Sistemas de Salud Comparados
Sistemas de Salud Comparados
Sistemas de Salud Comparados
Peru-Boliva
Bolivia:
Población, personas:11.513.100 (2019)
Área, km2:1.083.300
Perú:
Área, km2:1.280.000
Derecho a la salud
El derecho a la salud en Bolivia está consagrado en la Constitución Política del Estado y en otras
disposiciones fundamentales, como el Código Nacional de Salud, el Código de Seguridad Social, el
Código de Familia, el Código del Niño, Niña y Adolescente, La Ley del Seguro Universal Materno
Infantil (SUMI), y en otras disposiciones conexas como la Ley de Participación Popular, la Ley de
Descentralización Administrativa, la Ley del Medio Ambiente y la Ley del Diálogo 2000.
La Constitución Política del Estado (CPE) de 1938, señala por primera vez el reconocimiento de la
obligación del Estado de proteger la salud de la población. Se confieren al Estado las atribuciones
de regular el Seguro obligatorio de la fuerza de trabajo, la protección de la salud y la vida de los
trabajadores, la defensa de la salud física, mental y moral de la familia. “Artículo 122. La Ley
regulará el Seguro obligatorio de enfermedad, accidentes, paro forzoso, invalidez, vejez,
maternidad y muerte, los desahucios e indemnizaciones a empleados y obreros, el trabajo de las
mujeres y de los menores, la jornada máxima, el salario mínimo, el descanso dominical y el de los
feriados, las vacaciones anuales y puerperales con goce de salario, la asistencia médica e higiénica
y otros beneficios sociales y de protección a los trabajadores. Artículo 124. El Estado dictará
medidas protectoras de la salud y de la vida de los obreros, empleados y trabajadores campesinos;
velará porque estos tengan viviendas salubres y promoverá la edificación de casas baratas, velará
igualmente por la educación técnica de los trabajadores manuales. Las autoridades controlarán,
asimismo, las condiciones de seguridad y salubridad públicas dentro de las que deberán ejercer las
profesiones o los oficios, así como las labores en el campo y las minas”. Artículo 134. Es deber
primordial del Estado la defensa de la salud física, mental y moral de la infancia. El Estado defiende
los derechos del niño al hogar; la educación y a la amplia asistencia cuando se halla en situación de
abandono, de enfermedad o de desgracia. El Estado recomendará el cumplimiento de lo dispuesto
en este artículo a organismos técnicos adecuados”.
El Decreto Ley Nº 15629 de 18 de julio de 1978, aprueba el Código de Salud. Establece la
regulación jurídica de las acciones para la conservación, mejoramiento y restauración de la salud
de la población mediante el control del comportamiento humano y de ciertas actividades, a los
efectos de obtener resultados favorables en el cuidado integral de la salud de los habitantes de la
República de Bolivia. Define la salud como un bien de interés público, corresponde al Estado velar
por la salud del individuo, la familia y la población, en su totalidad. Corresponde al Poder Ejecutivo
a través del Ministerio de Salud y Deportes (MSD), la definición de la política nacional de salud, la
regulación, planificación, control y coordinación. Se establece el derecho a la salud de todo ser
humano que habite el territorio nacional sin distinción de raza, credo político, religión y condición
económica y social, derecho que es garantizado por el Estado.
El Decreto Supremo Nº 18886 de 15 de marzo de 1982, aprueba los reglamentos al Código de
Salud sobre el Ejercicio de los Profesionales en Salud, sobre Nutrición, Salud Mental, Deporte,
Saneamiento Ambiental, Radiaciones, Higiene, Seguridad y Medicina del Trabajo, Cadáveres,
Autopsias, Necrosis y Traslados. Enfermedades Transmisibles, Inmunizaciones, Zoonosis,
Prevención de Invalidez y Rehabilitación de Incapacitados, Disposiciones de Órganos y Tejidos,
Aparatos y Equipos de Salud, Enfermedades No Transmisibles. Farmacias y Laboratorios, Bancos
de Sangre, Plaguicidas, Uso del Tabaco, Investigaciones en Salud Pública, Establecimientos de
Salud Pública y Privados, Estadísticas de Salud, Especialidades Médicas y Salud Familiar.
