El silencio

de la noche
PRIMERA CAÍDA

Fausto Leyva / Cadosbra

Fausto Leyva (Mexico, DF) Estudiante de la licenciatura en Creación
Literaria de la UACM, seudo-escritor nocturno, de corazón resignado
a despedirse con frecuencia, siempre acompañado de Cadosbra
(anacrónico esqueleto que todo lo complica). Cuenta con algunos
poemas publicados en el Taller de Creación Literaria “EN EL BORDE,
líneas y versos para incitar al vuelo”. No se arrepiente de nada, ha
soportado la vida y sus mutilaciones.
 ÍNDICE

CARNE REFLEXIVA
SIEMPRE TERMINO QUEBRANDO ALGO……………………………………………….. 7
ESCOMBROS DE UN AMOR SUICIDA…………………………………………………….. 8
REFLEJO……………………………………………………………………………………………….. 9
ES EN SERIO…………………………………………………………………………………………. 10
EN EL SILENCIO…………………………………………………………………………………….. 12
ALUCINACIONES DEL SILENCIO
HASTA QUE EL SOPOR NOS ASFIXIE……………………………………………………… 15
TEMPLO DE LOS SINSENTIDOS……………………………………………………………… 16
MELODÍA EN MI PECHO……………………………………………………………………….. 17
NO TE VAYAS……………………………………………………………………………………….. 18
MUJER FUEGO……………………………………………………………………………………… 20
TRAGOS DE VÁLIUM
ESTOY EN PELIGRO………………………………………………………………………………. 25
DE ESTA SUERTE…………………………………………………………………………………… 26
RECUERDOS DE RABIOSO LICOR…………………………………………………………… 27
EL ALCOHOL DE TUS BESOS………………………………………………………………….. 28
ETÍLICA NOSTALGIA……………………………………………………………………………… 30
SALIDA AL INFIERNO
OTRAS SOLEDADES………………………………………………………………………………. 33
DESDE LA ORILLA DEL PROFUNDO MAR………………………………………………. 34
ANTES DE PARTIR…………………………………………………………………………………. 36
MORIR UNA VEZ MÁS………………………………………………………………………….. 37
 CARNE
REFLEXIVA
 F a u s t o L e y v a / C a d o s b r a

SIEMPRE TERMINO QUEBRANDO ALGO

(CADOSBRA)

Siempre termino quebrando algo

botellas
sillas
cigarros
un brazo

Soy un pasado fracturado

una aglomeración de heridas
que arruinan el trago y la voz

Soy penumbra de un bramido destinado al silencio

de “corazón resignado a despedirse con frecuencia”

Todo está hecho para quebrarse

no hay otra alternativa

Se rompen
el hocico
las ganas
y el tiempo

Siempre termino quebrando algo

sobre todo
el corazón y las noches.

7
E L S I L E N C I O D E L A N O C H E

ESCOMBROS DE UN AMOR SUICIDA

(CADOSBRA)

No puedo dormir,
viejas heridas se aferran a mi desánimo

El frío entristece el silencio,

insomne una vez más amanece
y el sol lastima mi carne que ya nadie extraña,
que se quiebra de indolencias al levantarme,
siempre derrotado y vacío
con la muerte que ocupa mi lugar
en una realidad decadente

Contemplo los escombros de un amor suicida

y las mismas penas en el fondo de cada botella

No puedo huir,
me siento débil como el silencio
cuando intento olvidar el cuerpo
donde se quebró mi sombra.

8
F a u s t o L e y v a / C a d o s b r a

REFLEJO
Angustiado
quebraste el reflejo en mil gritos de soledad,
derramando la piel cristalizada
en vertientes de pánico y repugnancia.

Con desesperadas manos te arrancas los ojos,

aletargando la caída de una certeza impostora.

Los espejos no mienten,

somos carne abierta
con líneas de sangre que hablan de olvido.

Inhabitables secretos.

Aseguras que eres tú

pero no te reconoces,
ves la imagen de la puta de anoche,
la sangre coagulada y amoratada en la boca,
la madrugada en los ojos,
sin dormir,
sin soñar,
sin nada.

Encontrarás lo mismo
en mí.

