UNIVERSIDAD DE EL SALVADOR

FACULTAD DE CIENCIAS ECONÓMICAS

DEPARTAMENTO DE ECONOMÍA
MICROECONOMÍA I

GT09
Descripción y análisis de la situación actual de la micro, pequeña y
mediana empresa, el impacto generado por la pandemia del COVID
19 sobre estas empresas y las medidas aplicadas para la mejora de
su situación económica en el año 2024.
Integrantes:

DC23008; Díaz Cárcamo, Denis Alexander,

CN23004; Castillo Navas, Brandon Josué,

FM22048, Franco Martínez, Alisson Michelle,

CH22042, Cedillos Hernández, Katherine Guadalupe.

Tutor:
Lic. Mario Arnoldo Díaz

San Salvador, El Salvador; 07 de julio de 2024

 Índice

Introducción…………………………………………………………………………………………..3
Objetivo general y objetivos específicos……………………………………………………..4
Justificación……………………………………………………………………………..5
Condiciones de las MIPYMES previas a la pandemia del COVID-19………….6
Antecedente
2020: La llegada del COVID 19 a El Salvador y el lanzamiento de medidas
económicas anticrisis. ……………………………………………………………….8
Efectos que ocasionó la pandemia COVID 19 a las MiPymes…………………8
Desempleo por cierre de empresas……………………………………………..9
Cierre de MIPYMES, deuda y reducción de ingresos………………………..10

Financiamiento de apoyo al sector MiPymes…………………………………….11

Medidas post pandemia que implementaron las MiPymes para el mejoramiento

de su situación económica……………………………………….………………….12
Digitalización y Comercio Electrónico………………………………………….12
Innovación en Productos y Servicios…………………………………………..12
Reducción de Costos y Optimización de Recursos………………………….13
Capacitación y Desarrollo de Habilidades……………………………………..13
Implementación de Medidas de Seguridad Sanitaria………………………...13
Flexibilidad y Trabajo Remoto……………………………………………………14
Acceso a Financiamiento………………………………………………………… 14
Reestructuración y Reinvención del Negocio………………………………... 14
Colaboración y Redes de Apoyo…………………………………………………14
Enfoque en el Cliente……………………………………………………………….15

Medidas que el gobierno de El Salvador implementó para el mejoramiento de

sector MiPymes………………………………………………………………………..15
Apoyo Financiero y Créditos Blandos………………………………………….15
Asesoramiento y Capacitación…………………………………………………..15
Digitalización y Comercio Electrónico………………………………………….16
Alivio Fiscal y Simplificación de Trámites……………………………………..16
Incentivos para la Innovación y Emprendimiento…………………………….16
Promoción y Apoyo al Comercio Local…………………………………………16

Conclusiones……………………………………………………………………………17

Recomendaciones……………………………………………………………………..20
Bibliografías……………………………………………………………………………..21
 Introducción

El documento es un informe exhaustivo de parte de estudiantes del Departamento de

Economía de la Universidad de El Salvador. El informe se centra en la situación actual
de las micro, pequeñas y medianas empresas (MiPymes) en El Salvador,
particularmente en el contexto de la pandemia de COVID-19, una crisis global que no
ha dejado piedra sin remover y que afecta todos los aspectos de la vida, incluido el
panorama económico; analizar el impacto de la pandemia en estos negocios y las
medidas implementadas para mejorar su situación económica es el objetivo principal
del informe.

El informe se justifica por el papel significativo que juegan las MiPymes en la economía
salvadoreña, contribuyendo al PIB y generando empleo, y que, a pesar de los desafíos
a los que se enfrentan estas entidades siguen siendo cruciales para la economía.

El enfoque principal del informe es presentar la información sobre la situación actual de

las MiPymes en El Salvador. Es un análisis integral que busca comprender el impacto
de la pandemia en estas empresas y las medidas implementadas para mejorar su
situación económica en 2024, sin embargo, el informe va más allá de la mera exposición
de hechos. Su objetivo es trazar un panorama de la situación económica de las
MiPymes antes de la pandemia de COVID-19, el impacto de la pandemia desde su
inicio en 2020 y las medidas adoptadas por las MiPymes para mejorar su situación
económica postpandemia. Se trata de un análisis integral de la situación de las
MiPymes antes, durante y después de la pandemia de COVID-19. El informe no es solo
una instantánea del presente, sino un viaje que nos lleva a través del pasado y del
presente de las MiPymes en El Salvador.

Además del análisis, el informe también proporciona una perspectiva más amplia al
integrar tendencias y comparaciones del estado de las MiPymes, teniendo como base
la última investigación para las MiPymes partiendo de los resultados de la encuesta
“Dinámica de las Micro y Pequeñas Empresas 2017”, publicado en el año 2018. De esta
investigación es que se logra definir una comparativa luego de la entrada de COVID 19
a El Salvador, la implementación de muchas medidas “anticrisis” tomadas por el
gobierno y el manejo y tratamiento que estas entidades le dieron, y consigo los
resultados que se obtuvieron de tales decisiones.

Este ambiente tan tenso, llevo a muchas empresas catalogadas como MiPymes a tomar
medidas drásticas: despidos temporales de personal o definitivos, cierre parciales o
definitivos, endeudamientos, reducciones drásticas en el ingreso, entre otros golpes
económicos. Todos estos elementos forman parte del informe para explicar la situación
actual de la micro, pequeña y mediana empresa.
 Objetivo general y objetivos específicos

Objetivo general
Determinar la situación actual de la micro, pequeña y mediana empresa de El Salvador.

