A5 Antecedentes
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MATRIMONIO.
2.1. ANTECEDENTES.
1
Baqueiro Rojas Edgar, Buenrostro Báez Rosalía, Derecho de Familia y Sucesiones, México 1990, Ed. HARLA, P. 37.
Este tipo de matrimonio romano consensual fue llamado matrimonio por usus, es
decir, por el hecho de vivir como casados sin ninguna ceremonia particular que le
diera realce, y se disolvía con la misma facilidad con la que se había iniciado
cuando, antes de transcurrir un año de vida en común la mujer se ausentaba del
hogar por tres noches seguidas, la ausencia triocti de la mujer lo que hacia era
impedir que ella cayera bajo la manus (potestad) de su marido.
Entre los romanos existieron otras formas de matrimonio, estas son la coemptio y
la conferreatio. La primera corresponde al matrimonio por compra que tuvo gran
aceptación entre los plebeyos y posteriormente entre los patricios cuando decayó
la costumbre de la conferreatio; está ultima era una auténtica ceremonia social y
religiosa en la que ambos consortes compartían una torta de trigo, como símbolo
de la comunidad de vida que establecían; la conferratio corresponde al llamado
matrimonio solemne. 2
2
Montero Duhalt Sara, Derecho de Familia, México 1992. Ed. Porrúa, P. 106.
El 30 de agosto de 1859, los principales obispos del país dirigieron una pastoral al
clero y a los fieles de toda la República, en la que declararon que “todos los
legisladores civiles del mundo jamás podrán despojar a la iglesia de la más
mínima de las facultades que recibió de Jesucristo; que entre esta facultades está
contenida la de conocer y arreglar el matrimonio sacramento; que solamente éste
y ningún otro es válido entre católicos; que el que estos contraigan contra las
prescripciones de la iglesia será ilícito; que será verdadero concubinato por más
que lo declaren válido las leyes civiles”.
2.3. DEFINICION.
El matrimonio se define como “la unión de un solo hombre y de una sola mujer que
conviven para realizar los fines esenciales de la familia como institución social y
civil”. Artículo 75 del Código Civil para el Estado de Veracruz.
Baudrit Lacantinerie8, autor citado por Sara Montero Duhalt, define al matrimonio
como el estado de dos personas, de sexo diferente, cuya unión ha sido
consagrada por la ley.
7
Montero Duhalt Sara, Derecho de Familia, México 1992. Ed. Porrúa, P. 96.
8
Ob. Cit. Montero Duhalt Sara, P. 96.
9
Ob. Cit. Montero Duhalt Sara, P. 96.
10
Ob. Cit. P. Ferreres, P. 96.
11
Baqueiro Rojas Edgar, Buenrostro Báez Rosalía, Derecho de Familia y Sucesiones, México 1990, Ed. HARLA, P. 39
Marcel Planiol, autor citado por Rafael Rojina Villegas12, lo define como la “unión
sexual del hombre y de la mujer, elevada a la dignidad del contrato por la ley, y
de sacramento por la religión”. Otros autores han objetado el carácter contractual
del matrimonio, sin desconocer el papel que la voluntad de los contrayentes
juega en su celebración. León Duguit13, citado por Rafael Rojina Villegas,
sostiene que el matrimonio constituye un acto jurídico condición; es acto jurídico
porque es una declaración de voluntad a la que el derecho otorga determinados
efectos; es condición en tanto resulta indispensable para el nacimiento de un
estado jurídico previamente establecido, con derechos y deberes que no pueden
ser alterados por las partes.
En síntesis los autores a los que se hace alusión y otros más, distinguen en el
matrimonio las siguientes características:
a) Es un acto solemne.
12
Citado por Rojina Villegas, Rafael, Derecho Civil Mexicano, Décima Edición, México 2003, ED. Porrúa, P.216
13
Rojina Villegas, Rafael. Ob. Cit. P. 216.
14
Rojina Villegas, Rafael. Ob. Cit. P. 216.
e) Sus efectos se extienden más allá de las partes y afectan a sus respectivas
familias y a sus futuros descendientes.
a) La teoría que para matizar las singularidades que separan al matrimonio con
los demás actos, habla de un contrato sui generis, personal y social (Cimbali);
16
Rojina Villegas, Rafael, Derecho Civil Mexicano, Décima Edición, México 2003, Ed. Porrúa, P. 217.
17
Castan Tobeñas, José, ob. cit., p. p. 454 y 455.
18
Rojina Villegas, Rafael. Ob. Cit. P. 220.
Matrimonio como acto jurídico mixto: es una acto jurídico mixto debido a que se
constituye no sólo por el consentimiento de los consortes, sino también por la
intervención que tiene el Juez del Registro Civil. Este órgano del Estado
desempeña un papel constitutivo y no simplemente declarativo, pues podemos
decir que si se omitiese en el acta respectiva hacer constar la declaración que
debe hacer el citado funcionario, considerando unidos a los consortes en legítimo
matrimonio, éste no existiría desde el punto de vista jurídico. 19
19
Rojina Villegas, Rafael. Ob. Cit. P. 221.
