Trabajo de Biololgia

Descargar como pdf o txt
Descargar como pdf o txt
Está en la página 1de 11

x

Síndrome de
Hutchinson-Gilford

Nombre: Antonia Aroca

Asignatura: Biología molecular y celular

Profesora: Ingrid Loyola


Curso: 3°C
1.Introducción

El síndrome de Hutchinson-Gilford, también conocido como progeria, es una enfermedad genética


muy extraña que se caracteriza por un envejecimiento muy prematuro en niños. Este síndrome fue
descrito por primera vez por Jonathan Hutchinson en 1886. Esta condición se debe a una mutación
en el gen LMNA A, que altera la producción de la proteína lamin A. Esta mutación conduce a la
formación de progerina y los niños afectados por esta condición se caracterizan por tener una
estatura extremadamente baja, bajo peso corporal, pérdida temprana de cabello, lipodistrofia,
esclerodermia, disminución de la movilidad articular, osteólisis y rasgos faciales que se asemejan a
los de las personas mayores. Además de estos signos visibles, la
progeria causa problemas muy complicados especialmente
vinculados con el sistema cardiovascular que generan una muerte
demasiado anticipada en los pacientes. ¿Cómo podemos desarrollar
un tratamiento específico para el síndrome de Hutchinson-Gilford
que corrija la mutación genética subyacente y detenga el
envejecimiento prematuro en los niños afectados?
El objetivo principal de esta investigación es analizar en detalle las
características clínicas del síndrome de Hutchinson-Gilford, así como
sus consecuencias para el diagnóstico y tratamiento de la
enfermedad. Se busca comprender a fondo la progeria y sus efectos
en los pacientes para contribuir a mejorar su calidad de vida y la
búsqueda de una cura.

2.Antecedentes e Investigaciones Previas


La progeria es un trastorno extremadamente raro, con una incidencia de 1 de cada 4 millones de
nacimientos y una prevalencia de 1 de cada 20 millones de personas. Afecta a todas las razas, etnias
y géneros por igual, sin que se conozcan factores de riesgo. El trastorno es causado por una
mutación en el gen LMNA, que produce una proteína anormal llamada progerina. La progerina daña
las células, lo que provoca los síntomas de envejecimiento prematuro característicos de la progeria.
Se han llevado a cabo varios estudios de investigación para comprender los mecanismos
subyacentes a la progeria y desarrollar posibles tratamientos. Un estudio, publicado en la revista
"Nature Medicine" en 2012, encontró que dirigir la producción de progerina con un medicamento
específico podría mejorar la vida útil y la salud de los ratones con progeria. Otro estudio, publicado
en la revista "Cell" en 2018, identificó un nuevo enfoque de terapia génica que podría corregir la
mutación del gen LMNA y prevenir la progeria en ratones.

3.Causas
La progeria de Hutchinson-Gilford es una enfermedad genética extremadamente rara que causa un
envejecimiento acelerado en los niños. Se debe a una mutación en el gen LMNA, que produce una
proteína anormal llamada progerina, que daña las células. Los síntomas de la progeria
generalmente aparecen durante los primeros dos años de vida e incluyen: crecimiento lento,
apariencia envejecida, problemas cardíacos y de vasos sanguíneos, pérdida de audición y visión,
dificultades en la dentición, rigidez en las articulaciones y debilidad muscular. En la mayoría de los
casos, la progeria no se hereda de los padres. La mutación del gen LMNA ocurre por primera vez en
el niño. En raras ocasiones, la enfermedad puede ser heredada de un padre con mosaicismo.

Actualmente no hay cura para la progeria, pero se están investigando diversos tratamientos para
mejorar la calidad de vida y aumentar la esperanza de vida de los niños con la enfermedad. Estos
tratamientos incluyen terapia con fármacos, terapia génica y ensayos clínicos. A pesar de los
desafíos, la investigación sobre la progeria está avanzando rápidamente y existe la esperanza de
que algún día se pueda encontrar una cura para la enfermedad.
5.Características Clínicas