Objetivos específicos
• Indicar la situación económica de las MiPymes Pre-pandemia COVID 19.
• Definir el impacto que tuvo la pandemia de COVID 19 en la micro, pequeña y
mediana empresa a partir de su inicio en 2020.
• Conocer qué medidas adoptaron las MiPymes para mejorar su situación económico
post pandemia COVID 19.
• Establecer un análisis de la situación de la micro, pequeña y mediana empresa
referente al antes, durante y el después de la pandemia COVID 19.
 Justificación
La micro, pequeña y mediana empresa (MiPymes) a nivel regional Centroamericano
son conocidas como entidades económicas de gran importancia en el PIB de los países
de Centroamérica. Estas entidades son generadoras de empleo, especialmente para
personas con menor nivel de formación académica, ayudando a reducir la tasa de
desempleo y la mejora de la calidad de vida en la población, esto a pesar de las difíciles
situaciones que deben pasar estas entidades al inicio de su creación y crecimiento,
como la dificultad de prestamos y créditos bancarios y leyes reguladoras y de apoyo
para tales actores económicos. Por estos factores las MiPymes no pueden
desarrollarse en la economía de cada país como debería ser, y que, con la llegada de
la emergencia sanitaria producida por el covid-19 en el año 2020 encontrando una base
inestable en la que la mayoria de las MiPymes se habían desarrollado, condujo a
problemas serios a este grupo, que además de afectar su integridad propia como
empresa, dio un duro golpe a los países de toda Centroamérica, que es donde se
encuentra inmerso El Salvador, y que es el punto central del presente informe.

En El Salvador, la situación antes de la llegada del COVID 19 para la micro, pequeña y

mediana empresa (MiPymes) ya era desalentadora, no en tamaño y representación que
tienen en el PIB nacional, sino en la forma de operar y las políticas fiscales y tributarias
que no están diseñadas para favorecer e incentivar a este sector, haciendo a estas
entidades muy susceptibles a cambios en el ambiente económico.

El desarrollo del COVID 19 en El Salvador y el efecto que trajo a las MiPymes es un

tema difícil de abordar y de dimensionar en daños ocasionados a estas entidades
económicas, ya que hasta el momento no existe un informe, reporte o investigación que
englobe la micro, pequeña y mediana empresa en un mismo espacio. Además, tales
informes son escasos y no cumplen en la totalidad de presentar a la sociedad
salvadoreña un documento en que muestre la situación de las MiPymes cercana al
COVID 19, el efecto que tuvo en las MiPymes y las acciones y estrategias tomadas por
estas entidades para sobrellevar la situación económica tan precaria que trajo el COVID
19 desde el año 2020.

Los múltiples despidos, los cierres de las MiPymes más vulnerables, la contracción de
estas y el golpe que le trajo a todo el país forman parte del presente informe. Este busca
brindar información que explique como estaba la situación de la micro, pequeña y
mediana empresa antes, durante y después de la pandemia del COVID 19, y a partir
de tal información, crear un documento que describa tales aspectos para poder definir
la situación de la MiPymes para este año 2024 en El Salvador.
 Condiciones de las MIPYMES previas a la pandemia del COVID-19

Antecedente

Las MiPymes son el motor de cualquier economía; a menudo estas entidades se

identifican como adaptivas al mercado, innovadoras y competitivas a nivel mundial.
Estas son en muchas regiones la principal fuente de empleos y de generación de
desarrollo económico.

Las condiciones en las que operan las MiPymes son particulares con relación al resto
de empresas, ya que poseen rasgos propios en cuanto a sus características
económicas, financieras, tecnológicas y sus condiciones de empleo.

El Salvador, el desarrollo económico es un proceso lento, y en donde tal rubro como las
MiPymes no tuvieron un respaldo de políticas públicas para un buen desarrollo y
perduración en el tiempo. Y es que apenas para el año 2014 fue que se promulgó la
primera Ley de Fomento, Protección y Desarrollo para la Micro y Pequeña Empresa,
una política de respaldo a estas entidades tan importantes y dinamizadoras de la
economía salvadoreña.

Estos actos, luego se volverían todo un proceso de adecuamiento para la micro,

pequeña y mediana empresa salvadoreña que según buscarían un crecimiento de
estas, una sostenibilidad y crecer a una escala más alta de empresa.

Su situación antes de la llegada de la pandemia del COVID 19 será un punto

desatacado de comparación de las MiPymes y el escenario tan diferente en la cual se
deben desarrollar después de tan desastroso acontecimiento sanitario mundial.

Partiendo de los resultados de la encuesta “Dinámica de las Micro y Pequeñas

Empresas 2017” , publicado en el año 2018, se logró observar una caracterización en
la que destaca que las MYPE dinamizan la economía, tomando como referencia el
número de unidades productivas estimadas, el volumen de sus ventas y las
dimensiones de la fuerza laboral ocupada ya que permiten realizar actividades bajo la
modalidad de cuenta propia y patrono, dando lugar a la creación de empleos,
generando encadenamientos productivos y permitiendo que esta producción sea
ofrecida fuera de las fronteras nacionales.

Es de mucha relevancia destacar que las MiPymes son dinamizadoras de

oportunidades de empleo y ocupación, considerando la información de la Encuesta de
Hogares y Propósitos múltiples (EHPM) que estima en dos millones setecientas mil
personas ocupadas, de ese total el 31.34%, tienen ingresos a partir del accionar de una
MYPE previo a la pandemia sanitaria. Sin duda su relevancia es muy significativa dado
su aporte a la contribución de generación de ingresos, empleo, y a activar la economía
interna del país.

