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Derecho civil

Equipo 6
Tema del capitulo 14, 15 y 16
14.1 Acepciones del término persona:

La definición de término persona implica en general un grado importante de complejidad


en virtud de las diversas acepciones que conlleva, es indispensable desde el punto de vista
filosófico, sociológico y psicológico. Etimológicamente, el término persona proviene del
latín persóna personae , el cual se refiere a las máscaras que utilizaban los actores
teatrales para hacer sonar más su voz.

El término no es creación de la ciencia jurídica sino que se tomó de otros ámbitos y obtuvo
una evolución desde las concepciones religiosas ancestrales como el hinduismo, el
budismo o el confucionismo, en donde la persona no gozaba de la autonomía de
pensamiento y voluntad , sino solo era considerada un objeto.
Psicológica: Recasens señala que persona es la escencia concreta de cada individuo humano, la
cual constituye el resultado de la íntima combinación como de factores biológicos,
constitucionales, biológicos adquiridos sociales y culturales y el yo, es decir la unidad radical y
profunda del sujeto. La acepción más común del término persona es la que alude al hombre en
sus relaciones con el mundo y consigo mismo, una unidad individual de relaciones sociales.

14.2 Teorías Jurídicas explicativas de la personalidad:

Las teorías se pueden agrupar en tres: las teorías de la fricción, las teorías realistas y las
teorías puramente jurídicas, entre las que destacan las de Francesco Ferrara y Hans Kelsen.
Teoría de la ficción: Debido a las razones de índole biológica, filosófica y religiosa implícitas
en el término, la persona se identificó con el ser humano y aun cuando históricamente se
reconoció la inexistencia de personas morales o colectivas, se entendió que eran solo una
creación del derecho por necesidades prácticas.
La teoría de la ficción pretende explicar la naturaleza de las personas a partir del supiesto de que la
unica persona real es el hombre por ser la única susceptible de querer, de tener voluntad de ser
origen y fundamento de los derechos subjetivos. Era necesario que el derecho supusiera una ficción
para que así pudieran tener derechos y obligaciones los miembros que la constituyen.
Para esta teoría, las personas morales o colectivas no son algo real, sino una ficción legal, pues los
seres humanos son los únicos de tener voluntad y en consecuencia ser capaces de derechos subjetivos
y obligaciones.

Teorías realistas: Otto Von Gierke dice que la capacidad de querer y obrar de las corporaciones es una
realidad a la que el derecho atribuye personalidad, porque ve en ellas una voluntad colectiva que es una y
continua. Ernst Zitelmann señala que el conjunto de individuos se convierte en un ser distinto de los
individuos desde que se unen orgánicamente.
Para las teorías realistas es un reconocimiento de que existe obligación de dar, pues la ley no crea
personas colectivas, sino que se concreta a reconocerles capacidad jurídica.
Teoría de Francesco Ferrara: La personalidad jurídica es un donde la ley, puede darse o
negarse al hombre o a los seres colectivos y es solo una creación de la técnica jurídica, sin
la cual resulta imposible construir un ordenamiento jurídico.
En la persona deben contemplarse dos factores o elementos: el sustrato y la personalidad,
pues esta no puede caer en el vacío.
Todo hombre debe de ser persona, porque el imperativo ético de nuestra cultura así lo
exige.
La personas colectivas denominadas asociasiones o instituciones, formadas para
conseguir un fin y para ser reconocidas por el orden jurídico requieren reunir ciertos
requisitos

Teoría de Hans Kelsen: el concepto de persona es una noción elaborada por la ciencia del
derecho , carece de existencia real o natural y solo son reales las conductas humanas , en
tanto que la personalidad es el punto de imputación de un conjunto de normas que pueden
referirse a un solo individuo, a un conjunto de individuos o a la totalidad de los conjuntos de
órdenes jurídicos parciales, lo cual se conoce como Estado o Nación.
Juridica: la doctrina ha definido a la persona como un sujeto de derechos y obligaciones , el orden jurídico
confiere a la capacidad que le pueden ser imputadas las consecuencias de derecho. La definición de persona
no se refiere a ningún ser real, sino que corresponde a la elaboración jurídica que se aplica a cualquier ser
real o ideal, ya sea el hombre ,conjunto de individuos o a un bien , un grupo de bienes o a una abstracción.

