Persona y Bioética

ISSN: 0123-3122
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Universidad de La Sabana
Colombia

EL FIN JUSTIFICA LOS MEDIOS: EL RETORNO DE LA TIRANÍA

Persona y Bioética, vol. 12, núm. 2, julio-diciembre, 2008, pp. 73-77
Universidad de La Sabana
Cundinamarca, Colombia

Disponible en: http://www.redalyc.org/articulo.oa?id=83211487001

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EL FIN JUSTIFICA LOS MEDIOS: EL RETORNO DE LA TIRANÍA • GILBERTO A. GAMBOA B.

EL FIN JUSTIFICA LOS MEDIOS:

EL RETORNO DE LA TIRANÍA

E
l avance científico no deja de sorprender y Uno de los refinamientos de las TRA es el recurso a
los sueños en el terreno de la biotecnología los “bebés medicamento” (6). En octubre de este año,
cada vez se están realizando más aceleradamen- científicos de Sevilla (España) dieron la noticia (7) del
te. La misma sociedad se ha encargado muchas veces de primero de ellos que logra nacer. Javier fue “querido”
empujar a los científicos a resolver problemas antiguos, con la finalidad de servir de tratamiento para la enfer-
nuevos, e incluso supuestos o inexistentes –para el caso medad congénita que padece su hermano de 6 años,
da casi igual–. Los avances que se incluyen en las gran- una anemia talasémica mayor.
des obras de ciencia ficción, cada vez con mayor celeri-
dad dejan de ser tales, pues entran en obsolescencia o se Los medios de comunicación no dicen nada de los her-
constituyen en temores anticipatorios de tecnoutopías manos de Javier que no llegaron a nacer, bien porque
cada vez más próximas, con sus correspondientes tiráni- fueron diagnosticados como portadores de la misma u
cos paradigmas (1). otra enfermedad, y como consecuencia de la selección
genética no fueron implantados en el útero de la ma-
Dos hechos recientes han alertado a la opinión pública dre, o bien porque sencillamente su desarrollo no fue
mundial sobre las posibilidades, pero también sobre los satisfactorio y se “perdieron” en el intento.
límites, de la aplicación de la biotecnología. Su relación
con la Bioética es patente pues en cada caso la dignidad Este procedimiento, que ya se ha venido empleando
de la persona humana está en juego. en países distintos de España, ha sido posible por la
permisión que en 2006 hizo la Ley de Reproducción
Treinta años después de Louise Brown, la primera “niña Humana Asistida en ese país; pero la difusión mediáti-
probeta” (2), las técnicas de reproducción asistida (TRA) ca no había alcanzado cotas globales como ha ocurrido
han mostrado unos avances paradójicos (3): a pesar de en el caso de Javier.
los miles de nacimientos que esta técnica ha hecho po-
sibles, los porcentajes de éxito no han aumentado como También en días pasados, con gran despliegue la prensa
se esperaba, y las pérdidas de vidas humanas tampoco inglesa comunicó al mundo la noticia sobre el desarro-
parece que hayan disminuido, pues generalmente no se llo de una nueva técnica, la “karyomapping”, (8), para
tienen en cuenta, ni hacen parte de las estadísticas de los ayudar a los padres en riesgo de engendrar hijos con
centros dedicados a estas lucrativas técnicas (4). algún defecto genético (en teoría casi todos), al diag-
nosticar algún problema potencial en el embrión; de
Es llamativo que en el último año en solo España hayan esta manera, mediante diagnóstico preimplantatorio
nacido cerca de siete mil niños con la utilización de las será posible implantar sólo los embriones sanos.
TRA (5), y sin embargo, esta técnica que se está posi-
cionando como un recurso frecuente, no pueda ofrecer La técnica ha sido desarrollada por el equipo del Cen-
porcentajes de éxito superiores al 20 ó 30%, cuando tro Bridge de Fertilidad en Londres, quienes afirman
en el mundo médico una técnica que no se sitúe por que con ella están en capacidad de detectar casi todos
encima del 70% sencillamente no se realiza. los 15.000 trastornos hereditarios conocidos.

