corpus teóricos tanto líticos argentinos, Buenos Aires, Argumentos, 1956;
de derecha como de izquierda, así como también Real, Juan José, 30 años de historia argentina (acción
con sectores peronistas, quizá su principal alteri- política y experiencia histórica), Buenos Aires-Monte-
dad por disputarle su sujeto revolucionario. video, Actualidad, 1962.
8
En sus investigaciones acerca del antiperonismo, Az-
La relación entre el peronismo y el comunismo zolini revisa esta concepción dicotómica existente en-
(1946-1955) en el ámbito político ha sido ana- tre peronismo antiperonismo, tomando como objeto
lizada, en sus comienzos, por dos grupos cla- de estudio el radicalismo. Azzolini, Nicolás, “Enemi-
ramente delimitados5; en primer lugar, se en- gos íntimos. Peronismo, antiperonismo y polarización
cuentran los autores pertenecientes a la esfera política en Argentina (1945-1955)”, Revista Identi-
partidaria, quienes, como parte de la narrativa dades, 6/2 (2016); Azzolini, Nicolás y Melo, Julián,
“El espejo y la trampa. La intransigencia radical y la
oficial, abordaron la temática de manera secun-
emergencia del populismo peronista en la Argentina
daria. El propósito de ese tipo de publicación era (1943-1949)”, Papeles de Trabajo, 5/8 (2011).
enaltecer el accionar partidario en la arena polí- 9
Altamirano, Carlos, Peronismo y cultura de izquier-
da, Buenos Aires, Siglo XXI, 2011; Amaral, Samuel,
Amaral, Samuel, “La renuencia de las masas; el Par-
tido Comunista ante el peronismo (1945-1955)”,
4
Aboy Carlés, Gerardo, Las dos fronteras de la demo- Buenos Aires, Universidad del CEMA, 2008; Gurba-
cracia. La reformulación de las identidades políticas nov, Andrés y Rodríguez, Sebastián, “Los comunistas
de Alfonsín a Menen, Buenos Aires, Homo Sapiens, frente al peronismo: 1943-1955”, Temas de Historia
2001, p. 54. Argentina y América, 24 (2016); Jauregui, Aníbal, “El
5
Staltari, Silvana, “El Partido Comunista frente al pe- peronismo en los debates del Partido Comunista Ar-
ronismo: estrategia y tácticas políticas, 1945-1955”, gentino: 1945-1953”, Revista Acontracorriente, 9/3
Revista Archivos de historia del movimiento obrero y (2012); Staltari, Silvana, “El Partido Comunista frente
la izquierda, 5 (2014), pp. 12-13. al peronismo… op. cit.”

Mercedes Saborido La prensa comunista argentina
de conservar la disciplina interna, la autonomía de trasmitir la doctrina y el sentir del núcleo po-
partidaria y la identidad político-ideológica fren- lítico al que sirvió; resultó una voz habitualmen-
te a posibles escisiones -que de hecho se hicie- te alternativa de gran valor ya que cohesionó
ron presentes- y por cuestiones programáticas voluntades en torno a una ideología. Dentro de
y/o ideológicas, que dependiendo el contexto, la estructura partidaria, sirvió para fortalecer la
fueron de mayor o menor significación. militancia proveyendo la solidez del análisis es-
crito. El periódico político o “militante”, como
El renovado impulso que han experimentado ellos mismos lo denominaban, fue el medio prin-
en estas últimas décadas los estudios del co- cipal por el cual un partido publicitaba sus ideas,
munismo argentino carece, sin embargo, de in- configuraba sus diferentes interpretaciones de
vestigaciones que se centren en el análisis de la la realidad, establecía las verdades propias de
política exterior peronista por parte del PCA. La todo grupo político, articulaba el plano teórico/
esfera de las relaciones exteriores y el contexto ideológico con la praxis política, discutía con sus
internacional signado por el advenimiento de la adversarios político, y se defendía, de ser nece-
Guerra Fría, los procesos de descolonización/ sario, ante los ataques recibidos. Frente a lo que
independencia y la paulatina consolidación del Giudice definió como una prensa masiva en apa-
Tercer Mundo10, pudieron ser el ámbito propicio riencia prescindente, pero en la práctica deudora
para que el comunismo articule un sólido discur- de los intereses de las capas más favorecidas de
so ideológico/confrontativo frente al peronismo. la sociedad, se alzaba la prensa militante, repre-
Su vocación internacionalista y su pertenencia al sentante de los intereses de los obreros, cuyo
Movimiento Comunista Internacional, así como propósito no era meramente informativo sino
su consecuente antiimperialismo -producto del educador, formador y organizador12.
análisis realizado por Lenin en 1916-, hacían
del PCA un espacio político original, no exento Los partidos comunistas, así como el argenti-
de tensiones, resultado de una orquestación de no, pusieron en marcha desde sus orígenes una
pertenencias a nivel nacional, regional, así como vasta política editorial que incluía revistas, pe-
global. Su atractivo residía en el carácter univer- riódicos, panfletos y libros, debido, entre otras
sal del proyecto revolucionario emancipador al razones, a la importancia que Lenin en persona
cual pertenecía. le dio al periódico como “organizador colecti-
vo”13. El esfuerzo que realizaron por promover
1. LA PRENSA COMUNISTA. COLUMNA VER- constantemente diversos proyectos editoriales,
TEBRAL DEL PARTIDO tiene su razón de ser en la amplia gama de op-
ciones que ofrece la prensa para la difusión de
La prensa ocupo un “lugar fundante de la iden-
diversas reuniones o actividades institucionales.
tidad partidaria”11. Los partidos políticos de iz-
Como explica Petra, la imposibilidad de editar en
quierda, y en particular los comunistas, contaron
condiciones de legalidad en muchos periodos de
con un conjunto diverso de artefactos culturales
su historia,
encargados, en su mayoría, de la socialización
del militante. Al hablar de esos artefactos, nos “dotó a los comunistas de un particular discurso
referimos a clubes, bibliotecas, actividades ar- sobre la función de la prensa y la palabra escrita
tísticas, editoriales, literatura, arte, prensa, etc. que al mismo tiempo que acentuaba los aspec-
Dentro de ese vasto conjunto, aquellos asocia- tos de la agitación militante, y la organización
dos directamente con la palabra impresa fueron partidaria por sobre cualquier interés de tentar
destinatarios, a lo largo de la historia, de grandes el camino de una prensa popular de masas, otor-
esperanzas de cambio social. Cumplió la misión gaba a la circulación de la letra impresa un carác-
ter épico y sacrificial”14.
10
Si bien el concepto irrumpe en la historia en 1952
con un efecto directo en el escenario internacional, se 12
Giudice, Ernesto, “La prensa obrera y comunista en
debe tener en cuenta los procesos políticos y sociales el país y su rol educativo y organizativo”, Orientación,
que lo precedieron. Para ampliar, Bergel, Martin, El 18 de septiembre de 1946.
Oriente desplazado: los intelectuales y los orígenes 13
Lenin, V., ¿Qué hacer? “Plan” de un periódico polí-
del tercermundismo en la Argentina, Quilmes, Edito- tico central para toda Rusia, 1902. Disponible en: ht-
rial UNQ, 2015. tps://www.marxists.org/espanol/lenin/obras/1900s/
11
Petra, Adriana, “Libros, revistas y publicaciones del quehacer/qh5.htm [Consultado el 30 de marzo de
comunismo argentino. Una introducción”, BADEBEC, 2020]
Revista del centro de estudios de teoría y crítica litera- 14
Petra, Adriana, “Libros, revistas y publicaciones del
ria, 9/18, (2020), p. 135. comunismo argentino… op. cit.”, p. 145.

Así lo planteaba Ernesto Giudice: “el heroísmo que se dice sino lo que se explica en cada caso,
comunista hacía milagros en las imprentas que en cada problema, surgiendo de los hechos mis-
nunca dejaron de dar forma a la idea combativa mos la comprensión teórica que educa y eleva”.
y orientadora del Partido”15. Su función era seleccionar de toda la informa-
ción disponible, aquella que era importante para
Si nos adentramos en el mundo especifico de los los obreros, y mediante la aplicación de la teóri-
órganos de prensa, el PC argentino contó, excep- ca, orientar y educar a los lectores.
tuando momentos de proscripción estricta, con
al menos una publicación del Comité Central del 2. EL PERONISMO Y SU POLÍTICA EXTERIOR
Partido. A diferencia de algunos partidos comu- EN EL SEMANARIO ORIENTACIÓN
nistas latinoamericanos –como el chileno-, y pro-
ducto de su ajetreada vida política/partidaria, la En sus orígenes, y producto de la coyuntura local
prensa cambió de nombre y formato en reitera- e internacional y de un eclecticismo ideológico,
das ocasiones. el gobierno peronista trató de modelar un pro-
yecto de país basado en tres pilares fundamen-
El semanario Orientación se publicó a lo largo tales que se retroalimentaban: la independencia
de trece años, entre septiembre de 1936 y di- económica, tendiente a lograr una mayor auto-
ciembre de 1949. Surge en un primer momento nomía con respecto a los países desarrollados
con el nombre de Hoy, figurando como director –e imprimiéndole fuerte impulso al proceso de
Cayetano Córdova Iturburu,16 pero una semana industrialización por sustitución de importacio-
después, argumentando problemas legales, se le nes–; la justicia social, cuya idea era una redistri-
cambió el nombre por el de Orientación. bución más equitativa de la riqueza nacional; y, a
nivel internacional, la soberanía política, plasma-
Como otras publicaciones comunistas, Orienta- da en una actitud claramente alternativa frente
ción estuvo clausurada desde 1943 hasta 1945. al conflicto de la Guerra Fría, la que luego se de-
Durante su primer período, hasta la clausura se nominó Tercera Posición.
autodenominó “Semanario de información po-
lítica, social y económica”, pero a partir de su La política exterior peronista estuvo condiciona-
reaparición en 1945 lo hizo con el nombre de” da por ciertos aspectos fundamentales, entre los
Órgano Oficial del Partido Comunista”. Durante que merecen ser tenidos en cuenta los siguien-
los años de su publicación, el semanario Orienta- tes: 1) la percepción tanto por el líder militar,
ción17 contó con la participación de importantes como por amplios sectores de su entorno más
personalidades del mundo comunista argenti- cercano, de que si bien la Segunda Guerra Mun-
no como Héctor P. Agosti (1911-1984), Ernesto dial había culminado, se avecinaba una tercera
Giudice (1907-1992) y Rodolfo Puiggrós (1906- de forma inexorable; 2) la pérdida de hegemonía
1980), entre otros, así como también figuras re- por parte de Gran Bretaña –antaño aliada prefe-
levantes del comunismo mundial como Georgi rencial de Argentina– y su reemplazo por Esta-
Dimitrov, Dolores Ibárruri y clásicos traducidos dos Unidos; 3) la posición de aislamiento diplo-
de Lenin y Stalin. Si bien su tirada era semanal, y mático sustentada durante la Segunda Guerra
tenía una extensión no mayor de 10 páginas, en Mundial y sus consecuencias inmediatas en las
el semanario se les otorgaba una especial aten- relaciones internacionales; y 4) el comienzo de
ción a los problemas internacionales. la Guerra Fría.
De acuerdo con la propia definición del director En primer lugar, la experiencia personal de Perón
de la publicación en los hechos, el semanario como observador de la situación internacional lo
Orientación era marxista, “pero no lo marxista convenció de que la paz que se estaba viviendo
por esos años era efímera y que el advenimien-
15
Giudice, Ernesto, “La prensa obrera y comunista en to de una Tercera Guerra Mundial, de carácter
el país … op. cit.”. incluso mucho más mundial que su predeceso-
16
Crítico de arte, periodista, poeta y militante comu- ra, era inminente. Pero lejos de conmoverse por
nista afiliado al partido en 1934. Fue miembro activo lo que depararía al mundo una guerra de tales
de la Agrupación de Intelectuales, artistas, periodista características, el líder consideraba que en caso
y escritores (AIAPE). Tarcus, Horacio, Diccionario Bio- de estallar generaría una excelente oportunidad
gráfico de la izquierda argentina, Buenos Aires, Eme- para el país, fundamentalmente en lo referi-
cé, 2007. do a la venta de alimentos: “[…] la idea de que
17
Para la fecha había logrado alcanzar un tiraje de la condición de productor de cereales y carnes
173.000 ejemplares.

constituía para la Argentina una carta de triunfo Extraordinaria Interamericana (1945) celebra-
de valor estratégico siempre estuvo presente en da en el palacio de Chapultepec en la ciudad
las representaciones del líder del justicialismo de México D.F., aunque finalmente fue invitada
[…]”18. a firmar las declaraciones finales. Dadas las cir-
cunstancias, Perón consideró verdaderamente
En segundo lugar, si bien al finalizar la Primera importante reemplazar la actitud sostenida por
Guerra Mundial se hizo evidente la pérdida de el país durante los años de guerra por otra ba-
hegemonía por parte de Gran Bretaña, el nuevo sada en un mayor protagonismo en el escenario
contexto fue subestimado por muchos obser- mundial. De allí que uno de los objetivos del go-
vadores. La imperiosa necesidad de volver a la bierno peronista fue el de estrechar lazos no sólo
situación de preguerra pareció suficiente como con los países latinoamericanos sino también
para no interpretar los acontecimientos con un con países europeos, Bélgica, Francia, Italia, Ale-
mayor grado de objetividad. De allí que costara mania Occidental y España, en los que intentó
algo de tiempo percibir el poderío que había ad- colocar los excedentes de productos agrarios, e
quirido Estados Unidos a nivel regional y mun- incluso con los países del Este, como la URSS y
dial19. otros22. Reconquistar una posición internacional
que habilitara al flamante gobierno poder gober-
En tercer lugar, Argentina experimentó duran-
nar con algún margen de maniobra se tornó así
te la mayor parte de la segunda contienda una
uno de los objetivos prioritarios. El ingreso a la
situación de aislamiento de la comunidad inter-
Organización de las Naciones Unidas era nece-
nacional debido a su neutralidad, causada, entre
sario para poder formar parte del sistema inter-
otras razones, tanto por los intereses económi-
nacional: luego de fuertes presiones por parte
cos como por la afinidad ideológica de algunos
de Gran Bretaña, los países latinoamericanos, y
sectores del gobierno con las potencias del Eje.
las consiguientes negociaciones con el bloque
Las presiones internacionales se hicieron sentir
soviético23, la Argentina finalmente se incorporó
mucho más aun luego del ingreso de los Estados
a las Naciones Unidas el 24 de octubre de 1945.
Unidos a la guerra. Pero el aislamiento se hizo
evidente en 1944, cuando el presidente de facto Por último, el factor relevante que condicionó la
de ese momento, Pedro Pablo Ramírez rompió política exterior del primer y segundo gobierno
definitivamente relaciones con el Eje y por ello peronista fue sin duda el comienzo y desarrollo
fue depuesto y reemplazado por Edelmiro Fa- de la Guerra Fría. Más allá del origen exacto de
rrell. El flamante presidente, no fue reconocido ésta –un tema de prolongada polémica-, durante
por los Estados Unidos, que incluso llegó a re- los primeros años del gobierno peronista se vivió
tirar el embajador del territorio nacional20. Para una situación internacional dominada por la in-
el secretario de estado norteamericano Cordell certidumbre y la inestabilidad. Si bien la Guerra
Hull, el general Farrell era “totalitario, hostil a la Fría no estaba en su apogeo, -claramente identi-
política norteamericana y constituía una ame- ficado a partir de la puesta en marcha de la Doc-
naza para la seguridad”21. Terminada la guerra, trina Truman- lo que estaba claro era la ruptura
Argentina quedó al margen de algunos eventos producida en el bloque antifascista, lo que plan-
importantes, entre las que figura la Conferencia teaba un nuevo escenario, en el que según Perón
había que tomar posición.
18
Paradiso, José, “Vicisitudes de una política exterior
independiente”, en Torre, Juan Carlos, Nueva Historia De este nuevo contexto deriva la famosa doctri-
Argentina. Los años peronistas (1943-1955), Buenos na de la Tercera Posición, una fórmula elaborada
Aires, Sudamericana, p. 527. durante los años 1946-1947, que aspiraba al des-
19
Para ampliar, véase Escudé, Carlos, Gran Bretaña, pliegue de una política exterior que no implica-
Estados Unidos y la declinación argentina, 1942-1949, ra un alineamiento automático con los bloques
Buenos Aires, Editorial Belgrano, 1988, pp. 253-330. en conflicto, y si bien estaba clara la pertenen-
20
Para ampliar sobre este acontecimiento Escudé, cia cultural al bloque occidental, rechazaba de
Carlos y Cisneros Andrés, “Las relaciones exteriores base la subordinación a los intereses de Estados
bajo el gobierno militar surgido el 4 de junio de 1943”,
en Escudé, Carlos y Cisneros Andrés, Historia general
de las Relaciones exteriores argentinas, http://www. 22
Escudé, Carlos y Cisneros, Andrés, Historia gene-
argentina-rree.com [Consultado el 15 de febrero de ral… op. cit.
2020]. 23
La Unión Soviética no quería dejar entrar a la Ar-
21
Lanús, Juan Archibaldo, De Chapultepec al Beagle, gentina a la ONU al considerarlo un país dominado
Vol. I, Buenos Aires, Hispanoamérica, 1986, p. 14. por el fascismo.

Unidos y se negaba a ser el “patio trasero” de tradujo casi inevitablemente en una significativa
la administración norteamericana24. La doctrina moderación del lenguaje confrontativo e hiper-
“tercerista” se presentaba como una política so- bólico, propio del comunismo.
cial internacional de orientación cristiana y pro-
clamaba ciertos valores fundamentales entre los En el ámbito de las relaciones internacionales,
que se destacaba la no intervención en asuntos los comunistas argentinos continuaron enarbo-
externos, la integración con países vecinos y de lando un encendido discurso antiimperialista
la región y la preeminencia de la paz mundial: basado en los tópicos antifascistas del periodo
“[…] la Tercera Posición implica poner la sobera- de entreguerras, lo que les permitió moverse
nía de las naciones al servicio de la humanidad en un ámbito que les era conocido y favorable,
en un sistema cooperativo de gobierno mundial “aunque sobre nuevas coordenadas e impulsos
[…]”25. Pese a esta actitud, el gobierno argentino ideológicos, por cierto, no siempre precisos ni
hizo lo posible para evitar enfrentamientos inne- situados”29. La presencia estelar del concepto
cesarios con la potencia occidental. antimperialismo dentro del mundo discursivo
comunista, se debió a una combinación de facto-
El movimiento liderado por Perón, por su alcan- res: por un lado, a su fuerza evocativa asociada
ce popular y su original forma de hacer política al principio de autodeterminación de los pueblos
en el contexto local, hizo que el comunismo de- uno de los pilares del leninismo, y por el otro,
biera revisar en varias oportunidades su postura a su capacidad de crear un presente de lucha y
respecto del mismo, entre otras razones, porque proyectar un futuro promisorio. Con la derrota
un amplio porcentaje de la clase obrera le brindó del fascismo, el fin de la Segunda Guerra Mun-
su apoyo, disputándoles, al menos en teoría, su dial, y el comienzo de la Guerra Fría, la relación
sujeto revolucionario. Fue en el Congreso Par- entre nacionalismo e internacionalismo sufrió
tidario celebrado en agosto de 1946 cuando se una transformación paulatina. El primer concep-
empezó a evidenciar el ajuste realizado por el to, anteriormente asociado a las clases medias o
comunismo a la nueva realidad emergida post altas, viró hacia sectores populares, encarnado
elecciones, caracterizando al peronismo como en movimientos anticoloniales y de liberación
un movimiento de composición heterogénea en nacional propios del Tercer Mundo. El segundo
donde aún prevalecían elementos fascistas26, re- adoptó innovadoras formas, relacionadas con
chazando la oposición sistemática al gobierno, el capital y con el cosmopolitismo cultural prin-
“oscilando entre preservar su identidad y una cipalmente “yanqui”. La lucha antiimperialista
táctica que lo sacara de su aislamiento”27. La lí- propia del periodo de la Guerra Fría puso así por
nea programática que se estableció producto de delante una nueva versión del nacionalismo: el
la asimilación y análisis de la derrota electoral, llamado “nacionalismo popular”30.
basada “criticar lo negativo y apoyar lo positi-
vo”28, se supeditaba en última instancia a la idea En armonía con el discurso soviético, el paci-
de poder conformar un Frente de Liberación Na- fismo, continuó siendo uno de sus grandes es-
cional y Social –más tarde denominado frente tandartes. El diagnóstico realizado por el comu-
democrático antiimperialista–. El viraje táctico se nismo, reforzado con la puesta en marcha de la
Doctrina Truman y el Plan Marshall, era que Es-
tados Unidos era una potencia expansionista y
24
Para ampliar sobre la política norteamericana en
la Argentina durante el periodo peronista, Rapoport,
belicista. En las antípodas se encontraba la URSS,
Mario y Spiguel, Claudio, Estados Unidos y el peronis- única garante de la paz mundial, que pregonaba
mo: la política norteamericana en la Argentina, 1949- un modelo de convivencia internacional basado
1955, Buenos Aires, Grupo Editor Latinoamericano, en el respeto de los acuerdos internacionales, el
1994. diálogo y el mutuo entendimiento.
25
Mensaje del presidente Perón al inaugurar las se-
siones del Congreso Nacional 1ero de mayo de 1950, La política exterior peronista fue abordada por
citado en Paradiso, José: “Vicisitudes de una… op. el semanario en reiteradas ocasiones; el inter-
cit.”, p. 541. nacionalismo y con él la mirada preferencial
26
Para un análisis más detallado del XI Congreso del
Partido Comunista, Amaral, Samuel, “La renuencia de 29
Petra, Adriana, Intelectuales y cultura comunista.
las masas… op. cit.”, pp. 10-18. Itinerarios, problemas y debates en la Argentina de
27
Altamirano, Carlos, Peronismo y cultura de izquier- posguerra, Buenos Aires, Fondo de Cultura, 2017, p.
da…, op. cit., p. 28. 143.
28
Gurbanov, Andrés y Rodríguez, Sebastián, “Los co- 30
Anderson, Perry, “Internacionalismo: un breviario”,
munistas frente al peronismo… op. cit.”, p. 91. New Left Review, 14 (2002), pp. 16-17.

de los asuntos exteriores fue parte constitutiva conocimiento de la URSS. Dos días luego de llegar
del comunismo. En el primer año del gobierno, al gobierno, Perón anunció el restablecimiento
se pudieron observar tres nudos problemáticos de las relaciones diplomáticas con la Unión So-
interrelacionados: en primer lugar, el “espíritu viética; sin embargo, y aun teniendo información
Chapultepec”, que hacía referencia a las presio- calificada, el peso de las movilizaciones realiza-
nes imperialistas norteamericanas y las alianzas das por el PC los días previos, denotaron que los
continentales favorecidas por esta nación, que líderes del partido estimaban que el proceso di-
derivaron en la firma del Tratado Interamericano plomático se dilataría por unos meses35. No hay
de Asistencia Recíproca (TIAR) y la creación de una manifestación oficial del partido expresada
la Organización de Estados Americanos (OEA). En en el semanario: por el contrario, hay un manto
segundo lugar, y en el marco de la no tan reno- de silencio, quizá condicionado por la descon-
vada lucha antifascista, el repudio al gobierno de fianza existente aun dentro del ámbito partidario
Franco y su supervivencia en el nuevo escena- hacia el mandatario.
rio global. Por último, y como telón de fondo de
los nombrados precedentemente, la necesaria Casi en paralelo, el flamante presidente anunció
lucha por la paz, y la confrontación hacia el go- en su discurso inaugural que enviaría al Congre-
bierno respecto de su visión catastrofista eviden- so para su ratificación el Acta de Chapultepec36 y
ciada en la Tercera Posición. la Carta de San Francisco. La ratificación del Acta
(30 de agosto), no estuvo exenta de críticas por
2.1. Las Alianzas continentales parte de distintos grupos políticos dentro y fue-
ra del recinto oficial37. El comunismo, por medio
Cuando Perón asume la presidencia a mediados de la prensa, mostró su disconformidad frente
de 1946, el orden internacional no estaba aún a lo consideraban un intento por parte de Esta-
definido; sin embargo, el recelo entre las po- dos Unidos de conformar un bloque continental
tencias integrantes de la Alianza que derrotaron bajo su liderazgo político y económico; estima-
al fascismo ya se había cristalizado. Fueron dos ban que no había, por el momento, ningún pe-
acontecimientos que manifestaron la intención ligro de agresión a excepción del imperialismo
por parte del gobierno, de buscar la reinserción norteamericano: “Hoy derrotado militarmente
en el sistema internacional: el “establecimiento” el Eje no existe peligro alguno de una agresión
de las relaciones diplomáticas con la URSS, y la extracontinental: nadie amenaza la soberanía de
ratificación de las Actas de Chapultepec y la Car- nuestros pueblos, como que no sean las mismas
ta de San Francisco. fuerzas anglo yanquis”38. No se debía firmar un
tratado de solidaridad con un país cuyo objetivo
Los pormenores respecto de la negociación ofi-
era emprender una campaña de agresión contra
cial y no oficial acerca del reconocimiento por
la Unión Soviética y los pueblos libres: “no po-
parte de la Argentina de la URSS, está desarrolla-
demos ni debemos hacerlo con Estados Unidos
do por Gilbert 31 y Rapoport32. En el marco de un
orientado por una política imperialista, por la
todavía enconado discurso antiperonista, el PC,
diplomacia del dólar que exhuma su nuevo pi-
que venía reclamado con empeño por el estable-
cimiento de relaciones con la Unión Soviética33,
sostenía que la razón por la cual ese reconoci- 35
Gilbert, Isidoro, El oro de Moscú…, op. cit., p. 141.
miento no se había efectuado era porque “la oli-
36
La Resolución VIII del Acta de Chapultepec estable-
garquía y el imperialismo niegan a nuestro país cía que los países americanos aprobarían un tratado
con el objeto de prevenir y reprimir las amenazas y
el derecho soberano de comerciar con quien
agresiones que pudiera sufrir cualquiera de ellos,
crea conveniente pretendiendo mantenerlo en para lo cual estaba programada una reunión en Río
el atraso semifeudal y semicolonial”34: eran los de Janeiro, originalmente prevista para el 20 de octu-
intereses antinacionales los que se oponían al re- bre de 1945, una vez finalizada la Conferencia de San
Francisco. Mongerfeld, Leandro, “Del TIAR a la OEA:
31
Gilbert, Isidoro, El oro de Moscú: historia secreta de Argentina, Estados Unidos y el sistema interamerica-
la diplomacia, el comercio y la inteligencia soviética no”, Revista Confines de las relaciones internacionales
en la Argentina, Buenos Aires, Sudamericana, 2007. y ciencia política, 6/12 (2010), p. 17.
32
Rapoport, Mario, Política y diplomacia en la Argen- 37
Las críticas se hicieron oír por un amplio espectro
tina. Las relaciones con EEUU y la URSS, Buenos Aires, ideológico que iba desde los propios peronistas hasta
Editorial Tesis, 1987. radicales intransigentes, incluyendo a grupos nacio-
33
Codovilla, Victorio, “Las relaciones con la Unión So- nalistas oligárquicos.
viética”, Orientación, 29 de mayo de 1946. 38
“La alianza y Chapultepec”, Orientación, 4 de sep-
34
Id. tiembre de 1946.

loto Truman”39. Lo que ellos evidenciaron fue bando republicano antes, durante y después de
una fuerte contradicción entre el espíritu de la la contienda, y la organización puesta en marcha
flamante ONU, que favorecía la defensa de la paz por el partido para la lucha antifascista tuvo en el
y la convivencia armónica de los pueblos, y las comunismo uno de sus principales protagonistas
Actas, que buscaban la consolidación de bloques a nivel local42.
regionales bajo la egida del imperialismo yan-
qui: “Como conciliar nuestra obligación –como La finalización de la Segunda Guerra Mundial, y
firmantes de las actas de Chapultepec– de estar la derrota del Eje abría un nuevo horizonte de
juntos a Estados Unidos en cualquier guerra ex- posibilidades para los reclamos antifranquistas.
tracontinental, con nuestra obligación […] como La “cuestión española”43 fue activamente tratada
integrantes de la UN de defender la paz frente a en las conferencias internacionales, y se generó
las abiertas provocaciones yanquis a la URSS, o una gran expectativa respecto de la emergencia
nuestra obligación –en ese mismo carácter– de de una condena internacional e incluso un even-
defender la soberanía de los pueblos frente a la tual derrocamiento del régimen. El epicentro del
descarada intervención de Norteamérica en la conflicto paso a ser la Asamblea General de las
guerra civil china. Evidentemente son incompa- Naciones Unidas. Las argumentaciones plantea-
tibles y de las dos debemos desechar Chapulte- das por parte de la organización frente al caso
pec”40. español se basaron en tres supuestos conexos:
derrotados los fascismos alemán e italiano, el
Si bien se puede observar una crítica directa a régimen franquista no debía sobrevivir al nuevo
los sucesos, las argumentaciones y estrategias orden mundial; España había violado su estatus
discursivas practicadas por el semanario, en el neutral y había ayudado a las potencias del Eje;
contexto del viraje táctico del partido en el XI de resultas de lo anterior, el régimen español re-
Congreso, se distancia sensiblemente de la verba presentaba un peligro para la paz mundial.
agresiva antiperonista propia del partido en los
meses previos a la asunción presidencial. Bajo En esa coyuntura, los republicanos en el exilio
los supuestos partidarios de “criticar lo positivo, empezaron a reavivar la idea de la ilegitimidad
y apoyar lo negativo”, si bien ciertas políticas en del régimen. En la Argentina, las voces progresis-
el orden doméstico podían ser valoradas como tas y los republicanos exiliados en estas tierras se
virtuosas, en el ámbito exterior su pertenencia hicieron eco del clima de época44. En consonan-
a un movimiento basado en solidaridades trans-
nacionales los condicionaba. Sin embargo, en en profundidad hasta el reciente estudio Piemonte,
los primeros meses de gestión, operaron caute- Augusto, “Las prácticas del políticas del PCA ante la
losamente y sostuvieron una actitud al menos guerra civil española y su relación con la Internacional
indulgente frente al presidente de la Nación, Comunista”, Revista Historia Contemporánea, Univer-
condicionados quizá por lo reciente de la derrota sidad del País Vasco, 2015; y “Entre la dirección y los
electoral y la necesidad por parte del partido de voluntarios. Una propuesta metodológica sobre la
comprender el fenómeno político que se estaba participación del Partido Comunista de la Argentina
en la Guerra Civil Español”, Americanía. Revista de
gestando y que les disputaba en el ámbito de la
Estudios Latinoamericanos. Nueva Época (Sevilla), 5
praxis política el sujeto revolucionario. (2017) pp. 404-435.
42
Recordemos además el rol del uno de los principa-
2.2. La “cuestión española” les líderes del partido, Victorio Codovilla, dentro de
la estructura del PC español. Para ampliar: Piemonte,
El pedido de solidaridad activa y lucha por el pue-
Augusto, “El centralismo verticalista de Victorio Co-
blo español fue un tópico largamente transitado dovilla y la reorganización del Partido Comunista de
por el campo comunista; basta recordar los años España en la Segunda República”, Revista de la Red de
de la guerra civil española y el rol que el parti- Intercátedras de Historia de América Latina Contem-
do asumió en la lucha antifascista a nivel local e poránea, 10 (2019); Elorza, Antonio y Bizcarrondo,
internacional para corroborarlo41. La defensa del Marta, Queridos camaradas. La Internacional Comu-
nista y España. 1919-1939, Barcelona, Planeta, 1999.
39
Id. 43
Se denomina cuestión española a la posición de Es-
40
Id. paña en el concierto internacional durante el primer
41
La historiografía acerca de la participación de ar- franquismo.
gentinos en la guerra civil española o el impacto que 44
El Centro Republicano Argentino en Buenos Aires y
tuvo en la misma a nivel local es vastísima, de gran la Federación de Sociedades Gallegas fueron ejemplo
solidez y de larga data. Sin embargo, el PC como ob- de esa movilización. Para desarrollar: Ortuño Mar-
jeto de estudio en el período no ha sido abordado tínez, Bárbara, El exilio y la emigración española de

cia con ellos, Orientación desplegó un dispositivo trechando lazos con países latinoamericanos48.
argumentativo cimentado en una serie de cate- Asimismo, y debido a su posición geoestratégica,
gorías y presupuestos del periodo de entregue- España comenzó a ser percibida como una pie-
rras. Desde su posición militante, el semanario za de capital interés para los planes de defensa
convocó en reiteradas ocasiones a obreros, cam- occidental. Como resultado, la visión de Estados
pesinos, mujeres, jóvenes, intelectuales y todo Unidos respecto del dictador fue virando para
patriota argentino para que prestaran su apoyo desembocar tempranamente en acuerdos mili-
a la causa republicana en contra del franquismo, tares (Pactos de Madrid 1953).
último reducto del fascismo:
Frente a este escenario, Orientación manifes-
“Para que el pueblo español pueda cumplir con taba una inequívoca claudicación de occidente
éxito su patriótica tarea, que es parte de la tarea frente al fascismo español. Semanas antes de la
general de todos los pueblos que luchan por li- efectivización de la condena internacional, la pu-
quidar los restos de fascismo, necesitan que el blicación ya denunciaba acuerdos económicos/
resto de los pueblos le presten un solidaridad militares entre el franquismo y el imperialismo
activa”45. anglosajón: “Dictadura terrorista en el interior,
armamentismo y provocación hacia el exterior,
Evocando imágenes que apelaban a la sensibili- todo ello con el beneplácito y la ayuda de los más
dad de las bases y sus recuerdos en la interven- negros círculos del imperialismo anglo-sajón,
ción de la guerra, Orientación publicaba: “ayu- es lo que constituye la esencia del franquismo”
demos con la misma intensidad que lo hicimos (ante la discusión del problema de España en la
durante el periodo de la guerra por su liberación ONU, 30 de octubre de 1946). Ya con el comien-
nacional. ¡Revivamos las organizaciones ayudis- zo de la Segunda Guerra Mundial, el comunismo
tas a fin de que los heroicos luchadores españo- había practicado diversas formas de conexión
les sientan una vez más la adhesión y el cariño entre fascismo e imperialismo. Como explica
del pueblo argentino!”46 Piemonte, “el fascismo era definido como toda
“política reaccionaria y represiva al servicio del
La filiación de la causa republicana con la lucha
imperialismo”49. En este contexto fascista no era
por la defensa de la democracia fue un ejercicio
solamente España sino también las potencias
retórico promovido por el propio gobierno repu-
occidentales. Esa línea programática se volvió a
blicano en el periodo bélico que, retomado en
poner en práctica en el XI Congreso partidario de
el nuevo contexto por el comunismo, contó con
1946, al diagnosticar en relación con el escena-
éxito relativo: “Franco representa un bastión de
rio internacional un cambio en lo que ellos de-
la reacción y del fascismo que el mundo civilizado
finieron la reacción, los nazi-fascistas y sectores
debe destruir”47. Pero en el orden internacional
imperialistas anglo-yanquis que buscaban rom-
emergente, tópicos como democracia y libertad
per la alianza antifascista: “La voz de la Repúbli-
sufrieron los avatares de la Guerra Fría. Las anti-
ca Argentina debe oírse allí tal y como el pueblo
guas caracterizaciones se tornaron obsoletas a la
quiere que se oiga: expresando la condenación a
hora de explicar las nuevas realidades políticas.
Franco y a su régimen y pidiendo por la ruptura
El 12 de diciembre de 1946, la Asamblea general de relaciones y con ello, el reconocimiento del
de la ONU aprobó su resolución N° 39, que ne- gobierno legítimo de España, el gobierno repu-
gaba el ingreso de España a la organización y en- blicano”50.
comendaba a los países miembros que retirasen
de Madrid a sus embajadores. Las sanciones no
lograron en la práctica debilitar sensiblemente 48
Para ampliar: Delgado Gómez Escalonilla, Lorenzo,
la posición del régimen; por el contrario, Franco
“La política latinoamericana de España en el siglo XX”,
logró construir una diplomacia alternativa es- Revista Ayer, 49 (2003); y Diplomacia franquista y
política cultural hacia Iberoamérica, 1939-1953, Ma-
drid, CSIC, 1988.
posguerra en Buenos Aires (Tesis doctoral inédita), 49
Piemonte, Augusto Víctor, “El Partido Comunista de
Alicante, Universitat de Alicante, 2012. la Argentina ante la Segunda Guerra Mundial y la di-
45
“Manifiesto del comité central del PCA. Solidaridad solución de la Internacional Comunista, 1939-1943”,
con el pueblo español”, Orientación, 16 de octubre de Pacarina del Sur. Revista de Pensamiento Crítico Lati-
1946. noamericano, 18 (2014).
46
Id. 50
“Condena al régimen de Franco”, Orientación, 30 de
47
Id. octubre de 1946.

Cuando el gobierno argentino optó por pronun- co más amplio. Interpelado por las declaraciones
ciarse en contra del veto al régimen franquista del general Perón había realizado en el marco de
por parte de la ONU51, Orientación puso en prác- una entrevista brindada a un corresponsal nor-
tica un diagnóstico de la situación acorde con teamericano, en las cuales afirmó que la posi-
su reposicionamiento respecto del gobierno. A ción de Arce era la posición oficial del gobierno
seis días de consumada la votación, el 18 de di- para evitar que se produzcan los horrores de una
ciembre, el semanario publica un artículo titula- nueva guerra civil, Orientación declaró, que “el
do “¿A quién representa el Señor Arce?” Como principio de no intervención mentado por Arce,
emerge del título, la embestida fue contra el no rige en este caso, porque detrás de esa ex-
representante de la Argentina ante la ONU, José presión jurídica, esconde una conducta que uti-
Arce, quien se destacaba por “su empecinada e lizada antes de 1939, sirvió al Eje para intervenir
inescrupulosa defensa del Caudillo”. Es preciso abiertamente en España”, haciendo referencia a
llamar la atención en este punto ya que como se la guerra civil española. “No intervención signifi-
puede percibir, no hay un ensañamiento directo ca intervención a favor de Franco”. Ese esquema
con la figura de Perón, sino con segundas líneas argumentativo ya había sido puesto en marcha
del gobierno. “¿De quién es portavoz Arce?”52 se en el X Congreso del PCA (1941), frente a la polí-
preguntaban, tica de neutralidad del gobierno de Castillo. Des-
de su prisma, el neutralismo en la guerra, o la no
“¿Obedeció directivas del presidente de la Repú- intervención actual, era considerada una acción
blica? En el país no se han dado a conocer tales “pronazi” que constituía un intento por coartar
instrucciones o directivas, aunque ciertamente la lucha antifascista llevada a cabo por los acti-
no pueden descartarse a juzgar por el apoyo eco- vistas argentinos56.
nómico recientemente acordado con Franco. Lo
más probable es que haya actuado de acuerdo Durante los primeros meses de 1947, continua-
con las indicaciones del falangista Figueroa”53, ron sosteniendo la misma lógica argumentativa
de carácter binaria que habían evocado en los
diputado oficialista asociado, de acuerdo al aná- meses previos. De acuerdo con lo expresado en
lisis comunista, a los componentes reaccionarios reiteradas ocasiones por Victorio Codovilla, Pe-
del gobierno “[…] Aunque, mirado desde otro rón se encontraba presionado por las diferentes
punto de vista, basta con el Dr. Arce para des- fuerzas que componían el movimiento: las po-
empeñar un papel filofascista, seguir su propia pulares y democráticas versus las reaccionarias
inspiración y la de la vieja oligarquía fraudulenta, profascistas y autoritarias. Su accionar, y sus con-
de la que es un exponente típico”54. Y continúan tradicciones eran consecuencia de esa heteroge-
“si la casa rosada quiere borrar esa marca, debe neidad política57. El presidente no estaba com-
desautorizar inmediatamente y llamar al infor- prendiendo las implicancias de los sucesos, y ese
tunado embajador” porque en los tiempos que idilio que se evidenciaba con Franco, conduciría
corrían, “nada define mejor a la política interna- a la Argentina a posiciones tan peligrosas como
cional de un gobierno que su actitud respecto la de aparecer identificados con el franquismo y
del régimen falangista”55. su política de provocación internacional”58. En
consecuencia, para el semanario era necesario
Luego de 14 días, el semanario vuelve a abordar
“la liquidación ese lado funesto de nuestras re-
la cuestión española en un contexto más temáti-
laciones exteriores”.
51
Para el estudio de las relaciones hispano-argenti-
nas puede consultarse la siguiente bibliografía: Quija- Los sucesos relacionados con el franquismo fue-
da Mauriño, Mónica, Relaciones hispano-argentinas ron de capital importancia para la prensa parti-
1936-1948. Coyunturas de crisis, Madrid, Universidad daria, no solo por la interpelación emotiva que el
Complutense, Colección Tesis Doctorales, 1989; Figa- tema generaba, sino por la fortaleza doctrinaria
llo, Beatriz, El protocolo Perón-Franco. Relaciones his- de la cual podían hacer gala para reforzar su pro-
panoargentinas, 1942-1952, Buenos Aires, Ediciones pia identidad.
Corregidor, 1992; Rein, Raanan, La salvación de una
dictadura. La alianza Franco-Perón, 1946-1955, Ma-
drid, CSIC, 1995. 56
Piemonte, Augusto, “El Partido Comunista de la Ar-
52
“¿A quién representa el Señor Arce?”, Orientación, gentina ante la Segunda Guerra… op.cit.”.
18 de diciembre de 1946. 57
Orientación, “Ecos de nuestro XI Congreso”, 22 de
53
Id. enero de 1947.
54
Id. 58
“La Argentina y el franquismo”, Orientación, 22 de
55
Id. enero 1947.

2.3. La consolidación de la Tercera Posición Ahora bien, a la disertación del propio Perón,
quien se encargó de responderle fue Juan José
A mediados de 1947, la tendencia moderada Real62, dirigente renombrado del partido. En un
del discurso comunista respecto al peronismo y artículo publicado el 23 de julio, el autor se pre-
la política exterior fue desafiado por un suceso gunta “¿Puede ser ella” –haciendo referencia a
de gran magnitud: la proclamación de la Tercera la denominada tercera salida– “una forma de
Posición por parte de Perón en el marco de la resistencia a la presión imperialista?”63 Veamos
convocatoria al congreso de Rio de Janeiro. la lógica argumentativa desarrollada: la doctri-
na tercerista establecía “una finalidad aparente
Los cambios en el contexto internacional a co-
de mantener al país fuera de cualquier presunto
mienzos de 1947, con la Guerra Fría en marcha,
bloque”64, y ese objetivo a priori era aplaudido
fueron el telón de fondo de los futuros debates
por el partido. Sin embargo, según se explica, esa
de Conferencia de Rio de Janeiro. La diploma-
estrategia no significaba “un aislamiento total del
cia norteamericana en su mayoría coincidió en
país, sino que encontraría sus puntos de apoyo
la necesidad de efectuar un pacto militar conti-
en algunas esferas dirigentes europeas como el
nental bajo el liderazgo de Estados Unidos, neu-
Vaticano, Franco, la Francia de De Gaulle y Portu-
tralizando así posiciones de algunos líderes de la
gal de Zalazar (sic)”. “¿Existen dos bloques anta-
región –como el propio Perón– que todavía an-
gónicos?” se preguntaba Real: “contrariamente
helaban una unión latinoamericana sin la poten-
a lo que se afirma, el mundo no está dividido en
cia del norte59.
bloque de naciones antagónicas”, ya que había
El 6 de julio, semanas antes de la conferencia re- algo que “une a los pueblos por encima de la vo-
gional, el presidente argentino lanzó su célebre luntad de los propagandistas de la guerra y de los
discurso titulado “Por la paz en el mundo”, en el agentes del imperialismo: la lucha por la paz en
que desarrolló los principales supuestos ideoló- un mundo mejor”. La Argentina, fiel a su tradi-
gicos de la Tercera Posición. Unos días más tarde, ción pacifista, no debía encolumnarse en ningún
el ministro de relaciones exteriores, Juan Atilio bloque, sino estar “al lado de los que luchan por
Bramuglia, publicó un documento titulado “Por la paz” situación que a los efectos se traducía en
la paz del mundo y la cooperación económica” la pertenencia del bando soviético, aunque no
cuyos destinatarios eran los países hispanoame- enunciado de esa manera. La política exterior ar-
ricanos y la Santa Sede. En el mismo, y retoman- gentina debía estar “inspirada en su propia tra-
do las ideas esbozadas por Perón, hizo conocida dición histórica, en sus propios intereses”, y no
la postura que tomaría el estado argentino en en las conveniencias de aquellos que se propo-
las negociaciones de Rio. Orientación publicó el nen dominar al mundo “ya sea en nombre de la
16 de julio un artículo haciendo referencia a los solidaridad del continente, ya sea en nombre de
planteamientos de Bramuglia titulado “Si, hay sedicentes planes de reconstrucción”, haciendo
que asegurar la paz”. Los comunistas apoyaron lo referencia a lo que luego se constituyó como el
que denominaron la “teoría pacifista” esgrimida
por cancillería, y consideraron de “suma oportu- 62
Juan José Real (1911-1964) fue un dirigente políti-
nidad la expresión de tales ideas en momentos co argentino afiliado al Partido Comunista. En 1937
en que aventureros de la diplomacia imperialista se dirigió a España, donde sirvió de voluntario en las
y conocidos corredores de armamentos, tratan Brigadas Internacionales de la Comintern en el área
de hacer creer que el mundo está al borde de la de prensa. De retorno en Argentina, Real fue delega-
do a la V Conferencia Nacional de la Juventud Comu-
guerra” y que por lo tanto “es inútil batallar por
nista en marzo de 1939 y en 1941 al Congreso de la
la paz”60. Sin embargo, objetó el “modus ope- Juventud Argentina. En 1941 es designado Secretario
randi de la cancillería ya que consideraron que de Organización del PCA. En 1952, Real propició un
el documento en el cual se establecieron los su- acercamiento con el peronismo. A raíz de ello, en fe-
puestos mencionados debía ser dedicado a los brero de 1953 el Comité Ejecutivo del PCA votó uná-
pueblos del mundo y no a la Santa Sede y a los nimemente por destituir a Real de todos sus cargos,
estados americanos”61. acusándolo de instigar un “brote de nacionalismo
burgués” en el partido. Poco después, lo expulsó del
partido. Marxists Internet Archive. Disponible en:
59
Mongerfeld, Leandro, “Del TIAR a la OEA… op. cit.”, https://www.marxists.org/espanol/real/index.htm
p. 19. (Consultado el 20 de marzo del 2020).
60
“Sí, hay que asegurar la paz”, Orientación, 16 de ju- 63
Real, Juan José, “Acerca de la ‘Tercera Salida’”,
lio de 1947. Orientación, 23 de julio de 1947.
61
Id. 64
Id.

TIAR. La política de neutralidad y aparente equi- to Marianetti, en un artículo publicado en plena

distancia esbozada por el presidente era según campaña electoral, la Tercera Posición requería,
el prisma del autor “una prolongación bajo otra según esta concepción, de una apolitización de
forma de aquella neutralidad durante la gran los trabajadores, un contrasentido en sí mismo65.
guerra contra el nazi fascismo”, en la cual parecía
no estar con ningún bando, pero en la práctica se Fue la promulgación de la Tercera Posición un
estaba con el nazismo. Por lo tanto, pacifismo sí, punto de quiebre en la relación peronismo-co-
neutralismo, no: ese era la visión. munismo en el ámbito de las relaciones interna-
cionales, tanto así que, en la campaña electoral
Ahora bien, ¿quiénes propiciaban, según Real, de 1948, fue utilizada la lucha contra la misma
la Tercera Posición? Es muy interesante la cone- como base del programa electoral: “Contra la
xión que el autor marca entre la política exterior Tercera Posición pro-falangista, ¡Vote el 7 de
peronista, y España. Desde su parecer, era sin marzo al Partido Comunista”66. La caracteriza-
duda el franquismo y sus conexiones con secto- ción del accionar del gobierno con profascista,
res dentro del gobierno quienes fomentaban la por ser concebido como parte integrante del
tercera salida “para defender la posición inter- bando estadounidense, y en particular profalan-
nacional de Franco”. España era “un apéndice gista, por su apoyo al franquismo, resurge y se
del imperialismo”, y se encontraba dentro de la impone como prisma interpretativo a partir de
espera de acción norteamericana: “el imperialis- este momento, evidenciando un reacomoda-
mo anglo-yaqui como sus sirvientes falangistas, miento discursivo del comunismo.
necesitan de la España de Franco para sus de-
signios agresivos”. Por lo tanto, si se mantenía CONCLUSIONES PRELIMINARES
esta aparente neutralidad, lo único que se logra-
Los estudios que abordan las relaciones entre
ría era “llevar al país a la órbita de los actuales
comunismo y peronismo han atravesado una re-
enemigos de la humanidad”, el imperialismo.
novación historiografía de importante significa-
Quizá esta política podía generar ilusiones, dice
ción y han logrado evidenciar, lo complejo, am-
el autor, “en alguna gente honrada que ve en ella
biguo y vacilante de las mismas. En ese marco,
la posible escapatoria a la presión imperialista”,
el objetivo del trabajo introductorio fue describir
pero era eso, una ilusión. Los argentinos debían
la visión del órgano de prensa del Comité Cen-
abogar por una política exterior independiente
tral del partido, Orientación, acerca de la política
con la defensa de la sagrada causa de la paz del
exterior peronista durante el primer año de ges-
mundo, reforzando el papel de la ONU, y en con-
tión para poder identificar el discurso enunciado
tra de una “alianza de las naciones latino-cristia-
por el PC en el marco de una fuerte “conmoción”
nas”, haciendo referencia al eje que se estaba
identitaria provocada por la victoria y ascenso
perfilando entre los países latinos de origen cris-
del nuevo gobierno.
tiano acompañados por la Santa Sede.
Luego del abordaje de las fuentes, se pueden ex-
Por lo antes argumentado, para luchar contra el
traer algunas conclusiones preliminares que nos
imperialismo había que luchar contra una tercera
invitan a seguir avanzando en la investigación:
salida, la cual, según palabras del autor “nos lle-
vará a caer en los planes agresivos de los peores En primero lugar, la “cuestión española” ocupó
enemigos de la soberanía nacional”. Este punto un lugar central en sus análisis. La experiencia en
es interesante: no hay en el universo comunista la lucha contra el fascismo español era vastísi-
una alternativa o capacidad de prescindencia a la ma, y no perdieron oportunidad para evocar ese
lógica discursiva dicotómica de raíz schmittiana pasado glorioso y su participación perseverante
basada en una serie de supuestos antagónicos: en distintivos espacios solidarios constituidos en
imperialismo vs anti imperialismo, soberanía na- ese contexto. La lucha, el sacrificio y muestra de
cional vs colonialismo, democracia vs fascismo, solidaridad activa frente a la causa republicana,
reacción vs progresismo, paz vs guerra, en última fue parte de la narrativa que les permitió con-
instancia, amigo vs enemigo. No obstante, en el figurar una tradición y una representación del
ámbito de la política netamente local, si se pue- mundo, necesaria para el reforzamiento de la
de concebir de esa forma, el lenguaje dicotómico
se traducía en la búsqueda incesante de posicio-
nar a Perón en uno de esos dos bandos. Su uni- 65
Marianetti, Benito, “La posición comunista ante las
verso de análisis todavía no concebía puntos por elecciones”, Orientación, 14 de enero de 1948.
fuera de esa lógica bicéfala. Como indicará Beni- 66
Orientación, 18 de febrero de 1948.

identidad política basada aun en la lucha contra de sentidos signada por el distanciamiento re-
el fascismo. lativo de la política del gobierno. No existían en
la lógica interpretativa comunista, cimentada en
Ahora bien, la posición Perón respecto de esos una visión tendencialmente binaria del mundo,
sucesos, complaciente con el dictador español, la posibilidad de terceras vías: se estaba a favor
fue interpretada por Orientación como el resul- del bando comunista o capitalista, se era impe-
tado de la victoria parcial de las fuerzas reaccio- rialista o antiimperialista, no había matices.
narias en el ministerio de relaciones exteriores.
El discurso utilizado para caracterizar el accionar El desafío que representó el peronismo para la
del presidente durante este período distó mucho identidad partidaria en materia de política inter-
de ser confrontativo y beligerante, como supo nacional no fue el mismo que en la política do-
serlo meses antes. Más allá del registro discur- méstica. Fue en el análisis del escenario mundial
sivo, hay un empeño por parte de la prensa de donde el comunismo encontró certidumbre y
conectar lo internacional con lo local como parte solidez doctrinaria que le permitieron moverse
de una estrategia de embarcarse en un proyecto en un ámbito conocido y largamente transitado.
de emancipación a gran escala. En el aparente Valiéndose de su pasado, mediato e inmediato,
universo dicotómico comunista, si se apoyaba basado en la lucha contra el fascismo y a favor
al franquismo se era fascista; sin embargo, los del antiimperialismo, el partido por medio de las
términos de la ecuación no se tradujeron en publicaciones partidarias invocó experiencias in-
una asimilación lisa y llana entre peronismo/ ternacionales para construir/reforzar su propia
franquismo y se debió quizá, a la necesidad in- visión del mundo, y como pruebas para su defi-
mediata que presentaba el partido de observar nición de peronismo.
más detenidamente el fenómeno político que se
tenía enfrente.
En segundo lugar, con la ruptura de la Gran Alian-

za, la consolidación de la Guerra fría y la cons-
titución de bloques antagónicos, Orientación
comenzó a reclamarle al gobierno una mayor
independencia en términos de política interna-
cional, ya que consideraron su accionar en esce-
nario mundial, producto de un alineamiento al
bando capitalista. Intentaron disputarle al pero-
nismo una serie de tópicos sugestivos: soberanía
nacional, neutralismo y pacifismo. Ser soberanos
implicaba no adherir a las Actas de Chapultepec,
no pertenecer en teoría a ningún bloque, ser
neutrales ante cualquier conflicto potencial, y
abogar por la paz y la convivencia de los pueblos,
ideales sostenidos discursivamente por la URSS.
Por último, la proclamación de la Tercera Posición

marcó un punto de distanciamiento sensible del
semanario respecto de la política exterior. Si bien
hasta ese momento, su análisis del accionar del
gobierno en el escenario mundial estuvo signado
por una disputa de sentidos que le permitieron
intentar reforzar su identidad, la estrategia dis-
cursiva que prevaleció estuvo caracterizada por
la moderación. En cada uno de los episodios,
hubo un intento por parte del semanario de ela-
borar explicaciones y argumentación con el pro-
pósito de interpelar al gobierno para que revisa-
ra su posición. Sin embargo, con la enunciación
doctrinal de la línea programática peronista, el
comunismo practicó una específica articulación

PRESENTACIÓN DEL DOSSIER: PANCATALANISMO E

IZQUIERDA REVOLUCIONARIA EN LA TRANSICIÓN
ESPAÑOLA
DOSSIER’S PRESENTATION: PANCATALANISM AND THE

REVOLUTIONARY LEFT IN THE SPANISH TRANSITION
Eduardo Abad García*

*
Universidad de Oviedo, España. E-mail: [email protected]
Recibido: 10 octubre 2020 / Revisado: 10 octubre 2020 / Aceptado: 10 octubre 2020 / Publicado: 15 octubre 2020
E
n el año 2012 tuvo lugar un acontecimien- parte del proceso de criminalización de esta for-
to que acabaría siendo trascendental para mación, se adujo con frecuencia la existencia de
la evolución del conjunto de la política ca- un pasado orgánico muy corto y vinculado direc-
talana y española. Por primera vez en décadas tamente a la violencia de Terra Lliure durante la
una organización de la izquierda revolucionaria, década de los ochenta1. Sin embargo, lo cierto
en este caso catalana, lograba un notable éxito es que ese tipo de conclusiones buscaban única-
electoral que la catapultaría al primer plano de la mente generar una narrativa del pasado que sir-
política activa. Como resultado de las elecciones viera a determinados intereses ideológicos en el
autonómicas celebradas en el mes de noviem- marco de lo que se denominó oficialmente como
bre de dicho año en el Principado de Cataluña, el desafío independentista, especialmente, tras
la Candidatura de Unitat Popular (CUP) había lo- los hechos acontecidos durante el referéndum
grado obtener 3 diputados en el Parlament de de autodeterminación del 1 de octubre de 2017
Catalunya. Unos buenos resultados para esta y la efímera proclamación de la República Cata-
candidatura que ya había demostrado su poder lana el 27 de dicho mes. Con todo, estos análisis
en el ámbito municipal y que vendrían a cambiar a vuelapluma en muchos casos no se regían por
el escenario político catalán hasta nuestros días, los criterios necesarios para la ejecución de un
sobre todo si se tiene en cuenta que este proce- análisis histórico medianamente riguroso. De ha-
so había sido su debut en unas elecciones de ám- ber sido así, se habrían dado cuenta de que esta
bito autonómico. Desde ese momento, la CUP se fuerza política, a medio camino entre el modelo
convertiría en un actor político de primer orden de movimiento y el de partido de masas, contaba
al convertirse en una pieza clave para la gober- con un notable pasado a sus espaldas. En con-
nabilidad de Cataluña. A esto hubo que sumar creto, era heredera directa de un corriente polí-
un notable crecimiento electoral durante los si- tica que hundía sus raíces en los oscuros tiempos
guientes comicios municipales y autonómicos de del franquismo, cuando el nacionalismo catalán
2015, lo que amplió notablemente su presencia se vio fuertemente influenciado por los ecos in-
mediática e influencia política. Por si esto fuera ternacionales de la izquierda revolucionaria y,
poco, su consolidación como una opción crítica especialmente, por los procesos de liberación
frente al rumbo oficial del Procés situó a esta nacional de las antiguas colonias. El asamblea-
organización en una difícil coyuntura de legitimi- rismo, el anticapitalismo, el feminismo radical,
dad, lo que no hizo sino acrecentar su activismo la combatividad revolucionaria o el compromiso
durante los años siguientes.
En este contexto, una amplia gama de politólogos

1
Por poner solo uno de los muchos ejemplos de ese
tipo de relatos, ver: Daniel tercero, “De Terra Lliure a
y analistas varios convirtieron a esta organización
los CDR: la violencia del secesionismo catalán”, ABC,
en el centro de las más diversas críticas. Como 24 de septiembre de 2019.

Presentación del dossier Eduardo Abad García
con la terra y el proyecto de los Països Catalans desde los márgenes las iniciales contradicciones
fueron elementos simbólicos fuertemente arrai- sufridas por la izquierda revolucionaria con res-
gados en el imaginario colectivo de la esquerra pecto a la cuestión nacional en Valencia.
revolucionaria independentista durante la Tran-
sición. Sin embargo, para la academia este ob- El segundo artículo lleva por título “El Partit So-
jeto de estudio siempre había sido un elemento cialista d’Alliberament Nacional dels Països Ca-
marginal y apenas fue abordado más allá de los talans (PSAN) durante el tardofranquismo y la
límites de la historia militante. Esta situación iría Transición” y es obra de Roger Buch, politólogo y
cambiando paulatinamente durante los últimos profesor de la Universitat Ramon Llull. Este autor
años de forma paralela al éxito político de la CUP cuenta a sus espaldas con una amplia bibliogra-
y a la aparición de un creciente interés por la iz- fía sobre este partido, hasta el punto de haberse
quierda revolucionaria en su conjunto2. convertido en uno de los máximos especialistas
sobre el PSAN. En este ocasión, el texto realiza un
En este sentido, el objetivo principal de este dos- breve recorrido por la historia de esta formación
sier de Historia Actual Online ha sido contribuir desde sus orígenes hasta 1980. Para ello Buch va
a ofrecer más luz sobre los orígenes de esta co- analizando las políticas del PSAN, su participa-
rriente política y, especialmente, sobre su papel ción en movimientos sociales, sus tácticas pro-
durante la Transición, contribuyendo de esta ma- pagandísticas o su accidentado aterrizaje ante el
nera a desmitificar muchos de los tópicos cons- cambio de ciclo ocurrido en 1977. Además, tam-
truidos en torno a este sector de la izquierda bién se adentra en la vida del partido en la se-
catalana. Para ello, se ha apostado por abordar miclandestinidad, la problemática de su política
esta tarea desde la rigurosidad y el compromiso de alianzas con otros sectores independentistas
con la historia crítica. Este esfuerzo colectivo se y sus acercamientos a la cuestión electoral. Para
ha plasmado a través de cinco artículos donde este autor el punto de inflexión se encontraría
se analizan distintas facetas de este poliédrico y en las elecciones autonómicas de 1980, donde el
desconocido sujeto histórico. partido fracasaría por sus fuertes divisiones in-
ternas y su bloqueo ante los cambios producidos
El primero de ellos corre a cargo de la autoría en el seno de la sociedad catalana. Para finali-
de Xavier Ferré i Trill, sociólogo e historiador de zar, este autor reflexiona sobre la trayectoria del
la Universitat Rovira i Virgili. Bajo el explícito tí- PSAN como un partido comunista e independista
tulo de “Etapa de generación teórica de Germa- al que cabe otorgarle cierto peso en la herencia
nia Socialista (1970-1972)”, este artículo aborda de la izquierda catalana tanto por la vía orgánica
un análisis en profundidad de la gestación y las como por la simbólica.
características del ideario de la organización va-
lenciana Germania Socialista, existente durante Sobre el impacto a medio plazo de las tesis na-
el periodo de 1970-1978. La profundización en la cionales de Joan Fuster trata el artículo de Carlos
idiosincrasia teórica de este grupo sirve para po- Cárdenas Blesa (Universidad de Murcia) titulado
ner en valor las peculiaridades intelectuales de “Los Países Catalanes: las tesis de Joan Fuster
este grupo en el marco de la teoría política sobre en el ideario político valenciano y catalán desde
el sujeto de liberación valencianista. El texto rela Transición a la actualidad”. A lo largo de este
sulta tremendamente esclarecedor para abordar interesante texto se van desgranando los prin-
cipales ejes teóricos del concepto de los Països
2
Del interés por esta parte de la izquierda dan buena Catalans acuñado por el escritor valenciano. Un
muestra la celebración durante los últimos años de concepto que aportaría una nueva cosmovisión
dos congresos temáticos con la correspondiente pu- para la izquierda valenciana y que marcaría un
blicación de sus respectivas actas: VV.AA., Las otras nuevo paradigma en la relaciones de Valencia
protagonistas de la transición. Izquierda radical y mo- y Cataluña. Además, el autor rastrea la influen-
vilizaciones sociales, Madrid, FSS, 2018 y FSS & CEDID cia de las tesis pancatalanistas de Fuster en la
(eds.), Mobilitzacions socials i esquerra radical. Actes izquierda valenciana desde su creación hasta el
del II Congrés, Les altres protagonistes de la Transició, tiempo presente.
Barcelona, FSS &CEDID, 2020. Más allá de la bibliogra-
fía existente sobre el tema, que se encuentra bien re- El historiador Antoni Marimon Riutort, profe-
flejada a los largo de los distintos artículos del dossier, sor de Historia Contemporánea en la UIB, es el
me gustaría destacar la importancia para el campo de
cuarto autor de este dossier. Bajo el título de “La
la inminente publicación de una obra colectiva de 900
páginas: Carles Viñas (coord.), Història de l’Esquerra
construcción del espacio político de la izquier-
Independentista, Barcelona, Tigre de Paper, 2021. da nacionalista en la isla de Mallorca: las elec-

Eduardo Abad García Presentación del dossier
ciones municipales de 1979 y de 1983” analiza

las peculiaridades del proceso de consolidación
del primer nacionalismo mallorquín de izquier-
das mediante un estudio de caso. Se trata de los
procesos electorales (locales y autonómicos) de
1979 y 1983. En estos comicios el Partit Socialista
de Mallorca (PSM) lograría una nada desdeñable
representación, al tiempo que otras candidatu-
ras de un espectro político similar se estrellarían
estrepitosamente. La fuerte presencia a nivel lo-
cal de sus principales activistas lograría que sus
alcaldes y concejales se consolidaran en el tiem-
po, lo que contrasta especialmente con su inca-
pacidad para lograr representación electoral en
el Congreso de los Diputados de Madrid.
Por último, el artículo de Antoni Rico i Garcia (U.

de Girona) también aborda la cuestión de los
Països Catalans, aunque desde una perspectiva
algo distinta. En su artículo “Indefinición, falta
de teorización y confusión: la izquierda revolu-
cionaria ante los “Països Catalans” (1962-1982)”
este historiador problematiza las carencias exis-
tentes alrededor de esta propuesta. Este tema
ya ha sido abordado en distintas publicaciones y
especialmente en su tesis doctoral. El texto ana-
liza como recibieron y como interactuaron con la
teoría fusteriana las organizaciones de la izquier-
da revolucionaria valenciana. Unas relaciones
marcadas por la improvisación, el modismo y los
análisis de brocha gorda. Sin embargo, este texto
no deja de ser una importante aportación para
lograr comprender la evolución de la izquierda
revolucionaria en valencia durante la Transición.

ETAPA DE GENERACIÓN TEÓRICADE GERMANIA SOCIALISTA

(1970-1972)
THE THEORETICAL GENERATION STAGE OF GERMANIA

SOCIALISTA (1970-1972)
Xavier Ferré Trill*

*
Societat Catalana d’Estudis Històrics, España. E-mail: [email protected]
Recibido: 10 julio 2020 / Revisado: 10 septiembre 2020 / Aceptado: 10 octubre 2020 / Publicado: 15 octubre 2020
Resumen: El artículo que aquí se desarrolla con- INTRODUCCIÓN
E
tiene el ideario general de Germania Socialista
(1970-1978). Este panorama previo servirá para l texto que presento desarrolla la evolución
sintetizar, como objetivo del trabajo, la etapa de ideológica de Germania Socialista (1970),
generación teórica de la formación, una dimen- una formación marxista valenciana surgida
sión que adquiere mayor peso específico en la en los años setenta. Esta formación, en un con-
trayectoria del “Grupo de Trabajo Político” de texto marcado por un giro industrializador, se
liberación valencianista. Se concluye con una re- encargará de teorizar, siguiendo el modelo de
flexión sobre la aportación –en la coyuntura de análisis dialéctico, un planteamiento original en
los años setenta– de dicho trabajo ideológico y la coyuntura de los primeros años setenta, ca-
con una proyección hacia elementos de reflexión racterizada por la práctica ausencia de fuerzas
posteriores llevados a cabo por Germania Socia- políticas de adscripción nacional en el País Va-
lista. lencià. Así, no fue hasta cerca de 1973 cuando se
organizó un socialismo valencianista en el Grup
Palabras clave: Germania Socialista, País Valen- d’Acció i Reflexió Socialista y un año después lo
cià, autodeterminación, trabajo político, movi- hizo la derivación valenciana del Partit Socialis-
mientos sociales ta d’Alliberament Nacional, fundado el 1969 en
Catalunya.
Abstract: The present article contains the gene-
ral ideology of the “Germania Socialista” (1970- Extraer, pues, consecuencias ideológicas y políti-
1978). This previous panorama will contribute cas de un proceso de transición entre la organi-
to synthetize, as an objective of the work, the zación productiva agraria y una estructura eco-
stage of theorical generation of the group, a di- nómica dominada por el capitalismo industrial
mension that acquires a specific weight in the fue, sin duda, la aportación teórica más sobre-
trajectory of the Valencian liberation “Political saliente de la trayectoria de este grupo político.
Work Group”. It concludes with a reflection on No de otro modo cabe situar la preocupación de
the contribution –in the context of the beginning Germania Socialista por la persistencia histórica
seventies– of the ideological work and with a de formas de oscura conciencia que imposibilita-
projection towards elements of later reflections ban, según su modo de ver, una correcta articu-
carried out by Germania Socialista. lación de la consciencia de País Valencià.
Keywords: Germania Socialista, Valencian Coun- Dicho campo ideológico se concretó en una evo-
try, self-determination, political work, social mo- lución general de la organización que, como de-
vements. tallamos, se vio influenciada por un obrerismo
cuando menos formulado teóricamente. Preci-
samente la asunción de dicha estrategia fue el
motivo más destacado para comprender, en un

Etapa de generación teórica Xavier Ferré Trill
marco político posfranquista, su declive. Hecho, se constituyó en otoño de 1970 como forma-
por lo demás, también vivido por otras organi- ción marxista revolucionaria no seguidista del
zaciones de una proclamada izquierda revolucio- PCE. Fue una organización que articuló ideoló-
naria, en cuyo ámbito cabría situar a Germania gicamente una estrategia de revolución socia-
Socialista. Ahora bien, se trató de un ciclo acaeci- lista desde, y para, el País Valencià. Esta fue su
do después de la desaparición del dictador Fran- aportación más destacada en una etapa –trienio
cisco Franco que no sólo determinó la implosión 1970-1973– donde prácticamente no había otra
de Germania, sino que acentuó el proceso de organización de liberación nacional valenciana2
absorción de otras formaciones valencianistas –a excepción de Nova Germania (1971) que con-
por parte de partidos de ámbito estatal español, sideraba la cuestión nacional en el marco poste-
como en el caso del Partit Socialista del País Va-
lencià, subsumido en el PSOE (1978), hecho com- hecho nacional en Rico Garcia, Antoni, La influència
parable al proceso de fusión del Partit Socialista del pensament de Joan Fuster i les cultures polítiques
de Catalunya (Congrés) en este mismo partido. dels Països Catalans (1960-1992) (Tesis Doctoral), Gi-
rona, Universitat de Girona, 2017. Un excelente tra-
Germania Socialista surgió en un contexto de re- bajo de historia local sobre la denominada transición
composición interna del franquismo que, a partir y la trayectoria de Germania Socialista en Gandia en
de los años setenta, se vio contestado desde di- Cremades i Arlandis, Vicent, La transició a la demo-
cràcia a Gandia (1973-1983), València, Institució Al-
versos frentes: obrero, estudiantil, cultural, y de
fons el Magnànim, 2019. En cambio, la historiografía
liberación nacional en la península (hay que des- reciente sobre la izquierda revolucionaria no cita la
tacar el consejo de guerra contra 16 militantes trayectoria de Germania Socialista. Ver: Wilhelmi,
de ETA en diciembre de 1970). Gonzalo, Romper el consenso. La izquierda radical
en la Transición española (1975-1982), Madrid, Siglo
Situar, pues, la “estructura teórica” de la organi- XXI, 2016; Germania Socialista, como organización re-
zación es lo que nos trae a caracterizar la doble sultante del PSV, en parte a causa de la radicalidad
dimensión organizativa, propagandística e ideo- ideológica del mayo de 1968 en Picó, Josep, El fran-
lógica del grupo. Aunque el presente estudio se quisme, València, Alfons el Magnànim, 1982, p. 99;
dedique, por el motivo antes descrito, a analizar Una síntesis de la ideología y de las primeras acciones
y a singularizar la centralidad en la originalidad directas de Germania Socialista vividas por uno de sus
teórica de Germania. primeros integrantes (Damià Mollà) en Mollà, Damià/
Mira, Mira, Eduard, De impura natione, València, Edi-
1. IDEARIO GENERAL Y ORGANIZACIÓN DE cions Tres i Quatre, 1986. La referencia más extensa
GERMANIA SOCIALISTA (1970-1978) del Grupo Político, en las memorias de un fundador
fundamental de Germania Socialista: Marqués, Josep
1.1. Origen Vicent, Tots els colors del roig. Quasi unes memòries
ideològiques, València, Eliseu Climent Editor, 1997.
Germania Socialista, que hasta el momento ha Testimonios de integrantes de la organización en los
recibido una atención historiográfica limitada1, primeros años de Germania Socialista en Sanz, Benito,
Ramón, Rodríguez Bello, I, Memoria del antifranquis-
mo. La de Valencia bajo el franquismo, 1939-1975,
1
El único trabajo de reconstrucción histórica de Ger- València, Universitat de València, 1999; La evocación
mania Socialista del que tengo referencia es el de de dos militantes de Germania Socialista en Martí,
Calvo Leganés, Clara y Tur Crespo, Rosa, Germania Vicent, “Una parella inaudita a la València dels 70”,
Socialista (Trabajo de 4º curso del Grado de Historia), Levante-EMV, 29 de marzo de 2001 y Banyuls, Enric,
València, Universitat de València, curso 2010/2011, Crònica parcial. Tardofranquisme y transició a Corbe-
30 pp. Una visión de la organización por medio de dos ra (La Ribera Baixa), 1971-1987, Corbera, Taller Seri-
de sus aportaciones teóricas centrales: la revolución cor, 2017. También es de interés: Mansanet, Víctor,
socialista y el hecho nacional en Cucó, Alfons, País i Pols d’estels (Rafa Ferrando i la València contracultu-
Estat: la qüestió valenciana, València, Eliseu Climent, ral), Simat de Valldigna, La Xara, 1999.
1989. La contextualización de Germania en la lucha 2
Nova Germania orientaba su trabajo hacia el valen-
universitaria en Rodríguez Tejada, Sergio, Zonas de li- cianismo cultural de base popular, mientras que Ger-
bertad. Dictadura franquista y movimiento estudiantil mania Socialista fundamentaba una parte substancial
en la Universidad de Valencia, II, València, PUV, 2009. del trabajo político en la reflexión teórica. El vínculo
La concepción ideológica del integrante de Germa- metodológico común de análisis era el marxismo. In-
nia Socialista Josep Vicent Marqués en torno a la in- formación de Pasqual Moreno (2 de junio de 2020).
dustrialización en Archilés, Ferran, Una singularitat Para la relación Nova Germania-Comité de solidari-
amarga. Joan Fuster i el relat de la identitat valencia- dad con el FRAP, Moreno Torregrosa, Pasqual, “D’un
na, Catarroja-Barcelona, Afers, 2012. Un análisis del Temps…” Crónica de un tiempo de lucha, 1971-1978,
trabajo ideológico de Germania Socialista en torno al Tavernes Blanques, L’Eixam, 2014.

