La Iglesia y Sus Ministerios

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Iglesia Bautista de la Cantarero

LA IGLESIA Y SUS MINISTERIOS

Colosenses 3:16-17 | 2 de junio de 2024

Introducción

Imagínese el siguiente escenario: una empresa realizó una inversión de un millón dólares para la
compra de una máquina sofisticada e innovadora que serviría para agilizar los procesos de producción.
Los operadores desempacaron el nuevo equipo y lo instalaron rápidamente, ellos sabían los grandes
beneficios de la misma. En todo el proceso de instalación, no leyeron las instrucciones del fabricante ni
mucho menos consultaron a los técnicos especialistas para aclarar sus dudas. Después de una
semana los dueños de la empresa recibieron la noticia de que la máquina se había fundido por
completo.

Este relato ilustra los efectos lógicos que enfrentamos cuando no seguimos las instrucciones del
fabricante. La iglesia nació en la mente y corazón de Dios, Él ha dado en la Biblia las instrucciones de
cómo debe funcionar. Cuando la Palabra de Dios es ignorada, la iglesia perderá su rumbo correcto y
tarde o temprano terminará abrazando prácticas y doctrinas que nada tienen que ver con su propósito
bíblico. Hoy existen iglesias de todo tipo, pero muchas de ellas solo reflejan su poco cuidado por las
Escrituras en aquello en que se ocupan.

Transición: En las últimas semanas hemos invertido nuestro tiempo en tratar algunos temas
importantes sobre la doctrina de la iglesia. Nuestro objetivo es proveer a la congregación de formación
bíblica para evaluar nuestro trabajo, y así, despertar un sentido de compromiso en el fortalecimiento de
esta iglesia. En esta mañana aprenderemos que (PH) Dios ha dado la instrucción precisa para el
desarrollo de los ministerios en la iglesia, lo anterior, por medio de tres encabezados: Ministerio a
Dios, ministerio a los creyentes y ministerio al mundo. Al estudiar el NT nos encontraremos que existen
tres grandes ministerios en la iglesia, los mismos engloban áreas específicas en donde el pueblo de
Dios puede poner a trabajar sus dones espirituales.

Deseo realizar dos observaciones importantes: 1. La palabra ministerio en el NT proviene de


“diakonos” que significa “servidor”. Siempre que usemos esta palabra la utilizaremos la indicar un tipo
de servicio a Dios y a los demás. 2. Este estudio tiene como base la exposición de ideas de Wayne
Grudem en su Teología Sistemática

I. MINISTERIO A DIOS: ADORACIÓN


a. En el pasaje que leímos nos encontramos con el apóstol Pablo instruyendo a la iglesia de
Colosas a que la Palabra de Dios more en ellos. En la idea principal (la palabra de Cristo more
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en abundancia…) les instruye a “cantar al Señor con salmos, himnos y cánticos espirituales”.
Efesios 1:15 aclara que el pueblo de Dios fue salvo para “la alabanza de su gloria”. Veamos
juntos Ef. 5:18-20. Note cuál es la característica de la iglesia: “hablando… cantando…
alabando al Señor”. La iglesia tiene como ministerio exaltar frente al mundo el nombre de Dios
y al Cordero que entregó su vida por salvar al pecador. La esencia de la iglesia es de un pueblo
lleno de agradecimiento que se goza en rendir adoración a Dios.
b. Es importante notar que, en estos pasajes que se habla directamente de la adoración hay un
vínculo directo con los cantos. Es así que, la adoración corporativa del pueblo de Dios a través
de los cantos es de importancia para el Señor. El NT no presenta un enfoque sobre el uso de
instrumentos, pero sí sobre la acción misma de cantar. Esto implica que, aunque no siempre se
puede contar con acompañamiento musical, la iglesia sí debe cantar con gratitud, admiración y
gozo delante del Señor.
c. Como iglesia debemos ver el tiempo de cantos como el espacio propicio para levantar
adoración a Dios de manera corporativa (como cuerpo). Es así que, nuestros cantos deben ser
escogidos para recordar el carácter de Dios, así como las verdades del evangelio. Lo anterior,
por medio de cantos antiguos y contemporáneos.

