24 La Septima Trompeta Cap 11
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Estudio Bíblico
Apocalipsis 10:7 sino que en los días de la voz del séptimo ángel,
cuando él comience a tocar la trompeta, el misterio de Dios se
consumará, como él lo anunció a sus siervos los profetas.
Este misterio que tiene que ver con la consumación del plan de Dios, todo
el plan redentor de los creyentes y el castigo de los rebeldes que lo
rechazaron, lo cual tiene que ver con los juicios de las siete copas que
representan el derramamiento final de la ira de Dios los cuales están
incluidos en la séptima trompeta.
Estas siete plagas mencionadas aquí son las siete copas mencionadas en
el capítulo 16
Apocalipsis 16:1 Oí una gran voz que decía desde el templo a los siete
ángeles: Id y derramad sobre la tierra las siete copas de la ira de Dios.
Es evidente que las copas de ira son parte de la séptima trompeta para
consumar la ira de Dios.
causa de los otros toques de trompeta que están para sonar los tres
ángeles!
* “Venga tu reino”
De alguna manera el toque de la séptima trompeta señala la respuesta de
Dios a la oración; “Venga tu reino. Hágase tu voluntad, como en el cielo,
así también en la tierra” (Mt. 6:10)
Una frase que resalta aquí es “los reinos de este mundo”, lo cual revela la
verdad esencial de que todos los diversos grupos del mundo, sean
nacionales, políticos, sociales, culturales, lingüísticos o religiosos, todos
son en realidad un solo reino bajo un rey. A ese rey se le conoce en las
escrituras por muchos nombres y títulos, entre ellos el de acusador (Ap.
12:10), el adversario (1 P. 5:8), Beelzebú (Mt. 12:24), Belial (2 Co.
6:15), el dragón (Ap. 12:3, 7, 9), el maligno (Ef. 6:16), el dios de este
siglo (2 Co. 4:4), el príncipe de la potestad del aire (Ef. 2:2), el león
rugiente (1 P. 5:8), el príncipe de los demonios (Mr. 3:22), el príncipe de
este mundo (Jn. 12:31), la serpiente antigua (Ap. 12:9; 20:2), el
tentador (1 Ts. 3:5), y, más comúnmente, el diablo (Mt. 4:1) y Satanás
(1 Ti. 5:15). Aunque Dios dispersó ese reino en la torre de Babel (Gn.
11:1-9), Satanás aún gobierna sobre las piezas del reino que una vez
estuvo unido. Aunque Dios ordena los gobiernos humanos para el
bienestar del hombre (Ro. 13:1), esos mismos gobiernos rechazan
someterse a Él o reconocer su soberanía (cp. Hch. 4:26). Son
esencialmente parte del reino de Satanás.
Daniel 2:44 Y en los días de estos reyes el Dios del cielo levantará un
reino que no será jamás destruido, ni será el reino dejado a otro pueblo;
desmenuzará y consumirá a todos estos reinos, pero él permanecerá para
siempre, 45 de la manera que viste que del monte fue cortada una piedra,
no con mano, la cual desmenuzó el hierro, el bronce, el barro, la plata y el
oro. El gran Dios ha mostrado al rey lo que ha de acontecer en lo por
venir; y el sueño es verdadero, y fiel su interpretación.
Zacarías 14:9 Y Jehová será rey sobre toda la tierra. En aquel día Jehová
será uno, y uno su nombre.
Todos los seres vivientes que aman a al Señor en el cielo y en la tierra ven
cumplido el constante clamor “Oh Señor; venga tu reino”. Y Dios será
alabado por su Omnipotencia, por su eternidad (él no tendrá fin) y por su
soberanía.
FURIA ENEMIGA
Mientras que el sonido de la séptima trompeta despierta gozo en los que
aman al Señor, también despierta furia en los que lo aborrecen; 18 Y se
airaron las naciones,
En la visión de la séptima trompeta Juan ve que las naciones impenitentes
se airaron ante la perspectiva de que el reino de Cristo se establezca en la
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tierra. Ellos al final reunirán su ejército para pelear contra Dios (16:14;
20:8-9).
Mostrarán su resentimiento colérico y hostilidad hacia el cielo, se
moverán a la gran batalla de Armagedón, a más de que hasta aquí ya han
probado los juicios anteriores de los sellos y las trompetas, de todas
maneras, como una obstinada mosca que se golpea contra una pared de
mármol pensando que puede derribarla, estos no querrán arrepentirse y
endurecerán su corazón, como faraón que mantuvo su corazón endurecido
hasta el punto de su propia destrucción.
No habrá salvación para ellos en aquel día, su gran esfuerzo para evitar
que el reino de Dios sea establecido en la tierra fracasara y serán
totalmente destruidos.
Los que piensan que Dios es solo amor y nunca derramará su ira tendrán
que arrancar muchos pasajes de la biblia… Dios juzgará un día a todos los
incrédulos
Isaías 26:20 Anda, pueblo mío, entra en tus aposentos, cierra tras ti tus
puertas; escóndete un poquito, por un momento, en tanto que pasa la
indignación. 21 Porque he aquí que Jehová sale de su lugar para castigar
al morador de la tierra por su maldad contra él; y la tierra descubrirá la
sangre derramada sobre ella, y no encubrirá ya más a sus muertos.
1Corintios 3:8 Y el que planta y el que riega son una misma cosa; aunque
cada uno recibirá su recompensa conforme a su labor.
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“a los que temen su nombre”; esto tiene que ver con reverencia, respeto,
honor, se dice que los escribas piadosos cuando escribían copias de las
sagradas escrituras, cada vez que llegaban al nombre de Dios (Yawe) que
era extremadamente sagrado para ellos, ellos dejaban de escribir, se
levantaban de su silla, oraban, se iban a lavar o bañar, lavaban el pincel, y
luego seguían escribiendo, y si encontraban varias veces ese nombre en el
texto, repetían esta acción de lavamiento una y otra vez. Que diferente
sería el cristianismo si los creyentes temerían y honrarían el nombre del
Señor de esa manera; “Padre, santificado sea tu nombre”.
La frase “tu siervo los profetas”, abarca a todos los que han proclamado la
verdad de Dios a lo largo de la historia de la redención, desde Moisés
hasta los dos testigos de Apocalipsis.
Otro grupo a ser galardonados son “los santos”, que se designan como
“los que temen su nombre”. Santos son los redimidos de la biblia tanto en
el A.T. como en el N.T., desde los pequeños hasta los grandes, o sea, todos
recibirán su recompensa
CONCLUSIÓN
El mensaje de la séptima trompeta es que Jesús el soberano Rey de reyes
y Señor de señores, un día recuperará el control de la tierra del que la
usurpó, estos son satanás y de los insignificantes gobernadores de la
tierra. La historia futura (si vale la expresión) se mueve hacia su
culminación en el reinado terrenal de Cristo. Cuando Él venga traerá
bendición de pacto a los redimidos, pero juicio y condenación eterna a
quinees lo rechazan.