En El Salvador, para el año 2017, existían alrededor de 317,795 unidades económicas

de las cuales el 33.92% es clasificado como emprendimientos, mientras que el 60.76%
de las unidades económicas lo constituyen microempresas y solo el 5.32% son
pequeñas empresas.

Es importante hacer notar que datos antes de la llegada del COVID 19, muestran que
las MiPymes siguen especializándose en actividades del sector terciario, ya que por
ejemplo el 51.8% se desempeña en el sector comercio, el 32.26% se desempeñan en
el sector servicios, mientras que en el tercer lugar con el 15.37% se localizan las
empresas dedicadas al sector industria, por lo tanto, el sector maquila, transporte,
construcción y minas y anteras juntos solo ocupan el 0.77%.

Por otro lado, el tiempo de vida de operación, para el año 2017, sin escenario de
emergencia sanitaria siguiente, se estima que las micro y pequeñas empresas, tienen
un 45.83% de existencia de vida entre 1 y 5 años, mientras que en el siguiente
quinquenio entre los 6 y 10 años se registra la existencia del 20.47% empresas MYPE,
10.14% pueden tener una vida entre los 11 y 15 años, y únicamente un 1.09% logra
llegar a más de 60 años de vida empresarial en El Salvador. En términos generales se
muestran que el elemento en común entre las MiPymes es que en los primeros cinco
años más de la mitad de los establecimientos desaparecen, mientras que en los
próximos cinco años nuevamente la mitad de los negocios desaparecen. Muy
posiblemente uno de los factores que genera esta situación obedezca a la falta de
planificación y de análisis que hacen las personas a la hora de emprender o iniciar un
negocio.

Es de destacar que en la medida en que una empresa es más pequeña es más

castigada por las altas tasas de interés de parte de sus acreedores, situación que se va
haciendo menos evidente en la medida en que el tamaño de la empresa es mayor a
fecha de realización de este estudio de 2017 y publicado en el año 2018. (Comisión
Nacional de la Micro y Pequeña Empresa (CONAMYPE), 2018)

Estas referencias, porcentajes e información con relación a la situación de la MiPymes

son base de conocer la realidad de estas entidades económicas antes de la llegada del
COVID 19, y que presentando en resumen tal información, se puede identificar una
serie de factores que han sido efecto del mal desarrollo de las MiPymes en el país,
partiendo de la falta de creación de políticas públicas, falta de otorgamientos de
prestamos bancarias y elevadas tasas de interés. Todo ello juega un ambiente hostil
para la formación de tales entidades.

Definiendo el estado de las MiPymes antes de la llegada de la pandemia COVID 19,

nos dará un panorama de los efectos que se esperan con tales inestables bases de
desarrollo.
2020: La llegada del COVID 19 a El Salvador y el lanzamiento de
medidas económicas anticrisis.

Con la confirmación del primer caso de COVID 19 la noche del 18 de marzo de 2020,
el gobierno anunció un “Plan de respuesta y alivio económico” para aminorar el impacto
que provocará la pandemia. Para el 11 del mismo mes, se inició con la medida de cierre
de fronteras y aeropuertos, afectando el movimiento de mercadería, medida que inicia
un cambio radical en la forma de operar de las empresas, y en específico, en la micro,
pequeñas y medianas empresas.

El plan constó de 30 medidas para atenuar la caída económica que se esperaba. Estas
van desde la suspensión de pagos de servicios, congelamientos de créditos para
personas naturales y empresas, dentro de ellas el sector MiPymes, aplazamiento de
pago de impuesto, entre otras.

Es claro que la implementación de tales medidas cedió a efectos considerados positivos

en comparación a la caída tan brusca de la economía que vivieron otros países, pero
tampoco exceptuaron a El Salvador de contraer su economía.

Con las medidas en vigencia, las empresas cedieron a ellas, iniciando con problemas
dentro de su estructura y estabilidad económica. No fue igual para todas las empresas,
ya quien el mayor golpe lo recibió las MiPymes, ya que el enviar a personal de la tercera
edad, embarazadas y personas con enfermedades crónicas a casa con sueldo y
adecuarse para el cambio al teletrabajo no fue sostenible para muchas de estas
entidades, por lo que muchas cedieron a la crisis cerrando definitivamente.

El perfil económico de las empresas, específicamente del sector MiPymes decayó,

trayendo consigo fuertes efectos en estas entidades que las arrojaría a la desaparición,
a cierres temporal, recortes de personal, contracción de su desarrollo y muchos otros
factores descritos en la siguiente parte.

Efectos que ocasionó la pandemia COVID 19 a las MiPymes

La pandemia provocó serias afectaciones en las empresas salvadoreñas, irrumpiendo

actividades económicas a grandes escalas y afectando principalmente a las micro,
pequeñas y medianas empresas (MIPYMES), mismas que reportaron problemas de
liquidez y capacidad de pago, provocando desigualdades e interrumpiendo los
esfuerzos de reducción de pobreza implementados en el país. El mayor desafío de las
MIPYMES fue mantenerse a flote durante el periodo más fuerte de la pandemia, pero
esta genero fuertes complicaciones, no muy diferentes para cada MiPymes, y que se
especifican a continuación, teniendo en cuenta ambas partes tanto para el empleador
como para el trabajador.
 • Desempleo por cierre de empresas
De acuerdo con datos oficiales del Instituto Salvadoreño del Seguro Social (ISSS), la
disminución en el número de trabajadores activos empezó a partir de marzo, mismo
mes en el que se decretaron los límites a la libre circulación. Así, desde febrero hasta
junio del 2020, un total de 73,538 personas con empleos formales habían dejado de
laborar, estimaciones de la empresa privada indican que solo en 2020, producto del
cierre económico por la pandemia Covid-19, se perdieron más de 85,000 empleos.

