INTRODUCCIÓN

En la sociedad, todos sus integrantes gozan de determinados derechos y están sujetos

a sus respectivos deberes; es decir, todo derecho origina un deber. Deber es la
obligación de obrar de una manera determinada, porque imponen la obligación de
respetarlos a toda persona y sociedad, aunque no exista una norma que los reconozca.
Así, por ejemplo: al derecho a la vida, corresponde el deber de conservarla; al derecho
a un nivel de vida digno, el deber de vivir dignamente; al derecho a no ser discriminado
el deber de no discriminar; al derecho de recibir educación, instrucción y capacitación,
el deber de esforzarnos para tener el máximo beneficio, etc.
El reconocimiento y cumplimiento de los deberes de los niños y adolescentes, es una
labor muy importante para formar ciudadanos responsables y comprometidos con su
patria. En este sentido, cabe mencionar que, en los últimos años, ha habido cambios
con respecto a la realidad que se vivía anteriormente en nuestro país cuando de
derechos y deberes de los niños y adolescentes se hablaba. Cambios que han sido
impulsados por las constantes modificaciones de las normas legales, partiendo de la
norma constitucional y tratados internacionales.
Sin embargo, el Estado en su anhelo de lograr que en nuestro país se reconozcan y
sobre todo se respeten los derechos de los niños y adolescentes, se esta olvidando de
asentar en los niños y adolescentes e incluso en la sociedad misma, la vocación para el
cumplimiento de sus obligaciones, a pesar de existir normas que regulan tales
exigencias.
Es decir, no se está poniendo énfasis en generar que los niños y adolescentes,
reconozcan también sus obligaciones como tal, por ello en la actualidad, se ven más
ciudadanos exigiendo derechos que cumpliendo con sus deberes, esto a consecuencia
de que se está formando niños y adolescentes poco conscientes de lo importante y
necesario que es vivir en una sociedad en donde se respeten los derechos y se
cumplan los deberes.
Actualmente, se han perdido los valores éticos y morales, se ha omitido el deber de
amar a la patria y el respeto por sus símbolos, no se inculca el deber de cuidar de su
propia salud, el respeto por la propiedad pública y privada, entre otros.
El desarrollo de este trabajo monográfico, permitirá conocer lo que está sucediendo
con la aplicación de los deberes de los niños y adolescentes en el Perú, enfocándonos
en la reorientación de acciones y esfuerzos para lograr ciudadanos formados y
fundamentados en el conocimiento y cumplimiento de sus deberes, con la finalidad de
contribuir de manera positiva al desarrollo del país.
 CAPITULO I
DEBERES DE LOS NIÑOS Y ADOLESCENTES
1.1 ANTECEDENTES:
Desde el siglo XIX han surgido varias organizaciones, a nivel internacional y nacional,
que promueven la protección de los niños y adolescentes. En el siglo XX las políticas
públicas se han visto fuertemente influidas por la acción de la Organización
Internacional del Trabajo, sobre todo en relación con el trabajo o explotación infantil, y
luego por la UNICEF, donde se desarrolla una convención para reconocer los derechos
humanos y todo lo que ello genera en beneficio de los niños y adolescentes.
 CONVENCIÓN DE LOS DERECHOS DEL NIÑO
El camino hacia la Convención sobre los Derechos del Niño ha sido largo y lento.
En 1945, la Carta de las Naciones Unidas estableció las bases de la Convención al
exhortar a todos los países a promover y alentar el respeto por los derechos
humanos y las libertades fundamentales para todos. La Declaración Universal de
Derechos Humanos fue aprobada tres años después, y en ella se hizo un mayor
hincapié en que la maternidad y la infancia tienen derecho a cuidados y asistencia
especiales y se definió a la familia como el elemento natural y fundamental de la
sociedad. Durante el siglo XX se aprobaron varias Declaraciones de los Derechos
del Niño, la última de ellas en 1959, donde se reconocía que la humanidad debe al
niño lo mejor que puede darle.
Las declaraciones son manifiestos con intención moral y ética, pero no son
instrumentos jurídicamente vinculantes. El marco internacional de derechos
humanos se fortaleció por tanto para que contara con pactos (o Convenciones)
que tuvieran todo el peso de la ley internacional. En 1986, los primeros dos pactos
el Pacto Internacional de Derechos Civiles y Políticos y de Derechos Económicos,
Sociales y Culturales se convirtieron en instrumentos vinculantes para los Estados
parte. Estos dos Pactos se basaron en los derechos y principios de la Declaración
Universal de Derechos Humanos, y como tales supusieron una obligación jurídica y
moral para que los países respetaran los derechos humanos de todos los
individuos.
Los derechos de la infancia siguieron después el mismo camino. En 1978, la víspera