Xavier Ferré Trill Etapa de generación teórica
rior de Solidaridad (1973) con la lucha armada camente, elementos de análisis sobre formas de
del Frente Revolucionario Antifascista Patriota. organización, de trabajo político, de estrategias
La primera organización socialista-valencianista, de lucha consejista en fábricas y un ambiente de
después de Germania Socialista, fue la plata- debate en común generalizado5.
forma Grup d’Acció i Reflexió Socialista (GARS)
(1973), uno de los núcleos que originó el primer Hay que precisar que el primer espacio donde se
Partit Socialista del País Valencià (PSPV) (1974- originó Germania fue el de la Facultad de Cien-
1978) y la segunda, la derivación valenciana cias Económicas de la Universitat de València.
(1974) del Partit Socialista d’Alliberament Nacio- Progresivamente, a partir de la incorporación de
nal fundado en Catalunya (1969). cuadros estudiantiles en la formación, Germania
Socialista tuvo implantación en Derecho, Filoso-
De limitado número de militantes3, Germania So- fía y Letras, Filología, Historia, Ciencias Básicas y
cialista llevó a cabo una muy notoria generación Medicina. En dichos espacios Germania realiza-
de análisis teórico desde una tradición comunis- ba, en ocasiones, acciones imaginativas –cerca-
ta no estalinista. Su dinámica se identificaba con nas al situacionismo como corolario e influencia
elementos libertarios y del movimiento intelec- del mayo del ‘68– de presencia en asambleas
tual situacionista (1957-1972). Desde el punto universitarias.
de vista orgánico Germania quería articular una
organización similar al Partit Obrer d’Unificació Ello significaba que la situación de debate en
Marxista (POUM) con el objetivo de “intentar torno a nuevos modelos sociológicos (sociología
una relación no dirigista entre vanguardia [parti- de crítica a la dominación) y económicos (mode-
do] y clase obrera”. No gratuitamente Germania los de análisis derivados del marxismo), junto al
Socialista difundió, en dicho sentido, textos don- ascendente docente e investigador de profeso-
de se analizaba la trayectoria de esta organiza- res en materia de teoría sociológica incidió en
ción y la de su líder destacado, Andreu Nin4. algunos de los planteamientos políticos de la
formación6. Cabe mencionar, en este sentido, la
Otra situación que condicionó ideológicamente difusión académica y civil de estudios innovado-
a Germania, como a otras organizaciones a la iz- res como Estructura Econòmica del País Valen-
quierda del PCE, fue la coyuntura de revolución cià (1970) y el ensayo País Perplex (1973). Este
cultural derivada de la movilización de contes- último, elaborado por el sociólogo e ideólogo
tación contrasistema estudiantil y su apoyo en de Germania Socialista Josep Vicent Marqués
espacios de la lucha obrera. El meridiano ideoló- (1943-2008), contó con la interlocución del mili-
gico del período 1967-1968, articulado en torno tante de la organización, Robert Usach.
a Berkeley-París-Berlín-Praga, aportó, ideológi-
Dicho estudio, análisis de crítica de la ideolo-
3
Las cifras de militantes activos que aportan infor- gía dominante de una cierta burguesía agraria
mantes del partido se concretan en torno a setenta. y financiera capitalina de València y su hinter-
Hay que tener en cuenta que este núcleo militante land metropolitano, formalizaba las formas de
contaba com el apoyo de una base de sensibilización mala y de oscura conciencia como resortes que
próxima. Un tipo de sociabilidad parapolítica que me- constituían una realidad artificiosa basada en la
recería un estudio pormenorizado. mitificación y reificación de elementos identita-
4
Información entrecomillada de Gaspar Agulló (14 rios: lugar social de la lengua de los valencianos,
de diciembre de 2020). La primera referencia que generación de falsos estereotipos agraristas, y
tengo del político catalán comunista como referente
sobredeterminación provincialista, es decir, re-
de Germania Socialista es: Andreu Nin. La situación
política y las tareas del proletariado. 1937-1972. 35
ducción a la subsidiaridad del resto de comarcas
aniversario del asesinato de un militante, ejemplar
mimeografiado Arxiu Municipal d’Elx (AHME-Fondo 5
Marqués, Josep Vicent, Tots els colors del Roig…, op.
Gaspar Agulló), Elx, A-580-D. junio de 1972. Agradez- cit., pp. 57-60.
co a María José, técnica del archivo, el envío de dicha 6
Como ejemplo, el ascendente del catedrático Aman-
documentación. La introducción (pp. 2-5), firmada do de Miguel en Damià Mollà, integrante de primera
por “Gerard Simó”, correspondía, en realidad, a Josep hora de Germania Socialista. De Miguel impartió en
Vicent Marqués. Las iniciales del alias correspondían la cátedra de Sociología de la Facultad de Económi-
a G[ermania] S[ocialista]. El objetivo de la edición del cas de Valencia entre el 9 de agosto de 1974 y el 10
texto de Nin era enfatizar la lucha revolucionaria por de julio de 1977. Arxiu Històric de la Universitat de
el socialismo superando el policlasismo, contribuir al València (AHUV), València. Agradezco a la archivera
“patrimonio teórico” de la clase obrera y contribuir a Irene Monclús la consulta del Expediente de Amando
la clarificación ideológica. de Miguel.

valencianas. En cualquier caso, cabe decir que el tipo de organización esencialmente estudiantil,
ensayo de Marqués era deudor de las tesis sobre al menos en esta primera etapa constituyente de
el hecho nacional valenciano formuladas entre funcionamiento, era un aval ideológico de legi-
1970 y 1972. Era una manera de entrelazar el in- timidad hacia la identidad revolucionaria de la
telectual con el trabajo político. Como hipótesis organización.
cabría decir que del mismo modo que el ensayo
referencial entre los militantes nacionalistas de Dicha primera etapa, con poca o nula estruc-
los años sesenta fue el ensayo de Joan Fuster No- tura, y con un cierto aluvión de procedencias,
saltres, els valencians, en los años setenta lo fue concluyó en una asamblea de militantes realiza-
País Perplex7. da el invierno del curso 1971-1972 en Bocairent
(Comtat), cuando se delimitó y se catalizó todo el
Por lo que atañe a la organización interna de “partido” en torno a una dirección que impulsó
Germania, cabe decir que su primera etapa cons- sistemáticamente el trabajo ideológico (formati-
tituyente –entre 1970-1971– definía un cierto vo y de producción de materiales) y político. Era
“magma” en cuanto a su dinámica interna dado un paso adelante necesario para poner fin a una
que aún no poseía un eje vertebrador o correa coyuntura interna difusa y para dotar a la forma-
de transmisión de acuerdos aprobados. ción de un liderazgo intelectual y delimitar áreas
de trabajo político10. En dicha asamblea se cul-
La situación es explicable porque la coyuntura minó la clarificación organizativa de Germania
inicial, que algunos militantes retrotraen, hipoté- Socialista.
ticamente, al curso 1969-19708, trataba de con-
seguir un primer número de militancia suficiente En definitiva, la formación acordó estructurarse
para iniciar el trabajo teórico y, como veremos, “horizontalmente” y no adoptar la forma tipo
emprender algunas acciones de propaganda. dominante de Comité Central y Ejecutivo propia
Por tal motivo algún militante de primera hora de los partidos comunistas al uso.
recuerda que los primeros miembros de Ger-
mania Socialista constituyeron su núcleo inicial Por “horizontal” entiendo una estructuración ba-
a partir de un estudiante, un obrero y un profe- sada en una dirección política que debatía la línea
sor9. El hecho de poder tener un obrero en un estratégica de Germania en asambleas, o “reu-
niones de línea”. En estas asambleas, abiertas a
la militancia, renovaba la dirección de Germania
7
Fuster para Marqués era un referente necesario, Socialista. La dirección se formaba con represen-
pero no suficiente y, por añadidura, para la práctica tantes elegidos por la células, o “colles”, grupos
totalidad de militantes de Germania Socialista. Otro
de tres, o cuatro personas, que eran a su vez nú-
punto de disentimiento era el marco nacional de Paï-
sos Catalans defendido por el ensayista de Sueca.
cleos de análisis y de trabajo político11. Aunque
Para Marqués y para Germania Socialista existía una cabe decir que el tipo de organización no anula-
nación cultural y lingüística común, pero no política. ba a los colaboradores –en una situación de cier-
El trabajo del sociólogo y el de Germania Socialis- ta sociabilidad–, considerados como “militancia”
ta marcaban una línea estratégica propia. No había indirecta que no era percibida como orgánica.
ninguna dependencia hacia el autor de Qüestión de El conjunto de dicha estructura organizativa fue
noms. La crítica de Germania Socialista y de Marqués efectivo desde 1972 hasta la “segunda” etapa de
hacia Fuster era consecuencia de un análisis social y implosión de la organización el 1978.
político propio, autónomo. En cambio, en el plantea-
miento que el intelectual Emili Gómez Nadal publi-
có en 1972, El País Valencià i els altres, sí que podía
haber coincidencias con el modelo de Germania So-
cialista. Ver el marco epistemológico de Marqués en
Castelló-Cogollos, Rafael, “De la perplexitat a la com-
plexitat. Josep-Vicent Marqués, la sociología pública 10
Es decir, el debate sobre el liderazgo intelectual y
valenciana”, en García Pilan, Pedro (coord.), Tots els la necesidad de afianzar el trabajo político del grupo.
colors de Josep-Vicent Marqués, València, Institució Agradezco a Vicent Martí (“Càndid”) las informacio-
Alfons el Magnànim, 2018, pp. 32-40. nes facilitadas sobre dicha cuestión.
8
Es el caso del integrante de Germania Socialista Vi- 11
Las células se constituían en pisos francos. Una de
cent Franch, a quien agradezco la información (21 de dichas células era la de propaganda y edición de ma-
abril de 2020). terial, que, por obvias razones de seguridad, sólo era
9
Testimonio de Vicent Franch en Sanz, Benito, Rodri- conocida per la dirección política y por los miembros
guez Bello, I, Memoria del antifranquismo… op. cit., que la integraban. Incluso los propios miembros igno-
p. 331. raban la dirección exacta del piso franco.

1.2. Incidencia ideológica y consolidación classes sociales. El segundo documento estruc-

(1971-1974) turaba el funcionamiento de Germania Socialista
a partir de círculos concéntricos de actividad: los
La etapa transcurrida entre 1971 y 1974, y como militantes de la formación implicados en luchas
prueba de consolidación de una mínima infraes- sectoriales integraban el Comitè de poble (“Co-
tructura, constataba la constitución de un apa- mité de pueblo”), encargado de marcar la direc-
rato de propaganda con la obtención, entre otro ción del trabajo político, y la Comissió de poble,
material, de dos multicopistas, una de rodillo y rama dependiente del Comité e integrada por
otra eléctrica12. Así, podemos cifrar el inicio de activistas de sectores sociales simpatizantes o
impresión de panfletos y de material teórico en afines con la lucha de Germania Socialista. Esta
1971. Comissió era una extensión social de la organi-
zación. El documento sobre el trabajo de masas
En esta primera fase de Germania Socialista, y
remitía a la necesidad de comprensión por parte
durante el curso 1970/1971, la formación pu-
del militante de Germania del comportamiento
blicaba su primer decálogo ideológico donde se
y idiosincrasia de la población no politizada pero
planteaba, desde el marxismo revolucionario
susceptible de ser captada políticamente. En
(punto 1º), establecer una “lucha total” contra el
este caso la referencia a Mao Tse Tung se pro-
capitalismo (punto 5º). Por vez primera Germa-
ducía por las características de incorporación del
nia Socialista se autodefinía como “organización
pueblo trabajador (campesino) chino al proceso
de trabajo político coordinado y riguroso” en el
revolucionario14.
horizonte de formar, “sola o en convergencia” un
partido obrero revolucionario y colaborar, si era Se efectuaban, igualmente, lecturas de trabajos
preciso, con otras organizaciones afines. Tam- de la revista Cuadernos de Ruedo Ibérico y de
bién se preveía concretar alianzas con “organiza- ensayos políticos e históricos publicados. Como
ciones ibéricas paralelas” (punto 10º)13. Este de- ejemplo, un estado de la cuestión sobre la rela-
cálogo –a modo de “carta de presentación”– era ción entre el estado capitalista bajo el franquis-
uno de los primeros documentos leídos por los mo y la realización de la revolución burguesa15.
futuros integrantes de la formación. Dichas reflexiones se dirigían a la formación de
los militantes de la células, o colles.
Además, Germania Socialista concretó el debate
entre militantes por medio de materiales gene- También eran de lectura obligatoria economistas
rados a partir de la elaboración de la propia orga- marxistas de orientación trotskista de la IV Inter-
nización y de la traducción de ensayos originales nacional como Ernst Mandel, intelectuales de la
al catalán. Por ejemplo: Les classes socials, Què izquierda marxista como Paul Sweezy y clásicos
és un grup polític, y la traducción de un fragmen- teóricos como Lenin (Qué hacer) y Rosa Luxem-
to del Libro Rojo de Mao Tse Tung (1964), Línia burgo y, ya en el primer quinquenio de los años
de masses. Estos documentos de debate, redac- setenta, la recepción, por ejemplo, de informa-
tados y adaptados hacia 1972, trataban respec- ción de luchas de ocupación de fábricas en Oc-
tivamente la definición del modo de producción citania como el caso de la fábrica de relojes Lip
capitalista y de sus contradicciones de clase, los (1973) –experiencia analizada por Germania en
mecanismos de explotación de fuerza de traba- forma de cómic traducido del francés al cata-
jo y el carácter político final del conflicto entre lán16.
12
Con anterioridad a la adquisición de la infraestruc-
tura de propaganda, hay que constatar, por ejemplo, 14
“Les classes socials”, [s/f], 10ff mecanografiados;
la impresión de material en el laboratorio universi- “Què és un grup polític”, [s/f], 3ff mecanografiados;
tario de Sociología de la nueva Facultad de Ciencias Tse Tung, Mao “Línia de masses” [1964], 3ff mecano-
Económicas. Una de las primeras vietnamitas manua- grafiados, Fondo Documental de Ricard Avellan.
les provenía de la asociación cultural del Rat Penat y 15
Me refiero a la traducción de las páginas XXVI-
fou ocultada en la Albufera de Sueca. Otra vietnamita II-XXXIX del trabajo de Viñas, Miguel (alias de Josep
fue adquirida y entregada a un militante de Germania María Vegara), “Franquismo y revolución burguesa”,
Socialista cerca de Bunyol. Informaciones respectivas Horizonte Español, 3 (1972). El texto de Germania So-
de Ricard Avellán, Toni Moll y Josep Pérez Casado (6 cialista fue titulado “Franquisme i Revolució burgesa
de agosto de 2020). a l’Estat espanyol”, 14 pp., Arxiu Històric Municipal
13
[“10 punts irrenunciables”], Arxiu Històric Municipal d’Elx. (AHME-ACPV), Elx, AM-91, E-1. [c. 1972].
d’Elx. (AHME-ACPV), Elx, AM E-4. 1 hoja ciclostilada a 16
“Els subversius de Palente. La Vaga de Lip”, Germa-
una cara. [c. 1970-1971]. Agradezco a la archivera Ana nia Socialista, 1974. 40 pp., Archivo personal de Albert
Álvarez López el escaneado del documento. Roqué.

En este contexto cabe mencionar una acción lizadas o en realización, como las de la fábrica
directa pionera contra la especulación de una de calzado Segarra (Vall d’Uxó), análisis de casos
zona verde en el área marítima de la Dehesa de de organización consejista (la lucha obrera en el
El Saler acaecida hacia el final de la primavera Vallès Oriental en Catalunya), formas de orga-
de 1971. Previamente, y por medio del círculo nización consejista contrarias a la estrategia de
de militancia informal anteriormente aludido, se participación en las estructuras sindicales del ré-
ideó una campaña informativa de sensibilización gimen franquista, la CNS. Así, el número cuatro
previa, para posteriormente realizar pintadas en del portavoz (mayo de 1974) se subtitulaba Re-
la zona afín (carretera al área turística de El Sa- vista per a impulsar l’Organització Obrera Anti-
ler) y la acción final de sabotaje en el campo de capitalista (COE Plataformes) al País Valencià, es
golf. El lema de la campaña era “El Saler és del decir, un año después del debate, que veremos
Poble”17. Cabe señalar que en la misma época seguidamente, sobre la proletarización, Germa-
tuvo lugar la acción, materializada también por nia quería adoptar dicha forma de lucha.
un “comando” (así es concebido el grupo por
una informante) de Germania Socialista, contra El debate interno surgido en una asamblea de
la edificación en un área natural perteneciente a Germania Socialista en la primavera de 197320
la población de Calp (Marina Baixa). trataba de orientar el grupo hacia la adopción de
la táctica de proletarización para incidir política-
En lo referente a primeros portavoces de propa- mente en el trabajo “exterior”. Parte de la mili-
ganda, Germania imprime, en junio de 1972, el tancia entendía que la adopción de la corriente
primer número de la serie Cuadernos de Lucha “proletarizadora” serviría para exteriorizar el tra-
Obrera (1972). Se trataba de un boletín de debajo político de Germania Socialista mediante su
bate ideológico para establecer conocimiento implantación en fábricas con el fin de vincular lu-
y contacto con la dinámica de la lucha laboral. cha obrera y lucha política. Esta finalidad era de-
Con este objetivo, el primer boletín analizó la fendida por un sector de unos trece integrantes
“situación” de “la lucha obrera en el País Valen- de la organización, mayoritariamente proceden-
ciano”18. La publicación se circunscribía a las for- tes de la agrupación comarcal de la Ribera (Alta y
mas de organización de lucha asamblearia en las Baixa), un enclave con una de las militancias más
empresas. destacadas hasta el momento.
El portavoz Poder Obrer19, de carácter bilingüe La propuesta de proletarización de la organiza-

(catalán/español), cuyo primer número se editó ción, a cargo de dos militantes de Germania que
entre junio y julio de 1972, era considerado de se proletarizaron después de este debate, oca-
orientación política estratégica donde se analiza- sionó, según su impresión, su expulsión. Como
ban cuestiones sociales de fondo. Estas revistas muestra de solidaridad con dichos integrantes
incidían teóricamente en formas de lucha rea- abandonó la formación una parte de la militan-
cia21. Este hecho, aunque no cuestionó la conti-
17
Se repartió una octavilla, “Mos estan furtant el
Saler!” [“Nos están robando El Saler”], Arxiu His- 20
Las entrevistas a militantes asistentes no llegan a
tòric Municipal d’Elx. (AHME-ACPV), Elx, AM-91D-1. un acuerdo sobre dónde se produjo dicho debate, ni
[1971]. En ella se responsabilizaba al Ayuntamiento y tampoco el año concreto.
a la burguesía financiera especulativa de la venta del 21
Marqués, como consecuencia, abandonó la direc-
espacio verde. Amer Blanch, Enric, “Josep Vicent Mar- ción de Germania Socialista. Marqués, Josep Vicent,
qués i els inicis de l’ecologisme valencià”, en García Pi- Tots els colors… op. cit., p. 65. El motivo de la expul-
lan, Pedro (coord.), Tots els colors de… op. cit., p. 233. sión provenía del hecho de generalizar la propuesta
18
Cuadernos Batalla Obrera. Instrumentos para la lu- a Germania Socialista. El abandono de los estudios
cha obrera en el País Valenciano, 1 junio, 1972, 12ff –para trabajar en una empresa– por parte de militan-
ciclostilados. Hemos podido consultar, además, un tes partidarios de la proletarización fue a título indi-
“Suplemento”, 2 [1972], 5 de noviembre de 1974 y vidual. El número de miembros que abandonaron se
6 de marzo de 1976 con el subtítulo “Revista Obre- cifra en unos trece. La ratio se ha obtenido a partir
ra de Germania Socialista-Unificación Comunista de de la información de cinco militantes de Germania
Liberación”. que asistieron a dicha asamblea. Para el contexto de
19
He podido consultar los siguientes números de la proletarización y de militantes de Germania Socialista
revista Poder Obrer: [0] junio-julio, 1972, 10 ff; 1 fe- en Plataformas Anticapitalistas, son útiles las evoca-
brero, 1973, 24ff; mayo, 1973, 16ff; noviembre, 1973, ciones de Álvarez, Vicent, Aquella Esquerra Revolu-
16ff; mayo, 1974, 22ff, disponibles en el Arxiu Històric cionària. Notes i apunts inicials de l’experiència, dels
Municipal d’Elx (AHME-ACPV, Fondo Gaspar Agulló), somnis i la realitat (1967-1983), País Valencià, 2007;
Elx, AD-580/D. Asunción, Juanjo de la, Rapsodia en Rojo. Antcapita-

nuidad de Germania, explicitó una primera crisis radores y los mecanismos de toma de decisiones
de crecimiento en un momento de cierta expan- –desde la célula hasta la Dirección política24.
sión de la formación.
La consolidación se conseguía con la presencia
El debate, prolongado en la trayectoria de Ger- universitaria en las asambleas interfacultativas,
mania, planteó posteriormente la realización de la edición de propaganda ante hechos acaecidos
trabajo político en futuras empresas, algunas de –represión estudiantil, asesinato de estudiantes
ellas multinacionales como la FORD, implantada (diciembre de 1972)–, acontecimientos políticos
en Almussafes en marzo de 1976, inaugurada en –contra el referéndum de reforma política del 15
octubre de dicho año (la Ribera Alta)22. de diciembre de 1976– y difusión de propaganda
en conflictos laborales. A nivel estudiantil cabe
A nivel ideológico dicho debate significó que una señalar relaciones políticas informales entre
parte de la hasta entonces militancia de Germa- estudiantes de Germania Socialista y de Acción
nia otorgase a la lucha obrera más relevancia Comunista, organización luxemburguista afín, en
que a la estrategia en torno a la cuestión nacio- este sentido, a Germania. Dicho hecho aconteció
nal23. Con todo, la estructura de Germania Socia- entre el curso 1972/1973 y 197825.
lista continuaba manteniendo la validez de la vía
autodeterminista. Implicaba la asunción política Territorialmente Germania se implantó en co-
del hecho nacional como catalizador de la revo- marcas de producción agraria e industrial como
lución socialista. Cada proceso revolucionario se la Ribera Alta (Alcúdia) y Baixa (Sueca), y comar-
desarrollaba en una ‘formación social’, es decir cas centrales y meridionales como La Safor (Oli-
en un ámbito de pertenencia territorial. Sucedía va), la Marina Baixa (Altea) e industriales Baix Vi-
lo mismo con el País Valencià. napoló (Elx). En estos casos los responsables de
las células comarcales elaboraban informes de la
Como probable consecuencia del debate inter- tarea política efectuada, posibilidades de capta-
no citado, la organización redactó un proyecto ción de nueva militancia e incidencia hipotética
de Estatutos de Germania Socialista fechados en en fábricas. Dicha incidencia venía acompañada
setiembre de 1973. Cabe destacar, en el aparta- de la elaboración de propaganda (octavillas) que
do b) del sexto punto del documento, la opción hacía referencia a luchas laborales en la comarca
como organización de no optar a la proletariza- y de la intervención en la organización de con-
ción. Estos Estatutos suponían un giro en la re- centraciones de carácter valencianista que to-
glamentación de Germania ya que formalizaban maban el nombre de Aplecs26.
toda la estructura de la organización, el modo de
ingreso de militantes, la participación de colabo- En conclusión, esta etapa sitúa la formación –a
pesar de la escisión obrerista– en una coyuntura
de consolidación y estabilización que culminará,
listas en Valencia 1970-1977, València, NPQ, 2015; con recomposición interna, en la etapa transcu-
Torres Castejón, Vicent, No inútilmente, València, rrida entre 1974 y 1976.
NPQ, 2019.
22
Sabemos, por informantes de Germania y por dos 24
Estatuts de Germania Socialista, “País Valencià. Se-
destacados de Plataformas Anticapitalistas de Sagunt tembre de 1973”, 8 pp. (CRAI-Pavelló de la República/
del momento (1973-1974) en que la organización de UB. DPP (UCL)) 1 I (2)). Los Estatutos se facilitaban a
izquierda nacional valenciana no tuvo implantación “militantes y a la gente que iba a militar en el gru-
en la Planta Siderúrgica de Altos Hornos de Sagunt po después del proceso de captación y al finalizar el
(Camp de Morvedre). Agradezco la información de seminario d’iniciación (marxismo y lucha de clases,
Julián Castelblanque (5 de noviembre de 2020). Para País Valencià)”. Información de Gaspar Agulló (correo
la trayectoria del núcleo de Plataformas en Sagunt, electrónico, 20 de octubre de 2020).
la monografía de Hebenstreit, Maria, La oposición al 25
Información de Cebrià Molinero (correo electróni-
franquismo en Puerto de Sagunt (1958-1977), Valèn- co, 14 de diciembre de 2020). En el caso de las rela-
cia, PUV, 2014, pp. 237-238 y ss. Agradezco a José ciones entre Acción Comunista y Germania Socialista
Alberto Gómez Roda, de la Biblioteca del Arxiu His- se dieron entre estudiantes de la Facultad de Letras,
tòric Sindical José Luís Borbolla, las imágenes de este Derecho y Económicas de València.
volumen. 26
La primera concentración organizada por Germania
23
La práctica totalidad de escindidos de Germania So- Socialista de la que tengo conocimiento fue el “Aplec
cialista en la Asamblea de 1973 orientó su militancia de l’Arròs” (Sueca, 29 de julio y 30 de julio de 1972).
hacia el trotskismo y hacia el entrismo en el PSOE y la Información del integrante de Germania Socialista,
UGT. Hay que constatar que hacia 1974/1975 el PSOE Manolo Lledó (correo electrónico, 25 de mayo de
no tenía apenas implantación en el País Valencià. 2020).

1.3. Recomposición (1974-1976) El segundo portavoz, Ho Volem Tot (1975-1977),

editaba textos de intervención y de agitación re-
La recomposición era consecuencia, en parte, sultado de análisis de coyuntura. Cabe recordar,
de la delimitación a establecer entre liderazgo para el título de la publicación, la novela de Nan-
intelectual y trabajo político. En el caso de Ger- ni Balestrini, Vogliamo Tutto (1971), narración
mania se desarrolló en intervalos hasta 1976. de la lucha obrera en Turín y en Milán. El porta-
La situación revelaba las “entradas” y “salidas” voz de Germania se subtitulaba Fulls de combat
del sociólogo Marqués (alias “Arnau”) del grupo ideológic (Hojas de combate ideológico)29. El bo-
político, hasta su abandono definitivo en una letín editaba monográficos resultantes del deba-
Asamblea realizada en Ontinyent en 1976. Esta te en célula e informaba de luchas obreras muy
situación planteaba, además, la función del in- destacadas en la rama de la producción textil en
telectual en el seno de una estructura política y, Elx y Elda y del movimiento huelguístico donde
en consecuencia, delataba la hipotética depen- se inscribían (invierno de 1975-1976). La edición
dencia de la vida de una organización en torno de los ejemplares era redactada por militantes
a un supuesto liderazgo personalista. Germania que tomaban parte en dichos debates y luchas
Socialista no era, pues, “Josep Vicent Marqués”, obreras.
aunque fue su motor teórico a lo largo de su exis-
tencia. El entramado de publicaciones evidenciaba, en
definitiva, una existencia de la organización mí-
La recomposición orgánica también fue de ín- nimamente consolidada. Hay que constatar que
dole ideológica. A partir de marzo 1973 y hasta durante el bienio 1974/1975-1975/1976, a me-
verano de 1976 se editó el portavoz Bloc Roig27. dida que iban finalizando sus estudios, los miem-
De alto nivel de elaboración teórica, analizaba bros de Germania retornaban a sus localidades
monográficamente cuestiones políticas y socioe- de origen, donde continuaban la militancia. In-
conómicas que afectaban, entre otros sectores, tervenían en el trabajo político en empresa y en
al obrero y al jornalero agrario (número 5). La la organización de huelgas junto a militantes de
publicación, orientada a sectores “no obreros” clase trabajadora. Cabe señalar, en este caso,
de la formación, tenía como objetivo apoyar mo- las movilizaciones huelguísticas asamblearias en
vimientos estratégicos que, en el conjunto de las una empresa textil (Mantas Mora, en Ontinyent,
clases subalternas, no estrictamente obreras, Vall d’Albaida) y en una industria de logística,
pudieran incidir en la articulación de un “Bloque Atarazanas Orozco (Altea, Marina Baixa). Tam-
Histórico” de tipo gramsciano, hegemonizado bién hay que destacar la intervención de mili-
por el “Pueblo Trabajador Valenciano”. Entre tantes de Germania en huelgas articuladas en
los referentes teóricos cabría destacar el plan- Movimiento Asambleario en el sector del calza-
teamiento de André Gorz acerca de los cambios do (Elx)30, y la participación en ámbitos de la pla-
de morfología de la clase obrera. Bloc Roig editó
monográficos en torno al movimiento estudiantil (AHME-ACPV, Fondo Gaspar Agulló), Elx. Verano de
(número 2), sobre la coyuntura política después 1976.
de la muerte de Franco (número 6) y reeditó por
29
He consultado: Ho volem Tot. Full de combat ideolò-
este motivo el documento-marco sobre la cues- gic comunista, 1 noviembre, 1975, 5ff. 2 noviembre,
1975, 4ff; 3 diciembre, 1975, 10ff; 4 diciembre, 1975,
tión nacional elaborado en mayo de 1972. Llevó
6ff; 5 diciembre, 1975, 4ff; 6 enero, 1976, 6ff; 7 ene-
a cabo esta nueva impresión (número 7) dado ro, 1976, 4ff; 8 enero, 1976, 2ff; 9 febrero, 1976, 3ff;
que el hecho nacional radicaba en la base terri- 10 abril, 1976, 6ff, Biblioteca Històrica Borja. Jesuïtes
torial de dicho Bloque revolucionario. En este (BHBSI), Sant Cugat del Vallés.
contexto se sitúa la reedición ampliada de la sín- 30
La huelga del textil en “Mantas Mora” en Ontinyent
tesis de los principios ideológicos de Germania contó con la participación de un núcleo de trabaja-
Socialista28. dores, militantes de Germania Socialista. Transcurrió
entre el 2 y el 11 de febrero de 1976. Ver: Llin Llo-
pis, Guilem; Sanchis Carbonell, Josep, Ontinyent, de
27
Bloc Roig. Seccions no obreres de Germania So- la dictadura a la democràcia (1968-1982), Ontinyent,
cialista, 1 marzo, 1973, 12 ff; 2 octubre, 1974, 27ff; Edicions Víctor, 2008, p. 215. La Huelga de negocia-
3 noviembre, 1974, 19ff; 4, 1975, 8ff; 5, invierno, ción del convenio en el sector del calzado en Elx se
1975/1976, 23ff; [Nº especial] 6 junio, 1976, 32ff; 7 inició, con represión policial, el 22 de agosto y finalizó
verano, 1976, 59ff. (CRAI-Pavelló de la República-Uni- el 5 de septiembre de 1977. En el mismo sector en
versitat de Barcelona). Elda la huelga se inició el día 24 de agosto. El acuerdo
28
Síntesi de les bases polítiques de Germania Socia- de inicio de huelga se tomó en la asamblea del 17 de
lista, 5ff ciclostilados, Arxiu Històric Municipal d’Elx. agosto en el estadio de futbol Altabix con la presencia

nificación sanitaria (Comarcas Centrales Valen- dos consignas propias, a la manifestación convo-
cianas), en la planificación urbana (Altea) y en la cada para reivindicar la Autonomía del País Va-
organización de Aplecs comarcales, entre los que lencià el 9 de octubre de 1977: “Abaix la societat
cabe destacar el II y III, realizados en la Marina de classes” (“Abajo la sociedad de clases”) y “Co-
Baixa (Callosa d’En Sarrià, 11 y 12 setiembre de munisme i independència per al País Valencià”
1976 y La Vila-Joiosa, 1-2 de octubre de 1977). (“Comunismo e independencia para el País Va-
La incidencia en movilizaciones obreras se pro- lenciano”). Se trató del último acto de Germania
dujo, mayoritariamente –excepto el movimiento como organización soberana, aunque su existen-
asambleario d’Elx–31, en una coyuntura previa a cia se prolongó simbólicamente, un año33.
la formación de la alianza con sectores de la ex-
trema izquierda ibérica. En tercer lugar, la implosión de Germania se
produjo por la imposibilidad de desarrollar to-
1.4. Crisis e implosión (1977-1978) talmente la alianza con otras fuerzas de la extre-
ma izquierda. Este proceso se inició en enero de
La etapa final de Germania Socialista, que cons- 1977 y finalizó en junio del mismo año con la for-
tata a la vez un periodo de crisis interna y de au- mación del MLC, que en el País Valencià tomó el
todisolución, tiene lugar a lo largo de los cursos nombre de Moviment d’Alliberament Comunista
1976/1977 y 1977/1978. Durante el primero se (MAC). El manifiesto de constitución del MAC,
produjo una cierta crisis de militancia, en algún firmado en junio de 1977, reivindicaba la unidad
caso muy destacada, por como se estaba produ- de la izquierda revolucionaria y consejista, la au-
ciendo la alianza de Germania Socialista con el toorganización de los trabajadores, la autonomía
“Movimiento Comunista de Liberación” (MLC)32. de clase y el comunismo34.
Por otra parte, existió, ya en el curso 1977/1978, El peso valenciano, muy limitado en dicha pla-
el sector de militancia, que se quedó las siglas de taforma, recaía en los militantes de Germania
Germania Socialista. Dicha fracción no era parti- Socialista. El órgano de propaganda peninsular
daria de la alianza de Germania con organizacio- del MLC era Lucha Obrera35, mientras que el
nes de la extrema izquierda ibérica y acudió, con portavoz en el País Valencià fue Temps de Lluita.
Revista d’intervenció política. Moviment d’Allibe-
de 4.000 obreros. Una información de la evolución de rament Comunista (1977-1978).
la huelga en “Calzado: paro total en el tercer día de
huelga”, La Verdad (edición de Elx), 25 de agosto de La incorporación de Germania a dicha alianza
1977, p. 9, Arxiu de la Democràcia. Universitat d’Ala- respondía, según informantes de la formación,
cant (AD-UA), Alacant. Agradezco al archivero Agustín
a una voluntad de no quedar al margen de un
López el envío del artículo. Para un análisis sociológi-
co de este movimiento asambleario, San Miguel del
panorama político que se proponía transformar
Hoyo, Begoña, Los trabajadores de la industria del la reforma posfranquista en ruptura revoluciona-
calzado de Elche. Cambios en las condiciones de vida y ria, aunque el conjunto de la fuerzas citadas no
de trabajo (1960-1997) (Tesis Doctoral), Alacant, Uni-
versitat d’Alacant, 1998, p. 158. La importancia de la 33
Informante de Germania Socialista (conversación
huelga de Elx radicaba en que, según Gaspar Agulló, telefónica, 17 de enero de 2021). Su identidad, por
“por primera (y única) vez se empleaba una organi- motivo expreso, queda en el anonimato.
zación asamblearia en la negociación de un conve- 34
[Grupo Comunista Revolucionario, Lucha Obrera,
nio colectivo estatal en el sector del calzado (1976 y Unión Comunista de Liberación y Germania Socia-
1977)”. Información de Gaspar Agulló, 14 de diciem- lista”], “Moviment d’Alliberament Comunista”, 2ff
bre de 2020. ciclostilados. Arxiu Històric Municipal d’Elx. (AHME,
31
Precisamente la participación en la huelga de Elx Fondo Gaspar Agulló), Elx, Legajo H/130, 23. Verano,
fue el último vínculo más destacado de militantes de 1977.
Germania Socialista con la organización. Su trayecto- 35
Lucha Obrera. Revista de la Mesa de Unificación de
ria derivó hacia el trabajo sindical en sindicatos como la Izquierda Comunista Revolucionaria, 1 marzo, 1977,
USO. Dicho militante, Gaspar Agulló (alias “Pere”) ela- 12 pp., editada por las organizaciones que intervenían
boró el ejemplar dedicado a todo el desarrollo de la en la constitución del MLC/MAC: Germania Socialista,
huelga ilicitana citado infra y fue publicado en Temps Grupo Comunista Revolucionario, Insurrección, Lucha
de Lluita. Revista de información política. Moviment Obrera, Organización comunista, Unión Comunista de
d’Alliberament Comunista, 3 setembre de 1977, 6 pp. Liberación. El manifiesto de constitución del Movi-
32
Peiro, Pura (“Vicenta”), “Als Companys”, Crítica, 6 ment d’Alliberament Comunista, firmado en junio de
(febrero 1977). Le agradezco el documento y la infor- 1977, acababa reivindicando la unidad de la izquierda
mación sobre su salida de Germania (Correo electró- revolucionaria y consejista, la autoorganización de los
nico, 7 de diciembre de 2020). trabajadores, la autonomía de clase y el comunismo.

mostraba consciencia política hacia la cuestión de Germania orientaron su intervención política

nacional del País Valencià36. hacia los movimientos sociales.
El objetivo de la alianza ibérica se encaminaba a 2. ETAPA DE GENERACIÓN TEÓRICA

potenciar y catalizar a la clase obrera como fuer-
za que tenía que hegemonizar y dirigir un pro- Germania Socialista elaboró en el bienio 1970-
ceso de revolución socialista, cuya primera fase 1972 materiales ideológicos que habrían de ser
tenía que efectuar la ruptura con el continuismo referenciales a lo largo de su existencia.
monárquico implantado en la etapa tecnocrática
El primer texto elaborado, Per què com a mar-
del franquismo (1969).
xistes som valencianistes (1970)39, fue de lectura
Ahora bien, la sobredeterminación clasista ca- obligatoria entre la militancia incorporada a la
racterizada en todo este ciclo final y reconocida formación en dicha etapa. Debemos su autoría
por históricos militantes de la formación, refle- principal a Josep Vicent Marqués, aunque hubo
jaba la situación de dependencia en que quedó intervención, en distinto grado, de primeros
recluida la “variable” lucha nacional. militantes de Germania como el estudiante de
Derecho, Vicent Franch, e, hipotéticamente, del
Con todo, MLC-MAC y el conjunto de la izquier- militante obrero Francesc Signes.
da revolucionaria de aquella coyuntura se vieron
sobrepasados por los hechos que avanzaban ha- El redactado surgió en un momento de primera
cia la sustitución de un proceso de transición po- exploración del hecho nacional valenciano –una
lítica por otro de “transacción”37. concepción descentralizadora y provincial– del
Comitè Provincial de València del Partido Comu-
Teniendo en cuenta la intervención de Germania nista de España (PCE). En efecto, durante el trie-
Socialista en dicha alianza y la reflexión efectuada nio 1968-1971 dicho partido expuso tácticamen-
sobre esta última etapa, un sector de la militan-
cia concluyó, en perspectiva, que el hecho nacio-
establecer la orientación del combate político: lucha
nal era el factor de lucha prioritario ante la crisis nacional o lucha obrera (Información de Gaspar Agu-
de dimensión política de una quizá mitificada lló, 14 de diciembre de 2020). El proceso constitutivo
“clase obrera”. No de otro modo hay que situar del Partit Valencià Nacionalista ante la crisis de im-
trayectorias posteriores de militantes de Germa- plantación y de programa de la Unitat del Poble Va-
nia Socialista en otras organizaciones nacionalis- lencià recogía prácticamente a todos los militantes
tas como candidaturas territoriales nacionalistas de Germania Socialista agrupados en torno a la idea
independientes –municipales y “autonómicas”–, de vertebrar una nueva organización nacionalista. Ver
en organizaciones-plataforma (Unitat del Poble la carta-manifiesto dirigida a Josep Vicent Marqués
Valencià-Bloc Nacionalista, elecciones locales de “Carta oberta a Josep Vicent Marqués”, El Temps, 24
de septiembre de 1990, pp. 28-29. La firmaban 13 in-
1995) y en formaciones nacionalistas (Partit Va-
tegrantes históricos de Germania Socialista proceden-
lencià Nacionalista, 1991) hasta el presente (Bloc tes de la Unitat del Poble de Valencià. El primer ma-
Nacionalista Valencià, 1998, y su actual presen- nifiesto crítico del PVN dirigido a la dirección de UPV
cia en la coalición Compromís)38. Otros sectores fue “Jubileu-vos, jubileu-vos” (“Col·lectiu Cassandra”,
25 de abril de 1991). Agradezco el envío de los dos
36
Informaciones de las militantes de Germania Socia- documentos a la exmilitante de Germania Socialista,
lista Pepa Chesa e Imma Seguí (9 de septiembre de Paca Sevila. La crisis y la escisión en UPV y la forma-
2020). La única formación con la que Germania So- ción del PVN y la del BVN en Oltra Català, Lluís, Fona-
cialista tenía más puntos de vista en común era “Li- ments de la identitat territorial amb especial atenció
beración”. a la identitat nacional. El cas valencià: Discursos po-
37
Roca, José M, “Reconstrucción histórica del naci- lítics sobre la identitat valenciana entre els militants
miento, evolución y declive de la izquierda comunis- de base del Bloc, EUPV i PSPV-PSOE (Tesis Doctoral),
ta revolucionaria en España”, en Roca, José Manuel Alacant, Universitat d’Alacant, 2012, pp. 618-641.
(ed.), El proyecto radical. Auge y declive de la izquier- 39
“Per què com a marxistes som valencianistes”, texto
da revolucionaria en España (1964-1992), Madrid, original mecanografiado, s/l, s/f, 13 pp. Sitúo en 1970
Libros de La Catarata, 1994, pp. 69-84; Laiz, Consue- la redacción del documento a partir de la evocación
lo, La lucha final. Los partidos de la izquierda radical de Damià Mollà. Este militante de Germania Socialis-
durante la transición española, Madrid, Libros de La ta data su lectura en otoño de aquel año. Sanz, Benito
Catarata, 1995, pp. 277-280. y Rodríguez Bello, Ramón I., Memoria del antifran-
38
Hubo otras opciones como la ecologista, la incor- quismo… op. cit., p. 330. Reproduzco algunas citas del
poración a otros partidos (PSOE) y el sindicalismo de documento en versión original dada su similitud de
empresa. Ahora bien, el debate de fondo consistía en comprensión con el español.

te su tesis “nacionalitaria”. Se produjo un primer primera condición de la hipótesis de la forma-

posicionamiento, condicionado por el acuerdo ción establecía que “les reivindicacions valen-
del Pleno del Comité del Partido (1970) al asu- cianistes formen part de la lluita concreta d’una
mir la tesis defendida por su presidenta, Dolores classe concreta”43.
Ibárruri, cuando definía a “España” como un “es-
tado multinacional”40. El redactado reconocía
Con todo, el documento fundacional de Germa- “les reivindicacions valencianistes com a

nia Socialista podía inscribirse en los pocos aná- reivindicacions de la classe treballadora
lisis existentes sobre la cuestión nacional. El de valenciana i no d’hipotètiques aliances de
enfoque más próximo fue el publicado por el so- classe, el futur del País Valencià com a futur
ciólogo Marqués en el curso 1969/1970 sobre la de la classe treballadora valenciana, la lluita
ideología de la burguesía valenciana, que, según valencianista com a lluita de la classe treba-
mantenía, era seudovalencianista. El artículo lladora valenciana”44.
suponía la crítica a la instrumentalización de las
Había una vía de lucha valencianista marxista en
señas de identidad valencianas por dicha clase
un proyecto donde la liberación tenía que ser to-
dominante41. Desde el sector ideológico de los
tal: liberación nacional sin explotación de clase.
Círculos de Obreros Comunistas, Vicent Álvarez
y Miquel Domènech establecieron en 1970 una Una vez reconocido el marco nacional (valencia-
lectura de la coyuntura sociopolítica valenciana no) como marco de lucha de clases, la reflexión
de los años sesenta42. se centraba en el tercer punto –central– del tex-
to, “Els treballadors valencians són explotats
2.1. Per què com a marxistes som valencianistes
com a valencians”45. En sus subapartados se con-
El primer epígrafe de Per què com a marxistes cretaba la “renúncia” nacional de la burguesía
som valencianistes, “Les qüestions”, planteaba la valenciana, clase económicamente dominante,
necesidad de un “anàlisi marxista del valencia- pero no clase políticamente dirigente. No existía
nisme” para saber definir la lucha obrera en un una burguesía nacional valenciana. La existente
proceso de liberación nacional. era dependiente, o “servidora”, “d’una classe
d’escala més ampla i es desentén del problema
Estas eran las preguntas que el documento de de desenrotllar el País en qüestió”. No existía, en
Germania quería responder con concepciones definitiva, un modelo de País Valencià impulsado
establecidas en el segundo apartado del texto, por dicha burguesía.
“Nostres tesis”. Partían del reconocimiento de
una “explotació específica dels treballadors va- Dicha conclusión especificaba una serie de ca-
lencians, com a valencians”, situación que sobre- racterísticas de este grupo social: ausencia de
determinaba la “explotació genèrica o bàsica de liderazgo en la transformación económica y cul-
què són víctimes com a treballadors”. Esta lógica tural del País –o falta de formación (modernidad
se apoyaba en la “estructura política” del mo- burguesa) de nuevos cuadros46. En cambio, la
mento, posibilitadora de la “explotación”. Una burguesía valenciana se convertía en correa de
transmisión de la burguesía política española,
40
Rodríguez-Flores, Vega, Fer País, Comunismo valen- beneficiaria de legitimación desde la construc-
ciano y problema nacional, València, Institució Alfons ción de unos “mites nacionals” (españoles) –que
el Magnànim, 2018, p. 28. servían para “distraure el poble”.
41
M[arqués], J[osep] V[icent], “Classe dominant i
consciència valenciana (un esquema per a la discus- Según el documento, la actitud dimisionaria de
sió)”, Sou. Revista de la Facultat CC.PP.EE.CC, València, la burguesía valenciana era “perfectament cohe-
[s/n], [1969/1970], pp. 9-10. rent” “amb els seus interessos de classe” (“con
42
Ferrer, Juan (alias Domènech, Miquel y Àlvarez, Vi- sus intereses de clase”) y era comparable a la
cent), “El País Valenciano como problema. Experien- aristocracia ochocentista, adversaria de la revo-
cias y perspectivas”, Cuadernos de Ruedo Ibérico, 25 lución burguesa, equiparable a los 100.000 Hijos
(junio-julio, 1970). Ver sobre todo el apartado “Pers-
pectivas”, pp. 56-57. Para profundizar en la textura
ideológica del artículo es indispensable, Archilés Car-
dona, Ferran, La singularitat amarga, Catarroja-Bar- 43
“Per què com a marxistes…”, op. cit., f. 1
celona, Afers, 2010, p. 403 y ss. También, Rico, Anto- 44
Ibid., f. 2
ni, La influència de les idees de Joan Fuster…, op. cit., 45
Idem.
pp. 131 y ss. 46
Idem.

de San Luís y a las oligarquías latinoamericanas47. La estrategia de la nueva formación no acepta-

Dicha burguesía se podía comparar a una cierta ba una forma unitaria de estado socialista, una
burguesía modernizadora ibérica que intentaba “forma castellanista de l’Estat”52. La reflexión se
entrar en el Mercado Común Europeo con el fin dirigía a legitimar la lucha que unificaba las dos
de reproducir el estatus de poder en una previsi- formas de opresión –nacional y de clase– para
ble “Europa del neocapitalisme” y de “la social- establecer un “futur socialisme ibèric”53. Si el
democràcia”48. futuro Estado socialista fuese monopolizado
por una estrategia “castellanista” significaría la
La burguesía ejercía una doble opresión: eco- reproducción de un tipo de opresión nacional
nómicamente, al impedir el desarrollo del País que impediría alcanzar el socialismo. Germania
Valencià (“baix índex de creixement”49) y cultu- identificaba un estado unitario y una “Espanya
ralmente, al ser agente minorizador del uso y del una i socialista”54, situación que posibilitaría la
estatus social del valenciano. difusión de “biografies del Cid com a precursor
del socialisme”55.
La situación de opresión también implicaba una
reproducción de las condiciones culturales que La crítica implícita al estalinismo denunciaba que
incidían en la ideología de los trabajadores: una organización política revolucionaria podía
ser contraria a la “democràcia obrera” y al “prin-
“La no realització de P.V. com a País autò-
cipi de l’autogestió56. La misma reproducción de
nom lliure origina un inconscient col·lec-
las condiciones de posibilidad de una modalidad
tiu d’importància, una espècie de complex
burguesa de estado bajo un aparente socialismo
d’inferioritat que accentua els aspectes
implicaba la difuminación/substitución de las cla-
estranyament i esgarrament de l’alienació
ses obreras peninsulares en un marco ideológico
obrera”50.
(retorno a la convencionalidad) hegemonizado
Cabe destacar el concepto “complejo de inferio- por “mites ideològics i les formes opressives de
ridad”, formulado por la moderna sociolingüísti- la vella societat”57. Idénticos mitos legitimaban
ca valenciana –Rafael Ninyoles había publicado culturalmente el estado burgués unitarista.
Conflicte lingüístic valencià (1969) y L. Vicent
La opresión del País Valencià definía una “forma
Aracil había aplicado el proceso de sustitución
de negació de la condició humana”. Por este mo-
lingüística del catalán por el español.
tivo, el hecho nacional devenía “potencialment
También hay que destacar en el texto el uso de revolucionari”. Cabía, pues, concluir que “la llui-
expresiones como “extrañamiento”, “desgarro”, ta obrera” tenía que ser “des d’ara valencianista”
“alienación”, categorías sociológicas socializadas y “no limitar-se a incloure en un racó del progra-
por organizaciones político-militares anticolo- ma [posiblemente en alusión a la concepción
niales e independentistas51. Una aportación del territorial del PCE] alguna “promesa autonómi-
texto era la definición de consecuencias estruc- ca”58. Era preciso unificar dos formas de lucha
turales, globales, en un modo de producción con en una única confrontación: el modelo universal
efectos multiplicadores culturales y políticos. Di- (dialéctica de negación hegeliana) de “lluita de la
cho enfoque indicaba que el marxismo de Ger- classe obrera” se concretaba históricamente en
mania Socialista no era economicista. una formación social: una “forma concreta com
una fracció de la classe treballadora universal viu
En consecuencia, el programa ideológico de una al País Valencià”59. Contrariamente, se podía ace-
incipiente Germania Socialista proponía que la lerar la dualidad, o atomización de la lucha polí-
dirección política del País Valencià tenía que ser tica, llegar a una “esquizofrènia” que obstaculi-
asumida por la clase subalterna. zara el análisis de “la realitat com un tot”60. “El
capitalisme és un fenomen total i cal colpejar-lo
47
Ibid., f. 3.
48
Idem. 52
“Per què com a marxistes…”, op. cit., f. 6.
49
Idem. 53
Idem.
50
Ibid., f. 5. 54
Idem.
51
Rubiralta, Fermí, El nuevo nacionalismo radical. Los 55
Idem
casos gallego, catalán y vasco (1959-1973), Donostia, 56
Idem.
Gakoa Liburuak, 1997, pp. 265-294; Nuñez Seixas, 57
Idem.
Xosé, “Nuevos y viejos nacionalistas: la cuestión te- 58
Ibid., f. 7.
rritorial en el tardofranquismo, 1959-1975”, Ayer, 68 59
Ibid., f. 8
(2007), pp. 68-74. 60
Idem.

on se’l trobe i l’opressió dels valencians és una partits comunistes de les metròpolis i sovint de
manifestació del capitalisme”61. La incidencia les colònies els papers de l’alliberament nacio-
de la explotación bajo el capitalismo era doble: nal”. Se advertía de una situación no tan paradó-
económica (fuerza de trabajo obrera) y política jica que indicaba una cierta inversión de la carga
(naciones sin estado). de la prueba al denunciar políticamente –desde
sectores de izquierda alternativa– a los minorita-
No existía un “capitalisme genèric”, ni un “valen- rios burgueses valencianistas y al no hacerlo en
cianisme pur”62. “Sabem lo que els mites impe- el caso del bloque político oligárquico español.
rials castellans ha fet per alienar als proletariats Por extensión “no hi ha problema valencià sols
ibèrics”63. Germania Socialista defendía un “va- problema socialista abstracte”67. El internaciona-
lencianisme solidari”64 con los pueblos peninsu- lismo de determinada izquierda era una abstrac-
lares desde una especificidad nacional de clase. ción.
La unidad de lucha se convertía en un catalizador
de una forma de consciencia de país que, lejos La crítica delataba a los sectores progresistas de
de una abstracción, reflejaba las contradicciones izquierdas que sólo apreciaban burguesía en la
de clase. Por esta razón articular un valencianis- periferia, pero no la contemplaban en el “centre”
mo nacional era una manera de luchar contra la peninsular68. Según Germania Socialista, este
instrumentalización dels “mites castellans”. La sector político idealizaba al trabajador despla-
solidaridad de clase entre los trabajadores se zado (andaluz) como “autèntico”, “bueno”, defi-
ejercía a través de la lucha de los pueblos y na- niendo una “mística colonitzadora ara en versió
ciones contra el Estado español, concreción del ‘esquerra’”69.
capitalismo, de la opresión de clase. De hecho,
el séptimo epígrafe del tercer apartado, “Defor- La finalidad de dicha denuncia ideológica des-
macions ideològiques”65 (f.10), hacía referencia a tacaba que un modelo de izquierda española
una situación común en militantes de izquierda no denunciaba la clase que había expulsado los
al subsumir la cuestión nacional en una estrate- obreros andaluces de su país de origen: la oligar-
gia no marxista. quía española, igualmente “opressora” del País
Valencià.
El epígrafe centrado en esta crítica era relevan-
te porque partía de dos referentes que conside- El epílogo-conclusión del documento, “El valen-
raban la lucha de emancipación de los pueblos cianisme marxista”, sintetizaba la crítica de la
oprimidos: el Black Power, las teorías anticolo- ideología dominante burguesa en el País Valen-
nialistas de Frantz Fanon y de Albert Memmi. La cià. Con tal fin, el apartado era un compendio
crítica explicitaba que la teoría marxista “oficial” del conjunto de factores culturales mixtificados
“ha descuidat el tractament de les conseqüèn- denunciados a lo largo del texto.
cies de consciència que provoca en els pobles
La conclusión del documento destacaba que la
oprimits l’estructura de dependència” (f.10)66.
burguesía seudovalenciana invertía la realidad
La asunción de tesis de lucha anticolonial denun- de los hechos por medio de una idealización
ciaba la “penetración” “en la gent d’esquerres compensatoria de la identidad cultural, históri-
dels mites del colonialisme o del nacionalisme ca y lingüística de los valencianos: la “mutaba”
opressor”. “Perquè sabem com han ignorat els con una ‘interferencia’ interpretativa de lo que
parecía que eran hechos ciertos cuando en reali-
61
Ibid., f. 9 dad no lo eran. Se producía una conversión cons-
62
Idem. ciente de la apariencia (folklore) en realidad.
63
Idem. Denunciar dicha estrategia implicaba analizar los
64
Idem.
mecanismos con los que la burguesía había “pre-
65
Ibid., f. 10.
66
Idem. Albert Memmi (1920-2020), sociólogo tune- fabricat una valenciania folklòrica inofensiva”,
cino que analizó críticamente el colonialismo. Autor “velo” que ocultaba sus intereses económicos
de dos obras que Marqués tuvo que conocer: Retrato y políticos reales y posibilitaba su “complicitat
del colonizado, precedido por retrato del colonizador amb l’oligarquia castellano-andalusa”70.
(1957) y El hombre dominado (1968). La alusión al
movimiento Black Power (Poder Negro) denunciaba
la segregación de la etnia negra. Se constituyó en 67
el marco del Movimiento por los Derechos Civiles 68
Idem.
[1955-1968] y el 10-12 de marzo de 1972 organizó la I 69
Idem.
Convención Política Negra. 70
Ibid., f. 11.

Para concretar la crítica al ideologismo burgués Germania Socialista anunciaba que había llega-
el texto reconocía la existencia de una tradición do el momento de “marcar la línia marxista del
política republicana que adoptó el valencianismo valencianisme”. Con todo, la formación recono-
de izquierda de los años treinta y que fue supri- cía otro valencianismo “no marxista” –“superfi-
mido a raíz de su derrota en 1939 por el fascismo cial”– que no era “el enemigo” político75. Pensar
francofalangista y su colaborador burgués, expo- lo contrario significaba “hacer el juego” a la “es-
nente de la valencianía: no era “valencianista”71. tructura centralista”. El “valencianisme burgès”
era “inexistent com a força”. El adversario predo-
El apartado final del programa ideológico de minante era el “castellanisme” no burgués sino
Germania Socialista valoraba la trayectoria del “feudal”76.
valencianismo político socialista del Partit Socia-
lista Valencià (1960-1970), primera organización Como corolario a esta consideración final, la re-
socialista valencianista desde la postguerra72. Lo flexión concretaba los principios ideológicos de
hacía a partir del reconocimiento de una nueva Germania a desarrollar: 1) responsabilidad de la
generación, “no traumatitzada per la guerra” burguesía como clase “doblement opressora”:
en una coyuntura internacional de descoloniza- dominante y responsable de la “dependència del
ción73. El documento reconocía que, junto a la País Valencià”, 2) imposibilidad de una alianza
“penúria bibliográfica” del momento, se consta- táctica con “la burgesia valenciana i la burgesia
taba, entre las nuevas bases valencianistas, una espanyola” al haber pasado la “hora de la revo-
asociación “instintiva” entre “lluita valencianis- lució burgesa”, 3) concepción crítica del valen-
ta” y “socialista”, aunque sin conseguir articular cianismo historicista: “Condemnem el culte al
una “visió global del problema”. Esta limitación passat. Som valencianistes del PV futur”, 4) rei-
explicaba la escisión “d’alguns valencianistes cap vindicación del autogobierno (fórmula genérica)
a posicions unitaristes, turmentats pel problema sin marginar la solidaridad con los pueblos ibéri-
de la compatibilitat entre socialisme i valencia- cos, 5) asociación inseparable entre ‘País Valen-
nisme”74. cià’ y “treballadors immigrats”, 6) concepción de
la lucha por la cultura como frente de lucha po-
lítica, 7) [en blanco en el original], 8) la finalidad
de Germania Socialista era sensibilizar a la clase
71
Idem.
72
Partido-movimiento que impulsó –más allá del tra- trabajadora de la “explotación burguesa” y de la
bajo universitario de sensibilización política– la irra- “opresión del Estado español” y establecer vías
diación comarcal de la consciencia valencianista de propias para que la clase subalterna asumiera
izquierda –desde la tradición anticolonialista y mar- la dirección política del País Valencià socialista y
xista guevarista propia de los años sesenta. Mantu- autónomo que, por medio del socialismo, se con-
vo vínculos puntuales con organizaciones afines en virtiera en “comunidad libre de hombres libres”.
Catalunya (Moviment Socialista de Catalunya y Front
Nacional de Catalunya) y estableció contactos con El posicionamiento de Germania Socialista en
el socialismo europeo y, en un ámbito de militancia 1970 aportaba elementos interpretativos nue-
individualizada, con sectores nacionalistas de Occità- vos. No se trataba de una evaluación táctica del
nia. La incidencia territorial y una cierta implantación hecho nacional como recurso a aplicar ante una
en sectores industriales explicaba que fuese, desde
coyuntura determinada. La propuesta trabajaba
1939, la primera organización política donde con-
fluían trayectorias valencianistas externas a la univer-
conceptos que en aquel momento no convoca-
sidad. Con todo, a partir de la escisión del partido en ban a una lectura superficial y mecanicista de la
1966, se constató la existencia de una doble corriente “naturaleza” y al carácter político de un principio
política: la que consideraba la socialización del nacio- estructural. La formulación exponía las contra-
nalismo como trabajo prioritario y la que optaba por dicciones de clase de los sectores valencianos
la cuestión obrera. El inicio de la autodisolución del económicamente dominantes y políticamente
PSV data de 1968, y, según su militante Josep Vicent dependientes respecto a la oligarquía política
Marqués, finaliza en 1970. Marqués, Josep Vicent, española.
Tots els colors… op. cit., pp. 52-55. La referencia pun-
tual a Germania como una parte menor consecuencia Ahora bien, Per què com a marxistes… fue un
de militancias procedentes del PSV en Sanz, Benito y primer análisis que, sometido, como ahora ve-
Nadal, Miquel, Tradició i modernitat en el valencianis-
me, València, Eliseu Climent, Editor, València, 1996,
p. 256. 75
Seguramente el documento se refería a la Unió De-
73
“Per què com a marxistes…”, op. cit., f. 12. mocràtica del Poble Valencià.
74
Idem. 76

remos, a un proceso de discusión interna fue parte del PCE y haberlo hecho en el Front Mar-
matizado y estructurado en una reflexión que se xista Valencià, demostraba la necesidad de arti-
constituyó en el documento-marco definitivo en cular un comunismo de base nacional valenciana
torno a la construcción de la Revolución socialis- en torno a la experiencia del modelo del PSUC
ta en el País Valencià. catalán. La propuesta, no del todo crítica con el
“Documento-Plataforma del PCE,” clarificaba y
2.1.1. Posicionamiento del Partido Comunista consolidaba ideológicamente las posiciones de
de España dicho grupo. Consideraba el País Valencià como
nacionalidad, vinculada a lo que esta agrupación
El Comitè Provincial del PCE planteó un “Docu-
entendía como área dels Països Catalans y coin-
mento-Plataforma” en el portavoz del partido,
cidía con el enfoque de Germania Socialista en la
Verdad, de octubre de 1971. La argumentación
denuncia de la burguesía “local”.
se situaba en la aplicación de los criterios del
“Pacto por la Libertad” (1969), estrategia del 2.2. Redacción del documento-marco de 1972
PCE para constituir un frente de lucha política
interpartidista contra la dictadura, y, tal vez así, El prolegómeno inmediato al texto de 1972 fue
atraer a sectores valencianistas77. El nuevo po- el artículo redactado principalmente por Josep
sicionamiento concretaba la política de descen- Vicent Marqués y por Damià Mollà “El País Va-
tralización regional y reconocía la cultura propia lenciano. Problemas de la revolución socialis-
del País. Germania Socialista respondió con un ta”80.
texto de oposición redactado por Josep Vicent
Marqués. El texto, concluido en abril de 1972, se incluía en
un monográfico dedicado a la evolución interna
Con un plástico “El PC continua sense entendre del tardofranquismo (1966-1972), al cambio de
res”78 la formación denunciaba el carácter su- estructura social, a la nueva dinámica de clases,
cursalista de la táctica valenciana comunista es- al estado de lucha política y estudiantil antifran-
pañola. Según Germania el PCE no contrastaba quistas y a la estrategia de liberación nacional de
las clases sociales en lucha y quería únicamente ETA. El enfoque teórico del trabajo posibilitó que
aplicar la política descentralizadora. fuera un referente remoto para un estudio socio-
lógico posterior de Damià Mollà: su tesis docto-
Además del posicionamiento crítico de Germa- ral El País Valencià com a formació social (1977).
nia Socialista cabía destacar la respuesta de los
“comunistes valencians independents”79. El posi- Según Damià Mollà, la reflexión se situaba “au-
cionamiento, iniciativa de la plataforma valencia- tónomamente” en la órbita de Germania Socia-
nista de históricos marxistas, sin haber formado lista. Suponía una orientación objetivadora y ac-
tualizadora de la situación de las clases sociales
77
“Documento Plataforma de discusión sobre la par-
ticularidad del País Valenciano”, Verdad. Comité Pro- 80
El artículo de Marqués y Mollà, con la intervención
vincial de Valencia del Partido Comunista de España, probable del entonces militante destacado de Germa-
9 (octubre, 1971), 6 pp. El “Documento…”, pp. 1-2; nia Socialista, Vicent Martí, contó con la participación
“Sobre el Pacto por la libertad”, pp. 3-4. Un análisis en su redacción final del ingeniero agrónomo socialis-
en profundidad del posicionamiento del PCE ante el ta Vicent Garcés, antes de que éste último lo enviara
hecho nacional y su posicionamiento valenciano en a Ruedo Ibérico (correos electrónicos, 15 de junio y
Rodríguez-Flores, Vega, Fer País, Comunismo… op. 13 de septiembre de 2020). Una síntesis del artícu-
cit., pp. 26-34. lo en Rico, Antoni, La influència del pensament… op.
78
Germania Socialista-GS: “El PC Continua sense en- cit., pp. 133-136. Como hecho anecdótico, o no tanto,
tendre res” [“El PC continua sin entender nada”], 2 los seudónimos de los autores del texto: Vicent Peris
ff en ciclostil. El texto, escrito per Josep Vicent Mar- (Josep Vicent Marqués) y Guillem Sorolla (Damià Mo-
qués), puede fecharse en otoño-invierno de 1971 llà), formaban las iniciales de G[ermania] S[ocialista]
(curso 1971/1972). Información de Vicent Martí (15 del P[aís] V[alencià]. Información telefónica de Damià
de septiembre de 2020). Traducción del fragmento Mollà (16 de abril de 2008). Existe también la posibili-
del catalán al español por el autor de este artículo. dad, confirmada por Vicent Garcés (correo electróni-
79
El documento de los comunistas valencianistas, co, 2 de diciembre de 2020), de que Vicent Peris, que
“Acerca del problema nacional”, y la respuesta del era el seudónimo de este ingeniero para los artículos
PCE a Verdad, 12 (febrero, 1972), p. 2-5. Una alusión de Ruedo Ibérico, también firmara con ese alias dicho
al programa del grup dels comunistes valencianistes artículo y que Guillem Sorolla fuera el tándem Mar-
“ratpenatistes” a Rodriguez-Flores, Vega, Fer País, Co- qués-Mollà). En Forment, Albert, José Martínez… op.
munismo…, op. cit, p. 37. cit., p. 669.

y de la estructura económica del País Valencià. El sus planteamientos autonomistas de ámbito po-
trabajo reflejaba, en su primera parte, la inves- lítico español.
tigación de Mollà sobre la caracterización de las
fuerzas productivas y de su nivel de desagrariza- La referencia al valencianismo político de iz-
ción, mientras que el análisis de las clases era de quierda –Esquerra Valenciana, Partit Valencia-
interés central en el trabajo intelectual de Mar- nista d’esquerra y Nova Germania– fue, según el
qués. documento, la única concreción política nacio-
nal valenciana. Es interesante la referencia que
El análisis de la burguesía recaía en la burgue- se hace, bajo el franquismo, a la existencia del
sía agraria y comercial exportadora, cuyo com- Front Marxista Valencià.
promiso nacional era nulo (inexistencia del “va-
lencianismo burgués”). De hecho, los autores Con todo, era notoria la evaluación que el tex-
responsabilizaban, en gran parte, de la “atonia to hacía del PSV. Permitía comprender, en parte,
social” del País a la difusión de la ideología do- el origen de Germania Socialista. Aquel partido
minante burguesa. Se situaba a la pequeña bur- era considerado “ambiguo” y “moderado” en los
guesía en una posición intermedia de proletari- posicionamientos nacionales. Ello explicaba la
zación. Su situación acumulaba la contradicción primera etapa de movilización (hasta 1966), ge-
de poseer una pequeña propiedad y la de ejercer neradora de “los gérmenes de su posterior des-
de clase jornalera. La “clase trabajadora” no era integración como grupo político”. La situación
solo industrial emergente sino rural. política interna evidenciaba, según el artículo,
un valencianismo sin partido necesitado de un
El epígrafe dedicado a “la cuestión nacional” re- planteamiento político que relacionara hecho
pasaba la formación de la confederación entre nacional y socialismo. Pero la cuestión clave –
Catalunya y Aragón donde constataba la perte- reconocida en Per què com a marxistes…– era
nencia del País Valencià a ella como “nación pre- que algunas fuerzas políticas conceptuaban la
coz”. La castellanización de las élites dominantes “Revolución socialista” haciendo abstracción del
aristocráticas valencianas suponía el final de los marco nacional de lucha, mientras que otros sec-
“planteamientos pancatalanistas”. El potencial tores concebían la cuestión nacional únicamente
revolucionario antifeudal se situaba en lo que, en términos culturalistas. En efecto, según los
según los autores, era una “revolución democrá- dos autores, el planteamiento del PCE citado, del
ticoburguesa”. El proceso de configuración histó- PCE(M-L)81 y de la Liga Comunista Revoluciona-
rica de la formación nacional de Catalunya, que ria no era estratégicamente concluyente para el
el análisis concluía en “1474” –confluencia hacia caso del análisis en cuestión.
la unión entre monarcas de Castilla y Aragón–,
determinaba que los autores definieran el País Este contexto evidencia Germania como un gru-
Valencià como “pueblo oprimido con caracterís- po político de “deliberado ámbito valenciano”,
ticas nacionales comunes con Catalunya y Balea- que “reconoce la identidad nacional de base del
res”. Una opresión que no era colonial, sino fruto País Valencià con Catalunya y Baleares”, era par-
de una satelización o subordinación, “cultural, tidario del derecho a la autodeterminación de
frustración política y desajuste económico”. Los los valencianos y definía el “proletariado” como
orígenes de la historia moderna posibilitaban “clase nacional de la emancipación popular”
analizar la ideología regional burguesa en la dentro de la “dirección marxista de la lucha”.
que se apreciaban formas de secesión territorial
La conclusión del artículo destacaba la vincula-
como en el caso de Alacant.
ción de la estrategia socialista con el “análisis
El recorrido por el valencianismo político con- concreto del País Valencià”: una forma de lucha
temporáneo –deudor, seguramente, del estudio obrera en la empresa que superase la lucha sin-
coetáneo del socialista valencianista e historia- dical y que caracterizara específicamente la si-
dor Alfons Cucó, El Valencianisme Polític (1971)– tuación en la pequeña empresa, la organización
partía de la controvertida Renaixença, y su “falta productiva valenciana dominante.
de apoyo político burgués”, a la vez que destaca-
ba la falta de una Lliga Catalana, dado que la for-
mación “Dreta Regional Valenciana” represen- 81
El artículo se basaba en el trabajo “La oligarquía
taba un proyecto valencianista político burgués
proimperialista valenciana”, Partido Comunista de Es-
frustrado por la fuerza social del blasquismo y paña (Marxista-Leninista), Comité Regional de Valen-
cia, Valencia, mayo, 1970, 14 ff.

La aportación de la reflexión se dirigía a com- cionamiento marxista de que el proletariado no

prender el capitalismo globalmente, no sólo podía oprimir al de otra nación porque acababa
económicamente. Era un planteamiento de pa- oprimiéndose a sí mismo. Los ejemplos para este
norámica histórica, de resolución hipotética del hecho eran tomados de la actitud del proletaria-
hecho nacional del País en la forma de un “Esta- do inglés hacia el proletariado irlandés.
do Federal”82.
Una vez analizada la opresión colonial en la pe-
El logro del artículo fue situar –hacer visible– la riferia del sistema capitalista, el apartado enfa-
existencia de otro Pueblo –además del vasco, del tizaba la solidaridad entre lucha de clases y li-
catalán y del gallego– en el contexto ibérico de li- beración nacional en naciones occidentales sin
beración nacional y social. Historiográficamente estado. De nuevo se apelaba al caso vasco y el
los autores mostraban, según Alfons Cucó, “una juicio de Burgos de 1970 a militantes de ETA (la
resposta políticament operativa des de l’òptica reflexión citaba, como ejemplo, declaraciones
del marxisme radical”, y planificaban “unes re- del encausado, marxista-leninista, Mario Onain-
flexions País Valencià endins”83. dia).
La segunda fase de la teorización del hecho na- La conclusión centraba la atención en la opresión
cional, realizada en 1972, fue la versión sobre del “pueblo trabajador” valenciano, no única-
la clase trabajadora y la “opresión nacional del mente formado por la clase obrera, sino integra-
País Valencià”84. Este documento-marco, organi- do por el pequeño productor agrario que, simul-
zado en dos partes, fue redactado por Josep Vi- táneamente, era propietario y jornalero y que,
cent Marqués con la colaboración del militante minorizado culturalmente, formaba parte del
e ideólogo Vicent Martí. Suponía la continuidad, “pueblo oprimido” y económicamente era “clase
debatida y ampliada, del texto Per què com a explotada”. Por ello la categoría que mejor podía
marxistes som valencianistes. definir este grupo social, sumado al proletariado
industrial, era el de “pueblo trabajador”85.
La primera parte –“El marxisme i l’opressió dels
pobles”– trataba de la relación entre marxismo Otra cuestión precisaba la condición nacionali-
y cuestión nacional. Incidía en la concepción de taria de la sociedad valenciana. Según Marqués
la nación asociada a la revolución burguesa anti- no se trataba de una formación social colonial al
feudal y en el ascenso de la burguesía como cla- situarse en una sociedad en proceso de indus-
se dirigente. El proceso culminaba en la forma- trialización, y tampoco se trataba de una situa-
ción del estado nacional y el principio de “a cada ción “regional” ni “nacional”. El País Valenciano,
nación le corresponde un estado”. La reflexión, y como formación con consciencia nacional inter-
esta era la parte novedosa, planteaba las forma- media, era un “Pueblo” oprimido.
ciones nacionales sin estado, es decir, cuando no
existía un Estado de planta mononacional sino La finalidad del apartado era delimitar el con-
plurinacional. Era el caso peninsular, donde se cepto de “clase nacional” que ejercía la dirección
circunscribía el País Valencià. de la revolución nacional en un proceso de revo-
lución social. Con todo ello Germania Socialista
La explicación del modelo que había de ser apli- elaboraba su propia teoría de la nación.
cado al caso valenciano partía del análisis de las
formas de opresión colonial, no adscribibles úni- La segunda parte de la reflexión, “El cas valen-
camente a Europa. El objetivo de esta parte, que cià”, es la más importante del trabajo. Dividía el
contaba con el apoyo de las lecturas de Lenin (El enfoque en tres bloques: caracterización del País
derecho de les naciones a la autodeterminación), Valenciano, diferenciación de la de sociedad va-
de Frantz Fanon (Los condenados de la tierra) y lenciana y posicionamiento estratégico de Ger-
de Karl Marx (Correspondencia), admitía el posi- mania Socialista. Mientras los dos primeros apar-
tados desarrollaban tesis agrupadas del artículo
82
Ver el “Prólogo” de Josep Vicent Marqués en Co-
de Mollà y Marqués en Horizonte español86, el
lectivo Clase obrera y cuestión nacional, Bilbao, Ze-
ro-Zyx, 1978, p. 16. 85
Era un término ya utilizado en la fundación de la
83
Cucó, Alfons, País i Estat… op. cit., p. 285. sección valenciana del FOC/FLP en 1967.
84
La Classe treballadora davant l’opressió del País 86
Este análisis sociolingüístico se aplicaba al caso
Valencià com a Poble. Anàlisi marxista del problema d’Alacant teniendo en cuenta la lectura realizada por
nacional al País Valencià [País Valencià], ed. catalana, Marqués del artículo de Contreras, Ernest, “Tres no-
1 de mayo de 1972, 64 pp. tes sobre Alacant”, Serra d’Or, 105 (junio 1968), pp.

tercero, a modo de resumen conclusivo, definía La reflexión se substanciaba en dos partes. La

el conflicto nacional valenciano como contradic- primera era una visión general de la cuestión
ción secundaria que emergía junto a la contra- agraria desde la crisis del Antiguo Régimen hasta
dicción principal en el pueblo trabajador valen- los años sesenta/setenta del siglo XX. Analizaba
ciano. El hecho nacional no tenía sentido en él la situación del campo valenciano teniendo en
mismo si no se vinculaba a la lucha política de cuenta la situación de clase del pequeño cam-
clases contra el estado burgués. En este sentido pesino y el clima de transformación económica
Germania Socialista se autodefinía, y ello es muy operante en el tránsito de la década de los se-
notorio, como fuerza no valencianista porque senta a los setenta. El documento reflejaba que
no representaba una unión valencianista inter- “un cierto tipo de mentalidad agraria impregna
clasista. Era, contrariamente, un grupo político la vida valenciana”, incidiendo así, en una “so-
internacionalista del País Valenciano. Esta era la breestimación del campo”. Se trataba de lo con-
clave para entender el concepto de lucha contra trario. Como era común, Germania Socialista
todo tipo de opresión concretada en el seno de incidía en el ideologismo sobre el campo valen-
la “clase trabajadora”. La minorización nacional ciano para romper con su idealización y vincular
tenía que ser asumida políticamente. a los campesinos a la lucha de clases desde su
realidad productiva.
El término “País Valencià Lliure” era resuelto por
Germania bajo la fórmula “autogobierno”, op- La segunda parte estructuraba comarcalmente
ción política cuya forma de organización se tenía el País Valencià en los diferentes tipos de cultivo
que concretar al ejercer la autodeterminación. precisamente para indicar la heterogeneidad de
Germania partía, pues, de la historicidad de una situaciones agrarias.
formación social y extraía una consideración in-
telectual a concretar en trabajo político: el con- Los textos de apoyo confluían, además, con ma-
junto de opresiones mostraba su alcance real y teriales de intervención. Así, la reflexión sobre la
formal en cada tipo de sociedad. Por ello Ger- explotación capitalista de la mujer fue precurso-
mania Socialista se posicionaba en torno a las ra de la lucha feminista al País Valencià. Se re-
contradicciones emergentes en una sociedad en dactó probablemente entre 1971 y 1972 y tenía
proceso de industrialización. como referente el movimiento feminista de los
EEUU, entonces reactivado en el National Poli-
3. TEXTOS DE APOYO tical Women’s Caucus, Asamblea Nacional femi-
nista constituida en julio de 1971, y en expansión
El documento-marco se complementaba con durante 1972.
otros trabajos objeto de debate. La cuestión
agraria era, en el País Valencià, tema crucial y, La reflexión analizaba, desde el marxismo, la ob-
aún más, en una coyuntura de substitución de tención de plusvalía del trabajo doméstico, con-
modelo de organización productiva. Marqués secuencia de la jerarquía de clases del capitalis-
elaboró un texto de discusión sobre ello87. mo. Las mujeres que ejercían como explotadoras
de fuerza de trabajo eran asimiladas a la burgue-
sía. No existía para Germania Socialista un femi-
nismo abstracto. Por ello el texto incidía, como
32-36. La referencia, en el documento-marco en la 2ª en la cuestión nacional, en las formas ideológicas
parte de La Classe Treballadora…, op. cit., “El cas va- dominantes que mixtificaban la función econó-
lencià”, p. 7.
mica y social de la mujer con el fin de oponerse a
87
En dicha coyuntura Guillermo Sanz (alias Vicent
Garcés y, posiblemente, Josep Vicent Marqués) re-
la socialización de la alienación de clase88.
dactó “La cuestión agraria en el Estado español”, Ho-
Por ello la lucha feminista era intrínseca a la lu-
rizonte español, 2 (1972), pp. 45-61. En nuestro caso
me refiero al artículo [La qüestió agrària al País Va- cha por el socialismo. El documento se inscribía
lencià], 15pp. Arxiu Històric Municipal d’Elx. (AHME), en la lucha del poder negro y en contra del impe-
Elx, AM-1/E-3. [c. 1972]. Al documento consultado le rialismo norteamericano en Vietnam.
faltaba el título de la cubierta, por eso el claudátor
con título hipotético. Era un primer esquema poste- Otro material, orientado a la intervención direc-
riormente más desarrollado y publicado como “La ta, fue el texto del 1 de mayo de 1972. Germania
qüestió agrària al País Valencià. Una anàlisi marxista
(2ª part)”, Bloc Roig. Per la construcció d’una alterna- 88
[¿Amorós, Cèlia?], Notes sobre la situació de la
tiva socialista al País Valencià, Nº. 5, invierno, 75-76, dona en la societat capitalista, [c.1971/1972] 8. ff ci-
24 pp. clostilados.

