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Aspectos negativos de las redes

sociales en la sociedad actual

Estudiante: Valentina Castro

Curso: 1ro Medio A
Profesora: Josefina Hernandez
Escuela: Administración y Comercio
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INTRODUCCIÓN

Las RRSS (Redes Sociales) son plataformas usadas para fines comerciales, comunicativos,

laborales, educativos, etc. Estos son creados por personas u organizaciones, siempre

permitiendo la interacción de las personas a través de estas. Sin embargo, estas han

presentado problemas en los que están involucrados distintos tipos de poblaciones,

principalmente, la población adolescente.

Las redes sociales son un tema grave en la vida cotidiana de los adolescentes de esta

generación, ya que han creado ciertos problemas psicológicos o físicos en estos jóvenes,

aquellos como la depresión o los complejos. Han hecho que estos se aparten de su entorno

real y se encierren en su mundo social virtual, conociendo personas con intereses mutuos a

través de las recomendaciones de estas apps.

Se ha visto un gran índice de problemas dismórficos en niñas a través de las redes sociales,

también se ha hecho más simple la forma de secuestros, rastreos, e incluso de hacer maldades

en contra de estas chicas.

Mis puntos de vista a defender es el error de habilitar las redes sociales en la vida de los

adolescentes y lo poco seguras que son para la sociedad en general. Presentando distintas

razones generales y explicando lo peligrosas que estas pueden llegar a ser tanto en la vida

cotidiana como en nuestra salud física y psicológica.

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Desarrollo: ¿Las redes sociales afectan a los adolescentes?

Las redes sociales se han convertido en una herramienta esencial para los jóvenes de hoy en

día, siendo una adicción parecida a la droga para nuestra generación.

Estos chicos se ven sometidos a una pantalla brillosa desde que se levantan hasta que se

acuestan, siendo imposible despegarse de ella. La pregunta es, ¿En qué les afecta? Para ello,

hay múltiples respuestas.

● Autoestima y dismorfia.

Las apps sociales se caracterizan por tener grandes comunidades en ellas, dividiéndolas por

intereses, edades, dedicaciones, etc.

Entre ellos. están los jóvenes, quiénes presentan total control y dominación de estas apps.

¿Qué tiene que ver la autoestima de los niños en esto? Los adolescentes, en especial las

chicas, suben contenido personal a estas redes. Su contenido suele ser sobre sus amigos, su

vida personal, viajes, pensamientos, intereses, etc.

El contenido personal presentado por estas jóvenes se basa en los filtros creados por estas

redes, con las que las chicas y chicos se sienten abrumados por no parecerse a estos filtros.

Con los que empiezan a crear defectos, como con su nariz, sus orejas, sus piernas, o en

resumen; Su físico.

Al pasar de los años, hay cirujanos plásticos quienes le dieron el nombre de “Trastorno

Dismórfico de Snapchat” a estos complejos, lo que me parece un trastorno ridículo pero muy

grave. Este fenómeno es una de las causas por la cual muchas jóvenes, generalmente menores

de los 30 años, se presentan a clínicas plásticas para modificar su imagen en base a un filtro

de Snapchat.
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“No podía dejar de mirar la manera

en que el filtro de Snapchat me

cambiaba la cara”, dijo Crystal, la

joven de la imagen, en una entrevista

en el programa BBC Three, siendo

una más de muchas chicas que

buscan el mismo objetivo a través de

cirugías.

Con el aumento de estas apps con estos

filtros, se aumentó la cantidad de chicas de

10-19 años que acabaron en hospitales por

causas como las autolesiones o intentos de

suicidios, también un incremento en la tasa

de suicidios de chicas de esa misma edad.

¿No es esta una de las razones por las que

las redes sociales no deberían ser aptas para

los niños y niñas de nuestra

generación?

Se han creado bastantes trastornos en

base a los complejos creados por estos

filtros y también por la

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sociedad, criticando la apariencia de los jóvenes que

publican fotos con y sin filtros. El estándar creado por esta

sociedad digital es aquel que son delgados hasta los huesos,

sus cara con unos deformes labios grandes, piel de

porcelana, y más totalmente ridículos, tratando de idealizar

el físico y apariencia de una mujer como Kylie Jenner o

para los hombres, un Ken. Esta no es una enfermedad física, la cual puede tratarse a través de

medicación, sino que es un trastorno que se extiende a preocupaciones por la salud mental de

estas niñas y niños.

Estas apps están siendo MAL UTILIZADAS por los jóvenes, quieren sentirse bien consigo

mismos y por eso acuden a la sociedad virtual. Hacen un simple gesto y una pose ingenua,

recibiendo unos pocos likes y comentarios positivos. Esto puede recibir el nombre de

“Popularidad Falsa". Esta popularidad trata

de el valor que se le da a los chicos y chicas

por el qué tan perfectos sean. Pero, ¿Qué les

sucede si reciben un comentario sobre alguna

parte de su cuerpo? Empiezan a esconderla.

Creen que se ven verdaderamente mal y se

convencen de que aquella parte es un defecto.

Creo que, quién recibiría la culpa por los trastornos que adoptan estos niños, sería la poca

empatía de otras personas y la irresponsabilidad de los padres. Ya que mayoritariamente estas

apps muestran una advertencia de edad debida a la que se podría usar estas, sin embargo,

vemos a niñas menores de 14 años viendo y creando contenido para TikTok con libertad, sin

que sus padres tengan control en lo que ven o suben en esta.