del Año Internacional del Niño, patrocinado por las Naciones Unidas, se propuso
un borrador de la Convención sobre los Derechos del Niño. Sobre la base de la
Declaración Universal de Derechos Humanos; el Pacto Internacional de Derechos
Civiles y Políticos; y el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y
Culturales, un grupo de trabajo de las Naciones Unidas revisó el borrador, y llegó
finalmente a un acuerdo sobre lo que se convertiría en la Convención sobre los
Derechos del Niño.
La aprobación final de los Estados miembros de las Naciones Unidas se produjo
después de que la Asamblea General de las Naciones Unidas aprobara
 unánimemente el texto de la Convención sobre los Derechos del Niño el 20 de
noviembre de 1989. La Convención se transformó en un documento jurídicamente
vinculante en septiembre de 1990, después de su ratificación por 20 Estados.
Muchos países ratificaron la Convención poco después de su aprobación y otros la
han ratificado o se han adherido a ella posteriormente, hasta convertirla en el
tratado de derechos humanos más ratificado de la historia. Casi todos los Estados
forman parte del tratado ahora. Los Estados Unidos y Somalia todavía no han
ratificado la Convención, pero la han firmado, una medida que denota su apoyo.
En razón a lo antes mencionado, no podríamos hablar de los deberes de los niños y
adolescentes, sin antes hablar de sus derechos; los derechos son el conjunto de
normas que imponen deberes y normas que confieren facultades.
Por ello, es preciso decir que los derechos de los niños y adolescentes son un conjunto
de condiciones que pretenden protegerlos hasta que cumplen los 18 años. Estos son
inalienables e irrenunciables, por lo que no existe posibilidad de vulnerarlos o
desconocerlos bajo ninguna circunstancia.
Sin embargo, aún hay mucho trabajo que realizar respecto a los derechos de los niños
y adolescentes, pues en muchos países no se esta dando la importancia necesaria,
muchos Estados no promueven ni les dan el reconocimiento adecuado a los derechos
de los niños y adolescentes.
En cuanto se refiere a nuestro país, nos preocupa la realidad del trabajo infantil que en
los últimos años han ido creciendo de manera alarmante, aun cuando se dice que
estamos en un proceso de crecimiento de nuestra economía. En tal sentido la cifra de
un millón seiscientos cincuenta mil niños y niñas que trabajan para sobrevivir
conforme lo señala la Defensoría del Pueblo nos increpa sobre qué estamos haciendo
para que esta situación se pueda revertir. No podemos considerarnos un país en
desarrollo si tenemos, además, a ochocientos mil niños que trabajan, incluso sin tener
la edad mínima, 14 años, para hacerlo, y lo hacen poniendo en riesgo su integridad y
su vida, empujados por sus difíciles circunstancias y ello ante la indolencia de nuestras
autoridades y la propia sociedad civil.
Si como Estado no somos capaces de garantizarles a nuestros niños y adolescentes sus
derechos mínimos, entonces estamos fracasando como sociedad y como Estado. El
desarrollo económico debe servir para superar esta realidad y hacer que ellos y ellas
puedan dedicarse a estudiar y jugar conforme corresponde en cualquier sociedad
democrática. En consecuencia, nos corresponde hacer esfuerzos concretos para
revertir esta situación, enfocándonos en mejorar las políticas de educación, salud,
seguridad y lucha contra la pobreza conforme al Acuerdo Nacional, para evitar que
nuestros niños y niñas sigan creciendo en el abandono moral y material.
Asimismo, en nuestro país este tema sigue generando controversia, por lo que es
objeto de estudio e investigación, lo cual viene generando cambios evidentes a través
del tiempo, pues en la actualidad los niños y adolescentes como sujetos de derecho y a
la vez sujetos con deberes, tienen un mayor reconocimiento en la sociedad. Sin
embargo, para algunos especialistas en el tema, aún existen puntos que requieren de
mayor énfasis y mejoras.
Castañeda J. en su investigación, Construcción de una propuesta didáctica, para
fortalecer el conocimiento de los derechos fundamentales de los niños y niñas,
concluye: “Este trabajo de investigación permite corroborar que los niños y niñas aún
tienen desconocimiento de sus derechos, además la manera que les han enseñado no
ha sido de manera significativa para ellos, puesto que no se ve evidenciada una
adquisición de conocimiento en este tema ya que no diferencian entre sus derechos y
deberes”.
Rey M. en la investigación Incorporación de una Norma Jurídica, Respecto a las
Medidas de Protección Social que Garantice el Interés Superior del Niño, Niña y
Adolescente, concluye indicando que: “No existen verdaderas políticas de Estado en el
ejercicio de los deberes de crianza y formación de los niños, niñas y adolescentes (…)”.