Socialista llamaba a una realización de saltos y La cuestión nacional articulaba este microsiste-
de acciones puntuales y no a una concentración ma de luchas.
general. Era un posicionamiento crítico para no
articular un movimiento “policlasista” “antioli- CONCLUSIÓN
gárquico” que, según Germania Socialista, tam-
Del análisis realizado sobre Germania Socialista
poco servía para vehicular un frente obrero. Era
cabe destacar una valoración de su evolución
una referencia velada al posicionamiento del
organizativa, una ponderación de la aportación
PCE-ML89.
ideológica y teórica y una observación metodo-
Fundamentalmente, Germania Socialista ape- lógica de concepción.
laba al hecho de que el movimiento obrero va-
Por lo que atañe a la trayectoria de esta forma-
lenciano aún no podía asumir una acción coor-
ción de extrema izquierda se ha concretado el lo-
dinada de mayoría porque se encontraba “en
gro práctico de su lucha política. El carácter muy
proceso de reconstrucción”. La formación citaba,
limitado de la militancia de Germania Socialista
en consecuencia, las detenciones de activistas
en comparación, por ejemplo, al apoyo social
del Partit Socialista Valencià y de CCOO a raíz
del PCE en el País Valencià, no posibilitó técnica-
de la manifestación del 1 de mayo de 1967 en
mente una implantación notoria en ámbitos de
València. No era necesario quemar etapas y mi-
lucha obrera. Aunque el trabajo en el espacio de
litancia. El referente de Germania Socialista –los
sociabilidad universitario no fue menor dada su
enfrentamientos con la policía de los obreros de
implantación en las campañas de oposición a la
las atarazanas de aquel mismo año en El Ferrol–
dictadura y de apoyo a la construcción del País
servía para advertir que el movimiento obrero
Valencià.
valenciano no estaba aún preparado para esta
fase. Germania Socialista elaboraba material de Es preciso evidenciar un trabajo práctico de di-
agitación apoyando solidariamente las moviliza- fusión de propaganda ideológica en el área de la
ciones obreras para incidir en la concienciación y lucha sindical, común al de otras organizaciones
formas de organización asamblearia90. de izquierda revolucionaria. Pero con el añadido
de mostrar una especial capacidad de análisis
El documento-marco de 1972 adquiría todo su
ideológico relacionada com la posibilidad real de
sentido si Germania Socialista, como fuerza in-
irradiación de la organización. La propaganda del
ternacionalista, iba concretando materiales de
uno de mayo de 1972 fue un ejemplo concreto
debate y acciones que retroalimentasen crítica-
de dicha táctica. Otra característica, no menor ni
mente el posicionamiento ideológico y político.
formal, el material elaborado para la socializa-
ción en ámbitos de protesta, radicaba en el uso
del valenciano, hecho poco frecuente en el resto
89
Comunicat sobre l’u de maig de Germania Socialista,
de las formaciones políticas de carácter ideoló-
1972, 1 hoja ciclostilada a dos caras. Archivo personal
de Ricard Avellan, a quién agradezco la reproducción. gico afín.
90
Tal fue el caso de sendos panfletos redactados per
Josep Vicent Marqués y elaborados con el fin de in-
El trabajo de agitación y de organización de huel-
cidir en la organización de comisiones de empresa gas, siguiendo la estrategia asamblearia, propia
con el fin de ir “despertando a los compañeros, pro- del consejismo, podemos localizarlo de manera
moviendo protestas y luches y organizándose”. Era más frecuente en los ámbitos territoriales, co-
el lema final de la primera octavilla de orientación marcales, donde existía mayor implantación or-
general titulada “A Tu, Treballador” / “A Tu, Trabaja- gánica. Las comarcas de la Ribera Alta (Alcúdia),
dor”. La segunda, muchos más concreta, apoyaba la de la Vall d’Albaida (Ontinyent) y de la Marina
continuidad de las huelgas iniciadas en primavera y Baixa (Altea) fueron “distritos” significativos de
verano de 1972 con el fin de ejercer presión y obtener trabajo político y de intervención en la lucha sin-
la readmisión de trabajadores despedidos y conseguir
dical.
mejores condiciones de trabajo. Se titulaba “Treballa-
dor” y hacía referencia a los conflictos en las empre- Otra forma de implantación del trabajo político
sas: Cartonajes Suñer de Alzira, Ferroland en Puerto
fue la participación en “Aplecs”, concentraciones
de Sagunto, Sierra Menera y Unión Naval de Levante.
Arxiu Històric Municipal d’Elx (AHME-ACPV), AM 91-
valencianistas, a lo largo de los años setenta. Los
D-3, D-4 y AM 91 D5-D6. [c. 1972]. Para el contexto, casos citados de Sueca i de los dos realizados en
Sanz, Jesús, El movimiento obrero en el País Valen- la Marina Baixa (1976 y 1977) ejemplifican dicha
ciano (1939-1976), València, Fernando Torres Editor, forma de presencia territorial concreta, siempre
1976, pp. 97-101. en el contexto de la intervención en la difusión

de la organización comarcal del País Valencià, en- organización situada a la izquierda del PCE– ex-
tonces en auge. plicitaba un análisis político autocentrado en el
País Valencià concebido como “Poble” (“Pue-
Finalmente, hay que destacar el doble proceso blo”) y como sujeto político objeto del derecho
de fin de la organización. El primero concretado a la autodeterminación. Era la aportación más
por el sector de Germania que se queda las siglas destacada de la formación por el hecho de re-
y que se autodiluye el 9 de octubre de 1977; el lacionar el ámbito de pertenencia político y el
segundo, concretado por el sector de la forma- marco cultural valenciano, adscrito al área lin-
ción, mayoritario, que participa en la plataforma güística nacional catalana.
peninsular del Movimiento de Liberación Comu-
nista. Ambos procesos confluyen en un estado Ello nos lleva a plantear –no como excusa analí-
interno de falta de capacidad estratégica para tica– que la expresión “minoritario” en nuestro
continuar la lucha política. Germania había cul- caso pudiera comportar una falta de valoración
minado su fase máxima de expresión y la contra- de la elaboración teórica de Germania. El hecho
dicción interna (irradiación en el País Valenciano) de que Germania Socialista quedara sobrepasa-
y externa (falta de influencia en la plataforma de da por el proceso de reforma política, no debe-
extrema izquierda, enfatizada, además, por la ría llevar a la conclusión de que la organización
falta de sensibilidad ante la cuestión nacional de no tuviese una significación muy destacada en
la gran mayoría de fuerzas de la plataforma). cuanto a la formulación de las tesis sobre el he-
cho nacional. De hecho, una parte, no menor,
La ponderación del trabajo teórico de Germania del nuevo nacionalismo político emergente tie-
Socialista, formación autodefinida como Gru- ne una raíz “agermanada” por lo que atañe a la
po de Trabajo Político marxista revolucionario centralidad del País Valencià como sujeto políti-
e internacionalista, es preciso realizarla desde co con derecho a la autodeterminación. La con-
el planteamiento de un internacionalismo que sideración actual de considerar al País Valencià
se concretaba en primera instancia en su traba- “nación política” –en sectores nacionalistas va-
jo político desde y para el País Valencià. En este lencianos– tiene un referente clave en Germania
sentido la dimensión valencianista de la organi- Socialista.
zación no era ambigua, sino que se quería pro-
yectar en las contradicciones de la clase trabaja- Metodológicamente el presente estudio posibi-
dora del País Valencià. lita el planteamiento del sentido cualitativo de
una fuerza que puede ser considerada, en tér-
Dicho objetivo se situaba, a la vez, en la consi- minos cuantitativos, de “minoritaria”. La consi-
deración que la cuestión nacional tenía que cir- deración debería llevarnos, quizá, a preguntar
cunscribirse en el complejo de una estrategia de el número de hechos “no de masas” que han
liberación total. Una liberación que no derivaba condicionado la vida presente en el ámbito de
únicamente del comunismo leninista y luxem- los derechos civiles concebidos como derechos
burguista, sino que provenía de la influencia de políticos.
las ideas revolucionarias del “espíritu” del mayo
de 1968. Es por este motivo que dentro de la for-
mulación de la ideología del Grupo hemos con-
siderado pioneros los trabajos sobre feminismo,
definido a partir de la explotación capitalista del
trabajo doméstico, y hemos aludido a la acción
precursora de lo que posteriormente ha venido
considerándose como ecologismo político. La
concepción nacional acumulaba las luchas que
iban emergiendo en la sociedad valenciana. La
teorización sobre la cuestión era consecuencia
de la incardinación de esas tesis ideológicas in-
corporadas, implícitamente, en el ideario del
grupo.
La generación teórica nacionalitaria de Germa-

nia Socialista aportaba, en definitiva, un posi-
cionamiento que, por vez primera –y desde una

EL PARTIT SOCIALISTA D’ALLIBERAMENT NACIONAL

DELS PAÏSOS CATALANS (PSAN) DURANTE EL
TARDOFRANQUISMO Y LA TRANSICIÓN
THE PARTIT SOCIALISTA D’ALLIBERAMENT NACIONAL

DELS PAÏSOS CATALANS (PSAN) DURING THE LATE
FRANCOISM Y TRANSITION
Roger Buch*
*
Universitat Ramón Llull, España. E-mail: [email protected]
Recibido: 10 septiembre 2020 / Revisado: 20 septiembre 2020 / Aceptado: 10 octubre 2020 / Publicado: 15 octubre 2020
Resumen: El Partit Socialista d’Alliberament Na- Keywords: political parties, independentism, ca-
cional dels Països Catalans (PSAN) fue un parti- talanism, nacional liberation, marxists parties
do político independentista y marxista que de-
fendió la creación del Estado Socialista de los 1. EL PSAN, UN NUEVO ACTOR EN LA POLÍTI-
Países Catalanes. El análisis del partido durante CA CATALANA
E
su etapa más relevante, entre 1969 y 1980, nos
l Partit Socialista d’Alliberament Nacional
permite seguir la génesis y evolución de un es-
dels Països Catalans (PSAN) fue un partido
pacio político, Esquerra d’Alliberament Nacional,
independentista que defendió la creación
en los años del tardofranquismo y la transición.
del Estado Socialista de los Países Catalanes. La
Aunque el partido no consiguió ninguno de los
etapa del PSAN más relevante es la que se en-
objetivos estratégicos que se había propuesto,
cuentra entre su nacimiento y 1980. Aunque for-
destacó por la influencia ideológica que tuvo
malmente el partido continuó existiendo hasta
posteriormente en muchas otras fuerzas políti-
el año 2015, nos centramos en este artículo en
cas catalanas.
analizar lo que fue el PSAN hasta 1980, enten-
Palabras clave: Partidos políticos, Independen- diendo que fue cuando tuvo más presencia, más
tismo, Catalanismo, Liberación nacional, parti- militantes y también más incidencia en el siste-
dos marxistas. ma político.
Abstract: The Partit Socialista d’Alliberament Na- El PSAN nació en 1969 fruto de una escisión del
cional dels Països Catalans (PSAN) was a pro-in- Front Nacional de Catalunya (FNC) del año an-
dependence and marxist political party that de- terior y se posicionó como un partido antifran-
fended the creation of the Socialist State of the quista de tamaño medio junto con otros partidos
Catalan Countries. The analysis of the party du- políticos clandestinos que al llegar la democra-
ring its most relevant stage, between 1969 and cia jugarían un papel relevante en el sistema de
1980, allows us to follow the genesis and evolu- partidos catalán. En 1980, once años más tarde
tion of a political space, Esquerra d’Alliberament de su fundación, sufría la última de tres durísi-
Nacional, in the years of late Francoism and tran- mas escisiones que lo dejaron, cada una de ellas,
sition. Although the party did not achieve any of prácticamente roto en dos trozos simétricos.
the strategic objectives that had been proposed, Muchos de los que habían militado en el PSAN
it stood out for the ideological influence it later durante la década anterior se quedaron en las
had in many other Catalan political forces. puertas del Parlament de Cataluña apoyando
a la candidatura de Nacionalistes d’Esquerra.
Mientras tanto, lo que quedó del partido y los

El Partit Socialista d’Alliberament Nacional Roger Buch
herederos de su primera escisión, empiezan a Parlament de Cataluña en 1980 representando

deslizarse por la pendiente del apoyo a la lucha el nacionalismo catalán (ERC, UDC y CDC), no
armada, estrategia que caracterizaría este sector estaban consolidados a principios de los años
del independentismo durante toda la década de 70. El FNC, que tampoco conseguirá represen-
los 80. tación había quedado debilitado tras la escisión
del PSAN, mientras que UDC y ERC eran partidos
A pesar de tener una presencia relativamente testimoniales en el conjunto de las luchas anti-
importante en Cataluña y en el País Valenciano franquistas. El gran espacio político del naciona-
durante los últimos años del franquismo y los lismo catalán que representaría el pujolismo no
inicios de la transición, el PSAN no consiguió se consolidaría organizativamente hasta después
ninguno de los objetivos estratégicos que se ha- de la muerte del dictador. Teniendo en cuenta
bía propuesto ni tampoco presencia en el siste- que Cataluña había tenido durante la Segunda
ma de partidos del nuevo sistema democrático. República un sistema de partidos propio con un
Aunque ni en su momento de máximo esplendor gran peso de los partidos catalanistas, todo hacía
alcanzó una cuota mínima de representatividad, pensar que el PSAN podría haber acabado for-
entendemos que su análisis es relevante para mando parte del nuevo sistema de partidos que
entender, no sólo la transición y la evolución del tenía de nacer.
nacionalismo catalán, sino también para conocer
ciertos condicionantes del sistema político ac- Pero no fue así, y el PSAN el final de la transición
tual. En primer lugar, por la cantidad y calidad de quedó relegado al ostracismo. Al mismo tiempo,
ciudadanos que militaron en él y, por otra, por la partidos de ideologías similares, independentis-
influencia que ha tenido en el campo ideológico tas y marxistas revolucionarios de las otras dos
posteriormente en muchas otras fuerzas políti- nacionalidades históricas de España sí tuvieron
cas. éxito relativo. Nos referimos a la Unión do Povo
Galego (UPG) en Galicia apoyando coaliciones
El PSAN fue un partido que, por un lado, se de- como el Bloque Nacional Popular Galego (BNPG)
finió por su radicalidad ideológica tanto en el o, en otro sentido, las diferentes ramas de ETA
campo social como en el nacional. Pero a la vez, que hicieron lo mismo con Herri Batasuna y Eus-
se encontró situado en una posición bastante kadiko Ezkerra. Precisamente el éxito electoral
central en el antifranquismo catalán: participó de estas candidaturas gallegas y vascas supuso
activamente en la Assemblea de Catalunya, en un jarro de agua fría, por comparación, cuan-
el Consell de Forces Polítiques de Catalunya y en do en 1979 los resultados de la coalición BEAN
el Congrés de Cultura Catalana y algunos de sus donde participaba el PSAN relegaron el indepen-
miembros formaron parte de las élites culturales dentismo catalán “a la cola de las naciones sin
catalanas. La generación que creó el PSAN fue estado”.
una generación joven, que se movió en el centro
neurálgico del antifranquismo catalán y en época 2. EL NACIMIENTO DEL PARTIDO Y EL ACTI-
de radicalismo, era quien más contundentemen- VISMO INICIAL
te se posicionará sobre los dos valores emergen-
tes del antifranquismo catalán: el nacionalismo El FNC fue un partido que nació en 1940 y fue el
catalán y la izquierda marxista. referente del nacionalismo catalán en el interior
durante el franquismo. Después de unos inten-
El PSAN durante cierto tiempo destacó precisa- sos primeros años de activismo, el partido hiber-
mente por la inexistencia de partidos políticos nó y se recuperó a finales de los años cincuenta
consolidados en el espacio político del naciona- con sucesivas entradas de jóvenes universitarios.
lismo catalán a finales del franquismo1, lo que La segunda de estas generaciones de jóvenes a la
dejaba un vacío que hubiera podido ocupar. Los vez que vivirá dentro del FNC un gran activismo
tres partidos que lograrían estar presentes en el catalanista, se encontrará inmerso en un contex-
to de hegemonía del marxismo y del socialismo
1
Durante los años del franquismo, la resistència cata- revolucionario tanto dentro del antifranquismo
lanista se concentró en la reivindicación de caràcter catalán, como de toda la izquierda europea. La
cultural. No es hasta el inicio de la transición que el conversión de los jóvenes del FNC hacia postu-
nacionalismo catalán logra consolidar partidos políti- lados marxistas y revolucionarios, junto a una
cos sólidos. Veáse Balcells, Albert, Història del nacio-
concepción antiimperialista y anticolonialista, no
nalisme català, Barcelona, Generalitat de Catalunya,
1992 y Colomer, Josep Maria, La ideologia de l’anti-
se hará esperar. Los futuros fundadores del PSAN
franquisme, Barcelona, Edicions 62, 1985. harán la síntesis de lo que son los movimientos
96 © Historia Actual Online, 53 (3), Año: 95-108

Roger Buch El Partit Socialista d’Alliberament Nacional
pujantes del momento, la renovación de la cul- insertarse en las luchas obreras y sociales, y las
tura catalana y el marxismo, bebiendo tanto de clases oprimidas debían ser la vanguardia de la
la influencia del Partit Socialista Unificat de Cata- independencia nacional. Este sector criticó que
lunya (PSUC) como, a la vez, del marxismo ecléc- la política del FNC sólo se basara en agitación
tico de la nueva izquierda europea y de las luchas superficial y contactos “desde arriba” con otras
de los movimientos de liberación nacional anti- fuerzas de la oposición. Era necesario, según el
colonialistas. Las revoluciones cubana, argelina sector crítico, que el independentismo participa-
y vietnamita, que enlazaban la liberación social ra activamente en los movimientos populares.
y la nacional, no sólo iluminan los jóvenes, sino
que les hacen pensar que han encontrado la vía El giro marxista de los jóvenes del FNC provocó
para modernizar el nacionalismo catalán2. reticencias en la dirección que pronto se puso en
guardia. El FNC tenía una ideología socialista “ge-
A parte de la idea de la revolución social y de la nérica” pero existían en su seno un fuerte com-
indisolubilidad entre la liberación nacional y la ponente anticomunista, por otra parte, habitual
liberación de clase, otro elemento influenció los de las izquierdas democráticas europeas de la
jóvenes frentistas: la toma de conciencia de los época, debido a los efectos de la Guerra Fría.
Países Catalanes como marco nacional catalán. Los jóvenes del FNC, encuadrados en la Sección
El termino Països Catalans es popularizado por Universitaria y en el Comité de Barcelona, en un
el escritor valenciano Joan Fuster a partir de los primer momento intentaron aplicar sus nuevas
años 603, con la intención de reivindicar la na- ideas desde el mismo partido. Prueba de ello fue
turaleza de sujeto político del conjunto de terri- la participación activa de militantes del FNC en
torios del ámbito lingüístico catalán. Formarían las nuevas Comisiones Obreras (CCOO) al mar-
parte de los Países Catalanes Cataluña, el País gen de la dirección del partido.
Valenciano, las Islas Baleares, las comarcas orien-
tales de Aragón (Franja de Ponent), Andorra y la La ruptura entre el FNC y el futuro PSAN, a di-
Catalunya Norte, situada en el Estado francés. ferencia de las muchas que sufriría el indepen-
dentismo catalán en los siguientes años, no fue
Por lo tanto, aparte de la propuesta de indepen- brusca. Las diferencias ideológicas e incluso ge-
dencia nacional que ya llevaba explícita el FNC, neracionales eran tan claras que la separación se
se añaden dos ideas nuevas, la doble liberación produjo sin grandes traumas personales. Unos
nacional y social y el ámbito de Países Catalanes, ochenta militantes fundaron el PSAN que pronto
que llevarán, a medio plazo, a la creación de un fue el referente del nacionalismo radical, tenien-
nuevo espacio político que llamaremos Esquerra do más protagonismo e incidencia que el mismo
d’Alliberament Nacional. Antes, y viendo la im- “partido madre”. Aunque el FNC tendría mayor
posibilidad de que el FNC asuma estos postula- número de militantes en ese momento, estos
dos, habrá que crear una nueva organización que mayoritariamente estaban repartidos por las co-
haga suyas estas premisas ideológicas4. marcas de Cataluña y eran de más edad, mien-
tras que los del PSAN eran más jóvenes y activos
La aportación en el campo de la estrategia del y, además, mayoritariamente concentrados en
grupo que formó el PSAN5 también distaba mu- Barcelona y poblaciones cercanas.
cho de la del FNC. Para los jóvenes frentistas, el
nacionalismo catalán, para actualizarse, debía El proceso de gestación del nuevo partido lleva-
rá desde el verano de 1968 hasta principios de
2
Sobre las influencias tercermundistas en los movi-
1969. Entre los meses de agosto y septiembre de
mientos marxistas partidarios de la independencia en
naciones sin Estado del sudoeste de Europa, véase
1969 aparece el primer número de lo que será
Núñez Seixas, Xosé Manoel, Movimientos naciona- el portavoz del partido, Lluita, con la historia del
listas en Europa. Siglo XXI, Madrid, Síntesis, 1998, p. cual es posible seguir la evolución de la Esquerra
270 y Rubiralta, Fermí, Orígens i desenvolupament del d’Alliberament Nacional de los años posteriores.
PSAN (1969-1974), Barcelona, La Magrana, 1988, pp. El primer documento es la Declaración Política
16-24. de Principios, fechada en marzo de 1969. El nue-
3
Fuster, Joan, Qüestió de noms, Barcelona, Edicions vo grupo eligió un nombre que simboliza sus tres
d’aportació catalana, 1962. principales objetivos: el socialismo, la liberación
4
Véase Rubiralta, Fermí, Orígens i desenvolupa- nacional y los Países Catalanes. Estrena también
ment..., op. cit., pp. 108-116.
simbología nueva: la bandera catalana con la es-
5
Véase Ferrer, Josep, Per l’alliberament nacional i de
classe. Escrits de clandestinitat, Barcelona, Ciutat de
Mallorca, València, Avançada, 1978.
© Historia Actual Online, 53 (3), Año: 95-108 97

trella roja solitaria6, símbolo socialista, así como El sector oficial, encabezado entre otros, por
la silueta del mapa de los Países Catalanes que Joan Armet, Jordi Altarriba y Rafael Castellanos,
caracterizarán, en el futuro, todo el espacio polí- consideraba la alternativa propuesta por los crí-
tico de la izquierda de liberación nacional. ticos de poco realista y demasiado voluntarista
y que no era posible pedir un compromiso tan
Una vez puesto en marcha el partido, los militan- severo a los militantes. En definitiva, creía que la
tes no se estructuraron por territorios sino por línea llevada hasta entonces era la única posible
frentes de lucha: barrios, comarcas, enseñantes, en las circunstancias del momento. Entendía que
sindical, jóvenes y universidad. El crecimiento el sacrificio personal que se pedía no era posible
fue lento pero continuado durante los primeros y si se llegara a concretar esta “proletarización”
años, aunque la mayoría de las nuevas incorpo- de la organización tampoco solucionaría los pro-
raciones vinieron de la universidad y del mundo blemas de incidencia del partido.
de la enseñanza. Se evidenció la gran dificultad
para introducirse en el mundo obrero y pronto Otro tema que estaba encima de crisis era el
aparecieron las primeras constataciones de la papel del partido con la lucha armada. Hay que
poca incidencia y escasa penetración social del decir que el sector crítico no era partidario de
partido. Ante esta realidad se decidió apretar el organizar la lucha armada, pero sí que decía,
acelerador. Durante el año 1972, se multiplicó por ejemplo, que era necesaria una solidaridad
la actividad del partido en diferentes sectores más alta con aquellos que sufrían represión para
en un intento de extensión que acabaría siendo practicarla. De todos modos, desde el mismo
agotador. Se editaron publicaciones sectoriales momento de la escisión de los “provisionales”, la
en cada frente de cara a la captación de posibles justicia española los implicó en asuntos relacio-
nuevos militantes. Este sobreesfuerzo no apor- nados con el terrorismo, incluso mucho después
tó ningún aumento significativo de la incidencia de llegar la democracia. No se trataba tanto de la
en los movimientos sociales. El cansancio por los creación de grupos armados catalanes sino del
pocos resultados dejó paso a la frustración y al apoyo a los comandos de ETA que pasaban por
inicio de discrepancias internas serias y llevaron Cataluña7.
a la creación de una tendencia interna, liderada
por Carles Castellanos, crítica con la línea oficial La ruptura, que supuso la primera escisión del
llevada desde el ejecutivo y que acabaría llevan- PSAN, se oficializó en la Asamblea de Represen-
do a la creación del PSAN Provisional (PSAN-P). tantes de marzo de 1974. Fue una ruptura dura,
No se trataba de divergencias ideológicas como hubo enfrentamientos personales fuertes y pro-
las que había tenido en la anterior crisis en el in- blemas por el control del aparato, los locales y
terior del FNC sino de diferencias estratégicas y las impresoras. De hecho, se publicaron dos Llui-
tácticas. ta por separado, firmados por el PSAN y en am-
bos se anunció la expulsión del partido de miem-
El sector crítico acusó a la dirección del PSAN bros de la dirección disconformes con la línea del
de hacer seguidismo del PSUC y también criticó partido. En poco tiempo, el PSAN liderado por
la extracción pequeñoburguesa de los militan- Carles Castellanos añadió el nombre de “provi-
tes del partido que se hacía notar en la falta de sional”, de claras connotaciones irlandesas, a las
compromiso real con el fin de insertar el parti- siglas del partido. Entre los que fueron con los
do en las masas. Por lo tanto, pedía un compro- provisionales destacan las hermanas Eva y Blan-
miso personal más fuerte que podía ir desde el ca Serra, así como las juventudes del partido, las
aumento de colaboración económica individual Joventuts Revolucionàries Catalanes (JRC), con
por el partido hasta el cambio de residencia o de presencia en la universidad. En total, quedaron
puesto de trabajo para poder expandir el parti- sólo una veintena de militantes en cada facción8.
do, por ejemplo, en las fábricas.
Cansados de tanto debate interno y discusión,
los restos del PSAN siguieron adelante bajo el
liderazgo de Joan Armet y se dedicaron a hacer
6
La bandera “estelada roja” del PSAN es utilizada en toda la extensión que no habían podido hacer
la actualidad por los grupos que apoyan a la Candi-
datura d’Unitat Popular (CUP) y también por las ju- 7
Buch, Roger, El Partit Socialista d’Alliberament Na-
ventudes de ERC. El FNC utilizaba la estelada histórica cional dels Països Catalans (PSAN) (1968-1980) (Tesis
de Estat Català, con estrella blanca sobre fondo azul, Doctoral), Bellaterra, UAB, 2010, pp. 95-96.
utilizada actualmente por la mayoría de grupos inde- 8
Rubiralta, Fermí, Orígens i desenvolupament..., op.
pendentistas catalanes. cit., pp. 158-171.

debido a los debates previos a la escisión. En Más adelante, a medida que entren más parti-
poco más de un año multiplicaron su militancia dos pequeños, muchos de ellos de izquierda ra-
por tres y la formación se estabilizó en varias co- dical y agrupaciones territoriales, su peso relati-
marcas. Destacó la creación de la primera célula vo será menor.
del PSAN en la ciudad de Valencia en 1974. Este
fue un hecho de gran importancia ya que por El PSAN tenía aliados en la Assemblea como la
primera vez un partido nacionalista catalán sale Assemblea Permanent d’Intel·lectuals Catalans
de los límites de la Cataluña estricta y se pone (APIC) o el independiente Jordi Carbonell. En el
en práctica la teoría del ámbito nacional de los momento de fijar la ideología fundacional de la
Países Catalanes. En poco tiempo el PSAN se ex- Assemblea de Catalunya, el PSAN pierde la rei-
pandirá por diversas comarcas valencianas y fi- vindicación del ámbito de Países Catalanes, pero
nalmente, en 1976, el partido tendrá presencia en cambio logra introducir el concepto de au-
orgánica también en Mallorca, aunque duró sólo todeterminación en uno de los famosos cuatro
un año. puntos programáticos. El redactado del tercer
punto será usado unos años después por el in-
3. PARTICIPACIÓN INICIAL EN MOVIMIEN- dependentismo para reclamar que la autodeter-
TOS SOCIALES Y UNITARIOS minación formaba parte del pacto antifranquista
tras la renuncia, por ellos injustificada, de los de-
Uno de los elementos más relevantes del PSAN más partidos11.
en sus primeros años es el compromiso con el
conjunto del movimiento antifranquista catalán Los líderes y los militantes del PSAN participa-
destacando su implicación en la Assemblea de ron en las actividades de la Assemblea, tanto de
Catalunya y también en las CCOO. agitación como también a nivel de contribución
intelectual, por ejemplo, en la redacción de cam-
La Assemblea de Catalunya nacida en 1971 cons- pañas para la oficialidad de la lengua catalana.
tituyó una de las grandes experiencias unitarias
del antifranquismo catalán por lo que significó Con el tiempo, los militantes de PSAN valorarán
de movimiento de masas que integraba las di- su participación en la Asamblea de manera dife-
ferentes luchas de los movimientos vecinales, rente. Por un lado, algunos creerán que fue una
obreros y estudiantiles con un proyecto polí- pérdida de tiempo en el sentido de que colabo-
tico. Estaba formada por los partidos políticos raron y ayudaron a triunfar la estrategia de otro
antifranquistas, de diversa ideología, (des de la grupo, el PSUC, y no contribuyeron a la realiza-
extrema izquierda hasta la democracia cristiana, ción de la estrategia de independencia en sí. Por
y también por fuerzas des de la diversa índole, otro lado, otros creerán que la participación fue
como organizaciones sindicales, grupos profe- un éxito, ya que aportaron sensibilidad naciona-
sionales, representantes del movimiento univer- lista a la Assemblea y contribuyeron, de una vez
sitario, del movimiento vecinal, grupos confesio- por todas, a catalanizar el antifranquismo popu-
nales cristianos, asambleas comarcales, etc. De lar. Aunque el nacionalismo radical no era mayo-
hecho, es considerado el fenómeno político de ritario en la Assemblea, colabora definitivamente
mayor alcance, en Cataluña desde 19399. en vincular la lucha por los derechos nacionales
de Cataluña con las luchas de los trabajadores y
La involución del régimen y el aumento de la rela lucha democrática contra el franquismo.
presión había provocado que el antifranquismo
catalán, con un protagonismo del PSUC impor- Además de la participación en la Assemblea de
tante, estuviera más unido que nunca. El PSAN Catalunya, en este primer periodo el PSAN inten-
participará desde el primer momento en la As- tó participar en los movimientos populares como
semblea, dedicando muchos esfuerzos y sus diri- parte de la estrategia para acercarse a las masas
gentes asistieron a las reuniones de su comisión e influir en ellas. Militantes del PSAN, junto con
preparatoria. El peso específico del PSAN en los miembros del Moviment Socialista de Catalunya
primeros momentos fue bastante destacable10. (MSC) promovieron los Comitès d’Acció Docent
(CAE). A nivel estudiantil es necesario citar la
9
Culla, Joan Baptista y de Riquer, Borja, Història de creación por parte del PSAN del Grup de d’Es-
Catalunya (Pierre Vilar, coordinador) Volum de fran-
quisme i transició, Barcelona, Edicions 62, 1989, p. Barcelona, Empúries, 1991 y Colomer, Josep Maria,
391. L’Assemblea de Catalunya, Barcelona, Avance, 1976.
10
Véase Batista Antoni y Maset, Josep Playà, La gran 11
Batista, Antoni y Playà, Josep, La gran conspiració...,
conspiració. Crònica de l’Assemblea de Catalunya, op. cit., p. 92.

tudiants Revolucionaris (GER) para influir en la las calles para causar atascos o incluso lanzan-
universidad. En el ámbito sindical, y como había do cócteles molotov. Estos “saltos” en algunas
empezado a hacer desde la época de la FNC, los ocasiones podrían ser más numerosos cuando
militantes participaron en la unitarias CCOO. La se reúnen los simpatizantes del PSAN con los de
participación de PSAN se limita en algunos ámbi- otros grupos, como el FNC. Otras acciones más
tos como la banca, las artes gráficas y la sanidad. comunes fueron el reparto de octavillas en las
La presencia de los militantes del partido en la estaciones de metro o durante las manifestacio-
lucha sindical catalana fue intensa ya que partici- nes unitarias convocadas por la Assemblea de
paron en varios conflictos de la clase trabajadora Catalunya.
a lo largo de los años, distribuyendo octavillas a
menudo firmadas con las siglas del partido y de Además de estas acciones, durante estos prime-
CCOO. El peso específico del PSAN, sin embar- ros años de vida, el PSAN participó en la lucha
go, se diluyó en un contexto de efervescencia de anti represiva centrada especialmente en la so-
las luchas de los trabajadores, especialmente las lidaridad con los independentistas vascos. Ésta
huelgas exitosas en el Baix Llobregat en 1972 y tuvo su apogeo durante el Proceso de Burgos13
1973. (diciembre de 1970) pero fue constante a prin-
cipios y mediados de los setenta. Por ejemplo,
El PSAN también trató de influir en la nueva lu- en 1975 fue importante la campaña para inten-
cha vecinal que tomará impulso en los últimos tar evitar las penas de muerte de Garmendia y
años de franquismo. El PSAN estará presente en Otaegui.
la Comisión de Barrios de Barcelona donde tie-
ne presencia militante, como Sant Andreu o Sant El PSAN apoyó a ETA y a la lucha del pueblo vas-
Antoni. También en este momento, los militantes co, pero en ningún caso promovió ninguna orga-
de PSAN promueven en algunas regiones, como nización armada dentro de los Países Catalanes.
el Vallès, el Maresme o el Camp de Tarragona, los El partido se limitaba a capacitar a comandos
Comités de Actividades Cívicas (CAC) con objeti- para acciones de propaganda para desplegar
vos similares a los de las comisiones vecinales, banderas catalanas, hacer pintadas y la autode-
pero a nivel comarcal. fensa de sus manifestaciones relámpago, pero
sin llegar nunca a entrenar militarmente. En el
4. LA AGITACIÓN INDEPENDENTISTA Y EL mismo espacio político, sin embargo, aparecie-
MOVIMIENTO ANTI REPRESIVO ron varios grupos que lo intentaron. Destacaron
las experiencias del Front d’Alliberament de Ca-
Además del movimiento social antifranquista, talunya (FAC) primero y de Exèrcit Armat Català
en sus primeros años de vida, el PSAN también (EPOCA) años más tarde, completamente dife-
participó en acciones catalanistas12. A diferencia rentes entre sí, pero los dos igualmente atípicas
de las acciones de cariz social, aquí tuvo que li- tanto por su estructura como por su estrategia14.
derarlas y no llegaron a ser tan masivas como las La solidaridad de PSAN con los militantes de es-
otras. En la década de 1970, en lugar de grandes tos grupos cuando fueron detenidos existía, pero
manifestaciones en las que un gran número de a menudo podía ser tibia, ya que generaba bas-
personas intentaban concentrarse, el naciona- tante incomodidad al no controlar sus acciones.
lismo catalán intentó tomar las calles en accio- Todavía quedaban años para que naciera Terra
nes clandestinas que buscaban lograr un golpe Lliure, una organización armada a favor de la in-
de efecto. Para aprovechar las acciones, se uti- dependencia catalana que sí que contó años más
lizaron fechas emblemáticas para el catalanismo
como el 11 de septiembre, Diada Nacional de
Catalunya, el 14 de abril, día de la República o el
23 de abril Día de Sant Jordi e implementar otras
nuevas como el 15 de octubre, el aniversario del 13
Sobre la manifestaciones del PSAN contra el pro-
fusilamiento del presidente de la Generalitat re- ceso de Burgos y por la libertad de los presos vascos,
publicana Lluís Companys. véase Rubiralta, Fermí, Orígens i desenvolupament...,
op. cit., pp. 130 y 131.
Las acciones más atrevidas fueron acciones re- 14
Véase Malló, Oriol. “La transició secreta” en El
lámpago o “saltos” que terminaban con el des- Temps, 22 de noviembre de 1993; Manté, Blai, Front
pliegue de una pancarta, poniendo cadenas en d’Alliberament Català. Sabotatges per la independèn-
cia, Barcelona, Editorial Base, 2009 y Dalmau, Ferran
12
Véase Buch, Roger, El Partit Socialista..., op. cit., p. y Juvillà Pau, EPOCA, l’exèrcit a l’ombra. Lleida, Edi-
88. cions El Jonc, 2010.

tarde con el apoyo político del Moviment de De- Diada nacional de Cataluña del 11 de septiembre
fensa de la Terra (MDT)15. de 1976 fuera de la clandestinidad se celebró en
Sant Boi de Llobregat de forma unitaria y multi-
5. EL DESPERTAR DE LA DEMOCRACIA (1975- tudinaria. Las primeras elecciones de 1977 serán,
1977) sin embargo, el detonante de la desaparición de
la Assemblea ya que después de éstas, a pesar
En 1975, tras años de experiencia de trabajo uni-
de los intentos de los grupos extraparlamenta-
tario en la Assemblea de Catalunya, el PSAN par-
rios como el PSAN, los partidos parlamentarios
ticipó en la fundación del Consell de Forces Po-
declararon la inviabilidad política de cualquier
lítiques de Catalunya (CFPC)16, que servirá para
intento de continuidad.
dar a conocer 11 partidos catalanes a la socie-
dad. El Consell se anunció públicamente apenas Las elecciones convocadas el 15 de junio de 1977
un mes después de la muerte de Franco y, por lo encontraron el independentismo dividido, ilegal
tanto, Joan Armet es el primer líder del PSAN en y sin suficiente fuerza o perspectiva para com-
aparecer en la prensa, todavía, en momentos de prender la enorme importancia que tendrían a
tensa clandestinidad. la hora de definir el futuro sistema de partidos.
Si en las elecciones al Congreso de los Diputados
Por otro lado, el PSAN también participó acti-
el independentismo no consiguió ningún resul-
vamente en plataformas unitarias de las Islas
tado positivo, sin embargo, en las elecciones al
Baleares, como la Assamblea Democràtica de
Senado Lluís Maria Xirinacs fue elegido como se-
Mallorca. En el País Valenciano participó activa-
nador independiente por Barcelona con el apoyo
mente en el Consell Democràtic del País Valencià
de diferentes organizaciones civiles y políticas.
y en la Taula de Forces Polítiques i Sindicals del
El PSAN apoyó la candidatura de Xirinacs para
País Valencià. Los constantes esfuerzos del PSAN
el Senado, mientras que, en el Congreso, reco-
para que las instancias unitarias tuvieran ámbito
mendó el voto para Esquerra de Catalunya (una
de Países Catalanes fueron parcialmente recom-
coalición entre los también ilegales ERC y PTE), y
pensados cuando se celebró en Cura (Mallorca)
también para otras coaliciones de izquierda radi-
el 31 de enero de 1976 una reunión de plata-
cal en el País Valenciano y las Islas Baleares.
formas unitarias de los Países Catalanes con la
presencia de representantes de los organismos En resumen, aunque los resultados mostraron la
unitarios de Cataluña, el País Valenciano y las Is- falta de una organización política de la izquier-
las Baleares. da de liberación nacional capaz de presentarse
a una elección, garantizaron, aunque precaria-
En los años posteriores a la muerte de Franco,
mente, que la voz de la izquierda independen-
la Assemblea de Catalunya actuó con fuerza y el
tista fuera presente en el Senado, con Xirinacs y,
PSAN siguió plenamente involucrado. La primera
más indirectamente, en el Congreso, con el repu-
blicano Heribert Barrera.
15
El grupo armado Terra Lliure, activo entre 1978 y
1995, reivindicó alrededor de 150 atentados y a lo 6. LA VIDA DEL PSAN EN LA SEMICLANDES-
largo de su existència fueron detenidas unes 300 per- TINIDAD
sonas acusadas de algun tipo de colaboración. Contó
con el apoyo inicial del PSAN-P, y también del PSAN Los grupos locales del PSAN participaron plena-
a partir de 1980, período que se encuentra fuera del mente en las movilizaciones municipales de tipo
alcance cronológico de este artículo. Véase Vilaregut, ecologista, cultural, vecinal o asociativo que se
Ricard, Terra Lliure, la temptació armada a Catalunya, multiplicaron entre 1975 y 1976. Según la relati-
Columna, 2004, Barcelona. va fuerza del partido, en cada lugar promovieron
16
Los partidos que formaron parte del Consell fueron
o colaboraron en las asambleas democráticas
Convergència Democràtica de Catalunya (CDC), Unió
Democràtica de Catalunya (UDC), Esquerra Democrà- locales que eran los núcleos locales de la Assem-
tica de Catalunya (EDC), Convergència Socialista de blea de Catalunya, y más tarde también en las
Catalunya (CSC), Reagrupament Socialista i Democrà- secciones locales del Congrés de Cultura Cata-
tic de Catalunya (RSDC), Front Nacional de Catalunya lana. Los núcleos del PSAN local, saliendo de la
(FNC), Partit Carlí de Catalunya (PCC), Partit Popular clandestinidad, participaron activamente en un
de Catalunya (PPC), Partit Socialista d’Alliberament movimiento mucho más amplio que compartían
dels Països Catalans (PSAN) y Partit Socialista Unifi- con todos los grupos prodemocráticos.
cat de Catalunya (PSUC). Véase Caminal, Miquel, Na-
cionalisme i partits nacionals a Catalunya, Empúries,
1998, Barcelona.

Más tarde, cuando se retrasaron las elecciones Isabel Clara Simó, Quim Monzó, Xavier Romeu u
municipales, los partidos de oposición ejercie- Oriol Pi de Cabanyes. El PSAN se convierte casi
ron una intensa presión sobre las instituciones en el partido hegemónico en los ambientes de
municipales que consideraban carentes de legiti- los jóvenes escritores catalanes. Muchos miem-
midad. Será común, especialmente a lo largo de bros del Frente Cultural del PSAN fueron miem-
1977 y 1978, las declaraciones unitarias de las bros de la Assamblea Permanent d’Intel·lectuals
secciones locales de los partidos contra la políti- de Catalunya (APIC).
ca de los ayuntamientos franquistas. El PSAN, en
las comarcas donde existe, colaboró activamen- Se propuso el frente cultural del PSAN:
te para promover el tejido cívico de la población.
“...la tasca de conscienciació, mobilització i
Durante la segunda mitad de la década de 1970, organització dels professionals, treballadors
hubo una efervescencia nacionalista en todos i de la cultura –metges, aparelladors, advo-
los ámbitos debido, en parte, a la renovación cats, investigadors escriptors, artistes, en-
popular catalanista que supuso el éxito de la As- senyants, traductors, periodistes, etc, etc.-
samblea de Catalunya. El nacionalismo entró con per tal de lluitar contra la funció alienadora
fuerza en la universidad y en todos los ambientes de la cultura burgesa en general i concreta-
antifranquistas. El prestigio de las demandas cament de la cultura espanyolista i impulsar
talanistas y de la lengua catalana estaba aumen- l’elaboració i la difusió de nous models de
tando, entre otras razones, debido a la identifica- cultura popular al servei del moviment d’al-
ción general entre la democracia y nacionalismo liberament nacional i de classe i de cara a
catalán, tras la identificación de la dictadura la producció d’una cultura nacional revolu-
franquista con la idea de España como nación cionària”18.
única. La identificación entre el nacionalismo es-
Entre 1975 y 1977, los militantes y simpatizantes
pañol con el franquismo y, en contrapartida, de
del Frente Cultural del PSAN estuvieron presen-
los nacionalismos periféricos con la lucha por la
tes en diversas manifestaciones culturales donde
democracia fue general en toda España17.
trataron de influir, sobre todo, en la defensa del
Durante los años 1976 y 1977 el PSAN convocó marco nacional de los Países Catalanes.
importantes mítines en ciudades como Manre-
La actividad cultural más importante de la época
sa, Vic, Arenys de Munt o Mataró. Los mítines,
fue el Congrés de Cultura Catalana (1975-1977)
diseñados como una presentación pública del
donde destacó la participación en la estructura
partido, tuvieron que superar las prohibiciones
organizativa de militantes del PSAN, entre los
y la censura, pero a medida que pasasen los me-
cuales Jaume Fuster19. Otro espacio donde se
ses, éstos se multiplicaron, al igual que los de los
notó la influencia de los miembros del frente cul-
otros partidos. Sin embargo, el hecho de que el
tural a nivel de confrontación intelectual fue la
PSAN fuera un partido independentista y revolu-
participación en diferentes Col·loquis i Jornades
cionario significó que en esta etapa predemocrá-
de debat dels Països Catalans20.
tica se le prohibieran las presentaciones públi-
cas, mientras que otros partidos más moderados 7. LA ESQUERRA D’ALLIBERAMENT NACIO-
ya eran tolerados. NAL, UN ESPACIO FRAGMENTADO
Si en algún aspecto el PSAN destacó cualitativa- Con la apertura democrática, el PSAN no encon-
mente con respecto a otros partidos políticos de tró la forma de erigirse como el líder del espacio
su volumen durante estos años, fue en la calidad del espacio de izquierda de liberación nacional
y relevancia de su frente cultural. Entre 1974
y 1976 el frente cultural del PSAN se refuerza 18
Comitè de Professionals i Treballadors de la Cultura
gracias a la presencia de jóvenes intelectuales, del PSAN. “Per un front cultural dels Països Catalans”,
especialmente escritores como Jaume Fuster, Jo- diciembre de 1974.
sep Maria López Llaví, Carles Jordi Guardiola, Xa- 19
Véase Fuster, Jaume, El Congrés de Cultura Catala-
vier Bru de Sala, Guillem Jordi Graells, Joan Ren- na. Què és i que ha estat. Barcelona, Laia, 1978.
dé, Maria Mercè Marçal, Maria Antònia Oliver,
20
Véase un resumen de las conferencias y el debate
entre independentistas y los que no lo son, a partir
17
Véase Sepúlveda, Isidro, “La eclosión nacionalista: de las diferentes ponencias presentadas en Renyer,
regionalismos, nacionalidades y autonomías” en Tu- Jaume, Catalunya. Qüestió d’Estat. Vint i cinc anys
sell y Soto, eds. Historia de la Transición (1975-1986), d’independentisme català (1968-1993),Tarragona, El
Madrid, Alianza Universidad, 1996. Mèdol, 1995, pp. 11-33.

que él mismo ha creado. Aunque siguiera siendo todos sus líderes conocidos, hipotecando así sus
el principal partido de este sector político, una posibilidades para el futuro21.
segunda escisión le impidió liderar un espacio
político que empezaba a asomar la cabeza en el La segunda escisión del PSAN conducirá a la
mundo político como una auténtica sopa de si- necesidad de reconstrucción material del parti-
glas. do y a un gran esfuerzo para recuperarse de las
numerosas bajas. También será el momento de
La segunda división del PSAN, producida en el promover un sindicato nacional y de clase pro-
invierno de 76-77, fue tan dura como la primera. pio: los Col·lectius de Treballadors (CCTT).
Dentro del partido se habían diferenciado dos
posiciones y poco a poco la correlación de fuer- Mientras el PSAN estaba teniendo su evolución,
zas sería favorable a los partidarios de una línea su primera escisión, el PSAN-P, luchaba con mu-
más radical, encabezada por el valenciano Josep chas dificultades para consolidarse. Su trayecto-
Guia. A principios de 1977, la división se consu- ria fue muy irregular ya que no logró estabilizar
mó y la mayoría de los dirigentes de los primeros la organización debido en gran parte a las múlti-
años del partido abandonaron la organización. ples caídas de los militantes entre 1974 y 1975.
En las sucesivas amnistías dictadas por el gobier-
Las diferencias fundamentales entre los dos sec- no central, varios militantes regresaron del exilio
tores se produjeron en tres campos; el sindical, y salieron de la cárcel, pero las nuevas detencio-
el táctico y el ideológico. Los entonces escindi- nes seguirían ocurriendo en febrero de 1977 y
dos creían en la necesidad de seguir haciendo agosto de 1978, acusados de pertenecer tanto
el trabajo sindical dentro de CCOO mientras los al PSAN-P como de colaboradores logísticos con
“oficiales” eran partidarios de la creación de la estructura de ETA en Cataluña. Esta presión
un sindicato nacional y de clase, que más tarde policial provocó el encarcelamiento o el exilio en
construirían. En cuanto al campo táctico, el sec- la Cataluña Norte (Francia) de la mayoría de sus
tor entonces dividido, viendo la naturaleza que líderes durante los primeros años de existencia
podría tomar la transición, entendió que existía de la organización22.
el peligro de autoexclusión si continuaba en una
línea de radicalización constante. Creían que las El PSAN comenzó, con la llegada de la demo-
condiciones del “Manifiesto para la Ruptura” de cracia, los pasos para salir de la clandestinidad
la Assemblea de Catalunya ya no se cumplían y y homologarse como un partido político. La in-
que era apropiado aprovechar la reforma políti- corporación al Consell de Forces Polítiques y la
ca y el trabajo en las instituciones. Para el sec- demanda de legalización eran en esta línea. A
tor más radical, no se tenía que aceptar nada pesar de una primera negativa de la legalización,
que proviniera de lo que consideraban la auto el PSAN pudo hacer una vida normal y salió de la
reforma del régimen. En el campo ideológico, clandestinidad sin demasiados sobresaltos. Sin
según los sectores del PSAN que continuaron, embargo, el PSAN-P no quería entrar en la nue-
los escindidos lo hacían porque no se sentían va dinámica democrática: continuaba realizando
cómodos con la definición de «partido comunis- clandestinamente agitación antisistema en la ca-
ta» aprobada en la última Declaración Política lle y participando en numerosas manifestaciones
de Principios. Las características leninistas de la ilegales que a menudo terminaban con enfrenta-
Declaración Política de Principios, que incluía el mientos con la policía.
concepto de «Dictadura del proletariado» y el
Después del verano de 1977, el independentis-
funcionamiento del partido sobre la base de una
mo quiso recuperar el tiempo perdido en mo-
estructura de fuerte disciplina interna, chocaron
mentos de plena euforia democrática, catala-
con el socialismo más heterodoxo que hasta el
nista y progresista. El 11 de septiembre por la
momento había prevalecido en el partido.
En un momento en que los partidos antifranquis- 21

Para más detalles sobre la segunda escisión véase
tas se preparaban para afrontar la nueva etapa Buch, Roger, El Partit Socialista d’Alliberament Nacio-
en las mejores condiciones posibles, el PSAN, de- nal dels Països Catalans (1974-1980), Barcelona, ICPS,
bido a un debate ideológico más que táctico, no 1995, pág. 23.
sólo dejó de prepararse para su futuro inmedia-
22
Véase IPC, La lluita per la independència, Barcelo-
na, IPC, 1980, p. 10 y también el capítulo “L’arpada
to, sino que perdió gran parte de su militancia y
de la bèstia” en Castellanos, Carles, Reviure els dies.
Records d’un temps silenciat, Lleida, Pagès editors,
2003. pp. 113-122.

tarde, se llevó a cabo la histórica manifestación nerales y se quedaron solos haciendo una crítica
unitaria “del millón” en la que los independen- frontal a la nueva Constitución. En el Parlamento
tistas también desfilaron a pesar de no suscribir español, el rechazo catalán más claro contra la
las consignas unitarias. Pero el mismo día por la Constitución vino del senador Lluís Maria Xi-
mañana, el PSAN junto a 13 organizaciones in- rinacs, que trabajó muy estrechamente con el
dependentistas convocaron un acto político en PSAN durante esos meses23.
el Fossar de les Moreres de Barcelona con ora-
dores independientes como Félix Cucurull y Jordi El PSAN organizó mítines con el lema “Votem No
Carbonell. El evento fue considerado un éxito de a la Constitució” en el que explicaba las razones
asistencia ya que sirvió para visualizar, por pri- del rechazo a la Constitución, donde coincidía
mera vez, la existencia de un espacio político lla- con otros partidos de izquierda radical. Pero los
mado “Esquerra d’Alliberament Nacional” que, resultados del referéndum constitucional del 6
más allá de un partido específico, fue capaz de de diciembre de 1978 hicieron de Cataluña uno
reunir a unas 30.000 personas. de los territorios del Estado más favorables a la
Constitución24. El PSAN había comenzado la tran-
El éxito del evento alentó otras llamadas uni- sición participando activamente, aunque como
tarias y declaraciones conjuntas de grupos in- fuerza radicalizada, en el consenso democrático,
dependentistas durante los próximos meses. catalanista y progresista de la lucha antifranquis-
A propuesta del PSAN-P, se convocó la primera ta. A partir de entonces, comenzarían a sepa-
Conferencia d’Organitzacions de l’Esquerra In- rarse del nuevo consenso de la política catalana
dependentista dels Països Catalans, que se cele- para convertirse pronto en un elemento de es-
bró en Barcelona los días 12 y 13 de noviembre. torbo, un sector extraparlamentario, sin posibili-
Después de la euforia de la Diada, la Conferencia dad de influencia real.
significó la frustración de comprobar que, si bien
el espacio político existía, no era fácil acordar la Las segundas elecciones legislativas, celebra-
creación de una sola organización, manteniendo das el 1 de marzo de 1979, una vez aprobada la
la tónica de lo que sería una constante del in- Constitución Española, volvieron a sorprender
dependentismo catalán contemporáneo. Dadas al independentismo sin una alternativa clara y
las dificultades de la “unidad independentista”, preparada a tiempo. Sin embargo, se presentó
el PSAN, que era con mucho el grupo más im- una nueva candidatura llamada Bloc d’Esquerra
portante, se comprometió a fortalecerse como d’Alliberament Nacional (BEAN) que nació como
organización dando entrada a nuevos militantes resultado de un pacto de última hora entre PSAN
por un lado y organizando su primer y único con- y otros pequeños grupos. La candidatura fue en-
greso que se celebró en Valencia y Barcelona du- cabezada por Xirinacs y los militantes de PSAN
rante dos fines de semana consecutivos en abril ocuparon un tercio de los candidatos en la lista
de 1978. de Barcelona y eran mayoría en las otras provin-
cias. La candidatura independentista obtuvo más
8. BUSCANDO LA FÓRMULA DE PARTICIPA- de cuarenta mil votos, aún lejos de poder obte-
CIÓN ELECTORAL ner ningún escaño25.
A finales de la década de 1970, el contexto no Unos meses más tarde, el 3 de abril de 1979,
favoreció el desarrollo del PSAN. El partido veía se convocaron las primeras elecciones munici-
que se estaban imponiendo las instituciones que 23
Véase Xirinacs, Lluís Maria, Paquet d’esmenes. Bar-
rechazaba y cómo también estaba perdiendo
celona,1979.
protagonismo en el espacio de la izquierda inde- 24
Resultados referéndum constitucional: Total España
pendentista. Ni estaba convencido de la vía elec- votos favorables 88,54%, con el 67,1% de participa-
toral, ni tampoco de iniciar un proceso de apo- ción; Cataluña, votos favorables 91,09%, con el 67,9%
yo activo a la lucha armada. El partido, cada vez de participación, en contraste con el País Vasco, votos
más desubicado, tendría que terminar eligiendo favorables 70,24%, con el 44,7% de participación. Dis-
cuál era su camino. ponible en: http://www.infoelectoral.mir.es/infoelec-
toral/ [Consultado 13 de diciembre de 2020].
Los diputados surgidos de las primeras eleccio- 25
La candidatura BEAN obtuvo 46.962 votos en Ca-
nes de 1977 iniciaron el proceso para redactar taluña (1,59%). En Barcelona 41.430 (1,81%), en
una Constitución para el Estado español. El inde- Girona, 1.939 (0,82%), en Lleida 1.476 (0,86%) y en
pendentismo y el PSAN continuaron defendien- Tarragona 2.117 (0,85%). Disponible en: http://www.
do la ruptura, la ilegitimidad de las Cortes Ge- infoelectoral.mir.es/infoelectoral/ [Consultada 24 de
enero de 2021].

pales democráticas. El PSAN obtuvo un total de que no controlaba. En el campo de la lucha arma-
32 concejales, 18 en Cataluña y 14 en el País Va- da, a raíz de los casos Bultó y Viola, que estaban
lenciano, pero sólo cinco de ellos en sus propias relacionados con la organización EPOCA, se rea-
candidaturas26. lizó la persecución judicial de muchos militantes
independentistas y también de personalidades
La siguiente cita en las urnas fue el referéndum veteranas como Manuel Viusà, Josep Maria Ba-
del Estatuto de Autonomía de Cataluña. Para el tista i Roca y Jaume Martínez Vendrell. Además,
PSAN, la exigencia de un Estatuto Nacional de en 1979 murieron los primeros activistas de lo
Autonomía para cada país catalán era una an- que será el grupo armado Terra Lliure. Todo ello
tigua reivindicación y un paso previo hacia los iniciará una dinámica acción-represión-reacción
Países Catalanes independientes y socialistas. El que generará una reanudación activista de los
PSAN había pedido el restablecimiento del Esta- antiguos provisionales, especialmente a raíz de
tuto de Cataluña de 1931 y había colaborado en la creación en marzo de 1979, de la organización
la redacción de los proyectos del Estatut de Cura antirrepresiva Comitès de Solidaridat amb els
para las Islas Baleares y del Estatut d’Elx para el Patriotes Catalans (CSPC) y la transformación del
País Valenciano, que no prosperaron en ninguno PSAN-P en Independentistes dels Països Catalans
de los dos casos. (IPC)29.
De la Asamblea de Parlamentarios formada por Por su parte, el PSAN, a pesar de mostrar soli-
diputados y senadores catalanes elegidos en daridad con los detenidos no se sentía cómodo
1977, se dará a conocer la “Comissió dels Vint” en este escenario de conflicto que no había pro-
que se encargará de redactar el proyecto de Es- movido. A medida que se aproximaba la tercera
tatuto, conocido como Estatut de Sau. El inde- escisión (1980), el sector que permanecería en el
pendentismo catalán mostró un claro rechazo al PSAN se acercaría gradualmente a esta dinámi-
texto por las graves deficiencias que veían y por ca, hasta que se insertaría por completo en ella.
ser hijo de una Constitución que habían rechaza-
do. El PSAN puso de relieve las críticas a la pre- El PSAN, tras el fracaso de las elecciones legisla-
servación de las provincias, atribuciones finan- tivas y municipales de 1979 perdió núcleos terri-
cieras insuficientes o el hecho de que el poder toriales, militancia y capacidad de incidencia y,
judicial y el orden público permanecieran bajo además, se crearon dos corrientes internas. Una
control estatal27. liderada por Josep Guia, firmemente comprome-
tido a seguir defendiendo las tesis de ruptura en
La lentitud con la que avanzó la promulgación del el nuevo marco democrático. La otra corriente,
Estatuto y los recortes que se estaban hacien- encabezada por Josep Huguet y Francesc Codina
do en Las Cortes Generales llevó a los partidos en Cataluña y Josep Lluís Blasco en el País Valen-
parlamentarios catalanes a hacer campaña por ciano, apuesta por el “posibilismo” e intentar
“el Estatuto sin recortes”. Los independentistas aprovechar las condiciones que ofrece el nuevo
respondieron haciendo campaña contra “el Es- sistema de libertades.
tatuto de La Moncloa” negándose a defender el
proyecto de Sau que ya no lo consideraban suyo. Para tratar de resolver la crisis que cada vez era
Defendieron la abstención con el lema “No voteu más tensa, se acordó preparar un nuevo Mani-
l’estatut sucursalista”28. fiesto Programa para aclarar qué estrategia que-
ría seguir el partido30. La tensión era tal que la
9. UN PARTIDO DESUBICADO ANTE LAS PRI- convocatoria de las primeras elecciones al Par-
MERAS ELECCIONES AL PARLAMENT lament de Cataluña acabó desencadenando la
escisión.
El PSAN, mientras constata que no se adaptaba a
la dinámica electoral, también observó cómo en En diciembre de 1979, se dio a conocer una nue-
el sí del independentismo existían movimientos va organización, Nacionalistes d’Esquerra (NE),
con predominio de sectores intelectuales, así
26
Buch, Roger, El Partit Socialista..., op. cit., pp. 126- como personas provenientes de nuevos movi-
128.
27
Rubiralta, Fermí, “Independentisme català versus 29
Véase la evolución de los CSPC en Fernàndez Calvet,
Estatut: de la reivindicació al rebuig (1968-1979) en Jaume, Terra Lliure 1979-1985, Barcelona, El Llamp,
Revista de Catalunya, 159 (2001), pp. 9-24. 1986, pp. 117-174.
28
PSAN, “Manifest del PSAN davant del proper re- 30
Buch, Roger, El Partit Socialista..., op. cit., pp. 137-
ferèndum sobre l’Estatut”, septiembre de 1979. 139.

mientos sociales, como el ecologismo, y antiguos no era principalmente electoral, en el momen-

miembros de PSAN que habían dejado el parti- to en que se queda fuera de las instituciones, el
do en 1977. Jordi Carbonell fue la cabeza visible partido se quedó sin posibilidad de incidencia.
de este grupo desde los inicios. NE logró reunir
a sectores intelectuales que hacían un análisis El partido estaba comprometido con una estra-
de que la reforma democrática no había cum- tegia de liderar el movimiento de masas. Los mi-
plido con las expectativas y que era necesario litantes revolucionarios, además de estar activos
construir una alternativa entre el nacionalismo en el partido, tenían que estar presentes en los
conservador de Jordi Pujol y la izquierda “su- movimientos sociales, los sindicatos, las comisio-
cursalista” del PSC. Un hito que se consideraba nes vecinales. El partido tenía que guiar a las ma-
esencial y al mismo tiempo factible era que el in- sas para crear el gran movimiento de liberación
dependentismo estuviera presente en el nuevo nacional. Pero las masas no responden y llega la
Parlamento de Cataluña31. democracia liberal. Entonces el partido, descon-
certado, tiene que tomar una decisión.
El PSAN inicialmente apoyó a Nacionalistes d’Es-
querra, pero el sector “Guia” se negó a participar Durante estos once primeros años de existencia,
si no se seguían ciertas condiciones. La tensión el PSAN será un partido que tendrá cierta rele-
dio lugar a la tercera escisión que se consumó vancia en Cataluña pero que nunca destacará.
oficialmente cuando dos Asambleas de Repre- Un partido conocido en los medios políticos y
sentantes del partido se celebraron en paralelo. de agitación cívica, pero que no conectará con
La ruptura afectó, como en las dos ocasiones an- la mayoría de la sociedad. Su incidencia fue sec-
teriores, tanto a militantes como a dirigentes de torialmente incisiva en áreas como la cultural o
base, pero, por primera vez, tanto en Cataluña la docencia y también territorialmente en ciertos
como en el País Valenciano. momentos en las comarcas del Bages y Osona
como paradigma, pero el impacto global como
La división fue tan dura y tensa a nivel personal partido fue escaso. Utilizando el concepto del
como inevitable, por lo que significaba diferencia politólogo Angelo Panebianco, el PSAN fue un
estratégica. Se trata de dos modelos de acción partido con un débil nivel de institucionalización
incompatibles en el mismo partido: el de la cons- tanto durante los últimos años de franquismo
trucción de una “Herri Batasuna catalana”, por como en los de la transición32. El partido se man-
un lado, para hacer un frente antisistema y, por tuvo, aunque con muchas dificultades, por enci-
otro lado, tratar de sacar el independentismo ma de su umbral de supervivencia ya que vivió
del extraparlamentarismo haciendo una política muy a menudo en situación de “reconstrucción”,
más pragmática y aprovechando las oportunida- rehaciéndose de escisiones y viviendo con una
des que brindasen las instituciones. sensación de fragilidad orgánica. Sin embargo,
el PSAN era mucho más que un “partido relám-
CONCLUSIONES pago”, que en palabras de Panebianco “aparece
fugazmente en el firmamento político”, como
El PSAN en sus primeros años no logró ninguno
lo demuestra su longevidad y su incidencia re-
de sus objetivos programáticos (socialismo, in-
lativa en comparación con otros partidos de su
dependencia, Países Catalanes) ni un nivel sufi-
tamaño. La mayoría de los partidos de izquierda
cientemente amplio de institucionalización que
radical de obediencia española, ambos activos
le permitiera sobrevivir en el nuevo entorno de-
durante los últimos años de franquismo y transi-
mocrático pluralista que se había establecido. El
ción no tenían, ni de lejos, una longevidad como
PSAN no pudo influir en la configuración del nue-
la del PSAN.
vo sistema político resultante de la transición. El
partido pide el “No” o la “abstención” en todos El PSAN vivió en sus primeros once años de vida
los referéndums y, sin embargo, siempre la op- un gran reemplazo de militantes y, sobre todo,
ción ganadora es el Sí. El PSAN pasa de ser el par- también un importante recambio de líderes, que
tido antifranquista más radical (catalanistas/vano le permitió consolidar una dirección política.
lencianistas de izquierda) que se autorreconocen El partido sufrió cada tres años una división que
como equivalentes, a quedar fuera del nuevo sis- rompió la organización en prácticamente dos
tema político. Aunque la estrategia del partido partes iguales pero la organización continuaba
31
Sobre el nacimiento y la evolución de NE véase Po-
blet, Francesc, Nacionalistes d’Esquerra 1979-1984, 32
Panebianco, Angelo, Modelos de partido, Madrid,
Barcelona, Fundació Josep Irla, 2004. Alianza, 1990.

viva ya que estos eran momentos de máxima cidió con un momento de euforia política. Pero
politización y existía una alta demanda de par- todos estos partidos, una vez que hubo eleccio-
tidos radicales por parte de jóvenes politizados. nes estuvieron condenados al ostracismo. La vía
Pero las divisiones le tocaron, como se ha visto, revolucionaria de las masas quedó eliminada por
en tres momentos clave: el momento de la reala vía de los hechos. Frente a ello, sólo queda-
grupación política antes de la muerte de Fran- ron dos opciones: participar en las elecciones o
co, antes de las primeras elecciones legislativas promover la lucha armada revolucionaria. De to-
españolas y también en los meses previos a las dos los partidos de la izquierda radical de España
primeras elecciones al Parlament. sólo los nacionalistas pudieron subsistir ya fuera
sobre la base de impulsar la lucha armada (ETA)
El PSAN, por tanto, desperdiciará estos momen- o moderando su compromiso socialista y partici-
tos decisivos para colocarse como un partido re- pando en la arena electoral como lo hicieron el
levante en el espacio de la izquierda catalana. A Partit Socialista de Mallorca (PSM) o la Unión do
la debilidad del partido generada por los relevos Povo Galego (UPG). Todos los demás terminaron
y la inestabilidad de la dirección, hay que añadir desapareciendo o, en la práctica, se convirtieron
las consecuencias negativas de ser un partido ge- en movimientos sociales34.
neracional, formado exclusivamente por jóvenes
y sólo excepcionalmente capaz de conectar con En resumen, el PSAN fue un partido que no que-
personas pertenecientes a edades avanzadas. A ría ser corrompido por su entorno pero que no
pesar del paso del tiempo, la edad media sigue tenía la capacidad o la fuerza para transformarlo.
siendo inferior a 30 debido al rejuvenecimiento Frente a esto, se encontró fuera de lugar, como
del partido. un partido revolucionario anticuado, utilizan-
do conceptos como la dictadura de proletaria-
A menudo es difícil saber si un partido es peque- do o el centralismo democrático y virando a la
ño porque es ideológicamente radical o radical izquierda al mismo tiempo que otros partidos
porque puede permitírselo al ser tan pequeño. empezaban una carrera hacia la moderación. En
Es el famoso “círculo vicioso del sectarismo” en la reivindicación nacional el PSAN aparecía, no
el que los partidos extraparlamentarios de cual- como un partido anticuado sino como un partido
quier espacio político a menudo caen. Según Pa- prematuro y, en cierto sentido “aguafiestas”. Su
nebianco, la combinación de un entorno hostil principal oferta era la independencia cuando en
y la incapacidad de superar el propio umbral de ese momento, a diferencia de lo que sucederá
supervivencia, y tener un territorio de caza ya décadas después, lo que la mayoría de la pobla-
ocupado por las otras partes genera entonces ción quería era la democracia y la llegada de la
el círculo vicioso del sectarismo. Se trata de pe- autonomía todavía goza de gran prestigio.
queñas organizaciones que deben compensar la
ausencia de perspectivas políticas creíbles recu- Si bien el PSAN en ese momento no tuvo éxito
rriendo a incentivos exclusivamente simbólicos. como organización en sus objetivos, hizo una
Debido a que no pueden ofrecer incentivos ma- contribución a la lucha antifranquista, en ideas,
teriales, cargos o influencia, sólo pueden ofrecer líderes y militantes, tanto a la izquierda como al
pureza ideológica a sus afiliados33. nacionalismo. Fue una contribución cualitativa
a la lucha por la democracia y el autogobierno,
En definitiva, la trayectoria del PSAN muestra realizada sobre todo en el marco de las instan-
muchos paralelismos con todos los partidos de cias unitarias de Cataluña y del País Valenciano,
la izquierda radical, que en los mismos años ayudando a muscular el movimiento antifran-
existieron en el conjunto de España y tuvieron quista en su conjunto. Los partidos de izquierda
también un impacto especial en los Países Cata- y sus militantes no derribaron la dictadura, pero
lanes. Fueron partidos nacidos de la ola izquier- su lucha impidió que el franquismo se extendie-
dista de finales de la década de 1960, situada a ra más allá de la cuenta. Al mismo tiempo, la
la izquierda de los partidos comunistas oficiales. militancia de estos partidos de izquierda prota-
Se movían bien en la agitación antifranquista
debido a su estructura y mensajes. También se
movían bien en la semiclandestinidad que coin-
34
Véase Laiz, Consuelo, La lucha final. Los partidos de
izquierda radical durante la transición española, Ma-
drid, Los libros de la Catarata, 1995. También Roca,
33
Véase Mair, Peter, “Forma organizativa y contenido José M. (ed.), El proyecto radical; auge y declive de
ideológico. Il caso del partito Marxista rivoluzionario” la izquierda revolucionaria en España, Madrid, Los li-
en Rivista italiana di scienza politica, 3 (1979). bros de la Catarata, 1994.

gonizó una revuelta de costumbres, entendida trema izquierda. Así, un gran número de líderes
sobre todo como una revuelta generacional que políticos parlamentarios catalanes tuvieron su
cambió muchos aspectos de la sociedad. El PSAN bautismo militante en organizaciones revolucio-
colaboró en este cambio, poniendo su grano de narias durante los últimos años de franquismo y
arena, interviniendo en un espacio más amplio transición. En este sentido, el PSAN ocupó, jun-
que el propio del independentismo y que tenía to con el Front Obrer de Catalunya (FOC) de los
como espacios de lucha las comisiones vecinales, años 60, y la coetánea Bandera Roja, uno de los
la renovación pedagógica, la lucha estudiantil y espacios de politización y de escuela política más
la movilización cultural. Allí, el PSAN proporcio- importantes de los líderes de izquierda de Cata-
nó sensibilidad nacionalista, haciendo un puente luña, que no procedían del PSUC. Por lo tanto,
entre los movimientos sociales y el movimiento el PSAN de la década de 1970 proporcionó ca-
catalanista. En el mismo sentido, a pesar del fra- pacitación política a una generación que termi-
caso en la lucha por la independencia, el PSAN nará teniendo un impacto político 25 años más
colaboró con el movimiento nacionalista catalán tarde cuando algunos de sus antiguos militantes
en su conjunto; la lucha por la dignificación y ofi- se convertirán en líderes políticos de las fuerzas
cialización de la lengua, la enseñanza del cata- parlamentarias.
lán en las escuelas, la lucha por los Estatutos de
autonomía, por la memoria de la histórica de la
Generalitat Republicana; el PSAN participó en la
amplia movilización nacionalista de la transición,
proporcionando el vínculo con las luchas socia-
les.
La otra gran contribución fue que el PSAN aca-

bó ofreciendo toda una generación de líderes a
la política y la sociedad catalana y valenciana. El
partido creado durante el franquismo y que tuvo
su actividad más importante durante sus once
primeros años dejará una importante huella en
la clase política catalana. No sólo la creación de
un espacio político que se mantendrá con altiba-
jos fuera del sistema político institucional, sino
también como una escuela de líderes que harán
intervención política en otros espacios políti-
cos más moderados. Una parte significativa de
los militantes de PSAN acudirán a ERC años más
tarde, donde obtuvieron importantes cargos ins-
titucionales35, pero la herencia militante del par-
tido se distribuye a través de un amplio espectro
de los partidos políticos catalanes, valencianos y
baleares36.
La transferencia de militantes del independentis-

mo radical a partidos más moderados fue un fe-
nómeno que debe registrarse en el contexto más
amplio del auge de los diferentes partidos de ex-
35
Véase Buch, Roger, “De l’esquerra d’alliberament
nacional a ERC: els antecedents extraparlamentaris
dels diputats d’ERC dels anys noranta” en VV.AA., Es-
querra Republicana de Catalunya. 70 anys d’història
(1931-2001), Barcelona, Columna, 2001.
36
Véase Buch, Roger, L’herència del PSAN. Les apor-
tacions humanes i ideològiques del Partit Socialista
d’Alliberament Nacional dels Països Catalans (1968-
1980) al sistema polític actual, Barcelona, Editorial
Base, 2012.

LOS PAÍSES CATALANES: LA PROYECCIÓN DE LAS TESIS DE

JOAN FUSTER EN EL IDEARIO POLÍTICO VALENCIANO Y
CATALÁN DESDE LA TRANSICIÓN A LA ACTUALIDAD
THE CATALAN COUNTRIES: THE PROJECTION OF JOAN

FUSTER’S THESES IN THE VALENCIAN AND CATALAN
POLITICAL IDEOLOGY FROM THE TRANSITION TO THE
PRESENT
Carlos Cárdenas Blesa*

*
Recibido: 23 abril 2020 / Revisado: 7 junio 2020 / Aceptado: 10 septiembre 2020 / Publicado: 15 octubre 2020
Resumen: La teoría política de Joan Fuster, de- of the Catalan Countries has mainly influenced
sarrollada a partir de su obra Nosaltres, els va- the Catalan independence left-wing.
lencians en los años sesenta, estaría llamada a
realizar una profunda renovación en un valencia- Keywords: Valencianism, catalanism, Catalan
nismo que, desde la Transición, se debatió entre Countries, Transition, present
el marco de referencia identitario en que debía
INTRODUCCIÓN
situarse el País Valenciano: los Países Catalanes
propuestos por Fuster, o tan solo el territorio va- “Hi ha una pregunta que tots ens hem fet
lenciano. Actualmente, el valencianismo ha ido en alguna ocasió, moguts per un motiu o
moviéndose hacia políticas más pragmáticas y altre: què són -què som- els valencians?”1.
D
ganando peso político, dejando en un lugar se-
cundario el debate identitario, mientras que la e esta forma, Joan Fuster (1922-1992),
teoría de los Países Catalanes ha incidido, prin- escritor suecano, y uno de los más desta-
cipalmente, en la izquierda independentista ca- cados en lengua valenciana en el siglo XX,
talana. abría un debate identitario y nacionalista que
estaba llamado a trascender de tal forma que
Palabras clave: Valencianismo, catalanismo, Paí- configuró no solo el discurso político e identita-
ses Catalanes, Transición, actualidad rio valenciano a partir de los años sesenta, sino
también el de importantes sectores del catala-
Abstract: Joan Fuster’s political theory, based on
nismo. Fuster planteó su ensayo Nosaltres, els
his work Nosaltres, els valencians in the 1960s,
valencians (1962) en torno a la cuestión de cuál
would be called upon to carry out a profound
era la identidad de los valencianos, y de dónde
renovation in a Valencianism that, since the Spa-
provenía su extrañeza como pueblo. Aludiendo a
nish transition to democracy, was debated be-
cuestiones históricas y, principalmente, a la len-
tween the identity reference framework in which
gua catalana como seña de identidad, así como
the Valencian Country should be situated: the
analizando la “dualidad” existente en el País Va-
Catalan Countries proposed by Fuster, or just the
lenciano entre las zonas “castellanas” y las “cata-
Valencian territory. Nowadays, Valencianism has
lanas”, Fuster llegó a la siguiente conclusión:
been moving towards more pragmatic policies
and gaining political weight, leaving the identity
debate in a secondary position, while the theory 1
Fuster, Joan, Nosaltres: els valencians, Barcelona,
Edicions 62, 1996, p. 6.

Los Países Catalanes Carlos Cárdenas Blesa
“Ens agradi o no a uns i a altres, el fet és que se señala que el nacionalismo va antes que la
hi ha dues menes de ‘valencians’ imposible nación, es decir, esta es producto del naciona-
de fondre’s en una de sola. D’altra banda, lismo5. La nación, entonces, sería construida por
això entrebanca els valencians de la zona grupos político-culturales que fueran capaces de
catalana en la dirección que hauria d’ésser i crear un imaginario colectivo y hacerlo llegar a
és llur únic futur normal: els Països Catalans, la población. Se construye cuando la identidad,
en tant que comunitat suprarregional on ha representada a través de elementos tales como
de realitzar-se llur plenitud de ‘poble’”2. el idioma, la cultura o la historia, convergen en
un cuerpo teórico que se desarrolla y cuyos sím-
Es decir, los problemas de identidad de los va- bolos acaban siendo identificatorios.
lencianos, para Fuster, no podían resolverse sino
aceptando su integración en el marco de los te- Quizás sea interesante señalar las aportaciones
rritorios catalanoparlantes, que para él constitu- de investigadoras como Liah Greenfeld a la hora
yen una identidad, a la que nombra como Países de determinar los diversos tipos de nacionalismo
Catalanes, término que, pese a no ser inventado existentes. La autora distingue entre un primer
por el propio Fuster (Mariona Lladonosa Latorre nacionalismo inglés, definido como “individualis-
señala la reminiscencia en el autor de un panca- tic and civic” (lo que vendría a ser un nacionalis-
talanismo que ya comenzaba a desarrollarse en mo propio de la democracia liberal) y un nacio-
tiempos de la II República3), carecía de la teoría nalismo colectivista, en el que los intereses de la
que él desarrolla para el mismo, y que abrirá un nación como un todo se superponen a los de los
nuevo tipo de nacionalismo valenciano que in- individuos particulares. Dentro de este, divide el
fluirá en la cultura, literatura y política posterior. nacionalismo entre uno colectivista de carácter
cívico, caso de Francia, y uno colectivista con el
Nuestro objetivo es trazar un recorrido general criterio de nacionalidad étnica, propio de los paí-
acerca de la cuestión nacional de los “Països Ca- ses de Europa del Este, pero que geográficamen-
talans” dentro del valencianismo y del catalanis- te también puede estar presente en Occidente6.
mo, atendiendo especialmente a los profundos
debates que se desarrollaron a lo largo de estos Eric Hobsbawm, quien también trata los proble-
cincuenta años sobre el marco nacional valencia- mas a la hora de definir el término “nación”, nos
no y a la presencia (o no) del término en la retóri- habla sobre definiciones de carácter objetivo (en
ca general de los principales partidos herederos este sentido, destaca la de Stalin:
de aquellos que, en mayor o menor medida, to-
maron como referencia las ideas de Fuster en el “comunidad humana estable, históricamen-
contexto de la Transición. te formada y surgida sobre la base de la co-
munidad del idioma, de territorio, de vida
Para abordar este desarrollo sobre la cuestión económica y de psicología, manifestada
nacional de los Países Catalanes, es necesario esta en la comunidad de cultura”7)
primero tomar en cuenta algunas consideracio-
nes sobre el concepto nacional. En primer lugar, y de carácter subjetivo, destacando al austro-
las tesis historiográficas que lo alejan de una marxismo y su concepción de la nacionalidad
concepción organicista (que concebía la nación
como un ente vivo, que en la etapa contempo- samiento y de los movimientos políticos y sociales de
ránea simplemente es “redescubierto” por los la Universidad Complutense de Madrid, 31 de enero
de 2018, p. 2.
nacionalistas), para pasar a concebirlo como un 5
Núñez Seixas, Xosé M., “Historiografía y nacionalis-
producto histórico, es decir, un hecho con prin- mo en la España del siglo XXI, Anuario del Centro de
cipio y final, propio de la etapa contemporánea, Estudios Históricos “Prof. Carlos S. A. Segreti”, 7/17
tal como señala el historiador José Álvarez Jun- (2007), p. 330.
co: “Las naciones no son fenómenos naturales 6
Greenfeld, Liah, “Nationalism in Western and
ni eternos”4. Bajo este enfoque constructivista, Eastern Europe Compared”, en Hanson, Stephen E.,
Spohn, Willfried (Eds.), Can Europe Work? Germany
2
Ibid., p. 52. & the Reconstruction of Postcommunist Societies, Es-
3
Lladonosa Latorre, Mariona, “Catalanitat(s) als Paï- tados Unidos, University of Washington Press, 1995,
sos Catalans”, Mirmanda, 8 (2013), pp. 10. pp. 19-20.
4
Diario de Sesiones del Congreso de los Diputados, 7
Stalin, Iosef, El marxismo y la cuestión nacional.
424, Comparecencias en relación con la evaluación y Marxist Internet Archive. Disponible en: https://
modernización del Estado autonómico. Del señor Ál- www.marxists.org/espanol/stalin/1910s/vie1913.
varez Junco, catedrático emérito de historia del pen- htm [Consultado el 3 de junio de 2020].

