Pintura abstracta 3 grado secundaria.

Te explicamos qué es la pintura abstracta, su historia, características y tipos. Además,

los principales pintores abstraccionistas.

La pintura abstracta de Mondrian influyó otras artes como el diseño y la arquitectura.

[Composición (1921), de Piet Mondrian (fragmento)]
¿Qué es la pintura abstracta?
La pintura abstracta, junto a la escultura abstracta, fue una de las manifestaciones de
la corriente artística nacida a comienzos del siglo XX conocida como arte abstracto o
abstraccionismo.
El abstraccionismo se caracterizó por oponerse al arte figurativo, que era el arte que
imitaba las formas de la realidad. El arte abstracto proponía un lenguaje visual propio,
basado en formas, colores y líneas. Además de haber sido un movimiento artístico que
se desarrolló en un momento de la historia, hoy se usa el adjetivo “abstracto” para
describir a una pintura que no imita a las formas visibles.
La pintura abstracta se manifestó de distintas formas mediante diferentes técnicas y
estrategias expresivas, desde la apuesta por la geometría hasta vertientes más libres o
intuitivas. Así, dio origen a diversos movimientos. Tuvo su momento más prominente
entre las décadas de 1950 y 1960, y un importante diálogo con las artes decorativas y
el diseño gráfico.
Su influencia en el arte moderno y contemporáneo ha sido significativa y continúa
vigente.
Historia de la pintura abstracta
Además de hacer obra, Kandinski teorizó en torno al abstraccionismo.
[Vasili Kandinsky, Composition VII, 1913]
La primera obra de pintura abstracta fue la serie Pinturas para el templo de la artista
sueca Hilma af Klint (1862-1944), realizada entre 1906 y 1915. En esta serie, Klint
intentaba representar su mundo espiritual a través de figuras geométricas, colores
vibrantes y patrones complejos.
Klint nunca dio a conocer sus cuadros en vida y pidió expresamente que fueran
mostrados 20 años después de su fallecimiento. Sus pinturas fueron exhibidas por
primera vez en 1986 y solo entonces fue reconocida como precursora del
abstraccionismo.
Hasta aquel momento se había considerado a Vasili Kandinsky (1866-1944) como el
pionero del arte abstracto, gracias a la obra que él mismo llamó Primera acuarela
abstracta (1910). En 1911, Kandinsky escribió De lo espiritual en el arte, una obra
teórica fundamental en la que presentó sus ideas sobre lo que llamó abstracción lírica
(subjetiva, libre, expresiva y de pinceladas sueltas).
Los postulados de Kandinsky posicionaron el abstraccionismo como un movimiento
artístico moderno e internacional, al que posteriormente se incorporaron artistas de
Francia, Rusia, Alemania y Estados Unidos.
Pero no fueron ellos los únicos en intentar un nuevo lenguaje para la pintura. En el
desarrollo del abstraccionismo influyeron significativamente otras experiencias
artísticas, como las siguientes:
El austríaco-alemán Adolf Hölzel propuso en 1905 un sistema de colores próximo a la
abstracción. Ese mismo año realizó su obra Composición en rojo, plenamente
abstracta, y en 1917 llevó a cabo una serie pictórica en la que emparentó su sistema de
colores con la música.
El pintor francés Francis Picabia (1879-1953) experimentó hacia 1910 con usos más
libres de la forma, el color y la textura. En la década de 1920 se alejó de su etapa dadá
y comenzó a explorar con la abstracción lírica. Sus obras de este período se
caracterizan por el uso de colores suaves, formas orgánicas y líneas fluidas.
Un grupo de más de veinte artistas (entre los que estaban Jean Metzinger (1883-1956),
Albert Gleizes (1881-1953) y Fernand Léger (1881-1955) crearon en el estudio de
Jacques Villon (1875-1963) en la ciudad de Puteaux, el movimiento Section D’or (1911-
1914). Este grupo intentaba ir más allá del cubismo, y para eso empleaba figuras
geométricas y bases matemáticas en la composición artística.
La pareja de franceses conformada por Sonia Delaunay (1885-1979) y Robert Delaunay
(1885-1941) desarrolló en 1912 un movimiento llamado “simultaneismo”
(simultanéisme), basado en las teorías sobre el color del químico francés Eugéne
Chevreul (1786-1889).
El ruso Kasimir Malévich (1879-1935) inició en 1915 el suprematismo, un movimiento
fundamental del arte no objetivo (es decir, arte sin referencia a la realidad visible), que
tuvo seguidores como Aleksandr Ródchenko (1891-1956), Liubov Popova (1889-1924),
Varvara Stepánovna (1885-1918) y Jean Pougny (o Ivan Puni, 1892-1970).
En 1917, el holandés Piet Mondrian (1872-1944), quien formaba parte del grupo De
Stijl (movimiento que buscaba la integración de las artes y el “arte total”), fundó el
neoplasticismo, una corriente que procuraba la abstracción pura a través de las formas
geométricas, las líneas rectas y los colores primarios.
Tipos de pintura abstracta