1.2 DEFINICION DE DEBERES:

Según el Diccionario de la Real Academia Española, Deber, del latín debere, debitum,
"deuda", "débito", es un compromiso o expectativa de realizar alguna acción en
general o si se producen determinadas circunstancias. Es aquello a lo que está obligado
el hombre por los preceptos religiosos o por las leyes naturales o positivas.
El término deberes hace referencia a las actividades, actos y circunstancias que
implican una determinada obligación moral o ética. Generalmente, los deberes se
relacionan con determinadas actitudes que todos los seres humanos,
independientemente de su origen, etnia, edad o condiciones de vida están obligadas a
cumplir a modo de asegurar al resto de la humanidad la posibilidad de vivir en paz, con
dignidad y con ciertas comodidades. Los deberes son, entonces, uno de los puntos más
importantes de todos los sistemas de leyes y de constituciones nacionales porque
tienen que ver con lograr formas comunitarias y sociedades más equilibradas en donde
todos acceden del mismo modo a sus derechos.
Muchos deberes son creados por ley, a veces incluyendo un castigo codificado o una
responsabilidad por incumplimiento. Muchas veces el cumplimiento del deber puede
requerir algún sacrificio.
Los deberes pueden estar implícita o explícitamente establecidos en una sociedad y
esto tiene que ver con las costumbres específicas de cada comunidad, ya que muchas
veces están relacionados con la permanencia de las condiciones más óptimas para el
desarrollo de tal comunidad.
Por ello, tenemos el deber de aprender nuestros deberes, para no apartarnos de ellos
y poder así, ser dignos de nuestra condición humana, en igualdad con nuestros
semejantes.
1.3 DEFINICION DE NIÑO Y ADOLESCENTE:

1.3.1 DEFINICION DE NIÑO:

La palabra niño es de origen latín “infans” que significa “el que no habla”, los niños son
seres con un carácter vulnerable por lo cual necesita protección por parte de sus
padres, familiares, amigos y personal del plan educativo. En consecuencia, es de suma
importancia brindarle un entorno de protección adaptada a su edad y al grado de
madurez.
Antiguamente los romanos usaban el término niño para identificar a la persona desde
su nacimiento hasta los 7 años. Se entiende que la etapa de infancia es desde el
nacimiento hasta la pre adolescencia, aproximadamente hasta los 13 años, ya que
después se observa la etapa de la adolescencia, adulta y vejez.
La Convención de los Derechos del Niño establece que el niño es un ser humano
menor de 18 años de edad a excepción de haber alcanzado la mayoría de edad
producto de la ley que se aplica.
Asimismo, el Código de los Niños y Adolescentes, en su Artículo I del Título Preliminar,
prescribe que: “Se considera niño a todo ser humano desde su concepción hasta
cumplir los doce años de edad (…)”.