Carlos Cárdenas Blesa Los Países Catalanes
como condición más libremente elegida, si se primer esglaó d’una altra projectada a tots
opta por pedirla. El autor nos advierte, sin em- els habitants dels Països Catalans”11.
bargo, sobre el problema de considerar que lo
único que se necesita para crear una nación sea 1. LOS ANTECEDENTES A FUSTER: LA FOLKLO-
la “voluntad de ser”8. RIZACIÓN DE LA IDENTIDAD VALENCIANA
En cualquier caso, el debate producido en torno El principal problema al que parece enfrentar-
a la cuestión nacional y el nacionalismo es com- se la teoría de los Países Catalanes es su inexis-
plejo. En nuestro caso y, atendiendo a los oríge- tencia como realidad política. Es un hecho que
nes del valencianismo como movimiento político señala Agustí Colomines refiriéndose a la histo-
plenamente formado a partir de las ideas nacio- ria común de los tres territorios: “La catalani-
nalistas de Fuster (dada su poca presencia ante- tat invertebrada políticament […] ha estat així
rior, a diferencia de otros nacionalismos subes- sempre”12. Esto implica que, al no haber forma-
tatales de más peso desde el siglo XIX, como el do nunca los territorios catalanoparlantes una
catalán o el vasco), quizás nos sea útil una de las unidad política, sino siendo territorios diferen-
definiciones que nos da Anthony Smith al res- ciados, la catalanidad se muestra en las raíces
pecto: culturales comunes de los territorios, muy espe-
cialmente en la cuestión lingüística, punto clave
“el nacionalismo es principalmente una en la obra de Fuster.
doctrina cultural o, para ser más precisos,
una ideología política que gira en torno a Este nacionalismo fusteriano, que concede la im-
una doctrina cultural”9. portancia principal de su tesis a la difusión de la
lengua (y con ella, de esa “dualidad” entre zonas
El nacionalismo que proclama Fuster, de carácter del País Valenciano), también es crítico con el es-
pancatalanista, incluye dentro de un concepto caso desarrollo del que partía el valencianismo,
nacional aquellas áreas catalanoparlantes de las hasta el punto de considerar que no había sido
actuales Comunidades Autónomas de Cataluña, un verdadero movimiento organizado. El propio
Comunidad Valenciana e Islas Baleares, inclu- Fuster ironiza en su ensayo acerca de las actitu-
yendo también otros reductos de habla catalana des de una inocencia rebelde llevadas a cabo en
tales como la Franja de Aragón, respetando, con el País Valenciano contra el centralismo estatal:
ese plural del término “Països”, los matices re-
gionales. En definitiva, para Fuster: “Des de Sal- “en algún museu públic del País Valencià, hi
ses a Guardamar, de Maó a Fraga, som un poble: ha severs retrats a l’oli de Felip V penjats cap
un sol poble”10. per avall: la ira vernacla es projecta romàn-
ticament sobre el primer Borbó espanyol, i
Dada la complejidad que supone exponer aquí la inversión dels cuadres és una venjança
el extenso debate producido en torno a las ideas simbólica ben significativa. La innocència i
políticas de Fuster y el propio fusterianismo, nos la falta de sentit històric que aquestes ac-
quedaremos con la definición que Antoni Rico da tituds suposen, resulten més còmiques que
sobre ello: simpàtiques…”13,
“[El fusterianismo] és una proposta hete- en referencia a los cuadros de Felipe V colgados
rogènia, política, cívica i cultural per a en- boca abajo en algunas ciudades como Xàtiva,
trendre el País Valencià que gira al voltant como “protesta” por la eliminación de los fueros
de la idea de nació que […] Joan Fuster va del Reino tras los Decretos de Nueva Planta, a
construir, imaginar i dissenyar”. Sus obras principios del XVIII.
fueron fundamentales para “la construcció
d’una identidad valenciana comuna […] el 11
Rico i Garcia, Antoni, La influencia del pensament
de Joan Fuster en les cultures polítiques dels Països
Catalans (1960-1992) (Tesis Doctoral), Girona, Uni-
versitat de Girona, 2017, p. 38.
12
Colomines i Companys, Agustí, “Una identitat lí-
8
Hobsbawm, Eric, Naciones y nacionalismos desde quida. Els nonats Països Catalans”, en Manent Tomàs,
1780, Barcelona, Crítica, 1991. Jordi (Coord.), La nova articulació catalana-valencia-
9
Smith, Anthony D., La identidad nacional, Madrid, no-balear, Barcelona, Edicions de la Revista de Cata-
Trama Editorial, 1997, p. 68. lunya, 2017, p. 39.
10
Fuster, Joan, Nosaltres…, op. cit., p. 52. 13
Fuster, Joan, Nosaltres…, op. cit., p. 8.

El desarrollo del valencianismo anterior a Fuster, Durante la dictadura franquista observamos un

desde el siglo XIX, está íntimamente ligado al distinto tratamiento de la cultura valenciana
contexto y las características económicas y cultu- respecto a la catalana. Como señala Ismael Saz,
rales del País Valenciano en el que se desarrolla. pese a la existencia de depuraciones en órganos
La cuestión del campo valenciano fue tratada por administrativos y educativos, “la represión de la
Fuster, como señala María Josep Picó, en tanto cultura valenciana se proyectó más sobre lo que
que el escritor consideraba que el territorio va- tenía de democrática, republicana o izquierdista
lenciano era eminentemente agrario y minifun- que sobre sus contenidos específicamente valen-
dista, con la concepción de una burguesía que no cianos”18. Esto generó que la lengua valenciana
había llevado a cabo un proceso de industrializa- no fuese perseguida de forma tan rotunda y los
ción al no invertir los beneficios de la agricultura jocs florals, prohibidos en Cataluña, no lo estu-
en la industria, hecho que caracterizaba el com- vieran en Valencia. Por otro lado, el franquismo
portamiento del pueblo valenciano14. no dudó en hacer acopio de elementos identi-
tarios que formaban parte del imaginario social
Así pues, en el siglo XIX, el valencianismo y el para que estos encajasen dentro de la identidad
catalanismo irían por caminos bastante diferen- nacional, a modo de variante regional. Uno de
ciados. La Renaixença, movimiento cultural de los ejemplos más destacados fue la consolida-
puesta en valor de la lengua catalana, no alcanzó ción institucional de las fallas, a la que se refiere
el mismo nivel en el País Valenciano que en Ca- Jesús Peris Llorca:
taluña, con un carácter mayormente literario en
territorio valenciano, con figuras como Teodor “…los elementos institucionales y protoco-
Llorente, vinculado a la restauración, y asocia- larios, incluso religiosos, habían ido toman-
ciones como Lo Rat Penat. Alfons Cucó muestra do una importancia central […] Las fallas se
un País Valenciano basado en la agricultura de convirtieron en un ritual civil e identitario
exportación, con una burguesía terrateniente, y absolutamente moldeado por el imaginario
en el que el movimiento literario no atiende a la franquista de la identidad regional”19.
función social de la lengua15. Asistimos, además,
a una regionalización de la catalanidad en el si- Así pues, a la hora de observar la diferencia con
glo XIX, en tanto que, pese al desarrollo de un la que se trató a la cultura catalana de la valen-
catalanismo político, principalmente bajo figu- ciana, la explicación parece radicar en la folklori-
ras como Prat de la Riba, estas demostraron una zación que fue posible realizar de la cultura va-
percepción regionalista, y no pancatalanista16. lenciana, que probablemente deba su causa a la
fuerza política que alcanzó el catalanismo, de la
En la primera mitad del siglo XX, pese a que se que el valencianismo carecía, sin una teoría de-
produce cierta evolución a través del nuevo pre- trás que lo desarrollase.
sidente de Lo Rat Penat, Barberà i Martí, que
introduce cierto componente social en la lengua 2. EL VALENCIANISMO EN LA TRANSICIÓN:
valenciana, y pese a que Villalonga, auspiciado LA “BATALLA DE VALENCIA”
por la Lliga catalana, intentará desarrollar un
La difusión de la teoría nacionalista de Fuster en
valencianismo conservador, se verá opacado a
los sesenta se produjo, en un principio, por los
partir de los años veinte por un valencianismo
ambientes universitarios, para cristalizar des-
de izquierdas representado en la Agrupació Va-
pués en movimientos políticos tales como el
lencianista Republicana. Durante la II República,
PSPV (Partit Socialista del País Valencià), UDPV
al igual que harán otros territorios del Estado, se
(Unió Democràtica del País Valencià) o partidos
intentará llevar a cabo la búsqueda de un Estatu-
independentistas como el PSAN (Partit Socialista
to para el País Valenciano17.
d’Alliberament Nacional dels Països Catalans).
14
Picó, Maria Josep, “Camp i Ciutat al País Valencià,
fa mig segle i ara. L’Espill, 40 (2012), p. 99. 18
Saz, Ismael, “La dictadura franquista”, en Hermosi-
15
Cucó, Alfons, “Actituds politiques i lingüístiques al lla Pla, Jorge, La ciudad de Valencia: historia, geogra-
País Valencià contemporani. Treballs de sociolingüísti- fía y arte de la ciudad de Valencia, Valencia, Publica-
ca catalana, 1 (1977), pp. 67-80. cions de la Universitat de València, 2009, p. 490.
16
Colomines i Companys, Agustí, “Una identitat lí- 19
Peris Llorca, Jesús, “Populismo y literatura popu-
quida…”, op. cit., p. 41. lar. La función de las fallas de Valencia en la extensión
17
Cucó, Alfons, “Actituds politiques…”, op. cit., pp. del blaverismo”, Pasajes: Revista de pensamiento con-
72-79. temporáneo, 46 (2014), p. 52.

La teoría política del alliberament nacional in- guno23. Esto generará que el PSPV inicie un pro-
fluiría a posteriores organizaciones aun existen- ceso de adhesión al PSOE, que pasará a deno-
tes, tales como Endavant, fundada en el 2000 minarse PSOE.PV, y después y definitivamente,
y definida como “Organització Socialista d’Al- PSPV-PSOE24. En el ámbito del centro derecha, el
liberament Nacional”. Una idea general de los PDLPV (Partit Demòcrata i Liberal del País Valen-
principios del alliberament nacional se puede cià) de Francesc de Paula Burguera, de tendencia
extraer de un texto de Rafael Castellanos en el valencianista, se encontraba dentro de la UCD,
que atribuye al nacionalismo un doble significa- y no sería hasta que comenzase la pugna por la
do: por un lado, el de una nación dominante o identidad valenciana durante la Transición que
imperialista, y por otro, el de aquellas naciones surgirían desavenencias dentro de la coalición
que luchan por liberarse de la opresión. Es por electoral.
ello que, para concretar la lucha que desde este
sector se pretendía articular, apostaba por utili- En efecto, uno de los elementos diferenciadores
zar el término de “movimiento de liberación na- y característicos de la Transición valenciana sería
cional”20. la guerra de símbolos e identidad que se desarro-
lló entre los partidos políticos e intelectuales y
El nuevo valencianismo sería combatido por el que, eventualmente, se trasladaría a la sociedad
franquismo, según Alfons Cucó, de dos formas: valenciana, en lo que la historiografía valenciana
de un lado, a través de la censura, y de otro, a viene a denominar “Batalla de Valencia”. Surgió,
través de la exaltación de ese regionalismo va- frente al valencianismo político, un movimiento
lenciano no catalanista21. Ello no impide que fi- cuyos críticos denominaron “blaverismo”25, que
nalmente se produzca la definitiva penetración coge su nombre de uno de los símbolos que de-
del nacionalismo fusteriano dentro de los movi- fendía: la Senyera valenciana con una franja azul,
mientos antifranquistas y de izquierdas22, aun- y que vendría a responder a la variante de un
que con la proliferación de múltiples puntos de regionalismo valenciano contrario a las tesis de
vista. Joan Fuster e ideas catalanistas.
A pesar del amplio alcance que tuvieron las ideas Desde entonces, se produjo un viraje de cier-
de Fuster en los círculos intelectuales y univer- tos sectores sociales y grupos políticos, como la
sitarios y, más allá, en los partidos políticos, lo UCD. En este contexto, se acuñan conocidas ex-
cierto es que la época de la Transición marca el presiones como “mos volen furtar la paella”, del
gran problema que tuvo el valencianismo a la político Manuel Broseta26 o “no mos fareu cata-
hora de presentarse a las elecciones: su escasa lans”. Se han de destacar los cambios que se pro-
presencia. En efecto, las elecciones generales dujeron en la UCD a partir, sobre todo, de 1978-
de 1977 fueron ganadas por el PSOE en el país 79. Este momento marca el desplazamiento del
valenciano con 13 diputados, mientras que al PDLPV por el PPRV (Partido Popular de la Región
valencianismo, por sí solo, le fue muy difícil lo- Valenciana) de Emilio Attard. La estrategia sería
grar representación electoral. El PSPV resultó di- radicalizada después por quienes tomaron su
vidido, presentándose una parte con el Partido relevo, como Fernando Abril Martorell. Surgió,
Socialista Popular (PSP) y obteniendo un escaño, a su vez, el partido Unión Regional Valenciana
mientras que la otra, PSPV-Bloc, no obtuvo nin- en torno a la figura de Miguel Ramón Izquierdo,
23
Rodríguez-Flores Parra, Vega, “Por un País Valen-
20
Castellanos i Llorenç, Rafael, “Sobre nacionalisme ciano libre, autónomo y socialista. El PSOE y la identi-
i classes socials als Països Catalans”, Mayurqa: revista dad valenciana (1974-1978)”, Pasado y Memoria. Re-
del Departament de Ciències Històriques i Teoria de vista de Historia Contemporánea, 17 (2018), pp. 108.
les Arts, 18 (1978-1979), pp. 68-69. 24
Sanz Díaz, Benito y Felip i Sardà, Josep María, La
21
Cucó, Alfons, “Cuestión nacional y poder político construcción política de la Comunidad Valenciana
en el País Valenciano durante la transición democrá- (1976-1993), Valencia, Fundación Alfons el Magnà-
tica”, en Tusell Gómez, Javier y Soto Carmona, Álvaro nim, 2006, p. 252.
(Dirs.), Historia de la transición y consolidación demo- 25
Flor i Moreno, Vicent, L’anticatalanisme al País Va-
crática en España (1975-1986), Vol. 1, Madrid, UNED, lencià: identitat i reproducción social del discurs del
Universidad Nacional de Educación a Distancia, 1995, “Blaverisme” (Tesis doctoral), Valencia, Universitat de
p. 497. València, 2009, p. 14.
22
Saz, Ismael, “La dictadura franquista”, op. cit., p. 26
Aimeur, Carlos, “El ocaso del catalanismo”, Valen-
504. cia Plaza, 18 de septiembre de 2017.

exalcalde de Valencia. Su relevo lo tomaría Unió tubre, que conmemora la toma de Valencia por
Valenciana (1982)27. Jaime I33.
Cabe preguntarse el alcance real que podía tener Fuera de los elementos simbólicos en sí (pero
lo que, para el valencianismo conservador, era el no exenta de simbolismo) tiene lugar una lucha
“peligro” representado por tesis pancatalanistas en lo que respecta a la cuestión lingüística: esto
en el ámbito del País Valenciano. A este respec- se explica dado que el nacionalismo que desa-
to, Xabier Zabaltza ilustra diversos aspectos: en rrolla Joan Fuster está íntimamente relacionado
primer lugar señala que, pese a la presencia de con la difusión de la lengua catalana, verdadero
una mayoría catalanoparlante en el País Valen- elemento estructurador. Debido a esto, la cues-
ciano, el sentimiento de catalanidad era ínfimo28 tión de la lengua adopta un primer plano con dos
cosa que, de hecho, no hizo más que reflejarse ideas completamente diferentes y contrarias:
en los sucesivos resultados electorales; en se- por un lado, el valencianismo acepta la unidad
gundo lugar, el hecho de que nunca existió una de la lengua (es decir, el valenciano proviene del
verdadera posibilidad de “federación” entre Va- catalán), y por ello se toman las Normes de Cas-
lencia y Cataluña, primero, porque los políticos telló (1932), que siguen la normalización del ca-
catalanes no mostraron interés (como se refleja talán de Pompeu Fabra, además, la posterior Ley
en Josep Tarradellas, que se posicionó en contra de Uso y Enseñanza (1983) supondrá un acerca-
de un concepto territorial más allá de Cataluña) miento al catalán normalizado del Institut d’Es-
y, segundo, dado el hecho jurídico de que el artí- tudis Catalans34. Por su parte, la tesis contraria
culo 145.1 de la Constitución prohíbe la federa- a esta es la consideración del valenciano como
ción de Comunidades Autónomas29. una lengua diferente del catalán e, incluso, más
antigua35. Los contrarios a la unidad de la lengua
Durante la “Batalla de Valencia”, las principa- defienden otras normas ortográficas, las Nor-
les disputas que se desataron tuvieron que ver mes del Puig (1979) que aceptarán instituciones
con la cuestión simbólica, es decir, con aquella como la Real Acadèmia de Cultura Valenciana o
serie de elementos que representan al territo- Lo Rat Penat36. En este campo, el valencianismo
rio valenciano. Podemos enumerarlos en los si- acabaría consiguiendo, dado el apoyo general fi-
guientes (en primer lugar, los defendidos por el lológico y académico, la unidad del idioma, aun-
valencianismo más cercano a las ideas de Fuster, que este no fuese denominado catalán.
frente a los defendidos por el regionalismo): el
nombre que se le da al territorio, País Valenciano Por último, dentro del conflicto identitario la
frente a Reino de Valencia30; la bandera, la cua- violencia no tuvo una gran repercusión, aunque
tribarrada o Señera de Aragón frente a la Señera no estuvo exento de la misma, como reflejan los
coronada o tricolor31; el himno, la Muixeranga, atentados que sufrió Joan Fuster en su domici-
baile de Algemesí, frente al Himne de l’Exposició lio, el más grave en septiembre de 198137, o el
de 190932, o la fiesta de la Comunidad, el 25 de militante comunista Miquel Grau, asesinado por
abril, que conmemora la Batalla de Almansa en un ultra de Fuerza Nueva en la víspera del 9 de
la Guerra de Sucesión (1707) frente al 9 de oc- octubre de 1977.
La Batalla de Valencia quedó reflejada en el texto

estatuario que se aprobó para el territorio valen-
ciano, denominado definitivamente Comunidad
27
Sanz Díaz, Benito y Felip i Sardà, Josep María, La
Valenciana para evitar la pugna entre Reino y
construcción política…, op. cit., p. 299.
28
Zabaltza, Xabier, “¿Vías paralelas? Anticatalanismo
País. En dicho Estatuto, en el campo simbólico se
valenciano y antivasquismo navarro durante la Transi-
ción. Dictatorships & Democracies. Journal of History 33
Peris Llorca, Jesús, “Populismo y literatura…”, op.
and Culture, 5 (2017), p. 55. cit., p. 44.
29
Ibid., pp. 60-66. 34
Pérez de Guzmán, Torcuato, “Dialecto e identidad
30
Català Oltra, Lluís, “Dicursos polítics sobre la iden- colectiva: los casos del País Valenciano y Andalucía,
titat territorial en els partits valencians d’esquerra i Revista de Antropología Social, 6 (1997), p. 149.
de centreesquerra”, Papers. Revista de sociología, 35
Peris Llorca, Jesús, “Populismo y literatura…”, op.
99/2 (2014), p. 189. cit., p. 45.
31
Peris Llorca, Jesús, “Populismo y literatura…”, op. 36
Pérez de Guzmán, Torcuato, “Dialecto e identi-
cit., p. 44. dad…”, op. cit., p. 149.
32
Zabaltza, Xabier, “¿Vías paralelas?...”, op. cit., p. 37
“Atentado contra el domicilio del escritor Joan Fus-
72. ter”, El País, 12 de septiembre de 1981.

impuso el criterio del regionalismo valenciano, Tras fracasar la enmienda a la totalidad que pre-
al establecer la Senyera coronada como bande- sentaron, formaron el PVN (Partit Valencià Na-
ra de la Comunidad, y escogiendo el Himne de cionalista) en 1990. El nacionalismo valenciano,
l’Exposició como oficial. Se accedió, además, a la pese a estar dividido, fue impregnándose de-
autonomía, a través del artículo 143, y no el 151, finitivamente de las tesis de la Tercera Vía, que
por el que habían accedido Cataluña, Galicia, acabaron llegando a la propia UPV. Esto, junto a
Euskadi o Andalucía, siendo necesario crear una los resultados electorales del partido, que se vol-
ley para el traspaso de competencias, la conoci- vió a presentar en solitario en 1991 alcanzando
da como LOTRAVA o ley 12/198238. En el campo tan solo el 3,70% de los votos41, hizo que se re-
de la lingüística, finalmente, se estableció una visaran los postulados respecto a la adscripción
cooficialidad entre el castellano y el valenciano. nacional, conformando finalmente una coalición
en 1995 con el nombre de UPV-Bloc Nacionalista
3. LA REVISIÓN DE LOS POSTULADOS: LA que, sin embargo, obtuvo peores resultados, el
TERCERA VÍA 2,70% de los votos42.
El escaso rédito electoral que tuvo el valencianis- En 1996 se realizó el VII Congrés de la UPV donde
mo durante la Transición, unido a los movimien- el marco de los Países Catalanes quedó abando-
tos de carácter anticatalanista y regionalistas que nado en pos de la nación valenciana, surgiendo
emergieron, sumieron al fusterianismo en una así el Bloc Nacionalista Valencià43. De este modo,
profunda revisión en los años ochenta, denomi- se produjo un paso a los postulados de Joan F.
nada Tercera Vía. A partir de entonces comienza Mira, que quedaron patentes en su nuevo ensa-
a cuestionarse el marco de los Países Catalanes yo Sobre la nació dels valencians (1997).
como punto de partida para la construcción na-
cional valenciana, hecho que queda recogido en Paralelamente a la reorganización del valencia-
literatura de la época como De Impura Natione nismo en los años ochenta y noventa, el regio-
(1986) de Damià Mollà y Eduard Mira, o Crítica nalismo valenciano experimentará un repunte
de la nació pura (1984), de Joan F. Mira, donde sin precedentes a través del partido Unió Va-
el autor separa el concepto de nación política del lenciana. Este, como se ha comentado, fue fun-
de nación cultural. dado en 1982 y estuvo muy influenciado por el
último alcalde franquista de Valencia, Miguel
En el año 1982 había surgido UPV (Unitat del Po- Ramón Izquierdo. Unió Valenciana no tuvo un
ble Valencià), partido que recogía al PNPV (Partit ideario político fijo, sino que se fue moviendo
Nacionalista del País Valencià), de Francesc de entre el regionalismo, para evitar la confusión
Paula Burguera, que había formado tras su mar- con el independentismo, hasta momentos en los
ginación de la UCD, y el Agrupament d’Esquerra que definió como nacionalista44. Fue un partido
del País Valencià. En las elecciones autonómi- que alcanzó representación no solo en los ayun-
cas del año 1987 UPV se coaligó con Izquierda tamientos y en las Corts, sino que llegó a tener
Unida, obteniendo un 8,03% de los votos y seis
escaños39. No obstante, el partido sufrió una es-
cisión a raíz de una corriente crítica que, como
señala Ignasi Escandell García, abogaba por “de- en el caso valenciano (1982-1996)”, en González Ma-
jar de lado los postulados fusterianos y seguir las drid, Damián Alberto et al., La Historia: lost in tras-
directrices marcadas por la tercera vía, haciendo lation?: Actas del XIII Congreso de la Asociación de
Historia Contemporánea, Cuenca, Ediciones de la Uni-
del partido de izquierdas una formación intercla-
versidad de Castilla-La Mancha, 2017, p. 2.871.
sista, posibilista y donde tuviesen cabida todos 41
Disponible en: https://www.cortsvalencianes.es/
los sectores con ciertos rasgos valencianistas”40. ca-va/composicio/resultats/dades-electorals-elec-
cions-autonomiques-1991 [Consultado el 12 de abril
38
Boquera Oliver, José María, “El Estatuto de Auto- de 2020].
nomía de la Comunidad Valenciana”, REALA, Revista 42
de estudios de la administración local y autonómica, ca-va/composicio/resultats/dades-electorals-elec-
228 (1985), p. 657. cions-autonomiques-1995 [Consultado el 12 de abril
39
Disponible en: https://www.cortsvalencianes.es/ de 2020].
ca-va/composicio/resultats/dades-electorals-elec- 43
Escandell García, Ignasi, “Los países catalanes…”,
cions-autonomiques-1987 [Consultado el 12 de abril op. cit., p. 2.873.
de 2020]. 44
M.G., “Unió Valenciana vuelve a definirse como
40
Escandell García, Ignasi, “Los países catalanes “nacionalista” tras negarlo durante años”, Las Provin-
como comunidad imaginada: límites y posibilidades cias, 5 de agosto de 2008.

diputados en el Congreso45. En las elecciones ñola, y que esta nunca había cambiado. Con ello,
autonómicas de 1983 fue coaligado con Alianza atendió al gran problema que había tenido el va-
Popular46, mientras que en las de 1987, en soli- lencianismo: que, pese al corpus teórico que se
tario, alcanzó seis escaños y casi 200.000 votos47. creó en torno a él, su propuesta identitaria nun-
En las elecciones de 1991 se produjo su máximo ca había calado en la sociedad valenciana. Los
electoral, con más de 200.000 votantes y seis Países Catalanes, que supusieron una importan-
escaños48 para comenzar, a partir de entonces, te propuesta en la etapa del antifranquismo, no
una “progresiva decadencia”49. Ello no impidió, parecieron, sin embargo, haberse adecuado a las
sin embargo, que en las autonómicas de 1995 circunstancias surgidas a partir de la Transición,
fuese cuarto en número de votos llevándose cin- cuando, además, la Constitución y el régimen
co escaños, que serían decisivos para el nuevo autonómico surgido de ella impidieron cualquier
gobierno50. intento de unificación entre comunidades.
En efecto, fue gracias al Pacte del Pollastre que el A la extensa bibliografía heredada de esta épo-
Partido Popular alcanzó la presidencia de la Ge- ca de intenso debate dentro del valencianismo,
neralitat Valenciana en 1995 aprovechando los algunas de cuyas obras ya hemos mencionado,
cinco escaños de Unió Valenciana, desbancando se añade el estudio prolífico sobre este período,
de esta manera al PSPV-PSOE de Joan Lerma, que, como detalla Antoni Rico i García, trata la
convirtiéndose Eduardo Zaplana en President de cuestión valenciana a través de temáticas muy
la Generalitat e iniciándose así las presidencias diversas, sobre todo a partir de la muerte de Fus-
de Zaplana (1995-2002), Camps (2003-2011) y ter en 1992, hecho que hemos de remarcar, pues
Fabra (2011-2015). constituye un antes y un después para comenzar
a analizar su obra. En este sentido, las aportacio-
Así pues, dentro del valencianismo, el hecho de nes vinieron en forma de estudio de Fuster como
elegir como marco los Países Catalanes o sola- personaje histórico, por investigadores como Fe-
mente el País Valenciano apelando a una política rran Archilés; de análisis de los partidos políticos
más realista, configurará el debate producido en desde la Transición, o libros sobre la propia épo-
torno a estos años, donde los resultados electo- ca, como el Roig i Blau de Alfons Cucó, del año
rales continuaron sin ser los esperados. Llegados 2002, uniendo a todo ello las biografías y auto-
ya los años noventa, Francesc de Paula Burgue- biografías que también cumplen su papel como
ra ganó el premio de ensayo Joan Fuster de los fuente de estudio historiográfico de la época51.
Premis Octubre con su obra És més senzill enca-
ra: Digueu-li Espanya. Con su título parafrasea- 4. LA ACTUALIDAD: ENTRE EL VALENCIANIS-
ba otra de Josep Guia, líder del independentista MO PRAGMÁTICO Y EL CATALANISMO
PSAN, que escribió És molt senzill, digueu-li Ca-
talunya. Burguera hacía referencia a que la iden- El Bloc Nacionalista Valencià, por sí solo, no lo-
tificación nacional de los valencianos era la espa- gró obtener ningún escaño en las Corts Valen-
cianes en las sucesivas citas electorales. Serían
45
Bodoque Arribas, Anselm, “Unió Valenciana (1982- las elecciones del año 2007 donde el valencianis-
2008). Una aproximación”, Papers, 92 (2009), p. 201. mo de izquierdas acudiese junto en la coalición
46
Disponible en: https://www.cortsvalencianes.es/ Compromís pel País Valencià, que reunía, entre
ca-va/composicio/resultats/dades-electorals-elec- otros, a Esquerra Unida y el Bloc, siendo capaz
cions-autonomiques-1983 [Consultado el 12 de abril de obtener siete escaños de representación52.
de 2020].
No obstante, una crisis en el seno de Esquerra
47
ca-va/composicio/resultats/dades-electorals-elec-
Unida provocó la división de un sector que se
cions-autonomiques-1987 [Consultado el 12 de abril constituyó como partido propio con el nombre
de 2020]. de Iniciativa del Poble Valencià a partir de 2007.
48
Disponible en: https://www.cortsvalencianes.es/ En él se encontraba uno de los rostros más cono-
ca-va/composicio/resultats/dades-electorals-elec-
cions-autonomiques-1991 [Consultado el 12 de abril 51
Rico i Garcia, Antoni, “Del no-res a una primavera
de 2020]. bibliogràfica. El valencianisme polític pensat històri-
49
Bodoque Arribas, Anselm, “Unió Valenciana…”, cament”, Índice Histórico Español, 129 (2016), pp. 27-
op. cit., p. 210. 42.
50
Disponible en: https://www.cortsvalencianes.es/ 52
ca-va/composicio/resultats/dades-electorals-elec- ca-va/composicio/resultats/dades-electorals-elec-
cions-autonomiques-1995 [Consultado el 12 de abril cions-autonomiques-2007 [Consultado el 9 de abril
de 2020]. de 2020].

cidos de la oposición en la vida política valencia- tidad del País Valenciano. El discurso político es
na: Mónica Oltra. claro: el valencianismo no podía mantenerse
más en tratar de revertir aquellos postulados
Una nueva coalición, esta vez sin Esquerra Uni- que acabaron imponiéndose en la Comunidad
da, con el nombre de Coalició Compromís, se Valenciana, tratando de ganar una batalla estéril
presentó a las elecciones de 2011, obteniendo por el discurso, mientras los resultados electora-
seis escaños53. Este grupo político reunía las sen- les demostraban el poco calado que tenían los
sibilidades de los Verds Equo del País Valencià, partidos valencianistas.
Iniciativa del Poble Valencià y el Bloc Nacionalis-
ta Valencià. Este nuevo valencianismo se replan- Frente a ello, el valencianismo actual parece re-
teó los términos en los que debía estructurar su coger ese carácter pragmático en lo referente a
discurso político, teniendo en cuenta que la gran los símbolos, tales como la aceptación de la Sen-
baza electoral de Compromís había sido la lucha yera coronada, sobre todo por el partido más na-
contra la corrupción en la política valenciana54 y cionalista de la coalición, el Bloc57. Las actuales
el desgaste de los partidos tradicionales en los propuestas valencianistas parecen orientarse a
albores del 15M, haciendo del nacionalismo algo un tipo de política de carácter más actualizado y
más subalterno en el discurso. transversal, primando elementos como la ecolo-
gía, las cuestiones sociales, el feminismo o la de-
Este cambio queda ejemplificado en una en- fensa de la financiación justa para la Comunidad
trevista que Mónica Oltra concedió a los sus- Valenciana, frente a las tradicionales políticas
criptores del medio digital catalán Vilaweb. Fue identitarias58. Igualmente, respecto a la cuestión
preguntada por la cuestión del uso del término identitaria, el partido parece mantenerse dentro
“Països Catalans”, a lo que contestó “nosaltres, del autonomismo: “Queremos un país que am-
per exemple, no utilitzem el terme ‘Països Cata- plíe su autogobierno y que respete la pluralidad.
lans’ mai, a no ser en actes nostres […] ni tan sols Somos una nacionalidad histórica…”59.
el terme ‘País Valencià’”55. Oltra comentaba que
la ausencia del uso de esos términos respondía En este sentido, el renovado valencianismo re-
a una estrategia política para evitar el “uso del presentado por Compromís, parece alejarse de
anticatalanismo” para obtener rédito político de los elementos de carácter identitario para ape-
sectores de la derecha valenciana. No obstan- lar a una visión renovada del hecho diferencial,
te, más adelante explica más en profundidad la auspiciado quizás por la configuración multiét-
cuestión: nica que, tanto España en general, como el País
Valenciano en particular, ha ido desarrollando,
“crec que també un ha d’assumir quan ha favorecida también, como comenta Xosé Núñez
perdut una batalla, i no podem estar per- Seixas, por el fenómeno de la inmigración: “la in-
dent, continuament, la mateixa batalla […] migración extraeuropea introduce un factor de
es va guanyar la de la unitat de la lengua diversidad etnocultural y lingüística”60.
[…] però la batalla dels símbols, i la de rei-
vindicar una historia comuna, una cultura Las elecciones autonómicas de 201561 marcaron,
comuna […] es va perdre”56. por primera vez, la entrada del valencianismo de
izquierdas de Compromís en el gobierno de la
La “batalla” a la que Oltra hace referencia nos Generalitat. El desplome del PP, aunque se hicie-
evoca a aquella “Batalla de Valencia” de la Tran-
sición, en torno a la disputa de símbolos e iden-
57
Ricós, Francisco, “Oltra ‘No usamos «països cata-
lans» nunca, a no ser en nuestros actos, con amigos’”,
53
Disponible en: https://www.cortsvalencianes.es/ Las Provincias, 17 de agosto de 2015.
ca-va/composicio/resultats/dades-electorals-elec- 58
Disponible en: https://compromis.net/info/trans-
cions-autonomiques-2011 [Consultado el 9 de abril parencia/idees-i-valors/manifiesto/ [Consultado el 9
de 2020]. de abril de 2020].
54
Sanjuán, Héctor, “Compromís, valencianismo de 59
Id.
izquierdas para alejarse de la vía catalana”, El Mundo, 60
Núñez Seixas, Xosé M., “Los nacionalismos subes-
10 de noviembre de 2019. tatales, la unificación europea y el mito de la sobe-
55
Entrevista a Mónica Oltra Jarque, entrevistada ranía. Algunas reflexiones”, Revista internacional de
por Vilaweb. Disponible en: https://www.vilaweb. filosofía política, 31 (2008), p. 182.
cat/noticia/3943540/20111028/oltra-proximes-elec- 61
cions-corts-valencianes-haura-canvi.html [Consulta- ca-va/composicio/resultats/dades-electorals-elec-
do el 27 de marzo de 2020]. cions-autonomiques-2015 [Consultado el 12 de abril
56
Id. de 2020].

se con la victoria electoral, permitió la creación definitiva del catalanismo en la Comunidad

de una coalición, el Acord del Botànic, entre el Valenciana”66.
PSPV-PSOE y Compromís, con el apoyo de Pode-
mos, que dio la presidencia de la Generalitat al Pese a que, a priori, podemos observar cómo el
PSPV-PSOE, con Ximo Puig a la cabeza, mientras concepto de los Países Catalanes se ha ido difu-
que la vicepresidencia recayó en Mónica Oltra. minando dentro de la teoría política valencianis-
Las últimas elecciones autonómicas, en 201962, ta, no permanece totalmente fuera del discurso
permitieron reeditar el acuerdo (Botànic II), con político, aunque sí parece ser más utilizado por
el mantenimiento de la coalición al sumarse Po- los detractores que por quienes abogan por su
demos. significado real. Diferente es el valencianismo
cultural, que continúa manifestando la impor-
A pesar del cambio de gobierno en la Comunidad tancia de la lengua y la relación con los territo-
Valenciana y la renovación pragmática del valen- rios catalanes, además desde una cultura que
cianismo, la pugna por la cuestión identitaria y, va renovándose y apelando a sectores juveniles,
sobre todo, por el catalanismo o anticatalanis- desde los grupos de música valencianos de ma-
mo, no parece haber terminado en el territorio sas de rock, punk, reggae o rap (La Gossa Sorda,
valenciano, auspiciada, quizás, por la manera Obrint Pas, Zoo o Auxili), hasta la convocatoria
en la que el proceso soberanista catalán ha conde manifestaciones, algunas de ellas muy simbó-
dicionado toda la política de los últimos años, licas, como las del 9 de octubre. También a tra-
incluso aunque en numerosas declaraciones de vés de asociaciones como Acció Cultural del País
Oltra el valencianismo parezca situarse más ha- Valencià (ACPV), encargada de la retransmisión
cia el lado crítico con el proceso catalán. En una de TV3 en el territorio valenciano, cadena que
rueda de prensa, Oltra fue interpelada acerca de se mantuvo en emisión desde 1983 hasta 2011,
la pregunta de una periodista a Oriol Junqueras cuando cesó la emisión dadas las dificultades.
sobre que el Banco Sabadell, al irse de Cataluña Colomines i Companys señala un dato curioso: el
a Alicante, se marchaba a los “Països Catalans”, mapa del tiempo de TV3 es uno de los pocos res-
a lo que Oltra respondió: “Opine sobre realitats, quicios culturales en un medio de comunicación
no sobre ectoplasmes”63. donde las noticias prácticamente se centran en
Cataluña67. En efecto, no solo se da la previsión
Ello no parece haber influido, sin embargo, en meteorológica de Cataluña, sino la de los territo-
relajar la tensión sobre el conflicto, como indica rios que formarían los Países Catalanes.
un texto del expresidente de la Generalitat del
PP, Francisco Camps, en 2017, donde se recoge: El principal problema que, actualmente, parecen
“De hecho, el catalanismo está presente en la ac- tener (o mantener) las propuestas nacionalistas
tualidad en el Gobierno de la Generalitat”64, del valencianismo (y que, dándose cuenta sus
formaciones, explica el pragmatismo en sus po-
“Los valencianos tenemos una oportunidad líticas) es el de la cuestión de la identidad, que
extraordinaria para acabar definitivamente durante tanto tiempo impidió su llegada a gran
con este terrible lastre que ha empañado parte de la sociedad valenciana. La teoría polí-
tantos proyectos”65, tica que Fuster construyó surgió en un ámbito
intelectual y, como tal, fue seguida en primera
“…es importante que el 1 de octubre haya
instancia en los espacios universitarios, configu-
sido la derrota del independentismo cata-
rándose una nueva literatura en catalán y valen-
lán […] pero sobre todo, que sea la derrota
ciano de carácter renovado. No obstante, a la
hora de llegar al electorado, más allá de ámbitos
municipales, la respuesta fue siempre escasa.
62
Disponible en: https://www.cortsvalencianes.es/ Como ya hemos comentado, Francesc de Paula
ca-va/composicio/resultats/dades-electorals-elec- Burguera trató la cuestión en el ensayo anterior-
cions-autonomiques-2019 [Consultado el 12 de abril mente mencionado68, donde llegó a la conclusión
de 2020].
63
Muñoz, Ignasi, “Oltra lamenta les causes del tras-
llat del Sabadell a Alacant però valora que “aporta re- 66
Id.
putació” al País Valencià”, Diari La Veu, 6 de octubre 67
Colomines i Companys, Agustí, “Una identitat lí-
de 2017. quida…”, op. cit., p. 50.
64
Camps, Francisco, “El expansionismo catalanista”, 68
Burguera, Francesc de Paula, És més senzill enca-
ABC, 7 de octubre de 2017. ra: digueu-li Espanya, Valencia, Edicions Tres i Quatre,
65
Id. 1998.

de que los mermados resultados tenían que ver Los Países Catalanes, pese a ello, no han desa-
con la conciencia nacional de los valencianos, en parecido completamente del discurso, habiendo
su mayoría, española. encontrado acomodo en otros espacios, princi-
palmente en Cataluña. Son las organizaciones
En efecto, la configuración identitaria de la so- políticas y culturales catalanas, principalmente
ciedad valenciana parece no haber cambiado, las de la izquierda independentista, quienes rei-
pese a la mayor fuerza política del valencianis- vindican la cuestión.
mo (fuerza que, precisamente, puede explicarse
por el pragmatismo) como se puede observar en Hay que tener en cuenta el cambio producido
los datos de las encuestas de opinión referidas dentro de los nacionalismos subestatales euro-
a la Comunidad Valenciana. Xavier Coller y Ra- peos a raíz de la influencia que tuvo en ellos la
fael Castelló ya llevaron a cabo un análisis de la descomposición de las exrepúblicas soviéticas y
identidad dual de los valencianos a partir de un países socialistas del Este de Europa. A este res-
estudio del CIS de 1996, distinguiendo el caso pecto, Xosé Núñez Seixas señala, de hecho, dos
valenciano, donde el sentimiento de españoli- procesos que llegaron a los nacionalismos peri-
dad y, más aun, la identificación dual valenciana féricos de Europa Occidental: el primero, duran-
y española diferían de la identificación nacional te los años sesenta y siguientes, coincidente con
en otras Comunidades Autónomas, principal- el desarrollo de la teoría fusteriana y su asimi-
mente la bilingües, en las que precisamente las lación al “alliberament nacional”, como hemos
identidades periféricas podrían haberse visto mencionado, en partidos como el PSAN. El otro,
reforzadas a través del autogobierno69. Así pues, tras la caída del Muro de Berlín a partir de 1989,
Valencia se convertía en un caso “anómalo” en y los procesos de descomposición de territorios
el que la identidad dual crecía en detrimento, como Checoslovaquia o Yugoslavia, que para el
precisamente, de las identidades estrictamente autor supusieron un influjo a los nacionalismos
española y valenciana, datos que, desde los años periféricos del occidente europeo, entre ellos, el
noventa hasta la actualidad, parecen corroborar catalán72. No obstante, como él mismo comen-
los estudios. Los últimos barómetros llevados a ta, existen profundas diferencias entre los países
cabo por la Generalitat muestran, en 2017, que orientales y los occidentales en la implantación
el 62,7% se siente tanto valenciano como espa- del nacionalismo y su modo de proceder73.
ñol, el 10,6% más español, y el 17,9% solo espa-
ñol, frente a un 3,8% que se siente más valencia- Anthony Smith, por su parte, comenta sobre la
no que español y un 1,6% solo valenciano70. En el tendencia que los nacionalismos de Europa Oc-
caso de 2019, los resultados son muy cercanos, cidental llevaron a cabo a partir de los años 50,
con un 61,5% que se sienten de ambas identi- de ajustarse más al autonomismo frente al sepa-
dades, un 9,4% más españoles que valencianos, ratismo. Aquí se introduce el concepto de iden-
un 17,8% solo españoles y, en este caso, un 6,5% tidad dual, como identidad nacional compatible
más valencianos y un 1,6% solo valencianos71. Es- con pertenecer a una identidad estatal territorial
tos datos nos ayudan a entender las reflexiones diferente, como podría ser el caso de una nación
producidas dentro del valencianismo, ante un catalana en España74. No es nuestro objetivo aquí
proyecto nacional, ya sea catalán o puramente tratar la evolución de los partidos soberanistas
valenciano, que resulta dificultoso llevar a cabo catalanes hacia el independentismo, aunque sí
en una sociedad que, en general, mantiene una es posible concretar que, entre otras cosas, tu-
adscripción nacional que, para la gran mayoría vieron mucho que ver los problemas derivados
de la población, no genera incompatibilidad en- del Estatut de 2006, donde quedaba en parte
tre la identidad valenciana y española. truncada esa posibilidad de reconocimiento de
una nación catalana dentro de España, como de-
fendía en esa época Pasqual Maragall (PSC), el
por entonces President de la Generalitat75.
69
Coller, Xavier, Castelló, Rafael, “Las bases socia-
les de la identidad dual: el caso valenciano”, Reis, 88 72
(1999), pp. 156-158. tatales…”, op. cit., pp. 179-180.
70
Disponible en: http://www.argos.gva.es/filead- 73
Ibid, p. 184.
min/argos/Documentos/Encuestas/201712A_Fre- 74
Smith, Anthony D., La identidad…, op. cit., pp. 126-
cuencias.pdf [Consultado el 12 de abril de 2020]. 127.
71
Disponible en: http://www.argos.gva.es/filead- 75
Company, Enric, “Maragall insiste en que Cataluña
min/argos/Documentos/Encuestas/2019_verano_ es una nación y en que el Estado español es federal”,
Frecuencias.pdf [Consultado el 12 de abril de 2020]. El País, 25 de agosto de 2005.

En el caso de la derecha soberanista catalana, el federaciones territoriales en las Islas Baleares y

concepto de Países Catalanes no parece haber en el País Valenciano, como una Coordinadora
ido más allá de una reivindicación cultural. El de Països Catalans cuya función es “…d’impuls
PDeCAT (Partit Demòcrata Europeu Català), uno de polítiques en l’àmbit de la construcció nacio-
de los actuales representantes del movimiento nal dels Països Catalans”81. Pero un documento
independentista en Cataluña, heredero de la an- que verdaderamente nos ilustra en este sentido
tigua Convergència Democràtica de Catalunya, es el de la “Ponència política” de ERPV (Esquerra
que había mantenido, al menos hasta la época Republicana del País Valencià) en la Conferència
del Procés, una visión más pragmática respecto a de País celebrada en Algemesí en 2013. En el do-
la cuestión territorial76, muestra en este sentido cumento, se especifican los pasos a seguir ante
su ámbito de acción en sus bases, donde deter- lo inminente que resultaba, en aquella fecha, el
mina, en el apartado “El país que imaginem i que camino hacia la independencia de Cataluña. Res-
volem construir”, la voluntad de “una nació ca- pecto a ello, señalan que
talana amb Estat propi. Una república indepen-
dent”77, mientras que la cuestión de los “Països” “el que ja no passarà és que el conjunt dels
la introduce en el ámbito lingüístico: territoris dels Països Catalans fem un procés
“tots junts i al mateix temp” en la lluita per
“Un país que defensa i promou el català l’emancipació nacional”82 debido a “l’avanç
com a lengua propia […] com a patrimoni tan significatiu del Principat”83, es decir: “És
compartit amb el domini cultural i lingüístic de tal dinamisme polític i social el procés
dels Països Catalans”78. d’emancipació del Principat que en els seus
plans no entra la possibilitat “d’esperar” a la
En sus estatutos la cuestión está más presente, resta de la nació”84.
no obstante, se determina, en su artículo 3, que
“L’àmbit territorial d’actuació […] és Catalunya, La cuestión de los Países, en el caso de la izquier-
sense perjudici del marc de referencia dels Paï- da catalana, se encuentra enmarcada en el he-
sos Catalans”79 respecto a ellos, establece en cho lingüístico como factor último que une a los
su artículo 46 que “Fora de l’àmbit territorial de territorios, no obstante, el nacionalismo de un
Catalunya, les relacions del partit amb la resta corte más cívico ha hecho que incluso esta cues-
dels Països Catalans es realitza mitjançant con- tión pueda tornarse más subsidiaria dentro del
venis”80. Así pues, la retórica de los Países Cata- propio discurso, tal como comenta Xosé Núñez
lanes parece mantenerse presente, no obstante, Seixas:
claramente más enfocada a la colaboración, en
la medida en la que se comparte un marco lin- “Algunos partidos independentistas, caso
güístico y cultural. de Esquerra Republicana de Catalunya
(ERC), afirman no ser nacionalistas, sino una
En cuanto a Esquerra Republicana, la cuestión izquierda nacional y soberanista, evitando
de los Países Catalanes cambia completamente centrar el peso de los referentes discursivos
y se vuelve mucho más manifiesta. De hecho, el e identitarios en la etnicidad y orientarlos
propio partido, surgido en Cataluña, tiene tanto hacia valores cívicos”85.
76
Núñez Seixas, Xosé M., “La nación en la España del En resumidas cuentas, el proceso independentis-
siglo XXI: Un debate inacabable”, Pasado y Memoria. ta catalán ha marcado un claro antes y después
Revista de Historia Contemporánea, 9 (2010), p. 130. en la cuestión nacional, pues, como señala igual-
77
Partit Demòcrata Europeu Català, Bases fundacio- mente Colomines i Companys
nals, 8, 9 y 10 de julio de 2016, p. 4. Disponible en ht-
tps://www.upf.edu/documents/4087858/26556073/
PDECAT_bases_fundacionals.pdf/4e4d11d7-af82-
4a5b-a805-56aa2f733279 [Consultado el 9 de abril
de 2020]. 81
Esquerra Republicana, Estatuts, marzo de 2018, p.
78
Ibid., p. 8. 48.
79
Partit Demòcrata Europeu Català, Estatuts, 82
Esquerra Republicana del País Valencià, Ponència
22 de julio de 2018, p. 4. Disponible en: https:// Política. Conferència de país: construïm el País Valen-
media.timtul.com/media/pdecat/ESTATUTS%20 cià del Segle XXI, 9 de noviembre de 2013, p. 25.
(Aprovats%20%201a%20ASSEMBLEA%20NACIO- 83
Id.
NAL)_20181009084253.pdf [Consultado el 9 de abril 84
Id.
de 2020]. 85
80
Ibid., p. 26. tatales…”, op. cit., p. 192.

“El procés sobiranista català és una mena surgimiento de estas organizaciones, que veían
de cadena perpètua per als altres territoris en la situación de los Países Catalanes una opre-
de parla catalana […] no entren en els plans sión nacional.
sobiranistes de Catalunya”86.
CONCLUSIÓN
Es decir, en tanto que la emancipación pretendi-
da por los partidos independentistas estaba ads- La teoría política de Fuster no solo marcó un an-
crita en exclusiva a Cataluña, ello dejaba al resto tes y un después en la literatura en lengua cata-
de territorios de los Países Catalanes fuera de la lana y en la percepción de los valencianos hacia
construcción de un Estado. Esquerra Republica- su propia cultura, sino que supuso uno de los
na intenta solventar la cuestión declarando que debates identitarios que más estaría llamado a
será cada territorio, a su ritmo, el que decidirá la permanecer en el discurso político contemporá-
incorporación: neo y actual, no solo en el País Valenciano, sino
en toda el área lingüística catalana.
“Una vegada siguem lliures, ens cal un marc
polític […] que podria ser, com a etapa pre- Un nuevo valencianismo político, con importan-
via per la reunificació dels PPCC, un nou este influencia en la cultura y lengua valencianas
tat: la República del País Valencià”87. surgió a partir de la Transición, pero el aleja-
miento de la teoría de Fuster de la realidad social
La meta final sí parece ser, en este caso, la cons- valenciana lo mantuvo electoralmente marginal
trucción nacional de unos Países Catalanes. durante muchos años. El corpus teórico fuste-
riano fue reformulado a finales del siglo XX para
Es en los grupos políticos y organizaciones in- tratar de formar partidos valencianistas que no
dependentistas más a la izquierda de Esquerra dependiesen de otros estatales, y que mantuvie-
Republicana donde los Países Catalanes encuen- ron una pugna constante sobre cuál era la nación
tran una defensa más clara y directa. Al princi- a la que se adscribían: la valenciana, o el marco
pio del texto mencionamos a Endavant, que se de los Países Catalanes. La teoría fusteriana, que
enmarca, junto con otros grupos, como el juve- parecía no acomodarse a un proyecto político
nil Arran, en el espacio de la CUP (Candidatura viable, fue dando paso a un marco cada vez más
d’Unitat Popular), partido de la izquierda inde- exclusivamente valenciano, que tampoco termi-
pendentista que cuenta con representación, a naba de hacer remontar al valencianismo. Fue-
día de hoy, tanto en el Parlament de Catalunya ron, de hecho, otras motivaciones, como la lucha
como en el Congreso de los Diputados. La postu- contra la corrupción o una agenda social, las que
ra de la CUP respecto a la cuestión identitaria es llevaron al valencianismo, a finales de los 2000, a
clara y, en este caso, la adscripción nacional son crecer electoralmente, configurándose como un
los Països Catalans, como así lo manifiesta la or- movimiento más pragmático respecto a la cues-
ganización: “La CUP […] s’estèn arreu dels Països tión nacional, aceptando los símbolos que en su
Catalans”, “s’articula com a espai útil per totes día fueron objeto de disputa, pero sin perder de
aquelles persones i col·lectius […] en la lluita per vista elementos a defender como la lengua.
l’alliberament nacional i social dels Països Cata-
lans”88. El pragmatismo valencianista provocó un despla-
zamiento de la teoría de los Países hacia Catalu-
En estos partidos políticos, deudores del pensa- ña, encontrando acomodo, especialmente, en la
miento de otros como el PSAN o el MDT (Movi- izquierda independentista. Los Países Catalanes,
ment de Defensa de la Terra), continúa la retórica no obstante, continúa siendo una formulación
política de una lucha “d’alliberament nacional” teórica, pues en la realidad política el movimien-
en el marco territorial que Fuster teorizó en un to independentista catalán se adscribió tan solo
momento de profundo debate intelectual fruto al territorio de la Comunidad Autónoma y de he-
de los movimientos nacionalistas, que llevaron al cho fue mirado, en general, con indiferencia des-
de el valencianismo. Entre los problemas para
86
Colomines i Companys, Agustí, “Una identitat lí- la formación de algún entramado, bien cultural,
quida…”, op. cit., p. 54. bien político, entre todos los territorios de habla
87
Esquerra Republicana del País Valencià, Ponència catalana se encuentran no solo los legales o la
Política. Conferència de país: construïm el País Valen- estructuración territorial de España, sino la pro-
cià del Segle XXI, 9 de noviembre de 2013, p. 27. pia configuración social tan diferenciada entre
88
Candidatura d’Unitat Popular, La CUP, l’alternativa territorios como Cataluña, en la que el indepen-
necessària, 11 de enero de 2009, p. 9.

dentismo ocupa la mitad de la cámara parlamen-

taria, frente a Valencia.
Con este recorrido tan general de los debates en

torno a la cuestión nacional planteada con Fuster
tan solo pretendemos mostrar la gran influencia
que sus ideas han tenido a la hora de crear un
gran corpus teórico que se cuestionase profun-
damente cuál era la nación a la que se adscribía
el País Valenciano y el resto de los territorios ca-
talanoparlantes. Cuestión que, como a grandes
rasgos hemos visto, sigue vigente a día de hoy,
teniéndose que adaptar, en cierto sentido, la
idea de unos Països Catalans al hecho reciente
de la búsqueda de independencia para Catalu-
ña. Es necesario ahondar mucho más en el tema,
tanto en lo que respecta al País Valenciano como
a Cataluña y, como no puede ser de otro modo,
al resto de territorios catalanoparlantes inclui-
dos en la teoría de los Països, no solo las Islas Ba-
leares, donde desde los sesenta también comen-
zó a ponerse de manifiesto la cuestión con Josep
Melià y Els mallorquins (1967), sino también en
otros territorios como la Cataluña del Norte, con
un papel muy destacado de las organizaciones
culturales.

LA CONSTRUCCIÓN DEL ESPACIO POLÍTICO DE LA

IZQUIERDA NACIONALISTA EN LA ISLA DE MALLORCA. LAS
ELECCIONES MUNICIPALES DE 1979 Y DE 1983
THE CONSTRUCTION OF THE NATIONALIST LEFT’S

POLITICAL SPACE IN MALLORCA. THE MUNICIPAL
ELECTIONS OF 1979 AND 1983
Antoni Marimon Riutort*

*
Universitat de les Illes Balears, España. E-mail : [email protected]
Recibido: 12 mayo 2020 / Revisado: 23 junio 2020 / Aceptado: 29 julio 2020 / Publicado: 15 octubre 2020
Resumen: En los inicios de la Transición apare- the Balearic Islands. Likewise, it became a no-
cieron en Mallorca diversas fuerzas políticas que teworthy political force in the local elections of
podemos considerar nacionalistas de izquierdas. 1979 and 1983. Furthermore, in these elections,
Entre todas ellas sólo se consolidó el Partit Socia- there were a considerable number of indepen-
lista de Mallorca –PSM–, que perdurará duran- dent candidatures that can be considered, to a
te décadas y tendrá una considerable influencia varying degree, close to the nationalist left.
política, social y cultural. Sin embargo, fracasó
estrepitosamente, una y otra vez, a la hora de Keywords: Nationalist left, municipal elections,
obtener representación en las Cortes españolas. independent candidatures, PSM, Balearic Islands
En cambio, consiguió estar presente en los orga-
INTRODUCCIÓN
nismos preautonómicos y, posteriormente, en el
E
Parlament de les Illes Balears. Asimismo, fue una l centralismo español, primero de la monar-
fuerza política a tener en cuenta en los comicios quía absoluta borbónica, después de la nue-
locales de 1979 y 1983. Además, en estas elec- va España liberal, con su división provincial
ciones aparecieron un considerable número de (1833) impuso unas instituciones y un idioma, el
candidaturas independientes que pueden consi- castellano, que eran ajenos a la tradición históri-
derarse, en mayor o menor medida, próximas a ca de Mallorca. Posteriormente, y con el poder
la izquierda nacionalista. local como una importante punta de lanza, se
profundizó en un proceso de aculturación y es-
Palabras clave: Izquierda nacionalista, eleccio-
pañolización. Este largo camino hacia la centra-
nes municipales, candidatura independiente,
lización absoluta se aceleró con las dos dictadu-
PSM, Islas Baleares
ras militares. Sin embargo, tropezó con algunas
Abstract: In the early days of the Transición, se- dificultades en las islas Baleares, aunque casi
veral nationalist left political forces appeared siempre de baja intensidad1. Desde diversos sec-
in Mallorca. Amongst them, only one became tores se intentó conjugar una españolidad, que
consolidated, the Partit Socialista de Mallorca reconocía cierta variedad en el seno de la nación
–PSM–, which lasted for decades and amassed española, con una mallorquinidad anclada en el
a considerable social, cultural and political in- pasado y en sus elementos más superficiales. Sin
fluence. And yet, it failed badly at obtaining re- embargo, el renacimiento cultural vinculado a la
presentation in the Spanish Court. However, it Renaixença, común en todos los territorios de
won some representation in the pre-autonomic
bodies and, subsequently, in the Parliament of 1
Marimon Riutort, Antoni (dir.), Mallorca davant el
centralisme, Palma, Lleonard Muntaner Editor, 2018.

La construcción del espacio político Antoni Marimon Riutort
habla catalana, con la progresiva utilización de la el seno de la izquierda, que es el objeto de este
lengua de Ramon Llull como instrumento de alta artículo, fueron los republicanos federales los
cultura, en flagrante contradicción con la obsesi- más sensibles a la cuestión nacional6. Aunque
va imposición del castellano como única lengua nunca hubo unanimidad sobre el tema, de esta
oficial del supuesto estado nación, constituía un corriente surgió Esquerra Republicana Balear
motivo permanente de fricción y de pequeños, o (1934), que era la versión balear de la Izquier-
no tan pequeños, problemas2. El frecuente meda Republicana de Manuel Azaña, muy matizada
nosprecio a las dificultades provocadas por la por la presencia de dirigentes inequívocamente
insularidad y una fiscalidad considerada excesiva nacionalistas y de izquierdas como Emili Darder,
también fue motivo de queja desde Mallorca. A Pere Oliver i Domenge y Francesc de Sales Agui-
finales del siglo XIX, el desarrollo del catalanismo ló. Por cierto que todos los citados ocuparon car-
político fue seguido con atención por algunos gos municipales, siendo Darder alcalde de Palma
intelectuales en Mallorca y, en 1898, una fecha hasta julio de 19367.
clave, Miquel dels Sants Oliver elaboró por pri-
mera vez un corpus teórico del regionalismo ma- Los sublevados contra la Segunda República
llorquín3. aplastaron totalmente al nacionalismo de iz-
quierdas, formado por intelectuales, profesiona-
En un terreno más antropológico, es importante les liberales y pequeños burgueses, poco prepa-
señalar que persistía la desconfianza ante los pe- rados para luchar contra un régimen dictatorial y
ninsulares castellanoparlantes, en una sociedad extremadamente represivo.
que continuaba manteniendo sus costumbres
ancestrales y se sentía, al menos hasta cierto Con el tiempo, sobre todo a partir de los pri-
punto, etnocéntrica. Por cierto que tampoco los meros años sesenta, con la creación de la Obra
partidarios de la Renaixença consiguieron conec- Cultural Balear, se produjo un renacimiento de
tar con amplios sectores de la población. No era la cultura expresada en lengua catalana. Un in-
una tarea fácil puesto que se prohibió la ense- telectual ubicado en el seno del régimen, pero
ñanza del idioma materno desde 1768. Además, aperturista y reformista, como Josep Melià pu-
en las islas Baleares había unos elevados índices blicó una obra fundamental para la recuperación
de analfabetismo, en concreto el 76% de la pode la conciencia de una identidad diferenciada,
blación mayor de 10 años en 1887, el 53% en Els mallorquins, en 1967.
1920 y el 37% en 19304.
Sin embargo, no fue la nueva burguesía surgida
Para un agudo observador como el escritor cata- del boom del turismo de masas de finales de los
lán Josep Pla, hacia 1920 años cincuenta y los años sesenta quien se inte-
resó por sus tesis nacionalistas, sino una nueva
“Mallorca, com Catalunya, es manté, da- generación de jóvenes, muchos de ellos universi-
vant de l’Estat, com un bloc impenetrable. tarios, que intentaron conjugar un marxismo sui
La llengua i les característiques profundes generis con su adhesión a la cultura catalana y su
han estat salvades, com a Catalunya, per la antifranquismo militante.
ruralia i la petita propietat”5.
La hipótesis que planteamos es que, si bien esta
En este contexto, muy pronto tanto la izquierda nueva izquierda nacionalista fracasó a la hora de
como la derecha se dividieron ante la cuestión luchar por la hegemonía, como quedó patente
que por entonces se denominaba regional. En al no conseguir representación en las elecciones
generales de 1977 y 1979, sin embargo sí que
2
Alomar, Antoni I., La llengua catalana a les Balears pudo obtener representación en los comicios
en el segle XIX, Palma, Edicions Documenta Balear,
preautonómicos de 1979 y en los autonómicos
2000.
3
Oliver, Miquel dels Sants, La qüestió regional, Barce- de 1983, así como cierto número de concejales
lona, Edicions de la Magrana/Diputació de Barcelona, y alcaldías gracias a los resultados de las elec-
1987. ciones municipales celebradas en esas mismas
4
Orell Villalonga, Bartomeu, “Perdre la parla nativa.
Alfabetització i castellanització a Mallorca, 1860- 6
Morro, Mateu, Serra, Sebastià, L’esquerra naciona-
1930”, en Actes del IV Congrés ‘El nostre patrimoni lista a Mallorca (1900-1936), Barcelona, Edicions la
cultural: el català patrimoni de Mallorca’, Palma, So- Magrana/Diputació de Barcelona, 1986.
cietat Arqueològica Lul·liana, 1997, pp. 153-172. 7
Company Mates, Arnau, Emili Darder Cànaves: El da-
5
Pla, Josep, Obra completa. Volum XV. Les illes, Barce- rrer batle republicà de Palma, Palma, Ajuntament de
lona, Edicions Destino, 1970, p. 96. Palma, 2008.

Antoni Marimon Riutort La construcción del espacio político
fechas. Precisamente, tenemos como objetivo lears”13,y el detallado estudio del también citado
precisar el alcance de esa influencia política en Miquel Payeras sobre los años 1975-197814. En
el ámbito municipal, intentar calibrar la influen- cuanto a los inicios de la autonomía, son útiles
cia de la izquierda nacionalista en las numerosas como obras generales, la obra sintética de Anto-
candidaturas independientes, pero claramente ni Marimon y Antoni Nadal sobre las cinco pri-
progresistas, y establecer, aunque sea somera- meras legislaturas autonómicas15 y el volumino-
mente, cuál fue su gestión en los ayuntamientos so libro coordinado por Miquel Duran y Sebastià
y quiénes fueron sus dirigentes. Serra sobre los primeros 25 años de autonomía
balear16.
Las fuentes básicas para elaborar este estudio
han sido los resultados electorales que pueden Casi todas estas investigaciones se ocupan, en
consultarse tanto en la web del Ministerio del mayor o menor medida, de los resultados electo-
Interior8 como en los volúmenes editados por el rales. Sin embargo, también disponemos de dos
Institut Balear d’Estadística9. También ha sido de obras específicas sobre los procesos electorales,
gran utilidad la prensa de la época, tanto los dia- como son las de Gonzalo Adán y Miquel Payeras
rios editados en Palma, sobre todo Ultima Hora y sobre las elecciones generales17 y las de estos
Diario de Mallorca, como la revista Mallorca So- mismos autores sobre elecciones autonómicas18.
cialista, publicada por el PSM. De manera com- Aunque, como hemos dicho, no disponemos de
plementaria también se han utilizado algunas monografías sobre las elecciones locales, puede
fuentes orales. encontrarse información útil en algunos trabajos
sobre la Transición en municipios concretos.
1. ESTADO DE LA CUESTIÓN
Desde un punto de vista más jurídico, cabe des-
Afortunadamente, ya disponemos de una abun- tacar diversos estudios de Bartomeu Colom Pas-
dante bibliografía sobre el período de la Tran- tor19. Asimismo, es imprescindible, como marco
sición y los primeros años de la democracia en general, el Diccionari de partits polítics de les
Mallorca, aunque carecemos de estudios espe- Illes Balears (1900-2008)20.
cíficos relativos a las elecciones municipales de
1979 y 1983. Como obras generales pueden ci- En cuanto al ámbito político objeto del presente
tarse el estudio de Roberto Mosquera y Antoni artículo, la izquierda nacionalista, son provecho-
Nadal sobre el proceso autonómico de las islas
Baleares10; la obra dirigida por Miquel Payeras11
en 1995-1996, que tuvo una notable difusión
13
Nadal, Antoni, La preautonomia balear (1975-
1983), Palma, Edicions Documenta Balear, 1999.
puesto que fue publicada inicialmente como 14
Payeras Femenias, Miquel, Les utopies esvaïdes:
suplemento de los diarios del Grupo Serra, de Crònica política de la Transició democràtica a les illes
Palma, Ultima Hora y Baleares (que en 1996 se Balears, 1974-1978, Palma, Edicions Cort, 1999.
reconvirtió en Diari de Balears); el volumen coor- 15
Marimon, Antoni, Nadal, Antoni, L’autonomia ba-
dinado por Antoni Marimon y Sebastià Serra, lear (1983-2003), Palma, Edicions Documenta Balear,
fruto de un congreso organizado por el Institut 2003.
d’Estudis Baleàrics12; la obra breve, pero den- 16
Duran Pastor, Serra, Sebastià, Les Illes Balears, un
sa, del citado Nadal, publicada en la colección ésser viu: 25 anys d’autogovern (1983-2008), Palma,
“Quaderns d’Història Contemporània de les Ba- Institut d’Estudis Autonòmics, 2008.
17
Adán Mico, Gonzalo y Payeras Femenias, Miquel,
El complejo comportamiento del voto en Baleares I:
8
Ministerio del Interior. Consulta de resultados elec- Elecciones generales, 1977-2011, Palma, Lleonard
torales. Disponible en: www.infoelectoral.mir.es Muntaner Editor, 2013.
[Consultado el 20 de diciembre de 2019]. 18
Adán Mico, Gonzalo y Payeras Femenias, Miquel,
9
Resultats electorals 79/95: Eleccions Locals, Palma, El complejo comportamiento del voto en Baleares II:
Institut Balear d’Estadística, 1995. Partidos, prensa y campañas. Las elecciones autonó-
10
Mosquera, Roberto y Nadal, Antoni, El procés au- micas (1983-2011), Palma, Lleonard Muntaner Editor,
tonòmic balear, Palma, Edicions Documenta Balear, 2015.
1994. 19
Colom Pastor, Bartomeu, Les claus polítiques del
11
Payeras Femenias, Miquel (dir.), Memòria Viva: Ma- procés autonòmic balear, Palma, Institut d’Estudis
llorca des de la mort de Franco fins avui, 1975-1995, Autonòmics, 2004.
Palma, Promomallorca, 1995. 20
Marimon Riutort, Antoni, Serra Busquets, Sebastià
12
Marimon Riutort, Antoni, Serra Busquets (coord.), (coord.), Diccionari de partits polítics de les Illes Ba-
La Transició a les illes Balears: Simposi 25 anys IEB, lears (1900-2008), Palma, Lleonard Muntaner Editor,
Palma, Institut d’Estudis Baleàrics, 1998. 2012.

sas las memorias de Antoni Serra21, Climent Ga- nacionalista. Uno era el Grup Socialista i Auto-
rau22 y Miquel López Crespí23, el libro de Antoni nomista –GASI–, una escisión por la izquierda
Marimon24 y la obra, más reciente, de Miquel del anteriormente citado ANAM, que aglutinó
Amengual y Joan Pau Jordà sobre las minorita- a algunos destacados intelectuales como Josep
rias opciones independentistas25. Maria Llompart27. El segundo grupo fue la de-
legación mallorquina de un partido de ámbito
2. LA EVOLUCIÓN DEL NACIONALISMO DE IZ- de Països Catalans, el Partit Socialista d’Allibera-
QUIERDAS ENTRE 1974 Y 1978 ment Nacional –PSAN–, que lideró en Mallorca
el escritor y periodista Antoni Serra28. Pero fue
A diferencia del comunismo, el nacionalismo de
otra fuerza política, también creada ese mes de
izquierdas no consiguió mantener una continui-
febrero de 1976, todavía en la semiclandestini-
dad, aunque fuese mínima, con el período an-
dad, el Partit Socialista de les Illes –PSI–, la que
terior a la Guerra Civil. Sin embargo, el relativo
consiguió una base social de cierta importancia y
auge del catalanismo cultural en los años sesen-
una larga trayectoria.
ta y primeros setenta, la intensificación de los
contactos con Cataluña y el acceso a la univer- En el PSI convergieron tanto personas hasta en-
sidad, por primera vez en la historia, de jóvenes tonces independientes, como militantes escindi-
mallorquines de clase media e incluso hijos de dos o procedentes de los citados ANAM, MAN y
obreros cualificados, creó un contexto favorable también del PCE, que era la fuerza política más
a la aparición de grupos políticos de la izquier- importante en el seno del antifranquismo ma-
da nacionalista. Todo ello no fue ajeno al gran llorquín. Entre estos últimos, cabe destacar un
impacto provocado por el Mayo de 1968 francés grupo de dirigentes, como Antoni Tarabini-Cas-
y al auge de las ideas marxistas, en todas sus tellani Cabot (Palma, 1940) o Francesc Obrador
variantes, en Europa occidental. Otro revulsivo Moratinos (Palma, 1942), que procedían de Ban-
importante, más concreto, fue la celebración, dera Roja y que, en el seno del PCE, habían discre-
también en Mallorca, del Congrés de Cultura Ca- pado de la política de la dirección del partido, to-
talana (1975-1977). Algunos de sus principales davía en París, en relación a la cuestión nacional
promotores figuraran entre los dirigentes de los de las islas Baleares29. En definitiva, en el nuevo
nuevos partidos de la izquierda nacionalista. PSI confluyeron sectores relativamente amplios
y dinámicos de la sociedad mallorquina, en es-
Inicialmente, estas formaciones tuvieron un ca-
pecial del movimiento vecinal, el sindicalismo, el
rácter francamente minoritario, pero realizaron
nacionalismo cultural y el catolicismo de izquier-
los primeros planteamientos teóricos y forjaron
das. Entre otros ejes de su ideología, este parti-
algunos futuros dirigentes. Los primeros grupos
do estaba a favor de la autonomía política como
organizados, todavía en la más estricta clandes-
“expressió del nostre dret a l’autodeterminació”
tinidad, fueron la Aliança Nacional Mallorquina
y de un socialismo autogestionario, “construït a
–ANAM–, fundada el otoño de 1973 y el Movi-
partir de l’autonomia i de les institucions demo-
ment d’Alliberament Nacional –MAN–, que sólo
cràtiques”30. Además, cabe destacar que el PSI
estuvo activo en 1974-197526. Algún tiempo des-
formaba parte de la Federación de Partidos So-
pués, en febrero de 1976, aparecen hasta tres
cialistas, de ámbito estatal, y de la Coordinadora
grupos más ubicados claramente en la izquierda
Socialista dels Països Catalans, integrada por el
21
Serra, Antoni, Gràcies, no volem flors: Cròniques de Partit Socialista de Catalunya-Congrés –PSC-C–;
la clandestinitat a Mallorca, Barcelona, Edicions de la el Partit Socialista del País Valencià –PSPV– y el
Magrana, 1981. Moviment Socialista de Menorca –MSM–.
22
Mateu i Martí, Jaume, Climent Garau: Un fil de
memòria, Palma, Lleonard Muntaner Editor, 2008. 27
Arnau i Segarra, Pilar, Josep Maria Llompart: Un
23
López Crespí, Miquel, Cultura i antifranquisme, Bar- home polifacètic al servei del país, Palma, Ajuntament
celona, Edicions de 1984, 2000. de Palma, 2011, pp. 52-54.
24
Marimon, Antoni, Entre la realitat i la utopia: His- 28
Amengual, Miquel, Jordà, Joan Pau, L’independen-
tòria del PSM, Palma, Edicions Documenta Balear, tisme..., op. cit., pp. 49-51.
2002. 29
Ginard Féron, David, “Movimiento obrero y cues-
25
Amengual, Miquel, Jordà, Joan Pau, L’independen- tión nacional y lingüística: El caso de los comunistas
tisme a les illes Balears: De la transició a l’actualitat en las islas Baleares”, Pasado y Memoria, 18 (2019),
(1976-2011), Palma, Edicions Documenta Balear, pp. 245-267.
2012. 30
“Uniu-vos al Partit Socialista de les Illes”. Octavilla.
26
Serra, Antoni, Gràcies, no volem..., op. cit., pp. 101- Colección particular Antoni Marimon Riutort, Palma,
104. 1976.