Fuente: Organización Internacional del Trabajo. “Base de datos de

estimaciones y proyecciones modeladas de la OIT (ILOEST)”
ILOSTAT. Consultado el 6 de febrero de 2024.

Tomando como comparación los años 2018, 2019, 2020, 2021, 2022 y 2023 podemos
observar un aumento en el 2020, El Salvador Alcanzó el pico más alto de desempleo
debido a la Pandemia, lo cual es comprensible tomando en cuenta que ningún país
estaba preparado para un golpe tan fuerte. Luego de que en el 2020 alcanzará el pico
más Alto 5%, del 2021 al 2023 podemos verificar una mejora emblemática, ya que va
de 4,3% en el 2021 a 3% en el 2023, lo que significa que el desempleo descendió.

Recalcar la perdida de más de 85,000 empleos en el primer año de la pandemia es más

que alarmante, considerando la información de la Encuesta de Hogares y Propósitos
múltiples (EHPM) mencionada anteriormente, que estima en 2017 en dos millones
setecientas mil personas ocupadas, de ellas el 31.34% laborando en una MYPE,
alrededor ochocientas cuarenta y seis mil.

Aunque El Salvador adoptó rápidamente medidas contundentes para contener el brote

y el Gobierno puso en marcha una respuesta fiscal sólida para limitar el impacto de la
pandemia en los hogares y las empresas, la COVID-19 ocasionó un fuerte golpe al
crecimiento, ya que el producto interno bruto (PIB) disminuyó en un -7,9 % en el año
2020, sin embargo en el año 2021, la economía salvadoreña creció un 11,2 %, y el
crecimiento se moderó hasta llegar al 2,6 % en 2022 y 2,7 % en el año 2023.
 2020 2021 2022 2023

Fuente: Elaborado con información del informe

• Cierre de MIPYMES, deuda y reducción de ingresos.

Las MiPymes, que representan una gran parte de la economía salvadoreña,

experimentaron dificultades financieras severas, resultando en numerosos despidos y
cierres. Datos oficiales mencionan lo siguiente:

“8 de cada 10 MYPE cerró su negocio durante la cuarentena, 4 de estas MYPE

son empresas familiares, y casi 5 de ellas están formalizadas”.

“Más del 50% de las MYPES tuvieron que cerrar temporalmente. El otro
porcentaje, permanecía tratando de sobrellevar la pandemia, con diferentes
métodos, solicitando préstamos; se generó una crisis de deuda”.

“De 3,152 MYPE según estadísticas del 3,152 MYPE se cerraron definitivamente,
un 13%”.

“Según estudios por la Cámara de Comercio e Industria de El Salvador

(CAMARASAL), aproximadamente más del 90% de las PYMES reportaron que
sufrieron una caída del 75% de ingresos, generando el despido de muchos
salvadoreños”.

“Un estudio realizado por Microsoft en 2022 encontró que, durante la pandemia,
el 91% de las pequeñas y medianas empresas en El Salvador aceleraron su
proceso de transformación digital”.

El COVID-19 tuvo un impacto devastador en las PYMES de El Salvador, con un alto

número de cierres temporales y permanentes.

Las estadísticas indican que un porcentaje elevado de estas empresas no pudo

sobrevivir a la crisis, perjudicando el empleo y la economía en general de El Salvador.
Las medidas de apoyo y recuperación implementadas por el gobierno y las
organizaciones fueron cruciales para ayudar a las MiPymes a recuperarse y así poder
ajustarse a la postpandemia.

Según reportes del Banco Central de Reserva de El Salvador y otras organizaciones,

se considera que miles de MIPYMES cerraron durante la pandemia; las cifras exactas
pueden variar, pero todas indican fue un impacto severo en nuestro país, refutándolo
en la información anterior.

Es muy considerable el impacto que ocasionó en COVID 19 en un lapso de 2 años con

medidas económicas fuertes para cuidar la integridad física de toda la población, y es
que el principal compromiso desde un inicio del gobierno fue cuidar las vidas de los
ciudadanos y su seguridad alimentaria, que desde un punto de vista humanitario está
excelente. Pero es de recordar que estas mismas medidas llevaron a aprietos a la
empresa privada y a las MiPymes, ya que no existió medidas que ayudaran a abordar
de manera más suave todas las acciones que tendrían que hacer en el momento.

Todos estos aconteceres condujeron a un sector tan dinámico e importante de la

economía salvadoreña, que son las MiPymes, a reducirme considerablemente, y por
ende a ocasionar problemas para todo El Salvador.

Con la estabilización de la enfermedad en el país, se inició un reactivamiento de la

economía, dando sus primeros pasos en el enfoque de ayudar a todas las empresas a
regresar al mercado económico. El más grande en términos de dinero y el más
importante se presenta a continuación:

Financiamiento de apoyo al sector MiPymes

Con un financiamiento de US$600 millones, el más grande aprobado en la historia del

Banco Centroamericano de Integración Económica (BCIE), la entidad multilateral
apoyará a la República de El Salvador en su recuperación económica después de la
crisis ocasionada por la pandemia de COVID-19. El Banco Interamericano de Desarrollo
(BID) aprobó un préstamo para El Salvador de US$100 millones para apoyar el
crecimiento de las micro, pequeñas y medianas empresas (MiPymes).