1.3.2 DEFINICION DE ADOLESCENTE:

La palabra adolescencia deriva del latín Adolescens “joven” y Adolescere “crecer”. Un
adolescente es, todo ser humano “(…) desde los doce hasta cumplir los dieciocho años
de edad (…)”, tal como lo indica el Código de los Niños y Adolescentes, en su Artículo I
del Título Preliminar.
La adolescencia es esencialmente una época de cambios. El adolescente afronta
enormes variaciones físicas y emocionales, es el proceso de transformación del niño o
la niña en adulto. Se adquieren nuevas capacidades, tienen necesidades objetivas y
subjetividades específicas determinadas por su edad. Es la transición entre la niñez y la
adultez, y tiene como objetivo prepararnos para asumir los roles de un adulto.
La adolescencia suele determinarse como el período comprendido entre el inicio de la
pubertad y la edad adulta legal: en la mayoría de los casos corresponde a la
adolescencia (13-19 años). Sin embargo, la pubertad suele comenzar antes de la
adolescencia. Aunque biológicamente un niño es un ser humano entre las etapas de
natalidad y pubertad, la adolescencia es aceptada por algunas culturas como parte de
la infancia social porque la mayoría de los adolescentes son considerados menores de
edad según la ley. El inicio de la adolescencia conlleva diversos cambios físicos,
psicológicos y de comportamiento. El final de la adolescencia y el comienzo de la edad
adulta varía según el país y la función, incluso dentro de un mismo estado, nación o
cultura, puede haber diferentes edades en las que se considera que un individuo es lo
suficientemente maduro como para que la sociedad le confíe ciertas tareas.
1.4 DEBERES DE LOS NIÑOS Y ADOLESCENTES
En nuestro país, tenemos derechos que deben ser respetados en todas las instancias,
pero a la vez la Constitución y nuestro ordenamiento jurídico, establecen deberes u
obligaciones que debemos cumplir. Por lo cual, así como se considera a los niños y
adolescentes sujetos dignos y con derechos, también se les reconoce deberes comunes
compatibles a su edad y condición.

1.4.1 DEBERES DE LOS NIÑOS Y ADOLESCENTES EN EL PERÚ

A partir de la aprobación de la Convención sobre los Derechos del Niño en el año 1990,
la situación de los niños y las niñas en todo el mundo ha mejorado, ya que ello ha
generado, el reconocimiento de los derechos de la infancia y adolescencia, asimismo
ha producido numerosas modificaciones legislativas y se ha incrementado
considerablemente la sensibilidad social a favor de este colectivo más vulnerable.
Sin embargo, por estudios realizados, se ha corroborado que en el Perú los niños y los
adolescentes, aún tienen desconocimiento de sus derechos; además, la manera que les
han enseñado no ha sido significativa para ellos, puesto que no se ve evidenciada una
adquisición de conocimiento en este tema, ya que no diferencian entre sus derechos y
deberes.
Por ello, es correspondiente decir que un porcentaje considerable de los niños
peruanos, no conoce sus derechos y mucho menos de sus deberes que se consagran
en Nuestra Constitución Política del Perú y sus Leyes; realidad que se ve reflejada en
los niños y adolescentes de muchas regiones de nuestro país, debido a que ésta
variable está condicionando a muchos factores individuales como contextuales, siendo
uno de ellos la manera, la forma, el método o la técnica mediante el cual reciben la
enseñanza en las instituciones educativas entre otros.

1.4.2 DEBERES DE LOS NIÑOS Y ADOLESCENTES SEGÚN LA COSTITUCIÓN POLÍTICA

DEL PERÚ.
Nuestra carta magna consagra el reconocimiento de los derechos de nuestra niñez. En
su Art. 1° establece que la defensa de la persona humana y el respeto de su dignidad
son el fin supremo de la sociedad y del Estado. El art. 2° señala que toda persona tiene
derecho a la vida, a su identidad, a su integridad moral, psíquica y física y a su libre
desarrollo y bienestar. El concebido es sujeto de derecho en todo cuanto le favorece.
Por su parte también, el Art. 4° de la norma suprema precisa que la Comunidad y el
Estado protegen especialmente al niño, al adolescente, a la madre y al anciano en
situación de abandono. También protegen a la familia y promueven el matrimonio.
Reconocen a estos últimos como institutos naturales y fundamentales de la sociedad.