I. MINISTERIO A LOS CREYENTES: NUTRIR


a. El segundo ministerio está orientado a los creyentes: nutrir (edificar). Veamos Col. 1:28, en esta
porción Pablo explica su ministerio como un proceso de “anunciar, amonestar, enseñar”, esto
es un proceso de discipulado, en donde el maestro nutre con información, corrección e
instrucción a otro para “presentar perfecto en Cristo Jesús a todo hombre”. Esto es, formar el
carácter de un hombre de acuerdo su identidad en Jesucristo.
b. La iglesia tiene un ministerio hacia los creyentes que forman parte de sus filas: nutrirlos con el
alimento de la Palabra y que así maduren. Dios ha dado a la iglesia personas que cumplan ese
deber: “ Y él mismo constituyó a unos, apóstoles; a otros, profetas; a otros, evangelistas;
a otros, pastores y maestros, a fin de perfeccionar a los santos para la obra del
ministerio, para la edificación del cuerpo de Cristo, hasta que todos lleguemos a la
unidad de la fe y del conocimiento del Hijo de Dios, a un varón perfecto, a la medida de la
estatura de la plenitud de Cristo” Ef. 4:11-13. Esta labor de ministerio incluye a las mujeres:
“Las ancianas asimismo sean reverentes en su porte; no calumniadoras, no esclavas del
vino, maestras del bien; que enseñen a las mujeres jóvenes a amar a sus maridos y a
sus hijos, a ser prudentes, castas, cuidadosas de su casa, buenas, sujetas a sus
maridos, para que la palabra de Dios no sea blasfemada. Tito 2:3-5.
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c. De este modo, la iglesia debe promover ministerios que busquen la madurez del pueblo de
Dios por medio de la Palabra: cantos, conferencias, discipulados, clases de escuela dominical,
retiros, campamentos, etc. La iglesia no nació para entretener o divertir, sino para que las
personas se parezcan más a Cristo, es decir, que sean sus discípulos.

II. MINISTERIO AL MUNDO: EVANGELIZACIÓN


a. Después de notar que el pueblo de Dios adora a Dios y nutre a su pueblo, hay un enfoque
orientado hacia afuera de sus puertas: la evangelización. El evangelio es la buena noticia de
cómo el hombre puede reconciliarse con Dios, conlleva el anuncio del juicio de Dios, pero al
mismo tiempo la esperanza de un Salvador que es Cristo. Leamos Mateo 28:19-20. El
discipulado comienza con la comunicación de esta verdad.
b. La iglesia, por tanto, debe comprender que tiene un deber hacia afuera, el deber de llevar el
evangelio a los perdidos. La vida de Pablo se centraba en ir a predicar el evangelio y capacitar
a los nuevos creyentes para replicar por su cuenta esa labor. De este modo, la iglesia debe
esforzarse e invertir su tiempo y recursos para cumplir con esta tarea.
c. La labor evangelística la trataremos más adelante en esta serie, pero es importante notar que
esa obra implica un acto de comunicación, por tanto, la iglesia puede usar los siguientes
recursos: evangelización casa por casa, uno a uno, medios de comunicación, campañas,
creación de escuelas cristianas, universidades cristianas, servicios de misericordia, etc.

Conclusión:

En esta mañana aprendimos que (PH) Dios ha dado la instrucción precisa para el desarrollo
de los ministerios en la iglesia, lo anterior, por medio de tres encabezados: Ministerio a Dios,
ministerio a los creyentes y ministerio al mundo.

Aplicaciones prácticas:

a. Vea los ministerios de la iglesia con el mismo nivel de importancia . no existe en el NT


la idea de que una tarea sea más importante que otra. No diga “la predicación es lo más
importante”, pues cada ministerio se complementa entre sí.
b. Piense en cómo sus dones contribuyen a esos ministerios. Dios ha dado dones para la
adoración de Dios, edificación de los santos y la evangelización. Los dones no son para
exhibirlos egoístamente, sino para ministren.
c. Recuerde que Dios conducirá a la iglesia por medio la dirección de su Palabra. Uno
de los problemas de la tradición es en que encasilla el trabajo a ciertas acciones concretas
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como las únicas que pueden ser útiles. Sin embargo, cuando la Biblia dirige, la iglesia
trabaja con más libertad y alcance.

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