Los fondos financiarán líneas de crédito del Banco de Desarrollo de la República de El

Salvador (BANDESAL) para instituciones financieras intermediarias, conocidas como
líneas de segundo piso, a fines de promover la expansión del acceso a crédito
productivo de mediano y largo plazo para las MIPYMES salvadoreñas. Los fondos
financiarán líneas de crédito del Banco de Desarrollo de la República de El Salvador
(BANDESAL) para instituciones financieras intermediarias, conocidas como líneas de
segundo piso, a fines de promover la expansión del acceso a crédito productivo de
mediano y largo plazo para las MiPymes salvadoreñas, el cual benefició a más de
21,000 MiPymes, de las cuales 14,755 están dirigidas por mujeres, así como la
retención de más de 100,000 empleos. El préstamo fue aprobado a un plazo de hasta
20 años, incluyendo cinco años de período de gracia y una tasa de interés anual
indicativa de 2.5%.
Los embargos y cierres de empresas fueron una consecuencia de la incapacidad de
muchas MIPYMES para poder cumplir con sus obligaciones financieras, así como el
pago de préstamos, alquileres y salarios. Si bien es cierto, el gobierno implementó
diversas medidas de apoyo, así como líneas de crédito, para brindar la posibilidad de
préstamos, para que fuese utilizado en el pago de deudas, estas no fueron
lamentablemente suficientes para frenar que algunas empresas cayeran en mora y
enfrentarán diversos embargos.

Visto el primer elemento de varias medidas de reactivación, se extiende el presente

informe a describir el siguiente bloque.

Medidas post pandemia que implementaron las MiPymes para el

mejoramiento de su situación económica.
Las empresas en El Salvador tomaron diversas medidas para adaptarse y sobrevivir
durante y después de la pandemia de COVID-19, muchas de ellas logrando éxito y otras
terminarían con el cierre de operaciones. Aquí algunas estrategias clave que adoptaron
las MIPYMES:

• Digitalización y Comercio Electrónico

Adopción de Plataformas Digitales: Muchas empresas comenzaron a utilizar
plataformas de comercio electrónico para vender sus productos y servicios en línea.
Esto incluyó la creación de tiendas en línea, el uso de redes sociales para marketing y
ventas, y la implementación de sistemas de pagos digitales.

Desarrollo de Páginas Web y Apps: Las empresas crearon o mejoraron sus sitios
web y aplicaciones móviles para ofrecer una experiencia de compra en línea fácil y
segura.

Marketplace: Muchas se unieron a plataformas de Marketplace como Amazon, eBay,

y plataformas locales para aumentar su alcance y acceder a una base de clientes más
amplia.

Redes Sociales: Usaron Facebook, Instagram y WhatsApp no solo para marketing sino
también para ventas directas, implementando estrategias de marketing digital como
publicidad pagada, promociones y sorteos.

• Innovación en Productos y Servicios

Diversificación de la Oferta: Las empresas diversificaron sus productos y servicios
para adaptarse a las nuevas necesidades del mercado. Esto incluyó la producción de
artículos de protección personal, como mascarillas y gel antibacterial, y la oferta de
servicios de entrega a domicilio.

Nuevos Productos: Empresas manufactureras comenzaron a producir artículos de alta

demanda como equipos de protección personal y desinfectantes.
Servicios Adaptados: Restaurantes y tiendas minoristas implementaron servicios de
entrega a domicilio y pedidos en línea. Algunas empresas ofrecieron sus productos en
kits para armar en casa.

• Reducción de Costos y Optimización de Recursos

Optimización de Procesos: Muchas empresas revisaron y optimizaron sus procesos
internos para reducir costos y mejorar la eficiencia. Esto incluyó la renegociación de
contratos con proveedores, la reducción de gastos operativos y la implementación de
prácticas de gestión lean.

Revisión de Proveedores: Renegociaron términos con proveedores para obtener

mejores precios y condiciones de pago.

Automatización: Implementaron herramientas de automatización para tareas

repetitivas y administrativas, lo que redujo costos operativos y mejoró la eficiencia.

• Capacitación y Desarrollo de Habilidades

Formación de Personal: Las empresas invirtieron en la capacitación de su personal
para adaptarse a las nuevas tecnologías y métodos de trabajo. Esto incluyó
entrenamientos en marketing digital, manejo de plataformas de e-commerce, y uso de
herramientas de trabajo remoto.

Certificaciones: Empleados obtuvieron certificaciones en áreas clave para mejorar la

competitividad y adaptarse a nuevas demandas del mercado.

• Implementación de Medidas de Seguridad Sanitaria

Protocolos de Bioseguridad: Para asegurar la salud de sus empleados y clientes, las
empresas implementaron estrictos protocolos de bioseguridad. Esto incluyó el uso de
equipo de protección personal, la instalación de estaciones de desinfección y la
modificación de espacios de trabajo para mantener el distanciamiento social.

Equipamiento: Proveer equipo de protección personal como mascarillas, guantes y

protectores faciales.

Higiene: Instalar estaciones de desinfección de manos y aumentar la frecuencia de

limpieza de instalaciones.

Distanciamiento: Rediseñar espacios de trabajo para asegurar el distanciamiento

social, incluyendo la reorganización de oficinas y áreas de producción.

• Flexibilidad y Trabajo Remoto

Teletrabajo: Muchas empresas adoptaron el trabajo remoto para mantener la
operatividad durante el confinamiento. Implementaron herramientas de colaboración y
comunicación en línea para facilitar el trabajo desde casa.
Herramientas de Comunicación: Implementación de plataformas como Zoom,
Microsoft Teams, y Slack para mantener la comunicación y coordinación entre equipos.

