0% encontró este documento útil (0 votos)
38 vistas8 páginas

La Oxidación

MATERIALES NO FERROSOS

Cargado por

carlos
Derechos de autor
© © All Rights Reserved
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como DOCX, PDF, TXT o lee en línea desde Scribd
0% encontró este documento útil (0 votos)
38 vistas8 páginas

La Oxidación

MATERIALES NO FERROSOS

Cargado por

carlos
Derechos de autor
© © All Rights Reserved
Nos tomamos en serio los derechos de los contenidos. Si sospechas que se trata de tu contenido, reclámalo aquí.
Formatos disponibles
Descarga como DOCX, PDF, TXT o lee en línea desde Scribd
Está en la página 1/ 8

LA OXIDACION

En química, la oxidación es la pérdida de electrones de un átomo

¿Qué es la oxidación?

Se denomina comúnmente oxidación a las reacciones químicas en las que el


oxígeno se combina con otras sustancias, formando moléculas
llamadas óxidos. Esto es particularmente frecuente en el mundo de los
metales, aunque para nada exclusivo de ellos. En química se llama oxidación al
fenómeno químico en el que un átomo, molécula o ión pierde uno o varios
electrones, aumentando así su carga positiva.

Como el oxígeno es un elemento que usualmente acepta dichos electrones, se


llamó a este tipo de reacciones, reacciones de reducción-oxidación, reacciones
de óxido-reducción o reacciones redox, pero también es importante aclarar,
que pueden existir reacciones redox en las que no participa el oxígeno.
Tomemos en cuenta que el nombre oxígeno proviene del griego oxys, “ácido”;
y genos, “productor”: es decir, que el oxígeno se llama así porque corroe
los metales, tal y como lo hace el ácido.
La mayoría de los casos de oxidación involucran al oxígeno, pero también
puede darse en ausencia de éste. Y de manera semejante, la oxidación y la
reducción siempre se dan juntas y en simultáneo.
En ellos participan siempre dos elementos que intercambian electrones:

 El agente oxidante. Es el elemento químico que capta


los electrones transferidos, es decir, que los recibe y aumenta su
carga negativa. A esto se le llama tener un estado de oxidación
inferior, o en otras palabras, ser reducido.
 El agente reductor. Es el elemento químico que cede o pierde los
electrones transferidos, aumentando su carga positiva. A esto se le
llama tener un estado de oxidación mayor, o en otras palabras, ser
oxidado.
 Entonces: el agente oxidante es reducido por el agente reductor, a la par
que el agente reductor es oxidado por el agente oxidante. De este modo,
tenemos que oxidarse es perder electrones, mientras que reducirse es
ganar electrones.
 Estos procesos son comunes y cotidianos, de hecho son indispensables
para la vida: los seres vivientes obtenemos energía química gracias a
reacciones semejantes, como la oxidación de glucosa.

Tipos de oxidación

La oxidación lenta se produce por causa del oxígeno contenido en el aire o en


el agua.
Existen dos tipos conocidos de oxidación:

 Oxidación lenta. Se produce por causa del oxígeno contenido en


el aire o en el agua, esa que hace que los metales pierdan su brillo y
sufran corrosión al estar expuestos demasiado tiempo al ambiente.
 Oxidación rápida. Ocurre en reacciones químicas violentas como
la combustión, generalmente exotérmicas (liberan energía en forma
de calor), y se produce fundamentalmente en elementos orgánicos
(con contenido de carbono e hidrógeno).

Número de oxidación

El número de oxidación es casi siempre entero.


Los elementos químicos poseen un número de oxidación, que representa el
número de electrones que dicho elemento pone en juego a la hora de asociarse
con otros para formar un compuesto determinado.

Este número es casi siempre entero, y puede ser positivo o negativo,


dependiendo de si el elemento en cuestión pierde o gana electrones durante la
reacción, respectivamente.

Por ejemplo: un elemento con número de oxidación +1 tiende a perder un


electrón al reaccionar con otros, mientras que uno con número -1 tiende a
ganar un electrón cuando reacciona con otros para formar un compuesto. Estos
números de oxidación pueden tener valores tan elevados como electrones
implicados en el proceso, y suelen depender en algunos casos de con qué
elementos estén reaccionando.

Los elementos libres, es decir, que no están combinados con otros, tienen
número de oxidación 0. Por otra parte, algunos ejemplos de números de
oxidación son:

El número de oxidación del oxígeno es -2 (O-2), excepto en los peróxidos que


tiene -1 (O2-2) y en los superóxidos que tiene -½ (O2–).

El número de oxidación de los elementos metálicos es positivo. Por ejemplo:


ion sodio (Na+), ion magnesio (Mg2+), iones de hierro (Fe2+, Fe3+)

El número de oxidación del hidrógeno es +1(H+), excepto en los hidruros


metálicos que tiene -1 (H–).
Oxidación y reducción

La oxidación y la reducción son procesos inversos y complementarios, que


se dan siempre a la vez. En el primero se pierden electrones y en el segundo
se ganan, variando así las cargas eléctricas de los elementos.

Estas reacciones son a menudo empleadas en procesos industriales y


metalúrgicos, por ejemplo, para reducir minerales obteniendo elementos
metálicos puros como el hierro o el aluminio; o en la combustión de materia
orgánica, como en las plantas de generación eléctrica o incluso en los motores
a reacción.

Concepto de oxidación - reducción.