1.4.3 DEBERES DE LOS NIÑOS Y ADOLESCENTES SEGÚN LA LEY N° 27337 CODIGO DE

LOS NIÑOS Y ADOLESCENTES.
El código de los niños y adolescentes, aprobado mediante Ley N° 27337, es una norma
especial que regula aspectos relevantes respecto de la niñez y adolescencia en nuestro
país. Esta norma, en su LIBRO PRIMERO: Derechos y libertades, clasifica a los deberes y
derechos de los niños y adolescentes.
El Artículo 24º de la norma establece que son deberes de los niños y adolescentes:
1. Respetar y obedecer a sus padres o los responsables de su cuidado, siempre
que sus órdenes no lesionen sus derechos o contravengan las leyes.
El respeto de los menores hacia los padres o las personas que estan a su
cuidado, es fundamental en toda familia y sobre todo en la sociedad. Recibir
educación fomentada en valores es indispensable en el desarrollo de un niño y
el respeto forma parte de aquellas personas nobles que se preocupan por los
demás.
En la actualidad, las familias se han vuelto un poco permisivas en ciertos
aspectos. Parece que la conducta de los niños y adolescentes se vuelve difícil de
manejar y el origen de esta dificultad muchas veces radica en la forma en la que
se educa a los pequeños.
Por ello, es importante que este deber sea inculcado con el ejemplo, pues los
padres tambien deben respetar a sus hijos, pues si los niños y adolescentes se
sienten respetados, sera más facil que ellos apliquen este deber.

2. Estudiar satisfactoriamente.

Estudiar es una de las grandes responsabilidades que tienen los niños y los
adolescentes, de la que se tienen que hacer conscientes poco a poco hasta ser
lo más autónomos que sea posible.

Por esta razón, la educación es de suma importancia, ya que les permite a los
niños y adolescentes desarrollar su personalidad e identidad, así como sus
capacidades físicas e intelectuales. De esta manera, contribuye a su plenitud
personal favoreciendo la integración social y profesional.
 Así, la educación contribuye a mejorar la calidad de vida de las personas.
Ofrece a adultos y niños desfavorecidos una oportunidad para salir de la
pobreza. Es, por tanto, una herramienta fundamental para el desarrollo
económico, social y cultural de todas las poblaciones del mundo. Por ello se
dice que, es vital para el desarrollo económico, social y cultural de todas las
sociedades.

3. Cuidar, en la medida de sus posibilidades, a sus ascendientes en su

enfermedad y ancianidad.

El rol de los padres está relacionado con cuidar, dar sostén, alimentación,
seguridad, educación a sus hijos, sin embargo, en muchas ocasiones los hijos
tienen que asumir alguna de esas funsiones, como lo es en el caso del cuidado
de la salud de sus padres, cuando estos lo necesian. Claro está, que un niño no
simpre puede cumplir con estas asistencias porque no todos los niños han
alcanzado la madurez suficiente para poder realizar tales tareas.
Sin embargo, los niños y los adolescentes tienen el deber de asistir a sus
padres, en la medida de lo posible, de acuerdo a sus condicienes y sobre todo
de acuerdo a sus facultades.

4. Prestar su colaboración en el hogar, de acuerdo a su edad

Un niño y adolescente que se encarga de tareas en la casa adquiere habilidades

y hábitos que puede desempeñar por sí mismo y que le ayudarán a vivir mejor
a lo largo de su vida.

Las tareas diarias, como lavarse los dientes, levantarse, acostarse a una hora
específica y algunos que haceres en casa como ordenar sus juguetes o su
habitación; fortalecen la independencia, la autonomía y la responsabilidad. Con
ellas, los niños y adolescentes se dan cuenta que tienen responsabilidad sobre
sí mismos y que deben ser capaces de responder por lo suyo. La autonomía, a
su vez, aumenta el amor propio.

5. Respetar la propiedad pública y privada

Para que nuestras personas y nuestras propiedades sean respetadas, tenemos

que respetar a todas las demás personas y sus propiedades.

Una de las virtudes esenciales que deben ser practicadas por todos los
ciudadanos que aspiran al progreso y bienestar de una comunidad, es el
respeto a la propiedad privada. Por ello, es importante inculcarle a los niños y
adolescentes el repeto por las propiedades privadas y públicas, pues es uno de
sus deberes.
6. Conservar el medio ambiente

Los niños y adolescentes, deben aprender que cuidar el medio ambiente es

cuidar la vida humana. Es importante, pues, que aprendan que el ser humano
tiene la responsabilidad de utilizar los recursos con sabiduría, de vivir, no de
destruir.