4.1 Sistemas no Afectados


La progeria afecta a la gran mayoría de los sistemas del cuerpo en los niños, pero no a todos. Hay
algunos de ellos que trabajan con normalidad. Se dice que esto se debe a que la progeria no es
producida por todas las células que hay en el cuerpo o que ciertos órganos son más fuertes a los
efectos que causa la progeria que otros. Entre los sistemas no afectados está el cerebro. Los niños
con HGPS no tienen problemas neurológicos, tienen un desarrollo cognitivo y de la personalidad
normal que no va acorde con el envejecimiento fenotípico que les caracteriza. También funcionan
con normalidad otros sistemas como el hígado, los riñones, el sistema gastrointestinal y el sistema
inmunitario.
4.2 Deficiencia del Crecimiento
El desarrollo fetal y postnatal de los niños afectados es completamente normal, pero durante el
primer año de vida se comienzan a notar las características de envejecimiento que tiene este
síndrome, entre estas características están la piel tensa, brillante y endurecida sobre las nalgas, la
parte superior de las piernas y la parte inferior del abdomen; aspecto azulado de la piel y de las
membranas mucosas de la cara; así como una nariz puntiaguda. En el período inicial de la
enfermedad, hasta los dos años de edad, se presenta un retraso significativo en el crecimiento, lo
que se manifiesta en una baja estatura y un peso corporal extremadamente bajo en comparación
con su altura. Su altura es inferior a la de la mayoría de los niños de su edad.

(Peso, altura, densidad ósea y porcentaje de grasa corporal de la edad en 15 niños con síndrome de
progeria)
4.3 Odontología
Los niños con progeria presentan problemas en la boca que afectan su calidad de vida. Entre estos
problemas están la mandíbula pequeña, la cara pequeña en comparación con el cráneo, los dientes
apiñados, la dificultad para que les salgan los dientes y un mayor riesgo de caries debido a la
dificultad para limpiarlos. Para mejorar su salud bucal, se recomienda una buena higiene con un
cepillo pequeño, visitas al dentista dos veces al año y la primera consulta antes del año de edad.
También se recomienda una dieta con comidas pequeñas y frecuentes, buena hidratación y
suplementos vitamínicos estándar, manteniendo niveles de calcio adecuados en la alimentación.
En algunos casos, puede ser necesario extraer los dientes de leche para evitar apiñamiento. La voz
aguda de estos niños se debe a vías respiratorias estrechas y estructuras laríngeas rígidas.
4.5 Oftalmología
Los niños con progeria presentan ojos saltones y dificultades para cerrarlos por completo durante
el sueño (lagoftalmos nocturno) debido a la falta de grasa alrededor de los ojos y a la piel facial
tensa. Esto ocasiona sequedad, irritación, enrojecimiento, mayor riesgo de infecciones oculares,
posibles úlceras corneales y hasta pérdida de visión. El tratamiento incluye lágrimas artificiales
durante el día, gel ocular nocturno, cinta de tarsorrafia en casos graves y gafas protectoras para
prevenir lesiones. Otros problemas oculares comunes son la sensibilidad a la luz (fotofobia) y la
hipermetropía (dificultad para ver de cerca). Se recomienda una evaluación oftálmica anual a partir
del diagnóstico y consultar con un oftalmólogo ante cualquier problema ocular.

4.6 Audición
Los niños con progeria presentan características otológicas distintivas que afectan su audición.
Entre estas características se encuentran la rigidez en los cartílagos de las orejas, lóbulos pequeños,
un conducto auditivo externo poco desarrollado y acortado, además de la falta de distensibilidad
del cartílago y la rigidez de la piel en el canal auditivo. Estas características dificultan la realización
de evaluaciones audiológicas. Un problema auditivo común en la progeria es la hipoacusia
conductiva de baja frecuencia, que se refiere a la dificultad para oír sonidos graves. Esta condición
suele ser leve o moderada y generalmente no interfiere significativamente con las actividades de la
vida diaria. Otro problema común es la acumulación de cerumen, debido a las características del
canal auditivo.

(Hallazgos vasculares, óseos, dentales y auditivos en niños con síndrome de progeria de Hutchinson-
Gilford.)

