Clasificacion de Los Suelos

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CLASIFICACION DE LOS SUELOS.

Los suelos de una manera muy general y detallada al mismo tiempo, se pueden clasificar de
la siguiente manera:

Geológico
Este es uno de los criterios más genéricos y versa sobre la distinción de los suelos como un
ente o bien organismo propio, de modo tal que su estudio se realiza de forma integral
aprehendiendo su origen, composición, formación y degradación.

Químico
Esta versa sobre la composición de los suelos, es decir, por el cumulo de partículas que el
mismo dispone, siendo el objeto de estudio el nivel de saturación que reside en los mismos,
el cual determina los procesos de degradación.
Climático
Esto se establece conforme a la relación que puede haber entre el suelo y el clima, es decir,
evalúa los efectos del clima sobre el mismo, en sí la distinción se produce en base al
proceso que desarrolla el suelo respecto aquel, si este puede o no evolucionar con total
independencia de la temperatura.

Genética
Su nombre refiere al génesis de las partículas que conforman el suelo, en efecto, esta
distingue a los suelos por su origen y proceso de formación; siendo una de las
clasificaciones que distingue entre los minerales que hacen parte del mismo.

Capacidad de uso

onsidera una de las clasificaciones más ambiguas, pues deviene de criterios industriales,
que permiten determinar si el suelo puede o no ser aprovechable.

Ingenieril
Optamos por incluirla como una subclasificación de la capacidad de uso, ya que la misma
deviene del evaluó de sus granos y de si los mismos sirven o no para la construcción.

Numérica
Para muchos más que una clasificación es un método estadístico empleado por los geólogos
para dividir los suelos, conforme a sus características más externas, como sus minerales u
organismos, sin inferir su composición geológica.

Bases Morfometricas
Esta alude al estudio y la distinción de los suelos con arreglo a la forma de las partículas
que lo componen. En efecto, su estudio se realiza por medio de una muestra que se toma
del suelo y se somete a la observación permitiendo evidenciar así su forma.
Ya hablando dentro de la clasificación de suelos en el área de la ingeniería civil, se puede
decir que los suelos se dividen en:

Suelos gruesos. Se dividen en gravas y arena, y se separan con

• Suelos finos. El sistema unificado considera los suelos finos divididos entre grupos: limos
inorgánicos (M), arcillas inorgánicas (C) y limos y arcillas orgánicas (0). Cada uno de estos
suelos se subdivide a su vez según su límite líquido, en dos grupos cuya frontera es Ll =
50%. Si el límite líquido del suelo es menor de 50 se añade al símbolo general la letra L
(low compresibility). Si es mayor de 50 se añade la letra H (hight compresibility).
Obteniéndose de este modo los siguientes tipos de suelos:

ML: Limos Inorgánicos de baja compresibilidad.


OL: Limos y arcillas orgánicas.
CL: Arcillas inorgánicas de baja compresibilidad.
CH. Arcillas inorgánicas de alta compresibilidad.
MH: Limos inorgánicos de alta compresibilidad.
OH: arcillas y limos orgánicas de alta compresibilidad.

• Suelos orgánicos. Constituidos fundamentalmente por materia orgánica. Son inservibles


como terreno para cimentación.
NIVEL FREATICO.

El nivel freático es la superficie o el límite superior de la capa de agua subterránea.


El nivel freático es un elemento dinámico, influenciado por las condiciones climáticas y
estructurales del terreno. Su formación se nutre del agua meteórica infiltrada en las
litologías y acumulada en el subsuelo, o aquella que asciende por capilaridad durante la
deshidratación de minerales ricos en agua, o impulsada por procesos geológicos durante
surgencias hidrotermales, eventos magmáticos, etc.

Hay diversos factores que pueden afectar al nivel freático de un terreno, algunos de ellos
son:
 Niveles de precipitación: siendo una de las fuentes principales de alimentación, la
cantidad de precipitaciones contribuye a incrementar el nivel freático del terreno,
entrando en juego el clima de la zona. En ambientes desérticos, las precipitaciones
son muy escasas, por lo que el nivel freático del terreno se encuentra a
profundidades considerables. Por otra parte, el ritmo de la precipitación puede
saturar rápidamente la capacidad de absorción del terreno. Esto ocurre durante las
lluvias torrenciales, donde el terreno no puede recoger el agua con la suficiente
velocidad, por lo que se forman riadas y deslizamientos. Además, los cursos de agua
superficial, ya sean o no permanentes, constituyen importantes fuentes de recarga
para los acuíferos.

 Perfil del terreno: cuando la superficie corresponde a relieves escarpados o muy


inclinados, el agua meteórica resbala antes de infiltrarse. En sentido inverso, los
terrenos llanos poseen, generalmente, mayores cantidades de agua infiltrada.

 Litología: aquí entra en juego tanto permeabilidad como la abundancia de fracturas


que posean la roca. Los terrenos más permeables y fracturados permiten una entrada
de agua más libre, incrementando el nivel freático.

 Acción antrópica: eventos, como la construcción de pozos, influyen en mayor o


menor medida en la altura del nivel freático y en la evolución del acuífero. En
general, los efectos de la actividad humana suelen provocar cambio significativos en
el nivel freático en un sistema de renovación lenta, de ahí la importancia de
controlar las acciones realizadas.

 Porosidad: Aunque el agua infiltrada desde la superficie no pueda incluirse si la


permeabilidad del terreno es baja, otros métodos de producción de agua, como la
deshidratación de ciertos tipos de minerales, pueden producir agua suficiente para
saturar los poros y hacer que suba el nivel freático. El proceso contrario, provocaría
un descenso del nivel freático. Aunque un material sea poroso no tiene porque ser
un buen acuífero, sino no constituirse como una capa impermeable (ej: arcillas).

 Vegetación: la cobertura vegetal impide que se formen torrentes de agua y permite


que ascienda la tasa de infiltración, aumentando el nivel freático.

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