No nos queda de otra,

no podrás perderme.
Te hallarás a cada instante
y me verás mil veces.

Hemos de soñar
y morir sin remedio.

9
E L S I L E N C I O D E L A N O C H E

ES EN SERIO
(CADOSBRA)

Aquel que hace una bestia de sí mismo

se libra del dolor de ser humano.
Samuel Johnson

has tenido esa sensación de caer

en medio de la nada sin que nada te detenga
y estás seguro de que no estás flotando
y caes
y caes
y caes
sin saber en qué momento te vas a partir la madre

es en serio
se llama Miedo

odio tener que decirte esto

pero me estoy asustando
toda esta gente de rostros carcomidos
y el pinche oso cogiéndose a las modelos
me causan terror

y este mundo
que no deja de dar vueltas
es un torbellino salvaje
que todo quiebra
una ruleta de malas intenciones
donde la suerte siempre te va a joder
es un carrusel desbocado
que jamás se detiene
con una caballería desangre furiosa
y putas que ya no saben llorar
pero que te cercenan la garganta
en la primera oportunidad

10
F a u s t o L e y v a / C a d o s b r a

escúchame cabrón
este es mi último trago
y me está entrando El Miedo

ayúdame a salir de este lugar

necesito salir de este podrido mundo
antes de que mate a alguien
ya tengo empuñada la navaja en mi saco
e incluso tú estás en peligro
mi nena y el chango están en peligro
y es que soy extremo para vivir
y raro para morir

es en serio
ayúdame
tengo Miedo

11
E L S I L E N C I O D E L A N O C H E

EN EL SILENCIO
A veces pretendo encerrarme en el silencio
para no reventar en paredes el sentimiento infectado,
librándome del hastío de la vida,
repugnante laberinto que jamás abandonaré.

La muerte no es una salida.

No soporto la felicidad trivial, efímera,

su ponzoña quebranta el aire.

Fiebre de que todo es finito.

Desconocías mi sonrisa de los pequeños placeres,

nostálgica al morder tu cuello,
siniestra al dejarte desnuda en la cama
dormida y sin adiós.

No encuentro dicha en nada,

desprecio todo acto de fortuna,
todo aquello que me parece ficticio.

Me deleito con lo que antecede a las desgracias.

Incendié todo lo desgastado por nuestra suerte

para matarte de una manera distinta,
quizá sólo me importa que busques tu propio fin,
por eso escribo de muertos anacrónicos
y doncellas ninfómanas decapitadas,
sofocándote en el silencio,
pagando para que alguien más diga
lo que a ti te desangró,
lo que te hizo salir huyendo.

12
ALUCINACIONES
DEL
SILENCIO
 F a u s t o L e y v a / C a d o s b r a

HASTA QUE EL SOPOR NOS ASFIXIE

(CADOSBRA)

Retrasa el afán de evaporarte en despedidas,

aferrémonos al noctámbulo deseo,
al filo de la nada,
al borde de Nosotros,
con el vértigo acariciándonos,
a punto de arrojarnos a tiempos que ya no serán.

El desenlace se acerca,
no esperes un llanto agónico de pasiones ulceradas,
ese elíxir me lo tragaré
directo de los senos de la ramera esperanza del olvido.

Seamos simples,
olvidemos el hartazgo,
que el humo nos desnude
relamiendo el veneno de nuestra carne falsa,
follemos con la furia de bestias heridas,
hasta que el sopor nos asfixie.

Compartamos la última pesadilla,

y si en tu delirio me encuentras
al extraviarse la noche,
dime
ADIÓS
mientras el último verso que te dedico,
prefiero,
con la tinta de mi lengua
escribirlo en tu espalda.

15
E L S I L E N C I O D E L A N O C H E

TEMPLO DE LOS SINSENTIDOS

Basta con cerrar los ojos para encontrarte,
no es preciso el momento,
pero siempre el oportuno para sentirnos en paz,
sin que nadie se dé cuenta
que me fugué a mi desolado centro,
amurallado templo de los sinsentidos.

Eres infinita y hermosa,

refugio de mi horror,
víctima de mis sueños.

Cabemos perfectamente en mi colchón.

Naces de la caída de las cortinas
y me devoras
y te recreo
y te penetro a cada instante.