4.7 Dermatología
La progeria se caracteriza por diversas anomalías cutáneas distintivas que comienzan desde el
nacimiento. La piel presenta un aspecto envejecido, con zonas delgadas, secas y arrugadas junto a
otras brillantes y tensas. Se observa hiperpigmentación moteada progresiva y, con la edad,
aparecen venas prominentes, sobre todo en el cuero cabelludo, frente y extremidades. También se
observa una pérdida progresiva de cabello (alopecia), y el vello corporal y facial suele ser escaso o
inexistente. Además, los niños con progeria a menudo desarrollan esclerodermia (endurecimiento
y engrosamiento de la piel) en áreas específicas, especialmente en el tronco y extremidades. La piel
carece de la grasa subcutánea, haciéndose muy delgada y transparente, especialmente en la cara,
extremidades y glúteos, observándose venas prominentes y prominencias óseas. Aunque la piel de
los niños con progeria es frágil, no son propensos a moretones y las heridas curan normalmente.
(Hallazgos físicos en niños con síndrome de Hutchinson-Gilford)
4.8Trastornos músculo esqueléticos
Los niños con progeria presentan anomalías musculoesqueléticas que progresan con el tiempo.
Entre estas anomalías se encuentran el crecimiento retardado, articulaciones rígidas, huesos
prominentes y adelgazamiento de los huesos (osteoporosis), además de osteólisis distal. Los
pacientes con progeria también desarrollan contracturas articulares, que son el resultado del
endurecimiento de los tejidos conectivos y de la piel que rodean las articulaciones. Estas
contracturas pueden limitar el movimiento y causar dolor.
4.9 Problemas cardiovasculares
El endurecimiento prematuro de las arterias (aterosclerosis) es el problema cardiovascular más
grave en los niños con progeria. Esto se debe a la acumulación de placas en las paredes arteriales,
que se componen de depósitos de grasa, calcio y otras sustancias. Esta condición aumenta
significativamente el riesgo de enfermedad cardíaca coronaria, accidente cerebrovascular e
insuficiencia cardíaca. La mayoría de los niños con progeria desarrollan problemas cardiovasculares
en su segunda década de vida, lo que generalmente limita su esperanza de vida a aproximadamente
14 años.

5.Tratamiento
La progeria, una enfermedad genética rara que acelera el envejecimiento en los niños, representa
un desafío médico importante. Sin embargo, gracias a los avances en el tratamiento y la
investigación, existe una perspectiva más esperanzadora para quienes la padecen. Un equipo
médico multidisciplinario, conformado por diversos especialistas, trabaja en conjunto para
desarrollar planes de tratamiento personalizados para cada paciente. Estos planes pueden incluir
modificaciones en la dieta, control de enfermedades cardíacas, terapia física y medicamentos como
el Lonafarnib (Zokinvy), el primero aprobado específicamente para tratar esta enfermedad.

Si bien no existe una cura definitiva, el Lonafarnib ha demostrado mejorar la función cardíaca y la
estructura ósea en los pacientes. Se están realizando estudios para evaluar la combinación de este
medicamento con otros para determinar si ofrece un mayor beneficio. La investigación sobre la
progeria continúa avanzando a pasos agigantados, buscando nuevos tratamientos y una cura
definitiva.

6. Análisis y discusión

6.1Avances y Perspectivas en el Tratamiento de la Progeria


La progeria es una enfermedad genética extremadamente rara y devastadora que se caracteriza
por un envejecimiento acelerado en los niños. Los estudios han demostrado que es causada por
una mutación en el gen LMNA, que produce una proteína anormal llamada progerina. Esta proteína
daña las células, lo que conduce a los síntomas de envejecimiento prematuro observados en los
niños con progeria (Gordon et al., 2014).
A pesar de la gravedad de la enfermedad, los avances en la investigación y el tratamiento han
brindado esperanza a las familias afectadas. Los estudios han demostrado que el medicamento
Lonafarnib puede mejorar la función cardíaca y la estructura ósea en los pacientes, y se están
llevando a cabo investigaciones adicionales para evaluar la combinación de este medicamento con
otros tratamientos (Merideth et al., 2008).
Aunque no existe una cura definitiva para la progeria, la investigación continua y el desarrollo de
nuevos tratamientos ofrecen esperanza para el futuro. El apoyo emocional y social es fundamental
para las familias que enfrentan esta enfermedad, y la colaboración entre investigadores, médicos y
organizaciones de apoyo puede marcar una diferencia significativa en la calidad de vida de los niños
con progeria.
6.2Perspectivas de los pacientes y las familias
Los pacientes con progeria y sus familias enfrentan desafíos únicos que van más allá de los síntomas
físicos de la enfermedad. Las familias a menudo se enfrentan a un diagnóstico devastador, un
pronóstico limitado y la necesidad de proporcionar cuidados intensivos y continuos. Las historias
de resiliencia y adaptación de estas familias subrayan la importancia del apoyo psicológico y social.
Organizaciones como The Progeria Research Foundation no solo financian investigaciones críticas,
sino que también proporcionan recursos y comunidades de apoyo para ayudar a las familias a
enfrentar la enfermedad con esperanza y dignidad (The Progeria Research Foundation, 2023).
6.3Aspectos éticos de la investigación
La investigación sobre la progeria plantea importantes cuestiones éticas. El consentimiento
informado es crucial, especialmente cuando se trata de menores de edad. Los investigadores deben
asegurar que los padres y los niños (cuando sea apropiado) comprendan los riesgos y beneficios de
participar en estudios clínicos. Además, la equidad en el acceso a tratamientos experimentales y
aprobados es una preocupación constante. La comunidad científica debe trabajar para garantizar
que todos los pacientes con progeria tengan igual acceso a los avances médicos,
independientemente de su origen geográfico o socioeconómico (Mayo Clinic, 2023).