Si destruimos el ambiente, estaremos perjudicándonos a nosotros mismos y a

los demás, incluso a las generaciones futuras. Cuidar el mundo es cuidarnos.
Los niños y niñas tienen que aprender que sus acciones tienen repercusiones y
que, en la medida en que protejamos nuestro ambiente inmediato, podemos
conservar nuestro país y nuestro planeta y garantizar un legado de
supervivencia para las futuras generaciones.

7. Cuidar su salud personal

El cuidado de la salud de los niños y adolescentes es una tarea que involucra a

los pequeños y sus familias. Si todos están informados pueden tomar acciones
diarias para proteger su bienestar social, físico y mental.

En este sentido, los niños y adolescentes adoptan los hábitos adecuados y los
padres les dan el ejemplo, cuidándolos y dándoles lo necesario para que se
cuiden. Por ello, es importante que los padres hablen con ellos sobre las
acciones que pueden tomar para cuidarse, pues ello, es una excelente forma de
invitarlos a cooperar en las medidas de higiene, buena alimentación, actividad
física y hábitos saludables para procurar su bienestar.

8. No consumir sustancias psicotrópicas

 Un psicotrópico o sustancia psicotrópica, es un agente químico que

actúa sobre el sistema nervioso central, lo cual trae como consecuencia
cambios temporales en la percepción, en el estado de ánimo, en el
estado de conciencia y en el comportamiento.
Estas sustancias son: el tabaco, el alcohol, el cannabis, las anfetaminas,
el éxtasis, la cocaína y la heroína.

Las drogas, incluyendo al tabaco y el alcohol, son de fácil acceso para los niños
y los adolescentes. Por ello, los padres de familia, tienen una gran influencia
sobre la decisión de su hijo de no usar drogas.

Es muy probable que los niños menores de 12 años, no hayan comenzado a

consumir alcohol, tabaco o ningún otro tipo de sustancias psicotrópicas. Por
esta razón cuando están en esa edad, es el momento perfecto para empezar a
hablar acerca de los peligros del consumo de estas sustancias. Con el fin de
 prevenir a los niños y adolescentes, por si en algún momento les llegan a
ofrecer este tipo de sustancias que son destructivas para ellos como personas y
para toda la sociedad.

Por ello, la prevención contra el abuso de drogas empieza cuando los padres
aprenden cómo hablar con sus hijos sobre temas difíciles. Después, los
programas que ofrecen las escuelas, los deportes y otros grupos pueden
contribuir a prevenir el consumo de estas sustancias en los niños y
adolescentes.

9. Respetar las ideas y los derechos de los demás, así como las creencias
religiosas distintas de las suyas

Los niños y los adolescentes, tienen los mismos derechos humanos generales
que los adultos, pero también otros derechos específicos derivados de sus
necesidades especiales. Al igual que los adultos, los niños son seres humanos y
titulares de sus propios derechos y responsabilidades apropiadas para su edad
y su etapa de desarrollo.

Por eso es importante que los niños y los adolescetes conozcan sus derechos
para que los pongan en práctica y a la vez, puedan alzar su voz cuando alguien
no los respete. De esta forma, podrán desarrollar todo su potencial y ser igual
de respetuosos con los derechos, ideas y creencias de los demás. Siendo este
ultimo uno de sus deberes como niños y como adolescentes.

Además, los niños y adolescentes, al igual que los adultos, tienen la libertad de
elegir y practicar la religión que deseen. Este derecho está protegido por el
artículo 14 de la Convención sobre los Derechos del Niño: “los estados
miembros tienen que respetar el derecho del niño a la libertad de
pensamiento, conciencia y religión”. Asimismo, los niños y adolescentes tienen
el deber de respetar las creencias religiosas de los demás.

10. Respetar a la Patria, sus leyes, símbolos y héroes.

Respetar nuestros símbolos significa valorarnos a nosotros mismos, a nuestros

compatriotas y a nuestro país. Respetar nuestros símbolos es honrar la lucha de
nuestro pueblo por su libertad e independencia.
El sentimiento por nuestra patria le permitirá a nuestros hijos e hijas ampliar
sus conocimientos y reforzar su autoestima al sentirse orgulloso de su país.