20
Rojina Villegas, Rafael. Ob. Cit. P. 222.
Como apoyo a lo anterior citado sobre los requisitos del matrimonio, se hace
referencia a la siguiente tesis:
21
Montero Duhalt Sara, Derecho de Familia, México 1992. Ed. Porrúa, p. 112.
4. Formalidad: solicitud ante el Juez del Registro Civil, para Sara Montero
Duhalt22, la formalidad consiste en que se hagan constar dentro de la
solicitud: los nombres, edad, ocupación y domicilio, tanto de los
pretendientes como de sus padres, que no tienen impedimento legal para
casarse y que es su voluntad unirse en matrimonio; a esta solicitud se
acompañan otros documentos que son: acta de nacimiento, certificado
médico, constancia en caso de quien deba dar el consentimiento,
presentación de testigos, copia del acta de defunción en caso de que uno
de los contrayentes sea viudo, copia certificada de la sentencia de divorcio
o nulidad del matrimonio, copia de la dispensa de impedimentos, en caso
de separación de bienes convenio expreso.
Todas las definiciones citadas son en parte verdaderas, por ello diremos que el
matrimonio es un contrato solemne de derecho de familia y de interés público
que hace surgir entre los que lo contraen el estado civil de casados con todos los
derechos y obligaciones determinados por el orden jurídico a través de la
institución del mismo nombre.
23
Ibidem, p. p. 122, 123, 124.
24
Ibidem, p. 113.
1.- PREVIOS:
27
Rafael de Pina, Rafael de Pina Vara, Diccionario de Derecho, México 2000, Ed. Porrúa, P. 114.
2.- CONCOMITENTES:
ORALES.-
• Ratificación de la solicitud.
• Lectura de los documentos.
• Identificación de los testigos.
• Pregunta de la voluntad de los contrayentes.
• Declaración de matrimonio por el Juez.
ESCRITOS.-
• Acta por triplicado en formas especiales.
• Firma del Juez, contrayentes y testigos.
• Huella digital de contrayentes.
Para que el hombre o la mujer, que no cumplan con la edad legal, puedan contraer
matrimonio se requiere: del consentimiento del ascendiente o ascendientes que
ejerzan la patria potestad; y si no hay quien ejerza esta, se necesita el
consentimiento del tutor, y faltando éste el Juez competente del domicilio del
menor suplirá el consentimiento. Así lo menciona el Código Civil del Estado de
Veracruz, en sus artículos 86, 87, 88 y 89.
28
Ibidem, P. 155.
b) La falta de consentimiento del que, o los que ejerzan la patria potestad, del tutor
o del Juez, en sus respectivos casos;
Respecto de los cónyuges, los derecho y obligaciones que nacen del matrimonio
son iguales para ambos, y recíprocos. Los principales se agrupan en: deber de
cohabitación; deber de ayuda mutua; débito carnal y deber de fidelidad.
Rafael Rojina Villegas29, menciona que los derechos y obligaciones entre los
cónyuges, se caracterizan:
1.- Porque son del orden público y no simplemente de orden privado; los cónyuges
no pueden renunciar a ellos ni antes ni durante el matrimonio.
2.- Toda persona tiene libertad para casarse o no; pero una vez casada ha
terminado su libertad, queda sometida a reglas imperativas que no le es dable
violar o modificar.
3.- Esas obligaciones y derechos descansan sobre 2 bases: igualdad que debe
existir entre los cónyuges; principio de dirección y autoridad que debe haber en
toda sociedad, tanto más en el matrimonio.
29
Rojina Villegas, Rafael, Derecho Civil Mexicano, México 2003. Ed. Porrúa p. 322.
El derecho a exigir una vida en común, con la obligación de habitar bajo el mismo
techo, es fundamental, dado que sólo a través de él puede existir la posibilidad
física y espiritual de cumplir con los fines del matrimonio. La vida en común implica
la relación jurídica fundante.
Así lo establece el artículo 98 de nuestro Código Civil, “toda persona tiene derecho
a decidir de manera libre, responsable e informada sobre el numero y el
espaciamiento de sus hijos. Por lo que toca al matrimonio, este derecho será
ejercido de común acuerdo por los cónyuges”.
31
Ibimen, p 327.
32
Ibidem p. 328.
Entendemos por lo tanto que estas obligaciones son de diversa índole, así, los
cónyuges se deben fidelidad recíproca, ambos deben colaborar para la adecuada
educación de los hijos, deben colaborar económicamente para los gastos que
implica tener una familia, ambos deben poner de su parte para evitar que el
matrimonio se disuelva, y sobre todo debe haber entre ellos mutuo respeto y
ayuda.
Los derechos y obligaciones que nacen del matrimonio son de tal naturaleza que
no se pueden dejar de lado por la simple voluntad de uno de los contrayentes a
menos que existe una razón para hacerlo, como podría ser la muerte de uno de
los cónyuges o por que se hayan divorciado.