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“La técnica básicamente consiste en el análisis de cual- justifica los medios” no se puede dejar de lado cuando
quier diferencia individual en la estructura del ADN se realiza la valoración de cualquier acto humano. Este
de los padres y los embriones”, explicó el profesor Alan aforismo está presente en la filosofía clásica1 cuando ella
Handyside, a la BBC. intenta salvar las evidencias más generales del sentido
común (9). Cinco siglos después lo utilizará Pablo de
“Esto nos permite trazar un mapa de los cromosomas de Tarso para enseñar una de las pautas que es necesario
los padres y los abuelos para poder rastrear genes de- tener en cuenta para que las acciones realizadas con co-
fectuosos e identificar embriones que serán afectados nocimiento y voluntad, los actos humanos, puedan hacer
por enfermedades como fibrosis quística o distrofia parte de un obrar verdaderamente humano2.
muscular de Duchenne”.
Un desarrollo biotecnológico que ignore esta sencilla
Sin embargo, las noticias tampoco hablan del destino orientación, antes o después se convierte en un ejem-
de aquellos otros embriones diagnosticados con esas plo paradigmático de la tiranía que la ciencia puede
enfermedades o aquellos otros que con la aplicación de ejercer sobre la persona humana. Cada vez con mayor
la técnica dejan de existir, simplemente se deduce que celeridad la sociedad de consumo va demandando una
no se implantan. serie de servicios que en lugar de servirla la degradan y
la ponen en peligro. Con Lipovetsky habría que afirmar
Estos dos casos son ejemplos inobjetables de la aplica- que la biotecnología como bien de consumo convierte
ción de una técnica que no se pregunta por su dimen- a la vida en una cascada de frustradas expectativas que
sión ética, ni en el diseño ni en el desarrollo, ni en los amenazan con destruir o, al menos, transformar a la so-
efectos, mostrando un severo divorcio que lleva consi- ciedad misma (10). Ese sería parte del precio de dar vía
go efectos deseables para unos, pero a costa de la lesión libre a una ciencia (11) sin norte, sin más sentido que el
de otros, generalmente los más indefensos y débiles. que le imprime el imperativo consumista.

Una de esas convicciones erróneas o injustificadas que se Los dos ejemplos comentados inicialmente, en lugar
pueden encontrar en la decisión de acometer estos proce- de mostrar que la razón humana avanza, parecería que
dimientos es no tener en cuenta la diferencia –y la relación reflejan una somnolencia o una hipnosis que el título
mutua– que existe entre el fin y los medios para alcanzar- de un aguafuerte de Goya retrata: “El sueño de la ra-
lo. Esta omisión –culpable o no– clausura la entrada a lo zón produce monstruos”3. Cuando la razón humana se
real, y ocasiona necesariamente una vital injusticia. 1
Aunque en Aristóteles no se encuentre formulado este aforis-
mo como tal, se puede desprender sin dificultad de la doctrina
Parecería que en un razonamiento técnico el fin sí justi- de los fines y los medios, principalmente cuando se refiere a la
praxis y al distinguir entre obrar, hacer y producir.
fica los medios, pues para garantizar la eficacia no haría 2
Cfr. Rm 3,8
falta considerar la moralidad del medio. Sin embargo, 3
Aguafuerte y aguatinta de Francisco de Goya y Lucientes,
hay que tener en cuenta que el sabio precepto “El fin no 1799. Museo IberCaja Camón Aznar, Zaragoza, España.

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oscurece se cierran las posibilidades de la libertad, de pueda. Tú y yo queremos ser la gente que se
alcanzar la verdad, de recorrer con plenitud el itinera- haga cargo, no de las personas de las que se ha-
rio existencial. Las consecuencias de estas claudicacio- gan cargo.
nes están acompañadas de prejuicios que obturan el
acceso a la realidad de manera objetiva (12). – ¿Qué tienes en mente?
– Cosas muy simples y obvias al principio: esterili-
El “sueño de la razón” tiene una aproximación explica- zación de los incapaces, exterminación de las razas
tiva en el artículo “Relativismo y dogmatismo”, donde atrasadas (no queremos pesos muertos), repro-
se comentan varias de sus causas y consecuencias; so- ducción selectiva… Después verdadera educa-
bre todo se ofrece el realismo como antídoto al esbozar ción, incluyendo educación prenatal. Por verda-
algunas condiciones para conocer la realidad, y algu- dera educación quiero decir una que no incluya
nas actitudes que lo favorecen. Y aunque para algunos el sinsentido de “tómalo o déjalo”. Una verdadera
“La estupidez humana es una constante matemática y educación transforma al que la experimenta en
la historia de cada lugar es el desarrollo en el tiempo lo que ella quiere infaliblemente, sea lo que fue-
de esta lamentable ecuación”4, la razón de la persona, re lo que los padres o el paciente traten de hacer
su racionalidad, volverá a ejercer la tarea de liberar al al respecto. Por supuesto, tendrá que ser sobre
hombre del pesado lastre (13) que el cientificismo le ha todo psicológica al principio. Pero a la larga lle-
impuesto. Esto será posible si esa capacidad de razonar garemos al condicionamiento bioquímico y a la
está bien orientada; de lo contrario se podría sostener, manipulación directa del cerebro.
con C. S. Lewis, que “la razón humana va a convertirse
en tecnociencia” (11). El artículo del doctor Antonio Pardo C. contiene un
interesante análisis del acto humano que, en buena
En el tercer tomo de la Trilogía de Ramson (11), es- medida, puede ayudar a dar claridad sobre la necesaria
crita en 1945, se encuentra un magistral diálogo entre valoración que todo ser humano ha de realizar sobre
Mark Studdock y lord Feverstone cuando éste trata de su propio actuar y para darle una aplicación práctica
convencer a aquel de sumarse a su causa (dominar el ofrece una propuesta a manera de pautas para realizar
mundo a través de la ciencia), que refleja el falso me- una valoración ética de una acción humana.
sianismo de una razón miope:
Para ayudar a mantener en la práctica biomédica ese
– El tercer problema es el propio hombre. precepto según el cual los medios han de ordenarse al
– Sigue. Eso me interesa mucho. fin y no al contrario, se ofrecen cuatro temas que refle-
– El hombre tiene que hacerse cargo del hom- jan muy bien –cada uno en su ámbito y muchas veces
bre. Recuerda que eso significa que algunos sin mencionarlo apenas, pues se da por supuesto– la
hombres tienen que hacerse cargo del resto: importancia de tener en cuenta en cada actuación el
otra razón para enfrentarse a ello en cuanto se bien del paciente y su irrenunciable dignidad.