La pintura abstracta geométrica se basa en preceptos racionales.

[László Moholy-Nagy. Composición Z VIII, 1924]. Créditos: Wikimedia Commons.
La pintura abstracta tuvo dos vertientes principales: una racionalista y geométrica, y
otra vinculada con la intuición y la relación con las formas musicales. Estas dos
vertientes dieron origen a dos grandes tipos de pintura abstracta:
La pintura abstracta expresiva. Indaga en el gesto subjetivo y enérgico, la intuición y la
emocionalidad. Sus obras son orgánicas, sugerentes, espontáneas y expresivas.
Corresponden a esta forma artística el abstraccionismo lírico, el expresionismo
abstracto y el informalismo.
La pintura abstracta geométrica. Aspira a cierto grado de objetividad y planifica la obra
en base a principios racionalistas, lógicos e impersonales, como la geometría y las
matemáticas. Son propios de este tipo de abstracción el suprematismo, el
constructivismo ruso y el arte concreto.
Pintores abstraccionistas reconocidos

Hilma af Klint fue pionera de la pintura abstracta.

[Abedul. Hilma af Klint, 1922]. Créditos: Arthive.
Algunos de los más célebres artistas del abstraccionismo pictórico fueron:
Hilma af Klint (1862-1941). Fue una pintora sueca, pionera del arte abstracto. En sus
obras realizadas a partir de 1906 demostró un elevado desarrollo del lenguaje
abstracto, con colores planos y formas geométricas. Su trabajo no fue reconocido
hasta 1986, fecha en la que sus cientos de pinturas fueron exhibidas por primera vez.
Vasili Kandinski (1866-1944). Fue un pintor ruso, precursor del abstraccionismo y
teórico de arte. Comenzó a pintar a los 30 años y fue un artista renombrado de su
tiempo, a pesar de que su obra no fue valorada por razones políticas en la entonces
naciente Unión Soviética. Se formó en Alemania y vivió en Munich hasta que en 1933
los nazis cerraron la Escuela de la Bauhaus, donde enseñaba. Por esta razón emigró a
Francia, donde residió el resto de su vida.
Piet Mondrian (1872-1944). Fue un pintor vanguardista neerlandés, miembro de De
Stijl y creador, con Theo van Doesburg, del neoplasticismo. Junto a Kandinsky y
Malévich, es considerado uno de los mayores representantes del abstraccionismo,
movimiento al cual llegó luego de incursionar en el naturalismo y el simbolismo. Su
obra y sus teorías influyeron enormemente en otras artes del siglo XX como el diseño,
la arquitectura, la decoración y la escultura.
Kazimir Malévich (1879-1935). Fue un pintor ruso de origen polaco, creador del
suprematismo, uno de los principales movimientos vanguardistas de Rusia. Redujo al
mínimo los elementos en sus obras, inventó un nuevo lenguaje artístico y fue valorado
por la incipiente Revolución de Octubre, tras la cual fue nombrado director de un
prestigioso estudio de los talleres de arte estatal en Petrogrado. Llegó a convertirse en
una de las grandes figuras del arte soviético y mundial.
Willem De Kooning (1904-1997). Fue un pintor nacido en Holanda y nacionalizado
estadounidense, figura central del expresionismo abstracto. Sus obras se caracterizan
por su fuerza expresiva, su gesto espontáneo y enérgico, sus texturas y sus tonos
vibrantes. Generó un estilo único que combinaba magistralmente la figuración con el
abstraccionismo.