El Elefante Bernardo
El Elefante Bernardo
El Elefante Bernardo
Había una vez un elefante llamado Bernardo, que nunca pensaba en los demás. Un día,
mientras jugaba con sus compañeros, tomó una piedra y la lanzó hacia ellos. La piedra
golpeó al burro Cándido en la oreja. Cuando la maestra vio lo que había pasado,
inmediatamente se puso a ayudar a Cándido. Mientras este lloraba, Bernardo se burlaba,
escondiéndose de la profe.
Al día siguiente, Bernardo jugaba en el campo cuando, de pronto, le dio mucha sed.
Caminó hacia el río para beber agua. Al llegar al mismo vio a unos ciervos que jugaban
en la orilla. Sin pensar dos veces, Bernardo tomó mucha agua con su trompa y la arrojó
a los ciervos. Gilberto, el ciervo más chiquitito perdió el equilibrio y acabó cayéndose al
río, sin saber nadar.