El PSI, pese a su denominación, nunca llegó a im- Poco después, en los comicios a Cortes de fe-
plantarse fuera de Mallorca. Pero poco antes de brero de 1979, se consolidó un pequeño espacio
las elecciones a Cortes constituyentes de junio político para el socialismo nacionalista, pero sin
de 1977, un decreto-ley estableció que, al Con- ninguna posibilidad de conseguir un escaño. De
greso, la circunscripción estaría formada por la hecho, al Congreso de Diputados, el PSM, en coa-
provincia. Es decir, en el caso que nos ocupa, por lición con el Partit Socialista de Menorca, recibió
todo el archipiélago de Baleares, mientras que un magro 3,3% de los votos en la circunscripción
los senadores serían elegidos por Mallorca, Me- de Baleares, mientras que el PSOE obtuvo nada
norca e Ibiza y Formentera. En estos primeros menos que el 29,9% de los votos32.
comicios democráticos, el PSI se presentó con el
PSP, bien implantado en Mallorca e Ibiza, y con 3. LAS ELECCIONES MUNICIPALES DEL 3 DE
el ya citado MSM de Menorca, en una lista de- ABRIL DE 1979
nominada Unitat Socialista. Esta candidatura dis-
Las primeras elecciones municipales de la de-
ponía de una considerable estructura, contaba
mocracia se celebraron juntamente con las elec-
con algunos líderes conocidos, como los citados
ciones preautonómicas. En este último caso,
Tarabini y Obrador o el joven historiador Sebas-
se elegía a los miembros del Consell Insular de
tià Serra Busquets (Son Ferriol, Palma, 1950), ha-
Mallorca, y se crearon cuatro circunscripciones:
bía tenido un considerable protagonismo en las
toda la isla y cada uno de los partidos judiciales
demandas de autonomía y organizó nada menos
(Palma, Inca, Manacor). Sin embargo, sólo se vo-
que 77 mítines en Baleares durante la campaña
taba una única lista. La candidatura del PSM fue
electoral, un número sólo superado por el PCE31.
la única opción de carácter nacionalista que se
Sin embargo, los resultados quedaron muy lejos
presentó.
de las expectativas. Con un 5,5% de los sufragios,
no consiguió representación al Congreso de Di- Ante estos comicios, y también en los municipa-
putados y fue la cuarta fuerza más votada. El so- les, este partido desarrolló una política de alian-
cialismo triunfador resultó ser el del PSOE, con zas con el sindicato de campesinos Unió de Page-
un 23% de votos y dos diputados. La candidatu- sos de Mallorca –UPM–, por aquel entonces muy
ra más votada fue, con diferencia, UCD, con el activo. De hecho existió un auténtico pacto, que
50,8% de los sufragios y cuatro diputados. no se hizo público, con este sindicato, de manera
que las listas del PSM incorporaron a miembros
Ante esta situación, el PSI, como muchos de sus
de la UPM en puestos destacados33. Asimismo,
homólogos de la Federación de Partidos Socia-
sobre todo en Palma, se consiguió integrar a per-
listas, parecía condenado a desaparecer. Buena
sonas muy conocidas en el movimiento cívico
parte de sus dirigentes se pasaron, con mayor o
protagonizado por las asociaciones de vecinos.
menor rapidez, al PSOE.
También fue muy importante la simbiosis que
No obstante, se incorporaron al PSI cierto nú- se operó con numerosas candidaturas indepen-
mero de personas vinculadas al nacionalismo dientes locales a las cuales apoyó el PSM y en
cultural, que procedían mayoritariamente de la las que, en ocasiones, se integraron sus militan-
Part Forana (el conjunto de los municipios de tes. En algunos casos también había militantes o
la isla sin la capital). En la III Asamblea del PSI simpatizantes del PSOE y del PCE en estas listas.
(diciembre de 1977), triunfaron las tesis nacio- Con todo, en conjunto, fueron muy numerosas
nalistas contrarias a una integración en el PSOE las candidaturas independientes escoradas ideo-
y el partido pasó a denominarse Partit Socialista lógicamente, en mayor o menor medida, hacia la
de Mallorca –PSM–. Este partido consiguió cier- izquierda nacionalista. El PSM también se pudo
to protagonismo, aunque limitado por no tener apoyar en la buena sintonía que tenía con el na-
representación en las Cortes, en el lento proceso cionalismo cultural, representado principalmen-
autonómico balear. En diciembre de 1978, incor- te por la citada Obra Cultural Balear. Por último,
poró un importante Col·lectiu Socialista i Nacio- también tuvo el apoyo de un partido de extrema
nalista, formado por independientes y antiguos izquierda, pero cada vez más moderado, el Partit
militantes de la Organització d’Esquerra Comu- del Treball de les Illes-Organizació Revolucionària
nista –OEC–. 32
Resultats electorals 77/96. Eleccions generals: Con-
grés i Senat, Palma, Institut Balear d’Estadística, 1996,
p. 75.
31
Miquel Payeras Femenias, Les utopies..., op. cit. p. 33
Marimon Riutort, Antoni, Entre la realitat..., op. cit.,
360. p. 58.

dels Treballadors y de algunos grupos del Partido nar en todos los municipios de Mallorca donde
Carlista, que habían evolucionado hacia el fede- era posible.
ralismo y el socialismo autogestionario34. Aun-
que con más discreción, no hay duda que el PSM Los mejores resultados de las candidaturas del
era la opción de algunos sectores progresistas de PSM correspondieron a dos pueblos del interior,
la iglesia católica de Mallorca. no muy grandes y con poca inmigración, Campa-
net y Montuïri. En el primero, en la comarca del
El apoyo a numerosas e importantes candidatu- Raiguer, fue la segunda fuerza más votada, con 4
ras independientes hizo que el PSM, como tal, ediles (36,8% de los sufragios), los mismos que la
en los comicios locales, sólo se presentase en la Coalición Democrática y uno más que UCD, que
capital y en cuatro municipios de la Part Forana. era la tercera fuerza en disputa. En este munici-
pio, donde el PSM era la única candidatura de
En Palma, una gran ciudad (304.000 habitantes izquierdas, optó por pactar con la derecha más
en 1980) y en continuo crecimiento, con una in- moderada y obtuvo la alcaldía el cabeza de lista
migración peninsular muy numerosa y, en parte, de UCD. Los nacionalistas de izquierdas forma-
poco integrada, el PSM tenía que competir con ron parte del equipo de gobierno y su influencia
dos partidos por entonces ya bien implantados, fue decisiva en la orientación ideológica del nue-
el PSOE y el PCE-PCIB. El socialismo nacionalis- vo consistorio. En el municipio de Montuïri, en
ta consiguió presentar una lista encabezada por la comarca del Pla, también consiguió muy bue-
un veterano dirigente del movimiento vecinal, nos resultados, con tres concejales y el 27,5% de
Jaume Obrador Soler (Felanitx, 1940). Se trata- los votos, pero fue la tercera fuerza más votada
ba de un sacerdote secularizado (1973), anti- tras el PSOE (3 ediles) y UCD (5). Gracias al citado
guo misionero en Burundi, que había militado acuerdo, de carácter general, entre los dos par-
en la ya citada OEC35. En la lista que encabeza- tidos socialistas, la alcaldía fue para el cabeza de
ba había personas representativas de diversos lista del PSM, Francesc Trobat Garcias (Montuïri,
barrios y pueblos del municipio de Palma, con 1943), un empleado de GESA, la compañía que
una mujer, Rosa María Bueno Castellanos, como monopolizaba la electricidad en la isla37.
número tres. Nacida en Villapalacios (Albacete),
había sido la responsable diocesana de la Juven- El PSM también consiguió representación en los
tud Obrera Cristiana –JOC– entre 1967 y 1972. otros dos municipios en los que se presentó con
Desde sus inicios, participó en el movimiento su propia candidatura, Capdepera y Andratx. Se
vecinal palmesano, y por aquel entonces era la trata de dos villas costeras con una importante
presidenta de la Asociación de Vecinos del Rafal actividad turística y una fuerte inmigración pe-
Nou, un barrio de nueva construcción, obrero e ninsular. En Capdepera, un pueblo con una fuerte
inmigrante36. El número dos de esta candidatura tradición socialista, el único concejal (6,6% de los
fue Josep Bernat Brondo, un empleado de banca votos) del PSM pudo pactar con el PSOE (4 con-
que había sido un antiguo militante de la OEC. cejales) y el PCE-PCIB (2), de manera que obtuvo
Por otra parte, de 27 candidatos, 7 eran mujeres. la alcaldía el partido de Felipe González. En cam-
bio, en Andratx, aunque también se presentaron
Los resultados fueron moderadamente satis- el PSOE y el PCE-PCIB, se impuso la derecha y el
factorios para el PSM en Palma, ya que recibió único edil del PSM quedó en la oposición. Había
6.832 votos (6,4%) y un concejal, el citado Jaume conseguido un 7,5% de los sufragios.
Obrador. También consiguieron representación
UCD (13 ediles), PSOE (11) y PCE-PCIB (2). Por un En conjunto, estas cinco listas del PSM recibieron
margen muy ajustado, la izquierda superó a la 9.725 votos (el 3,53% del total de la provincia de
derecha, de manera que se pudo acordar un pac- Baleares) y sumaron 10 concejales. Se trata de
to tripartito que llevó a la alcaldía a un socialista cifras modestas, inferiores, por ejemplo, a las del
del PSOE. De hecho, el PSM y el PSOE llegaron a PCE-PCIB, con 26 ediles en Baleares38.
un acuerdo para que la izquierda pudiese gober-
Entre sus ediles, cabe destacar la presencia de
34
“Avanç nacionalista i ruptura del bipartidisme”, Ma- dos mujeres, Magdalena Solivellas, en Campa-
llorca Socialista, 12, 21 de abril de 1979, p. 1. net, y Joana Jordà, en Montuïri.
35
“Jaume Obrador. Nº 1 del PSM a l’Ajuntament de
Ciutat”, Mallorca Socialista, 11, 24 de marzo de 1979, 37
Capellà, Margalida, “Els batles del PSM: Francesc
p. 4. Trobat, batle de Montuïri”, Mallorca Socialista, 13, 16
36
Ferré Freitas-Morna, Marta et al., Qui és qui a Ma- de mayo de 1979, p. 5.
llorca, Palma, Promomallorca, 1999, p. 97. 38
Ministerio del Interior. Consulta de..., op. cit.

Pero el PSM no estaba representado exclusiva- pició el PSM en junio de 1980, marzo de 1981 y
mente por las candidaturas con sus propias si- junio de 198242. El caso de Sineu es bastante pa-
glas ya que fueron muchas las candidaturas in- recido, ya que su candidatura independiente, Si-
dependientes, más o menos en su órbita, que neuers Independents, tuvo el apoyo del PSM, del
consiguieron buenos resultados en aquellos co- PSOE e incluso del PCE-PCIB y también obtuvo
micios. De hecho, su órgano de prensa, el Mallor- la alcaldía con mayoría absoluta. Su candidatura,
ca Socialista, anunció con orgullo, y en portada, liderada por Jaume Ferriol Niell recibió el 55,2%
que habían sido elegidos cinco alcaldes de la iz- de los sufragios y 6 concejales. Esta candidatura
quierda nacionalista39. Y ya hemos visto que sólo participó, como mínimo, en la II y III de las cita-
hubo un alcalde surgido de las listas del PSM, en das “trobades”.
Montuïri. Los otros municipios a los que hacia
rferencia eran tres villas de mediana importan- En Inca, en un contexto de mayor pluralidad po-
cia, Artà, Algaida y Sineu, y una pequeña ciudad lítica, la Candidatura Progressista Independent
industrial y comercial, Inca. El caso de Artà era –CPI– no consiguió unos resultados tan espec-
indiscutible, puesto que el cabeza de lista de los taculares, pero fue la fuerza de izquierdas más
Independents d’Artà era un militante del PSM, votada, con el 23% de votos y cinco ediles. Su
Jaume Morey Sureda (Artà, 1948), por aquel en- candidatura estaba formada en buena parte por
tonces trabajador en el sector de la hostelería y miembros del PSM, de la UPM y de CCOO. Me-
estudiante del último año de filología catalana. diante un acuerdo con el PSOE (4 concejales) y el
El mismo Morey explicó que no se había presen- PCE-PCIB (2), su cabeza de lista, el independiente
tado una lista con las siglas PSM porque la ma- Jaume Crespí Cerdà, consiguió esta importante
yoría de sus integrantes no estaban vinculados a alcaldía. Se da la circunstancia que uno de los
este partido y por la oposición rotunda de un re- concejales elegidos, Jaume Armengol Coll, tam-
presentante del sindicato UPM40. La candidatura bién era candidato por el PSM en las elecciones
de los Independents d’Artà obtuvo un magnífico preautonómicas pero no consiguió el escaño43.
resultado al ser la fuerza más votada y conseguir
Asimismo, también participaron en alguna de las
5 concejales, con el 39% de los votos. Como el
citadas “trobades” de ediles de la izquierda na-
PSOE obtuvo otros tres ediles, y aunque el PCE-
cionalista, representantes de candidaturas inde-
PCIB no logró representación, se pudo formar un
pendientes que lograron muy buenos resultados,
equipo de gobierno de izquierdas, liderado por
como la Candidatura Progressista Independent
el citado Morey.
de Selva (5 ediles); la Candidatura Independent
En el caso de Algaida, el alcalde Joan Ramis Ge- de Consell (6 concejales, la mayoría absoluta); la
labert, era independiente, y su candidatura, los Candidatura Independent Progressista de Búger
Independents d’Algaida, tenía el apoyo del PSM, (4 ediles); la Entesa Campanera Independent,
del PSOE y del sindicato UPM. Sus resultados del municipio de Campos, que también tenía in-
fueron excelentes, ya que con el 54,8% de los tegrantes procedentes del PSOE, (4); y la Candi-
votos consiguió 6 ediles y la mayoría absoluta. datura Democràtica Independent de Felanitx (5).
Resulta muy significativo que este porcentaje
Otras listas que también asistieron a en estos
sólo sea un poco superior al que obtuvo el PSM
encuentros tuvieron resultados más limitados,
en ese municipio en las elecciones preautonó-
aunque no menospreciables, como la Candida-
micas, en concreto el 51,9%, que fue su mejor
tura Independent del Poble, de Santa Maria del
resultado41. Además, la candidatura de los Inde-
Camí (2 ediles) o la Candidatura Independent de
pendents d’Algaida participó en las “trobades”
Sant Joan (2).
(encuentros) de consejeros preautonómicos y
concejales nacionalistas de izquierdas que aus- Pero todavía hubo más candidaturas indepen-
dientes, ubicadas en mayor o menor medida en
39
“Batles d’esquerra nacionalista”, Mallorca Socialis- la izquierda nacionalista, aunque no nos conste
ta”, 12, 21 de abril de 1979, p. 1. su participación en las “trobades” de conceja-
40
Capellà, Margalida, “Els batles del PSM: Jaume Mo- les de la izquierda nacionalista. Sin duda la más
rey, batle socialista d’Artà”, Mallorca Socialista, 12, 21
de abril de 1979, pp. 6-7. 42
Mallorca Socialista, 26, junio de 1980, p. 2.; Mallor-
41
Garcia-Cassanyes, Xavier “Quadre comparatiu dels ca Socialista, 35, abril de 1981, p. 5.; Mallorca Socia-
resultats de les eleccions al Consell de Mallorca del lista, 47, junio de 1982, p. 3.
3 d’abril i de les eleccions al Congres de l’1 de març 43
1979”, Lluc, 684 (marzo-abril 1979), pp. 16-17. (dir.), Diccionaris de partits..., op. cit., p. 48.

importante era la Candidatura Democràtica In- ya que este partido por aquel entonces no dispo-
dependent –CDI– de Manacor, la segunda ciu- nía de implantación en Mallorca. Esta lista fue la
dad de Mallorca, que consiguió 2.119 votos i 5 segunda más votada, con un 17% de los votos y
concejales, así como la alcaldía para su cabeza dos ediles, que quedaron en la oposición47.
de lista, Llorenç Mas Sunyer. Aunque Mallorca
Socialista44 se quejó de su poca sensibilidad ha- Asimismo, se definía de izquierdas y nacionalis-
cia las propuestas nacionalistas y progresistas de ta, aunque sin vínculos aparentes con el PSM, el
otra candidatura independiente de Manacor, la Grup Independent de Son Carrió, que logró dos
Opció Independent per a Manacor –OIM– (3 edi- concejales en el municipio de Sant Llorenç des
les), entre 1980 y 1984 hubo contactos entre la Cardassar, que pactaron con otra candidatura in-
CDI y el PSM45. Es importante precisar que esta dependiente de carácter progresista y naciona-
candidatura gobernaba la ciudad de Manacor en lista, el Grup Independent de Sant Llorenç des
coalición con la citada OIM y UCD. Cardassar, que también obtuvo dos ediles, y con
el PSOE. En este caso se formó un equipo de go-
Otras candidaturas situadas en la órbita de la iz- bierno con la alcaldía para este último partido.
quierda nacionalista, al menos en parte, fueron También era nacionalista y moderadamente pro-
la Candidatura Independent d’Esporles y los In- gresista la Candidatura Independent Lloretina,
dependents de Puigpunyent i Galilea, que se pre- en el pequeño municipio de Lloret de Vistalegre,
sentaron en dos municipios de la Sierra de Tra- que obtuvo 3 ediles y la alcaldía para su candi-
muntana. En ambos casos, consiguieron hacerse dato.
con la alcaldía. En Esporles, un antiguo feudo del
PSOE, casi todos sus integrantes eran jóvenes Resulta interesante vincular los resultados de
independientes hijos de socialistas, si bien tam- muchas de las candidaturas independientes lo-
bién había algún militante del PSM y algún an- cales citadas con los sufragios que recibió el PSM
tiguo militante del PSP46. Esta candidatura logró en los comicios preautonómicos. Así, además
3 ediles y pactó con el PSOE y con el PCE-PCIB. del extraordinario 51,9% de los votos en Algai-
En Puigpunyent, otro municipio de tradición iz- da, también consiguió muy buenos resultados
quierdista, los citados Independents lograron 6 en Selva (46%), Sineu (40%), Lloret de Vistalegre
concejales y la mayoría absoluta. (31,3%) Sant Llorenç des Cardassar (27,7%), Con-
sell (26,9%), Puigpunyent (25,8%), Búger (23,5%)
En el municipio industrial de Lloseta se creó la y Petra (20,2%). En cuanto a las capitales comar-
Candidatura Unitat Democràtica Obrera de Llo- cales, Inca y Manacor, este partido también ob-
seta, que aglutinó a independientes y a afiliados tuvo unos nada menospreciables porcentajes de
del PSM, el PCE-PCIB y CCOO. Obtuvo un único voto, con el 21,1% y el 26% de los sufragios, res-
edil, que quedó en la oposición, como los 2 que pectivamente. Es importante indicar que, en el
obtuvo el PSOE. Otra candidatura con miembros conjunto de Mallorca, el PSM recibió el 11,5% de
del PSM, y en este caso también del PSOE, fue el los votos en los comicios preautonómicos, sien-
Grup Independent de Petra, un municipio rural do la tercera fuerza más votada, tras UCD (48%)
del interior de Mallorca. Esta candidatura logró y el PSOE (26,7%). Con estos resultados logró dos
tres concejales, que también estuvieron en la representantes en el Consell Insular de Mallor-
oposición. En otro municipio del centro de Ma- ca, Gabriel Oliver Oliver –Biel Majoral– (Algaida,
llorca, los Independents de Vilafranca lograron 1950) y Pere Llinàs Barceló (Son Macià, Manacor,
nada menos que el 33,1% de los votos y tres edi- 1941), un independiente miembro del secreta-
les, aunque no pudieron gobernar. Además, en la riado del sindicato UPM.
pequeña ciudad de Sóller, se creó la candidatura
Esquerra Sollerica, que aglutinó a militantes del Sin duda, en un momento de auge de las candi-
PCE-PCIB, del PSM y un cabeza de lista, Andreu daturas locales independientes en todo el Esta-
Pizà Mairata, que estaba afiliado a ERC, un hecho do48, en Mallorca, la izquierda nacionalista consi-
explicable más que nada por tradición familiar, guió imbricarse con un número muy elevado de
estas listas.
44
“Darreras notícies”, Mallorca Socialista, 15, julio de 47
Quetglas Cifre, Antoni, La transició democràtica a
1979, p. 2. la vall de Sóller (1973-1983), Pollença, El Gall editor,
45
Marimon Riutort, Antoni, Serra Busquets, Sebastià 2007, pp. 55-59.
(dirs.), Diccionari de partits..., op. cit., p. 48. 48
Capó Giol, Jordi, “Elecciones municipales, però no
46
Comunicación de Bartomeu Llinàs Ferrà (Esporles, locales”, Revista Española de Investigaciones Socioló-
1952), 8-6-2018. gicas, 56 (1991), pp. 143-164.

En casi todos los municipios en los que no pudo nalistas de izquierdas de Baleares que deseaban
presentar una lista propia y tampoco hubo can- cotas más altas de autonomía para su Estatuto.
didaturas como las que hemos citado, sus resul- Con todo, finalmente, votaron a favor y sólo se
tados fueron casi testimoniales. Así, en un pe- abstuvo el Grupo Popular, de manera que la au-
queño municipio como Banyalbufar sólo obtuvo tonomía entró en vigor en las islas Baleares el 1
el 1,4% de los votos; en la pequeña ciudad de de marzo de 198351.
Llucmajor, el 3,6%; en el municipio industrial de
Alaró, el 1,5% y en el importante municipio de Paralelamente, en el ámbito estatal, se produjo
Pollença, en la costa norte, el 2,7%. la crisis del partido gobernante, UCD, y el ascen-
so del PSOE, que culminó en las elecciones ge-
4. LAS ELECCIONES LOCALES DEL 8 DE MAYO nerales de octubre de 1982. En esos comicios,
DE 1983 pese a todo, el PSM se presentó en coalición con
el Partit Socialista de Menorca bajo la denomi-
El relativo éxito conseguido por el PSM en los nación PSM-Nacionalistes de les Illes. Sus resul-
comicios preautonómicos de abril de 1979, y tados fueron testimoniales, con tan sólo el 2,3%
de una manera más difusa, en las elecciones lo- de los votos frente al 40,5% de los sufragios del
cales celebradas simultáneamente, resultó ser PSOE, que se convirtió, por primera vez en la his-
muy efímero. Este partido tenía una estructura toria, en la fuerza más votada en la circunscrip-
muy débil, no había una dirección política sólida ción de Baleares52.
y faltaban dirigentes profesionalizados. Pero lo
peor fue el enfrentamiento, iniciado en 1979 y Sin embargo, ante los primeros comicios au-
prolongado hasta la primavera de 1981, entre el tonómicos y los segundos municipales, que se
sector más radicalmente izquierdista, en buena celebraron en mayo de 1983, el PSM consiguió
parte procedente del mencionado Col·lectiu So- presentar un importante número de candidatu-
cialista i Nacionalista, y los que, sin dejar de ser ras y con candidatos, en muchos casos, de cierto
de izquierdas, preconizaban cierta moderación, prestigio. En los comicios locales, presentó 19
que consideraban más acorde con el carácter de candidaturas en listas con sus propias siglas. En
la sociedad mallorquina49. Los primeros termina- algunos casos, como Inca, Algaida, Vilafranca de
ron perdiendo la partida y se escindieron para Bonany, Sant Joan o Sant Llorenç des Cardassar,
fundar un nuevo partido, Esquerra Mallorquina, se trataba de municipios en los que había des-
creado en Palma en 1981, con implantación en aparecido la candidatura próxima a la izquierda
la capital mallorquina e Inca. En 1982, intentó nacionalista que se había presentado en 1979.
presentar una candidatura a las elecciones al En otros municipios, como Palma, Montuïri o
Congreso de Diputados, pero finalmente pidió el Campanet, se daba continuidad a las listas crea-
voto para el PSOE. En 1983, se disolvió y algunos das hacia cuatro años. Pero también había candi-
de sus militantes más destacados se incorpora- daturas de nueva creación, en municipios como
ron al PCE-PCIB50. Pollença, Bunyola, Calvià, Marratxí, Costitx, Bi-
nissalem, Llubí o Porreres.
La larga crisis del PSM afectó directamente a la
Candidatura Progressista d’Inca, que no volvió En cuanto a las candidaturas independientes en
a presentarse a las elecciones y alejó del PSM a la órbita ideológica de la izquierda nacionalista,
otras candidaturas independientes. la dirección del PSM consideraba próximas las de
los Independents d’Artà, Sineuers Independents,
Por otra parte, este partido intentó denodada- la Candidatura Democràtica Independent de Fe-
mente tener protagonismo en el proceso auto- lanitx, la Candidatura Independent de Petra, la
nómico, pero finalmente el estatuto balear fue Candidatura Progressista Independent de Selva,
fruto de un acuerdo bipartidista UCD-PSOE. Con Esquerra Unida de Santa Maria, los Indepen-
el proyecto de estatuto ya en el Congreso, en dents de Son Servera y el Grup Independent de
enero de 1983, los diputados del PCE, de Euska- Valldemossa53. A estas candidaturas cabe añadir
diko Ezkerra y de ERC se abstuvieron, y el por- como nacionalistas y progresistas, aunque de
tavoz de este último partido, Francesc Vicens,
explicó que lo hacía en solidaridad con los nacio- 51
Mosquera, Roberto, Nadal, Antoni, El procés au-
tonòmic..., op. cit., pp. 73-76.
49
Marimon Riutort, Antoni, Entre la realitat..., op. cit. 52
Resultats electorals 77/96. Eleccions generals..., op.
pp. 57-61. cit., p. 45.
50
Marimon Riutort, Antoni, Serra Busquets, Sebastià, 53
Marimon Riutort, Antoni, Entre la realitat..., op. cit.
Diccionari de partits..., op. cit. pp. 90-91. p. 79.

forma un tanto difuminada, las de los Indepen- En las capitales comarcales, las cosas fueron un
dents de Puigpunyent i Galilea, la CDI de Mana- poco mejor para este partido, pero no demasia-
cor y la Candidatura Independent Lloritana. do. En Inca, con una candidatura encabezada
por el farmacéutico Jaume Armengol Coll (Inca,
En total, de manera directa o indirecta, la izquier- 1938), obtuvo el 7% de los votos y un concejal.
da nacionalista estuvo presente, en 1983, en 30 En Manacor, con una lista liderada por el joven
municipios de Mallorca (de un total de 53). Por geógrafo Guillem Roman Quetglas, este partido
su parte, el PSOE presentó hasta 39 listas bajo logró el 5,3% de los votos y un edil, pero hay que
sus propias siglas. tener en cuenta que en esta ciudad se presenta-
ba la CDI que consiguió el 20,2% y 4 concejales
Además, hay que indicar que Mallorca siguió la
que, como el edil del PSM, quedaron en la opo-
tendencia general a reducir el número de candi-
sición.
daturas independientes en relación a los comi-
cios locales de 197954 El PSM obtuvo sus mejores resultados en mu-
nicipios relativamente pequeños, pero con más
En cuanto a los resultados, fueron agridulces
de 1.000 habitantes, en los que ya se había pre-
para la izquierda nacionalista, ya que si bien
sentado, como Campanet (5 concejales) y Mon-
obtuvo una considerable presencia municipal,
tuïri (3), o en los que se presentaba por primera
perdió la representación que tenía en Palma y
vez como Pollença (4), Llubí (4), Vilafranca de
cosechó un resultado modesto en las capitales
Bonany (4) y Algaida (3), si bien en estos dos
comarcales, Inca y Manacor.
últimos pueblos en parte era heredero de can-
En Palma, la candidatura del PSM estaba liderada didaturas independientes desaparecidas. Tam-
por Joan Perelló Ginard, (Campos, 1953), un em- bién consiguió representación en Alcúdia (1),
pleado del aeropuerto y escritor, que había acce- Binissalem (1), Bunyola (1) Porreres (1), sa Pobla
dido a la concejalía que tenía este partido en el (1) i Sant Llorenç des Cardassar (1). En cambio,
consistorio de la capital en marzo de 1981, en el no tuvo suficientes votos para conseguir un edil
contexto de la citada crisis interna y gracias a una en el pequeño pueblo de Costitx, aunque llegó
sentencia judicial. Su gestión al frente del área al 10,7% de los sufragios. Por cierto que los me-
de educación había sido bien valorada por am- jores porcentajes del PSM en estas elecciones
plios sectores. Le acompañaban en los primeros locales correspondieron a los ya citados munici-
puestos de la candidatura el empleado de banca, pios de Campanet (44%), Llubí (31,7%), Vilafran-
escritor, activista cultural y sindicalista Bartomeu ca de Bonany (31,7%), Montuïri (29,5%), Algaida
Mestre Sureda (Felanitx, 1952) y el maestro de (26,5%) i Pollença (21,1%).
escuela y promotor sociocultural Baltasar Dar-
En total, las listas de este partido sumaron 32
der Sansó (Ariany 1948-Palma 1991), que era
concejales, una cifra modesta si la comparamos
el director del Patronato gitano de Son Banya
con el PSOE (136 ediles en Mallorca), pero muy
(Palma). La primera mujer ocupaba el número 5
superior a la del PCE-PCIB (4 concejales).
y era la independiente Joana Aina Maria Palou
Sampol. En total había cinco mujeres en una lista De estos ediles, cuatro eran mujeres, Catalina
de 27 candidatos. Esta candidatura tan solo re- Mas Targa (Algaida); Jerònia Rayó Bennàssar y
cibió el 4% de los votos, de manera que el PSM, Antònia Femenias Horrach (Campanet); y Cata-
como el PCE-PCIB (3,1%), quedó fuera del consis- lina Trobat Nicolau (Porreres).
torio palmesano, mientras que el PSOE aglutinó
el voto de izquierdas (45,6% de los sufragios) y En muchos casos, los concejales del PSM queda-
logró la mayoría absoluta. ron en la oposición, ya que la coalición AP-PDP-
UL, con 181 concejales, y la nueva Unió Mallor-
En los otros municipios de la bahía de Palma, quina –UM–, regionalista de centroderecha, con
con una fuerte emigración, los resultados fueron 130 ediles, pudieron gobernar en un gran núme-
parecidos o peores. En Calvià, el PSM recibió un ro de municipios. Por su parte, el PSOE consiguió
3% y en Marratxí un 4,8%, mientras que en Lluc- tres mayorías absolutas y otras dos alcaldías con
major, como en Andratx, no hubo candidatura de alianzas diversas, en las que el PSM no tuvo nada
este partido ni de grupos independientes próxi- que ver porque ni siquiera tenía representación.
mos a la izquierda nacionalista.
Sin embargo, en Montuïri, se firmó un pacto en-
54
Capó Giol, Jordi, “Elecciones municipales...”, op. cit. tre el PSM (3 concejales) y el PSOE (3), mediante
pp. 155-156.

el cual este último partido detentaría la alcaldía multáneamente, el PSM logró en Sineu el 30,4%
en un primer período mientras que el PSM la de los votos, siendo el partido más votado.
ocuparía entre 1985 y 1987. Así, pudo presidir
el consistorio por segunda vez Francesc Trobat En cierta manera, también puede considerarse
Garcias, que fue el único alcalde elegido en una afín a la izquierda nacionalista la candidatura de
candidatura de este partido en esa legislatura. los Independents de Puigpunyent i Galilea, que
obtuvo 7 concejales y la alcaldía para su candida-
Pero hubo otro militante del PSM que ocupó una to Antoni Colom Ferrà, si bien en los comicios au-
alcaldía. Se trata del ya citado Jaume Morey Su- tonómicos muchos de sus votantes optaron por
reda, que encabezó nuevamente la candidatura el PSOE o incluso por opciones conservadoras ya
de los Independents d’Artà y consiguió el 39% de que el PSM sólo consiguió un modesto 5,4% de
los sufragios y 5 concejales, el mismo número los sufragios.
que en 1979. Así, pudo pactar de nuevo con el
PSOE (3 ediles) y seguir gobernando el consisto- Otro caso complejo es el del Grup Independent
rio de Artà. de Valldemossa, que inicialmente era próximo al
PSM. Con el 41,8% de los votos y 4 concejales,
En algunos casos, las alianzas para formar los fue la candidatura más votada en su municipio,
consistorios fueron muy discutidas. En el mu- de manera que obtuvo la alcaldía para su candi-
nicipio de Bunyola, en la Sierra de Tramuntana, dato Joan Lladó Calafat. Pero en 1985 se afilió a
el único edil del PSM, Bartomeu Quetglas Pons, la citada UM y aunque la candidatura indepen-
tuvo un papel destacado y polémico al participar diente perduró, se alejó de la izquierda naciona-
en una amplia alianza con los dos concejales de lista57. De todas maneras, los resultados del PSM
los Independents de Palmanyola (una urbaniza- en las elecciones autonómicas fueron limitados,
ción en el término municipal de Bunyola) y nada un 9,4% de los votos, si bien suponían cierta me-
menos que otros dos de AP-PDP-UL, para hacer joría en relación a los comicios preautonómicos
alcalde al único edil del nuevo partido regionalis- de 1979.
ta centrista Unió Mallorquina –UM–. Era la única
manera posible de desbancar al más votado, Jau- También consiguió la alcaldía la Candidatura
me Conti Borràs, que era el líder de la Candida- Progressista de Selva, que logró el 23,8% de los
tura Independent de Bunyola y había conseguido votos y 3 ediles. Mediante un pacto con el PSOE
cinco ediles. Esta lista era difícil de definir ideo- y UM, su cabeza de lista, Llorenç Coll Solivellas
lógicamente y, de hecho, la Agrupación local del detentó la alcaldía entre 1985 y 1987.
PSM justificó su voto en función de su supuesto
Los resultados de la Candidatura Democràtica In-
carácter autoritario y personalista55.
dependent de Felanitx fueron más modestos, el
Otra situación polémica se produjo en Algaida, 10,2% de los sufragios y un edil que quedó en la
puesto que no se respetó el pacto entre PSM (3 oposición. La Candidatura Independent de Petra
ediles), PSOE (2) y los Independents de Pina (1), consiguió el 14,6% de los votos y dos conceja-
que debía llevar a la alcaldía al candidato de los les, que también estuvieron en la oposición. Por
nacionalistas de izquierdas, Gabriel Oliver Oliver. su parte la Esquerra Unida de Santa Maria del
A la hora de la verdad un edil del PSOE votó al Camí, que no tenía nada que ver con Izquierda
candidato de AP-PDP-UL, que obtuvo así la alcal- Unida, que todavía no existía, obtuvo el 11,9%
día, y el otro se votó a sí mismo56. de los votos y un concejal que pasó a la oposi-
ción. Los Independents de Son Servera recibie-
En cuanto a las listas de las candidaturas inde- ron el 16,1% de los sufragios y dos ediles, que
pendientes, la de los Sineuers Independents se también quedaron en la oposición a causa de la
ubicaba claramente en la izquierda nacionalista mayoría absoluta de la candidatura AP-PDP-UL.
y su candidato, Jaume Ferriol Niell, con el 59,2% En cambio, la Candidatura Independent Lloritana
de los votos y 7 concejales, reeditó la mayoría ab- consiguió tres ediles que apoyaron un candidato
soluta conseguida en 1979. Resulta significativo de AP a la alcaldía.
que, en los comicios autonómicos celebrados si-
En conjunto, estas candidaturas independientes
55
Mateu Verdera, Jaume, “Todos contra Conti, la frase obtuvieron cinco alcaldías y nada menos que 38
que revoltà mig Bunyola”, Diario de Mallorca, 24 de concejales, aunque no todos eran personas ideo-
novembre de 2019, pp.46-47.
56
“Eleccions municipals”, Es Saig, 30, junio de 1983, 57
p. 3. (dir.), Diccionari de partits..., op. cit., p.124.

lógicamente claramente ubicadas en la izquierda 5. LA GESTION MUNICIPAL DE LOS NACIONA-

nacionalista. LISTAS DE IZQUIERDAS
En cuanto a los comicios autonómicos celebra- Como hemos visto, en el período 1979-1987,
dos ese mismo 8 de mayo de 1983, en la circuns- una decena de municipios tuvieron un alcalde
cripción de Mallorca, la única candidatura del de izquierda nacionalista o independiente más o
nacionalismo de izquierdas fue la del PSM, que menos próximo a esta ideología. Además, cier-
en esta ocasión no estableció ninguna alianza to número de ediles formaron parte de equipos
con el sindicato UPM, y además, tuvo que com- de gobierno con un alcalde de otro partido, fre-
petir, por el espacio mallorquinista centrista, con cuentemente del PSOE, como fue el caso de Pal-
UM. Tampoco puede obviarse el auge del PSOE a ma entre 1979 y 1983.
raíz de su gran éxito en los comicios generales de
octubre de 1982. Pese a todo, el PSM consiguió La situación con la que se encontraron los nue-
dos diputados en el nuevo Parlament de les Illes vos gestores municipales fue casi desastrosa. En
Balears, el ya citado Sebastià Serra Busquets y general, los años 70 fueron una época de crisis a
Damià Pons Pons (Campanet, 1949), con el 6,5% causa de la ausencia de servicios e infraestructu-
de los votos de Mallorca. El retroceso respecto ras, la poca o nula legitimidad de los consistorios
a las elecciones preautonómicas de 1979 era hasta las elecciones de 1979 y la falta de ingre-
evidente, pero la representación fue la misma y sos58.
continuaba existiendo un espacio político para la
Dos ejemplos pueden ilustrar la acción de los
izquierda nacionalista. Resulta interesante cons-
nacionalistas de izquierdas desde el poder mu-
tatar que los resultados fueron, en las autonó-
nicipal: los ayuntamientos de Montuïri (2.191
micas, con alguna excepción, más o menos po-
habitantes en 1980), en el centro de Mallorca, y
sitivos en los municipios en los que se presentó
de Artà (5.620 habitantes en 1980), en el Llevant
candidatura del PSM o de las citadas candidatu-
de la isla, con una amplia zona costera. En ambos
ras independientes progresistas y nacionalistas.
consistorios se gobernó con el PSOE.
Así, por poner sólo algunos ejemplos, en Campa-
En el caso de Montuïri, el alcalde del PSM, Fran-
net obtuvo el 37% de los votos; en Llubí el 29,5%;
cesc Trobat Garcias, que ocupó este cargo entre
en la ciudad de Manacor, el 8,8%; en Petra el,
1979 y 1983, así como entre 1985 y 1987, ma-
10,6%; en Sant Llorenç des Cardassar el 13,4%;
nifestó inicialmente su voluntad de mejorar in-
en Selva el 10%; en Lloret de Vistalegre el 12,6%
fraestructuras, como el alcantarillado, iniciar la
y en Vilafranca de Bonany el 24,7%. En cambio,
ordenación del tránsito rodado y cambiar los
en los municipios sin lista del PSM y sin candida-
nombres de algunas de las calles. Además, se
turas independientes más o menos progresistas
propuso, según sus propias palabras, realizar “la
y nacionalistas, los resultados de las autonómi-
neteja de tots els vestigis de la guerra civil de la
cas fueron puramente testimoniales. Este fue el
façana de l’església”59.
caso de muchos municipios pequeños, la mayo-
ría de menos de 1.000 habitantes, como Búger Con el tiempo, impulsó la construcción de un
(3,8%); Deià (1,5%); Estellencs (2%); Fornalutx consultorio médico y de una pista polideportiva,
(0,70%); Mancor de la Vall (1,7%); Maria de la Sa- así como la adquisición de un campo de futbol y
lut (2%); Sencelles (2,9%), y Ariany (1,7%). Hubo de un antiguo convento de monjas. La preocu-
alguna excepción, como el atípico municipio de pación por la cultura y el fomento de la lengua
montaña de Escorca, con el 9,5% de los sufragios catalana fue una constante para los alcaldes y
para este partido. concejales de la izquierda nacionalista. En este
caso se creó un Patronato Municipal de Cultura y
Los resultados, por diversas razones, también
fueron muy malos para el PSM en Alaró (2%), un
feudo del PSOE; Calvià (3,5%) un municipio con
una inmigración peninsular abrumadora; Cam-
pos (2,2%), un término municipal que se con-
sideraba perjudicado por la política ecologista
58
Marina Carranza, Marcos, “El pulso de los ayunta-
proteccionista del PSM; Esporles (2,2%), que era mientos: La convocatoria de las elecciones de 1979 y
el cambio político en España”, Cuadernos de Historia
otro feudo del PSOE; la pequeña ciudad de Lluc-
Contemporánea, 38 (2016), pp. 235-256.
major (2,7%); o el municipio, en parte rural y en 59
Capellà, Margalida, “Els batles del PSM:Francesc
parte turístico, de Santa Margalida (1,8%). Trobat”..., op. cit. p. 5.

se aprobó un Reglamento de Normalización Lin- en el Congreso por Baleares fue monopolizada

güística de la lengua catalana60. por los grandes partidos estatales, UCD, PSOE y
AP-PDP. En el Senado por Mallorca y por Ibiza y
En el caso de Artà, su alcalde, Jaume Morey Su- Formentera sucedió lo mismo. En el senado por
reda, consideraba imprescindible mejorar las ca- Menorca hubo una única excepción con la Can-
rreteras y caminos, la sanidad y la educación. En didatura Progressista Menorquina, que tuvo el
este último ámbito, Artà carecía de centro esta- apoyo de toda la izquierda de la isla, incluido el
tal de Educación General Básica –EGB–. Esta en- Partit Socialista de Menorca y diversos sindica-
señanza primaria se impartía solamente en dos tos. Su candidato, Tirs Pons Pons, fue elegido se-
centros religiosos en los que, según el mismo nador y, si bien procedía del Moviment Socialista
Morey “ens consta que s’ha dit als alumnes que de Menorca, por aquel entonces ya era militante
no ens votassin per marxistes i comunistes”61. del PSOE, aunque se incorporó al Grupo Mixto
del Senado.
A diferencia de Montuïri, en Artà existía un co-
lectivo de cierta importancia formado por emi- Sin embargo, en las elecciones municipales y
grantes peninsulares todavía poco integrados también en las preautonómicas del 1979, el na-
en la vida comunitaria. Para el primer alcalde cionalismo de izquierdas consiguió ocupar un
democrático de este municipio, “són artanencs espacio político, que sin ser mayoritario, no era
tots aquells que viuen, fan feina i moren aquí”62. en absoluto despreciable. El PSM obtuvo repre-
sentación en los organismos preautonómicos y
Entre 1979 y 1987, desde la administración mu-
en algunos ayuntamientos, entre los que cabe
nicipal de Artà se impulsó el cambio de nombre
destacar Palma. Cuantitativamente fue más
de algunas calles, la normalización lingüística de
importante la proliferación de candidaturas in-
la lengua catalana, así como la modernización de
dependientes, más o menos escoradas hacia la
la administración con la depuración de los pa-
izquierda nacionalista. Estas listas consiguieron,
drones de impuestos, la revisión de ordenanzas
entre otras, las alcaldías de las capitales de dos
y la implantación de un servicio municipal de re-
partidos judiciales, Inca y Manacor. Estos relati-
cogida de basura. En el ámbito educativo, se pro-
vamente buenos resultados, convirtieron al PSM
pugnó la creación de una escuela de EGB pública
en la tercera fuerza política. Así, pudo desarro-
y un instituto de enseñanza secundaria así como
llar, en algunos municipios, una política progre-
un Patronato de Música. Además, se cedió un lo-
sista que se caracterizaba por la dotación de ser-
cal para la tercera edad y se rehabilitó la Casa
vicios, la recuperación de la lengua catalana, la
de Cultura. Otro eje ideológico de la candidatura
protección del medio ambiente y el fomento de
Independents d’Artà era preservar la costa del
la participación ciudadana, entre otros aspectos.
turismo de masas. En 1979, todavía no se ha-
bía desarrollado ningún gran complejo turístico, Cuatro años más tarde, pese a la crisis interna
pero había muchos proyectos para urbanizar la padecida por el PSM, el ascenso del PSOE y la
costa que fueron paralizados o dificultados por aparición de una fuerza regionalista de centro,
el nuevo consistorio63. UM, continuó existiendo un espacio político
para la izquierda nacionalista en las nuevas ins-
CONCLUSIONES
tituciones autonómicas y en numerosos ayunta-
La utopía del nacionalismo mallorquín de iz- mientos. En algunos municipios, no muchos, la
quierdas se estrelló contra la realidad de las ur- izquierda nacionalista pudo prolongar su admi-
nas en las elecciones generales de 1977, 1979 y nistración durante más de una legislatura.
1982. Tampoco consiguieron representación por
En los municipios más importantes, el PSM com-
las islas Baleares la extrema izquierda, la extre-
pitió electoralmente, con más o menos fortuna,
ma derecha, el nacionalismo centrista, el PCE-
con el PSOE e incluso con el PCE-PCIB. Pero en
PCIB o la democracia cristiana. La representación
algunos municipios medianos, fue relativamente
frecuente que la izquierda se aglutinase mayori-
60
Marimon Riutort, Antoni, “Trobat Garcias, Fran- tariamente en torno a una única fuerza, ya fuese
cesc”, en Gran Enciclopèdia de Mallorca, Palma, Pro- el PSOE, el PSM o una candidatura independien-
momallorca, 1997, volumen 17, p. 326. te progresista. En cambio, el PCIB-PCE tuvo una
61
Capellà, Margalida, “Els batles del PSM. Jaume Mo-
implantación municipal más reducida aunque
rey”..., op. cit. p. 6.
62
Ibid., p.7.
obtuvo un buen resultado en Palma en 1979.
63
I 40, Artà, Independents d’Artà, 2019, pp. 7, 18. Por otra parte, los municipios más pequeños, de

menos de 1.000 habitantes, se convirtieron en por la hegemonía absoluta de la derecha, o me-

feudos de la derecha o del centro regionalista. La nos frecuentemente del PSOE.
izquierda nacionalista tuvo muchas dificultades
en los municipios costeros con más inmigración, La izquierda nacionalista mallorquina siempre
sobretodo en Calvià. estuvo abierta a contactos con fuerzas homólo-
gas de las otras islas del archipiélago balear, prin-
Es importante destacar que la pauta establecida cipalmente de Menorca, y de los otros territorios
en esas primeras elecciones, es decir, incapaci- de los países de habla catalana, que consideró
dad de la izquierda nacionalista para conseguir como un ámbito identitario de referencia, los
representación en las elecciones generales, pero Països Catalans. Asimismo, también se estable-
capacidad para obtener una representación más cieron relaciones con fuerzas ideológicamente
o menos importante, pero significativa, en los próximas de otras regiones y nacionalidades del
comicios locales y autonómicos, ha perdurado Estado Español. Por cierto que son especialmen-
durante cuarenta años. Ni siquiera la participa- te interesantes, en ciertos aspectos, los paralelis-
ción en los gobiernos autonómicos, en cuatro mos con los casos de Galicia y Andalucía.
ocasiones, o la celebración de elecciones gene-
rales poco después de unos comicios autonómi-
cos y locales han conseguido romper la norma.
Sin embargo, en el ámbito estrictamente local,

sólo entre 1979 y 1983, la izquierda nacionalista
estuvo presente, con mayor o menor fuerza, en
decenas de municipios, grandes y medianos, de
todas las comarcas de Mallorca. Su presencia en-
riqueció el debate político y amplió la pluralidad
de opciones ideológicas.
En cuanto a los candidatos de la izquierda na-

cionalista, predominaron los hombres jóvenes,
de origen mallorquín, de las clases medias y con
buena formación cultural. Pero también encon-
tramos en las listas del nacionalismo progresista
a personas de más edad y de oficios muy diver-
sos. En 1979 fue muy importante la presencia de
campesinos. Además, en Palma y en los munici-
pios cercanos a la capital, en las listas del PSM
hubo cierto número de personas de origen pe-
ninsular, aunque no tantos como en el PSOE y
el PCE-PCIB. Por lo que se refiere a la presencia
de la mujer, se incrementó entre 1979 y 1983, si
bien no hubo ninguna alcaldesa ni diputada au-
tonómica.
La implantación y los resultados de la izquierda

nacionalista no pueden entenderse sin el factor
humano. Fue fundamental la existencia de gru-
pos de activistas, muchos de ellos con estudios
universitarios, preocupados por la historia, la
lengua y el medio ambiente, a veces con el apo-
yo de algunos eclesiásticos y grupos vinculados a
asociaciones de vecinos o a entidades culturales.
En cambio los nacionalistas de izquierdas no pu-
dieron desarrollarse en aquellos municipios que,
por su pequeño tamaño o por el peso abruma-
dor de la inmigración, así como, en otros casos,

INDEFINICIÓN, FALTA DE TEORIZACIÓN Y CONFUSIÓN. LA

IZQUIERDA REVOLUCIONARIA ANTE LOS PAÏSOS CATALANS
(1962-1982)
INDEFINITENESS, LACK OF THEORIZING AND CONFUSION.

REVOLUTIONARY LEFT IN THE FACE OF PAÏSOS CATALANS
(1962-1982)
Antoni Rico i Garcia*

*
Institut de Recerca Història Universitat de Girona, España. E-mail: [email protected]
Recibido: 12 mayo 2020 / Revisado: 3 julio 2020 / Aceptado: 10 octubre año / Publicado: 15 octubre 2020
Resumen: La idea nacional de los llamados Paï- behind the political events as well as the intellec-
sos Catalans tomó fuerza durante los años del tual debates which nationalism and the majority
tardofranquismo y la transición. Su principal teó- of the leftist movement carried out. Both, the
rico, el escritor valenciano Joan Fuster, se con- lack of theorizing and vagueness became the ge-
virtió en un tótem del antifranquismo. Todas las neral rule.
culturas políticas de Cataluña, el País Valencia-
no o las Baleares debatieron sobre la propuesta Keywords: Joan Fuster, nationalism, Catalan
nacional fusteriana. La izquierda revolucionaria Countries, Spanish transition, revolutionary left
A
no fue menos. Toda la amalgama de siglas y or-
ño 1962, en el marco de la dictadura fran-
ganizaciones que formaron parte de esta cultura
quista, el escritor valenciano Joan Fuster
política, se vieron abocadas a debatir sobre el
lanzaba la propuesta nacional de los lla-
tema. Pero el debate fue a remolque tanto de los
mados Països Catalans1. La idea no era nueva ya
acontecimientos políticos como de los debates
que la podemos localizar tanto en los años de la II
intelectuales que el nacionalismo y la izquierda
República como en los anteriores2. Ahora bien, la
mayoritaria llevaron a cabo. La falta de teoriza-
influencia y centralidad que tuvo, sí lo fue. Nunca
ción y la indefinición se convirtieron en la regla
antes, una idea de nación catalana que superase
general.
el marco de las cuatro provincias del viejo Prin-
Palabras clave: Joan Fuster, nacionalismo, Països cipado, había provocado tanto debate. Todas las
Catalans, Transición, izquierda revolucionaria culturas políticas, desde el catalanismo histórico
de matriz burguesa a la izquierda federal espa-
Abstract: The national idea of the so-called Ca- ñola, se vieron obligadas a afrontar la discusión y
talan Countries took off during late francoism reflexión “fusteriana”. La propuesta nacional de
and the transition. Its main theorist, the Valen- Fuster provocó, incluso, la aparición de nuevas
cian writer Joan Fuster, turned into a totem of culturas políticas como el neovalencianismo. En
the anti-Franco struggle. All the political cultures definitiva, el “fusterianismo” removió los márge-
in Catalonia, the Valencian Country and the Ba- nes nacionales y nacionalistas en que se movían
learic Islands debated on Fuster’s national pro-
posal. The revolutionary left did not stay out of 1
Quiero agradecer a Vicent Àlvarez los comentarios
the discussion. The whole amalgam of acronyms y sugerencias que me ha hecho durante la redacción
and organizations that were part of this political del presente artículo.
culture , were bound to debate on the topic . 2
Gonzàlez Vilalta, Arnau, La nació imaginada. Els fo-
Nevertheless, the discussion was always lagging naments dels Països Catalans (1931-1939), Catarroja,
Afers, 2006.

Indefinición, falta de teorización y confusión Antoni Rico i Garcia
las diferentes culturas y partidos. Fuster interpe- quien escribe las presentes líneas sobre la transi-
ló a todo el antifranquismo, tuviese la ideología ción y el llamado pacto constitucional del 78, re-
que tuviese. De hecho, podríamos decir que el producir ideas como el “atado y bien atado” para
éxito de Fuster radicó en el hecho de que su pro- explicar un proceso tan complejo como impro-
puesta nacional, moderna y con ciertos tintes visado, aporta poco académicamente hablando.
marxistas, enlazaba perfectamente con parte del Contrariamente, creo que es más efectivo anali-
relato del antifranquismo3. Pero ¿era la propues- zar en su contexto cada movimiento, documento
ta de los Països Catalans de izquierdas? Rotun- o votación. Esto es lo que he intentado hacer en
damente no. Tampoco lo era de derechas. Como mi tesis doctoral a la hora de estudiar tanto la
veremos, las ideas fundamentales que el escritor influencia de Fuster como los relatos nacionales
de Sueca lanzó podían encajar perfectamente en que se desarrollaron entre 1960 y 1992. E insisto,
una amplia amalgama de culturas políticas. Eso, más allá de mi opinión política respecto determi-
de hecho, fue así al principio. Cuando llegó la nados movimientos y cambios políticos.
transición, como tantas otras cosas, la influencia
fusteriana menguó. El contexto político de los diferentes territorios
de lengua catalana es fundamental para enten-
El impacto de Fuster no fue ni lineal ni simétrico. der los debates sobre la cuestión nacional que se
Siempre estuvo circunscrito a la realidad de cada dieron. Determinar los márgenes epistemológi-
territorio y cultura política. Así, Cataluña, con su cos a partir de los cuales analizaremos una pro-
dinámica propia, asumió el debate y proyecto puesta nacional como la fusteriana también. Así,
de Fuster en unos términos. El País Valenciano una primera advertencia: a pesar de que el es-
y las Islas Baleares lo hicieron de otra manera. critor valenciano Joan Fuster construyó un pro-
Cierto es que entre 1962 y el final de la dicta- yecto nacional para todos los territorios, la cen-
dura, la reciprocidad existente entre los diferen- tralidad de dicha propuesta varió dependiendo
tes territorios y las culturas políticas que tenían de la realidad de cada país. Cataluña tenía una
representación, fue más constante y dinámica idiosincrasia propia diferente de la valenciana o
que durante la transición o los primeros años del la balear4. El hecho no es menor. En cuanto al re-
nuevo estado autonómico. Ahora bien, muchas lato nacional, por ejemplo, en Cataluña no hubo
veces se ha magnificado dicha dinámica olvidan- una ruptura generacional. El catalanismo políti-
do que, en el fondo, se trataba de una recipro- co, representado por las nuevas generaciones de
cidad circunscrita a pequeños núcleos políticos, universitarios de los sesenta y setenta, mantuvo
antifranquistas o del ámbito de las letras y de la lazos y conexiones con el de pre y postguerra.
cultura. En este sentido, es lógico que antes de El caso valenciano fue radicalmente diferen-
las primeras elecciones postfranquistas, los parte. Dejando a un lado que el valencianismo de
tidarios del proyecto fusteriano pensasen que su preguerra fue un movimiento minoritario e inci-
propuesta era mucho más sólida y asumida por piente que se vio interrumpido por el golpe de
parte de la población de como en realidad lo era. estado del 36 y la victoria del bando franquista,
En este sentido, la frustración que el resultado lo cierto es que con la propuesta fusteriana nacía
de la transición dejó entre los sectores políticos una nueva forma de entender la valencianidad y,
rupturistas, vinculados mayoritariamente a la como consecuencia, el valencianismo como mo-
izquierda revolucionaria, partidos nacionalistas vimiento político5. ¿En qué consistía esta nueva
e independentistas, ha construido un relato de visión de la valencianidad? De forma global es lo
traiciones y traicionados, donde las renuncias y
otras ideas fuerza, se han convertido en centra- 4
Esa idiosincrasia propia es la que ha llevado a al-
les, no acabando de ayudar a entender de forma gunos autores a hablar de una especie de “ruptura
completa el porqué del abandono de proyectos catalana”. Mayayo, Andreu, La ruptura catalana. Les
como el de la república o la idea de los Països Ca- eleccions del 15-J del 1977, Catarroja-Barcelona-Pal-
talans. Más allá de la opinión política que tenga ma, Afers, 2002.
5
Sobre el pensamiento de Joan Fuster son fundamen-
tales los trabajos de Ferran Archilés. Una síntesis de
3
Para una aproximación general al discurso sobre los su trabajo al respecto en Archilés, Ferran, Una singu-
Països Catalans en el período de la transición ver Rico, laritat amarga. Joan Fuster i el relat de la identitat
Antoni, “Quan dir Països Catalans volia dir Espanya. valenciana, Catarroja, Afers, 2002. Por otra parte, una
Els Països Catalans en la narrativa política de la Tran- perspectiva de los estudios sobre el valencianismo
sició (1975-1978)”, en Archilés, Ferran (ed.), Inventar político en Rico, Antoni, “Del no-res a una primavera
la nació. Cultura i discursos nacionals a l’Espanya con- bibliogràfica. El valencianisme polític pensat històri-
temporània, Afers, Catarroja-Barcelona, 2017. cament”, Índice Histórico Español, 129 (2016).

Antoni Rico i Garcia Indefinición, falta de teorización y confusión
que llamo fusterianismo o propuesta nacional de elementos, tanto de fondo como de forma,
fusteriana. que simbolizaba Fuster. Por una parte, su com-
promiso como intelectual antifranquista. A pesar
Como ya he explicado en otros trabajos, definir de que sus orígenes familiares eran de carácter
el concepto de fusterianismo supone crear unos conservador y próximos al régimen, su trayecto-
marcos simbólicos y narrativos que, seguramen- ria política a partir de la década de los cincuen-
te, no gustarían en absoluto al propio Joan Fus- ta, especialmente por sus contactos con el exi-
ter. Para empezar, creo necesario romper con lio republicano catalán8, lo fueron convirtiendo
algunos mitos. Fusterianismo, si atendemos a en un referente antidictadura9. Para el caso del
lo dicho y escrito por el escritor de Sueca, no País Valenciano, Fuster fue una especie de inte-
puede ser sinónimo de izquierda o independen- lectual generacional. Representó para toda una
tismo. Si esto fuese así, la influencia de Fuster nueva ola de militantes políticos lo mismo que
hubiera quedado circunscrita a los partidos re- en aquellos años Sartre para la juventud fran-
presentantes de estas culturas políticas. Y no fue cesa, por poner un ejemplo sugeridor10. Pero
así. La propuesta nacional lanzada por Fuster fue más allá de la referencialidad como intelectual,
mucho más amplia y tenía una clara intención parte del contenido de sus escritos enlazaba de
de transversalidad. La propuesta era de país, de pleno con determinados postulados marxistas e
nación, pero no de partido o movimiento. Cosa izquierdistas. Ahora bien, en líneas generales, no
diferente es el hecho que, con el paso del tiempo fue la base marxista la que mayor peso tuvo en
y los cambios sucesivos de contexto, fueran de- el relato nacional fusteriano precisamente11. En
terminados partidos y organizaciones las que se primer lugar, en la narración de Nosaltres, els va-
identificasen con ella. lencians, la burguesía era la culpable del proceso
de desnacionalización sufrido por parte del pue-
Llegados a este punto, cuando hablamos de la
blo valenciano. I si la burguesía era la culpable,
propuesta nacional fusteriana nos referimos a
las clases populares eran el sujeto político con
los siguientes elementos:
capacidad de subvertir esta realidad. Además,
1. Consideración del País Valenciano como debemos tener en cuenta la pasión que Fuster
un sujeto nacional diferente de la nación mostró por un intelectual como Gramsci que, si
con la que mayormente se identifican los alguna cosa estaba a finales de los sesenta, era
valencianos: la española.
nizaciones de este sector, el partido independentista
2. Creencia en la necesaria modernización se identificaría ideológicamente con este sector. No
de las estructuras del País Valenciano, en to- lo hacemos por dos motivos. El primero, porqué tam-
dos los niveles, puesto que el relato históri- bién podemos incluirlo en el ámbito del nacionalismo
co nos muestra una sociedad atrasada y estrictamente. Y el segundo, porqué en el presente
poco europea. dossier ya hay un artículo que trata la evolución de
este partido.
3. Afirmación de que más allá de su territo- 8
Sobre los contactos de Fuster la editorial 3i4 ha pu-
rio, el País Valenciano forma parte por len- blicado diversos volúmenes epistolares.
gua e historia de la cultura catalana.
9
Para una aproximación biográfica ver Furió, Antoni,
“Perfil biogràfic de Joan Fuster”, en Obres Completes:
4. Compromiso con los Països Catalans, volum I, Barcelona, Edicions 62, 2002, pp. 15- 59.
ya sean entendidos como un sujeto estric- 10
Son diversos los autores que han hecho la misma
tamente cultural y lingüístico o bien como comparación. Ver Muñoz, Jacobo, “Joan Fuster, entre
posible sujeto político nacional6. el compromiso y el distanciamiento”, Quaderns de
filosofia i ciència, 34 (2004), p. 62 o Penalba, Neus,
Con estos elementos sobre la mesa debemos “Joan Fuster: entre Sartre i Camus, Erasme”, en Mar-
hacernos una pregunta: ¿qué atrajo del fusteria- tí Monterde, Antoni y Padró Nieto, Bernat (eds.), Qui
nismo a la izquierda en general y la revoluciona- acusa. Figures de l’intel·lectual europeu, Barcelo-
na, Publicacions i Edicions Universitat de Barcelona,
ria en particular?7 Fundamentalmente una serie
2015.
11
Sobre el tema ver Archilés, Ferran, “’De gent que
6
Rico, Antoni, “De cara a la política. La influència de anomenen classes subalternes’. La influència de
Joan Fuster en les cultures polítiques dels Països Ca- Gramsci en Joan Fuster”, Revista L’Espill, 38 (2011) y
talans”, Concret, economomia i pensament, 1 (2019). Archilés, Ferran, “L’altre descrèdit de la realitat. Na-
7
En el sector de la izquierda revolucionaria podría- ció i narració històrica a Nosaltres, els valencians”, en
mos incluir también al PSAN. Tanto por discurso polí- Carbó, Ferran y Pérez Moragón, Francesc (eds.), Sobre
tico como por contactos y reciprocidad con las orga- Nosaltres, els valencians, València, PUV, 2013.

de moda entre la izquierda europea12. Si a estos Víctor Alba, a diferencia de las primeras interpre-
elementos añadimos el hecho de que la derecha taciones que harían los comunistas del PSUC, se
franquista atacó Fuster, llegando en algún mo- mostraba entusiasmado con las propuestas fus-
mento a convertirlo en una especie de enemigo terianas. Teniendo en cuenta el antiestalinismo
de la valencianidad oficial, podemos entender de Alba y su antipesuquerismo, no sería de ex-
porque la izquierda lo convirtió en un intelectual trañar que el histórico militante del POUM estu-
de referencia, más allá de compartir o no mu- viese enterado de las críticas que la vieja guardia
chos de sus posicionamientos políticos. del PSUC, encabezados por Pere Ardiaca, había
vertido sobre la obra de Fuster en el momento
1. FUSTER Y VÍCTOR ALBA: UNA CORTA RELA- de su publicación14. La referencialidad intelec-
CIÓN EPISTOLAR, A PESAR DE CAMUS tual que empezaba a tener Fuster, llevó a Alba a
proponerle diferentes artículos para Panoramas.
Una de las primeras personas relacionadas con
Las diferencias entre uno y otro no tardaron en
la izquierda revolucionaria y concretamente con
surgir. Fuster propuso a Alba escribir un artícu-
el comunismo de matriz trotskista, con las que
lo donde desarrollaría la idea del nacionalismo
Fuster mantuvo una cierta relación, fue Pere
español como arma ideológica de la derecha.
Pagès i Elias, más conocido como Víctor Alba.
Alba consideró que el tema podía conllevar una
Después de la guerra civil, Alba fue encarcelado
serie de problemas en la distribución de la revis-
y posteriormente exiliado en Francia y México,
ta en España. En este sentido, propuso a Fuster
respectivamente. Durante su estancia en Francia
un cambio de orientación en el artículo en una
entró en contacto y colaboró con Albert Camus
carta fechada el 13 de julio de 1964. Alba pro-
en Combat. De la relación entre Camus y Alba
ponía escribir sobre como en “América Latina el
surgió la traducción al francés del clásico de Joan
nacionalismo ahora es a la vez un instrumento
Maragall Cant espiritual i Soleiada13. Años más
de la oligarquía terrateniente, y de esa otra dere-
tarde sería Joan Fuster quien traduciría Camus
cha que son los comunistas y castristas, creo que
al catalán. Concretamente su libro La peste, el
sería interesante un artículo tuyo hablando del
1966. Pero más allá de la relación directa o indi-
nacionalismo, arma ideológica de la derecha”15.
recta entre Alba, Camus y Fuster, lo que nos inte-
De esta manera intentaba llevar a Fuster a sus
resa en nuestro trabajo es el contacto con cierto
posiciones políticas más críticas con el comunis-
contenido político. Así, mientras estuvo exiliado
mo mayoritario. Fuster no era un admirador, pre-
en México, mantuvo una pequeña relación epis-
cisamente del PCE y el PSUC. Pero una cosa era
tolar con Fuster iniciada a principios de los se-
no ser comunista y otra diferente comulgar con
senta. Alba pidió al valenciano su colaboración
las críticas trostkistas de Alba.
en la revista Panoramas que se publicaba des-
de el exilio. Además de las colaboraciones, Alba El contacto epistolar acabó al poco tiempo de
también mostró sus impresiones ante los textos forma bastante brusca. Fuster cortó su relación
de Fuster con reflexiones como la siguiente: con una carta cargada de exabruptos en la que,
claramente, se distanciaba, si es que nunca es-
“Acabo de recibir y de leer de un par de tira-
tuvo mínimamente cerca, tanto de la persona
das ‘Nosotros, los valencianos’. Ya era hora,
de Alba como de aquellos sectores políticos que
rediós. Ya era hora que saliera en Cataluña
éste pudiese representar.
un escritor político con la dosis suficiente
de escepticismo [...] para decir las cosas sin
preocuparse de electores, de lectores […].
Cataluña, que no ha tenido nunca políticos
de talla y ni siquiera teorizantes o escritores
políticos, los necesita más que el pan que
come. No hay que decir cómo me he alegra- 14
El texto a que nos referimos fue el publicado en Ho-
do de descubrir que ya tenemos uno”. ritzons número 3 el 1961 con el título de “¿Per què
HORITZONS redueix la seva visió de Catalunya al terri-
tori de les ‘cuatro provincias’?”. Aunque no iba firma-
12
Sobre la influencia gramsciana en la obra de Fuster do, son diversos los trabajos que otorgan la autoría a
ver Rico, Antoni (ed.), El pensament i l’acció. De Marx Pere Ardiaca. Ver Colomer, Josep Maria, Espanyolis-
a Gramsci en Joan Fuster, Lleida, Edicions El Jonc, me i catalanisme. La idea de nació en el pensament
2017. polític català (1939-1979), Barcelona, L’Avenç, 1984.
13
Lluís, Joan-Lluís, “Què en sabia Albert Camus del ca- 15
Carta consultada en el Fondo Joan Fuster de la Bi-
talà?”, El Punt-Avui, 28 de abril de 2013. blioteca de Catalunya.

2. FUSTER EN CUADERNOS DE RUEDO IBÉRI- española. Francesc Vicens situaba en el periodo

CO 1960-1964 un interés por parte de determinados
intelectuales catalanes por un género que, hasta
El verano de 1965, un grupo de exiliados espa- el momento, no había sido precisamente central:
ñoles en París vinculados a diferentes organiza- el ensayo. Y en este sentido destacaba la publi-
ciones, sindicatos o partidos de la izquierda re- cación en 1962 de Nosaltres, els valencians que
volucionaria, decidían crear la revista Cuadernos comenzaba una nueva manera de pensar la va-
de Ruedo Ibérico16. Entre 1965 y 1979, con un lencianidad en clave de futuro17. Cuando Vicens
total de 66 números, esta publicación se convir- hablaba de ese interés del catalanismo por el en-
tió para el ámbito del antifranquismo interior y sayo lo hacía conscientemente. En este sentido,
exterior en fundamental. No fue la única, claro la editorial Edicions 62, nacida ese mismo año
está. De hecho, las revistas y editoriales fueron lanzando el clásico de Fuster como primer libro,
un altavoz para la oposición al régimen. Es im- fue central. A parte del libro de Fuster, Edicions
portante ser conscientes de las limitaciones de 62 también publicó Els altres catalans de Paco
este tipo de publicaciones: tenían un público mi- Candel, donde se abordaba la catalanidad que
noritario y muy militante. Pero más allá de estos nacía con la llegada de la inmigración del resto
hándicaps, lo cierto es que Ruedo Ibérico, Cua- del Estado. Vicens formaba parte de la nueva ge-
dernos para el diálogo, Nous Horitzons o Taula neración de militantes e intelectuales del PSUC
de canvi, por citar las más influyentes en el ám- que, a finales de los sesenta y principios de los
bito de la izquierda catalana y valenciana, fueron setenta, renovó las posiciones que los comunis-
una auténtica escuela de militancia y reflexión. Y tas catalanes habían tenido históricamente so-
Joan Fuster tuvo presencia en todas ellas. bre el catalanismo y su idea de nación18.
En Cuadernos de Ruedo Ibérico, la izquierda, en- Para volver a encontrar a Fuster citado en Cua-
tendida de forma amplia, debatió los principales dernos tenemos que remontarnos a 1970. Nos
temas táctico-estratégicos que le interesaban. El encontramos en el momento en que la primera
debate sobre el modelo de estado, las naciones organización del valencianismo político surgido
del Estado español o el propio concepto de na- a la vera de Fuster, ha desaparecido como tal. El
ción que debía defender la izquierda, estuvieron Partit Socialista Valencià, como consecuencia de
presentes en diferentes números. En este sen- las escisiones provocadas por las dos formas de
tido, cuando los textos estuvieron relacionados entender el valencianismo, una más nacionalista
con la realidad catalana o valenciana, Fuster apa- y la otra más izquierdista, desapareció entre 1968
reció como una referencia inevitable. En muchas y 1970 dependiendo de la fuente consultada. En
ocasiones, los artículos estaban firmados por mi- lo que respecta al tema de nuestro trabajo, inte-
litantes claramente identificados con el fusteria- resa resaltar los nombres del sector izquierdista.
nismo. Cabe dejar claro que identificarse con el Entre ellos, Josep Vicent Marqués y Vicent Àlva-
fusterianismo no quería decir comulgar en todo rez son más que importantes. Marqués encabe-
lo expresado por el suecano. Es más, muchos de zó, junto a otros valencianistas identificados con
los textos publicados en Cuadernos sobre la rea- el marxismo y sociólogos de formación, el grupo
lidad valenciana, por ejemplo, los deberíamos Germania Socialista. Vicent Àlvarez militó en or-
encuadrar dentro de una especie de fusterianis-
mo crítico. El 1966, el militante del PSUC Fran- 17
Roig, Joan, “Veinticinco años de movimiento nacio-
cesc Vicens i Giralt, firmando con el pseudóni- nal en Cataluña”, Cuadernos de Ruedo Ibérico, Suple-
mo de Joan Roig, publicaba un artículo sobre la mento (1966), p. 126.
evolución del catalanismo político. Su artículo, el 18
El 1979, en la reedición de los primeros números de
primero de la revista donde encontramos citado Nous Horitzons correspondientes a 1961, la introduc-
a Fuster, “Veinticinco años de movimiento na- ción redactada por cuatro destacados dirigentes del
cional en Cataluña”, formaba parte de un suple- PSUC hacía una autocrítica del dogmatismo mostrado
mento de análisis más amplio sobre la realidad en algunos artículos de carácter ideológico cuando se
cuestionaba algún elemento que los comunistas cata-
lanes ya tenían “resuelto”. En este sentido, Francesc
16
Sobre la evolución de Cuadernos de Ruedo Ibérico Vicens hacía énfasis en el aspecto, precisamente, de
ver VV.AA., La Transición en Cuadernos de Ruedo ibé- los Países Catalanes y afirmaba que “otro aspecto de
rico. Edición crítica de Xavi Díez, BlackList, Barcelona, incomprensión dogmática, este del problema nacio-
2011. También Sarrià, Arantxa, Cuadernos de Ruedo nal, es la “Respuesta de la redacción (publicada al
Ibérico: exilio, oposición y memoria, Documentos de número 3 de Horitzons) sobre el tema de los Países
trabajo, 2002. Catalanes”.

ganizaciones de la izquierda revolucionaria du- que marcarían el discurso de este sector durante
rante los años setenta como la Organización de el resto de la década. Así, Germania Socialista
Izquierda Comunista19. Y fue este último quien,
bajo el pseudónimo de “Juan Ferrer”, volvió a “reconoce la identidad nacional del País Va-
introducir Fuster en las páginas de Cuadernos. lenciano con Cataluña y Baleares, sin darle
Como ya he comentado, estos sectores del va- traducción política pancatalanista. Procla-
lencianismo se identificaron claramente con el ma el derecho de autoderminación del País
marxismo y las diferentes tendencias comunis- Valenciano y considera al proletariado y a la
tas que influyeron en la izquierda mundial, espe- revolución socialista como agente y marco
cialmente a partir del Mayo del 68. Y, aun siendo de la emancipación popular (para la que
seguidores de Fuster, criticaron todo aquello que considera adecuada cualquier fórmula que
consideraron necesario. De hecho, esta primera implique autogobierno, frente al unitarismo
crítica abierta de Àlvarez, expresada en el artícu- y la separación), y entiende necesaria la di-
lo “El País Valenciano como problema. Experien- rección marxista de la lucha […] ni nos cae
cias y perspectivas”, se centró más en los segui- bien el carácter de nación ni somos una re-
dores de Fuster y la interpretación política que gión. Somos un pueblo, es decir, una colec-
habían hecho del pensamiento del suecano, que tividad producto de una peculiar evolución
no en el propio paradigma nacional que repre- histórica, con una estructura de clases dife-
sentaba. Cierto es que dos años después, el mis- renciada de otros pueblos, una lengua, unos
mo Àlvarez criticaría desde las páginas de Gorg trazos culturales y la conciencia mínima de
elementos substanciales de la nación fusteriana no ser un conjunto disperso. La traducción
como la catalanidad esencialista de los valencia- inmediata de eso es que nos es necesario
nos o el historicismo poco marxista que trasmitía poder dirigir nuestros asuntos, realizarnos
en algunos momentos textos como el Nosaltres. como sociedad libre y solidaria y decidir con
Sea como fuere, como ya apuntó Alfons Cucó, los quien queremos integrarnos, hacia el Esta-
textos de Àlvarez buscaban cuestionar la evolu- do Socialista Universal”21.
ción del PSV y algunas de sus debilidades ideo-
Fusterianismo crítico revestido de la retórica de
lógicas desde una lógica izquierdista20. De 1972
la izquierda revolucionaria de los setenta en es-
es también el último articulo publicado en Cua-
tado puro. Y marcaron tendencia porque, a pe-
dernos donde tenía presencia Fuster. Esta vez,
sar de que las diferentes organizaciones de la
los encargados del texto fueron los miembros
izquierda revolucionaria fueron muy a remolque
de Germania Socialista Josep Vicent Marqués y
de los planteamientos nacionales del PCE y el
Damià Mollà. Detrás de los pseudónimos Vicent
PSUC, estos planteamientos de Germania Socia-
Peris y Guillem Sorolla, el texto “El País Valencia-
lista se pueden localizar en determinados discur-
no. Problemas de la revolución socialista” ponía
sos, sobre todo de los años de la transición.
las bases de las que serían las críticas al fuste-
rianismo los años posteriores por parte de este 3. LAS ORGANIZACIONES Y SUS DIRIGENTES
mismo sector militante. Así, después de analizar
el recorrido histórico del País Valenciano y el pa- Entre finales de los sesenta y el período de la
pel de su burguesía, el texto analizaba la posición transición, surgieron una gran cantidad de par-
que en aquellos momentos mantenían sobre la tidos y organizaciones identificadas con lo que
cuestión valenciana organizaciones como el PCE, llamamos la izquierda radical o revolucionaria22.
la Liga Comunista Revolucionaria o Germania Con la mirada en los años cincuenta y la apari-
Socialista. Los “hermanados” criticaban la ambi-
güedad y falta de atención sobre el caso valen- 21
Peris, Vicent y Sorolla, Guillem, “El País Valenciano.
ciano de partidos como el PCE o la Liga Comu-
Problemas de la revolución socialista”, Cuadernos de
nista. Y proponían unas líneas de interpretación Ruedo Ibérico, 2 (1972).
22
Para un análisis completo de esta subcultura políti-
ca ver Fundación Salvador Seguí-Madrid (coord.), Las
19
Para una historia de esta organización ver Sans, otras protagonistas de la Transición. Izquierda radi-
Joel, Militancia, vida y revolución en los años 70: la cal y movilizaciones sociales. Madrid, FSS Ediciones,
experiencia de la Organización de Izquierda Comunis- 2018. Sigue siendo fundamental, a pesar de los nue-
ta (OIC), (Tesis doctoral), Barcelona, Universitat Autò- vos estudios, la tesis doctoral de Consuelo Laiz. Ver
noma de Barcelona, 2017. Laiz, Consuelo, La izquierda radical en España durante
20
Cucó, Alfons, País i Estat. La qüestió valenciana, la transición a la democracia, (Tesis doctoral), Madrid,
València, Tres i Quatre, 1989. Universidad Complutense de Madrid, 1993.

ción del Frente de Liberación Popular, influidos modo no podía ser de otra manera si atende-
por la revuelta estudiantil del mayo del 68, las remos tanto al contexto como a la historia de esta
voluciones protagonizadas por los movimientos subcultura política. ¿Era la cuestión nacional un
de liberación nacional de las antiguas colonias, tema de interés para unos jóvenes universitarios
la revolución cultural china, entre otros aconte- que se declaraban maoístas y trostkistas y se dis-
cimientos, fueron el caldo de cultivo en el que tanciaban del comunismo oficial? Ciertamente
una nueva generación de estudiantes universi- no. Hubo algunas excepciones derivadas de dos
tarios se formaron políticamente. Sin olvidar el factores. Por un lado, el hecho de que algunos
componente generacional. La distancia que par- militantes provinieran del valencianismo de ma-
te de esta juventud quiso mantener respecto del triz fusteriana. Casos como los de Vicent Àlvarez
comunismo oficial que representaban el PCE y o Carles Dolç son, en este sentido, muy claros.
PSUC, es fundamental en la proliferación de tan- Por otro, el origen de organizaciones como el MC
tas siglas. Maoismo, trostkismo e interpretacio- que tenían una clara influencia de movimientos
nes particulares del propio marxismo-leninismo, nacionalistas o independentistas como el vasco.
dieron lugar a una enorme amalgama de siglas,
en muchos casos efímeras y de escasa militancia, Unos años después, la teorización había evolu-
que llenaron los espacios que el antifranquismo cionado poco si atendemos a la descripción que
creaba más allá del PCE y los sectores naciona- hacía el 4 de enero de 1977 Alfons Cucó en un
listas que, también, habían conseguido reor- artículo para el diario Avui. Según Cucó, se po-
ganizarse por las mismas fechas. Bandera Roja dían encontrar varios posicionamientos ante la
(1968-1989), el Partido del Trabajo (1967-1979), cuestión nacional valenciana. Con la retórica
la Organización Revolucionaria de Trabajadores autodeterminista por bandera, el debate Luxem-
(1969-1979), la Liga Comunista Revolucionaria burgo-Lenin se mantenía casi intacto, como si no
(1971-1991), el Movimiento Comunista de Espa- hubieran pasado los años. Las fuerzas de extre-
ña (1972-1991), Unificación Comunista de Espa- ma izquierda rehuían el debate escudándose en
ña (1973), el Partido Comunista de los Trabaja- el argumento de que las propuestas nacionalis-
dores (1973-1980) o la Organización de Izquierda tas interclasistas no tenían un auténtico com-
Comunista (1974-1979). Es decir, una colección ponente revolucionario. Y por ello estas fuerzas
de micropartidos que representaban un tipo de no habían tenido casi presencia en las jornadas
vanguardismo marxista muy característico de de debate realizadas en la Facultad de Derecho
finales de los sesenta y, sobre todo, principios de la Universidad de Barcelona sobre, precisa-
de los setenta23. Todos estos partidos se vieron mente, el tema de los Països Catalans24. Más allá
“obligados” a tener un posicionamiento sobre la de las connotaciones e intenciones políticas del
organización del Estado español y, en el caso va- texto de Cucó, lo cierto es que acertaba de ple-
lenciano, claramente fueron arrastrados por los no en su análisis. Ahora bien, no debemos caer
debates derivados de los planteamientos que el en la trampa de pensar que todos los partidos
fusterianismo y el valencianismo político propo- de la izquierda radical vivieron ajenos al debate
nían. Ahora bien, el posicionamiento no fue una planteado por el fusterianismo. ¿Cómo y por qué
prioridad si tenemos en cuenta las críticas que llegaron en algún momento a tener interés por
los miembros de Germania Socialista dedicaban esta propuesta nacional? Fundamentalmente
a algunas de estas organizaciones en el artículo por una cuestión de estrategia política y porque
ya citado de 1972 “El País Valenciano. Problemas estos eran elementos que conformaban la iden-
de la revolución socialista”. La principal crítica tidad del antifranquismo25. Y, como ya hemos di-
se centraba en la gran indefinición, derivada de cho, Fuster era antifranquismo. Táctica y estrate-
la falta de teorización, que estas organizaciones gia como, en el fondo, ya habían reflexionado un
tenían respecto la cuestión nacional. Y en cierto siglo atrás los propios Marx y Engels para casos
como el irlandés o el polaco.
23
Como afirma Manuel Herranz, este sector político
representó muy poca militancia en el conjunto del
antifranquismo y de la izquierda en general. Ver He-
rranz, Manuel, “Militancia revolucionaria. A vueltas 24
Cucó, Alfons, “Tres llances lligades”, Avui, 4 de ene-
con las cifras. La izquierda de la izquierda. Éramos ro de 1977, p. 2.
muy pocos”, en Fundación Salvador Seguí-Madrid 25
Rodríguez-Flores, Vega, “L’esquerra radical en la
(coord.), Las otras protagonistas de la Transición. Iz- Transició valenciana”, Afers, fulls de recerca i pensa-
quierda radical y movilizaciones sociales, Madrid, FSS ment 67 Transició política i qüestió nacional al País
Ediciones, 2018. Valencià, 25/67 (2010), p. 682.