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Buena parte de la experiencia del doctor Ramón Cór- La buena acogida que ha recibido la sección Jóvenes
doba P. se vierte en su artículo “Génesis y esencia de la Investigadores, que en esta ocasión trae un interesante
medicina” con el que se busca reforzar lo más propio y estudio sobre la influencia del estado civil en las ado-
originario de la tarea que los médicos –y por extensión, lescentes embarazadas, nos ha animado a poner en
los profesionales de la salud– están llamados a realizar marcha otra iniciativa que es –hasta cierto punto– co-
sin desvirtuar con sus acciones su “ethos profesional”. rriente en publicaciones que tratan temas éticos y huma-
nos: llevará por nombre “Bioética en Práctica”, y utilizará
Aunque también se habrían podido mencionar como la narrativa como vehículo para comunicar y transmitir
ejemplos para la introducción de estas líneas las situa- con fuerza pensamientos, virtudes y valores. Esperamos
ciones puntuales que en el momento actual se presentan contar con la experiencia y colaboración de nuestros lec-
en Inglaterra, Italia y España sobre el recrudecimiento tores, que se pueden constituir en autores, al redactar
de la polémica relacionada con la eutanasia, el artícu- y enviar narraciones de las que se puedan desprender
lo del doctor Luis Fernando Giraldo C. brinda algunos enseñanzas para mejorar el quehacer ético.
elementos que ponen en contexto esa realidad humana
de la muerte y muestra la importancia de los cuidados Los relatos y los testimonios han demostrado gran
paliativos como un recurso que deja sin piso las preten- utilidad en la laboriosa tarea de contribuir a formar
siones de humanizar la muerte a través de medios ajenos actitudes bioéticas, y se constituyen en poderosos alia-
a la profesión médica. dos de la fundamentación teórica que muchas veces
–por su misma naturaleza– muestra limitaciones para
“aterrizar” en la práctica.
El tratamiento de todas estas temáticas conduce a
una de las tareas más importantes y apasionantes en Esta nueva sección de la revista Persona y Bioética
la Bioética: su enseñanza. La experiencia de un gru- pretende ser una herramienta cognitiva que permita
po de profesionales, encabezados por el doctor Pablo explicar la acción humana, mostrándola coherente y
González B., que en el Brasil está trabajando en este plausible: las imágenes ayudan a entender e interpretar
campo con estudiantes de medicina, es compartida a el porqué y el cómo se llega a la solución de problemas,
través del artículo “Una nueva metodología docente en procurando siempre que predomine el discurso pedagó-
Bioética”, donde se muestra el recurso del “portafolio” gico. Este recurso está pensado –más que para resolver
que permite ir integrando el aprendizaje de esta disci- problemas– para sensibilizar, para añadir conocimiento
plina con las prácticas clínicas donde el estudiante es y experiencia vividos, para intentar comprender senti-
el principal protagonista del proceso al darse cuenta dos de la vida no accesibles de otros modos. Se utiliza
de situaciones donde se presentan problemas bioéticos la interacción texto-lector, aprovechando la capacidad
que luego discute tanto con su tutor como con un con- mimética del actuar humano y el gran paralelismo entre
sultor de Bioética. narrativa e historia personal.

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