En ti estalla cada pensamiento,

eres celadora de mi única sonrisa,
y sin importar los momentos,
en tu piel incierta
se combinan los silencios,
los estribillos citadinos,
magnificas las sensaciones
cobijando sordos y errantes universos.

Oscuridad,
la muerte se ha vestido de ti,
peligrosa y seductora.

Sonrío perdiéndole el miedo al final,

a la nada.

16
F a u s t o L e y v a / C a d o s b r a

MELODÍA EN MI PECHO
(A JOSHI, WENDY Y HÉCTOR†)

Aún la oscuridad no sabe proteger tus sueños

pero no hay nada qué temer
la noche te alcanzó con su claridad
y no promete relámpagos que nos asusten

Los juegos se terminaron por hoy

en un silencio que llena de paz
con una luna que sonríe al verte
y se conmueve con tus ilusiones puestas al amanecer

Tengo una melodía en mi pecho que quiero contarte:

La historia de un beso que un día soñó con llegar a ti
atravesando todos los cielos en una estrella fugaz
y así poder vivir en tu frente por siempre

Duerme mi niña
que la noche es corta
y mucho el amor que te tengo
en cada segundo que antecede al alba
están los deseos y caricias que nunca te di

Sé que hoy lloraste de nuevo

la miel de tus lágrimas me duele
yo también lloro y te extraño
pero ni la muerte me ha evitado llegar a tu sueño
que este corazón inerte se sienta vivo
mientras te arrulla en esta noche infinita.

17
E L S I L E N C I O D E L A N O C H E

NO TE VAYAS
(CADOSBRA)

Entre los vestigios del alcohol y el cigarro

mis sábanas percudidas de melancolía
se tornan tibias
eres tú
que has vuelto

cautelosa
sobre este cuerpo deshecho
postras tu belleza desnuda
me silencias con un beso aletargado
sabías que no era necesario decir que te extrañaba

la sangre hierve entonces

surcas mi cuello y el pecho con tus labios
muerdes el deseo
te aferras a mi costillar
mientras tu lengua estruja mi pene

eres ardor de violento jadeo

tomo tus senos para devorarlos
cuelgas de mi cintura con tus piernas
¡tus hermosas piernas!

penetro tu sexo desbordado

gimes y arrancas de mi espalda la soledad
colisionamos en un ir y venir estridente
estallamos el universo
derramo la muerte de mi tristeza
caemos de nuevo al sosiego

escucho una alarma en la lejanía

un agudo y constante martilleo que languidece al silencio
empiezo llorar y tú sólo sonríes

18
F a u s t o L e y v a / C a d o s b r a

¡por favor, no te vayas!

deja que mueran así mis noches
en el lastimero quebranto del horizonte de tu cuerpo
no te muevas
no digas nada
solo abrázame
quédate conmigo
no dejes que pierda este sueño

el sonido de la alarma se intensifica

no te conviertas de nuevo en un recuerdo

¡por favor, no te vayas!
no quiero despertar a tu ausencia

19
E L S I L E N C I O D E L A N O C H E

MUJER FUEGO
(Cadosbra)

Se alzó el vestido
mostrando unas piernas delicadas y firmes
se postró sobre mí sin darme oportunidad a decir algo
su lengua invadió cualquier razonamiento
se enredaba con la mía cual serpiente amenazante

comencé a arrancarle la ropa

su piel era tersa como un mar sosegado
descubrí sus senos
me arrojé sobre ellos
mordisqueé sus pezones duros y perforados
el crujir de mis dientes y el metal
erizaban su espalda

comenzó a bajar por mi pecho

abrió el pantalón y sacó mi pene
lo arremetió con labios feroces y suaves

(maldita sensación al verla a los ojos

una mirada salvaje en un tierno rostro que me devoraba
no era parte de mis funciones soportar tan bello momento)

correspondí como dicta el deseo

recostada sobre el viejo sillón

besé sus muslos trémulos
lamí sus caderas
y mordí su sexo (también perforado)
era un río tibio
en el cual resbalé sin remedio
siendo mi lengua dueña de sus gemidos