Si analizamos los estatutos y documentos de de propuestas claras sobre el proyecto de los

todas estas organizaciones llegaremos a las mis- Països Catalans, pues, junto a una ambigua de-
mas conclusiones que Cucó, Marqués y Mollà. finición de Estado federal o de conceptos como
Otro documento interesante producido en el pueblo o autodeterminación, fue la tónica gene-
mismo período son los análisis desarrollados en ral que denunciaron los ponentes. Es más, en la
el marco del Debat sobre els Països Catalans26 de propia retórica de los portavoces de estas orga-
octubre de 1976. En las ponencias presentadas, nizaciones, también se puede observar cómo,
se analizaba el momento en que los partidos de en muchas ocasiones, tuvieron una opinión mí-
cada territorio se encontraban respecto la idea nimamente formada por el hecho de seguir los
de los Països Catalans. No debemos olvidar, debates y conclusiones del resto de la izquierda,
como en los casos anteriormente citados, que especialmente de ese PSUC i PCPV que tanto
los ponentes eran personas claramente identifi- “detestaban”.
cadas con el nacionalismo de matriz fusteriana.
Jordi Carbonell para el caso catalán, Eliseu Cli- Centrándonos en el ámbito de las declaraciones
ment para el valenciano y Josep Maria Llompart públicas, una fuente fundamental es la trilogía
para el mallorquín, narraban una situación coin- de entrevistas que el periodista Amadeu Fabre-
cidente con la que explicaría después Cucó. En gat realizó entre 1976 y 1978 a todos los partidos
lo que respecta al informe sobre Cataluña, Car- políticos del País Valenciano. El resultado fue pu-
bonell analizaba para el ámbito de la izquierda blicado por la fusteriana editorial Tres i Quatre
radical el PTE i el MC de Catalunya. Afirmaba que de Eliseu Climent28. En dichas entrevistas, por
en todos los partidos estudiados el concepto de una cuestión claramente de interés editorial y
Països Catalans aparecía pero con intensidades del propio periodista, los portavoces de los dife-
diferentes. Por su parte, Eliseu Climent realizaba rentes partidos fueron preguntados directamen-
un estudio más amplio. En este sentido, el MCPV, te sobre su modelo de estado, la opinión sobre
Bandera Roja, el PTE, la Organización de Izquier- la cuestión de los Països Catalans y el proyecto
da Comunista, Unificación Comunista, la Liga final para el País Valenciano. También podemos
Comunista o la Liga Comunista Revolucionaria, destacar para el caso balear el libro de Bartomeu
mostraban un cuadro de análisis más completo Canyelles y Francisca Vidal L’oposició antifran-
que el del caso catalán. Según Climent, el MCPV quista a les Illes de 1977. En el caso mallorquín
era el partido más próximo a las tesis fusterianas solo el Movimiento Comunista y el Partido del
ya que partía de la idea de que los Països Cata- Trabajo tenían representación suficiente como
lans formaban parte de una misma comunidad para tenerlos en cuenta29.
nacional. Por su parte, la Liga Comunista, si-
Analicemos, pues, cada una de estas organiza-
guiendo el discurso generado por Germania So-
ciones a partir de las declaraciones de sus por-
cialista, consideraba que el País Valenciano era
tavoces. De todas, por una cuestión de origen
una nacionalidad exclusiva. Finalmente, el resto
y militancia, la que más se aproximó al relato
de partidos se alienaban con las teorías del PCE
fusteriano fue el Movimiento Comunista30. Esto
o el PSUC que consideraban que aún no se po-
día hablar de un hecho nacional, ni para el caso els Països Catalans. Ponències i comunicacions de les
valenciano en particular ni para el de los Països jornades de debat sobre els Països Catalans (octubre
Catalans en general. Sobre las Islas, Llompart era 1976), Barcelona, Curial Edicions Catalanes, La Ma-
menos concreto que los otros dos ponentes. El grana, 62, Anagrama, Laia, Publicacions de l’Abadia
motivo fundamentalmente se debía al hecho de de Montserrat, 1977, pp. 171- 198.
que en el territorio insular no existió una prolife-
28
Ver Fabregat, Amadeu, Partits polítics al País Valen-
ración tan grande de siglas de la izquierda radi- cià 1, València, Tres i Quatre, 1976; Partits polítics al
País Valencià 2, València, Tres i Quatre, 1977 y Fabre-
cal. Y las que existieron mantuvieron posiciones
gat, Amadeu, Converses extra parlamentàries, Valèn-
iguales que en los otros territorios27. La ausencia cia, Tres i Quatre, 1978.
29
Canyelles, Bartomeu y Vidal, Francisca, L’oposició
26
Las ponencias se recogieron un año después en VV. antifranquista a les Illes, Palma, Moll, 1977.
AA., Debat sobre els Països Catalans. Ponències i co- 30
Una aproximación a la historia del MC en Her-
municacions de les jornades de debat sobre els Països vella, Gustavo, “La izquierda marxista-leninista: el
Catalans (octubre 1976), Barcelona, Curial Edicions Movimiento Comunista, M.C. y el nacionalismo
Catalanes, La Magrana, 62, Anagrama, Laia, Publica- (1972-1982)”, en Actes del Congrés La Transició de la
cions de l’Abadia de Montserrat, 1977. dictadura franquista a la democràcia, Barcelona, 20,
27
Carbonell, Jordi et al., “Informe sobre els partits 21 i 22 d’octubre de 2005. Barcelona, Centre d’Estu-
polítics dels Països Catalans”, en VV.AA., Debat sobre dis sobre les èpoques franquista i democràtica, 2005.

mismo ya lo explicó el periodista y amigo de El MC siempre estuvo coordinado con partidos

Fuster, Vicent Ventura. Según Ventura, el MCPV independentistas como el PSAN o los valencia-
era la única organización de “la izquierda más nistas del PSPV, con los que fue coaligado en las
extrema” que asumía el problema nacional de elecciones de junio de 1977. Militantes como
los “Països Catalans, a pesar hacerlo con formu- Carles Dolç tuvieron claramente un discurso crí-
laciones muy matizadas”31. Cabe recordar que tico pero valencianista y fusteriano en muchos
esta organización había surgido como una esci- aspectos. El 1976 afirmaba que “en cuanto al
sión de ETA y, por tanto, los planteamientos na- País Valenciano, sí, pienso que tiene una perso-
cionales diferenciados de los imperantes en las nalidad nacional valenciana diferenciada respec-
organizaciones de estricta matriz española, ya to de la de los otros pueblos del Estado español,
formaban parte en su génesis. Ahora bien, como aunque con vínculos con la de Cataluña y las Is-
el resto de organizaciones de la izquierda radical las”. Porque el MCPV no llamó a los Països Ca-
-exceptuando claro está las independentistas- su talans con este nombre durante mucho tiempo,
apuesta nacional pasaba por un derecho a la au- pero sí los tuvo presentes como un conjunto cul-
todeterminación que tenía la intención de unir tural, lingüístico e histórico que tenía los compo-
España desde la libre voluntad de sus diferentes nentes necesarios como para ser considerados
pueblos, pero en ningún caso independizar nin- una nación. Seguramente, no en un presente
guno de estos territorios. Además, la definición inmediato, pero eso no quitaba potencialidades
de nación que utilizaban se podía identificar con al proyecto si así lo quería la ciudadanía. De he-
la estalinista surgida a principios del siglo XX. En cho, el MC valenciano impulsó encuentros con
el caso valenciano, la influencia fusteriana se el MC de Cataluña y de las Islas Baleares con la
puede concretar en el hecho de que, como pasó intención de consensuar políticas comunes en
con las principales fuerzas antifranquistas, el MC determinados aspectos. Ahora bien, para Dolç
incorporó al nombre del partido las siglas de PV. los valencianos aún no habían desarrollado un
El hecho no es menor y nos muestra como el “sentimiento diferencial” propio. Es interesante
relato valencianista había impregnado en la mi- destacar que, en su relato sobre la no asunción
litancia del MC. Ahora bien, el detalle del cam- de un sentimiento propio, Dolç ponía énfasis en
bio de sigla no es exclusivo del MC valenciano el hecho de que la burguesía autóctona siempre
sino que debemos entenderlo en el marco de los se había mostrado desinteresada en ello. Fuster
cambios que esta organización experimentó a ni- sobrevolaba claramente las palabras de Dolç. I
vel estatal donde la “E” de España desapareció, más que sobrevolaba si tenemos en cuenta que
cediendo protagonismo a las siglas de los dife- Dolç asumía los principios propuestos en el lla-
rentes territorios donde el MC tenía presencia32. mado Estatut d’Elx, entre los redactores del cual
estuvo el mismo Fuster33. Propuestas como man-
Sobre la evolución del MC durante la transición en comunar políticas en determinados aspectos era
Fernández, Javier, “Cambio de rumbo en la transición.
observado como una especie de política real y
Claves para entender el desarrollo del Movimiento
Comunista (MC) 1977-1980”, en Fundación Salvador
posible a la hora de construir los Països Cata-
Seguí-Madrid (coord.), Las otras protagonistas de la lans34. Como pasa siempre, más allá de que un
Transición. Izquierda radical y movilizaciones socia- portavoz político hable en nombre de todo un
les. Madrid, FSS Ediciones, 2018. Finalmente, sobre la colectivo, es muy importante la formación, sen-
evolución del MC en el País Valenciano y sobre todo sibilidad y intereses individuales de dicha perso-
en la provincia de Alicante Moreno, Francisco, “El na. En este sentido, Dolç formó parte pocos años
Moviment Comunista del País Valencià”, en Moreno, después de la refundación del valencianismo de
Francisco, Partidos, sindicatos y organizaciones ciuda-
danas en la provincia de Alicante durante la Transi- 33
Tanto sobre l’Estatut d’Elx como de las otras pro-
ción (1974-1982), Arxiu de la Democràcia, Universitat puestas estaturarias que tuvo el País Valenciano ver
d’Alacant, 2013. Aguiló, Lluís et al., Volem l’Estatut. Una autonomia
31
Ventura, Vicent, “Els partits polítics del País Valen- possible per al País Valencià, València, Prometeo,
cià i la reivindicació dels Països Catalans”, en VV.AA., 1979. También Aguiló Lúcia, Lluís (ed.), Els avantpro-
Debat sobre els Països Catalans. Ponències i comu- jectes d’Estatut d’Autonomia de la Comunitat Valen-
nicacions de les jornades de debat sobre els Països ciana. Valencia, Corts Valencianes, 1992. Alcaraz, Ma-
Catalans (octubre 1976), Barcelona, Curial Edicions nuel, “Política e ideología en el proceso autonómico”,
Catalanes, La Magrana, 62, Anagrama, Laia, Publica- en Fernando Badía, Juan (coord.), Estudio sobre el
cions de l’Abadia de Montserrat, 1977, pp. 360-373. Estatuto valenciano, I. El proceso autonómico valen-
32
Cucó i Giner, Josepa, De la utopia revolucionaria al ciano. València, Consell Valencià de Cultura, 1993.
activismo social. El Moviment Comunista, Revolta i 34
Fabregat, Amadeu, Partits polítics al País Valencià 1,
Cristina Piris, València, PUV, 2016, pp. 36-37. València, Tres i Quatre, 1976, p. 33-49.

izquierdas junto a diversos militantes del PCPV y por el Estatuto de Autonomía y por las fórmu-
del valencianismo fusteriano de los sesenta35. Es las de autogobierno”37. A pesar de que la UCE de
importante tener en cuenta este elemento para València impulsó una visión de lucha conjunta de
contextualizar de forma más clara las palabras los “Països Catalans por el reconocimiento de su
de Dolç, más allá del propio MCPV. Finalmente, personalidad”38, la contundencia de Navarro nos
por lo que respecta a este partido político, debe- hace dudar sobre si lo que afirmaba representa-
mos destacar el hecho de que una de las víctimas ba realmente al conjunto de su organización.
de la transición valenciana fue uno de sus mili-
tantes. La noche del 6 de octubre de 1977, el jo- En cuanto al resto de organizaciones de la iz-
ven alicantino Miquel Grau era agredido por un quierda radical, podemos decir que en general
miembro de Fuerza Nueva mientras pegaba car- mantuvieron el debate abierto y una postura
teles convocando a la manifestación nacionalista poco concreta sobre el tema nacional. Por ejem-
del 9 de Octubre. Grau murió pocos días después plo, la Organización Comunista de España-Ban-
y se convirtió en un referente de la lucha por la dera Roja no tenía un posicionamiento claro
autonomía valenciana, reivindicado muchas ve- sobre el tema39. En el caso valenciano, Bandera
ces por los sectores nacionalistas36. Roja se había formado el 1972 como consecuen-
cia de una escisión del PCE40. El dirigente valen-
Unos planteamientos parecidos tuvo Unificación ciano Eduard Zafra, preguntado sobre la cues-
Comunista de España en el País Valenciano. Por tión de los Països Catalans el 1976 afirmaba que
sorprendente que parezca, si tenemos en cuenta “sobre estas preguntas, tengo que decir que el
la evolución y sobre todo el discurso actual de la Comité del País Valenciano del OCE (BR) no ha
UCE, el 1976, su dirigente Xavier Navarro consi- llegado todavía a unas conclusiones definitivas”.
deraba que el País Valenciano había sido el terri- Y es por eso que tenía que dar su opinión perso-
torio más “reprimido de los Decretos de Nueva nal, la cual se fundamentaba en una serie de ele-
Planta”, con una fuerte castellanización y someti- mentos tópicos de manual básico de la izquierda
miento al centralismo del Estado. Además, el dis- federalista española de entonces. Afirmaba Zafra
curso respecto de la burguesía valenciana, en la que el País Valenciano tenía suficiente entidad
línea del MCPV, tenía una clara influencia fuste- para desarrollarse autónomamente mantenien-
riana. Y como conclusión de la entrevista, ante la do vínculos fraternales con los Països Catalans
pregunta sobre los Països Catalans, Navarro afir- y el resto de España de forma confederada. Para
maba rotundamente que “sí, estoy totalmente a Zafra, el País Valenciano formaba parte del grupo
favor por razones lingüísticas, culturales, históri- de nacionalidades históricas del Estado41.
cas, geográficas, políticas, etc.”. Como ya hemos
comentado para el caso de Dolç, es importante Finalmente, hay que mencionar el caso del Par-
tener en cuenta los intereses de cada portavoz tido del Trabajo de España42. Nuevamente, una
en cuestión. En el caso de Navarro, del que no
conocemos su trayectoria posterior, sí que es
37
importante tener en cuenta que en la descrip- València, Tres i Quatre, 1977, p. 119-135.
38
Rodríguez-Flores, Vega, “L’esquerra radical en la
ción que él mismo hacía de su persona como
Transició valenciana”, Afers, fulls de recerca i pensa-
nota previa a la entrevista, afirmaba que como ment 67 Transició política i qüestió nacional al País
comunista, respecto la cuestión nacional, estaba Valencià, 25/67 (2010), p. 679.
“a favor de la lucha de las nacionalidades por su 39
Una aproximación a la historia de Bandera Roja en
autodeterminación. Creo que la lucha de los Paï- Meroño, Pere, Historia de Bandera Roja, 1968- 1989,
sos Catalans por el reconocimiento de su perso- Barcelona, Gregal, 2019.
nalidad es una parte de la lucha general por el 40
Sobre la evolución del MC en el País Valenciano y
socialismo y por una sociedad sin clases. No cabe sobre todo en la provincia de Alicante Moreno, Fran-
decir que, como nacionalista convencido, estoy cisco, “Organización Comunista de España (Bandera
Roja)”, en Partidos, sindicatos y organizaciones ciuda-
danas en la provincia de Alicante durante la Transi-
35
Sobre este proceso ver Rico, Antoni, “D’esquerres i ción (1974-1982), Arxiu de la Democràcia, Universitat
valencianistes. Els casos de l’EUPV i l’AEPV durant la d’Alacant.
transició (1977-1982)”, Afers. Fulls de recerca i pensa- 41
ment, 79 (2014). València, Tres i Quatre, 1976, p. 51-67.
36
El grupo de música tradicional valenciana Al Tall le 42
Sobre la historia en general del PTE ver VV.AA.,
dedicó incluso una canción. Sobre el asesinato de Mi- PTE. La lucha por la ruptura democrática en la Tran-
quel Grau ver Quiñonero, Llum, Miquel Grau 53/1977, sición, Madrid, Asociación por la Memoria Histórica
València, Pruna Llibres, 2019. del Partido del Partido del Trabajo de España y de la

escisión del PSUC originaba una nueva organiza- el proyecto nacional del PTE puesto que su idea
ción comunista. En un primer momento la esci- de nación era la de una unión de naciones y re-
sión tomó el nombre de PCE (internacional). Su giones de España.
discurso sobre la cuestión nacional valenciana y
los Països Catalans es el que mejor representa la En definitiva, las organizaciones representantes
retórica de la izquierda española antifranquista. de la izquierda revolucionaria o radical se mos-
El portavoz del PTE, Josep Sanmartín, conside- traban, antes de las elecciones de junio de 1977,
raba que España era una nación multinacional y más o menos abiertas al debate nacional en cla-
por este motivo defendía el derecho a la autode- ve valenciana y también de Països Catalans. Aun
terminación, “a pesar de no ser un partido sepa- así, este debate llegó sobrevenido por los aconte-
ratista”. Las contradicciones del discurso, pero, cimientos generales de principios de los setenta
se encontraban en el momento de hablaban del y por la centralidad que los postulados fusteria-
caso valenciano. Estas no dejaban de ser fruto nos tuvieron en esos años, al menos en territo-
de la cultura política de la que formaban parte: rio valenciano. Esto no quiere decir que estas
la izquierda federal que recogía el discurso na- organizaciones, de igual manera que para el caso
cional de antes de 1936. El origen psuquero era de partidos como el comunista o el socialista, se
más que evidente. De igual manera que determi- creyeran firmemente los elementos programá-
nados postulados del PSUC, el PTE no creía que ticos relacionados con el cambio de concepción
el País Valenciano fuera una nación o nacionali- nacional que parecía que estaban desarrollando.
dad de la misma categoría que Cataluña o el País Los años posteriores así lo demostraron. De he-
Vasco. En el discurso del PTE podemos observar cho, el problema para el seguimiento y evolución
como el debate estaba aun abierto. El País Valen- de los postulados de estas organizaciones es que
ciano no era una nación como sí lo eran Catalu- en muchos casos desaparecieron después de las
ña, el País Vasco o Galicia. Este tema no es menor elecciones de 1977 por la absorción o integra-
porque, para el caso valenciano, generó algunas ción en partidos como el PSUC, el PCE o el PSOE.
polémicas con el resto del antifraquismo. Ahora Esto provocó que algunos de sus planteamientos
bien, sí tenía “rasgos y características muy pecu- se incorporaran en unas estructuras de partido
liares debido a la propia configuración del Estado en las que el debate giraba alrededor de la cons-
multinacional y abigarrado que denominamos trucción del estado de las autonomías y no de
España”. Y en este sentido el País Valenciano for- realidades nacionales abstractas. Son pocos los
maba una nacionalidad con catalanes y baleares casos en que estos partidos sobrevivieron y los
en tiempos medievales. El problema radicaba en que lo consiguieron tuvieron un papel testimo-
el posterior desarrollo diferente y por separado. nial en todo el proceso político del cambio de ré-
El argumento fusteriano de la carencia de bur- gimen, con muy poca influencia política y social.
guesía autóctona volvía a sobrevolar el relato del
4. DE REVOLUCIONARIOS A EXTRAPARLA-
porque el País Valenciano era o no una nación. Y
MENTARIOS, DE RUPTURISTAS A AUTONO-
este elemento diferenciaba al País Valenciano de
MISTAS
Cataluña en su propia consideración nacional. Y
respecto de los Països Catalans, Sanmartín aca- Las elecciones de junio de 1977 mostraron que
baba afirmando que “es evidente que por razo- la sociedad española estaba más por una refor-
nes de afinidad cultural, lingüística, etc., existe ma que por una ruptura. Ciertamente, podemos
una relación especial con el Principado y las Is- discutir sobre como la UCD, Suárez y los sectores
las. Es en ese nivel que podemos hablar, efectiva- del franquismo vinculados a la reforma, tuvieron
mente, de Países Catalanes”43. Pero este no era la sartén por el mango y capitanearon el proceso.
También podemos discutir sobre el papel de los
Joven Guardia Roja, 2010 y Martín Ramos, José Luis dos partidos mayoritarios de la izquierda. Pero
(coord.), Pan, Trabajo y Libertad. Historia del Partido sea como fuere, el voto de los españoles conso-
del Trabajo de España, Barcelona, El Viejo Topo, 2011. lidó a las fuerzas políticas que apostaron, clara-
Sobre el PTE en la provincia de Alicante y el País Va- mente, por una reforma desde las estructuras
lenciano Moreno, Francisco, “El Partido del Trabajo del régimen. La ruptura quedó descartada la no-
de España”, en Partidos, sindicatos y organizaciones che del 15 de junio de 1977. Las nuevas Cortes,
ciudadanas en la provincia de Alicante durante la ahora ya democráticas, se configuraron para la
Transición (1974-1982), Arxiu de la Democràcia, Uni-
legislatura constituyente que se abría sin la pre-
versitat d’Alacant.
43
sencia de las fuerzas rupturistas. Exceptuando
València, Tres i Quatre, 1977, pp. 137-155. los casos de determinados diputados o senado-

res vinculados al mundo independentista vasco la federación fue uno de los motivos por los cua-
o catalán, el resto de representantes apostaban les el Movimiento Comunista de Cataluña pidió
por la redacción de una constitución basada en el “No” a la Constitución del 197845. Pero a pesar
aquello que se denominó “el consenso”. Fuster, de las reformulaciones teóricas y organizativas,
por cierto, fue un gran crítico del “consenso” y la tónica general en un primer momento fue la
eso le fue alejando de los partidos mayoritarios falta de concreción y, en los años siguientes, la
y aproximando a los que representaban la crítica adaptación al contexto de construcción del esta-
a la transición y su desarrollo, especialmente los do autonómico. Una adaptación sin abandonar
sectores independentistas y nacionalistas valen- una retórica crítica con todo, sí, pero adaptación
cianos que, por uno u otro motivo, se mantenían al fin y al cabo. Sobre la autocrítica, Josep Ma-
al margen del proceso constituyente. nuel Bañó como portavoz de la Liga Comunista
Revolucionaria, afirmaba el 1978 que todos los
El espacio político de la izquierda se simplificó a partidos obreros en general habían vivido en una
nivel de siglas. El 15 de junio de 1977 convirtió especie de abstracción en la que, reconociendo
aquellas fuerzas políticas de la llamada izquierda el derecho a la autodeterminación del País Va-
revolucionaria o radical en la izquierda extrapar- lenciano, pensaban que el problema nacional ja
lamentaria. A partir de aquí, los partidos y orga- estaba solucionado46. Lo interesante de la decla-
nizaciones que formaban este espacio político ración es que la acusación de falta de teorización
tuvieron que resituarse en el nuevo contexto. y concreción no se hacía desde las filas del valen-
Algunas acabaron diluyéndose en el Partido Co- cianismo político, como en años anteriores, sino
munista o el PSUC, otros crearon nuevos espa- desde la misma izquierda radical.
cios unitarios de trabajo –para el caso valenciano
destacarían organizaciones como Esquerra Uni- Como hemos comentado, el MCPV fue la orga-
da del País Valencià, por ejemplo- y unas pocas nización que más se aproximó a la propuesta
continuaron su camino en solitario sin tener nin- fusteriana. En las elecciones de 1977 algunos de
guna influencia política sobre la sociedad. sus militantes se presentaron en la candidatura
de los nacionalistas valencianos del PSPV. A pe-
A principios de 1978, algunas de las organiza- sar de que la candidatura, que solo se presen-
ciones de la izquierda radical más significativas, tó por las provincias de Valencia y Castellón, no
iniciaron un proceso de reformulación de su es- obtuvo representación, es interesante analizar
tructura interna, en un intento de adecuación al su programa electoral que de fondo y de forma
ideario nacional que defendían: el federalismo. se reducía a pedir un estatuto de autonomía47.
Este fue el caso del MC o el PTE que pasaron a La aproximación de estos mismos militantes a
afirmar definitivamente que el federalismo era posturas valencianistas fue constante durante
tanto su forma de estructura interna como la todo el proceso de la transición, colaborando y
apuesta para construir la nueva España44. En el construyendo las condiciones necesarias para la
caso de Cataluña, es interesante el debate que refundación del valencianismo fusteriano. Mili-
las diferentes fuerzas políticas, parlamentarias y tantes destacados como Carles Dolç impulsaron,
extraparlamentarias, tuvieron el 27 de noviem- junto a los valencianistas expulsados del PCPV i
bre de 1978 sobre la Constitución y el contenido exmilitantes del PSPV, la creación de la revista
que debía tener el futuro Estatuto. En este sen- Trellat. En cierta manera, desde aquí se pusieron
tido, el representante de la Organización Revolu- las bases para la fundación de la Agrupació d’Es-
cionaria de Trabajadores Antonio Pérez Cabello, querres del País Valencià y de Esquerra Unida
según Jaume Sobrequés, afirmó que “el deseo del País Valencià. La EUPV surgió de una espe-
de su organización sería que el Proyecto de es- cie de confluencia entre exmilitantes del PSPV y
tatuto permitiera que “Cataluña pudiera fede- plataformas políticas de tipo municipalista como
rar libremente su territorio y sus instituciones a
las de las otras nacionalidades, especialmente a 45
Sobrequés, Jaume, L’Estatut de la Transició. L’Es-
aquellas que tienen nuestra misma cultura, idio- tatut de Sau (1978-1979), Barcelona, Generalitat de
ma y psicología”, una mención bastante clara a Catalunya, 2010, p. 50.
46
Fabregat, Amadeu, Converses extraparlamentàries.
los Países Catalanes. De hecho, la prohibición de
València, Tres i Quatre, 1978, p. 51.
47
Sobre la historia del PSPV ver Martí, Joan, Socialis-
44
Rodríguez-Flores, Vega, “L’esquerra radical en la tes d’un país imaginat. Una història del Partit Socialis-
Transició valenciana”, Afers, fulls de recerca i pensa- ta del País Valencià (1974-1978), València, Institució
ment 67 Transició política i qüestió nacional al País Alfons el Magnànim/ Centre Valencià d’Estudis i d’in-
Valencià, 25/67 (2010), p. 674-675. vestigació, 2017.

Esquerra Independent de Castelló48 o Socialis- dismo en el que se gestó como organización50.

tes Independents de Xàtiva. La vinculación de la Porque la identificación y defensa de los Països
EUPV con el MCPV, que en ese momento se esta- Catalans no fue solo una cuestión particular de
ba fusionando con la Organización de Izquierda algún militante como Dolç, sino un elemento
Comunista y la Liga Comunista Revolucionaria, central del partido. Así se puede observar en las
se concretó en la aproximación e integración de resoluciones sobre el País Valenciano surgidas de
estas organizaciones extraparlamentarias a un la Conferencia del MCPV de mayo de 1981 don-
modelo municipalista de marcado discurso iz- de, posicionándose contra el decreto de plurilin-
quierdista que había conseguido algunos éxitos güismo que impulsaba el gobierno preautonómi-
electorales por el hecho de tener concejales. El co, afirmaba como uno de los motivos el hecho
proceso lo debemos entender en el marco de re- de que este decreto negaba “la unidad cultural y
formulación del espacio de la izquierda española lingüística del País Valenciano con el resto de los
en general, la valenciana en particular y el valen- ‘Països Catalans’”.
cianismo político. Durante la transición, como
hemos dicho, el espacio de la izquierda radical se Junto al MCPV, la otra organización que se mos-
tuvo que resituar políticamente. Sus militantes tró próxima al fusterianismo y el valencianismo
buscaron nuevos espacios políticos donde inte- fue la Organización de Izquierda Comunista.
grarse y el mundo valencianista de izquierdas fue Como hemos dicho, a partir de las elecciones de
un buen lugar donde confluir para el caso de los 1977, la OIC inició un proceso de aproximación
militantes y organizaciones con una mayor “sen- e integración en el MC. El discurso valencianis-
sibilidad” fusteriana. ta de la OIC no era casual. Su secretario general
era Vicent Álvarez, exmilitante del PSV y perso-
En los documentos fundacionales, la EUPV se na que mantenía una buena relación con Fuster.
mostraba partidaria de la libertad del País Valen- Es cierto que Álvarez tuvo una correspondencia
ciano, de su autodeterminación y de la coordi- más fluida con el suecano durante los años se-
nación de este con el resto de Països Catalans49. senta que en los setenta. Los motivos son varios
Un discurso claramente fusteriano. Interesan- y entre estos tenemos que destacar el hecho de
te es también un artículo publicado por Carles que a principios de los setenta Álvarez, como ya
Dolç a Trellat el febrero de 1981. Con el título hemos visto, había empezado a mostrarse crítico
de “Marxisme i Països Catalans”, el militante del con algunos de los planteamientos fusterianos
MCPV desarrollaba un relato en el que ser de respecto la idea de nación, los Països Catalans y
izquierdas y concretamente marxista era total- la definición de la valencianidad. Ahora bien, las
mente compatible con la defensa de los Països críticas de Álvarez se deben entender siempre
Catalans. Dolç asumía parte de la semántica que en el marco del fusterianismo y no contra éste.
a principios de los setenta había desarrollado El 25 de octubre de 1978, Vicent Álvarez envió
Germania Socialista, rehuyendo de una idea de una carta a Fuster para pedirle una entrevista
nación esencialista para defender una propuesta que tenía que ser publicada en el periódico de
al servicio de los trabajadores. El relato recorda- la OIC La voz de los trabajadores. La publicación
ba también al de las izquierdas independentistas era de ámbito estatal y en la carta Álvarez afir-
que entendían que la liberación nacional y de maba que hacía tiempo que él y sus compañeros
clase eran dos caras de una misma moneda. El del partido querían publicar una entrevista con
MCPV, así, se encontraba a inicios de los ochen- el suecano. Según Álvarez, la entrevista era im-
ta más próximo al valencianismo fusteriano que portante por varios motivos: “de un lado porque
a determinados principios políticos del izquier- hace que el tema de las nacionalidades sea algo
presente y porque nos ayuda a normalizarnos, a
48
Para entender el discurso de matriz fusteriana de la salir del gueto en que los grandes, los parlamen-
EIC debemos tener en cuenta que uno de sus princi- tarios, nos sitúan”. Fuster respondió la entrevista
pales dirigentes fue el histórico militante valencianis- en poco tiempo, tal como nos informa la carta
ta Vicent Pitarch. Amigo personal de Fuster, fue uno
de confirmación que Álvarez le dirigió el 16 de
de los concejales que la EIC tuvo en la capital de la
Plana. noviembre de 1978. De esta carta es interesante
49
Este fue el discurso general de la EUPV a lo largo de la opinión de Álvarez sobre el contenido de la en-
su existencia tal y como muestran los documentos del trevista: “me ha parecido muy bien, en tu línea,
partido Declaració fundacional d’Esquerra Unida del evidentemente, que en gran parte es la que mu-
País Valencià de 1981 o “Per un País Valencià d’esque-
rres, vine amb l’esquerra del País”, documento edita- 50
Dolç, Carles, “Marxisme i Països Catalans”, Trellat.
do para las elecciones generales de 1982. Crítica cultural i política, 4 (1981).

chos tenemos”. Sobre el contenido de la entre- Año 1982, en el marco de la nueva España auto-
vista, fundamentalmente Fuster el que hacía era nómica, se aprobaba el estatuto de autonomía
criticar la transición valenciana como se estaba de la Comunidad Valenciana. Anteriormente se
desarrollando y especialmente el papel que es- había aprobado el catalán y un año después pa-
taba jugando la izquierda. En este sentido, el es- saría lo mismo con el balear. Empezaba así una
critor hacía algunas afirmaciones contundentes nueva etapa de la historia de España. Los años
como que ochenta son complicados y requerirían muchas
páginas de las que no disponemos. Lo que está
“la izquierda, la izquierda valenciana es más claro es que la izquierda radical se vio obligada a
tonta de lo que parece, y lo parece mucho. replantearse tanto a ella misma como, en el caso
La izquierda parlamentaría ganó el 15 de de sus militantes, la praxis política que desarro-
junio y no se ha notado. La izquierda extra- llarían a partir de ese momento. En el caso va-
parlamentaria se dedica a dar conciertos lenciano, muchos de sus militantes acabaron en
de arias demagógicas, sin ningún resultado la Unitat del Poble Valencià, partido surgido del
positivo. ¿Por qué ser de izquierdas es ser reagrupamiento del valencianismo después de la
masoquista? [...] Me temo que la izquierda transición y consecuencia directa de la coordina-
‘de veras’ en el País Valenciano, todavía no ción iniciada a principios de la década por parte
ha comprendido que tiene que ser dialécti- de organizaciones como la EUPV, la AEPV y otras
camente izquierda y valenciana, revolucio- organizaciones. Fuster también se replanteó a sí
naría y nacionalista. Digo dialécticamente y mismo. Y los Països Catalans quedaron, como la
el que no sea marxista o marxiano, que se república o el socialismo, en el cajón de los pro-
retire”51. yectos que tiempos atrás parecían posibles.
Este es uno de los pocos documentos existen-
tes que relacionan Fuster directamente con la
izquierda extraparlamentaria y ya vemos que la
temática fundamental es el análisis de la situa-
ción política y el papel de la izquierda. Los acon-
tecimientos de la transición fueron precipitando
cambios organizativos. La aproximación y con-
fluencia entre el MCPV y la OIC se empezó a vis-
lumbrar de forma pública en documentos como
la propuesta de Estatuto de autonomía redacta-
da el 1979 de forma conjunta. El texto definía el
País Valenciano
“como expresión de su realidad nacional,

haciendo uso de su derecho al autogobier-
no y sin renunciar a su derecho permanen-
te e inalienable de autodeterminación, se
constituye en comunidad autónoma dentro
del Estado español según la Constitución y
el presente Estatuto”.
Y la lengua era central para la integración de los

valencianos en el marco de los Països Catalans
que era reconocido como un ámbito cultural y
lingüístico, siempre, eso sí, partiendo de la coofi-
cialidad entre catalán y castellano52.
51
Tanto las cartas con Àlvarez como la entrevista se
encuentran publicadas en Fuster, Joan, Correspon-
dència 14. La generació valenciana dels seixanta,
València, Tres i Quatre, 2013.
52
Rodríguez-Flores, Vega, “L’esquerra radical en la ment 67 Transició política i qüestió nacional al País
Transició valenciana”, Afers, fulls de recerca i pensa- Valencià, 25/67 (2010), p. 678.

CARRERO BLANCO ANTE LA GRAN BAZA SOVIÉTICA:

IDEOLOGÍA Y DISCURSO
CARRERO BLANCO AND THE GREAT SOVIET ADVANTAGE:

IDEOLOGY AND DISCOURSE
Juan Miguel Valdera Gil*

Benamí Barros García**
*
Universidad de Granada, España. E-mail: [email protected]
**
Universidad de Granada, España. E-mail: [email protected]
Recibido: 28 septiembre 2020 / Revisado: 2 octubre 2020 / Aceptado: 10 octubre 2020 / Publicado: 15 octubre 2020
Resumen: La gran baza soviética es uno de Keywords: Carrero Blanco, discourse analysis,
los volúmenes de discursos de Carrero Blanco ideology, Francoism, Soviet Union
emitidos en radio y publicados en 1949 bajo el
pseudónimo de Juan de la Cosa. En este artícu- 1. CARRERO, UN ESPAÑOL ANTE LA CRISIS
lo proponemos un análisis sociodiscursivo y de MUNDIAL
L
contextualización histórica del capítulo “Espa-
uis Carrero Blanco fue uno de los más cer-
ña ante la actual crisis mundial”. En él Carrero
canos y devotos colaboradores de Franco
enfatiza los postulados nacional-católicos del
hasta su asesinato en 19731. Preston2 dirá
régimen franquista para juzgar los acontecimien-
de él que era “un franquista casi tan convencido
tos que tenían lugar en el mundo, persiguiendo
como el propio Caudillo” y cuya única ambición
disimular los vínculos con el derrotado nazi-fas-
en la vida era servirle. Considerado como el alter
cismo y sacar ventaja del anticomunismo de la
ego de Franco3, el político e ideólogo conserva-
Guerra Fría. Asimismo, mostramos las conexio-
dor Gonzalo Fernández de la Mora considerará
nes del texto analizado con informes anteriores
que el dictador y Carrero Blanco formaban una
del propio Almirante.
auténtica diarquía4. Durante su larga carrera,
Palabras clave: Carrero Blanco, análisis del dis- ocupó diversos puestos como la subsecretaria
curso, ideología, régimen franquista, Unión so- de la Presidencia, vicepresidencia del Gobierno
viética y brevemente la jefatura del Gobierno5. También
fue procurador en Cortes (parlamento franquis-
Abstract: The Great Soviet Advantage is one of ta) durante más de treinta años. A pesar de su
the volumes containing Carrero Blanco´s spee- indudable importancia en el entramado de po-
ches, which were broadcast on Spanish National der del franquismo, la figura de Carrero Blanco
Radio and published in 1949 under the pseu-
donym of ‘Juan de la Cosa’. This study offers a 1
Payne, Stanley, The Franco regime: 1936-1975, Ma-
socio-discursive analysis of the Chapter entitled dison, University of Wisconsin Press, 1987, p. 291.
‘Spain in the current world crisis’. Carrero pre- 2
Preston, Paul, Las tres Españas del 36, Barcelona,
sents the national-catholic postulates of Franco’s Debolsillo, 2006, p. 50.
regime to analyse world events taking place at 3
Moradiellos, Enrique, Franco: anatomía de un dicta-
that time, aiming to downplay their links with dor, Madrid, Turner, 2018, p. 99.
the defeated fascist Nazi government and to take 4
Cf. Tusell, Javier, Carrero: la eminencia gris del régi-
advantage of the Cold War Anticommunism. Se- men de Franco, Madrid, Temas de Hoy, 1993, p. 453.
condly, the article exposes connexions of the
5
Téllez, Antonio, “Carrero Blanco, veinte años des-
analysed text with reports from Carrero himself. pués: Un pensamiento político inmutable”, Historia
16, 212 (1993), pp. 22-30.

Carrero Blanco ante La gran baza soviética Juan Miguel Valdera Gil y Benamí Barros García
ha sido, según Téllez, poco tratada de forma modo en el Canarias, fue nombrado consejero del
nográfica6. Destacan el trabajo de Fernández7 partido único por recomendación de este y parti-
o la obra de Tusell8. El más reciente trabajo de cipó en una delegación a la Italia de Mussolini18.
Orella9 se ocupa de su papel en el llamado De- Ya en la década de los cuarenta, y a petición del
sarrollismo. La mayoría de las investigaciones se Ministro de Marina, el Almirante Salvador Mo-
ha centrado tradicionalmente en su magnicidio reno, elaboró otra serie de escritos donde ana-
(entre otros, Bardavío10, Campo11, Fuente, García lizaba las implicaciones estratégicas de la parti-
y Prieto12, Pinilla García13 y Guerra Gómez14), re- cipación española en la II Guerra Mundial19. El
flejando posiciones contrapuestas entre los que destinatario de los mismos era Franco. Al princi-
ven la desaparición de Carrero como un punto pio Carrero muestra sus simpatías por el Eje que
de inflexión (otros dirán punto final), los que lo lucha contra el poder judaico anticristiano, un
ven como un acontecimiento revelador para la conglomerado de democracias, masonería, libe-
sociedad o los que lo hacen desde la perspectiva ralismo, plutocracia y comunismo, enemigo de la
menos trascendente de la pérdida de un hombre civilización cristiana20. Sin embargo, y en la línea
importante del régimen15. Lo que sí parece claro de lo esgrimido por otros altos mandos militares
es que con el asesinato de Carrero se puso de como Carlos Martínez Campos21, recomendaba
manifiesto el estado de debilidad del Régimen, y evitar la implicación directa en el conflicto bélico
del propio Caudillo, en los años setenta16. por la debilidad militar española. Era necesario
mantener el imprescindible comercio con Amé-
Carrero Blanco ganó notoriedad por varios infor- rica hasta que Alemania controlara totalmente el
mes de carácter militar. El primero de ellos, de Mediterráneo, momento en el que España esta-
1938, Esquema para un plan de operaciones na- ría en situación propicia para intervenir22. El pau-
vales en el Mediterráneo, daba indicaciones para latino declive militar del Eje analizado por Ca-
conducir la guerra contra la República en el mar. rrero le llevó a alejarse en términos estratégicos
Debió de gustarle a Franco, porque Carrero fue de la beligerancia, acentuando las ventajas de la
ascendido a Jefe de Estado Mayor de la División neutralidad. Ya casi llegado el final de la II Guerra
de Cruceros, con mando en el buque Canarias17. Mundial, recomendaba en sus dos últimos in-
En 1939, y gracias a la amistad con el falangista formes de agosto y septiembre de 1944, España
Pedro Gamero del Castillo, al que había conoci- ante la situación actual del mundo y Considera-
ciones sobre una futura constitución política del
6
Téllez, Antonio, “España y la II Guerra Mundial: los mundo, el fortalecimiento de los principios del
informes reservados de Carrero Blanco”, Mélanges de régimen (Dios, Patria y Justicia social), un acer-
la Casa de Velázquez, 29/3 (1993), pp. 263-280. camiento al bloque anglosajón ante el previsible
7
Fernández, Carlos, El almirante Carrero, Barcelona, enfrentamiento con la Unión Soviética, e incluso
Plaza & Janés, 1985. la creación de una comunidad europea23. La im-
8
Tusell, Javier, Carrero…, op. cit.
portancia de estos informes radica, según Tusell,
9
Orella, José Luis, La España del desarrollo: Carre-
ro Blanco y sus hombres, Valladolid, Galland Books,
es que además de su lealtad y convencimiento
2014. ideológico, Carrero demostró que tenía enormes
10
Bardavío, Joaquín, La crisis. Historia de quince días. cualidades de tipo estratégico y táctico, muy va-
Madrid, Sedmay, 1974. loradas por Franco24.
11
Campo, Manuel, Información y servicios secretos en
el atentado al presidente Carrero Blanco. Barcelona, Carrero Blanco destacó por su faceta de analista
Argos Vergara, 1983. para los altos círculos del poder, pero también
12
Fuente, Ismael y García, Javier y Prieto, Joaquín, se ocupó de difundir su pensamiento al gran pú-
Golpe mortal: asesinato de Carrero y agonía del fran- blico: escribió estudios de carácter militar como
quismo. Madrid, PRISA, 1983.
13
Pinilla García, Alfonso, “El asesinato de Carrero
Blanco en la prensa. Desinformación, ruido y silen- 18
Ibid., pp. 35-36.
cio”, Historia Actual Online, 3 (2004), pp. 27-37. 19
Bardavío, Joaquín, La crisis…, op. cit., pp. 26-27. Té-
14
Guerra Gómez, Amparo, “El asesinato de Carrero llez, Antonio, “España y la II Guerra Mundial…, op. cit.
Blanco como primera muerte del franquismo. Memo- 20
Téllez, Antonio, “España y la II Guerra Mundial…,
ria de una transición mediática”, Historia Actual Onli- op. cit., p. 271.
ne, 42 (2017), pp. 143-155. 21
Tusell, Javier, Carrero…, op. cit., p. 39.
15
Ibid., p. 143. 22
16
Pinilla García, Alfonso, “El asesinato…”, op. cit., pp. op. cit., pp. 267-268.
27-37. 23
Ibid., pp. 276-277.
17
Tusell, Javier, Carrero…, op. cit., pp. 30-31. 24

Juan Miguel Valdera Gil y Benamí Barros García Carrero Blanco ante La gran baza soviética
España y el mar25 y otros textos bajo diferentes En el presente trabajo nos centraremos precisa-
pseudónimos. Bajo la firma de Jakim Boor26, en mente en La gran baza soviética, que comprende
alusión a las dos columnas de los templos masó- 39 discursos del año 1948, publicados al año si-
nicos, Jakhin y Boaz27, colaboró con Franco entre guiente en Valencia en la editorial Semana Gráfi-
1946-1951 en la redacción de una serie de artí- ca. Entre todos estos discursos destaca, como se
culos en el diario falangista Arriba, publicados en comentará en adelante, el texto España ante la
1952 como libro con el título Masonería28. Juan actual crisis mundial. Es en este volumen de dis-
Español, Gines de Buitrago29 o Hispanus30 fueron cursos y, en particular, en este último texto sobre
otros de los pseudónimos usados por Carrero. el que realizaremos un análisis sociodiscursivo y
Sin embargo, fue con Juan de la Cosa, en honor al en el que trataremos de revelar patrones en la
célebre marino nacido como él en Santoña, con construcción del discurso y el comportamiento
el que Carrero Blanco tuvo más protagonismo31. de algunos elementos específicos ligados a la
Con este pseudónimo se valió en los años cua- carga pragmática e ideológica en unos textos
renta de los micrófonos de Radio Nacional de Es- que, cabe recordar, a pesar de ser alocuciones,
paña32 para comentar la realidad política nacio- están especialmente institucionalizados y medi-
nal e internacional. Estos discursos aparecerían dos.
a la postre en cinco volúmenes: Comentarios de
un español, Las tribulaciones de don Prudencio, España ante la actual crisis mundial es una alocu-
Diplomacia subterránea, La gran baza soviética y ción de Carrero Blanco destinada a conmemorar
Las doctrinas del Komsomol33. el noveno aniversario del final de la Guerra civil
española y que destaca sobre el resto por la car-
25
Carrero Blanco, Luis, España y el mar. España ante ga ideológica que subyace al texto. Además, en
el mundo, Madrid, Editora Nacional, 1942. En 1964, el él los argumentos e ideas defendidos se aseme-
Instituto de Estudios Políticos reeditaría la obra aña- jan en algunos puntos a los dos últimos informes
diendo al original otros dos libros. secretos mencionados con anterioridad34 y que,
26
Moradiellos, Enrique, Franco…, op. cit., p. 106. presumiblemente, sirvieron de base para cons-
27
Romano, Max, “La Masonería de Jakim Boor, el libro truir la alocución radiofónica de 1948 ya en el
que escribió Franco contra la misma”, El Correo de Es- contexto más claro de inicio de la Guerra Fría; un
paña, 21 de junio de 2019.
comienzo que Carrero parece que previó cuatro
28
Boor, Jakim, Masonería, Madrid, Gráficas Valera,
1952. años antes. Esta similitud se pone de manifiesto
29
Campo Vidal, Manuel, Información…, op. cit., p. 72. incluso en los títulos: España ante la actual crisis
30
Camprubí, Lino, Los ingenieros de Franco: ciencia, mundial, en el capítulo analizado, y España ante
catolicismo y Guerra Fría en el Estado franquista, Bar- la situación actual del mundo, en el informe.
celona, Crítica, 2017, p. 169.
31
Tusell, Javier, Carrero…, op. cit., pp. 125-141. Si partimos de una definición de ideología como
32
Radio Nacional de España había sido fundada en “las creencias fundamentales de un grupo y sus
1937 por el gobierno de Franco en plena contienda miembros”35 y asumimos que tiene una dimen-
civil. Los medios de comunicación de masas fueron sión pragmática de impulso de la actividad, de
un instrumento clave de difusión de la ideología ofi- una materialización de las creencias en el mun-
cial, rasgo que comparte el franquismo con otros re- do y de posterior justificación de la obra reali-
gímenes antiliberales. Así, los discursos de Carrero
zada36, entonces podemos decir que el texto a
tenían un público potencial muy importante. Ya en el
decreto que declaraba el estado de guerra en julio de
analizar incide especialmente en esta compo-
1936, los medios de radiodifusión y prensa quedaban nente pragmática, a su vez legitimadora, según
bajo el estricto control del gobierno y debían dar las la cual el franquismo surge para reprimir la revo-
noticias oficiales que se les proporcionasen. A este lución comunista. Una de las ideas recurrentes
respecto véase: Jurado González, Javier, Estrategias en todo el volumen de discursos consiste en ver
de legitimación de la dictadura franquista a través de el comunismo nacido de la Revolución soviética
los medios audiovisuales (1936-1975) (Tesis doctoral), como el enemigo de España; una idea que en el
Getafe, 2015. p. 88, p. 101.
33
De la Cosa, Juan, Comentarios de un español, Va- Valencia, Semana Gráfica, 1949; De la Cosa, Juan, Las
lencia, Semana Gráfica, 1946; De la Cosa, Juan, Las doctrinas del Komsomol: comentarios de un español
tribulaciones de Don Prudencio: comentarios de un (quinta serie), Valencia, Semana Gráfica, 1950.
español (segunda serie), Valencia, Semana Gráfica, 34
1947; De la Cosa, Juan, Diplomacia subterránea: co- op. cit.
mentarios de un español (tercera serie), Valencia, Se- 35
van Dijk, Teun, Ideología y discurso, Barcelona,
mana Gráfica, 1948; De la Cosa, Juan, La gran baza Ariel, 2003, p. 14.
soviética: comentarios de un español (cuarta serie). 36
AUTOR 1.

texto concreto que nos ocupa se presenta cons- 2. Tópicos de La gran baza soviética
tantemente mediante la oposición antitética del
nosotros-ellos, concibiendo la ideología como La gran baza soviética figura como primer ca-
instrumento que alimenta “la idea de protección pítulo del volumen de discursos y da título a la
frente al otro escogido, que deberá ser defini- obra. Se trata de un discurso emitido el 12 de
do mediante prejuicios hasta adquirir suficiente febrero de 1948 y que podría concebirse como
fuerza como para aumentar el sentido, el signifi- una presentación del “otro”, es decir, de la Unión
cado y la necesidad del grupo ideológico”37. Soviética como amenaza para la humanidad en
el siglo XX. Carrero Blanco todavía no entra en
De cara al estudio del texto partiremos de una detalles sobre las formas de organización y fun-
adaptación de los postulados de van Dijk38 y cionamiento del comunismo soviético, aunque sí
Alonso39 sobre el análisis del discurso. En primer explica la finalidad de su carácter ateo, así como
lugar, trazaremos una descripción de la estruc- las razones por las que la considera una amenaza
tura general de toda la obra, con los principales tanto por su fin último (esclavizar a las masas)
tópicos presentes a lo largo de los 39 capítulos como por sus medios (uso de la mentira, el odio
o discursos. Destacaremos la centralidad del ca- y la desesperación). Precisamente por el uso de
pítulo primero, La gran baza soviética, que da estos medios Carrero Blanco adopta la locución
título y concede un sentido general a toda la de la gran baza soviética:
obra, y, sobre todo, del octavo, España ante la
actual crisis mundial, que, como hemos adver- “La mentira, la hipocresía, la deslealtad, son
tido, aglutina los temas más importantes desa- para los comunistas perfectamente lícitos
rrollados a lo largo del resto del libro. Posterior- en tanto sirvan a sus fines de atracción, esto
mente, realizaremos un recorrido a través del es en tanto produzcan desesperación y odio
contexto sociohistórico donde aparece la obra, contra sus enemigos. El comunismo preten-
ya que consideramos desacertado separar el es- de destruir lo que no es comunista con el
tudio del discurso de su contexto histórico: no es propio empuje de las masas a las que va a
posible comprender las “diferentes propiedades esclaviza después, y para ello lo primero que
internas del discurso en los niveles semántico, necesita es que estas masas estén desespe-
pragmático y estratégico si ignoramos el papel radas; que esta desesperación no tenga si-
de las condiciones, las funciones, los efectos y las quiera el consuelo que inspira el sentimien-
circunstancias de la producción y de la compren- to religioso (por eso el comunismo tiene
sión del discurso”40. Tras la contextualización, que ser ateo por táctica de procedimiento),
centraremos nuestra atención en el discurso Es- para que así las masas desesperadas odien
paña ante la actual crisis mundial para ahondar y se lancen a la destrucción sin pensar más
en la estructura temática y distribución de los tó- que en la revancha”42.
picos, relacionando estos últimos con los grupos,
Esta inquietante definición del “otro soviético”
conflictos y relaciones de poder expuestas en el
legitimaría, por tanto, una respuesta del régi-
texto41, reflejo de la situación política interna y
men español ante la amenaza: “¿Queréis evitar
externa que se vivía en España en ese momen-
la propagación del comunismo? Pues evitad la
to. Asimismo, analizaremos algunas cuestiones
desesperación y el odio”43.
relacionadas con la retórica del texto y reflexio-
naremos sobre la variación del pensamiento de Será en el capítulo octavo, España ante la actual
Carrero Blanco a lo largo de su vida. crisis mundial, donde el autor definirá las líneas
para afrontar y enfrentarse a esta amenaza, ra-
zón por la que los tópicos que detallaremos a
continuación son más explícitos y frecuentes
37
Villegas, Francisco Manuel, Análisis crítico del dis-
curso político de Vladimir Putin en el contexto del re- precisamente en este texto. Esta destacada im-
surgimiento nacional ruso, Granada, EUG, 2017, p. 55. portancia es coherente con el hecho de que,
38
van Dijk, Teun, “Opiniones e ideologías en prensa”, como ya se ha advertido, fuese precisamente
Voces y cultura, 10 (1996), pp. 9-51. este discurso el emitido para conmemorar el fi-
39
Alonso, Luis Enrique, La mirada cualitativa en socio- nal de la Guerra civil española o guerra de libera-
logía, Madrid, Fundamentos, 1999, p. 216. ción nacional según la terminología del régimen.
40
van Dijk, Teun, Estructura y funciones del discurso,
México, Siglo XXI, 1991, p. 113. 42
De la Cosa, Juan, La gran baza soviética…, op. cit.,
41
Conde, Fernando, Análisis sociológico del sistema pp. 8-9.
de discursos, Madrid, CIS, 2012. 43
Ibid., p. 9.

Sirve, por tanto, el capítulo octavo para dar solu- na izquierda aparecen los temas asociados a la
ción a lo presentado en el primer capítulo de La Crisis mundial y en la derecha los asociados con
gran baza soviética. España, afectada también por esta crisis, aunque
con capacidad de respuesta por su nuevo régi-
Es importante comprender que la estrategia pro- men encabezado por Franco. En el centro de la
puesta para luchar o defenderse de dicha ame- Tabla aparecen dos tópicos que parecen servir
naza no debe plantearse como una cuestión in- para conectar los acontecimientos de la Guerra
terna o, al menos, no únicamente interna, sino civil española con las tensiones geopolíticas de
como un problema de orden mundial. En esta la Guerra Fría, tratando de convencer al lector u
línea es interesante comprender que Carrero oyente de la importancia de la España de Franco
Blanco tratará en sus discursos de implicar, de para salvar a la civilización occidental del comu-
hacer un llamamiento por el bien de la huma- nismo soviético (“lección española al mundo”),
nidad. Y de esta finalidad universalista surge en así como de demostrar que España puede y debe
términos retóricos una sensación de premura, ser un socio clave en una “alianza internacional”
de urgencia. que se enfrente el expansionismo soviético,
alianza que por aquel entonces significaba in-
España atiende a una crisis mundial ante la que
defectiblemente un acercamiento a los Estados
debe reaccionar. Esta crisis tiene su origen en la
Unidos, tal y como veremos en el siguiente apar-
secularización de la sociedad y la injusticia social,
tado dedicado al contexto sociohistórico.
que el comunismo pretende instrumentalizar en
su propio beneficio mediante una estrategia ba- Tabla 1. Tópicos del capítulo España ante la ac-
sada en el odio y la desesperación, que utilizará tual crisis mundial
para implementar su proyecto político. Por otro
lado, se destaca la debilidad de las instituciones
de la democracia liberal multipartidista, llama-
das por el franquismo “democracia inorgánica”,
puesto que permiten y facilitan que el comu-
nismo implemente su estrategia con éxito. Esta
sería la argumentación centrada en el otro, es
decir, en la Unión Soviética. Pero Carrero Blan- Elaboración propia. Fuente: de la Cosa, Juan, La
co sabe de la importancia de trasladar ese razo- gran baza soviética…, op. cit., pp. 41-49.
namiento y advertencia al caso español. Partirá,
por tanto, de la representación general del pro- Si observamos cómo se distribuyen estos tópicos
blema para posteriormente centrarse en la rea- a lo largo del volumen completo de los 39 dis-
lidad de España, en la que la II República es el cursos de La gran baza soviética (Tabla 2), que-
reflejo de esa crisis mundial, por sus tendencias da clara la centralidad del capítulo analizado en
anticatólicas (por influjo de la masonería), anti- profundidad en este trabajo, en el que aparecen
nacionales y pro-soviéticas, y en suma, por su absolutamente todos los tópicos, algo que no
objetivo último de convertir a España en satélite sucede en ningún otro capítulo de la obra. Los
comunista de Rusia (sic). Ante esto, se propone tópicos aquí destacados no son todas las temá-
una reacción, que no sería otra que la “Guerra de ticas abordadas por Carrero (ONU, libertad de
liberación nacional”, que alumbró un nuevo régi- prensa, etc.), pero sí los que podemos decir que
men en el país, auténticamente independiente muestran una posición más relevante en cuanto
de cualquier manejo exterior. Esta respuesta a la a tematización de los discursos. De igual forma,
amenaza, dirigida por Franco, caudillo gracias a el tópico 5 (II República) refiere a la actividad que
la providencia divina, tiene como pilares la “de- realizaban en ese año los antiguos dirigentes re-
mocracia orgánica” (sistema antitético al pluri- publicanos en el exilio y que pretendían influir
partidismo), la justicia social y el catolicismo. sobre las potencias vencedoras de la II Guerra
Mundial para que les devolviese el poder me-
La línea argumentativa que acabamos de resu- diante una intervención en España. En la Tabla
mir se recoge en la Tabla 1, en la que se asigna 2 aparecen tópicos acompañados del nombre de
un número a cada uno de los tópicos localizados. países (mediante guion bajo). Esto sucede cuan-
A su vez, estos aparecen agrupados en torno a do el tópico referido se circunscribe a una reali-
dos dimensiones, crisis mundial y España, que dad histórica, geográfica o cultural concreta. Por
se corresponden con los contextos en los que ejemplo, en el capítulo 22, La huelga del puer-
ubica Carrero Blanco el conflicto. En la colum- to de Londres y la rebelión de Tito, los tópicos

detectados (2 y 4) se acompañan de la etiqueta miento de un cuerpo de voluntarios (la División

Reino Unido, lo que significa que Carrero Blanco Azul) para luchar bajo los estandartes alemanes
se está refiriendo a la debilidad de la democra- contra la URSS44. Sin embargo, ya hacia 1943 y
cia multipartidista en este país para hacer frente adivinando la derrota alemana, España empieza
a la estrategia comunista de desestabilización a bascular hacia los aliados45. Esto no será óbi-
que en este caso instrumentaliza las huelgas. En ce para que, al término de la contienda, el 2 de
este sentido, destaca otra constante: la crítica agosto de 1945 en la Conferencia de Postdam,
del intento de intervención de los gobiernos de la coalición antifascista vencedora imponga el
Francia, Italia y, sobre todo, Reino Unido en el aislamiento internacional de España, al vetar su
gobierno español para que se deshaga de Franco ingreso en la Organización de las Naciones Uni-
y vuelva a la “democracia inorgánica”. das46. En 1946 la Asamblea General de la ONU
solicita la retirada de embajadores. Solamente
Tabla 2. Presencia de los tópicos del capítulo Es- El Vaticano, Portugal, Irlanda y Argentina se nie-
paña ante la actual crisis mundial en el resto de gan47. Además, Juan de Borbón, aspirante al tro-
capítulos del libro no que se encontraba en el exilio, había publica-
do en marzo de 1945 el Manifiesto de Lausana,
donde pedía a Franco que abandonase el poder,
para permitir la restauración en su persona de
una monarquía liberal de signo moderado para
reconciliar al país. Su programa político incluía
la elaboración de una constitución, sufragio uni-
versal, amnistía, reconocimiento de la diversidad
regional y reformas económicas para repartir
mejor la riqueza48. La situación interna también
era difícil por la actividad de las guerrillas de
inspiración, sobre todo comunista, que seguían
combatiendo con las armas al régimen franquis-
ta. Sin ir más lejos, en 1944, se produjo el intento
de invasión guerrillera desde Francia por el Valle
de Arán. Aunque la operación fracasó, aumentó
la sensación de peligro49. La escasez material y el
racionamiento50 que experimentaba el país tras
el final de la guerra civil tampoco ayudaba a la
tranquilidad. El fantasma del hambre acechaba
y solamente la ayuda económica del dirigente
argentino, Juan Domingo Perón51 en 1946, palió
en algo la situación. Ante tan complicado pano-
rama, Carrero Blanco llegará a decir a Franco que
la única fórmula para sobrevivir es “orden, uni-
dad y aguantar”52.
En 1948, año del que data el texto que nos ocu-

pa, la situación ha cambiado. Las guerrillas co-
Elaboración propia. Fuente: de la Cosa, Juan, La
gran baza soviética…, op. cit. 44
Biescas, José Antonio, y Tuñón de Lara, Manuel, His-
toria de España (Tomo X): España bajo la dictadura
3. CONTEXTO SOCIOHISTÓRICO DE LA PRO- franquista, Madrid, Labor, 1983, pp. 179-180.
DUCCIÓN Y COMPRENSIÓN DEL DISCURSO 45
Ibid., pp. 192-196.
46
Moradiellos, Enrique, Franco…, op. cit., p. 106.
En el apartado primero señalamos que España 47
Ibid., p. 114.
se mantuvo al margen de la II Guerra mundial, 48
Biescas, José Antonio y Tuñón de Lara, Manuel, His-
porque a pesar de la cercanía a las potencias del toria de España (Tomo X)..., op. cit., p. 202.
Eje, la situación no era propicia para sacar ven-
49
Ibid., pp. 209-212.
tajas materiales o políticas de la entrada en el
50
Ibid., pp. 38-39.
conflicto. Aun así, podemos entender que Espa-
51
Martínez, Nelson, El peronismo. Madrid, Cuadernos
Historia 16, 1985, p. 14.
ña realizó un gesto hacia Hitler con el recluta- 52

munistas dejan de actuar.53 Además el régimen Se sobreentiende del texto que Carrero ubicaba
ha alejado la posibilidad de restauración en la el comienzo de lo que posteriormente pasaría a
figura de Juan, instaurando una monarquía de llamarse Guerra Fría en la España de 1936. Pre-
tipo tradicional, católica, social y representativa. cisamente en esto consistía la citada “lección es-
Así, según la Ley de Sucesión de 1947 Franco se pañola al mundo”:
mantiene en el poder y elegirá sucesor cuando
lo crea conveniente54. Como afirma Moradiellos, “Fuera de España, aquel 1º de abril fue sim-
la estrategia de resistencia numantina de Fran- plemente el final de la guerra civil española.
co, preconizada por Carrero, había funcionado. Nadie fue capaz de darse cuenta de que se
En el contexto de naciente Guerra Fría, los es- trataba del final victorioso de la primera ba-
trategas militares norteamericanos presionan a talla librada contra el comunismo por la civi-
su gobierno para acercar posturas a España55. El lización cristiana, y mucho menos de pensar
aislamiento empieza a desvanecerse. que años más tarde el mundo entero habría
de verse ante la misma amenaza y que Es-
Tras la paulatina consolidación de regímenes paña acababa de señalar, con su ejemplo
prosoviéticos en Europa central y del este, el en- heroico el único camino de salvación”57.
frentamiento con la Unión Soviética va tomando
forma. Carrero Blanco alude a la sovietización de La “desnazificación-desfascistización” se obser-
Checoslovaquia y de Europa oriental (capítulos va en otro plano, el de la ocultación de la ayuda
3, 11 y 32), la creciente influencia de los comu- directa que Alemania e Italia prestaron a la Es-
nistas en Francia y sobre todo Italia (capítulos 6, paña de Franco. El texto de Carrero Blanco su-
12, 13 y 24), la desestabilización de Yugoslavia braya con gran énfasis las dificultades que tuvo
(capítulo 22) o la limitación de la actividad de los para afrontar el bando sublevado. Así se arguye
partidos comunistas en Estados Unidos y Gran que mientras que el régimen franquista no contó
Bretaña (capítulos 16 y 17) por estar controla- con ayuda internacional, los defensores de la II
dos, según Carrero Blanco, por el gobierno so- República recibieron el auxilio de la URSS y las
viético. simpatías de Francia. Las armas, el apoyo logísti-
co e incluso la intervención directa de unidades
Aunque el texto todavía muestra un cariz anti- militares alemanas e italianas nunca existieron.
liberal de raíz tradicional-católico, ya coloca al Incluso la aquiescencia británica, a través de la
comunismo soviético como la primera amenaza política de la “no intervención” que benefició a
para la paz mundial. De este modo, Carrero Blan- los sublevados, es presentada como contrapro-
co trata de “desnazificar-desfascistizar” la Guerra ducente para Franco:
civil española; esto es, intenta que el conflicto
deje de ser visto como el preludio a la II Gue- “En los primeros meses de 1936 el proble-
rra Mundial, que se deje de vincular la España ma de España es pavoroso. Rusia y el Fren-
de Franco con el finiquitado fascismo italiano y te Popular francés apoyan decididamente
nacionalsocialismo alemán, que es el argumento a los rojos. Inglaterra, en cuya política está
que habían esgrimido las potencias vencedoras el mantener buenas relaciones con Francia,
para aislar al régimen franquista. De hecho, la pues su Ejército es pilar fundamental de los
aprobación en 1945 del Fuero de los Españoles, planes militares británicos, deja hacer fría-
una declaración de derechos y libertades y la Ley mente. La España nacional no tiene dinero,
de Referéndum, iban en la dirección de disimu- ni industria, ni barcos, ni armas, ni nada.
lar los vínculos nazi-fascistas del régimen56, tal y Sólo tiene espíritu. Hay que hacer una gue-
como trata de hacer Carrero en el texto. rra larga sin medios”58.
Para Carrero Blanco, la contienda española fue Hay un tercer elemento simbólico de alejamien-
la primera batalla a nivel internacional contra el to de las potencias del Eje, la desaparición del
comunismo soviético. España se situó, por tanto, judaísmo como bestia negra del franquismo,
en la vanguardia a la hora de señalar los autén- del que, de forma llamativa, no quedará rastro
ticos peligros que se materializarían a la postre. en los discursos de La gran baza soviética. Ade-
más de en los informes secretos ya menciona-
53
toria de España (Tomo X)..., op. cit., p. 249.
54
Moradiellos, Enrique, Franco…, op. cit., p. 116. 57
55
Ibid., p. 117. p. 41.
56
Ibid., pp. 108-110. 58
Ibid., p. 46.

dos, Palmero59 muestra cómo en 1942 Carrero discursivo con el uso de los pares “problema-so-
Blanco hacía gala de sus veleidades antisemitas lución”, “nosotros-ellos”, “España-mundo”.
en España y el mar, lo que en aquella época no
desentonaba con el ambiente intelectual y polí- 4.1. El origen del problema: secularismo e injus-
tico predominante. Sin embargo, en términos de ticia social en el marco de la “democracia inor-
oportunidad política y después de lo que supuso gánica” (tópicos 1 y 4)
la condena internacional al proyecto nazi de ex-
Comentábamos en el apartado anterior que al
terminio judío tras el final de la II Guerra Mun-
término de la II Guerra Mundial el régimen fran-
dial60, parece claro que Carrero supo disimular
quista se había deshecho de buena parte de su
su sentimiento antisemita para evitar conflictos
verborrea “fascistizante”, lo que llevará a remar-
innecesarios con Estados Unidos y mejorar la
car mucho más sus rasgos de “tradicionalismo
imagen del régimen en el exterior61.
católico”64. El partido único, FET de la JONS, fue
En 1950 la situación ha cambiado para España. perdiendo progresivamente el protagonismo
La ONU levanta las sanciones. En 1953 la Espa- que había tenido en los primeros años del régi-
ña de Franco refuerza aún más su perfil católi- men. El propio Carrero Blanco, a pesar de haber
co con la firma de un nuevo Concordato con la sido consejero de la mano de Pedro Gamero,
Santa Sede. Además, Estados Unidos negocia ya desconfiaba del poder del partido en el régimen
abiertamente con el régimen franquista. El mis- y consiguió aminorar su poder y autonomía. Esto
mo año de la firma del tratado con el Vaticano, le llevó a enfrentarse con Ramón Serrano Suñer
España cierra con el gigante norteamericano o José Luis Arrese y situar en puestos claves a la
acuerdos de cooperación en el ámbito económi- tecnocracia católica del Opus Dei en las décadas
co, cultural y, sobre todo, militar62. Estados Uni- de los cincuenta y sesenta65.
dos instalará bases en suelo español a cambio de
Carrero Blanco había estado desde su juventud
contraprestaciones económicas y se comprome-
en la órbita del integrismo católico, bebiendo
terá al fortalecimiento y modernización de las
de pensadores como Juan Vázquez Mella66. El
fuerzas armadas hispanas63. La España de Fran-
pensamiento tradicionalista católico que recha-
co había conseguido “hacerse útil” e integrarse
zaba el liberalismo económico y político era muy
en la alianza anticomunista internacional con su
pujante en esta época. Figuras como Ramiro de
aproximación a Estados Unidos. Se daba carta de
Maeztu, José Agustín Pérez del Pulgar y Ramírez
naturaleza real al marco de legitimación del fran-
de Arellano, José Calvo Sotelo, Joaquín Azpiazu
quismo enunciado por Carrero Blanco en 1948.
o José Pemartín, conformaron doctrinalmente
4. ESTRUCTURA TEMÁTICA Y DISTRIBUCIÓN al régimen. Maeztu por ejemplo, se oponía al
DE LOS TÓPICOS: GRUPOS, CONFLICTOS Y laissez faire y aspiraba a construir un capitalismo
RELACIONES DE PODER REPRESENTADOS EN cristiano basado en los gremios y el proteccionis-
EL TEXTO mo económico; por su parte, Azpiazu defendió
el corporativismo y el reforzamiento y la caridad
Una vez destacados los principales tópicos pre- como política de Estado para disminuir las mi-
sentes en la obra, es interesante observar cómo serias del capitalismo y esquivar la rebelión so-
Carrero Blanco los despliega para construir una cial67. Además, su primacía en la educación, en
narración rebosante de pretensiones ideoló- la definición de las normas estéticas y de morali-
gicas, a la vez que bien sostenida en cuanto a dad pública, harán que el régimen franquista sea
cohesión y coherencia desde el punto de vista denominado como nacional-católico68.
59
Palmero Aranda, Fernando, El discurso antisemi-
ta en España (1936-1948) (Tesis doctoral), Madrid,
2016, p.178, nota 427. 64
60
Sobre el proyecto nazi de exterminio véase Po- toria de España (Tomo X)..., op. cit., pp. 469-470.
liakov, León, Breviario del odio: El Tercer Reich y los 65
Tusell, Javier, Carrero…, op. cit., p. 59; p. 72; p. 217;
judíos, Barcelona, Cómplices Editorial, 2011. p. 260.
61
Téllez, Antonio, “España y la II Guerra Mundial…”, 66
Ibid., p. 18.
op. cit., p. 270. 67
Camprubí, Lino, Los ingenieros de Franco…, op. cit.,
62
Niño, Antonio, La americanización de España, Ma- pp. 48-54.
drid, Catarata, 2012. 68
Pérez-Agote, Alfonso, “Sociología histórica del na-
63
Marquina, Antonio y Mestre, Tomás, España y la cional-catolicismo español”, Historia contemporánea,
OTAN. Madrid, Cuadernos Historia 16, 1985. 26 (2003), pp. 207-237.