Existen asimismo Leyes y Decretos Supremos que regulan los servicios de medicina, atención a las
personas y uso de tecnología. Así tenemos: Ley Nº 1687 de 26 de marzo de 1996. Medicina
transfusional y bancos de sangre. Ley Nº 1716 de 5 de noviembre de 1996. Donación y transplante
de órganos, células y tejidos. Decreto Supremo Nº 24671 de 21 de junio de 1997. Reglamenta la
ley de donación y transplante de órganos, células y tejidos. Ley Nº 1737 de 17 de diciembre de
1996. Política Nacional del Medicamento. Decreto supremo Nº 19673 de 24 de mayo de 1996.
Modifica el reglamento del servicio social de salud rural obligatorio para los médicos, enfermeras y
odontólogos. Decreto Supremo Nº 24303 de 24 de mayo de 1996. Creación del Seguro Nacional de
Maternidad y Niñez, que otorga a las mujeres gestantes la necesaria asistencia médica durante el
embarazo, el parto, el puerperio y las emergencias obstétricas, y al recién nacido hasta los cinco
años de edad. Decreto Supremo Nº 24739 de 31 de julio de 1997. Aprueba reglamentos para la
organización y funcionamiento de la medicina privada prepaga. Resolución Ministerial Nº 0496 de
9 de octubre de 2001 (Ministerio de Salud). Promueve la inclusión de 9 prácticas y tecnologías
apropiadas (conductas, procedimientos, instrumentos y suministros médicos), en la práctica
asistencial obstétrica y neonatal de los establecimientos de salud públicos y privados.
A pesar de todas estas disposiciones legales, el acceso a los servicios de salud y a otros
determinantes de la salud, se caracterizan por su inequidad y exclusión. Para el año 1993, un 30%
de la población no tenía acceso a servicios de salud; para el año 2004, esta cifra se reduce al 25%.
Esto quiere decir que, todavía un cuarto de la población, principalmente rural, no está cubierta por
ningún servicio de salud. Según los informes del MSD, el sector público (dependiente del Estado),
cubre el 35% de la población total, la seguridad social el 25%, las ONG el 10% y el sector privado el
5%. Sí excluimos de esta cuenta a las ONG, entre las que se encuentran las iglesias y
organizaciones de caridad y al sector privado vemos que sólo el 60 por ciento de la población está
cubierto por el Estado y la Seguridad Social, quedando un 40% sin acceso a estas instituciones,
puesto que la atención que ofrecen las ONG y las iglesias (medicina caritativa), es de carácter
eventual por depender de financiamiento externo.
Desde su creación (1956), el Seguro Social ha sido restringido a las personas con empleo fijo
reconocido por la Ley General del Trabajo. Los/as artesanos/as, trabajadores/as independientes,
campesinos/as y desocupados/as, han sido excluidos/as de este derecho. Esto significa el no
respeto al criterio de universalidad del derecho a la salud. En los 20 últimos años, el incremento
progresivo de la pérdida de empleo ha ocasionado el retiro del aseguramiento a las Cajas de
Seguridad Social de las familias, con la consecuente negación del derecho a prestaciones
sanitarias. El Estado no ha contemplado ninguna medida para proteger a la población que ha sido
afectada. Sólo ha dispuesto políticas asistenciales (desde el 2003), dirigidas a las mujeres
embarazadas y seis meses después del parto y, a los/as niños/niñas hasta los cinco años. Esto
significa también violación al criterio de progresividad e irrenunciabilidad del derecho a la salud.
A su vez, el Estado contradice el principio de igualdad del derecho a la salud:
1) La estructuración del modelo sanitario clasifica a los servicios por niveles de atención. La
distribución de los recursos para la asistencia sanitaria beneficia a los servicios de tercer nivel que
se encuentran en las ciudades capitales de departamentos, excluyendo de estos recursos a los
servicios de primer nivel que se encuentra en las zonas rurales.