Filosófica: Luis Recanses Siches define a la persona como la expresión de la escencia del ser humano, del
individuo humano, escencia que no puede ser captada el campo de la ontología, más bien es conseguible en la
intersección de este campo con el de la ética.
La persona en filosofía se define no solo por sus características ontológicas sino también por su
transportación en el mundo de los valores éticos, como el ser sobre el cual pesa un deber ser, una misión
moral por responsabilidad propia.

Sociológica: Recanses, define a la persona atendiendo tanto a la persona humana, de la que subraya sus
determinantes sociales y colectivas, como al concepto de personalidad social ,en tanto miembro de un grupo.
De aquí se colige que persona es el individuo humano que desempeña un papel social en la vida en
comunidad.
14.4 Clasificación de las personas morales:
En la actualidad, aun cuando se siguen usando las clasifcaciones romanas y algunas otras, para
fines prácticos se distingue a las personas morales en personas de derecho público y personas de
derecho privado.
Respecto de dicha clasificación, Planiol dice que para esclarecer esta distinción es preciso buscar si la
institución funciona en virtud de una delegación del poder público o por efecto de fuerzas
individuales asociadas.

Tal es la única razón determinante. Para ser público, es necesario que el establecimiento sea un
modo de acción de la autoridad pública; cualquier otro establecimiento solo puede ser privado,
porque es una de las formas de la energía y de la iniciativa de simples ciudadanos que obran a título
particular.

Otro criterio es el que considera como establecimiento público a las personas civiles creadas para la
gestión de un servicio público y establecimientos privados los fundados por socios particulares con
fines individuales.
Respecto a las personas morales se tiene:
a) Personas de derecho público: Son aquellas que pertenecen a entidades del Estado, como la nación, los
estados, municipios y corporaciones reconocidas como parte del poder estatal. Un ejemplo serían instituciones
públicas como la UNAM o el IMSS.

b) Personas de derecho privado: Son aquellas que persiguen fines lícitos y privados, como sociedades y
asociaciones de carácter económico, profesional, artístico, benéfico, entre otros. También pueden incluirse
personas extranjeras según lo establecido en el artículo 2736.

• Asociación: Unión voluntaria de personas físicas para un fin común, no transitorio, con un carácter
preponderante no económico.

• Sociedad: Unión de individuos que combinan recursos para un fin común predominantemente económico.
Las sociedades mercantiles se rigen por leyes especiales y priorizan la forma sobre el fin.

• Corporación: Conjunto de individuos unidos voluntariamente o no, sin un fin económico, como el bautismo
o la pertenencia a un gremio. Para Andreas von Tuhr, siempre es de derecho público.

• Fundación: Sustrato económico dedicado a una finalidad que el fundador no puede modificar. Administran
un patrimonio destinado y generalmente tienen fines píos, científicos o artísticos.
15.1 Principio de la personalidad individual:

Juridicamente define la personalidad como aptitud para ser sujeto de derechos y


obligaciones portal razón todo sujeto de derecho y obligaciones es una persona de
derecho ya que con el ello, indique estar dotada de la cualidad o investidura
denominada personalidad jurídica.

Dicha personalidad tiene principio y fin lo cual quiere decir, inicio y extinción lo
primero se refiere a cómo se adquiere, y los segundos se refiere a cómo se pierde.
El surgimiento y la extinción de la personalidad jurídica,tiene lugar en muy
distinta manera en los dos tipos de personas que qué regula el derecho: físicas y
morales .
15.2 Perdonalidad del concebido
El embrión humano, el ser concebido antes de nacer o nasciturus, como se le conoce en la
doctrina, se encuentra protegido por el derecho y según el art. 22 in fine del CCDF, se le tiene
por nacido debido a una ficción para todos los efectos declarados por la ley.