La raíz del mal, la semilla de la discordia estaría le ofrecen el oro y el moro, para que gobier-
en que el progreso económico y técnico del mo- nen, y naturalmente, el pueblo soberano
derno capitalismo solamente habría beneficiado da su voto a quien le da el pan, según dice
a unos pocos, excluyendo a la mayoría, que tiene con gráfica expresión; por eso los primeros
que vender su fuerza de trabajo en el mercado. tiempos de la democracia inorgánica son el
El progreso económico no tiene en cuenta los imperio del caciquismo, que es un fraude
principios morales establecidos por la religión escandaloso de las famosas libertades”71.
católica, que buscan hacer compatible la pro-
piedad privada con la justicia social para las ma- 4.2. Estrategia y proyecto comunista en el con-
sas, dentro del marco de lo que se conoce como texto de la II República: el fracaso definitivo de
“destino universal de los bienes”: la “democracia inorgánica” (tópicos 2, 3, 4 y 5)
“[…] El capitalismo se impone y se ofrece Así, se puede decir que el liberalismo económico
como un magnífico instrumento de pro- y político ha sembrado la semilla para la injusticia
greso económico. Crea riqueza, aumenta social. Y las masas, fruto de esa injusticia se re-
la producción, lo que es indispensable para belaron contra todo. Su desesperación individual
atender las necesidades del aumento de la devino en un gran torrente destructivo contrario
población, pero es egoísta, no es cristiano, al orden establecido basado en el rencor y en la
y como en los regímenes liberales no hay sed de venganza. Y esa fuerza destructiva fue ca-
quien le imponga obligaciones en relación a nalizada por poderosos grupos internacionales.
las masas que han tenido que hacer de sus Aquí Carrero Blanco da a conocer a los grandes
brazos y de su técnica una mercancía más, enemigos que justificarán la aparición del fran-
que se cotiza según la ley de la oferta y la quismo: la masonería, cuyo fin era descatolizar
demanda, produce la injusticia social”69. España, el capitalismo internacional y los parti-
dos marxistas. En este volumen de discursos, y
Si bien la primera crítica apunta contra el libe- concretamente en el capítulo 17, Carrero Blanco
ralismo económico, tampoco se escapa el libe- da a entender, sin llegar a afirmar abiertamente,
ralismo político. Este proporciona una serie de que la masonería es un movimiento internacio-
libertades formales al individuo, como votar, nal controlado por los británicos y que por eso
pensar o expresarse sin censura previa, que, sin no está prohibida en este país. La masonería
embargo, no sirven para garantizarle una vida sería la forma de los británicos de inmiscuirse
digna. Las libertades formales son un fraude en los asuntos internos de España72.La preo-
para las masas que sufren de la injusticia social, cupación en Carrero por la supuesta influencia
porque deberán entregar su voto al mejor pos- británica no desaparecerá. Décadas más tarde
tor para conseguir sobrevivir. Carrero Blanco re- pensará que Reino Unido financiaba a ETA73. Esta
laciona este fenómeno con el sistema político de visión conspirativa de la política a todos los nive-
la Restauración borbónica (1874-1931), donde les, donde poderosos grupos ponen en marcha
los caciques locales manipulaban las elecciones estrategias oscuras para lograr sus objetivos es
concediendo favores económicos a su clientela un rasgo presente también en el antisemitismo,
de votantes. Se trata de la primera experiencia como ha mostrado Cohn74. Aunque los judíos se
de la “democracia inorgánica”70 en España: cayesen del relato de la conspiración universal
de Carrero, esta manera de entender la política
“El hombre es libre y soberano, cuya comida estaba muy enraizada en la dictadura, como se
del día siguiente depende de la voluntad de refleja en los escritos de intelectuales franquis-
su patrón, tiene derecho eso sí, a votar; a
dar su representación a unos señores, que
69
de la Cosa, Juan, La gran baza soviética…, op. cit., 71
de la Cosa, Juan, La gran baza soviética…, op. cit.,
p. 43. p. 43.
70
Por esta razón hemos destacado la presencia del 72
Tusell, Javier, Carrero…, op. cit., p. 116; p. 129.
tópico 4, “debilidad de la ‘democracia inorgánica’”, 73
Sartorius, Nicolás y Sabio, Alberto. El final de la
tanto en este apartado como en el posterior. Para Ca- Dictadura: la conquista de la democracia en España,
rrero Blanco la monarquía de la Restauración de 1874 noviembre de 1975-junio de 1977, Madrid, Temas de
y el régimen republicano de 1931, a pesar de ser for- Hoy, 2007, p. 678.
mas diferentes de gobierno, comparten su carácter 74
Cohn, Norman, El mito de la conspiración judía
de democracia inorgánica con todas las rémoras que mundial. Los protocolos de los sabios de Sión, Madrid,
ello acarrea. Alianza Editorial, 2010.

tas como Mauricio Carlavilla75 o los discursos y y lanzar a las masas contra el orden establecido:
escritos del propio Franco, que hasta el final de “el único camino era que las demás naciones se
sus días siguió pensando que existía un “contu- deshicieran en una guerra y luego explotar la
bernio” de los enemigos de España, idea que desesperación que produce la crisis económica
hunde sus raíces históricas en el catolicismo re- subsiguiente”79. Según nos da a entender Carre-
accionario de nuestro país76. ro Blanco, esto fue lo que hizo la URSS durante la
II República. La República fue un proyecto políti-
El marxismo es, de todos los participantes en la co impulsado por los masones anticatólicos y, so-
conspiración, el enemigo más temible, al que bre todo, por radicales comunistas que preten-
más espacio dedica Carrero, porque su programa dían convertir a España en el satélite soviético
político se hizo realidad en Rusia en 1917. Pero el del que hablamos anteriormente:
comunismo implantado en Rusia es un desastre.
No funciona en el plano económico ya que, al “La garra de Moscú la sentimos los espa-
destruir la propiedad privada, elimina cualquier ñoles antes que nadie en nuestra propia
estímulo al trabajo. La única solución del modelo carne. En cinco años de República, mien-
soviético es el terror: tras los servidores del designio masónico
se esfuerzan por descatolizar al pueblo, el
“Ha desaparecido la propiedad, ha desapa- comunismo les gana la mano, y el Gobierno
recido el estímulo del trabajo, no hay pro- del Frente Popular está a punto de entregar
greso económico, y ante la catástrofe se a España a Moscú cuando estalla el Movi-
trata de salvar la crisis con el aislamiento y miento Nacional”80.
con el terror, y las masas obreras y campesi-
nas pasan a ser esclavas de una minoría que 4.3. El Movimiento Nacional como reacción sal-
asume la función del Estado”77. vadora (tópicos 7, 8, 9 y 10)
El segundo aspecto sobre el que Carrero llama El Movimiento Nacional conseguirá derrotar
la atención es “el imperialismo soviético”: “La el proyecto de la II República tras una guerra e
solución de la crisis del comunismo ruso exigía implantará un nuevo modelo de sociedad diri-
su expansión por el mundo entero; crear la Gran gido por Franco, un líder carismático dotado de
República Soviética Universal bajo el despótico grandes cualidades81, que alcanzaba la más alta
mandato de Moscú”78. Este punto es clave por- magistratura gracias a la providencia divina. En
que supone establecer la conexión entre la Gue- el resto de la obra encontramos referencias lau-
rra civil española y la Guerra Fría: legitimar el datorias a Franco en los capítulos 25, 26, 32 y 35,
golpe de Estado de julio de 1936 haciéndolo pa- en los cuales se insiste en que Franco fue el único
sar como la primera lucha contra el comunismo estadista del mundo que vio venir la amenaza so-
soviético a nivel internacional. El argumento es viética desde el principio e hizo algo para evitar-
fundamental para poder vender el acercamien- lo. En este fragmento se observan las cualidades
to con los Estados Unidos que se va a producir específicas del líder en el terreno militar, político
a principios de la década de los cincuenta. El ex- y diplomático al mantener a España al margen
pansionismo soviético convierte al comunismo de la II Guerra mundial:
en un virus que pretende y necesita implantarse
en otras sociedades políticas para poder sobrevi- “Un clamor nacional designa al general
vir. Su modus operandi consiste en aprovecharse Franco. No es el más antiguo ni el de más
de las ventajas que concede el liberalismo políti- edad, pero España entera y sus mismos
co (“democracia inorgánica”), de ahí su debilidad compañeros saben que es el más capaz. Su
y fracaso, para crear desórdenes, generar el caos prestigio no tiene comparación con el de
ninguno de los que le rodean […]. El Cau-
75
En esta línea, véase: Connolly de Pernas, Eduardo, dillo sabe ganar la guerra cuyo fin hoy cele-
Mauricio Carlavilla: el encanto de la conspiración, Hi- bramos; pero lo que aún le hace más acree-
bris: Revista de bibliofilia, 23 (2004), pp. 4-19. dor de la eterna gratitud de los españoles es
76
Sánchez Illán, Juan Carlos y Lumbreras Martínez, que sabe también ganar la paz encauzando
Daniel, Francisco Franco, articulista de incógnito la vida de la nación al margen de todos los
(1945-1960), Historia y comunicación social, 21/1
(2016), p. 50. 79
Id.
77
De la Cosa, Juan, La gran baza soviética…, op. cit., 80
Id.
p. 45. 81
Moradiellos, Enrique, Franco…, op. cit., pp. 208-
78
Id. 228.

errores del pasado; y tiene que realizar esta Esta doctrina económica aquí descrita debe ser-
labor mientras nos libra, por su exclusiva ac- vir para acabar con la injusticia social ligada a las
ción personal, de los horrores de la pasada primeras fases del capitalismo y, por tanto, con-
contienda mundial, a la vez que hace frente seguir acabar con las bases objetivas que permi-
a la más violenta ofensiva internacional que ten al enemigo (la llamada subversión comunista
jamás conoció Estado alguno. Su fórmula es dirigida desde Moscú) manipular a las masas. Se
sencilla, como todas las grandes ideas; bajo trata de atacar la raíz de este problema socioeco-
la inspiración del Evangelio, como única nómico del mundo moderno, desde la tradición
fuente de Verdad, hacer compatible la justi- católica. En el plano político, el régimen franquis-
cia social con el progreso económico para el ta propone una solución diferente a la demo-
exclusivo servicio de la patria”82. cracia representativa pluripartidista. Frente a la
“democracia inorgánica”, el franquismo defiende
El franquismo se presenta como una tercera vía la democracia orgánica, un sistema en el que el
entre el capitalismo liberal y el socialismo mar- pueblo elige a sus representantes sin necesidad
xista. Esta vía de carácter tradicional respeta la de contar con partidos políticos:
propiedad privada de los medios de producción,
pero propone una intervención económica de “El régimen español es, además, el único
carácter paternalista e inspirado en la doctrina verdaderamente democrático, pues es el
social de la Iglesia Católica, como explicamos al único que permite la intervención del indi-
principio del apartado, a modo de instrumento viduo en la gobernación del Estado a través
para combatir la injusticia social83. de un cauce racional y activo y le redime de
la tiranía de los partidos políticos, que se
“El régimen español reconoce la propie- arrogan su representación y no le sirven”86.
dad, pero empezando por la de reconocer
la propiedad del derecho a la vida, que es El cauce racional y activo hace referencia a la re-
una propiedad que da Dios a todos los se- presentación corporativa u “orgánica” de regus-
res. Todo hombre, por endeble que sea su to fascista, pero también con sólidas bases en
naturaleza física y por menguada que sea su el pensamiento político tradicional católico que
capacidad intelectual, tiene un sagrado de- pone la vista en los antiguos gremios medievales.
recho a alimentarse, a vestirse, a disponer Se considera que no son los individuos aislados,
de una habitación digna de un ser humano, sino los sujetos en cuanto partes de colectivida-
y a que todo esto se le dé gratis cuando esté des, los que ejercen la actividad social, econó-
enfermo o cuando por ancianidad o incapa- mica y también política. Estas colectividades que
citación no pueda trabajar. Tiene el mismo constituyen el organismo social son la familia, el
derecho a poder criar, educar y formar para sindicato (con funciones parecidas al gremio) y el
el trabajo a todos los hijos que Dios le man- municipio. Es a través de estos colectivos como
de. Satisfecho este mínimo minimórum que se conforman las instituciones político-adminis-
cada cual gane más con arreglo a su capa- trativas del país, incluyendo las Cortes españo-
cidad intelectual o su voluntad para el tra- las o parlamento. Todas estas ideas habían sido
bajo”84. sistematizadas por el jurista afecto al régimen
Luis del Valle Pascual87 en 1942, año en el que
Conviene resaltar que el fragmento referido a la también se aprobaría la Ley de Cortes. Carrero
justicia social es muy parecido a otro encontrado Blanco llama la atención sobre otra ventaja de
por Téllez85 en unos apuntes en el archivo fami- este sistema frente a la democracia liberal o “in-
liar de Carrero Blanco con el título Notas sobre la orgánica”: impediría que los partidos marionetas
situación política del 29 de agosto de 1945, por dependientes de la URSS se infiltraran en el sis-
lo que, de nuevo, podríamos conectar el texto tema político con fines espurios. Este problema
analizado con diferentes textos precedentes. que Carrero denuncia y que se estaba dando en
Francia, Reino Unido o Italia fue precisamente el
que aquejaba a la II República española: “deses-
82
peración que habrían de fomentar los vasallos
p. 46.
83
Tusell, Javier, Carrero…, op. cit., pp. 134-136.
84
p. 47. 86
85
Téllez, Antonio, “Carrero Blanco, veinte años des- p. 47.
pués…, op. cit., p. 26. 87
Moradiellos, Enrique, Franco…, op. cit., p. 222.

de Moscú, infiltrados en la política de esos países fin de la guerra civil. Aquí hay que insistir en el
gracias a la democracia inorgánica”88. hecho de que se trata de un discurso político
que, según hemos defendido, nace de diferen-
4.4. Lección española y colaboración en una tes textos precedentes no preparados, al menos
alianza internacional anticomunista, desde la a priori, para su alocución. Esto implica que los
independencia nacional (tópicos 6, 11 y 12) rasgos característicos, llamémosles, híbridos del
género del discurso político oral, es decir, la con-
Ya nos hemos referido a la “lección española al
servación de rasgos de oralidad y del texto es-
mundo” en varias ocasiones como intento de
crito, sean especialmente acuciados y, en parte,
reinterpretación de la Guerra civil española, se-
subrayados intencionadamente.
gún la cual esta era vista como primer episodio
de la Guerra Fría con el fin de transformar a Es- Por su adaptación al medio radiofónico, en este
paña de país repudiado por sus vínculos nazi-fas- texto la duplicidad o split illocution cobra es-
cistas a país socio, con la experiencia de quien pecial importancia: por un lado, se dirige a la
ya vio venir el problema del comunismo. Carrero audiencia, en parte desconocida (simpatizante
consideraba que España estaba dispuesta a co- potencial y oyente por convencer); por otro, se
laborar para conjurar la amenaza, pero siempre dirige a otro tipo de público más conocido y con-
que se respetaran sus instituciones políticas. creto (simpatizante consolidado u oyente ante
Esta es una constante a lo largo de toda la obra, el que corroborar). No sorprende, por tanto,
sobre todo cuando se critican los intentos de los que el discurso se construya sobre un lenguaje
gobiernos de Francia y, especialmente, Reino sumamente cercano al de régimen sin ningún
Unido para que España abandonara su régimen, tipo de reparo. No olvidemos una idea que he-
que según Carrero Blanco tan buen resultado ha- mos defendido continuamente: el texto analiza-
bía dado, precisamente, en el combate contra el do y, probablemente, varios de los capítulos de
comunismo: la obra completa, beben y en parte reproducen
el contenido de varios informes secretos y otras
“Ante la grave crisis que el mundo experi-
notas del autor sobre la realidad política y el día
menta en estos momentos la actitud de
a día del régimen90. Esta cercanía para con el sim-
España es la del veterano que ya sabe del
patizante no deja de ser un mecanismo de fideli-
peligro. España está serena porque tiene
zación, de familiaridad, que facilita que el lector
confianza en Dios y en sí misma. Está con-
u oyente dote de mayor verosimilitud, que com-
vencida de su razón; está convencida del
prenda como verdadera la descripción de los su-
acierto de su fórmula política que, natural-
cesos y argumentos expuestos. No en vano uno
mente, no tiene la pretensión de imponer
de los objetivos prioritarios de Carrero con estos
a nadie, pero no está dispuesta tampoco a
discursos es el de implicar, hacer un llamamiento
que nadie le dé lecciones ni la haga impo-
y convencer.
siciones de ningún orden, que a España le
pesa mucho su historia para que se la ma- Ya en la primera línea se deja claro que “los espa-
neje”89. ñoles escuchábamos”91, una elección que, si bien
pudiera pasar desapercibida, no deja de enfati-
5. RETÓRICA Y FORMAS DE CONSTRUIR LA
zar la inferencia según la que el lector u oyente
IDEOLOGÍA
comprende que el autor, como él, es también
De lo expuesto hasta este momento se deduce español. Partimos, por tanto, de una cualidad
que el texto debe guardar y salvaguardar ciertas compartida determinante que podría augurar
premisas o patrones en la construcción y elabo- una unidad de pensamiento: somos uno. Ya casi
ración del aparato ideológico. Estamos ante un al final del texto se recurrirá a la inmutabilidad
texto altamente polarizado construido precisa- de este “somos”: “así somos y nada nos hará
mente para causar una reacción, una impresión cambiar”92.
profunda en el lector, aunque deberíamos decir
oyente si nos ceñimos a la ingenua idea de que
el texto tenía por destino ser una alocución ra- 90
diofónica con motivo de la conmemoración del op. cit. Téllez, Antonio, “Carrero Blanco, veinte años
después…”, op. cit.
88
De la Cosa, Juan, La gran baza soviética…, op. cit., 91
p. 45. p. 41.
89
Ibid., 48-49. 92
Ibid., p. 48.

A este primer nosotros, posteriormente crista- cadencia (en la lectura y en la alocución) domina-
lizado en “nuestro régimen”, se le añade “con da por las pausas, normalmente motivadas por
júbilo”93, consiguiendo de manera bastante ru- un uso casi excesivo de las comas. No asistimos a
dimentaria presentar la alegría como estímulo; un florilegio de conceptos y palabras propias del
algo que, dicho sea de paso, también harían régimen como es de esperar en muchos regíme-
otros regímenes a través de sus discursos oficia- nes totalitarios97, sino más bien a un despliegue
les y manifestaciones artísticas. Pensemos, por de léxico y expresiones peyorativas y alarmantes
ejemplo, en las obras de Deineka durante el pe- referidas, sobre todo, a la amenaza comunista
riodo del Realismo socialista. (“barbarie”, “abismo comunista”, “vasallos de
Moscú”, “despótico mandato de Moscú”, “ma-
Con el objetivo de atrapar al receptor se cons- sas proletarias anticristianas”, “rencorosas y an-
truye el discurso en una suerte de in crescendo, tinacionales”, etc.). Estamos ante un texto que
en un llamamiento a la preparación ante cierto quiere persuadir por encima de cualquier finali-
momento culminante que se aproxima para zan- dad estética (tarea que parece encomendarse a
jar todas las cuestiones abiertas. Observamos un la metáfora mantenida del cuadro de Waterloo),
acercamiento esperable hacia la construcción y para ello pone toda la maquinaria argumentati-
clásica del discurso político en cuanto a recursos va a funcionar. Todo está perfectamente medido,
y figuras retóricas, manifestaciones tropológicas todo atado y bien atado, si hacemos uso de la
y, sin duda, en su estructura tanto interna como conocida expresión del régimen: desde los recur-
externa (micro/macro). Los actantes (héroe o sos léxicos, el lenguaje arcaizante (muy bien in-
sujeto, destinador, obtenedor del bien, objeto, serto en la lengua del estado a modo de anclaje
etc.) y el despliegue del clímax discursivo suce- con las raíces, con lo verdaderamente español),
den dentro de una dinámica clásica de curvas y una estructura orientada hacia el logro de la
o fluctuaciones sobre la pérdida y el reconoci- máxima eficiencia en la persuasión, hacia la con-
miento, evidentemente marcadas por un alza- secución de que este (recordemos, conmemo-
miento final del argumento principal: la ya ana- rativo) discurso, entendido como una suerte de
lizada “lección española al mundo”, una España etopeya de España, pase a convertirse en fuente
“dispuesta a defenderse por sí sola y advirtiendo histórica.
a los demás del peligro”94.
Como fruto de esta intención de convencer, de-
Recordemos en este punto que el discurso de la mostrar y aleccionar nacen los frecuentes re-
derecha suele mostrar una tendencia clara hacia cursos orientados hacia la captación de la aten-
la retorización95, hecho que se corresponde con ción del destinatario. Podemos destacar, por ser
la estructura y tipo de construcción del discurso crucial, la captatio benevolentiae, recurso muy
comentado. El obtenedor del bien es colectivo, ciceroniano que subyace a gran parte del texto
como marca la épica clásica. En este caso, sería y muy concretamente sistematizada en los pá-
el mundo. El sujeto o héroe sería España, aun- rrafos finales mediante la anáfora ya comentada
que atendemos a un recurso de personificación (“El régimen español…”). El texto crece desde un
bastante paulatino según el que el sujeto pasa a principio centrado en el escaso reconocimiento
ser el Caudillo y, podríamos decir, el obtenedor del régimen español (pérdida, injusticia) hacia
del bien pasa a ser España mediante metonimia. el éxtasis, momento en el que se le reconoce al
El árbitro sería Dios, a veces convertido en el régimen, al Caudillo, su valía, su significado (“Es-
Evangelio mediante sinécdoque, a veces asimi- paña tiene su régimen; el suyo, el que sirve a Es-
lado por personificación en la figura de Franco. paña [...] Está convencida de su razón”98).
El oponente o adyuvante, el gran enemigo, tam-
bién está claro y viene de la Unión Soviética. Y este clímax se alcanza mediante la reformula-
ción, recurso también muy frecuente en la re-
El texto está plagado de un léxico que pretende tórica clásica (no X, sino Y99) (“No por orgullo,
dejar cierto eco épico y con una marcada agresi- sino por dignidad”; “no por reacción [...], sino
vidad alegórica (“la garra de Moscú”96), con una
93
Ibid., p. 41.
94
Ibid., p. 49. 97
Klemperer, Victor, LTI. La lengua del Tercer Reich:
95
Van Dijk, Teun, Racism and the Press, London, Rout- Apuntes de un filólogo, Barcelona, Minúscula, 2001.
ledge, 1991. 98
96
De la Cosa, Juan, La gran baza soviética…, op. cit., p. 48.
p. 45. 99
AUTOR 2.

por convicción profunda de nuestra razón”100), bierno103. Las coincidencias entre el capítulo ana-
así como mediante el icono, a estas alturas del lizado, La gran baza soviética, parecen no dejar
discurso ya formulador, del coracero del cuadro lugar a dudas:
de Waterloo que introduce en el segundo pá-
rrafo del texto y que se mantiene como espacio “Somos demócratas, pero nuestra demo-
mitológico: “Recuerdo que hace muchos años, cracia es una democracia orgánica que nada
al contemplar un cuadro creo que del barón de tiene que ver con la democracia inorgánica
Gross o de Checa [...] me impresionó extraordi- del liberalismo masónico, y somos socialis-
nariamente una de sus figuras”101. El cuadro es tas porque somos cristianos, pero sin que
presentado como fuente histórica mediante la tengamos nada que ver ni con el marxis-
omisión del autor: lo importante es el hecho, no mo ni con el socialismo liberal masónico, ni
el autor. Una lógica que no deja de suponer una tampoco con la democracia cristiana [...].
sugestiva contradicción con las formas de culto Nuestro sistema político pretende resolver
a la persona de muchos regímenes totalitarios. el problema social con pleno acatamiento a
En este sentido, es curioso cuando el autor dice la Ley de Dios según la doctrina de la Santa
no recordar si el cuadro en cuestión es del barón Iglesia Católica Apostólica Romana (Princi-
de Gros o de Checa. El cuadro, sabe el lector, es pio II del Movimiento)”104.
El barranco de Waterloo de Checa. La figura de
Carrero siguió alineado hasta el final de su vida
excepción, según Carrero Blanco, es, ni más ni
con un integrismo católico contrario al liberalis-
menos, el foco de atención del cuadro, el primer
mo trufado de una marcada visión conspirativa
plano, el centro.
del mundo y que, sin embargo, desde el Conci-
Y al igual que ocurriera con los pares ideológi- lio Vaticano II, perdía fuerza. De ahí sus críticas
cos (nosotros-ellos, problema-solución, Espa- contra la democracia cristiana más adaptada
ña-mundo) sobre los que se cimentaban los a los nuevos tiempos. Masones y marxistas (el
tópicos, observamos que a nivel argumentativo antisemitismo se había caído del discurso pú-
el discurso se resuelve también mediante pares blico) eran los conspiradores permanentes que
antitéticos como, entre otros, lo inconcreto e in- se aprovechaban de los problemas de injusticia
tangible (capitalismo, masonería etc.) frente a lo social generados por el capitalismo para lograr
concreto y tangible (el Caudillo). sus oscuros designios. Que Carrero Blanco man-
tuviera intactas sus ideas políticas no significa
CONCLUSIONES: INMUTABILIDAD Y ADAPTA- que no tuviera la suficiente habilidad táctica en
CIÓN A LOS TIEMPOS términos discursivos para adaptar y rearticular
los principios del régimen franquista, que eran
A lo largo de este estudio se ha hecho hinca- los suyos, a la nueva realidad de la Guerra Fría,
pié en la importancia de que hayamos podido sacando partido del nuevo escenario de con-
revelar que las alocuciones contenidas en La frontación entre Estados Unidos y la Unión So-
gran baza soviética se inspiraron en diferentes viética. Por eso, la idea defendida por Carrero de
documentos precedentes como los informes se- que los problemas de España eran los problemas
cretos de la II Guerra Mundial y algunas notas del mundo es un elemento clave de legitimación
sobre la situación política encontradas en el ar- internacional. Si la España de Franco ha solucio-
chivo personal de Carrero Blanco. Esto pone de nado el problema de la justicia social plantando
manifiesto otro hecho interesante: la distancia cara al comunismo (lección española al mundo),
entre el pensamiento político de Carrero Blanco es que su régimen se merecía un lugar en el con-
en un ámbito restringido y el pensamiento polí- cierto de las naciones civilizadas. Este “éxito” en
tico articulado en sus discursos públicos es míni- cuanto a aceptación internacional sirvió para
ma. Téllez102 llegará a decir que su cosmovisión que otras dictaduras posteriores, como la de
política se mantuvo inalterada hasta su muerte. Augusto Pinochet en Chile, utilizaran parte del
En 1970, siendo ya vicepresidente del Gobierno,
elaborará un informe con el título Introducción
al estudio de una planificación de acción de Go-
100
p. 49. 103
Téllez, Antonio, “Carrero Blanco, veinte años des-
101
Ibid., p. 41. pués…, op. cit., p. 26.
102
Téllez, Antonio, España y la II Guerra Mundial…, op. 104
Cf. Téllez, Antonio, “Carrero Blanco, veinte años
cit., p. 22. después…”, op. cit., pp. 28-29.

argumentario del régimen de Franco para sus

propios fines de legitimación105.
Con este trabajo se ha pretendido mostrar cómo

fue posible, en términos de legitimación dis-
cursiva, cambiar de aliados internacionales y al
mismo tiempo mantener la esencia de la victoria
lograda por Franco en la Guerra civil española.
A nivel formal se puede corroborar el tipo de
discurso ante el que nos encontramos, supues-
tamente orientado hacia la alocución, pero per-
fectamente medido en términos compositivos y
retóricos. El capítulo analizado refleja a la perfec-
ción la intención de construir un texto en el que
se sucedieran estados emocionales particulares
en el lector u oyente para culminar en una suerte
de clímax en el que la lección de España no pare-
ce dejar lugar a dudas.
105
Jara Hinojosa, Isabel, La ideología franquista en la
legitimación de la dictadura militar chilena, Revista
Complutense de Historia de América, 34 (2008), pp.
233-253.

APROXIMACIÓN HISTORIOGRÁFICA A LOS “ESTUDIOS DE

LO BÉLICO” DE LA GUERRA CIVIL ESPAÑOLA SOBRE EL
BANDO SUBLEVADO
HISTORIOGRAPHICAL APPROACH TO THE “WAR STUDIES”

OF THE SPANISH CIVIL WAR ON THE REBEL ARMY
Francisco J. Leira-Castiñeira*
*
Histagra-Universidade de Santiago de Compostela, España. E-mail: [email protected]
Recibido: 21 septiembre 2020 / Revisado: 2 octubre 2020 / Aceptado: 10 octubre 2020 / Publicado: 15 octubre 2020
Resumen: La historia es presente. Se hace evi- ces, subjected to another chronology because of
dente con el análisis de los estudios bélicos de having lived a different socio-political reality.
la guerra civil española, marco analítico de este
ensayo historiográfico, y, más en concreto, sobre Keywords: war studies, Spanish civil war, soldier,
la violencia. Estos se realizaron prestando más Cultural History, Social History
atención a la represión política que a lo que su-
INTRODUCCIÓN
cedió en el frente. Se centraban en batallas, y los
L
más rigurosos eran análisis de la institución cas- a guerra civil es uno de los episodios princi-
trense. Con el cambio de paradigma, en el que pales de la historiografía española contem-
se reclamaba una mayor presencia de los indi- poránea. Se han publicado miles de libros
viduos, comenzó a ser el combatiente el nudo y leído centenares de tesis doctorales que han
gordiano, a través de la historia cultural y social. tratado de arrojar luz sobre alguno de los aspec-
Se explicará este proceso, así como se expon- tos de la contienda. Sin embargo, la violencia
drán sus referencias europeas, sometidas a otra en el frente de batalla, la formación del contin-
cronología a causa de haber vivido una realidad gente militar, la experiencia de los soldados y su
sociopolítica distinta. desmovilización han estado fuera de la agenda
historiográfica hasta hace muy poco tiempo. En
Palabras clave: estudios de la guerra, guerra ci-
la década anterior, el único modo de acceder a
vil española, soldado, historia cultural, historia
estas cuestiones, de forma parcial y claramente
social
incompleta, eran las memorias escritas por anti-
Abstract: The history is present. It becomes evi- guos combatientes, que hoy se recuperan como
dent with the analysis of the war studies of the fuente histórica con las prevenciones metodoló-
Spanish civil war, the analytical framework of gicas necesarias1. No obstante, como aseveró Pío
this historiographic essay and, more specifically, Baroja en 1950, “los grandes acontecimientos
on violence. These were carried out paying more no producen buena literatura, más bien sirven
attention to political repression than to what para engendrar libros mediocres. En las épocas
happened on the front. They focused on battles de lucha y de violencia, la energía se enfoca ín-
and the most rigorous were analyses of the mi- tegra en la acción y no queda remanente alguno
litary institution. With the change of paradigm,
in which a greater presence of individuals was
claimed, the combatant being the Gordian knot,
through cultural and social history. This process 1
Señalado en primera instancia por Núñez Seixas,
will be explained, as well as its European referen- Xosé Manoel, ¡Fuera el invasor! Nacionalismo y movi-
lización bélica durante la guerra civil española (1936-
1939), Madrid, Marcial Pons, 2006, pp. 11-28.

Aproximación historiográfica a los “Estudios de lo bélico” Francisco J. Leira-Castiñeira
para otras actividades”2. Las memorias publica- bre el estudio de la violencia, intentando demos-
das durante la posguerra no eran más que re- trar porque no fue una prioridad el estudio de
producciones de la propaganda emitida por los las personas, sobre todo, desde una perspectiva
sublevados, que pasaba convenientemente por individual. En esto, influye una forma de pensa-
la censura. miento que se ha instalado en los últimos años
y que está vinculada al desarrollo de la sociedad
Este artículo pretende mostrar la historiografía actual, debido a que toda historia es presente.
sobre los war studies o “Estudios sobre la gue-
rra”, en relación a la Guerra Civil española y al El franquismo mantuvo el discurso público bé-
bando sublevado. Se pretende mostrar las nue- lico como elemento legitimador e instrumento
vas investigaciones realizadas en un marco histo- para intentar manipular políticamente a la opi-
riográfico más amplio y reivindicar los trabajos nión pública durante la dictadura4; duró hasta
de esta nueva generación. Como “Estudios de los tiempos recientes y pervive en lo que se ha de-
bélico”, se entiende los trabajos realizados desde nominado “memoria colectiva”. Por su parte, el
la perspectiva de la Historia Social y Cultural, y antifranquismo, que englobó a distintas sensibi-
no de la Historia Militar propiamente dicha. Por lidades, no fue capaz de crear un discurso públi-
eso, es estas páginas se reivindica denominar a co alternativo, pues fue el Partido Comunista de
estos trabajos como se hace en el resto del de España el que capitalizó la resistencia y también
Europa: “Estudios de lo bélico”. Se rechaza de continuó con el mismo discurso desplegado en
este modo, denominarlo como Nueva Historia la guerra, algo que ayudó a afianzar la visión de
Militar3, al considerar que todo lo nuevo termina las “dos Españas condenadas a enfrentarse”. El
convirtiéndose en viejo. Luego, porque la Histo- resultado ha sido una falta intencionada de es-
ria Militar tiene unos objetivos y metodología cucha de los recuerdos de los ancianos que ha
distintos y deben seguir produciendo trabajos hecho imposible proponer un relato alternativo.
que, con la sinergia con los Estudios de los bélico, Los combatientes de ambos bandos han sido uti-
permitan conocer mejor el pasado. Por su parte, lizados y se ha manipulado su experiencia para
se reivindica que esta tendencia historiográfica usarla como instrumento político también en
que comienza a asentarse en España, tiene sus democracia: la lucha de rojos contra azules, la
objetivos, principalmente el estudio del sujeto verdadera España contra quienes la iban a des-
como centro de la narración y su metodología. truir, los defensores de la democracia contra el
En definitiva, dos caminos que deben conver- fascismo, etc.: viejas palabras que no permiten
ger, encontrarse, pero que no pueden solaparse. que se construya un relato alternativo, democrá-
Del mismo modo, Este artículo quiere encontrar tico y acorde a los tiempos que corren.
una explicación de la marginación del Ejército
sublevado en las investigaciones precedentes Este es uno de los motivos que contribuyen a ex-
anteriores y, hasta hace poco, también de sus plicar el desconocimiento académico de lo que
combatientes. Al fin y al cabo, no dejaron de ser ocurrió en los campos de batalla. Existe, por el
las principales figuras de la contienda bélica, en contrario, un recuerdo basado en la propagan-
este caso, del bando sublevado. Como hipótesis da, en las memorias y libros sobre la contienda
se mantiene que la razón de ello es que, amén de que seguían los mismos clichés de la retórica y
que la agenda historiográfica se regía por otras la narrativa impuestas por el régimen franquis-
prioridades, durante este periodo no se ponía ta. El propio Ejército y los militares de alto ran-
en duda el pensamiento del bloque que repre- go que participaron en la contienda en el ban-
sentaba el Ejército sublevado. Por eso, antes de do sublevado se encargaron de elaborar relatos
centrarse en el análisis de los trabajos que se a menudo puramente descriptivos y asépticos
están realizando, se hará un breve recorrido so- del campo de batalla. Esta(s) historia(s) fue(ron)
cedida(s) a los discursos públicos del pasado de
ambos bandos para que la manipulasen a su an-
2
Baroja, Pío, Los caprichos de la suerte, Madrid, Es- tojo, mientras que la memoria social, hasta hace
pasa, 2015. apenas dos décadas, no estaba formada por
3
Como hace el excelente proyecto Revista Universi-
nada más que por los viejos recuerdos de ancia-
taria de Historia Militar. Es el principal proyecto de-
dicado a los “Estudios de la guerra” y de la Historia
Militar de España, liderado por David Alegre, Miguel
Alonso y Alfonso Iglesias. Fundado por Félix Gil Feito. 4
Perfectamente indicado por Aguilar, Paloma, Me-
También destaca la asociación ASEHISMI, de la que moria y olvido de la Guerra Civil española, Alianza
fue presidente Ángel Viñas o Fernando Puell. Editorial, 1996.

Francisco J. Leira-Castiñeira Aproximación historiográfica a los “Estudios de lo bélico”
nos a los que nadie escuchaba, ni sus familiares dicaciones, figuraba la participación individual
ni las generaciones más jóvenes. en el mundo político a través de una suerte de
asambleísmo. Se puede afirmar que, desde en-
Así, quedó en la memoria colectiva una mezcla tonces, tanto en España como en el resto de los
de ejércitos profundamente politizados junto países del primer mundo, los individuos se eman-
con personas que “fueron a la guerra” (porque ciparon de los partidos y organizaciones sociopo-
no se habla de luchar, de matar o de asesinar, ya líticas, siendo la sociedad la que relegó a los re-
que esto supone un tabú en una sociedad demo- presentantes tradicionales a un segundo plano.
crática) “porque les tocó ir”, frase muy emplea- A pesar de su fracaso, este nuevo modelo ter-
da por los familiares de antiguos combatientes. minó impregnando todas las esferas de la vida.
Ambas apreciaciones son ciertas y, a la vez, están Como es estudio histórico es hijo de su tiempo,
equivocadas: la experiencia de los soldados de tuvo efectos a la historiografía y, comenzó a exis-
la guerra civil española es seguramente la más tir una mayor preocupación por las personas y
compleja, intrincada y contradictoria de todas los pequeños colectivos. En lo que se refiere a
las que pudieron existir en la España de los si- este artículo, de interesar el estudio del Ejérci-
glos xix y xx. Para la sociedad, que comenzaba to como institución, al combatiente. En España,
a ver las rendijas de la democracia a finales de la inquietud, la metodología, las preguntas y el
los años setenta del siglo xx, así como para los uso de fuentes fueron tardíos, pero está comen-
líderes de aquel tiempo y, especialmente, para zando a arrojar importantes resultados. Destacar
sus descendientes, que vivieron un oasis de cre- que se trata de una nueva generación la que está
cimiento socioeconómico solo perturbado por afianzando este tipo de trabajos, junto con his-
la crisis del petróleo a mediados de esa déca- toriadores consagrados que pusieron la primera
da, resultaba más cómodo no preocuparse por piedra para estudiar este fenómeno desde una
aquellos que encarnaban lo más sangriento de perspectiva distinta a la Historia Militar.
su pasado más inmediato.
Asimismo, este artículo intenta reivindicar los
Los soldados quedaron silenciados para la histo- war studies en España, es decir, la “Historia de la
riografía. En un principio, esto no podía ser de guerra” o “Estudios bélicos” que, con una meto-
otra manera, puesto que eran los años de la Gue- dología propia de la Historia Cultural y de la His-
rra Fría, en los que la lucha política, ideológica toria Social, sirva para conocer las representacio-
y social tomaba forma a través de instituciones, nes culturales de los enfrentamientos armados
asociaciones, colectivos organizados y partidos y recoger la voz de la trinchera para componer
políticos. Era un momento histórico en el que las una historia rigurosa sobre el frente de batalla,
personas permanecían detrás de la organización tanto del insurgente (foco de este estudio), del
y no actuaban de una forma individualizada. De que no hay apenas investigaciones, como del re-
este modo, tratar de comprender a los indivi- publicano. Coexistiría con la Historia Militar, que
duos se consideraba extemporáneo en medio tiene unos objetivos de estudio, metodologías,
del auge de los estudios sobre los movimientos fuentes y una finalidad distintos, que deben ser
sociales, sobre los distintos partidos políticos y respetados, por eso es conveniente usar el tér-
su funcionamiento, y sobre las grandes perso- mino que verdaderamente se emplea en la his-
nalidades. En definitiva, la forma de historiar es- toriografía mundial. Por lo tanto, el proceso que
taba relacionada con el contexto sociopolítico5. se está desarrollando en España no interfiere en
Además, en España, hasta la muerte del dictador los análisis que se realizan desde otra óptica his-
no se iniciaron las principales investigaciones. toriográfica ni pretende quitarle su relevancia ni
su lugar dentro del abanico del conocimiento.
Con la caída del Muro de Berlín y la progresiva
aparición de nuevos movimientos sociales, se 1. HISTORIOGRAFÍA DE LA VIOLENCIA EN ES-
modificó la forma de historiar. Fue un proceso PAÑA (1960-1998)
lento, que culminó con la crisis económica de
2008 y, en España y en otros países, las protestas Entender la ausencia de trabajos sobre los com-
del 15M, que no estaban orquestadas por una batientes requiere hacer un recorrido por la
organización ni partido político. Entre sus reivin- historiografía sobre la violencia en España. Las
primeras disertaciones presentaban un marcado
sesgo ideológico, propio de antiguos militares
5
Esto se puede observar en las principales obras de-
sarrolladas en esta época, en las que el individuo se
franquistas o falangistas y de historiadores afi-
ocultaba detrás de grandes movimientos sociales.

nes con una visión escasamente crítica6. Asimis- garon de ello investigadores de distintas genera-
mo, surgieron hispanistas, en las décadas de los ciones que usaron fuentes y metodologías más
años sesenta, setenta y ochenta del siglo xx. Es amplias y elaboradas, y que, en muchos casos,
destacable el hecho de que sus autores, en su aprovecharon su mayor conocimiento de los de-
mayoría, eran hispanistas que publicaron en la bates internacionales, pero poniendo un ojo en
notable editorial Ruedo Ibérico, nacida en 1961 lo ya expuesto hasta esa época.
en París de la mano de refugiados españoles7.
Por lo que respecta al Ejército, lo publicado den-
Los primeros hispanistas, que escribieron en el tro del ámbito académico eran obras escritas
extranjero, fueron seguidos por unas primeras desde la Historia Militar tradicional que daban
generaciones de historiadores españoles que, ya cuenta del desarrollo de las distintas batallas,
en democracia (en las décadas de los ochenta y destacando la extensa obra de Ricardo de la Cier-
noventa del siglo xx), explicaron la contienda de va o de Martínez Bande. Asimismo, las investi-
una manera más rigurosa, sin presencia de los gaciones sobre el mundo castrense como las de
maniqueísmos que habían predominado en la Julio Busquets, Gabriel Cardona o Jesús Martínez
propaganda de posguerra, y alejados de las vi- Aparicio en la década de los años ochenta del si-
siones a veces un tanto condescendientes de los glo xx y, más adelante, las de Fernando Puell de
hispanistas8. Por eso mismo, se trata de indaga- la Villa10. Los primeros tenían como objetivo co-
ciones pioneras que forjaron la teoría y práctica nocer la evolución del Ejército como institución,
de las futuras obras que intentarían explicar la para entender el porqué del golpe de Estado11.
naturaleza y la praxis de la violencia desplegada Analizaron los pronunciamientos militares, la
en la guerra civil española. Entre 2000 y 2012, se pérdida de las colonias, el desastre de Annual o
publicaron los principales títulos sobre la violen- la reforma militar de la II República de la mano
cia política y la represión franquista9. Se encar- del ministro Manuel Azaña para dar una respues-
6
Salas Larrazábal, Ramón, Pérdidas de la Guerra, da República y el primer franquismo, Albacete, 1936-
Madrid, Planeta, 1977; de la Cierva, Ricardo, Histo- 1950, Madrid, Siglo XXI, 1996; Vega Sombría, San-
ria del franquismo: orígenes y configuración (1939- tiago, De la esperanza a la persecución. La represión
1945), Barcelona, Planeta, 1976; de la Cierva, Ricar- franquista en la provincia de Segovia, Barcelona, Crí-
do, Historia de la guerra civil española, Madrid, San tica, 2005; Gómez Bravo, Gutamaro, Crimen y castigo.
Martín, 1969. Cárceles, justicia y violencia en la España del siglo xix,
7
Thomas, Hugh, La Guerra Civil Española, París, Madrid, La Catarata, 2005; Gil Andrés, Carlos, Lejos
Ruedo Ibérico, 1961; Southwoth, Herbert, El mito del frente. La guerra civil en la Rioja alta, Barcelona,
de la cruzada de Franco, París, Ruedo Ibérico, 1963; Crítica, 2006; Souto Blanco, María Jesús, La represión
Brenan, Gerald, The face of Spain, Londres, Turnstile franquista en la provincia de Lugo (1936-1940), Sada,
Press, 1950; Malefakis, Edward, Agrarian Reform and Ediciós do Castro, 1999; Prada, Julio, De la agitación
Peasant Revolution in Spain, Yale, YUP, 1970; Payne, republicana a la represión franquista. Ourense 1936-
Staley G., Falange. Historia del fascismo español, Pa- 1939, Barcelona, Ariel 2006; Fernández Prieto, Lou-
rís, Ruedo Ibérico, 1965; Payne, Staley G., Los milita- renzo, “Represión franquista y desarticulación social
res y la política en la España contemporánea, París, en Galicia”, Historia social, 15 (1993) 49-65.
Ruedo Ibérico, 1968; Preston, Paul, Franco. Caudillo 10
Busquets, Julio, Pronunciamientos militares y gol-
de España, Barcelona, Grijalbo, 1998. pes de Estado en España, Barcelona, Planeta, 1982;
8
Ucelay da Cal, Enric, La Catalunya populista: Imat- Busquets, Julio, El militar de carrera en España, Bar-
ge, cultura i política en l’etapa republicana, 1931- celona, Ariel, 1984; Cardona, Gabriel, El poder mili-
1939, Barcelona, La Magrana, 1982; Reig Tapia, Alber- tar en la España contemporánea hasta la guerra civil,
to, Ideología e historia. Sobre la represión franquista Madrid, Siglo XXI, 1983; Cardona, Gabriel, Historia del
y la Guerra Civil, Madrid, Akal, 1984; Aróstegui, Julio, Ejército. El peso de un grupo social diferente, Madrid,
La Junta de Defensa de Madrid: noviembre 1936-abril Humanitas, 1983; Cardona, Gabriel, Historia militar
1937, Madrid, Comunidad de Madrid, 1984; Aróste- de una guerra civil. Estrategias y tácticas de la guerra
gui, Julio, La guerra civil, 1936-1939: la ruptura demo- de España, Barcelona, Flor del Viento, 2006; Cardo-
crática, Madrid, Temas de Hoy, 1996; Sánchez Recio, na, Gabriel, Franco y sus generales. La manicura del
Glicerio, Guerra civil y franquismo en Alicante, Alican- Tigre, Temas de Hoy, Madrid, 2001; Martínez Apari-
te, Instituto Alicantino, 1990. cio, Jesús, Para conocer nuestros militares, Madrid,
9
Por ejemplo, Casanova, Julián et al.: El pasado ocul- Tecnos, 1983; Puell de la Villa, Fernando, Historia del
to. Fascismo y violencia en Aragón (1936-1939), Zara- Ejército en España, Madrid, Alianza, 2000.
goza, Mira Editores, 1999; Cobo Romero, Francisco, La 11
Puell de la Villa, Fernando, “Nuevos enfoques y
guerra civil y la represión franquista en la provincia de aportaciones al estudio militar de la Guerra Civil”,
Jaén (1936-1950), Jaén, Diputación Provincial, 1993; Studia historica. Historia contemporánea, 32 (2014),
Ortiz Heras, Manuel, Violencia política en la Segun- pp. 95-110.

ta a esa complicada pregunta. De este modo, que muchas de las medidas adoptadas por el
consiguieron dar con la base del pensamiento Ejército sublevado no fueron una invención pro-
militar y su funcionamiento, que es útil para co- ducto de la guerra civil, sino el resultado de la
nocer qué cambios se produjeron en la Guerra adaptación del repertorio de prácticas usuales al
Civil. Asimismo, predomina el estudio del Ejér- nuevo contexto de combate, en este caso, enca-
cito republicano, en este caso, por parte de ex- minado a controlar grandes masas de gente. Las
pertos como Michael Alpert o Salas Larrazábal, unidades de castigo, la vigilancia, los correctivos
que el sublevado, salvo la excepción de Casas de corporales o los fusilamientos no eran nuevos en
la Vega y su libro sobre las Milicias Nacionales12. su origen (sí en su aplicación) para unos genera-
Así pues, sus disertaciones fueron una forma de les que venían de una guerra colonial.
acercarse al conocimiento del Ejército, por lo
que aportan técnicas de investigación y fuentes Este artículo quiere encontrar una explicación
que pueden ser beneficiosas para los nuevos de la marginación del Ejército sublevado en las
trabajos, aunque su sujeto de estudio no tenga investigaciones precedentes anteriores y, hasta
presencia en ellas. Hay dos grandes excepciones. hace poco, también de sus combatientes. Al fin
Por un lado, Aunque me tires el puente, que, con y al cabo, no dejaron de ser las principales figu-
fuentes orales, narraba la batalla del Ebro, lo que ras de la contienda bélica, en este caso, del ban-
supuso un célebre precedente13. Por otro, el clá- do sublevado. Como hipótesis se mantiene que
sico de Ronald Fraser, Recuérdalo tú y recuérdalo la razón de ello es que, amén de que la agenda
a otros de 1979, primer intento de estudiar “des- historiográfica se regía por otras prioridades, du-
de abajo” y desde la oralidad, la Guerra Civil en rante este periodo no se ponía en duda el pensa-
todos sus ámbitos. miento del bloque que representaba el Ejército
sublevado.
Estas obras se complementaban con otras sobre
la ideología militar14. Jensen analizó la heteroge- Era un periodo en el que el predominio del ma-
neidad de ramas de pensamiento dentro de la terialismo histórico hizo que se estudiasen las
institución en el primer tercio del siglo xx. Así, grandes estructuras que, según esta forma de
estas se unieron a las desarrolladas por Sebas- análisis, estarían caracterizadas por que sus
tián Balfour y Gustau Nerín. El libro más conoci- miembros estuvieran alineados con el mismo
do es Abrazo mortal, donde establece la lógica pensamiento que el defendido por la institución.
de unión entre la experiencia bélica en Marrue- Por lo tanto, nadie ponía en duda que el Ejérci-
cos y la guerra civil, en la cual, según el autor, to sublevado, que Falange o que la Iglesia apo-
los principales oficiales africanistas habían sufri- yasen sin fisuras el golpe, la guerra y la dictadura.
do un proceso de brutalización que, además de Cuando este paradigma comenzó a mudar, los
explicar el inicio de la guerra, también se podría historiadores se preocuparon por aquello que
emplear para entender la cruel represión. Sin había dejado una huella poderosa en la memo-
embargo, no solo existió conflicto entre socie- ria, como fue la represión. Pero ¿por qué no la
dad y Ejército, sino también dentro de las filas de la tropa? Porque su memoria estaba oculta
del propio Ejército, en concreto, entre los que entre una maraña de responsabilidad, vergüen-
querían modernizar el sistema de ascensos y za y un público poco ávido de conocer sus expe-
aquellos a los que beneficiaba el existente, como riencias. Esto está empezando a cambiar, justo
dejó patente Geoffrey Jensen. Todas estas inves- cuando quedan pocos supervivientes, como se
tigaciones son primordiales, porque explican la verá más adelante, en la segunda década del si-
cultura militar española y su evolución a lo largo glo xxi. Lo hizo, en parte, por el contexto social,
del tiempo. De hecho, se comprueba con ellas por un lado, y por la distancia temporal con la
que se aborda la historia de este colectivo. Por
12
Alpert, Michael, El Ejército Popular de la Repúbli- otro lado, por lo ya comentado, el enfoque, cen-
ca, 1936-1939, Barcelona, Crítica, 2007. trado en la persona, propio de una sociedad que
13
Cardona, Gabriel y Losada, Juan Carlos, Aunque ambiciona tener voz en los problemas políticos y
me tires el puente, memoria oral de la batalla del sociales desde su individualidad.
Ebro, Madrid Aguilar, 2004.
14
Navajas Zubeldia, Carlos, Ejército, Estado y socie-
dad en España, Logroño, Instituto de Estudios Rioja-
nos, 1991; Losada, Juan Carlos, Ideología militar del
ejército franquista, 1939-1959, Madrid, Istmo, 1990;
Jensen, Geoffrey, Cultura militar española, Madrid,
Biblioteca Nueva, 2014.

2. EL SURGIMIENTO DE LOS “ESTUDIOS BÉ- bases de la historia de la guerra en España. El

LICOS” EN ESPAÑA SOBRE EL BANDO SUBLE- profesor de la Universidad del País Vasco relató
VADO Y SU RELACIÓN CON LA HISTORIOGRA- la movilización requeté en el País Vasco y Nava-
FÍA EUROPEA rra, provocada por el surgimiento de un nacio-
nalismo violento de masas en el que se encua-
A medida que la sociedad entraba en una nueva dró también el carlismo. De la misma manera,
etapa, comenzaron a surgir los primeros escritos observó la parte cultural de ese proceso. En su
sobre la guerra, los soldados y las representa- opinión, la red social de carácter local influyó en
ciones culturales de la misma. Se puede afirmar la repercusión de la que gozó la movilización, im-
que los primeros en desarrollarlo, que aquí se pulsada por sectores del carlismo. No obstante,
denomina como “Estudios de la guerra”, son Ja- se debe reconocer que esta movilización no ha
vier Ugarte Tellería, Michael Alpert, Xosé Núñez sido tan trascendental en otros territorios. Sin
Seixas, Julio Aróstegui y Michael Seidman. Arós- duda, una excelente aportación y, posiblemente,
tegui publicó un libro de obligada consulta sobre la primera que acercó el examen del fenómeno
los voluntarios requetés, que propone debates y bélico a lo que se producía dentro de la historio-
sugiere preguntas que están siendo respondidas grafía del resto del mundo16.
en la actualidad. Michael Alpert trabajó sobre el
Ejército Popular de la República, en el que explica Núñez Seixas es la otra referencia destacable,
el funcionamiento del mismo desde su creación pues fue el primero que, en ¡Fuera el invasor!,
hasta su derrota final, destacando esa contra- preguntó que les ocurría a aquellos combatien-
dicción presente en sectores de la izquierda de tes que estaban en la trinchera. Aborda la sim-
formar un Ejército jerarquizado. Seidman sacó a bología presente en discursos y prensa escrita de
la luz dos libros sobre la Guerra Civil española; ambos bandos, manteniendo como premisa el
el primero, del año 2003, es el que resulta de in- peso de la cuestión nacional en una guerra civil
terés aquí porque cuenta con la virtud de estar y, todo ello, empleando los principales debates y
escrito en un tiempo en el que apenas se habían teorías procedentes de Europa. El valor de esta
publicado ensayos de la guerra civil alejados de investigación es indudable, no solo por su me-
la oposición entre franquismo y antifranquismo. todología, sino porque compara las representa-
En este sentido, ostentó el mérito de ofrecer ciones culturales de la guerra de ambos bandos.
una visión de la gente corriente sin necesidad de Afirma, algo que nadie había hecho, que tanto
otorgar una presencia constante a la política ni a el bando sublevado como el republicano em-
sus entresijos y discursos. Por el contrario, pre- plearon un discurso nacionalista español, pero
sentó una visión individualizadora del comporta- basándose en aspectos históricos apropiados a
miento de las personas carente de ideología e, su relato. Asimismo, estudia los nacionalismos
incluso, y especialmente, del mundo rural, como subestatales, como Euskadi, Cataluña y Galicia17.
las personas analfabetas. Finalmente, este libro
se completó con una visión desde el lado suble- Estas investigaciones están influidas por la his-
vado escrita en 2012, todo ello en el marco de toriografía sobre los fenómenos bélicos que
una investigación más completa donde muestra se estaba llevando a cabo en el resto del mun-
el poder del bando insurgente y donde tiene en do para otros conflictos desde una perspectiva
cuenta algunas de las críticas que había recibido principalmente cultural, pero también social.
por su anterior trabajo, aunque no parte de sus Publicaciones que recogieron el guante de estos
prejuicios con la sociedad española de la década autores beben, como ellos, de estos postulados
de los años treinta del siglo xx. Como se puede renovadores de Paul Fussel y John Kegan, que,
ver, son dos libros fundamentales15. en los años setenta del siglo xx, comenzaban a
plantear otras preguntas sobre lo acontecido en
Destacan los trabajos de Javier Ugarte Tellería las guerras, en las que se empezaba a hablar de
y Xosé Manoel Núñez Seixas, que sentaron las la memoria y de la vida del soldado18. Asimismo,
15
Aróstegui, Julio, Combatientes requetés de la gue- 16
Ugarte Tellería, Javier, La nueva Covadonga insur-
rra civil española (1936-1939), Madrid, La Esfera de gente. Orígenes sociales y culturales de la sublevación
los Libros, 2013; Alpert, Michael, El ejército popular de 1936 en Navarra y País Vasco, Madrid, Biblioteca
de la república, 1936-1939, Barcelona, Crítica, 2007; Nueva, 1998.
Seidman, Michael, A ras de suelo: historia social de 17
Núñez Seixas, Xosé Manoel, ¡Fuera el invasor!,
la República durante la Guerra Civil, Madrid, Alianza, Madrid, Marcial Pons, 2006.
2003; Seidman, Michael, La Victoria Nacional, Ma- 18
Fussell, Paul, The Great War and Modern Memory,
drid, Alianza, 2012. Oxford, Oxford University Press, 1975; Keegan, John,

el alemán George L. Mosse resultó esencial para y reincorporación a la vida civil. Se trata de una
que triunfara la historia cultural de la guerra. No noción amplia de la que se cuestiona su ope-
obstante, hay que remarcar que coincide con la ratividad y que se centra en exceso en la parte
crisis del materialismo histórico y la historia so- cultural de la guerra y obvia a menudo el contexto
cial, que arrancó en los años ochenta del siglo xx sociopolítico. Del mismo modo, resulta intere-
y que terminó por derrumbarse a partir de los sante el estudio de la configuración de identida-
años noventa del siglo xx junto con el Muro de des colectivas y, especialmente, de los discursos
Berlín. A partir de entonces, el modelo historio- que sirven para justificar el uso indiscriminado
gráfico viró su rumbo, y la historia cultural y el de la violencia, como puede ser a través de la
giro lingüístico se convirtieron en la tendencia deshumanización del enemigo, muy empleada
predominante que afectó a las investigaciones en la historiografía española22. Son aspectos de
que vinieron después19 Fallen Soldiers se basa en gran significación para entender todo el univer-
el estudio de los voluntarios en la Gran Guerra, so bélico y que serán tenidos muy en cuenta en
obviando en ocasiones que los Ejércitos se for- este artículo, aunque el camino teórico y prácti-
maron a través de la recluta. Estos voluntarios y co discurra por otro lado, ya que su aplicación al
personas favorables a la confrontación bélica se caso español presenta complicaciones, como se
brutalizaron de tal modo que cometieron atroci- intentará exponer a lo largo de estas páginas y
dades en el frente de batalla y, junto a las repre- como ya remarcaron González Calleja y José Luis
sentaciones culturales basadas en un nacionalis- Ledesma Vera23.
mo extremo, fueron el sustento de los regímenes
fascistas20. Cabe decir que la historia cultural de la guerra
considera que las contiendas contribuyen a con-
Del mismo modo, se puede apreciar la influencia solidar el proyecto nacional y, por extensión, al
de la historiografía francesa, quizá más en ¡Fue- ascenso de los fascismos en el marco de la a ve-
ra el invasor!, de Núñez Seixas, y en los trabajos ces llamada “Guerra Civil Europea”24. La defensa
de Sevillano Calero21. Con historiadores como de la “Patria en peligro” produce una sacraliza-
Jean-Jacques Becker y Stéphane Audoin-Rozeau, ción de la identidad territorial, que se refuerza a
nace la denominada Histoire Culturelle de la Gue- partir de la construcción de mitos, con el culto a
rre, que tiene como objetivo analizar las repre- los héroes y el constante recuerdo de los caídos,
sentaciones simbólicas surgidas en una contien- todo ello también mediante la elaboración de ri-
da, el discurso, los lugares de memoria y el modo tos y el uso de símbolos como banderas, himnos
en que todo esto se manifestó en el ámbito de o distintivos. Esto es lo que queda reflejado en
las artes y manifestaciones culturales cotidianas.
Con ello, surge el concepto de “cultura de gue- 22
Audoin-Rozeau, Stéphane y Becker, Anette, 14 –
rra”, que presenta como objetivo el estudio de 18, retrouver la guerre, París, Gallimard, 2000; Au-
las actitudes sociales, emociones y percepciones doin-Rozeau, Stéphane y Beckeret, Anette (eds.), La
que manifiestan sobre los conflictos sus protago- violence de guerre 1914 - 1945. Approches comparées
nistas, es decir, el análisis de cómo se adaptan los des deux conflits mondiaux, París, IHPT-CNRS, 2002;
Becker, Jean-Jacques (ed.), Histoire Culturelle de la
individuos a un contexto de extrema violencia y
Grand Guerre, París, Armand, 2005.
las consecuencias sociales, políticas y culturales 23
Ledesma Vera, José Luis, “¿Cuchillos afilados? De
que todo esto devuelve tras su desmovilización violencias, guerra civil y culturas bélicas en la España
del primer siglo xx” en Canal, Jordi y González Calleja,
The Face of Battle, New York, Penguin, 1976. Eduardo (eds.), Guerras civiles. Una clave para enten-
19
Para el conocimiento de la evolución y estado der la Europa de los siglos xix y xx, Madrid, Casa Ve-
actual de los estudios de la guerra: Kühne, Thomas lázquez, 2012, pp. 89-104; González Calleja, Eduardo,
y Ziemann, Benjamin, “La renovación de la Historia “La cultura de guerra como propuesta historiográfi-
Militar. Coyunturas, interpretaciones, conceptos”, SE- ca: una reflexión general desde el contemporaneísmo
MATA, Ciencias Sociais e Humanidades, 19 (2007), pp. español”, Historia Social, 61 (2008), pp. 69-87; Gon-
307-347. zález Calleja, Eduardo, “Experiencia en combate: con-
20
Mosse, George L., Fallen soldiers. Reshaping the tinuidad y cambios en la violencia represiva (1931-
Memory of the World Wars, Oxford, OUP, 1990. 1939)”, Ayer, 76 (2009) pp. 37-64.
21
Núñez Seixas, Xosé Manoel, ¡Fuera el invasor!, 24
Mosse, George L., Fallen soldiers. Reshaping the
Madrid, Marcial Pons, 2006; Sevillano Calero, Francis- Memory of the World Wars, Oxford, OUP, 1990; Mos-
co, Rojos: La representación del enemigo en la Guerra se, George L., La nacionalización de las masas, Ma-
Civil, Madrid, Alianza, 2007; Sevillano Calero, Francis- drid, Marcial Pons, 2005; Gentile, Emile, Il mito del
co, Cultura de guerra en el Nuevo Estado franquista, Stato Nuovo dal’antigiolittismo al fascismo, Bari, La-
Madrid, Biblioteca Nueva, 2017. tterza, 1984.

el libro de Robert W. Rieber, que analiza la psico- momento en el que publicaron sus trabajos27. Sin
logía que se encuentra detrás de la imagen que embargo, cabe señalar, que esta renovación en
se construye del enemigo para reforzar la propia España no se puede entender sin el proyecto de
identidad25. El propio George L. Mosse acuñó el la Revista Universitaria de Historia Militar funda-
término del “mito de la experiencia de guerra”, da por Félix Gil Feito en 2012, que desde hace
por el cual los individuos crean una comunidad unos años son el principal reflejo de este cambio
que se manifiesta de forma muy clara en la pos- historiográfico.
guerra con el culto a los caídos, la masculinidad
entendida en términos agresivos y la defensa de Para el caso español, se abordó la contienda
la nación26. desde diferentes puntos de vista que, en cierto
modo, se complementan. Van desde una renova-
3. LAS RECIENTES APORTACIONES A LOS “ES- ción de la historia política y social de la Guerra Ci-
TUDIOS BÉLICOS” EN ESPAÑA SOBRE EL BAN- vil, centrada en los oficiales de baja graduación,
DO SUBLEVADO Y SU RELACIÓN CON LA HIS- a una Historia Cultural. James Matthews fue pio-
TORIOGRAFÍA EUROPEA nero en este tipo de aproximación al pasado, con
un libro imprescindible sobre los soldados y su
Teniendo en cuenta todo lo escrito antes sobre reclutamiento en ambos bandos. Apenas aten-
la guerra, tanto en España como, especialmen- dió a las cuestiones ideológicas y sociológicas
te, fuera, una nueva generación de autores se de la experiencia en el frente, sino que prefirió
ha dedicado a estudiar la realidad de la guerra seguir la estela de autores como Seidman y Al-
en el frente en la guerra civil española. Entre los pert para cada uno de los bandos. Sin embargo,
últimos, se encontraron un páramo en el que su investigación es rigurosa, clara y de obligada
se recogió el testigo de lo expuesto por Núñez consulta. Remarca el hecho, ya explicado por
Seixas: estudiar al protagonista, al combatien- Kalyvas e incluso por Seidmann, de que no to-
te. No empezaron hasta la segunda década del dos los soldados iban convencidos a la guerra
presente siglo, seguramente, influidos por los ni apoyaban el bando en el que les tocó luchar.
motivos expuestos anteriormente (la distancia Germán Ruiz Llano siguió la estela del hispanista
de los autores con la contienda civil, el deseo de en su estudio sobre los voluntarios y conscriptos
avanzar en el conocimiento del pasado reciente alaveses, explicando perfectamente el proceso
y la influencia que pudo ejercer el nuevo conde movilización y su paso por la guerra. Se trata
texto sociopolítico, en donde los individuos de a de una investigación seria, pero que no tiene una
pie empezaron a reclamar de manera indepen- aproximación tan clara del soldado en cuanto a
diente, lo que trajo aparejado que las personas la interpretación de las posibles consecuencias
comenzaran a ser el objeto de estudio en vez de socioculturales e, incluso, políticas28.
las estructuras, modificándose el canon historio-
gráfico de esta etapa). Citándolos en orden de Por su parte, Francisco Leira, segundo en publi-
aparición: en 2012, James Matthews; en 2013 y car novedades sobre esta temática, intentó, sin
2020, Francisco Leira; en 2014, Ángel Alcalde; en
2015 y 2016, German Llano; en 2017, Javier Ro-
27
Ledesma Vera, José Luis, “¿Cuchillos afilados? De
drigo; en 2018, David Alegre Lorenz, y en 2019, violencias, guerra civil y culturas bélicas en la España
del primer siglo xx” en Canal, Jordi y González Calleja,
Miguel Alonso Ibarra 2018; tal es la nómina de
Eduardo (eds.), Guerras civiles. Una clave para enten-
los principales exponentes de esta generación, der la Europa de los siglos XIX y XX, Madrid, Casa Ve-
que se unió a los descubrimientos parciales de lázquez, 2012, pp. 89-104; González Calleja, Eduardo,
González Calleja o José Luis Ledesma, o a los es- “La cultura de guerra como propuesta historiográfica:
tudios sobre las milicias de Julio Prada, José An- una reflexión general desde el contemporaneísmo es-
tonio Parejo o Aurora Artiaga, entre otros, fun- pañol”, Historia Social, 61 (2008), pp. 69-87; González
damentales por la metodología, las fuentes y el Calleja, Eduardo, “Experiencia en combate: continui-
dad y cambios en la violencia represiva (1931-1939)”,
Ayer, 76 (2009), pp. 37-64; Artiaga Rego, Aurora, “Vo-
25
Se destaca este artículo: Reiber, Robert W. y Ke- luntarios para un golpe. Las milicias rebeldes de pri-
lly, Robert J., “Substance and Shadow: Image of the mera línea en la Guerra Civil”, Ayer, 111 (2018), pp.
Enemy”, en Reiber, Robert W. (ed.), The Psychology of 23-51. Parejo, José Antonio, “De puños y pistolas.
War and Peace. The Image of the Enem, Nueva York, Violencia falangista y violencias fascistas”, Ayer, 88
Plenum, 1991, pp. 3-39. (2004), pp. 125-145.
26
Mosse, George L., Fallen soldiers. Reshaping the 28
Matthews, James, Soldados a la fuerza, Madrid,
Memory of the World Wars, Oxford, OUP, 1990, p. Alianza, 2013; Ruiz Llano, Germán, Álava. Una provin-
110. cia en pie de guerra, Bilbao, Beta, 2016.

conseguirlo, mantener un equilibrio entre lo so- do Ángel Alcalde en la introducción de la traduc-

cial y lo cultural, aunque con preeminencia de ción de Fallen Soldiers31.
lo primero. No se desvió al responder a ciertas
preguntas clave, como las de la socialización o Como se ha dicho, tanto Leira Castiñeira como
la ideologización de los contendientes, la bru- Miguel Alonso o David Alegre intentan, cada uno
talización del soldado, la concepción de vícti- desde su perspectiva, la del primero, más social,
mas y victimarios de los militares de reclutas o y la de los otros dos, más cultural, responder a
su influencia en la consolidación posterior de la muchos de los debates surgidos en la historio-
dictadura. Todo ello, sin olvidar el análisis que grafía mundial. La cuestión de la brutalización
realizó de la institución para comprender ciertos de los soldados y la preeminencia de la ideolo-
comportamientos de la tropa, que complemen- gía en el contexto bélico han sido los principales.
tan un trabajo ya realizado por James Matthews. Leira, así como James Matthews, está más cerca
Destaca el uso de testimonios como memorias, de las posiciones defendidas por Benjamin Zie-
al igual que todos los que conformaron esta ge- mann, que estudió a los combatientes alemanes
neración, de los testimonios en juicios militares y de la Primera Guerra Mundial y propone que ya
las testificaciones de los evadidos y prisioneros. en 1918 empezaron a negarse a seguir luchan-
Por encima de todo, sobresale la historia oral, do y matando en masa, de tal forma que, para
con la recuperación de la voz de los pocos ex- él, supervivencia y asesinatos se entremezclan,
combatientes que seguían vivos. Miguel Alonso poniendo en duda las tesis de la brutalización
y David Alegre coinciden en parte de las fuentes provocada por la guerra y sus supuestas reper-
empleadas, pero mantienen visiones distintas cusiones en el periodo de entreguerras32. Entre
que complementan este trabajo29. las formas bajo las cuales se manifestó ese re-
chazo de la violencia destacan las deserciones y
Las influencias de Francisco Leira son variadas, el agotamiento físico y psicológico que sufrieron
pero se pueden encontrar en autores como los combatientes33.
Leonard V. Smith, que usa el testimonio de los
soldados franceses en la Gran Guerra, James E. Asimismo, recogen los apuntes de Frédéric Rous-
Kitchen, Pierre Puirsegle, Robert Gerwath o Jay seau, centrado en el caso francés, que, en una
Winter y, por supuesto, en James Matthews30. publicación conjunta, propone una interpreta-
Sin embargo, el historiador gallego pone más én- ción distinta de la Primera Guerra Mundial, que
fasis en la complejidad del Ejército y la existencia defiende la inexistencia de un fervor nacionalis-
de sus resistencias que en el colectivo más favo- ta, la deserción como mecanismo de repulsa a la
rable al bando sublevado. De este modo, afirma guerra y el surgimiento de discursos antimilitaris-
que las tesis de George L. Mosse son de difícil tas34. También, de Sönke Neitzel y Harald Welzer,
adecuación al caso español, algo que ha resalta- partidarios de eliminar cualquier trascendencia
de la ideología en el frente de batalla35. No obs-
29
Leira Castiñeira, Francisco J., La consolidación so- tante, su libro Soldados del Tercer Reich muestra
cial del franquismo. La influencia de la guerra en los la experiencia, la crueldad y la cotidianidad de los
“soldados de Franco”, Santiago de Compostela, Servi-
cio de Publicaciones de la USC, 2014 Leira Castiñeira, 31
Alcade, Ángel, “Introducción”, en Mosse, George
Francisco J., Soldados de Franco. Reclutamiento for- L., Soldados caídos, Zaragoza, PUZ, 2016.
zoso, experiencia de guerra y desmovilización militar, 32
Ziemann, Benjamin y Antolín Hofricter, Andrés,
Madrid, Siglo XXI, 2020; Alegre Lorenz, David, La ba- “La violencia como objeto de estudio en las investi-
talla de Teruel, Madrid, La Esfera de los Libros, 2018; gaciones recientes sobre la Primera Guerra Mundial”,
Alonso Ibarra, Miguel, El Ejército sublevado en la gue- Historia Social, 86 (2016), pp. 141-159.
rra civil española. Experiencia bélica, fascistización y 33
Ziemann, Benjamin, Violence and the German Sol-
violencia, (Tesis doctoral), Barcelona, UAB, 2019. dier in the Great War. Killing, Dying, Surviving, Lon-
30
Winter, Jay, Remembering War: The Great War be- dres, Bloomsbury, 2017.
tween Memory and History in the 20th Century: The 34
Rousseau, Frédréric, “Repensar la Gran Guerra
Great War and Historical Memory in the 20th Cen- (1914-1918). Historia, testimonios y ciencias socia-
tury, Yale, YUP, 2006; Smith, Leonard V., The Embatt- les”, Historia Social, 78 (2014), pp. 135-153; Rous-
led Self: French Soldiers’ Testimony of the Great War, seau, Frédreric, “14-19, retrouver le monde sociale
Ithaca, Cornell University Press, 2007; Kitchen, James en guerre ʻOser penser, oser écrireʼ”, en Rousseau,
E. et al.: Other Combatants, Other Fronts: Competing Frédreric (ed.), La Grande Guerre des sciencias socia-
Histories of the First World War, Newcastle, Cambri- les, Quebec, Athéna, 2014, pp. 9-24.
dge Scholars Publishing, 2011; Purseigle, Pierre, Mo- 35
Para ellos, la ideología sería solo el telón de fondo.
bilisation, Sacrifice et Citoyenneté. Angleterre-France, Welzer, Harald y Neitzel, Sönke, Los soldados del Ter-
1900-1918, París, Les Belles Lettres, 2013. cer Reich, Barcelona, Crítica, 2012, pp. 346.

combatientes en guerra, en concreto, de los ale- pués de la aparición de la obra de Browning37.

manes, a través de unas fuentes y metodologías En opinión de Browning, el conservadurismo
novedosas, como cartas, diarios y grabaciones alemán habría desarrollado las políticas de ex-
que existían en los campos de prisioneros fran- terminio si no hubiera sido por la llegada del na-
ceses y británicos, por lo que en ellos se recogía cionalsocialismo al poder, que no todos defen-
lo que opinaban los combatientes allí destinados dían. Su libro es muy relevante por las fuentes
sobre la crueldad que estaban perpetrando. El empleadas, la metodología, las preguntas que se
fenómeno de los desertores y combatientes que plantea y cómo las responde; por eso, de esta in-
rechazaron la violencia es cardinal para el traba- vestigación se recogieron varios aspectos, como
jo de James Matthews, Francisco Leira y Germán el marco de estudio a través de un grupo reduci-
Ruiz Llano, siendo insoslayables los trabajos de do de personas.
André Loez, Nicolas Mariot o Charles Glass36.
Este debate continuó entre los defensores de
Miguel Alonso Ibarra y David Alegre Lorenz, la pulsión ideológica y organicista de los man-
aunque tienen en muy cuenta en sus trabajos dos militares y soldados y los partidarios de que
lo aportado por la historiografía mencionada, deben tenerse en cuenta las obligaciones y los
están más cerca de de los historiadores que sentimientos personales de los combatientes38.
opinan, con matices, que existió un proceso de Destaca la aportación del historiador Omer
brutalización en el que se romperían las barreras Bartov con su estudio sobre el Frente del Este,
morales preexistentes para desplegar una vio- que años más tarde completaría con su Hitler’s
lencia sin precedentes. Una investigación central Army39. Este autor planteaba que los alemanes
sobre esta temática es la de Christopher Brow- no querían ir a la guerra por un supuesto afán su-
ning Ordinary Men: Reserve Police Battalion 101 premacista y su antisemitismo, sino por su con-
and the Final Solution in Poland, donde, con una fianza en Hitler como líder político; según él, en
metodología consistente, basada en la revisión un primer instante, incluso no estaban a favor de
de los interrogatorios a los que fue sometido el la intervención. Sin embargo, comparte que en
batallón en cuestión, respondió a la pregunta el Frente del Este se produjo una brutalización
de cómo unos soldados profesionales de clase de los soldados que provocó que perpetraran los
media participaron en los crímenes nazis entre crímenes como consecuencia de una asunción
julio de 1942 y noviembre de 1943. Se trata de ideológica del nazismo y también que luchasen
un trabajo que debe ser considerado por todos hasta el final.
los estudiosos de la violencia y lo bélico, porque
va mostrando la evolución de un batallón y cómo Las investigaciones de Miguel Alonso y David
progresivamente esas convenciones morales se Alegre están asimismo influidas por las novedo-
van difuminando, de manera que obtiene con- sas aportaciones de historiadores de los fascist
clusiones muy notables, puesto que todos los studies. Jeff Rutherford publicó su investigación,
soldados manifestaron un grado de connivencia centrada también en el Frente del Este con los
mayor o menor con la violencia, algo que está alemanes como protagonistas, en la que defien-
más presente en los trabajos procedentes de la de una convergencia entre el imperativo militar,
escuela de la Universidad Autónoma de Barcelo- es decir, la necesidad de adoptar y cambiar cual-
na, encabezada por Javier Rodrigo, así como por quier política con el único propósito de ganar la
el investigador de la Universidade de Santiago, guerra, y la ideología40. Se une a Amedeo Osti
que en James Matthews o Germán Ruiz Llano.
37
Hilberg, Raul, La destruccción de los judíos euro-
Ordinary Men apoya la visión de que también los peos, Madrid, Akal, 2005; Goldhagen, Daniel, Los ver-
“alemanes corrientes” participaron en las masa- dugos voluntarios de Hitler, Madrid, Taurus, 1996.
cres nacionalsocialistas, una tesis ya defendida 38
Para conocer el debate, Bessel, Richard, “Functio-
por Raul Hilberg en 1961 y que sería llevada al nalists vs. Intentionalists: The Debate Twenty Years on
extremo por Daniel Goldhagen cuatro años des- or Whatever Happened to Functionalism and Inten-
tionalism?”, German Studies Review, 26/1 (2003), pp.
15-20.
39
Bartov, Omer, The Eastern Front, 1941-1945: Ger-
36
Loez, André, 14-18. Les refus de la guerre: Une man Troops and the Barbarisation of Warfare, Nueva
histoire des mutins, París, Gallimard, 2013; Mariot, York, Basingstoke, 2001; Bartov, Omer, El ejército de
Nicolas y Loez, André, Obéir/désobéir. Les mutineries Hitler, Madrid, La Esfera de los Libros, 2017.
de 1917 en perspective, París, La Découverte, 2008; 40
Rutherford, Jeff, Combat and Genocide on the
Glass, Charles, Desertores, Madrid, Ariel, 2014. Eastern Front. The German Infantry´s war, 1941-1944

para el caso italiano41. En este sentido, destaca la tigación que es complementaria de las anterior-
obra de Javier Rodrigo, La guerra fascista, que, a mente aludidas y que inicia un interesante de-
través del estudio de los combatientes italianos, bate, internacional y estatal, sobre el uso de lo
sostenía que, al proceder de una ideologización que denominó Francisco Leira “apropiación de la
en los postulados del régimen de Mussolini, la memoria de los excombatientes”. Sin duda, una
guerra fue para el Corpo Truppe Volontarie un aportación única43.
escenario ideal para promover la fascistización
de España. Compartiendo esta visión, junto con Las investigaciones internacionales citadas, así
Miguel Alonso, afirman que hay que denominar a como otras muchas que quedaron en el tintero,
la guerra que hicieron los sublevados entre 1936 modificaron el arquetipo dominante en el estu-
y 1939 como “guerra fascista”, por los métodos, dio de la guerra, teniendo como eje vertebrador
el simbolismo y la movilización que realizaron. al soldado y su experiencia, todo ello con el fin
Sin duda, se trata de una propuesta novedosa de interpretar los cambios sufridos en Europa
en la historiografía española y que debe tener- desde finales del siglo xix hasta mediados del xx.
se en cuenta. Finalmente, David Alegre consagró Esto tuvo su reflejo en los tratados sobre la gue-
el carácter de guerra total de la contienda civil a rra civil española. En ambos casos, se reivindica
través del análisis de las formas de hacer la gue- el valor de la metodología y las fuentes emplea-
rra y los medios empleados para ello y, al mismo das, como cartas, memorias, prensa y el aparato
tiempo, penetró en el complejo mundo de la tro- propagandístico.
pa con su estudio La batalla de Teruel, en el que,
En concreto, en el caso español se observa que
además de la perspectiva cultural, cuenta con
hubo distintas visiones, una más cultural y otra
recomendables capítulos sobre la cotidianeidad
más social, pero todas se complementan y nece-
de los soldados, tratado desde una perspectiva
sitan. Usan metodologías y fuentes, en algunos
social, siendo de los libros que mejor combinan
casos, teniendo como marco teórico comparati-
ambas perspectivas historiográficas –a social y
vo las guerras mundiales y, en otros, aportando
cultural–. Se trata de dos investigaciones esen-
un fuerte valor empírico. Son, sin duda, grandes
ciales para entender lo que ocurre en una guerra
hallazgos que supusieron un nuevo acercamiento
y que participan en el debate internacional42.
a la violencia que se desarrolló durante la guerra
Finalmente, hay que citar las investigaciones civil y que componen una historiografía enfoca-
de Ángel Alcalde, que son esenciales dentro de da en la socialización o ideologización de la tro-
esta nueva corriente. En su libro Los excomba- pa, en su día a día o en el papel de la camarade-
tientes franquistas, no tuvo como objetivo el co- ría. Todo ello lo ha logrado una nueva generación
nocimiento exhaustivo del frente, sino el de los que, desde puntos diferentes, recogió el testigo
excombatientes y sus asociaciones. Desde una de Aróstegui, Ugarte Tellería y Núñez Seixas y se
perspectiva cultural, defendió que estos eran el preocupó por colocar al soldado como protago-
sustento sociológico del franquismo. Por tanto, nista de la historia, iniciando un nuevo modelo
se está ante el estudio que abrió un extraordi- apropiado a los tiempos que corren.
nario camino historiográfico. En su publicación
CONCLUSIONES
posterior, se centró en la apropiación simbólica
del excombatiente por parte de los grupos hege- Toda la historia es presente, depende de los
mónicos, lo cual, como interpretación, acomoda cambios sociales, políticos y culturales, de los
mejor la existencia de disenso entre gentes que intereses colectivos e historiográficos, de las
hicieron la guerra, pero no entraron dentro de fuentes disponibles, de conocer o proponer una
las categorías oficiales de veteranía. Una inves- nueva propuesta metodológica. El siglo trajo xxi
consigo nuevas preguntas sobre la guerra civil
Cambridge, CUP, 2014.
41
Osti, Amedeo, Le radici storiche dell’antisemitis- española que sirvieron y sirven para conocer me-
mo. Nuove fonti e ricerche, Roma, Viella, 2009; Osti, jor nuestro pasado. Es algo que está presente en
Amedeo, L’Esercito italiano in Slovenia. Strategie di todas las temáticas históricas. El nuevo contex-
repressione antipartigian, Roma, Viella, 2011. to sociopolítico ha permitido que se preste más
42
Rodrigo, Javier, La guerra fascista, Madrid, Alianza, atención que antes al individuo como ser políti-
2017; Alegre Lorenz, David, La batalla de Teruel, Ma- co e influyente en los cambios sociales y cultura-
drid, La Esfera de los libros, 2018; Alonso Ibarra, Mi-
guel, El ejército sublevado en la guerra civil española. 43
Alcalde, Ángel, Los excombatientes franquistas, Za-
Experiencia bélica, fascistización y violencia, (Tesis ragoza: PUZ, 2014 e íd., War Veterans and Fascism in
doctoral), Barcelona, UAB, 2019. Interwar Europe, Cambridge, CUP, 2017.

les, del mismo modo que está ocurriendo en el diosos) ni es conveniente adjetivarla con “nue-
presente. La actualidad política se ha visto mo- va”, pues terminaría convirtiéndose en vetusta y
dificada y, con ella, la forma de historiar. Antes no dejaría que volviese a ser renovada, así como
se hablaba de Ejército, partidos e instituciones, que esta última, la Historia Militar, tiene otras
mientras que, en la actualidad, algunos pensa- preguntas, fuentes y metodologías.
dores se preguntan por los soldados, los militan-
tes y los miembros del engranaje institucional. Estos trabajos y debates están a su vez, insertos
Este enfoque persigue saber sobre quienes estu- en las discusiones teóricas internacionales, tra-
vieron ocultos durante estos años, sobre la gen- tando la violencia en el frente de batalla y apli-
te corriente. Son muchos los factores externos cando metodologías y fuentes novedosas como
que intervienen en este cambio de patrón, que las desarrolladas fuera de nuestras fronteras. De
no nace ahora, sino que ha venido gestándose a esta forma, será una ventana de estudio, local
lo largo de las últimas dos décadas, tanto en el o trasnacional, siempre abierta a los cambios e
ámbito internacional como estatal. innovaciones, para una mayor y mejor compren-
sión del pasado reciente.
En lo que se refiere a la historia de la violencia de
la guerra civil, se ha observado cómo a la tropa
no se le ha prestado atención. Durante la tran-
sición hacia la democracia se pasó de puntillas
sobre este tema, porque los intereses se centra-
ron en otras cuestiones, aunque no hubo un ol-
vido historiográfico, pues se publicaron libros y
artículos sobre la violencia política en la guerra.
En la década de los años noventa del siglo xx y
los diez primeros años del segundo milenio, fue
cuando empezaron a surgir los principales libros
sobre la violencia en la contienda bélica. El prin-
cipal objetivo siempre fue el análisis de la repre-
sión, de lo que se había perpetrado en la reta-
guardia y de las operaciones militares, obviando
al combatiente.
Hoy, la historiografía tiene el deber de aplicar

una metodología rigurosa para descubrir quié-
nes fueron y, si se quiere, quiénes somos. Esta
corriente se inició con Javier Ugarte, Julio Arós-
tegui y Xosé Manoel Núñez Seixas, cuyos traba-
jos fueron el asiento de los que se están desa-
rrollando (y ellos mismos siguen haciéndolo)44
en la actualidad. De esto se está encargando una
nueva generación, que, por una parte, debe ser
consciente de lo que aportaron sus predeceso-
res, pero, por otra, tiene la obligación de moder-
nizar la disciplina. Este artículo reivindica el valor
y las nuevas investigaciones de lo que debe de-
nominarse como “Historia de la guerra” o “Estu-
dios de la guerra”, ya que no es homologable a la
Historia Militar (en la que destacan historiadores
como Fernando Puell, Roberto Muñoz Bolaños,
Federico Fernández Roda, Pablo González Pola
de la Granja, entre otros muchos grandes estu-
44
Quizás el mejor estudio de estas características
sea el de Núñez Seixas sobre la División Azul. Núñez
Seixas, Xosé Manoel, Camarada invierno, Barcelona,
Crítica, 2017.