Inculcar amor a la patria, a sus leyes, simbolos y heroes, en los niños y

adolescentes, es fomentar los valores por la tierra donde nació. Es tarea de los
padres, madres o cuidadores que le expliquemos el concepto de país y el
respeto hacia nuestra nación. La formación y los valores que tendrán los niños
y adolescentes para ser mejores ciudadanos viene de casa.

En el Perú, el mes de julio es uno de los más importantes, donde rendimos

honor a nuestra patria y lo festejamos de diferentes maneras, agradeciendo a
nuestro país por la gran diversidad de riquezas que hay en nuestro país.

En el tiempo de pandemia por COVID-19, los actos cívicos de entidades

gubernamentales y de la población educativa disminuyeron grandemente. Sin
embargo, a manera virtual muchos centros de estudio realizaron actos cívicos
para conmemorar el día, elevando la oración a la bandera y cantando el Himno
Nacional del país.
 CONCLUSIONES
1. Conforme a lo descrito por nuestra Carta Magna, el respeto de la persona
humana y el respeto de su dignidad son los fines supremos del estado y la
sociedad. Por esta razón, la creación de normas que promueven beneficios al
cuidado de los niños y adolescentes, es fundamental para generar y fomentar
un mejor desarrollo social, ya que los niños y adolescentes son las semillas de
las futuras generaciones.

2. En nuestro país la aplicación de los derechos de los niños y adolescente ha

venido evolucionando con el pasar de los años, anteriormente se percibía
muchos maltratos y abusos a los niños y no se respetaban y mucho menos se
reconocían sus derechos. En la actualidad esa situación que generaba retraso
en nuestra sociedad ha mejorado y sigue mejorando, pues ahora los niños y
adolescentes reconocen y hacen respetar sus derechos.

3. El estado debe implementar programas y proyectos que promuevan el

reconocimiento y la aplicación de los deberes que tienen los niños y
adolescentes, pues esto ayudará a contribuir a la formación de personas más
responsables para el futuro, ya que actualmente vemos más ciudadanos
exigiendo derechos que cumpliendo con sus deberes, pues hasta ahora el
estado en su propósito de lograr el reconocimiento de los derechos de los niños
y adolescentes se ha olvidado de crear cimientos que les generen conciencia y
vocación para el cumplimiento de sus deberes, esto quiere decir que no se está
poniendo el énfasis necesario para promover el cumplimiento de dichos
deberes.

4. Los deberes de los niños y adolescentes, es un tema que no esta teniendo la

importancia que requiere, pues a nivel social se viene reconociendo los
derechos como el tema de mayor relevancia, mientras que los deberes del niño
y adolescente están siendo olvidados e indirectamente dejando de cumplir a
nivel familiar, educativo y social; debe existir una estrecha relación de los
derechos con los deberes del niño y del adolescente para ellos se requiere de
una cooperación en conjunta con el estado, centros educativos y los padres o
tutores.

5. La aplicación adecuada de los deberes de los niños y adolescentes les permitirá

ser personas responsables, incluso les ayudará a tener una personalidad segura
 de sí mismos, pues al cumplir con sus deberes, como el de ayudar en la medida
de sus posibilidades en las actividades de casa, les generará confianza y
seguridad para poder realizar otras actividades que les sean necesarias.
Asimismo, la aplicación de los deberes, conllevará a un fortalecimiento de sus
principios y valores que desarrollarán como buenos ciudadanos.