Los principales casos que se presentan ante esta anticipación de la personalidad en el


concebido son: a) el establecido por el art. 1314 del mismo código, que prevé el caso de que los
concebidos puedan obtener herencia antes de haber nacido, siempre y cuando se encuentren
en el seno materno al fallecer el autor de la sucesión, y b) el de los no nacidos que pueden
adquirir por donación, siempre y cuando hayan estado concebidos al tiempo en que se hizo la
donación y sean viables conforme a lo dispuesto en el art. 337, como lo indica el art. 2357 del
mismo ordenamiento.
15.3 Pricipio de personalidad colectiva
Asi como la personalidad jurídica de los seres humanos comienza con el nacimiento legal en los términos del art.
337 del Código Civil local, debería existir un precepto que precisara el momento en que se inicia la personalidad
jurídica de los entes colectivos. Lamentablemente no existe tal precepto, por lo que al sistema jurídico mexicano
pueden aplicársele las diferentes opiniones doctrinales respecto del momento de iniciación de la personalidad
jurídica de estos entes.

Al respecto, los momentos señalados por los autores han sido dos: a) El momento del acto de la constitución.
b) El momento del acto del reconocimiento hecbo por el Estado.

La primera opinión considera que el acto constitutivo (contrato o acto complejo co­ lectivo) es suficiente por sí
mismo para hacer nacer la personalidad del ente social, -;iempre que sus finaliciades sean lícitas.

La segunda posición doctrinaria (o sea, aquella que considera necesario un acto es­ tatal para que se inicie la
personalidad) encuentra también su apoyo en algunos textos legales, sobre todo para las sociedades mercantiles y
las fundaciones.
15.4 Fin de la personalidad individual:
Cuando termina la existencia fisica del ser humano termina tambien su vida juridica.
Portanto, la muerte pone fin a la personalidad juridica del hombre.

Es de gran importancia precisar el momento en que cesa la personalidad jurídica ,tener una
prueba fehaciente de la muerte que indique día y hora en que cesó la vida, pues a partir de
se hecho se derivan consecuencias jurídicas muy importantes como la extinción de los
efectos jurídicos en relación con la persona fallecida , el hijo, de la viuda nacido despues de
300 días de acaecido el deceso del marído no es hijo de ese salvo el caso de que hubiese
consentido el uso de los métodos de fecundación asistida a su conyuge
15.5 Conmoriencia y premorencia
Un caso de especial interés por su trascendencia es el de los conmorientes, es decir, el de aquellas personas
que siendo entre sí sucesoras mueren en un mismo acto o desastre, como guerra, naufragio, accidente de
aviación, etc., sin que pueda determinarse en forma fehaciente si la muerte fue simultánea o sucesiva, esto es,
si murieron al mismo tiempo o quién murió antes y quién después, a efecto de determinar los derechos
sucesorios de los herederos, pues el muerto con posterioridad heredará al primeramente muerto y, en
consecuencia, transmitirá a sus herederos no solo sus bienes adquiridos con anterioridad, sino también los
que pudiere adquirir en virtud de la herencia del conmoriente; en el caso de que hayan muerto al mismo
tiempo no se heredarán entre ellos, de ahí la importancia de fijar el momento de la muerte.

En el derecho romano se establecían una serie de reglas para presumir la muerte, es decir, presunciones en
virtud de las condiciones físicas de los sujetos, que hacian creer en la posibilidad de que unos hubieran
muerto antes que otros (presunción de hombrencia), Así se establecía la presunción de premuerte de la mujer
respecto del hombre, del niño en relación con el adulto, etc. Ello originaba innumerables dificultades en la
práctica
15.6 Presuncion de muerte :
Otro caso que guarda semejanza en algunos efectos jurídicos con la muerte es la declaración de
presunción de muerte. Esta presupone la ausencia del sujeto de su domicilio por el tiempo y
previos los trámites que marca la ley. Cabe anticipar que en este caso no hay fin de la
personalidad, sino solo un procedimiento cautelar de los bienes del ausente en beneficio de él y de
sus herederos.