La energía que necesitamos para realizar cualquier actividad, la obtenemos


fundamentalmente de procesos de oxidación–reducción, como el metabolismo
de los alimentos, la respiración celular, etc. Además, son responsables de
procesos tan dispares como la corrosión de los metales, el oscurecimiento de
una manzana cortada, la acción de los conservantes alimenticios, la
combustión, el blanqueado de las lejías, ...

Hoy en día, las reacciones de oxidación–reducción se utilizan en infinidad de


procesos, especialmente en el campo de la industria, por ejemplo, en la
generación de energía eléctrica (pilas electroquímicas), o el proceso inverso, es
decir, a través de la electricidad, provocar reacciones químicas que no son
espontáneas, de gran utilidad para la obtención de metales y otras sustancias
de gran interés social (electrólisis). También son de gran utilidad para la labor
policial, ya que una reacción de este tipo, entre el ión dicromato y el alcohol
etílico, es la que permite determinar con gran precisión el grado de alcoholemia
de conductores.

Las reacciones de oxidación – reducción, también llamadas REDOX, presentan


un cierto paralelismo con las reacciones ácido – base, ya que ambas se llaman
reacciones de transferencia. Mientras que en las ácido – base se transfieren
protones del ácido a la base, en las redox, se produce una transferencia de
electrones del reductor al oxidante. Por ejemplo:
+2 +2
Zn+ Cu → Zn +Cu

en la que existe una transferencia de electrones del Zn (que pierde 2


electrones) al Cu+2 (que los gana).

Las reacciones redox son muy fáciles de identificar cuando tienen lugar entre
iones o compuestos iónicos, ya que es sencillo ver entre que especies tiene
lugar la transferencia de electrones; pero, cuando tiene lugar entre sustancias
covalentes, no es tan obvio reconocerlas, por ejemplo:

Fe2 O3+ 3C →2 Fe+3 CO 2

Podríamos decir que el C se ha oxidado porque ha incorporado oxígeno


transformándose en la molécula de CO2 y, el Fe2O3 se reduce porque lo
pierde, obteniéndose hierro metálico. Este concepto de oxidación – reducción,
debido a Lavoisier, ha quedado desfasado, ya que hay reacciones redox en las
que el oxígeno ni siquiera interviene.

Según el concepto actual: Una sustancia se oxida cuando pierde electrones,


que cede a otra sustancia que es la que se reduce, luego la oxidación es una
pérdida de electrones y la reducción una ganancia de electrones. Reacciones
de Oxidación – Reducción.

Cuando un compuesto se oxida, siempre hay otro que se reduce. Al primero se


le llama reductor y al segundo oxidante. Por ejemplo:

oxidante 1+ reductor 2 →reductor 1+ oxidante2

+2 +2
Cu +Zn → Cu+ Zn

Oxidación es una ganancia de oxígeno, o una pérdida de electrones, aumenta


el número de oxidación del elemento que se oxida.
Reducción es una pérdida de oxígeno o una ganancia de electrones, disminuye
el número de oxidación del elemento que se reduce.

Un elemento que se oxida, actúa como reductor; es un donador de electrones.


Un elemento que se reduce, actúa como oxidante; es un aceptor de electrones.
REACCIONES DE OXIDACIÓN Y REDUCCIÓN
La palabra oxidación se acuñó originalmente para definir a la reacción de combinación de cualquier
elemento con el oxígeno, para producir algún óxido. Por ejemplo, cuando el hierro se oxida, se produce
herrumbre, que es el óxido de hierro (III), o cuando se quema el carbón, se produce dióxido de carbono:

La palabra reducción se empleó antiguamente para referirse a la eliminación del oxígeno de un óxido,
dejando puro al elemento, con una notable reducción de la masa y/o el volumen con respecto al material
original. Por ejemplo el cobre, posiblemente el primer metal reducido por el hombre a su forma pura o
metálica, puede obtenerse calentando el óxido en presencia de carbón.

Posteriormente, se asignó el nombre de oxidación al proceso en el cual un elemento perdía electrones y el


de reducción a aquel en que un elemento ganaba electrones.
En la actualidad, como ya se vio en el capítulo 5, se dice que un elemento se oxida si aumenta su número
de oxidación y que un elemento se reduce si disminuye su número de
oxidación.

Veamos el ejemplo de la reacción de un metal (Mg) con un no metal (S), ambos en


estado elemental:

El magnesio perdió dos electrones, lo que causó que su estado de oxidación aumentara,
pasando de 0 a 2+, es decir, el magnesio se oxidó. Simultáneamente, el azufre ganó
dos electrones y su número de oxidación disminuyó de 0 a 2-; el azufre se redujo.
En una reacción química, nunca puede haber una oxidación sin una reducción y viceversa,
la oxidación de un elemento, necesariamente provoca la reducción de algún otro.
Por eso decimos que un elemento que se oxida, perdiendo electrones, actúa como reductor,
pues a alguna otra especie cede sus electrones. De manera análoga, un elemento que
se reduce, ganando electrones, actúa como oxidante, pues toma de otra especie los electrones
para reducirse.
Empecemos por escribir la reacción en su forma iónica:

Así, es fácil ver que en el cobre hubo un cambio en el estado de oxidación, que pasó
de 2_ a 0, es decir, se redujo, ganando dos electrones.
El plomo, por otro lado, el número de oxidación aumentó de 0 a 2_. El plomo se
oxidó pues perdió dos electrones. Podemos decir entonces también que el plomo redujo al
cobre o que el cobre oxidó al plomo. Ni el oxígeno ni el nitrógeno participan en este caso
en la reacción de oxidorreducción, ya que permanecen formando iones nitrato, sin cambio
alguno en sus números de oxidación.

Ee-

También podría gustarte