ANALISIS CRITICO
Los deberes de los niños y adolescentes es un tema del que muy poco se habla, incluso
muy poco se practica, se podría decir que es un tema que muy pocos conocen, pues el
enfoque en los derechos de los niños ha generado que esto quede un poco alejado de
la educación y formación que se brinda a estos futuros ciudadanos.
En nuestro país como en muchos otros, el reconocimiento de los derechos de los niños
y adolescentes ha tenido bastante enfoque a lo largo del tiempo, pues para llegar a
ello se han creado organizaciones y convenciones que defienden esta causa. En el
transcurso de los últimos años podemos percibir la evolución que este tema ha tenido,
pues antes se veía mucho desconocimiento sobre los derechos de los niños y
adolescentes, lo cual generaba que estos, sufran muchos abusos y actos de violencia.
Sin embargo, considero que la aplicación o interpretación de las leyes que han sido
creadas para defender estos derechos no se está realizando de la manera más idónea,
pues hoy en día se puede apreciar que hay muchos niños y adolescentes, incluso los
padres y hasta la misma sociedad, exigiendo el cumplimiento y respeto de estos
derechos, pero se ven muy pocos niños y adolescentes cumpliendo con sus deberes,
esto probablemente sea por desconocimiento de su parte.
Por eso, el estado con el mismo ímpetu con el que ha venido trabajando para que en
nuestro país se logre el respeto y reconocimiento de los derechos de los niños y
adolescentes, debe poner énfasis en el reconocimiento y aplicación de los deberes que
tienen los niños y adolescentes como sujetos de derecho, pues esto contribuye a que
aquellos pequeños ciudadanos sean formados, de manera consiente y responsable.
Por ello, es muy importante que los niños y adolescentes reconozcan que, así como
tienen derechos, también tienen deberes y responsabilidades. Sobre todo, que un
derecho siempre debe estar acompañado de una responsabilidad, así como se hacen
valer los derechos, de igual manera se debe poner énfasis en cumplir los deberes.
Solo así podremos decir que estamos formando niños y adolescentes responsables,
cuando estos responden por sus acciones y se encuentran atentos a sus decisiones.
 RECOMENDACIONES

1. El estado debe implementar programas para fomentar en los niños y

adolescentes el reconocimiento y en consecuencia el cumplimiento de sus
deberes, como sujetos de derecho y fututos ciudadanos peruanos, pues como
ya se mencionó anteriormente, es un tema del que muy poco se habla y es muy
poco promovido.

2. En los centros educativos se deben realizar actividades que contribuyan a la

aplicación de estos deberes, con la finalidad de que puedan los niños y
adolescentes reconocer la diferencia entre derechos y deberes, así también
reconocer la importancia y la relación que existe entre ambos.

3. Si bien es cierto que el estado debe implementar programas que deben ser
aplicadas a través de las instituciones, el cuidado y formación de los niños y
adolescentes es responsabilidad de los padres, es en el hogar donde ellos
empiezan a formar su personalidad, por ello es importante que los padres
reconozcan y respeten los derechos de los niños y adolescentes, para que ellos
también respeten los derechos de los demás y a la vez les enseñen a cumplir
con sus deberes, para que desde pequeños se familiaricen con sus
responsabilidades y obligaciones.

4. Se les debe inculcar a los niños y adolescentes desde pequeños a que cooperen
con las actividades dentro de casa, estas actividades deben ser de acuerdo a su
edad y a sus condiciones, pues el realizar las tareas de casa creará en ellos un
estado de conciencia e independencia en los niños y adolescentes y a la vez le
ayudara a ser personas responsables con valores y principios.
 BIBLIOGRAFIA

 Percy Castro Barrueta y Elia Arcelia Mozombite Salinas. Deberes y derechos de

los niños y adolescentes - Trabajo de investigación.

 Convención sobre los Derechos del Niño 1989.

 Castañeda, J. Construcción de una propuesta didáctica, para fortalecer el

conocimiento de los derechos fundamentales de los niños y niñas (tesis de
pregrado).

 Rey, M. Incorporación de una norma jurídica, respecto a las medidas de

protección social que garantice el interés superior del niño, niña y adolescente
(Tesis de Pregrado).

 Barrantes, W. El reconocimiento de los niños y niñas en cuanto sujetos de

derecho de una vida libre de castigo físico.

 Espín. Los derechos de los niños niñas y adolescentes y la maternidad y

paternidad responsable.

 La Constitución Política del Perú 1993.

 Los Derechos y Deberes de los Niños, las Niñas y Adolescentes, Ministerio de

Educación 2014.

 Ley N° 27337 Código de los Niños y Adolescentes.

 PROTECCIÓN DE
LOS DERECHOS
DEL NIÑO, NIÑA Y
ADOLESCENTE
DESDE LA FUNCIÓN
POLICIAL
 PROTECCIÓN DE
LOS DERECHOS
DEL NIÑO, NIÑA Y
ADOLESCENTE
DESDE LA FUNCIÓN
POLICIAL