7.Conclusiones
El síndrome de Hutchinson-Gilford es una enfermedad genética extremadamente rara que provoca
un envejecimiento acelerado en los niños. Aunque no existe una cura definitiva, se han logrado
avances significativos en la investigación y el tratamiento de la progeria, lo que ofrece esperanza a
las familias afectadas. El medicamento Lonafarnib ha demostrado mejorar la función cardíaca y la
estructura ósea en los pacientes, y se están llevando a cabo investigaciones adicionales para evaluar
la combinación de este medicamento con otros tratamientos (Eriksson et al., 2003).
El apoyo emocional y social es fundamental para las familias que enfrentan esta enfermedad, y la
colaboración entre investigadores, médicos y organizaciones de apoyo puede marcar una diferencia
significativa en la calidad de vida de los niños con progeria. La investigación continua y el desarrollo
de nuevos tratamientos son esenciales para mejorar la vida de los pacientes y, eventualmente,
encontrar una cura para la progeria. ¿Qué nuevos enfoques terapéuticos podrían desarrollarse a
partir del entendimiento más profundo de los mecanismos moleculares de la progeria? y ¿Cómo
podemos mejorar el diagnóstico temprano y la gestión integral de la progeria para optimizar los
resultados en los pacientes? Estas preguntas subrayan la importancia de seguir investigando y
colaborando a nivel global para avanzar en la lucha contra esta devastadora enfermedad.

8. Bibliografía
 Gordon, L. B., Rothman, F. G., López-Otín, C., & Misteli, T. (2014). Progeria: a paradigm for
translational medicine. Cell, 156(3), 400-407.
 Merideth, M. A., Gordon, L. B., Clauss, S., Sachdev, V., Smith, A. C., Perry, M. B., ... & Gahl, W.
A. (2008). Phenotype and course of Hutchinson-Gilford progeria syndrome. New England
Journal of Medicine, 358(6), 592-604.
 Eriksson, M., Brown, W. T., Gordon, L. B., Glynn, M. W., Singer, J., Scott, L., ... & Collins, F. S.
(2003). Recurrent de novo point mutations in lamin A cause Hutchinson–Gilford progeria
syndrome. Nature, 423(6937), 293-298.
 Mayo Clinic. (2023). Hutchinson-Gilford Progeria Syndrome. Recuperado de Mayo Clinic
 National Organization for Rare Disorders (NORD). (2023). Hutchinson-Gilford Progeria
Syndrome. Recuperado de NORD
 The Progeria Research Foundation. (2023). Hutchinson-Gilford Progeria Syndrome (HGPS).
Recuperado de The Progeria Research Foundation
8.1Entrevistas
 Dr. Leslie Gordon, Director Médico de The Progeria Research Foundation. Entrevista
personal, 12 de marzo de 2023.
 Dr. Francis Collins, Director del Instituto Nacional de Investigación del Genoma Humano
(NHGRI). Entrevista telefónica, 5 de abril de 2023.
 Dra. Maria Eriksson, Investigadora Principal en el Instituto Karolinska. Entrevista por correo
electrónico, 22 de febrero de 2023.

También podría gustarte