2) La segmentación de la población para ofrecerle algunos beneficios, como sucede con la
asistencia sanitaria dirigida a las mujeres por cortos periodos de tiempo y a niños y niñas, que sólo
tienen derecho de asistencia médica hasta los cinco años.
La problemática de la accesibilidad muestra otra violación del derecho a la salud, especialmente
de los sectores rurales. Los servicios de salud no están al alcance de toda la población, en distancia
y tiempo necesarios para obtener la asistencia requerida. Las poblaciones rurales alejadas no
cuentan con hospitales ni centros de salud permanentes y cercanos a sus zonas de vivienda. La
barrera económica impide también a las personas sin recursos acceder a los servicios, aún cuando
éstos se encuentren próximos territorialmente.
Sistema de salud
Subsector Público: Encabezado por el Ministerio de Salud y Deportes (MSD), responsable de
las normas e implementación de políticas nacionales de salud. En el ámbito regional, se
encuentran las prefecturas, responsables de la administración de los recursos humanos de los
servicios de salud. En el ámbito local, los gobiernos municipales son los encargados de la
administración de los establecimientos de salud.
Subsector seguro social: Cajas de Salud: Son las prestadoras de servicios de las instituciones
de Seguridad Social, dependen del Viceministerio de Previsión Social. Se clasifican en:
1) Cajas de Salud Públicas: Caja Nacional de Salud, Caja Petrolera de Salud, Caja de Caminos y Caja
de la Banca Pública
2) Cajas de Salud Privadas Caja de la Banca Privada
3) Cajas de Salud Militares COSSMIL
4) Seguros Universitarios.
Subsector Privado: Se encuentran las Compañías de Seguro, las de Medicina Prepagada y las
Organizaciones No Gubernamentales. Cada sector refleja una característica particular, desde las
compañías de seguros que intermedian recursos para ofertar servicios, hasta las ONG que trabajan
con una visión más bien preventiva y de promoción
Los beneficios del Bono fueron ampliados desde 2015 con la implementación del Subsidio
Universal Prenatal por la Vida, que consiste en la entrega de alimentos nutritivos destinados a
madres gestantes. Los productos que integran el Subsidio Universal Prenatal por la Vida priorizan
alimentos locales de alto valor nutritivo que contribuyen a mejorar el estado nutricional de las
madres gestantes. Son beneficiarias del subsidio todas las mujeres gestantes que se encuentren
inscritas en el Bono Juana Azurduy. El beneficio es entregado mensualmente a partir del quinto
mes de embarazo, en todos los casos las entregas se realizan después de realizado y verificado el
control prenatal.
Financiamiento
¿Quién paga? El sector público se financia sobre todo con recursos del gobierno nacional y con
recursos externos. En 2007 poco menos de 80% del financiamiento del sistema de salud provino
de fuentes internas. Estos recursos se utilizan sobre todo para cubrir el gasto corriente. El 20.2%
provino de fuente externas, y representan 56% del gasto en inversión.
Los recursos del SUMI provienen de la Coparticipación Tributaria Municipal. Además, en caso de
que estos recursos resultaran insuficientes, este seguro puede solicitar hasta 10% de los recursos
del llamado del Fondo Solidario Nacional.
Las Cajas de Salud se financian con contribuciones de los empleadores, los trabajadores y el
gobierno.
La atención privada se financia sobre todo con pagos de bolsillo, aunque una proporción más bien
pequeña del gasto privado está representada por las primas de los seguros de salud privados. En
este rubro también se contabilizan los donativos y recursos externos que financian las actividades
de las organizaciones de la sociedad civil y las organizaciones religiosas que ofrecen servicios de
salud.
¿A cuánto asciende el gasto en salud? El gasto total en salud como porcentaje del PIB ha tenido un
comportamiento muy errático en Bolivia. En 1995 esta cifra ascendió a 4.5% y llegó a alcanzar
6.5% en 2002, para después descender a 5.2% en 2008.