20
F a u s t o L e y v a / C a d o s b r a

entonces me tomó del cabello

restregándome hasta sus labios
éramos una tormenta jadeante
un quejido placentero que todo lo cimbró
–cógeme, cabrón–
resonó en mí su aullido

abrió las piernas

me guió a su humedad
un abismo estrecho que incineró el tiempo

penetré suave y lentamente

como cuidando de no romperla
pero pronto todo fue un caos
cada vez me hundía con más violencia
gemidos
rasguños
espasmos

fuimos animales rabiosos

en un orgasmo de universos paralelos
un estallido que ensordeció al mundo
en un lamento de gozo
hasta que llegó el silencio
y el sueño desapareció
nos acomodamos la ropa

retomé mi carpeta de trabajo

y tuvimos que ir al comedor
el sillón extrañamente estaba partido
como mis anhelos de volverla a sentir
pues era tarde ya
para lo que vine hacer
y tenía que hacerlo:

–Por favor, dígame su nombre completo

y vacante a la que se postula–.

21
TRAGOS
DE
VALIUM
F a u s t o L e y v a / C a d o s b r a

ESTOY EN PELIGRO
(CADOSBRA)

Hay algo en su mirada que me dice que estoy en peligro,

que la locura descansa en sus labios.
Le invito un trago y sé que terminaré arruinado,
que quizá ya no amanezca.

¿Qué buscas? — Pregunta con una sonrisa hermosa —

No me interesan las derrotas
que han marcado tus brazos — respondo —
en realidad sólo quiero saber tu nombre,
apostar todo por darte un beso,
andar sobre tu piel sin importarme el daño.

Quiero un instante que nos borre de la nostalgia,

saturarme los sentidos de tu envinado aliento,
con mi lengua dibujar un camino
y en él atravesar desde tu cuello a tu pecho,
llegar a tu espalda y resbalar por tu vagina,
demenciar tus piernas con un placer que me abrace por la cintura,
convulsionar juntos la voluntad de ser eternos en esta noche,
que la ternura de tu desnudez me guarde
hasta que el sueño nos abandone.

Soy un hombre que se enamora fácilmente,

que guarda los infortunios en tragos de arena;
y tu sonrisa me afirma que esto terminará cuando el sol se asome,
no me importa que la melancolía llegue con tu nombre
y las noches terminen vencidas
en lo incorpóreo y cáustico de tu piel.

25
E L S I L E N C I O D E L A N O C H E

DE ESTA SUERTE
Motivos me sobran
para vaciar cualquier botella
en ellas he dejado
algunos momentos afortunados
en otras
el nombre de mujeres
que a fuerza de tragos profundos
me propongo olvidar

así lo intento con el tuyo

fragmentándolo en cada brebaje
para sorberlo poco a poco
y sentir cómo se mezclan
el amor y la rabia
hasta orinar tu última promesa
pero no lo he logrado

sigues ahí
aferrada a mi garganta
me haces toser el dolor y las noches
para después
vomitar de nuevo el recuerdo
que me embrutece con tu lejanía
y la resaca termina por hacerme polvo
silencio

de esta suerte
voy dejando pequeños pedazos de ti
en más botellas vacías
y cigarros que nunca son suficientes
ahí se va quedando tu amor
en los pasos que ya no dimos
en la sombra que ya no te pertenece
en versos que quiebran tu recuerdo
en el silencio de este final.

26
F a u s t o L e y v a / C a d o s b r a

RECUERDOS DE RABIOSO LICOR

(CADOSBRA)

No me arrepiento de nada,
he soportado la vida y sus mutilaciones.

Al amor lo vi salir por el parabrisas

disparado a la eternidad.
Ángeles de sangre dibujan un cielo de piedra,
la entrada al infierno,
aquel que olvidé al evaporarse
mis tiempos en el silencio,
borrando mi nombre de cualquier recuerdo ajeno.

Ya sólo espero un final,

con las vértebras partidas,
dolientes de un gélido secreto,
fumándome la angustia,
mezclando la fe y el miedo en arcadas de sangre.

Recuerdos de rabioso licor,

briago sin culpa,
mientras los astros patean con violenta luz
las ventanas de una muerte
que me pinte
en un perpetuo olvido.

