Entrega 2 Las Bases El Cerebro YA

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Entrega 2- Deja de Ser Tu

Las Bases: El Cerebro


Como recordamos, el autor sufrió un terrible accidente que lo dejó al borde de
quedar paralítico para siempre. Sin embargo, siendo él quiropráctico, una disciplina
cuyo creador propugnó desde el inicio en que uno de sus principios era que “la
inteligencia innata que creó tu cuerpo, puede sanarlo, si le das la oportunidad y el
tiempo que requiere para lograrlo”, decidió no operarse y fiel a ese principio, decidió
comprobar en si mismo, esa máxima. Y al lograrlo, se dedicó a explicarlo desde un
punto de vista científico. En primer lugar, se dedicó a estudiar todo lo que tenía que
ver con el funcionamiento del cerebro. Y al revisar los últimos estudios que se estaban
realizando acerca del cerebro, se encontró con que, a la luz de las últimas
herramientas tecnológicas disponibles a ese propósito, mucho de lo que se dio por
cierto durante mucho tiempo, se empezó a desmentir: Antes se asumía que el número
de neuronas con que contamos al nacer, es el máximo. Por mal uso, se podían perder,
pero nunca regenerarse.
Actualmente ya no es cuestión de creencia sino que ha podido demostrarse que eso
es falso: pueden producirse neuronas nuevas a cualquier edad. Otra cosa: el cerebro
no sólo es absolutamente maleable, sino que cada pensamiento implica desplegar una
increíble cantidad de actividad de tipo eléctrico, bioquímico y de todo tipo. Y se ha
demostrado que una persona haciendo uso de su libre albedrío, de acuerdo al foco en
que se concentre y a la intensidad que le imprima, su cerebro ha quedado literalmente
modificado. Es donde y en qué ponemos nuestra atención es lo que traza el curso de
nuestro estado de ser.
También se daba por cierto que, aunque lo que hacemos físicamente nos afecta y
afecta la realidad, no se creía que, únicamente con actividad mental se lograra algún
resultado. Sin embargo, según averiguó (y más tarde comprobó por sí mismo) algunos
estudios habían demostrado que el cerebro no distingue mucho la diferencia entre una
imagen mental y una imagen que está sucediendo en presente. A un grupo lo pusieron
a hacer cierto ejercicio. A otro, solo a imaginar que lo hacían. ¡Sorpresa! Ambos,
tuvieron cambios cerebrales casi idénticos. Y aún más ¡también hubo cambios
similares en su musculatura!. Esto resultó determinante. Todo indica que cuando Ud.
imagina que está haciendo algo, en su cerebro se llevan a cabo las mismas secuencias
que las que se llevan a cabo cuando efectivamente se está ejecutando la acción. Y de
esto, se saca una conclusión obvia: el ensayo mental es una manera poderosa de
mejorar nuestras aptitudes fisiológicas. Esto ya se ha convertido en una rutina más
para perfeccionar las actitudes atléticas de deportistas de alto nivel en las más
distintas disciplinas. Y algo más general, pero de consecuencias impresionantes:
nuestros pensamientos afectan nuestro organismo de maneras que antes no se creían
posibles. Los quiroprácticos creen que en la “inteligencia innata” del cuerpo para
sanarse. Pero, ¿hasta dónde?.
Tengamos en cuenta lo siguiente: En este segundo, en cada una de nuestras células
se llevan a cabo unas 100.000 reacciones químicas y en nuestro cuerpo hay por ahí
100.000 BILLONES de células organizadas para constituirlo. ¿Tienes idea cómo cuándo
y dónde se lleva a cabo alguna de estas reacciones? Sólo en el páncreas diariamente
se regeneran casi todas sus células. En cada segundo, mueren y nacen cerca de 10
millones de células. Cómo nos deshacemos de los deshechos de las que mueren?
Como juntamos los elementos necesarios para que se generen las que nacen? Y en
cada órgano: ¿qué hace que sin fallar, lata nuestro corazón? ¿Qué hace que nuestro
riñón filtre litros de nuestra sangre cada hora con mucha mayor eficiencia que la más
avanzada de nuestras diálisis lo hace en procesos mucho más lentos? ¿Qué en nuestro
aparato digestivo hace que se produzcan y secreten las cantidades de enzimas para
digerir cada alimento que ingerimos? ¿Quién dirige las 66 (sí, sesenta y seis) distintas
funciones que lleva a cabo el hígado? ¿Quién comanda el ejercito de anticuerpos que a
cada instante se encarga de combatir los virus y bacterias que a cada instante
intentan vulnerarnos y grabar las características de los nuevos para que nunca más
puedan siquiera pasar de los primeros pasos? Y lo más maravilloso: esa fuerza de vida
que dirigió, a partir de solo dos células, nuestros 100.000 Billones de células
especializadas, las mantiene organizadas hasta ese instante en que morimos y ese
mismo cuerpo organizado empieza a descomponerse. El poder interior que lo mantenía
en funcionamiento, ha desaparecido. ¿Qué es lo que ha desaparecido? La Consciencia
de Ser en ese cuerpo.
Y entonces, procedió a profundizar en qué viene a ser eso, partiendo de una nueva
rama de la ciencia llamada Psico-Neuro-Inmunología la relación entre nuestro
pensamiento y nuestro cuerpo físico. En síntesis, un pensamiento produce reacciones
bioquímicas que son como mensajeros del pensamiento. Esto hace que del cerebro se
produzcan señales químicas que hacen que el cuerpo se sienta exactamente del modo
en que estamos pensamos. Si nuestros pensamientos son alegres, felices, se ´produce
dopamina que nos hace sentirnos de ese mismo modo. Si los pensamientos son de
odio, de enojo o de desprecio, se producen neuropéptidos que no imprimen un
sentimiento de Odio, o enojo etc. y actuamos como tal. La mente se convierte en algo
tangible, resultado de cómo actuamos envueltos en esos sentimientos. Y eso genera
un círculo. Virtuoso o Vicioso. Cuando un ser vive envuelto en uno de estos dos
círculos, se dice que ese ser ES ASÏ. Pero realmente no TIENE que SER así. Es una de
sus conclusiones más determinantes: mientras una persona PERMITA que un tipo de
pensamiento prime en su cerebro, esos pensamientos influirán de manera directa en
nuestro estado de ánimo, en nuestra salud, en nuestras decisiones y en fin, en nuestra
calidad de vida. Y cuando una persona pasa casi todo el día dando primacía a
pensamientos y estados de ánimo de tristeza celos, rabia, etc. más tarde o más
temprano se generarán enfermedades que corresponden a esos estímulos.
Siguiendo este razonamiento, si una persona realmente quiere cambiar su vida, en
primer lugar debe cambiar sus pensamientos. A medida que vaya liberándose de los
ciclos perpetuos de pensamientos y sentimientos perjudiciales por otros nuevos y
beneficiosos, su salud mejorará.
Por otro lado, ¿acerca del concepto de Conciencia, en qué consiste? En la ciencia,
¿cuáles son las últimas investigaciones que la tocan? En la próxima entrega se verá lo
que averiguó.

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