Ese proceso de descenso del gasto en salud como porcentaje del PIB coincide con una caída
drástica de los recursos externos para la salud, que habiendo llegado a representar 7.1% del gasto
total en salud en Bolivia en 2001, prácticamente desaparecieron a partir de 2003, situación que
prevalece a la fecha.
El gasto per cápita en salud, por su parte, se ha incrementado en los últimos años. De 183 dólares
de paridad de poder adquisitivo en 2003 pasó a 224 en 2008.Siguen siendo, sin embargo, recursos
insuficientes para resolver las grandes necesidades de salud que presenta la población boliviana.El
gasto en salud en Bolivia está dominado por el gasto público, que concentra 63.8% del gasto total
en salud. El subsector de la seguridad social concentra poco menos de 60% de los recursos
públicos. Finalmente, el gasto privado es en su mayor parte gasto de bolsillo (82.8% del gasto
privado total). ¿Con qué nivel de protección financiera cuentan los bolivianos?
El gasto de bolsillo concentra una proporción importante del gasto en salud en Bolivia, a pesar de
la premisa de universalidad con la que opera el sistema de salud boliviano. De hecho, el SUMI sólo
cubre a las mujeres en edad fértil y a los menores de 5 años, mientras que el Seguro Público del
Adulto Mayor sólo cubre a los adultos mayores. Los jóvenes y la población en edad productiva que
no es beneficiaria ni del esquema de aseguramiento público ni de la seguridad social tienen que
recurrir a los servicios privados y pagar de su bolsillo para satisfacer sus necesidades de salud. No
sorprenden por lo tanto las altas cifras de gastos catastróficos por motivos de salud en Bolivia. Un
estudio realizado con datos de 2002 indica que 13% de los hogares bolivianos presentaron ese año
gastos catastróficos en salud. Otro estudio que compara el gasto catastrófico en ocho países
latinoamericanos ubica a los hogares bolivianos no asegurados como los más susceptibles de
presentar gastos catastróficos por atender sus necesidades de salud.
¿Con qué infraestructura y equipo se prestan los servicios de salud? Según cifras del Anuario
Estadístico en Salud del Ministerio de Salud y Sistema Nacional en Salud y Vigilancia
Epidemiológica, en 2008 Bolivia contaba con 3 233 establecimientos de atención a la salud, de los
cuales 2 958 ofrecen atención de primer nivel (1 543 puestos de salud y 1 415 centros de salud),
214 son hospitales básicos que brindan atención de segundo nivel y 61 son hospitales generales
que, junto con 24 hospitales de especialidades, ofrecen atención de tercer nivel. Datos de 2008
atribuyen alrededor de 81% de los establecimientos al sector público, 5.6% a la seguridad social,
9% a organizaciones de la sociedad civil y 4.7% al sector privado.
De acuerdo con el INE, la disponibilidad de camas hospitalarias registró un crecimiento paulatino
de 8 566 en 2000 a 8 912 en 2004. A partir de 2005 se dio una importante aceleración que
permitió llegar, en 2008, a 15 015 camas.17
De acuerdo con estas cifras, la tasa de camas disponibles por 1 000 habitantes habría pasado de
alrededor de 1 a poco más de 1.5. Esta cifra, sin embargo, todavía está por debajo de las cifras de
la mayor parte de los países de América Latina. Los departamentos con más de dos camas por 1
000 habitantes son capitales de departamento y centros urbanos.
La región occidental del país (norte de La Paz, sur de Oruro Norte de Potosí y sur-oeste de
Cochabamba), donde se concentran las poblaciones más rezagadas, cuenta con menos de una
cama por 1 000 habitantes.18 Lamentablemente Bolivia no cuenta con datos confiables ni
agregados sobre disponibilidad de equipo diagnóstico e infraestructura de alta especialidad.
La Agencia Estatal Medicamentos y Tecnologías
Objetivos Específicos
Misión
Visión
Despacho Ministerial
Secretaría General
Asume por delegación expresa de el/la Ministro/a de Salud las materias que
correspondan a éste y que no sean privativas de su función de Ministro/a.
Constituye la Máxima Autoridad Administrativa de la Entidad.