27
E L S I L E N C I O D E L A N O C H E

EL ALCOHOL DE TUS BESOS

Fue tu piel la razón
por la que dejé de arruinar las noches
para que la venda de tu voz
me arrancara las dolencias
de este cuero cansado
y así estrecharte sin miedo
sin miedo a la palabra hecha revólver
sin miedo a echar mi cuerpo a la muerte
sin miedo a escucharte decir adiós

Así en tus manos

puse mi último aliento
la fe de volver a tu deseo
de retumbar en tu ser
para no ser una sombra
que se desmorona
que se retuerce
que se revienta en sonoros abismos de derrota

Pero te siento lejana

inalcanzable

Malditas soledades

¿Qué le ha pasado a tu sueño

de fundirnos en una sola carne?
se han callado tus labios
como si otro cuerpo guardara su tibieza

Vuelven
la incertidumbre
las horas extraviadas
la bruma del silencio
y los temores
llegan como animales que me adolecen

28
F a u s t o L e y v a / C a d o s b r a

mientras tu corazón sigue mudo

guardando quizá la verdad de promesas ajenas
en donde ya sólo soy
un trago insípido

¿En qué momento perdí el alcohol de tus besos?

Vuelven a quebrarse las noches

ahora tengo nuevas heridas
y la misma maldita sensación
de haberme equivocado otra vez.

29
E L S I L E N C I O D E L A N O C H E

ETÍLICA NOSTALGIA
Me acompañan
un vaso lleno de nostalgia,
melodías de pasiones desgarradas,
un mareo de fotos en mi mente
y el desquiciado humo de cigarro
que a veces dibuja tu cuerpo.

Las sensaciones se agolpan,

destazando mi renuencia a recordarte,
denotando el hartazgo
de sentirme aislado de tu piel de atardecer,
de la cadencia de tu deseo,
de tu sexo tibio añorando orgasmos en un verso,
mientras mi lengua exige tu espalda
y suspiro con la necesidad
de inhalarte en cada poro,
de enredarme en ti,
de morir en tu pelo.

Todo parece tan claro,

la misma rutina
con recuerdos recorriendo mi cuerpo
como un lánguido palpitar de sangre etérea,
pero la oscuridad ilumina la sonrisa
que aflora al concebir tus pechos
mientras me compaña
un vaso lleno de etílica nostalgia.

30
 SALIDA
AL
INFIERNO
 F a u s t o L e y v a / C a d o s b r a

OTRAS SOLEDADES
I

A veces no sé o no me atrevo a despedirme,

otras, simplemente no hubo tiempo
o quizá ya no valía la pena hacerlo.
No me gusta decir adiós,
siempre termino con los días quebrados,
removiendo escombros de aquello que pudo ser mejor.

II

¿Cómo despedirme entonces de ti,

si no terminaste de huir por completo?
Aún el aroma de tu sexo se guarda en la lluvia,
la música esconde los ritmos de tu ahogo placentero
y el hueco en mi cama murmura el choque de cuerpos agitados.
Los temores de tu carne se quedaron en mí,
el suspiro de tus remordimientos
son martillazos que me despiertan de madrugada.

En la ventana me espera sentada tu ausencia

y con una sonrisa tierna me salta al cuello
ahogando ese adiós que quiero gritar.

III

De entre las grietas de esta ciudad derrotada

una sombra adicta al infortunio me dijo:
“Acepta que fue un error, ya pasará todo y saldrás bien librado”
me di cuenta que no valía la pena despedirme,
entonces lo amargo de mis pasos me arrastró a otras soledades,
pues ahora son otros labios los que mutilan mis noches,
son otras piernas las que me dan de beber tristeza.