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Desarrollo: ¿Son seguras para nosotros y nuestros niños?

Las redes sociales no son verdaderamente seguras para nuestros hijos, ya que podemos ver

personas rondando por estas vías digitales buscando a sus presas, en forma de chicos o chicas

jóvenes. También podemos ver involucrados a nuestros hijos en bandas online, quizá también

vemos que tienen a mano páginas no aptas para su edad.

Aseguro que, estas plataformas pueden llegar a saber toda la información personal de estos

niños. La suficiente información como para mostrarles contenido respecto a sus likes o el

perfil que se crean, pero estas no solo pueden saber esta a través de un perfil o los likes, sino

que también pueden saberlo respecto a lo que sienten a diario.

Estas empresas son MÁQUINAS DE DINERO, las cuales obtienen grandes ingresos a costa

de los engaños de sus publicidades o los videos que mayoritariamente suben.

● Capitalismo de vigilancia.

El capitalismo de vigilancia es un concepto para definir el hecho de que todas las acciones

que hacen nuestros niños y las personas en general son vigiladas y grabadas por máquinas y a

veces, aunque sea perturbador, por humanos.

“Todo lo que hacemos en internet se observa, se registra y se mide. (...) Las redes tienen un

avatar de cada uno de nosotros.” Dijo Tristan, Ex Diseñador ético de Google. El asegura que

estas RRSS saben tu estado de ánimo, personalidad, lo que ves, lo que te gusta, etc. Y esta

información es usada para mostrarte contenido publicitario de tu interés para generar ingresos

a través del tiempo que ves aquel anuncio. Se busca contenido de tus preferencias para

aumentar los ingresos monetarios de las publicidades.

Los chicos son la mayor fuente de ingresos para estas industrias, ya que son quienes pasan

más tiempo metidos en estas aplicaciones.

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Se asegura que, Google y Facebook son las empresas más ricas de todos los tiempos, pero

¿Sus empleados son personas humanas?

Señores, la respuesta es sí, los empleados son personas humanas, sin embargo, la mayor parte

de empleados son máquinas. Estas controlan los ingresos de las publicidades, el tipo de

personas que la ven, la cantidad de personas que las ven, etc.

Estas redes son un químico tóxico que nos

está matando lentamente, pero no de forma

literal, sino, como personas. En mi opinión,

las redes sociales son muchas veces útiles,

para bastantes cosas. A los jóvenes nos

facilitaron la forma de cumplir con

nuestras tareas, recibir información en

tiempo real respecto a nuestras notas. A los

adultos, les facilitó la búsqueda de trabajos,

y las redes sociales ayudan a informarse con noticias actualizadas. Pero, ¿a qué costo nos

ayudan estas? Al costo de desinformación al mismo tiempo, nos afectan psicológicamente

con la dopamina que estos aparatos liberan, nos están acostumbrando a tener una vida más

fácil y tecnológica, perdemos el tiempo en estas aplicaciones, el romanticismo es idealizado

por estas como relaciones, el invento de los casi algo, y más. Estas son razones suficientes

para aceptar el mal que nos hacen las tecnologías sociales.

CONCLUSIÓN
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Para concluir, quiero recalcar el hecho de que estas redes sociales han estado manipulando

tanto nuestras mentes que todo lo que pensamos son en los videos que vimos sobre gatos,

quizá la conversación hasta las 2 de la mañana con la persona de la cual estamos enamorados,

o más cosas que tienen que ver con lo que vemos y hacemos en estas apps, pero ¿Por qué no

pensamos en nuestra vida?

Porque estamos pensando en lo que piensan de nosotros, estamos pensando en los likes que

recibimos en fotos, o quizá en el

por qué nuestras caras cambian

tanto con los filtros, ¿Recibiré más

likes y comentarios si no me pongo

filtros?, ¿Qué pensará de mí si

hago esto?

Las RRSS nos han manipulado y

programado específicamente para

eso, para convertirnos en sus

“productos”. Nos viciamos tanto a estos aparatos que, ya no sabemos hacer algo sin buscar

tutoriales, no lo intentamos si sabemos que nos lastimaremos. Nos importa tanto lo que los

demás piensan de nosotros, lloramos por un comentario de alguien que no nos conoce como

personas, sino como un perfil.

Mi postura en este ensayo, es que estoy en contra de las redes sociales si estas nos afectan

tanto a nuestra vida cotidiana, nuestra manera de relacionarnos, nuestra forma de pensar e

incluso, si estas nos generan complejos o trastornos respecto a nuestros cuerpos, también si

estas nos utilizan como fuente de ingresos o nos intoxican con fake news, solo para generar

polémica y ganar dinero y fama.

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No son aptas para los jóvenes si queremos una futura generación sana y revolucionaria.

REFERENCIAS Y CITAS

Jeff Orlowski. (2020) El dilema de las redes sociales. Netflix.

Anna Davies. (2018) "Dismorfia de Snapchat": el fenómeno por el que cada vez más

pacientes de cirugía estética aspiran a parecerse a sus propios selfies con filtros. BBC Three.

Sandhya Pruthi, M.D. (2024) Los adolescentes y el uso de los medios sociales: ¿cuál es la

repercusión? Mayo Clinic.