• Acceso a Financiamiento
Solicitud de Créditos y Subsidios: Las empresas aprovecharon los programas de
financiamiento y subsidios ofrecidos por el gobierno y otras instituciones para obtener
el capital necesario para mantener sus operaciones y realizar inversiones estratégicas.

Programas de Gobierno: Aprovecharon programas como el Fondo de Recuperación

Económica (FIRE) y otras iniciativas gubernamentales para obtener financiamiento con
tasas de interés bajas.

Organismos Internacionales: Algunas buscaron apoyo de organismos

internacionales y ONG que ofrecían fondos y asesoría para la recuperación económica.

• Reestructuración y Reinvención del Negocio

Reestructuración Operativa: Algunas empresas realizaron reestructuraciones
operativas para adaptarse a la nueva realidad económica, lo que incluyó la reubicación
de recursos, cambios en la cadena de suministro y ajustes en los modelos de negocio.

Redefinición de Modelos de Negocio: Algunas empresas cambiaron su modelo de

negocio, pasando de ventas físicas a ventas en línea, o adaptando sus productos y
servicios a las nuevas necesidades del mercado.

Reubicación de Recursos: Re-alocación de personal y recursos financieros a áreas

clave para maximizar el impacto y la eficiencia.

• Colaboración y Redes de Apoyo

Alianzas Estratégicas: Las empresas buscaron formar alianzas y redes de
colaboración con otras empresas, organizaciones y asociaciones para compartir
recursos, conocimientos y acceder a nuevos mercados.

Cooperativas y Asociaciones: Formación de cooperativas o asociaciones

empresariales para compartir recursos, reducir costos y aumentar el poder de
negociación.

• Enfoque en el Cliente
Mejora del Servicio al Cliente: Se implementaron estrategias para mejorar la
experiencia del cliente, incluyendo el soporte en línea, la personalización de servicios y
la mejora en la atención post-venta.

Atención Personalizada: Uso de CRM (Customer Relationship Management) para

personalizar la interacción con los clientes y mejorar la fidelización.
Soporte 24/7: Implementación de servicios de atención al cliente disponibles las 24
horas a través de chatbots, redes sociales y líneas de atención telefónica.

Medidas que el gobierno de El Salvador implementó para el

mejoramiento del sector MiPymes
• Apoyo Financiero y Créditos Blandos
Fondos de Emergencia y Líneas de Crédito: El gobierno de El Salvador, a través de
instituciones como el Banco de Desarrollo de El Salvador (BANDESAL), implementó
fondos especiales y líneas de crédito con condiciones favorables para las Mipymes
afectadas por la pandemia.

Programa de Financiamiento para Mipymes: BANDESAL lanzó programas de

financiamiento con tasas de interés bajas y plazos flexibles para ayudar a las empresas
a reactivar sus operaciones.

• Asesoramiento y Capacitación
Capacitaciones y Asesorías: El Ministerio de Economía (MINEC) y la Comisión
Nacional de la Micro y Pequeña Empresa (CONAMYPE) ofrecieron programas de
capacitación en temas como digitalización, marketing digital, manejo financiero, y
adaptación a nuevas normativas sanitarias.

Plataformas de Asistencia Técnica: Se crearon y fortalecieron plataformas para

brindar asesoramiento técnico y acompañamiento a las Mipymes, ayudándolas a
mejorar sus procesos y aumentar su competitividad.

• Digitalización y Comercio Electrónico

Impulso a la Digitalización: Programas específicos para promover la digitalización de
las Mipymes fueron implementados, incluyendo el apoyo para la creación de tiendas en
línea y el uso de plataformas digitales para ventas.

Ferias Virtuales y Marketplace: Se organizaron ferias virtuales y se promovió la

participación de las Mipymes en Marketplace digitales para aumentar su alcance y
ventas, tanto a nivel nacional como internacional.

• Alivio Fiscal y Simplificación de Trámites

Exoneraciones y Reducciones Fiscales: Durante la pandemia, se implementaron
medidas fiscales como la exoneración temporal de ciertos impuestos y la reducción de
tasas para aliviar la carga financiera de las Mipymes.

Simplificación de Trámites Administrativos: El MINEC y otras instituciones estatales

trabajaron en simplificar los trámites administrativos y reducir las barreras burocráticas
para facilitar la creación y operación de Mipymes.
 • Incentivos para la Innovación y Emprendimiento
Subvenciones y Concursos de Innovación: Se lanzaron concursos y programas de
subvenciones para incentivar la innovación y el desarrollo de nuevos productos y
servicios por parte de las Mipymes.

Apoyo al Emprendimiento: Se fortalecieron las iniciativas de apoyo al

emprendimiento, proporcionando fondos y recursos para startups y nuevos negocios,
especialmente aquellos con modelos innovadores y sostenibles.

• Promoción y Apoyo al Comercio Local

Campañas de Compra Local: Se llevaron a cabo campañas para promover el
consumo de productos y servicios locales, incentivando a los salvadoreños a apoyar a
las Mipymes de su comunidad.

Ferias y Eventos Locales: Se organizaron ferias y eventos locales para dar visibilidad
a las Mipymes y facilitarles un espacio para comercializar sus productos directamente
al consumidor.

Estas medidas, implementadas a través de una combinación de esfuerzos

gubernamentales y la colaboración con organizaciones privadas y ONG, han sido
cruciales para la recuperación y fortalecimiento de las Mipymes en El Salvador,
ayudando a mitigar el impacto económico de la pandemia y a fomentar un entorno más
resiliente y dinámico para estos negocios.