33
 E L S I L E N C I O D E L A N O C H E

DESDE LA ORILLA DEL PROFUNDO MAR

–¿Por qué lloras? ¿Qué dije?–
–Sólo es lluvia– le sonreí
mientras me limpiaba las lágrimas.
Desearía que pudiera detenerlo
Sé que en algún momento
se romperá mi corazón.
Robert James Smith

Ella es fuego cuando la beso

un gemido que devasta la cordura
y rasguña esta piel de pesares

sabe cómo entrar a mis sueños

acallar el veneno de mis palabras
abrazar este despedazado corazón
que nunca puede salir del infierno

ella dice que se siente feliz conmigo

y me duele creer que así es
–¿Por qué lloras? ¿Qué dije?–

aún no se ha percatado
que me siento bien entre sus labios
que ya no quiero una sonrisa doliente
que le arranco a las noches el vértigo del deseo
que despierta la sombra de un viejo amante sin gloria
que detengo el tiempo entre sus muslos para existir

no entiende a la bestia que soy

no comprende este suspiro de angustia
–Sólo es lluvia– le sonreí mientras me limpiaba las lágrimas

y es que entre sus manos

se rompe el silencio de mis demonios
me enerva la sangre cuando muerdo su cuerpo

34
F a u s t o L e y v a / C a d o s b r a

para aferrarme al placer de su humedad

y entonces renacer de lo inefable

aún así hay algo que punza

que ensombrece mis anhelos
como las hojas que caen al tiempo
marchitas y ajadas de tanto sol
desearía que pudiera detenerlo

pero qué hago si hay algo averiado en mí

como una tormenta que persevera hasta el desvelo

sólo soy bruma de un grito olvidado

un fragmento nocturno de una muerte
que nunca llega

a pesar de todo no dejo de pensarle y astillarla en mi voz

de sorber su aliento para calentar mi alma

ya no quiero ser más el vestigio de amores quebradizos

aunque sé que en algún momento
ella será polvo que se escurra entre mis dedos
sé que en algún momento
se romperá mi corazón

35
E L S I L E N C I O D E L A N O C H E

ANTES DE PARTIR
En serio creí que esto iba a ser eterno
que jamás me cansaría de tus piernas
que lo hermoso de los amaneceres vendría de tus ojos
con la esperanza de sólo vivir de tu aliento
y saltar de tus brazos a la muerte

El silencio bastaba para este amor

pero las noches se derrumbaron a gritos
con la verdad clavada en la espalda
y tu piel cubierta de soledad
aferrándome a tu figura
y al viento indolente de tu tristeza

Hace tiempo que cada quién desvió el camino

buscabas cimbrarte en otros cuerpos
dejándome en un palpitar oscilante de ausencia.

Ahora estamos aquí

compartiendo estas nostalgias en tragos que arañan el orgullo
creciendo el pecho para dejar escapar este adiós
esperando que nos suceda ese último sorbo
un brindis que recrudece la garganta
antes de partir

Con un beso repentino dedicamos el trago final

no hay mejor forma de huir

¿En serio creímos que esto iba a ser eterno?

36
F a u s t o L e y v a / C a d o s b r a

MORIR UNA VEZ MÁS

Acúsame de cualquier cosa,
pero no de cobarde.

Olvidarte sería negar que significas algo en mí,

aún eres todo aquello que aletarga mi sombra,
que me diluye en las noches
quebrando mi aullido,
dejándome entre las ruinas del silencio.

Fui otro de tus amantes equívocos,

un cuerpo que no tiene espacio para más dolencias,
tu recuerdo me revienta el espíritu
y a diario se cuelga en lo trágico de mis palabras,
en la falsedad de tiempos prometedores
mientras el suicidio de tus sueños
marchita mis labios.

Razón suficiente para morir una vez más.

No sé cuántos días me he adormecido con alcohol,

brindando por tu piel que guardó mis secretos,
ahogando un corazón muerto y mal intencionado,
respirando el humo que esconde lo siniestro de mi rostro.

No estoy preparado para arrancarte

de este pecho que se asfixia en dolor,
para despertar de este mal sueño
que me hace escribir.

37
Los textos incluidos en esta edición son de la autoría de
Fausto Leyva / Cadosbra (heterónimo) y fueron extraídos de
las publicaciones del Taller de Creación Literaria “EN EL
BORDE, líneas y versos para incitar al vuelo” IV, VI y IX; sal-
vo los textos NO TE VAYAS y EL ALCOHOL DE TUS BESOS
extraídos de la Revista Infame y el texto SIEMPRE TERMINO
QUEBRANDO ALGO original de esta edición. Este compilado
fue realizado en junio de 2014 en la Ciudad de México.
Primer boceto de Cadosbra por Ángel Mayorga (diseñador)