RESEÑAS DE LIBROS / BOOK REVIEWS
Delgado, Lorenzo y López, Santiago M. (eds.), provinciano que le impedía equipararse a los paí-
Ciencia en Transición. El lastre franquista ante ses en los que se pretendía reflejar.
el reto de la modernización, Madrid, Sílex,
2019, 383 pp. Este libro es fruto de un encuentro titulado
Ciencia en transición. De la CAICYT a la Ley de
Por Mario Rosano Alloza la Ciencia, celebrado en el Instituto de Estudios
(Universidad de Cádiz) de la Ciencia y la Tecnología de la Universidad
de Salamanca en mayo de 2018. Aunque sus
A la hora de poner en marcha esta reseña, quien responsables son Lorenzo Delgado (Investigador
escribe estas líneas no puede evitar la tentación en el Instituto de Historia del CSIC) y Santiago
de comenzar desde el principio. Y es que la porta- M. López (Director del Instituto de la Ciencia y
da del libro del que se va a hablar de aquí en ade- la Tecnología de la Universidad de Salamanca y
lante representa de una manera oportunamente Presidente de la Asociación Española de Histo-
gráfica el sentido general del contenido ubicado ria Económica), el libro en cuestión cuenta con
bajo su égida. Una imagen, dicen, vale más que la contribución de muchos de los científicos que
mil palabras. La que abre Ciencia en transición. El participaron en el simposio salamanquino. Así
lastre franquista ante el reto de la modernización pues, además de Delgado y López, catorce au-
es la reproducción de un cartel anónimo de 1969 tores provenientes de varias disciplinas diferen-
publicado en la revista La Actualidad Española. tes se hacen cargo del análisis de un contexto
Su propósito era publicitar la visita a España de de modernización científica cuyo pistoletazo de
Edwin Aldrin, Michael Collins y Neil Armstrong y salida corresponde a la creación, en 1958, de la
homenajear su reciente éxito en la misión Apolo Comisión Asesora de Ciencia y Tecnología (CAI-
XI. En una suerte de fotomontaje kistch, un rótu- CYT), organismo encargado de fomentar, orien-
lo que rezaba “OLE, ASTRONAUTAS” coronaba a tar y coordinar la investigación científica durante
estos tres ilustres norteamericanos, que apare- el tardofranquismo. Su punto de fuga se sitúa
cían engalanados con sus respectivos trajes de en la restructuración de la estrategia en torno al
luces. I+D promulgada en la Ley de la Ciencia de 1986.
Este lapso de tiempo, es decir el contexto de mo-
La veneración de esta famosa gesta cósmica por
dernización científica que abarca del año 1958 al
parte de un público, como el español, poco ha-
año 1986, es entendido en términos de transi-
bituado a las hazañas espaciales, respondía a la
ción científica.
contribución del régimen franquista al triunfo
de aquel primer alunizaje. Gracias a la cesión A diferencia de la transición política, que en un
de terrenos y derechos para la construcción de periodo relativamente corto de tiempo culminó
estaciones de seguimiento de vehículos espacia- la consolidación democrática y la integración de
les, España consiguió participar en una aventu- España en la Unión Europea, los autores de esta
ra cuyos réditos simbólicos fueron, a la postre, obra postulan que las instituciones científicas
bastante más sustanciosos que sus éxitos mate- han ido a rebufo de una transición más lenta,
riales. A este respecto, la simpática imagen de caracterizada por la incesante permanencia de
aquellos tres astronautas rubios con montera y determinadas rémoras del franquismo, acaso
muleta constituye una inquietante metáfora del más explícitas que en la contraparte política.
papel de la ciencia y la investigación españolas en Aunque a finales de la década de los cincuenta el
el proceso de modernización patrio desarrollado sueño de la autarquía tecnológica se había dado
a partir del aperturismo tecnocrático propio del por terminado, quince años después, en las pos-
Plan de Estabilización del año 1959: tremenda- trimerías del franquismo, el sistema científico
mente funcional para relegitimar una dictadura español todavía seguía siendo endogámico, de-
encorsetada en los estrechos márgenes de su masiado apegado a la condición funcionarial,
matriz fascista, pero con un sabor ridículamente

escasamente autónomo, muy débil en cuanto la ciencia o que los investigadores españoles no
a transferencia del conocimiento y en general sean conscientes de su responsabilidad social
poco atractivo como destino post-doctoral para son cuestiones que constituyen el telón de fondo
los investigadores extranjeros. De ahí que su ho- de este libro sobre el pasado, fundamental para
mogeneización y su homologación a los sistemas resolver los problemas del presente y los desa-
del entorno occidental fuesen lentas. De 1978 en fíos del futuro.
adelante se fueron poniendo los cimientos para
la construcción de una nueva Ley de la Ciencia. Egido, José Antonio, La dificultad de la Revolu-
Una vez publicada en 1986, esta ley no logró ción Nacional en una colonia petrolera. Vene-
colmar las expectativas de la comunidad cientí- zuela vencerá. Puerto de Santa María, El Bole-
fica. Inevitablemente, hubo de ser deudora de tín, 2019, 150 pp.
las condiciones previas. No obstante, permitió
Por Isabel Mª Cubero Trujillo
poner cierto orden al llamado “modelo espon-
(Universidad de Cádiz)
táneo” (es decir, el modelo sin modelo) anterior.
Vivimos en un mundo donde la información es
Las diversas reflexiones que componen esta obra
un bien preciado, pero escaso. Nos desenvolve-
pasan revista a distintos aspectos relacionados
mos en un tiempo en el que los medios de comu-
con este contexto: el rol de instituciones como el
nicación dominan la información y se rigen por
Consejo Superior de Investigaciones Científicas
el hábito y la dominación de la propaganda, lo
(CSIC), el Instituto Nacional de Técnica Aeroes-
que nos lleva entender y comprender la realidad
pacial (INTA), el Instituto Nacional de Investiga-
de todo cuanto ocurre de forma distorsionada;
ciones Agrícolas (INIA) o la Junta de Energía Nu-
y en ocasiones, nos encontramos con un única
clear (JEN), el papel de países como Francia, la
visión del mundo que es la que quieren hacernos
República Federal de Alemania y los Estados Uni-
ver. Esta desinformación nos hace echar en falta
dos de América en la búsqueda española de tu-
trabajos complejos, que lejos de la simplicidad
tela y de financiación internacional, la incidencia
y, mediante una investigación rigurosa, nos acer-
de los factores económicos en la aplicación de
que a la realidad de muchos países que viven en
las políticas científicas, así como algunos ejem-
un caos político, económico y social. Y la pobla-
plos de éxito en la implementación de medidas
ción tiene la necesidad de informarse con la ma-
transformadoras y otros ejemplos de fracaso en
yor precisión y veracidad posible.
lo que al tratamiento y gestión del personal de
la investigación se refiere. Por sus páginas desfi- Esta necesidad social, que parece deseable, se
lan, de manera transversal, desde protagonistas torna cada día más difícil e ilusoria. La propiedad
encarnados en agentes concretos como Manuel de los medios de comunicación, en manos de un
Lora Tamayo hasta fenómenos más burocráticos neoliberalismo cada vez más ambicioso, frena e
como leyes de educación, planes de desarrollo e imposibilita el ejercicio libre del periodismo. Eso
informes ministeriales. es precisamente lo que vemos todos los días en
los medios de comunicación, y en especial en
Sin embargo, este libro no solo se basa en la ma-
la televisión, con los sucesos que acontecen en
terialidad del archivo para hacer una genealogía
Venezuela desde hace unos años, que arrastran
de la política científica española a través de sus
problemas que provienen históricamente del pa-
protagonistas, sus instituciones o sus influencias
sado siglo. Pero podríamos citar otros ejemplos
externas, sino también para señalar los obstá-
en los que la visión unidimensional de la infor-
culos y las dificultades a las que se han tenido
mación pública ha deformado la realidad de paí-
que enfrentar ciertas dinámicas que pretendían
ses en beligerancia: Libia, Siria, Irak, Ucrania…
constituir un soplo de aire fresco para el panora-
ma de la ciencia española. Quizás señalar estas Sin embargo, a veces ocurre que, con el trans-
limitaciones pueda resultar de ayuda para res- curso del tiempo, la realidad puede asomar por
ponder a otras preguntas subsidiarias que tie- cualquier resquicio, y deja al descubierto las me-
nen que ver con nuestro persistente retraso con dias verdades y las mentiras mediáticas que se
respecto a otras latitudes, más conscientes de la cuentan de muchos conflictos y de muchas gue-
importancia del conocimiento. rras que, en realidad, no son más que saqueos y
violencia provocada por las grandes potencias y
Que la ciencia no impregne a la sociedad ni a la
los grandes lobbies del poder.
política españolas, que el desarrollo económico
de España no esté basado en la aportación de

Reseñas / Book reviews
Así, el trabajo que realizan los diferentes investi- todos sus recursos naturales, especialmente el
gadores, historiadores, periodistas, politólogos, petróleo.
etc., para analizar con la mayor objetividad y
rigurosidad posible lo que ha ocurrido y ocurre Para acercarse a estas ideas expuestas, el con-
en el mundo, tiene un gran mérito y debe ser junto de datos que aporta el libro son fundamen-
reconocido. Por ello, vamos a hacer mención tales. Además, La dificultad de la Revolución Na-
del trabajo realizado por el sociólogo, Antonio cional en una colonia petrolera será una lectura
Egido, que nos va a contextualizar, histórica y muy útil para entender todo el proceso boliva-
actualmente, en una Venezuela muy disímil a la riano en torno a al figura de Chávez desde su lle-
descrita por los medios informativos día tras día gada al poder. Un intento de revolución nacional
durante estos últimos años. Estamos ante un li- que no empezaba de cero, sino que ya enfrenta-
bro que puede servir como una herramienta útil ba enormes problemas estructurales heredados
para combatir la guerra mediática arbitraria de de los anteriores gobiernos.
este siglo XXI.
El autor valora los pros y los contra de toda ca-
El autor nos ha querido familiarizar con la historia rrera política de Chávez desde sus inicios. Para
política, económica y social de Venezuela desde ello hace uso de una gran cantidad de citas de
el siglo XIX hasta nuestros días, para comprender personalidades, estudiosos, y un sin fin de re-
la problemática central que vive actualmente el ferencias a datos oficiales de organismos inter-
país caribeño. Fruto de un enorme trabajo de in- nacionales como la FAO, Naciones Unidas, etc.
vestigación realizado durante su larga estancia en Todo, para demostrar la importancia del proceso
Venezuela (2066-2017), primero como profesor bolivariano, el mismo que los medios de comu-
en diferentes instituciones, y segundo, como co- nicación occidentales tratan de esconder, dañar,
laborador en diversos medios de comunicación, e incluso, de subvertir.
profundiza su estudio en el análisis de las trabas
Confirmando lo evidente, el libro también exa-
y los conflictos que han conllevado la ‘dificultad
mina la crisis actual que vive día tras día el pue-
de hacer una verdadera revolución nacional’ en
blo y el Gobierno venezolano desde que apare-
un país transformado en colonia petrolera.
ció en escena un desconocido personaje, Juan
Su compromiso personal con la causa del proce- Guaidó —llegado de la mano de los Estados Uni-
so bolivariano hace que muchas de las reflexio- dos, como otros tanto líderes que han encabe-
nes que A. Egido realiza en la publicación estén zado revoluciones y golpes de estados con ayu-
inducidas de cierta dosis de crítica, pues, en da y financiación de la Casa Blanca en América
cierta medida, se suma a los que comparten la Latina—, que muy pronto conseguiría un íntimo
opinión de que la revolución es un proyecto in- acercamiento a la presidencia de la República,
concluso, que demanda una serie de profundas intentando desbancar y eliminar al presidente,
transformaciones del sistema, frenar con el pro- Nicolás Maduro. Lo ha hecho y lo sigue hacien-
greso de la democrática liberal —que nada tiene do vinculado a una organización que cuenta con
de democrático—, y con los restos históricos que el apoyo internacional, y por supuesto, con el
arrastra de la antigua cultura neocolonial que apoyo del aparato empresarial, conformado por
aún corrompe las estructuras centrales del país y las grandes sociedades y empresas petroleras
su propia economía, creando en la sociedad una que demandan recursos naturales como el oro
diferencia abismal entre ricos y pobres. y el coltán, este último muy solicitado para la
fabricación de móviles, ordenadores y cualquier
Venezuela es el país con mas reservas petroleras otro aparato relacionado con las nuevas tecno-
del mundo, acompañado de la gran cantidad de logías. Esto se traduce en un enorme expolio de
recursos naturales que posee. Podría convertirse las grandes riquezas del país suramericano, que
en un país más independiente, más saneado e apenas tiene para mantener a su propia pobla-
industrializado, y menos dependiente de la ex- ción, mientras otros acrecientan sus riquezas a
plotación externa —principalmente proveniente costa de explotar a Venezuela.
de los Estados Unidos y sus grandes empresas
petroleras—. Mientras esto no cambie, la socie- Por último mencionar la atención que le dedica
dad venezolana seguirá careciendo de productos el autor al importante papel del juego geopolí-
de primera necesidad y seguirá sumida en una tico y geoestratégico que rodea el conflicto, y el
pobreza provocada por no obedecer a los de- estudio y la observación de las posibles opciones
signios imperialistas de querer expropiar al país y alternativas futuras que pueden plantearse de

cara a los problemas que acorralan a Venezuela, rrear en la estructura del trabajo; pero, en este
y especialmente los posibles escenarios y pers- caso, es indiscutible que resulta un plus para me-
pectivas en relación a una futura recuperación jor aprehender la realidad poliédrica de un pro-
de carácter política, económica y social, mani- ceso extremadamente complejo, que contó con
festando como prioridad, aliviar la terrible cri- la participación de infinidad de actores.
sis que sufre el país, justo en un momento en el
que todo el planeta vive salpicado por una grave Los coordinadores saben dar una estructura co-
crisis sanitaria, y que en países tan debilitados herente, lo que no es fácil, a la diversidad de tra-
como este, las dificultades aprietan con más bajos presentados en el volumen que sirven para
fuerza. Por eso, como cita el libro de A. Egido, construir de manera clara una imagen del pro-
“es necesario el apoyo para que triunfe la Revo- ceso. Para ello, estructuran el volumen en cinco
lución Nacional Democrática en Venezuela, para partes de un tamaño similar, salvo la primera,
que le dé acceso al desarrollo económico, la de- que funciona a modo de una contextualización,
mocracia verdadera, el progreso y la soberanía”. a través de los trabajos de Gérard Bossuat y An-
tonio Moreno Juste para explicarnos la evolución
González Madrid, Damián A.; Molina García, del proceso de construcción europea, poniéndo-
Sergio y Ortíz Heras, Manuel, L’adhésion de l’Es- lo en perspectiva.
pagne à la CEE (1977-1986), Bruxelles, Peter
Lang, 2020, 436 pp. Posteriormente, la segunda parte analiza las re-
laciones entre España y Francia, el país que ac-
por Alejandro Román Antequera tuó como principal obstáculo a las aspiraciones
(IMAGER, UPEC) españolas, y que no deja de ser el lugar de cele-
bración de un coloquio cuyas reflexiones están
La entrada de España en la Comunidad Econó- en el origen de esta obra colectiva. A través de
mica Europea firmada el 12 de junio de 1985 y las aportaciones de Matthieu Trouvé, Lorenzo
efectiva el 1 de enero de 1986 completaba un Delgado Gómez-Escalonilla, María Elena Cavalla-
arduo proceso de negociación iniciado años an- ro y Joël Brémond se relatan las relaciones fran-
tes con la nueva petición para el ingreso por el co-españolas de los años 70 y 80, que no comen-
gobierno liderado por Adolfo Suárez en 1977. zarían a cambiar hasta la llegada de los partidos
La adhesión fue el comienzo de la culminación socialistas al gobierno de ambos países, siendo
de un viejo anhelo español, cómo expresaba el especialmente difíciles durante el mandato pre-
editorial de El País del 2 de enero de 1986: “El vio de Giscard d’Estaing, y en las que el influjo de
nuevo año significa para España la reafirmación los estereotipos jugó un papel más importante
de un destino europeo del que nunca debimos del que se pueda imaginar.
apartarnos”, y que transita todo el siglo XX. Este
objetivo fue perseguido por diferentes gobier- A continuación, la tercera parte completa el pa-
nos españoles, sin importar el signo político, es- norama del proceso y las interacciones a nivel de
pecialmente desde la configuración de la CEE en países, mostrando en cinco trabajos de Sergio
el tratado de Roma de 1957, la cual rechazó al Molina García, Carlos Sanz Díaz, Walther L. Ber-
régimen franquista y que no daría el visto bueno necker, Ángeles González-Fernández y Setheros
a España hasta el tránsito a la democracia. Isidoros Balios las actitudes y las relaciones de
otros actores importantes del proceso. De este
Es ese período de consecución de la adhesión de modo, se dedican dos trabajos a Alemania, y
1977 a 1986 el que da el marco cronológico al otros dos a países que consiguieron la adhesión
libro, en su afán de conseguir explicar un proce- en los años ochenta, Grecia en 1981 y Portugal
so, que no fue ni mucho menos fácil, para conse- en el mismo momento de España, y que también
guir integrarse en la CEE, a partir de la segunda está presente como eje central en uno de los dos
demanda realizada por España, bajo el gobierno trabajos sobre Alemania; sin olvidar, la presenta-
de Adolfo Suárez. Para conseguir explicar este ción de la actitud de los países del Magreb, Ar-
periplo, los tres coordinadores del volumen con- gentina, EEUU y la Unión Soviética.
siguen reunir un nutrido grupo de especialistas,
de diversas procedencias, así como el testimonio Este panorama sobre las relaciones entre países
de cuatro protagonistas del proceso de negocia- hubiese sido insuficiente, pero los coordinadores
ción. Este carácter colectivo de la obra podría tienen el gran acierto de incluir dos partes más.
haber sido un hándicap cómo ocurre en diversas La primera, cuarta en el total, dedicada a abordar
ocasiones, por el desequilibrio que puede aca- el rol de los actores internos dentro del proceso

de adhesión. Se dedican cuatro trabajos a este el trabajo-, no deja de ser positivo, tanto para el
aspecto fundamental, para comprender también proyecto europeo, como para España.
la complejidad del mismo dentro de España, con
dos capítulos dedicados al PSOE, el partido en el Este balance positivo, en un contexto actual en
poder cuando se ejecutaron las negociaciones el cual la opinión sobre la pertenencia al mismo
decisivas y la adhesión, por Manuel Ortíz Heras ha decaído en España con respecto a épocas pa-
y Damián González Madrid. En ellos, los autores sadas a causa de la gestión de la crisis de 2008,
analizan la evolución del partido en los previos, de los propios procesos internos y del momento
desde su congreso de Suresnes (1974), hasta al- de incertidumbre que atravesamos por la crisis
canzar el gobierno (1982) y completar el objetivo del COVID, es una conclusión que se puede ex-
de integrar la CEE (1986). Asimismo, no se olvida traer de las diferentes aportaciones del libro.
el papel de otros grupos políticos, de lo que se Sin embargo, es importante destacar que no por
encarga Julio Pérez Serrano, con su análisis de ello se abandona un espíritu crítico sobre el aná-
las posiciones encontradas de los comunistas, lisis del proceso de adhesión español a la CEE,
oficiales y disidentes, ante la CEE en el proceso resaltando las dificultades que conllevó y los in-
de adhesión. Por último, Emilio Martos Contre- convenientes que se pueden derivar incluso hoy
ras y Rafael Quirosa-Cheyrouze y Muñoz ponen en día. Se compone con ello un trabajo de sumo
la lupa en los cambios acontecidos en la agricul- interés para avanzar en nuestro conocimiento
tura almeriense por el proceso de adhesión a la sobre una cuestión fundamental del proceso de
CEE, lo que permite aprehender a un nivel micro cambio que experimentó España en las últimas
las ventajas y desventajas que el mismo conlle- décadas del siglo XX, en las que se produjo el
vo, en uno de sus aspectos fundamentales, como paso a la democracia y la modernización socioe-
es la agricultura, ante la necesidad de adaptarse conómica, que no se pueden llegar a entender
a la Política Agraria Común (PAC). sin su integración en las instituciones europeas.
Finalmente, la quinta sección del libro da voz a González Martínez, Carmen (coord.), Transicio-
los protagonistas, con lo que el análisis realiza- nes políticas contemporáneas: singularidades
do en los capítulos anteriores, con una lógica nacionales de un fenómeno global, Madrid,
de progresiva reducción de la escala, gana en Fondo de Cultura Económica y Red Columnaria,
riqueza y es puesto en perspectiva, gracias a las 2018, 284 pp.
intervenciones de personas que participaron en
Por Mariano Monge Juárez
el proceso. Además, hay el acierto añadido de
(Universidad de Murcia)
contarse con políticos encuadrados en partidos
políticos diferentes y con un encuadre ideológico Uno de los procesos más característicos y a la
diverso, con otro elemento no menos importan- vez complejos de las últimas décadas del siglo
te, el que sean de ambos lados de los Pirineos, XX ha sido la transición de regímenes totalitarios
favoreciendo la visión poliédrica sobre un proce- o autoritarios a sistemas democráticos y libera-
so muy complejo, estableciéndose dos binomios les. Tras las crisis del petróleo de 1973, hasta la
a partir de un tema específico, la agricultura, y consolidación de internet, a finales de los años
la posibilidad de ofrecer un balance global con noventa, el fenómeno de las transiciones, inser-
una perspectiva sobre la entrada española en la to en un clima de reformulación de la nación, ha
CEE. De este modo, por un lado, se cuenta con definido el final de la Guerra Fría y el principio
las intervenciones de Jaime Lamo de Espinosa y de una nueva época, desde la vieja Europa a La-
François Guillaume sobre la espinosa cuestión tinoamérica.
agrícola, que fue uno de los principales pun-
tos de conflicto en el proceso de adhesión, fo- Carmen González Martínez, catedrática de histo-
calizado en la pugna entre España y Francia, la ria contemporánea de la Universidad de Murcia,
cual veía la llegada de los productos españoles nos presente en esta monografía una selección
al mercado común como una amenaza para su de ensayos críticos que analizan desde diferen-
propia producción. Por el otro, los testimonios tes perspectivas el fenómeno de las transiciones
de Catherine Lalumière y Miguel Ángel Martínez y responden a cada una de las dinámicas socia-
Martínez ofrecen ese balance sobre la entrada les y políticas. Cada uno de los doce capítulos en
de España en la CEE, que a pesar de los claros- que está dividido el libro nos induce a reflexionar
curos del proceso -que se ponen de relieve en sobre modelos, mecanismos o elementos comu-
nes y divergentes. Como advierte la introduc-

ción, resulta muy interesante el abordaje de la Sabater Navarro, que, partiendo de la teoría del
transición como crisis de las clases medias, que contexto ibérico como gran paradigma para el
se sienten amenazadas por la esclerosis econó- caso de la península, aporta el análisis desde un
mica y política de aquellas estructuras autorita- flanco novedoso, ya que sitúa la “cuestión Por-
rias que durante años han resultado estables y tuguesa” en el ámbito de la “zona de inestabi-
útiles pero que, en un momento determinado, lidad en el sur de Europa” en plena Guerra Fría,
se encuentran deterioras, obsoletas o incapaces circunstancia que dota de especial relevancia el
de dar respuestas a nuevos problemas. Es por papel de Estados Unidos en los procesos de tran-
ello que, como propone la misma coordinadora, sición ibéricos, sobre todo por razones geoestra-
el objetivo de este libro es “adentrarse en un ám- tégicas. Asimismo, el capítulo dedicado al caso
bito metodológico en el que hay que identificar de España, de Julio Pérez Serrano, sobre todo
las diferencias dentro de un marco genérico para porque en pocas páginas consigue desmontar las
poder comprender las verdaderas peculiarida- visiones apologéticas entorno a esa transición
des de cada ejemplo nacional”. He aquí que Gon- española “inmaculada” que nos sitúa ante un
zález Martínez organice un conjunto de estudios nuevo “mito re-fundacional” de la nación susten-
en dos grandes bloques, el dedicado a España y tado entres relatos: el “de los grandes hombres”,
Europa y el que se centra en América latina. que fundamenta su argumentación en el papel
casi providencial de Adolfo Suárez, Santiago Ca-
En el caso de los capítulos dedicados a España y rrillo o Juan de Borbón entre otros; el de “corte
Portugal, destaca el planteamiento del contexto funcionalista”, que interpreta la transición como
ibérico en la transición lusa, para detenerse en el el resultado “natural” de la naturaleza reformista
caso español, diseccionado desde tres puntos de de ciertas élites franquistas -Opus Dei, tecnócra-
vista diferentes; el del análisis del debate y la ne- tas- rectoras del desarrollismo de los años 60; y
cesaria desmitificación, el de la óptica francesa y por último, el relato “populista”, que atribuye al
el de las contribuciones del exilio a la democra- “pueblo español” el éxito de la democratización,
cia. Por otra parte, el análisis de Europa del Este, como producto de su “madurez”, concepto de
se sitúa ante la “transición rusa” desde la mirada difícil ubicación en un esquema científico. Tam-
del occidente liberal, sobre todo española, mien- bién creo que es de lectura imprescindible el
tras la experiencia húngara se nos muestra como capítulo de Magdalena Garrido Caballero sobre
espacio de analogía con otros países de la órbita la “transición rusa”, en el que incide muy acerta-
soviética -Polonia, Checoslovaquia o Rumanía. damente sobre los conceptos en ruso, perestroi-
ka y novoe myslenie, “reconstrucción” y “nueva
La segunda parte, centrada en América latina, se
mentalidad”, para continuar con una síntesis en
ocupa de presentar todo un espectro de transi-
torno a las teorías sobre la caída de la Unión So-
ciones y crisis que nos revelan diferentes modos
viética dese S. Cohen y su rechazo de la idea de
de hacer historia, pero sobre todo, destacan los
“muerte anunciada”, hasta la de Flores y Colo-
diferentes modelos, la mayoría posteriores a los
mer sobre la “implosión de los nacionalismos” y,
casos europeos, en los que llama la atención el
finalmente, facilitar los resultados de una riguro-
tratamiento del concepto de “olvido” a propó-
sa investigación sobre la visión “oficial” española
sito del 25 aniversario de los Acuerdos de Paz
y el papel de Felipe González tras la entrada en
de El Salvador, el papel de la violencia política
la OTAN, ya en plena perestroika. El capítulo de-
y su lugar en la prensa en el Brasil de los años
dicado a la transición en Uruguay de Carlos De-
70, el ejemplo de cambio de un Estado vigilan-
masi es también destacable porque nos facilita
te y represivo a un sistema democrático a través
un modelo general adaptable a otros lugares de
del diálogo en Uruguay, el papel de los sindica-
la Latinoamérica de tradición liberal que termi-
tos y las organizaciones obreras en Argentina, la
na sufriendo episodios autoritarios relacionados
fase postransicional y los significados de la idea
con el “Plan Cóndor”, entre los años 70 y ochen-
de “transición vigilada” de Chile y por último, la
ta cuyo resultado, la violación sistemática de los
encrucijada de México tras la derrota del PRI, el
Derechos Humanos -terrorismo de Estado-, que-
inicio de una dificultosa transición y el fracaso
da sometido al dictamen del poder legislativo en
democratizador que padece la sociedad mexica-
forma de Ley de Caducidad de 1985, en Uruguay,
na desde 2008.
equivalente a Ley de Punto Final de 1986, en Ar-
Sin desmerecer el resto de aportaciones, creo gentina.
que es destacable la contribución del capítulo
dedicado a la transición portuguesa de Gregorio

Todo ello hace de esta monografía un libro im- westerns. Este exitoso género popularizó duran-
prescindible para aquellos lectores o investi- te el s. XX una visión idealizada de los territorios
gadores que estén interesados en entender las fronterizos como “territorios vírgenes”, espacios
dinámicas internas que subyacen en los proce- donde se producía una lucha incesante entre la
sos de transición política. Además, como todo “civilización” y la “barbarie”. Una visión falsaria
trabajo científico trascendente, sugiere vías de que escondía deliberadamente el hostigamien-
trabajo en torno a otros casos, como por ejem- to a los pueblos originarios, la explotación de la
plo los de Perú, Ecuador, Filipinas, o incluso abre clase obrera inmigrante, la discriminación de las
la perspectiva para estudiar otro tipo de transi- mujeres o la segregación de la población afro-
ciones diferentes, más específicas y relacionadas descendiente.
con la violencia organizada, terrorismo y/o lucha
armada en Colombia, y el País Vasco tras ETA. Sin embargo, no hace falta irse tan lejos para en-
Del mismo modo, el trabajo de Carmen González contrar territorios fronterizos cargados de una
nos invita al abordaje de las transformaciones de intensa y despiadada historia. Un perfecto ejem-
China tras la muerte de Mao Zedong. plo de esta realidad fue la frontera entre España
y Francia, marcada por el accidente geográfico
Gracias, Carmen, por hacer el camino más fácil. pirenaico y también por la resaca de la historia
contemporánea española, especialmente tras el
In memoriam. final de la Guerra Civil. Pese a que había pasa-
da bastante desapercibida para la historiografía,
Hernández Sánchez, Fernando, La frontera sal-
este espacio fue el escenario de algunos de los
vaje. Un frente sombrío del combate contra
acontecimientos más decisivos de la lucha anti-
Franco, Barcelona, Pasado & Presente, 2018,
franquista y de las relaciones hispano-francesas.
541 pp.
Fernando Hernández se propone en esta mono-
Por Eduardo Abad García grafía desentrañar los pormenores de lo que el
(Universidad de Oviedo) categoriza como un “territorio salvaje”, que sir-
vió de escenario para refugiados políticos y eco-
La noción de frontera siempre ha despertado la nómicos, guerrilleros, espías, militares y policías.
fascinación y el interés de grandes grupos huma-
nos. A lo largo de las últimas décadas, lo territo- El autor cuenta en su haber con una amplia pro-
rios fronterizos también han atraído la atención ducción historiográfica que ha aportado un im-
de innumerables investigadores sociales. El filó- portante impulso a la renovación de los estudios
sofo marxista Etienne Balibar ha recalcado con sobre el comunismo español. Aunque ha ela-
mucho acierto que el concepto de frontera natu- borado numerosos artículos y coordinado otras
ral no es más que un mito político y que, en todo importantes obras colectivas, destacan especial-
caso, es necesario entenderlo como una cons- mente sus últimos libros sobre la historia del co-
trucción social donde confluyen diversos facto- munismo en España, donde siempre ha aporta-
res de enorme complejidad.1 Desde una mirada do un interesante y riguroso enfoque a aspectos
sociocultural, la frontera estuvo muy presente temáticos esenciales para la comprensión global
en las sociedades occidentales contemporáneas, de este fenómeno: Comunistas sin partido: Jesús
asociada en el imaginario capitalista a la idea de Hernández, ministro en la Guerra Civil, disidente
la “tierra de oportunidades” del American Way en el exilio (Raíces, 2007), Guerra o revolución.
of Life. Esta noción, que se escondía detrás de El partido comunista de España en la Guerra
un pensamiento netamente imperialista, ofrecía Civil (Crítica, 2010) y Los años de plomo: la re-
a unas sociedades donde abundaba la miseria construcción del PCE bajo el primer franquismo
una válvula de escape para las clases populares. (1939-1953) (Crítica, 2015).
Sin embargo, al mismo tiempo garantizaba a los
En la Frontera Salvaje. Un frente sombrío del com-
Estados y a las clases dominantes la oportunidad
bate contra Franco Hernández estudia el pasado
de expandirse mediante la guerra, de explotar
oculto de aquellos antifranquistas que, agrupa-
otros recursos y dar salida a la producción de sus
dos principalmente en torno al PCE, se convir-
lugares de origen. Probablemente, la muestra
tieron en un motivo de preocupación para los
más representativa de un producto cultural de
estados francés y español. La presencia de este
masas cuyo epicentro sea la frontera fueron los
colectivo humano en el sur de Francia se convir-
1
Balibar, E. 2001. Nous, citoyens d’Europe? Les fron-
tió en una presencia incómoda tras demostrar su
tières, l’Etat, le peuple, París: La Découverte, p. 174. valía en la derrota del nazi-fascismo en Europa.

Su anhelo por continuar la lucha y liberar España influencia del PCF. También se trata la evolución
del yugo de la dictadura franquista amenazaba de las relaciones entre los servicios de control
con entorpecer las renovadas relaciones entre social y fronterizo de ambos países. Especial-
los dos países. El periodo cronológico compren- mente interesante resulta en esta parte la deta-
dido en esta obra abarca desde la liberación de llada descripción de los métodos de trabajo de
Francia en 1944 hasta la Operación Bolero-Papri- la policía política y el servicio de espionaje fran-
ka de 1950. Un corto periodo de tiempo donde quista, que nos acercan de lleno a la amplia acti-
las autoridades francesas de la IV República pa- vidad que tuvieron en suelo francés. También se
saron de homenajear a los comunistas españoles narra la evolución del estado de ánimo los anti-
como “héroes de la resistencia” a expulsarles del franquistas y, sobre todo, del tratamiento que les
país acusándoles de ser “agentes de Moscú”. La dio el Estado Francés. La segunda parte realiza
Guerra Fría había facilitado el cambio de postu- un interesante recorrido de las practicas militan-
ra respecto a sus anteriores aliados y, al mismo tes de los comunistas españoles en suelo galo
tiempo, había envuelto en un halo de pragma- desde una perspectiva social. De tal manera que
tismo las relaciones con los cuerpos represivos se analizan sus formas de organización, las redes
franquistas. Lo verdaderamente interesante de de contacto y sus dinámicas de socialización. Por
este libro es la amalgama de personajes que in- último, el capítulo finaliza con un pormenorizado
tervino en todo este complejo y paulatino pro- repaso sobre el proceso de ilegalización del PCE
ceso, lo que en ocasiones le confiere a su lectura en Francia y su importante impacto entre las filas
un halo de misterio, propio de las mejores no- comunistas.
velas de espías. Además, el escenario en el cual
se centra el autor no puede ser más excepcional. El libro La Frontera Salvaje. Un frente sombrío
El sur de Francia, donde se encontraba la mayor del combate contra Franco es un texto altamen-
parte de los exiliados españoles y, especialmente recomendable por varios motivos. La temáti-
te, en la zona fronteriza pirenaica, se convirtió ca escogida ofrece un contexto muy novedoso
en el centro de todas las conspiraciones. Este en los estudios sobre el PCE, el de los estudios
territorio fue objeto de seguimiento por parte transfronterizos franco-españoles. Además, la
de los servicios policiales francés y español, muy perspectiva de análisis se centra en fuentes no
preocupados por las posibles acciones de la mili- consultadas hasta el momento que permiten
tancia comunista. entender el funcionamiento de los aparatos del
Estado español y francés en sus tareas de control
Por otra parte, el libro destaca por su rigurosidad sociopolítico y, sobre todo, el alto grado de cola-
y por una correctísima utilización de los archi- boración entre ellos. Además, el enfoque social
vos disponibles. Hernández maneja una amplia permite rescatar del olvido a los verdaderos pro-
gama de fuentes directas que no había sido estu- tagonismos de tales hostigamientos: la militancia
diadas hasta el momento y que le permite ahon- comunista en su conjunto. En suma, este libro ha
dar en multitud de aspectos inéditos. La mayor de convertirse en una referencia obligada para
parte de ellas están basadas en las notas y los cualquier persona interesada en los estudios so-
informes de los servicios de información, de ca- bre los comunistas españoles.
bles diplomáticos y de la documentación gene-
rada por los distintos cuerpos policiales. De esta Núñez de Prado Clavell, Sara, Historia de Rusia:
manera, combina la información recabada en los De la Unión Soviética a la Federación Rusa, Ma-
fondos franceses con la de los archivos españo- drid, Síntesis, 2019, 330 pp.
les y las agencias de espionaje norteamericana,
Por José Luis Rodríguez Jiménez
logrando de esta manera una triangulación que
(Universidad Rey Juan Carlos)
permite una visión muy completa del fenómeno
de estudio. A la profesora Sara Núñez de Prado Clavell se
debe la obra De la Unión Soviética a la Federa-
El libro se estructura en 15 capítulos que se divi-
ción Rusa. Pensando en los posibles interesados
den en dos partes. La primera de ellas comienza
en la materia, iniciamos la reseña atendiendo
describiendo la situación en la cual se quedaron
a los contenidos, estructurados en nueve capí-
las fuerzas españolas en suelo francés tras la li-
tulos, para abarcar: los orígenes, nacimiento y
beración y la creciente incomodidad que esto
creación de la Unión de Repúblicas Socialistas
supuso para las autoridades francesas, cada vez
Soviéticas (URSS); la URSS de Stalin y la forma-
más preocupadas por consolidar el poder de los
ción del Imperio soviético (1924-1953); los últi-
monopolios en Francia y evitar un aumento de la

mos zares rojos, con Jruschov y Bréznev como Núñez de Prado atiende a todas estas cuestiones
figuras principales (1953-1985); Gorbachov y desde la perspectiva de un historiador conscien-
los intentos de renovación interna, con esas dos te de la necesidad de establecer los anteceden-
palabras que ya forman parte del léxico político tes de los temas que va a tratar en profundidad.
global, Perestroika y Glásnost (1985-1988); Gor- No obstante, consciente de que los estudiantes
bachov versus Yeltsin, con atención a las repú- de las asignaturas de Historia y los aficionados
blicas bálticas, el nuevo Tratado de la Unión, el a la historia actual están muy interesados en los
golpe de Estado de agosto de 1991 y el final de acontecimientos recientes en Rusia, y, en gene-
la URSS, y por supuesto a las relaciones entre ral, en el este de Europa, dedica buena parte de
ambos dirigentes y el final de la presidencia de estas páginas a desmenuzar las últimas etapas
Gorbachov. También analiza el desmembramien- de la historia de la URSS-Rusia-Federación Rusa,
to territorial de la URSS, la aparición de nuevos marcadas por la personalidad de sus líderes po-
Estados a partir de las extintas repúblicas sovié- líticos, circunstancia que caracteriza también
ticas, con atención a las causas y desarrollo de a Estados Unidos y a otros países, sobre todo
los conflictos de raíz nacionalista en el seno de a los regímenes autoritarios. Tras la muerte de
la Unión, por lo tanto, al papel de Rusia, las re- Bréznev en 1982, fue Andropov el impulsor de la
públicas bálticas, las repúblicas de Asia Central y renovación de la cúpula de mando y del funcio-
los otros dos influyentes y gigantes territoriales, namiento interno de la URSS y, asimismo, de la
Ucrania y Bielorusia. El capítulo siete lleva por tí- candidatura de Mijaíl Gorbachov como secreta-
tulo “Proyecto Rusia” (1991-1999), para tratar el rio general del PCUS, cargo al que accedió el polí-
fin de la URSS y la creación de la Confederación tico reformista en marzo de 1985, tras la muerte
de Estados Independientes (CEI), bajo la batuta de Chernenko. Gorbachov encontró resistencias
de Yeltsin, y las cuestiones de política interior y a su propósito de reforma económica y política
exterior y de seguridad correspondientes, entre del sistema, conservándolo, y no lo logró, pues
estas la crisis de Chechenia. Los dos últimos ca- este fue incapaz de regenerarse a sí mismo, a di-
pítulos, el 8 y 9, estudian la Rusia de Putin. En ferencia de lo acontecido en China, lo que fue
estas páginas se analizan el personaje político aprovechado por los sectores rupturistas. No
que es Vladímir Putin, las reformas introducidas obstante, el legado de Gorbachov es enorme. En
bajo su mandato como primer ministro y presi- economía destacan la apertura del monopolio
dente, económicas, administrativas, las directri- estatal del mercado laboral, la reducción del vo-
ces de política internacional, la situación de los lumen y el valor de la dirección centralizada de
derechos humanos, las cuestiones de geopolíti- empresas estatales, para dar paso a cierto grado
ca interna y externa de Rusia, en concreto “Gas, de autogestión, y la ruptura del monopolio del
petróleo y geopolítica”, “Crimea y Ucrania” y “El Estado sobre el comercio exterior. Además, el lí-
mar Caspio”, y, obviamente, los mecanismos y der soviético buscó la implicación de la sociedad
formas para perpetuarse en el poder, para ter- en la Perestroika, a diferencia del Despotismo
minar con una reflexión sobre el cuarto mandato Ilustrado, y con este fin un paquete de medidas
de Putin y la posible evolución de la situación en favoreció, parcialmente, la libertad individual y
la Federación Rusa. de decisión empresarial, lo que se conoce como
Glásnost, transparencia, con el mensaje de que
La obra se completa con una Selección de textos, la sociedad precisaba una nueva mentalidad y,
la mayoría correspondientes a la historia más en consecuencia, la discusión y la crítica tenían
reciente de Rusia y una Cronología que abarca cabida en el mundo comunista, y que no ten-
la Rusia de los zares, la Revolución soviética, la drían consecuencias negativas para quienes las
URSS y la Federación Rusa. Es un libro que com- ejercieran. Entre el conjunto de medidas adop-
pagina el análisis académico con el propósito de tadas para hacer realidad ese mensaje, cabe
divulgación, como viene siendo la norma en la destacar la Ley de Prensa, que puso fin al control
colección Temas de Historia Contemporánea de del Partido sobre las publicaciones periódicas y
la editorial Síntesis que coordina la Dra. Pilar To- el conjunto de la cultura, la apertura en cine, li-
boso Sánchez. teratura y música, y lo mismo en el ámbito de
la historiografía, con el resultado de la revisión
En la actualidad, Rusia es objeto de atención,
de los textos escolares y la publicación por los
más que por los historiadores, de los expertos
historiadores de estudios ahora menos, o nada,
en relaciones internacionales, en seguridad y de-
sujetos a los dictados de la política y la propagan-
fensa del denominado mundo occidental, y, asi-
da gubernamental.
mismo, de los investigadores chinos. El libro de

Pero el Partido Comunista perdía poder, control terminó con la era Gorbachov. Con este preso de
y autoridad, y Gorbachov, aunque reunía dos los golpistas, y agotado, físicamente al menos,
cargos en su persona, el de secretario general fue Yeltsin, el presidente ruso, fotografiado su-
del Partido y el de jefe del Estado, lo mismo. Su bido a un tanque, para proclamar que lucharía
posición se vio amenazada por el sector duro del por la democracia, y beneficiado por la división
Partido cuando acordó con Estados Unidos, por de las fuerzas armadas, quien consolidó su po-
convencimiento de que era preciso avanzar en la sición de líder nacional. El Partido Comunista
desnuclearización del mundo y porque la situa- fue suspendido en Rusia, Gorbachov renunció al
ción económica de la URSS no hacía posible nue- cargo de secretario general del PCUS y disolvió
vas inversiones para modernizar el armamento, en noviembre el Comité Central, y Yeltsin decla-
una reducción de su arsenal nuclear, que mermó ró que Rusia asumía la economía de mercado y
sus capacidades defensivas en mayor medida que las instituciones rusas estaban por encima
que las de su adversario (mientras Reagan im- de las de la URSS. Y el proceso era irreversible. En
pulsaba el programa de guerra de las galaxias), diciembre, el referéndum ucraniano ofreció un
y cuando el mundo asistía a la caída del muro de resultado abrumador a favor de la independen-
Berlín y la URSS perdía a la República Democráti- cia, y antes y después los intentos de Gorbachov
ca Alemana como socio del Pacto de Varsovia. El de hacer avanzar el Tratado de la Unión, dotan-
malestar general por el deterioro de la situación do a las repúblicas de mayor poder de decisión
económica, con fuerte producción de la industria y, a continuación, dando paso a una federación
pesada y graves carencias en industria civil y de con un mayor número de poderes transferidos,
consumo, convirtió a un líder reformista emer- fracasaron. El 25 de diciembre de 1991, Gorba-
gente, Boris Yeltsin, el muy popular secretario chov dimitió como presidente de la URSS. Esta
general del Partido en Moscú, en protagonista Unión se acababa. Una a una, las repúblicas pro-
de primera fila. Elegido, tras las elecciones de clamaron declaraciones de soberanía, primero, y
marzo de 1990, presidente del Soviet Supremo de independencia, después, y varias repúblicas
de la República rusa, Yeltsin fue distanciándose colisionaron con Rusia o con otra república por
de Gorbachov, hasta abandonar con sus segui- motivos territoriales y de otra índole.
dores el PCUS, y se convirtió en el actor principal
de la desaparición de la URSS. Mientras, varias En diciembre de 1991, Rusia, Ucrania y Bielo-
repúblicas de la URSS reclamaban su derecho a rrusia alentaron la Comunidad de Estados Inde-
acceder a la soberanía. Un Gorbachov cada vez pendientes (CEI), a la que se sumaron Armenia,
con menos partidarios quedó en medio de dos Azerbayán, Kazajistán, Uzbekistán, Kirguistán,
posturas, la de la línea dura del partido, en parte Moldavia, Tayikistán y Turkmenistán (aunque
neoestalinista, y la de los demócratas que aban- este país y Ucrania no ratificarán el protocolo de
deraba Yeltsin. adhesión). Dicho esto, una de las constantes de
estos años, y de los que vienen, es la tensión, e
En febrero de 1991, tras un referéndum, el par- incluso el enfrentamiento armado, entre terri-
lamento de Lituania proclamó su independencia. torios ex URSS; en 1994, tuvo lugar la crisis de
En marzo, el referéndum convocado por Gorba- Chechenia: Rusia combatió a los independentis-
chov para que los ciudadanos se expresasen so- tas de esta región y conservó la unidad territorial
bre la preservación de la URSS como federación de la república.
renovada de repúblicas soviéticas iguales “en las
que se garantizarán plenamente los derechos y Yeltsin se mantuvo como presidente de Rusia,
libertades del individuo de cualquier nacionali- con distintos jefes de gobierno. La Constitución
dad”, se saldó con un sí mayoritario, de un 75% de 1993 estableció que la Federación Rusa-Rusia,
de los votantes. A continuación, Gorbachov im- cuya capital sigue siendo Moscú, es “un Estado
pulsó un nuevo tratado de las repúblicas, pero de derecho federativo con una forma republica-
los representantes de seis no asistieron (las bálti- na de gobierno” y cuya población es “multina-
cas, Armenia, Georgia y Moldavia). La oposición cional”, un Estado sin adscripción ideológica ni
a Gorbachov de los halcones del Partido y de los confesión religiosa y entre cuyos objetivos figu-
demócratas ganaba terreno. En Rusia se celebra- ran garantizar “el reconocimiento, observación y
ron elecciones a la presidencia y el elegido fue defensa de los derechos y libertades del hombre
Yeltsin con el 58% de los votos. y del ciudadano”, y que consagra el pluralismo y
el pluripartidismo. Mientras Rusia aparece como
El fallido golpe de Estado de agosto de 1991, que perdedor de la Guerra Fría frente a Estados Uni-
pretendía una marcha atrás en el rumbo del país, dos, China no para de ganar posiciones en el es-

calafón mundial como potencia económica y mi- bre las entidades federadas, y, a continuación,
litar, y la OTAN se expande hacia el Este, la difícil vaciamiento de poder de las mismas; liquidación
situación económica, que afecta a clases bajas y de los vestigios políticos de la etapa Yeltsin y as-
media baja, producida por la liberalización de los censo de los muy fieles a quien ahora repite en
precios y la desnacionalización de empresas, le la presidencia de la Federación; implementación
pasa factura a Yeltsin; a mediados de la década de medidas para fortalecer el papel de Rusia en
de 1990, el consumo ha retrocedido, y un tercio el contexto internacional, con especial atención
de la población vive por debajo del considerado a la modernización de sus capacidades militares,
umbral de pobreza, lo que no oculta una evolu- y choque con Estados Unidos a causa de la no
ción positiva para el resto de la población, cuyo vuelta atrás de Washington respecto al desplie-
nivel de consumo aumenta y disfruta de muchas gue del escudo de defensa antimisiles en Euro-
más oportunidades de ocio que en años anterio- pa; fortalecimiento del poder ejecutivo y de la
res. A finales de la misma, emerge en la política figura presidencial; dado que el presidente no
rusa la figura de Vladímir Putin. En 1999, los gru- puede presentarse para un tercer mandato, me-
pos contrarios a Yeltsin consiguen presentar en didas para perpetuar su estela, situando a un
el Parlamento cinco cargos contra él, entre estos afín como presidente, que favorece su designa-
destruir la URSS y reducir la capacidad defensiva ción por la Duma como primer ministro, a la es-
del país, y plantean su destitución. No consiguen pera de regresar a la presidencia…, hasta llegar
entonces su objetivo, pero varias publicaciones al cuarto mandato, con un afán de perpetuación;
le acusan de ser partícipe o responsable princi- y recortes de las libertades ciudadanas, para fre-
pal de varios casos de corrupción; a finales de nar las protestas por el probable fraude electoral
año, Yeltsin dimite. Su candidato a la presidencia en las elecciones legislativas y presidenciales. La
del Estado es quien lleva solo unos meses al fren- autora no se olvida de la situación de los dere-
te del gobierno, Putin. Y es el quien se impone en chos humanos en Rusia, de cuál es su realidad y
las siguientes elecciones presidenciales, arropa- cuál su desarrollo legislativo, y de la referida a la
do, y parcialmente controlado, por la oligarquía libertad de prensa.
económica, que no está acostumbrada a, y que
no desea, una economía de libre mercado; y lo La figura de Putin llena dos décadas de vida po-
hace con un discurso que compagina democra- lítica de los rusos, y no solo política, y no solo
cia y libertades con autoridad y primacía de los de los rusos. Por este motivo, la personalidad y
intereses del Estado. objetivos en política interior y exterior de este
personaje son objeto de atención en los medios
Esta oligarquía, estos señores del dinero, van a te- de comunicación y publicaciones especializadas,
ner un especial protagonismo durante la era Pu- sobre todo de las occidentales dedicadas a Re-
tin, por las exigencias de quienes son, en parte, laciones Internacionales y Defensa. Se señala
artífices del éxito político del personaje citado. que, en la historia de la Rusia contemporánea,
Pero no perdamos de vista que las agrupaciones encontramos procesos de modernización de la
económicas convertidas en grupos de influencia estructura económica y administrativa desde
son cambiantes, y dominadas por figuras que se formas de Estado autoritario, las de Pedro I, Sta-
suceden, y que la etapa naciente y actual está lin, Gorbachov, Yeltsin y Putin, de forma equipa-
controlada por quienes detentan el poder polí- rable a China, aunque sean caminos distintos.
tico, con una figura principal, consolidada, unido Núñez de Prado incide en que la Rusia zarista,
al poder militar y los servicios de inteligencia. El la Rusia cabeza dirigente de la URSS y la Fede-
libro de Núñez de Prado dedica dos capítulos a ración Rusa son denominaciones de una misma
la era Putin. Al giro económico: reforma fiscal, nación, y que, habiendo experimentado varia-
para ampliar la base tributaria, mayor control a ciones geográficas y políticas, “nunca ha perdido
la actividad bancaria, aumento del gasto social, su esencia”. De hecho, la URSS de Stalin, victo-
liberalización del mercado de las propiedades riosa en 1945, supuso una fase más, ampliando
agrarias, medidas que propician un control de la el territorio europeo y con un formato político y
inflación y un crecimiento sostenido; proyectos económico distinto, del proyecto imperial ruso.
de Prioridad Nacional, para la mejora de la sa- En esta línea, la autora titula uno de los epígrafes
nidad, educación y vivienda; y las relaciones en- “La doctrina de la soberanía limitada”, referido a
tre las reservas y exportación de gas y petróleo la era Brézhnev, cuando la URSS refuerza su pre-
y la geoestrategia del Estado. Y al giro político: sencia como potencia internacional, como esta-
incremento del control del Gobierno central so- do líder del mundo comunista y practica la dis-

tensión, continuadora de la coexistencia pacífica poco los actores colectivos fueron entrando en
de la etapa Jruschov. Ciertamente, el mundo ha escena, de la mano de nuevos relatos que po-
cambiado mucho desde entonces, si por mucho nían el acento en los procesos sociales. Partidos,
entendemos lo que significa China en la actua- sindicatos y movimientos fueron en esta segun-
lidad y la ampliación de la Unión Europea y de da fase objetos de una investigación más apega-
la OTAN mediante la incorporación de naciones da a la realidad que logró poner en evidencia la
del este de Europa. Y ya no se aplica en Moscú complejidad y las incertidumbres de un cambio
el derecho de intervención en defensa del socia- político, social y cultural que distaba mucho de
lismo como bien común superior…Sin embargo, ser obra solo de audaces “pilotos” o “arquitec-
Rusia, y no solo ella, también Estados Unidos, si- tos” que operaban secretamente en la cúspide
gue aplicando la doctrina de soberanía limitada del Estado.
a algunos de sus vecinos. Por este motivo, la au-
tora señala en el prólogo de la obra que la Rusia La obra de Gema Pérez Herrera se inscribe en los
dirigida por Putin está “empeñada en recuperar albores de una tercera etapa, en la que la histo-
el esplendor perdido y en encontrar su razón de ria vuelve la mirada a los individuos, pero no ya
ser basándose en el afianzamiento de sus pro- producto de una inmediatez sesgada por preten-
pios valores y en un nacionalismo patriótico y siones hagiográficas o pedagógicas, sino todo lo
eufórico encauzado hacia la grandeza interior y contrario, para centrar la mirada, ya con la sufi-
el aseguramiento exterior como potencia global ciente distancia, sobre esa nutrida “segunda lí-
de primer nivel”. ¿Es una crítica?, ¿no es, sim- nea” de personajes que contribuyeron de forma
plemente, lógico que sea así? Son formas de ver concreta a poner en pie el sistema democrático.
las cosas. En general, los analistas occidentales No es la primera ni será la última vez que se in-
critican con dureza la actuación rusa en la recien- corpore una biografía política al (por desgracia,
te crisis de Crimea. Pero, algunos, olvidan que, inexistente) panteón de hombres y mujeres ilus-
nada más acceder al poder, Jruschov, nacido cer- tres de nuestra democracia. Pero sí es un hito,
ca de la frontera actual ruso-ucraniana, hizo que tanto por la relevancia del personaje como por
Rusia cediera Crimea a la República Socialista la calidad de la obra, en la que la autora ha sabi-
Soviética de Ucrania. Desde Rusia se preguntan: do combinar una meritoria indagación biográfica
¿Por qué tanto escándalo en Occidente cuando con un análisis fino de las cualidades políticas
el gobierno de Putin ha reclamado el territorio que José Pedro Pérez-Llorca acreditó como hom-
y, tras las negativas de Ucrania, ha recuperado bre de Estado.
Crimea por la fuerza?
El gaditano que es objeto de este libro, fue pro-
Pérez Herrera, Gema, José Pedro Pérez-Llorca. ducto de una época transcendental en la historia
Una biografía política, Madrid, Agencia Estatal de España, pero también de una familia y de una
Boletín Oficial del Estado y Centro de Estudios ciudad, con sólidas raíces liberales y anteceden-
Políticos y Constitucionales, 2020 (Col. Derecho tes masónicos. Sus ancestros y también su her-
Público), 408 pp. mano mayor, Jaime, que fue senador socialista
(y recordado amigo), representan fielmente los
Por Julio Pérez Serrano valores y las prácticas de una clase profesional
(Universidad de Cádiz) ilustrada que, alejada del ideal revolucionario,
tampoco se sintió nunca cómoda con la dictadu-
El periodo de la Transición española a la demo- ra. Esta filiación reformadora, racionalista y prag-
cracia es, sin duda, uno de los más tratados por mática, es especialmente acusada en la trayecto-
la historiografía. Su poderoso impacto sobre la ria de José Pedro, que orientó su carrera hacia el
memoria de las generaciones vivas hace que el mundo tasado del derecho, mientras que Jaime,
interés no decaiga, al tiempo que los aconteci- más apasionado y comprometido, continuó la
mientos insisten en recordarnos la vigencia aún tradición médica familiar. Ambos compartieron,
hoy de algunos de los debates y preocupacio- sin embargo, el interés por los asuntos interna-
nes que marcaron aquel tiempo. Si echamos un cionales, en el caso de José Pedro a través de la
vistazo a la producción historiográfica veremos carrera diplomática y por su desempeño como
cómo inicialmente predominaron los relatos que Ministro de Asuntos Exteriores, que lo llevó a
hacían hincapié en el rol protagónico de figuras materializar el ingreso de España en la OTAN, un
singulares, como el rey Juan Carlos, Torcuato ámbito que también Jaime transitaría poco des-
Fernández Miranda o Adolfo Suárez, vistas como pués como miembro destacado de la delegación
muñidores o artífices del cambio político. Poco a española en la Asamblea del Atlántico Norte.

La obra posee una estructura cartesiana que nos negociación autonómica. La tercera, de nuevo
permite comprender cómo se forja el carácter y con efectos sobre el partido y el gobierno, marcó
va definiéndose el perfil político del personaje. el agotamiento del ciclo reformista liderado por
Un primer capítulo está dedicado a sus orígenes Adolfo Suárez y se cerró en falso con una nue-
familiares, su formación universitaria y los co- va reestructuración del gabinete que permitió,
mienzos de su actividad profesional hasta des- al fin, al gaditano desvincularse del enquistado
embocar en el compromiso político con el pro- y en apariencia irresoluble problema territorial,
yecto centrista. Se nos revela aquí una persona asumiendo la cartera de Asuntos Exteriores en el
dotada de inusitada elocuencia y extraordinaria mes de septiembre.
capacidad para la negociación, cualidades que
le acompañarán a lo largo de toda su carrera. El Este último periodo al frente de la diplomacia es-
segundo capítulo reconstruye su destacado pa- pañola, que culmina dos años más tarde con la
pel, ya como diputado y portavoz parlamentario, derrota electoral de la UCD, ocupa el quinto y úl-
durante el proceso constituyente, una etapa en timo capítulo de este libro, el más extenso y qui-
la que no sin fundamento recibió el apelativo de zá también el más clarificador, pues en esta últi-
“zorro plateado”. La sólida formación jurídica ma etapa la autora se sitúa ya en una atalaya que
que poseía, combinada con su brillante oratoria le permite observar con mayor claridad y sentido
y una habilidad natural para facilitar el acuerdo, el itinerario completo de este político. De nuevo
sin renunciar nunca a los principios, lo situaron se hacen aquí visibles las dotes pragmáticas y la
en la ponencia constitucional, convirtiéndolo en altura de miras que, como hombre de Estado,
uno de los siete padres de la Constitución Espa- caracterizan al personaje, capaz de encauzar en
ñola de 1978. condiciones especialmente adversas, que inclu-
yen el golpe militar frustrado perpetrado el 23
Tras las elecciones de 1979 revalidó su escaño y, de febrero de 1981, una negociación que termi-
pese a su juventud, pues apenas contaba treinta nará anclando a España en el espacio atlántico
y ocho años, fue nombrado ministro de la Presi- tras la firma del tratado de adhesión a la OTAN.
dencia en el tercer gobierno de Adolfo Suárez. Su Al mismo tiempo, también estos dos años de Pé-
recorrido en esta I Legislatura (1979-1982) ocu- rez-Llorca al frente de la política exterior fueron
pa la segunda parte del libro. El tercer capítulo cruciales para dar el impulso final a la integra-
se centra en la cuestión autonómica, uno de los ción de nuestro país en el Mercado Común.
ámbitos que ya se habían manifestado como más
problemáticos en el debate constitucional y que La llegada del PSOE al gobierno tras su rotunda
constituyó un permanente quebradero de cabe- victoria electoral en octubre de 1982 supuso
za para el político gaditano. Desde su ministerio, también la retirada de Pérez Llorca de la prime-
Pérez-Llorca debió atender de forma preferente ra línea política y el retorno a la actividad profe-
la relación con los gobiernos preautonómicos y sional y académica en el campo del Derecho, un
afrontó una dura negociación jurídica y política ámbito en el que fue capaz de construirse una
en el proceso de redacción de los primeros Esta- “segunda vida”, mucho más prolongada y dis-
tutos, los de las llamadas nacionalidades “histó- creta, pero marcada igualmente por el signo del
ricas” (País Vasco, Cataluña y Galicia), lamenta- éxito. Como se resalta en el balance final de la
blemente con escasos frutos. obra, el talante abierto del personaje y su perfil
de hombre de Estado explican el reconocimiento
El cuarto capítulo se centra en el año decisivo unánime de que goza su figura, en cuya intensa
de 1980, jalonado por tres crisis que la autora trayectoria política, donde abundan los éxitos,
va encadenando con maestría en su relato. La resalta especialmente el fracaso que, pese a sus
primera fue producto del cuestionamiento del esfuerzos, cosechó en la cuestión autonómica. Ni
modelo autonómico en algunos territorios, en el saber hacer de que hacía gala ni sus reiterados
la que marcó un hito la rebelión cívica de Anda- intentos por introducir racionalidad en este de-
lucía, plasmada en el referéndum del 28 de fe- bate lograron asentar un acuerdo estable con los
brero, por la “autonomía plena”, que fracturó el partidos nacionalistas mayoritarios en Cataluña
partido y asestó un golpe mortal al ya debilitado y País Vasco en torno a la idea de una España
gobierno de la UCD. La segunda, con epicentro autonómica, plural y a la vez unida, homologable
en el propio partido, derivó en un reajuste minis- con la de otros Estados europeos.
terial que reubicó a Pérez-Llorca como ministro
de Administración Territorial, lo que no le permi- No quisiéramos finalizar sin hacer un reconoci-
tió evadirse de continuar a cargo de la enconada miento expreso al trabajo que realiza el Grupo

de Investigación en Historia Reciente (GIHR) de ta había establecido en septiembre 1998 para

la Universidad de Navarra, liderado por el profe- que todas las fuerzas nacionalistas vascas se con-
sor Pablo Pérez López, en el que se inserta esta gregaran en el municipio navarro de Estella e ini-
obra, fruto de la tesis doctoral de su autora. Entre ciar «un proceso de diálogo y negociación» que
los muchos méritos de este equipo cabe señalar favoreciera el diseño de una estrategia conjunta
su labor en la recuperación documental y en la que permitiera la obtención de la independencia
producción historiográfica referida a los proyec- del País Vasco. Este encuentro, que se selló a tra-
tos reformistas que contribuyeron al restableci- vés del conocido como «Pacto de Lizarra», dejó
miento de la democracia en España2. Sin duda, fuera a las fuerzas no nacionalistas; es decir, los
es en este vivero académico en el que esta obra dos grandes partidos del panorama político es-
adquiere su auténtica dimensión como aporta- pañol de la década de 1990: PP (en el Gobierno)
ción relevante al conocimiento de los hombres y PSOE. Tal circunstancia puso de manifiesto que
y mujeres que formaron el centro político en los la vasca era una sociedad fragmentada, en la que
años de la Transición a la democracia, un actor el nacionalismo vasco se enfrentaba con aque-
colectivo más diverso y complejo de lo que a me- llas sensibilidades políticas contrarias a traspasar
nudo se piensa, al que todavía la historiografía líneas rojas, que eran contrarias a realizar con-
no ha prestado la necesaria atención. Confiamos cesiones políticas para poner fin al terrorismo;
en que esta línea de investigación continúe de- y que, en definitiva, eran reacias a que el fin de
sarrollándose con la misma brillantez que hemos ETA fuera negociado políticamente. Fernando
observado en este modélico libro. Buesa, como se desprende de la obra aquí rese-
ñada Fernando Buesa, una biografía política. No
Rivera, Antonio y Mateo, Eduardo, Fernando vale la pena matar ni morir, fue uno de ellos.
Buesa, una biografía política. No vale la pena
matar ni morir, Madrid, Catarata, 2020. Escribir una biografía política no es una tarea
sencilla. Es fácil incurrir en el error, muchas ve-
Por David Mota Zurdo ces inconsciente, de “enamorarse” del persona-
(Universidad Isabel I) je, ofreciendo una imagen estereotipada y he-
roizada del rememorado. Igualmente, hay casos
El 22 de febrero del año 2000, Fernando Buesa
en los que los autores del relato realizan abier-
Blanco y Jorge Díez Elorza fueron asesinados por
tamente un relato hagiográfico, que se basa en
el comando Ituren de ETA en Vitoria. Al día si-
un uso ventajoso de la retrospectiva. Los autores
guiente, Pedro Gorospe, periodista de El País, re-
de este tipo optan por presentar al biografiado
lató el magnicidio de la siguiente manera:
como una figura cuasi-omnímoda, situada en el
“una furgoneta cargada con más de 20 ki- lugar adecuado y en el momento oportuno, eclip-
los de explosivos puso fin ayer en el campus sando conscientemente aquellos espacios grises
universitario de Vitoria a la vida del portavoz de su trayectoria personal y política, las cuáles
del PSE en el Parlamento vasco, Fernando deciden introducir en el baúl de los recuerdos,
Buesa, de 53 años, casado y con tres hijos, y cerrarlas bajo llave y tirarlo al mar, creyendo así
a la del ertzaina que le escoltaba, Jorge Díez que nadie podrá desvelar su lado más lóbrego.
Elorza, de 26 años y soltero. Los terroristas En muchos casos, suelen ser obras descontex-
de ETA tenían a la vista al parlamentario y tualizadas, unas crónicas sin orden, ni concier-
su escolta cuando a las 16.38 accionaron el to que deliberadamente tratan de deformar la
mando a distancia que provocó la explosión realidad y desvirtuarla. Textos que, en definitiva,
y la muerte del ex vicepresidente del Go- buscan construir una historia paralela, un relato
bierno autónomo, uno de los políticos más que pugne con el auténtico para lograr imponer-
críticos con la banda y su entorno político”3. se y recordar al biografiado como el adalid de los
demócratas, el padre de la patria o el motor de
El atentado mortal se produjo escasamente un la reforma social de un determinado país. Por el
mes después de que ETA asesinara al teniente contrario, hay otro tipo de obras realizadas con
coronel Pedro Antonio Blanco, con el que se rom- la finalidad de conocer y entender al personaje
pió la tregua que la propia organización terroris- en toda su integridad, valorando sus aciertos y
errores, sus virtudes y defectos y sus claroscuros.
2
Vid. Pérez López, Pablo (coord.), “El centro políti- De este modo es como se humaniza al biografia-
co en la transición”, dossier en Historia del Presente, do, como se descifra cuál fue su impacto sobre la
36/2 (2020), pp. 5-94. sociedad de su tiempo y los porqués, si procede,
3
El País, 22 de febrero de 2000.

de la impronta que han dejado en un determina- granjearon enemistades, como sucedió con su
do lugar, comunidad o colectivo. posicionamiento ante la política lingüística del
Gobierno Vasco, la negociación en torno a la
La obra que aquí se trae a colación no se en- conversión de las ikastolas en centros educativos
cuentra entre las del primer tipo. No es una de públicos o su inflexibilidad ante un fin del terro-
ellas. Antonio Rivera, catedrático de Historia rismo negociado políticamente.
Contemporánea de la UPV-EHU, y Eduardo Ma-
teo, responsable de la gestión de proyectos y do- Recogen sus aciertos al frente de la Diputación,
cumentación de la Fundación Fernando Buesa, cuando ganó el pulso al Ayuntamiento de Vito-
han escrito una obra de gran interés sobre uno ria, dirigido por el PNV, en lo relativo a la reforma
de los políticos vascos más destacados de nues- y construcción de «la plaza del ganado», situada
tra historia reciente: Fernando Buesa. Lo hacen a las afueras de la ciudad, para edificar un nuevo
con mucho tino, sin escamotear en detalles, in- estadio para el equipo de baloncesto Baskonia
dependientemente de que estos sean negativos (entonces Taugrés) que, actualmente, se conoce
o positivos. por su nombre: «Buesa Arena». También hacen
alusión a las discrepancias que mantuvo con
De hecho, esta monografía palia un vacío histo- diferentes entidades por la subvención de las
riográfico notable al analizar la trayectoria po- «txosnas» (caseta/bar de las fiestas populares
lítica de uno de los dirigentes vascos más desen las que se sirven comida y bebida) con dinero
tacable de las últimas décadas del siglo XX. No del erario público, porque estas pertenecían en
sólo porque esta sea una de las pocas biografías su mayoría al ámbito del nacionalismo vasco ra-
académicas realizadas sobre un militante socia- dical, que no sólo apostaba por derribar el orden
lista vasco (de los etiquetados como «constitu- constituido y constitucional, sino que le había se-
cionalista»), sino porque en la figura de Fernan- ñalado como enemigo por su perspectiva sobre
do Buesa se produce un hecho singular: que su el uso del euskera en el ámbito institucional y
muerte se produjera como consecuencia de un que contribuyó a su estigmatización, como que-
asesinato violento, perpetrado por una organiza- dó recogido en las páginas de Egin y Gara.
ción terrorista, hizo que el político, con sus erro-
res y aciertos, transmutara desde esta condición Pero aparte del análisis de esta figura del socia-
a la de víctima de ETA. Esta circunstancia elimi- lismo vasco hay otra cuestión que se debe poner
nó su trayectoria anterior y se ciñó a los meses en valor. Rivera y Mateo no omiten que la bio-
y años previos al atentado. En cierto modo, tal grafía de Buesa no se entiende sin su familia, sin
condición contribuyó a una suerte de damnatio sus amigos y compañeros de partido, sin los te-
memoriae de su labor política y social, aun cuan- rroristas que planificaron su muerte, sin la pren-
do en los días y semanas posteriores a su muerte sa y medios de comunicación que lo señalaron y
sus compañeros de partido y amigos, como Ja- lo apoyaron y tampoco sin la realización de una
vier Rojo, y adversarios políticos, como el nacio- semblanza de la última persona que estuvo a su
nalista vasco José Ángel Cuerda, lo pusieran en lado antes de fallecer, el también asesinado Jor-
valor. ge Díez Elorza, el ertzaina que lo escoltaba cuan-
do los miembros de ETA Diego Ugarte López de
Por este motivo, el ejercicio de reconstrucción Arkaute, Asier Karrera Arenzana y Luis Mariñe-
de la etapa de Buesa al frente de la Diputación larena Garciandia decidieron accionar la bomba
Foral de Álava, de los primeros Gobiernos Vascos que acabó con sus vidas. De ahí que haya espacio
de coalición entre socialistas y jeltzales y de su para todos ellos en sus páginas, incluyéndose un
paso por el Ayuntamiento de Vitoria y las Jun- prolijo contexto histórico al que los autores apli-
tas Generales es sobresaliente. Así, analizan, por can diferente zoom según el hecho analizado,
ejemplo, cómo Buesa pasó de posicionamientos habiendo tramos en los que la precisión es mi-
políticos democristianos durante la década de nuciosa, de crónica de hora a hora, como sucede
1970 a recalar en el PSOE con una visión neta- con su muerte, el sepelio y la posterior polémica
mente socialdemócrata, que en no pocas ocasio- con manifestantes, partidos, Gobierno vasco e
nes le valió la etiqueta de «socialista de seda» instituciones; y que en otros el estudio sea más
entre sus opositores dentro y fuera del partido. amplio, con continuos nexos pasado-presente y
Tratan sin ambages las complicadas decisiones la aplicación de distintas perspectivas de análisis.
que tuvo que tomar este «cartesiano» cuando
desempeñó puestos de responsabilidad políti- Como he señalado al inicio, escribir una biografía
ca durante las décadas de 1980 y 1990 que le no es una tarea sencilla. Más cuando el biogra-

fiado ha dejado una honda huella en la sociedad

de su época, en el caso de Buesa, en la política
vasca, alavesa y vitoriana, e incluso, como reco-
gen sus autores, hasta en la española. Pero no
está demás incidir en que sus autores lo hacen
acertadamente, con un hilo conductor claro, ba-
sado en diferentes escritos y testimonios reali-
zados por el biografiado, y frases y comentarios
tanto de personas cercanas como de la prensa.
Estos fragmentos son muy ilustrativos y sirven
para tener una idea a vuelapluma de lo que se
analiza en los párrafos posteriores y, a su vez,
observar el progreso del proceso de estigmatiza-
ción de Buesa y su actitud ante la intimidación. Y
es que, hasta en los momentos más duros, cuan-
do la amenaza contra su vida fue patente, el po-
lítico vitoriano siguió apostando por las palabras,
anteponiendo el diálogo a las pistolas.

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LAS COOPERATIVAS INDUSTRIALES TEXTILES: UNA

INDUSTRIAL TEXTILE COOPERATIVES: A WORKERS

Luis Carlos San José Belda*

Resumen: El final de la autarquía condujo a una INTRODUCCIÓN

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La Ley de Responsabilidades Políticas12 de 9 de “Hemos creado el Sindicalismo nacional

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y la aceptación de los acuerdos aduaneros y pales empresarios durante el transcurso de 1963

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restricciones eléctricas materiales y supeditadas

Por todo ello encontramos la respuesta de los

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LA INFLUENCIA DE LA UNIÓN EUROPEA EN EL ESPACIO

THE EUROPEAN UNION’S INFLUENCE ON THE POST-SOVIET

Las cooperativas industriales textiles: una respuesta obrera durante la autarquía��21

La influencia de la Unión Europeaen el espacio postsoviético: la Asociación Oriental (2009-2019)��31

La prensa comunista argentinay la política exterior peronista (1946-1947)��57

Presentación del dossier: Pancatalanismo e izquierda revolucionaria en la Transición española��71

Etapa de generación teóricade Germania Socialista (1970-1972)�� 75

Carrero Blanco ante La gran baza soviética: ideología y discurso�� 151