Estas estrategias no solo ayudaron a las MIPYMES en El Salvador a enfrentar los

desafíos inmediatos de la pandemia, sino que también les permitieron sentar bases
sólidas para una recuperación sostenida y un crecimiento a largo plazo en un entorno
económico post pandemia.
Después de la pandemia, varias medidas implementadas en El Salvador han ayudado
a mejorar la situación económica de las micro, pequeñas y medianas empresas
(MiPymes). Estas medidas han sido ejecutadas tanto por el gobierno central como por
diferentes ministerios y entidades privada.

Conclusiones
Este informe ha permitido presentar un marco teórico en torno a la situación actual de
micro, pequeña y mediana empresa (MiPymes) luego de la pandemia COVID 19, dentro
del cual se definieron las bases de desarrollo con las que las MiPymes que enfrentarían
a la pandemia, su situación económica a partir de las medidas económicas para
contener la enfermedad desarrolladas por el Estado, su impacto por tales decisiones, y
las medidas que llevaron a cabo estas entidades económicas para mantenerse en el
mercado. Todo un escenario difícil para las MiPymes da inicio en el año 2020, una
realidad, nuevas formas de operar y administrar para seguir siendo competentes en la
economía salvadoreña; el estudio bibliográfico del presente da las conclusiones
siguientes:

Conclusión 1: Las MiPymes en El Salvador experimentaron una caída

significativa en sus ingresos durante la pandemia de COVID-19.

La pandemia de COVID-19 trajo consigo una serie de restricciones y medidas sanitarias

que afectaron profundamente la economía mundial, y El Salvador no fue la excepción.
Las Micro, Pequeñas y Medianas Empresas (MiPymes) en el país enfrentaron desafíos
sin precedentes que resultaron en una caída drástica de sus ingresos. Factores como
el cierre obligatorio de negocios, la disminución de la demanda de productos y servicios,
y las interrupciones en las cadenas de suministro globales contribuyeron a esta caída.

Las encuestas y estudios realizados durante la pandemia revelaron que un alto

porcentaje de MiPymes reportaron una reducción de ingresos superior al 50%, con
algunos sectores como el turismo, la hospitalidad y el comercio minorista siendo los
más afectados. La falta de reservas financieras y la limitada capacidad para adaptarse
rápidamente a nuevas formas de operación, como el comercio electrónico, exacerbó la
situación para muchas de estas empresas.

Conclusión 2: La pandemia de COVID-19 aceleró el proceso de digitalización y

adopción del comercio electrónico entre las MiPymes en El Salvador.

La necesidad de mantener operaciones y continuar generando ingresos durante los

períodos de confinamiento impulsó a muchas MiPymes en El Salvador a adoptar
tecnologías digitales y plataformas de comercio electrónico a un ritmo sin precedentes.
Antes de la pandemia, muchas de estas empresas se resistían a digitalizarse debido a
la falta de conocimientos, recursos y percepción de la necesidad. Sin embargo, la crisis
sanitaria demostró que la digitalización no era una opción, sino una necesidad para la
supervivencia.

La adopción de herramientas digitales, desde la creación de sitios web y perfiles en

redes sociales hasta la implementación de plataformas de pago en línea y servicios de
entrega a domicilio, se convirtió en una estrategia clave. Este cambio no solo permitió
a las MiPymes mantener una conexión con sus clientes existentes, sino también llegar
a nuevos mercados. Las estadísticas mostraron un aumento significativo en el uso de
soluciones digitales entre las MiPymes, lo que indica una transformación duradera en
sus modelos de negocio.

Conclusión 3: Las medidas de apoyo económico del gobierno salvadoreño

ayudaron a reducir la tasa de cierre de MiPymes durante la pandemia.

Ante la severa crisis económica provocada por la pandemia, el gobierno salvadoreño

implementó una serie de medidas de apoyo destinadas a mitigar el impacto en las
MiPymes. Estas medidas incluyeron la suspensión temporal de pagos de servicios
públicos, moratorias en los pagos de créditos, líneas de financiamiento específicas para
las pequeñas empresas, y subsidios directos.

Las evaluaciones de estas políticas revelaron que, aunque no pudieron evitar todos los
cierres de negocios, sí tuvieron un efecto significativo en la reducción de la tasa de
cierres. Las MiPymes que accedieron a estos apoyos lograron mantener sus
operaciones durante los momentos más críticos de la pandemia. Sin embargo, también
se identificaron áreas de mejora en la implementación y alcance de estos programas,
sugiriendo que una mayor cobertura y accesibilidad podrían haber tenido un impacto
aún más positivo.

Conclusión 4: La pandemia de COVID-19 provocó una reconfiguración del

mercado laboral en El Salvador, afectando principalmente a las MiPymes.

La crisis sanitaria no solo afectó a las empresas en términos de ingresos, sino que
también tuvo un profundo impacto en el mercado laboral. Muchas MiPymes se vieron
obligadas a reducir su fuerza laboral debido a la disminución de la demanda y a las
restricciones operativas. El desempleo y el subempleo aumentaron, afectando
especialmente a los trabajadores de sectores más vulnerables y menos adaptables a
las condiciones de la pandemia.

La reconfiguración del mercado laboral incluyó un aumento en el trabajo remoto y la

digitalización de ciertas funciones, lo que benefició a las empresas y trabajadores que
pudieron adaptarse a estos cambios. Sin embargo, para muchos empleados de
MiPymes en sectores tradicionales, la transición fue más difícil, resultando en una
pérdida significativa de empleos. Esto puso de relieve la necesidad de programas de
capacitación y reentrenamiento laboral para ayudar a los trabajadores a adaptarse a un
mercado laboral en rápida evolución.