En la actualidad las legislaciones occidentales consideran que se requiere una prueba plena para
tener por muerta a alguna persona, independientemente de su edad o de lo prolongado de su
ausencia. Según Planiol, "la ausencia, por prolongada que sea, nunca produce la certidumbre de la
defunción (.) el ausente no está ni muerto ni vivo". De ahí que cuando la muerte de una persona
no puede comprobarse fehacientemente, la personalidad jurídica no puede extinguirse y, por
ende, no pueden transmitirse sus derechos y obligaciones, quedando suspendidas sus relaciones
jurídicas hasta la muerte del ausente o la certidumbre de su fallecimiento.
15.7 Fin de la personalidad colectiva :
Así como el fin de las personas físicas solo llega con la muerte y la muerte física coincide con el fin de la personalidad;
en las personas morales el fin de la personalidad no siempre coincide con el fin de la existencia del ente social.

El fin de las personas morales puede ser voluntario o necesario.

a) Es voluntario cuando los miembros de la persona moral acuerdan la disolución de la misma.

b) Es necesario cuando la persona moral adolece o le falta un elemento esencial para su existencia (falta de socios,
realización del objeto social, imposibilidad del mismo, etc.), o cuando por disposición del poder público, ya sea por ley
o por sentencia, se resuelva la desaparición de la persona social.

Normalmente, el fin de la personalidad implica el fin del ente colectivo, en cuyo caso debe procederse a la liquidación
del patrimonio social, según las reglas que para cada tipo de ente colectivo se establecen, conforme a su naturaleza.
Pero a veces, no obstante que se priva de personalidad jurídica al ente colectivo, este persiste como persona social no
jurídica, por ejemplo: la nación polaca en las épocas de su desaparición como Estado, las iglesias y los sindicatos en las
legislaciones que les negaban personalidad jurídica, etcétera.

La ley prevé como causas de terminación de la personalidad jurídica de las personas morales:
16.1 Concepto de atributo:
Por atributo se entiende cada una de las cualidades o características propias de
ser que lo distinguen de los demás y respecto de las personas todas las
situaciones judicial jurídicas que permiten identificarlas individualizarlas y
situarlas dentro de la sociedad y el orden jurídico.

La personalidad según Louis Josserand comporta cierto número de atributos


que no se reduce exclusivamente a ventajas o prerrogativas sino que implica
también una multitud de deberes cargas y obligaciones para quienes están en
investidos de dichos atributos todos somos más o menos prisioneros de nuestra
propia personalidad y de las colorías jurídicas que ellas le siguen
16.2 Clasificación de los atributos:
Los principales atributos de la personalidad considerados tradicionalmente son:

Nombre: se considera el primer atributo de la personalidad por ser el elemento que


designa a la persona y la diferencia de las demás de su misma especie de los animales y de
las cosas es decir delimita a cada persona jurídica al individualizarla.
Domicilio: hoy se considera el segundo tributo de las personas ya que como sede jurídica
de la misma constituye un elemento trascendental en virtud de que el derecho lo toma en
consideración para atribuirle efectos jurídicos.
Estado: se considera en estado personal o lo que es lo mismo en estado de capacidad o
incapacidad en estado familiar o civil y en estado político.
Patrimonio: Se le considera frecuentemente un atributo de la personalidad, pero algunos
juristas modernos dudan que lo sea.
Otros autores consideran también como atributos de la personalidad de los
derechos personalísimos que se fijan directamente en la existencia del ser
humano, como el derecho al honor, a la consideración, a la integridad de la
personalidad moral, intelectual y física, a la manutención y al respeto a la vida
privada a la intimidad, así como el derecho a oponerse a la reproducción o
exposición de su retrato o fotografía y el derecho a ser dejado tranquilo es
decir los llamados derechos de la personalidad, a los que ferrara define como
aquellos que garantizan el goce de nosotros mismos.

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