Conclusión 5: Las MiPymes en sectores más tecnológicamente avanzados o

adaptativos tuvieron una mejor resiliencia frente a la pandemia.

Las MiPymes que ya tenían una base tecnológica sólida o que pudieron adaptarse
rápidamente a las nuevas circunstancias mostraron una mayor resiliencia durante la
pandemia. Empresas en sectores como tecnología de la información, servicios en línea,
y comercio electrónico pudieron no solo mantener sus operaciones, sino también crecer
debido a la mayor demanda de sus servicios.

Estas empresas aprovecharon la crisis para innovar y expandir sus ofertas, adoptando
rápidamente nuevas tecnologías y modelos de negocio. La capacidad de pivotar hacia
el comercio electrónico, implementar herramientas de gestión remota y ofrecer servicios
digitales fue crucial para su éxito. En contraste, las MiPymes en sectores menos
adaptables, como el comercio minorista tradicional y la manufactura, enfrentaron
mayores dificultades para ajustarse a las nuevas condiciones del mercado.
Conclusión 6: La falta de acceso a financiamiento fue uno de los mayores
desafíos para la supervivencia de las MiPymes durante la pandemia.

Uno de los problemas más críticos enfrentados por las MiPymes durante la pandemia
fue la dificultad para acceder a financiamiento. A pesar de las medidas de apoyo del
gobierno y las líneas de crédito específicas, muchas empresas pequeñas y medianas
encontraron barreras significativas para obtener los fondos necesarios para mantener
sus operaciones. Estas barreras incluían requisitos estrictos, procesos burocráticos y
una limitada disponibilidad de recursos.

El acceso insuficiente a financiamiento impidió que muchas MiPymes pudieran cubrir

costos operativos básicos, invertir en la adaptación de sus negocios a nuevas
realidades y sostener a sus empleados. Esto subraya la necesidad de desarrollar
mecanismos financieros más inclusivos y accesibles para apoyar a las MiPymes en
tiempos de crisis y más allá.

El impacto que vivió las MiPymes en todo el desarrollo de la pandemia de COVID 19

sin duda fue un acto con un duro golpe que acabó en reducir el numero de empresas
en todo El Salvador, aumentando el desempleo y el nivel de vida. La esperanza en que
estas entidades económicas puedan recuperarse de esta emergencia sanitaria es una
realidad; según análisis sobre este informe se espera que las MiPymes vuelvan
paulatinamente al nivel y posicionamiento que tenían antes, y se espera que ahora
incluyendo las herramientas tecnológicas, ser mas productivas y puedan tener un
mayor desarrollo y mas surgimiento de nuevas micros, pequeñas y medianas
empresas. Para este año 2024, este factor y muchos otros determinaran el rumbo que
llevaran las MiPymes en El Salvador.

Recomendaciones
Basándonos en el análisis detallado de la situación de las micro, pequeñas y medianas
empresas (MiPymes) en El Salvador durante y después de la pandemia de COVID-19,
se pueden hacer las siguientes recomendaciones:

1. Fortalecer los Programas de Alfabetización Digital: Dado el papel

significativo de la digitalización en ayudar a las MiPymes a sobrevivir a la
pandemia, se recomienda fortalecer los programas de alfabetización digital. Esto
puede ayudar a más empresas a utilizar eficazmente las herramientas y
plataformas digitales para sus operaciones.

2. Ampliar el Acceso a la Financiación: Como la falta de acceso a la financiación

fue un desafío importante para las MiPymes durante la pandemia, se deben
hacer esfuerzos para ampliar el acceso a la financiación. Esto podría implicar la
creación de mecanismos financieros más inclusivos o la simplificación del
proceso para obtener fondos.
3. Mejorar el Apoyo del Gobierno: El gobierno debe continuar brindando apoyo a
las MiPymes, como a través de ayuda financiera, alivio fiscal y procedimientos
 administrativos simplificados. La efectividad de estas medidas debe ser
evaluada y ajustada regularmente según sea necesario.

4. Mejorar la Investigación de Mercado: Se debe alentar a las MiPymes a realizar

investigaciones de mercado regulares para entender los cambios en los
comportamientos de los consumidores y las tendencias del mercado. Esto puede
ayudarles a ajustar sus estrategias de negocio en consecuencia.

5. Invertir en Formación de Habilidades: Invertir en formación de habilidades

para las MiPymes, particularmente en áreas como marketing digital, gestión
financiera y gestión de crisis. Esto puede ayudarles a navegar mejor los desafíos
futuros.

6. Promover el Consumo Local: Continuar promoviendo el consumo local para

apoyar a las MiPymes. Esto puede hacerse a través de campañas, eventos e
iniciativas que resalten la importancia de apoyar a las empresas locales.

7. Implementar Arreglos de Trabajo Flexibles: Animar a las MiPymes a

implementar arreglos de trabajo flexibles, como el trabajo remoto. Esto puede
ayudarles a mantener las operaciones durante las crisis y también mejorar el
bienestar de los empleados.

8. Establecer un Plan de Gestión de Crisis: Animar a las MiPymes a establecer

un plan de gestión de crisis. Esto puede ayudarles a responder de manera más
efectiva a las crisis futuras y asegurar la continuidad del negocio.

Las anteriores recomendaciones responden al análisis que se le ha dado a toda la

información presente, además de integrar planes y arreglos que pueden llevarse a cabo
como parte de los buenos resultados que han sido obtenidos, por lo que se instala una
base sólida para seguir con las medidas adoptadas para el mejoramiento de las
MiPymes al igual que la integración de nuevas medidas a implementar como parte de
este apartado.
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